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AGOSTO 1962

N.° 16-62 H

José del CañizoIngeniero Agrónomo del I. N. I. A.

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MINISTERIO DE AGRICULTURA^;^-^,±^^ DIRECCION GENERAL DE COORDINACION,i^^^^ CREDITO Y CAPACITACION AGRARIA

A^IL

LAS AVISPAS

Las avispas y sus daños.

Aunque habitualmente carnívoras, las vulgares avispasde diversas especies, cuando maduras las uvas y otras f ru-tas ocasionan daños de importancia, en las comarcas dondeabundan tales insectos, a diferencia de las abejas que porcarecer de mandíbulas resultan inofensivas en este aspecto,a pesar de lo cual cargan f recuentemente con la culpa delos destrozos debidos a las avispas.

Acuden éstas, de preferencia, a las uvas de mesa y alos f rutos tempranos y de variedades más selectas, de pielmás fina y pulpa más azucarada. En especial, y aparte delas uvas, son los higos, albaricoques, melocotones y ciruelaslas fi-utas preferidas, aunque tampoco desdeñan las perasy manzanas.

En las viñas, además de vaciar las uvas, provocan, alderramarse el _zumo, el ataque o invasión del hongo micros-cópico llamado vulgarmente «negrilla» y otras veces el«moho gris» de la poclredumbre del racimo. ^n las otrasfrutas, aparte del daiio directo, favorecen también la infec-ción por diversos mohos y podredumbres a consecuencia delas lesiones producidas en su piel.

Pespecto a la abundancia de estos insectos podemos adu-cir el dato de que, en los últimos meses del verano de 1946,el ilustrado agricultor de Abarán (Murcia), cíon Manuelde Arana^a, destruyó, en un radio de tres kilómetros alre-dedor de su finca, 863 nidos de la especie Poliste.r ^allicuso«avispa francesa» y 427 nidos subterráneos de la avispacomún. (T^espu.la gernaanica) llamados vulgarmente «ollas»;advirtiendo que, en una sola de estas «^llas» pasaba de24.000 el nítmero de celdillas entre los ocho panales queformaban el avispero; nítmero que, en otros, llega a diez odoce. Como en cada celdilla se cría una nueva avispa, queviene a sumarse a las ya adultas, se puede calcular la mu-

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chedumbre de tales insectos y la importancia de los dañosconsiguientes.

Cuando no encuentran frutas en período de maduració^i,

las avispas se alimentan de insectos vivos, dando caza a

Fig. 1. - Racimo de uvas atacado por avispas de la especie Polistes gollicu.r.(PASQUIER.^

moscas y moscardas, e incluso a la ŝ abejas, así como a cier-tas orugas, entre ellas la del tomate (Heliothi,r armigera).Son también muv ávidas de carne, con marcada prefereticia

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Fig. 2.-Yara conseguir materiales desti-nados a la construcción del nido, las avis-pas arrancan tiras de corteza, perjudi-cando con ello a los árboles frutales y deribera. Véase en esta figura un avispón(Vespa crabro) dedicado a esta tarea.

(STEP.^

Fig. 3.-Rama de chopo con lesiones enla corteza causadas por el av.ispón (i^espa

crabro). Según F^csTEtx.

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por el híg^ado, como saben bien los carniceros, preferenciadebida, acaso, a su contenido en glttcógeno.

Com^^ ^-a hemos advertido, el aparato bucal de las abe-jas es solamente lamedor, en tanto que el de las avispases nlasticador ti^ lamedor a la vez. Con sus robustas man-díbtilas desgarran ti- roen la corteza de las ramas tiernaspara I^rovocar el derrame de savia que lamen luego y t^,m-bién a fin de procurarse material para ha ĉer sus nidos oavisperos. Del mismo modo roen los postes y vigas r.o pin-tadas, para utilizar las fibras de madcra, masticadas y alna-^adas con su saliva, en la f abricación de una especie del^apel fuerte y fle^ible, con cuyo material construyen el nidoc^^lectivo o avispero.

lliversas especies de avispas.

I)e la familia Véspidos hay en Iapaña varias especies<le dos grttpos distintos :

Vesj^^^ crabyo, Vésf^^r^^la yer^^yaá,yi.i^•a }= Poliste.r gall^icus,

Fi^. 4.---I^a avispón (vespa rrabro) es la especie de avispa de mayor tamaño entrelas europeas.-Aumcntado (2:1). (Dibttjo de CEBAI_í.05.)

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siendo estas dos últimas las más comunes en España, aun-que existen también otras especies menos f recuentes.

EL AVISPÓN (Ves^a crabro) es la especie de mayor ta-maño entre las avispas europeas.

De color pardo rojizo, con fajas amarillas y vello ro-jizo. Mide 28 mm. de largo y 50 mm. de envergadura; susalas plegadas y de consistencia débil son análogas a las dela V. gernaánica. Sus nidos son muy g^randes (algunos lle-

Fig. 5,-Nido de avispáu, despojado de su envoltura para que sc ^ean los sietc

panales que lo f®rman. Hay avisperos de esta espec.ie que tienen 10 ó 12. (lle

STF:P. Ĵ

g-an a medir dos decímetros ^ más de diámetro) y estánprotegidos por varias capas de una especie de papel fuerte,que envuelven los numerosos panales, dispuestos horizon-talmente y en varios pisos, unidos por columnas de la mismapasta de madera, aglutinada con su saliva.

Ocasionan daños a la f ruta ti• devoran también a las

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abejas. ^demás perjudican a los árboles jóvenes al roer yarrancar tiras de corteza para la construcción de sus nidos.

Como en las otras avispas, en el otoño perecen los ma-ohos y las obreras o hembras estériles. Solamente invernan

Fig. 6.-Avispa comím de la especie I^^espuJ¢ per^nmittic¢.-Aumentada (2,5:1).(D,ibujo de GorrznLO C^:Bni.i.os.)

Fig, 7.-(/espul¢ gern^a^sic¢ vista de lado (aumentada) : Obsérvese el abdomentTUncado en su base y la robustez del cuerpo, que la distinguen, a primera vista,

de la avispa gentil o francesa (Polistes ,q¢llicus).-De S^rEr.

A.^ ^

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las hembras fecundas que en la primavera siguiente fundanuna nueva colonia o avispero. Ls peligrosa esta especie deavispa por sus picaduras.

La especia más datiina a frutales y viñas es la avispaalemana (T^espitila gerynanica), común en casi toda Espa^ia.

Las obreras miden cerca de dos centímetros de larg^o(1,8 como promedio), la reina y, sobre tocío el macho, sonalgo más pequeiio. Alas amarillas en los bordes y grises en

Fig. 8.-Entrada a un nido subtcrráneo («olla») dc avispa comím (L'. germanica).

FOiO FiOYER.

su extreino. Ln esta esl^ecie, el tórax es negro y- el abdomenpresenta bandas amarillas v puntos negros, de disposiciónmás o menos variable.

Establece su avispero generalmente en madrig^ueras c>galerías abandonadas por los topillos u otros roedores y es,a veces, de gran tamaño, pues consta de hasta 13 panalessuperpuestos y- unidos entre sí por pilares del mismo mate-rial, dejand^ la separación necesaria para que circulen la^s

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avispas entre ellos. Las celdillas pueden pasar de 20.000 gel conjunto del avispero está envuelto por una cubierta pa-pirácea formada por láminas hojosas sobrepuestas que pre-sentan en la parte de abajo un solo orificio de entrada ysalida de sus habitantes, y por la parte de arriba está unido

Fig. 9.-Avispero subterráneo de la especie T^espwla germanica. Adviértase elenorme volumen de excavacibn que han necesitado las avispas para alojamie^^to

del nido. (De STer.)

por un sólido rabillo al techo de la cavidad donde se en-cuentra.

Esta cubierta protectora, impregnada de una secreciónespecial, es impermeable a la humedad.

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N'i^. 10.-Avispa gentil o francesa (Polzstes gallicus). - Aumentada (3,5:1).

(Dibujo de CffiALI.OS.)

I%ig. 11.-Nido o avispero, al aire libre, de la especie PolT;rtes gallicus, muy comúnen España.

1^1uy semejante a ésta es la T^espula vulgaris, de análogas^.ostumbres.

Muy común es también la avispa f rancesa (Yolistes ga-dlicus), menos dañina, porque sus avisperos son mucho máspequeños y de población escasa.

Miden unos 1^ mm. de longitud y se distinguen por elabdomen ahusado de color amarillo vivo con manchas ne-gras, una de ellas triangular en la base del último segmento;las alas son ferruginosas y transp^,rentes.

Los machos tienen las antenas encorvadas en su extre-mo y la cara casi completamente amarilla. Hembras y obre-ras de Polistes son muy semejantes entre sí.

El avispero de las Polistes es aéreo y consta de un solopanal o serie horizontal de celdillas, exagonales paralelas ;carece de envoltura y está suspendido de un rabillo o pe-dúnculo. tie los encuentra comúnmente bajo los tejados o enlos cobertizos, pero también al aire libre, sujetos a ramascíe árboles frutales o sarmientos de cepas. Los nidos sonde colu:- gris y están construídos con un material semejantea cartón c papel f uerte f abricado con f ibra de madera.

En ge^:E:ral los nidos cíe esta especie son pequeños, aun-que alguna vez llegan a tener el tamañ^ cle ttn puño.

Vida y costumbres.

Según es sabido, las avispas son insectos sociales comolas abejas. A diferencia cie la colmena, que persiste de unaño a otro, el avispero y la familia que lo habita sólo duraun año. A1 llegar el invierno perecen todos sus habitantes,salvo unas cuantas hembras f ecundas, que se buscan unrefugio para invernar. Hallado un cobijo cualquiera, enco-gen sus patas y sus alas y quedan inmóviles, agarradas so-lamente por sus mandíbulas, como algunos artistas de circo.En priinavera cada una de estas hembras fértiles supervi-vientes se dedica a buscar sitio adecuado para iniciar laformación de un nuevo avispero.

Tanto las avispas comunes de los géneros hespula y

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Polistes, como el avispón (Ves^a crabro) son de análogasvida y costumbres.

Constituyen sus sociedades individuos de tres clases :- Hembras fecundas, ponedoras de huevos, que son las

llamadas reinas o madres del enjambre.- Machos o zánganos, cuya única misión es fecundar

a las reinas.- Hembras estériles u obreras, que tienen a su cargo

todos los trabajos: construcción y ampliación del avispero,alilnentación de la reina o reinas y crianza de las larvas (1).

Las larvas de avispas tienen forma de gusano y estánalojadas, cada cual en una celdilla del nido. Excepcional-mente, las obreras pueden poner huevos partenogenésicos,cuancío la colonia queda huérfana por muerte de la reinaantes de finalizar la época de buen tielnpo.

En las últimas puestas de la temporacía ocurre el hechocurioso de que, así como antes sólo nacían hembras, en otoñonacen también avispas machos, estos últimos proceden delos huevecillos fecundados por los espermatozoides que lahembra gttarda en el receptáculo seminal.

Los machos carecen de aguijón y perecen poco despuésdel apareatniento con las hembras, de las cuales sólo un cortonúmero sobreviven a las inclemencias invernales ; estas sonlas madres fundadoras que al año siguiente crean un nuevoavispero.

En el otoño, reinas y machos abandonan los avisperos^- realizan el vuelo nupcial. Poco después mueren los ma-chos, pero las hembras fecuncías pasan el invierno aletar-gadas, en cualquier refugio, ya sea en la rendijas de lascercas de piedra, grietas de muros, árboles huecos o(comolas Ynlistes) incluso en los desvanes y sótanos o cuevas delas casas rurales, aunque si el inviernc> no es muy frío selas puede ver volar en días de buen tiempo. A1 llegar laprimavera, la avispa reina sale cíe su sopor, abandona el

(1) Se distinguen de la madre por su menor tamaño y abdomen menosvoluminoso. Los ovarios de las obreras están atrofiados a causa de la alimen-

tación recibida (castración nutricia), influyendo también el desgaste producidopor la actividad de su vida laboriosa.

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^cobijo de invernada v vuela por los alrededores en buscacie un sitio adecuado para emplazar el nuevo avispero.

Se dedica entonces a recolectar los materiales precisospara iniciar la constrttcción del panal, en cttyas primeras^celdillas pone sendos huevecillos, de los que nacen a los po-^cos días las primeras larvas del atio, a cuya crianza se dedicaafanosamente la maclre, alimentándolas diariamente con-despojos cíe orttgas y^ otros insectos recién mttertos, que lessuministra bajo forma de papilla contenida en stt buche.

Una vez han alcanza<lo la metamorfosis en insecto^erfecto (avispas obreras en esta primera crianza), las hi-jas prosiguen la obra de agrandar el panal por adición denuevas celdillas, quedando va la reina dedicada, exclusiva-mente, a la puesta de huevos con f ecundidací asombrosa. Lareina de avispas vulgares pone comu promedio 25.000 hue-vecillos y las de I'olis2e.c varios centenares.

Los httevecillos son alargados, de color blanco y ligera-mente curvos ; avivan a los dos o tres días de pttestos.

Las larvitas recién naciclas son débiles g^usanillos de co-lor blanco grisáceo y- están colgados con la cabeza hacia aba-jo, adherida cada cttal a su reldilla por ttna sttstancia peg^a-josa produci<la por ellas.

La fase de larva dura de doce a dieciocho clías. ^^ me-<lida que crecen van llenando c^m stt ctterp^, la celdilla, ctty-asI>aredes le sirven y-a cle sostén. sin necesidad de la citaclamateria pegajosa. Tejen lueg^^ tui r.apullo sedos^^, dentro delcual sttfi•en la nletamorfosis, cjttedando inmóviles, bajoforma de pupa, en la que se recon<^en y-a los órganosclel insecto perfer.to ( antenas, alas, patas, etr. ) recogidosv envuelto^ por una t inísima ineulbrana transparente. Alprincipio dicha pttpa es de color blanco crema, pero luegova adquiriendo la coloración del adttlto. Este período dttraunos doce días, transcurridos los cttales el insecto rasga lamembrana envolvente v sale al aire libre, para e^tender susalas y comenzar su vida activa y- laboriosa.

En la sociedací de las avispas, como en la colmena, lasobreras están en gran may-oría. F_n un avispero de Ves^rtilagerfraanica viven con frecttencia ttnas 15.000 a 25.000 avis-

^as obreras y unos centenares entre machos y hembras fér-tiles o reinas. En los avisperos de Polistes el número de ha-bitantes es bastante menor, contándose varios centenares deobreras y un par de docenas entre reinas y machos.

Como y-a se ha dicho, 1-as avispas obreras tienen a sucargo todos los trabajos : buscar alimento y nutrir a larvasy reinas, así COt110 agrandar el nido construyendo nuevasceldillas y nuevos panales (T^espa, Ve,rpula); las Polistestambién agrandan el nido, pero limitándose a agregar nue-vas cel<lillas en el borde cíel único panal.

En otoño, al persistir el tiempo frío, avispas y avispo-nes abandonan sus nidos de papel, que ya no serán utiliza-dos después, y suelen ser clestrozados por los pájaros y otrosanimales; o se desintegran poco a poco.

La especie se perpetúa, como ya se ha indicado, por lashembras fecunclas invernantes, en la primavera cíel año si-guiente.

Medios de lucha contra las avispas.

La protección de las uvas y frutas contra las avisl^asofrece la dificultad cíe la gran movilidad y capacidad devuelo de estos insectos. Además, sus ataques se dirigen ala f ruta madura, de próxima o inmediata recolección, loque impide aplicar insecticidas a las viñas, parrales y plan-taciones f ruteras.

La protecciótii con bolsa-s o saquitos de papel sólo puedehacerse en el cultivo intensivo de frutos selectos, tales comolos racimos de uva de mesa, melocotones, etc., debido a lamano cíe obra que requiere.

Por ello, lo verdaderamente efectivo y práctico es la des-trucción de avisperos, realizada al amanecer cuando las avis-pas están rettnicías en el nido y entorpecidas por el frío.

En algún caso puede resultar práctico, para la capturade avispas, el empleo cíe botellas-traziz^a (análogas a losfrascos cazamoscas); las avispas son atraídas por el olor deliíquido contenicío en ellas (vino, cerveza o melaza diluídacon agtta), penetran y no pueden salir.

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Destrucción de avisperos.

Para proteger eficazmente una viña o parral de uva demesa, lo mismo que a los árboles fi-utales, es preciso exter-minar los avisperos situados en ellos y además los que seencuentren en un radio de 400 ó 500 metros. Para la loca-lización de los nidos téngase en cuenta lo dicho sobre las di-versas especies de avispas y particularidades de sus nidos ;es necesario también observar la dirección de sus vuelos.

La manera de pr^ceder varía según se trate de avisperosal aire libre o de avisperos subterráneos.

En los avis^eros a^reo.r, la destrucción puede hacerseaplicando directamente los insecticidas sobre los mismos, alas primeras luces del alba y acercando al avispero la bo-quilla del pulverizador o espolvoreador, sin movimientosbruscos, para evitar corrientes de aire que alarmen a lasavispas ; además conviene dirigir primero el insecticida alcentro del avispero y luego a la periferia, con movimientocircular.

Los nidos o avisperos fácilmente accesibles pueden serdesalojados y metidos en un saco u otro recipiente adecuado,para luego rociarles con gasolina o petróleo y prenderlesfuego. Previatnente, en los avisperos con envoltura, hay quetaponar el orificio de salida con un trapo empapado en ga-solina o en sulfuro de carbono, cuyos vapores atontan a lasavispas, evitándose con ello sus picaduras.

Hay que actuar rápidamente y a horas en que estos in-sectos estén reunidos en el avispero. Después de cogidoséstos se queman o entierran.

Los avisperos de Polistes qa-llicus son fáciles de destrttirporque esta especie de avispa es poco agresiva y permiteacercarse incluso durante el día, si bien es preferible hacer-lo, en la forma indicada, al amanecer o a la puesta del sol.

Los avisperos de los tejados se pueden destruir levan-tando las tejas al amanecer v aplastándolos; si las tejas es-tán sujetas se recurrirá al empleo cíe insecticidas. ^

7 o.r avis^e^-os s^^.bterrá^ieos pueden destruirse echando

^•^ ^.

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Fig. 12.-V.ido de avispón (T^es^¢ r^rabro), visto por fnera. (De Ganss^`.^

Fig. 13.-Avispero de G'e.rp¢ iy¢bro, visto por debajo. Al^unos de estos nidosalcanzan cl tarnaño de la cabeza de rm niño y albergan hasta 25.000 avispas_

(De Gxnss^.)

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en ellos un decilitro, aproximadamente, de una mezcla debisulfuro y tetracloruro de carbono (Boboline, Pentalina) obien introduciendo por él la lanza del pulverizador o espol-voreador, tapando a continuación el agujero con barro.

Los nidos subterráneos de las avispas comunes (Vespatila

ger^nanica y Ves^ula v2^-l^aris) deben ser localizados du-rante el clía y al anochecer, cuando todas se hayan recogidoes cuancío se debe aplicar el insecticida. Un cuarto de litro

Fig. 14.-Avispero de I^espula getmanica, desenterrado. (Fot. BoYex.)

de gasolina por «olla» es suficiente para exterminar un avis-pero; a la mañana siguiente están todas muertas y suelenser muchos millares en cada niclo.

Los insecticidas en polvo resultan f áciles de aplicar con-tra las avispas comunes, así como contra los avispones (hes-

fiatila c^^ab^^o), ya tengan los nidos bajo tierra o en árboleshuecos, introduciendo el tubo de salida de un espolvoreadorpor la abertura del avispero ; dos o tres vigorosos golpesde fuelle bastan í^ara que el polvo insecticida penetre en el

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nido, matando a sus habitantes en el plazo de veinticuatrohoras.

La boca de entrada a los nidos subterráneos se tapará,como se ha dicho, con una paletada de tierra mojada, des-pués de aplicar el insecticida, para evitar que las avispas,más o menos into^icadas, salgan al aire libre.

Insecticidas recomendables.

El DDT puede emplearse sea en emulsión concentradao en polvo mojable, desleído en agua y aplicado con pulve-

Fig. 15.-Gran avispero de la especie Polisfes gallicus, en un sarmiento de vid.Las celdillas operculadas contienen larvas o pupas en metamorfosis. (lle Pns-

QUI^R.^

rizador de mano o de mochila. Los polvos para emplear eriseco se aplicarán con un pequeño espolvoreador.

Hay también preparados de DDT en solución oleosa,aplicables directamente, sin previa dilución.

De igual modo que el DDT pueden utilizarse el Clor-dano y el HCH.

Las dosis de aplicación varían según el producto em-pleado y su formulación.

En los tratamientos por espolvoreo pueden aplicarsecualquiera de los siguientes productos :

- L^DT en polvo para espolvorear, con 5-10 por 100de riqueza en producto activo. ,

- Clordano, espolvoreable con 5-6 por 100 de riquezaen producto activo.

Para los tratamientos líquidos pueden elegirse cualquie-ra entre los productos siguientes :

- DDT 5 por 100 en solución oleosa.- DDT 50 por 100 en polvo mojable, desleído en agua

a la dosis del 0,6 por 100.- I?mulsión concentrada de DDT (25 por 100 de ri-

queza, cíiltrí ĉla a razón de un cuarto de litro en 20 litros deagua (o sea, al 1,25 por 100).

- Clor ĉlano 2 por 100 en solución oleosa.- 13mulsión de Clordano (45 por 100 de riqueza en

producto activo), diluída en agua a la dosis del 0,4 por 100.- Clordano 40 por 100, polvo mojable desleído en agua

a la dosis del 0,3 por 100.- 13mulsión de Malathion, 50 por 100 (o polvo moja-

ble de igual riclneza), a la dosis del 0,15 por 100.Los preparados emulsionables o emulsiones concentra-

das se diluyen fácilmente, agregándoles el agua necesaria y(se^íin su riqueza en prodttcto activo) para que queden ala dosis incíicada, y batiendo la mezcla enérgicamente.

De los productos en polvo mojable se prepara primerouna pasta clel insecticicla con muy poca agua y cíespués debien batida añadir- el agua restante, evitándose así la for-mación de grumos.

Para combatir las avispas en las casas pueden utilizarse

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los preparados de DDT o de Clordano pulverizables sin ^re-via dilución (soluciones oleosas con 5 por 100 y 2 por 100,respectivamente, aplicadas con un pulverizador de mano).

En las habitaciones son también aplicables los aerosolesa base de piretrinas o sus derivados.

Precauc,iones con los insecticidas.

La mayoría de los insecticidas son tóxicos para las per-sonas. Deben guardarse lejos del alcance de los niños y delos anilnales domésticos. Hay que evitar también la conta-minación de alimentos o utensilios de cocina. No respirar nitragar la niebla o polvo durante la aplicación del insecticida.Laval-se cara y manos con agua y j abón después de usarlos.El sulfuro de carbono es inflamable y debe aplicarse al airelibl-e, sin fumar ni encender lumbre cerca.

Picaduras de avispas.

Cuando son molestadas o alguien perturba los avisperos,las avispas-como las abejas-se defienden clavando suaguijón (oviscapto) que sólo las hembras poseen y cuyosf inos estiletes comunican con una glándula excretora dellíquido venenoso, el cual queda inyectado en la herida.

En el sitio de la picadura se pl-oduce una dolorosa infla-mación, que puede persistir durante varios días, pero que,generalmente, no causa trastol-nos serios, salvo en el casode haber sido picado por un enjambre.

Cuando la persona picada padece de asma, o de la lla-mada «fiebre de heno» , o de cualquier otra enfermedad alér-gica, conviene avisar rápidamente al médico, porque la pica-dura pudiera tener consecuencias más o menos gl-aves. Enlos casos leves, el tratamiento se limita a extraer el aguijón,si quedó clavado en la herida, y aplicar, sobre la lesión, amo-níaco u otra sustancia alcalina, a fin de neutralizar la aci-dez del veneno inyectado por la avispa. También se alivia eldolor aplicando una pomada de mentol.

DEPOSITO I.EGAL, M. 3.109-1958.GRÁFICAS UGUINA - MADP.IU