la imagen pública de la presidencia de gobierno. análisis ...20image...maría josé canel crespo....

La imagen puacuteblica de la Presidencia de Gobierno Anaacutelisis teoacuterico y empiacuterico de las percepciones de los

espantildeoles (1992-2006)

Mariacutea Joseacute Canel CrespoUniversidad Complutense de Madrid

mjcanelccinfucmes

En la comunicacioacuten de organizaciones una de las cuestiones objeto de debate tanto entre acadeacutemicos como entre profesionales es la de cuaacutel es la mejor manera de conocer queacute percepciones tienen los puacuteblicos sobre lo que una organizacioacuten es y hace El presente trabajo analiza la imagen puacuteblica que los espantildeoles tienen de la Presidencia del Gobierno central tomando como objeto de anaacutelisis las evaluaciones que realizan de los distintos aspectos de la institucioacuten la gestioacuten de Gobierno y la popularidad de su Presidente En el marco de las teoriacuteas de la ldquoPresidencia Puacuteblicardquo y del ldquoCiclo electoralrdquo y partiendo de las propuestas de estudio de ldquoatribucioacuten de responsabilidadesrdquo asiacute como de preparacioacuten del juicio o priming este trabajo revisa y propone modelos de anaacutelisis de imaacutegenes puacuteblicas gubernamentales y ofrece una reflexioacuten sobre lo que significa la interaccioacuten entre esta institucioacuten y sus puacuteblicos

Mariacutea Joseacute Canel Crespo Profesora Titular de la Universidad Complutense de Madrid ademaacutes de Visiting Professor de la London School of Economics y de la Universidad de Syracusa (Nueva York) Especialista en comunicacioacuten poliacutetica entre sus publicaciones destacan los libros Opinioacuten Puacuteblica (Eunsa) Comunicacioacuten Poliacutetica (Tecnos) Journalism and Political Scandals (Hampton Press) asiacute como casi un centenar de escritos cientiacuteficos en publicaciones de aacutembito nacional e internacional (European Journal of Communication Parliamentary Affairs Journal of Political Communication y Studies on Local Government) sobre comunicacioacuten poliacutetica marketing electoral efectos de los medios de comunicacioacuten y comunicacioacuten de las instituciones poliacuteticas Miembro del Consejo Editorial del Journal of Political Communication (1996-2002) ademaacutes de en Espantildea ha impartido cursos y conferencias en Reino Unido Hungriacutea Polonia Meacutexico Colombia Argentina y Chile

Palabras claveComunicacioacuten de gobiernos percepciones puacuteblicas evaluacioacuten de instituciones puacuteblicas

La imagen puacuteblica de la Presidencia de Gobierno Mariacutea Joseacute Canel Crespo 1


espantildeoles (1992-2006)1

Mariacutea Joseacute Canel Crespo

Universidad Complutense

mjcanelccinfucmes

En la comunicacioacuten de organizaciones una de las cuestiones objeto de debate tanto entre acadeacutemicos como entre profesionales es la de cuaacutel es la mejor manera de conocer queacute percepciones tienen los puacuteblicos sobre lo que una organizacioacuten es y hace El presente trabajo analiza la imagen puacuteblica que los espantildeoles tienen de la Presidencia del Gobierno central tomando como objeto de anaacutelisis las evaluaciones que realizan de los distintos aspectos de la institucioacuten la gestioacuten de Gobierno y la popularidad de su PresidenteLa investigacioacuten sigue la praacutectica convencional de los estudios de evaluacioacuten de presidencias de Gobierno (por citar soacutelo algunos Brace y Hinckley 1991 y 1992 Edwards III 1973 y 1983 Edwards III y Swenson 1997 Ostrom y Simon 1985 1988 1989 y 1997 Hetherington 1998 Hibbs Douglas y Fassbender Heino 1981 Saacutenchez-Cuenca y Barreiro 2000 Jacobs y Burns 2004 Newman 2002 2003 y 2004 Nicholson y otros 2002 Canes-Wrone 2004 y 2006) que toman los datos de los centros nacionales de investigacioacuten socioloacutegica tales como el American National Election Study de Estados Unidos el IPSO-Mori del Reino Unido o el General Election Study de Beacutelgica Aquiacute se toman datos del Centro de Investigaciones Socioloacutegicas2 El presente trabajo constituye el primero en el que los datos del Centro de Investigaciones Socioloacutegicas sobre la Presidencia de Gobierno se analizan e interpretan desde un punto de vista comunicativo En el marco de las teoriacuteas de la ldquoPresidencia Puacuteblicardquo y del ldquoCiclo electoralrdquo y partiendo de las propuestas de estudio de ldquoatribucioacuten de responsabilidadesrdquo asiacute como de preparacioacuten del juicio o priming este trabajo revisa y propone modelos de anaacutelisis de imaacutegenes puacuteblicas gubernamentales y ofrece una reflexioacuten sobre lo que significa la interaccioacuten entre esta institucioacuten y sus puacuteblicos

1 Quiero agradecer a Mario Garciacutea Gurrionero investigador del Departamento de Comunicacioacuten Audiovisual y Publicidad II la revisioacuten que ha realizado con gran competencia y precisioacuten de los anuarios lo que me ha permitido identificar los sucesos acaecidos en las eacutepocas objeto de este estudio2 Es eacutesta praacutectica convencional por varias razones En primer lugar porque el puacuteblico de la institucioacuten Presidencia de Gobierno es un puacuteblico extenso que necesita de procedimientos muestrales elaborados En segundo lugar porque estos centros nacionales realizan mediciones con regularidad arrojando una gran riqueza de series temporales que ndashcon algunos maticesmdash al guiarse por las mismas pautas permiten la elaboracioacuten de iacutendices crosstemporales Por uacuteltimo tomar los datos de centros de investigacioacuten ajenos al investigador anula toda duda o sospecha sobre el sesgo que pudiera tener la generacioacuten de datos


1 PUNTO DE PARTIDA LA IMAGEN PUacuteBLICA EN FORMA DE EVALUACIOacuteNLa evaluacioacuten de una institucioacuten definida por el momento en teacuterminos algo simplistas es la medicioacuten de los resultados de la comunicacioacuten respecto a los objetivos que se han definido en la planificacioacuten de la misma (Wilcox y otros 2001 203) Al debate sobre lo que es la evaluacioacuten subyace una idea maacutes de fondo que estaacute relacionada con la motivacioacuten y objetivos de la misma En un extremo del debate estaacuten los que consideran que se evaluacutea para lograr una mejor persuasioacuten la evaluacioacuten permite identificar cuaacutel es la percepcioacuten puacuteblica de la organizacioacuten y ofrece pautas sobre lo que hay que hacer para que la organizacioacuten llegue a lo que quiere En otro extremo estaacuten los que consideran que la evaluacioacuten estaacute para recibir el feed-back que se necesita para establecer una relacioacuten de confianza entre la institucioacuten y los puacuteblicos Aquiacute se entiende que la evaluacioacuten sirve para construir y reforzar relacionesSiguiendo esta segunda perspectiva y tomando como objeto de anaacutelisis la relacioacuten entre una organizacioacuten y sus puacuteblicos Grunig y Hon (1999) consideran que lo que una institucioacuten ha de tomar como objeto de evaluacioacuten es lo siguiente Por una parte la confianza que definen como la confidencia deseo y apertura de una parte hacia la otra En segundo lugar el control mutuo que es el grado en el que ambas partes estaacuten de acuerdo en el correcto poder de influencia que tiene una sobre la otra En tercer lugar la satisfaccioacuten que es el grado en que cada parte siente satisfechas sus expectativas positivas En cuarto lugar el compromiso que es el grado en el que cada parte siente que la relacioacuten merece la pena En quinto lugar el intercambio o grado en que una parte ofrece beneficios a la otra porque la otra se los ofrecioacute en el pasado y espera que lo siga haciendo Y por uacuteltimo lo que denominan ldquocomunalidadrdquo que definen como el grado en el que ambas partes ofrecen beneficios a la otra simplemente por la preocupacioacuten por su bienestar auacuten incluso cuando no se recibe nada de ella a cambio Estos autores consideran que los profesionales de la comunicacioacuten antildeaden valor cuando desarrollan relaciones comunales con todos los puacuteblicos afectados por los comportamientos organizacionales La mayor parte de la evaluacioacuten de las relaciones se centran en las percepciones que una parte tiene de la relacioacuten Esta medicioacuten incluye la evaluacioacuten de la prediccioacuten lo que una parte de la relacioacuten supone o espera que piense la otra de esa relacioacuten Las mediciones sirven para evaluar la calidad percibida de la relacioacuten y ello permite decir por queacute las instituciones tienen mala reputacioacutenDesde un planteamiento maacutes conceptual de lo que es la identidad e imagen corporativa de la organizacioacuten Villafantildee (1998 y 1999) considera que la imagen corporativa de una organizacioacuten estaacute en la imagen del puacuteblico resumiendo tres imaacutegenes previas Por eso la evaluacioacuten ndasheste autor utiliza no sin reservas el concepto de auditoriacuteamdash ha de atender a tres proyecciones de la institucioacuten la funcional (los servicios que la institucioacuten ofrece es la imagen financiera y la comercial) la autoimagen (la imagen que la organizacioacuten tiene de siacute misma que se proyecta hacia el exterior en sus modos de comportamiento es la


imagen interna) y la imagen puacuteblica de la organizacioacuten (que es consecuencia de su imagen mediaacutetica y de la imagen proyectada en su entorno) (Villafantildee 1998 y 1999)Pues bien como ya se ha mencionado el presente trabajo toma como objeto de investigacioacuten la evaluacioacuten de la institucioacuten Presidencia de Gobierno en Espantildea atendiendo especiacuteficamente a la imagen puacuteblica a la percepcioacuten que de ella tienen los ciudadanos Como se veraacute a continuacioacuten se han tomado aquellas variables que se pueden trasladar en los teacuterminos identificados por Grunig y Hon la confianza de los ciudadanos en la institucioacuten y el control mutuo satisfaccioacuten y compromiso (en forma de intencioacuten de voto evaluacioacuten de la gestioacuten de Gobierno y evaluacioacuten de la situacioacuten poliacutetica y econoacutemica) A continuacioacuten se exploran conceptualmente estas variables

2 PARA MEDIR LA IMAGEN PUacuteBLICA DE LA PRESIDENCIA DE GOBIERNOSe ha generalizado el teacutermino ldquopopularidadrdquo para referirse a toda medicioacuten de la institucioacuten Presidencia de Gobierno un teacutermino que se ha hecho paraguas como resultado de la divulgacioacuten de los sondeos que miden la valoracioacuten de los poliacuteticos por parte de los ciudadanos Asiacute se dice que un liacuteder es popular si es querido Las variables que interesan en teacuterminos de evaluacioacuten de la Presidencia de Gobierno son tres la confianza el liderazgo y la gestioacuten

21 La confianza en la institucioacuten puacuteblicaPara medir la confianza en la institucioacuten puacuteblica Presidencia de Gobierno se suelen combinar preguntas sobre la confianza en la persona (del estilo de ldquoiquestcuaacutento confiacutea usted en el Presidente del Gobierno Xrdquo) con valoraciones sobre la confianza que inspiran las distintas instituciones (gobierno nacional autonoacutemico local asiacute como otras instituciones como la banca los sindicatos la iglesia o la corona) Asiacute lo hace por ejemplo Suecia Beacutelgica o Espantildea (Bouckaert y Van de Walle 2001) En paiacuteses como los Estados Unidos la evaluacioacuten trata de especificar los modos de (des)confianza al referir la pregunta a la confianza del ciudadano en las competencias de los poliacuteticos a la utilizacioacuten que estos hacen de los recursos puacuteblicos o al tipo de de intereses que creen que les mueven en la gestioacuten puacuteblicaInterpretar los resultados de la evaluacioacuten de la confianza en un Gobierno requiere tener en cuenta algunas advertencias (Bouckaert y Van de Walle 2001) pues ldquoGobiernordquo es ciertamente un concepto algo teacutecnico abstracto lejano sobre el que la gente proyecta imaacutegenes diferentes Asiacute por ejemplo cuando a la gente se le pide que evaluacutee la confianza en el Gobierno tiende a no diferenciar el sector puacuteblico del privado a no distinguir lo que es maacutes puramente poliacutetico de lo que es de la Administracioacuten Puacuteblica y a no diferenciar los distintos niveles de Gobierno Por ejemplo en Espantildea cuando un ciudadano acude a un museo puede faacutecilmente no reparar en si aquello que le ha gustado es de competencia nacional autonoacutemica o local Por uacuteltimo la gente no distingue bien los componentes de la institucioacuten no distingue al liacuteder del equipo que lidera de la institucioacuten en general y de la gestioacuten que alliacute se


lleva a cabo De manera que la confianza en un componente puede tener influencia en la confianza en el resto por ejemplo la confianza en el Presidente (en quien lidera) puede elevar la confianza en el gobierno (los ministros) o la confianza en el gobierno puede incrementar la confianza en la calidad de los servicios

2 2 El liderazgo de la institucioacuten puacuteblicaiquestQueacute es lo que maacutes se valora de un liacuteder Aunque se advierte una cierta dispersioacuten en cuanto a cuaacuteles de todos son los rasgos que predominan al valorar a un liacuteder la mayor parte de los trabajos coinciden en afirmar que el puacuteblico juzga fundamentalmente respecto a dos rasgos la competencia profesional y la personalidad (veacutease por ejemplo Citrin y Green 1986 Funk 1999 Gronke 1999 Greenstein 2000 Newman 2004)Cuando se habla de liderazgo en poliacutetica se tiende a pensar en la persona que estaacute al mando de la institucioacuten Pero el liderazgo no es resultado soacutelo de una persona sino que hay otros elementos ndashde caraacutecter maacutes organizacionalmdash que estaacuten jugando tambieacuten un efecto en la capacidad de liderarEl mapa que algunos autores trazan de la investigacioacuten precedente sobre el liderazgo se recoge en una evolucioacuten que arranca a comienzos del siglo veinte en la que se suceden de manera cronoloacutegica las siguientes teoriacuteas la teoriacutea de los rasgos que sostiene que el liderazgo consiste en unas caracteriacutesticas personales las teoriacuteas conductistas que se centran no tanto en lo que los liacutederes son sino en lo que hacen la teoriacutea situacional que parte de la idea de que el liderazgo estaacute condicionado por la situacioacuten en la cual se da la teoriacutea transaccional que enfatiza la importancia de las relaciones entre los liacutederes y sus seguidores la teoriacutea de la atribucioacuten que considera que el liderazgo es soacutelo la atribucioacuten que los seguidores hacen de los liacutederes y debido a las caracteriacutesticas personales de eacutestos la teoriacutea del liderazgo carismaacutetico que afirma que una persona es liacuteder en la medida que otras creen que lo es la teoriacutea transformacional llamada asiacute por la capacidad que desarrolla el liacuteder para transformar o modificar los comportamientos de los seguidores o de las organizaciones la teoriacutea del servidor en la que el liacuteder basa su liderazgo en su voluntad de servir y por uacuteltimo la teoriacutea del liderazgo adaptativo (desarrollada a finales del siglo XX e inicios del XXI) que considera que el intereacutes del liacuteder seriacutea influir sobre las personas para que eacutestas afronten sus problemas (Cfr esquema resumen de Loacutepez y Leal 2005 pp 28-29)Todas estas teoriacuteas tienen en comuacuten el entender que el liderazgo es un proceso de influencia del liacuteder sobre el comportamiento de otras personas bien de manera individual o en grupo Es decir giran en torno a la consideracioacuten de si el liderazgo es esencialmente algo que procede de las caracteriacutesticas individuales de las personas o es maacutes bien algo dependiente del contexto o situacioacuten en la que se da De manera que frente a los que piensan que el liderazgo es maacutes una consecuencia natural del caraacutecter o rasgos individuales estaacuten los que consideran que el liderazgo condicionado por los muacuteltiples factores contingentes del contexto es un proceso una funcioacuten o un rol social El liderazgo no depende entonces de las caracteriacutesticas personales del liacuteder


sino tambieacuten del comportamiento de otras personas asiacute como de otros elementos contextuales (Blake y Haroldsen 1977 Mateos 1998)El panorama de lo poliacutetico a comienzos de siglo XXI en el que la excesiva personalizacioacuten de la poliacutetica se ha visto retada por la fragmentacioacuten de los puacuteblicos (Canel 2006) sugiere la necesidad de desarrollar el concepto de liderazgo institucional aplicado a las instituciones puacuteblicas Algunos autores apuntan especiacuteficamente la necesidad de asentar el liacuteder poliacutetico sobre el liderazgo de la institucioacuten puacuteblica a la que representa (Hinkley 1991 Roncarolo 1994 Knippenberg y Hogg 2003)

23 La evaluacioacuten de la gestioacuten de la institucioacutenEl tercer elemento para la evaluacioacuten de la institucioacuten es el de la valoracioacuten de su gestioacuten Hay que distinguir como sentildealan Bouckaert y Van de Walle (2001) la evaluacioacuten del nivel macro (de la situacioacuten general del paiacutes medida por los indicadores econoacutemicos tales como los iacutendices de inflacioacuten de empleo etc) de la evaluacioacuten del nivel micro (de la situacioacuten personal es decir de la evaluacioacuten que el ciudadano realiza de la gestioacuten de un Gobierno por lo que percibe directamente de los servicios puacuteblicos que utiliza tales como la sanidad la educacioacuten los transportes etc)Uno de los elementos que influyen en la valoracioacuten de la gestioacuten es el de las expectativas que el ciudadano tiene sobre lo que la institucioacuten es capaz de darle Bouckaert y Van de Walle (2001) aplicando distintas teoriacuteas sobre el conocimiento sugieren que las expectativas pueden tener distintos efectos la asimilacioacuten de la diferencia ndashel ciudadano al comprobar que hay distancia entre lo que esperaba y lo que recibe simplemente se ajusta asimila mdash el contraste ndashal ciudadano se le hace patente la diferencia entre lo esperado y lo recibido por lo que tenderaacute a evaluar la institucioacuten de manera menos favorable que si no hubiera tenido expectativas de tipo alguno y por uacuteltimo una viacutea intermedia seguacuten la cual se opta por la asimilacioacuten o por el contraste dependiendo de cuaacutel sea el grado de distanciamiento entre lo esperado y lo recibido Las expectativas se construyen dependiendo de la interaccioacuten comunicativa que hay entre institucioacuten y puacuteblicos La institucioacuten con su comunicacioacuten puede manejar algo las expectativas pero ha de ser consciente de que la creacioacuten de nuevas expectativas ha de ir acompantildeada de la posibilidad de cumplirlas Si no el efecto seraacute el contrario cuanto maacutes arriba se sube de manera ficticia maacutes fuerte seraacute la caiacutedaOtro elemento importante en la valoracioacuten de la gestioacuten de la institucioacuten es el modo en coacutemo las personas atribuimos las responsabilidades de lo que pasa en el aacutembito puacuteblico Y es algo complejo pues como afirman Saacutenchez-Cuenca y Barreiro (2000) no siempre es atribuible el mismo grado de responsabilidad a todos los gobiernos mientras que hay poliacuteticas cuyos efectos dependen casi enteramente de la accioacuten del Gobierno hay otras cuya ejecucioacuten no es completamente controlable por eacuteste Pues por ejemplo una crisis econoacutemica podriacutea abortar un programa para crear empleo (p 11) De manera que la responsabilidad es una cuestioacuten de grado y se mueve en un continuo en el que en un extremo estaacuten las poliacuteticas que maacutes escapan al control


gubernamental (por ejemplo dicen estos autores combatir el terrorismo no es completamente controlable por el gobierno) y en el otro extremo las poliacuteticas controlables por el gobierno en su totalidad (como puede ser por ejemplo la corrupcioacuten)iquestCoacutemo atribuimos las personas la responsabilidad de los asuntos puacuteblicos Referiacute en trabajos precedentes (Canel 1999 y 2006) que en los problemas puacuteblicos hay una responsabilidad ldquode causardquo que determina quieacuten o queacute es origen del problema y una responsabilidad ldquode tratamientordquo que determina quieacuten o queacute tiene la capacidad (o responsabilidad) de resolverlo (Weiner 1985) Siguiendo con el mismo ejemplo la responsabilidad de causa del problema terrorismo son los mismos terroristas pero la responsabilidad de tratamiento del problema terrorismo incluye a las autoridades puacuteblicas a aquellos interlocutores a quienes compete solucionarlo Pues bien el puacuteblico tiende a atribuir la responsabilidad de tratamiento de los problemas puacuteblicos al sistema poliacutetico y dentro de eacuteste a la institucioacuten o a la autoridad maacutes visible en relacioacuten con el problema (Iyengar 1991 19)

3 LOS DEBATES ACTUALES SOBRE LA EVALUACIOacuteN DE LA INSTITUCIOacuteN PUacuteBLICA LA ldquoPRESIDENCIA PUacuteBLICArdquo Y EL ldquoCICLO DE POPULARIDADrdquo3 1 El debate en torno a la llamada ldquoteoriacutea de la Presidencia PuacuteblicardquoParte de la literatura en torno a la evaluacioacuten de las instituciones puacuteblicas y particularmente en torno a la evaluacioacuten de quien dirige una nacioacuten hace referencia criacuteticamente a la sobrevaloracioacuten que estas instituciones otorgan a la popularidad Es la nocioacuten (que algunos denominan teoriacutea) de la ldquoPresidencia Puacuteblicardquo que sostienen quienes consideran que el Presidente ldquose ha hecho un ser puacuteblicordquo Alguien que estaacute en ldquocampantildea permanenterdquo porque una vez conseguido el poder necesita afianzarlo y consolidarlo manteniendo las mismas teacutecnicas de caacutelculo estrateacutegico y de creacioacuten de imagen que utilizoacute durante el periacuteodo de contienda electoralrdquo (Canel 2006 108) Estar en campantildea permanente significa orientar los esfuerzos para que el liacuteder sea alguien muy visible para los ciudadanos que ocupe espacio en los medios de comunicacioacuten y que sea claramente reconocible e identificable por los votantes (Blumenthal 1980 Edwards II 1983 Roncarolo 1994 Kavanagh 1996) Como consecuencia se hace de los titulares del poder (y maacutes especiacuteficamente del presidente) ldquoseres puacuteblicosrdquo (Kernell 1986 y Kernell 1997) que viven con la obsesiva preocupacioacuten por crear noticias para promover su imagen La expresioacuten maacutes clara de la Presidencia Puacuteblica dicen los criacuteticos es la tambieacuten obsesiva preocupacioacuten por los iacutendices de popularidad que se toman como los evaluadores de la eficacia de la campantildea permanente La presidencia puacuteblica estaacute asiacute asociada a la idea de que los iacutendices de popularidad son los que marcan lo que la institucioacuten ha de hacer el Presidente llevaraacute a cabo su agenda poliacutetica soacutelo si los iacutendices de popularidad son elevados (Canes-Wrone 2004) los liacutederes utilizan los iacutendices de popularidad para ldquopromocionarserdquo ante el resto de los liacutederes ante el Congreso etc hacieacutendose ndashsi los iacutendices son buenosmdash con un capital que les permite negociar con maacutes holgura (Edwards


III 2003) los Presidentes valoran la capacidad de influencia que tienen en el puacuteblico seguacuten cuaacutel sea su popularidad personal (Polsby 1978) y todo esto hace que los Presidentes tenga como objetivo incrementar a corto plazo los iacutendices de popularidad para lograr vehicular los temas poliacuteticos que tiene en agenda (Brace y Hinckley 1992) De manera que el principal capital con que cuenta un Presidente para poder influir para tener poder es su prestigio puacuteblico y la reputacioacuten de la que goce hacia dentro y hacia fuera (Neustadt 1960)Pero frente a la posicioacuten de aquellos que se acogen a la visioacuten de la Presidencia Puacuteblica para criticar el recurso a la evaluacioacuten presidencial estaacuten tambieacuten aquellos autores que observan con mayor escepticismo esta capacidad del poliacutetico de influir en el puacuteblico Esta posicioacuten se apoya en trabajos que muestran que los presidentes no tienen tan faacutecil modificar las preferencias de los ciudadanos respecto a las medidas puacuteblicas (Edwards III 2003) O trabajos que muestran el resultado en sentido inverso por ejemplo los iacutendices bajos de confianza no constituyeron una barrera para que Reagan aplicara las poliacuteticas que deseaba (Citrin y Green 1986 453) Algunos autores muestran incluso que una elevada popularidad apenas tiene impacto en la tarea legislativa de un gobierno (Canes-Wrone 2004 478) Jacobs y Burns (2004) argumentan contundentemente que los Presidentes no pueden utilizar los sondeos a su antojo En primer lugar porque no estaacuten solos practicando el ldquoarte de sondear y hacerse puacuteblicordquo hay una oposicioacuten empresas medios de comunicacioacuten etc que tambieacuten sondean con el objetivo estrateacutegico de movilizar opiniones que se contrapongan a las del Gobierno En segundo lugar porque el puacuteblico no es un receptor pasivo de los mensajes del Presidente Puede entre otras cosas identificar en eacuteste las actitudes manipuladoras y demagoacutegicas Y por uacuteltimo los presidentes estaacuten dominados por las normas y las reglas institucionales de la soberaniacutea popular al final del camino estaacute el posible castigo electoral En resumen junto a la liacutenea de trabajos que critican la publicidad exagerada en la que han caiacutedo los liacutederes poliacuteticos estaacute esta otra liacutenea maacutes esceacuteptica y que se articulan en torno a la tesis del ldquono winrdquo (los Presidentes ldquono [siempre] gananrdquo) (Ostrom y Simon 1988) Debido a un desajuste entre la responsabilidad y la autoridad formal de la institucioacuten los presidentes no son capaces de mantener el apoyo del puacuteblico al nivel suficiente como para asegurar su reeleccioacuten Evaluar la popularidad y lograr una popularidad elevada no garantiza los resultados electoralesAdemaacutes varios autores reaccionan a las visiones criacuteticas de la Presidencia Puacuteblica subrayando el valor positivo que tiene la evaluacioacuten de la popularidad Sentildealan que eacutesta es para muchas instituciones la uacutenica viacutea a traveacutes de la cual se logra obtener un feed-back de los puacuteblicos (Jacobs y Burns 2004) la evaluacioacuten permite a la institucioacuten estrechar la relacioacuten con sus puacuteblicos y otorga a estos un mayor escrutinio (Rimmerman 1991) Luego si bien todo este aparato de sondeo se originoacute para averiguar coacutemo manejar (y manipular) mejor la opinioacuten puacuteblica su desarrollo a lo largo del tiempo ha incrementado el intereacutes de los poliacuteticos por conocer y responder a las preferencias puacuteblicas (Jacbos 1992)


Por tanto una Presidencia que sondea no necesariamente es una ldquoPresidencia Puacuteblicardquo (con el significado negativo acuntildeado arriba mencionado) Con otras palabras la evaluacioacuten no es en siacute ni buena ni mala todo depende de queacute es lo que se busque con ella y para queacute se utilice

3 2 El debate en torno a la llamada ldquoteoriacutea del ciclo electoralrdquo La teoriacutea del ciclo electoral propuesta por Mueller (1970 y 1973) afirma que la popularidad ndashpopularidad en sentido geneacuterico valoracioacuten del gobierno del Presidente de la gestioacuten de la confianza etcmdash sigue unas pautas que son comunes a todas las instituciones y a todos los tiempos y que son baacutesicamente las siguientes la Legislatura comienza con una fase inicial que es un periacuteodo de elevada popularidad en la que la institucioacuten disfruta de la ldquorenta de legitimidadrdquo que obtuvo al ganar las elecciones una fase intermedia en la que la popularidad baja y una fase final ya casi pre-electoral en la que se produce una ligera recuperacioacuten Quienes proponen el ciclo electoral parten de que todo Presidente termina la legislatura con menos popularidad que como la comenzoacute incluso auacuten cuando la poliacutetica que lleve a cabo sea la que quiere la mayoriacutea (Kernell 1978 506) Y parten tambieacuten de que las valoraciones de los poliacuteticos suelen ser muy bajas rara vez se supera el 6 y en la mayor parte del mandato lo que se obtiene es un suspenso (Bouckaert y Van de Walle 2001) En definitiva esta teoriacutea postula que la popularidad de toda institucioacuten sigue un calendario electoral y es por tanto un ciclo autoacutenomo e independiente de cuaacutel sea la gestioacuten de gobierno (de cuaacutel sean los logros o los errores) e independiente tambieacuten de la situacioacuten econoacutemica Ahora bien auacuten cuando los datos empiacutericos ponen de manifiesto una cierta estabilidad y repeticioacuten de la popularidad tambieacuten hay datos que contradicen la existencia de ciclo Por ejemplo no siempre se valora a todos los liacutederes por igual No todos disfrutan de la misma popularidad unos tienen una media de 64 de aprobacioacuten y otros de 43 (en teacuterminos americanos) unos gozan de una media de 65 y otros de 5 (en teacuterminos espantildeoles) Pero ademaacutes unos parten de 79 y otros de 51 (en teacuterminos americanos) unos parten de 7 otros de 6 y otros de 5 (en teacuterminos espantildeoles) Unos bajan a 4 otros a 35 y otros llegan a bajar a una nota de 3 Y mientras que llegada la precampantildea unos consiguen recuperar todo lo que perdieron otros no logran maacutes que incrementar unas deacutecimas desde el punto maacutes bajo y otros nunca remontan Por uacuteltimo unos bajan antes que otros y unos recuperan antes que otrosDesde anaacutelisis metodoloacutegicos maacutes sofisticados teacutecnicamente son ya varios los autores que rechazan la teoriacutea del ciclo electoral como planteamiento para la interpretacioacuten de la popularidad de los gobiernos (ver por ejemplo Stimson 1976 Kernell 1978 Mac Kuen 1983 Ostrom y Simon 1985 Ostrom y Simon 1988 Ostrom y Simon 1989 Rose 1991 Chanley y otros 2000 Gronke y Newman 2003 Brace y Hinckley 2006) Negar la teoriacutea del ciclo electoral significa por una parte afirmar que la valoracioacuten que los puacuteblicos hacen de la institucioacuten tiene un cierto margen de fluctuacioacuten que depende de lo que sucede (lo que pasa tiene efectos en la


evaluacioacuten) Implica tambieacuten afirmar que la valoracioacuten que los puacuteblicos hacen depende de lo que la institucioacuten haga en respuesta a lo que sucedeLa negacioacuten del ciclo electoral tiene consecuencias en lo que se refiere a la comunicacioacuten de una institucioacuten Significa que eacutesta ha de emplearse en la gestioacuten de las cosas que suceden en la comunicacioacuten de los imprevistos en la comunicacioacuten de sus poliacuteticas puacuteblicas en generar unas expectativas en los puacuteblicos que esteacuten cerca de lo viable Sentildeala por uacuteltimo que la posibilidad que tiene la institucioacuten de actuar sobre ese margen no es ilimitada

3 3 El debate en torno a las caracteriacutesticas del puacuteblico evaluadorDe la posicioacuten que se adopte en los debates arriba recogidos se desprende una determinada concepcioacuten del puacuteblico que evaluacuteaA grandes rasgos hay dos tradiciones extremas en la concepcioacuten del puacuteblico evaluador (Ostrom y Simon 1988 1097 y ss) Por una parte la que se acoge al rational choice que piensa que las personas cuando evaluamos lo poliacutetico y las instituciones analizamos con precisioacuten y finura el entorno poliacutetico evaluamos racionalmente Por otra estaacute la tradicioacuten menos racional que considera que para los ciudadanos la poliacutetica es una preocupacioacuten soacutelo perifeacuterica por lo que carece de motivacioacuten suficiente para consumir informacioacuten sobre lo que hacen los poliacuteticos y poder asiacute supervisarlos Bajo esta concepcioacuten la evaluacioacuten del puacuteblico es tomada como una reaccioacuten a los gestos simboacutelicos de la poliacutetica reaccioacuten que es poco informada y en muchos casos visceralUna y otra tradicioacuten son extremos de algo que en realidad sucede de manera intermedia Es decir si bien es cierto que hay ciudadanos que evaluacutean de manera informada y racional y ciudadanos que lo hacen de manera maacutes visceral la mayor parte de las personas se situacutea en una posicioacuten en la que tanto la informacioacuten precisa como lo simboacutelico juegan un papelLos tres debates aquiacute recogidos sirven para establecer un marco de interpretacioacuten de los datos empiacutericos Apuntan que si bien puede haber una cierta base de prejuicio ideoloacutegico y desinformado en las valoraciones que la gente hace sobre los poliacuteticos y la poliacutetica se puede decir tambieacuten que el prestigio de una institucioacuten es una mezcla de informacioacuten y experiencia real de percepcioacuten de lo realizado y de atribucioacuten de la responsabilidad Las valoraciones pueden estar prejuiciadas pero a la vez son vulnerables a las condiciones sociales poliacuteticas y econoacutemicas del momento en las que el ciudadano vive y sobre las que consume informacioacuten Cuaacutento de inercial o cuaacutento de experiencial sea la valoracioacuten del Gobierno es algo que hay que observar en los resultados empiacutericos

4 METODOLOGIacuteA E HIPOacuteTESIS DE INVESTIGACIOacuteNPara explicar las causas de las alzas y bajas de la popularidad de una institucioacuten una decisioacuten importante es la de determinar tanto para un estudio cuantitativo como para uno cualitativo queacute es variable dependiente (aquello


que se quiere explicar) y cuaacuteles son variables independientes que lo pueden explicar Siguiendo la praacutectica convencional (Norpoth 1984 Citrin y Green 1986 Ostrom y Simon 1988 Edwards III y otros 1995 Gronke 1999 Nicholson y otros 2002 Gronke y Newman 2003 Newman 2004) combineacute un estudio agregado con varios estudios individuales En la presente investigacioacuten se recogen los resultados de los estudios individuales para los que se tomeacute las matrices de los estudios del CIS en el tercer antildeo de las dos uacuteltimas legislaturas de Felipe Gonzaacutelez las dos de Joseacute Mariacutea Aznar y lo que va de Legislatura de Joseacute Luis Rodriacuteguez-Zapatero3 Los datos fueron tratados con el programa SPSS de anaacutelisis estadiacutestico y la teacutecnica utilizada fue la de regresioacuten linealEl anaacutelisis de los datos de la media de popularidad del Presidente de Gobierno desde 1982 hasta Julio de 2006 permite decir a grandes rasgos que la popularidad de los tres presidentes ha seguido unas pautas que se ajustan a lo postulado por la teoriacutea del ciclo electoral Los tres empiezan sus mandatos con maacutes elevada popularidad que la que gozaraacuten el resto de la Legislatura A medida que los tres presidentes avanzan en el ejercicio del gobierno se produce un descenso de popularidad Y con el final del mandato y la proximidad en la celebracioacuten de elecciones se recupera popularidad (algo que en el caso de Rodriacuteguez Zapatero todaviacutea no es posible comprobar) Hay por tanto unas pautas que son comunes a todas las LegislaturasPero junto con las pautas comunes tambieacuten se advierten diferencias dignas de atencioacuten Para analizarlo completo lo mostrado en los cuadros con la Tabla 1 que recoge la valoracioacuten obtenida por los presidentes a comienzo de mandato a final de mandato asiacute como la media de popularidad de toda la Legislatura

Tabla 1 Popularidad de los residentes de GobiernoLiacutederLegislatura Popularidad Inicio Popularidad Final Media de LegislaturaGonzaacutelez(28X82-22VI86)

76 69 665

Gonzaacutelez(22VI86-29X89)

7 59 598

Gonzaacutelez (29X89-6VI93)

59 57 565

Gonzaacutelez(6VI93-3III96)

57 49 47

Aznar(3III96-12III00)

51 52 49


58 46 502

RZapatero(14III04- )

66 54 (IV06) 559

3 El siguiente cuadro recoge los datos de los estudios individuales Los detalles metodoloacutegicos de cada estudio se pueden encontrar en la referencia recogida Simplemente mencionareacute que las muestras de cada antildeo supera una N de 2000

Datos de los estudios del CIS utilizados en la investigacioacutenLegislaturaFecha del estudioNuacutemero de referencia del estudio del CISGonzaacutelez (29X89-6VI93)Octubre 19922024Gonzaacutelez (6VI93-

3III96)Marzo 19952151Aznar (3III96-12III00)Abril 19992324Aznar (12III00-14III04)Octubre 20032541RZapatero (14III04- )Abril 20062640


Hay diferencias entre las legislaturas dentro de una tendencia general todos los mandatos muestran alzas y bajas y en un comportamiento que no es comuacuten al del resto de las legislaturas Por ejemplo un mismo Presidente goza de diferentes medias de popularidad el caso y explicacioacuten maacutes loacutegica es el de Felipe Gonzaacutelez cuya popularidad (que es la maacutes alta alcanzada por un Presidente) fue en desgaste a lo largo de sus legislaturas para terminar con un suspenso de 47 Otras diferencias contrasta la fase inicial que es incluso de incremento de la primera y tercera legislaturas de Gonzaacutelez con la fase inicial alta pero en declive del resto de legislaturas contrasta tambieacuten los frecuentes picos de la segunda legislatura de Gonzaacutelez y la primera de Aznar con la relativa estabilidad del resto de legislaturas En definitiva unos caen antes y otros maacutes tarde unos recuperan antes y otros maacutes tarde Unos recuperan lo mismo y otros muy poco Para explicar los movimientos de popularidad construiacute dos ecuaciones de regresioacuten lineal para cada una de las matrices de datos de los estudios del CIS una para explicar la variable dependiente ldquoEvaluacioacuten de la gestioacuten de Gobiernordquo y otra para explicar la variable dependiente ldquoLiderazgordquo Esta variable ha sido construida como un iacutendice de 12 valores a partir de los items que el CIS utiliza sobre la valoracioacuten del Presidente de Gobierno la valoracioacuten en una escala de 0 a 10 y la evaluacioacuten de la confianza que inspira (con respuesta ldquoMuchardquo ldquoBastanterdquo ldquoPocardquo y ldquoNingunardquo) La ecuacioacuten construida a tal fin es la siguiente

ECUACIOacuteNLiderazgoGestioacuten de Gobierno =

Bo + B1 escala ideoloacutegica + B2 intencioacuten de voto + B3 edad + B4 sexo + B5 situacioacuten econoacutemica + B6 situacioacuten econoacutemica retrospectiva + B7 situacioacuten

econoacutemica prospectiva + B8 situacioacuten poliacutetica + B9 situacioacuten poliacutetica retrospectiva + B10 situacioacuten poliacutetica prospectiva

Clasifiqueacute las variables independientes de la siguiente maneraa) Variables inerciales Considero que son variables inerciales

fundamentalmente las que estaacuten relacionadas con la ideologiacutea (valoracioacuten una escala de izquierda a derecha y la intencioacuten de voto) (seguiacute para esto los siguientes estudios Ostrom y Simon 1988 Gronke 1999 Hudson 1987 Lanoue y Headrick 1994)

b) Variables sociodemograacuteficas la edad y el sexo c) Variables de evaluacioacuten de la situacioacuten del paiacutes maacutes especiacuteficamente

situacioacuten econoacutemica (actual retrospectiva y prospectiva) y poliacutetica (actual retrospectiva y prospectiva) (seguiacute para esto los estudios de Kernell 1978 Key y Fiorina 1981 Citrin y Green 1986 Marsh Ward y Sanders 1991 Sanders 1991 y 1993 Chanley y otros 2000 Bosch y Riba 2005)


d) Variables de evaluacioacuten sobre la gestioacuten de sucesos imprevistos (seguiacute para esto los estudios de Mueller 1970 Brace y Hinckley 1991 Gronke 1999 Nicholson y otros 2002)

e) Variables actitudinales que miden las actitudes de los encuestados respecto a la participacioacuten el intereacutes por la poliacutetica la confianza en los poliacuteticos (en general) y el consumo informacioacuten en los medios (Seguiacute para esto los estudios de Gronke 1999 McGraw y Ling 2003 Shaw y otros 2002)

El punto del que partiacute para el presente trabajo es el siguiente Por una parte y siguiendo los resultados de estudios internacionales y asiacute como los estudios precedentes para el caso espantildeol considereacute que el puacuteblico es cada vez maacutes un puacuteblico evaluador que ejerce su criterio con una mayor independencia de su afiliacioacuten partidista aplicando para cada caso la informacioacuten y valoracioacuten que realiza sobre el entorno lo que sucede en cuanto a poliacuteticas puacuteblicas y lo que sucede en cuanto a la gestioacuten de sucesos imprevistos De manera que si bien las variables ideoloacutegicas o de identificacioacuten partidista constituyen una explicacioacuten importante de la evaluacioacuten de la institucioacuten hay otras variables relacionadas con la valoracioacuten del entorno que tambieacuten explican la valoracioacuten y de una manera no despreciableEste planteamiento geneacuterico se tradujo en las siguientes hipoacutetesis

- Hipoacutetesis 1 Si bien las variables de identificacioacuten partidista explican en buena medida la variacioacuten de la evaluacioacuten de la institucioacuten (tanto en lo que se refiere a la popularidad como en lo que se refiere a la valoracioacuten de la gestioacuten de Gobierno) las variables situacionales (y concretamente las valoraciones sobre la situacioacuten econoacutemica y poliacutetica del paiacutes) constituyen tambieacuten una parte importante de la explicacioacuten parte que no se puede ignorar De manera que los coeficientes de regresioacuten de las variables situacionales son importantes

- Hipoacutetesis 2 Por asociacioacuten con las variables ideoloacutegicas las variables sociodemograacuteficas explican poco tanto en lo que se refiere a la valoracioacuten del liacuteder como a la valoracioacuten de la gestioacuten de Gobierno

- Hipoacutetesis 3 Hay diferencia entre valorar al liacuteder y valorar la gestioacuten de la institucioacuten Las variables situacionales explican maacutes la valoracioacuten de la gestioacuten de Gobierno de lo que explican la valoracioacuten del liacuteder

- Hipoacutetesis 4 En cuanto a la evolucioacuten en el tiempo las variables situacionales van explicando cada vez maacutes tanto la valoracioacuten del liderazgo como la valoracioacuten de la gestioacuten de Gobierno De manera que en los primeros antildeos los coeficientes de regresioacuten de estas variables son menores que en los uacuteltimos antildeos Por la asociacioacuten que existe entre estas variables y las sociodemograacuteficas lo mismo sucede con las sociodemograacuteficas en los primeros antildeos explican maacutes que en los uacuteltimos

A continuacioacuten comento los resultados obtenidos Para la exposicioacuten seguireacute una secuencia loacutegica y coherente con la exposicioacuten teoacuterica partireacute de las variables maacutes inerciales para terminar con las maacutes experienciales


5 LA INFLUENCIA DE LA ldquoINERCIArdquo EN LA IMAGEN PUacuteBLICA DE LA PRESIDENCIA DEL GOBIERNOSiguiendo a varios autores considero ldquoinercialrdquo la identificacioacuten partidista porque la ideologiacutea (en sentido amplio) genera una cierta repeticioacuten en el voto haciendo que el votante mantenga su opcioacuten poliacutetica mientras nada cambie de manera sustancial (Saacutenchez-Cuenca y Barreiro 2000 13) La identificacioacuten partidista puede ldquoinerciarrdquo tanto la valoracioacuten del liderazgo como la valoracioacuten que se hace de la gestioacuten de GobiernoEs un resultado de la investigacioacuten ampliamente comprobado que la identificacioacuten partidista juega un papel muy importante en la evaluacioacuten de la institucioacuten (Edwards III 1976 Kernell 1986 Ostrom y Simon 1987 Gronke 1999 Chanley y otros 2000) Realmente la identificacioacuten partidista prejuicia la evaluacioacuten de las instituciones puacuteblicas los votantes siempre apoyaraacuten al liacuteder y a la institucioacuten si es de su partido ya sea buena o mala la gestioacuten que estos realicen La identificacioacuten partidista funciona tambieacuten orientando la evaluacioacuten de la institucioacuten hacia los aspectos que son favorables Por ejemplo los demoacutecratas cuando evaluaban a Clinton se fijaban maacutes en su eficiencia y empatiacutea mientras que los republicanos lo haciacutean en su integridad (Funk 1999)La identificacioacuten partidista puede anular tambieacuten los efectos de la gestioacuten es decir identificarse con el partido del gobierno puede derivar en apoyarle auacuten cuando se le atribuye una mala tarea y la identificacioacuten con el partido de la oposicioacuten puede derivar en el apoyo a eacutesta auacuten cuando se considera que el partido del gobierno ha realizado una buena gestioacuten (Ostrom y Simon 1987) Pero la investigacioacuten tambieacuten demuestra que la identificacioacuten partidista no es la uacutenica variable que explica la valoracioacuten del liacuteder y de la gestioacuten sino que compite con otras variables En primer lugar porque los datos hablan de la existencia de un margen de fluctuacioacuten en la valoracioacuten que una institucioacuten obtiene entre los votantes de un mismo partido ni el 100 de los propios votantes valoran siempre bien (y tampoco siempre con la maacutexima puntuacioacuten) ni el 100 de votantes ajenos valoran siempre mal (y tampoco siempre con la peor puntuacioacuten) Maacutes allaacute de la identificacioacuten partidista la institucioacuten y su liacuteder pueden ganar maacutes apoyo entre los propios y reducir el rechazo de los ajenos (Edwards III 1976 y 1983 Rose 1991 Lanoue y Headrick 1994 Rimmerman 1991)En relacioacuten con la identificacioacuten partidista estariacutean otras caracteriacutesticas sociodemoacutegrafiacutecas como la edad el nivel de educacioacuten y la renta si bien es preciso sentildealar que estas variables auacuten cuando pueden arrojar elementos interesantes para los casos concretos cada vez explican menos las variaciones en la popularidad (Chanley y otros 2000 241 Edwards III y Swenson 1997)iquestQueacute sucede al respecto en EspantildeaRefirieacutendose al caso espantildeol Saacutenchez-Cuenca y Barreiro (2000) identifican dos factores que pueden operar en este sentido Por una parte la comparacioacuten de la accioacuten del gobierno del propio partido con lo que podriacutea haber hecho el partido de la oposicioacuten en caso de gobernar Factor que puede llevar a no


apoyar al partido propio en el gobierno que ademaacutes ha gestionado bien porque se considera que el partido de la oposicioacuten lo hubiera hecho auacuten incluso mejor El segundo factor al que se refieren es la atribucioacuten de responsabilidades Pues bien tras su observacioacuten empiacuterica referida a la etapa socialista de 1982-1996 estos autores afirman que se demuestra que la atribucioacuten de responsabilidad a un Gobierno no es un asunto totalmente partidista Pues en la eacutepoca analizada se pone de manifiesto que entre los votantes de cada partido hubo suficiente variabilidad como para poder concluir que la responsabilidad es algo maacutes que una excusa con la que disculpar los malos resultados Atendiendo ademaacutes a las poliacuteticas puacuteblicas se demostroacute que en ciertas aacutereas al margen de sus intenciones de voto la gente reconocioacute que las cosas habiacutean mejorado o que habiacutean empeorado Es decir la orientacioacuten partidista no determina completamente las percepciones de los ciudadanos sobre las poliacuteticas las valoraciones sobre queacute poliacuteticas han ido bien y cuaacuteles mal coincidieron hasta cierto punto entre votantes socialistas y votantes de la oposicioacuten Los datos mostraron por uacuteltimo que el juicio de que el partido contrario lo hubiera hecho mejor llegoacute a modificar a la baja la valoracioacuten de la gestioacuten de gobierno del propio partido (p 84)Los datos del presente trabajo corroboran a grandes rasgos los resultados de estas investigaciones precedentes Se recogen en la Tabla 2 para la valoracioacuten del liderazgo y en la Tabla 3 para la valoracioacuten de la gestioacuten de Gobierno


Tabla 2 EXPLICACIOacuteN DE LA VALORACIOacuteN DEL LIDERAZGOCoeficientes de regresioacuten lineal

RESUMENMODELO

Octubre 1992 Marzo 1995 Abril 1999 Octubre 2003 Abril 2006

Ajuste (R2 ajustado)

46 53 57 69 57

Sig Estadiacutestica

000 000 000 000 000

Diagnoacutestico de colinearidad

187 194 19 197 178

COEFICIENTES

NoEstand

Estand NoEstand

Estand NoEstand

Estand NoEstand

Estand NoEstand

Estand

Variables ideoloacutegicasEscala IzdaDcha

-03 -02 -36

-16

4

18

4

16

-35

-17

Intencioacuten de voto

26

46

402

41

263

3

413

45

253

32

Variables sociodemograacuteficas

Edad 007

04

01

05

01

06

001 003 01

04

Sexo -02 -003 06 007 -34

-04

-06 -006 18 02

Variables de valoracioacuten situacioacuten

Situacioacuten poliacutetica

109

23

148

29

123

27

1

25

SP retrospectiva

37

05

66

08

22

04

SP prospectiva 12 02 -03 -005 97

18

Situacioacuten econoacutemica

75

22

55

12

46

09

30

06

08 02

SE retrospectiva

20 04 30

04

-06 -008 31

05

SE prospectiva 42

10

7

12

08 01 27

04

20

04

() plt010 () plt001 () plt0001


Tabla 3 EXPLICACIOacuteN DE LA VALORACIOacuteN DE LA GESTIOacuteN DE GOBIERNOCoeficientes de regresioacuten lineal

RESUMEN MODELO

Octubre1992 Marzo1995 Abril1999 Octubre2003 Abril2006


046 057 056 061 058


0000 0000 0000 0000 0000

Durbin Watson

182 19 178 19 187

COEFICIENTES

NoEstand

Estand NoEstand

Estand NoEstand

Estand NoEstand

Estand NoEstand

Estand


-03

-05

-08

-17

07

15

10

18

-08

-16


65

33

70

32

47

25

68

31

62

3


Edad 001 02 0 -001 0 0 001 02 0 007

Sexo 01 007 05 03 04 02 04 02 -03 -01Variables de valoracioacuten situacioacuten


32

30

35

31

33

30

30

29

SP retrospectiva

13

08

11

05

07

04

SP prospectiva

-02 -02 07

04

17

12


38

34

19

17

2

18

11

09

07

06

SE retrospectiva

07 04 007

005

07

04

07

04

SE prospectiva

16

12

04 03 07

05

03 02 07

06

() plt010 () plt001 () plt0001


La Tabla 2 y la Tabla 3 muestran los coeficientes de regresioacuten de las cinco regresiones (una para cada uno de los puntos temporales en los que se ha realizado la observacioacuten) En la parte superior de las dos tablas se recogen los datos que resumen el modelo Como caracteriacutesticas generales mencionareacute que

a) Para todos los casos salvo para octubre de 1992 las regresiones explican maacutes de la mitad de la varianza (ver datos del R2 ajustado) un porcentaje importante siguiendo los criterios de valoracioacuten de los estudios realizados en este campo

b) Respecto a las cuestiones metodoloacutegicas todos las regresiones dan un elevado iacutendice de significacioacuten estadiacutestica (0000) Para todos los caso el iacutendice Durbin-Watson ofrece valores que permiten asumir que se cumple el principio de independencia Y para todos los casos los valores FIV (factores de inflacioacuten de la varianza) permiten asumir que no hay problema de colinealidad o relacioacuten entre las variables independientes

A continuacioacuten comento los resultados maacutes significativos

51 La influencia de las variables ideoloacutegicas y sociodemograacuteficas en la valoracioacuten del liderazgo

Los datos confirman la hipoacutetesis 1 Por una parte y atendiendo a los coeficientes de regresioacuten estandarizados (que permiten observar cada modelo de regresioacuten en siacute mismo es decir comparar los coeficientes de un mismo modelo entre siacute) las variables ideoloacutegicas (escala ideoloacutegica e intencioacuten del votar al partido en el Gobierno) constituyen una explicacioacuten importante de la varianza de la valoracioacuten del liderazgo todos los coeficientes estandarizados gozan de elevado iacutendice de significacioacuten estadiacutestica y para todos los casos los coeficientes son importantes si bien es maacutes importante la intencioacuten de votar al partido en el Gobierno que la escala ideoloacutegica Como era de esperar el sentido de los coeficientes es el esperado cuanto mayor es la intencioacuten de votar al partido en el Gobierno mayor es la valoracioacuten del liacuteder y en cuanto a la escala ideoloacutegica cuando gobierna el Partido Socialista el coeficiente da negativo (pues se acerca maacutes al 1 ndashque es el extremo que representa a la izquierda en la escalamdash que al 10)En segundo lugar tambieacuten seguacuten lo hipotetizado las variables sociodemograacuteficas explican poco el liderazgo mientras que la variable sexo no es importante en caso alguno (salvo en 1999 antildeo en el que el coeficiente muestra ligeramente que Aznar era maacutes popular entre los hombres que entre la mujeres) la variable edad lo es para todos los antildeos salvo 2003 pero con un iacutendice de significacioacuten estadiacutestica menor que el de otras variables y con unos coeficientes muy bajos menores ademaacutes que los del resto de variables Por tanto el resultado apenas merece comentario si bien siacute sentildealareacute que el sentido del resultado es que a mayor edad mayor es la valoracioacuten del liacuteder De manera que para el caso espantildeol los datos corroboran lo afirmado por Chanley y otros (2000) y Edwards III y Swenson 1997 los datos sociodemograacuteficos explican poco


En tercer lugar y tambieacuten seguacuten lo hipotetizado no son despreciables los coeficientes de las variables situacionales Como se ve en la tabla no todas las celdas tienen resultado y la razoacuten estriba en que los estudios de 1992 y de 1995 no incluyeron todas las preguntas que posteriormente siacute se incluyeron sobre la situacioacuten poliacutetica y econoacutemica Pues bien al margen de la explicacioacuten maacutes detallada que posteriormente dareacute del tipo de valoracioacuten situacional se puede decir que en general la valoracioacuten de la situacioacuten econoacutemica y poliacutetica tiene importantes iacutendices de significacioacuten estadiacutestica y que aunque en general menores los coeficientes de regresioacuten estandarizados son importantes e incluso en algunos casos maacutes importantes que los de la variable escala ideoloacutegica (no asiacute los de la variable intencioacuten de voto al partido en el Gobierno cuyos coeficientes siempre son mayores que los de las variables situacionales) En resumen los datos confirman la hipoacutetesis 1 y 2 para el liderazgo si bien las variables ideoloacutegicas son importantes (y no asiacute las sociodemograacuteficas) son tambieacuten importantes las variables situacionales

52 La influencia de las variables ideoloacutegicas y sociodemograacuteficas en la valoracioacuten de la gestioacuten

Los resultados respecto a la valoracioacuten de la gestioacuten de Gobierno son a grandes rasgos similares a la valoracioacuten del liderazgo y confirman las hipoacutetesis 1 y 2 Con el fin de agilizar la exposicioacuten comentareacute los resultados en sentido geneacuterico (cuya especificidad se puede comprobar mediante la consulta de la Tabla 3) Los coeficientes de regresioacuten estandarizados muestran que las variables ideoloacutegicas constituyen una explicacioacuten importante de la varianza de la valoracioacuten de la gestioacuten de Gobierno de nuevo todos gozan de elevado iacutendice de significacioacuten estadiacutestica de nuevo para todos los casos los coeficientes son importantes aunque explica maacutes la intencioacuten de votar al partido en el Gobierno que la escala ideoloacutegica de nuevo cuanto mayor es la intencioacuten de votar al partido en el Gobierno mayor es la valoracioacuten de la gestioacuten y en cuanto a la escala ideoloacutegica cuando gobierna el Partido Socialista el coeficiente da negativo (pues se acerca maacutes al 1 ndashque es el extremo que representa a la izquierda en la escalamdash que al 10)En segundo lugar al igual que sucede con el liderazgo y tambieacuten seguacuten lo hipotetizado las variables sociodemograacuteficas explican poco Quizaacute sea digno de mencioacuten que incluso aquiacute explican menos los coeficientes de las variables sociodemograacuteficas no gozan de significacioacuten estadiacutesticaPor uacuteltimo y tambieacuten seguacuten lo hipotetizado no son despreciables los coeficientes de las variables situacionales Aquiacute cabriacutea decir ndashy es algo que comento con maacutes detalle en el epiacutegrafe posteriormdash que incluso son aquiacute menos despreciables que los coeficientes de valoracioacuten del liderazgo En resumen los datos confirman la hipoacutetesis 1 y 2 para la valoracioacuten de Gobierno si bien las variables ideoloacutegicas son importantes (y no asiacute las sociodemograacuteficas) son tambieacuten importantes las variables situacionales


53 Valoracioacuten del liacuteder versus valoracioacuten de la gestioacuten de Gobierno

Los datos confirman la Hipoacutetesis 3 que afirma que hay diferencia entre valorar al liacuteder y valorar la gestioacuten de la institucioacuten Por una parte las variables sociodemograacuteficas explican menos la valoracioacuten de la gestioacuten de Gobierno que la valoracioacuten del liderazgo Pero y es algo todaviacutea maacutes interesante asiacute como contundente a diferencia de lo que ocurre con la valoracioacuten del liderazgo (donde las variables situacionales explican algo pero siempre menos que las ideoloacutegicas) en la valoracioacuten de la gestioacuten las variables situacionales pueden llegar a explicar maacutes la valoracioacuten de la gestioacuten que las variables ideoloacutegicas Asiacute sucede con la variable situacioacuten poliacutetica (que en todos los casos menos en 2006 tiene coeficientes maacutes elevados que las dos variables ideoloacutegicas) y con la variable situacioacuten econoacutemica (que comparativamente casi todos los antildeos tiene coeficientes maacutes elevados que la variable escala ideoloacutegica)De manera que se confirma la Hipoacutetesis 4 que afirmaba que las variables situacionales explican maacutes la valoracioacuten de la gestioacuten de Gobierno de lo que explican la valoracioacuten del liacuteder Con otras palabras la valoracioacuten del liacuteder es maacutes partidista o ideoloacutegica que la valoracioacuten de la gestioacuten de Gobierno

54 La evolucioacuten en el tiempo de la valoracioacuten del liderazgo y de la valoracioacuten de la gestioacuten de Gobierno

iquestHay evolucioacuten en el tiempo de la valoracioacuten del liderazgo y de la gestioacuten de la institucioacuten y sigue alguna tendencia tal evolucioacuten iquestSe comporta tal tendencia seguacuten lo hipotetizado es decir los coeficientes de las variables ideoloacutegicas explican maacutes en los primeros antildeos que en los uacuteltimos y las variables situacionales explican maacutes en los uacuteltimos antildeos que en los primerosAntes de comentar los resultados es preciso sentildealar que un condicionante de esta comparacioacuten en el tiempo es el de la ausencia de datos para los dos primeros antildeos en octubre de 1992 soacutelo se pregunta por la estuacioacuten econoacutemica (actual retrospectiva y prospectiva) y en marzo de 1995 soacutelo se pregunta por la situacioacuten poliacutetica y econoacutemica actual y por la situacioacuten econoacutemica retrospectivaLos datos no permiten concluir seguacuten lo hipotetizado Ni para el liderazgo ni para la gestioacuten de Gobierno Por ejemplo en los dos casos la variable situacioacuten econoacutemica constituye un coeficiente importante en el primer antildeo 1992 e incluso es maacutes importante en 1992 que en 2006 (ver coeficientes no estandarizados)Por tanto no se confirma la hipoacutetesis 4 seguacuten la cual hay una tendencia en el tiempo por la que cada vez maacutes las valoraciones son maacutes situacionales que ideoloacutegicas Este resultado confirmariacutea en cierta medida la idea de la contingencia en la valoracioacuten de la institucioacuten cada caso se comporta de manera diferente por lo que hay que atender a las circunstancias propias Por tanto los datos confirman tres de las cuatro hipoacutetesis de partida por lo que podriacuteamos resumir el resultado de la siguiente manera la evaluacioacuten de la


institucioacuten Presidencia de Gobierno depende (ha dependido siempre y no ahora maacutes que antes) no soacutelo de las variables ideoloacutegicas sino tambieacuten de las variables situacionales

6 LA INFLUENCIA DE LAS POLIacuteTICAS PUacuteBLICASLos datos arriba recogidos permiten dirigir la exploracioacuten hacia la corriente ldquomedioambientalistardquo es decir la que afirma que siendo la identificacioacuten partidista soacutelo parte de la explicacioacuten otra parte hay que buscarla en el entorno es decir en lo que sucede La investigacioacuten al respecto distingue lo que sucede en cuanto a la gestioacuten de poliacuteticas puacuteblicas de la gestioacuten de los sucesos imprevistosLos estudios concluyen que las poliacuteticas puacuteblicas influyen en la popularidad de una institucioacuten (Bosch y otros 1999 Newman 2004) La justificacioacuten es algo obvia cuando la gente estaacute satisfecha con la situacioacuten econoacutemica y poliacutetica estaacute maacutes satisfecha con el Gobierno Algunos estudios se refieren no soacutelo al contenido de las poliacuteticas puacuteblicas sino tambieacuten al procedimiento con el que eacutestas se adoptan (Hibbing y Theiss-Morse 2001)

61 La poliacutetica econoacutemicaUna de las poliacuteticas puacuteblicas que maacutes afecta a la percepcioacuten de un gobierno es la poliacutetica econoacutemica La teoriacutea claacutesica del voto econoacutemico seguacuten la cual los ciudadanos responden a los resultados pasados o previstos de la economiacutea supone que los electores atribuyen automaacuteticamente la responsabilidad al ejecutivo de la evolucioacuten de la situacioacuten econoacutemica Un elevado nuacutemero de trabajos empiacutericos confirma la teoriacutea las condiciones econoacutemicas y las percepciones sobre las mismas afectan de manera poderosa la valoracioacuten de un Gobierno ya sea en Presidencialismos como en Parlamentarismos (Whiteley 1980 Hibbs y Fassbender 1981 Paldam 1981 Citrin y Green 1986 Rose 1991 Lewis-Beck 1997 Nadeau y Niemi 1999 Chanley y otros 2000 Fraile 2002 Nicholson y otros 2002 707 Gronke y Newman 2003 Brace y Hinckley 2006) De ahiacute el dicho de que ldquoes la economiacutea la que decide la suerte de los poliacuteticosrdquo (Norpoth 1984 253) Una de las cuestiones objeto de examen es la de queacute influye maacutes si las evaluaciones econoacutemicas retrospectivas (lo que el ciudadano piensa del pasado que es lo que ldquofuncionardquo como causa de la realidad en la que se encuentra hoy) o las evaluaciones econoacutemicas prospectivas (lo que piensa sobre el futuro sus expectativas) Pues bien unos autores consideran que son las visiones retrospectivas las maacutes determinantes (Key 1966 Key y Fiorina 1981) pero otros estudios concluyen que tanto en Estados Unidos como en el Reino Unido los juicios son maacutes prospectivos que retrospectivos (Marsh Ward y Sanders 1991 Sanders 1991 y 1993) Por uacuteltimo otra de las cuestiones interesantes es la de si los efectos de la situacioacuten econoacutemica pueden quedar neutralizados por los efectos de otras variables La identificacioacuten partidista como ya se apuntoacute arriba puede ser maacutes fuerte que la satisfaccioacuten econoacutemica (Citrin y Green 1986 438) No siempre se vota con el bolsillo se podriacutea decir Es interesante a este respecto estudios


como el de Fiorina (1981) y el de Kinder y Kiewiet (1981) que muestran que los ciudadanos que se identifican con el partido del Presidente pueden reducir su compromiso con el partido cuando la economiacutea se deteriora Los datos de la Tabla 2 y de la Tabla 3 referidos a la situacioacuten poliacutetica y econoacutemica corroboran lo hallado en estudios internacionales las percepciones de la situacioacuten del paiacutes afectan poderosamente la valoracioacuten de un Gobierno Los encuestados parecen confirmar que cuando la gente estaacute satisfecha con la situacioacuten econoacutemica y poliacutetica estaacute maacutes satisfecha con el Gobierno Todos los coeficientes de regresioacuten se mueven en la direccioacuten prevista (a mejor percepcioacuten mayor valoracioacuten) y ademaacutes hay un elevadiacutesimo iacutendice de significacioacuten estadiacutesticaEn segundo lugar para todos los casos la valoracioacuten de la situacioacuten poliacutetica es maacutes influyente (tiene coeficientes de regresioacuten estandardizados maacutes elevados) que la valoracioacuten de la situacioacuten econoacutemica Esto puede querer decir pero no deja de ser una suposicioacuten no justificable por los datos aquiacute obtenidos que mientras que los encuestados atribuyen al Gobierno y a su liacuteder la responsabilidad de la situacioacuten poliacutetica no asiacute ndasho al menos en menor medida y para bien y para malmdash la de la situacioacuten econoacutemica El resultado anterior se completa con el dato de que comparando con la valoracioacuten del liderazgo la situacioacuten econoacutemica es maacutes predictora que la poliacutetica en la valoracioacuten de la gestioacuten De lo que podriacutea desprenderse que el encuestado atribuye maacutes al liacuteder la situacioacuten poliacutetica que al Gobierno y al Gobierno maacutes la situacioacuten econoacutemica que al liacutederPor uacuteltimo y en cuanto al caraacutecter retrospectivoprospectivo La valoracioacuten de la situacioacuten actual es maacutes predictora que la retrospectiva y prospectiva para todos los casos (algo por otra parte loacutegico pues el iacutendice de respuesta de la valoracioacuten de la situacioacuten actual es mayor que el de la valoracioacuten de la situacioacuten retrospectiva y prospectiva) No es posible identificar aquiacute grandes tendencias salvo que ndashy es un resultado loacutegico con el mencionado en el paacuterrafo anteriormdash la situacioacuten econoacutemica retrospectiva y prospectiva en teacuterminos generales se hace maacutes predictora para la valoracioacuten de la gestioacuten que para la valoracioacuten del liderazgo Los datos de este epiacutegrafe han mostrado que la valoracioacuten de la situacioacuten poliacutetica es maacutes importante que la valoracioacuten de la situacioacuten econoacutemica Son datos por tanto que llevan a explorar lo que sucede con la valoracioacuten de otras poliacuteticas puacuteblicas distintas de la poliacutetica econoacutemica

62 La influencia de otras poliacuteticas puacuteblicasiquestInfluye la gestioacuten de poliacuteticas puacuteblicas en la valoracioacuten de la gestioacuten de Gobierno iquestCuaacutento y coacutemoResulta interesante tomar como orientacioacuten los resultados de algunos estudios precedentes referidos al caso espantildeol Fraile (2002) compara lo que denomina el ldquovoto econoacutemicordquo de las elecciones de 1996 con el ldquovoto econoacutemicordquo de las elecciones de 2000 y concluye que esta variable sirvioacute tanto para castigar a los socialistas despueacutes de una etapa de recesioacuten como para premiar al gobierno de los populares por una legislatura de prosperidad econoacutemica En resumen


afirma ndashy es un resultado que estaacute en liacutenea con lo afirmado en el epiacutegrafe anteriormdash la gestioacuten de la economiacutea ayuda a explicar tanto la derrota del PSOE como la victoria del PP Ademaacutes mientras que el castigo a los socialistas no soacutelo estuvo motivado por razones econoacutemicas (sino tambieacuten por la corrupcioacuten y el desgaste de los dirigentes socialistas) el premio al PP estuvo causado principalmente por la poliacutetica econoacutemica y por las expectativas optimistas generadas entre los electoresPero y es el punto que quiero destacar para lo que ocupa el presente epiacutegrafe esta autora considera que los modelos de voto econoacutemico han ignorado la importancia de las poliacuteticas puacuteblicas para la supervivencia de los gobiernos A juicio de Fraile (p 134) la ecuacioacuten de voto econoacutemico deberiacutea incluir las poliacuteticas sociales Pues eacutestas son tan importantes como las poliacuteticas econoacutemicasEl estudio llevado a cabo en Espantildea sobre la etapa socialista entre 1982 y 1996 (Saacutenchez-Cuenca y Barreiro 2000) muestra que los ciudadanos evaluacutean al gobierno por las poliacuteticas puacuteblicas dirimiendo incluso el grado de responsabilidad que eacuteste tiene en la poliacutetica concreta Asiacute los ciudadanos valoraron al gobierno socialista especialmente en funcioacuten de poliacuteticas cuyo objeto de aplicacioacuten quedaba constituido por la propia actividad del Estado (particularmente la educacioacuten y la justicia) Ademaacutes cuestiones que los autores identifican como menos controlables por el Gobierno las relacionadas con la seguridad (terrorismo y la seguridad ciudadana) influyen poco en la valoracioacuten de la gestioacuten En una posicioacuten intermedia se encuentran las poliacuteticas que afectan a los resultados econoacutemicos el Gobierno conserva aquiacute cierto margen de maniobra pues se interpreta que esos resultados vienen determinados por factores que escapan hasta cierto punto a la voluntad del Gobierno Por uacuteltimo en cuanto a la corrupcioacuten los datos muestran que los ciudadanos no permiten al gobierno el lujo de no reaccionar ante eacutesta los casos de corrupcioacuten influyeron notablemente en la reduccioacuten de la valoracioacuten de la gestioacuten del gobierno (p 61) iquestCuaacutento influye la valoracioacuten de otras poliacuteticas Para el presente trabajo conteacute con datos del estudio de enero de 2006 en el que ademaacutes de las variables que ya he recogido hasta aquiacute se pregunta al encuestado sobre la valoracioacuten de distintas poliacuteticas puacuteblicas Mi intereacutes radicaba fundamentalmente en comprobar si la valoracioacuten de estas poliacuteticas es influyente en la evaluacioacuten que los ciudadanos hacen de la institucioacuten tanto de su liacuteder como de su gestioacuten Y siguiendo los estudios precedentes quise observar si la influencia puede decir algo de la atribucioacuten de responsabilidades que el ciudadano realiza de la accioacuten puacuteblica Tomeacute como variable dependiente de una regresioacuten lineal la valoracioacuten que los ciudadanos hacen de la gestioacuten de Gobierno y como variables independientes la valoracioacuten que realizan de las distintas poliacuteticas puacuteblicasLos resultados que se recogen en la Tabla 4 permiten afirmar lo que expongo a continuacioacuten

Tabla 4 El peso de las poliacuteticas puacuteblicas en la valoracioacuten de la Gestioacuten de Gobierno

Coeficientes de regresioacuten


Resumen del modelo R2 aj 60 Sig 0000 Durbin-Watson 19

Economiacutea 07 ()Empleo 17 ()Vivienda 001Educacioacuten 1 ()Sanidad -01Poliacuteticas sociales 06 ()Medio ambiente -03Inmigracioacuten 007Seguridad ciudadana 006Estatutos de autonomiacutea 15 ()Terrorismo 19 ()Unioacuten Europea 07 ()Poliacutetica exterior 18 ()() plt010 () plt001 () plt0001

Los datos resumen del modelo muestran que eacuteste que goza de significacioacuten estadiacutestica (0000) y tiene un iacutendice DW que permite sumir el principio de independencia explica un importante (60) de la varianza de la valoracioacuten de la gestioacuten de Gobierno En cuanto a los coeficientes de regresioacuten se puede decir que en primer lugar efectivamente el peso de la poliacutetica econoacutemica es menor que el peso de otras poliacuteticas de bienestar como el empleo o algunas poliacuteticas sociales como la educacioacuten Ahora bien la explicacioacuten de este comportamiento maacutes que encontrarlo en la importancia que puedan tener las poliacuteticas sociales sobre las poliacuteticas econoacutemicas lo encuentro en la hipoacutetesis de la atribucioacuten de responsabilidades seguida por Saacutenchez-Cuenca y Barreiro si bien con algunos matices y excepcionesPues la Tabla 4 permite concluir en teacuterminos generales que las poliacuteticas que maacutes peso tienen en la valoracioacuten de la gestioacuten son aquellas cuyos resultados son maacutes atribuibles al Estado que a otro tipo de instancias Asiacute por ejemplo los estatutos de autonomiacuteas el terrorismo el empleo o la poliacutetica exterior todas ellas competencias del Gobierno central son las poliacuteticas que maacutes peso tienen en la valoracioacuten de la gestioacuten El presente trabajo confirma los resultados de Saacutenchez-Cuenca y Barreiro los ciudadanos evaluacutean al Gobierno por las poliacuteticas puacuteblicas dirimiendo incluso el grado de responsabilidad que eacuteste tiene en la poliacutetica concreta La justificacioacuten de algunos datos se puede encontrar aunque soacutelo en parte en la ldquoexplicacioacuten exonerativardquo que tambieacuten utilizan estos autores las cuestiones que identifican como menos controlables por el Gobierno las relacionadas con la seguridad influyen poco en la valoracioacuten de la gestioacuten Por uacuteltimo la posicioacuten intermedia que obtiene la poliacutetica econoacutemica puede explicarse siguiendo la explicacioacuten de estos autores el Gobierno conserva aquiacute cierto margen de maniobra pues se interpreta que esos resultados vienen determinados por factores que escapan hasta cierto punto a la voluntad del Gobierno Y puede ser el caso de los encuestados atribuyen la responsabilidad


de la poliacutetica de empleo al Gobierno maacutes que la responsabilidad de la poliacutetica econoacutemicaUna pregunta subsiguiente a estos resultados es la de si la identificacioacuten partidista puede estar neutralizando los efectos de la valoracioacuten de la gestioacuten de las distintas poliacuteticas puacuteblicas Es decir iquestno sucederaacute que la gente valora las poliacuteticas puacuteblicas seguacuten su identificacioacuten partidista valorando siempre bien si quien gestiona es de mi partido Para responder a esto lleveacute a cabo la comparacioacuten de medias de los encuestados que afirman tener intencioacuten de votar al partido en el Gobierno con las medias de los ciudadanos cuya intencioacuten de voto no estaacute con el partido del Gobierno Pues bien la comparacioacuten no permite afirmar que los que tienen intencioacuten de votar al partido en el Gobierno valoran mejor las distintas poliacuteticas que los que tienen intencioacuten de votar a un partido distinto del que estaacute en el Gobierno Curiosamente ademaacutes en la mayor parte de las poliacuteticas la valoracioacuten es superior entre aquellos ciudadanos que no tienen intencioacuten de votar al partido del Gobierno Estos datos en realidad es otra forma de mostrar que la evaluacioacuten de la institucioacuten no es ni soacutelo ni fundamentalmente una cuestioacuten partidista Y corrobora los resultados de estudios precedentes (Saacutenchez-Cuenca y Barreiro 2000)

7 LA INFLUENCIA DE LOS SUCESOSUna de las conclusiones que se deriva del rechazo del ciclo electoral es que lo que pasa importa No soacutelo en lo que se refiere a las poliacuteticas puacuteblicas sino a lo que sucede de manera inesperada involuntaria y fortuita (como un terremoto la enfermedad del liacuteder o una inundacioacuten) o a lo que sucede como consecuencia de la voluntad de alguien (padecer o protagonizar una invasioacuten recibir acusaciones de incurrir en conducta corrupta o padecer un atentado terrorista)Algunas consideraciones subrayan el intereacutes de lo que aquiacute se estaacute tratando Los sucesos propician que determinadas ideas latentes se hagan expliacutecitas Podriacuteamos decir que una institucioacuten y su liacuteder se dan a conocer con maacutes claridad cuando tienen que reaccionar ante algo que no teniacutean previsto Y por eso el modo en como se responde a un suceso habla ciertamente de la capacidad de gestioacuten de la institucioacuten y de la personalidad de su liacuteder (Cohen 2001) Ademaacutes determinados sucesos gozan de tal intensidad dramaacutetica que tienen garantizada la atencioacuten mediaacutetica por lo que la institucioacuten y su liacuteder saben que con motivo de lo inesperado para bien y para mal tendraacuten una gran visibilidad Por uacuteltimo en lo inesperado ve la oposicioacuten una oportunidad de retar la competencia de quien gobierna los eventos activan la reaccioacuten y respuesta de unos rivales que buscaraacuten siempre como minar la capacidad de gestionar la incidencia (Edelman 1964)La personificacioacuten de la institucioacuten adquiere en la gestioacuten de los sucesos especial relevancia Porque el liacuteder de una institucioacuten ndashmaacutes en el caso de la Presidencia de un paiacutes o de un Estado federado o de una Comunidad Autoacutenomamdash tiene una dimensioacuten simboacutelica como jefe de la nacioacuten (del Estado de la Comunidad Autoacutenoma o de la regioacuten) los sucesos tendraacuten efecto en su valoracioacuten sea o no el liacuteder parte implicada y responsable Por eso los liacutederes


de instituciones ejecutivas se juegan mucho en las acciones que adoptan para responder a lo que sucede La explicacioacuten que MacKuen (1983) elabora al respecto es interesante por cuanto viene a subrayar la necesidad de comunicar bien la gestioacuten de los sucesos Distingue la evaluacioacuten de las realidades que el ciudadano puede realizar por siacute mismo (la situacioacuten econoacutemica que experimenta en su bolsillo) de la evaluacioacuten de las realidades que el ciudadano soacutelo puede hacer a traveacutes de los medios de comunicacioacuten la gestioacuten de un terremoto inundacioacuten o incendio en una ciudad distinta de la propia Mientras que las primeras son evaluaciones maacutes racionales las segundas han de apoyarse en elementos simboacutelicos (lo que de ellas se representa en los medios) Por tanto concluye un Presidente no puede confiar en el eacutexito econoacutemico para lograr el apoyo poliacutetico Debe atender tambieacuten a la dimensioacuten simboacutelica Ademaacutes para considerar los efectos de los sucesos en la popularidad hay que tener en cuenta que los liacutederes suelen ser maacutes receptores pasivos de los efectos que instigadores o planificadores de los mismos Los sucesos vienen a mostrar de nuevo que el margen de maniobra que tiene una institucioacuten de ldquomanejarrdquo su popularidad estaacute lleno de riesgos incertidumbres y retosMedir los efectos que tiene lo que sucede en la evaluacioacuten de la institucioacuten tiene sus dificultades operativas Una de ellas es la de definir queacute se entiende por suceso y establecer distintas categoriacuteas para distintos sucesos Brace y Hinckley (1991) ofrecen una tipologiacutea de los sucesos en torno a dos ejes lo positivonegativo y lo voluntario (decidido por la institucioacuten) no voluntario (decidido por alguien ajeno a la institucioacuten) La investigacioacuten ha acuntildeado el teacutermino rally event para referirse a los sucesos que generan apoyo al Gobierno Un evento con rally effect es el que produce un incremento repentino e importante en la aprobacioacuten del Presidente (Hetherington y Nelson 2003 37) Mueller (1973) considera que hay un rally effect cuando estaacute asociado a un suceso que es internacional e implica directamente a los Estados Unidos y a su Presidente ademaacutes debe ser especiacutefico dramaacutetico y muy acotado Y entiende que son rally events las intervenciones militares como la de Korea de 1950 o la de la Bahiacutea de Cochinos en 1961 las grandes acciones diplomaacuteticas como el establecimiento de la doctrina Truman (1947) los desarrollos tecnoloacutegicos espectaculares como el del lanzamiento del Sputnik en 1957 las cumbres internacionales ameacuterico-sovieacuteticas como la de Postdam de 1945 o las operaciones militares de guerra Revisiones posteriores a la tipologiacutea de rally events de Mueller concluyen que las dos uacuteltimas categoriacuteas pueden tener efectos tanto positivos como negativos (Brody 1991)iquestQueacute efectos tienen los sucesos en la popularidadLa investigacioacuten muestra que los eventos poliacuteticos significativos tienen en la popularidad del ejecutivo un efecto inmediato en el corto plazo Asiacute sucesos como las dimisiones de ministros disturbios callejeros escaacutendalos acciones militares e incluso una enfermedad presidencial pueden modificar el nivel de apoyo a la institucioacuten (Brace y Hinckley 1991 Chanley y otros 2000 Nicholson y otros 2002 706)


Los eventos pueden ldquofuncionarrdquo como estimulantes del apoyo del puacuteblico generando determinados siacutembolos entre los que puede estar incluido el liacuteder Un caso de este tipo es de la fuerza simboacutelica y unificadora que adquirioacute el alcalde de Nueva York en el 11-S Pero los eventos funcionan tambieacuten en sentido contrario es decir como detractores del apoyo cuando sacan a la luz el conflicto y la divisioacuten que hay en el paiacutes Casos de este tipo son el 11M en Espantildea o la respuesta a la cataacutestrofe del Prestige o a los incendios de Guadalajara o de GaliciaiquestQueacute ha sucedido al respecto en Espantildea Estudios precedentes se refieren fundamentalmente a la influencia de los casos de corrupcioacuten en el uacuteltimo Gobierno de Felipe Gonzaacutelez Los estudios afirman que los datos muestran que los ciudadanos no permiten al Gobierno el lujo de no reaccionar ante la corrupcioacuten los casos de corrupcioacuten influyeron notablemente en la reduccioacuten de la valoracioacuten de la gestioacuten de Gobierno (Saacutenchez-Cuenca y Barreiro 2000 61)iquestCoacutemo influye la valoracioacuten de la gestioacuten de sucesos en la valoracioacuten del liacuteder y de la gestioacuten de GobiernoPara analizar esta cuestioacuten tomeacute los estudios del Centro de Investigaciones Socioloacutegicas que pregunta al encuestado la valoracioacuten de la gestioacuten de algunos sucesos especiacuteficos Como necesitaba que en el mismo estudio se incluyeran tambieacuten las variables que aquiacute estoy analizando (liderazgo y gestioacuten de Gobierno) la disponibilidad de datos se redujo Considero auacuten asiacute que es suficiente para poder analizar lo que era objeto de mi intereacutes comparar el peso de la valoracioacuten de la gestioacuten de sucesos con el peso que tiene otro tipo de valoraciones por parte del encuestadoLos estudios disponibles para este anaacutelisis son los siguientes la valoracioacuten de la gestioacuten del caso Roldaacuten (estudio de marzo de 1995 ya utilizado en el presente trabajo) la valoracioacuten de la gestioacuten del caso Prestige (estudio de enero de 2003) y la valoracioacuten de la intervencioacuten en Irak (estudio de abril de 2003)Siguiendo la clasificacioacuten de eventos realizada por Brace y Hinckley (1991) el caso Roldaacuten constituiriacutea un suceso negativo no discrecional pues es un suceso que va en contra de la institucioacuten y no estaacute intencionado por eacutesta sino por otros quienes llevaron a cabo la investigacioacuten y acusacioacuten El Prestige seriacutea tambieacuten un suceso negativo no discrecional pues actuacutea en contra de la institucioacuten y no es intencionado por eacutesta sino que es resultado de las circunstancias (es una cataacutestrofe natural) Por uacuteltimo la guerra de Irak es un suceso negativo discrecional pues genera conflicto o desunioacuten y es resultado de una decisioacuten controvertida de la institucioacutenLos resultados se recogen en la Tabla 5 en la Tabla 6 y en la Tabla 174

4 Respecto a las cuestiones metodoloacutegicas mencionareacute que con el fin de controlar los problemas de multicolinealidad lleveacute a cabo correlaciones bivariadas y parciales entre la variable dependiente (gestioacuten de Gobierno) y las variables independientes (en este caso la valoracioacuten de la gestioacuten de cada uno de los sucesos) Los resultados de la correlacioacuten siempre inferiores a 07 me permitioacute asumir la ausencia de colinealidad entre las variables independientes y dependientes Ademaacutes como se sentildeala en las tablas el iacutendice Durbin Watson permite tambieacuten asumir que se cumple el principio de independencia necesario para poder llevar a cabo regresiones lineales


Los datos que a continuacioacuten se exponen permiten concluir que la valoracioacuten de la gestioacuten de los sucesos es predictora de la valoracioacuten de la gestioacuten En todos los casos los coeficientes de regresioacuten estandarizados son estadiacutesticamente significativos y se comportan en la direccioacuten esperada cuanto maacutes elevada es la valoracioacuten de la gestioacuten del suceso maacutes elevada es la valoracioacuten de la gestioacuten del gobierno y cuanto menor menorLa Tabla 5 permite afirmar que la valoracioacuten del caso Roldaacuten es una variable que tiene peso en la valoracioacuten de la gestioacuten de Gobierno El coeficiente estandarizado con maacutexima significacioacuten estadiacutestica es algo superior a la valoracioacuten de la gestioacuten econoacutemica (tanto actual como prospectiva) y es superior tambieacuten al peso de las variables sociodemograacuteficas

Tabla 5 Influencia de la valoracioacuten de la gestioacuten del caso Roldaacuten en la valoracioacuten de la gestioacuten de

GobiernoBaroacutemetro Marzo 1995

R2 Adj- 42 DW 187 Sig 0000Coeficientes estandarizados

Situacioacuten Econoacutemica 20Situacioacuten econoacutemica prospectiva 06Situacioacuten poliacutetica 37Edad 009Mujer 03Gestioacuten Roldaacuten 22

() plt010 () plt001 () plt0001

La Tabla 6 permite afirmar lo mismo para el caso Prestige De nuevo el coeficiente es superior al de todas las valoraciones econoacutemicas y aunque no supera la valoracioacuten de la situacioacuten poliacutetica siacute lo hace al coeficiente de la variable situacioacuten poliacutetica retrospectiva y prospectiva Por supuesto y siguiendo con lo expuesto hasta el momento este coeficiente es tambieacuten superior al de las variables sociodemograacuteficas que en este caso ademaacutes de tener coeficientes muy bajos apenas son significativos

Tabla 6 Influencia de la valoracioacuten de la gestioacuten del Prestige en la valoracioacuten de la gestioacuten de Gobierno

Baroacutemetro Enero 2003R2 Adj- 57 DW 193 Sig 0000

Coeficientes estandarizadosSituacioacuten econoacutemica 19Situacioacuten econoacutemica retrospectiva 01Situacioacuten econoacutemica prospectiva 06Situacioacuten poliacutetica 38Situacioacuten poliacutetica retrospectiva 03Situacioacuten poliacutetica prospectiva 02Edad -001Mujer 04Valoracioacuten gestioacuten Prestige 28

() plt010 () plt001 () plt0001

Por uacuteltimo con los datos que se recogen en la Tabla 7 concluyo algo similar si bien aquiacute deseo hacer alguacuten comentario comparativo con lo sucedido en otros


paiacuteses con variable similares La variable ldquovaloracioacuten de la gestioacuten de Irakrdquo es la que tiene el coeficiente maacutes elevado de todas las variables independientes de la regresioacuten estaacute por encima de las valoraciones de la situacioacuten econoacutemica y de la situacioacuten poliacutetica ya sea presente retrospectiva o prospectiva Por supuesto estaacute por encima de las variables sociodemograacuteficas Comparativamente el peso que la valoracioacuten del a gestioacuten de Irak tiene en la valoracioacuten de la gestioacuten de Gobierno estaacute por encima de lo que tiene la gestioacuten del caso Roldaacuten y de la gestioacuten del caso Prestige en las respectivas valoraciones de la gestioacuten de Gobierno (asiacute lo muestran los coeficientes no estandarizados que son los que permiten comparar resultados de muestras diferentes) Estos resultados confirman el caraacutecter contingente que tiene la evaluacioacuten de la institucioacuten presidencial estudios realizados al respecto muestran que determinados conflictos en determinados paiacuteses en determinados momentos y con determinados resultados puede incrementar la valoracioacuten de la Presidencia confirmando que las victorias generan apoyos y las derrotas lo contrario (Norpoth 1987 Krosnick y Brannon 1993 Edwards II y Sewnson 1997 Morgan y Anderson 1999 Gaines 2002) Pero distintos conflictos distintos efectos por ejemplo mientras que la guerra de Irak en 1991 incrementoacute la popularidad de George Bush (Krsnick y Brannon 1993) y la de las Malvinas la de Thatcher (Norpoth 1987) la de Korea y Vietnam mostraron que la guerra erosiona la popularidad maacutes que lo contrario (Mueller 1973 y Norpoth 1984) Los datos aquiacute recogidos respecto al caso espantildeol viene a dar maacutes contundencia a esta contingencia

Tabla 7 Influencia de la valoracioacuten de la gestioacuten de Irak en la valoracioacuten de la gestioacuten de Gobierno

Baroacutemetro Abril 2003R2 Adj- 59 DW 176 Sig 0000

Coeficientes estandarizadosSituacioacuten econoacutemica 15Situacioacuten econoacutemica retrospectiva 05Situacioacuten econoacutemica prospectiva 08Situacioacuten poliacutetica 31Situacioacuten poliacutetica retrospectiva 01Situacioacuten poliacutetica prospectiva -007Edad 04Mujer 03Valoracioacuten gestioacuten Irak 39

() plt010 () plt001 () plt0001

Todo esto nos permite concluir que la valoracioacuten de la gestioacuten de los sucesos es predictora de la valoracioacuten de la gestioacuten Pero como ya he afirmado el efecto de la identificacioacuten partidista puede llegar a anular los efectos que tiene en la popularidad los sucesos y los eventos De manera que quien es del partido del Presidente le valoraraacute positivamente independientemente de que se produzcan sucesos negativos (Ostrom y Simon 1987 1101)Para comprobar cuaacutel era la situacioacuten al respecto para cada uno de los tres sucesos aquiacute analizados se llevaron a cabo modelos de regresioacuten controlando para aquellos que se identifican con el partido en el gobierno es decir con


aquellos que afirman tener intencioacuten de votar al partido en el gobierno si las elecciones fueran al diacutea siguienteLos resultados son realmente interesantes Atendiendo a los coeficientes de regresioacuten no estandarizados (aquiacute de nuevo se estaacuten comparando muestras diferentes) los datos no arrojan grandes diferencias entre aquellos que tienen intencioacuten de votar al Gobierno y aquellos que no Es decir si bien hay algo de diferencia eacutesta es pequentildea parece que la valoracioacuten del suceso se hace independientemente de cuaacutel sea la identificacioacuten partidista De manera que al margen de sus intenciones de voto la gente reconoce una buena o mala gestioacuten del suceso Es decir la orientacioacuten partidista no determina completamente las percepciones de los ciudadanos sobre la gestioacuten de los sucesos imprevistos

8 LA MEDIACIOacuteN DE LOS MEDIOS EN LA EVALUACIOacuteN DE LA INSTITUCIOacuteNiquestCoacutemo influyen los medios en la evaluacioacuten que las personas hacemos de las instituciones puacuteblicas La teoriacutea del priming o ldquopreparacioacutenrdquo propuesta por Shanto Iyengar y Donald Kinder hace referencia a los factores que influyen en las valoraciones que la gente hace de los personajes puacuteblicos Apoyan la hipoacutetesis en la limitada capacidad que tiene la persona de almacenar y procesar informacioacuten en la mente De tal manera que cuando a una persona se le pide un juicio sobre por ejemplo el Presidente de su paiacutes como no puede realizar un anaacutelisis completo y exhaustivo de todo lo que sabe de eacuteste recurre a la informacioacuten que tiene maacutes a mano en su memoria Y la informacioacuten maacutes a mano afirman estos investigadores es la que ha recibido a traveacutes de los medios de comunicacioacuten Desde estos postulados se concluye que los medios asientan la agenda de temas con los que los ciudadanos juzgaraacuten a los personajes puacuteblicos Asiacute por ejemplo si los medios estaacuten dando prioridad de cobertura a la situacioacuten de la Seguridad Social cuando a la gente se le pida una valoracioacuten de la gestioacuten poliacutetica del Presidente del gobierno tenderaacute a emitir su juicio seguacuten lo que el Presidente haya hecho en poliacutetica sanitaria quedando al margen otro tipo de poliacuteticas (Iyengar y Kinder 1987 Krosnick y Kinder 1990 Canel 2006)El ldquopriming por tanto se refiere al poder que tienen los medios de hacer que la marcha de determinados temas sucesos o problemas constituyan el criterio por el que las personas evaluacutean a los poliacuteticos (Ansolabehere Behr e Iyengar 1993 176) Y afirmar que hay un efecto de priming implica considerar que los medios logran desplazar la atencioacuten hacia un problema haciendo de eacuteste el principal elemento de juicio de la gestioacuten del Gobierno (Miller y Krosnick 2000 301)Hay estudios de priming que pone en conexioacuten la cobertura mediaacutetica con la percepcioacuten puacuteblica de la misma Pero para el presente anaacutelisis seguireacute los estudios de priming que toma como anaacutelisis la influencia que las actitudes individuales sobre el consumo de medios (la confianza la frecuencia de consumo la atencioacuten etc) en la evaluacioacuten de la institucioacuten (por ejemplo Krosnick y Brannon 1993)


La confianza de los ciudadanos en los medios es una variable que hay que tener en cuenta para considerar los efectos de priming Los medios maacutes fiables son los maacutes eficaces en ldquoprepararrdquo el juicio de los espectadores (Miller y Krosnick 2000 y Druckman 2001) Pero la investigacioacuten tambieacuten muestra que los medios pueden ser los causantes de una reduccioacuten de la confianza en las instituciones puacuteblicas (Nye y Zelikow 1997) Referidos a los efectos especiacuteficos de la informacioacuten econoacutemica algunos trabajos han mostrado que la divulgacioacuten que sobre eacutesta realiza los medios es maacutes influyente que la opinioacuten de los expertos (Nadeau y Niemi 1999) Krosnick y Brannon (1993) refieren dos perspectivas para interpretar los datos sobre la influencia de los medios en la evaluacioacuten presidencial Por una parte la que denominan la perspectiva de la ldquotradicional dosis de resistenciardquo que afirma que cuanto maacutes consumo hay de informacioacuten maacutes vulnerable se es al efecto de los medios pero cuanto mayor conocimiento se tiene de la cuestioacuten sobre la que uno se informa maacutes resistente se es al efecto eacutestos En segundo lugar la perspectiva ldquopsicoloacutegica contemporaacuteneardquo que afirma que atendiendo a la exposicioacuten e intereacutes por la informacioacuten de los medios los efectos de priming de una noticia importante seraacuten mayores entre individuos con poca exposicioacuten y menor intereacutesLos medios son especialmente relevantes en la influencia de los sucesos inesperados Algunos trabajos han mostrado que la interaccioacuten entre los sucesos y la cobertura favorable de los medios es lo que maacutes explica el cambio de las preferencias poliacuteticas de los votantes (Shaw 1999)Pero los efectos de los medios son limitados es decir estaacuten sujetos a otra serie de variables Por una parte se pone aquiacute de manifiesto de nuevo los efectos de la identificacioacuten partidista la identificacioacuten partidista hace que la atribucioacuten de responsabilidades se haga en siacute misma de una determinada manera Estudios recientes (McGraw y Ling 2003) muestran que tambieacuten limitan o condicionan los efectos del priming la pertenencia a grupos sociales Estudios precedentes referidos al caso espantildeol y respecto a la institucioacuten parlamentaria muestran que los mayores iacutendices de consumo de medios (tanto de prensa como de radio y de televisioacuten) van asociados a un mayor nivel de confianza ciudadana en el Congreso a un mayor intereacutes de los ciudadanos en lo puacuteblico (en la poliacutetica en las actividades del Congreso y en las actividades del Gobierno) asiacute como a una mayor participacioacuten de los ciudadanos en las elecciones a sus representantes en el Congreso (Canel y otros 2006) No hay estudios al respecto sobre el consumo de medios y la evaluacioacuten ciudadana de la Presidencia del GobiernoEn el presente trabajo comenceacute realizando regresiones lineales tomando como variable dependiente el liderazgo y la gestioacuten de Gobierno y como variables independientes ademaacutes de las tratadas hasta ahora las que tienen que ver con la frecuencia del consumo de medios de comunicacioacuten Lo hice para los estudios del Centro de Investigaciones Socioloacutegicas de abril de 1999 octubre de 2003 y enero de 2006 que incluyen preguntas sobre el consumo de medios frecuencia atencioacuten confianza y preferencias Los resultados obtenidos en estas primeras regresiones fueron algo desorientadores para todos los antildeos y en general para todos los medios no se arrojaron resultados especialmente importantes Es decir parece que los


medios apenas juegan efecto en la evaluacioacuten de la institucioacuten Presidencia de Gobierno A esta afirmacioacuten general hay que hacer las siguientes matizaciones

- La prensa es de los tres el medio maacutes influyente aunque bajos (-05 y 04) y como se ve en un caso positivo y en otro negativo obtiene coeficientes estadiacutesticamente significativos tanto en octubre de 2003 como en enero de 2006

- La prensa es influyente en cuanto a la valoracioacuten de la gestioacuten no en cuanto a la valoracioacuten del liderazgo (los coeficientes son significativos soacutelo cuando se regresiona sobre la valoracioacuten de la gestioacuten) Resulta faacutecil encontrar una explicacioacuten plausible la informacioacuten que se consume en la prensa tiene maacutes que ver con la gestioacuten de Gobierno que con las caracteriacutesticas personales del liacuteder

- Hay dos casos en los que la televisioacuten resulta determinante y merecen comentario la variable que mide la confianza en la televisioacuten De manera que cuando el encuestado manifiesta tener confianza en las noticias que da la televisioacuten se incrementa la valoracioacuten de liderazgo (en un 05 con significacioacuten estadiacutestica () y la valoracioacuten de la gestioacuten (en un importante 18 con significacioacuten estadiacutestica () Se confirma aquiacute aunque soacutelo sea para la televisioacuten lo apuntado por Miller y Krosnick (2000) y por Druckman (2001) los medios maacutes fiables son los maacutes eficaces en ldquoprepararrdquo el juicio de los espectadores

- Un uacuteltimo dato merece tambieacuten comentario En enero de 2006 se incluye la variable frecuencia de uso de Internet Los resultados son francamente interesantes a mayor uso de Internet maacutes criacutetica es la valoracioacuten tanto de la gestioacuten de Gobierno como del liderazgo de su Presidente y con un importante -11 () y un maacutes bajo -07 () Esto apunta la existencia de movimientos de opinioacuten a traveacutes de la red que como han mostrado recientes estudios apuntan la existencia de nuevas viacuteas para el desarrollo un ldquomarketing viralrdquo (Zamora 2006)

La uacuteltima cuestioacuten que me planteeacute en relacioacuten con los medios es la de si el mayor o menor consumo puede llevar consigo un mayor o menor conocimiento de la institucioacuten Para eso lleveacute a cabo correlaciones de los iacutendices de consumo de medios con el iacutendice de respuesta a las variables de valoracioacuten situacional (tanto de la situacioacuten poliacutetica como de la situacioacuten econoacutemica) asiacute como de la valoracioacuten del liderazgo y de la gestioacuten Pues bien hay que decir que para todos los casos (prensa radio y televisioacuten) se dan correlaciones positivas y significativas que sentildealan que a un mayor consumo de medios hay un mayor iacutendice de valoracioacuten (es decir entre los que maacutes informados estaacuten hay menos encuestados que optan por la opcioacuten NSNC) De lo que se puede concluir que aquellos que consumen maacutes informacioacuten estaacuten maacutes habilitados para formular sus juicios sobre la institucioacutenNo resulta faacutecil apuntar una explicacioacuten que auacutene todos estos datos sobre la influencia de los medios de comunicacioacuten en la evaluacioacuten de la Presidencia de Gobierno Creo que las sugerencias de los autores arriba recogidas orientan algo la interpretacioacuten pero sobre todo plantean preguntas a la investigacioacuten en este campo Por un lado ese primer resultado general de que el mayor consumo de medios no tiene consecuencias de gran relevancia en la evaluacioacuten positiva o negativa de la Presidencia no significa en realidad una


ausencia de efecto de medios Porque cabriacutea apuntar todo depende de cuaacutel sea el medio que se consuma Puede estar sucediendo que dos ciudadanos esteacuten consumido con elevada frecuencia la informacioacuten de medios distintos uno afiacuten al Gobierno y otro criacutetico con eacuteste y como resultado uno le valora bien y otro le valora mal Es decir con un mismo nivel de frecuencia de consumo hay una valoracioacuten distinta de la institucioacuten y por tanto habiendo como hay un efecto los coeficientes de regresioacuten no mostraraacuten peso alguno No es posible realizar al respecto anaacutelisis por cabeceras pues el Centro de Investigaciones Socioloacutegicas nunca pregunta por el tiacutetulo de medio que el encuestado consume Pero si esto fuera asiacute estariacutea sucediendo algo de lo que sugieren Krosnick y Brannon (1993) a mayor consumo maacutes vulnerable se es al efecto de priming o preparacioacuten del juicio de los medios Una pequentildea y muy parcial constatacioacuten la encontreacute utilizando la variable que mide la pluralidad de medios que el ciudadano consume El resultado arrojado es que a menor pluralidad (y cuanto maacutes concentrado estaacute el ciudadano en una cadena o en un diario) mayor y maacutes significativo es el coeficiente de regresioacuten es decir maacutes clara es la influencia que tiene el consumo de medios en la evaluacioacuten presidencial Lo que hace esta pequentildea constatacioacuten es apuntar el intereacutes de llevar a cabo investigaciones que permitan explorar esto en maacutes detalle9 CONCLUSIONESTanto la exploracioacuten mediante estudios agregados como la observacioacuten de varios estudios individuales del tercer antildeo de las dos uacuteltimas legislaturas de Felipe Gonzaacutelez las dos de Joseacute Mariacutea Aznar y lo transcurrido de la legislatura de Joseacute Luis Rodriacuteguez Zapatero permiten concluir que en la evaluacioacuten de la institucioacuten Presidencia de Gobierno los espantildeoles no soacutelo se guiacutean por criterios partidistas e ideoloacutegicos sino que les pesa tambieacuten criterios de valoracioacuten externa sobre lo que sucede Asiacute lo muestran por una parte los indicadores econoacutemicos de estudios agregados (cuanto maacutes elevado es el desempleo maacutes baja es la evaluacioacuten de la Presidencia de Gobierno) como la presencia de sucesos especiacuteficos (tales como casos de corrupcioacuten cataacutestrofes naturales o peacuterdidas de elecciones paralelas) Son indicadores y sucesos que actuacutean haciendo que se evaluacutee mejor o peor al Gobierno Asiacute lo muestran tambieacuten las variables situacionales de los estudios individuales ademaacutes de las variables ideoloacutegicas (como la escala o la intencioacuten de voto) en la evaluacioacuten que los espantildeoles realizan de la Presidencia de Gobierno tambieacuten pesa la percepcioacuten que tienen sobre la situacioacuten poliacutetica y econoacutemica asiacute como la valoracioacuten que se hace de la gestioacuten de las poliacuteticas puacuteblicas Se corrobora asiacute lo hallado para otros paiacuteses las condiciones econoacutemicas y las percepciones sobre las mismas afectan de manera poderosa la valoracioacuten de un Gobierno Cuando la gente estaacute satisfecha con la situacioacuten econoacutemica y poliacutetica estaacute maacutes satisfecha con esta institucioacutenEsta evaluacioacuten no es tan partidista como cabriacutea esperar la observacioacuten que ha sido posible en enero de 2006 muestra que votantes ajenos al Partido Socialista reconocen buena gestioacuten de algunas poliacuteticas puacuteblicas del Gobierno socialista y que votantes socialistas reconocen mala gestioacuten de algunas poliacuteticas puacuteblicas de su Gobierno Los datos muestran tambieacuten que en la evaluacioacuten que los espantildeoles realizan del Gobierno distinguen cuaacutendo las


poliacuteticas son de competencia estatal y cuando no Es decir la evaluacioacuten de los ciudadanos refleja una atribucioacuten de responsabilidades con caraacutecter exonerativo en teacuterminos generales se exculpa al Gobierno de aquello que no es de su competencia o de lo que depende de circunstancias externas y ajenas a su control Con otras palabras las poliacuteticas de competencia estatal son las que maacutes peso tienen en la valoracioacuten de la gestioacuten Estos datos corroboran resultados similares a los hallados en estudios de eacutepocas precedentes para las poliacuteticas puacuteblicasSe ha mostrado tambieacuten que las variables que miden la gestioacuten de sucesos especiacuteficos (como Roldaacuten Prestige e Irak) tienen un importante peso en la evaluacioacuten de la Presidencia y que esta evaluacioacuten se hace con caraacutecter algo independiente de la identificacioacuten partidista maacutes concretamente hay votantes socialistas que calificaron negativamente la gestioacuten de su Gobierno en el caso Roldaacuten votantes socialistas que valoraron positivamente la gestioacuten de un Gobierno popular en el caso Prestige y votantes populares que valoraron negativamente la gestioacuten de su Gobierno en el caso Prestige y en la guerra de IrakLo apuntado por las variables actitudinales merece desarrollos ulteriores En lo que se refiere al intereacutes por la informacioacuten y al consumo de medios los datos pueden estar escondiendo algo Revelan que los medios ofrecen informacioacuten que estaacute permitiendo a los ciudadanos formular maacutes sus juicios sobre el Gobierno Pero pueden estar teniendo el efecto de ldquodistribuirrdquo los juicios hacia unas determinadas (y extremas) posicionesNo es posible concluir en una tendencia o evolucioacuten entre 1992 y 2006 Maacutes bien cada caso ndashcada antildeomdash se comporta de manera diferente La popularidad es multicausal son muchas y muy diversas circunstancias las que pueden hacer que una actuacioacuten sea positiva en un caso y negativa en otro Se confirma asiacute lo apuntado por Garnett con su modelo de contingencia estrateacutegica no existe una uacutenica o mejor manera de transmitir para todas las situaciones de Gobierno La imagen puacuteblica de la Presidencia de Gobierno es contingente Y por tanto la planificacioacuten estrateacutegica ha de realizarse atendiendo a la interaccioacuten en cada caso con los puacuteblicosPor uacuteltimo los datos muestran que no es lo mismo valorar al liacuteder que valorar la gestioacuten de la institucioacuten que lidera la valoracioacuten de la gestioacuten es menos partidista o ideoloacutegica y maacutes situacional que la valoracioacuten del liacuteder Pero tanto la valoracioacuten del liacuteder como la valoracioacuten de la gestioacuten tienen importancia en lograr un ldquointercambiordquo del puacuteblico es decir en mover al ciudadano para que quiera repetir Gobierno en la siguiente Legislatura Por tanto como afirma Rose (1991) ldquoel Presidente que quiera ser popular ha de ganarse la popularidad mediante la gestioacuten y el ejercicio del mandatordquo (p 286)Los resultados entonces apuntan que el liderazgo de la institucioacuten Presidencia de Gobierno no depende soacutelo de las caracteriacutesticas del liacuteder sino tambieacuten del comportamiento de otras personas Apuntan el liderazgo institucional de las instituciones puacuteblicas es decir la necesidad de asentar el liacuteder poliacutetico sobre el liderazgo de la institucioacuten puacuteblica a la que representa algo de especial intereacutes si se tiene en cuenta que a comienzos del siglo XXI la excesiva personalizacioacuten de la poliacutetica se ha visto retada por la fragmentacioacuten de los puacuteblicos (Canel 2006) Se hace por tanto preciso revisar el concepto de


liderazgo recuperando aquellas aportaciones que en su comienzo hicieran las teoriacuteas de los rasgos asiacute como atender hacia las organizaciones como sujetos de liderazgoEn el marco de los debates maacutes actuales sobre la imagen puacuteblica de la Presidencia de Gobierno todas estas constataciones van en contra de la teoriacutea del ciclo electoral o no la corrobora totalmente si bien hay unas tendencias baacutesicas hay elementos situacionales y contextuales que pueden hacer que un votante no valore bien a su Presidente y a su Gobierno aunque se acerquen las elecciones o que un votante ajeno los valore bien tambieacuten cuando se acercan las elecciones El ciclo electoral por tanto no es tan autoacutenomo e independiente de lo que sucede como sugieren los postulantes de la llamada ldquoteoriacutea del ciclo electoralrdquo Al ciudadano le importa lo que pasa tanto lo que pasa en las poliacuteticas puacuteblicas como en forma de sucesos imprevistos Le importa tanto que eso le influye en la evaluacioacuten del GobiernoInterpretando lo constatado en teacuterminos de caracteriacutesticas del puacuteblico evaluador estos resultados permiten decir que si bien hay una cierta base de prejuicio ideoloacutegico y desinformado en las valoraciones que la gente hace sobre los poliacuteticos y la poliacutetica se puede decir tambieacuten que el prestigio de una institucioacuten es una mezcla de informacioacuten y experiencia real de percepcioacuten de lo realizado y de atribucioacuten de la responsabilidad Las valoraciones pueden por tanto ser algo inerciales pero a la vez tienen alzas y bajas son prejuiciados pero a la vez vulnerables a las condiciones sociales poliacuteticas y econoacutemicas del momento sobre las que el ciudadano consume informacioacuten Estas constataciones tiene importantes implicaciones para la comunicacioacuten de la Presidencia En parte porque arrojan escepticismo sobre la llamada ldquoteoriacutea de la Presidencia Puacuteblicardquo estos datos significan que la Presidencia de Gobierno no puede controlar tan faacutecilmente su imagen puacuteblica Confirma lo apuntado por Brace y Hinckley los presidentes maacutes que provocadores o instigadores de los sucesos son receptores de los mismos (1991 999) Hay cataacutestrofes naturales escaacutendalos acciones de poliacutetica internacional vaivenes de la economiacutea etc que estaacuten fuera del control presidencial Y no le es tan faacutecil a la Presidencia manejar las expectativas para lograr al final el intercambio (el voto) del ciudadano La contingencia de la imagen puacuteblica de la Presidencia de Gobierno apunta que la planificacioacuten estrateacutegica ha de realizarse atendiendo a la interaccioacuten en cada caso con los puacuteblicos Bien es verdad que la evaluacioacuten puede utilizarse tanto como herramienta para manipular como para incrementar la receptividad de la institucioacuten Pero los datos muestran que a la institucioacuten le es difiacutecil controlar las expectativas y maacutes le compensa utilizar la evaluacioacuten para construir relaciones con los puacuteblicos En definitiva la Presidencia de Gobierno ha de gestionar la comunicacioacuten del ldquoquieacuten esrdquo como del ldquoqueacute hacerdquo No soacutelo el liacuteder sino de todo el equipo Ha de emplearse tambieacuten en la comunicacioacuten de lo que sucede de los imprevistos Y no soacutelo de lo que pasa sino tambieacuten de lo que se percibe sobre lo que pasa En definitiva ha de ser capaz con su comunicacioacuten de construir la imagen puacuteblica sobre relaciones de ndashsiguiendo los conceptos de evaluacioacuten que tomamos de partidamdash confianza control mutuo satisfaccioacuten compromiso intercambio y ldquocomunalidadrdquo


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espantildeoles (1992-2006)1

Mariacutea Joseacute Canel Crespo

Universidad Complutense

mjcanelccinfucmes

En la comunicacioacuten de organizaciones una de las cuestiones objeto de debate tanto entre acadeacutemicos como entre profesionales es la de cuaacutel es la mejor manera de conocer queacute percepciones tienen los puacuteblicos sobre lo que una organizacioacuten es y hace El presente trabajo analiza la imagen puacuteblica que los espantildeoles tienen de la Presidencia del Gobierno central tomando como objeto de anaacutelisis las evaluaciones que realizan de los distintos aspectos de la institucioacuten la gestioacuten de Gobierno y la popularidad de su PresidenteLa investigacioacuten sigue la praacutectica convencional de los estudios de evaluacioacuten de presidencias de Gobierno (por citar soacutelo algunos Brace y Hinckley 1991 y 1992 Edwards III 1973 y 1983 Edwards III y Swenson 1997 Ostrom y Simon 1985 1988 1989 y 1997 Hetherington 1998 Hibbs Douglas y Fassbender Heino 1981 Saacutenchez-Cuenca y Barreiro 2000 Jacobs y Burns 2004 Newman 2002 2003 y 2004 Nicholson y otros 2002 Canes-Wrone 2004 y 2006) que toman los datos de los centros nacionales de investigacioacuten socioloacutegica tales como el American National Election Study de Estados Unidos el IPSO-Mori del Reino Unido o el General Election Study de Beacutelgica Aquiacute se toman datos del Centro de Investigaciones Socioloacutegicas2 El presente trabajo constituye el primero en el que los datos del Centro de Investigaciones Socioloacutegicas sobre la Presidencia de Gobierno se analizan e interpretan desde un punto de vista comunicativo En el marco de las teoriacuteas de la ldquoPresidencia Puacuteblicardquo y del ldquoCiclo electoralrdquo y partiendo de las propuestas de estudio de ldquoatribucioacuten de responsabilidadesrdquo asiacute como de preparacioacuten del juicio o priming este trabajo revisa y propone modelos de anaacutelisis de imaacutegenes puacuteblicas gubernamentales y ofrece una reflexioacuten sobre lo que significa la interaccioacuten entre esta institucioacuten y sus puacuteblicos

1 Quiero agradecer a Mario Garciacutea Gurrionero investigador del Departamento de Comunicacioacuten Audiovisual y Publicidad II la revisioacuten que ha realizado con gran competencia y precisioacuten de los anuarios lo que me ha permitido identificar los sucesos acaecidos en las eacutepocas objeto de este estudio2 Es eacutesta praacutectica convencional por varias razones En primer lugar porque el puacuteblico de la institucioacuten Presidencia de Gobierno es un puacuteblico extenso que necesita de procedimientos muestrales elaborados En segundo lugar porque estos centros nacionales realizan mediciones con regularidad arrojando una gran riqueza de series temporales que ndashcon algunos maticesmdash al guiarse por las mismas pautas permiten la elaboracioacuten de iacutendices crosstemporales Por uacuteltimo tomar los datos de centros de investigacioacuten ajenos al investigador anula toda duda o sospecha sobre el sesgo que pudiera tener la generacioacuten de datos




























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la imagen pública de la presidencia de gobierno. análisis ...20image...maría josé canel crespo....

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