La Evolucion de la Vivienda junto a las Necesidades Humanas. ¿Habitamos o nos hacen habitar?

Fernando Carrascosa BernalHTCA 2

Grupo 2.132011/12

MMar Loren Méndez

A Nerea. Porque sin ella probablemente no estaría escribiendo esto.A Mar. Por haberme dado la oportunidad.

Índice

La Evolucion de la Vivienda junto a las Necesidades Humanas. ¿Habitamos o nos hacen habitar? 5

Resumen 5

Palabras Clave 5

Contenido 6

Laviviendaeneltiempo. 6

¿Quécaracterísticastieneunavivienda? 6

¿Quénecesidadesdebencubrirlasviviendas? 6

¿Cuándoseoriginalavivienda? 6

La vivienda en las sociedades nómadas. 6

Elpasodelasociedadnómadaalasedentaria. 7

LaviviendaenlasCulturasClásicasyelMundoAntiguo. 7

Egipto.7

Grecia.7

Roma.7

LaviviendaEdadMediayelRenacimiento.7

La vivienda del S. XIX. 8

La vivienda del S. XX. 8

Eldesarrollooccidentalysurepercusiónenellejanooriente.8

Conclusiones. 9

La Evolucion de la Vivienda junto a las Necesidades Humanas. ¿Habitamos o nos hacen habitar?

Resumen

Durante el desarrollo de la historia, el Hombre ha buscado su refu-gio, construyéndolo para resguardarse de la climatología o de las fieras que habitan el mundo en el que se desenvuelve y en base a sus necesidades pero, ¿Son estas necesidades originarias del ser humano como ser vivo o se las han impuesto otros hombres a fin de controlarlos? Este escrito es una reflexión sobre la intención de habitar del hom-bre, cómo y cuándo lo hace, qué lo mueve a hacerlo. Es una travesía, desde la ocupación modificación individual de unas ramas, para resguardarse de la lluvia hasta la necesidad de vida social que ge-nera la vida colectiva que propone la ciudad. Un viaje de lo indivi-dual a lo colectivo.A lo largo del artículo se propone la coyuntura del habitar ¿habita-mos como queremos o como nos dejan? ¿Hacemos lo que queremos o lo que una sociedad nos hace creer que queremos en base a sus intereses? ¿Somos individuos independientes o se nos ha forzado a vivir de una forma social, dependiendo de los servicios que unos terceros nos ofrecen? ¿Nos están imponiendo un estilo de vida a través de la forma de habitar?

Palabras Clave

Historia, Humanidas, Vivienda, Necesidad, Imposición.

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Contenido

Laviviendaeneltiempo.

¿Quécaracterísticastieneunavivienda?Son muchos los elementos que configuran una vivienda, y muy variados, las características de una vivienda varían según su localización, el clima, el material que pueda ser utilizado, el terre-no donde se construirá, la técni-ca con la que se puede edificar, el número de personas que la habitará, la capacidad adquisiti-va. Pero sobre todo, depende de las necesidades.

“vivienda.

(Del lat. vivenda, t. f. de -dus, part. fut. pas. de vivĕre, vivir).

1. f. Lugar cerrado y cubierto construido para ser habitado por personas.”1

1 Definición de vivienda por el Diccionario de la Real Academia de la lengua Española, en su Vigésimo segunda edición.

¿Quénecesidadesdebencubrirlasviviendas?Si consultamos el DRAE, nos dirá que una vivienda es un lu-gar cubierto construido para ser habitado por personas. Nosotros profundizaremos un poco más, puesto que debemos ser críticos con esta definición. Para habitar un lugar no es necesario que un lugar sea construido, y si en una vivienda, es donde habitan las personas, esta no tiene por qué ser construida entonces.Para habitar un lugar, éste debe reunir una serie de condiciones, que, en general, han de ser la protección frente a los acciden-tes climatológicos o del entorno, generando un pequeño hábitat de un relativo confort.Esto lleva a que un pequeño acto, como encender una hogue-ra en una cueva en la que hace demasiado frío ya sea habitarla, y por tanto, puede ser temporal-mente una vivienda.

¿Cuándoseoriginalavivienda?Esto significa que desde que el Hombre ha puesto una serie de ra-mas caídas de un árbol, para cubrirse de la lluvia o entra en una ca-verna con el mismo fin, ya la está convirtiendo en una vivienda. Por tanto, la vivienda ha acompañado al Hombre prácticamente desde el origen de éste y con él ha evolucionado.

La vivienda en las sociedades nómadas.Las diversas sociedades nómadas que han ido descubriéndose a lo largo de la historia entendieron la vivienda de diversas formas, debido a su distancia tanto física como temporal entre ellas. De he-cho aún existen comunidades nómadas, que continúan con su estilo de vida, ajenas a lo que sucede en el mundo “desarrollado”, estas comunidades siguen desplazándose de un lugar a otro, según las ventajas que ofrezca y la temporada que sea. Por ello sus viviendas han de ser fáciles de hacer, en algunos casos hasta de portar. Sue-len ser de materiales sencillos, existentes de forma natural en el

lugar que se implanta. En el caso de ser viviendas que pueden ser portables(como el caso de la Jaima), son de materiales ligeros, que puedan ser portados por animales y fácilmente desmontables.Su función es principalmente la de dar cobijo en la noche, puesto que el resto del día los miembros de la tribu nómada se encuentran buscando alimento.Es una vivienda que se ajusta a una necesidad muy concreta, la de tener un refugio frente al exterior.

Caza de búfalos, Tassili n’Ajjer, Sáhara, Argelia.15 de abril de 2006, Gruban.

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Elpasodelasociedadnómadaalasedentaria.Con el desarrollo de la agricultura, el hombre deja de necesitar mo-verse de un lugar a otro y se asienta en lugares fijos. Introduciendo nuevas necesidades a la vivienda, la vivienda debe ser duradera, perenne en el tiempo, de materiales resistentes, con una tecnología más elaborada. Estas son las nuevas cualidades que debe tener la vivienda debido al cambio del dinamismo a la estática.Por otro lado se produce un cambio social, no depender de la caza, de la estación del año o del lugar en el que se implanta la tribu da al Hombre cierta independencia, ya no depende de sus compañeros, pues cultiva su propio alimento, pastorea su propio ganado o se ocupa de su pesca. Se libera en cierto aspecto de las cargas “colec-tivas” que suponía la caza y es un ser más individual. El resultado de esto se hace patente en la vivienda, pasa de haber una única vivienda común a haber viviendas individuales, la vida en sociedad cambia, y con ella, la tipología de vivienda también.

LaviviendaenlasCulturasClásicasyelMundoAntiguo.Para poder ver cómo era la vivienda en estas sociedades, ya seden-tarias, es mejor hacerlo por secciones. Cada sección atiende a una cultura, con sus circunstancias, de esta forma podemos ver cómo adapta la vivienda cada una a sus necesidades.

Egipto.En el antiguo Egipto, las viviendas eran de planta única, hechas de adobe, y cuya planta era rectangular, varía el tamaño según el esta-mento, la vivienda del esclavo tenía entre dos y cuatro dormitorios, dispuestos en retícula ortogonal, por otro lado, la de posiciones más altas, como la del capataz estaban mucho más desahogadas.

Grecia.En la Antigua Grecia, a excepción de los palacios de Creta y Micena, la vivienda era de pequeña escala, sencilla. Distribuida alrededor de un patio interior, puesto que le daban mucha más importancia a la vida pública que a la privada. Toman mucha más importancia los edificios públicos que la vivienda privada.

Roma.En la cultura romana, la vivienda se diferencia por estamento so-cial, mostrando que cada clase, según su poder adquisitivo o los privilegios de que disponen. Empieza a predominar la “apariencia” creando unas necesidades que no tienen por qué ser las que corres-ponden al verdadero nivel del individuo.

La vivienda Edad Media y el Re-nacimiento.Cuando con la Edad Media apa-rece el feudalismo, los grandes hombres que tenían el poder y la influencia ofrecían protección, a cambio de un tributo, a los hombres humildes.Aunque también había perso-nas que vivían en el campo, en granjas o viviendas insalubres, en unas condiciones míseras, se marca la diferencia de clases de una forma radical, con vivienda diferenciada para los distintos estamentos sociales, la nobleza, en palacios, el clero, en monas-terios o viviendas acomodadas a la vida religiosa, y los campesi-nos, que viven hacinados.En esta misma edad, prospera-ron algunos negocios, y comen-zó a producirse una nueva clase social, construyéndose casas similares a las de la nobleza, en esto ya se observa una inserción de un modo de habitar diferen-te al que “corresponde” a esta clase social, que pretende ha-bitar como los nobles. Al hacer esto, se crea una necesidades que no son impuestas por el propio Hombre, sino por otros hombres, que se consideran su-periores. Una élite que exije que se actúe como ellos para poder pertenecer a su “selecto club”.

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La vivienda del S. XIX.En el siglo XIX surge la revolu-ción industrial produjo un avan-ce en la sociedad, un gran salto para el desarrollo de la urbe. Se produjo una explosión demo-gráfica, la gente pasó de vivir en un terreno rústico para ir a la ciudad a trabajar en la industria. Esto supuso un grave problema,

Eldesarrollooccidentalysurepercusiónenellejanooriente.El desarrollo de la vivienda en oriente transcurrió en una línea completamente diferente a la de occidente, puesto que su desarro-llo ha sido más lento, y sus intereses han sido distinto, dedicaron su tiempo a desarrollar una vivienda armoniosa con el individuo, donde se sintiera cómodo, respetando lo tradicional, la penumbra, lo misterioso.Con la llegada del avance de occidente, y el desarrollo mayor que éste ofrecía, las regiones orientales se “anularon” y dejaron paso a éstos avances y estas tecnologías.

“En una palabra, Occidente ha seguido su vía natural para llegar a su situación actual; pero nosotros, colocados ante una civilización más avanzada, no hemos tenido más remedio que introducirla en nues-

tras vidas”1

1 TANIZAKI, Junichiro, El elogio de la sombra (Madrid:Siruela, 2011) p. 25

pues la infraestructura urbana no estaba preparada para ello, y se vieron forzados a vivir ha-cinados, en unas condiciones insalubres. Se desarrollan teorías de cómo debe evolucionar la ciudad, es en este momento en el que sur-gen las propuestas de ciudad jardín, y todas las que consoli-dan el urbanismo como ciencia.De nuevo se ve, como los más desfavorecidos se ven obligados a vivir en unas condiciones que no son las que realmente cubren sus necesidades, sino las que les “impone” una nueva necesidad.

La vivienda del S. XX.Se estila la vivienda en propie-dad, una vez “estabilizada” la situación en la ciudad, lo que se busca es volver a la individua-lidad que se disfrutaba en el principio de los asentamientos sedentarios, aunque esta indivi-dualidad se ve bastante limita-da, pues ahora se vive en pisos, que pertenecen a comunidades de vecinos, raras son las casas unifamiliares ya, salvo para las clases pudientes. Abunda la clase media, que vive en apar-tamentos o pisos, en los que, a pesar de la individualidad, sigue dependiéndose de la tribu, aho-ra llamada sociedad para tomar decisiones importantes.

Dejaron de preocuparse por el desarrollo de su vivienda (que no tiene nada que envidiar a la occidental) para rendir pleitesía al desarrollo, dejando que occidente impusiera su modo de vida, sus costumbres y sus gustos, sus aficiones, su forma de entender la vida.Occidente impuso a Oriente su modo de vida, un modo de vida muy diferente, y que ha pasado factura a los orientales, habiéndoles he-cho perder gran parte de su riqueza.

Casa de antigup estilo japonés. Mitake Tokyo Japan.5de Noviembre de 2005, Hiragayato.

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Conclusiones.El Hombre, en su origen, ha vivido conforme a sus necesidades, ha adaptado el terreno, aprovechado los materiales que la naturaleza le ofrecía, para aplicar soluciones sencillas, pero a su vez eficaces. En sus primeros pasos el Hombre hacía su vivienda con el único fin de cubrir una necesidad.Conforme la tecnología ha ido avanzando, el hombre ha buscado nuevas necesidades que cubrir, necesidades no reales, necesidades “sociales” (entendiendo lo social como lo “impuesto” por un grupo de personas) que además no eran necesariamente las necesidades acordes con las reales. Sino que, en muchos casos, eran necesidades aparentes, por querer ser más que otros.Esto quizá se debe, como se habla en el último apartado, a que, fascinado por el desarrollo de otros, el hombre desea imitarlo, sin tener en cuenta que quizá no le conviene eso, sino desarrollar él mismo su técnica, como dice Junichiro Tanizaki en “El Elogio de la Sombra” para que su tecnología sea más acorde a sus necesidades real.Por tanto se puede afirmar que el hombre ha dejado de habitar como realmente lo debe hacer para habitar como otros hombres le “sugieren”, mediante distintas formas (Televisión, admiración, prensa…), sin pararse a pensar qué es lo que realmente quiere.

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>Tanizaki, Junichiro. (1994). El Elogio de la Sombra. Madrid: Siruela.

>Rykwert, Joseph,. (2005). La casa de Adán en el Paraíso. Barcelona: G.G.

>Apuntes de Urbanismo 1 (2010-11) tomados por Fernando Carrascosa Bernal.

>http://html.rincondelvago.com/evolucion-historica-de-la-vivienda.html (10-feb) (Evolucion histórica de la vivienda, trabajo de curso).