Por el doctor Jürgen Keltsch – Ministerio del Interior del Estado de Baviera – Munich, 4 de agosto de 1999

La fabricación del hombre-máquina en el laboratorio de aprendizaje

cibernético

1- Evaluación de la organización de la Cienciología por el Estado en AlemaniaFundada en 1953 en los Estados-Unidos por el autor de ciencia

ficción Lafayette Ronald Hubbard (1911-1986), la « Church of Scientology » es una organización internacional con sede en los Estados-Unidos que comercializa en el mundo entero sus programas para el desarrollo de la personalidad y sus técnicas de organización y de gestión.

Ella adopta la forma organizativa y de distribución de una empresa comercial de formación dentro el mercado de la formación profesional continua, atribuyéndose al mismo tiempo el estatuto de nueva religión. Sus actividades han desencadenado y desencadenan en el mundo entero conflictos con las sociedades democráticas. Despues de un examen profundizado, la Comisión de Investigación sobre las llamadas « sectas y psicogrupos » creada por el Deutscher Bundestag (parlamento alemán) ha clasificado la Cienciología, en su informe final depositado en

1998, como siendo una organización con estructura criminógena que persigue objetivos anticonstitucionales. Este análisis confirma el punto de vista de los servicios de seguridad alemanes.

Bajo la apariencia de una nueva religión, esta organización calificada por la Comisión de Investigación, no como una comunidad religiosa sino como un psicogrupo, ha sabido, hasta una fecha reciente, disimular con destreza sus características estructurales esenciales : estructura organizativa y logística de grupo industrial ; estrategia expansionista con una estructura comercial y operando con agresividad (promoviendo la venta sobre la base de franquicias a través de la formación de cadenas de sub-contratos inspiradas en el funcionamiento de los sistemas piramidales) ; duros procedimientos de conducta y de condicionamiento de los seres humanos bajo la forma de un social engineering, lo que significa : una puesta en práctica brutal de técnicas psicológicas y sociales inspiradas en la psicología comportamentalista para el reclutamiento de colaboradores (el personal empleado), de clientes y de adeptos ; utilización de una técnica de organización totalitaria para la puesta bajo sumisión y la instrumentalización de los colaboradores a través de un control temporal y local sin fallos.

2 - Los principios de la psicología comportamental en las técnicas

sociales de HubbardSegún un estudio separado efectuado dentro del marco del informe

final de la Comisión de Investigación, la organización de la Cienciología pertenece a la categoría de suministradores comerciales de prestaciones y servicios pertenecientes al mercado de la psicología bajo la denominación de « Mind machines y nuevo aprendizaje ».

Este sector de prestaciones y servicios de un nuevo tipo se caracteriza por su tentativa de modificar durablemente al ser humano, tanto en su comportamiento externo como interno, gracias a unos

laboratorios de aprendizaje en los que se aplican métodos pertenecientes a la ya mencionada psicología comportamental, es decir, por medio del aprendizaje y del condicionamiento programados.

Esta corriente científica de la psicología y de la pedagogía es calificada de behaviorismo. A partir de principios del siglo XX los psicológos que estudian el aprendizaje desde un punto de vista behaviorista (Watson, Paulov, Skinner) han intentado, basándose en ensayos de laboratorio realizados sobre animales y seres humanos, establecer las leyes generales del aprendizaje, desarrollando a partir de dichas leyes programas de entrenamiento (tecnología de aprendizaje) cuyo objetivo es el de modificar el comportamiento humano.

Este proceso tecnológico aplicado al ser humano encuentra su utilidad en la medida en que posibilita la puesta bajo influencia de los organismos vivos, de manera que éstos reaccionen ante determinados estímulos modificando así su comportamiento, es decir aprendiendo. Dicho procedimiento es calificado como condicionamiento cuando los nuevos tipos de comportamiento son inculcados en un laboratorio, de tal manera que éstos puedan reproducirse despues del envío de una señal clave. Para facilitar el aprendizaje basado en estos esquemas de impulsos y reacciones, se utiliza un meticuloso sistema de recompensas y castigos llamado « feedback training » (utilización del principio de la retroacción, es decir, del envío de informaciones sobre el comportamiento de un sistema, como el del organismo humano por ejemplo, en ese mismo sistema de manera que éstas influyan sobre el comportamiento futuro del sistema) así como otros métodos de modificación del comportamiento. Las facultades cognitivas del ser humano pueden igualmente ser modificadas a través del condicionamiento (behaviorismo cognitivo).

Estas técnicas de aprendizaje recuerdan a menudo al adiestramiento. A pesar de sus éxitos extraordinarios, estos procedimientos tecnológicos se han convertido rapidamente en objeto de numerosas críticas, ya que éstos no solo han sido utilizados para modificar positivamente al hombre, sino tambien de una manera

negativa (ejem. : provocación por Watson de una neurosis a través de la insatisfacción de los esquemas de comportamiento bajo la forma de una fobia a los gatos en un niño pequeño). Los experimentos de la psicología comportamental han establecido igualmente que sus estrategias de modificación del comportamiento permitirían transformar la voluntad y las convicciones de una persona a través de un control sistemático de la información y de la comunicación según la voluntad del experimentador, e incluso provocar trastornos mentales por medio de un uso paradójico del lenguaje (ejem. : « el dolor es la felicidad ») o técnica del doble bind.

Cuando semejantes procedimientos son utilizados de manera intencionada para manipular y perjudicar a una persona (cf. « Neusprache » en el romance « 1984 » de Georges Orwells), los conocimientos psicológicos pierden su caracter de instrumento pedagógico y terapeútico capaz de aportar una ayuda y se convierten en un arma pérfida. La eficacia de los métodos de la psicología comportamental se manifiesta de la manera más espectacular cuando las convicciones políticas y filosóficas de una persona internada son modificadas en contra de su voluntad, según el programa del instigador, practicándole torturas que no dejan traza alguna sobre el cuerpo (torturas psicológicas).

Es algo sumamente conocido que durante la Guerra de Corea varios prisioneros americanos fueron « convertidos » de esta manera a la ideología comunista, y que varios incondicionales de Stalin caídos en desgracia fueron llevados, antes de ser liquidados, a acusarse a sí mismos en público de haber tenido intenciones antinacionalistas que no existían realmente y a « reconocer su culpa ».

Aunque las personas que disponen de una plena libertad de movimientos pueden igualmente verse perjudicadas por medio de la utilización sistemática de estos métodos inspirados en la psicología comportamental, y sentir cómo su voluntad propia disminuye al tiempo que su personalidad empieza a debilitarse. Este extremo ha sido demostrado a través del combate llevado a cabo por la Stasi (servicios de seguridad de la ex-RDA) contra los disidentes inspirándose para ello sobre un programa científico de « desagregación del alma » desarrollado por un grupo de psicólogos del comportamiento.

Las víctimas de tales métodos de tortura psicológica sufren todavía más o menos de sus secuelas. Ha sido demostrado que la Cienciología utiliza procedimientos (« técnicas ») similares, de una parte, para convertir en dóciles a sus adeptos y aplicarles una pedagogía que les inculque disciplina ; y por otra parte, en el caso de que se produzcan ataques judiciales contra la organización llevados a cabo por antiguos adeptos, considerados en este caso como enemigos, para obligarles al silencio y paralizarlos en sus acciones contra la Cienciología.

Los perjuicios causados por la utilización de dichos métodos, que han invadido ya el mundo de los negocios, son hoy en día estudiados por las ciencias humanas y sociales bajo la denominación de « mobbing ». Es particularmente inquietante, pues es algo irreconciliable con los valores y el orden democráticos, que semejantes métodos sean impartidos en sus cursos por parte de ciertos profesores en gestión administrativa partidarios de una filosofía empresarial y social darwinista, y que pretenden hacer de sus clientes unos « mánagers de combate » entrenados para la « guerra económica ».

Desde el momento en el que no es proporcionada ninguna explicación sobre los principales efectos de las estrategias de modificación del comportamiento, o incluso, como es el caso de la Cienciología, si existe una voluntad deliberada de engaño a este respecto, los individuos sometidos a estas técnicas manifiestan normalmente una dificultad en hacer la diferencia entre la pedagogía normal y la pedagogía coercitiva cuyo objetivo es la manipulación, o lavado de cerebro.

Es algo particularmente condenable pues, el hecho de disimular bajo la falsa apariencia de « medidas curativas » unas técnicas de represión que el utilizador de las mismas aplica de manera precisa con la voluntad de causar un perjuicio, o admitiendo que ello pueda eventualmente producirse. Las averiguaciones de la Comisión de Investigación la han llevado a constatar que en una especie de campos de re-educación llamados « rehabilitación projet force (RPF) », los miembros de la unidad de élite de la Cienciología (La Organización del Mar o SeaOrg) que han cometido errores son sometidos para su re-educación a varias técnicas

clásicas de lavado de cerebro. La descripción del « brainwashing » hecha por Hubbard en el Diccionario del Management del que él es el autor, prueban que él poseía excelentes conocimientos psicológicos sobre la utilización de las técnicas de lavado de cerebro. Él clasifica así varios métodos de condicionamiento según Paulov en el apartado del lavado de cerebro, y describe de qué manera éste ha provocado varias psicosis, a través de unos experimentos sobre animales, por medio de su tecnología de adiestramiento.

En una conferencia celebrada en 1951, Hubbard afirmó que sus técnicas le permitían volver enferma a la gente, calificando al mismo tiempo sus métodos como « black dianetics ». El hecho de que las psicosis y las neurosis causadas por la insatisfacción de los esquemas de conducta pueden igualmente ser provocadas en el hombre a través del condicionamiento, forma parte desde hace ya tiempo del inventario de conocimientos adquiridos por las ciencias humanas.

3 - Los fundamentos cibernéticos de la teoría tecnológica de Hubbard

El estudio naturalista del caracter ha recibido un nuevo impulso con la puesta de relieve a finales de los años ’40, por el matemático Norbert Wiener , de la similitud entre las leyes que rigen el mando, la regulación y la transmisión de la información en el ser vivo así como en el caso de una máquina (ordenador, robot), acontecimiento que ha supuesto el nacimiento de un nuevo paradigma común a las ciencias naturales y a las ciencias humanas, y tambien de una nueva ciencia : la sistémica y la cibernética (arte de la navegación).

Es el retorno a la imagen materialista del ser humano, del « hombre-máquina », formulada en la época de Las Luces. Hoy en día, los ordenadores y la construcción de robots que se pilotan ellos mismos permiten la simulación mecánica de la inteligencia artificial y de la vida artificial. La nueva teoría compara los procesos mentales y psíquicos internos del hombre con las propiedades funcionales cibernéticas de un sistema (cognitivismo). Ciertos investigadores piensan que la prueba es

así aportada de que el cerebro humano solo sería una máquina comparable a un calculador electrónico. La teoría tecnológica de Hubbard para la modificación del ser humano, tal y como él la ha descrito en su obra fundamental titulada « Dianética » (1950), no solo tiene el behaviorismo cognitivo como punto de partida, sino que tambien está directamente ligada a la técnica de comunicación y de mando de la cibernética. Esto útimo queda demostrado por los siguientes indicios : el hecho de que Hubbard concibe el cerebro humano/la razón humana como una máquina tratadora de datos (Dianetics, El desarrollo de una ciencia, 1959, 1972) ; el hecho de que él mismo se califica como « ingeniero » ; el lenguaje inspirado en las ciencias de la ingeniería, evocando un código mecánico ; la re-definición de todas las aptitudes mentales y sociales del hombre a través de centenares de nociones funcionales copiadas de la ingeniería, la recomendación de utilizar ingenieros como « auditores » para la reprogramación del cerebro humano/la razón humana ; los métodos de medida de la evolución psicométricos (Series sobre la Gestión, Vol. 1-3) ; la utilización de métodos de feedback con la puesta en funcionamiento de un detector de mentiras (electrometro, abreviación « e-metro ») ; el hecho de creer en la « programabilidad » y en la « productibilidad » de un Hombre Nuevo (« Valuable final product ») en los laboratorios de aprendizaje programado. Conformemente a esto, Hubbard ha definido la utilización de su tecnología como una utilización de las reglas educativas naturales (The logics of Dianetics are the science of education. These are the axioms of education, Diccionario de Gestión, palabra-clave : Axioms of Education).

Igualmente, los métodos a primera vista incomprensibles de la Dianética y de la Cienciología (« tecnología ») pueden explicarse de una manera comprensible a través del paradigma de la cibernética. Por medio de ejercicos repetitivos (« trainings »), se le inculca al « hombre-máquina », como si éste fuese un robot al que habría que reprogramar completamente, y a base de duros procesos que duran a menudo horas y horas, una manera de comportarse en el mundo externo, y al mismo tiempo en retroacción con éste último, pretendidamente (según Hubbard) más precisa, o más bien se le integra a la fuerza dicho comportamiento por programación (los llamados « objetivos process »). Al mismo tiempo se acostumbra así al individuo (« Preclaro », « PC ») a obedecer ciegamente a cualquier orden de su

formador, es decir, a comportarse como una marioneta. Es solo despues de que el individuo haya adoptado esta obediencia que consiste en desarrollar una serie de reacciones ante determinados estímulos, que su psiquismo es sometido a una exploración cuyo objetivo es la detección de los fallos de funcionamiento por medio de una serie de interrogatorios excesivos e inquisitoriales (« Auditación »).

La auditación encuentra igualmente su punto de partida en la teoría cibernética. Dejando de lado las facultades hereditarias, Hubbard pensaba manifiestamente que todos los trastornos psíquicos, como por otra parte tambien todos los males físicos, eran causados por una « mala programación », a saber, por la memorización de nuestras vivencias dolorosas bajo la forma de un almacenamiento de datos (« engrama ») en el cerebro/la razón, él mismo concebido como un banco de datos (« mental reactivo » o « mente reactiva »). Para tratar de detectar un eventual « error de programación » se utiliza el electrometro, al que el adepto permanece conectado durante las sesiones de interrogatorios llevadas a cabo por medio de unas listas de preguntas standarizadas, como si en realidad se tratase de una búsqueda por barrido dentro de la memoria, así como por medio de combinaciones refinadas de preguntas mecánicas siguiendo la llamada « pista del tiempo » (« Timetrack »). La presencia de un « engrama » es señalada por un cierto movimiento de la aguja del electrometro.

El individuo debe revivir inmediatamente el acontecimiento doloroso en su imaginación hasta que la aguja del electrometro deje de moverse (« null needle »). Esta práctica recuerda los ejercicos de descondicionamiento por abreacción utilizados en la terapia comportamentalista. Según la teoría terapeútica de Hubbard, el engrama ha sido entonces « borrado » y ya no debe tener ningún efecto perjudicial sobre el individuo así tratado. Sin embargo Hubbard no ha aportado nunca la prueba de que la « carga » eléctrica (corporal) indicada por el electrometro podía ser provocada por el recuerdo visual del acontecimiento doloroso, ni tampoco que el recuerdo doloroso podría perjudicar la salud del individuo.

El aumento del bien-estar personal resentido despues de la « descarga » del « engrama » no constituye tampoco una prueba, pues este estado emocional puede ser provocado por la sugestión o por un efecto placebo. Cuando todos los engramas han sido borrados, la causa llamada « reactiva » es eliminada. Este estado se define como siendo « Claro ». La posibilidad de penetrar en la conciencia por medio de un aparato de biofeedback y de influenciarla con fines terapeúticos ha sido estudiada experimentalmente por la investigación psicológica (psicometría, psicofísica) bastante tiempo antes de que Hubbard se amparase de este método. Los efectos y el valor de dichos métodos son puestos en duda hoy en día y criticados en tanto que reduccionismo biológico. Incluso si, hasta nuestros días, no ha sido todavía aclarado con detalle por medio de las herramientas que poseen las ciencias humanas lo que les ocurre luego a las personas que se someten a los métodos de Hubbard, hay motivos suficientes para suponer que la « tecnología dianética » no es una simple terapia de apoyo ni un juego simbólico, sino que con ella el comportamiento externo e interno del individuo es durablemente modificado por medio de unas técnicas psicológicas y sociales de una gran eficacia (condicionamiento operante, inducción del trance hipnótico, sugestión, regulación del comportamiento social a través de la psicometría y de la sociometría y control sistemático del grupo sobre el individuo).

Dentro de este contexto, los ejercicos que inducen la experiencia llamada « de separación con el cuerpo » (exteriorización, « estado de OT » u Operational Thetan) parecen ser particularmente problemáticos. La experiencia ámpliamente estudiada por las ciencias humanas de este fenómeno, que sobreviene en el transcurso de determinados ejercicios de meditación, es utilizada por Hubbard para exponer su teoría dualística paranormal del alma y del cuerpo. Él sostiene que el espíritu, del que se afirma que es un campo de energía (« Thetan »), puede abandonar el « hombre-máquina ». La pretendida prueba sería, una vez más, aportada por un cierto movimiento de la aguja del electrometro (« theta bop »). En numerosos clientes de la Cienciología tales ejercicios provocan fenómenos psíquicos singulares pudiendo llegar hasta trastornos mentales de caracter mórbido. Un deseo adictivo a proseguir este tipo de ejercicios nace inmediatamente y los

clientes no retroceden ante ningún gasto para someterse de nuevo a esta experiencia.

En su informe final, la Comisión de Investigación ha confirmado que en el caso de personas frágiles, la auditación puede provocar la aparición de enfermedades mentales graves pudiendo llegar hasta el riesgo de suicidio. La Comisión ha igualmente criticado el caracter agresivo de los métodos de venta (« hard sell ») utilizados para forzar la compra por parte de los clientes de la Cienciología de estos ejercicios extremadamente caros y costosos.

4 - La teoría organizativa inspirada en la ingeniería cibernética

La forma de organización eligida para la Cienciología por Hubbard, a fin de vender su desarrollo de la personalidad tecnificante y sus métodos de gestión empresarial, despierta a primera vista la impresión de que se trata simplemente de un grupo industrial internacional con una gestión muy estricta ofertando diversos servicios en el mercado de la formación profesional continua (Narconón : « rehabilitación de drogados »; Criminón : « rehabilitación de delincuentes »; Applied Scholastics : « mejora de la formación »; Fundación el Camino a la Felicidad : « mejora de la moral en la sociedad »; Comisión contra los fallos de la psiquiatría : « protección de los pacientes contra los errores de la psiquiatría »)

Sin embargo, los cienciólogos convencidos declaran que la venta de sus prestaciones y servicios solo es el medio que va permitirles alcanzar su objetivo final que es el de « curar » a todo el mundo y de « crear así una civilización sin enfermedades mentales, sin criminales y sin guerras ». Es por eso que ellos consideran a la Cienciología como un « movimiento de reforma de la sociedad ».

Más allá de su objetivo basado en la oferta de terapias individuales, objetivo que ella persigue por medio de la « firts dynamic tech », la Cienciología pretende igualmente poseer una nueva tecnología de organización, de administración y de gestión, que ella denomina « third

dynamic technology » y que permitiría mejorar la estructura y el funcionamiento de todos los grupos, organizaciones y administraciones.

a) Third dynamic technology

La organización vende esta tecnología en forma de contratos de franquicia a las empresas industriales que ella obliga a adherirse al « World Institute of Scientology Enterprises » (WISE), organización que cubre todos los sectores de actividad. La difusión de esta tecnología de gestión y la integración de los clientes actores de la vida económica en la estructura del WISE están directamente ligadas a un objetivo de acumulación de poder económico y, dentro del marco de una estrategia a más largo plazo, a la voluntad de influir sobre los acontecimientos relativos al conjunto de la sociedad y del mundo político con el objetivo final de una toma de poder. No resulta difícil entonces comprender en qué consiste el programa de reforma social perseguido por la Cienciología y descrito según sus propias palabras bajo la forma de « Planeta Claro ». La influencia de la Cienciología sobre la economía es ya en los Estados-Unidos de tal envergadura que, dentro del marco de la cooperación con las industrias alemanas, ciertas grandes empresas americanas no aceptan a menudo el hecho de que sus homólogas germanas se protejan a través de un contrato firmado contra la utilización de tecnologías Hubbard dentro de su empresa.

La « third dynamic tech » y las instrucciones relativas a su aplicación han sido detalladas por Hubbard en los tres volúmenes de las « Management Series » (Series sobre la Gestión). El contenido de dichas prescripciones organizativas y de sus instrucciones operacionales, así como los efectos sociales y psicológicos derivados de su puesta en práctica, no han sido todavía a día de hoy objeto de ningún estudio científico desde el punto de vista organizativo ni social. En consecuencia, el examen de los objetivos perseguidos por el sistema de la Cienciología y la posibilidad de evaluación de su peligro potencial para sus funcionarios y sus clientes de una parte, y para el Estado y la sociedad de otra parte, son entonces muy difíciles de pronosticar.

Actualmente, solo es posible dar una descripción y una evaluación provisionales de esta teoría organizativa y social y de sus técnicas. En las Series sobre la Gestión la apelación « third dynamic tech » abarca la teoría social de una sociedad controlada por la ingenieria cibernética, descrita según la forma de un sistema biotecnológico comparable a un gran superorganismo, así como la descripción de las técnicas sociales necesarias para la creación y el mantenimiento de un sistema de estas características. Dichas técnicas son específicas de un engineering social tecnocrático, y su objetivo oculto consiste en crear, por medio de estas técnicas sociales, un gran número de « pequeños superorganismos » cienciológicos que permitan a largo plazo absorber las democracias en beneficio de un « superorganismo global » bajo el control de la Cienciología (« The Ideal Org » en HCO PL del 12 marzo 1975) [HCO : Hubbard Commons Office u Oficina de Comunicación Hubbard]. Las técnicas sociales necesarias para alcanzar este objetivo están basadas sobre unas leyes de regulación y de comunicación biotecnológicas.

Las cualidades de las que un funcionario cienciólogo ideal debería disponer dentro del nuevo sistema social, y que conviene entonces inculcarles a los neófitos, son las de un perfecto tecnócrata que posea la facultad de obedecer ciegamente a las órdenes de mando procedentes de dicho sistema, así como la capacidad de corregir despiadadamente las más mínimas desviaciones respecto del reglamento técnico y de imponer la obediencia absoluta a los subordinados. El objetivo perseguido por la educación ciencióloga para los funcionarios corresponde entonces al tipo de personalidad llamada « personalidad autoritaria » tal y como T. W. Adorno y sus colaboradores lo han constatado en 1950, dentro del marco de un estudio clínico sobre la receptividad hacia las ideologías fascistas totalitarias.

b) La teoría de la técnica de control inspirada en la ingeniería cibernética

Una tecnología de control refinada debe permitir el control sin fallos de todos los « procesos de producción » de cualquier organización (« Org ») cienciológica según un sistema perfecto de gestión total de la

calidad en el que es indiferente saber si las partes del sistema en el que el funcionamiento es controlado con meticulosidad son orgánicas o inorgánicas. Si los miembros del personal de explotación, en sus « puestos » respectivos, son calificados por Hubbard como partes de una « live organization », éstos son no obstante estrictamente sometidos a los procesos de producción y a los mecanismos de control propios del sistema, sin ningún tipo de consideración hacia sus necesidades y su libertad personales, y tratados como partes de un conglomerado mecánico (HCO PL del 2 noviembre de 1970, reeditado el 10 octubre de 1980).

Ideado por Hubbard sobre las bases de la teoría y de las técnicas de la cibernética de Norbert Wiener, de las que él solo ha conservado los aspectos tecnológicos, elevados al rango de una pretendida « ley natural » que debe aplicarse a todo tipo de producción, ya se trate de la reproducción biológica o de la producción efectuada por la mano del hombre ; este principio implica que el suministro de prestaciones y servicios por parte de la Cienciología en el campo de la « pedagogía » y de la « terapia » sea considerado como un proceso de fabricación de cosas y, por lo tanto, comparable a una producción de mercancías. Según la filosofía empresarial de Hubbard y de la actual dirección de la organización, los « organismos de producción » cienciológicos fabrican al cienciólogo, « producto final de valor ». En las Series sobre la Gestión, el « hombre nuevo » de Hubbard no es entonces una persona libre de disponer de ella misma, sino un objeto, un organismo del que se supone que funcionaría mejor despues de someterse a un « tratamiento », y que forma parte del superorganismo de la Cienciología en tal que parte integrante de un sistema.

Para que los clientes/adeptos de la Cienciología no perciban esta realidad se les promete « la adquisición de la libertad » (HCO PL del 24 enero 1969, corregido y reeditado el 6 octubre de 1985). En las Series sobre la Gestión, la dimensión espiritual y psíquica del hombre es totalmente ignorada. Del mismo modo que las cualidades del « organismo de producción » (la « Org ») no son consideradas desde un punto de vista espiritual sino solo bajo una óptica puramente técnica y funcional. En consecuencia, una « buena Org cienciológica » debe su existencia y su eficacia, según Hubbard, a la integración adecuada de los tres factores de organización « naturales » que siguen :

1) Ética (« Ethics »)

2) Técnica (« Tech ») 3) Administración (« Admin »)

Las siguientes leyes « naturales » se aplican entonces cuando la « Ética » ha sido « aportada » dentro de un grupo – traducido al lenguaje corriente esto significa que todo el mundo obedece a todas las órdenes del sistema y sin protestar – es solo entonces que es posible pasar a la aplicación de la « tecnología de la Cienciología », esto es, a la pedagogía basada en entrenamientos repetitivos de caracter militar que representa en sí misma la condición que va a permitir imponer el reglamento de administración. Éste último reposa sobre el principio del orden y de la obediencia estrictos típicos de un sistema de mando militar.

Es solo despues de que estos tres factores funcionen todos ellos de manera óptima que tendremos una organización « sana » y en expansión (HCO PL del 16 octubre 1997). Esta « ley fundamental » del « arte de la gestión » cienciológica se encuentra ilustrada y desarrollada de manera concreta en centenares de cartas y de directivas harmoniosas las unas con las otras, emitidas por la Oficina de Comunicación de Hubbard (« HCO PL »), que regulan el funcionamiento y la constitución de las organizaciones cienciológicas, la formación del personal, la conducta interna y externa de la organización, en un lenguaje frío, tecnócrata y a menudo cínico. No obstante, es su modelo de organización y de gestión pensado para la organización de la Cienciología el que Hubbard propone como modelo-tipo para la constitución y la conducta ideales de todas las organizaciones en todos los sectores de la futura sociedad global. Para su modelo organizativo, Hubbard se basa evidentemente sobre la convicción, calificada por él mismo como « ley natural », de que la estricta aplicación de sus tecnologías permite mejorar al hombre y a la sociedad, del mismo modo que al motor de un coche deportivo, por ejemplo, en el que se trataría de obtener un « producto punta » sometiéndolo a un proceso continuo de optimización.

Según esto, el reglamento organizativo diseñado para controlar las organizaciones cienciológicas hace pensar en los planos y esquemas de construcción, así como en las instrucciones de servicio creadas por los ingenieros del sector técnico de la comunicación y de la robótica, cuando éstos se disponen a instalar una unidad de producción totalmente automatizada gracias a la utilización de ordenadores y de robots. En dichas instrucciones organizativas intervienen, de una parte, los colaboradores (personal de explotación) designados con el término de « terminales », es decir, unos puntos de partida y de llegada para la transmisión de la información y de las órdenes de control, y de otra parte, otro tipo de colaboradores secundarios designados bajo la denominación de « máquinas », para la producción de « máquinas » aptas a producir (HCO PL del 29 octubre 1970), así como un sistema extremadamente jerárquico de instancias de control y de mando que aplican técnicas de verificación psicotécnicas y sociotécnicas.

Igualmente Hubbard consideraba tambien las prestaciones de servicio por parte de sus organizaciones, en las Series sobre la Gestión, como una verdadera fabricación. En este sentido él califica a los clientes y al personal en fase de formación como « materia bruta » (« raw meat », « raw public », « partículas »). Se trata por consiguiente de « optimizarlos » con el objetivo de obtener un « producto de valor final » (« valuable final product ») al cabo de un proceso de trabajo « mecánico » que se lleva a cabo de acuerdo con un modelo ya predeterminado (« escena tipo») y según unos procedimientos técnicos que deben de aplicarse con precisión y que recuerdan a las reglas de desarrollo de las secuencias mecánicas, es decir, unos algoritmos. No es entonces por un azar que Hubbard habla de « reparación de vida » (HCO PL del 20 de agosto de 1979 ; HCO PL del 21 de septiembre de 1980). Dicha concepción biotecnológica de un « Homo sapiens » modificable a través de los métodos del engineering social expuestos en la Series sobre la Gestión no permite entonces el reconocimiento de ningún rasgo inherente a la idea de hombre religioso, hombre filosófico u hombre psicológico. El modelo humano de Hubbard encarna por consiguiente la negación total de la idea de hombre vehiculada no solamente por las religiones, sino tambien por las democracias.

Según el orden y los valores democráticos, el hombre es una persona, es decir, un individuo con determinación y en posesión de la dignidad humana, y nunca un objeto al que se pretendería fabricar, y que estaría dotado de una capacidad de funcionamiento superior solo despues de haber pasado por un laboratorio de aprendizaje, evocando el « New Brave World » de Huxley en el que el jefe del laboratorio certificaría la calidad del « producto acabado » utilizable al término de un proceso de control final llevado a cabo dentro del marco de un procedimiento de gestión total de la calidad.

c) El entrenamiento de los funcionarios, el aprendizaje de un nuevo lenguaje

Estas reglas de organización y de control son por otra parte aplicadas con minuciosidad por los dirigentes de la Cienciología. Para asegurar el funcionamiento del organismo de producción de una « Org », el personal es sometido a un adiestramiento basado en la « Tech », esto es, al aprendizaje programado y al entrenamiento repetitivo de caracter militar con vistas a asegurar su perfecto funcionamiento para el « tratamiento », es decir, para el entrenamiento de su cientela (« educating people with drills until they can think », HCO PL del 26 de abril de 1970, revisado el 15 de marzo de 1975). Esto implica esencialmente el aprendizaje del « nuevo lenguaje » creado por Hubbard para sus « hombres-máquina » con el que él ha imitado, al modo de las ciencias de la ingeniería, las relaciones de comunicación física de la comunicación humana de acuerdo con la teoría de la tecnología cibernética. Este nuevo lenguaje recuerda entonces la jerga técnica de los técnicos de la comunicación y de los programadores informáticos (« fórmula de la comunicación », HCOB del 5 de abril de 1973).

Para los profanos que no comprenden en qué consiste este telón de fondo inspirado en las ciencias de la ingeniería, y que confunden con el dinero fácil la ideología pseudo-religiosa bajo la cual los astutos cienciólogos profesionales en relaciones públicas disimulan el sistema, este nuevo lenguaje, así como los textos redactados con él, resultan totalmente incomprensibles y en consecuencia no son nunca objeto de discusión. Con este nuevo lenguaje, Hubbard ha creado para las

« terminales » y las « máquinas de producción » utilizadas en su sistema de ingeniería cibernética un código-máquina perfecto que permite a estos « hombres-máquina » comunicarse en el mundo (« Mest ») y entre ellos mismos basándose en un modelo tecnológico. Éstos buscan los « datos » en su « banco de datos » de su cerebro/su mental (HCO PL del 12 de mayo de 1970), y ellos mismos los envían como mensaje hacia otra « terminal » o se hacen reprogramar por « False Data Stripping » (HCO PL del 7 de agosto de 1979) cuando han sido constatados, con motivo de un control, varios errores en su programa o en su banco de datos (« Data Series »). Las Series sobre la Gestión presentan entonces una conformidad absoluta con las técnicas de la ingeniería cibernética, y en consecuencia entran en contradicción con la teoría del « Thetan » expuesta por Hubbard en otros de sus escritos.

d) Aprender a anestesiar los sentimientosEl nuevo lenguaje cibernético de Hubbard, en tal que código de

representación del mundo físico, no contiene ninguna expresión que concierna los sentimientos ni los estados de ánimo. Dentro del repertorio de valores cienciológicos, la compasión es considerada incluso como un defecto. Según Hubbard, la compasión (« sympathy ») reduciría el « potencial de supervivencia ». En su tabla de evaluación de las emociones de 40 niveles (« escala tonal »), que es un tablero que permite la medida del « potencial de supervivencia » por medio de tests, la compasión posee un valor de 0,9, índice con una depreciación total.

Conformemente a esto, Hubbard rechazaba igualmente la caridad del Estado-providencia (las ayudas estatales). No resulta pues extraño que Hubbard haya inventado varios ejercicios cuyo objetivo es la represión sistemática de la expresión de las emociones, como por ejemplo, el procedimiento llamado « bull baiting », en el transcurso del cual el individuo sometido a un proceso de estímulo debe aprender a permanecer insensible incluso bajo la tortura. O el caso del entrenamiento repetitivo de tipo mecánico con un lenguaje corporal propio de las marionetas aplicable a la mímica. O el contacto visual, o los movimientos de los brazos y de las piernas, o del cuerpo, en lo que concierne la orientación de éste hacia las demás personas, o la manera de hablar para lo que tiene que ver con la elocución … Todos estos

ejercicios de comunicación no verbal (« TR,s ») persiguen la adquisición de un lenguaje corporal artificial y hacen pensar en los cursos de arte dramático. No obstante éstos pertenecen más bien al campo de la pedagogía y del adiestramiento.

El uso permanente del lenguaje técnico inspirado en la ingeniería, y la cultura de comunicación no verbal artificial practicada en el seno de la vida social, deberían conducir poco a poco a los funcionarios y a los clientes asiduos a la extinción de su vida emocional, y en consecuencia a la desaparición del sentimiento moral que va de par con ella. Podría entonces considerarse que ello conduciría, a los individuos, al desarrollo de un « hombre unidimensional », tal y como H. Marcuse lo ha presentado y criticado, en tal que nueva personalidad de tipo tecnoide, en sus estudios sobre la ideología de la sociedad industrial avanzada (1964). En cuanto a los dirigentes superiores de la Cienciología y a los miembros de la SeaOrg « aristocracia » de la organización, quienes son sometidos a un entrenamiento más intensivo, sería sin duda alguna más pertinente clasificarlos bajo el arquetipo vecino del « hombre tecnológico » destinado a funcionar y a combatir, como así ha sido prevista su aparición por E. Jünger en su estudio titulado « El Trabajador » (1932), en una nueva etapa dentro de la evolución de la humanidad cada vez más tecnificante.

Según el estudio sobre la « Personalidad Autoritaria » llevado a cabo por T. W. Adorno y sus colaboradores a finales de los años ’40 en Berkley, hoy en día es algo indiscutible, dentro del campo de la investigación social, que la re-edificación del psiquismo y la tecnificación de las relaciones humanas, objetivos intencionadamente perseguidos por el entrenamiento de la Cienciología, constituyen una condición necesaria para la formación de este tipo de personalidad. En su forma más perfecta, dicho tipo de personalidad presenta las siguientes características : ésta funciona en los sistemas totalitarios de una manera completamente mecánica ; cuando se trata de la conservación o de la expansión del poder del sistema ella ordena sin escrúpulos, incluso las medidas más inhumanas, o ejecuta tales medidas con precisión cuando la orden le es dada. La cuestión de saber si dichas medidas son contrarias a los derechos del hombre o a la ley moral le es

por lo general indiferente. Para justificar sus actos, solo le basta que éstos sean utiles para el sistema y/o que sean aprobados por el sistema.

El modelo humano autoritario está entonces en contradicción fundamental con el modelo humano democrático. Mucho tiempo despues del abandono de la organización, los antiguos adeptos de la Cienciología que han permanecido durante largos años como funcionarios o como clientes asiduos de la organización, se quejan todavía de sentir una frialdad emocional interna. Los parientes próximos de los miembros de la Cienciología constatan la modificación de su personalidad a menudo poco tiempo despues de la primera toma de contacto con la organización. Éstos describen su comportamiento utilizando términos como « fríamente calculador », « como un robot », « mecánico », o quejándose de un comportamiento social « cínico » e incluso « sádico ». Se detectan comportamientos similares incluso despues de su salida de la organización.

La problemática sobre si sería correcto basarnos sobre este tipo de comportamientos para diagnosticar una enfermedad en forma de neurosis permanece todavía sin respuesta. Aunque otro fenómeno dificilmente explicable sería el de saber porqué la mayoría de antiguos adeptos cosideraban, durante su estancia dentro de la organización de la Cienciología, a los autores de críticas hacia el sistema como unos verdaderos enemigos, incluso si se trataba de sus parientes más próximos, intentando eliminar por todos los medios posibles estos factores de « perturbación ». Algunos antiguos adeptos han puesto el acento sobre el hecho de que ellos consideraban la ruptura del lazo de unión con la organización, satisfaciendo así los deseos de sus familiares, como una amenaza para su bienestar personal o su « supervivencia », según la doctrina inculcada por el sistema. La generación de esta actitud forma parte de la estrategia de manipulación del sistema, que inmuniza de este modo a sus adeptos contra las críticas externas. Se trata entonces de una técnica social que ya ha demostrado sus efectos en numerosas ocasiones bajo los regímenes totalitarios, consistente en la dogmatización del lazo estrecho que une al régimen con su continuidad en tal que bien necesario para la

supervivencia, a fin de adquirir nuevos defensores de su causa y al mismo tiempo más combatientes para la protección y la expansión del sistema.

e) Inflexible exigencia de rendimiento a través de la medida permanente de la capacidad de acción del « hombre-máquina » y de sus « dispositivos »

Desde el momento que una « Org operacional » ha sido creada, los clientes son conducidos hasta la « Org » y « tratados » con los métodos expuestos en el punto 3. El proceso de formación y de educación al que son sometidos los colaboradores (personal de explotación), no se encuentra en estos momentos completamente terminado. Todos los trabajos de los colaboradores, al igual que lo harían unos obreros en una cadena de producción, son puestos a disposición del cliente de acuerdo con un reglamento técnico predeterminado que es objeto de continuas medidas de verificación sobre las que se basan el control y el mando de los individuos, así como el de la « Org ». Esta medida del « outflow » sirve para determinar la capacidad de rendimiento de cada uno de los colaboradores, así como, indirectamente, la capacidad de gestión dentro del sistema. Por otra parte, Hubbard ha santuarizado la estadística como teoría biológica de salvación, pues es ella la que permite medir al mismo tiempo el « potencial de supervivencia » de los colaboradores concernidos y tambien el de la « Org ». La estadística es entonces la piedra angular de todo el sistema de la Cienciología.

Ésta « decide » por sí sola cual será el destino del más pequeño de los funcionarios, al igual que del mánager situado en los puestos más altos de la organización. Sobre la base del resultado estadístico, cada uno de los colaboradores, hasta llegar al más alto mánager, y comprendiendo tambien las « Orgs », a cada cual se le va a atribuir un sistema de evaluación de 12 grados (« Confusión, traición, enemigo, duda, riesgo, no existencia, peligro, emergencia, normal, afluencia, cambio de potencia y potencia »), unas condiciones llamadas « de ética » que determinarán su valor y su reputación en el interior de la « Org » o con respecto a las otras « Org,s ».

Si el resultado estadístico es malo (p. ejem. « no existencia »), unas sanciones extremadamente severas son pronunciadas para que la capacidad personal de rendimiento mejore. Dentro de este contexto la enfermedad no constituye una escusa válida pues, según la teoría de Hubbard, los cienciólogos perfectamente entrenados no pueden nunca caer enfermos. Una mala estadística provocada por una eventual enfermedad sería entonces particularmente merecedora de una « medida de corrección », a saber, una serie de ejercicios difíciles. Según los informes de antiguos adeptos, la estadística es abusivamente utilizada para el acoso y la explotación despiadada de los colaboradores, a fin de empujarles a aumentar la « producción » sobre la que se basa la expansión del sistema. El cálculo de la fuerza de expansión en un sistema de coordenadas espacio-temporales sirve de indicador para determinar la fuerza de una « Org » (HCO PL del 4 de diciembre de 1966).

f) El potencial de supervivencia del « hombre-máquina » y de sus « dispositivos »

Por « potencial de supervivencia » Hubbard entiende una función de vitalidad medida a través de la estadística de producción (HCO PL del 6 de julio de 1976). La puesta en práctica de su « tecnología » pretende aumentar esta producción de vitalidad, es decir, la capacidad de funcionamiento del ser humano en su totalidad, en los campos físico, intelectual y espirituales, hasta hacerle alcanzar una dimensión sobrehumana. Todos los trastornos del comportamiento, entre los cuales figuran igualmente las enfermedades psico-somáticas, deben de ser eliminados sobre el « Puente », a saber, ese largo recorrido de ejercicios con un coste económico increíble. Las organizaciones (las Org,s) tienen igualmente atribuído un potencial de supervivencia.

El superhombre biológico con un perfecto funcionamiento y poseyendo una fuerza biológica lo más grande posible (« potencia ») de Hubbard no pertenece entonces al universo de las religiones en el sentido occidental del término, tampoco al universo del budismo como la Cienciología lo pretende, sino al de una doctrina natural biológica con una superestructura fantástica (cientismo utópico). A través de la

condición de « potencia » que, como ya ha sido visto constituye el nivel más elevado dentro del « sistema de ética » graduado, Hubbard no comprende en primer lugar otra cosa que la capacidad de rendimiento más elevada en el proceso de trabajo, ya se trate de un individuo o bien de una organización. Pero esto significa tambien la potencia más elevada posible para una humanidad biológica compuesta de superhombres que habría que crear por medio de su « tecnología » y gracias a la cual verá el día la « voluntad de potencia » (« will power ») de la humanidad entera. En « Cienciología 0-8. Das Buch der Grundlagen », Hubbard se refiere explicitamente a Nietzsche como fuente precursora de la Cienciología.

El concepto de potencia biológica, y tambien el modelo del hombre-máquina que unicamente le atribuye un valor de uso material al hombre, prueban que Hubbard quería llevar a la práctica las ideas de Nietzsche. Las exigencias tecnológicas de Nietzsche apelando a un social engineering contrario a la dignidad humana no tienen nada que envidiarle al cinismo de Hubbard : « La tarea consiste en convertir al hombre en algo tan útil como sea posible, y de hacer que se parezca al máximo a una máquina infalible : a este respecto hay que dotarlo de virtudes propias de las máquinas. Éste debe entonces acostumbrarse a considerar las condiciones en las que trabaja con una utilidad mecánica, como si éstas fuesen las más valiosas para él. Con esta finalidad, es necesario hacer que aborrezca a los demás obreros tanto como sea posible, de presentarle a la gente como un peligro y de desconsiderarla tanto como sea posible » « NachlaB » en werke III, p. 630.

Así, de ese modo, el primer axioma de la doctrina de Hubbard « Sobrevive » no ha sido sin duda concebido en tal que concepto filosófico, sino al contrario, como concepto biológico dentro del marco de una teoría biológica procedente del darwinismo social. Los planteamientos filosóficos sobre la Cienciología olvidan a menudo el hecho de que la mayor parte de los conceptos cienciológicos tienen un fundamento materialista, es decir biotécnico, sobre el que Hubbard basa su conocimiento del comportamiento activo (« tecnología »). Para Hubbard, no se ha tratado nunca de la práctica de la potencia espiritual, sino siempre y unicamente de la potencia biopolítica tal y como la define el analista de la potencia M. Foucault.

g) La obligación de « producir » a través de la puesta en práctica de la « Ética »

No obstante, la lógica de funcionamiento de la doctrina totalitaria de organización y de producción del sistema está constituida de reglas tecnócratas que se aplican, no solo a la construcción de la organización (« Admin ») y a la formación de los colaboradores (« Tech »), sino tambien, como ya ha sido indicado antes, a los dirigentes de los colaboradores (« Etica »). Este reglamento representa igualmente la expresión del principio de control total del comportamiento gracias a la puesta en práctica de medidas pedagógicas coercitivas. Las más ínfimas transgresiones del reglamento diseñado para la « producción » imputables a los funcionarios a los que estas reglas les han sido inculcadas por medio de entrenamientos repetitivos (« ideal escena », HCO PL del 5 de julio de 1970) son anotadas en el seno de la « Org » gracias a un refinado sistema de control y de sanciones (« Ethics »). En este contexto el sistema no reconoce ninguna esfera íntima. Todos los medios están entonces permitidos para someter a cada miembro del personal a un examen total, es decir, para hacer de él « un hombre de vidrio » total. El objetivo del control « ética » es el de detectar las « intenciones contrarias » y de erradicarlas inmediatamente por medio de una pedagogía coercitiva.

Para permitir el descubrimiento de tales intenciones constitutivas de una transgresión, unos « informes de conocimiento » sobre los errores cometidos por los colaboradores considerados contrarios al objetivo de producción deben de ser enviados a los « oficiales de ética » (los jueces de la organización local). Está igualmente exigido, llegado el caso, de denunciarse a sí mismo.

Todos los « informes de conocimiento » son guardados en unos dossiers llamados « de ética » con la finalidad de poderlos utilizar para justificar una sanción más severa o para expulsar al funcionario en caso de fallos repetitivos. La « evaluación » se efectua tambien a partir de los dossiers personales y de las estadísticas, así como de la « condición de ética » precedente. Y puesto que la ética cienciológica tiene mucho que

ver con el comportamiento productivo útil para la expansión del sistema, no es de extrañar que Hubbard perdonase generalmente incluso los crímenes, comportamiento completamente inmoral, a los colaboradores que tuviesen una estadística elevada (doctrina llamada de Khan Khan, HCO PL del 1 de septiembre de 1965 VIII).

Manifiestamente, el sistema aplica todavía a día de hoy esta ética final, utilitarista e inmoral cuando reprime sistemáticamente toda crítica justificada, difunde falsa propaganda, entrena a sus colaboradores para que sepan mentir perfectamente, acosa a los autores de críticas utilizando el terror psicológico u obliga a callar a los antiguos adeptos bajo la amenaza de publicar los resultados de sus confesiones obtenidas durante las sesiones de auditación. La Cienciología actua entonces según una doble moral cuyo principo de base es que « el fin justifica los medios ».

Por otra parte, el sistema se asegura permanentemente del no desviacionismo de sus colaboradores por medio de unos interrogatorios severos, con caracter inquisitorial, llevados a cabo dentro del marco de las llamadas « verificaciones de seguridad », a través de listas de preguntas y con la ayuda del detector de mentiras (« E-metre »). No obstante, los clientes son igualmente sometidos a tales « verificaciones » con la finalidad de detectar eventuales « intenciones contrarias » o « intenciones extrañas ». Las transgresiones supuestamente indicadas por un cierto movimiento de la aguja del electrometro son rapidamente « reparadas ». Entre las « medidas de reparación » figuran en primer lugar los procedimientos llamados de clarificación de palabras. Su objetivo es el de consolidar el nuevo lenguaje – y en consecuencia la orientación ideológica del que se haya desviado – a través del estudio de las definiciones propias del sistema.

Nunca es facilitada ninguna explicación sobre el objetivo ni los efectos de este programa de adiestramiento lingüístico. El hecho de que este arsenal de técnicas de educación represivas comprenda tambien la re-educación a base de trabajos forzados va de par con la lógica del sistema. Hubbard ha manifiestamente encontrado el modelo del « RPF » en la « pedagogía » de los campos de las dictaduras comunistas y fascistas.

Los individuos que entorpecen la fabricación del Hombre Nuevo tanto desde el interior como del exterior del sistema, son objeto de un tratamiento educativo especial particularmente sensible aplicado por la maquinaria de educación tecnológica de la Cienciología. Estos perturbadores que frenan la « producción » (« personas supresivas », HCO PL del 16 de octubre de 1967), son tratados a base de medidas de educación extremadamente dolorosas hasta que éstos dejen de frenar la maquinaria. El curso « PTS/SP, cómo afrontar y romper la supresión » (HCO PL del 23 de diciembre de1965 RA, revisado el 10 de septiembre de 1983) contiene un reglamento preciso de reglas materiales y de procedimientos relativos a la definición de los « actos supresivos » y las maneras de conseguir que éstos cesen. Es considerado un gran crimen (« high crime »), por ejemplo, el hecho de abandonar la Cienciología.

Las difamaciones públicas contra la Cienciología o los cienciólogos están prohibidas. Este reglamento confirma que el orden social propuesto por la Cienciología es el de un sistema caracterizado por el control total del comportamiento y la represión más severa posible. Ello demuestra igualmente que la Cienciología se situa y actua al margen del orden y de los valores democráticos. Debido a dichas medidas de control del comportamiento de una dureza inhumana aplicadas a la conducta de los colaboradores, éstos se sienten constantemente sometidos a una exigencia de rendimiento extremadamente elevada. Este sentimiento genera en ellos una mala conciencia permanente de no haber hecho nunca bastante, lo que les lleva de una parte a aumentar su « potencia de producción » estudiando nuevos cursos a precios exorbitantes, y de otra parte, a reclutar nuevos clientes (adeptos) para el sistema con el objetivo de mejorar su estadística.

La construcción del sistema se basa entonces sobre una estrategia de explotación sin consideración alguna por la persona humana, buscando deliberadamente esclavizar no solamente a los colaboradores, sino tambien a los clientes. En sus instrucciones diseñadas para los mánagers de la Cienciología situados en los puestos más altos, relativas a la manera de asegurar la « salud del grupo »,

Hubbard afirma que es necesario « utilizar » a la gente. Cualquier otro tipo de actitud social es rechazada y tachada de « psicótica » (HCO PL del 14 de diciembre de 1970).

5 – La Cienciología o el poder de psicodiagnóstico cibernético total

a) « Dianometría »Para medir en permanencia la capacidad de rendimiento del

« hombre-máquina », a parte del duro reglamento de explotación, el sistema utiliza todavía a día de hoy toda una batería de tests constituidos por un sistema jerárquico de métodos de medida psicométricos y sociométricos complementarios los unos de los otros. Es evidente entonces que Hubbard ha visto rápidamente el poder que le otorgaban sobre los hombres estos procedimientos de medida y de control « psicodiagnósticos ». En 1951, él se ha enorgullecido publicamente, y con énfasis, de su nuevo concepto de medida llamado « Dianometry – Your Ability and State of Mind » – no sintiendo temor alguno de compararse con Adolf Hitler ; aunque Hubbard ya había expresado otras veces su admiración por el inventor Thomas A. Edison y por Adolf Hitler, ambos fueron « inteligentes, extremadamente capaces, brillantes, y tuvieron mucho éxito ».

Pero había algo más a parte de inteligencia y energía en los planteamientos de Hubbard, puesto que él empieza aquí a exponer su modelo humano de tipo cibernético y los métodos de tests correpondientes (Boletines Técnicos 1950-1953, pág. 67). La predilección mostrada por el sistema hacia un control permanente por medio de tests behavioristas queda puesta de manifiesto por el espacio dedicado a este tema en las Series sobre la Gestión. Solamente en lo que concierne a las palabras claves « evaluación » y « evaluador » existen más de 350 citaciones y párrafos, y de ello se desprende que cada « auditación » es al mismo tiempo un tests de capacidad. Todos los actos de los colaboradores son igualmente verificados en permanencia. El modo de observación, de análisis, de grabación y de

evaluación hace pensar en los procedimientos de ensayo llevados a cabo por los ingenieros del servicio de control técnico en un laboratorio de ensayo. En consecuencia, es evidente que el debate puramente filosófico e ideológico no permite la penetración del verdadero núcleo del sistema de la Cienciología, donde de lo que se trata es de tests permanentes y de aprendizaje programado.

Y ésta es la razón por la que los cienciólogos no creen en los dogmas filosóficos ni religiosos, ellos solo creen en su capacidad a ser « optimizados » por medio de tests a sus ojos eficaces, y tambien por medio de la « tecnología » aplicada. La misión del Estado de derecho democrático debe entonces centrarse en el estudio y la descripción de estos métodos, en demostar sus peligros y la manera de evitarlos. No obstante, el Estado de derecho democrático está insuficientemente preparado hoy en día para afrontar este reto.

b) Sobre el camino de la sociedad de testsEn el transcurso de los últimos decenios, la divergencia entre la

visión filosófica del mundo y el avance científico ha ido aumentando cada vez más. Un número creciente de facetas de nuestra personalidad son hoy en día decriptadas por medio de métodos científicos y, en consecuencia, puestas a disposición de un eventual control técnico (W. Ch. Zimmerli, 1989). El poder de diagnóstico a nivel social, que no ha parado de crecer, permitiría entonces medir por medio de tests nuestras capacidades de producción, las necesidades y las opiniones del ciudadano de a pie, y poder pronunciarse, según el resultado de dichos tests, sobre las posibilidades de adaptación de éste último para llegar a realizar determinadas tareas en el seno de la sociedad. Existe un número incalculable de tests que se venden en el mercado de servicios constantemente en aumento.

En su vida profesional, sobre todo, y en el marco de la formación profesional continua, el ciudadano, ya sea éste un simple empleado o un mánager de alto nivel, está obligado a pasar varios tests de cuyo resultado depende la continidad de su vida profesional. Para realizar y evaluar dichos tests, se utiliza hoy en día la potencia de análisis y de cálculo de los ordenadores.

Los programas informáticos de desarrollo y de formación del personal de la empresa tienen como objetivo, de una parte, servirles de ayuda para el aprendizaje a los miembros del personal, pero estos programas son al mismo tiempo utilizados como herramientas de diagnóstico para la medida de sus capacidades de rendimiento. Concretamente, y gracias a unos programas informáticos de gestión muy punteros, desarrollados como instrumentos de gestión para la optimización del resultado de la empresa, la dirección de ésta puede hoy en día radiografiar en cualquier momento cada uno de los miembros de su personal a través de la « sombra informática » que éstos han dejado trabajando en el sistema informático montado en red dentro de la empresa, y de hacer así de cada empleado consciente de este peligro un « hombre de vidrio ». Aunque por motivos relacionados con la protección de la personalidad, semejante tipo de diagnósticos realizados gracias a la recopilación de datos personales a través de un sistema especializado (« Data Mining ») permanece prohibido hoy en día en Alemania [§206 del código penal alemán (StGB), § 43 de la ley federal sobre la protección de datos (BDSG)].

No obstante, un número cada vez más importante de empresas utilizan este tipo de diagnósticos para proteger sus sistemas informáticos totalmente construidos en red y, en consecuencia, altamente vulnerables. Bajo el pretexto de eliminar o de controlar a los empleados perturbadores, es cada vez más frecuente a día de hoy que sea aprovechada esta excusa, basada en la protección del sistema construido en red, para establecer un perfil de productividad de cada uno de los miembros del personal a fin de instaurar un control total de la calidad de producción (Kaltenborn, 1999).

c) Protección insuficiente de la personalidad respecto los « poderes basados sobre la realización de tests »

Quien impone la realización del tests es quien posee el poder. El test pone la persona testada a la disposición del poder diagnóstico de quien va a corregir el test. Si el individuo testado no puede saber de qué tipo de test se trata, ni si éste va a ser utilizado correctamente, el

individuo puede entonces convertirse en un simple juguete en manos de quien corrige el test. Incluso si los tests de personalidad se entromenten peligrosamente en el derecho a la autodeterminación informacional de cualquier ciudadano, el Estado no ha adoptado en absoluto, hasta el día de hoy, las medidas que se imponen para la protección frente al uso abusivo de estos tests. De hecho el sistema de la Cienciología puede vender sin ningún tipo de problema sus tests de personalidad (« test OCA ») a los empresarios industriales, incluso si dichos tests no están basados sobre ningún fundamento científico. Aunque a pesar de ello esta circunstancia no le impide en modo alguno a la Cienciología extender su pretendido poder de diagnóstico psicológico y difundir al mismo tiempo su modelo humano tecnificante en nuestra sociedad. Es más, la pretendida posesión por parte de la Cienciología del conocimiento total en materia de diagnóstico se vería aumentada por el hecho de que la Cienciología difunde en Alemania, desde hace ya algunos años, toneladas de propaganda en las que son atacados sistemáticamente y de manera difamatoria los poderes de diagnóstico universitarios, respetuosos del orden y de los valores democráticos, y que son la psiquiatría y la psicología académicas. No obstante el Estado de derecho democrático no está desprovisto de medidas de protección.

En su documento E/CN/4/1116 del 23 de enero de 1973, pag. 71 y siguientes, la Comisión de los Derechos del Hombre de las Naciones Unidas ha descrito los peligros inherentes a la utilización abusiva de tests y ha emitido a este respecto una serie de recomendaciones para la « protección de la esfera privada ante los métodos psicológicos y fisiológicos modernos cuyo objetivo es la obtención de datos y de informaciones », recomendaciones que Alemania todavía no ha trasladado a su legislación.

1) Los Estados deben regular de por ley la puesta en práctica de procedimientos de test psicológicos utilizados fuera del ámbito del consejo y de la terapia.

2) La utilización de tests psicológicos debe de estar regulada en prioridad por el derecho a la protección del individuo y efectuada unicamente por un personal cualificado y competente.

3) Unas disposiciones particulares deben regular la posibilidad de

negarse a realizar el test sin que ello suponga ningún perjuicio para el interesado, y de presentar oposición ante los tribunales respecto de las consecuencias que del resultado del test puedan derivarse.

4) En el campo de la formación y del trabajo, solo deben de ser utilizados unos tests que guarden una relación directa y verificable con las exigencias en materia de competencias laborales.

5) La utilización, la confidencialidad y la difusión de los resultados del test deben de estar regulados por la ley.

6) La utilización de tests de personalidad que permitan obtener informaciones sobre los procesos mentales relacionados con el insconsciente y el psiquismo profundo debe de ser sometida a unas reglas particulares y estrictas que aseguren la protección de los derechos del hombre. A fin de proteger la autodeterminación informacional, el diagnóstico psicológico realizado por medio de este tipo de tests debería de estar regulado de por ley lo más rápidamente posible. Esto permitiría poner punto final a todos los abusos sistemáticos cometidos por la Cienciología sobre los conocimientos diagnósticos, y que son los que le otorgan a ella un poder sobre sus clientes (adeptos).

6 - De la fabricación del « hombre-máquina » a la dictadura cibernética

Cabe plantearse la pregunta de por qué motivo los colaboradores y los clientes permanentes de la Cienciología no se rebelan contra la humillante obligación de tener que someterse a los controles psicométricos y sociométricos que la organizacion les impone regularmente. La explicación tendría mucho que ver con esto que sigue : dichos individuos se sienten tan influidos por las experiencias que ellos han vivido en estado de trance durante sus entrenamientos en la Cienciología, y que han destruido su visión empírica del mundo, que éstos creen en las promesas de la Cienciología cuando la organización afirma poder salvar a la humanidad entera por medio de sus

técnicas ; y en estas condiciones ellos aceptan como un mal necesario el hecho de que la aparición de una « nueva civilización » exigiría de su parte numerosos sacrificios, a saber, una disciplina de hierro, la sumisión a un control total o la puesta a disposición permanente y excesiva de su propia fuerza de trabajo y de sus propios recursos económicos. Al mismo tiempo, los colaboradores y los clientes permanentes de la organización se sienten en la incapacidad de darse cuenta de que en realidad se les ha estado manipulando con unos artificios inspirados en la psicología comportamentalista, y que se les está manteniendo dentro de un sistema cerrado por medio de técnicas de control cibernético. ¡¡Lógico !! puesto que a los clientes/adeptos no se les explica nunca que ellos han sido hipnotizados en el transcurso de determinados entrenamientos.

Al contrario, se les asegura siempre que no se utiliza la hipnosis. Las técnicas de control bio-cibernéticas no son identificables por el cliente, pues la Cienciología no habla nunca de su utilización y miente de manera intencionada sobre el empleo de estos métodos. Para establecer contactos, la Cienciología explota abusivamente las reglas sociales del juego. Con el juego y dentro del juego, puede ser posible controlar y modelar al mismo tiempo a los jugadores, es decir, instrumentalizarlos y someterlos. La antropología sistémica cibernética considera el juego como la adaptación inicial de la especie humana y de los organismos superiores a su entorno y, en consecuencia, como un modo particular de aprendizaje.

El juego sobre y con el modelo material y espiritual obtenido de la realidad es supuestamente útil para la adquisición y el ejercicio de ciertas facultades. La cibernética intenta explicar la modificación del comportamiento de los hombres y de los grupos apoyándose sobre la teoría del juego, que hace la distinción entre juegos determinados, no determinados, estrategias y no estrategias (Flechtner, 1970). La propia esfera de las interacciones entre los miembros de un grupo (relaciones interespecíficas) es igualmente considerada como un juego, y el conjunto de dichas interacciones (o estrategias de juego) es definido como siendo un sistema social (F. B. Simon, 1995). Desde la óptica de la teoría de sistemas, la Cienciología es considerada por ella misma como una red (HCO PL del 4 de diciembre de 1966) y un sistema de

juego (HCO PL del 4 de diciembre de 1966) en el que de lo que se trata es de adquirir nuevos jugadores a través de estrategias específicas. En este contexto, la Cienciología transmite la apariencia de ser un sistema abierto en el que uno puede empezar y terminar un juego según su propia voluntad. Pero en realidad se trata de un sistema concebido para guardar durablemente a los jugadores, es decir, para construir con ellos las partes integrantes de la estructura del sistema.

Los sistemas que presentan estas características son calificados de « sistemas esclavizadores » por la teoría de los sistemas. En los sistemas de este tipo en expansión, los elementos esclavizados consolidan la fuerza de expansión del sistema, como en una avalancha en la que se produciría un efecto sinérgico (H. Haken, 1981). El modelo de gestión de la Cienciología actua según este concepto sistémico ; dicho concepto constituye la base de la estrategia de expansión de la Cienciología.

a) La auditación, un juego de marionetas

En su teoría sobre las condiciones de juego del 1 de diciembre de 1950 (PAB n° 101), Hubbard escribe : « Los juegos son la respuesta más adecuada al enigma de la vida ». Éste define a continuación la auditación « como siendo un juego » (« Nosotros auditamos al « Preclaro » en todas las fases, igual que se juega a un juego »). En los detalles sobre « Las condiciones prealables para la auditación » del 12 de junio de1956 (PAB n° 88), Hubbard expone que, en el transcurso de la auditación el auditor, o miembro del personal de explotación, debe de dirigirse lo menos posible a su propio yo subjetivo, el mental. En revancha él tiene que inculcarle al « Preclaro » (el adepto que está siendo auditado) la facultad de jugar a un juego al final del cual él obtendrá un « premio » (ganancia cognitiva).

Esta técnica consistente en organizar juegos que permitan al final la obtención de una ganancia es la causa por la que a numerosos clientes y colaboradores les resulta imposible abandonar el sistema de la Cienciología. Los juegos de la Cienciología que, como ya ha sido visto antes representan un modelo de interacción casi mecánica, pertenecen

a la categoría de los juegos de control que no le dejan libertad al jugador. El jugador se convierte en una marioneta, un objeto que solo su entrenador puede modificar. El concepto axiomático de Hubbard según el cual todos los ejercicios del « Puente » (el camino trazado por Hubbard para alcanzar la « libertad total », segun él) son unos juegos de aprendizaje inspirados en la pedagogía terapeútica, desvela el sentido y la finalidad que tienen ciertos entrenamientos misteriosos de la Cienciología. Por ejemplo, el ejercico con un cenicero (en la imagen Roger Gonnet, antiguo dirigente de la Cienciología a Lyon) o el aprendizaje del « control » a través de la ejecución estereotipada y repetida de un ejercicio como « caminar, cambiar y pararse ».

El auditor juega con el « hombre-máquina » un juego de entrenamiento que recuerda el juego de los niños pequeños, con el objetivo de que éste aprenda a desplazarse por el mundo con la misma precisón que un robot, a interpretar el mundo como lo haría un instrumento físico, y a controlarlo con una seguridad cada vez más grande. La película americana Matrix, que sería una película culta para los cienciólogos avanzados, muestra una ilustración concreta de esta antropología cibernética fantástica. Los juegos cienciológicos que intervienen en los llamados Procesos Objetivos son de tal estupidez y banalidad que los clientes/adeptos sometidos a este tipo de ejercicios se sienten manifiestamente en la necesidad de rodearlos de misterio, a fin de poder llegar de esa manera a encontrarles imaginariamente un sentido, una utilidad, con la que lograr alcanzar la sensación de ganancia (cognitiva) personal que les había sido prometida al principio. Los precios exorbitantes de estos ejercicios constituyen otro elemento esencial para la elaboración de dicha « ganancia cognitiva », imaginaria, por parte del adepto, ya que si cuestan caros es porque deben « funcionar ». En la mayoría de casos los clientes de la Cienciología no se dan cuenta de que los ejercicios solo son una técnica operacional destinada a hacerles ejercitar bajo órdenes directas, y con precisión, determinados movimientos. El objetivo del « processing » es en primer lugar el de la interacción lúdica como tal. Al igual que en el juego de los niños pequeños, no se trata aquí de vehicular ningún sentido, como así sería el caso para los juegos de símbolos, sino que solo se trata de ejercer una acción (juego de función moto-sensorial).

En estos juegos « desprovistos de sentido » y en los que está permitida la elaboración de numerosas interpretaciones, el adepto/cliente es libre de encontrar por autosugestión el reconocimiento de cualquier ganancia (« cognición ») con la que se termina cada juego. Es algo manifiesto que el individuo confunde en estos casos el juego de función con el juego de símbolos, aunque esto tambien es facilitado por el hecho de que estos ejercicios estereotipados se prolongan a menudo durante horas y horas, lo que hace que sea bastante frecuente que el adepto/cliente entre en un estado de trance, y que éste considere dicho estado como el objetivo final del ejercicio. El truco consistente en incitar al jugador a interpretar una acción tonta y sin sentido como algo cargado de valor y de significado parece funcionar con una gran eficacia.

Los clientes se dejan arrastrar cada vez más lejos en el gran juego de la Cienciología gracias a esta experiencia de la « ganancia cognitiva » sobre la que ellos deben describir su vivencia por escrito al finalizar cada juego. La promesa de un aumento constante de la « ganancia » aportada por cada uno de los cursos que forman parte del « Puente a la libertad total » fuerza a los clientes a proseguir este camino. En el sector publicitario este método es calificado como sistema de incitación o técnica de incitación. El hecho de que haya que realizar unos sacrificios económicos y personales cada vez mayores es aceptado por los clientes/adeptos y por los funcionarios visiblemente transformados en esclavos de su pasión por el juego. Vendedor experimentado, conocedor de todas las astucias e instigador de sus funcionarios, Hubbard les ha encarecidamente recordado a éstos, en las « Series sobre el Márketing », toda la importancia que tiene el hecho de no dar nunca explicaciones a la gente sobre los ejercicios y experiencias misteriosas que ellos han vivido dentro la Cienciología, a fin de poderles vender otros cursos más facilmente (HCO PL del 25 de junio de 1978, reeditado el 31 de agosto de 1979).

De ese modo los clientes no son más que unas marionetas en manos de su entrenador, quien él mismo es otra marioneta del sistema la mayor parte del tiempo. Y ésta es la razón por la que los clientes/adeptos y los colaboradores no se dan cuenta a menudo de que, al contrario de lo que afirma la publicidad cienciológica, ellos no están recorriendo un « camino espiritual », sino que al contrario ellos

están sometiéndose a un adiestramiento que va a hacer de ellos unos « hombres-máquina » que funcionarán perfectamente dentro de un sistema en expansión que los utiliza para hacer venir otros clientes, como en un juego piramidal, para atraer a más jugadores. La presión ejercida por toda la maquinaria del sistema es tan fuerte que incluso los funcionarios con un mayor grado de lucidez se dejan persuadir por los métodos de venta agresiva (hard sell) y compran otros cursos, incluso si ellos están ya economicamente arruinados.

Las fuerzas de resistencia naturales parecen encontrarse completamente paralizadas por el adiestramiento ideológico.

b) Plan y práctica de expansión según las reglas de un juego de estrategia

La teoría cibernética del juego otorga una particular importancia a los juegos que conciernen la competición y el combate, y que en consecuencia están basados sobre un conflicto que cada cual intenta resolver en beneficio propio a través de una determinada estrategia (G. Klaus, 1969 ; Flechtner, 1970). El sistema de la Cienciología, con todas sus organizaciones, es explícitamente presentado como un jugador que participa en un juego de este tipo jugado contra el mundo entero (HCO PL del 4 de diciembre de 1966, 12 de febrero de 1967 y 6 de diciembre de 1970), y las Series sobre la Gestión (Management Series) hacen implícitamente referencia a la teoría cibernética de los juegos estratégicos. Para ganar en este juego, los jugadores son entrenados según unos planes de batalla preconcebidos (HCO PL del 22 de agosto de 1982) e instruídos de acuerdo con un plan estratégico o « strategic planning » (HCO PL del 5 de enero de 1983).

Es algo llamativo el hecho de que existan, en el índice de materias de las Series sobre la Gestión, unas cuarenta referencias a la palabra clave « guerra » y quince a la palabra clave « combate ». Es por eso que las Series sobre la Gestión pueden ser globalmente consideradas como un manual de logística y de estrategia cibernéticas para la conquista del mundo, a la que aspira el modelo de gestión de la Cienciología. Y no estaríamos aquí realizando una interpretación abusiva, puesto que este extremo queda patente no solo por la

utilización de una terminología de estrategia militar, sino tambien por el hecho de que el sistema de la Cienciología se encuentra realmente armado para su expansión como lo estaría para un combate : su núcleo duro se encuentra dotado de una forma de organización militar.

La SeaOrg, en la que sus miembros visten un uniforme, se define como una orden militar capaz de intervenir en aquellas regiones en crisis para eliminar los obstáculos cuando la expansión de la Cienciología se ve frenada. Del mismo modo, los servicios secretos OSA (Office of Special Affairs), quienes deben velar por un ambiente seguro para la expansión, se comportan como un pelotón de combate. Sus agentes, así como los de la SeaOrg Management, son en este sentido preparados para sus « misiones » y operaciones a través de una formación práctica especial inspirada esencialmente en el manual de estrategia del chino Sun Tsu (500 antes J-C), que es una guía para la utilización de técnicas de espionaje y de combate biológico contrarias a cualquier forma de moral y de derecho ; así como del « Manual of Justice » en el que Hubbard ha detallado de qué manera hay que eliminar al adversario con « eficacia » por medio de métodos sucios. La prueba es que estas instrucciones son aplicadas en el mundo entero contra las críticas hacia la organización.

A través de la definición de un objetivo estratégico y la utilización de un modelo de organización de tipo militar, Hubbard ha explotado las fuerzas de cohesión social que unen en la acción a los miembros de una tropa de combate con una misión que cumplir. Este aspecto crea entonces una harmonización perceptiva, una visión del mundo y una perspectiva de acción comunes (J. Ruesch/G. Bateson, 1995). Como buen conocedor de la psicología social, Hubbard ha dado como misión a la tropa de combate que él mismo ha creado la de asegurar la « supervivencia de toda la humanidad », motivación que no ha sufrido ningún cambio desde entonces. Sin embargo esta meta consistiría, una vez más, en un artificio psicológico sacado del arsenal de los propagandistas totalitarios y de los especialistas de la incitación, quienes se sirven de estas causas nobles para organizar campañas de venta y agitar los movimientos sociales. De ese modo, el reglamento cienciológico – constituido por un laberinto de normas harmoniosas las unas con los otras – que rigen la organización, la educación y el control

sistémico, reduciendo los colaboradores y los clientes/adeptos a la categoría de instrumentos, reposa sobre la utilización abusiva de los conocimientos relativos al comportamiento activo inspirados en las teorías de los sistemas de la información y del control.

Si la posibilidad de que pueda existir una utilización abusiva de estas técnicas es desde hace tiempo objeto de debates entre los científicos, la puesta en práctica de este tipo de amenaza ha sido considerada como algo imposible hoy en día (H. Stachowiak, 1989). Aunque no es por ello que esto no deja de sorprender pues, desde el descubrimiento de las leyes cibernéticas por Norbert Wiener, el antiguo bloque del Este, principalmente, ha trabajado intensamente sobre el estudio de la aplicación práctica de esta nueva técnica científica. Así, el estudio de la cibernética ha llegado incluso a estar inscrito en los programas de los partidos políticos de la URSS y de la RDA (G. Klaus/H. Liebscher, 1970). Los ideólogos marxistas leninistas veían incluso en la teoría y la técnica cibernéticas la prueba científica de la justificación del materialismo dialéctico (G. Klaus/M. Buhr, 1964, 1972). A pesar de la utilización mundial de los conceptos y técnicas pertenecientes a la teoría de los sistemas, de la información y del control, el motivo por el cual existe una constante referencia a la cibernética en tal que concepto vulgarizado dentro de la teoría y de la técnica de la Cienciología, así como un abuso sobre este nuevo conocimiento de organización y de control, no ha sido todavía desvelado a día de hoy. La razón determinante es sin duda alguna que el radicalismo de una transformación tecnocrática basada en la creación de un sistema social fundado unicamente sobre una teoría y unas prácticas procedentes de la ingeniería cibernética, y que por consiguiente degradarían al hombre al estatuto de robot, escapa ampliamente a cualquier imaginación normal.

De la misma manera, no ha sido tampoco revelado hasta nuestros días que en las Series sobre la Gestion (Management Series), la noción de « Thetan » designa una unidad de control que emite de manera autónoma unas órdenes que controlan otro sistema, a saber el cuerpo humano (HCO PL del 4 de diciembre de 1966). Podemos encontrar un planteamiento similar en la cibernética académica (Haken, 1981). Con respecto a la pertinente utilización hecha en las Series sobre la Gestión del lenguaje y esquemas pertenecientes al sector de la ingeniería, uno

no puede dejar de sospechar que tal vez éstas no hayan sido escritas por Hubbard, sino por tecnócratas sin escrúpulos quienes se han servido del escritor de ciencia ficción y mitómano, Ron Hubbard, para disimular su voluntad de potencia cínica. Si, en todo caso, las Series sobre la Gestion son de Hubbard, hay como para pensar que su mito del Thetan solo ha sido concebido como un « mystery sandwich » (HCO PL del 25 de junio de 1978), para atraer a la gente hacia su maquinaria de explotación.

La clave que permite entonces comprender el sistema totalitario de la Cienciología y su poder de seducción no se encontraría tanto en su superestructura pseudo-religiosa (en la que tal vez creen muchos cienciólogos de base, aunque probablemente no los autores de las Series sobre la Gestión ni los mánagers situados más alto), sino en su capacidad a la hora de utilizar los conocimientos de la psicología comportamentalista y de la cibernética de los sistemas, que son los que le permiten imponer su dominación sobre los demás a fin de controlar a los hombres, reducirlos al rango de instrumentos y esclavizarlos. Entre todas estas técnicas utilizadas de manera acumulativa figuran :

1) La motivación de los clientes/adeptos y de los colaboradores a través de la puesta en práctica permanente de procedimientos de incitación (técnicas de incitación) en forma de promesas de ganancia, de felicidad y de éxito, llevadas a cabo por medio de campañas de publicidad y de cursos que los adeptos estudian ; la provocación con fines manipulativos de sentimientos de felicidad, bajo los efectos de la hipnosis o por sobre-estimulación del organismo (por ejem. con sesiones de sauna de una duración excesiva dentro del programa de purificación llamado «Run-down») ; el hecho de hacerles ver a los clientes objetivos imaginarios con la intención de disimular la voluntad de potencia totalitaria de la organización.

2) La acomodación a un nuevo lenguaje inspirado en las ciencias de la ingeniería para la re-estructuración operacional de la acción y del pensamiento ; represión y pérdida del lenguaje corporal natural.

3) El aprendizaje a ejercer un poder de control sobre sus semejantes a través de :

a) El aprendizaje por medio de ejercicios repetitivos de caracter militar (drill). b) El aprendizaje programado.

c) El condicionamiento operacional gracias a la represión de los comportamientos indeseados y a la consolidación de los deseados (técnica de refuerzo). d) El control sistemático del grupo sobre el individuo.

4) Endoctrinamiento de los adeptos por medio de una falsa antropología con la promesa de conseguir un control total del espíritu y del alma a través de la medida de la electricidad corporal de una parte, y con la puesta en práctica de técnicas de aprendizaje de otra parte.

5) Inducción de una especie de adicción que empuja a los clientes/adeptos y a los colaboradores a querer participar constantemente al « juego ganador » de la Cienciología.

6) La explotación de dicha adicción : a) Por medio de los precios

exorbitantes de los cursos vendidos. b) A través de la explotación de los colaboradores.

7) Desprecio sistemático de los saberes de las ciencias humanas y sociales relativos al trato respetuoso de la dignidad humana, del cuerpo, del alma y del espíritu, del comportamiento de los colaboradores y de las reacciones frente a las críticas.

7 - El tecnototalitarismo, un peligro para el orden democrático

de valores en el siglo XXI Debido a sus objetivos y a su comportamiento, la organización de la Cienciología encarna un nuevo tipo de totalitarismo. Para someter a los hombres y sus organizaciones, dicho totalitarismo se sirve de una técnica de mando y de control inspiradas en la cibernética y el behaviorismo (tecnototalitarismo o ciberfascismo). Hubbard ha copiado sin duda alguna la visión consistente en liberar a la sociedad de sus « agresiones » por medio de la tecnología del aprendizaje behaviorista al especialista del aprendizaje B. F. Skinner, quien publicó en 1948 un libro titulado « Walden Two » en el que él presentaba un modelo de re-educación de la sociedad similar al de Hubbard.

Sin embargo, contrariamente a Hubbard, Skinner indicaba ya desde el principio que el éxito de esta tentativa de educación exigiría que el hombre renunciase a su libertad y a su dignidad. Incluso si la teoría antropológica que admite la posibilidad de remodelar al hombre a voluntad por medio de las tecnologías del aprendizaje ha sido rechazada desde hace tiempo, dichas técnicas son cada vez más utilizadas hoy en día en el sector de la formación profesional continua (formación de los directivos) con el objetivo de una pretendida optimización humana.

Por otra parte el concepto tecnológico de la « optimización » aplicado por Ron Hubbard al ser humano sería perfectamente acorde con la tradición del « Scientific Management » del ingeniero F. W. Taylor quien, a principios del siglo XX, utilizó técnicas de ingeniería para calcular el rendimiento y el comportamiento de los obreros de las fábricas americanas, para separarlos en funciones individuales y ordenarlos según una nueva cadencia de producción, es decir, para mecanizarlos y en consecuencia deshumanizarlos (taylorismo). En esta técnica que pretende disciplinar al hombre tanto exterior como interiormente por medio de métodos científicos, Max Weber veía una forma de dominación típica de la época moderna (ver sobre este tema Der Neue Mensch). El verdadero peligro potencial derivado del « Scientific Management », a saber, la posibilidad de practicar un uso

abusivo con fines totalitarios, ha sido descrita de una manera que continuaría siendo válida hoy en día por el ingeniero y escritor ruso J. Samjatin.

A partir de 1920, en la época en la que Max Weber criticaba el taylorismo, J. Samjatin explicaba la capacidad del bolchevismo a colectivizar la sociedad en Rusia y a someter a los individuos a su causa por medio de la utilización abusiva de los métodos del « Scientific Management ». En el romance de anticipación satírico titulado « Wir », en el que Samjatin critica al bolchevismo, los hombres son unos « números » controlados según los métodos de Taylor, es decir, según unas leyes matemáticas. Éstos pagan el precio de su perfecto funcionamiento técnico con la pérdida de su alma.

La estrategia de la aplicación de las tecnologías a todas las relaciones personales y sociales (social engineering) considerada por Samjatin como característica del totalitarismo, es incontestablemente aplicada por la Cienciología. Es algo significativo que, para describir sus técnicas de modificación del hombre y de la sociedad, la organización nunca utiliza los términos de « ideología » ni de « psicología », sino el de « tecnología ». En el informe separado antes mencionado, informe elaborado por cuatro expertos de la Comisión de Investigación, y según la orientación científica de las teorías y prácticas de la Cienciología, ésta no se encontraría clasificada en el contexto de las religiones ni de la fe, sino en el contexto postmoderno de las ideologías que se sirven de la ciencia y de la técnica (cientismo). La Cienciología pertenecería entonces a la nueva corriente cultural tan criticada por el sociólogo N. Postman quien la califica como « Tecnopol » (1991), y por su homólogo G. Ritzer quien habla de « McDnalización » de la sociedad (1993). Postman teme la puesta bajo control de toda la sociedad a través de la potencia de las tecnologías ; Ritzer ve en la progresiva aplicación de las tecnologías sobre la sociedad el peligro de que se construya una « jaula de hierro » para la sociedad entera. J. Weizenbaum, científico americano experto en informática, observa el mismo peligro y lanza una alerta sobre la

tendencia simplista que se observa en la sociedad de seguir avanzando hacia un cientismo cibernético, y contra los excesos sin límite en este sentido (1976).

La aplicación al hombre de las técnicas de mando y de control, así como de unos procedimientos de medida y de evaluación psicométricos, permite identificar claramente a la Cienciología como un representante típico del « Tecnopol » (tecnopolio). No obstante podría darse el caso de que las críticas de los científicos antes citados fuesen exageradas, pero incluso así éstas describen con justeza la tendencia creciente hacia una orientación biotécnica de nuestra sociedad, y que sería aplicable, en cualquier caso, a las prácticas de la Cienciología. Es por este motivo que algunos futurólogos alemanes ven peligros similares a los ya expuestos por los autores americanos. El instituto Fraunhofer para la economía y la organización del trabajo (JAO) de Stuttgart, ha desarrollado tres escenarios futuros posibles para el siglo XXI. Frente a dos de sus modelos más optimistas se opone un tercer modelo llamado en este caso « Metrópolis », y que representa una variante del « Tecnopolio » de Postman.

La Comisión de Futurismo instituida por los lander,s de Baviera y de Saxe considera que no hay que descartar una evolución de la sociedad del tipo « Metrópolis » si no se toman medidas para contrarrestar esta tendencia. Nuestra sociedad apenas ha llegado a comprender el riesgo que puede engendrar la aplicación desenfrenada de las técnicas cibernéticas al mundo de las relaciones humanas (ciber-sociedad), principalmente en lo que concierne los métodos del « Scientific Management » aplicados a la organización y al control cibernéticos de la empresa a los que determinados sectores de la vida económica recurren.

La Cienciología es un representante extremista de esta tendencia que consiste en otorgarle la primacía a la tecnología. Incluso si la organización de la Cienciología permanece desde 1997 bajo los radares de los servicios de contra-espionaje alemanes como movimiento anticonstitucional, y si numerosos son los adeptos que le han dado la espalda a la organización gracias a las importantes campañas de

información realizadas por el Estado alemán, debemos permanecer vigilantes. Para evitar los peligros inherentes a la utilización abusiva de las tecnologías de aprendizaje de tipo behaviorista y de las técnicas de control cibernéticas, sería necesario desarrollar lo antes posible unas normas de comportamiento ético y jurídico que permitan proteger al individuo. Es por este motivo que hay que desarrollar lo antes posible un reglamento jurídico aplicable a las actividades desarrolladas dentro del sector de la psicología, de la formación profesional contínua y del diagnóstico de la personalidad por medio de tests, tal y como la Comisión de Investigación lo ha recomendado.