jovenes, tecnologia y el lenguaje de los vinculos

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Comunicar ISSN: 1134-3478 [email protected] Grupo Comunicar España Marí Sáez, Víctor Manuel Jóvenes, tecnologías y el lenguaje de los vínculos Comunicar, núm. 27, 2006, pp. 113-116 Grupo Comunicar Huelva, España Disponible en: http://www.redalyc.org/articulo.oa?id=15802717 Cómo citar el artículo Número completo Más información del artículo Página de la revista en redalyc.org Sistema de Información Científica Red de Revistas Científicas de América Latina, el Caribe, España y Portugal Proyecto académico sin fines de lucro, desarrollado bajo la iniciativa de acceso abierto

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Jovenes, Tecnologia y El Lenguaje de Los Vinculos

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  • ComunicarISSN: [email protected] ComunicarEspaa

    Mar Sez, Vctor ManuelJvenes, tecnologas y el lenguaje de los vnculos

    Comunicar, nm. 27, 2006, pp. 113-116Grupo ComunicarHuelva, Espaa

    Disponible en: http://www.redalyc.org/articulo.oa?id=15802717

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    Sistema de Informacin CientficaRed de Revistas Cientficas de Amrica Latina, el Caribe, Espaa y Portugal

    Proyecto acadmico sin fines de lucro, desarrollado bajo la iniciativa de acceso abierto

  • Comunicar, 27 2006, Revista Cientfica de Comunicacin y Educacin; ISSN: 1134-3478; pginas 113-116

    Jvenes, tecnologas y el lenguaje de los vnculos

    Vctor Manuel Mar Sez es profesor de la Universidad deCdiz y miembro del CICO (Centro Iberoamericano de

    Comunicacin Digital de Sevilla) ([email protected]).

    1. Generacin.netSegn los expertos, ya ha

    surgido la Generacin.net,la primera que est creciendo y educndose con lapresencia de Internet en los principales espacios desocializacin. Para Fisher (2002), sta sera la genera-cin que llega a la adolescencia coincidiendo con laefervescencia social de Internet. La Generacin.netimplica una adhesin al ciberespacio y a la revolucindigital, dos aspectos que han modificado nuestro mun-do y que acompaan al nuevo milenio.

    Los estudios que se vienen publicando en los lti-mos tiempos sobre usos de las tecnologas de la infor-macin y de la comunicacin (TIC) entre la poblacin

    Vctor Manuel Mar SezCdiz

    Este artculo explora los nuevos modos de relacin y de interaccin que se producenen la sociedad de la informacin, especialmente en el uso de las tecnologas de la infor-macin y de la comunicacin (TIC). Los jvenes, la Generacin.net, dan valor al len-guaje de los vnculos. Son ellos los que ms y mejor se estn apropiando de los poten-ciales de relacin y de comunicacin de tecnologas como Internet. Estas transforma-ciones implican oportunidades y riesgos que deben ser tenidas en cuenta por parte deeducadores y comunicadores.

    This paper explores the new ways of relation and interaction which are taking placeinto the Information Society, particularly on the use of the latest information and com-munication technologies (ICTs). Young people, the Net generation, have a very goodopinion of the language of links. They are taking the most of the relation and commu-nication potentials from the new technologies such as the Internet. These present chan-ges mean chances and risks that should be taken into account by teachers and commu-nicators.

    DESCRIPTORES/KEY WORDSRedes, vnculos, interactividad, Internet, comunidades virtuales.Networks, links, interactivity, the Internet, virtual communities.

    Youth, technologies and the language of links

    (Recibido 22-02-06 / Aceptado: 17-04-06)

    I N V E S T I G A C I O N E S

  • coinciden en destacar los mismos segmentos de eda-des que ms y mejor se est apropiando de estas he-rramientas. En el caso de Internet, por ejemplo, el in-forme Jvenes, relaciones familiares y TIC (INJU-VE, 2003) considera que el retrato-robot correspondea varones de una edad comprendida entre los 15 y los44 aos y a mujeres de 15 a 29 aos. Para la Asocia-cin de Usuarios de Internet (AUI, febrero de 2004),los internautas comprendidos entre los 14 y los 34aos representan el 62,4 % del total. Netvalue, en elestudio Adolescentes en la Red en Europa (2002),seala que uno de cada cinco internautas tiene unaedad comprendida entre los 13 y los 19 aos. Las ci-fras confirman la idea apuntada: aquellos segmentosde la poblacin que estn en un momento decisivo enla construccin de su identidad son quienes destacanpor el uso que hacen de las TIC.

    Por este motivo, en el presente artculo nos vamosa centrar en el anlisis sociocultural de los usos de In-ternet por parte de los jvenes. Siguiendo a Thomp-son (1999), creemos que el uso de los medios de co-municacin implica la creacin de nuevas formas deaccin e interaccin en la sociedad, nuevos tipos derelaciones sociales y nuevas formas de relacionarsecon los otros y con uno mismo. Asistimos a un cambioen los modos de producir, consumir, pensar, vivir yrelacionarse, que tiene mucho que ver con las panta-llas ubicuas (Lewis, 1999) que rodean a los jvenes:principalmente, la pantalla del ordenador, de la televi-sin, del mvil y de las videoconsolas.

    2. El valor de los vnculos en el nuevo entornosociocultural

    En la actual sociedad de la informacin predomi-nan las actividades que se organizan en forma de red.Como indica Manuel Castells, las redes constituyen lanueva morfologa social de nuestras sociedades, y ladifusin de su lgica de enlace modifica de forma sus-tancial la operacin y los resultados de los procesos deproduccin, la experiencia, el poder y la cultura. Aun-que la forma en Red de la organizacin social ha exis-tido en otros tiempos y espacios, el nuevo paradigmaproporciona la base material para que su expansincale toda la estructura social.

    Siguiendo a Elina Dabas (1995), hablar de redessupone dar importancia al lenguaje de los vnculos. Alvalor de las interacciones, de los intercambios dinmi-cos que somos capaces de crear entre las personas yentre las organizaciones e instituciones sociales en lasque participamos. Algunas expresiones coloquiales delos jvenes hay un buen ambiente en este sitio,hay buena qumica entre t y yo remiten a unas

    formas nuevas de sociabilidad y de comprensin delmundo en las que la calidad de los vnculos y el mun-do relacional y emocional juegan un papel decisivo.

    Frente a la lgica cartesiana, al pensamiento abs-tracto y la miopa de lo visible que predominaban en elparadigma anterior, en la sociedad-red se otorga msvalor a una lgica relacional que parte de lo concreto,pero que es capaz de descubrir las conexiones ocultasque conectan a los acontecimientos y a las personasentre s. En este nuevo contexto sociocultural en elque predomina la lgica de la Red es en el que triun-fan las redes tecnolgicas y sus correspondientes dis-positivos comunicativos. Por ello, creemos que es fun-damental que integremos, en nuestros anlisis, la di-mensin tecnolgica y la dimensin sociocultural delas TIC: la difusin y popularizacin de Internet nosera tal si no coincidiese con un nuevo clima socio-cultural en el que las redes y el lenguaje de los vncu-los son altamente significativos.

    3. En torno a la interactividadHablar de redes y de tecnologas supone, necesa-

    riamente, hacer referencia al trmino interactividad. Pa-ra Kerckhove (1999), la interactividad es, junto a lahipertextualidad y la conectividad, una de las caracte-rsticas bsicas de las TIC. Consiste, bsicamente, en larelacin que se establece entre la persona y el entornodigital. Este trmino es utilizado sistemticamente porlas empresas productoras de multimedia, como partede unas estrategias de marketing que pretenden asociarlos materiales con nuevos modelos educativos y comu-nicativos en los que el usuario (supuestamente) tieneun papel ms activo que en los modelos tradicionales.

    Ahora, en los nuevos medios de comunicacin di-gitales, la interactividad y el hipertexto sugieren que elcentro del proceso comunicativo es el usuario, y no elproductor del texto. Nos dicen que ahora podemosconstruir nuestros propios itinerarios de exploracin,navegacin, comunicacin y aprendizaje, gracias aldescentramiento y a la estructura no lineal sobre la quese han construido los materiales multimedia y las pgi-nas web. Es necesario, por tanto, discernir entre loque de verdad y lo que de envoltorio publicitario y se-ductor hay en este concepto. Alfonso Gutirrez (1997)ofrece una sntesis de los diferentes niveles de interac-tividad que puede llegar a ofrecer una produccinmultimedia digital. En una gradacin de menor a ma-yor, l establece cinco modelos:

    Modelo A: caracterstico de la enseanza pro-gramada. Prima un modelo de comunicacin unidirec-cional, en el que la iniciativa parte del programa mul-timedia.

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  • Modelo B: adems de transmitir informacin, eneste nivel se efectan determinadas consultas al usua-rio. ste tiene un poco ms de participacin que en elmodelo anterior, aunque se trata de una respuesta a lasinstrucciones previamente marcadas por la mquina oel programa informtico.

    Modelo C: propio de la enseanza programada,donde el equipo informtico es capaz de recoger y detener en cuenta las respuestas y elecciones del usuario.

    Modelo D: son aplicaciones multimedia con di-seos ms abiertos que en el caso anterior, donde elordenador no poda ajustar su respuesta a las inter-venciones del usuario. En este caso, es posible mover-se con mayor libertad por la informacin proporciona-da por el sistema.

    Modelo E: el usuario no slo navega librementepor la aplicacin previamente diseada por el creador,sino que utiliza el medio para convertirse l mismo enemisor de mensajes.

    Si contrastamos los mate-riales multimedia y las pginasweb que prometen interactivi-dad con esta clasificacin queacabamos de exponer, obser-vamos que la mayora de ellosse quedaran en los nivelesms bajos de interactividad. Encontadas ocasiones se llega almximo nivel de participacindel usuario, en el que emisor yreceptor intercambian sus po-siciones.

    4. Ambigedades y zonas oscuras del lenguaje delos vnculos

    Al final del apartado anterior hemos comenzado aanalizar crticamente algunas de las promesas de inte-ractividad, de comunicacin y de relacin que prome-ten las nuevas tecnologas. En esa misma lnea, vamosa profundizar en las ambigedades y contradiccionesque generan la sociedad-red, el lenguaje de los vncu-los y las TIC, en las diversas dimensiones a las queestamos haciendo referencia: sociocultural, comunica-tiva y tecnolgica.

    No deja de ser paradjico el hecho de que la exal-tacin de los vnculos sociales coincida, a su vez, conla crisis y el desmoronamiento de determinadas redessociales que permitan al individuo, en pocas anterio-res, construir su proyecto de vida personal e integrar-se en la sociedad. El socilogo polaco Bauman (2002)plantea que hemos entrado en el perodo de la Mo-dernidad lquida, en el que se han derretido los sli-

    dos que parecan inmutables en pocas anteriores, yque permitan unir al individuo con las estructuras so-ciales. Se han derretido y evaporado instituciones (p-blicas), servicios (sociales, educativos y sanitarios gra-tuitos y universales) y valores (solidaridad, emancipa-cin) sobre los que se haba construido la convivenciasocial durante dcadas en las sociedades avanzadas.

    Por un lado, el nuevo entorno sociocultural fo-menta el lenguaje de los vnculos, el valor de las rela-ciones e interacciones, cara a cara, y mediadas tecno-lgicamente. Pero, por otro lado, en esta misma socie-dad se cortan otros vnculos que permiten el desarro-llo personal y colectivo. Como apunta Richard Sennett(2000), las consecuencias personales del nuevo capi-talismo flexible conducen a la corrosin del carcter,entendido como la apuesta a largo plazo por construirrelaciones estables: Nada a largo plazo es el principioque corroe la confianza, la lealtad y el compromiso

    mutuos... Las condiciones de la nueva economa sealimentan de una experiencia que va a la deriva en eltiempo, de un lugar a otro lugar, de un empleo a otro...El capitalismo a corto plazo amenaza con corroer elcarcter, en especial aquellos aspectos que unen a losseres humanos entre s y brindan a cada uno de ellosla sensacin de un yo sostenible (Sennett, 2000: 22-25).

    Desde esta perspectiva, habra que releer crtica-mente el modelo de sociabilidad que subyace a las co-munidades virtuales y a los chats, que tanta aceptacintienen entre los internautas. Qu tipo de relaciones yqu modelo de comunidad est presente en esos espa-cios comunicativos? Sin negar sus utilidades y aporta-ciones vlidas para el desarrollo social y educativo,creemos, siguiendo a Wolton (2000), que detrs demuchas de estas propuestas comunicativas hay unmodelo cultural fuertemente individualista, que dejade lado la cuestin de la alteridad, de la relacin y con-vivencia con los otros que no se parecen a m. En el

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    La Red no slo plantea una comunicacin para transmitir,sino que tambin comtempla una comunicacin para relacionarse. Potenciar el lenguaje de los vnculos en nuestras prcticas educativas y comunicativas supone aprovechar lo mejor del nuevo contexto sociocultural para construir redes que dan libertad.

  • ciberespacio y en la sociedad-red hay lugares en losque relacionarse con los iguales, pero faltan mediacio-nes desde las que gestionar creativamente las diferen-cias. Y una sociedad que no se plantea estrategias derelacin y de comunicacin con los diferentes y conlos excluidos acaba reforzando las brechas y divisorias,tanto las estructurales como las digitales.

    Finalmente, en el plano tecnolgico, habra quepreguntarse si la cuestin de la interactividad conducea mayores niveles de democracia. Para Michel Snecal(1995), existen dos concepciones posibles de la inte-ractividad. Una, en la que los usuarios de la comuni-cacin permanecen cautivos dentro de un universocomercial prefabricado. Y otra, al servicio de un pro-yecto de reapropiacin crtica de los medios, basadaen la reciprocidad y en altos grados de participacinde los usuarios en el proceso de comunicacin. Ade-ms, habra que plantearse la participacin de la ciu-dadana no slo en los productos multimedia y en elciberespacio; en nuestros das, es fundamental reto-mar la participacin de la poblacin en los asuntos ge-nerales de inters pblico relacionados con la cultura,con la economa y con la poltica. No tendra muchosentido, desde una perspectiva transformadora, edu-car en la participacin meditica y comunicativa sinplantearse, a la vez, una participacin en la sociedad.

    5. EstrategiasLos retos que plantea el nuevo entorno sociocul-

    tural deberan llevarnos a disear unas estrategias edu-cativas y sociales que aprovechen lo mejor del nuevocontexto y que reduzcan las contradicciones y limita-ciones que existen. Creemos, en primer lugar, que se-ra provechoso incorporar el lenguaje de los vnculos yel valor de las relaciones a las prcticas educativas ycomunicativas en las que estamos inmersos. Fomentarla lgica de la Red y la construccin de redes socialesy comunicativas que rompan con los modelos jerr-quicos, verticales y unidireccionales que tanto predo-minan en nuestras sociedades y espacios educativos.

    En segundo lugar, hara falta aprovechar el poten-cial interactivo que tienen las TIC. Llegar hasta losmximos niveles de interactividad, porque de esta ma-nera demostraremos, en la prctica, que la interactivi-dad est estrechamente unida a una concepcin dedemocracia que pretende ofrecer los mximos nivelesde participacin a las personas involucradas en losprocesos comunicativos.

    En tercer lugar, hace falta revisar los modelos decomunidad y de sociabilidad que predominan en In-

    ternet, con el fin de favorecer la inclusin del otro, deldiferente, del excluido. Siguiendo a Garca Canclini(2005), habra que preocuparse, conjuntamente, porlos diferentes, los desiguales y los desconectados. Lasdiferencias de identidades, de posicin socioeconmi-ca y de integracin tecnolgica tienen que responder-se conjuntamente para evitar reduccionismos: Qui-nes son los diferentes, los desiguales y los desconecta-dos? A veces son los mismos. sa fue la principal moti-vacin para trabajar juntos los tres trminos y las teor-as que los sostienen... Pensar juntas estas tres condi-ciones de diferencia, desigualdad y desconexin meparece bsico para avanzar en cualquier pensamientoy transformacin de lo social.

    Como sealan Snchez y Aguaded (2002) en lasconclusiones de su investigacin Internet y los jve-nes, la Red no slo plantea una comunicacin paratransmitir, sino que tambin comtempla una comuni-cacin para relacionarse. Potenciar el lenguaje de losvnculos en nuestras prcticas educativas y comunica-tivas supone aprovechar lo mejor del nuevo contextosociocultural para construir redes que dan libertad.

    ReferenciasALFIERI, C. (2005): Todos nos hemos globalizado (Entrevista aNstor Garca Canclini), en Revista de Occidente, 294; 127-153.[Sobre el libro de GARCA CANCLINI, N. (2004): Diferentes, de-siguales y desconectados. Mapas de la interculturalidad. Barce-lona, Gedisa].BAUMAN, Z. (2002): Modernidad lquida. Mxico, Fondo de Cul-tura Econmica.DABAS, E. y NAJMANOVICH, D. (Comps.) (1995): Redes. Ellenguaje de los vnculos. Hacia el fortalecimiento de la sociedadcivil. Buenos Aires, Paids.FISHER, H. (2002): El choque digital. Buenos Aires, Eduntref.GUTIERREZ, A. (1997): Educacin multimedia y nuevas tecnolo-gas. Madrid, De la Torre.KERCKHOVE, D. (1999): Inteligencias en conexin. Barcelona,Gedisa.LEWIS, D. (1999): La pantalla ubicua. Buenos Aires, La Cruja.LORENTE, S.; BERNETE, F. y BECERRIL, D. (2003): Jvenes,relaciones familiares y TIC. Madrid, INJUVE.MAR, V.M. (1999): Globalizacin, nuevas tecnologas y comuni-cacin. Madrid, La Torre.MAR, V.M. (Coord.) (2004): La Red es de todos. Cuando los mo-vimientos sociales se apropian de la Red. Madrid, Popular.SNCHEZ, M. y AGUADED, I. (2002): Internet y los jvenes.Granada-Huelva, Grupo Comunicar.SENECAL, M. (1995): La interactividad conduce a la democra-cia?, en El Correo de la Unesco, 48; 16-18. SENNETT, R. (2000): La corrosin del carcter. Las consecuen-cias personales del trabajo en el nuevo capitalismo. Barcelona, Ana-grama.THOMPSON, J.B. (1999): Los media y la modernidad. Una teo-ra de los medios de comunicacin. Barcelona, Paids.WOLTON, D. (2000): Sobrevivir a Internet. Barcelona, Gedisa.

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