javier del real crÍtica de clÁsica / voces del real … · repetición y él ha vuelto a cantar...

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Por G. PAJARES - Madrid S e veía venir y lo barruntá- bamos desde el momento en que puso el pie en el escenario del Teatro Real a fina- les de noviembre. Ya en el ensa- yo general demostró maneras, que estaba en plena forma, a pesar de acabar de salir un cóli- co nefrítico. Su esposa le decía que no cantara mientras él se preguntaba: «¿Cómo voy a decir que no a Madrid?». En las cuatro funciones de «Rigoletto» que ha cantado ahora en Madrid ha bisado la misma aria: «Vendetta, tremenda vendetta». Lo suyo ha sido también tremendo. A sus 73 años, Nucci, Leo «bis», está en El barítono rompe todos los récords en el Teatro Real y vuelve a hacer historia al bisar la «Vendetta» en las cuatro funciones que ha cantado de «Rigoletto» LEO NUCCI, MÁQUINA TOTAL plena forma. Divertido, ocu- rrente y emocionadísimo en su tercera función estuvo a un «tris» de bisar dos veces, aunque él mismo se encargó con un gesto de decirle sin palabras al maestro que con una vez era suficiente. Cuatro noches que, como aquella de 2009, cuando el vera- no ya se asomaba por Madrid, marcó un hito al repetir por pri- mera vez en el coliseo la misma aria que ahora. Le pasa al artista como a los grandes: es de una inmensa generosidad (recorda- mos una mañana, día 25 de di- ciembre, que contestó al teléfo- no como si fuera un día cual- quiera, una mañana en que la conversación, que se desborda- ba con tantísimas anécdotas, acabó en Lady Gaga, inolvida- ble) y sabe darle al público lo que pide. El patio de butacas cada noche ha esperado el momento final del segundo acto para rom- perse las manos pidiendo una repetición y él ha vuelto a cantar esa tremenda aria como si fuera la primera vez, desolado, roto de dolor, padre al cabo. Nucci se ha transmutado al caer el sol en el bufón de la corte. Ha pasado de verdugo a víctima. Él es y será para siempre Rigoletto. Con el teatro entero puesto en pie. Se llama Leo, pero no da patadas a un balón.Y es grande.Y redondo. Y un máquina total. Leo Nucci, junto a Olga Peretyatko, la Gilda con la que ha cantado en el Teatro Real Javier del Real SECCIÓN: E.G.M.: O.J.D.: FRECUENCIA: ÁREA: TARIFA: PÁGINAS: PAÍS: CULTURA 236000 81874 Diario 383 CM² - 37% 8573 69 España 11 Diciembre, 2015

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CULTURA

Por G. PAJARES - Madrid

Se veía venir y lo barruntá-bamos desde el momento en que puso el pie en el

escenario del Teatro Real a fi na-les de noviembre. Ya en el ensa-yo general demostró maneras, que estaba en plena forma, a pesar de acabar de salir un cóli-co nefrítico. Su esposa le decía que no cantara mientras él se preguntaba: «¿Cómo voy a decir que no a Madrid?». En las cuatro funciones de «Rigoletto» que ha cantado ahora en Madrid ha bisado la misma aria: «Vendetta, tremenda vendetta». Lo suyo ha sido también tremendo. A sus 73 años, Nucci, Leo «bis», está en

El barítono rompe todos los récords en el Teatro Real y vuelve a hacer historia al bisar la «Vendetta» en las cuatro funciones que ha cantado de «Rigoletto»

LEO NUCCI, MÁQUINA TOTALplena forma. Divertido, ocu-rrente y emocionadísimo en su tercera función estuvo a un «tris» de bisar dos veces, aunque él mismo se encargó con un gesto de decirle sin palabras al maestro que con una vez era sufi ciente.

Cuatro noches que, como aquella de 2009, cuando el vera-no ya se asomaba por Madrid, marcó un hito al repetir por pri-mera vez en el coliseo la misma aria que ahora. Le pasa al artista como a los grandes: es de una inmensa generosidad (recorda-mos una mañana, día 25 de di-ciembre, que contestó al teléfo-no como si fuera un día cual-quiera, una mañana en que la

conversación, que se desborda-ba con tantísimas anécdotas, acabó en Lady Gaga, inolvida-ble) y sabe darle al público lo que pide. El patio de butacas cada noche ha esperado el momento fi nal del segundo acto para rom-perse las manos pidiendo una repetición y él ha vuelto a cantar esa tremenda aria como si fuera la primera vez, desolado, roto de dolor, padre al cabo. Nucci se ha transmutado al caer el sol en el bufón de la corte. Ha pasado de verdugo a víctima. Él es y será para siempre Rigoletto. Con el teatro entero puesto en pie. Se llama Leo, pero no da patadas a un balón. Y es grande. Y redondo. Y un máquina total.

Leo Nucci, junto a Olga

Peretyatko, la Gilda con la que ha cantado en el

Teatro Real

Javier del Real

Bejun Mehta, ¡che puro ciel!

CRÍTICA DE CLÁSICA / VOCES DEL REAL

Obras de Mozart, Bach, Gluck,

Hasse, etc. Bejun Mehta, contra-

tenor. Programa de la Akademie

fü Alte Musik Berlin. Elfa Rùn

Kristinsdóttir, concertino y di-

rectora. Teatro Real. Madrid, 9

de diciembre de 2015.

Todos tenemos nuestras fi lias y nuestras fobias y he de re-conocer que los contrateno-res no son mi plato preferido. Su timbre de voz me desagra-da y habitualmente me resul-tan monótonos. Por ello suelo rehuir sus conciertos o recitales. Dicho lo cual, he de reconocer que el programado por el Teatro Real con Bejun Mehta y la Akademie fü Alte Musik Berlin reunía muchos atractivos y no era cuestión de hacer mutis por el foro. Mehta es sin duda uno de los tres mejores cantantes de su cuerda y, particularmente, aquél a que más soporto. No oculto que esta es una crítica un tanto personal. Por su parte el conjunto musical es una de las orquestas de cáma-ra en su género con más prestigio.

Ambos cumplieron sobra-damente las expectativas, aunque no fuese mucho el público que pudo compro-barlo, ya que la ocupación del Teatro Real infundía tristeza

al no pasar probablemente del 60%. Da gusto escuchar la perfección con la que el gru-po tocó las páginas instru-mentales de Mozart, Bach o Hasse, así como la forma de acompañar al solista, quien comenzó a caldear el am-biente con «Vadasi... Già dagli occhi eil velo», de la ópera «Mitridate» del joven Mozart, y «Ah, di sì nobil alma», de su «Ascanio in Alba».

Con todo, el entusiasmo se desbordó en las arias de

«Ezio», de Gluck, y «Artaser-se», de Johan Christian Bach, páginas en las que Mehta pudo lucir su habilidad para utilizar la voz como un instru-mento musical más, para las coloraturas casi circenses, así como mostrar un tempera-mento dramático que mu-chas veces se echa de menos en sus colegas.

Gonzalo ALONSO

DA GUSTO ESCUCHAR

LA PERFECCIÓN CON

LA QUE EL GRUPO

TOCÓ LAS PÁGINAS

INSTRUMENTALES

DEL MOZART

LA RAZÓN • Viernes. 11 de diciembre de 2015 69

Impreso por Francisco Rincón Durán. Prohibida su reproducción.

SECCIÓN:

E.G.M.:

O.J.D.:

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TARIFA:

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CULTURA23600081874

Diario

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69España

11 Diciembre, 2015