Historia grupal:Había una vez una familia de cinco integrantes donde cuatro de ellos eran enanos y uno llamado Pedro había nacido gigante.

Pedro se avergonzaba mucho de su tamaño, porque todos se reían de él y se sentía muy triste de eso.

Un día Pedro se fue a la cuidad, donde se le ocurrió que con su enorme tamaño podía ayudar, sus manos gigantes permitían juntar toda la basura y la contaminación de la cuidad. De a poco logro dejar la cuidad limpia y hermosa, el estaba muy feliz por lo que había logrado. Y pudo aprender que no se tiene que avergonzar por ser diferente porque puede lograr muchas cosas buenas siento tan cual es.