INSTITUTO DE INVESTIGACIONES AGROPECUARIAS, CENTRO REGIONAL DE INVESTIGACIÓN LA PLATINA, MINISTERIO DE AGRICULTURA DICIEMBRE DE 2008, SANTIAGO DE CHILE

¿QU~ ES CONDUCCIÓN?

Desde el punto de v ista pro­

du cti vo frecuentemente se

confunde poda y conduc-

ción. Sin embargo, son dos concep­

tos mu y diferentes. Conduc ión po­

dría se r definida como, la form a o

dispos ic ión que se le da a las di stin ­

tas partes de la planta, en func ión de

va ri ados tipos de estru cturas de sos­

tén. La importanc ia que ti ene la con­

ducc ión para la v id radi ca es que es

una enredadera y por lo tanto es una

planta que no es autosoportante. La

es tru ctura de sostén condi c ion a la

altura del tronco, di recc ión ele los

brazos y elementos el e poda y ade­

más, la expos ición del fo ll aje a la luz

so lar.

I TéMIAS DE CQ DUCCIÓN De v1nes /VAN MUÑOZ H. lng. Agrónomo MS.

ARTURO CAMPOS M . lng. Agrónomo MS.

El concepto de poda, por otra parte, es la eliminac ión de pa rtes vivas de la

pl anta, que influyen en su fisio logía. El tamaño de la p lanta se mantiene o

modi fica con la poda, de ahí que cualquier t ipo de poda se adapta a los d ife­

rentes sistemas de ondu c ión.

¿CUÁLES SON LOS OBJETIVOS DE LA CONDUCCIÓN?

1. Permitir que la pl anta pueda crecer en fo rma erecta y no a ras de suelo

como lo haría en forma natural.

2. Darl e a cada va ri edad la pos ibilidad de expresa r li bremente su poten­

cial de de arro llo, de modo que la poda que se rea li ce se ajuste al

hábito de fructi ficac ión de la va ri edad que e trate.

3. Fac ilitar las labores tales como: manejo del rac imo, paso de maq uina­

ri a, ri ego, poda, des in fecc iones, cosecha, etc.

4 . Conseguir un efi iente uso de la luz so lar, para lograr una buena fru -

ti ficac ión de las yemas. La v id , es una de las espec ies frulales que ma­

yores ex igenc ias presenta en este a pe to.

5. Reducir pos ibles daños de heladas, dándole una mayor altura a la planta.

CORFO PROYECTO EJECUTADO POR IN/A Y FINANCIADO POR CORFO: Selección de Cultivares de Vid con Mayor Potencial para la Producción de Pasas de Cal idad para el Mercado Nacional y de Exportación, Código 05CN 11 IAD- 14

¿PORQUÉ SE REQUIEREN SISTEMAS

DE CONDUCCIÓN?

La v id , no puede crecer satisfac­

tori amente si no di spone de al­

gú n tipo de estru ctura de sostén,

iendo por e ll o necesa ria algún

tipo de conducc ión para obtener

rendimientos productivos renta­

bles, además de facilitar el ma­

nejo general de la plantac ión y

obtener fruta de ca lidad .

Los soportes que se utilizan para

la conducc ión son de dos tipos;

de corta durac ión y permanentes.

Los soportes de co rta durac ión

utili zados en v ides formadas en

cab za , proveen sos tén hasta que

las plantas desarrollan un tron co

lo sufic ientemente rígido y firme

que permita a la planta autosos­

tenerse.

Los soportes de tipo perman ente

son utili za dos en espalderas y

parronales para un desa rrollo

óptimo de las pl antas y se en­

cuentran presente durante toda la

v ida productiva de la plantac ión.

¿QUÉ SISTEMA DE CONDUCCIÓN UTILIZAR?

Para definir que sistema de conduc­

c ión utili za r se debe considerar a l­

gunos factores fund amentales como:

Variedad

Tal vez sea el fac to r más re levante

deb iéndose considerar tres concep­

tos fundamentales:

• Hábito de fructifi cac ión, el cual de­

termin a el largo del elemento pro­

ducti vo de poda (ca rgador y pitón).

• Vi gor, lo que determ inará la altu­

ra o expansión que se le pueda dar

a la pl anta para lograr una alta

expos ic ión a la luz.

• Destin o de la fruta, si es pa ra con­

sumo fresco algunos sistemas en

espald era podrían tener c iertas

limitaciones para va riedades bl an­

cas, no así para las co loreadas . Sin

emba rgo, si la fruta ti ene como

des tin o la producc ión de pasas,

todos los sistemas de conducc ión

se adecuan muy bi en. Los siste­

mas en espaldera tendrían c ierta

ventaja sobre el parrón, po r sus

costos de estab lec imiento y fac i­

lidad de la producc ión.

Topografía del terreno

Es un facto r importante para determi ­

nar el sistema de conducc ión a adop­

tar. Es así como, en un terreno pl ano

se puede utili za r cualquier sistema de

condu cc ión (parronal, espalderas) .

En cambi o, si la topografía presenta

c ierta pendiente y el suelo es de poca

profundidad, que no permita rea li za r

una n ive lac ión, podría optarse siste­

ma de conducc ión en espaldera, los

que se adaptarían en mejo r fo rm a a

la topografía.

Costos de implantación

Este es o tro facto r que inc ide en la

elecc ión del sistema de conducc ión,

ya que todos ti enen un cos to di fe ren­

te.

SISTEMAS DE CONDUCCIÓN UTILIZADOS EN ESTE PROYECTO

Espaldera Vertical

Este es uno de los tipos de estru ctura de conducc ión más ut i li zada en vid,

espec ialmente para v ino, pero también puede utili za rse en va ri edades para

mesa y pasas.

Consiste bás icamente en una lín ea de postes o rodrigones co locados cada 4 ó 6 metros, sujeto en los ex tremos po r los ca beza les (Foto 1 ).

Foto 1.

Si stema de

conducc ión

en espaldera

verti ca l.

El cabeza l es el pos te que va en cada

extremo de la hil era. Este debe ser re­

sistente, con un di ámetro mínimo de

4 ó 6 pulgadas y ele un largo adecua­

do a la altura del sistema. Entre ell os,

cada 4 a 6 metros se a locan los pos­

tes centrales que por lo gen ral son

de 3 a 4 pulgadas de di ámetro y de

un largo que considere la altura del

sistema, má lo necesa rio para ente­

rrar, (por lo general 40 a 50 cm).

El cabeza l se pone inc linado, si ndo

el ángul o óptimo de 45° con respec­

to a la superfi c ie del suelo. Para man­

tenerlo en esa posic ión, se debe co­

loca r un alambre (ri enda) que ama­

rra el ca beza l con un "muerto o an­

c la", el cual va enterrado a una di s­

tancia adecuada para formar un tri án­

gulo isósce les con la altura a que va

pu esto el alambre de formación.

Tanto el cabezal como el muerto no

va n enterrados a un a profundidad

fij a, ta dependerá de la altura total

del sistema, pero normalmente flu -

tú a entre 0,8 y 1,0 m .

Los alambres se ubi can a lo largo de

la hil era de postes y las alturas que

se utili zan norma lmente son: 0,9 m

para el primer alambre, 1,2 m para

el segundo y 1,5 m para el terce r

alambre. En este sistema es aconse­

jable que el primer alambre sea ace­

rado ya que tendrá que sostener la

madera (brazos) y la producc ión.

Una muy buena alternativa en este

sistema de espaldera es di sponer de

alambr s móvil es, los que se van su­

biendo en la medida que la p lanta

crece. Esta di sposic ión de los alam­

bres, aumenta la efi c ienc ia, fac ilitan­

do el manejo del viñedo.

Una gran ventaja de di sponer de alambres móv il es es permitir ev itar la envo l­

tura del fol laje en los alambre fij os, o rn o también redu ir la chapoda, prá -

ti ca muy debilitante para la pl anta.

Para la forma c ión de la pl anta, es aconsejable poner a ca da una un tuto r y

amarrar el brote eleg ido que constituirá el futuro tronco.

Cruceta Californiana Doble

Este también es un sistema en espaldera con la di fe renc ia que ll eva dos ru ce tas

en uyo extremo ll eva un alambre a lo largo de toda la hilera.

La primera cru ce ta se ubica a los 1,2 - 1,3 m desde el suelo y ti ene una longi­

tud de 0,6 m a 0,8 m y en ca da extremo ll eva un alambre acerado.

A 0,40 m sobre la primera ru eta, se ubi a una segunda cruce ta de 0,8 a 1,2

m de longitud y que también en sus extremos ll eva un alambre ga lva ni za do.

Los al ambres de la primera cru eta sirven para soportar los brazos y los ele­

mentos de poda, por lo tanto también soportarán la fruta que se produz a cada

año. Los ele la segunda sirven para que la vegeta ión que crece durante la

temporada pase obre ell os y cuelgue li b rem nte.

Este sistema permite que a la pl anta se le puedan fo rmar cuatro brazos, dos en

cada uno de los alambres de la primera cru ceta (Foto 2), ele tal manera que se

puede dupli ca r el número de yemas dejada a la poda, en comparac ión a la

espaldera verti ca l.

Foto 2. Si stema de cru ceta ca l i fo rni ana doble.

-

COSTOS DE INVERSIÓN EN LOS SISTEMAS DE CONDUCCIÓN

La eva luac ión de los costos de inversión para los dos sistemas de conducc ión

se mue tra en los Cuadros 1 y 2, ambos es tán eva luados considerando una

p lantac ión con una distancia de 3 x 2 metros, es dec ir para densidad de pl an­

tación de unas 1. 660 plantas por hectárea.

Los mayores cos to asociados a la cruceta ca li fo rni ana se debe a la neces idad

de contar con co ligües guiadores de las plantas hasta que alcancen la altura

adecuada para se desarrollo final. Si bien esta diferencia no es muy alta, si lo

es cuando se consideran los cos tos comparativo con el sistema de parrón

españo l, el cua l puede alcanzar a un va lor de más de ci nco millones de pesos.

Cuadro 1. Sistema de espa ldera simp le (Costos por hectárea) .

Materiales Nº Valor unidad Valor total

Poste impregnado 3" a 4" 470 1.300 611 .000

Postes pino impregnado 4" a S" 66 2.000 132.000

Alambre acerado Nº 17 1 S (kilos) 600 1.S87 9S2.200

Alambre galvanizado Nº 14 280 1.309 366.S20

Alambre 6 so 1.247 62.3SO

Grampa 10 1.200 12.000

Clavo J s 2.000 10.000

Anclas 66 3.SOO 231.000

Mano de obra 60 12.000 720.000

Preparación suelo 2SO.OOO 2SO.OOO

Total 3.347.070

Cuadro 2. Sistema de Espaldera Californiana. (Costos por hectárea).

Materiales N12 Valor unidad Valor total

Alambre acerado 17 1 S (kilos) 330 1.700 S61.000

Alambre galvanizado Nº 14 217 1.400 303.800

Alambre 6 so 1.247 62.3SO

Centrales 3/4" de 240 sso 1.200 660.000

Cabezales 4" a S" de 2SO 66 2.300 lSl.800

Centrales 3" de 240 (cruzetas) 2SO 1.200 300.000

Clavos de 3" (kilos) 2S 1.200 30.000

Anclas 66 3.SOO 231.000

Coligues de 1,S mt 1.666 200 333.200

Mano de obra 70 12.000 840.000

Preparación de suelo 1 2SO.OOO 2SO.OOO

Total 3. 723.1 SO

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