la habana soporte nutricional a pacientes con cirrosis...

26
HOSPITAL UNIVERSITARIO COMANDANTE MANUEL FAJARDO LA HABANA Soporte nutricional a pacientes con cirrosis hepática Dr. Carlos Antonio Oliva Anaya Especialista de II Grado en Cirugía General Profesor Auxiliar de Cirugía. Master en Urgencias Médicas Diplomado en Nutrición Clínica y Terapia Intensiva Jefe del Grupo de Apoyo Nutricional (GAN) del Hospital INTRODUCCIÓN Antecedentes históricos: El primer caso relatado de cirrosis hepática fue el de J. Morgani en 1760 al efectuar la autopsia de un personaje de la sociedad veneciana. En 1819 Laenec describe la enfermedad de un soldado muerto de hemorragias, derrame pleural y ascitis como cirrosis, debido a las granulaciones amarillas que presentaba el hígado a las cuales les atribuyo equivocadamente una etiología tumoral. Bright en 1827 señala al alcoholismo como el responsable de una hepatopatía hidropígena y Ackerman y Kretz consideran en 1880 que la lesión comienza a nivel del hepatocito y que la repetición de procesos de regeneración y degeneración consigue alterar la estructura con proliferación además del tejido

Upload: hoangtruc

Post on 29-Sep-2018

218 views

Category:

Documents


0 download

TRANSCRIPT

Page 1: LA HABANA Soporte nutricional a pacientes con cirrosis ...files.sld.cu/cirured/files/2011/04/soprte-nutricional-en-ch.pdf · En la cirrosis el flujo normal de la sangre se disminuye,

HOSPITAL UNIVERSITARIO COMANDANTE MANUEL FAJARDO

LA HABANA

Soporte nutricional a pacientes con cirrosis hepática

Dr. Carlos Antonio Oliva Anaya

Especialista de II Grado en Cirugía General

Profesor Auxiliar de Cirugía. Master en Urgencias Médicas

Diplomado en Nutrición Clínica y Terapia Intensiva

Jefe del Grupo de Apoyo Nutricional (GAN) del Hospital

INTRODUCCIÓN

Antecedentes históricos: El primer caso relatado de cirrosis hepática fue el de J.

Morgani en 1760 al efectuar la autopsia de un personaje de la sociedad

veneciana. En 1819 Laenec describe la enfermedad de un soldado muerto de

hemorragias, derrame pleural y ascitis como cirrosis, debido a las granulaciones

amarillas que presentaba el hígado a las cuales les atribuyo equivocadamente una

etiología tumoral. Bright en 1827 señala al alcoholismo como el responsable de

una hepatopatía hidropígena y Ackerman y Kretz consideran en 1880 que la lesión

comienza a nivel del hepatocito y que la repetición de procesos de regeneración y

degeneración consigue alterar la estructura con proliferación además del tejido

Page 2: LA HABANA Soporte nutricional a pacientes con cirrosis ...files.sld.cu/cirured/files/2011/04/soprte-nutricional-en-ch.pdf · En la cirrosis el flujo normal de la sangre se disminuye,

conectivo. Con algunas variantes estos conceptos se han mantenido a pesar del

tiempo transcurrido.

La primera evidencia de que la nutrición adecuada podía mejorar los resultados en

pacientes con cirrosis se dio a mediados del siglo XX.

CIRROSIS HEPÁTICA

La cirrosis hepática constituye el estadio final y común de un número elevado de

hepatopatías crónicas de distintas etiologías. A pesar de esta diversidad original

se definen, en general, como una alteración difusa de la arquitectura del hígado

por fibrosis y nódulos de regeneración. Estos cambios condicionan una alteración

vascular interhepática y una reducción de la masa funcional, que llevan a la

hipertensión portal y la insuficiencia hepática; respetando ciertas particularidades

propias de cada hepatopatía es la cirrosis hepática, por si misma, la que marca de

forma predominante, las manifestaciones y descompensaciones clínicas, las

medidas terapéuticas y el pronóstico de éstos pacientes.

Las causas más comunes de cirrosis son el consumo abundante de alcohol y la

hepatitis C crónica. Entre otras causas de cirrosis están la hepatitis B, la hepatitis

D y la hepatitis autoinmune; enfermedades que dañan o destruyen las vías

biliares, enfermedades hereditarias, la enfermedad de hígado graso no alcohólica

y medicamentos, toxinas e infecciones.

Muchas personas con cirrosis no presentan síntomas en las primeras etapas de la

enfermedad, por tanto, el que la padece puede permanecer en ese estado durante

meses o años. En ocasiones su diagnóstico es casual cuando se examina al

paciente y se detecta una hepatomegalia. A medida que la enfermedad avanza,

los síntomas pueden incluir debilidad, fatiga, pérdida del apetito, náuseas, vómitos,

pérdida de peso, dolor abdominal, distensión del abdomen, picazón y vasos

sanguíneos en forma de araña cerca de la superficie de la piel.

Page 3: LA HABANA Soporte nutricional a pacientes con cirrosis ...files.sld.cu/cirured/files/2011/04/soprte-nutricional-en-ch.pdf · En la cirrosis el flujo normal de la sangre se disminuye,

El término cirrosis hepática compensada se aplica cuando la enfermedad no ha

desarrollado ninguna de sus complicaciones mayores.

A medida que la función hepática se deteriora, se puede presentar una o más

complicaciones. En algunas personas, las complicaciones pueden ser los primeros

signos de la enfermedad.

La cirrosis hepática puede presentar en su evolución graves complicaciones como

la aparición de ascitis, la hemorragia por varices esófago-gástricas, la ictericia, la

encefalopatía hepática y el carcinoma hepatocelular.

Cuando el daño hepático pasa a una etapa avanzada (cirrosis descompensada),

se acumula líquido en las piernas (edema), y en el abdomen (ascitis), signos

de insuficiencia hepática, Hipertensión Portal e hiperesplenismo.

En la cirrosis el flujo normal de la sangre se disminuye, causando presión en la

vena portal. Esto produce un bloqueo en el flujo normal de la sangre, lo que

ocasiona que el bazo se agrande. La sangre que sale de los intestinos trata de

buscar salida a través de la formación de nuevos vasos sanguíneos. Algunos de

estos vasos sanguíneos se agrandan (várices). Las várices pueden formarse en el

estómago y en el esófago a causa de la hipertensión portal. Las várices tienen

paredes muy frágiles y tienen una presión muy alta. Existe gran riesgo de que se

rompan y que ocasionen un problema serio de sangrado en la parte superior del

estómago o el esófago. Si esto ocurre, la vida de la persona corre peligro y hay

que tomar acción rápida para detener el sangrado ya que este por lo general

tiende a ser un sangrado masivo.

La esplenomegalia es habitualmente acentuada, con aumento uniforme de la

consistencia y del volumen del órgano. Se acompaña, a veces, de

hiperesplenismo secundario (anemia, leucopenia, trombocitopenia). El aumento

del tamaño del bazo está casi siempre presente en las etapas avanzadas de la

enfermedad.

Page 4: LA HABANA Soporte nutricional a pacientes con cirrosis ...files.sld.cu/cirured/files/2011/04/soprte-nutricional-en-ch.pdf · En la cirrosis el flujo normal de la sangre se disminuye,

El incremento de la presión del árbol portal produce incremento de la presión

hidrostática que, unida a una hipoalbuminemia (a causa de la insuficiencia

hepática) y a una vasodilatación esplácnica, produce la ascitis, que es un

trasudado que llena de líquido libre el abdomen y que por acción de un mal

manejo del sodio y de un hiperaldosteronismo secundario, incrementará su

volumen.

La ascitis se trata de un fluido acuoso que contiene proteínas y otras sustancias,

tales como glucosa, sodio y potasio. De este líquido se pueden coleccionar

muchos litros, hasta llegar a causar grandes distensiones abdominales, que, al dar

lugar a síntomas compresivos, obligan a la realización de paracentesis

evacuadoras que ocasionan pérdida de proteínas y electrolitos, a veces grave por

severa depleción de estos elementos.

Asimismo, pueden observarse venas dilatadas que surcan las regiones epigástrica

y periumbilical, que testimonian el esfuerzo que hace la circulación portal

bloqueada para hallar una salida a su cauce y telangiectasias aracnoideas, sobre

todo en la piel de la cara anterior del tórax.

Se presentan hemorroides hasta en el 50% de los sujetos con hipertensión portal

consecutiva a cirrosis hepática, ya que este es también un sitio donde la

circulación portal (vena porta, vena mesentérica inferior, venas hemorroidales) y

sistémica (venas hemorroidales, venas hipogástricas, vena cava inferior) tienen

comunicación.

La encefalopatía hepática parece depender de una intoxicación por amoníaco u

otro producto parecido del metabolismo del nitrógeno, al no pasar por el hígado

después de ser absorbido en el intestino, o por la incapacidad de aquél órgano

para transformarlo en urea. Los síntomas y signos de esta encefalopatía son

inespecíficos e incluyen toda la gama de alteraciones de la conciencia, por

ejemplo: euforia, desaseo, falta de concentración, insomnio, confusión, depresión,

desorientación, estupor, temblor intencional que provoca alteraciones

características en la escritura, inconciencia y convulsiones.

Page 5: LA HABANA Soporte nutricional a pacientes con cirrosis ...files.sld.cu/cirured/files/2011/04/soprte-nutricional-en-ch.pdf · En la cirrosis el flujo normal de la sangre se disminuye,

La ictericia se presenta cuando el hígado enfermo no elimina suficiente bilirrubina

de la sangre, lo que provoca una coloración amarillenta de la piel y mucosas y

oscurecimiento de la orina.

La cirrosis provoca resistencia a la insulina, una hormona producida por el

páncreas que le permite al cuerpo usar la glucosa como energía. Con la

resistencia a la insulina, los músculos y grasas del cuerpo así como las células del

hígado no usan la insulina adecuadamente. El páncreas intenta satisfacer la

demanda de insulina produciendo más, pero el exceso de glucosa se acumula en

el torrente sanguíneo y causa la diabetes tipo 2.

La cirrosis puede causar disfunción del sistema inmunitario, lo que provoca riesgo

de infección. La cirrosis también puede causar insuficiencia renal y pulmonar,

conocidas como síndrome hepatorrenal y síndrome hepatopulmonar.

El carcinoma hepatocelular es un tipo de cáncer de hígado que puede presentarse

en las personas con cirrosis, el cual tiene una tasa de mortalidad alta, pero hay

varias opciones de tratamiento disponibles.

La ascitis se presenta con una frecuencia del 70 al 80 % de los casos de

descompensación, la hemorragia digestiva alta, (melena, hematemesis) 45 %,

ictericia 44%, arañas 40 %, circulación colateral, eritema palmar, alteración de la

distribución del vello 25 %, ginecomastia 5% y la

hepatomegalia y la esplenomegalia son muy variables.

Para hacer un diagnóstico de cirrosis el médico se basa en los antecedentes,

síntomas, examen físico y pruebas de laboratorio e imagenológicos donde incluye

el ultrasonido de abdomen (prueba más específica, donde mostrará la

desestructuración del hígado), una tomografía axial computarizada, e imágenes de

resonancia magnética (IRM). Si existen varices esofágicas, se visualizarán por

medio de la endoscopia. Una biopsia de hígado confirmará el diagnóstico.

Page 6: LA HABANA Soporte nutricional a pacientes con cirrosis ...files.sld.cu/cirured/files/2011/04/soprte-nutricional-en-ch.pdf · En la cirrosis el flujo normal de la sangre se disminuye,

Es muy importante señalar que la cirrosis hepática en sus primeras etapas no se

puede diagnosticar por exámenes de laboratorio ni de imágenes ya estos solo

pueden detectar cambios inespecíficos, la única forma es una biopsia hepática,

debido a que por años pasa en un periodo silencioso, la cirrosis cuando el médico

especialista la detecta por lo general ya esta en etapas avanzadas, es cuando ya

hay signos específicos

Generalmente se considera que la cirrosis es irreversible pero la actuación sobre

su causa puede interrumpir su progresividad y mejorar el pronóstico, tanto en lo

que se refiere a la aparición de manifestaciones de descompensación como a la

supervivencia.

La rapidez en la evolución de la cirrosis depende de la etiología, del buen

seguimiento del tratamiento médico y de los hábitos y estilos de vida.

Al enfrentar a un paciente cirrótico, se debe definir si la enfermedad basal se

encuentra compensada o descompensada, para lo cual es necesario evaluar la

presencia de ictericia, ascitis, desnutrición, hepatocarcinoma o várices con riesgo

de sangrado. Los objetivos del tratamiento son detener el avance del tejido

cicatricial en el hígado y prevenir o tratar las complicaciones. El tratamiento

incluye evitar el alcohol y otras drogas, terapia nutricional y otras terapias que

tratan complicaciones específicas o causas de la enfermedad.

Se considera la posibilidad de un trasplante de hígado cuando no se pueden

controlar las complicaciones de la cirrosis mediante tratamiento.

El pronóstico de la enfermedad es excelente mientras ésta se mantiene

compensada.

Como la desnutrición es común en las personas con cirrosis en el curso de la

enfermedad donde puede conducirlos a problemas graves de salud, es necesaria

una mayor comprensión hacia los aspectos nutricionales para evitar grandes

Page 7: LA HABANA Soporte nutricional a pacientes con cirrosis ...files.sld.cu/cirured/files/2011/04/soprte-nutricional-en-ch.pdf · En la cirrosis el flujo normal de la sangre se disminuye,

complicaciones por lo que se hace importante mantenerlos con una dieta

saludable en todas las etapas de la enfermedad.

La prevalencia de desnutrición en los cirróticos es muy elevada debido a su estado

de hipercatabolia por un lado, y las dietas inadecuadas junto al aumento de los

requerimientos energético proteicos por otro, lo cual es muy difícil de reponer, por

lo que se hacen necesario de un soporte nutricional.

Las alteraciones metabólicas en la cirrosis se pueden resumir como sigue: los

pacientes tienen una disminuida utilización y capacidad de almacenamiento de

carbohidratos además de un aumento en el catabolismo de proteínas y grasas, lo

que conduce a un estado catabólico crónico cuyo resultado es la depleción de las

reservas proteicas y lipídicas. Estas anormalidades, combinadas con un descenso

en la ingesta y en la absorción de nutrientes, constituyen las bases de la

malnutrición calórico-proteica en los estadios avanzados de la enfermedad.

La malnutrición se correlaciona con la gravedad clínica de la enfermedad y cierra

un círculo vicioso del cual es muy difícil separar las consecuencias que tiene para

un individuo cirrótico las afectaciones derivadas de la desnutrición y aquellas que

tienen que ver con la progresión de la enfermedad.

La desnutrición afecta al 50,0% de los pacientes con Cirrosis Hepática (CH). Las

causas de desnutrición de estos pacientes son múltiples e incluyen:

1. Reducción de la ingestión calórica proteica secundaria a anorexia.

2. Trastornos en la digestión y absorción de los nutrientes de causa multifactorial.

3. Defectos en el metabolismo de aminoácidos y carbohidratos.

4. Gastritis por ingesta alcohólica.

5. Disminución del pool enterohepático de ácidos biliares.

6. Insuficiencia pancreática secundaria a pancreatitis crónica.

Page 8: LA HABANA Soporte nutricional a pacientes con cirrosis ...files.sld.cu/cirured/files/2011/04/soprte-nutricional-en-ch.pdf · En la cirrosis el flujo normal de la sangre se disminuye,

El trastorno nutricional según reflejan algunos autores, parece estar relacionado

más con el grado de daño hepático que con la causa de la enfermedad. Sin

embargo, el etilismo es capaz de producir desnutrición incluso antes que

aparezcan las manifestaciones de insuficiencia hepática crónica.

La cirrosis hepática se caracteriza por una reducción significativa de la masa

muscular y grasa con redistribución del agua corporal. Las pérdidas más

significativas de grasa ocurren en los estadios iniciales seguido de una pérdida

acelerada de la masa muscular en los estadios más avanzados de la enfermedad.

La disminución de los compartimentos grasos y musculares en estos pacientes

oscila entre el 30 al 40% respectivamente.

La alimentación del cirrótico varía según su enfermedad se encuentre

compensada o descompensada (encefalopatía hepática, sangramiento digestivo,

ascitis, síndrome hepatorrenal), la dieta en el primer caso, se establecerá

siguiendo las pautas de dieta saludable y en los descompensados se realizarán

patrones de reajuste según la respuesta del enfermo a la terapéutica.

La correcta nutrición de estos pacientes es tan importante como el tratamiento

farmacológico de la enfermedad y sus complicaciones, ya que ello nos permite

realizar acciones encaminadas a mejorar su calidad de vida, de ahí la importancia

de conocer exactamente todos los fenómenos metabólicos que ocurren en esta

enfermedad.

Las recomendaciones dietéticas van dirigidas a establecer una dieta, dependiendo

de qué tan bien esté funcionando su hígado y ayude a protegerlo del trabajo duro

y que pueda funcionar lo mejor posible, dado que la desnutrición puede conducir a

problemas graves.

Debido a que la enfermedad hepática puede afectar la absorción de alimentos y la

producción de proteínas y vitaminas, su dieta puede influenciar su peso, apetito y

las cantidades de vitaminas en su cuerpo.

Page 9: LA HABANA Soporte nutricional a pacientes con cirrosis ...files.sld.cu/cirured/files/2011/04/soprte-nutricional-en-ch.pdf · En la cirrosis el flujo normal de la sangre se disminuye,

Un pobre estado nutricional se asocia con un peor pronóstico de supervivencia, lo

que se ha demostrado en pacientes con cirrosis descompensada y en aquellos

subsidiarios de trasplante.

OBJETIVOS DEL TRATAMIENTO DIETÉTICO

• Controlar las manifestaciones clínicas de la enfermedad.

• Mantener un nivel de nutrición adecuado, impedir el catabolismo del tejido

proteico del organismo y controlar el edema y la ascitis.

• Prevenir o mejorar los síntomas de encefalopatía hepática en la medida de lo

posible.

VALORACIÓN NUTRICIONAL

La evaluación del estado nutricional de un paciente cirrótico siempre debe ser

realizada con el objetivo de identificar si existe desnutrición y encaminar las

medidas terapéuticas a prevenir las complicaciones que derivan de ello.

Evaluación nutricional del paciente cirrótico

La evaluación nutricional del paciente cirrótico, como en todo paciente desnutrido,

incluye:

1) los procederes clínicos (donde se recogen los datos del interrogatorio, examen

físico, historia psicosocial y encuestas dietéticas);

2) los procedes antropométricos, que incluyen la talla, el peso, la superficie

corporal, el índice de masa corporal (IMC), la circunferencia braquial, los pliegues

cutáneos, y las áreas muscular y grasa del brazo.

Page 10: LA HABANA Soporte nutricional a pacientes con cirrosis ...files.sld.cu/cirured/files/2011/04/soprte-nutricional-en-ch.pdf · En la cirrosis el flujo normal de la sangre se disminuye,

3) Las variables bioquímicas que se consideran son: hemograma, glucosa, urea,

creatinina, proteínas plasmáticas (albúmina, transferrina, prealbúmina), conteo

celular de linfocitos, hierro sérico, excreción urinaria de creatinina y nitrógeno

ureico, y el balance nitrogenado, entre otros.

En los pacientes cirróticos estas variables no son del todo fieles por las siguientes

razones:

1) La evaluación del peso es contradictoria por la presencia de ascitis y los efectos

de la terapéutica: restricción hídrica, uso de diuréticos y paracentesis, las medidas

del brazo pueden ser más sensibles en estos casos;

2) La medición de la glicemia a veces no refleja el estado real de la reserva

energética de hidratos de carbono del paciente;

3) La albúmina y el resto de las proteínas no constituyen buenos indicadores, ya

que la biosíntesis está disminuida y el catabolismo proteico acelerado;

4) La excreción urinaria de nitrógeno no refleja del todo el estado de

hipercatabolia, ya que el hígado es incapaz de desintocificar y metabolizar los

azoados séricos, que por lo regular se encuentran elevados.

Podemos decir que la evaluación nutricional del paciente se realizará basándose

en la anamnesia, la clínica y análisis subjetivo de su estado nutricional.

Con esta revisión pretendemos destacar la importancia del soporte nutricional en

estos pacientes afectados por la cirrosis hepática como parte del tratamiento

preventivo para impedir la aparición a los estadios avanzados de la enfermedad, y

también orientar como utilizar diversas estrategias en la terapéutica nutricional en

la cirrosis descompensada.

RECOMENDACIONES NUTRICIONALES A PACIENTES CON CIRROSIS

HEPÁTICA COMPENSADA:

Page 11: LA HABANA Soporte nutricional a pacientes con cirrosis ...files.sld.cu/cirured/files/2011/04/soprte-nutricional-en-ch.pdf · En la cirrosis el flujo normal de la sangre se disminuye,

El cirrótico compensado puede tener un aceptable estado nutricional, usualmente

con niveles séricos de albúmina mayores de 3,5 g/dl y bilirrubina total menor de

1,5 mg/dl, así como suficiente apetito, por lo que con frecuencia puede recibir una

dieta prácticamente normal aunque hay que ser prudentes en la administración de

ciertos y determinados alimentos, prohibición de bebidas alcohólicas, así como la

restricción del sodio para minimizar en lo posible la formación de ascitis o edemas.

Para pacientes con cirrosis moderada o compensada, una dieta bien balanceada

será suficiente. En general, estos pacientes deben ingerir una dieta que

proporcione cantidades suficientes de calorías, proteínas, vitaminas y minerales,

aunque con estricto control.

Exponemos a continuación algunas de las recomendaciones nutricionales a tener

en cuenta en los pacientes cirróticos compensados:

La nutrición enteral debe ser la primera vía de aporte de nutrientes a considerar y

debe mantenerse salvo que los pacientes presenten intolerancia a la vía oral,

desnutridos que deban ser sometidos a tratamiento quirúrgico, en las

insuficiencias hepáticas graves u otras complicaciones graves que se vea

dificultada la vía enteral.

La dieta del paciente se particularizará de acuerdo con su evaluación nutricional y

sus necesidades energéticas. El aporte de glúcidos, grasas y proteínas será

adecuado en una proporción aproximada de: Glúcidos: 60 - 65 %; Grasas: 20 - 25

%; Proteínas: 10 - 15 %.

Las bebidas alcohólicas están completamente prohibidas

Otros tóxicos no recomendados en el enfermo cirrótico son: el tabaco y el café.

Las comidas del paciente deben ser fraccionadas y frecuentes en el día, y se

deben evitar grandes ingestas de una sola vez, para solventar los frecuentes

Page 12: LA HABANA Soporte nutricional a pacientes con cirrosis ...files.sld.cu/cirured/files/2011/04/soprte-nutricional-en-ch.pdf · En la cirrosis el flujo normal de la sangre se disminuye,

problemas de náuseas y sensación de plenitud. Inclusión de una merienda en las

noches.

Las necesidades energéticas calculadas para cada individuo pueden oscilar entre

25-30, y hasta 40-50 kcal/Kg/día. La energía se aportará primariamente en forma

de carbohidratos y grasas.

La restricción proteica estará encaminada a evitar la progresión del estado

encefalopático, pero debe ser lo suficiente para evitar que se produzcan el déficit

nutrimental, las alteraciones de la inmunidad celular y las sepsis. Las proteínas se

darán a razón de 1-1,2 g/Kg/día. El paciente desnutrido, suele tolerar bien dietas

incluso con 1,2-1,5 g/kg/d de proteínas, (no llegando a sobrepasar los 70 g

diarios), sin presentar repercusión del tipo de encefalopatía y con mejora del

balance nitrogenado. Se puede iniciar con 0,7 g/kg/d, con aumentos progresivos.

Solo si coexiste un importante shunt porto-sistémico debe procederse con más

cautela.

Se priorizará el consumo de proteínas de origen vegetal, ricas en aminoácidos de

cadena ramificada, y pobres en aminoácidos aromáticos, amoníaco y

mercaptanos.

Se evitará la ingestión de carnes rojas y vísceras. Las carnes blancas se

administrarán con sumo cuidado.

Los alimentos muy asados, a la brasa o a la parrilla, generan una serie de toxinas

que el hígado debe eliminar. Un hígado enfermo es incapaz de eliminarlas y

empeora con la presencia de estas sustancias.

No debe comer mariscos crudos, los cuales pueden contener una bacteria que

causa infecciones graves.

Se aportará clara de huevo por su alto contenido en albúmina (en merengues,

cocida, o crudo).

Page 13: LA HABANA Soporte nutricional a pacientes con cirrosis ...files.sld.cu/cirured/files/2011/04/soprte-nutricional-en-ch.pdf · En la cirrosis el flujo normal de la sangre se disminuye,

Los pacientes con la retención de líquidos se recomiendan una dieta baja en sodio

(hiposódica). Se puede restringir la entrada de sodio al organismo evitando tales

productos de alimentación como sopas enlatadas y verduras, fiambres, productos

lácteos, y condimentos como la mayonesa y la cátsup. Un sustituto de la sal con

sabor agradable es el jugo de limón.

Se recomienda la Ingesta moderada de grasas. El enfermo de cirrosis tiene

muchas dificultades para digerir las grasas. El aporte de grasas saturadas será de

hasta un 40 %. El resto del aporte graso será a expensas de grasas mono y

polinsaturadas.

Es importante que las grasas a utilizar en las comidas no sean fritas o

recalentadas. Este tipo de grasas genera un tipo de toxinas que se llaman

acroleínas.

Se restringirá el consumo de la leche y los derivados.

Se aportará a libre demanda las leguminosas y los análogos lácteos y cárnicos

derivados de la soya.

No ingerir sustancias tóxicas de condimentos, fritos, con mucho colorantes y

alimentos enlatados.

Arroz, pastas, viandas, cereales, panes y galletas (se considerará el contenido en

sodio).

Se empleará la miel de abeja como edulcorante. Comer muchos alimentos ricos

en azúcares refinados conlleva el aumento de grasa y colesterol. Igualmente el

uso de edulcorantes artificiales perjudica al hígado enfermo.

Los alimentos vegetales, especialmente las frutas y la verdura, son los más

indicados para los enfermos del hígado.

Se ofrecerán frutas y vegetales. Son más fáciles de digerir que las carnes por lo

que no supone tanto esfuerzo para un hígado enfermo. Por otra parte son ricos en

Page 14: LA HABANA Soporte nutricional a pacientes con cirrosis ...files.sld.cu/cirured/files/2011/04/soprte-nutricional-en-ch.pdf · En la cirrosis el flujo normal de la sangre se disminuye,

vitaminas, minerales y antioxidantes, además contiene mucha fibra que favorece

la evacuación más rápida de las heces y la no absorción de las toxinas por el

intestino.

Las frutas contienen azúcares mucho más asimilables que los azúcares refinados.

Son más convenientes que las comidas azucaradas porque resultan más fáciles

de digerir y estabilizan mejor los niveles de azúcar en la sangre. Cunado se siente

la necesidad de comer algún dulce, es mejor tomar algo de fruta. Deben

consumirse maduras y frescas. No deben consumirse como postre, dificulta la

digestión.

El uso de jugos esta recomendado para los enfermos de cirrosis. Los jugos de

frutas presentan muchos antioxidantes que son capaces de ayudar al hígado a

neutralizar las toxinas. Se deben consumir frescos y lo antes posible. No es

conveniente tomar jugos de frutas después de las comidas. Debe hacerse una

hora antes o una hora después.

En la cirrosis hepática los niveles de vitaminas en el organismo se encuentran

disminuidas, tanto las liposolubles (A, D, E, K), como las hidrosolubles (complejo

B, ácido fólico, vitamina C, ácido pantoténico y biotina). Estas últimas muestran un

déficit mucho más marcado en los alcohólicos por los efectos que tiene el etanol

sobre las mismas. A todo lo anterior se le suma la disminución en la ingestión de

alimentos ricos en tales vitaminas. Por tanto es importante el aporte de

suplementos vitamínicos, en especial vitaminas del complejo B.

La deficiencia de zinc es común en estos pacientes, especialmente cuando se

asocia con malnutrición, debido a un descenso en la capacidad de

almacenamiento hepático. Debe considerarse su suplementación si los niveles

plasmáticos están bajos o en los casos con disgeusia o alteración de la visión.

La osteoporosis y osteomalacia se asocia al déficit de calcio y vitamina D; los

trastornos visuales por déficit de vitamina A y Zinc, entre otros.

Page 15: LA HABANA Soporte nutricional a pacientes con cirrosis ...files.sld.cu/cirured/files/2011/04/soprte-nutricional-en-ch.pdf · En la cirrosis el flujo normal de la sangre se disminuye,

Si anemia recordar que esta es de causa multifactorial: por déficit de hierro,

megaloblástica y asociada a hemólisis.

Alimentación en la cirrosis hepática descompensada:

Se define la cirrosis descompensada como aquella que puede presentar en su

evolución alguna o más de las graves complicaciones, como la aparición de

ascitis, ictericia, encefalopatía hepática, hemorragia por varices esófago-gástricas,

síndrome hepatorrenal o el carcinoma hepatocelular. La albúmina plasmática

usualmente es inferior a 3 g/dl y la bilirrubina total superior a 2-2,5 mg/dl.

El tratamiento nutricional reporta beneficios en los estadios avanzados de la

enfermedad. Los beneficios a corto plazo están en relación con la mejoría del

balance nitrogenado, el descenso en la estancia hospitalaria, y la mejoría de la

función hepática. También se ha encontrado beneficios a largo plazo como

disminución de la incidencia y severidad de la encefalopatía y mejoría del balance

nitrogenado. La suplementación oral con dietas líquidas es a menudo difícil debido

a la anorexia y otros síntomas gastrointestinales, aunque la nutrición oral

suplementaria ha demostrado ser beneficiosa en pacientes seleccionados.

Además, se ha visto en pacientes con cirrosis que la suplementación con nutrición

enteral (NE) puede mejorar el aporte proteico, descender la frecuencia de

hospitalización, mejorar el estado nutricional y la función inmune y, cuando el

paciente precisa hospitalización, en aquellos que no pueden cubrir sus

necesidades nutricionales en las primeras 48 h, la administración de NE ha

demostrado mejoría en la estancia y en la severidad de la enfermedad. La NE a

largo plazo no se ha estudiado con detalle en la cirrosis avanzada principalmente

porque la colocación de gastrostomías está normalmente contraindicada en

pacientes con ascitis.

En la cirrosis descompensada en cualquiera de sus formas, primero se deben

tomar las medidas emergentes para controlar la gravedad del enfermo y sostener

las funciones vitales (reanimación). En esta primera fase, las medidas a tomar

Page 16: LA HABANA Soporte nutricional a pacientes con cirrosis ...files.sld.cu/cirured/files/2011/04/soprte-nutricional-en-ch.pdf · En la cirrosis el flujo normal de la sangre se disminuye,

desde el punto de vista nutricional son pobres, y están encaminadas

principalmente a controlar la causa de la descompensación.

Una vez que el paciente rebasa esta etapa, se debe establecer un patrón de

reajuste donde primeramente se reconocerá el estado del enfermo. Se debe

monitorear estrechamente la terapia nutricional y ajustar secuencialmente la dieta,

según la respuesta del individuo.

Se le administrarán las kilocalorías suficientes, según su tolerancia, para

mantenerlo compensado, en forma productos enterales y parenterales.

Ascitis: El incremento de la presión del árbol portal produce incremento de la

presión hidrostática que, unida a una hipoalbuminemia (a causa de la insuficiencia

hepática) y a una vasodilatación esplácnica, produce la ascitis, que es un

trasudado que llena de líquido libre el abdomen y que por acción de un mal

manejo del sodio y de un hiperaldosteronismo secundario, incrementará su

volumen.

En este estado de descompensación del enfermo, el tratamiento dietético está

encaminado a restringir la sal (sodio). Mantener dieta hiposódica (50 – 60

mEq/día) y aportar, además, una dieta de acuerdo con las necesidades

energéticas del individuo, con énfasis en la administración de albúmina por vía

oral (ovo- y lactoalbúmina) y endovenosa si lo requiriera y según los criterios

establecidos. El aporte endovenoso de albúmina se podrá realizar cuando sea

necesario hacer paracentesis, y su infusión se calculará a razón de 6 a 8 g de

albúmina por cada litro de líquido ascítico extraído. La mitad de la dosis durante

las 2 primeras horas después de la paracentesis y la otra mitad 6 horas más tarde.

La Poligelina (HemoC), Gelafusín, el Dextrano-70 (Macrodex) o el Dextrano-40

(Rheomacrodex) son menos eficaces que la albúmina en prevenir la disfunción

circulatoria post paracentesis.

Page 17: LA HABANA Soporte nutricional a pacientes con cirrosis ...files.sld.cu/cirured/files/2011/04/soprte-nutricional-en-ch.pdf · En la cirrosis el flujo normal de la sangre se disminuye,

Como consecuencia de la incapacidad que muestra el paciente cirrótico para

excretar el sodio en forma efectiva, la mayor parte del sodio contenido en la dieta

es retenido, acompañado de la correspondiente retención de agua. Por tanto, el

tratamiento principal de la ascitis se basa en la restricción del sodio. Para obtener

la reducción de la ascitis es necesaria una administración de sodio que no supere

los 250 o 500 mg/día. La natremia baja (<130 mEq/l) indica la retención de

líquidos por encima del sodio retenido (hiponatremia dilucional) haciendo

necesaria la restricción de los líquidos hasta alcanzar un total no superior a 1000

ml/día.

El tratamiento con diuréticos suele iniciarse con Espironolactona (Aldactone) que

actúa inhibiendo la acción de la aldosterona sobre el túbulo renal distal. Sus

ventajas sobre otros diuréticos consisten en que, además de producir aumento de

la excreción del sodio, también reduce la pérdida de potasio. La dosis inicial es de

100 mg/día en dosis divididas, que pueden ser incrementadas en forma gradual

hasta más de 400 mg/día para obtener diuresis. La ginecomastia puede complicar

la administración prolongada de la Espirolactona.

Para obtener una diuresis más efectiva y rápida, se combinan 100mg/día de

Espironolactona con 50 a 100mg/día de Hidroclorotiazida o con la Furosemida,

diurético mas poderoso, en dosis de 40 mg/día, sobre todo en pacientes con

edemas y ascitis.

Hipertensión portal: La Hipertensión Portal (HP) es el incremento de la presión

del árbol portal por encima de 10 mmHg. La presión portal está establecida entre

dos parámetros: el flujo venoso portal y la resistencia al flujo en el interior del

hígado. El flujo venoso portal está determinado y regulado por la sangre

proveniente del área esplácnica y toda resistencia a ese flujo en un sector o en la

totalidad del árbol portal se considera como hipertensión portal parcial o total

respectiva-mente.

Page 18: LA HABANA Soporte nutricional a pacientes con cirrosis ...files.sld.cu/cirured/files/2011/04/soprte-nutricional-en-ch.pdf · En la cirrosis el flujo normal de la sangre se disminuye,

El incremento de la Resistencia portal vascular al flujo, incrementa la presión

portal (Hipertensión Portal), reduce el pasaje efectivo de la sangre a través del

hígado, propicia la búsqueda de la fuga de este volumen retenido creando nuevas

rutas o colaterales.

El hábito constitucional del enfermo es especial por la obesidad centrípeta (cuerpo

grueso y extremidades adelgazadas), piel fina adelgazada y palmas hepáticas,

hepatomegalia, esplenomegalia y ascitis, circulación colateral del abdomen y

telangiectasis o nevus arácnidos.

La presencia de hipertensión portal facilita el desarrollo de un estado

hipermetabólico con translocación bacteriana y aumento de las citoquinas

proinflamatorias.

El médico puede indicar un betabloqueante para la hipertensión portal. Los

betabloqueantes pueden disminuir la presión en las várices y reducir el riesgo de

hemorragias, es utilizado el Propranolol: 20 mg cada 12 h, aumentando o

disminuyendo la dosis a intervalos de 3-4 días, hasta conseguir disminuir la

frecuencia cardiaca en 25 %, siempre que ésta no descienda por debajo de

55/min. Ni la presión arterial sistólica por debajo de 90 mm Hg. En caso de mala

función hepatocelular es recomendable iniciar el tratamiento a dosis menores.

Hemorragia digestiva: Ocurre por rotura de várices esofágicas, es la

complicación principal de la hipertensión portal (HP) y constituye una de las

primeras causas de muerte en los pacientes cirróticos. La probabilidad de

desarrollar várices esofágicas en un cirrótico es 83 % de los casos, con una

prevalencia en estudios endoscópicos de 60 %.En caso de hemorragia digestiva,

el tratamiento está encaminado en la primera etapa a controlar la hemorragia,

conocer la causa de la misma (si es de origen varicoso o no), y aplicar las

medidas de aclaramiento del tracto gastrointestinal con el objetivo para impedir la

absorción de compuestos nitrogenados que precipiten la aparición de una

encefalopatía.

Page 19: LA HABANA Soporte nutricional a pacientes con cirrosis ...files.sld.cu/cirured/files/2011/04/soprte-nutricional-en-ch.pdf · En la cirrosis el flujo normal de la sangre se disminuye,

En el paciente con hemorragia aguda por las varices esofágicas, la hipertensión

portal puede ser reducida mediante la infusión intravenosa de vasopresina

(Pitressin), somatostatina o sus análogos, tales como octreotida o vapreotide.

Estas drogas pueden disminuir la severidad de la hemorragia y a menudo la

detienen, pero no se ha demostrado que modifiquen la supervivencia.

Luego de rebasada esta etapa, la dieta variará en dependencia del estado del

enfermo. Tan pronto lo permita, se debe iniciar la vía oral con líquidos y alimentos

blandos (papillas, purés de frutas y vegetales e incluso de leguminosas) que

aporten energía, evitando, al igual que en la encefalopatía, alimentos nitrogenados

que empeoran el cuadro.

La encefalopatía hepática: es un síndrome caracterizado por un amplio espectro

de signos y síntomas neuropsiquiátricos que aparece en pacientes con

enfermedad hepática avanzada.

El hígado de las personas con cirrosis presenta dificultad para remover las toxinas,

las cuales se acumulan en la sangre. Estas toxinas pueden ocasionar confusión

mental, y degenerar en cambios de personalidad y hasta coma.

Los primeros signos de acumulación de toxinas en el cerebro pueden incluir

descuido en la apariencia personal, dificultad para concentrarse, incorrecta

articulación de las palabras, cambios en los hábitos de sueño, pérdida de memoria

e insensibilidad.

En el caso específico de la encefalopatía hepática, existe un aumento en las

concentraciones séricas de amoníaco, aminoácidos aromáticos,

neurotransmisores inhibitorios y falsos neurotransmisores como la serotonina,

feniletanolamina y octopamina. Además, existen ácidos grasos de cadena corta y

fenoles. Esto quiere decir que las fórmulas nutrimentales a administrar deberán

estar privadas de estos componentes, o de sus precursores.

Page 20: LA HABANA Soporte nutricional a pacientes con cirrosis ...files.sld.cu/cirured/files/2011/04/soprte-nutricional-en-ch.pdf · En la cirrosis el flujo normal de la sangre se disminuye,

Los episodios agudos de encefalopatía pueden presentarse intermitentemente en

pacientes con cirrosis avanzada como resultado de infección, hemorragia

gastrointestinal, deshidratación, alteraciones electrolíticas, sedantes,

incumplimiento del tratamiento con lactulosa o estreñimiento severo. No es común

que ocurra solo por ingesta de proteínas en cantidades superiores a las

recomendadas por lo que debe buscarse otra causa. Sin embargo, cuando la

causa de la encefalopatía no está clara, debe sospecharse transgresión dietética e

incumplimiento terapéutico. Hay que tener en cuenta que además de la ingesta

proteica, otra fuente de amonio es el gasto proteico en diferentes órganos.

En la encefalopatía aguda debe corregirse agresivamente el posible factor

precipitante.

La restricción proteica estará encaminada a evitar la progresión del estado

encefalopático, pero debe ser lo suficiente para evitar que se produzcan el déficit

nutrimental, las alteraciones de la inmunidad celular y las sepsis. Siempre que el

paciente lo tolere, se administrarán por vía enteral alimentos y/o nutrientes (según

sea el caso) que contengan cantidades reducidas de aminoácidos aromáticos y

azufrados, y cantidades aumentadas de aminoácidos ramificados en forma de

jugos de frutas y vegetales, ya sea espontáneamente, por vía oral, o por sonda

nasogástrica.

Dieta: inicialmente hipoproteica (0.5 g/kg/día) y aporte calórico suficiente mediante

carbohidratos y lípidos. Excepcionalmente se indicará dieta sin proteínas. Cuando

se haya resuelto el episodio, se reinicia la alimentación oral habitual según la

tolerancia.

Régimen higiene-dietético del cirrótico según clasificación de Child-Pugh y

en particular según grado de ascitis:

El pronóstico de los pacientes con cirrosis hepática ha podido establecerse con

bastante certeza mediante la clasificación de Child-Pugh que puede ser muy útil

Page 21: LA HABANA Soporte nutricional a pacientes con cirrosis ...files.sld.cu/cirured/files/2011/04/soprte-nutricional-en-ch.pdf · En la cirrosis el flujo normal de la sangre se disminuye,

no solo como predictor de supervivencia, sino también como índice fiable de

ocurrencia de complicaciones. Esta clasificación tiene en cuenta los niveles de

bilirrubina, albúmina sérica, tiempo de protrombina, la existencia y grado de

encefalopatía y ascitis.

CLASIFICACIÓN DE CHILD–PUGH DE LA SEVERIDAD DE LA CIRROSIS

1 PUNTO

2 PUNTOS

3 PUNTOS

ENCEFALOPATÍA

Ausente

Grado 1–2

Grado 3–4

(crónico)

ASCITIS

Ausente

Leve/moderada

(responde a la

diuresis)

Tensa

BILIRRUBINA

(mg/dl)

< 2

2–3

> 3

ALBÚMINA

(g/dl)

> 3.5

2.3–3.5

< 2.8

TP (prolongado

unos segundos)

< 4

4–6

> 6

INR

< 1.7

1.7–2.3

> 2.3

La clase de cirrosis se basa en la puntuación total:

Page 22: LA HABANA Soporte nutricional a pacientes con cirrosis ...files.sld.cu/cirured/files/2011/04/soprte-nutricional-en-ch.pdf · En la cirrosis el flujo normal de la sangre se disminuye,

• Clase A: puntuación total 5 o 6

• Clase B: puntuación total 7–9

• Clase C: puntuación total 10 o más

El pronóstico está directamente relacionado con la puntuación.

INR, cociente normalizado internacional; TP, tiempo de protrombina.

• Cirrosis Grado (A): Dieta normal. Consumos de proteínas a razón de 1,5 g/kg

de peso/día. Se recomienda abstinencia de consumo de alcohol en todos los

casos. Ejercicios físicos sin llegar al agotamiento.

• Cirrosis Grado (B): Dieta hiposódica (50 mEq/día de sodio). Consumo de

proteínas a razón de 0,5 a 1.0 g/kg de peso/día, preferiblemente de origen

vegetal según existan o no manifestaciones de encefalopatía hepática.

Abstinencia total de consumo de alcohol. Reposo relativo.

• Cirrosis Grado (C): Dieta sin sodio. Consumo de proteínas de 0,0 a 0,5 g/kg de

peso/día preferiblemente de origen vegetal según existan o no manifestaciones

de encefalopatía hepática. Reposo.

LA NUTRICIÓN PARENTERAL EN LOS PACIENTES CIRRÓTICOS

La Nutrición parenteral en los pacientes cirróticos solo debe reservarse para

aquellos estados que plenamente lo justifiquen:

1) Los desnutridos que deban ser sometidos a tratamiento quirúrgico,

2) En las insuficiencias hepáticas graves como medida terapéutica auxiliar,

Page 23: LA HABANA Soporte nutricional a pacientes con cirrosis ...files.sld.cu/cirured/files/2011/04/soprte-nutricional-en-ch.pdf · En la cirrosis el flujo normal de la sangre se disminuye,

3) En los pacientes graves con alguna de las complicaciones antes descritas o

cuando exista imposibilidad de alimentación oral.

RECOMENDACIONES EN EL USO DE LA ALBÚMINA EXÓGENA:

Es bueno dejar establecido que dicho elemento es un hemoderivado, no es un

nutriente. Por lo tanto, no se puede utilizar con fines de repleción nutricional.

El uso de la albúmina en el paciente cirrótico como complemento nutricional debe

indicarse cuando los valores de albúmina sérica estén por debajo de 25,0 g/L y el

aporte nutricional satisfaga el 90 % de sus necesidades energéticas, para poder

de esta forma lograr los efectos fisiológicos y terapéuticos de la misma.

De no ocurrir así, como se trata de pacientes hipercatabólicos, la albúmina se

utilizará como sustrato energético por vía gluconeogénica, y en 4 a 6 horas se

convertirá en nitrógeno ureico. Por lo tanto, no tiene sentido administrar la

albúmina con fines nutricionales. No obstante, la infusión de albúmina sigue

siendo la indicación más frecuente, y es totalmente justificada, luego de

paracentesis evacuadoras.

CONCLUSIONES

Se recomienda una frecuente valoración nutricional en los pacientes con cirrosis

hepática, herramienta que disponemos para realizar un diagnostico temprano y

evolutivo sobre el estado nutricional del paciente y poder instituir la terapia

nutricional mas apropiada u oportuna estableciendo una vigilancia seriada del

efecto y la eficacia del apoyo nutricional en el curso de su enfermedad para

mantener un estado nutricional y metabólico óptimo.

El tratamiento nutricional reporta beneficios en los diferentes estadios de la

enfermedad, facilitando, mejoría de la función hepática, disminución de la

incidencia y severidad de la encefalopatía y mejoría de la calidad de vida. La

suplementación con nutrición enteral puede mejorar el aporte proteico, descender

Page 24: LA HABANA Soporte nutricional a pacientes con cirrosis ...files.sld.cu/cirured/files/2011/04/soprte-nutricional-en-ch.pdf · En la cirrosis el flujo normal de la sangre se disminuye,

la frecuencia de hospitalización, mejorar el estado nutricional, la función inmune y

la severidad de la enfermedad.

Proporcionándole al personal medico como a los propios pacientes cirróticos estas

recomendaciones nutricionales beneficiosas es una buena forma de ayudar a

estos pacientes a evitar la descompensación de la enfermedad y poder brindarle

una asistencia de alta calidad, orientada al paciente y garantizar la recuperación

nutricional del enfermo.

Page 25: LA HABANA Soporte nutricional a pacientes con cirrosis ...files.sld.cu/cirured/files/2011/04/soprte-nutricional-en-ch.pdf · En la cirrosis el flujo normal de la sangre se disminuye,

BIBLIOGRAFÍA

1. Tratado de Medicina Crítica. Shoemaker. 2002. Waitzberg, D.L. Desnutrición calórica proteica y su importancia clínica. Nutrinews 1997; 3.

2. Montejo JC. Bases para la valoración metabólica, el soporte nutricional y el diseño de la investigación nutricional en los pacientes críticos. REMI 2003 Marzo; 3(3).

3. Montejo, J.C.; García Lorenzo, A. Nutrición enteral. En: Manual de Medicina

Intensiva 2001: 480-486. 4. Mondejar, J.C; etc. Complicaciones gastrointestinales de la nutrición enteral

en el paciente crítico. Medicina Intensiva 2001 abril; 25(4): 152-160.

5. A. Mesejo, M. Juan y A. Serrano. Cirrosis y encefalopatía hepáticas: consecuencias clínico-metabólicas y soporte nutricional. Nutr Hosp. 2008; 23(Supl. 2):8-18

6. Correia, M. Evaluación nutricional subjetiva. Rev. Bras. Nutr Clin.1988;

13(2).

7. Castellanos MÍ. Nutrición y Cirrosis hepática Acta medica 2003;11(1):26-37,

8. Ginés P, Arroyo V. Cirrosis hepática. En: Farreras P, Rozman C. Medicina Interna. 13 edición.

9. Pinto PC, American J, Reynolds TB. Large-volume paracentesis in

nonedematous patiens with tense ascites: Its effect on intravascular volume. Hepatology 8: 207, 1998

10. Butterworth RF. Complications of cirrhosis Hepatic encephalopaty. J Hepatol 2000; 32 (supp 1): 171-180.

11. Bosch J.Medical Treatment of portal hypertension Digestion 1998; 59:547-

555.

12. Jiménez Jiménez FJ, Montejo González JC, Núñez Ruiz R. Nutrición artificial en la insuficiencia hepática. Nutr Hosp 2005; 20(Supl. 2):22-24.

Page 26: LA HABANA Soporte nutricional a pacientes con cirrosis ...files.sld.cu/cirured/files/2011/04/soprte-nutricional-en-ch.pdf · En la cirrosis el flujo normal de la sangre se disminuye,

13. Steinter B.C et al: Complicaciones más comunes en la cirrosis hepáticas.Rev.Med.Columbia.2002; 34:130-138.

14. Gines P, TitoL, Arroyo Vetal. Pandomized comparative study of therapeutic paracentesis with and without intravenous albuminin cirrhosis. Gastroenterology 94: 1493, 1998.

15. Garassini MA, Garassini ME. Conceptos actuales sobre ascitis. GEN 1996; 50(2):100-11.

16. Quigley EM. Gastrointestinal dysfunction in liver disease and portal hypertension. Gut-liver interaction revisited. Dig Dis Sci 1996; 41:557-561.

17. Suárez A, Díaz Y, Rodríguez M. La nutrición y el hígado. Arch Gastroenterol 1975;2:184-91.

18. Blei A, Córdoba J. Hepatic encephalopathy. Am J Gastroenterol 2001; 96:1968-1976.

19. Venegas LF, Holguín R, Yoza Y cols. Evaluation and nutritional therapy in cirrhotic patients of Edgardo Regagliati Martins Hospital. Rev Gastroenterol Peru 2002; 22:13-8.

20. Dudrick SJ, Kavic SM. Hepatobiliary nutrition history and future. J Hepatolbiliary Pancreat Surg 2002; 9: 459-68.