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Había una Vez 1 número veintidós I AGOSTO 2015 SECCIÓN JUVENIL ENTREVISTA Javier Zabala “La ilustración de calidad tiene más espacio que nunca” LA MIGRACIÓN EN LA LIJ Acogida, encuentro y diálogo ILUSTRACIÓN Raquel Echenique Naturaleza que moviliza

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Había una Vez 1

número veintidós I AGOSTO 2015

SECCIÓN JUVENIL

ENTREVISTAJavier Zabala“La ilustración de calidad tiene más espacio que nunca”

LA MIGRACIÓN EN LA LIJAcogida, encuentro y diálogo

ILUSTRACIÓNRaquel EcheniqueNaturaleza que moviliza

Había una Vez2

Índice

EditorialMigrar a través de las páginas de un libro. Por María José Egaña ActualidadNoticias del mundo LIJ

Migración y LIJLa literatura como espacio de acogida y de reconstrucción identitariaPor Martina Fittipaldi

Recién llegadosPor Carola Martínez

Columna de María José FerradaEse país

Desde las Bibliotecas CRA Libros sin fronteras

Desde el SNBP La experiencia de una usuaria extranjera

Recomendados por Mediadores Cinco libros imperdibles

Recomendado Profesional Por María Paz Garafulic

Lecturas recomendadas Por Fundación Cuatrogatos

Entrevista Javier Zabala. Por María Isabel Molina

IlustradoraPerfil de Raquel Echenique. Por Claudio Aguilera

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¿Por qué soy lector? Por Francisco Ortega

Buena IdeaLeoteca

Plan Nacional de la LecturaPresentación del nuevo Plan 2015-2020

Recordando aLos 70 años del Silabario. Por Manuel Peña Muñoz

Mis Favoritos Por Florencia García

Jóvenes Recomiendan ¡Entre nosotros nos entendemos!

Cómic de Marcela Trujillo Un viaje a Valdivia

Dosis de lectura Hijo de ladrón de Manuel Rojas

Columna de Esteban CabezasProtagonistas gay en la LIJ: de tabú a tema

Novedades de agosto30 nuevos títulos

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JUVENIL

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Migrar a través de las páginas de un libro

Migrar, viajar, moverse. Trasladarse con toda la vida a cuestas. Partir y dejar atrás. Llegar y comenzar de cero, para tal vez nunca más volver.

Los fenómenos migratorios son propios de la humanidad desde siempre, y han recorrido en forma constante su historia por varios y variados motivos, desde los más obligatorios hasta otros decididamente voluntarios. Guerras, amores, desastres naturales, negocios, conflictos políticos, estudios o, simplemente, la aventura de un nuevo comienzo. Todo vale para emigrar.

Quizás por los mismos efectos de la globalización, quizás también por otros factores distintivos del desarrollo moderno, lo cierto es que el fenómeno migratorio se ha visto intensificado durante las últimas décadas al punto de alcanzar hoy gran escala a nivel mundial y una alta complejidad. Personas de todos los países cruzan fronteras, océanos y continentes para poder migrar al resto del planeta. Permanentemente, como un flujo constante.

Pese a que la migración podría entenderse como un tema más bien de adultos, la LIJ no ha quedado ajena a la experiencia del éxodo. Varios son los relatos a propósito de viajes –solos o acompañados por sus padres, buscados o inesperados, en contextos de paz o de algún conflicto bélico– donde niños y jóvenes se exponen a las vicisitudes de una diáspora, como pueden ser el desamparo, el abandono y el exilio.

En conjunto, estas obras conforman un imaginario sobre una infancia que migra y se desintegra, para volver a nacer en otro espacio, uno completamente nuevo, cargado de novedades, pero siempre nostálgico y pleno de añoranzas, temores e incertidumbres.

También constituyen un instrumento de enorme valor para facilitar la adaptación de niños y jóvenes cuando se han convertido en inmigrantes, considerando especialmente que en la mayoría de los casos lo han hecho

Editorial

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de manera impuesta. Las historias y las imágenes les ayudan a reconocer y expresar sus emociones a partir de la dualidad de la pérdida del hogar y la ganancia de una nueva casa, a la vez que facilitan su entendimiento y aprehensión de la diversidad y el pluralismo que traen consigo los movimientos migratorios.

Respeto, empatía, solidaridad, valentía y resiliencia son algunos de los principales valores que contienen los libros infantiles y juveniles que, desde alguna perspectiva, tratan el fenómeno de la migración, haciendo a sus lectores más conscientes de sus entornos y de las formas en que se relacionan con los demás.

La literatura como espacio de acogida y de encuentro, como plantea en esta revista la especialista en LIJ Martina Fittipaldi al analizar cómo los libros infantiles y juveniles pueden transformarse en un espacio que permita a los recién llegados reconstruir su propia identidad y establecer un valioso diálogo con los demás para, en conjunto, construir nuevas perspectivas.

Su lectura aparece entonces como el punto de partida de un aprendizaje social y afectivo en pro de la inclusión y la integración, el reconocimiento de las diferencias y/o los valores comunes, y una reflexión sobre las relaciones entre las sociedades y entre las personas.

Por otra parte, en esta misma edición y bajo la premisa de que todos los seres humanos somos de una u otra forma migrantes, la especialista Carola Martínez recorre una selección de obras para niños y jóvenes que invitan al lector a mirar la realidad de quienes dejan lo conocido y se reinventan en un nuevo lugar.

Complementando estas miradas, una columna de María José Ferrada sobre ese país imaginario al que llegan a vivir todos los niños migrantes, y las entrevistas a dos destacados ilustradores: el español Javier Zabala y la chileno-francesa Raquel Echenique.

Les dejamos entonces extendida la invitación a realizar otro viaje, recorriendo desde múltiples perspectivas el fenómeno de la migración, esta vez a partir de la lectura.

María José Egaña H.Directora EjecutivaFundación Había una Vez

Actualidad

Maratón Internacional de Cuenta CuentosLos días sábado 29 y domingo 30 de agosto se realizará en Santiago, Valparaíso e Iquique la 4ª Maratón Internacional de Cuenta Cuentos organizada por la Escuela de Cuenta Cuentos de Fundación Mustakis. El evento contará con la presencia de destacados invitados, entre los que se cuentan Maryta Berenguer (Argentina), Benita Prieto (Brasil), Beatriz Falero (México), Niré Collazo (Uruguay) y César “El Wayqui” Villegas (Perú). En Santiago, la actividad principal se llevará a cabo el sábado 29, entre las 11:00 y las 21:00 horas, en el Hall del Museo Nacional de Bellas Artes. Además habrá susurradores y cuentos dedicados exclusivamente al patrimonio en el Museo Histórico Nacional, el Museo Chileno de Arte Precolombino y la Casa de la Ciudadanía Montecarmelo. Al día siguiente, la maratón se trasladará al Centex de Valparaíso, entre las 11:00 y las 14:00 horas, y a Iquique, en una actividad que se desarrollará frente a la Casa de la Cultura a partir de las 17:00 horas.La idea, dicen los organizadores, es congregar a la familia completa y que todos puedan gozar con diversas y múltiples historias.

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Dedicada a Roberto CabreraYa está en línea la edición especial en torno a la literatura infantil de White Rabbit: English Studies in Latin America –una revista de la Facultad de Letras de la Universidad Católica de Chile–, que dedica este número a la memoria de Roberto Cabrera, figura clave de la LIJ chilena que falleció en agosto del año pasado dejando un gran legado.

El especial incluye una nota de las directoras, Andrea Casals y Allison Ramay; la presentación que hizo Cabrera para el lanzamiento del libro El Árbol (Pehuén) de María Luisa Bombal, ilustrado por Alejandra Acosta, y una columna de Carolina Ojeda sobre el aporte del fallecido Doctor en Literatura y académico a la misión de la Fundación La Fuente. El número también publica un artículo de la profesora Jean Webb de la Universidad de Worcester, directora del International Forum for Research in Children’s Literature; dos artículos académicos de alumnas de la Facultad que se licenciaron con seminarios en literatura infantil y juvenil; y la segunda parte de la novela gráfica Hell or High Water de Wade Simpson.

Para más información ingresa a www.fundacionmustakis.com

La revista se puede descargar en www.whiterabbitesla.com o a través del Facebook de la Facultad de Letras UC.

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Entre agosto y noviembre de este año se realizará el I Festival de Literatura Infantil y Juvenil de Valparaíso, que busca generar un espacio abierto, inclusivo y gratuito para la comunidad. El Festival contará con la presencia de especialistas del área, ilustradores, escritores y editores, y contempla múltiples actividades.

A propósito de la ilustraciónHasta el 30 de agosto están abiertas las matrículas para el curso de ilustración A propósito de la Ilustración. Convocado por Babel Libros (Colombia), El Jinete Azul (España), Gata Gorda (Chile), Instituto Emília (Brasil) y Treintayseis (Argentina), contempla la realización de un módulo presencial en São Paulo los días 11 y 12 de septiembre (no obligatorio) y un módulo online que se desarrollará entre el 1 de septiembre y el 18 de diciembre del 2015.Los contenidos del curso, coordinado por Antonio Ventura, incluyen la revisión de la ilustración como género y el concepto de álbum ilustrado; una breve historia del género y un panorama de la actualidad; la imagen y la sintaxis en el álbum ilustrado; cómo realizar un storyboard, preparar un book y presentar los proyectos a una editorial; las principales editoriales y sus características, las ferias del libro y los contratos.

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www.clubkirico.com

Un extenso paisaje por el que transitar. Así se nos presenta el panorama de la literatura juvenil

con muchos lugares para recorrer y algunos en los que detenerse: historias de amor, distopías,

confl ictos sociales y familiares, aventuras clásicas, viajes al futuro y al pasado,

enfermedad, superación y búsqueda de un espacio propio para quedarse, para tratar de buscar

el sentido de cada vida. Historias contadas en variados registros: cartas, diarios, fragmentos de textos, correos electrónicos, cómic, información.

Hay muchas posibilidades para encontrar lo que se busca. Elige pareja Si uno de los libros te gusta es posible que el que está a su lado también. Si no, ya sabes, combina los libros como te parezca. El amor es libro

Juego de parejas

Lecturas juveniles

Reconocimiento internacionalGabriel Rodríguez se convirtió en el primer chileno en ganar el Premio Eisner –el galardón más importante de la industria del cómic–, en la Categoría Mejor Serie Limitada, por su trabajo en Little Nemo: Return to Slumberland, realizada en conjunto con el guionista estadounidense Eric Shanower y coloreada por el también chileno Nelson Daniel. La serie de IDW Publishing será publicada en septiembre de este año en Chile por Anfibia Ediciones como Little Nemo: Regreso al país de los sueños.

Festival de LIJ en Valparaíso

Programa en http://www.festivaldelij.cl/

El Club de Librerías Kirico preparó una guía de lectura con libros seleccionados de literatura juvenil, editados recientemente. Chicas que dejan huella, Cuando la realidad se cuela en casa y Reír para no morir en el intento son algunos de los nombres de las categorías de esta guía imperdible, titulada Juego de Parejas.

http://www.clubkirico.com/wp-content/uploads/2015/07/gu%C3%ADa-juvenil-2105.pdf

Más información en http://apropositode.com/

Ilustración de Beatriz Martín Vidal

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Actualidad

La ilustradora española Miren Asiain Lora es la ganadora de la sexta edición del Catálogo Iberoamericano de Ilustración de Publicaciones Infantiles y Juveniles, que este año destacó también el trabajo de cinco ilustradores chilenos: Karina Cocq, Sandra Conejeros, Andrea Mahnke, Mario Moreno y Sol Undurraga.

Participaron 788 creadores de 19 países, pero solo los 33 escogidos estarán en el catálogo –que es parte de la iniciativa Iberoamérica Ilustra y es convocado desde el 2010 por Fundación SM, El Ilustradero y la Feria Internacional del Libro de Guadalajara– y en la exposición de las ilustraciones originales, que se exhibirán en la FIL de Guadalajara del 28 de noviembre al 6 de diciembre de este año.

Lee, pregunta y entrevista

La Fundación de la Prensa llama a niños y jóvenes de todo Chile a ser parte del XV Concurso de Lectores Infantiles. Los participantes

deben tener entre 7 a 13 años y la invitación es a leer diarios y revistas, elegir un personaje de la actualidad nacional y enviar 10 preguntas que le harían. La iniciativa busca potenciar la lectura de los medios de comunicación en casa y en los colegios, que los niños y jóvenes le tomen el gusto a informarse y a conocer quiénes son los principales actores del acontecer nacional, y fomentar la imaginación y capacidad de cuestionar el mundo en que viven. El cierre del concurso es el 10 de septiembre.

Más información en http://concursolectoresinfantiles.cl/

Chile para Niños obtiene sello internacionalEl portal Chile para Niños de la Biblioteca Nacional recibió recientemente el sello Buena Práctica Iberoamericana, otorgado por el Centro Virtual Leer.es, dependiente del Ministerio de

Educación, Cultura y Deporte de España. Este reconocimiento

destaca propuestas didácticas de todo el ámbito iberoamericano

que contribuyen, en sus respectivas lenguas oficiales

y en cualquier área del currículo, a

desarrollar la competencia en

comunicación lingüística.

Más información en http://iberoamericailustra.com/

Catálogo Iberoamericano

Karina Cocq

Miren Asiain

XIII PREMIO DE POESÍA INFANTILwww.uclm.es/cepli

Convocatorias LIJ

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Con el objetivo de estimular la creación de obras literarias para niños y jóvenes, el Grupo Anaya presentó el XIII Premio de Literatura Infantil y Juvenil, que este año está dirigido a obras para lectores de ocho a doce años. La admisión de originales vence el 15 de septiembre del 2015.

Bases en http://blog.anayainfantilyjuvenil.es/wp1/wp-content/uploads/IJ00517801_bases_XIIIPremioA.pdf

La editorial Edelvives invita a autores e ilustradores a participar de los Premios Ala Delta de Literatura Infantil, Alandar de Narrativa Juvenil y a la quinta versión del Premio Internacional de Álbum Ilustrado. El plazo de postulación de los dos primeros vence el 15 de octubre del 2015 y el de libro álbum el 18 de diciembre.

Bases en http://www.edelvives.com/premios/ala-delta-literatura-infantil

Con el fin de promocionar la creación poética para niños, el CEPLI (Centro de Estudios de Promoción de la Lectura y Literatura Infantil) de la Universidad de Castilla-La Mancha organiza el XIII Premio Luna de Aire de Poesía Infantil. Las obras se pueden presentar hasta el 30 de noviembre del 2015.

Bases en https://www.uclm.es/cepli/v2/contenido.asp?tc=actvis41655rlish

La Organización Española para el Libro Infantil y Juvenil (OEPLI) convoca al Premio Lazarillo 2015 para Álbum Ilustrado. El plazo de presentación de los proyectos finaliza el 30 de septiembre del 2015.

Bases en https://es.hightail.com/e?phi_action=app/orchestrateDownload&batch_id=bXBhQmtYQVNEa1ZBSXNUQw

Actualidad

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Acercar la ilustración al público, reflexionar sobre sus alcances y promover el ejercicio profesional de la disciplina son algunos de los objetivos del 3er Festival Internacional de Ilustración de Chile, FESTILUS 2015, organizado por PLOP! Galería, con el apoyo del Fondo Nacional del Libro y la Lectura. El encuentro, que se realizará entre el 11 y el 18 de agosto, ofrecerá distintos talleres de ilustración, exposiciones, charlas magistrales, conversaciones y actividades con ilustradores, y una nueva versión de la Jornada Profesional de Ilustración, entre otros eventos.

Entre el selecto grupo de ilustradores invitados están el ilustrador y diseñador gráfico español Javier Zabala (ver entrevista en página 58), el artista e ilustrador argentino Luis Scafati y el ilustrador, animador y poeta portugués André da Loba. También estarán presentes la editora e ilustradora mexicana Abril Castillo, el diseñador e ilustrador mexicano Santiago Solís Montes de Oca, la artista, ilustradora y docente argentina Cecilia Afonso Esteves, y el editor colombiano Daniel Jiménez.

Además, participarán destacados ilustradores nacionales, como Alberto Montt, Malaimagen, Marcelo Escobar y Catalina Bu, quienes realizarán talleres, contarán su experiencia en la escena chilena y conversarán con el público en la actividad Café Ilustrado.

Destacados ilustradores en FESTILUS 2015

Entre el 11 y el 18 de agosto se realizará la nueva versión de este festival de ilustración organizado por PLOP! Galería. El encuentro contará con la presencia de renombrados ilustradores iberoamericanos, entre ellos el español Javier Zabala y el argentino Luis Scafati, y contempla por primera vez actividades tanto en Santiago como en regiones.

Javier Zabala Luis Scafati

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Por primera vez, el encuentro tendrá una importante presencia en regiones. Gracias a una alianza con Fundación La Fuente, y el apoyo de Minera Escondida y Viva Leer Copec, los invitados al festival realizarán actividades en escuelas de la Región Metropolitana y Valparaíso, y las sedes de Biblioteca Viva en Antofagasta y Concepción.

Más información en www.festilus.cl

El domingo 16 de agosto se realizará la 2ª Jornada Profesional de Ilustración en el Centro Cultural Palacio La Moneda (CCPLM), una instancia de gestión y reflexión dirigida a ilustradores que contará con charlas magistrales y mesas redondas. Durante la jornada también se llevará a cabo la primera Feria de Ilustración FESTILUS, una plataforma de exposición y venta de obras que congregará a medio centenar de ilustradores seleccionados mediante una convocatoria virtual para creadores locales.

FESTILUS 2015 también incluirá tres exposiciones de ilustración: una conmemorativa en BiblioGam, que reunirá a cincuenta artistas nacionales e internacionales que han presentado su trabajo en PLOP! Galería durante sus cinco años; una muestra internacional en PLOP! Galería con obras de Luis Scafati, André da Loba, Cecilia Afonso Esteves y Javier Zabala; y una exhibición de los trabajos recientes de los mexicanos Abril Castillo y Santiago Solís en Casa PLOP!

El Festival Internacional de Ilustración de Chile se realiza desde el 2012 y en sus anteriores versiones ha contado con la presencia de los ilustradores Liniers (Argentina), Isol (Argentina), Isidro Ferrer (España), Gabriel Pacheco (México), Alejandro Magallanes (México), Power Paola (Colombia), Diego Bianki (Argentina), Cristián Turdera (Argentina), Fito Espinosa (Perú) y José Rosero (Colombia); y del escritor Jairo Buitrago (Colombia) y el editor Sebastián García Schnetzer (Argentina).

Había una Vez12Ilustración de Francisca Yáñezwww.franyanez.com

Los textos literarios pueden cumplir un rol relevante en el proceso de adaptación de niños y jóvenes que han dejado su hogar para instalarse en una nueva tierra. La especialista Martina Fittipaldi analiza cómo la literatura puede transformarse en un espacio que permita a los recién llegados reconstruir su propia identidad y establecer un valioso diálogo con los demás.

Por Martina FittipaldiDra. en Didáctica de la Lengua y de la LiteraturaProfesora del Máster en Libros y LIJ (UAB y Banco del Libro) Especialista en LIJ

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Migración y LIJ

La literatura como espacio de acogida y de reconstrucción identitaria

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La migración forma parte de la experiencia humana en todas las épocas y culturas, ya que –como afirma Martin Heidegger– “no hay casa primaria, somos todos transeúntes” (citado en Nagy Zekmi, 2001). Pero es a partir de

finales del siglo XX y de la mano del proceso globalizador que se da un movi-miento cada vez más acusado y continuo de flujos de población, lo que ha lleva-do a la configuración de sociedades plurales, caracterizadas por la diversidad. En este panorama de desplazamientos constantes entre países y también entre continentes, se hace necesario reflexionar sobre las vinculaciones existentes entre infancia e inmigración, y es por ello que, en un primer momento, revisare-mos los estudios que se han ocupado de analizar estas relaciones, con el fin de conocer los modos en que los niños viven el proceso migratorio.

¿Y cómo puede la literatura colaborar en ese proceso? Esta es la cuestión a la que hemos buscado dar respuesta desde el proyecto internacional Visual Jour-neys: Understanding immigrant children’s responses to the visual image in contemporary picturebooks (Arizpe et al., 2014)1, cuya experiencia nos ha per-mitido observar en diversos contextos el relevante rol que pueden cumplir los textos literarios al otorgar a los niños recién llegados espacios desde los que reconstruir su propia identidad, pero también lugares donde establecer un diá-logo fructífero con los demás.

Infancia e inmigración: algunos estudios previos

Dejar la propia tierra para vivir en un nuevo sitio supone, a cualquier edad, un desafío psicológico importante. Como bien señala Joseba Atxotegui (2007), implica un gran “trabajo de duelo” que conlleva un proceso de reconstruc-ción identitaria en el que la persona se redefine de cara a los demás: a aque-llos que quedaron en el punto de partida y a aquellos a quienes conoce y con los que se vincula en la sociedad de acogida. Asimismo, las posibilidades que ofrece actualmente la tecnología permiten al sujeto seguir manteniendo un estrecho contacto con la cultura de origen, lo cual le conduce a construir un “doble marco de referencia” (Ogbu, 2003) que lo ubica en un in-between (Bhabha, 2000), un espacio intermedio o zona liminar entre ambas culturas.

1 El proyecto Visual Journeys, dirigido por Evelyn Arizpe, ha sido desarrollado conjuntamente por investigadores pertenecientes a las universidades de Columbia, de Glasgow, de Bolonia y de la Universitat Autònoma de Barcelona.

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El fenómeno migratorio lleva así a la transformación del individuo, pero tam-bién a la modificación tanto de la sociedad de salida como de la de llegada.

Si este proceso es difícil ya en los adultos, en los niños se suma en muchos casos la imposibilidad de tener voz y voto en la decisión de migrar, con la consiguiente involuntariedad del traslado que, en numerosas ocasiones, es vivido como una imposición. Son los adultos quienes, por diversas razones, deciden cambiar de sitio o llevar a los niños con ellos una vez que ya están asentados en el nuevo lugar. Los datos evidencian que más del ochenta por ciento de los niños y jóve-nes que llegan a un nuevo territorio lo hacen bajo el concepto de “reagrupación familiar” (Cfr. Suárez Orozco, 2008).

Diferentes investigaciones se han dedicado a estudiar las relaciones entre in-fancia, migración y escuela para intentar explicar cómo viven los niños este pro-ceso y los modos en que intentan acomodarse a la nueva situación. En relación con esto, Suárez Orozco y Suárez Orozco (2003: 178-200) describen las mane-ras en que se van configurando las nuevas identidades y señalan la existencia de tres clases de adaptación por parte de los sujetos:

En primer lugar, la huida étnica, que conduce a los individuos a identificarse de forma total con la cultura de acogida y a imitar de manera acrítica los modos de comportamiento y de relación vigentes en esta, con el fin de distanciarse sim-bólica y psicológicamente de su familia o grupo y de ser aceptados sin eviden-ciar su “diferencia”2.

En segundo lugar, la oposición activa, que lleva a muchos niños y jóvenes a re-chazar las instituciones de la nueva sociedad y a considerar que la adopción de cualquier rasgo característico de la cultura de acogida implica el abando-no de la identidad propia. Es por ello que muchas veces estos son reacios a

“…el trabajo de lectura compartida y de discusión literaria (…) puede colaborar en la promoción de una sociedad más inclusiva…”

2 Xavier Besalú denomina a este proceso “asimilación” (Besalú, 2002: 31).

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incorporar lenguas diferentes y no quieren actuar como “buenos alumnos” (Coronas, 2008), lo que en general los conduce al aislamiento y autosegre-gación como formas de diferenciación.

En tercer lugar, la transculturación, un proceso que implica conocer y vincular creativamente diversos aspectos de las distintas sociedades por las que atra-viesa el individuo, sin dejar de lado la conciencia acerca del grado de conflicti-vidad que supone esta tarea. La puesta en diálogo de los diferentes contextos y códigos culturales permite así al sujeto construir puentes entre los variados territorios en los que se mueve.

No obstante, los estilos de adaptación de los niños recién llegados dependen asimismo de las maneras en las que es concebido y abordado el fenómeno mi-gratorio en la sociedad y, en especial, en las escuelas. Autores como Campano (2007) o Larrosa (2002), por ejemplo, subrayan la necesidad de poner en tela de juicio el discurso del “multiculturalismo” que en ocasiones parece predomi-nar en algunas instituciones escolares: “‘Ser culturalmente diferente’ se convierte demasiado a menudo […] en poseer un conjunto de determinaciones sociales y de rasgos psicológicos (cognitivos o afectivos) que el maestro debe ‘tener en cuenta’ en el ‘diagnóstico’ de las resistencias que encuentra en alguno de sus alumnos y en el diseño de las prácticas orientadas a romper esas resistencias. No otra cosa es lo que la escuela suele entender por ‘diferencia’ cuando se termina el juego de la exhibición, frecuentemente trivializada, de las ‘particulares’ formas que cada uno tiene de vestir, de comer, de cantar y bailar, de contar cuentos o de celebrar las fiestas” (Larrosa, 2002: 8).

Desde la perspectiva de este investigador, se simplifica así la cuestión de la di-ferencia, que se convierte más en un ejercicio de retórica y en una celebración pintoresca y estereotipada de la diversidad que en un verdadero proyecto de integración social. “¿Qué podemos hacer entonces para evitar la ‘guetización’, la ‘fragmentación’ o ‘el exotismo de la diferencia’ en nuestra sociedad, en nuestras es-cuelas? ¿Cómo podemos entender que, más allá de un ‘ellos’ o un ‘nosotros’ ahora somos ‘todos’?” (Fittipaldi, 2008: 26).

Las experiencias llevadas a cabo por el equipo GRETEL3 y por los demás grupos participantes del proyecto Visual Journeys apuntan a que el trabajo de lectura

3 Muchas de estas experiencias, así como los resultados de la investigación desarrollada, son descritos en Colomer y Fittipaldi (2012).

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compartida y de discusión literaria con libros sin palabras como Emigrantes de Shaun Tan (BFE, 2007) o Flotante de David Wiesner (Océano, 2007)4, por ejemplo, pueden colaborar en la promoción de una sociedad más inclusiva en la medida en que posibilitan una reflexión empática y compleja sobre las relacio-nes entre las sociedades y entre las personas, sobre la identidad y la alteridad.

La literatura, espacio de reconstrucción personal

Como hemos señalado más arriba, migrar supone un proceso de restableci-miento de la identidad que es reestructurada a partir del nuevo contexto, pero también de lo que se deja atrás. Pese a que pertenece al terreno ficcional, la literatura ofrece a los lectores la oportunidad de reflexionar sobre la experien-cia para transformarla y a la vez transformarse, ya que “leer tiene ramificacio-nes intelectuales y emocionales que van más allá de las páginas de un libro, y puede comprometer profundamente la vida cotidiana de gente real” (Tan en Arizpe et al., 2014: xv)5. Esto queda patente en las lecturas y discusiones literarias realiza-das con los niños en el marco del proyecto Visual Journeys pues, a lo largo de las distintas sesiones, observamos cómo ellos evocan las propias vivencias a partir de la lectura (Fittipaldi, 2008: 88-90). Dos de las participantes, Naima y Cristina, por ejemplo, parten de las imágenes de Emigrantes para señalar que, al igual que la hija del protagonista del libro, en sus casos la decisión de migrar también ha sido involuntaria:

“Habían ido donde estaba su padre; él ha ido a trabajar y las llevó… Como yo, […] vivíamos en el Marroc y bueno, también vinimos aquí pel meu pare [por mi padre] […] Me ha cogido él” (Naima).

“Pese a que pertenece al terreno ficcional, la literatura ofrece a los lectores la oportunidad de reflexionar sobre la experiencia (de la migración) para transformarla y a la vez transformarse…”

4 Ambos títulos forman el núcleo del corpus compartido por los diversos grupos de investiga-ción del proyecto Visual Journeys.

5 La traducción es nuestra.

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“Aquí mayormente los padres te dicen ‘me voy a otro país’. Son los que mandan, pues lo tienes que hacer… Tampoco puedes quedarte ahí muriéndote de hambre, ¿no? Porque tienes que acompañar a tus padres, […] haces lo que te mandan. Entonces vienes y tus amigos y tu familia se quedan ahí… Lástima mayormente los padres mandan […] A partir de los 18 puedes hacer lo que quieras, pero yo, yo solo tengo 11…” (Cristina).

Calin, otro participante, va más allá al reflexionar sobre el miedo y el dolor que supone el desarraigo, sobre lo difícil que resulta el hecho de tener que abandonar la propia tierra y muchos de los afectos ligados a ella: “También es como la muerte, que tienes que superarlo. […] Cuando se muere alguien tienes que superarlo, cuando vienes aquí tienes que superar que ya no estás en tu país, y tú estás aterrorizado”.

El reconocimiento o proyección que realizan los niños a partir de la lectura les ayuda a realizar un proceso de catarsis, los lleva a comprender mejor su pro-pia historia y a saberse protagonistas de esta. Coincidimos con Michèle Petit cuando afirma que los textos literarios “contribuyen a definir lo que somos”, nos ayudan a construir “una especie de reserva poética y salvaje en la cual abrevar a lo largo de la vida; para fabricar lugares en donde vivir, y acondicionar pequeños cuar-tos propios en los cuales pensar, comenzar a decir ‘yo’ y ser el narrador de la propia historia” (Petit, 2012: 271).

No obstante, como afirman muchos de los niños hacia el final de los encuentros, la lectura puede ofrecer además la posibilidad de abrirnos a los otros, de com-partir con ellos nuestras miradas, para construir, juntos, perspectivas nuevas.

“…la lectura puede ofrecer además la posibilidad de abrirnos a los otros, de compartir con ellos nuestras miradas, para construir, juntos, perspectivas nuevas”

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La lectura, lugar de encuentro con los otros

Libros como Emigrantes o Flotante constituyen propuestas que, sin una red de palabras de la cual asirnos, enfatizan en la necesidad de observación e infe-rencia a partir de la narración construida en imágenes. Es gracias a esta parti-cularidad que todos los lectores pueden ir construyendo diversos sentidos más allá de su nivel de dominio de la lengua de acogida y, paradojalmente, la lectura de este tipo de textos complejos invita a quienes se acercan a ellos a poner en palabras las conexiones halladas, así como las dudas o los cuestionamientos surgidos en el proceso.

La lectura literaria se convierte así en un espacio que posibilita el encuentro, que convoca al diálogo y la discusión entre los lectores a partir de la puesta en juego de variedad de pensamientos, sentimientos, formas de leer, etc. Com-partir la experiencia de hablar sobre los libros les da asimismo la oportunidad de conocer otras maneras de mirar y, por consiguiente, les ofrece la ocasión de pensar un mismo hecho desde puntos de vista diferentes. Como bien señala Margaret Meek, “la literatura (y el arte en general) ofrece al lector una oportunidad para que considere otro punto de vista, y aún la posibilidad de reconciliar diferentes perspectivas [a fin de] reducir la falta de familiaridad y, a la vez, hacer lo que es fa-miliar menos estable, más inclusivo de la diferencia” (Meek, 2001: p. XVI)6.

Vemos así que aunque los lectores se aproximen a los textos desde su propia historia, desde sus vivencias particulares, la lectura literaria les permite sin em-bargo asumir perspectivas diversas y los lleva a intentar comprender las ex-periencias ajenas desde la empatía. Carolina e Hilda, dos alumnas que no han vivido el proceso migratorio pero que conviven a diario con él, expresan clara-mente esta idea al señalar que la lectura del libro de Shaun Tan les permitió si-tuarse en el lugar de los compañeros y amigos inmigrantes, ponerse “en la piel [...] del que llega aquí y empieza a vivir” (Fittipaldi, 2008: 97).

Como hemos visto, el recorrido realizado hasta aquí parte sobre todo de la ex-periencia de lectura compartida en torno a los libros de Tan y Wiesner. Pero este corpus tiene que ser ampliado por docentes y demás mediadores, de acuerdo con su particular contexto y con sus lectores, para integrar otros textos a partir de los

6 La traducción es nuestra.

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cuales puedan ser abordadas las cuestiones de migración e identidad. En esta selección podrían incluirse álbumes como Me llamo Yoon (Juventud, 2003), Mi miel, mi dulzura (Edelvives, 2005), Ziba vino en un barco (Lóguez, 2008) o ¡Va-mos a ver a papá! (Ekaré, 2010), entre muchos otros, y novelas como Luna de Senegal (Anaya, 2009), Como si no hubiera que cruzar el mar y Mar cruzado (Alfaguara, 2004 y 2013) o La noche del polizón (Norma, 2012). Libros como los que mencionamos evidencian que: “El camino que propone la literatura es un camino de conocimiento [del] otro y la cosecha que obtenemos en la lectura consiste en salir de la indiferencia porque al final de un libro quien escribe y quien lee quedan en deuda con la complejidad de razones, intereses, virtudes y defectos de un otro di-ferente de sí, comprenden que ya no sería tan sencillo desentenderse de su existencia” (Andruetto, 2014: Par. 9).

Ese conocimiento que nos ofrece del otro, de los otros, pero al mismo tiempo esa oportunidad que nos da de repensar nuestra identidad a partir de ese nuevo saber, permite situar la literatura como un espacio clave dentro del proceso de acogida, como un lugar desde donde salir al encuentro gozoso con los demás para construir así, entre todos, una sociedad abierta, dialogante y plural.

Referencias bibliográficas

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“…aunque los lectores se aproximen a los textos desde su propia historia, desde sus vivencias particulares, la lectura literaria les permite sin embargo asumir perspectivas diversas y los lleva a intentar comprender las experiencias ajenas desde la empatía”M

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Ilustración de Viviana Palmahttp://www.elmundodevivi.blogspot.com

Bajo la premisa de que todos los seres humanos somos, de una u otra forma, migrantes, la especialista Carola Martínez hace un recorrido por obras para niños y jóvenes que invitan al lector a empatizar con la realidad de quienes dejan lo conocido y se reinventan en un nuevo lugar.

Por Carola Martínez Especialista en LIJ y editora independiente www.dondevivenloslibros.com

Migración y LIJ

Recién llegados

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“…abramos todas las jaulas, pa’ que vuelen como pájaros…”

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Todos somos migrantes, recién llegados. ¡Qué gran viaje fue salir de la selva y caminar por la sabana!

Y salimos de África al mundo. Para acá y para allá. Desde Asia Menor hasta Portugal y para el otro lado, hasta el helado estrecho de Bering. Y de allí a América. En troncos huecos por el Pacífico y por toda Oceanía. Oleadas y oleadas de pueblos. Mezcla conflictiva y pacífica. Enriqueciendo nuestras cul-turas, intercambiando objetos, ideas, palabras.

Debemos nuestra lengua a incontables pueblos: íberos, celtas, romanos, ger-manos, árabes, judíos, gitanos, mapuches. Y esa es su principal riqueza. Pero tenemos mala memoria. Miramos con desconfianza al “nuevo”, sin recordar que no hace mucho tiempo, nosotros, nuestros abuelos, nuestros tatarabue-los, eran los nuevos. “Cometierra” les decían los gauchos a los italianos hace más de cien años.

Hoy tenemos otros sobrenombres, otros chistes denigrantes. Nos extrañan sus olores, sus comidas, su forma de hablar nuestro idioma. Nos perturban sus costumbres, sus fiestas y hasta su risa. Nunca nos detenemos a pensar qué piensan ellos de nosotros. De nuestro olor, que los abruma. De nuestros modismos, que significan lo contrario que en su región.

El que migra, cambia

El migrante viaja de lo conocido a lo desconocido, a un nuevo lugar donde los paisajes y las costumbres son otras. El que migra llega, no importa las razones, a un mundo extraño. El sociólogo francés Michel Wieviorka, discípulo de Tou-raine, señala que “el problema es que nadie sabe qué hacer con las diferencias entre los que llegan y los que ya están”1.

Emigrantes (BFE, 2007) es quizás el primer libro en el que pensamos cuando hablamos de migración. La llegada del protagonista a una ciudad habitada por seres y objetos surrealistas fue tema de estudio para la especialista argentina Marcela Carranza: “El mundo en el que transcurre esta historia no es el mundo del lector, y sin embargo el desplazamiento no es tan grande como para que no pueda decodificar lo que allí sucede. Este extrañamiento que el lector sufre ante ese mundo

1 Entrevista en Revista Ñ: http://www.revistaenie.clarin.com/ideas/Entrevista-Michel-Wie-viorka_0_925707440.html

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“El migrante viaja de lo conocido a lo desconocido, a un nuevo lugar donde los paisajes y las costumbres son otras. El que migra llega, no importa las razones, a un mundo extraño”

ligeramente desplazado del mundo conocido, permite su identificación con el perso-naje. La lectura de este modo busca remedar la vivencia de quien debe enfrentarse a una realidad foránea, y por lo tanto imprecisa, misteriosa”2.

El mismo tópico aborda Eloísa y los bichos (Babel, 2009/El Jinete Azul, 2012/Calibroscopio, 2014) con la historia de una niña pequeña que viaja a un nuevo país junto a su padre. “No soy de aquí”, es la primera frase del libro. Si bien al principio el álbum parece una obra de ciencia ficción, una frase hace anclaje en la realidad: “Como un bicho raro”. Y todo se transforma. Algo parecido ocurre en Migrant (Groundwood Books, 2011), un libro que habla de los trabajado-res golondrina, que viajan desde México hasta Canadá para realizar labores ocasionales en el campo. La protagonista, Anna, es pequeña y trabaja la tie-rra junto a su familia. Esa sensación de extrañamiento, esa mirada del otro, también está presente en todo el libro. Y a esta idea se suma una pregunta de Anna: “¿Cómo será quedarse en un mismo lugar, tener mi propia cama, montar mi propia bicicleta?”.

En estos tres libros el tema del desplazamiento, del proceso de inmigración y toda la problemática vital que trae consigo, se observan con una clara refe-rencia a Kafka. Los otros, el país de acogida, ese proceso de enajenación ante una migración forzada, se simbolizan con el extrañamiento de la otredad. Dice Marcela Carranza sobre Emigrantes, en una cita que puede ser extrapolada a los otros libros mencionados: “Esta ‘novela silenciosa’ (…) pone al lector en la situación del inmigrante que llega a un país desconocido. Habitar el libro se trans-forma de este modo en un desafío como el que debe afrontar quien se adentra en lo nuevo. Un desafío pleno de dudas, temores, misterios, promesas y logros”.

“Quizás lo diferente es bueno”, dice Yoon, de Me llamo Yoon (Juventud, 2003), la niña que viaja junto a sus padres y comienza a aprender un nuevo idioma. Ella está triste, se siente sola, pero aun así, sola y pequeña, es capaz de co-menzar otra vez. ¿Será que debemos aprender de los niños?

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2 En revista Imaginaria: http://www.imaginaria.com.ar/2010/11/emigrantes/

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La literatura como puerta de entrada, la literatura como ventana

Los niños inmigrantes africanos, los pequeños refugiados en Palestina, los re-fugiados de la guerra en Siria, la niña muerta en el medio del Mediterráneo filmada por la televisión italiana: lo cierto es que la migración es un fenómeno público. La literatura infantil y juvenil hace eco de esa necesidad de hacer vi-sible un fenómeno que se da a gran escala en todo el mundo. Teresa Colomer, en su artículo Escuela e inmigración, la literatura que acoge3, señala a la lite-ratura como un punto de partida: “Un potente instrumento educativo para crear una nueva representación de las sociedades actuales que incluya la diversidad de orígenes y culturas de sus individuos”.

Y acá ingresa otro tema, que la escritora María Teresa Andruetto señala de esta forma: “Pagamos un precio muy alto para disminuir nuestro contacto con el dolor de los demás; creemos tantas veces que es mejor no pensar, no saber. Ilusión de insensibilidad, de autoanestesia que imaginamos podría protegernos y, sobre todo, podría proteger a nuestros hijos. Si la literatura nos permite entrar en el corazón del otro, entonces evitarla nos ayuda a vivir anestesiados. La anestesia en la lectura se obtiene por un camino de fórmulas fijas, estereotipos que impiden penetrar la super-ficie de los textos y de la vida. Así, la indiferencia puede acompañarnos aun leyendo. Historias narradas en un lenguaje amable e inocuo en las antípodas de lo literario, cuya potencia reside en la posibilidad de inquietarnos, de conducirnos hacia zonas inesperadas de nosotros mismos”4. Ese es el momento en el que el escritor decide contar lo que existe, reflejar en sus páginas la realidad, el dolor y el sufrimiento de un otro.

“…lo cierto es que la migración es un fenómeno público. La literatura infantil y juvenil hace eco de esa necesidad de hacer visible un fenómeno que se da a gran escala en todo el mundo”

3 http://leer.es/documents/235507/242734/art_prof_escuelainmigracion_teresacolomer.pdf/47e0987a-ab9a-4208-899a-e25fcd783014

4 Memoria del 34 Congreso Internacional de IBBY, México 2015. La literatura como una casa hospitalaria: http://www.ibbycongress2014.org/conferencias/conferencia-magis-tral-3-la-literatura-como-una-casa-hospitalaria

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Así está pensado El color de la arena (Edelvives, 2005). Abdulá es un niño pe-queño, pero no tan pequeño como para no cuidar el ganado. Vive en el medio del desierto, ha dejado junto a su familia sus tierras y pronto nos damos cuen-ta de que su único sueño es tener lápices de colores para dibujar el mar, del que tanto habla su abuelo. Lo mismo ocurre en el libro Grisclarito (Macmillan, 2013), donde un conejo pequeño y sus padres inmigrantes no tienen papeles y son expulsados de su casa por unas liebres policías. Con pocas palabras, Elz-bieta, la autora, nos sitúa claramente en la realidad de la familia: “Cuando uno es pobre, se avanza despacio”.

En ese sentido va también el libro Migrar de José Manuel Mateo, ilustrado por Javier Martínez Pedro (Tecolote, 2011/Faktoría K de Libros, 2012). Escrito e ilustrado según la tradición del pueblo xalitla sobre papel amate, cuenta la his-toria de dos hermanos pequeños que cruzan junto a su madre la frontera entre México y EE.UU. Suben a “La Bestia”, el tren que une ambos países en uno de los viajes más peligrosos y cruentos que puede hacer un ser humano. Cientos de niños hacen cada día este viaje. Muchos de ellos mueren en el trayecto; la mayoría ingresa de manera ilegal y vive durante años sin derechos civiles ni so-ciales. “La incertidumbre siempre da miedo, el cambio y lo nuevo atemorizan. ¿Qué pensarán los niños cuando su mundo se modifica tan rápido, tan duro, tan tosco como el tren llamado La Bestia al que hay que abordar en marcha?”, se pregunta Elena Poniatowska en una columna sobre el libro en el diario La Jornada5.

En la literatura juvenil

En la literatura juvenil también está presente esta temática. La Gran Inmigra-ción es uno de los principales escenarios, esa gran oleada de inmigración eu-ropea que llegó a América entre fines del siglo XIX y principios del XX. Libros como El juramento de los Centenera de Lydia Carreras (Edelvives, 2007) o Stefano de María Teresa Andruetto (Sudamericana, 2004/Babel Libros, 2008) nos muestran cómo muchos niños y jóvenes cruzaron el Atlántico en busca no de “una oportunidad de ascenso social”, sino tan solo por la imposibilidad de seguir viviendo en sus países natales, donde la miseria, la guerra y la crisis los expulsaban.

5 La migración vista por los niños, pintada en papel amate: http://www.jornada.unam.mx/2011/12/04/opinion/a04a1cul

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El desamparo total de esos niños está grabado a fuego en este fragmento de Stefano:

“Dejan atrás el Hotel de Inmigrantes, el mar, el ajetreo del puerto. Van a la estación Retiro y desde ahí, en un tren, hasta La Pampa. No llevan equipaje, no tienen nada.

Pino dice:

-Es como si fuéramos recién nacidos.

-En cambio yo -dice Stefano-, creo que ya lo hemos vivido todo”.

Con todo, la magnitud del proceso migratorio fue una gran igualadora; el desamparo era general y el país los recibía, con conflictos, pero los recibía. Las migraciones internas, propias de la segunda mitad del siglo XX, también aparecen en la literatura para jóvenes. Sus protagonistas son de países cer-canos, también llegan, encandilados por las luces de las grandes ciudades, escapando de la miseria y terminan en los márgenes de la sociedad: en las villas, en las plazas, donde son discriminados y denigrados. En Presagio de carnaval, Liliana Bodoc (Norma, 2009) nos cuenta la historia del “boliviani-to” Sabino:

“Sabino Colque tenía veinticinco años en Tarambuco, lugar donde la edad suele pe-sar el doble.

La idea de irse a una ciudad grande y lejana había empezado a rondarle como las gallinas en el patio de tierra. Al principio, lo mismo que hacía con las plumosas, Sabino espantó esas ideas. Aunque estaba seguro de que por mucho que intentara apartarlas, volverían. Y terminarían por ganarle la voluntad”.

Y de nuevo aparece el extrañamiento:

“Cuando Sabino Colque llegó a esa ciudad, creyó necesario reír bajito de la gente que hablaba dando gritos tal como si estuvieran en la otra orilla, o arriba de un árbol. ¿Y a qué gritaban, si ni siquiera estaban felices o enojados?”.

En Vuelta al sur de Mario Méndez (Edelvives, 2012), el protagonista recons-truye la historia de su abuela, Filomena Juliana Benavídez. Nacida en la fron-tera entre Argentina y Chile, escapa de la pobreza y la violencia doméstica a costa de un sacrificio supremo: desprenderse de sus hijos, a los que promete volver a buscar una vez que logre asentarse.

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Como vemos, estos temas se mezclan con las migraciones actuales, produci-das por las crisis económicas y los conflictos políticos. Vivimos en una nueva época de migraciones globales. Personas de todo el mundo llegan a todo el mundo. O mejor dicho, migrantes del tercer mundo (o cuarto) buscan cualquier lugar donde vivir. Así, Karmo, un joven que escapa de Liberia como polizón en el ancla de un barco, termina en Buenos Aires en La noche del polizón de An-drea Ferrari (Norma, 2012). En ese viaje, Karmo crece de golpe. Y nuevamente, el extrañamiento: “Era algo que había aprendido, en Argentina a la gente no le gustaba que uno criticara el mate. Creían que ese líquido amargo que chupaban por un tubo era muy especial”.

En los libros para niños, la metáfora en la palabra y los recursos visuales de la ilustración transmiten la sensación de extrañamiento. En los libros para jó-venes, es la escritura cruda y sin concesiones. Nada más incómodo que la mi-gración, nada más incómodo que comenzar todo de cero. Esa incomodidad es combustible para estos libros; cada uno en su formato y género nos da una luz para mirar la realidad de esos otros que se reinventan en un lugar nuevo. Qui-zás es cierto, y en la literatura todos somos migrantes.

“En los libros para niños, la metáfora en la palabra y los recursos visuales de la ilustración transmiten la sensación de extrañamiento. En los libros para jóvenes, es la escritura cruda y sin concesiones” M

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Existe un país en el que viven los niños migrantes. Un país que se habita desde distintos lugares de la Tierra. No sabes cómo, pero un día llegas. Te llevan. Tiene una bandera que se parece a otras banderas, pero tiene algo diferente: le falta una estrella, le sobra una línea... No sé bien qué es, pero tiene algo raro.

También el idioma suena extraño, pero se entiende.

Y el paisaje. El paisaje del país de los niños migrantes es un paño blanco. Lo llevan en el bolsillo, junto a una aguja, y cada vez que pueden, van cosiendo algo: lo que veían por la ventana de la casa que quedaba en el país que dejaron, lo que dicen sus padres sobre ese lugar –sus padres siempre hablan de ese lugar–, lo que vieron por la ventana del avión, del bus, del barco.

También van agregando algunas de las cosas que encuentran en el país al que llegaron. Pocas cosas, porque los niños migrantes piensan que ese país al que llegaron no les pertenece. Se los dijo una vez otro niño y ya no lo olvidaron: vuélvete a tu país. Era una broma, pero los niños migrantes no se rieron. Y entonces en la escuela

dijeron que los niños migrantes no tenían sentido del humor, que los niños migrantes eran raros.

No hay primos ni hay abuelos en ese país. Tampoco hay mascotas, porque si tienes una mascota te encariñas y algún día vamos a volver. Pero los días pasan y el día en que vamos a volver no llega nunca. Los días pasan y no tienes mascota.

También están las fiestas. A las fiestas del país de niños migrantes va mucha gente que se parece a ellos. Porque están ellos y están los demás. Eso antes no lo sabían, pero lo aprendieron al llegar.

En las fiestas conversan, se ríen y comen la comida de allá. Esa comida se hace con ingredientes que traen los que vienen. Esa comida es la mejor del mundo. Eso dicen sus padres. Pero los niños migrantes piensan que ellos no han probado la comida de todo el mundo y que tampoco podrían hacerlo porque el mundo es un lugar grande, demasiado grande, y ellos son pequeños.

La fiesta avanza y de pronto, aunque esté sonando la música, aunque

Por María José FerradaEscritora y editora de Chile para Niños

ESE PAÍS

Columna

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estén hablando, se produce un silencio. Los padres de los niños migrantes piensan que ellos no lo notan porque son niños, pero ellos sí lo notan y saben perfectamente que esos silencios son unos agujeros que los mayores llaman nostalgia.

Los agujeros duelen, sobre todo cuando sopla el viento. Pero se aprende a vivir con ellos. Eso se lo dijo a un niño migrante su hermana mayor y este se lo dijo a todos los demás.

Otra cosa: los habitantes del país de los niños migrantes ponen mucha atención a sus propias palabras y a su forma de vestir, porque no les gusta llamar la atención de los demás. Se esfuerzan mucho, muchísimo. Hasta que un día lo logran y ese día se forma un segundo agujero.

Y habían esperado tanto, tanto la llegada de ese día, que no entienden por qué no es un día alegre.

Como suele suceder, el tiempo pasa, también en este país. Y entonces los niños migrantes comprueban que sí, que los agujeros duelen, sobre todo cuando sopla el viento.

El tiempo pasa, también en este país. Y los habitantes del país de los niños migrantes, un día miran hacia atrás y a veces, solo a veces, piensan que podría haber sido distinto.

Pero las cosas fueron así.

Y hoy hace frío, hace tanto frío. Y a pesar del paso del tiempo, los agujeros duelen.

Tal vez si alguien les hubiera hablado del sol. Tal vez si alguien.

* Según un informe de la Unicef del 2014, en Chile viven 398.251 migrantes internacionales. Sin embargo, el Gobierno estima que esta cifra podría incrementarse si se sumara a las personas que se encuentran en situación migratoria irregular. Del total de esta población, el 15% de los migrantes son niños, niñas y adolescentes.

¿Por qué algunas personas abandonan sus lugares de origen para comenzar una vida nueva en otro país? Desde tiempos antiguos la literatura toca el tema de las migraciones, como en el libro del Éxodo, que narra las aventuras del pueblo israelita viviendo en la esclavitud en Egipto, o Eneas, que abandona con su gente la ciudad de Troya para instalarse en Italia. La emigración es un viaje sin retorno hacia una tierra y una vida desconocida: nada más atractivo para la literatura.

Algunos objetivos de 5° o de 8° básico que tratan temas como “demostrar empatía por los demás” o “los grandes movimientos demográficos de fines del siglo XIX” son excelentes oportunidades para introducir el tema de la inmigración desde la empatía y la aceptación.

En la colección CRA encontraremos abundantes recursos relacionados con la migración. Hay testimonios de inmigrantes en Chile, como Cuando éramos niños en la Patagonia de Jean Chenut (Pehuén, 2006), que narra las experiencias de varias familias de origen belga que se instalan en el pueblo de Chile Chico después de la Segunda Guerra Mundial. También se puede encontrar De Europa al fin del mundo: Relatos de viajeros en Chile de Cecilia Beuchat y Carolina Valdivieso (Ediciones UC, 2011), sobre algunos viajeros ilustres que llegaron entre los siglos XVIII y XX a Chile y aportaron desde distintas disciplinas al conocimiento del país.

Libros sin fronteras

Por Equipo de Bibliotecas Escolares CRA

Desde las Bibliotecas CRA

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Para el primer ciclo, el libro álbum La Península del Tesoro de Daniel Monedero y Paula Alenda (Tándem, 2011) narra una historia triste desde la perspectiva inocente de un niño. Para el segundo ciclo, El pan de la serpiente de Norma Huidobro (Norma, 2010), ambientado en Buenos Aires a fines del siglo XIX, narra las aventuras de los inmigrantes españoles Felisa, Joaquín y Juana.

A partir de la Enseñanza Media, La infancia de Jesús de J.M. Coetzee (Random House, 2013) narra una historia de inmigración moderna que termina por hacernos pensar si no seremos todos un poco inmigrantes. De Zadie Smith es Dientes blancos (Salamandra, 2008), ambientada en un barrio de inmigrantes de Londres, en que los protagonistas se rebelan contra la situación en la que viven. Las mujeres de Ravensbrück de Lidia Beccaria y Ana Maria Bruzzone (LOM, 2010), recopila testimonios verídicos de mujeres italianas deportadas por el fascismo italiano hacia Alemania para trabajar como esclavas en industrias bélicas. Por último, el libro de poemas Weichapeyuchi ül: Cantos de guerrero (LOM, 2012) es una antología de poesía política mapuche recopilada por Paulo Huirimilla, que nos plantea otro punto de vista con respecto al tema de las migraciones: ¿Es posible sentirse un extraño en la propia tierra?

Las migraciones caracterizan al ser humano: todas las civilizaciones han surgido, de una u otra manera, por grandes movimientos migratorios producidos por fenómenos climáticos, situaciones políticas, guerras o mejores oportunidades laborales o comerciales. La sociedad global de nuestra época no es la excepción y la literatura refleja esto en historias que nos pueden dejar alegres o tristes, ¡pero jamás indiferentes!

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Desde el SNBP

Usuaria y monitora colombiana

María del Pilar Rodríguez: “La Biblioteca de Santiago es un gran tesoro que ustedes tienen”Lleva menos de un año en Chile, pero junto a su hija han hecho suyo cada espacio de la biblioteca, un segundo hogar al que van a leer, jugar y compartir con otros usuarios. Y más allá de los libros y las actividades, lo que realmente valoran es haber descubierto un lugar de acogida e integración.

Por Álvaro Heríquez EnsemeyerPeriodista SNBP-DIBAM

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María del Pilar Rodríguez (38 años) llegó a Chile en diciembre pasado procedente de Colombia junto a su esposo y su pequeña hija María Camila, de 5 años. Una de las primeras cosas que hizo al instalarse en Santiago fue buscar una biblioteca que le permitiera seguir con la tradición que inició en Cali, su ciudad de origen, que era participar activamente junto a su hija en actividades de lectura.

Fue en la Biblioteca de Santiago donde encontró ese lugar que estaba buscando, con actividades permanentes y espacios ideales para el fomento de la lectura en la primera infancia, como son la Sala Infantil y la Guaguateca.

Es que María del Pilar es una amante acérrima de la lectura y particularmente de la literatura infantil, gusto que ha procurado –con éxito– traspasarle a la pequeña María Camila. Pero para ella ser usuaria activa no era suficiente. Por eso decidió tomar un taller como monitora de lectura y actualmente lee de manera voluntaria a los niños y padres que asisten a la biblioteca. “Es muy bueno porque las mamás son muy receptivas y la capacidad de interés de los niños, a pesar de que son bebés, es altísima”, comenta.

Para madre e hija, la Biblioteca de Santiago representa un lugar en el que se sienten acogidas e integradas, donde pueden conocer gente y hacer más llevadera su estadía en un país

que recién están aprendiendo a conocer.

¿Cómo descubrieron la Biblioteca de Santiago?

Yo solía asistir a las bibliotecas infantiles de mi ciudad, Cali. Allá generalmente el último miércoles, la última semana de cada mes, había actividades para la primera infancia. Al llegar aquí lo primero que hice fue buscar un espacio similar.

¿Y qué cosas han aprendido en la biblioteca?

Mi hija ha aprendido a vincularse emocionalmente con el conocimiento, los libros, el lugar como tal. Ese ha sido el mayor impacto que ha tenido, que ya ve la biblioteca como un lugar importante al que le gusta ir, en el que hace muchas cosas. Y obviamente el nivel de lectura y consumo de libros que tiene es bastante alto para su edad.

¿Ambas piden libros para llevárselos a casa?

Normalmente pido solo para ella, porque yo tengo mi propia biblioteca o consumo por Internet. Además, compro libros. Pero con María Camila he tenido la oportunidad de acceder a libros de tradiciones de aquí, muy interesantes, que leemos juntas. Entonces, como puedo sacar siete libros, normalmente yo escojo cuatro y ella tres, o ella cinco y yo dos. A mí me interesa mucho la literatura infantil.

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¿Por eso decidió tomar un taller para monitora de lectura en la biblioteca?

Sí, fue una actividad voluntaria en la Guaguateca, de promoción de lectura en la primera infancia. El objetivo central era resaltar las posibilidades de vinculación afectiva que hay en esa actividad de lectura.

Como usuaria de biblioteca y como extranjera, ¿qué mensaje les enviaría a los chilenos que aún no conocen las bibliotecas de su país?

Pienso que lo más importante es acercarse a los padres de familia, porque los niños encantados van a la biblioteca. Por ejemplo, en la Biblioteca de Santiago todos los días hay actividades y puedo decir que desde que llegamos nunca hemos ido al centro comercial para pasar tiempo libre o tiempo de familia, porque justamente tener esas actividades de multiplicidad artística en la biblioteca permite que una no tenga que recurrir a eso. Pero no es solo dejar al niño y decir “vaya, entreténgase”; él necesita acompañamiento, que le lean, que le tengan paciencia, que pueda decidir qué libro quiere leer. Para nosotros esta biblioteca es un gran tesoro que ustedes tienen aquí en Santiago.

¿Qué rol cumplen o pueden llegar a cumplir las bibliotecas como espacios abiertos y de integración para los inmigrantes?

Uno muy importante, porque se forman vínculos. Cuando una empieza a asistir comienza a conocer a otras personas y a

generar amistad con gente que también puede estar en la misma situación. Y eso es fundamental para que una pueda sentirse cómoda en el lugar al que está llegando.

¿Ha conocido a otras personas que al igual que usted son extranjeras y se han sentido acogidas en la biblioteca?

Al taller que yo di fueron dos colombianos que estaban estudiando aquí. Y también he visto a muchas personas que sabes que no son de Chile y que se nota que no son personas que tengan mucho dinero, pero que sí son cultas porque ir a la biblioteca te permite acceder a una cantidad de información muy importante. Y eso genera un nuevo ciudadano más culto, más interesado en estas expresiones artísticas y humanas que son fundamentales para la sana convivencia, para tener puntos de vista más flexibles.

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EmigrantesAutor: Shaun Tan

Barbara Fiore Editora, 2007ISBN: 9788493481162

Hoy les traigo aquí un libro exquisito, de una belleza deslumbrante y sobrecogedora, un libro inolvidable. Se trata de Emigrantes, la novela gráfica (sin texto escrito) realizada por Shaun Tan y publi-cada en el 2007 en España por la editorial Barbara Fiore.

Recomendados por Mediadores

*De 7 años en adelante, aunque si hay compañeros emigrantes en el

aula bien puede valer para más pequeños. Y muy recomendable para

lectores entre 10 y 16 años.

para todos años

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¿Qué empuja a la gente a emigrar?, ¿qué fuerza es capaz de romper las familias y separarlas a pesar del cariño?, ¿cómo es el viaje que nos lleva lejos de casa?, ¿cómo es la soledad del que se marcha en busca de una vida mejor para los suyos?... Podría ir sumando preguntas que ocuparían todo el texto de esta breve nota de lectura, preguntas que van surgiendo a lo largo de la lectura de este hermosísimo y delicado libro, y cuyas respuestas están implícitas en las emociones que sus ilustraciones nos van provocando.

Un hombre deja su casa, su mujer y su hija y se va en busca de un trabajo que les permita vivir dignamente a él y a su familia. El monstruo (del desempleo, de la enfermedad, del hambre..., qué más da, hay un monstruo…) campa a sus anchas en ese lugar e impele a este hombre a partir en un viaje demorado hasta un lugar lejano, un lugar extraño donde todo resulta desconocido (las letras, las costumbres, la vida toda) y en el que este hombre ha de ser capaz de desenvolverse, trabajar, vivir.

Para contar todo esto de una manera accesible, deslumbrante y eficaz, Shaun Tan recurre al poderoso trazo de su lápiz; así las cosas, el autor e ilustrador australiano solo ha de crear un mundo extraño para colocar en él al protagonista de la historia con

el que nos sentimos identificados en cuanto va avanzando la lectura. Es tal la fuerza de las ilustraciones (que a un mismo tiempo nos resultan cercanas y extrañas) que quedamos entregados a ellas desde la primera página, sin remisión, y dejamos que apelen directamente a nuestra entraña, a nuestras emociones, y nos coloquen en ese lugar ensoñado (al borde de la pesadilla). Por lo tanto, atrapados en ese mundo nuevo, somos nosotros quienes deambulamos por un país incomprensible, somos nosotros los que tratamos de buscar trabajo, los que añoramos a los nuestros, los que encontramos a los otros emigrantes, a la gente generosa que hace que los días brillen gracias a los pequeños detalles. Somos nosotros, nosotros, quienes emigramos durante la lectura para habitar las páginas de este libro.

La propuesta estética de sus dibujos (algunos de ellos copiados de fotografías originales, como las de los pasaportes de sus guardas) a modo de viejas fotografías en sepia o blanco y negro, es hermosa y muy acertada para contar esta historia, habilitando un estilo personalísimo pero muy cercano para los lectores.

En suma, un libro maravilloso y totalmente recomendable.

Recomendado por Pep BrunoEscritor y cuentistawww.pepbruno.com

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CríctorAutor: Tomi Ungerer

Kalandraka, 2011ISBN: 9788492608423

Recomendados por Mediadores

Esta es una obra que, probablemente, no nació con el afán de presentar un tema asociado a la migración, pero que hoy se actualiza y se hace evidente.

para todos años

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Recomendado por Claudia Olavarría Socia y editora de Gata Gorda Ediciones Académica de la Facultad de Educación UC www.gatagordaediciones.com

Tomi Ungerer es autor de Los tres bandidos (1961) y Adelaida (1959), editados por Kalandraka al español (en el 2007 y el 2014, respectivamente) y es también ganador del Andersen de 1998. Su obra para niños (mucho más amplia y productiva que solo lo mencionado) podría ser catalogada como una obra de ilustraciones sencillas, más bien minimalistas, pero con mensajes profundos y cargados de sentido. Este es también el caso de Críctor (1958, 2011 por Kalandraka), un álbum simple pero con un mensaje claro: el destierro y la nueva vida en un país lejano.

Críctor trata sobre una serpiente, una boa constrictor, que es trasladada desde África a una pequeña ciudad francesa. Llega a la casa de Madame Bodot como regalo de su hijo, quien trabaja en África estudiando reptiles. Al principio, la mujer se espanta, pero rápidamente le entrega un hogar cálido y cuidados especiales a su nueva mascota. Críctor, nombre que le da Madame Bodot, se adapta fácilmente a su nuevo hogar e, incluso, termina siendo un héroe de la ciudad.

El libro trata sobre la esperanza de encontrar un buen lugar en el mundo, un lugar que nos sea propio, acogedor, amable. Trata sobre encontrar a un alguien que nos haga ese lugar propio y amable, sobre encontrar a un alguien que nos ame y nos acoja. A la larga, trata sobre el sentirse desterrado pero con la esperanza de que

encontraremos un nuevo espacio, una nueva tierra. Pienso que Críctor, en cierta medida, hace referencia a los migrantes africanos en Europa. Y que esa migración no es para nada amable, lo sabemos y lo vemos frecuentemente en los noticieros. Pienso también que la literatura puede ser un refugio de esperanza y, en ese sentido, Críctor podría ser leída como una obra de esperanza, como una obra abierta a las posibilidades de aceptación y amistad que los otros puedan darnos.

No podemos olvidar que este libro es una obra escrita hace más de 50 años, traída a nuestro presente de la mano de Kalandraka (editorial que tiene un especial afán por la recuperación de grandes autores de la LIJ clásica). Una obra que, probablemente, no nació con la voluntad de presentar un tema asociado a la migración, pero que hoy se actualiza y se hace evidente.

Nuestro mundo, cargado de historias menos alegres sobre los migrantes, necesita de más señoras como Madame Bodot, que se asombren por lo nuevo y que lo acepten tal como es. Nuestro mundo necesita que todos seamos un poco Madame Bodot con quienes se ven desterrados, apartados de su tierra, solos y asustados en una nueva casa. Una casa que debiera acoger y no rechazar. Una casa que debiéramos hacer hospitalaria y no hostil.

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Memorias de una abuela apostadora

Autora: Dayal Kaur KhalsaEdiciones Ekaré, 2015

ISBN: 9788494303852

A la tradición de historias con abuelas, que inicia Caperucita, llega una que se sale del molde: apuesta, bebe, mastica chicle y hasta es un poquito aprovechada cuando pone las cartas de póker sobre la mesa. La anciana de este libro álbum no dejará ganar la partida a nadie. Ni a su pequeña nieta, a quien le sugiere que apueste su mesada. “Ella arrasó conmigo”, recuerda la nieta.

Recomendados por Mediadores

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La nueva edición del libro Memorias de una abuela apostadora de Ediciones Ekaré, escrito e ilustrado por Dayal Kaur Khalsa y publicado originalmente en 1986, acierta desde la traducción del título en inglés, que hubiera sido, literalmente, Cuentos de una abuela apostadora.

“Memorias” establece ya un tono más íntimo, testimonial, que se corresponde mejor con esa suerte de relato oral que propone la autora –y nieta– desde las primeras líneas: “Mi abuela era una gran jugadora. Le encantaba apostar. Esta es la historia de su vida, tal como ella me la contó y como yo la recuerdo”.

La construcción de su recuerdo se sucede en páginas llenas de acción y de humor.En la primera, la abuela nace, los cosacos invaden su pueblo, ella debe esconderse en una carreta, pierde un zapato, huye en un barco de Rusia, se instala en Nueva York –sin el zapato– y, cuando está en edad de casarse, monta una simpática escena.

En la segunda página, el montaje surte efecto: se casa. Luego el marido consigue trabajo con un mafioso y la abuela aprende a jugar póker, con algunas mañas, “para ayudar con los gastos de la casa”.

En la tercera página se concluye el pasado de la abuela, nace la nieta y arranca el cuento de ellas dos juntas que, además de apuestas, tendrá idas a la feria, al cine, al teatro, a la juguetería, y dos consejos importantes: uno, nunca ir sola al bosque (¿será la abuela de Caperucita que habla en revancha?), y dos, tener siempre mucha

sopa de remolacha en la nevera, por si los cosacos invaden el barrio.

Pero no solo es el sentido del humor desde las manías inamovibles de una persona mayor y las costumbres que migran con la gente; lo mejor de esta anciana es su placer por la vida: “Mi abuela gozaba un mundo”.

La nieta se ocupa de relatar, con una prosa directa, con detalles singulares, bien elegidos, una cotidianidad sin lobos feroces pero con tacitas verdes, anillos de diamantes, sándwiches de banana y una alfombra con estampado de rosas.

Las ilustraciones condensan esas particularidades, arrojan otras pistas, y son tan notables como el texto: plastas de colores vibrantes, trazos gruesos y simples, una fuerte influencia naif y perspectivas llenas de simetrías y diagonales que atrapan la mirada.

Las expresiones en el rostro de la abuela también llaman la atención: van de la sonrisa discreta, traviesa, al estoicismo de quien trama algo o estudia a su oponente. Casi siempre lo segundo.

El secreto del humor y la potencia de esta historia radican, justamente, en la naturalidad y hasta seriedad con la que se cuentan y dibujan las extravagancias de la abuela que, cuando viaja en tren, se baña en una tina llena de jugo de naranja.

Dayal no pierde tiempo en enunciados lacrimógenos, se divierte, y nos divierte, con una abuela que apuesta por una vida gozosa y gana un libro que honra su memoria.

Recomendado por Adolfo CórdovaPeriodista, escritor y promotor de la lectura www.linternasybosques.com

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Té con leche Autor: Allen Say

Everest, 2001ISBN: 9788424179380

Recomendados por Mediadores

“Sus padres la llamaban Ma-chan, que era el diminutivo de Masako, y hablaban con ella en japonés. Todos los demás la llamaban May y hablaban con ella en inglés”.

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Recomendado por María Teresa MujicaProfesora PUC Biblioteca SC Monjas Inglesas

May, la protagonista de esta historia de Allen Say, se siente una norteamericana más, a pesar de que su familia sea extranjera. Ella habla y piensa como estadounidense. Es lo que conoce, siempre ha vivido en San Francisco y esa es su realidad.

Por eso, cuando sus padres la llevan a Japón para que se empape de la cultura de su pueblo, todo le resulta extraño e incómodo, principalmente el hecho de que su madre esté decidida a convertirla en una auténtica japonesa. Se ve presa del incómodo kimono, sufre por tener que sentarse por horas en el suelo y echa mucho de menos la comida: tortillas, pollo frito, espaguetis, té con leche y azúcar, y todo lo que le recuerda a “su” país.

Desesperada con su nueva realidad, decide huir en busca de su identidad y destino.

Muy bien escrito, con un lenguaje simple y sin localismos, este libro narra de forma clara, en tercera persona, las vivencias de May, lo que ella siente y piensa ante el mundo que la rodea y cómo reacciona frente a los nuevos desafíos.

Un libro de gran formato y tapa dura, con cuidadas ilustraciones que acompañan muy bien el texto y que nos permiten sumergirnos en los distintos lugares donde transcurre la historia. Negros, grises y cafés son los tonos que dominan la propuesta

gráfica del autor, realista y cargada de detalles.

Allen Say es un destacado autor e ilustrador japonés-norteamericano que ha obtenido numerosos reconocimientos a lo largo de su carrera, incluyendo la Medalla Caldecott. Ha publicado varios títulos relacionados con el mismo tema: inmigrantes japoneses y norteamericanos en ambos países. Claramente, su historia personal lo marca.

“May, un hogar no es un lugar o un edificio que te espera con los brazos abiertos en Estados Unidos o en cualquier parte…”, le dicen a la joven protagonista de Té con leche. Y eso es justamente lo que ella no se cansa de buscar: ese hogar en el que nos sentimos cómodos, donde no tenemos que mirar lo que está haciendo o diciendo el otro para saber que pertenecemos ahí.

Una invitación a buscar los elementos propios de las raíces y la cultura que nos identifica. Un llamado también a ponerse en los zapatos del otro, de un extranjero que llega a un país que no es el suyo, con códigos distintos, o de una persona que llega a un lugar nuevo, en el que no conoce a nadie. Una puerta además para conocer otros textos con una temática similar, tales como El Jardín de la Emperatriz Casia (Norma) o Enigma asiático (FCE), libros que ayudan a conocer el mundo, a uno mismo y, en definitiva, a ser una mejor persona.

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El canario polacoAutor: Sergio Gómez

Ilustración de portada: Rafael Nangarí y Juan Márquez

Ediciones SM, 2014 (6ta Ed.)ISBN: 9789562645621

Una original novela infantil protagonizada por un viejo ratón contador de historias que vive en el establo de una familia alemana frente al lago Llanquihue, en el sur de Chile.

Recomendados por Mediadores

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El ratón de este libro –que ganó el Premio Barco de Vapor en el 2008– llegó desde Europa en el bolsillo del abrigo de Anne Suren, una niña francesa de origen judío de solo once años, que se salvó de los campos de concentración donde murieron sus padres. El ratón va contando la historia de la pequeña y de su amistad con un canario polaco que les silbaba en los momentos más difíciles, dándoles esperanzas en un mundo hostil.

Antes de la persecución nazi, mientras vivían en París, un general aconseja al padre de la niña que se marche de allí con su familia: “Tal vez viajar a Estados Unidos donde se decía viajaban los emigrantes”. El padre, escritor de libros infantiles, no cree en los funestos vaticinios que se propagan en tiempos de guerra y sufre las consecuencias pagando con su propia vida y la de su esposa en el campo de prisioneros Auschwitz-Birkenau, por el solo hecho de ser judíos.

Un conmovedor relato que nos hace reflexionar sobre la intolerancia durante la Segunda Guerra Mundial desde la perspectiva de la niña y sus inseparables amigos: su canario y su ratón. Diversos sucesos, algunos angustiosos, están descritos con verosimilitud y emoción mostrando

cómo el ser humano en distintos momentos de la historia se ve en la necesidad de emigrar.

El libro va narrando las distintas peripecias de la niña en un continente en guerra. Muy conmovedor es el momento en que la pequeña se despide de su canario en el muelle francés de Le Havre hasta la llegada con su ratón, primero a Buenos Aires y luego al sur de Chile.

Hacia el final, el ratón reflexiona: “Mi historia debería concluir relatando esa travesía sobre el mar que dé cuenta de cómo salté de un continente a otro, para llegar a este rincón del mundo, un rincón bello y apacible, lleno de emigrantes alemanes o de familias chilenas, trabajadores pacíficos a quienes les gusta la música, y ayudan y acogen a todos los que llegan, tan diferentes a los que conocí en aquella época en que debí huir como prisionero”.

El libro va alternando la vida del ratón en el granero de los Muller, frente al volcán Osorno, con el relato de lo sucedido tiempo atrás en épocas del Tercer Reich.

Un libro sobre la emigración y la necesidad del ser humano por buscar comprensión y paz en un mundo en guerra.

Recomendado por Manuel Peña Muñoz Escritor y especialista en literatura infantil www.elcaballerodelosalerces.cl

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La literatura que acoge: Inmigración y

lectura de álbumesObra dirigida por Teresa Colomer y

Martina FittipaldiBanco del Libro-GRETEL, 2012

ISBN: 9789806417397

Por María Paz Garafulic Directora Fundación Había una Vez

Recomendado Profesional

La creciente ola migratoria nos invita a repensar el mundo y a realizar esfuerzos por asimilar la cultura que cada día se va desarrollando. Uno de los caminos para iniciar este aprendizaje es, sin duda, comenzar por los niños, y un excelente medio son los libros.

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La literatura que acoge: Inmigración y lectura de álbumes es una obra que surge como fruto de una investigación desarrollada por el Grupo de Investigación GRETEL, de la Universitat Autònoma de Barcelona. El libro comparte los resultados de estudios aplicados en estudiantes inmigrantes escolarizados en nuevos contextos socioculturales, donde la literatura jugó un rol clave en los procesos de integración.

Un gran aporte para el trabajo de educadores en contextos multiculturales, quienes encontrarán en la palabra literaria un “instrumento” de acogida y reconstrucción de la identidad de quienes llegan. Un puente a la reflexión sobre la realidad pluricultural que abastece de “imágenes” para aportar en la construcción de representaciones de una sociedad diversa.

Los libros álbum cobran un papel importante en este viaje; con su gran componente visual, rompen las barreras idiomáticas y facilitan la interacción profesor-alumno. Un recurso que, sumado a la discusión literaria, se convierte en herramienta para afrontar el reto de acoger a alumnos de inmigración reciente. La obra demuestra la forma en que

estos libros facilitan el tratamiento de temáticas complejas a pesar de existir dominio limitado de la lengua o la lectoescritura, ofreciendo un motivo para hablar y compartir.

En sus capítulos podemos encontrar también propuestas metodológicas aplicadas en el aula, como actividades didácticas, formación de mediadores y resultados obtenidos en los mismos niños a través del trabajo de vinculación entre literatura y migración. Una apuesta útil para las prácticas docentes: la selección de corpus concretos, determinadas formas de mediación, las posibilidades de la discusión compartida y la expresión creativa de los niños.

En definitiva, un libro que provee la oportunidad de conocer en profundidad la respuesta a la literatura, reconociendo las emociones empáticas que provoca y su potencial para abrir espacios de encuentro entre la cultura representada por los textos y los contextos culturales de los lectores. Una invitación para profesores y adultos a formarse como mediadores, utilizando la lectura como aprendizaje social y afectivo en el nuevo contexto mundial en pro de la integración, reconocimiento de las diferencias y valores comunes.

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Recomendados Fundación Cuatrogatos

Destacados de la Fundación Cuatrogatos

La Fundación Cuatrogatos, con sede en Estados Unidos, tiene entre sus

objetivos la investigación y valoración de la oferta editorial en español para niños y jóvenes. Cada año otorga el Premio Fundación Cuatrogatos a 20 libros sobresalientes de creadores

iberoamericanos y, además, difunde un amplio listado de obras recomendadas

por su calidad literaria y gráfica.

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Para leer con los más pequeños

Duerme, niño, duerme

Autora: Laura Herrera Ilustradora: July Macuada Ekaré Sur, 2013 ISBN: 9789568868116

Mientras el viento sopla sobre los mágicos paisajes de la isla de Chiloé, en el sur de Chile, dentro de una casita una madre trata de ahuyentar los temores de José, su pequeño hijo, para que logre conciliar el sueño.

Este precioso libro, inspirado en una canción de cuna tradicional inglesa, conjuga un texto que transmite amor maternal, seguridad y paz con ilustraciones inspiradas en motivos del entorno geográfico y cultural donde se sitúa la historia.

Con el tradicional sello de calidad de los álbumes creados por Ekaré, esta es una obra ideal para leer en la cama y generar un momento especial de cercanía y afecto; un pórtico para dar paso al reposo y a hermosos sueños.

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Para leer con los más pequeños

Cu Canguro

Autora: Gabriela Keselman Ilustradora: Nora Hilb Norma, 2013 ISBN: 9789875456143

Un día, Cu Canguro se lleva una gran sorpresa: cuando, cansado de jugar y saltar, intenta meterse en la bolsa de su mamá, se percata de que esta ha sido ocupada por un cangurito muy parecido a él, pero más pequeño. El descubrimiento no le hace ninguna gracia al protagonista de este cuento.

Refrescante acercamiento al eterno conflicto que genera la llegada de un nuevo miembro a la familia. El texto de Gabriela Keselman recrea con acierto el pensamiento y la conducta de los niños de las primeras edades cuando dejan de ser hijos únicos, y las ilustraciones de Nora Hilb, hechas con lápices de colores, enriquecen la propuesta aportando con sus trazos ingenuidad y deliciosos detalles a la trama.

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Para los que empiezan a leer solos

Cielo de agua

Autor: Aramís Quintero Ilustradora: Betania Zacarias Fondo de Cultura Económica, 2014 ISBN: 9786071621313

Aramís Quintero, una de las principales figuras de la poesía para niños y jóvenes en nuestra lengua, entrega con Cielo de agua un libro de esmerada factura, rebosante de lirismo e imaginación.

Ganador del Premio Hispanoamericano de Poesía para Niños 2013, este es un excelente cuaderno para propiciar un enriquecedor encuentro de los niños con la poesía de alto vuelo artístico. Sus originales composiciones, con gran riqueza de intenciones y significados, transitan por variados registros expresivos: desde lo humorístico y lo lúdico hasta lo intimista y lo reflexivo. Animales, paisajes y preguntas, para las que cada quien deberá hallar sus propias respuestas, se reúnen en este exquisito juego verbal de imágenes y sonoridades. Las ilustraciones, cándidas y pródigas en color, tienden efectivos puentes comunicativos hacia los versos.

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Para los que empiezan a leer solos

Un señor muy recto & una señora con muchas curvas

Autor: Fidel Sclavo ¡Más Pimienta!, 2013 ISBN: 9789974836846

Con una trama lineal y un elegante y expresivo trabajo de ilustración y diseño, este libro álbum del uruguayo Fidel Sclavo pone de manifiesto la capacidad de los seres humanos para descubrir lo esencial y aceptarse, por encima de rasgos y preferencias personales en apariencia inconciliables, cuando los une el amor.

Un señor muy recto & una señora con muchas curvas es una propuesta fresca, apta para todas las edades, que invita a reflexionar sobre el arte de construir relaciones afectivas que acepten las diferencias del otro, basadas en el respeto y la transformación enriquecedora, pero sin renunciar por ello a las peculiaridades que nos hacen únicos.

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Para los que se atreven con libros largos

La voz del árbol

Autor: Vicente Muñoz Puelles Ilustrador: Adolfo Serra Anaya, 2014 ISBN: 9788467861372

Páginas que celebran la convivencia de los seres humanos, los animales y los árboles. Los capítulos, con el paso de las estaciones del año como trasfondo, van dibujando, con un lenguaje de gran plasticidad, un mosaico que nos presenta a una familia de la que forman parte miembros muy distintos entre sí, unidos por fuertes lazos afectivos. Poético acercamiento a un mundo en el que la palabra escrita se convierte en un espacio privilegiado para el crecimiento espiritual, la comunicación y el entendimiento.

Con pinceladas de humor y de misterio, esta novela del autor español Vicente Muñoz Puelles, con delicadas ilustraciones de su compatriota Adolfo Serra, rinde homenaje a la naturaleza en su espléndida diversidad y al poder transformador de la literatura y la lectura.

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Para los que se volvieron grandes lectores

Zoom

Autora: Andrea FerrariEdiciones SM, 2013ISBN: 9789875738683

Haciendo forward y rewind para conducir a los lectores hacia adelante y hacia atrás en el tiempo, y zoom para proponer acercamientos a las emociones y los secretos de sus personajes, la escritora argentina Andrea Ferrari construye una novela redonda y dinámica, de gran riqueza composicional, que muestra diferentes aristas de la sociedad contemporánea (el desempleo, la depresión, el alcoholismo, la desigualdad social).

Ana, la adolescente protagonista, encuentra un refugio en un universo virtual donde puede transformarse en la guerrera Ishara, pero la situación económica de su hogar la impulsa a buscar un trabajo temporal que desencadena sucesos imprevistos.

Narración aguda y sutil, donde las imágenes captadas a través de la lente de una cámara son traducidas con acierto al lenguaje de las palabras; un libro que nos recuerda que la trama de la vida, con todos sus posibles principios y finales, es mucho más compleja que cualquier juego virtual.

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Para los que se volvieron grandes lectores

Tristania

Autor: Andrés Acosta Ilustrador: Marco Chamorro Ediciones El Naranjo, 2014 ISBN: 9786077661856

¡Abran paso a la caminata de los muertos vivientes! ¡Los zombis al poder! Esta ultrasupermegagore novela juvenil, de vocación onírica y surrealista, se inspira en personajes y situaciones de las películas de terror serie B y les rinde homenaje con una trama oscura, viscosa y con constantes puntos de giro, ambientada en un viejo cine inverosímil, cuya arquitectura parece escapada de lo más sombrío del universo de Piranesi.

El gordo Morby y el flaco Sick, dos hermanos adictos a los juegos de rol y al cine más sanguinario y truculento, protagonizan esta farsa de humor negro que nos conduce de forma original a través del imaginario dark de un sector de los niños y adolescentes de hoy.

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Entrevista

JAVIER ZABALA:

“La mirada personal se construye y también, a veces, solo se descubre”

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Invitado al 3er Festival Internacional de Ilustración de Chile, FESTILUS 2015, el destacado ilustrador español visitará por primera vez nuestro país en agosto, para compartir su oficio con lectores, mediadores y autores.

Por María Isabel MolinaSocia fundadora de PLOP! Galería Directora editorial en Grafito Ediciones Investigadora en edición e ilustración

Si la ilustración fuera un territorio, Bolo-nia sería sin duda su capital. Todos los años se congregan ahí miles de autores

en su famosa Feria del Libro Infantil y, en este evento de gran envergadura, hay nombres que, simplemente, no pueden faltar. Uno de ellos es Javier Zabala, a cuyo libro El pájaro enjaulado la editorial Edelvives le dedicó por completo su stand en el 2014.

Y es que por su abultada trayectoria, numerosas distinciones –entre las que se cuentan el Premio Nacional de Ilustración de España 2005– y la gran diversidad de libros en los que ha trabajado, Zabala es un autor imprescindible en el panorama de la ilustración internacional actual.

En medio de sus viajes y clases, dos ocupaciones que junto con ilustrar llenan

gran parte de su tiempo, Javier dialogó con Había Una Vez sobre su proceso creativo y cómo ha construido ese terreno tan personal que plasma en cada uno de los libros en los que participa.

En tu sitio web hay una cita de Rafael Vivas que dice que los libros que has ilustrado son diferentes entre sí y que no repites esquemas; sin embargo, hay algo que los unifica. ¿Identificas un hilo conductor en tu obra?

Quiero creer que así es. Si miras juntos todos mis trabajos de estos años creo que se perciben todos los eslabones de una cadena ya bastante larga (incluso los eslabones más débiles o menos claros). En realidad, si yo tuviese que definir mi estilo diría que es ecléctico, y lo es seguramente porque yo

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también lo soy como persona. Me cuesta elegir y quizás por ello también me guste conciliar situaciones a priori difíciles si intuyo que esa unión será positiva para ambas partes. Lo mismo me sucede con la plástica: son retos difíciles de eludir, me provocan, aunque soy consciente de que a veces puedo correr riesgos y meterme en un lío.

Casi al principio de mi carrera trabajé una temporada en equipo con tres colegas: Paz Rodero, Emilio Urberuaga y Arcadio Lobato. Un día le enseñé 50 o 60 ilustraciones a Arcadio. Él las miró detenidamente y me dijo: “Están todas muy bien, Javier, pero… ¿te das cuenta de que has empezado aquí cinco carreras y solo tienes una vida?”. Creo que desde entonces muchos de mis esfuerzos

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ta “En realidad, si yo tuviese que definir mi estilo diría que es ecléctico, y lo es seguramente porque yo también lo soy como persona”

se han centrado en procurar ser coherente plásticamente, aunque no siempre lo he conseguido. Si a esto añadimos que me encanta investigar, probar técnicas, maneras, recursos, distintas formas de narrar…, tenemos lo que un italiano llamaría un casino, un lío.

Javier cuenta que hace un tiempo le tocó escuchar en Cuba una conferencia donde el novelista Leonardo Padura dijo: “¡Qué sería de los escritores sin sus obsesiones!”. Inmediatamente, recuerda Zabala, pensó que lo mismo sucede con los ilustradores.

¿Y has buscado esas obsesiones en tu trabajo?Sí, lo hice cuando volví a Madrid y me sorprendí con todas las que descubrí. Muchas, realmente. Temas recurrentes, composiciones similares con diez años o más de diferencia, gestos gráficos incluso muy alejados técnica o cronológicamente, ilustraciones en donde una e incluso varias de estas obsesiones aparecían…, y cuanto más tiempo dedicaba a esta tarea más aparecían, hasta que dejé de hacerlo.

Desde entonces, muchas veces, en vez de mostrar mi trabajo desde un punto de vista cronológico (desde donde se perciben más claramente todos los eslabones de esa cadena de la que hablaba), prefiero hacerlo desde

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el punto de vista de las obsesiones. Ahí se ve claramente el paso del tiempo, las búsquedas y luchas, pero a la vez creo que sí que hay un hilo conductor evidente. Pienso que la coherencia solo se puede percibir (al menos en mi caso) si ves la obra en conjunto. Aunque creo también que sobre estas cosas es siempre mejor que opinen los demás porque quizás yo no tenga suficiente perspectiva.

Por tu trabajo viajas con regularidad y estás en contacto con diferentes culturas. Este continuo movimiento, ¿se traduce como un aporte a tu obra? ¿De qué manera?Mientras viajo dibujo mucho en cuadernos, ya sea en aviones, trenes, habitaciones de hotel…, pero me sucede una cosa curiosa: nunca dibujo lo que veo en ese momento o lo que estoy viviendo. Solo dibujo lo que tengo en la cabeza, de memoria. Tienen que pasar varios meses para que consiga metabolizar todos los estímulos, y normalmente entonces ya estoy en otro sitio. Pero claro que los viajes te enriquecen, tanto visual como profesional o personalmente. Todo lo que vivimos o hacemos o somos acaba en un papel, es como una especie de catarsis.

En una entrevista señalaste que tu forma de trabajo se relaciona con el hallazgo, lo cual proviene de tu actitud ante el mundo, es decir, de una característica personal. Según tu experiencia, ¿ante qué elementos deberían estar receptivos los ilustradores?Creo que la curiosidad por todo debe ser una actitud en una profesión como la nuestra, también la capacidad de sorprenderse con los hallazgos inesperados

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y aprovecharlos como fuente de creación. Yo, que me tengo por una persona intuitiva, tanto en mi trabajo como en la vida, normalmente estoy muy atento a lo que sucede, y en un papel suceden muchas cosas inesperadas que se pueden canalizar, usar.

Una colega me recordaba hace poco que nosotros trabajamos con los sentimientos, de dentro hacia fuera, con nuestro yo más íntimo, pero no creo que eso sea suficiente si primero no eres receptivo y estás atento a las pequeñas cosas que suceden cada día delante de nuestros ojos. Los ilustradores tenemos una mirada un poco ausente, despistada cuando caminamos por la calle porque estamos concentrados en muchos detalles que llaman nuestra atención. Son nuestras fuentes de inspiración, pero por supuesto también los libros, el teatro, la ópera, el cine, la música… Si no te preocupas de “rellenar los saleros”, de renovar la información y los estímulos, de procurar tener una opinión sobre las cosas, es difícil que después puedas aportar algo interesante en tu trabajo. Por supuesto que el proceso creativo comienza mucho antes de que el lápiz o el pincel toquen el papel. Un libro creo que se trabaja el 80% en la cabeza y el 20% en el papel. La mirada personal se construye y también, a veces, solo se descubre. Luego se convierte en tu mundo plástico.

Has ilustrado grandes obras de la literatura. ¿En qué se diferencia tu lectura como ilustrador de tu lectura normal o ajena a un proyecto?

Yo suelo leer los libros que ilustro tres veces como mínimo y procuro que la primera lectura sea solo como un lector “normal” ajeno a la plástica. No siempre es fácil y si una imagen me llega clara mientras leo, la

apunto en el margen. En la siguiente lectura me esfuerzo en traducir la literatura en imágenes. La tercera lectura muchas veces es solo parcial; fragmentos o párrafos que llamaron mi atención o quizás una lectura entre líneas, más intuitiva. Son códigos muy distintos el plástico y el literario y obviamente hay un proceso de inevitable traducción para que la información llegue

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La prosa del Transiberiano y de la pequeña Juana de

FranciaAutor: Blaise Cendrars

Ilustrador: Javier ZabalaFCE, 2013

ISBN: 9786071616098

SantiagoAutor: Federico García LorcaIlustrador: Javier ZabalaLibros del Zorro Rojo, 2007ISBN: 9788496509559

ÁrbolesAutor: Mario BenedettiIlustrador: Javier ZabalaLibros del Zorro Rojo, 2012ISBN: 9788496509993

El soldadito SalomónAutoras: Rocío Antón y Lola NúñezIlustrador: Javier ZabalaAnaya, 2014ISBN: 9788467860825

El pájaro enjaulado Autor: Vincent van Gogh Ilustrador: Javier Zabala Edelvives, 2013ISBN: 9788426390905

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ta “Si no te preocupas de ‘rellenar los saleros’, de renovar la información y los estímulos, de procurar tener una opinión sobre las cosas, es difícil que después puedas aportar algo interesante en tu trabajo”

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clara y sin ruido al receptor. Lo que sí tengo claro desde hace tiempo es que siempre es mejor sugerir al lector que imponer. Dejar espacio, huecos vacíos donde otros puedan incorporar sus sensibilidades, su visión personal de la historia. En definitiva, no cerrar demasiado la propuesta.

Considerando que has ilustrado libros de diferentes géneros, ¿hay diferencias entre ilustrar poesía y narrativa?

A mí me encanta ilustrar poesía y creo que es porque es el género que más posibilidad de interpretación y libertad creativa te permite; donde tu mundo plástico, emocional e intelectual tiene más cabida.

También has señalado que la ilustración, como lenguaje, ha alcanzado la mayoría de edad hace tiempo. En Chile se está asentando esta situación. Si bien depende del contexto, a grandes rasgos, ¿qué indicadores crees que marcan este proceso de maduración?

Creo que los propios ilustradores debemos trabajar un poco más allá del margen del mercado, fuera de la zona de confort, forzando un poco las cosas, los lenguajes, las formas de transmitir la información y por supuesto la plástica (a veces nos olvidamos de que más allá de la comunicación, la relación texto-imagen, etc., la ilustración es una manifestación eminentemente plástica). Sin embargo, esto no sería nunca suficiente si el propio mercado y sus demás

actores (editores, lectores…) no estuviesen maduros y/o receptivos para seguir a los creadores. Al final, simplemente, no comprenderían.

A veces sucede que un libro queda demasiado lejos de esos márgenes de comprensión de un determinado público y solo años después se produce esa esperada y necesaria conexión, pero incluso esto creo que es positivo.

Has trabajado con diversas editoriales de todo el mundo, algunas bastante arriesgadas respecto del concepto de libro álbum…

En los últimos años en Europa, y también en varios países de Latinoamérica, se han creado muchas pequeñas y valientes editoriales de calidad que han permitido y potenciado que los lenguajes, tanto el gráfico como el literario, pudieran evolucionar, crecer y madurar. Si los lectores no hubiesen estado receptivos, no habría habido sitio para la creación de estas editoriales. Sin todos ellos habría sido imposible este crecimiento, la gran cantidad de propuestas gráficas de calidad que existen hoy en día. Por supuesto, soy consciente de que la ilustración es un gran cajón de sastre y de que hay muchos libros prescindibles en el mercado, pero creo que estamos en un momento en el que la ilustración de calidad tiene más espacio que nunca.

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Ilustradora

Nacida en el sur de Francia, la ilustradora chilena llegó a Chile siendo una adolescente. El impacto de un nuevo país, los recuerdos de su infancia y un diálogo permanente con el medioambiente son algunos de los ingredientes que enriquecen su intenso y profundo trabajo artístico.

RAQUEL ECHENIQUE:“EN LA NATURALEZA ENCUENTRO LA FUERZA Y EL MOVIMIENTO QUE PONGO EN MIS ILUSTRACIONES”

Por Claudio AguileraPeriodista y socio fundador de PLOP! GaleríaInvestigador y curador de ilustración

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“Cuando llegué a Chile sentí por primera vez lo que era ser extranjero”, recuerda la ilustradora Raquel Echenique, de nacionalidad chilena y española, pero nacida en Lagrasse, Francia. “Venía de un pueblo multicultural y llegué a una capital muy cerrada, en la que incluso ser adolescente era distinto. En Francia, la adolescencia era probar y tener experiencias. Acá lo que importaba era adaptarse a las normas”.Han transcurrido varios años, pero ella sigue sin conformarse con las reglas. En un mercado editorial en el que no siempre es fácil alejarse de los estereotipos que marcan lo que debe ser un libro ilustrado o un libro para niños, el trabajo de Raquel Echenique se presenta como un desafío visual, que no rehúye la intensidad de la materia ni tampoco las sombras, a fin de cuentas tan propias de la vida como las luces.

La imagen es más o menos así. Un pue-blo medieval en el sur de Francia que parece sacado de un cuento, con una

abadía de los tiempos de Carlomagno y un puente de piedra del siglo XII. Los niños corren en el bosque, nadan en el río, esca-lan cerros. Podrían llamarse Rachid, Cheng, Enzo o Raquel. En sus casas se podría ha-blar árabe, chino, italiano o español. Pero eso a nadie le importaría mucho, porque a la hora de jugar o ir a la escuela pública to-dos serían iguales, todos habitarían el mis-mo país: la infancia.

La siguiente escena transcurre en Santiago de Chile. La niña Raquel ya es una adolescente recién llegada a un país en plena dictadura. No es solo otro idioma, son otros códigos y otra cultura. La libertad y la diversidad son cosa del pasado. Aquí prevalecen las convenciones sociales, las reglas y el deber ser.

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“Ser extranjero en Chile, sobre todo si vienes de Europa o Estados Unidos, tiene algo bueno, porque se valora tu mirada”, acota. “Eso es rico y te da cierta seguridad. Pero por otra parte produce una especie de nostalgia muy profunda que a veces se transforma en rabia, porque no encuentras esa manera de ver y vivir aquí. O la encuentras en círculos muy pequeños”.

Es probable que sus libros, que ya suman más de 30, sean uno de esos círculos. En ellos se respira aquella sensación de libertad, espontaneidad y fuerza que tanto anhela. Desde las evocaciones a la muerte en Alturas de Macchu Picchu de Pablo Neruda (Amanuta) y el feroz despliegue pictórico en Reino Animal de Gabriela Mistral (Pehuén), a la cándida nostalgia de Luchín de Víctor Jara (Lom) y la poesía cotidiana y mínima de Diez pájaros en mi ventana de Felipe Munita (Ekaré Sur), sus imágenes se elevan a partir del texto gracias a una lectura llena de sugerencias y vivencias propias.

“En el fondo, ilustro mis temas”, explica.

“Aquellos que me llaman y que busco. Con los que convivo, sufro, de los que intento recuperarme, trato de superar o sobrellevar. Es a través de esa cosa negra, triste e incluso violenta, que logro profundizar en un texto. Me costaría trabajar desde la alegría, desde la cosa colorida y cálida. Es el leguaje que conozco”.

Escribir para ilustrarRaquel Echenique traza grandes manchas negras sobre la pared blanca. La pintura escurre. Se expande. Corre muro abajo. Ella deja que siga su curso hasta que en el momento exacto la atrapa, la devuelve, le da forma, la hace suya. Agrega detalles. Construye personajes. Añade color. No hay errores ni duda. Todo fluye. El pequeño mural es parte de la muestra Bandada que pocos días después inaugurará frente a decenas de personas en PLOP! Galería. Ahí reunió sus trabajos más recientes. Un conjunto en el que, incluso si las técnicas y los materiales

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“En el fondo, ilustro mis temas. Aquellos que me llaman y que busco. Con los que convivo, sufro, de los que intento recuperarme, trato de superar o sobrellevar”

“Hacer un libro es ir desde algo intuitivo a algo muy concreto”, explica. “Llevar esa sensación que te da el texto a una estrategia que te permita conjugar tus ilustraciones con el escrito de manera que formen un lenguaje paralelo, que no es el mismo, pero que se enriquecen mutuamente y se transforman en un todo”.Cada uno de esos pasos implica cientos de decisiones. ¿Será un primer plano o un gran paisaje? ¿Se incluirá un árbol, un florero o

con los que trabaja son diversos (collages, papel de color, pastel graso, tinta, lápiz, acuarela), se siente la cohesión y solidez de su obra. “Cada texto me trae un material, me pide una forma particular de dibujo”, dirá semanas después durante una visita guiada.

Pero lo de ella es un azar controlado. Quizás porque creció entre dos culturas, quizás porque todavía piensa y sueña en español y francés, Raquel Echenique se mueve en un vaivén permanente entre la planificación y la espontaneidad, entre la estructura y el hallazgo, entre la palabra y la imagen.

La soltura con que resuelve cada una de sus imágenes es el resultado de un proceso que parte con una lectura del texto y una gran cantidad de anotaciones donde deja registro de las sensaciones que le ha provocado. Luego vienen los bocetos, en los que comienza a estructurarse la historia ilustrada, su ritmo gráfico, composición, escenas, planos y símbolos. Es lo que ella llama “cranear”.

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“Cada texto me trae un material, me pide una forma particular de dibujo”

una casa? Y nada de eso es trivial porque ella busca que todo signifique, que nada sea decorativo en sus ilustraciones.

Naturaleza interiorCuando ya el plan está trazado, recién entonces llega la hora de “pensar con el lápiz”, completar los detalles y abandonarse a la “sorpresa que trae la mancha”. “Es valorar también lo orgánico y espontáneo, eso que no depende de mí, que sucede a pesar de mí, y poder crear desde ahí. Algo que tiene probablemente que ver con la cercanía y emoción que me provoca la naturaleza”.Raquel siempre vuelve a la naturaleza. Es el lugar en el que se reencuentra con el país de su infancia. Ese pueblo de piedra y tejas, inmerso en la vegetación, donde aprendió a dialogar con su entorno, a maravillarse con las formas y los colores. Donde se construyó su manera de expresar, comunicar y plasmar. Donde, como ella misma dice, “se formó la persona que soy”.Esa relación sigue intacta hasta hoy. Es parte de su vida y de su trabajo, de sus preocupaciones como ciudadana. También es el refugio donde encuentra la energía para seguir creando. “Si tuviera que decir qué es lo que más

me emociona hacer, diría que es ir a la montaña, caminar y hacer cumbre. Cuando ilustro, que es algo que también me gusta muchísimo, hay una mezcla de sufrimiento y placer. La naturaleza en cambio es puro placer. En ella, en el viento, las piedras, la tierra y los árboles, encuentro la fuerza y el movimiento que pongo en mis ilustraciones”, comenta.Vivimos en una sociedad que está destruyendo el medioambiente. ¿Cómo te afecta eso?Me preocupa lo que pasa. No deja de sorprenderme esa capacidad autodestructiva del ser humano. Ningún hecho, ni siquiera aquellos científicamente comprobados, lo hace

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cambiar de rumbo. Todo va hacia una mayor explotación de los recursos, a costa de lo que sea y de quien sea. Eso me impacta mucho y me angustia. ¿Tienes esperanza de que las cosas cambien?La esperanza es lo único que no se pierde nunca. Y gracias a eso una está viva. Hay grupos que son más conscientes, que hacen pequeñas acciones que tratan de frenar la destrucción. Pero no creo que haya un cambio de rumbo a nivel global. Es como un tren que se va a estrellar contra un muro y que ya partió. Sí se pueden seguir haciendo cosas a pequeña escala. Todos los intentos son válidos y hay que seguir intentándolo. Como ilustradora, ¿sientes que tienes un rol que jugar?Creo que sí. Quizá no directamente. Pero sí está en nuestras manos sensibilizar. Mostrar la belleza de lo que nos rodea. Espero que ese pueda ser un aporte.

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“Si tuviera que decir qué es lo que más me emociona hacer, diría que es ir a la montaña, caminar y hacer cumbre. Cuando ilustro, que es algo que también me gusta muchísimo, hay una mezcla de sufrimiento y placer. La naturaleza en cambio es puro placer”

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Pablo Neruda, poemas ilustradosAlturas de Macchu PicchuAutor: Pablo NerudaIlustradora: Raquel EcheniqueAmanuta, 2011ISBN: 9789568209742

Reino AnimalProsa del agua y del vientoAutora: Gabriela Mistral Ilustradora: Raquel EcheniquePehuén, 2014ISBN: 9789561606029

LuchínAutor: Víctor JaraIlustradora: Raquel EcheniqueLom, 2014ISBN: 9789560005304

Diez pájaros en mi ventanaAutor: Felipe Munita Ilustradora: Raquel EcheniqueEkaré Sur, 2015

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aEl alerce. Gigante milenario Autora: Alice Hoffman Ilustradora: Raquel Echenique Amanuta, 2011ISBN: 9789568209735

Viaje al Corazón de NerudaAutora: Marilú Ortiz de RozasIlustradora: Raquel EcheniqueAmanuta, 2014ISBN: 9789568209902

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¿Por qué soy lector?

La ballena blancaPor Francisco Ortega*

El primer libro que leí fue Moby Dick. Primero, en una versión reducida que aparecía en las primeras páginas de la revista Mampato; luego, en un corte novela juvenil de aventuras, con tapas duras amarillas y dibujos, que publicó Zig-Zag en los 60. Más adelante, en una edición también resumida que publicó la revista Apuntes, y así hasta que finalmente me atreví con la novela íntegra, tal cual la escribió

Herman Melville, aunque eso fue muchos (bastantes) años después. Y sí, puedo decir que es el libro de mi vida. El primero y el último, el de siempre.

“Si el lector quiere puede llamarme Ismael. Hace algún tiempo, no importa cuánto, encontrándome yo sin un céntimo, decidí recorrer el mundo por los caminos del mar…”, recuerdo que era el inicio de la libre traducción que descubrí en 1978, en las páginas de Mampato. Tenía yo 4 años y había aprendido a leer solo o jugando con mi mamá, no lo tengo muy claro. Sí, entré a kínder y a primero básico sabiendo leer, fortuna que se tiene al crecer en una casa con libros. Mi papá

era muy lector, sobre todo lector de historietas, y cuando yo nací, en julio del 74, comenzó a comprar semanalmente el Mampato. Su idea era que de chico me familiarizara con las historias, con los relatos, con el cómic, cuando entonces nadie lo llamaba así. De cabro chico yo era un fanático de todo lo que fuera grande y animado: dragones, dinosaurios y ballenas… y me encontré con esa historia del capitán Ahab enajenado por una venganza contra un

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enorme cachalote blanco que le cortó la pierna –porque a esa edad yo sabía identificar perfecto los tipos de ballenas y Moby Dick no era una ballena común y corriente–; también me encontré con el viaje del Pequod, la nobleza de Starbuck, la camaradería de Quiqueg y la inocencia de Ismael, narrador, testigo y único superviviente del viaje. En otra Mampato venía una lectura distinta y libre del relato, esta vez en historieta y con Mampato y Ogú embarcados en el barco ballenero del hermano del capitán Ahab, quien recorría el Pacífico tras el loco comandante del Pequod. Y allí, con dibujos de Themo Lobos, otra vez el cachalote blanco.

Recuerdo que también de chico vi la película de John Huston, con guión de Ray Bradbury (nombres que averigüé con los años), una tarde de domingo en el Canal 7, el único que entonces llegaba al sur. Y recuerdo también haber descubierto por una vieja Selecciones de Reader’s Digest que Moby Dick se había basado en la existencia real de un cachalote albino divisado a inicios del siglo XIX en las costas de Chile, cerca de la isla Mocha, por la cual los marinos y navegantes lo habían bautizado como Mocha Dick… Descubrir a los 8 años que tu monstruo marino favorito no solo era real, sino que además era chileno, puede ser peligroso, sobre todo en una época en que no había Internet. Y la

obsesión creció, y el ritual de leer año tras año distintas versiones de Moby Dick se convirtió en fetichismo literario. Hasta el día de hoy colecciono ediciones del libro, en diversos idiomas y formatos. Tuve además la fortuna de escribir mi tributo, Mocha Dick, la novela gráfica que firmamos con Gonzalo Martínez el 2012 y en la cual cumplimos la mutua obsesión de traer de vuelta la ballena blanca a mares chilenos y, personalmente, de regresar la ballena blanca a mí, aunque en verdad jamás se fue. Siempre ha permanecido cerca, nadando entre mis dedos y mi imaginación, con su poderosa frente, su mandíbula torcida y sus arpones clavados en el pellejo. Moby Dick fue el primer libro que leí y compré, también el último… hace dos semanas, en una recopilación francesa en formato novela gráfica de esta aventura tanto moral como física. Y en lo personal, de crecimiento.

* Francisco Ortega (40) nació en Victoria. Es autor de las novelas gráficas 1899 y Mocha Dick, y de las novelas 60 Kilómetros, El Horror de Berkoff, El Verbo Kaifman y Logia; también de cuentos aparecidos en diversas antologías. En agosto publicará Max Urdemales, abogado de monstruos, su primera novela infantil-juvenil, editada por Planeta. Existe en Twitter como @efeortega.

“Y sí, puedo decir que (Moby Dick) es el libro de mi vida. El primero y el último, el de siempre”

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Buena Idea

Leoteca:La lectura como punto de encuentro

Más de siete mil usuarios –incluyendo a niños, padres y docentes– ya han podido conectarse y compartir sus lecturas en la plataforma virtual Leoteca, que promete seguir expandiendo sus redes tras su primer año de funcionamiento.

Terminado el año escolar, los alumnos de un grupo de 5º básico revisan sus perfiles de Leoteca, viendo cómo ha sido su trayectoria durante los últimos meses: qué han leído en común, qué han descubierto, qué libros quedan pendientes y cuáles se han convertido sin lugar a dudas en los favoritos de la gran mayoría.

Cada uno ha seguido su ritmo y si se pudiese echar una rápida ojeada a tres o cuatro perfiles veríamos que todos tienen el sello propio del lector al que representan. Pero lo que sí comparten estos niños es el hecho de que se han descubierto lectores y, como tales, han ganado una nueva afición común: la lectura.

¿Qué es Leoteca?

Leoteca es una plataforma virtual (www.leoteca.es) pensada para niños pero también para aquellos adultos que quieran acompañarles, principalmente maestros y padres. Se trata de un espacio gratuito donde los lectores pueden conectarse entre sí y compartir lo que leen.

Todo empezó en un aula de 4º básico. Una de las precursoras del proyecto, maestra, notó que el conocimiento e interés en torno a la literatura era muy bajo en su centro educativo. Para remediar esa situación, puso en marcha un intenso programa que buscaba realzar el valor social de la

Por Equipo de Leoteca

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lectura; en pocas palabras, convertir el libro en una afición compartida, en un punto de encuentro.

Así, los alumnos, y también las familias y docentes, comenzaron a compartir lecturas, visitas a la biblioteca y a asistir a encuentros e intercambios. Uno de los logros más importantes del proyecto fue conseguir conectar a estudiantes de dos colegios para que compartiesen sus experiencias con los libros. Este intercambio, que primero se hizo por carta y luego por correo electrónico, dio un verdadero significado social a la lectura. Los estudiantes disfrutaban hablando de sus libros favoritos, buscando recomendaciones personalizadas para otro niño o niña, pero también enviando y recibiendo

en préstamo títulos que llegaban mensualmente al aula. Fue tanto el entusiasmo que el programa superó las barreras del calendario escolar y la comunicación siguió durante vacaciones y días festivos.

La ilusión con la que crecía esta iniciativa era proporcional a la complejidad de coordinación que suponía para los maestros. Llegó entonces el momento de plantearse cómo hacer para mantener el sistema en el tiempo y animar a más escuelas a sumarse. Fue necesario admitir que, viviendo en la era de las nuevas tecnologías, era importante apostar por un espacio de calidad que facilitase a los niños un lugar para hablar de sus lecturas. Y así nació Leoteca.

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El primer año

Hace un par de meses, la plataforma cumplió un año abierta al público, sumando alrededor de 7.000 usuarios entre niños, padres y madres y docentes hispanohablantes, procedentes principalmente de España, Argentina, México y Colombia.

Antes de su lanzamiento, hubo un largo proceso de dos años de construcción en colaboración con colegios, especialistas en LIJ y editoriales. Lo que estuvo claro desde el principio fue que el espacio era para los niños, y luego para los mayores. Su diseño, lenguaje y herramientas responden a este principio.

Leoteca quiere seguir creciendo, cambiando y probando que aún quedan muchas posibilidades que ofrecer para acercar la literatura de calidad a cada lector. Unirse a la red es muy sencillo. Lo primero es registrarse: los adultos pueden ingresar como padres, maestros u otro sector profesional relacionado con la LIJ, y los niños menores de 14 años, por motivos de seguridad, deben esperar a que sus padres o maestros los inscriban.

Una vez ingresado, cada lector cuenta con un espacio propio, llamado “Mi biblioteca”. Ahí, como si se tratara de una estantería, el usuario tiene diferentes baldas: “Mis favoritos”, “Quiero leer” y “Recomendados”, de forma que al mismo tiempo que lee puede compartir la experiencia con amigos, profesores y familiares. También es posible consultar qué ha leído un compañero, hacer sugerencias, comentar libros y realizar nuevas búsquedas.

Leoteca ofrece además herramientas específicas para los docentes. El formato en red simplifica el seguimiento del recorrido lector de los alumnos y ofrece la posibilidad de incentivar los gustos de cada niño. También existen un “Área de trabajo”

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y un espacio reservado para aquellas lecturas que se están haciendo en el colegio.

Por último, el sitio no se olvida de orientar. Siempre bajo el lema de la calidad, cuenta en la portada con una sección fija de libros recomendados por niveles lectores. Esta información se complementa mes a mes con otras dos secciones: “Hablamos de…”, donde se presentan diversas selecciones de libros clasificados por temáticas, y “Te queremos presentar a…”, dedicada a un autor cuya obra merece ser recordada.

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El pasado 23 de abril, en el marco de la celebración del Día Mundial del Libro, lanzamos el Plan Nacional de la Lectura 2015-2020, con un marcado acento en relevar la lectura como un derecho de todos y todas para la formación de una sociedad informada, reflexiva y crítica, creativa y participativa. Desde esa visión, las instituciones que lo coordinamos –Ministerio de Educación (Mineduc), Consejo Nacional de la Cultura y las Artes (CNCA), Ministerio de Desarrollo Social (MDS), Dirección de Bibliotecas, Archivos y Museos (Dibam), Ministerio Secretaría General de la Presidencia (Minsegpres), por medio del Consejo Nacional de la Infancia, Servicio Nacional del Adulto Mayor (Senama) e Instituto Nacional de la Juventud (INJUV)– nos comprometimos en la implementación de un Plan amplio e inclusivo, cuyos énfasis son la articulación interinstitucional de entidades públicas y privadas, y la participación amplia de actores y sectores diversos vinculados a la lectura y al libro, acciones que derivan en el establecimiento de programas conjuntos que buscan mayor cobertura territorial y más beneficiarios.

Este 2015 estamos ejecutando alrededor de 40 acciones y programas, que nos permiten abordar destinatarios desde el embarazo, pasando por la primera infancia y llegando hasta los adultos mayores. Así, el Ministerio de Desarrollo Social a través de Chile Crece Contigo suma a su paquete de cuidados básicos y estimulación, dos libros (Mi primer libro y Te cuento mi cuento) destinados a las familias que son atendidas en el parto en un establecimiento perteneciente a la Red Asistencial de los Servicios de Salud del país. Desde el Ministerio de Educación dos hitos importantes marcaron julio: entrega de 5.000 Bibliotecas de Aula, desde kínder a segundo básico, en todo el país, y la campaña Descubre qué te gusta leer, cuyo objetivo es incentivar a niños, niñas y jóvenes a que descubran qué géneros literarios o informativos prefieren y en qué soporte

Plan Nacional de la Lectura 2015-2020

Hacer leer, como se come, todos los días, hasta que la lectura sea, como el mirar, un ejercicio natural, pero gozoso siempre. El hábito no se adquiere si él no promete y cumple placer.

Gabriela Mistral, Pasión de leer, 1935

Por Equipo Plan Nacional de la Lectura

Plan Nacional de la Lectura

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prefieren leerlos. Asimismo, este año el Mineduc renovará 10.700 colecciones de Bibliotecas Escolares CRA, ampliando las oportunidades de los estudiantes de acceder a nuevos y variados títulos.

Por su parte, el Consejo Nacional de la Cultura ha apoyado la itinerancia de escritores nacionales y extranjeros por medio del programa Diálogos en movimiento. Este año se realizarán, en las 15 regiones del país, 50 encuentros entre estudiantes de Educación Media y autores premiados en regiones y por el programa Premios Literarios del Consejo.

En una importante alianza, Dibam y Mineduc están desarrollando alrededor de 170 pasantías de encargados y coordinadores de bibliotecas escolares CRA a bibliotecas públicas. A su vez, de Dibam destacan la red de Bibliomóviles, con avances en acceso tecnológico a la lectura, y el nuevo Plan de Fomento Lector en recintos penitenciarios. Por último, Senama está realizando talleres autobiográficos, capacitaciones en algunas regiones a sus asesores seniors para convertirse en mediadores de lectura, y en junio lanzó el concurso literario para adultos mayores: Confieso que he vivido.

Para el 2016, se proyecta el programa Aquí se lee, que requiere de la participación de agentes e instituciones vinculadas al fomento lector y cuyo principal objetivo es catastrar espacios, programas y mediadores de lectura, para visibilizarlos mediante mapas y señaléticas que tracen la ruta de la lectura en Chile.

La principal meta del Plan de la Lectura hacia el 2020 es la implementación de 15 planes regionales de la lectura, que puedan representar cada uno los sellos e identidades de cada territorio.

Gobierno de Chile

Plan Nacionalde la Lectura

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Recordando a

Ilustración de July Macuada • http://www.julymacuada.com

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Este 2015 se cumplen 70 años desde que apareció la primera edición del Silabario HispanoAmericano, con el que muchas generaciones de niños y niñas de todo el continente aprendieron a leer.

Por Manuel Peña MuñozEscritor y especialista en Literatura Infantil y Juvenil www.elcaballerodelosalerces.cl

El pedagogo chileno Adrián Dufflocq Galdames (1905-1984) creó el Silabario HispanoAmericano en 1945, publicado en Santiago de Chile por la editorial Lord Cochrane, y desde entonces suma casi un centenar

de ediciones. Su presencia inconfundible trae nostalgia de esa niñez con sabor a otoño, a camisa recién planchada y a lápices de colores para pintar una casa con un sol entre montañas.

Las recordadas ilustraciones son obra de Coré, Mario Silva Ossa, el ilustrador de la revista El Peneca. Aquellas imágenes son únicas y nadie que se haya iniciado en las primeras letras con este libro podrá olvidar su portada, en la que aparecían dos niños sentados sobre grandes cubos con vocales, leyendo un Silabario en cuya tapa estaban ellos mismos leyendo el Silabario...

Como gran dibujante que era, Coré dotó a las figuras de esa aureola poética que lo hacía único. Y en la mente de millones de lectores quedaron para siempre grabadas las imágenes del niño manejando una locomotora, de aquella isla “rodeada de agua por todas partes”, de la cama que tenía un

EL SILABARIO DE LA NOSTALGIA

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corazón calado, del reloj cucú, del loro, de la muñeca, de la niña a la que le faltaba un diente o de aquel sol que nos guiñaba un ojo. A través de este silabario, Coré formó la sensibilidad estética de millones de niños en toda América. Fue él quien dibujó al niño que se pierde por seguir al organillero, al duende que lleva un libro sobre una carretilla o aquella jaula en la que estaban encerrados varios pájaros blancos y negros. En la primera página silabeábamos: “pi-pa”, “pa-pá”, “pe-pe”. Y más adelante, ya podíamos leer: “a-mo a mi ma-má”, “la cu-na de la ne-na” o “Filomena dibujó una foca fea”.Al final aparecía el cuento de las cabritas que engañaron al lobo porque sabían leer el letrero que decía: “El que pase por el puente se cae al agua porque está quebrado”. También estaba el relato del gigante que para demostrarle al enano que no estaba enojado, se arrancó un bolsillo y se lo regaló para que se hiciera un par de abrigos.Dufflocq quería que el estudio de las primeras letras se transformara en algo bello y ameno. Por eso, les dedica su silabario “a los niños de habla española, con mi fervoroso deseo de hacerles llano y fácil el camino en este primer paso del conocimiento de nuestra hermosa lengua”. La escritora uruguaya Juana de Ibarbourou escribió en las primeras páginas: “Aprender a leer en los antiguos textos pesados, y aprender a leer en

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el Silabario del gran pedagogo Adrián Dufflocq, lujo de los ojos, gracia para el entendimiento del niño. ¡Ah!, ¡cuánto tienen que agradecerle madres y maestras a ese hermoso talento creador, a ese puro corazón intuitivo que ha hecho para los niños de las Américas este libro perfecto!”.El autor promovió la hermandad latinoamericana poniendo en la contratapa las banderas de los países del continente junto con la española, para que los niños se sintieran integrados a una cultura hispánica común. El texto fue usado en campañas de alfabetización llevadas a cabo en zonas rurales del país y difundido en gran parte de Latinoamérica. Por esta labor idiomática y educacional, recibió la prestigiosa Orden del Rey Alfonso X el Sabio en España.Pese a los modernos sistemas de enseñanza actual, el Silabario HispanoAmericano tiene algo especial que nos hace soñar con pupitres, tinteros con una pluma de palo y una profesora de pelo blanco, haciéndonos leer: “Zulema sacó mucha maleza de la viña” o “René dibujó la cabeza de una lechuza”. Y es que después de setenta años sigue estando en los laberintos más entrañables de la memoria. Tal vez sea porque fue la puerta inicial a la lectura, porque nos llevó de la mano al mundo de los libros, al universo de la palabra escrita, o más precisamente porque estuvo allí, en nuestra infancia, con las páginas abiertas, en el seco banco escolar o en la mesa familiar cubierta por un mantel de hilo donde estaban el costurero y las tareas.

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“A través de este silabario, Coré formó la sensibilidad estética de millones de niños en toda América”

Portada del Silabario HispanoAmericano (1945). “Método fónico sensorial objetivo sintético deductivo”, ilustrado por Coré, Mario Silva Ossa.

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Por Florencia García

Mis favoritos

El mejor regalo literario para un niño:

Juegos, adivinanzas, trabalenguas, chistes, poesías. Palabras, palabras y más palabras. Cualquier instancia que permita ampliar el léxico de cada niño al nivel de la imaginación, del poder creador que da algo tan cotidiano como la palabra. Literatura no es solo lo escrito por los adultos.

Directora Biblioteca Pública Digitalwww.bpdigital.cl

Un libro que hace reír a grandes y chicos:

Cualquier libro de Babette Cole. Especialmente Miamor, hilarante, frenético y de un amor infinito. Y el libro Pipí caca, por el simple placer de mirar a un niño reírse mientras se lo lees.

No se puede evitar llorar con el libro:

El lobo rojo de Friedrich Karl Waechter. Un libro precioso sobre el amor, que cuenta la vida de un perro entre lobos y entre humanos. Un relato de trazo muy suave, a modo de bocetos melancólicos, pero a la vez muy fuertes. Y otro libro que siempre me emociona, pero de ternura, es Yo de Philip Waechter, que cuenta en primera persona la historia de un oso perfecto… en casi todo.

Para cautivar a un adolescente no lector:

Hay que regalarle una tablet con una buena aplicación que permita leer novelas gráficas y cómics. Incorporarle una colección básica que incluya desde manga japonés hasta Corto Maltés, pasando por Condorito, Astérix, grandes héroes americanos y cómic europeo.

Un libro que no falla a la hora del cuentacuentos:

Un clásico, Vamos a cazar un oso de Michael Rosen (texto) y Helen Oxenbury (ilustración). Con sus repeticiones de palabras y onomatopeyas, es perfecto para que un grupo de niños participe activamente de su lectura.

Debería hacerse una película del libro:

El intocable de John Banville, con los mejores componentes para una película de espías, incluyendo secretos, mentiras, guerra fría, Cambridge y, por supuesto, a la reina de Inglaterra.

Me gustaría tomar un café con el escritor(a):

Me habría gustado, porque lamentablemente está muerta, tomarme un café con Marguerite Yourcenar, la primera mujer en integrar la Real Academia Francesa. Novelista, poeta, dramaturga y traductora. Apasionada a mil.

Mi libro álbum favorito:

El soldadito de plomo de Jörg Müller. Un álbum sin palabras que reinterpreta la clásica historia de Andersen. Incorpora esos elementos perturbadores de la globalización que muchas veces no queremos mirar, como la explotación del hombre por el hombre o la inequidad. También me gusta mucho Perro azul de Nadja, porque como buen libro álbum puede retomarse a cualquier edad y va

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MiamorAutora: Babette ColeDestino, 2001ISBN: 9788423332830

Pipí cacaAutora: Stephanie BlakeCorimbo, 2006ISBN: 9788484702160

El lobo rojoAutor: Friedrich Karl Waechter

Lóguez, 2011ISBN: 9788496646711

YoAutor: Philip Waechter

Lóguez, 2012ISBN: 9788489804876

tomando un significado cada vez más complejo e íntimo.

Mi novela juvenil favorita:

Demian de Hermann Hesse. Recuerdo haberla leído a los 14 años, esa edad en que tratamos de ser lo que no somos, nos buscamos y desencontramos en cada momento.

Mi poeta preferido:

Arthur Rimbaud. Curiosamente, mientras más años cumplo, más cercano siento a este joven poeta, que escribió solo hasta los 20 años.

El ilustrador que más me gusta:

Me gusta mucho Roberto Innocenti, sobre todo en las ilustraciones de La casa, un libro álbum sin texto, y en Las aventuras de Pinocho, muy expresivo, lleno de detalles, como cuadro de Brueghel. Pero Tomi Ungerer sigue siendo mi favorito: Allumette, Los tres

bandidos y Críctor son únicos, cada uno con su propio estilo.

La biblioteca donde encuentro todo:

Google. Suelo pensar que todo está allí; la consulto todos los días, por urgencia, necesidades y ocios.

El libro que hoy tengo sobre mi velador:

Sumisión de Michel Houellebecq. Narra la historia de un profesor de Literatura en una Francia islamizada en el año 2022. El lanzamiento de esta novela ocurrió el mismo día que el ataque a la revista Charlie Hebdo. Y debió cancelarse toda promoción. Houellebecq ha sido catalogado por muchos de antimusulmán y pronacionalista. Pero hasta el momento, mi lectura solo ha visto un tema recurrente en el autor: una descarnada crítica al esnobismo burgués parisino.

Mis

fav

orit

os

Vamos a cazar un osoAutor: Michael RosenIlustradora: Helen OxenburyEkaré, 1993ISBN: 9789802571079

El intocableAutor: John BanvilleAnagrama, 2009ISBN: 9788433908872

88 Había una Vez

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El soldadito de plomoAutor: Jörg Müller Lóguez, 2005ISBN: 9788489804920

Perro azul Autora: Nadja Corimbo, 2007ISBN: 9788484702566

La casaAutor: J. Patrick Lewis Ilustrador: Roberto Innocenti Kalandraka, 2010ISBN: 9788492608232

CríctorAutor: Tomi Ungerer Kalandraka, 2011ISBN: 9789898205704

entendemos

ENTRE¡Recomendaciones y reseñas de

jóvenes lectores

NOSOTROSNOS

¡Coordinación:

Pablo Álvarez

Comité Editorial Revista HUV

90 Había una Vez

Historia fuerte, conmovedora, realista y triste con pequeñas estelas de felicidad que dejan huellas en la amistad de Amir y Hassan, dos niños de Afganistán pertenecientes a clases sociales diferentes, cuyas vidas se entrelazan en todos los tiempos a través de esta frase: “Por ti lo haría mil veces”.

Me gustó mucho ya que está escrito en un lenguaje sencillo con palabras propias de esa cultura, lo cual es enriquecedor. Lo puedes encontrar en dos versiones: a modo de historieta y como texto. Como historieta tiene la ventaja de que es un formato rápido de leer, pero hay imágenes fuertes que a mí me impresionaron. Como texto, detalla más la situación y deja para la imaginación de cada uno.

Es un libro envolvente, juega con las emociones del lector, lo que te hace sentir parte de la historia, como si fueras otro personaje. Leerlo es como subir una montaña rusa, porque en un momento estás en lo más terrible y en un segundo aparece lo más conmovedor y sutil de la historia, lo que te motiva a seguir adelante. Así que ¡te invito a emprender un viaje como los cometas y disfrutar de este libro! No te arrepentirás, estoy segura de que te dejará tantas estelas de recuerdos como a mí.

Cometas en el cielo de Khaled Hosseini (Salamandra, 2004)

Lía Arancibia M., 13 años

91 Había una Vez

Valentina Álvarez F., 16 años

Un hombre solo. No se menciona su nombre ni su edad. No se sabe nada de él, ni siquiera dónde trabaja. Lo que sí se sabe es que es un hombre común y corriente, que disfruta de estar solo, de comer, de ver series, de dormir. Lo normal, lo que haría cualquier mortal. Todo esto puede sonar un poco fome. ¡Pero no es así! Es todo lo contrario; al leer Diario de un solo vas a reír, disfrutar y hasta identificarte con muchas de las viñetas. Porque es la vida cotidiana, cosas que pueden parecer estúpidas pero a la vez ciertas como armar la cama, trabajar y odiar a todos, o tener sueño todo el día. Todo esto expresado en dibujos y textos de un hombre solitario que te hará reír, empatizar y disfrutar.

En cuanto a lo estético, todo es azul y blanco, hasta el mismo personaje principal. Extraño, ¿no? A mí eso es lo que me llamó la atención, todo en esos dos colores y que los dibujos sean tan simples pero a la vez lindos y graciosos, algo poco común y muy atractivo.

Personalmente el libro me encanta, lo he leído más de 10 veces y me sigo riendo y disfrutando tanto como la primera vez que lo leí. Me gusta que nos podamos identificar con muchas cosas que aparecen y que sea cercano a los lectores. Lo recomiendo a ojos cerrados. 

Diario de un solo de Catalina Bu (Catalonia, 2014)

92 Había una Vez

Matilde Hirth, 13 años

La historia parte con el vuelo de las hermanas Azancot de Santiago a Puerto Frío, un pueblito ubicado al sur de Chile. Magdalena, Matilde, Manuela y Marina, las 4 M. Se dirigen a la casa de su abuela Meche, a la que nunca han visto en su vida, pero tienen que ir a vivir con ella ya que sus padres murieron recientemente. Lo que ellas no saben es que apenas pisen Puerto Frío se verán envueltas en la mayor aventura de su vida, con personajes fantásticos, un romance imposible, traiciones, mentiras y una larga historia familiar que te dejará sin palabras.

Me encantó este libro. Siempre me ha gustado la fantasía y la magia; en esta historia los personajes la usan mucho al dominar los poderes de la naturaleza. Además, al estar ambientada en un pueblo (inventado) de Chile, una puede identificar lugares y costumbres típicas, lo que hace más fácil y entretenido el proceso de imaginar las situaciones descritas. También las partes amorosas son de mucha ternura, como las juntas secretas de Marina con Damián, y los problemas que puede causar el amor entre elementales y humanos.

Lo mejor de todo fue encontrar un personaje con mi nombre, ya que me podía creer parte de la historia. Lástima que no me gustó su forma de ser o lo que es realmente. Este libro lo recomiendo 100% si es que eres amante de la magia y más si es que te sentiste identificado con algún personaje.

Si ya leíste esta historia te aseguro que te encantará la secuela, porque Zahorí es una trilogía, y el segundo tomo es Zahorí II. Revelaciones, donde continúan las aventuras y desafíos de las hermanas Azancot.

Zahorí I. El legado de Camila Valenzuela (Ediciones SM, 2013)

93 Había una Vez

Esta es una saga de cinco tomos. Toda la trama gira en torno a Percy, un niño que un día descubre que es un semidiós, hijo del dios del mar, Poseidón, y que debe ir al Campamento Mestizo, el único lugar en el que los semidioses como él están a salvo de los males, los monstruos y sobre todo de Cronos, un malvado titán. Cuando su vida cambia para siempre, Percy debe embarcarse en grandes aventuras junto con Annabeth, la semidiosa hija de Atenea, y de Grover, el joven sátiro.

La trama de estos libros hará volar tu imaginación y tu forma de ver la fantasía. Todo ocurre en Nueva York y es increíble ver cómo la mitología y la forma de escribir de un autor se fusionan con una de las ciudades más reconocidas del mundo.

Esta serie, novedosa y muy recomendable, puede ser leída por jóvenes que disfrutan de la mitología griega, ya que te enseña mucho acerca de ella, pero de una forma muy entretenida, que a mí al menos no me dejó despegar los ojos de todos los libros hasta terminarlos.

Percy Jackson y los dioses del Olimpo de Rick Riordan (Salamandra, 2014)

Sofía Peró, 14 años

94 Había una Vez

Josefina Martínez, 15 años

Este libro relata la vida de Belly, una adolescente de 16 años enamorada completamente del verano y de su lugar favorito para pasarlo: Cousins Beach. Desde que tiene memoria, ha pasado el verano en la casa de Beck, la mejor amiga de su mamá, junto a sus hijos Jeremiah y Conrad, y su hermano Steven. Belly durante casi toda su vida ha estado loca por Conrad pero él siempre la consideró como una más de los tres amigos. Este año será diferente: ella decidió verse más bonita y ser femenina, y se aseguró de que él se diera cuenta de eso, aunque no es el único que comenzará a verla de otra manera.

Me gustó mucho el libro. Lo encontré interesante y bien escrito. En ningún momento se pierde la curiosidad y es muy rápido de leer. Me llamó profundamente la atención la manera en que Belly ve el mundo, cómo no le importa hacer y pensar lo que quiere.

Un libro perfecto para relajarse un rato y entretenerse con una historia increíble que te va sorprendiendo en cada momento.

El verano en que me enamoré de Jenny Han (Destino, 2014)

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Fragmento de

Hijo de ladrónManuel Rojas

dosis de lectura

Hijo de ladrónAutor: Manuel Rojas Zig-Zag, 2013ISBN: 9789561225732

Introducción de Pablo ÁlvarezCoordinador Sección JIL

Comité Editorial Revista HUV

C hile acaba de ganar la Copa América. Un título inédito en una historia marcada por el fracaso futbolístico a nivel de naciones. El primer penal lo pateó Matías Fernández. Lo puso en el ángulo, fue el penal perfecto: nunca un arquero, por

más alto y ágil que fuere, podría atajar ese remate. Matías Fernández nació en Buenos Aires en 1986. Ahora intercambiemos el 9 con el 8: 1896, año en el que nació Manuel Rojas, uno de los más importantes escritores chilenos. También nació en Buenos Aires.

La historia de quien migra puede ser compleja; un viaje puede transformarse en una aventura o en el más trágico de los escenarios. No se es dueño de nada, no se tiene un lugar en el mundo. O quizás sí, quizás ese lugar en el mundo son los tránsitos, las trayectorias, los espacios en constante transformación, como los migrantes que deben reinventarse, adecuarse y adaptarse.

Aniceto Hevia, héroe de este relato, tiene una vida complicada desde el inicio: hijo de un ladrón profesional, respetado por todo el mundo del hampa, desde temprano debe hacerse cargo de sí mismo. La vida es dura cuando se viaja tanto. Aniceto nació en Buenos Aires, pero tempranamente, por cuestiones laborales del padre, debe viajar a diversos lugares. Este incesante andar parece haber sido heredado también de él, El Gallego, como es mejor conocido en el rubro. Así, la vida de Aniceto es un permanente vagabundeo, donde la precariedad se transforma en uno de los ejes centrales de su manifestación en la realidad.

La novela Hijo de ladrón (1951) constituye todo un hito en la literatura chilena. Su estructura es compleja, como su personaje, y no sigue una secuencia narrativa tradicional. Los saltos temporales se suceden como la memoria misma, y el relato de Aniceto se transforma en una larga declaración o testimonio de la vida callejera. Llegó a Chile arriba de un tren lleno de animales, oliendo a excrementos, de manera salvaje. El tren y los barcos, símbolos del progreso y las comunicaciones trasnacionales, son elementos fundamentales en la novela: Aniceto cruza la frontera en un tren y proyecta sus mayores anhelos sobre un barco. Hay una fuerza mecánica que desplaza al personaje, como si el movimiento perpetuo y la falta de raíces fueran algo completamente natural. Si los no lugares, o espacios en tránsito, estuvieron de moda durante una buena parte de la década de los 90 en adelante, en Manuel Rojas pareciera que esto está superado, naturalizado, que formara parte de su poética y capacidad narrativa. Aniceto no tendrá papeles, no tendrá un certificado, pero tiene una vocación innata por el vagabundeo, por el nomadismo.

INTRODUCCIÓN

101 Había una Vez

Había una Vez102

Ilustración de Fabián Rivas http://fabianrivas.com/

103 Había una Vez

¿Cómo y por qué llegué hasta allí? Por los mismos

motivos por los que he llegado a tantas partes. Es una historia larga y,

lo que es peor, confusa. La culpa es mía: nunca he podido pensar como pudiera hacerlo un metro, línea tras línea, centímetro tras centímetro, hasta llegar a ciento o a mil; y mi memoria no es mucho mejor: salta de un hecho a otro y toma a veces los que aparecen primero, volviendo sobre sus pasos solo cuando los otros, más perezosos o más densos, empiezan a surgir a su vez desde

el fondo de la vida pasada. Creo que, primero o después,

estuve preso. Nada importante, por supuesto: asalto a una joyería cuya existencia y situación ignoraba e ignoro aún. Tuve, según parece, cómplices, a los que tampoco conocí y cuyos nombres o apodos supe tanto como ellos los míos; la única que supo algo fue la policía, aunque no con mucha seguridad. Muchos días de cárcel y muchas noches durmiendo sobre el suelo de cemento, sin una frazada; como consecuencia, pulmonía; después, tos, una tos que brotaba de alguna parte del pulmón herido. Al ser dado de alta y puesto en libertad, salvado de la muerte y de la justicia, la ropa, arrugada y manchada de pintura, colgaba de mí como

de un clavo. ¿Qué hacer? No era mucho lo que podía hacer; a lo sumo, morir; pero no es fácil morir. No podía pensar en trabajar –me habría caído de la escalera– y menos podía pensar en robar: el pulmón herido me

impedía respirar profundamente. Tampoco era fácil vivir.En ese estado y con esas expectativas, salía a la calle.

-Está en libertad. Firme aquí. ¡Cabo de guardia!Sol y viento, mar y cielo.

[…]-Quisiera sacar libreta de embarque. -¿Nacionalidad? -Argentina. -¿Certificado de nacimiento? -No tengo.

104 Había una Vez

-¿Lo ha perdido? -Nunca tuve uno. -¿Cómo entró a Chile?

-En un vagón lleno de animales.

[…]-Señor: necesito un certificado que acredite que soy argentino. -¡Ajá! ¿Y quién me acredita que lo es? ¿Tiene su certificado de nacimiento? -No, señor. -¿Su libreta de enrolamiento? -No, señor. -¿Entonces?

-Necesito ese certificado. Debo embarcar. No tengo trabajo.

-Escriba y pida sus papeles. ¿No tiene parientes en Argentina? -Sí, pero…

[…]No pude, pues, embarcar: carecía de documentos; a pesar de mis piernas y de mis brazos, a pesar de mis pulmones y de mi estómago,

a pesar de mi soledad y de mi hambre, parecía no existir para nadie. Me senté en la escalera del muelle y miré hacia el mar: el barco viraba en ciento ochenta grados, enfilando después hacia el noroeste. Relucían al sol de la tarde los bronces y las pinturas, los blancos botes, las oscuras chimeneas. Lo recorrí con los ojos de popa a proa: en algún lugar de la cubierta, en un camarote, en la cocina o en el comedor, iba mi amigo. Incliné la cabeza, descorazonado: allí me quedaba, en aquel puerto desconocido,

solo, sin dinero, sin nacionalidad comprobada, sin amigo.

[…]

105 Había una Vez

Hacia el sur termina de pronto la ciudad y aparecen unas barracas o

galpones amurallados. ¿Qué hay allí? Ratas y mercaderías, no se escucha ruido alguno, la falda del cerro acompaña a la calle en sus vueltas y revueltas y alzando la vista se puede ver, en lo alto, unos pinos marítimos que asoman sus oscuras ramas a orillas del barranco. Los tranvías van y vienen, llenos de gente, pero la calle se ve desierta y apenas si aquí y allá

surge algún marinero o algún cargador con su caballo. La soledad me asusta: quiero estar entre hombres y mujeres, y más que entre mujeres entre hombres a quienes acercarme y pedir consejo o ayudar en sus trabajos, si son livianos. Los que pasaban me miraban con curiosidad y hasta con cierta extrañeza y estaba seguro de que, alejados unos pasos

se volvían a mirarme. ¿Qué figura haré caminando bajo el viento y el sol, a orillas del mar? Siento que a mi alrededor y más allá resuena un vigoroso latido, una grave y segura pulsación, al mismo que una alegre y liviana invitación al movimiento y a la aventura; pero tengo miedo y no quiero dejarme llevar ni ser tomado por algo violento: por favor, déjenme tranquilo, mi pulmón no

está bueno. ¿Y cómo será la herida? Si pudiera mirar, ¿acaso la vería? ¿Cómo es: grande, pequeña, seca, húmeda, de gruesos o delgados labios, apretada o suelta? Es curioso: ha visto una fotografía y dibujos de corazones y de estómagos, de hígados y de pulmones y sabe, más o menos, cómo son y hasta podría describirlos y quizá dibujarlos, decir dónde están en el cuerpo del hombre y qué funciones tienen; pero cuando se trata de nuestro corazón, de nuestro estómago, de nuestro hígado o de nuestros pulmones, no sabe uno nada, ni siquiera dónde exactamente están, mucho menos lo sabe cuando se enferman, entonces, el dolor parece convertirlos en algo extraño y hostil, independiente de nosotros y dotados de una propia y soberbia personalidad.

De pronto terminó el muro y apareció el mar.

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Ilustración de Fabián Rivas http://fabianrivas.com/

El año pasado Nintendo pidió disculpas a sus jugadores al no incluir la opción de escoger una pareja del mismo sexo en su Tomodachi Life. Y luego lo corrigió en su juego Fire Emblem del 2015.

Son nuevos tiempos los que corren.

Otro ejemplo: la novela y luego la película de Cazadores de sombras (Destino), donde aparecían un par de cazademonios homosexuales, algo muy distinto a la norma al uso de la fantasy.

Casos aislados, dirán algunos, pero hoy en nuestras librerías son más que casualidades. Ya son tendencia.

POR ESTEBAN CABEZAS

Periodista, escritor y crítico de restaurantes

Años atrás ser homosexual en la vida real no era solo disfuncional, sino también ilegal en algunos países. Hoy, tanto en la literatura como en otros ámbitos, la tolerancia se impone. Lentamente, pero lo hace. Página a página.

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PROTAGONISTAS GAY EN LA LIJ:DE TABÚ A TEMA

De entre los más exitosos, el libro cofirmado entre el superventas John Green y David Levithan, del 2010, pero que recién llega al castellano gracias al éxito del primero de ambos autores. ¿Cuál es la trama de Will Grayson, Will Grayson (Nube de Tinta)? Uno de los Will es un colegial muy amigo de un megagay (grandote, impulsivo, drama queen, gracioso y que quiere montar un musical sobre su salida del clóset) y el otro Will, en el extremo opuesto, es un personaje retraído que se enamora pausadamente –al ritmo del descubrimiento de su naturaleza– de un chico virtual. En un momento de la vida cruzan sus caminos, con el resultado de un aprendizaje diverso y distinto para ambos tocayos. El tono del libro, en general, es algo festivo y desenfadado –por la pluma de Green–, y algo más meditabundo en las partes de Levithan, quien escribe hasta con faltas de ortografía, como lo haría su personaje.

Otro estilo es el de Aristóteles y Dante descubren los secretos del universo (Planeta). Del escritor Benjamin Alire Sáenz, describe la historia de dos chicos que cargan con esos nombres tan cultosos y que son un par de sujetos muy hacia dentro, bien sensibles, y con padres que son verdaderos ejemplos de paternidad (más como socios que meros testigos). Página a página ambos adolescentes se dan cuenta de que son amigos de verdad, sólidos e íntimos, traspasando de a poco la línea del afecto hacia el cariño. ¿La verdad? Es un libro bello, literatoso, entrañable.

Y hay otra novela más que viene a sumarse a lo que se podría catalogar de tendencia: Te daría el mundo de Jandy Nelson (Alfaguara). Es la historia de dos

hermanos gemelos, Noah y Jude, que cargan con las tensiones de una vida par-dispar como la que poseen aquellos que ven la luz con minutos de diferencia. Este tema, el de la dualidad y las opciones, es uno de los que recorre el libro. También hay una cuota de realismo mágico. Y no deja de ser central el descubrimiento que hace Noah de su sexualidad.

Autores y vida no tan privada

Hay autores de LIJ que trasladan algo de lo sufrido en su temprana vida por ser gays, como ocurre con John Boyne, el célebre autor irlandés de El niño con el pijama de rayas (Salamandra). Como se puede leer en su libro para adultos El pacifista (Salamandra), donde al protagonista le duele asumir y luego exponer sus sentimientos en un escenario de plena guerra. O como acontece en la delirante e infantil El increíble caso de Barnaby Brocket (Nube de Tinta), donde un niño que flota –algo que odian sus estructurados padres– es rescatado de llegar hasta la estratósfera por un par de ancianas que van volando en globo. Ellas son el primero de muchos encuentros de Barnaby con sujetos que han sido rechazados por sus familias. Y en este caso es por el amor que ambas veteranas se han profesado durante décadas.

David Lozano, escritor español de La puerta oscura (SM) –donde incluyó a dos secundarios gays–, ha escrito un interesante texto en su blog sobre los personajes gays en la LIJ. Según este autor, hoy por hoy los personajes homosexuales están lejos de tener el protagonismo (por suerte este texto es

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del 2011) y la inclusión no debe ser por una política de corrección al uso, sino por los conflictos propios de la edad juvenil donde este tema tiene una obvia cabida.

Ese es un punto, el tema. Pero también está el de quién toca el tema.

Por eso, tema aparte es la opción de la abierta homosexualidad que han asumido algunos autores, algo que ya les dará lana a los analistas de su obra, o que aportará una cuota a la construcción de este nuevo mundo más tolerante y, por lo mismo, menos contaminado e infantil. Así puede ocurrir con la libertad de la opción del simpático José Ignacio Valenzuela, alias El Chascas, exitoso guionista de teleseries

y autor de la Trilogía del Malamor (Alfaguara). Así puede ocurrir al saber de la compleja y reprimida vida del maestro Hans Christian Andersen, también de las dificultades y rechazos que vivió María Helena Walsh, o del desenfado de Maurice Sendak, que salió del clóset el año siguiente de la muerte de sus padres: “Soy gay y no creo que a nadie le incumba. Solo quería ser heterosexual para que mis padres fueran felices. Y ellos nunca lo supieron”.

Y, como era él, vaya otra frase al respecto para terminar, más al estilo Sendak: “Firmar ejemplares es horrible, estúpido, no significa nada. Y a mi ni siquiera me sirve para seducir a las madres bonitas de los niños lectores, porque soy gay”.

Will Grayson, Will GraysonAutores: John Green yDavid LevithanNube de Tinta, 2015ISBN: 9788415594482

Aristóteles y Dante descubren los secretos del universoAutor: Benjamin Alire SáenzPlaneta, 2015ISBN: 9789563600018

Te daría el mundoAutora: Jandy NelsonAlfaguara, 2015ISBN: 9788420418605

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NovedadesEditoriales

AF-097A BUEN PASOALFAGUARAAMANUTA

ANAYACATALONIADE LA FLOR

DESTINOEKARÉ

FONDO DE CULTURA ECONÓMICALETRA CAPITAL

LOMMONTENA

OCÉANO TRAVESÍAPANAMERICANA

PEHUÉNPLANETA

QEBSM

ZIG ZAG

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AF-097OMM MOO YOGA PARA NIÑOS 2015ISBN: 9789569658006Distribuido en Chile por HUEDERS

Este libro enseña a los niños a relajarse, fortalecer el equilibrio y tener una autoconciencia positiva de manera didáctica y entretenida a través de 47 posturas de yoga, fomentando la activación de chakras, la empatía con los compañeros, la desintoxicación y mucho más. Incluye un DVD con 26 capítulos de esta serie infantil donde el maestro Swamichico guía a los niños y a un grupo de vacas para que practiquen las posturas esenciales del yoga.

A BUEN PASOEL LIBRO DE LA SUERTEAutor: Sergio LairlaIlustradora: Ana G. Lartitegui2015ISBN: 9788494157998

En este libro se cuenta, por un lado, la aventura del señor Buenaventura y, si le damos la vuelta, la del señor Malapata. Los dos viven en el mismo edificio, pero no se conocen. Uno es ordenado y se toma la vida tal como le viene; el otro, un tanto desastroso y siempre enfurruñado. Por cosas del azar, los dos escogerán el mismo destino para sus vacaciones. Ambos viajarán, cruzarán las mismas calles, encontrarán los mismos personajes y regresarán sin haberse conocido. Un libro cuyas ilustraciones llevan al lector de una historia a la otra, y a reflexionar sobre los caprichos del azar y la retorcida métrica que rige nuestras vidas.

Nov

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A BUEN PASOTIENES UN VESTIDO BLANCOAutora: María José FerradaIlustradora: Arianne Faber2015ISBN: 9788494285479

Un libro que acompaña al lector mientras camina por el jardín, atravesando las estaciones. La joven protagonista de este texto poético lleva un vestido al que le gusta jugar con las cosas y las criaturas del mundo: todo lo que aparece en el vestido cobra vida y todo lo que la joven protagonista toca acaba apareciendo en el tejido de su vestido. Una invitación a seguir los pasos de la protagonista y a descubrir todas las cosas buenas que esconde la vida.

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ALFAGUARAMALULITO MALDADOSOAutor: Esteban CabezasIlustradora: Alejandra Acosta2015ISBN: 9789561525481

Dicen que las apariencias engañan, y que a veces los nombres también. Porque aunque Malulito Maldadoso sea un niño como cualquier otro, cuando alguien oye su nombre de inmediato piensa que es responsable de las maldades más maldadosas: jarrones rotos, colaciones apachurradas y pelotas desinfladas. ¡Quién más va a ser que Malulito Maldadoso!

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AMANUTACOLORESAutora: Estrella OrtizIlustradora: Paloma Valdivia2015ISBN: 9789569330131 Un divertido libro para los más pequeños, donde conocerán diferentes animales, cada uno de un distinto color. Este nuevo título de la Colección BB –que busca entretener, estimular e introducir a los niños en diversos temas– invita al lector a cantar, leer, mirar y jugar con ilustraciones que encantarán a grandes y chicos.

ALFAGUARANO ES LO QUE PARECEAutora: Paula Vásquez2015ISBN: 9789562479769

En las páginas de este libro, nada es lo que parece: trompas de elefantes, cuernos de venados y bolsas de canguros se transforman en objetos inesperados y curiosos. Cierra los ojos, vuélvelos a abrir y verás que radios, despertadores y abanicos cobran vida cuando uno los mira desde otra perspectiva.

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CATALONIAEN EL BOSQUE. CUENTOS DE HADASAutores: Fede Pazos, Pablo Cabrera, Power Paola, Decur, María Elina Méndez, Liniers2015ISBN: 9789563243680

Seis destacados dibujantes dan vida a las historietas de este libro, basadas en los cuentos de los hermanos Grimm: Hansel & Gretel por Federico Pazos, Hans de Hierro por Pablo Cabrera, Blancanieves & Rosarroja por Power Paola, La Señora Holle por Decur, Jorinda & Joringel por María Elina Méndez y El Sapo Príncipe por Liniers.

ANAYACUENTOS MÍNIMOSAutor: Pep BrunoIlustrador: Goyo Rodríguez2015ISBN: 9788467871371

Cuentos que primero fueron tuits, ¿o son tuits que quisieron convertirse en cuentos? En cualquier caso, una recopilación de historias condensadas en unas pocas líneas que harán volar la imaginación del lector mucho más allá de sus páginas y de la red social en la que nacieron. Un nuevo imperdible del destacado escritor y cuentista Pep Bruno.

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DESTINOEL CLUB DE LOS PERDEDORESAutora: Lorena Amkie2015ISBN: 9789562479769

La historia de Alexa y sus hermanos losers es una lucha por encajar en un mundo donde ser diferente se paga con sangre. Narrada con honestidad brutal y con un negro sentido del humor, esta es una novela sobre lo que significa crecer, sobre la crudeza del mundo real, el descubrimiento del amor, pero sobre todo sobre la lucha por la supervivencia en un lugar donde se es demasiado joven para ser adulto y suficientemente adulto como para creer que mañana todo estará bien.

DE LA FLORSEMILLAS 1Autor: Decur 2015ISBN: 9789505158287Distribuido en Chile por CATALONIA

El joven dibujante de Santa Fe que sorprendió cuando irrumpió en el mundo del humor gráfico con Merci!, y que luego deslumbró con su segundo libro, ¡Pipí cucú!, da otra vuelta de tuerca con dibujos humorísticos minuciosos y bellos, sobrevolados por la poesía.

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EKARÉCUENTOS A PATADASAutor: José UrriolaIlustrador: Lucas García2015ISBN: 9788494303838

Un torneo intercolegial se parece mucho a un Mundial de Fútbol. Se le puede preguntar a David, que ha sido escogido como titular en su equipo. Las jugadas son cada vez más difíciles y David aprende, tras cada partido, grandes lecciones de la historia del fútbol: el cabezazo de Zidane, la historia de Balotelli… Un libro con humor a patadas para quienes gustan del fútbol y de las buenas anécdotas.

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DESTINOVIOLET Y FINCHAutora: Jennifer River2015ISBN: 9788408141426

Violet está rota. Finch está roto. ¿Pueden dos mitades rotas reconstruirse? Esta es la historia de una chica que aprende a vivir de un chico que pretende morir; de dos jóvenes que se encuentran y dejan de contar los días para empezar a vivirlos.

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FONDO DE CULTURA ECONÓMICACON LOS OJOS ABIERTOSAutor: Francisco Hinojosa2015ISBN: 9786071625779

A sus 15 años y medio, Sara decide irse de casa; la vida con su padre, madrastra y hermanastras es insoportable. Para sobrevivir lejos de su “hogar” encuentra trabajos informales, entre ellos vender libros afuera de la universidad. Al poco tiempo se hace amiga y novia de un estudiante travieso, inteligente, creativo, rebelde, reservado y misterioso con un padecimiento oculto que para Sara representará un reto más que debe conquistar.

EKARÉVEO VEO. EL ARTE DE SOCORRO SALINASAutores: María Francisca Mayobre y Vicente LecunaIlustraciones: Socorro Salinas2015ISBN: 9789802573578

A través de un sencillo juego, este libro propone la búsqueda de figuras y situaciones particulares entre las obras de la artista venezolana Socorro Salinas. Los lectores de cualquier edad podrán descubrir todo tipo de detalles inesperados e historias alucinantes del universo de esta pintora, que aborda de manera profunda y compleja la diversidad cultural.

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LETRA CAPITALALAMEDA DE IDA Y VUELTAAutor: Vicente CociñaTextos: Vólker Gutiérrez2015ISBN: 9789569271038

Una mirada ciudadana y artística a la Alameda, a mano alzada, es la que pensó y llevó al papel el dibujante Vicente Cociña. Durante un año, el ilustrador se posó en las aceras de la principal avenida de Santiago y fue trazando con minuciosidad las imágenes en que desfilaban personas, edificios, árboles, vehículos. El resultado: dos largos pliegos con un perfil de cada acera de la Alameda, entre plaza Baquedano y la carretera Norte-Sur, que Letra Capital Ediciones transformó en un libro desplegable de seis metros de extensión, al que se agregó información de cuarenta hitos de ese tramo de la arteria capitalina. Los textos, investigados y escritos por Vólker Gutiérrez, se presentan en español e inglés.

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FONDO DE CULTURA ECONÓMICAEN EL ZOOLÓGICOAutora: Suzy Lee2015ISBN: 9786071625410

Una niña va con sus padres al zoológico; todo parece normal, pero pronto se dará cuenta de que algo ha pasado: ¡los animales han desaparecido de sus jaulas! Solo hay una manera de transformar ese zoológico gris y vacío en un mundo lleno de color. Al mismo tiempo, los padres de la niña viven otra experiencia motivada por la angustia de encontrarla.

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LOMTAMIKAAutora: Tamara VidaurrázagaIlustradora: Karina Cocq 2015ISBN: 9789560005588

Tamika es la historia de dos niñas, una africana y una latinoamericana, que todas las noches, cada una en su tierra, escuchan de sus madres el cuento sobre una niña de otro continente, a la que luego reconocerán en sus sueños como a una amiga y hermana.

LETRA CAPITALLA CAÑADILLA DE INDEPENDENCIATextos: Dante FigueroaIlustrador: Marcelo Escobar2015ISBN: 9789569271052

Camino del Inca, Camino de Chile o La Cañadilla fueron nombres que recibió el sendero por el cual diversas expediciones y personas se asomaron desde el norte hasta la cuenca del río Mapocho. La entrada triunfal de las tropas patriotas a Santiago, después de derrotar en febrero de 1817 al ejército realista en Chacabuco, llevó a que la antigua arteria del barrio de la Chimba fuera conocida desde entonces como avenida Independencia. En torno a esta calle se han tejido múltiples historias urbanas, deportivas, sociales y religiosas, que el historiador Dante Figueroa y el ilustrador Marcelo Escobar rescatan para crear el tercer volumen de la Colección Miremos Juntos.

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MONTENAGIRL ONLINE. UNA CHICA EN NUEVA YORKAutora: Zoe Sugg2015ISBN: 9789568474447

Penny tiene un secreto: un blog donde escribe lo que piensa sobre la amistad, los dramas del instituto, los chicos, su familia… y, últimamente, también sobre las crisis de ansiedad que han empezado a arruinarle la vida. Cuando la cosa amenaza con ponerse fea, un inesperado viaje a Nueva York hará que cambie de aires. Allí conoce a Noah, un guitarrista muy guapo del que queda prendada. Y, por supuesto, lo cuenta todo en su blog. Lo que no sabe Penny es que Noah también tiene un secreto…

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LOMTOTÓ VA AL NORTEAutora: Silvia AguileraIlustrador: Olivier Balez2015ISBN: 9789560005601

Totó va con su mamá a casa de su abuelo, que está en Arica, en el norte de Chile. Durante el viaje, la ventana del bus les permite apreciar los colores de las casas de Valparaíso, los cerros del Elqui, la sequedad de la pampa y –para alegría de Totó– el milagro del agua. ¡Es un viaje inolvidable!

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OCÉANO TRAVESÍAEL MENINOAutora: Isol20159786077355113

Un día como cualquier otro, en un barrio común y corriente, mientras la gente está ocupada en sus cosas, ocurre algo que rompe con la sucesión ordenada de los días: un bebé cae literalmente del cielo. “¡Agárrenlo para que no se caiga!”, grita la mamá. “¡Lo tengo!”, se agita el papá. Este hermoso libro narra la llegada del nuevo bebé y cómo este hecho trasforma la vida familiar. Una mirada llena de gracia de los primeros años de un niño.

PANAMERICANAABUELITA MILAGROAutor: Antonio Orlando RodríguezIlustradora: Catalina Acelas2015ISBN: 9789583047145

Abuelita Milagro nos lleva al encuentro de un grupo de singulares personajes y de un universo rural en el que la fantasía y la realidad se entremezclan poéticamente. Su protagonista: una anciana bondadosa, aventurera e invencible en el juego de las adivinanzas. Este libro, uno de los más significativos de la literatura cubana para niños, regresa para cautivar a nuevos lectores con su imaginación, humor y recreación del folclor campesino.

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PEHUÉNLA CIUDADANÍA TAMBIÉN ES MÍA Autora: Paloma Valenzuela Berríos Ilustradora: Ana Sanfelippo 2014 ISBN: 9789561606128

Una forma didáctica de introducir a los niños y niñas en un ámbito abandonado por décadas en la educación chilena: la formación cívica. El texto se apoya en las nuevas nociones de ciudadanía infantil y de sus derechos, y consigue explicar cómo se organiza la vida en una sociedad democrática, los derechos de todas y todos, y los desafíos que para cada uno de nosotros tiene el convivir en una comunidad.

PEHUÉNLOS HIJOS DE LA TIERRA. GUÍA ILUSTRADA DE UN LARGO VIAJE Autor: José Ramón Alonso Ilustrador: Diego Max 2014ISBN: 9789561606111

Relato que cuenta cómo surgió la vida en el planeta: una célula, tan solo una, que se multiplicó, se diversificó y dio lugar a bacterias, gusanos, helechos, dinosaurios, araucarias, champiñones, libélulas y ballenas azules. De los mamíferos surgieron los primates y hubo uno entre ellos, que se irguió y miró hacia el horizonte. Nunca paró de explorar, siempre quiso saber qué había más allá. Liberó sus manos y con ellas hizo armas y herramientas y aprendió a acariciar. Es el hombre en su excursión desde el Big Bang a Internet, la historia del planeta, de la vida, de los seres humanos.

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PLANETAALGO TAN SENCILLO COMO TUITEAR TE QUIEROAutor: Blue Jeans2015ISBN: 9788408141020

En esta nueva novela de Blue Jeans, conoceremos a un grupo de chicos y chicas que afrontan por primera vez la experiencia de vivir y estudiar lejos de la casa familiar. Madrid se convertirá en su ciudad de acogida y residencia. Todos deberán enfrentarse a la soledad, las nuevas relaciones que puedan surgir, las tentaciones poco recomendables… A pesar de todo, y por encima de todo, triunfarán el amor, la amistad y la lealtad al grupo.

QEB¿QUÉ TIENES EN TU BOLSA?Autores: Ruth Symons - Laura Watkins2014ISBN: 9781609927776Distribuido en Chile por TIME BOOKS

Josh no entiende por qué su mamá le dice que no puede meterse en su bolsa, pero ella le explica que es porque tiene una sorpresa muy especial. ¿Podrán los amigos de Josh ayudarlo a averiguar qué tiene en la bolsa con las pistas que le dio su mamá?

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QEBMURCI-RATÓNAutor: Steve Smallman2014ISBN: 9781609927783Distribuido en Chile por TIME BOOKS

El ratón Pip sabe qué quiere ser cuando grande: ¡un murciélago! Pero ser un murciélago no es tan fácil como parece. Si tan solo Pip pudiera volar...

SMMI CIRUELOAutora: Ana María GüiraldesIlustradora: Florencia Olivos2015ISBN: 9789563498608

Una niña trepa todos los días a su árbol preferido para esconderse a leer y vivir experiencias maravillosas. Este no es un simple árbol, es un ciruelo que le da poderes mágicos y, con el paso del tiempo, la ayudará a desarrollar su imaginación.

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SMLA TORTULENTAAutor: Esteban CabezasIlustrador: Pato Mena2015ISBN: 9789563498714

Existen muchos animales y cada uno con su particularidad. Aunque la protagonista de esta historia sufre porque no encuentra su lugar. Ella quiere ayudar a los demás, pero no logra llegar a tiempo. Entonces, ¿qué rol jugará en el reino animal? Una fábula moderna que invita al lector a conocer sus fortalezas y valorar las diferencias.

ZIG-ZAG12 HISTORIAS MINÚSCULAS DE LA TIERRA, EL CIELO Y EL MARAutora: María José FerradaIlustradora: Karina Letelier2015ISBN: 9789561227798

Este libro invita a los pequeños lectores a sumergirse en la fantasía, el humor y el encanto de pequeñas historias que, en apenas unas cuantas líneas, evocan los misterios de distintos mundos y paisajes. Además, las delicadas y sugerentes ilustraciones despiertan la imaginación e invitan a crear nuevas posibilidades.

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Directora EjecutivaMaría José Egaña

Editora Bernardita Cruz

Directora de ArteSandra Gaete

Corrección de pruebas y estilo Pilarín López

Comité Editorial: Pablo Álvarez, Bernardita Cruz, Rebeca Domínguez, María José Egaña, Sandra Gaete, María Paz Garafulic, Carmen Paz Hernández, Manuel Peña, Verónica Uribe

Representantes legales: Rebeca Domínguez, María Paz Garafulic Ilustración de portada gentileza de: Raquel Echenique

Ilustraciones interiores gentileza de: July Macuada, Viviana Palma, Fabián Rivas, Marcela Trujillo, Francisca Yáñez

Webhosting: Mediart

Colaboradores: Claudio Aguilera, Pablo Álvarez, Pep Bruno, Esteban Cabezas, Adolfo Córdova, CRA, Fundación Cuatrogatos, María José Ferrada, Martina Fittipaldi, María Paz Garafulic, Florencia García, Carola Martínez, María Isabel Molina, María Teresa Mujica, Claudia Olavarría, Francisco Ortega, Manuel Peña Muñoz, Plan Nacional de la Lectura, SNBP

ESCRÍBENOS A: [email protected]

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Apoquindo 4760 of. 11A, Las Condes, Santiago, Chile. Fono: (56 2) 2207 5744

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