la casa de tom (2)
TRANSCRIPT
Te invitamos a conocer La Casa de Tom
de Córdoba Capital, Argentina, por dentro….
… vamos a presentarte uno a uno a sus habitantes y al final
te contamos un poquito de la Casa.
¡Bienvenidos!, se abre la puerta
¡pasen, pasen… no sean tímidos!
Primero los más pequeños de la casa
¡Hola!
¿Qué tul?
Decime: ¡piedra libre!
Seguí, es para allá
¡Hola, soy la China!, una de las más pequeñas de la casa pero del grupo de las “más silenciosas” (junto a mi hermanita llamada Chicha que no
se quiso fotografiar porque tiene vergüenza). Me podes reconocer entre el montón porque siempre te miro muy dulcemente. Dicen los
que me conocen que cuando me miran encuentran tranquilidad: OMMMMMMMM. Voy a ponerme grandecita cuando crezca.
Está castrada, desparasitada, con las vacunas al día.
Está castrada, desparasitada, con las vacunas al día.
¡Hola, soy Lucesita! Me encanta estar en movimiento, será porque
cuando era chiquita tuve un accidente en la cadera. Pero ahora estoy hecha un fórmula 1, voy de aquí para allá. Sólo me detiene el encontrar
con quien jugar en el camino. Soy una buena amiga. Dicen que voy a ser medianita, aunque si la ocasión lo requiere puedo usar tacos y
verme más alta. No tengo problemas con la moda.
¡Mirá lo bien que estoy! Ni yo lo puedo creer cuando me miro en el espejo (soy
muy coqueto). Encantado, me llamo Trompa. Tengo la facha de un boxer, mis amigos de La Casa de Tom me dicen que soy pintón. Más allá de la humildad que me caracteriza, debo reconocer que con tan sólo cinco meses: ¡tengo una percha!
Soy pura energía. Amo jugar con el que tenga ganas de hacerlo, no importa la edad.
Desparasitado, con las vacunas al día.
Desparasitado, con las vacunas al día.
Soy Lucky, mucho gusto, ¿vos cómo te llamás? Lucky es suerte en inglés. Creo que
como Chiqui Legrand: doy suerte… pero, que no se comente dado que no creo poder hacer frente a las fans solito porque a pesar de tener ya un año de edad me
falta altura. Mis amigos de La Casa acuerdan que soy petiso, pero agregan que también soy agrandado: ¿a vos te parece?
Sé disimular muy bien, acá me hago el dormido pero sé muy bien que me están fotografiando.
Ahora, los otros habitantes de la casa
¿Loba estás?, ¡sí, acá estoy! Me llamo Luli, soy coloradita y muy parecida a una
lobita pero sólo en lo estético porque en actitud soy tímida, amigable y silenciosa. Mi tamaño es medianito y soy una de las habitantes más antiguas de La Casa por eso te puedo contar mucho sobre nuestra historia. Me gusta estar bronceada por
eso como verán en la foto tomo un rato de sol todos los días (eso sí, en los horarios recomendados por los dermatólogos).
Está castrada, desparasitada, con las vacunas al día.
Está castrada, desparasitada, con las vacunas al día.
Buenas, buenas… Soy Mulata. Ya tengo un par de añitos (cinco aproximadamente) que llevo con mucha jovialidad. Trato de aconsejar a los más pequeños cuando me
parece que lo necesitan. Si tengo que confesar un secreto vanidoso, estoy enamorada de mi pelaje brillante, no dejo de mirarlo cuando se refleja en algún
que otro vidrio. Me lo piropean los chicos de la casa, yo me pongo un poco colorada pero por suerte no se me nota.
Ay! Ahora que me veo: ¡qué seria que salí en la foto! Me presento, me llamo Yeny. Cariñosamente, todos en la Casa me dicen: la gordita Yeny, a veces “vaquita” por
mis colores de vaca holando-argentina. Me caracterizo por ser la alegría de la Casa. Soy un cóctel de movimientos de felicidad cuando veo a amigos que quiero y que
me quieren. Hace poquito que estoy acá, si te tengo que contar algo de mi historia: en mis cuatro años de vida anduve por ahí, mi última morada fue una estación de
servicio de Villa Libertador.
Está castrada, desparasitada, con las vacunas al día.
Soy Terry, el típico alto y flaco de todo grupo de amigos. Estoy saliendo de una época de stress producto de poca comida y maltrato. Ahora, gracias a un
tratamiento basado en cuidados-amor-alimento me siento cada día mejor. Igual, si te veo por primera vez capaz necesito de un tiempito para acercarme a olerte,
pero después que lo hago firmo un pacto de fidelidad y amistad entre nosotros.
Desparasitado, con las vacunas al día.
Si, es verdad, acá estoy… soy el famoso Tom de la “Casa de Tom”. Así como me ves en esta foto soy: pancho, tranquilo, sereno. Me caracterizo por apostar a la “paz y al amor”. Me tomo mi tiempo para hacer las cosas, respeto a mis amigos y les doy
una mano si me necesitan. Me relaja mucho que me acaricien, ¡intentalo y vas a ver!
Desparasitado, con las vacunas al día.
Está castrada, desparasitada, con las vacunas al día.
¡Por fin llegó mi turno! Cuánto que esperé para presentarme, soy Rita. Sin dudas la más mimosa de la Casa. Ojo! es recíproco: dar y recibir. Yo doy
muchos mimos y me encanta también recibirlos. Me considero muy optimista, será tal vez por mi pasado: no tenía ni un pelo que me abrigara. Ahora mirame: ¿estoy bárbara, no?, ¡qué calentita voy a pasar el invierno!
Está castrada, desparasitada, con las vacunas al día.
¡Hola! Soy Laica, así me llamo ¿Cómo te va? Físicamente, parezco la hija de la Mulata, ¿no? Emocionalmente, no puedo desconocer que tengo alma de
líder. Por eso siempre ando de aquí para allá en jauría con mis amigos aliados de la Casa (la Rita es una de ellas). Soy una buena amiga, estoy siempre lista para lo que ellos propongan (jugar, descansar, travesuras).
Me llamo Pirra. Qué alegría que nos visites. Espero que la estés pasando lindo y que te sientas como en tu casa. Me agarraste infraganti en mi momento de descanso. El sol se refleja en mi blanca cabellera y la hace radiante. Espero no encandilarte porque me gusta ser mirada,
mimada y elegida. Me considero una buena compañera, te acompaño a dónde tengas que ir y si no tenés que ir a ningún lado aquí me quedo hasta que te
decidas a emprender viaje…
Está castrada, desparasitada, con las vacunas al día.
Está castrada, desparasitada, con las vacunas al día.
Justo me descubrieron en uno de mis lugares favoritos de la casa: la cama. Mi nombre es Luna. Me
estoy recuperando lentamente de un problemita digestivo. Cada día tengo un poquito más de hambre
y eso es una buena señal para mi recuperación. Cuando me siento descansada me gusta dar una
vueltita por la Casa para interactuar un poco con mis amigos y tomar un poquito de sol. Creo que el
verdadero amor es mi mejor terapia de por vida.
Está castrada, desparasitada, con las vacunas al día.
Me agarraron con un noni-noni impresionante. Mucho gusto, mi nombre es Indra. El jugar con mis amigos todo el día tiene un precio que se paga con horas de sueño. Amo el agua, cuando nadie me ve meto mis patitas en los baldes de
agua de la Casa y disfruto como loca de sentir esa frescura. Sueño con nadar en una pileta, lago o río, pero aún soy joven… sé que voy a poder hacerlo realidad algún día no muy lejano. Creo que este es mi tamaño definitivo, un poco más
grande que un pez, un taaaaaaanto más pequeña que un delfín.
Soy Santi, hola! No sé si lo notan pero me está creciendo el pelo, estoy tan contento.
Antes me decían “dolape”, ahora soy el extraño de pelo largo. Tuve una sarna muy severa a la que le gané la batalla. Hoy, me siento fuerte y saludable. Me gusta jugar con una pelotita de tenis especialmente
con las chicas de la Casa porque sé efectivamente que les voy a ganar. Si bien
me hago el gran macho argentino reconozco que por dentro soy muy sensible y me rindo ante la primer
manifestación de cariño. Mi tamaño es mediano-grande, tengo toda esa
superficie disponible para ser acariciada.
Desparasitado, con las vacunas al día.
“…Volver, con la frente marchita, las nieves del tiempo
platearon mi sien. Sentir, que es un soplo la vida, que veinte años no es nada…”
Esa fue una pista para que adivinen mi nombre ¿y? Me llamo Tango, pebetes. Soy puro corazón, no mido las consecuencias de mi amor. Siento, siento y siento. Esa es mi intensa conexión con la vida. Después de conocerme seguro vas a entender esto que te digo. Como Gardel mi tamaño es grande.
Desparasitado, con las vacunas al día.
Ya nos conociste individualmente, por eso te invitamos conocernos
grupalmente: nuestra convivencia.
¿Qué está pasando en la cocina? Terry preocupado por ruidos raros.
Por favor no molestar, estamos durmiendo.
Salgamos de a uno al patio, por favor.
Recargándonos las pilas con energía solar
Lucky y Trompa: amigos son los amigos
Te cuento un secreto.
Luli desfilando por la pasarela.
¡Gracias por tomarte el tiempo para conocer
la vida que hay dentro de La Casa de Tom!
Esta casa es una organización no gubernamental que actúa como
hogar transitorio para que perritos de la calle (de todas las edades) se
recuperen en cuidados (tanto de salud como afectivos)
hasta que se encuentren con una familia que los adopte.
¿Te interesa darle una familia a alguno de los habitantes de
La Casa de Tom?
¿Te interesa colaborar con La Casa de Tom? (de la manera que vos
definas acorde a tus posibilidades)
Poniendo las patas sobre la mesa, te hacemos un par de preguntitas:
Cintia: (0351) 152020267
Silvia: (0351) 155631931
Juliana (0351) 153842321
Por facebook: La Casa de Tom
Tenemos teléfono fijo: 351-4380133 (pero no siempre funciona, si no te contestamos por ahí
comunicate con nuestros celulares).
Comunicate con alguna de nosotras (ya sea, por mensaje o llamada):
¡Fue un placer conocerte! Gracias. Te agradecemos que nos ayudes a difundir nuestra tarea
así ampliamos las oportunidades para estos y tantos otros perritos más.