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    GEOLOGA FORENSE: MTODOS APLICADOS EN LABSQUEDA DE DESAPARECIDOS EN LA REGIN CENTRALDE ARGENTINA

    Revista de la Asociacin Geolgica Argentina 70(1): 150 - 160 (2013)

    Guillermo SAGRIPANTI1, Diego VILLALBA1, David AGUILERA2y Aldo GIACCARDI2

    1Universidad Nacional de Ro Cuarto, Departamento de Geologa, Ro Cuarto, Crdoba, Argentina. E-mail: [email protected] Nacional de San Luis, Departamento de Geologa, San Luis, Argentina.

    RESUMEN

    La geologa forense es una disciplina dentro de las Ciencias de la ierra que, a travs de la recoleccin y anlisis de minerales,suelo, agua, etc., puede aportar valiosas pruebas para la resolucin de problemas planteados por la justicia.Los objetivos de esta contribucin son documentar las actividades de geologa forense realizadas en la exploracin de sitiospotenciales de enterramientos clandestinos de personas en la regin central de la Repblica Argentina, poner al alcance de

    gelogos algunas metodologas geolgicas-geofsicas adecuadas para este tipo de bsquedas y fomentar su participacin con elfin de multiplicar esfuerzos en el aporte desde la geologa a los Derechos Humanos. Las investigaciones han sido realizadas enterrenos de Centros Clandestinos de Detencin ubicados en la regin central de Argentina, por solicitud de la Justicia, EquipoArgentino de Antropologa Forense y Organismos Nacionales de Derechos Humanos. Los conocimientos y mtodos que seaplican en investigaciones geolgicas convencionales, han sido adaptados para colaborar en este tipo de bsquedas, entre ellos elanlisis morfo-litolgico, tomografas elctricas, geo-radar, ensayos geomecnicos y apertura de trincheras. Las evidencias de in-tervencin antrpica en la superficie con motivo de una excavacin son las que pierden su expresin rpidamente, mientras quelas que afectan la parte superior del perfil del suelo pueden reconocerse, an, despus de varias dcadas, y ser ubicadas utilizandomtodos geolgicos-geofsicos. El equipo de investigacin dedicado a la exploracin de sitios potenciales de enterramientos depersonas debe ser interdisciplinario, ya que, contar con mayor cantidad de datos y opiniones aumenta la posibilidad de hallazgo

    Palabras clave:Enterramientos clandestinos, personas desaparecidas, mtodos geofsicos, trincheras.

    ABSTRACT

    Forensic Geology: Methods employed in the search of missing people in the central region of ArgentinaForensic geology is a branch of the Earth Sciences that, through the collection and analysis of minerals, soil, water, etc., can providevaluable evidence for the resolution of problems at the request of Te Ministry/ Department of Justice. Te aims of this paper arethreefold: first, to report the activities carried out by forensic geology as regards the search of clandestine burial sites of missing peoplein the central region of Argentina; second, to share some of the geological-geophysical methodologies suitable for this kind of search;and third, to promote colleague participation in order to multiply efforts in relation to the contributions that geology can maketo Human Rights. Te investigations reported in this paper have been carried out on grounds of Clandestine Detention Centerslocated in the center of Argentina, as the result of the request made by the Ministry/Department of Justice, the Argentine eam ofForensic Anthropology, and National Human Rights Organizations. Te knowledge and methods usually employed in conventionalgeological investigations have been adapted to be applied in this kind of search, including morpho-lithological analysis, electricaltomography, geo-radar, geomechanical trials and trench excavations. Evidence of anthropic disturbance on a particular surface asthe result of an excavation loses its expression rapidly, while the evidence that affects the top of the soil profile can be recognized andlocated using geological-geophysical methods, even after several decades. Te research team dedicated to the exploration of potentialburial sites of missing people should be interdisciplinary, since a greater amount of data and views increases the chances of findings.

    Keywords:Clandestine burials, missing people, geophysical methods, trenches.

    INRODUCCIN

    La geologa forense es el estudio de las

    pruebas que aportan los minerales, sueloy otros materiales presentes en la tierra,que se utilizan para dar respuesta a las pre-

    guntas planteadas por orden de la justicia(Murray y edrow 1992).Existen diversas reas del conocimiento

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    dentro del campo de las geociencias quepueden contribuir a resolver problemaspropuestos por la justicia como la geof-sica, hidrogeologa, mecnica de suelos,cartografa, sismologa, geologa ambien-

    tal y sedimentologa, entre otras. al es elcaso de la sismologa que, a travs de lared sismolgica, utiliza los sismogramas(que registran seales de origen natural oartificial, obtenidas en cualquier escena) yaportan informacin sobre cmo, cundoy dnde se han producido los eventos quelas han generado. La interpretacin delorigen de las seales con este fin y parapermitir dilucidar problemas judiciales sedenomina sismologa forense (Ruffell yMcKinley 2008, CSIC 2009).

    Las primeras investigaciones en geologaforense trataban solamente sobre el uso delsuelo o sedimentos que se adhirieron a loszapatos de un sospechoso y que se puedenrelacionar con la escena de un delito; enla actualidad la aplicacin de las diversasdisciplinas geo incluye otros elementosadems de suelo o roca, utilizando tcni-cas analticas para establecer la culpabili-dad o inocencia de los sospechosos. Por lotanto, la geologa forense es la aplicacinde conocimientos de Ciencias de la ierrapara aportar pruebas o evidencias vlidas,

    a investigadores de la escena de hechosdelictivos y a antroplogos forenses, paraorientar o esclarecer problemas de carcterpenal, humanitario, crmenes de guerra ymedio ambientales. Es decir, se aplica enlo que respecta a la bsqueda de la verdady la justicia, ya sea para dar argumentos ala querella o a la defensa (Ruffell y McKin-ley 2008, CCI 2010).En pases como Inglaterra, Estados Uni-dos, Australia, Irlanda, Escocia, Alemania,Italia y Holanda desde hace varias dcadasvienen trabajando e incorporando otras

    disciplinas cientficas para ser aplicadasen el campo de la criminalstica, entre s-tas, la geologa forense. En tiempos msrecientes se suma Colombia, que tambinha comenzado a aplicar la geologa paracontribuir a resolver diferentes delitos, yBrasil, que ha adquirido experiencia eneste campo aplicndolo para resolver pro-blemas ambientales y en el fraude de ge-mas (CCI 2010).La bsqueda de objetos enterrados ha sido

    una tarea compleja para los investigadores(Arquelogos o Antroplogos) durantemuchos aos, ya que solo se contaba contcnicas directas destructivas para su loca-lizacin. Ms an, su aplicacin al campo

    de la criminalstica ha dado por resultado,en muchos casos, la prdida o destruccinde pruebas incriminatorias o evidenciasvaliosas consideradas cruciales ya que sig-nificaban la diferencia en que se otorgaramayor o menor carga penal. En la actua-lidad se cuenta con tecnologas que per-miten la exploracin del subsuelo desdela superficie, en forma indirecta aunqueprecisa.La intervencin antrpica del medio natu-ral como en el caso de una excavacin para

    el enterramiento de cuerpos, modifica lascondiciones naturales de los materiales delsubsuelo y su entorno, generando distur-baciones en el medio fsico. Estas puedenser detectadas y delimitadas en forma in-directa mediante la aplicacin de tcnicasgeolgicas-geofsicas apropiadas, sin pro-vocar alteraciones en el estado en que seencuentran los sedimentos (Aguilera et al.2006, Sagripanti et al.2012).La Repblica Argentina desde el ao 1976hasta el ao 1983, estuvo bajo un gobier-no de facto denominado dictadura mili-

    tar, perodo en el cual miles de personasfueron arrestadas y desaparecidas. Estadictadura dividi al territorio argentino,en cinco zonas geogrficas, para controlary reprimir el accionar de grupos conside-rados subversivos. Como parte de su pla-nificacin se instalaron en el pas CentrosClandestinos de Detencin (CCD), quellegaron a ser alrededor de 340, indispen-sables dentro de la poltica de desaparicinde personas. Estos estaban bien organiza-dos y en ellos fue comn el uso metdi-co de la tortura, asesinato y desaparicin

    (CONADEP 2006).El Equipo Argentino de Antropologa Fo-rense (EAAF) realiza tareas en cinco reasde investigacin: investigacin preliminar,bsqueda y recuperacin de restos, labora-torio de anlisis, gentica y centro de do-cumentacin de archivos. Uno de los ob-jetivos que persigue es la identificacin derestos de desaparecidos durante la dicta-dura militar para conocer el modus operan-di de la represin. Para cumplir con este

    propsito el equipo trabaja en los CCDque operaban en las cinco zonas geogrfi-cas en que el gobierno de facto dividi elpas (EAAF 2009).Entre los aos 2007-2009, este equipo ha

    conducido la inspeccin y excavacionesrealizadas en cementerios y CCD que fun-cionaban en la provincia de Buenos Aires,Crdoba, Mendoza, Chaco, Corrientes,Entre Ros, Formosa, Misiones, Neuqun,Santa Fe, Santiago del Estero y ucumn,donde han rescatado restos seos de 181personas desaparecidas (EAAF 2009).Los arquelogos y antroplogos forensesabocados a la bsqueda e identificacin depersonas desaparecidas durante la ltimadictadura militar, plantearon la necesidad

    de la participacin de gelogos en la etapade exploracin del subsuelo para la ubica-cin de sitios potenciales de enterramien-tos clandestinos de personas. Esto a partirde reconocer que el profesional gelogoposee aptitudes como el conocimiento delmedio natural y la capacidad para la in-terpretacin de anomalas en el subsuelo,consideradas caractersticas bsicas paraeste tipo de bsqueda ya que las mismaspueden ser generadas por potenciales en-terramientos.El equipo de investigacin de geologa

    forense se integr con docentes de lasuniversidades de Ro Cuarto y San Luis(UNRC-UNSL), y comenz a trabajaraplicando los conocimientos y tcnicas deexploracin, habitualmente usadas en elcampo de la geologa, a este tipo especfi-co de bsquedas. Es oportuno mencionarque las investigaciones que normalmentedesarrollan los integrantes del grupo es-tn orientadas a la prospeccin geofsicay a estudios neotectnicos y paleosismo-lgicos. El equipo de gelogos ha partici-pado tambin, colaborando en proyectos

    arqueolgicos, entre ellos, en la ubicacinde restos de edificios correspondientes a laprimera fundacin de la ciudad de SantaFe, en la localidad de Cayast.Los conocimientos y experiencia de los in-tegrantes del equipo han sido puestos alservicio de la bsqueda de enterramientosclandestinos, intentando hacer un aportedesde la geologa a los organismos de DD.HH. y a familiares de desaparecidos.El equipo de investigacin UNRC-UNSL

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    desde el ao 2004 ha colaborado en nume-rosos casos, a solicitud de Juzgados Fede-rales, Equipo Argentino de AntropologaForense y Organismos Nacionales de DD.HH., como la Asamblea Permanente de

    Derechos Humanos (APDH-San Luis) yMovimiento Ecumnico por los DerechosHumanos (MEDH-Mendoza). La partici-pacin estuvo orientada a la bsqueda desitios de enterramientos clandestinos, acti-vidades de exploracin que han sido reali-zadas en numerosos CCD ubicados prin-cipalmente en las provincias de Crdoba,San Luis, Santa Fe y Mendoza (Fig. 1).Es importante resaltar que, a nivel nacio-nal, son escasos los antecedentes de inves-tigaciones de geologa forense aplicada en

    la bsqueda de enterramientos clandesti-nos de personas. Es por ello que los mto-dos geolgicos-geofsicos y herramientas,normalmente usados en investigacionesgeolgicas convencionales de subsuelo, sehan tenido que adecuar para la explora-cin muy somera (no ms de 3 m), conobjeto de bsqueda de tamao reducidoy que solo se manifiesta en un cambio en

    logos algunas metodologas geolgicas-geofsicas que han debido ser adecuadaspara este tipo de bsquedas y;- fomentar la participacin de colegas conel fin de multiplicar esfuerzos en el aporte

    desde la geologa a los Derechos Humanos.

    ANECEDENES

    Los antecedentes sobre bsqueda de en-terramientos clandestinos de personas anivel nacional, por varias razones, no sonnumerosos. Una de ellas es que no haymuchos gelogos que se dediquen a estetipo de actividad y otra es debida a quela mayora de las investigaciones estn in-ditas en los expedientes de las distintas

    causas que lleva adelante la justicia y queno pueden hacerse pblicos.Gran parte de los antecedentes y biblio-grafa de investigaciones de geologa fo-rense desarrolladas en otros pases estnenfocadas a apoyar las investigaciones dela escena de los hechos, como por ejem-plo, comparar la presencia de salpicadurasde sedimentos (barro), en una prenda deun sospechoso, con la existente en el lugardonde fue enterrada una vctima. Algunosantecedentes importantes que se puedencitar son los trabajos realizados por France

    et al. (1992), Pye y Croft (2004) y Ruffelly McKinley (2008), entre otros.Segn Rodrguez Cuenca (1994), en sulibro sobre antropologa forense, planteaque la mayora de los hallazgos normal-mente son ocasionales, durante labores deconstruccin o por la aparicin a flor detierra de restos seos en trabajos agrcolaso urbansticos. Sin embargo, cuando setrata de la localizacin de fosas con ciertaantigedad, se requiere de una previa laborde bsqueda. En este ltimo caso se debentener cuenta algunos criterios de prospec-

    cin, localizacin, excavacin y anlisis demateriales. Por ejemplo, reconocer huellascomo los cambios de contorno superficialy variaciones de la vegetacin local, usaruna sonda metlica para ubicar las caracte-rsticas menos compactas del suelo utiliza-do para rellenar la fosa y tambin despejarla zona que se investiga ya que las fosastienen una apariencia ms oscura que elterreno que las rodea.Recientemente, la tecnologa del geo-

    Figura 1:Mapa de ubicacinde las provincias enque se realizaron lasinvestigaciones.

    las propiedades fsicas que tienen sutildiferencia con el material inalterado quelo rodea. Ello ms all de los condiciona-mientos propios de la regin de bsqueda,tipo de enterramiento y caractersticas de

    los antecedentes que figuran en testimo-nios de la causa.Los enterramientos en Argentina, segndistintos antecedentes, han sido de di-versos tipos, dependiendo de los mtodosaplicados para disponer de los cuerpos(fosas individuales o mltiples tanto encementerios como a campo abierto) aligual que las tcnicas para el ocultamientode las fosas (disimuladas con vegetacinimplantada que en la actualidad tienengran tamao, cultivadas peridicamente o

    cubiertas por obras edilicias, superficies dehormign o pavimento).Los objetivos de esta contribucin son:- divulgar las actividades de geologa fo-rense, aplicadas a la exploracin de sitiospotenciales de enterramientos de personasen la regin central de la Repblica Argen-tina;- poner al alcance de profesionales ge-

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    radar (Ground Penetrating Radar-GPR),como ocurre en la mayora de los casos,se ha desarrollado debido a la necesidad yse ha aplicado cuando tienen ocurrenciadesastres naturales o guerras. En este lti-

    mo caso, se ha perfeccionado y mejoradola tecnologa para detectar objetos ocultoscomo el plstico de minas antipersonalesy antitanques que fueron enterradas du-rante conflictos blicos. Una importanteaplicacin ha sido efectuada en el campode las investigaciones arqueolgicas, paradetectar cavidades en pirmides egipcias(Strongman 1992).Los mtodos elctricos permiten deter-minar, a travs de mediciones efectuadasdesde la superficie, la distribucin de la re-

    sistividad elctrica del terreno en profun-didad. A travs de la tomografa elctrica2D se pueden obtener secciones verticalesdel terreno en forma de perfiles continuosde resistividad elctrica en dos dimensio-nes, lo que facilita su vinculacin a la es-tructura y textura del subsuelo (Aguilera etal. 2006, Sagripanti et al.2012).La tcnica de exploracin por medio delsondeo de penetracin posibilita realizarun importante aporte al conocimiento dela resistencia mecnica de los materialesdel subsuelo. Al igual que la tomografa

    elctrica, el sondeo de penetracin no ge-nera disturbacin del medio fsico (Agui-lera et al. 2006, Sagripanti et al.2012).

    MEODOLOGA

    La metodologa seguida en las investiga-ciones para la bsqueda de enterramientosclandestinos se puede dividir en cuatroetapas, en las que participan profesionalesde diferentes especialidades. stas son:Etapa de inventario e investigacin preli-minar: se realiza con la participacin de

    distintos profesionales como antroplo-gos forenses, historiadores, gelogos, etc.,donde se acopian y analizan testimoniosde las causas, tanto escritos como oralesy evidencias fotogrficas, para elaborarhiptesis sobre los sitios potenciales quepuedan ser enterramientos clandestinos.Corresponde a los gelogos realizar el in-ventario de antecedentes sobre tipo y usodel suelo, mapas y fotografas areas a dis-tintas escalas, actuales, de la poca en que

    se denuncia la excavacin y previas a ella.Etapa de exploracin del subsuelo: losprofesionales gelogos realizan el releva-miento de campo con los datos obtenidosen la etapa anterior. Se realiza el reconoci-

    miento del lugar, la bsqueda de eviden-cias superficiales y el desarrollo de la ex-ploracin del subsuelo a travs de distintastcnicas indirectas y directas.Etapa de exhumacin: los arquelogos yantroplogos forenses rescatan los restosseos y todas las evidencias asociadas a s-tos, como pueden ser proyectiles de armasde fuego, ropa y efectos personales.Etapa de identificacin: se realiza en ellaboratorio de Investigacin y Gentica,donde se analizan los restos seos rescata-

    dos, tratando de identificar a quien per-tenecen y determinar la causa y forma demuerte.En la presente contribucin se describenlos mtodos geolgicos-geofsicos aplica-dos en las dos primeras etapas, en la etapade inventario e investigacin preliminar serealiza el anlisis morfo-litolgico y de usodel suelo de detalle y en la etapa de ex-ploracin del subsuelo se utilizan mtodosgeofsicos y geomecnicos eminentementeno invasivos, y la apertura de trincheras/

    calicatas para el anlisis directo del perfilde subsuelo, los mismos se muestran en unesquema de sntesis (Fig. 2).

    Anlisis morfo-litolgico, uso del suelo

    y fotogrficoDado que el objetivo final de la metodo-loga presentada es determinar potencialeszonas de enterramientos, es lgico dedu-cir que los mismos implican, por un lado,una modificacin en las formas y, porotro, su ubicacin tiene un fuerte condi-cionamiento por parte de la litologa aflo-rante. Al mismo tiempo, la magnitud dela perturbacin estar condicionada por eltipo de enterramiento.En este marco, la finalidad de este anli-

    sis es obtener una zonificacin, de apoyopara las tareas de exploracin del subsuelo,cuya escala de trabajo a emplear depende-r del caso de estudio.La fotointerpretacin de fotografas a-reas verticales, a distintas escalas, prefe-rentemente 1: 5.000 o mayor, es esencialpara este anlisis, aunque es importantecontar tambin con fotos de distintas fe-chas de toma, obtenidas con anterioridada la supuesta excavacin clandestina y, loms prxima, con posterioridad a la mis-

    Figura 2:Esquema de sntesis que presenta las distintas metodologas utilizadas.

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    ma. En algunos casos, como el de ente-rramientos mltiples, es valioso obtenerfotografas areas oblicuas tomadas a bajaaltura para analizar la morfologa superfi-cial y detectar la presencia, sutil, de algn

    rasgo distintivo relacionado con el motivode la bsqueda. Los anlisis pueden com-plementarse con fotos panormicas de lapoca y actuales del sector, con el fin deapoyar las posteriores interpretaciones.Se elabora en primera instancia un mapamorfo-litolgico del sector, donde se re-presentan el drenaje superficial, rasgosmorfolgicos dominantes, pendientes, li-tologa, especialmente unidades morfol-gicas cuya gnesis implica poca potenciade la cubierta sedimentaria, etc. Es con-

    veniente realizar la cartografa del uso delsuelo, principalmente en los CCD quefuncionaban en campos militares, quecontenga los rasgos de intervencin an-trpica como caminos, senderos, basura-les, excavaciones realizadas en las prcticasmilitares, crteres dejados por el uso de ex-plosivos, etc. Suele ser de utilidad conocerlos datos de profundidad del nivel de aguasubterrnea, dado su condicionamientosobre la respuesta a los estudios geofsicos.Finalmente todo puede volcarse en unmapa de sntesis en el que constar la

    superposicin de los distintos niveles deinformacin y se identificarn las variacio-nes de rasgos de acuerdo a distintas pocassegn se dispongan. A esta informacin sele sumar la aportada por los testimoniosde la causa y de la aplicacin de criteriosgeolgicos, para delimitar las zonas que re-querirn estudio de mayor detalle.En estas zonas se pueden aplicar ademstcnicas geodsicas complementariascomo relevamientos topogrficos de de-talle, modelo digital del terreno y/o unared geo-referenciada amojonada (grilla) si

    se tiene disponibilidad econmica e ins-trumental, ya que estos mtodos (tcnicastambin usadas en levantamientos arqueo-lgicos o antropolgicos) son de muchautilidad.Cuando se inicia la actividad de campo,para delimitar un sitio potencial de ente-rramiento, debe realizarse una inspeccinvisual preliminar de la zona, con el fin dedetectar algn cambio sutil en la morfo-loga de la superficie del suelo, como de-

    presiones, tratando de delimitar su formay tamao, y variaciones en la vegetacinque hospeda, como distintos patrones decrecimiento de las plantas. Se debe con-sultar a un especialista sobre la edad de las

    mismas, ya que se pueden haber realizadoplantaciones sobre el enterramiento con elpropsito de ocultamiento.Durante esta inspeccin se debe prestaratencin tambin a la presencia de cons-trucciones, revisando con detalle las obraspresentes ya que stas pueden haber sidoconstruidas sobre la fosa con intencinde ocultar el enterramiento. Por lo tanto,probablemente la prdida de volumen deuno o varios cuerpos sepultados se puedemanifestar en asentamientos, grietas en

    paredes, rotura de pisos o veredas.Exploracin geofsicaEn las zonas delimitadas en el mapa, sedebe trabajar a una escala de mayor deta-lle, aplicando mtodos geolgicos-geofsi-cos que permitirn realizar la deteccin ydelimitacin de anomalas en el subsuelo,de posible origen antrpico, que puedanser vinculadas a antiguas excavaciones paraenterramientos clandestinos de personas.Sobre la base de numerosos estudios reali-zados, se considera que la exploracin por

    mtodos geolgicos-geofsicos debe serentre el primer y tercer metro de profun-didad, dependiendo si el enterramiento esindividual o mltiple.Dentro de los mtodos geofsicos que per-miten hacer una exploracin de detalle eneste tipo de bsqueda, entre los que se hacomprobado que ofrecen resultados satis-factorios y adecuada relacin costo-benefi-cio, se mencionan a la tomografa elctricay el geo-radar (GPR)Tomografa elctrica: Este mtodo geofsicose basa en medir la resistividad aparente

    de los materiales del subsuelo, con un dis-positivo tetraelectrdico determinado (2electrodos emisores y 2 receptores), conuna separacin constante denominada a.Se debe ir variando las distancias entre lospares de electrodos emisor-receptor pormltiplos de un valor denominado n, detal forma que el resultado final ser unaseccin de resistividad aparente a variosniveles n en profundidad; datos queposteriormente son tratados por medio

    de algoritmos matemticos de inversin(Aguilera et al. 2006, entre otros).La inversin arroja como resultado unaimagen de resistividades y profundida-des verdaderas que se correlaciona con

    la informacin geolgica, perforaciones,geoqumica, hidrogeologa, edafologa,etc. Las medidas de resistividad aparentedel terreno para un estudio por tomografaelctrica se efectan mediante tcnicas deenvo de corriente al subsuelo con posibi-lidad de empleo de una gran variedad dedispositivos en lo que a la distribucin delos electrodos se refiere. El arreglo geom-trico considerado ms adecuado para eltipo de anomala correspondiente a unafosa, es el denominado dipolo-dipolo

    (Aguilera et al. 2006).Combinando adecuadamente resolucinlateral y profundidad de investigacin, latomografa elctrica es, sin duda, una delas herramientas de carcter no destructivoms eficaz para el estudio y caracterizacinde posibles discontinuidades del subsuelo,con detalle en los primeros metros de pro-fundidad (Fig. 3a).El equipo utilizado para la medicin deresistividades del terreno es un resistiv-metro digital de alta precisin. El mismoest constituido por un mdulo transmi-

    sor que enva corriente continua al terrenomediante dos electrodos de emisin y unmdulo receptor en el cual se miden lasdiferencias de potencial producidas.Al excavar una fosa que posteriormente estapada se disturban y mezclan los mate-riales presentes en el subsuelo provocandouna modificacin en stos en relacin a losadyacentes, que al ser explorada con unatomografa elctrica se detecta como unaanomala, reconocindose claramente suslmites y profundidad.En la figura 3b se presenta una imagen

    de la distribucin de resistividad aparen-te del terreno obtenida por medio de unatomografa elctrica, donde se observa unaanomala en el subsuelo, que se interpretaque corresponde a una excavacin clan-destina cuya edad es de varias dcadas. Lasdimensiones y profundidad de la anomalaen la grfica fueron constatadas cuando seexcav el sitio.Geo-radar: Antiguamente, para la bsque-da de objetos sepultados, se ha contado

    G. SAGRIPANI, D . V ILLALBA, D. AGUILERA Y A. GIACCARDI

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    con el detector de metales y el magnet-metro. Su aplicacin en investigacionesforenses dependa de que los objetos en-terrados alrededor de una vctima tuviesenrespuesta a estas tecnologas. En el caso deldetector de metales, ste reacciona ante lapresencia de objetos metlicos y puedeusarse en forma selectiva. Su sensibilidades limitada hasta una profundidad mxi-ma de 0,30 m y su efectividad tambindepende del tamao del objeto enterrado(Strongman 1992).

    El magnetmetro, en cambio, puede haceruna lectura precisa hasta 1 m de profun-didad y solo reacciona a los campos mag-nticos de los metales ferrosos. Es efectivosolo en zonas descampadas, ya que, comoposeen altsima sensibilidad existen nume-rosas fuentes antrpicas que pueden produ-cir una influencia externa como la corrienteelctrica, caeras, construcciones con hie-rro y cualquier objeto de metal presente,tanto es as que el operador no debe llevar

    ningn objeto metlico consigo.En la actualidad, las limitaciones de estosmtodos son superadas por la aplicacin dela tecnologa del geo-radar, la que se consi-dera una forma de teledeteccin ms preci-sa y confiable (Strongman 1992).El GPR utiliza los principios bsicos decualquier sistema radar (Strongman 1992),cuenta con cuatro unidades principales:transmisora, receptora, de control y de re-gistro (Fig. 4a).Un pulso o seal electromagntica es diri-

    gido hacia el subsuelo y se refleja en parte,dependiendo de las propiedades electro-magnticas de los materiales que atraviesa.Este cambio se puede correlacionar con:modificacin en el contenido volumtricode agua, variaciones en la densidad aparen-te, presencia de contactos, fracturas, vacosy elementos metlicos. La energa refleja-da como una onda, es tomada por la an-tena receptora del sistema, que determinael tiempo de retardo de la seal, que es la

    diferencia entre tiempo de transmisin yrecepcin (Strongman 1992, Gonzlez deVallejo et al.2002).La seal se repite muchas veces en un se-gundo y, como el sistema transmisor-re-

    ceptor se mueve a travs de la superficie aexplorar, las seales reflejadas definen unavisin o perfil transversal del subsuelo quemuestra grficamente los distintos niveles oestados del suelo y la presencia de objetosenterrados o anomalas (Strongman 1992).Las principales ventajas de este sistema son:la rapidez en la adquisicin de datos; suversatilidad, ya que posibilita que se pue-da realizar el relevamiento del subsuelo nosolo donde los sedimentos estn aflorando,sino tambin en sitios donde existen pisos

    (baldosas, hormign, pavimento, etc.); ypermite explorar a distintas profundidades,debido a la posibilidad de intercambiar an-tenas con diferentes frecuencias.Al excavar y tapar una fosa se produce ladesagregacin y/o mezcla de los sedimen-tos presentes en el perfil del subsuelo. Estaintervencin provoca una modificacin enlos materiales en relacin a los adyacentes,que al ser explorada con un GPR, se de-tecta como una anomala que, aun siendosutil, permite definir claramente sus lmitesy profundidad (Fig. 4b).

    Determinacin de propiedades mecni-cas del suelo para la ubicacin de fosasUna vez definido el sitio potencial de en-terramiento es ventajoso, como actividadprevia, abrir una calicata de exploracinprxima al sitio donde se considere que noha sido afectado por la intervencin antr-pica (excavacin de una fosa), para realizarla descripcin detallada de los sedimentospresentes en el perfil, definir los espesoresde los horizontes edficos, y obtener unperfil de referencia inalterado. Esta calicata

    se complementa con un ensayo de pene-tracin para conocer la distribucin de laresistencia mecnica de los materiales y co-rrelacionarlos con los distintos horizontesdel suelo (Fig. 5). Este perfil tipo permitircorrelacionar sus propiedades con los resul-tados de las exploraciones posteriores.Ensayo de penetracin: La necesidad de ex-plorar el subsuelo por distintos objetivosde trabajo ha favorecido el desarrollo yadaptacin de distintos mtodos, dentro

    Figura 3:a) Fotografa presentando la disposicin de los electrodos durante la realizacin de una tomografaelctrica. b) Imagen donde se indica con un rectngulo la anomala interpretada correspondiente a una fosa devarias dcadas de antigedad.

    a

    b

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    de los cuales, los ensayos de penetracin seconsideran importantes ya que permiten

    determinar una propiedad mecnica delsuelo como su resistencia. Una ventaja deesta tcnica es que provoca mnimas mo-dificaciones en el estado en que se encuen-tran los sedimentos. anto el penetrmetronormalizado como el Penetrologger (Fig. 6)se adaptan a los requerimientos de la bs-queda de fosas tapadas, muros e infraes-tructuras enterradas (Aguilera et al. 2006,Sagripanti et al.2012).Cuando se han delimitado anomalas conotros mtodos, se procede a aplicar un en-sayo de tipo directo, con el fin de lograr

    mayor precisin respecto de las propiedadesgeomecnicas de los materiales, que facilitela decisin de realizar una intervencin ma-yor (excavacin de trinchera) o bien descar-tar el sitio. Los ensayos de penetracin serealizan, con una equidistancia que est enfuncin del tamao de la anomala y ali-neados en dos direcciones perpendicularesentre s segn la geometra de la misma.Estos se efectan tanto dentro como fuerade la anomala, para lograr mayor precisin

    en su delimitacin. La utilizacin del pe-netrmetro normalizado o del Penetrologger

    est en funcin de la antigedad del ente-rramiento.El ensayo de penetracin dinmica, conpenetrmetro normalizado, consiste enhincar en el suelo una punta cnica norma-lizada por medio de golpes proporcionadospor una pesa que cae libremente desde unaaltura definida. Estos ensayos proporcionaninformacin continua sobre la resistenciamecnica de los materiales del perfil o te-rreno explorado hasta la profundidad de 1m, la que ser proporcional a la profundi-zacin por cada golpe (Moll et al.1987).

    Elpenetrologgerha sido diseado para me-dir la resistencia a la penetracin hasta unaprofundidad de 0,80 m. Se realiza hincan-do en el suelo una varilla metlica, que ensu extremo posee una punta cnica norma-lizada y ejerciendo, en forma manual, unapresin vertical sobre la misma. Este equi-po, de mayor tecnologa, permite hacer ungran nmero de mediciones en forma r-pida y el almacenamiento en forma digitalde los datos obtenidos, como as tambin el

    posicionamiento geogrfico del sitio de en-sayo ya que cuenta con un dispositivo GPS.Los datos obtenidos de estos ensayos per-miten elaborar un perfil del suelo con lavariacin de la resistencia mecnica de los

    sedimentos en funcin de la profundidad.Estos resultados se analizan en forma com-parativa con el perfil de referencia obtenidopreviamente, junto con la calicata de ex-ploracin, lo que permite definir en formarpida si se est en presencia de una ano-mala.La obtencin de valores de resistencia an-malos de los sedimentos, permite interpre-tar la posible presencia de una excavacintapada que ha sido posteriormente afectadapor la accin antrpica y/o natural (porcen-

    taje de humedad, lixiviacin, consolidacino compactacin diferencial, etc.), como astambin detectar la presencia de elementosenterrados (objetos, muros, etc.) que po-seen resistencia distinta a los sedimentos ensu estado natural (Fig. 7).Los ensayos realizados con Penetrologgertienen una limitacin operativa, compara-da con el penetrmetro normalizado, dadapor materiales que poseen mayor grado decompactacin que, como es de esperar, re-quieren ms presin para hincarse lo queproduce una flexin importante de la vari-

    lla metlica que puede generar una lectura

    Figura 4:a) Geo-radar relevando una calicata de exploracin tapada. b) Radiogramas obtenidas del subsuelo delsitio. La de la derecha tiene una orientacin E-O y la de la izquierda N-S.

    Figura 5:Vista de un perfil litolgico de referencia enuna calicata y valores de resistencia de los materiales,obtenidos en un ensayo de penetracin.

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    errnea de los datos. Se han realizado en-sayos en sedimentos loessoides, con fosasde diferentes tiempos de excavacin (1, 2, 5, 8 y 10 aos) ubicadas en un Ce-menterio Municipal y se ha comprobado

    que los resultados son confiables solo paraaquellas que no tengan ms de un ao deexcavadas.Otra limitacin al utilizar estos ensayos,es el tipo de sedimento en el cual se esttrabajando, ya que si stos presentan ro-dados, escombros o basura, los mismosimposibilitan el funcionamiento normalde los equipos.Sondeo con barreno manual o pala vizca-chera (SPV):El sondeo con barreno es un procedimien-

    to mecnico manual, que se basa en larotacin de una herramienta de corte quedesagrega el terreno y una cuchara quepermite almacenar y extraer muestras dedetritos (cutting) hacia la superficie desdeuna profundidad conocida. Se emplea so-lamente en terrenos poco coherentes o debaja dureza (Huarte 1977, Gonzlez deVallejo et al.2002).La utilizacin de esta herramienta permite

    realizar un muestreo continuo de los ma-teriales del perfil, compararlo con el perfillitolgico de referencia y hacer una cons-tatacin precisa si el lugar explorado fueexcavado (Fig. 8a).

    En el caso que, sobre el lugar donde sesospecha est ubicada la fosa, se hayan rea-lizado construcciones que posean pisos obien que se haya pavimentado el lugar, sedestaca el uso del SPV porque, a diferenciade otros mtodos, se puede acceder al sub-suelo y extraer muestras de materiales conla minima afectacin de la obra. Para ellose realiza un corte en el piso, de aproxima-damente 30 x 30 cm, removiendo el con-tra-piso, si existiese, y dejando expuesto eltecho del perfil a investigar (Figs. 8b y 8c).

    Mtodo de exploracin directa porapertura de trincherasA partir de la integracin e interpretacinde los datos obtenidos se determina la po-tencialidad del sitio, y si esta evaluacin espositiva se aplica el mtodo de exploracindirecta de excavacin de trinchera el que,por su costo y grado de perturbacin del

    rea, es un mtodo de aplicacin contro-lado.Al excavar una fosa, que generalmente su-pera 1 m de profundidad y con una super-ficie que depender de si el enterramiento

    es individual o mltiple, se debe movilizaro extraer un importante volumen de mate-rial o sedimentos, disturbando los nivelesedficos superiores, principalmente el Aque contiene la cobertura vegetal y mate-ria orgnica.Esta excavacin genera irregularidades enla superficie que la diferencian del entor-no (distintos sedimentos, humedad, color,vegetacin, etc.), por lo tanto, probable-mente una fosa reciente, por estas carac-tersticas, sea fcil de identificar. Adems,

    al cerrar o tapar la misma, con posteriori-dad al depsito de los restos de la vctima,existe un volumen sobrante de sedimentoesto es debido, por un lado, al volumenreemplazado por el cuerpo enterrado y,por otro, al estado de desagregacin queadquieren los sedimentos al romperse suestructura, por lo tanto la fosa se rellenacon materiales menos compactados, y se

    Figura 6:a) Equipo de penetracin. b) Posicin en lafinalizacin del ensayo. c) Punta cnica normalizada.d) Equipo penetrologger. e) Posicin del equipo al fi-nalizar el ensayo.

    Figura 7:Esquema presentando curvas tpicas obtenidas en un ensayo de penetracin. Curva de Sondeo A corres-ponde a un perfil antrpicamente intervenido, curva Sondeo B al perfil de suelo en estado natural y curva SondeoC a la presencia de un muro oculto en el subsuelo.

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    genera una zona positiva aledaa, lo quefavorece la ubicacin del enterramiento.Sin embargo, a medida que transcurre eltiempo un cuerpo enterrado pierde volu-men por lo tanto una fosa ms antigua

    puede presentar una superficie deprimidacon distinta coloracin y diferentes sedi-mentos debido a la mezcla de materiales,de distintas profundidades. Otra evidenciala aporta la vegetacin que se instala pos-teriormente sobre la fosa ya que, la mismatiene distinto patrn de crecimiento al delentorno (Fig. 9).La accin de excavar una fosa produce pla-nos de corte en el suelo que se visualizanen el perfil litolgico y en la traza de losmismos en superficie. Estos cortes, realiza-dos con herramientas manuales o mecani-

    zadas, son evidencias claras de la interven-cin antrpica en el medio fsico que sepueden preservar durante varias dcadas,siendo ms visibles si los materiales delperfil presentan mayores diferencias.La prctica habitual, en la mayora de loscasos, cuando se buscan cuerpos de perso-nas desaparecidas, es hacer una excavacinde importantes dimensiones con una palamecnica sin seguir algn criterio, con to-das las consecuencias asociadas que genera

    esta forma de intervencin. La probabili-dad de perder o destruir evidencias es alta,como tambin es importante el grado deafectacin del terreno excavado. Es por elloque se recomienda al comenzar la apertura

    usar una tcnica de excavacin superficial,de pocos centmetros de profundidad, yaque el anlisis e interpretacin de los pla-nos de corte, en los primeros centmetrosdel perfil, es de vital ayuda para llegar auna sepultura que se encuentra a mayorprofundidad (Fig. 10a y 10c).Esta tcnica, probada en varios casos, seconsidera la ms apropiada y econmicaya que se inicia la excavacin de forma su-perficial con una pala mecnica pequea(tipo bobcat) haciendo la primer pasada

    con una profundidad de corte entre los0,25 y 0,30 m, con el fin de asegurar laremocin de la mayora de las races de lacobertura vegetal y destapar la parte supe-rior de la anomala (Fig. 10b y 10d). Pos-teriormente se revisa, con detalle, la super-ficie destapada tratando de identificar lapresencia de algn lmite lateral de la fosabuscada o contacto entre materiales en suestado natural y removido, con la ayuda deuna pala de mano, scrapery cepillos.Se contina profundizando la excavacincada 0,25 m y rectificando las paredes del

    Figura 8:a) Perfil litolgico reconstruido en superficiecon las muestras de materiales del subsuelo obtenidasa distintas profundidades. b) Ejemplo de corte en unpiso de cermicos, dentro de una habitacin, para ac-ceder al subsuelo. c) Obtencin de los materiales ex-trados por la cuchara del barreno manual.

    Figura 9:a) Fotografa de unterreno donde se ubicauna fosa utilizada para ladisposicin de residuos,que permanece tapadadesde hace alrededor de 15aos. b) La lnea de trazosindica el lmite de la fosa,delimitando las diferenciasen la morfologa y en lavegetacin.

    perfil (con una pala o scraper) con el fin dedetectar evidencias de intervencin antr-pica que permitan identificar los lmitesbuscados (Fig. 10a y 10c). En lo posiblees conveniente dejar expuesta al aire la su-

    perficie a investigar, de manera de obtenerotra perspectiva visual de la zona destapa-da, ya que los distintos materiales respon-dern diferencialmente segn el contenidode humedad inicial.Por el contrario, en ciertos casos cuandolos materiales estn ms secos, si los lmi-tes buscados de la fosa no son bien visi-bles, stos se pueden realzar humectandoligeramente la superficie excavada con laayuda de un rociador (Fig. 11a y 11b).

    CONSIDERACIONES FINALESLa experiencia adquirida y resultados ob-tenidos por la participacin en numerososcasos, permiten plantear que desde unaCiencia de la ierra como la geologa sepuede prestar una importante colabora-cin con la justicia y, en el caso particularde Argentina, hacer un invalorable aportea los DD. HH. y a familiares de desapare-cidos durante la dictadura militar y an endemocracia.Es indudable que en otras reas del cono-

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    Figura 10:a) Perfil correspondiente a una fosa de enterramiento cuya edad estimada es de alrededor de varias dcadas. b) Ejemplo de la tcnica de corte superficial delterreno que corresponde a la fosa anterior. c) Sketch de a, las lneas de trazos indican la evidencia del corte dejado por la intervencin antrpica. d) Sketchde b, las lneasde trazos indican el contacto entre los sedimentos en estado natural y excavados expuestos en el corte superficial.

    Figura 11:a) Vista del corte superficial del terreno de la fosa presentada en la figura 10, las flechas indican suslmites. b) Vista del mismo corte superficial, humectado para resaltar los lmites de la excavacin.

    a b

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    a bcimiento de la geologa existen profesio-nales especializados cuyas metodologas sepueden sumar en la etapa de investigaciny hacer un mayor aporte a la bsqueda depersonas desaparecidas.La excavacin de una fosa para un enterra-

    miento, con herramientas de mano o ma-quinarias, genera anomalas en el estadonatural de los materiales que pueden serdetectadas, interpretadas y delimitadas, ycuya expresin tiene variable persistenciaen el tiempo.Las evidencias de intervencin antrpicaen la superficie con motivo de una exca-vacin (micro-topografa, falta de vegeta-cin, etc.) son las que pierden su expre-sin ms rpidamente, mientras que las

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    que afectan la parte superior del perfil delsuelo (planos de corte producidos por he-rramientas y niveles de sedimentos mez-clados), pueden reconocerse, an, despusde varias dcadas.

    La participacin de profesionales de lageologa, y la aplicacin de los mtodosgeolgicos-geofsicos, se consideran defundamental importancia en la bsquedade enterramientos clandestinos de perso-nas, ya que la informacin que aportanaumenta substancialmente la posibilidadde hallazgo. Entre los mtodos a aplicar,con adaptaciones, se destacan el anlisismorfo-litolgico y aerofotogrfico, tomo-grafas elctricas, GPR, ensayos de pene-tracin geomecnicos, sondeo con barre-

    no manual y apertura de trincheras.En el desarrollo de las actividades, las dis-tintas situaciones, favorables o desfavora-bles, que se han tenido que transitar y losresultados obtenidos dejan una enseanzaque permite plantear que, entre los facto-res que juegan un rol importante en la eta-pa de bsqueda, se destacan tres:a) la regin geogrfica donde se ubica elsitio, accesibilidad al lugar, tipo de ente-rramiento, precisiones de los testimonios,recursos econmicos con que se cuenta,mtodos que se puedan aplicar, personal

    de apoyo y herramientas disponibles.b) la integracin del equipo de investi-gacin, que debe ser interdisciplinario yaque esto permite obtener mayor cantidadde opiniones e informacin para realizarlas interpretaciones.c) Es muy importante en las etapas deinvestigacin, cualquiera que sea la meto-dologa aplicada, disponer de tiempo sufi-ciente para realizar la interpretacin de lainformacin obtenida, que muchas vecesno se condice con los tiempos de la admi-nistracin y es, sobre la base de sta, que

    se tomar la decisin de excavar un sitio odescartarlo.Es importante lograr la concientizacinde las autoridades que requieren la inves-tigacin del hecho que la optimizacin deltiempo y del esfuerzo dedicado a la bs-queda se traduce en aumentar la posibili-dad de hallazgo.Se espera que el contenido de esta contri-bucin sea de utilidad a gelogos, antro-plogos, arquelogos, estudiantes y profe-

    sionales, de Argentina y otros pases, quetrabajen en la bsqueda de restos seos,objetos y elementos arqueolgicos ocultosbajo la superficie, especialmente en casosforenses en los que es necesario hacer un

    aporte desde una de las Ciencias de la ie-rra para acercarse a la verdad y justicia.

    AGRADECIMIENOS

    A la Esp. Mnica Villegas (UNRC) y Dra.Mnica Blarasn (UNRC) por su invalora-ble ayuda en la correccin del manuscrito,lectura crtica y sugerencias que han per-mitido mejorar el mismo, y principalmen-te por alentarnos a dar a conocer las acti-vidades de geologa forense realizadas. Al

    Dr. Hugo Schiavo (UNRC) y Dr. BaltazarParra (UNRC) por su colaboracin en lapuesta a punto delpenetrologger. A las au-toridades de las universidades nacionalesde Ro Cuarto y San Luis por autorizar-nos a realizar estas actividades. Al editorDr. Pablo Pazos y a los revisores Dr. MarioGimnez (UNSJ) y annimo, por sus opi-niones sobre la temtica abordada, lecturacrtica del manuscrito y correcciones quehan permitido mejorar este artculo.

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