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IISemana Santa 2010 LA OPINIÓN–EL CORREO DE ZAMORA / Martes, 30 de marzo de 2010
PROCESIÓN
Deslucidos por el aguaLos cargadores de la Cruz de Yugos llevan el paso protegido de la lluvia con un plástico.
FOTO MIGUEL RODRÍGUEZ GÓMEZ
Los cofrades aplauden dentro de la iglesia de San Lázaro.
Dos hermanos se disponen a cubrir el grupo de La Despedida.
Fernández Nieto explica al jefe de la Policía la decisión de suspender el acto.
B. Blanco La lluvia, intermitente durante
todo el día, finalmente cumplió su amenaza y obligó a suspender la procesión de la Hermandad de Je-sús en su Tercera Caída. Todos sus cofrades esperaban mirando supli-cantes al cielo pocos minutos antes de las ocho y media de la tarde, al-gunos, dentro de la iglesia parro-quial de San Lázaro, preparándose para cargar los pasos, la mayoría, fuera del templo, haciendo ya las fi-las pertinentes para comenzar. Y to-dos con la esperanza intacta de po-der salir finalmente, a pesar de que
las previsiones meteorológicas no eran muy halagüeñas y el cielo es-taba totalmente encapotado.
Esa esperanza de los cofrades hi-zo que, en un principio, se diera co-mienzo a la procesión. Los tambo-res marcaron el ritmo de los prime-ros momentos a la salida de la iglesia, abarrotada de gente en su exterior, pero la lluvia cayó con más furia en esos minutos, acom-pañada por un fuerte viento, por lo que se decidió suspender el desfile y los pocos hermanos que había lo-grado iniciar la procesión tuvieron que volver a la parroquia, que aco-
gía tanto a los pasos de la Herman-dad como a las bandas de música.
Con la desilusión en las caras, los cofrades que estaban en el exterior comenzaron a descubrirse, mientras que los que se habían acercado has-ta allí, paraguas en mano, se aleja-ban de la puerta de la iglesia.
Desde la directiva, se decidió es-perar a que el tiempo dejara sacar los pasos para llevarlos hasta el Museo de Semana Santa. Fue en-tonces cuando se pudo ver, leve-mente, la nueva iluminación de la Corona de Espinas de Coomonte, mientras que la Cruz de Yugos del
zamora era cubierta con plásticos para subirla, con el resto de los pa-sos, por San Martín, escoltados por la Policía Municipal y aplaudidos por las pocas personas que estaban por la calle en esos momentos.
De esta manera, los nuevos se-tenta hermanos de la cofradía no se pudieron estrenar este año en el desfile y habrá que esperar otros doce meses para escuchar el emoti-vo acto de la Plaza Mayor.
Los pasos fueron llevados, a paso ligero, hasta el Museo de Semana Santa, cubiertos con plásticos
La intensa lluvia obliga a suspender el desfile de la Hermandad de Jesús en su Tercera Caída, aunque llegó a salir de la iglesia parroquial de San Lázaro
GALERÍA
Los cargadores del paso de la Cruz de los Yugos, obra de José Luis Alonso Coomonte, posaban con una sonrisa en los labios dentro de la parroquia, queriendo así inmortalizar el momento, sin saber todavía que la procesión se iba a suspender finalmente.
Foto de familia
El tiempo no se apiadó de la procesión, ni tam-poco de los componentes de un ritual consolida-do. El canto «La muerte no es el final» —que estaba previsto para cerrar el desfile bajo lo so-
portales del Ayuntamiento viejo— mudó su escenario. La noticia de que la «Tercera Caída» se quedaría a cubierto precipitó un emocionado canto que estaba llamado a consolar a los fieles
de San Lázaro. En medio de la tristeza y de los abrazos sentidos entre los hermanos, la letra del ya himno de la cofradía puso punto y final a los limitados actos de este Lunes Santo.
La oración «La muerte no es el final» cambió de escenario
A las puertas de la iglesia parroquial de San Lázaro, minutos antes del inicio de la procesión, se pudo ver a varios pequeños cofrades que disfrutaban del momento, ajenos a la preocupación de los mayores, que miraban al cielo con la duda en los ojos.
La ilusión de los más pequeños
DAVID RODRÍGUEZ
A ritmo ordinario de tambor, los cargadores del «Jesús Caído» de Quintín de Torre, tomaron rumbo a la panera de la cofradía. A paso ligero, porque la imagen se quedó en San Lázaro. Y una vez en la panera, intercambia-ron comentarios de aliento en una noche que quedó truncada.
La carrera de Jesús Caído acaba en la paneraLos hermanos soportaron unos minutos la carga de la imagen titular de la cofradía en el desmontaje del paso. No lo imaginaban, pero las previsio-nes meteorológicas precipitaron el plan alternativo: deshacer todos los pre-parativos realizados con mimo para la tarde del Lunes Santo.
Un final precipitado y frustrado en San Lázaro
pólito Pérez Calvo, Higinio Vázquez y José Luis Coomonte.
Estamos ante un escultor con oficio, que trabaja personalmente todas sus obras, sobre todo las talladas en made-ra de las que existe una gran produc-ción destacando sobre todo la imagen de San Juan de la Cruz, de la que una copia realizada en bronce se encuentra en la fachada de la catedral de Cáceres. Cultivó el retrato mostrando en todas sus obras un gran dominio del dibujo.
Durante estos años, abre un taller en Madrid, en la colonia del Viso, calle Daniel Urrabieta donde trabaja en su gran obra los conquistadores, y realiza encargos para toda España. Como aca-démico, el encargado de organizar las exposiciones de Arte Español en el ex-tranjero.
Realizó varias imágenes procesio-nales además del paso de Zamora co-mo el ángel de la Oración del Huerto de Huelva, obra de juventud. Quema-do en 1936, la imagen del Cristo de la Buena Muerte de Valverde del Cami-no. La imagen de la Virgen Esperanza Macarena de Almería y el grupo escul-tórico del Entierro de Cristo en San-tander
Fue, ante todo, un escultor, Vivió to-da su vida por y para la escultura y es-tuvo trabajando hasta los últimos días. La muerte le sobrevino el día 2 de Marzo de 1981 en Madrid, terminado encargo y creando obra. Tenía 81 años.
En 1957 realiza por encargo de la Junta Pro semana Santa de Zamora una imagen de Cristo en el momento de la despedida de su madre. El encar-go le vino dado por su amistad con el entonces gobernador civil de Zamora Juan Murillo Valdivia, tras dar una conferencia en la ciudad en 1954. La obra fue costeada por Carlos Pinilla
Turiño y José An-tonio Girón de Velasco, hombres liga-dos a la organización sindical del anti-guo régimen, para la cofradía de ex-combatientes de la ciudad. Fue bendecida el sábado 13 de abril, víspe-ra del Domingo de Ramos por el obis-po de la diócesis Eduardo Martín Gon-zález. Procesiona por primera vez so-bre el trono prestado del Cristo de las Injurias.
Nos encontramos ante una magnifi-ca obra realizada en el mejor momen-to creativo de su autor. Un escultor en edad madura, pleno de conocimiento que acababa de ser nombrado acadé-mico de Bellas Artes.
Tiene la figura todo el porte de la estatuaria fascista grandilocuente en formas y rigidez en el sentimiento. Es una imagen correcta en ejecución, muy propia del momento en el que fue creada y alejada del sentimiento historicista y neoclásico de nuestros desfiles procesionales. La imagen del Cristo, tallada en madera de cedro, es magnífica en composición y hechuras destacando la amplitud y caída del ro-paje sobre su pecho. Aunque lo que verdaderamente sobresale es la reso-lución del manto sobre la espalda. La figura de la Virgen, tallada en pino del norte, presenta un bello rostro de por-te clásico que quizás sea el mas so-bresaliente de todas nuestras Vírge-nes. Los rasgos de esta cara no se di-ferencian mucho de los su mujer Magdalena Leroux, quizá estemos ante un retrató. Es una pena que que-de tapado por la imagen de Cristo en el desfile procesional. Los ropajes son mas clásicos, pegados a su cuer-po como las figuras de la antigüedad.
La policromía es interesante y un tanto novedosa para la época. Las ca-
ras y manos están policromados a la manera tradicional, aunque poco ricas de veladuras intermedias, lo que le da cierto aspecto de dureza. Los ojos son de carey y marfil en la imagen de la Virgen y de marfil y un agua marina en la imagen del Cristo logrando gran realismo y cierta profundidad en la mirada. Los cuerpos han sido patina-dos con tonos al aceite para vislum-brar la madera entre el color, sin em-bargo la vuelta de esos trajes presen-tan un aparejo dorado que lejos de conferir un halo de sacralidad, aporta cierta luz a los rostros de las imágenes.
Esta forma de policromar es muy extraña en la obra Comendador, ya que si hay algo destacado en su obra religiosa en madera es su excelente policromía, oficio que aprendió sin duda de niño en el taller de Joaquín Bilbao, ya que muchas de sus obras presentan una rica policromía, con abundantes y preciosistas estofados en oro, sin embargo aquí no. Toda la obra es un compendio de color sobre la ma-dera. Los cabellos patinados contras-tan vivamente con las carnes policro-madas para volver a un espacio lumí-nico dorado y acabar en un gran
espacio patinado donde se resaltan los matices de la madera. Una novedad como tratamiento polí-cromo en madera.
Si hay algo que poner en detrimento de la obra, es la interrelación de las dos figuras en el paso procesional. Las fotos publicadas en la prensa de Zamora, donde apare-ce la imagen realizada en aun en escayola antes del sacado de puntos a ma-dera, presenta una unidad entre las dos figuras que ahora no tiene. El brazo de la Virgen está unido al hombro de Jesús y las dos manos derechas estas entrelazadas horizontal-mente, lo que le da a toda la obra un mayor dina-mismo y relaciona las fi-guras en un único con-cepto escultórico.
La decisión de separar las imágenes en dos figu-ras independientes no fue un acierto aunque eso su-puso una mejor realiza-ción de la obra sin la complicación que supo-nía manejar el doble de volumen. La colocación que tiene ahora en la me-sa acrecienta esta separa-ción y las imágenes care-cen del la idea principal que las creó. El último abrazo de la Virgen a Je-sús. Y sobre todo la colo-cación en paralelo de las figuras me parece poco
acertada. Sé que fue el escultor quien las coloco así, y las vio procesionar pero solo tienen visión mirándose de frente. Lateralmente, que es como se contemplan durante el desfile proce-sional se tapan una a otra. La obra ten-dría mas visión si la Virgen se mantu-viese en el centro del paso y Cristo se alejara despidiéndose de ella.
El artífice de una iconografía
tan acertada como La Despedida fue Amando Gómez, deán de la Catedral de Zamora, quien el 7 de marzo de 1947 lanza a través de las páginas del diario local «El Correo de Zamora» la idea de tallar estas figuras. Aun no se había entregado la imagen del Cristo Caído. Algunos años más tarde la Jun-ta Pro Semana Santa y Hermandad de Jesús en su Tercera Caída toma esta iniciativa.
Siempre se nos ha vendido como una idea original y única la representa-ción en Semana Santa de un Jesús que sabiendo llegada su última hora va a despedirse de su madre. Pero tal origi-nalidad no es cierta. La noche del Vier-nes de Dolores desfila en la ciudad de Cartagena la procesión del Cristo de la Misericordia. En ella la agrupación de «El Ósculo» (Beso de Judas) de la Co-fradía de Nuestro Padre Jesús del Pren-dimiento (Californios) procesiona des-de el año 2004 el paso La despedida de Jesús a la Santísima Virgen, obra reali-zada por José Antonio Hernández Na-varro. Es el primer grupo escultórico cartagenero posesionado íntegramen-te por mujeres.
Aunque la iconografía del momen-to de la despedida de Jesús es muy escasa en la Semana Santa actual, no siempre fue así. Ya en 1626 era uno de los pasos que desfilaba en Antequera (Málaga) en la desaparecida Cofradía del Cristo de la Humildad, y en cuya composición se incluía el Apóstol San Juan. En 1638 se sabe que Pedro Fer-nández de Mora esculpía un paso si-milar para la Semana Santa de la ciu-dad de Málaga, conservándose aun hoy día la figura central de Cristo en el convento del Císter, bajo la advocación de Jesús Soberano del Despedimiento para la Pasión.
En Sevilla el gremio de vendedores de pescado funda en el siglo XVII una cofradía que bajo el nombre de Cofra-día del Despedimiento de Nuestro Se-ñor Jesucristo de su Santísima Madre para Ir a Padecer, Santo Cristo de las Virtudes y Dulce Nombre de María. Desfilaba el Miércoles Santo. Dicha hermandad posesionó por última vez en 1820 y su paso de misterio estaba compuesto por las figuras de El Señor y la Virgen, San Pedro, San Juan, San-tiago apóstoles y las tres Marías. Dos a dos, uno enfrente del otro como en actitud de despedirse el Señor de su Madre para irse a padecer. En 1950, unos fieles de la parroquia de San Isi-
dro de Sevilla intentan la recuperación de dicha cofradía y la creación de un nuevo grupo escultórico que recreara ese misterio. La reticencias de las autoridades eclesiásticas frustraron este intento y los bienes que aun exis-tan de esta cofradía fueron repartidos por otras hermandades.
Zamora se adelantó a ese intento creando este grupo escultórico y aun-que en un principio se solicitaron bo-cetos del escultor Collaut Valera, la obra fue encargada finalmente a uno de los mejores escultores que en esos mo-mentos había en el estado español, Enrique Pérez Comendador.
Enrique Aniano Pérez Comendador nace el 17 de noviembre de 1900 en el pueblo cacereño de Hervás. Cuando Enrique tiene seis años su padre consi-gue trabajo en una fábrica de harinas en Sevilla, trasladándose toda la fami-lia a orillas del Guadalquivir. Estudia con los salesianos y en el colegio de San Ramón y a los catorce años ingre-sa en la Escuela de Artes, Industrias y Bellas Artes logrando el título de Peri-to Aparejador.
Siendo un niño, la inquietud artísti-ca se despierta en Enrique y al mismo tiempo que estudia por el día va por la noche a las clases de dibujo, pintura y escultura. El escultor Joaquín Bilbao Martínez lo admite de aprendiz en su taller. Fue este escultor una bocanada de arte dentro de iconografía artística de Semana Santa sevillana. Mal enten-dido por sus paisanos, que rechazaron el correcto clasicismo artístico de la obra de Joaquín Bilbao se decantó por el idealismo Barroco que presentaba escultores como Castillo Lastruci, que han marcado el desarrollo iconográfi-co procesional de la Semana Santa andaluza. La impronta de la obra de Joaquín Bilbao está presente en toda la obra procesional de Pérez Comenda-dor.
En 1919 es pensionado por el Ayun-tamiento de Sevilla y la Diputación de Cáceres obteniendo una beca para estudiar en Madrid y viajar por el Europa.
Con 24 años consigue la 3ª Medalla en la Exposición Nacional de Bellas Artes. A los 25 gana el concurso para erigir un monumento al poeta Gabriel y Galán en Cáceres y en 1930 y 1932 obtiene la Segunda y Primera Medallas en las exposiciones Nacionales.
En 1929 conoce a la pintora france-sa Madeleine Leroux Morel, pensio-nada en la Casa Velázquez de Madrid, casándose con ella en París dos años más tarde.
En 1930 participa por primera vez en la exposición Nacional de Bellas Artes de Madrid, con su obra «Busto de Mujer», y fue «….quien más llamó la atención de la crítica inteligente». El afán por aprender lleva a nuestro
escultor a la ciudad de Roma en la que permanecerá desde 1934 hasta 1939. Esta estancia en Roma marcará el de-sarrollo de su arte, que se moverá entre la grandilocuencia de la estatuaria fas-cista que señala al hombre como eje principal de lo creado y la espirituali-dad derivada de la perfección clásica. Trabaja en muchos de sus desnudos, estudia la escultura etrusca y la poli-cromía al fresco y viaja a Grecia, Inglaterra, Austria, Francia.
La Guerra Civil le sorprende en la Roma fascista como pensionista de la Academia Española, primera institu-ción que personalmente «tomó» parti-do por la causa nacional. Su adhesión al nuevo régimen fue instantánea. Par-ticipa con el gobierno Nacional repre-
sentado a España en la XXI Bienal de Venecia de 1938. Pérez Comendador concurre con 19 obras, de las que so-bresalen las tituladas Madre española y Busto de mujer quien, según palabras de D’Ors «se presenta ante nosotros como uno de los más típicos represen-tantes de las inquietudes asumidas en estos momentos por el Arte oficial».
Ya en España, ingresa en 1941 en la Escuela Central de Bellas Artes de San Fernando, y por ende será más tarde profesor de Modelado del Natural y Composición Escultórica hasta 1970 en la Escuela de Bellas Artes de Ma-drid, teniendo por alumnos a toda una generación de escultores que trabaja-ron en España a mediados del siglo XX. Entre ellos a nuestros paisanos Hi-
Originalidad muy estudiada
Apunte realizado para La Despedida.
Paso del Santo Entierro realizado para Santander.FOTOS CEDIDAS POR RICARDO FLECHA
Pérez Comendador trabajando en su taller de escultura.
IV–VSemana Santa 2010 LA OPINIÓN–EL CORREO DE ZAMORA / Martes, 20 de marzo de 2010
REPORTAJE
✒ Ricardo Flecha Barrio
En los primeros apuntes, la mano de la Virgen aparece sobre el hombro de Jesús; la composición final separó las dos figuras que ganarían si María quedara en el centro de la mesa
Una obra de Pérez Comendador.
Zamora se adelantó, con el paso de Pérez Comendador, a otras ciudades que proyectaban crear
un grupo como La Despedida
VISemana Santa 2010 LA OPINIÓN–EL CORREO DE ZAMORA / Martes, 30 de marzo de 2010
PROTAGONISTAS
MAYORDOMO
C. G. Alfonso Mayo ingresó
en la hermandad de Jesús en su Tercera Caída con un grupo de amigos para sa-car a hombros al paso de la Despedida.
—¿Ya cargaba antes? — Éramos un grupo
que cargábamos en la Vir-gen de los Clavos, en el Santo Entierro. En aquella época empezó el auge de quitar las ruedas a los pa-sos y con esa historia entré en la cofradía. En realidad ya salía desde pequeño, de la Universidad Laboral, con la túnica de mi herma-no, hace 28 ó 30 años. He sido vocal de la directiva con Juan Fernández cuan-do el cincuentenario. Des-pués empecé con un pro-blema cervicales y tuve que dejar de cargar, aun-que he salido como her-mano de fila y estoy en el coro.
—Que le gusta la Se-mana Santa, vamos.
—Es algo que te pica, le coges en gusanillo, tienes vivencias bonitas bajo el paso, porque es una auténtica hermandad que reúne a todo tipo de gente. Ahí no hay diferen-cias sociales, estamos hombro con hombro des-de obreros como yo, a empresarios, abogados, no hay distingos sociales.
—Con la mayordomía recordará, supon-go, los buenos momentos.
—Momentos muy bonitos. Recuerdo que en
la Plaza Mayor con La Despedida, aguantábamos de pie hasta que entraban la Tercera Caída y La Amargura. Era casi media hora, oscilando un poqui-to, pero en el sitio. Había que hacer un esfuerzo so-brehumano y a veces se te saltaban las lágrimas, y eso que descansábamos por turnos los pares y los im-pares. No sé cómo expli-carlo, hay momentos en que se sufre porque llevas a lo mejor 25 kilos duran-te tres horas y tienes que sentirlo mucho para hacer-lo. Es difícil de definir, no es fanatismo, pero sí un sentimiento muy profun-
do. —¿Le gusta esta proce-
sión, estéticamente? —Es atractivo el raso ne-
gro y blanco y artísticamen-te la procesión está muy bien, aunque quizá no pega con la estética de lo que pensamos en Zamora que debe ser la Semana Santa, está demasiado «sevillani-zada». De alguna manera es más entretenida que otras
con más misticismo y hábito monacal. Es posi-tivo que haya de todo.
—¿Le hace ilusión la mayordomía? —Mucha ilusión. He hecho una orla para
distribuirla entre nosotros. La cofradía da un re-cuerdo a los mayordomos, pero nosotros nos hacemos también los nuestros propios.
«En la Plaza Mayor es difícil que no se salten las lágrimas»
«Nuestro desfile está muy bien, aunque quizá tenga una estética muy sevillanizada»
ALFONSO MAYO Ex cargador del paso de La Despedida
COFRADE
B. B. Cofrade de diez herman-
dades, Diego Esteban rei-vindica el papel de la ju-ventud en la Semana Santa.
—¿Desde cuándo está apuntado en esta cofra-día?
—Llevo saliendo en es-ta procesión desde 2001, pero también estoy apunta-do en otras nueve cofradías.
—Así que usted es de los que viven la Semana Santa desde dentro.
—Totalmente. La pri-mera procesión en la que salí fue la del Espíritu San-to, cuando sólo tenía tres años. Con seis años co-mencé a procesionar en el Santo Entierro.
—¿Con qué momento se queda de este desfile?
—Cuando todos los hermanos ya hemos llega-do a la Plaza Mayor y co-mienzan a entrar los pasos para iniciar la oración por los fallecidos de la Her-mandad. Me encanta ver bailar todas las tallas en ese lugar de la ciudad.
—Este año la corona de espinas de Coomonte estrena iluminación, ¿cómo cree que se ha adecuado a la proce-sión?
—Es un paso peculiar, que casi roza lo estri-dente. Pero con la cabeza de la procesión se acopla muy bien, junto con las cruces que abren el desfile. La nueva iluminación será algo inte-resante para ver como novedad de la procesión.
—¿Cuál es su paso preferido?
—El Cristo en su Terce-ra Caída. Estoy en lista de espera para poder cargar, es una imagen a la que le tengo mucha devoción, a la que más de toda la Se-mana Santa. Esta cofradía fue la primera de la que me hice hermano por vo-luntad propia, cuando ya era mayor, porque tenía muchas ganas de salir.
—¿Cómo se prepara para estos días?
—Pertenezco a dos jun-tas directivas: la del Santo Entierro y Las Siete Pala-bras, así que hay que pre-parar cosas desde septiem-
bre. Del resto, intento acu-dir a las asambleas y a algunos actos representati-vos siempre que puedo.
—¿Vive la juventud la Semana Santa de la mis-ma manera que la gente mayor?
—Reivindico nuestro pa-pel en la Semana Santa, no sólo como hermanos de fila, sino también en cargos di-rectivos y representativos,
porque nosotros no somos el futuro sino ya el presente. Y tenemos que heredar la Semana San-ta en las mejores condiciones posibles, por eso creo que necesitamos un rodaje previo en los car-gos, para que no nos pille el cambio de golpe. En este sentido, algunas cofradías ya lo están apli-cando, pero otras se cierran todavía a la juven-tud.
«Todavía hay cofradías que se cierran a la juventud»
«Estoy en lista de espera para cargar el Cristo en su Tercera Caída»
DIEGO ESTEBAN Hermano de Jesús en su Tercera Caída
«Empezó el auge de quitar las ruedas a los pasos, y nosotros fuimos precursores en ello»
Alfonso Mayo. FOTO EMILIO FRAILE
«Mi momento preferido es cuando entran los pasos en la Plaza Mayor para iniciar la oración»
Diego Esteban.
No hay duda de que la Her-mandad de Jesús en su Tercera Caída tiene el futuro asegurado para salir muchos Lunes Santos más. Así se pudo ver a las puer-tas de la parroquia de San Lá-zaro, donde eran numerosos los padres que llevaban a sus hijos, algunos incluso de meses, jun-to a ellos para iniciar el desfile. Tras la desilusión de la suspen-sión de la procesión por la llu-via, algunos optaron por refu-giarse bajo el techo de la igle-sia, donde los más pequeños pudieron descansar e incluso se vio a alguno que se había que-dado dormido después de una tarde tan intensa. MIGUEL RODRÍGUEZ GÓMEZ
Una tradición que pasa de padres a hijos y que perpetúa las tardes del Lunes Santo
VIISemana Santa 2010LA OPINIÓN–EL CORREO DE ZAMORA / Martes, 30 de marzo de 2010
REPORTAJE
José María Sadia A José Luis Alonso Coomonte se
le han pasado estos últimos 25 años volando. Al hacer memoria sobre una de las principales donaciones que ha realizado a la Hermandad de Jesús en su Tercera Caída, la Cruz de Yugos, no podía creer que desde entonces haya transcurrido un cuar-to de siglo. Sin embargo, así lo ates-tigua la historia de la cofradía de San Lázaro, reflejada en la edición del 2 de abril de EL CORREO DE ZAMORA. El artista benaventano acababa de entregar una nueva cruz, la quinta, que comenzaba a forjar un claro hilo iconográfico que ha ido enriqueciendo año tras año.
Aquel Martes Santo, los zamora-nos vieron en la calle una cruz muy especial, compuesta por varios yu-gos y correas para atar a los bueyes, «una cruz casi bizantina, diría yo», explica Coomonte. Sin embargo, la Cruz de Yugos no era la primera aportación del artista a la «Tercera Caída». En el año 1981, la imagen titular de la hermandad, el Jesús
Caído de Quintín de Torre estrena-ba una mesa muy distinta a las vis-tas hasta la fecha. La popular «Tan-queta» reflejaba las 14 Estaciones de la Pasión, que Coomonte había
diseñado para una iglesia de Miami. Reutilizó los moldes originales y compuso una estructura de fibra de vidrio, que le daba el tono verdoso que le valió el apodo de la máquina
militar, hoy transformada en altar para que el Jesús Caído permanez-ca todo el año en San Lázaro.
Y después se sucedieron las cru-ces, no como encargos, sino como
donaciones del autor. «He ido reali-zando las cruces según mi motiva-ción de vida, porque la cruz es algo muy personal, íntimo, y seguro que cada uno de nosotros hemos tenido que llevar una», explica Alonso Coo-monte. El benaventano viene a re-clamar, asimismo, el respeto para su concepción íntima de la obra, «des-pués, la gente la interpretará a su ma-nera y también eso estará bien».
«He ido realizando cruces como una motivación de vida y según el momento», confiesa el benaventano
En los inicios, según refleja el pe-
riódico en aquella fecha, la Cruz de Yugos era la quinta de las que desfi-laban. En este caso, se trataba de un elemento muy especial, que «en principio, debía ir algo más inclina-da», y que portaban los hermanos de la cofradía. Un cuarto de siglo des-pués, la plantilla que lleva a hom-bros este verdadero símbolo de la «Tercera Caída» acaba de reunirse para celebrar el cumpleaños.
Tras la Cruz de Yugos, se suce-dieron el resto de los elementos que componen la colección, pero con el cambio de milenio, Coomonte apos-tó por la Corona de Espinas, una es-pectacular estructura compuesta por rejas de arado. Los yugos, el arado, porque «es donde yo he nacido», re-cuerda el benaventano. Una corona que hace sudar a sus cargadores, al-go que, a juicio de su autor, «no está mal, es una forma de penitencia pa-ra los hermanos».
La popular «Tanqueta», la colec-ción de cruces y la Corona de Espi-nas no son las únicas aportaciones de Coomonte a la Pasión, pero sí a la de Zamora. Con veinte años realizó la talla de un Ecce Homo en su loca-lidad natal que este año protagoniza el cartel oficial de Benavente. Lo hi-zo «con apenas veinte años». Eran otros tiempos, asume Coomonte.
Hoy por hoy, el artista zamorano puede presumir de haber marcado un punto de inflexión en el arte se-manasantero, que se alimentó, como él mismo recuerda, de los retablos clásicos del siglo XVI. Coomonte confiesa que tiene pensado hacer un Cristo para él, que ya lo tiene en la cabeza. Pero, ¿habrá más cruces? «Hay cruces en todas partes, en el suelo, en las baldosas...», responde como evasiva.
«¿Han pasado ya 25 años?» El artista Alonso Coomonte recuerda la donación de la Cruz de Yugos a la
«Tercera Caída», que desfiló por primera vez el Lunes Santo de 1985
La Cruz de Yugos surca la Puerta de la Feria en una instantánea del año 1992.JESÚS DE LA CALLE
«Una tarde agradable...»
El 2 de abril de 1985, «con un tiempo agradable y miles de personas en la calle», el diario EL CORREO DE ZAMORA cuenta cómo la Hermandad de Jesús en su Tercera Caída estrenó una quinta cruz, la Cruz de Yugos, «donación y obra del escultor zamorano José Luis Alonso Coomonte». El periódico cuenta también que el nuevo elemento marchaba tras la Cruz guía y el resto de cruces, portada por los hermanos.
Banda del Cuartel General del Ejército
Por entonces, desfilaban, igual que hoy, La Despedida, Jesús Caído y La Amargura de Ramón Abrantes. Con una diferencia, que el paso titular, obra de Quintín de Torre, lo hacía sobre la popular «Tanqueta», una mesa pequeña que refleja las Estaciones de la Pasión con los moldes de una secuencia realizada para una iglesia de Estados Unidos. Ese Lunes Santo, La Amargura iba acompañada de la Banda del Cuartel General del Ejército. Página 5 del diario del 2 de abril de 1985.
Hemeroteca
VIIISemana Santa 2010 LA OPINIÓN–EL CORREO DE ZAMORA / Martes, 30 de marzo de 2010
PROCESIÓN
J. M. S. La penitencia no entiende de
obstáculos. Los hermanos de la «Buena Muerte» no dudaron en sa-car adelante su cita anual con la es-tameña y la tea y su Cristo se en-cargó de arropar el tremendo acto de fe que supone la madrugada del Lunes Santo. Esa secuencia de imá-genes, instantes, sonidos y silencios que marca un antes y un después en quien se acerca a conocer el opro-bio realizado a Cristo y por el que la ciudad guarda silencio.
Y así la demostración de com-promiso resultó inmensa. Las bisa-gras de las puertas de San Vicente chirriaron lo justo sobre la media-noche dejar escapar gota a gota, la procesión, a ritmo vertiginoso para ganar la primera estación, Santa Lucía. La acústica de la casa del Santísimo Cristo de la Buena Muerte reflejaba ya los ecos del «¡Oh, Jerusalem!» en la voz pro-funda de los hermanos de coro, mientras las teas consumían los pri-meros silencios de la noche.
Apareció Cristo, recostado sobre su Cruz, sereno en el sufrimiento, amparado por el sentimiento zamo-rano. Su dolor inclinado ganó el em-pedrado de la plaza del Fresco para caminar por las calles, esta vez, al-go más desnudas que de costumbre.
El ritual cobró vida, de nuevo. Las teas guiaban a los hermanos camino de Balborraz desenrollan-do un hilo de luz, sólo alterado por las pantallas de las cámaras foto-gráficas, las mismas que se han empeñado en decorar la Semana Santa del siglo XXI. Con la noche destemplada y la luna buscando un hueco en el cielo para escuchar atenta el himno de la «Buena Muerte, las estrofas latinas del maestro Manzano renovaron el mi-lagro. Muchos zamoranos regresa-ban, satisfechos a su casa. El Cris-to recostado en su Cruz caminaba, paso firme, buscando el Arco de Doña Urraca. 2010. Y de allí, los últimos pasos, esos que congelan el tiempo, que hielan el alma a las puertas del templo.
La fe ampara al Cristo recostado
La amenaza de lluvia convierte la noche en un intenso acto de fe en honor al
Crucificado de la Buena Muerte
Los hermanos cubren una parte del recorrido.
MAYORDOMO
C. G. Julio Esteban Carrascal
tiene 48 años y lleva 25 sa-liendo en la procesión de la Buena Muerte, herman-dad a la que se incorporó pocos años después de su creación.
—¿Su momento pre-ferido de la procesión?
—Me quedo con el mo-mento de la iglesia, la so-lemnidad de ese acto, que no puede ver el público pero que es muy bonito, muy emotivo. El momen-to antes de salir y a la hora de llegar, por la intensidad y el recogimiento, aunque desde luego hay otros mo-mentos bonitos, como el de la plaza de Santa Lucía.
—¿Es de las más austeras? —La más austera es las Capas, y pienso que
la segunda es esta, porque en el momento de desfilar todos estamos concienciados para que salga lo mejor posible. Es una forma que te vie-ne en la sangre, es marca de la casa.
—¿Como vive la in-corporación de la mujer en las cofradías?
—Yo creo que se ha tar-dado. Somos un poco «moros», las costumbres no queremos que nos las cambien, y tienen tanto de-recho como nosotros de salir en la Semana Santa, porque la sienten igual de nosotros. Tienen pleno de-recho a salir y pienso que se está haciendo con mu-cha lentitud, parece que no quieren que salga. Casual-mente salgo en el Santo Entierro y es el primer año que desfilan mujeres. A mí me parece estupendo.
—¿Qué valores priman, a su juicio, en la Semana Santa?
—Yo pienso que prima el sentimiento. ¿La religiosidad?, si por supuesto, pero pienso que lo principal es el sentimiento. Habrá gente que no piense lo que yo, pero conozco a muchos que sintonizan con esta idea. Es lo más bonito que tenemos en Zamora.
«Somos un poco “moros” a la hora de incorporar a la mujer» «El momento preferido para mí es la salida en la iglesia, cuando aún no hay público»
JULIO ESTEBAN CARRASCAL Hermano de la Buena Muerte
COFRADE
B. B. A pesar de su juventud,
Fernando Barroso lleva más de 25 años como co-frade de esta Hermandad.
—¿Cuándo comenzó a procesionar en esta hermandad?
—La primera vez que salí fue cuando sólo tenía seis años. A esta cofradía me apuntó mi tío, junto con mi hermano mayor, se puede decir que se trata de una tradición familiar.
—¿Qué le hace espe-cial a esta procesión noc-turna del Lunes Santo?
—Sobre todo la esté-tica que tiene, con la tú-nica blanca y la iluminación de las teas, que no se ve en ninguna otra procesión. Además, el reducido número de cofrades, que no lle-ga a cuatrocientos, también la hace especial. El recogimiento podría ser otra de sus ca-racterísticas, pero ésta creo que la compar-te con la mayoría de las procesiones de nuestra Semana Santa.
—¿Con qué momen-to se queda del desfile desde dentro?
—Por supuesto, con la bajada por la calle Bal-borraz, es un escenario único, con todas las lu-ces apagadas y la gente guardando silencio a nuestro paso. Otro lugar muy destacado para mí es la zona cercana al ar-co de doña Urraca.
—Otra de las carac-terísticas singulares son las teas que se portan, ¿hay que llevarlas de una forma especial?
—Lo único que hay que hacer es tener cuida-
do al pasar muy cerca al lado de la gente que está viendo la procesión. La tea debe ir apo-yada en la cintura y un poco incorporada pa-ra que no se consuma muy pronto.
—¿Pertenece a más cofradías? —Salgo en las del Vía Crucis y en la de
Jesús Nazareno y cada una de ellas tiene su propio encanto, muy diferentes entre sí.
«La bajada por la calle de Balborraz es un escenario único»
«Su estética, con las túnicas blancas y la iluminación de las teas, la hace especial»
FERNANDO BARROSO
Julio Esteban Carrascal.DAVID RODRÍGUEZ
Fernando Barroso.FOTO DAVID RODRÍGUEZ
IXSemana Santa 2010LA OPINIóN–EL CORREO DE ZAMORA / Martes, 30 de marzo de 2010
Semana Santa 2010 LA OPINIÓN–EL CORREO DE ZAMORA
TEMPLO DE SALIDA: LA HORTA
F. P. La iglesia de Santa María de la
Horta, una de las joyas del romá-nico zamorano será sometida a un proceso de restauración integral por parte del Proyecto Cultural Za-mora Románica, promovido por la Junta de Castilla y León y el Ayun-tamiento de Zamora, si bien sus in-tervenciones se llevarán a cabo en dos fases espaciadas entre sí:
La primera fase, llevada a cabo durante los pasados meses, se cen-tró en la zona correspondiente a la nave sur, que presentaba un im-portante estado de deterioro en sus espacios, concretamente en la unión entre el baptisterio y la sa-cristía. Esta última, se encuentra en un estado de conservación acepta-
ble, todo lo contrario que el espa-cio usado como cuarto de instala-ciones, que debido a actuaciones recientes (en las que se dispuso en su interior además de la caldera de calefacción ya existente, un aseo), calificables como poco, de desa-fortunadas, muestra un deterioro innecesario y evitable derivado de la instalación y uso de este tipo de elementos.
Con el objeto de dignificar y re-cuperar el ámbito de esta la nave lateral, se propuso demoler los distintos muros de fábrica que ha-bían compartimentado moderna-mente estos ámbitos, dejando así un espacio totalmente diáfano. Con la retirada de estos añadidos, tuvo lugar el feliz descubrimiento
de unas pinturas murales de épo-ca medieval, que en la actualidad se encuentran en proceso de estu-dio y que serán objeto de restau-ración, junto con el nuevo espacio resultante, durante la presente anualidad.
La cubierta de la sacristía se modificó en una actuación hace escasos años, dejando marcado al exterior un vasto recrecido entre la línea de cornisa antigua y la te-ja, desacorde con la ejecución del resto de paramentos, por lo que se procedió al desmontaje de la cu-bierta y construcción de una nue-va a nivel de esa antigua cornisa.
A partir del segundo semestre del año comenzará la segunda fa-se de intervención, en la que se
acometerá ya la restauración inte-gral del templo, interviniendo so-bre todo en la limpieza de sus pa-ramentos tanto exteriores como interiores. Éstos, debido al paso del tiempo y al uso de un tipo de calefacción poco adecuado, pre-sentan gran suciedad y deterioro.
En lo tocante a sus paramentos exteriores, el norte se encuentra bastante deteriorado con gran pre-sencia de suciedad, humedades y pérdida de elementos pétreos en algunas de sus partes que será ne-cesario restituir; lo mismo sucede con la zona del ábside.
La nave sur, en la que ya se ha intervenido, se dignificará, po-niendo en valor además las pintu-ras murales aparecidas.
La intervención en la torre se re-ducirá sobre todo a un proceso de limpieza, pero con lo que respec-ta al Archivo de la Orden de San Juan se procederá a un proceso de restauración com-pleto tanto de sus paramentos, car-pinterías, solado, etc.; como del propio armario-archivo, ya que el estado de abando-no es considera-ble.
Finalmente, la intervención más significativa de esta segunda fase va a corresponder a su entorno, so-bre todo por la imperiosa necesi-dad de solventar los problemas de humedad del templo debido a la presencia de grandes filtraciones de agua hacia el interior que se producen desde la zona norte y la cabecera.
La intervención sobre los bie-nes muebles de la iglesia de la Horta se está centrando en dos grupos de piezas de cronología medieval, aunque de muy dife-
rente naturaleza, pues uno de ellos serán las pinturas murales descu-biertas, en su mayoría de estilo gótico aunque con restos de un ci-clo pictórico fechable en el siglo XVI; y un interesante conjunto de laudas sepulcrales labradas en piedra arenisca de los siglos XIII y XIV.
Precisamente en relación con los bienes muebles, este templo romá-nico, fue el primero en exhibir una nueva cartelería de diseño atractivo y novedoso, que con el paso de los meses se ha extendido al resto de las iglesias que componen el Pro-yecto Cultural Zamora Románica, en la que además de informar sobre la restauración de estos bienes, en muchas ocasiones desconocidos
para los propios zamoranos, recoge una pequeña ficha técnica, junto con una reseña histórica y fotogra-fías de su estado previo.
Novedades junto al DueroLa retirada de añadidos en La Horta deja al descubierto pinturas murales del medievo
Interior de La Horta durante el proceso de restauraciónFOTO CEDIDA POR «ZAMORA ROMÁNICA»
Torre y portada sur de Santa María de la Horta
«La Lanzada» de la iglesia de El Perdigón (detalle). L. O. Z.
C. G. La colección de láminas «15 joyas de la Pa-
sión de Zamora» llega mañana a la décimo se-gunda entrega, con la reproducción de «La Lanzada», una obra del siglo XVI atribuida a Luis del Castillo, que procede de la iglesia pa-rroquial de San Félix, de El Perdigón. La es-cena reproduce el momento en el cual un sol-dado romano (Longinos) a caballo acaba de herir con su lanza a Jesús en el costado dere-cho, y de la herida ha brotado sangre y agua, símbolos de la eucaristía y el bautismo.
Mañana, «La Lanzada», un óleo sobre tabla de la iglesia parroquial de San Félix, de El Perdigón ● La obra, del siglo XVI, reproduce el momento en el que un soldado romano hiere el costado de Jesús
«15 joyas de la Pasión de Zamora»
R. D. S. El presidente de la Cofradía de
las Capas Pardas, Antonio Martín Alén, pidió ayer disculpas a los miembros del coro de la Herman-dad por las declaraciones efectua-das en el especial de Semana San-ta de LA OPINIÓN-EL CORREO DE ZAMORA publicado el pasa-do domingo en las que dejaba en-trever que algún miembro de la agrupación musical podía haber cambiado una de las capas que les cede la Cofradía por otra en peor estado. «En esas declaraciones no
he querido implicar directamente a ningún miembro del coro porque es verdad que hay mucha más gente que tiene acceso directo a la iglesia. Mi intención no ha sido ofender a ninguno de los cantores y desde aquí quiero pedir a cada uno perdón porque no he querido inculpar a ninguno de ellos. Así se lo he transmitido al director, Pa-blo Madrid. A partir de ahora, se harán las cosas de otra manera y se tendrá más cuidado a la hora de entregar las capas», declaró a este periódico.
Martín Alén pide perdón a los miembros del coro de las Capas PardasDenunció el «cambiazo» de una de las prendas que se prestan a los cantores
XISemana Santa 2010LA OPINIÓN–EL CORREO DE ZAMORA / Martes, 30 de marzo de 2010
ITINERARIOS
LO QUE NO HAY QUE PERDERSE
REZO DEL VÍA CRUCIS Los cofrades que acompañan al paso del Nazareno participan en el rezo del Vía Crucis que se celebra a la llegada de la imagen al templo parroquial de San Frontis. El rezo es reproducido por unos altavoces.
DESPEDIDA Uno de los momentos más emotivos de la procesión se produce a la salida del Puente de Piedra, cuando las imágenes del Nazareno y de la Virgen de la Esperanza se despiden con varias reverencias.
Cofradía de Jesús del Vía Crucis
Sale a las 20.15 horas de la Cate-dral y sigue por la Rúa de los Nota-rios, plaza de los Ciento, Rúa de los Francos, Plaza Viriato, Ramos Ca-rrión, Alfonso XII, plaza Santa Lu-cia y Puente. El desfile cruza el Puente de Piedra y sigue por plaza de Belén, donde el Nazareno despi-de a la Virgen de la Esperanza, la cual se dirige al convento de las Do-minicas Dueñas, para continuar el Nazareno por la avenida del Naza-reno de San Frontis, Fermoselle has-ta la plaza de San Frontis, donde se reza el Vía Crucis para finalizar en el templo parroquial de San Frontis.
Las imágenes titulares toman caminos diferentes al atravesar el Puente de Piedra
REZO EN LA PLAZA VIRIATO
de la procesión de la Hermandad de las Siete Palabras se produce en la Plaza de Viriato, donde se celebra el rezo de las Siete Palabras en un acto de oración y de reflexión en el que se invita a participar a los asistentes. La oración antes se realizaba en la Plaza de Claudio Moyano.
SALIDA DE LA HORTA La procesión parte de la iglesia de La Horta, uno de los puntos del recorrido procesional donde se congrega una mayor afluencia de público para ver como los cofrades sacan la imagen titular del desfile, el Cristo e la Agonía, antes de iniciar su andadura por las calles del casco antiguo de la ciudad.
Hermandad Penitencial de las Siete Palabras
Sale a las 0.00 horas desde la iglesia de Santa María de la Horta, para continuar por Plaza de la Horta, Plaza de San Julián del Mercado y las calles Plata, Balborraz, Plaza Mayor, Costanilla, Ramón Álvarez y Plaza de la Leña. Baja por el Arco de Doña Urraca, Ronda de Santa María la Nueva y sigue por la calle Motín de la Trucha, calles Hospital, Damas, Moreno, Rúa de los Francos, y Plaza de Viriato, donde se celebrará el acto de las Siete Palabras. Después continuará por: Rúa de los Francos, calle Doncellas, Chi-meneas, Cuesta de San Cipriano, Plaza de Santa Lucía, Zapatería, Caldereros, y Pla-za de la Horta, para retornar al templo de salida.
El Cristo realiza un recorrido nocturno por el casco histórico de la ciudad
Imagen del Cristo.FOTO L. O: Z.
Cristo de la Agonía
HERMANDAD FUNDACIÓN: 1968 HERMANOS: 850 COFRADE VESTIMENTA Túnica y estameña blanca. Caperuz y fajín de pana verde.
Imagen de la Virgen de la Esperanza.
Nazareno y Virgen de la Esperanza
1.938 1.500
Túnica blanca. Caperuz, escapulario y faja morada.
XIISemana Santa 2010 LA OPINIÓN–EL CORREO DE ZAMORA / Martes, 30 de marzo de 2010
PUESTA EN VALOR DEL PATRIMONIO
Otro año más, por estas cosas que tiene la vi-da, el trabajo, y el resi-dir a 800 kilómetros,
he tenido que faltar a la cita que ningún zamorano puede obviar. Este año en concreto, me duele más que otras veces, que por los mismos motivos, he faltado a la reunión. Me hacía mucha ilusión poder llevar a Pablo por primera vez, a ver las procesiones. Esta-ba deseando cogerlo en brazos cuando se acercase el Baranda-les anunciando el desfile, me moría de ganas porque me diera un beso en el atrio de la catedral, con su madre, antes de entrar con todos mis hermanos a jurar silencio. Me hubiese encantado que pudiese haber olido el in-cienso saliendo del pebetero, que viese las velas y notase el si-lencio. Me quedo con las ganas
de ponerle una minitúnica y sa-carlo conmigo y con su abuelo y su tío, aunque solo sea un ratito, repartiendo algunas almendras y comiéndose todas las que quisie-ra. Como no voy a estar, no po-drá ir a esperarme a la Plaza Ma-yor el viernes por la mañana, no podrá ver con su madre y conmi-go, el bosque de cruces alzadas que despiden hasta el año que viene a su otra madre, la de to-dos los zamoranos. Como no estaremos, no notará retumbar su barriguita al paso de los tam-bores y cornetas de la Congrega-ción. No pasará frío, extendien-do la mano, esperando una almendra de algún amigo y her-mano.
Todo esto nos lo hemos perdi-do, el año que viene será. Para que vaya aprendiendo, y así ma-tar también mi añoranza, le he enseñado vídeos de nuestra Se-mana Santa, le he puesto graba-ciones del Merlú, lo ha visto y lo ha oído, aunque no sea lo mis-
mo. Le compré una corneta de plástico y él imitaba los desfiles que veía en los vídeos. Ha escu-chado las cornetas y los tambo-res, ha visto el Cinco de Copas, las cruces, la Verónica, la Sole-dad, las reverencias, las Tres Marías, ha escuchado la banda Nacor Blanco tocando Thalberg, Mater Mea... he intentado que lo viese y, oyese todo, y parece que le ha gustado. Hoy es Viernes Santo. La Semana, ha terminado. Anoche me fui a la cama más pronto que de costumbre, echan-do de menos tantas cosas y a tan-ta gente, que lo único que quería era dormir y que la noche acaba-se lo antes posible y con ella mi nostalgia. Ha sido en balde, no he podido dormir, habrá sido ca-sualidad pero a las cinco en pun-to Pablo se ha despertado tocan-do la corneta de plástico que le regalé.
Como no voy a estar, no podré ver el bosque de cruces alzadas que despide hasta otro año a la Virgen de la Soledad■
Jorge Valcárcel Pérez Me fui a la cama en
balde, no he podido dormir. Habrá sido casualidad, pero a las cinco en punto Pablo se ha despertado tocando la corneta de plástico que le regalé y con la que imita las procesiones que le voy enseñando en vídeo
“
El Merlú del Viernes Santo.FOTO L. O. Z.
J. M. S. Los responsables de la Cofradía
de la Santa Vera Cruz han elegido «El árbol de la Cruz» como título para el catálogo que recoge la ex-posición celebrada en 2008 con motivo del VI Congreso Interna-cional y la XXV Peregrinación y que acogió el Museo Etnográfico. En datos, el volumen —editado en formato de lujo— contiene refe-rencias de unas ochenta obras sa-cras, la mayoría de titularidad de la diócesis de Zamora y otras cedi-das por el propio Etnográfico y la cofradía.
En realidad, el compendio debería haberse editado junto con la celebración de la ex-posición. Carlos Piñel, di-rector del Etnográfico, ex-cuso la demora, justificada en que «queremos hacer las cosas bien, porque este catá-logo es el que va a permane-cer en el tiempo, mientras que la exposición pasa». Y es que el trabajo ha sido impulsado por la «Vera Cruz», pero ha sido la co-laboración con el Museo, con las instituciones municipal y provin-cial y con la entidad Caja Rural, la que ha permitido hacer reali-dad la idea fuerza de la cofradía.
«La tozudez de Chano ha sido fundamental para sacar este pro-yecto adelante», comentaba el historiador José Andrés Casque-ro, técnico que se ha encargado del estudio de las piezas in-cluidas en la obra, junto con José Luis Hernando y el de-legado de Patrimonio y Cultu-ra de la diócesis, José Ángel Ri-
vera de las Heras. Sus aporta-ciones han engendrado este compendio, de la que se han editado 1.500 ejemplares y que «es ya una obra de referencia en torno a la cruz», coinciden en señalar los autores. De ahí
que, según indicó Carlos Piñel, «El árbol de la Cruz» estará pre-
Una «biblia» sobre la Cruz ● «Vera Cruz» y Etnográfico sacan a la
luz el catálogo de la exposición de 2008El libro recoge referencias de unas
80 piezas de la diócesis de Zamora
Viernes Santo
sente en todo el mundo a través de librerías y ferias.
«El catálogo no es una simple re-ferencia de las obras, sino un traba-jo exhaustivo de las piezas realiza-do por especialistas», definió José Andrés Casquero. Por su parte, Jo-sé Luis Hernando habló de los dis-tintos significados históricos de la
cruz y de los «aspectos mágicos» que la han rodeado. «Este catálogo intenta soslayar aspectos proble-máticos acerca de la cruz», detalló Hernando. El tercero de los técni-cos y nexo de unión con el Obispa-do, el delegado Rivera de las Heras se mostró «gratamente sorprendi-do» por el resultado final de la edi-ción y destacó la relación «exce-
lente» que existe en-tre la institución eclesiástica y el Mu-seo Etnográfico en es-ta labor.
Tras el turno de agradecimientos a to-das las personas im-plicadas en la edición del manual a cargo de Chano Lorenzo, pre-sidente de la «Vera Cruz», el responsable del Etnográfico, Car-los Piñel, valoró la «colaboración» entre todas las instituciones como «modelo» de hacer las cosas. Asi-mismo, Piñel subrayó el «enorme esfuerzo» realizado tanto por los técnicos como por los miembros del Museo
que dirige, porque «han sido mu-chas las horas y los días que se han invertido en este trabajo».
Del lado institucional, la alcal-desa, Rosa Valdeón, valoró el alumbramiento del libro, al tiempo que advirtió que el Ayuntamiento «ha tenido un papel mínimo». Las librerías zamoranas dispondrán del nuevo libro en breve.
UNA OBRA DE REFERENCIA.- Instituciones y cofradías coinciden en destacar la relevancia de «El árbol de la Cruz». Sobre estas líneas, Valdeón y Piñel examinan la edición. A la izquierda, túnica de la Vera Cruz de Toro de los siglos XVIII y XIX. Al lado, cruz procesional del XVI, ambas incluidas en el tomo.
XIIISemana Santa 2010LA OPINIÓN–EL CORREO DE ZAMORA / Martes, 30 de marzo de 2010
LA PASIÓN EN LA PROVINCIA ALISTE
Belén Alonso La procesión del Santísimo
Rosario de la Luz abre hoy las procesiones en Manganeses de la Lampreana. La cofradía ini-ciará su recorrido a las 21.00 horas por las calles de la locali-dad y como es tradición cuatro cofrades sacarán el paso de ro-dillas desde el Altar Mayor has-ta la puerta del templo.
La hermandad del Santísimo Rosario de la Luz es la de más reciente fundación. Creada en 2006, cuenta con 33 cofrades que acompañan a la Virgen del Rosario y es la primera cofra-día mixta de la localidad terra-campina.
Mañana, Miércoles Santo, la procesión del Santísimo Cristo de la Consolación realizará a partir de las 21.30 horas el re-corrido por la villa.
El Jueves Santo, los actos de la pasión darán comienzo a las 18.00 horas con la misa de la Cena del Señor, para proseguir a las 18.45 horas con la proce-sión del Nazareno, con la talla del imaginero Ramón Alvarez. A las 20.00 horas se celebrará la Hora Santa.
El Viernes Santo, a las 9.00 horas comenzarán los turnos de vela y a las 11.30 horas saldrá a la calle la procesión de la Ve-ra Cruz. Los actos litúrgicos se celebrarán a las 18.00 horas y a las 22.00 desfilará la procesión del Yacente y Nuestra Madre de las Angustias.
El Santísimo Rosario de la Luz abre los actos de la Pasión en Manganeses La cofradía, fundada en 2006, es la primera hermandad mixta de la localidad
Chany Sebastián El «Cristo de la Piedad», una de
las más históricas imágenes reli-giosas del Arciprestazgo de Aliste, será el encargado de abrir mañana, Miércoles Santo, a las 21.00 horas, la Semana Santa de la Villa de Al-cañices estrenando una nueva me-sa procesional en la mística «Pro-cesión del Silencio». La escasez de personas voluntarias para ser car-gadores ha sido un grave problema en los últimos años, tal es así, que incluso en 2008, la procesión hu-bo de salir a la calle sin la anti-gua y preciada imagen para los alcañizanos. A la ausencia de vo-luntarios se unía que con los nuevos tiempos se mezclaban los mayores, con estaturas me-dias de alrededor de 160 centí-metros con los más jóvenes que no bajan de 180, con lo cual, la tarea era imposible y siempre el peso de las andas recaía en los mismos.
La nueva mesa, con un peso de más de 1.000 kilos, llega con la ventaja de que puede llevarse por los cargadores, si los hay, o en caso contrario, hacerlo sólo dos personas pues cuenta con cuatro ruedas y los correspondientes fre-nos.
Aunque podrá utilizarse con hasta cinco pasos diferentes en es-ta Semana Santa se hará con el
Cristo de la Piedad (Miércoles Santo) y «El Nazareno» (Jueves Santo y Viernes Santo). Ambas imágenes son muy grandes con lo cual otro obstáculo a salvar era tanto la puerta de la iglesia parro-quial de «Nuestra Señora la Vir-gen de la Asunción» como la del Convento (Virgen de la Salud). Por eso la nueva mesa cuenta con un mecanismo hidráulico que per-mite bajarlas y subirlas a una sola persona.
Los auténticos artífices de la iniciativa han sido Manuel Ferrei-ra Rodríguez (coordinador), Mi-guel Barros Gago, que ha labrado la madera de haya e Isidro Rivas Gago que se ha encargado de ayu-darle en su construcción a Talleres José de Ceadea.
El coste ronda sólo los 5.000 euros, gracias los cientos de horas echadas altruistamente por ellos, sino no llegaría ni con 12.000. La
financiación se hace a través de una rifa y con los donativos de de-votos e instituciones como Funda-ción «Caja Rural».
El Cristo de La Piedad de Alcañices estrenará mesa mañana en la «Procesión del Silencio»● En 2008 la imagen no pudo salir a la calle en la noche de Miércoles Santo por falta de cargadores
Ch. S. Manuel Ferreira Rodríguez es
uno de esos alistanos a los que la vi-da llevó a otras tierras regresando al jubilarse a los orígenes siempre año-rados y queridos, que nunca olvida-dos. Es él uno de los artífices y co-ordinadores de la ambiciosa inicia-tiva semanasantera en una Villa donde la Semana Santa ya fue his-tórica en tiempos de los Francisca-nos y la cofradía de la Vera Cruz.
—¿Cómo y cuando surge la ne-
cesidad y la idea de construir una nueva mesa procesional?
—Para que la Semana Santa no se termine. Ya nos paso hace dos años que el Cristo de la Piedad no pudo procesionar por falta de per-sonas que lo llevaran y no quería-mos que eso volviera a suceder. La procesión del Silencio no es lo mis-mo sino sale la imagen. Son imáge-nes que pesan mucho y hace falta gente. Para llevar «El Nazareno» los días de Jueves Santo y Viernes San-
to hacen falta doce cargadores. Con la nueva mesa procesional dos o tres personas pueden hacerlo sin proble-mas.
—La tarea, me imagino, mere-ce la pena, pero no habrá sido fácil.
—Hemos tenido que movernos y trabajar mucho y muchas horas. Yo encargándome de hacer la rifa y dis-tribuyendo los talonarios por los co-mercios. Isidro, Miguel y José ha-ciendo los trabajos. Las horas son
incontables. La mesa ha quedado muy bien y ahora sólo esperamos que la gente y las instituciones cola-boren para poder cubrir los gastos.
—Ilusión, por lo menos, no les
falta, e incluso parece ser estáis abiertos a construir más mesas.
—Si a la gente le gusta y colabo-ra por nuestra parte no habría pro-blema en hacer nuevas mesas. Aho-ra de momento nos arreglaremos con esta, que debido, a que es muy grande habrá de guardarse en la iglesia del Convento.
—Una de las novedades, apar-te de las riendas y el elevador hi-dráulico, es la iluminación.
—Cuenta con autonomía propia, ya que lleva oculta una batería que abastece a las cuatro lamparas. El hidráulico permite subir y bajar al entrar y salir de las iglesias de La Asunción y el Convento ya que las imágenes son más altas que las puertas. Luego lleva una falda de terciopelo que cubre la parte baja para que no se vean ni los meca-nismo ni los cargadores. Se com-plementará luego en cada proce-sión con las flores. Nosotros y la gente estamos muy ilusionados con el estreno.
«Construimos la nueva mesa procesional para que la Semana Santa no se termine»
«Esperamos la colaboración de la gente para cubrir los cinco mil euros de coste»
MANUEL FERREIRA Coordinador de la iniciativa «Pro Mesa»
Los artífices de la nueva mesa posan junto al Cristo.FOTO CH. S.
Manuel Ferreira.
hidráulico que permitirá subir y bajar las tallas a una sola persona
CAMPOS
Las ruedas permitirán a dos personas llevar las figuras por las calles, en el caso de que falten voluntarios
J. A. G. Por tercer año consecutivo, el
Obispo de la Diócesis de Zamora presidió anoche la Eucaristía en la celebración del Triduo al Santísi-mo Cristo de la Salud de la Co-fradía del Silencio, en la iglesia parroquial de Santa María del Carmen de Renueva de Benaven-te. Gregorio Martínez Sacristán protagonizó la homilía e impuso la medalla a los veinticinco nue-vos hermanos de la Cofradía en una ceremonia que se ha conver-tido en un hito para la Cofradía benaventana año tras año precisa-mente por la presencia del obispo.
El Silencio ha ganado medio centenar de cofrades en el último
bienio. Anoche recibieron su me-dalla trece mujeres y doce varo-nes con una media de edad infe-rior a los cuarenta años, según su presidente Antonio Flórez, que destaca el incremento de la parti-cipación. «Cada vez sale más gente y cada vez hay más respe-to», explica.
Tras el oficio religioso, que co-menzó a las ocho de la tarde, tu-vo lugar el Primer Triduo al Cris-
to de la Salud. El sacerdote Da-niel Villalón, párroco de Bermi-llo y Almeida de Sayago y tam-bién de Peñausende, ofició ano-che el triduo y lo hará también hoy y mañana.
Nueva campana de bronce La Cofradía del Silencio, la
más joven de las cuatro herman-dades benaventanas, congrega ya entre sus filas a 430 cofrades. Ti-
tular de la procesión del mismo nombre que sale durante la noche del Miércoles Santo, sus herma-nos miran desde ayer al cielo confiando en que la lluvia sea be-névola y no haga acto de presen-cia mañana por la noche.
El Silencio no tiene este año grandes novedades, pero si tendrá al menos un pequeño estreno. Un cargador del paso del Cristo de la Salud ha donado una campaña
de bronce con la efigie de la Cruz de Santiago y la leyenda: Santísi-mo Cristo de la Salud. Pesa 18 kilos y procesionará y sonará ma-ñana por primera vez, posible-mente trasladada por dos cofra-des.
El Coro del Carmen cantará por segundo año al Nazareno y entonará el Himno al Cristo de la Salud en la Plaza Mayor cuando la comitiva procesional alcance este punto del recorrido. Y, como ha venido ocurriendo en los últi-mos años, la procesión finalizará arropada por la Banda de Música a las puertas del Carmen de Re-nueva. Los músicos interpretarán una saeta y los cargadores mece-rán los pasos hasta completar el regreso al templo mariano. Este se ha convertido en uno de los momentos más emocionantes y entrañables de la Procesión del Silencio en los últimos años al que aguarda el público más devoto.
Miriam Soto La Cofradía de Jesús Nazareno
continúa preparando con mimo la Procesión del Encuentro del pró-ximo viernes. Si el sábado eran los costaleros los que realizaban el en-sayo general por las calles del cen-tro de Benavente, ayer las camare-ras de la Cofradía cambiaban la vestimenta del Nazareno y de La Dolorosa, que en la mañana del Viernes Santo protagonizarán uno de los momentos más emotivos de la semana de Pasión benaventana.
Los hermanos de la Cofradía trasladaron ayer las andas hasta la Iglesia de Santa María para colo-car en ellas las dos imágenes que procesionarán dentro de tres días.
Una vez instaladas las esculturas, con «mucho mimo», como resaltó el Alcalde Mayor de la Cofradía, Félix Vara, los mantos que visten habitualmente el Nazareno y la Virgen de los Dolores, fueron sus-tituidos por la vestimenta que luci-rán en el momento del desfile. «Una labor ardua y meticulosa, que requiere mucho más tiempo del que se puede imaginar, porque son ropas muy delicadas y valio-sas, que dan aún más belleza y va-lor al Nazareno y a la Virgen”, re-saltó Vara. Toda dedicación es po-ca a la hora de engalanar al Nazareno, que este año contará con una nueva camisola que vesti-rá debajo del manto, y que ha sido
donado por una diseñadora bena-ventana. Los últimos retoques, du-rante la mañana del próximo jue-
ves, cuando se colocarán las flores que adornarán las andas en el mo-mento de la procesión, y el nuevo
farol.
XIVSemana Santa 2010 LA OPINIÓN–EL CORREO DE ZAMORA / Martes, 30 de marzo de 2010
TRIDUO DEL SILENCIO
Juramento de devoción
BENAVENTE
El obispo de la Diócesis impone la medalla a 25 nuevos hermanos durante la misa previa al primer
día de oración al Cristo de la Salud
Cristo Flagelado en primer plano durante la misa en la iglesia del Carmen de Renueva. A la derecha, el obispo impone una medalla a un cofrade de El Silencio.FOTIO C. DE LA CAL
Con las mejores galas de la Pasión
El Nazareno y La Dolorosa ya visten los mantos que lucirán el Viernes
Santo en la Procesión del Encuentro
Un grupo de cofrades de Jesús Nazareno sostienen la talla del Cristo ayer por la tarde en Santa María.
Martes Santo Procesión de las Tinieblas
A las 21,15 horas comenzará la Procesión de las Tinieblas. Las Co-fradías Santa Vera Cruz, Santo En-tierro y Damas de la Luz y la Soel-dad, acompañadas de las autori-dades y representaciones de las distintas cofradías, reunidas en La Ermita de la Soledad inician la pro-cesión con el siguiente orden: Paso de la Verónica acompañada por la Cofradía del Silencio, Paso de Je-sús con la Cruz a Cuestas acom-pañado por la Cofradía de Jesús Nazareno, Cristo Yacente acompa-ñado por las Cofradías de la Santa Vera Cruz y Santo Entierro, Ima-gen de la Virgen de la Soledad y la Imagen de la Virgen de las Angus-tias acompañadas por las Damas de la Luz y la Soledad, cerrando la Procesión la Presidencia del Clero, acompañados por los Alcaldes Ca-balleros de las Cofradías y por últi-mo las Autoridades Civiles y Milita-res y miembros de la Junta Pro-Se-mana Santa
XVSemana Santa 2010LA OPINIÓN–EL CORREO DE ZAMORA / Martes, 30 de marzo de 2010
PASION TORESANATORO
M. Barrio No pudo ser. El Santísimo Cris-
to del Amparo se quedó ayer sin procesionar al son de la matraca y el bombardino por culpa de la llu-via, que no cesó de aparecer a in-tervalos de fuertes rachas a lo lar-go de toda la jornada
Los responsables de la cofradía homónima habían acordado a me-dia tarde esperar hasta las 11.00 de la noche en un intento de apu-rar hasta el final todas las posibi-lidades, pero llegadas las diez ya vieron que la cosa estaba fea, muy fea. En las caras de los hermanos de esta real hermandad, cubiertos con sus capas castellanas, se podía ver la decepción y el desánimo an-te la situación, mientras aguarda-ban en el interior del templo de San Antón, al que pertenece la imagen, uno de los Crucificados más bellos de la Semana Santa de Toro. Aflicción también entre los numerosos toresanos que se que-daron sin ver la salida de la iglesia de esta hermosa talla del siglo XVI con la que cada año se inicia un desfile sencillo y conmovedor que recorre las calles más vetustas de la localidad.
La procesión ya se ha suspendido en varias ocasiones desde el año 1991, cuando comenzó a celebrarse
Los faroles, apagados, se apos-
taban en el interior del recinto eclesiástico sin que pudieran ali-viar la pena de cofrades y devo-tos que pedían al Cristo que el año que viene puedan volverse a reunir.
El Coro Interparroquial de Toro y el Coro Parroquial de la Trini-dad, que entonó el Miserere, tam-poco pudieron unirse a las rogati-vas en el interior de la iglesia.
No es la primera vez que la pro-cesión del Cristo del Amparo se queda sin salir a causa de la lluvia
desde que comenzara a celebrarse en el año 1991. La hermandad da-ta del siglo XVIII -sus estatutos de 1774 aluden a otros anteriores-, y se creó en torno a la festividad del Cristo del Amparo que se ce-lebra el 14 de septiembre, pero sus responsables acordaron hace
19 años llenar el hueco del Lunes Santo, vacío por entonces de pro-cesiones.
Alfonso Sumillera Manso, Pas-casio Presa Oreja, Antonio Manso Matilla y Juan Antonio Manso García, son este año los abades en ejercicio de la cofradía.
Rezos para aliviar la penaLa lluvia impidió que las matracas y el bombardino resonasen en las calles para acompañar
al Cristo ● Desánimo entre los miembros de la cofradía ante la imposibilidad de desfilar
El Cristo, al fondo, con el templo abarrotado de fieles una vez que se decidió suspender la procesión.FOTO M. B.
La toresana Conchi Rodríguez expone en la Oficina Municipal de Turismo una veintena de cua-dros con motivos de la Semana Santa de la localidad. Se trata de pinturas al pastel en pequeño formato que hacen un recorrido por las diferentes procesiones que conforman la Pasión toresa-na. «He procurado que hubiera un poco de casa cosa, ha señala-do la artista. Las pinturas for-man parte de la serie de medio centenar que ya se expusiera ha-ce seis años en la Casa Munici-pal de Cultura. FOTO M. B.
La Pasión toresana se muestra en colores pastel
M. B. Hoy, Martes Santo, la Cofra-
día de Jesús y Ánimas de la Campanilla trasladará en pro-cesión al Santo Ecce-Homo desde el Real Monasterio de Santa Clara hasta la iglesia de Santa María de Roncesvalles, donde quedará dispuesto para procesionar de nuevo el Vier-nes Santo, junto al resto de imágenes que se encuentra en el templo. La procesión de hoy dará comienzo a las 21.30 ho-ras y discurrirá por la plaza de Santa Clara, plaza de San Ju-lián (donde se incorporará la Virgen de los Dolores), calle el Sol, Arco del Reloj, Puerta del Mercado, Plaza Mayor, San Lorenzo el Real, Rejadorada y Rúa de Santa Catalina de Ron-cesvalles, para finalizar en la iglesia del mismo nombre. El Cristo es una talla del siglo XVIII y pertenece al monaste-rio mencionado.
Hoy se realiza el traslado en procesión del Santo Ecce HomoEl recorrido se iniciará a las 21.30 horas desde el Real Monasterio de Santa Clara
M. B. La Junta Pro Semana Santa
ha dado a conocer el nombre de los ganadores del concurso de narración sobre la Pasión de Toro, al que se han presentado 19 personas. Así, en la catego-ría infantil el ganador ha sido Ángel Hernández Alonso; en la juvenil Carmen González Gó-mez y Garazi Espinosa Aran-guena y en la de adultos Ramón Merino Fernández, Irene Mar-cos Chillón y Elena Holguín Bercianos. La entrega de pre-mios tendrá lugar el Domingo de Resurrección al finalizar la misa de una en la Colegiata.
La Junta distingue a seis personas en el concurso de narración sobre las celebracionesLa entrega de premios se realizará el Domingo de Resurrección en la misa de La Colegiata
