la etica marxista

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La tica Marxista Para poder analizar la tica desde el punto de vista de la ideologa marxista, tendremos que partir de una serie de cuestiones, que nos ayudarn a comprender el pensamiento y la concepcin, que en este caso Karl Marx pondrn de manifiesto en sus trabajos filosficos y cientficos acerca de la sociedad moderna tradicional. Tenemos que tener en cuenta el contexto histrico-social en el que se desarrolla esta ideologa y todo lo que ello implica para su comprensin. Karl Marx desarrolla un anlisis filosfico y econmico acerca de las relaciones sociales capitalistas que afectaban a la sociedad moderna de su poca. Debemos destacar que la sociedad europea del siglo XIX, en la que este filsofo se desenvolva, era una sociedad en la que el capitalismo burgus ya estaba afianzado, convulsionado por la Revolucin Industria. La concepcin que Marx tiene de la historia es lo que se denomina como materialismo histrico, debido a que l la piensa como una materia, porque el hombre trabaja con ella, adems porque estudia lo concreto de la historia las relaciones de produccin, las clases sociales, los conflictos polticos, etc. Se considera a esta filosofa como la filosofa de la historia, es decir, el sujeto de la historia es el hombre concreto en su mundo social, el hombre que se crea a s mismo en el trabajo. En contraposicin al idealismo hegeliano, que la ve como el desarrollo de las ideas separado de su fundamento socio-econmico, el materialismo histrico pone principal nfasis en la actividad prctica de los hombres. l postula una filosofa de la praxis y no un simple anlisis terico. Para Marx la historia, desde siempre, est marcada por la lucha de clases antagnicas; a saber, el proletariado (oprimido) y la burguesa (opresor). El primero de estos al perder los medios de produccin en manos de la burguesa capitalista se ve en la necesidad de vender su fuerza de trabajo para poder subsistir. Por el contrario el segundo, concentrando los medios de produccin y estableciendo sus propias relaciones de produccin, aglutina el capital y obliga al proletario a ser explotado para poder obtener su consecucin. La historia en el devenir dialectico se caracteriza por las contradicciones que en ella se encuentran desde siempre. As como la burguesa en su momento neg al feudalismo, el proletariado, segn Marx, negara a la burguesa para llegar a una superacin. Estas contradicciones del sistema de produccin al sistema vigente de cada caso, son las que mueven la historia. La base de las relaciones de produccin forma la denominada estructura econmica de la sociedad, la base real sobre la que se levanta la superestructura jurdica y poltica que sustenta el orden imperante, en este caso el capitalismo. La esencia del hombre se encuentra en la naturaleza y en la relacin con otros hombres, Marx lo concibe a este, como el ente que se produce a s mismo, que se genera en el trabajo. Por tal motivo, el trabajo ser el medio para su realizacin, para su satisfaccin y para su felicidad. Se da en este proceso de autoproduccin un proceso dialectico, que es la exteriorizacin del hombre en la naturaleza; es decir, el trabajo significa una humanizacin de la naturaleza bebido a que al transformarle deja su propia esencia en ella. Esta podra considerarse como un concepto de la

moral de la clase oprimida, ya que a travs de ella podrn ser realmente libres tanto de materia como de espritu. En cambio existen atenuantes que llegan a romper con esta posibilidad de libertad, la cual Marx denomina como alienacin. Si dijimos que el ser del hombre consiste en el trabajo, la alienacin se da cuando el trabajador es ajeno de su produccin, o sea, lo que produce, lo que crea ya no le pertenece a l, sino que por el contrario le pertenece a otra clase, a la burguesa. Esta apropindose de los recursos naturales y utilizndolos para la acumulacin de su capital, le quito al proletariado la oportunidad de ser libre a travs del trabajo. Se siente ajeno a lo que hace, por lo tanto no es feliz y no es capaz de realizarse, llegando a tal punto de negarse, de sentirse como una herramienta ms, como una maquina mas en el proceso de produccin capitalista. Por eso el trabajador solo se siente en s, fuera del trabajo, y en el trabajo fuera de s. Esto se convierta ya no en una satisfaccin sino en un medio para poder subsistir y conlleva un sufrimiento al no poder elegir su trabajo. Podemos encontrar una contraposicin a la moral religiosa, debido a que Marx plantea que la religin es el opio del pueblo en tanto que le promete a todos el reino de los cielos, es decir que el sufrimiento que los oprimidos padecen no importan ya que esperan la recompensa del ms all. Se puede decir que la religin adormece las luchas de los hombres por superar su indignidad social. En conclusin podemos indicar que la tica marxista trata los problemas de cmo liberar la condicin oprimida del proletariado, y como superar el orden imperante, si la manera planteada por Marx, a decir la revolucin violenta, es un medio adecuado para el fin; que el hombre llegue al conocimiento de su propia esencia y a la libertad. Ya que decimos que la estructura dialctica lleva en si su propia negacin, el proletario tendr que negar, tomando conciencia de su clase, a la burguesa y as llegar a la instancia del comunismo, donde desaparecern las clases sociales y el hombre habr superado la alienacin y en ese momento podr cumplir su esencia.