factores que influyen en la inserción laboral de los jóvenes vinculados a la violencia o a las...
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El desarrollo óptimo del sector juventud es el único camino viable para frenar y detener este terrible fenómeno que presenta múltiples expresiones y que no son más que un reclamo implícito a la sociedad salvadoreña por la desatención y falta de una visión integral de desarrollo humano hacia los jóvenes, ya sea por la familia o el Estado. Por esta razón el grupo de investigadores del área social, específicamente de la Licenciatura en Trabajo Social de la Universidad Pedagógica de El Salvador, realizó la presente investigación, para conocer cómo se manifiesta este fenómeno en un grupo de jóvenes que reciben capacitación en el Centro de Formación y Orientación Padre “Rafael Palacios” de la Iglesia Católica del Municipio de Mejicanos.TRANSCRIPT
UNIVERSIDAD PEDAGÓGICA DE EL SALVADOR
FACULTAD DE EDUCACIÓN
ESCUELA DE SALUD Y MEDIO AMBIENTE
FACTORES QUE INFLUYEN EN LA INSERCIÓN LABORAL DE LOS
JÓVENES VINCULADOS A LA VIOLENCIA O A LAS MARAS, QUE HAN
SIDO CAPACITADOS EN EL CENTRO DE FORMACIÓN Y ORIENTACIÓN
PADRE “RAFAEL PALACIOS” DE LA IGLESIA CATÓLICA
DE MEJICANOS; AÑO 2006.
INTEGRANTES:
MARINA GUADALUPE TOVAR FLORES
REINA ELENA CARRILLO CARRILLO
ROBERTO GUARDADO MENJÍVAR
PARA OPTAR AL GRADO DE:
LICENCIATURA EN TRABAJO SOCIAL
SAN SALVADOR, MARZO DE 2007.
AUTORIDADES UNIVERSITARIAS
________________________.
ING. LUIS MARIO APARICIO
RECTOR
_________________________________
LICDA. CATALINA MACHUCA DE MERINO
VICE RECTORA ACADÉMICA
_________________________________
LIC. JORGE ALBERTO ESCOBAR
DECANO DE EDUCACIÓN
MIEMBROS DEL JURADO CALIFICADOR
__________________________________.
LIC. SANTOS ANTONIO RAMÍREZ AZCUNAGA
PRESIDENTE
_________________________________.
LIC. SALVADOR ELÍAS JOYA
1er. VOCAL
__________________________________.
LICDA. MARINA DEL CARMEN CAMACHO
2da. VOCAL
ASESOR DE TESIS
__________________________________.
LIC. ROGELIO DE JESÚS FIGUEROA LARA
AGRADECIMIENTOS DEL GRUPO
A la Universidad Pedagógica de El Salvador por formarnos
profesionalmente en nuestra carrera.
Al Centro de Formación y Orientación Padre “Rafael Palacios” de la
Iglesia Católica de Mejicanos: por permitirnos realizar nuestra
investigación y apoyarnos en el proceso.
Al Licenciado Rogelio de Jesús Figueroa Lara: Asesor de nuestra
investigación.
Al Jurado Evaluador: Por habernos brindado sus conocimientos en cada
avance de nuestra investigación, de manera especial al Licenciado Santos
Antonio Ramírez Azcúnaga, quien nos brindó su apoyo y comprensión en
todo momento
A todos muchas gracias.
Marina Guadalupe Tovar
Reina Elena Carrillo Carrillo
Roberto Guardado Menjivar
DEDICATORIA
Este trabajo lo dedico en primer lugar a Dios Todopoderoso que me brindo la
sabiduría y la fuerza para culminar mis estudios y lograr mis propósitos.
A mis Padres Joaquín Tovar y Rosa Ester de Tovar por su apoyo y esfuerzo
incondicional que me brindaron siempre en las alegrías, tristezas y en mis
momentos de desmayo para lograr mis metas.
A mi Mamita Marina motivo por el cual estoy aquí logrando mis éxitos; mis
hermanas y hermanos por haberme apoyado moral y económicamente para
llevar a cabo mis sueños.
A mi futuro Esposo Joaquín Bondanza que me apoyo en los momentos de
angustia dándome fuerzas para continuar y sobre todo contar con su amor.
A mis Amigos y Amigas a quienes les agradezco que estuvieron de forma
indirecta conmigo Gracias por todo.
A Mis Compañeros de Tesis Reina Elena y Roberto Guardado por los
momentos de alegrías, enojos y sobre todo por el de nuestro triunfo.
Marina Guadalupe Tovar Flores
DEDICATORIA
Quiero dar Gracias a Dios Todopoderoso por haberme dado sabiduría y
fortaleza para alcanzar mis metas propuestas.
A mis Padres Don Sebastián Carrillo y Doña Natalia de Carrillo por haberme
apoyado moral y económicamente en toda mi carrera y en todo momento
para alcanzar mis objetivos, por impulsarme siempre a seguir adelante a
pesar de las dificultades.
A mis Hermanos: Luis Orlando, Blanca Senaida, Ana María, Manuel
Humberto, por haberme apoyado siempre y en todo momento.
A mis compañeros de tesis Marina Tovar y Roberto Guardado.
Reina Elena Carrillo Carrillo
AGRADECIMIENTOS:
A Dios Todopoderoso: por darme inteligencia y fortaleza en todos los
momentos difíciles de mis estudios.
A Mi Esposa Reina Doris Cartagena: por ayudarm e en todo momento.
A Mis Hijos Héctor Salomón, Roberto Josué y David Alejandro por
comprenderme en mis ausencias a causa del estudio.
A Mis Padres Juan Ramón Guardado y María Aracely Menjivar por sus
oraciones y apoyo moral en todo momento.
A Mis Hermanos: Ana Gladis, Bety, Fredy y Oscar René; de manera especial
a René por brindarme apoyo y hospitalidad en su casa, a Fredy por
brindarme en muchos casos transporte y comprensión en horas nocturnas.
A Mis Suegros Elisa y Alfonso también por su apoyo.
A Mi Cuñada Daisy Esther por su apoyo, igual que a su esposo Ricardo Ebim
por su comprensión y consideración en mi trabajo.
A Mis Amigos y Amigas que de una u otra manera brindaron su apoyo y me
inspiraron.
A Mis Compañeros de Tesis Reina Elena Carrillo y Marina Gu adalupe Tovar
por los duros y gratos momentos que vivimos.
De Verdad Muchas Gracias,
Roberto Guardado Menjívar
ÍNDICE
Contenido Páginas
INTRODUCCIÓN ............................................................................................. i
CAPITULO I: MARCO CONCEPTUAL .............................................................1
1.1. Antecedentes del Problema ......................................................................1
1.1.1. Origen de las Maras ............................................................................1
1.1 .2. Respuestas del Estado ante el fenómeno
de la violencia .................................................................................................. 7
1.2. Justificación .................................................................................................14
1.3. Planteamiento del Problema .....................................................................15
1.4. Alcances y Limitaciones .............................................................................21
1.5. Recuento de conceptos y categorías ........................................................26
CAPITULO II: MARCO TEÓRICO .....................................................................29
2.1. Fundamentación teórico metodológica......................................................29
2.2. Construcción del marco empírico ..............................................................40
2.2.1. Hallazgos ...........................................................................................40
2.3. Formulación teórico metodológica de lo investigado.. .............................68
2.4. Desarrollo y definición teórica ....................................................................72
CAPITULO III: MARCO OPERATIVO
3.1. Descripción de los sujetos investigados ....................................................76
3.2. Procedimiento para la recopilación de datos ............................................77
3.3. Desarrollo de la prueba piloto ....................................................................79
3.4. Técnicas para el análisis de datos .............................................................80
Recursos Humanos y logísticos ........................................................................81
Cronograma de actividades ...............................................................................82
4. Indice preliminar del informe final .................................................................83
BIBLIOGRAFÍA .................................................................................................88
ANEXOS............................................................................................................90
INTRODUCCIÓN
La violencia es un fenómeno social que se encuentra presente en la vida
de todo ser humano, incluso antes de nacer ya está en algunos casos
marcando la vida del futuro ser, sobre todo en aquellos hogares donde la
violencia es cotidiana.
La violencia, siendo un paradigma que se practica, se sufre y se observa
a diario, trunca vidas y provoca muertes.
El desarrollo óptimo del sector juventud es el único camino viable para
frenar y detener este terrible fenómeno que presenta múltiples expresiones y
que no son más que un reclamo implícito a la sociedad salvadoreña por la
desatención y falta de una visión integral de desarrollo humano hacia los
jóvenes, ya sea por la familia o el Estado.
Por esta razón el grupo de investigadores del área social,
específicamente de la Licenciatura en Trabajo Social de la Universidad
Pedagógica de El Salvador, realizó la presente investigación, para conocer
como se manifiesta este fenómeno en un grupo de jóve nes que reciben
capacitación en el Centro de Formación y Orientación Padre “Rafael Palacios”
de la Iglesia Católica del Municipio de Mejicanos.
Los esfuerzos de esta Iglesia se orientan a capacitar a estos jóvenes
como una forma de insertarse en la vida social y convertirlos en personas útiles
a su grupo familiar y a la sociedad en general; pero sobre todo tratar de
disminuir en ellos esas acciones de violencia que caracterizan a estos grupos.
i
El presente trabajo se ha dividido en tres apartados capitulares; el primer
capítulo es el Marco Conceptual; el segundo capítulo es el Marco Teórico y el
tercer capítulo es el Marco Operativo.
El primer capítulo se inicia con los antecedentes del problema, en donde
se describe el surgimiento de estos grupos y su evolución hasta los momentos
actuales en los que su incidencia en la vida social es preocupante.
Se trabaja en este mismo capítulo la justificación de la investigación
como una necesidad sentida ante el flagelo de la violencia juvenil desde e l
punto de vista del Trabajo Social.
En el planteamiento del problema se trabaja la situación problemática del
fenómeno de la violencia juvenil y la falta de interés del Estado por atender a los
jóvenes de manera integral, capacitándolos y reinsertándolo s a la vida laboral y
productiva.
Al final de este capítulo se presentan los alcances y limitaciones de la
investigación, así como, el recuento de los conceptos y categorías utilizadas en
la presente investigación.
En el capítulo dos se presenta la Fundamentación Teórico –
Metodológico en el cual se desarrolla el planteamiento teórico que han realizado
algunos autores para explicar el fenómeno investigado; entre ellos: Martín Baró
que explica los factores que desatan los actos violentos; Reiss y Roth que
ii
define la violencia como el comportamiento interpersonal que intencionalmente
amenaza, atenta o de hecho inflige un daño físico.
El numeral 2.2. hace referencia a la construcción del Marco Empírico, en
el cual se presentan los hallazgos del trabajo de investigación; con la
información recolectada a través del cuestionario, la guía de entrevista y la guía
de observación.
En el numeral 2.3. se trabaja la parte referida a la formulación teórico –
metodológico de lo investigado, es decir, los grupos de ma ras, la violencia y
finaliza con algunas conclusiones propias de este grupo.
Siempre en este capítulo se deja señalado el desarrollo y definición
teórico propia de esta investigación elaborada por este equipo de
investigadores apoyada en la metodología y teoría propia del Trabajo Social.
El capítulo tres se refiere al Marco Operativo, que contiene la descripción
de los sujetos, con una descripción inicial, es decir, se partió de que todos
integraban grupos de maras y que desarrollaban acciones de violencia.
Sin embargo finalizada la investigación se valora que no todos los
jóvenes son integrantes de maras y por tanto no todos desarrollan acciones de
violencia. Significa que como grupo de investigadores se tiene ahora una
percepción diferente de estos jóvenes.
En el numeral dos se trabajan los instrumentos utilizados para la
recolección de la información, la fórmula para determinar la muestra y las
primeras valoraciones de los sujetos que se entrevistaron, el género en que se
ubicaron, la aceptación de pertenecer a un grupo de maras, así como los
sujetos que han buscado su incorporación en un trabajo.
En el numeral 3.3. se especifica que este equipo de investigadores valoró
la necesidad de realizar la prueba piloto, ya que ello permitió mejorar el
instrumento.
iii
En la parte última de este capítulo se describen las técnicas utilizadas
para el análisis de datos, contiene también el detalle de los recursos humanos y
logísticos que fueron necesarios para desarrollar este trabajo de investigación.
También forma parte de este capítulo el cronograma de actividades, en el
que se muestra las actividades de la investigación documental y las actividades
de la investigación de campo.
Por último se agregan varios anexos, entre ellos: el cuestionario, la guía
de entrevista, la guía de observación, papelería del centro y las fotografías que
dan fe de este trabajo realizado; así como la carta de la Universidad solicitando
el permiso para desarrollarlo.
iv
CAPITULO I. MARCO CONCEPTUAL
1.1. Antecedentes del problema
1.1.1. Origen de las maras
Existen muy pocos documentos que dan cuenta de los orígenes exactos
de las maras, sin embargo ya por la década de los años 50 y 60 del siglo
pasado existían ciertos grupos constituidos por jóvenes pertenecientes a
diferentes centros educativos de la capital que expresaban rivalidad relacionada
con los resultados de los partidos de básquetbol en lo que estos jóvenes
participaban; a estos grupos se les reconocía como mara estudiantil. Los
enfrentamientos tenían lugar en la calle pero sin mayores consecuencias.
Por otro lado, también se daba el caso de diferentes grupos de amigos o
vecinos que se reunían en sus colonias o barrios para jugar, platicar u organizar
diferentes actividades, sin que esto implicara que estas personas perteneciera n
a un grupo determinado o se organizaran para delinquir.
Tampoco se sabe en qué momento estos grupos de amigos o estas
“pandillas estudiantiles” comenzaron a desarrollar las características de las
pandillas callejeras actuales, tales como el uso frecuente de la violencia y las
prácticas de tipo delictivo, son los antecedentes mas directos de lo que ahora
se conoce como pandillas callejeras o maras.
Hasta finales del conflicto armado (1981 – 1991), el tema de las maras
tenía poca relevancia en la opinión pública, ya que las acciones que en la
capital se desarrollaban se relacionaban con los comandos urbanos de la
guerrilla, pues se estaba en guerra; será en la década de los años 90, como
resultado de la firma de los Acuerdos de Paz que las acciones de los comandos
urbanos ya no se realizan, quedando al descubierto las acciones que las maras
realizaban, ya no eran de la mara estudiantil, sino que, se habían conformado la
MS y la 18, integradas por algunos miembros de la mara estudiantil.
Los investigadores Cruz y Portillo (1998), sostienen “que a pesar de la
dificultad de determinar o distinguir los factores causales de aquellos que sólo
se asocian al surgimiento de estos grupos es posible enumerar una serie de
factores que están relacionadas con el fenómeno. Tales factores pertenecen a
distintas categorías, ya sean: estructurales, medio ambientales, personales,
familiares, comunitarios, políticos y económicos,” 1
La pandilla de la calle 18 surge en los Estados Unidos según los mismos
pandilleros es la que tiene mas larga trayectoria, surge aproximadamente por
los años 50 como parte del movimiento de pandillas, dentro de la dinámica del
movimiento chicano del Sur de California. Este movimiento buscaba la defensa
de los derechos de la minoría hispana radicada en los Estados Unidos que no
era protegida frente a las actitudes de racismo y de conducta social de los
sectores de la sociedad norteamericana. De esa forma los jóvenes
latinoamericanos que emigraban a esa zona se integraban a dicha pandilla, la
cual contaba en su mayoría con mexicanos.” 2
A principios de los años ochenta, con la masiva emigración y asentamiento
de salvadoreños en los Ángeles, toma cuerpo otra pandilla que se
autodenominó Salvatrucha, por el origen de sus integrantes y como un inte nto
por definir su origen étnico frente a la diversidad de nacionalidades. El
enfrentamiento declarado entre ambas pandillas, la mara Salvatrucha y la
pandilla de la calle 18 (Los Angeles, Estados Unidos) , no toma lugar sino hasta
comienzos del año 1990.
1 Cruz José Miguel, Portillo Peña Nelson. “Solidaridad y Violencia en las pandillas del gran San Salvador;
más allá de la vida loca” UCA – Editores El Salvador. 1998. Pág. 156 2 Op. Cit. Pág. 56
Por otra parte, el control de territorio está asociado al control que la
pandilla ejerce en un área determinada; y tiene que ver además con los grafitti y
todas aquellas manifestaciones de poder territorial que la misma ostenta y que
en ningún momento está dispuesta a ceder o permitir que sea invadida o
violentada por otra pandilla o miembro contrario. Es tal el celo por el territorio,
que incluso llegan a protagonizar riñas y balaceras propiciando consecuencias
fatales.
En los momentos actuales, la sociedad salvadoreña está siendo castigada
por la delincuencia y el crimen, como puede constatarse, en los medios de
comunicación social, puesto que se levanta de frontera a frontera y la vida humana y
demás bienes jurídicos son irrespetados de manera tal que la sociedad vive bajo
signos de constante violencia e inseguridad, desde delitos de mínima cuantía hasta
los más horrendos crímenes contra la vida, la in tegridad personal, violación
sexual y otros.
La sociedad salvadoreña día tras día es conmovida por las imágenes de
muertes violentas y otros graves hechos delincuenciales, en donde la
inseguridad ciudadana es la nota del día, a nadie escapa que los jóvenes
aglutinados en Maras o pandillas cometen estos actos ilícitos, que transgreden
el orden jurídico y la tranquilidad de las personas; sus acciones van desde pedir
una “cora”, que es equivalente a $0.25 hasta asaltar a mano armada para
obtener dinero con el que posteriormente adquirirán droga, como: marihuana,
cocaína, crack y otras. Sin mencionar que en los últimos meses según los
medios de comunicación (Radio y T.V.) se han dedicado a la tarea de
extorsionar a personas, negocios, rutas de buses y microbuses, etc. e incluso
asesinan a quienes no acceden a sus peticiones económicas. Vale aclarar que
en algunas circunstancias los mismos empresarios han sido utilizados para
contribuir a las extorsiones.
La extorsión, el tráfico de droga y el crimen organizado son las
principales fuentes de ingresos económicos de estos grupos, por lo que pagan
cualquier favor recibido.
La violencia en El Salvador, muestra la incapacidad del Estado para
generar instrumentos de integración social, ejercer au toridad y administrar
justicia. Además, hace evidente, la marginación y la exclusión social; es decir,
que las instituciones del Estado excluyen de toda actividad y desición a estos
jóvenes quienes al final generan la violencia juvenil.
El Conferencista Rosales Carlos, clasifica la violencia en: “política,
intrafamiliar (aquí se da sobre todo a mujeres, niños, niñas y ancianos),
violencia sexual (a niñas y mujeres), laboral (mujeres y niñas) en medios de
comunicación, violencia común y violencia intelectual.” 3
Para muchos entendidos en la materia el ciclo de la violencia inicia en la
familia (intrafamiliar), ya que es ahí donde se adoptan los primeros patrones de
respeto o irrespeto, es el lugar donde se forma y moldea la personalidad del
individuo, y es esta personalidad con la que se presentará el joven ante la
sociedad.
Por otra parte, es importante delimitar el costo social de la violencia , que
para la autora Gloria Mirian Rubio (1998) lo define como “Los traumas causados
por la violencia, tanto en la violencia que conlleva a la muerte, como en la que
no, pero siempre hay un trauma social.”4 La pérdida irreparable de un ser
humano, es un costo social de la violencia , que no se puede medir en términos
monetarios como lo hacen los economistas. Los daños físicos, los trastornos
3 VIII Coloquio, Violencia y Salud. Universidad de El Salvador, Facultad de Medicina del 23 al 27 de nov.
1998. P. 14 4 Op. Cit. P. 84
psicológicos que limitan temporal o permanentemente la capacidad del
individuo o la funcionalidad de una sociedad, son costos difíciles de medir”.
Por otra parte, la población salvadoreña históricamente ha sido
desatendida por el Estado en cuanto a la satisfacción de sus necesidades mas
fundamentales; además los jóvenes al no tener acceso a la escuela, a una
fuente de empleo se van sintiendo marginados, generando un resentimiento
social, que trasciende a los niveles ideológicos y políticos. La población rural
principalmente y la urbano-marginal, enfrentó estas situaciones de una
sociedad agraria exportadora, con claras estructuras autoritarias que han
sometido y excluyen de la participación en las decisiones nacionales a estos
sectores, lo que generó la pobreza rural, agravada con los doce años de
conflicto armado.
El conflicto armado de (1981 – 1991), sirvió como disolvente de aquella
sociedad autoritaria y de las escasas estructuras sociales que regulaban e
integraban a la población; además, los desastres socionaturales, es decir,
aquellos provocados por la intervención del hombre han generado otros
problemas, entre ellos: la desintegración familiar, en donde la familia que es el
entorno de la formación fundamental e inicial de los nuevos miembros. En este
seno familiar donde se desarrolla los niños y adolescentes sufrió profundos
cambios en su estructura como familia nuclear, generando familias desunidas o
bien familias ampliadas que incorporan a otros miembros del grupo.
De ahí que los cambios sociales sucedidos en los últimos dieciocho año s
afectó sensiblemente la institución básica de la sociedad, la familia en su forma
y estructura tradicional y nuclear; puesto que el conflicto provocó
desplazamientos internos, (emigración) nacional/internacional y un proceso de
concentración poblacional a nivel de la capita l, que se ha traducido en una
sobre población que vuelve más difícil la atención por parte de las instituciones
del Estado, especialmente en: educación, salud, vivienda, y sobre todo empleo;
su ausencia dificulta toda forma de sobre vivencia .
En este proceso de modificación de la estructura familiar, los niños y
adolescentes, fueron los más directamente afectados, al ser sometido su
entorno inmediato familiar a tensiones destructivas y dañinas. La mayoría de
ellos tiene como referencia familiar de vida una situación socioeconómica difícil,
un contexto de conflicto, de violencia familiar y social, el desplazamiento, la
migración, la muerte y la ausencia de sus padres o familiares cercanos
obligaron a que se criara con sus abuelos, tíos y en ciertos casos, los vecinos
que tomaron la responsabilidad de manutención y educación.
Existen cuatro grupos que sufren procesos diversos de exclusión social
vinculados de diferentes formas, en su origen; por su capacidad de generación
paradigmática, hacia la población joven salvadoreña, se convierten en
población altamente desintegradora. Estos grupos son:
Los jóvenes empobrecidos, marginados y excluidos
Los grupos de maras
Los deportados por actividades delictivas, los desmovilizados de ambos
bandos que fácilmente pueden enrolar a otros jóvenes en bandas de
delincuencia y
Los niños de la calle.
Equivocadamente hay sectores sociales que piensan que la gente pobre
es la causante de la violencia; por el contrario, aunque la violencia se puede
definir como los síntomas de la inequidad, o como el resentimiento frente a la
exclusión, no son los pobres los causantes de su propia exclusión, ni mucho
menos de la violencia; la gente pobre y las personas vulnerables
económicamente son las principales víctimas de la violencia, ejercida por el
Estado a través de sus aparatos de control social.
Sin embargo en El Salvador son muy pocas las instituciones que brindan
apoyo a los jóvenes que tienen la intención de transformar o modificar sus
vidas; y si existen tienen que trabajar con instituciones extranjeras para
costearse los gastos que éstas generan, ya que por parte del Estado no existen
políticas de inserción o prevención de estos fenómenos.
La exclusión hace evidente la falta de oportunidades educativas sobre
todo en el campo, en donde la exclusión territorial persiste y los jóvenes deben
emigrar a las ciudades, buscando mejorar sus condiciones de vida, lo que
influye en el desarrollo de conductas urbanas en un ambiente hostil, siendo esto
parte de la exclusión social y la migración por medio del trabajo doméstico
infantil, explotación sexual y trabajo en las calles.
Esta realidad urbana que los excluye, hace que los jóvenes construyan
su propia realidad urbana paralela, si se quiere y en donde coexisten en el
mismo espacio, pero en dimensiones diferentes.
Todo lo anterior demuestra que son varios los factores que posibilitan el
desarrollo de conductas delictivas o desintegradotas de los jóvenes.
1.1.2. Respuestas del Estado ante el fenómeno de la violencia.
El gobierno de El Salvador, en su desesperación por controlar a los
grupos de Maras, de pandillas y de crimen organizado, se ha dado a la tarea
de promulgar leyes que le faciliten el desarrollo de acciones orientadas al
castigo y encarcelamiento de los integrantes. Por estar orientados a estos
grupos son llamadas “Leyes Antimaras”, para legitimar el Plan Mano Dura. Este
plan y este tipo de normas que endurecen las penas, promueven el control
social tal como lo afirma Santos de Escobar, Aída Luz y otros , en su Ensayo
Sobre Justicia Juvenil (2005, Pág.77), “tal control es promovido desde la
administración Bush de los Estados Unidos, obedeciendo intereses domésticos
de ese país, relacionados al combate del terrorismo.”
Esta visión se hace notar en la declaración conjunta de los presidentes
de El Salvador, Guatemala, Honduras, y N icaragua sobre las pandillas “mara
Salvatrucha y la Mara 18” suscrita el 15 de enero de 2004, en lo que se llamó:
“Declaración de San Salvador”:
“La multiplicación de leyes o proyectos de ley an tiMaras”, como el “plan
mano dura” en El Salvador, el “plan libertad” en Honduras y el “plan escoba” en
Guatemala, discriminantes, represivos e innecesarios, inquietó a un grupo de
asociaciones civiles no gubernamentales, preocupados por la niñez, la
adolescencia y juventud, así como por otros grupos participantes activamente
en la recuperación del marero.
El gobierno de El Salvador, viene aplicando el Plan Mano Dura, que a
juicio de Santos de Escobar, Aída Luz y otros. Ensayo sobre Justicia Juvenil (2005,
Pág. 13), “E l plan mano dura es en buena medida, la forma de gestión de la
política de seguridad pública del gobierno, destacando su apuesta por el
carácter represivo de ésta, su manipulación y utilización política, su selectividad
discriminativa e irrespeto por la normas constitucionales y de derechos
humanos; así como por la institucionalidad, ” sin embargo, el plan mano dura se
extendió hasta mediados del año 2004, apoyado por la vigencia de la ley
antiMaras que fue declarada inconstitucional.
La otra cara del plan mano dura, es el Plan Mano Amiga; que busca
tenderles la mano a todos aquellos integrantes de estos grupos que
voluntariamente deseen reincorporarse a la sociedad como personas útiles. El
plan comprende una serie de acciones orientadas a la prevención y a la
reinserción de estos jóvenes.
Básicamente, se busca capacitar a los jóvenes en varios oficios y
preparación técnica, para ello el Estado a través del Instituto Salvadoreño de
Formación Profesional (INSAFORP), que opera y funciona median te el 1% que
aporta todo trabajador que recibe su sueldo por planilla, a través de la
institución sean estos privados o públicos.
En los últimos años el INSAFORP ha desarrollado algunas
investigaciones sobre desempleo juvenil en El Salvador, las cuales han
ayudado a elaborar un diagnóstico y a sugerir la formulación de una serie de
políticas que le ayuden a mejorar el acceso de los jóvenes al mercado laboral.
En el estudio sobre empleo y juventud urbana se parte de tres presupuestos
que dan el marco general de la problemática del desempleo en El Salvador, en
las que se basa para hacer sus sugerencias finales:
Primero, el sistema económico no está generando suficientes fuentes de
empleo como para satisfacer un alto porcentaje de la demanda de trabajo.
La segunda afirmación del INSAFORP, es que los jóvenes requieren de
una atención específica como grupo social vulnerable y de importancia
estratégica para el desarrollo económico y social de la nación.
Finalmente, la investigación afirma que, “los jóvenes co mo grupo social
requieren de una atención coordinada por parte de las instituciones nacionales
correspondientes, que hagan posible una actuación cada vez mas integral de
sus necesidades para lograr una adecuada inserción laboral. Es por eso que en
sus recomendaciones de políticas laborales se sugiere la creación de una Red
Interinstitucional a favor de la formación e inserción laboral de los jóvenes
salvadoreños, donde tendrían que involucrarse los Ministerios de Salud ,
Educación, Economía; junto a otras instituciones como las Universidades e
inversionistas extranjeros.
La reinserción social, laboral y familiar, requiere en primer lugar terminar
con el Estigma Social de Marginación y Exclusión Social, requiere además de
otorgarles confianza y creer en ellos, que se preparen y se insertarán
nuevamente.
Pero además, se necesita mayores niveles de educación formal que
permitan la creación de capital humano capaz de crear oportunidades reales
económicamente y por otro lado es imperiosa la necesidad de políticas
estatales y privadas de mediano y largo plazo que ayuden a enfrentar el
problema con seriedad y convicción real.
En este proceso, juega un papel muy importante, en primer lugar el grupo
familiar, el Estado a través de sus diversas instituciones, las Orga nizaciones no
Gubernamentales y los Organismos Internacionales para el financiamiento de
las iniciativas.
De manera más específica el INSAFORP apoya a la población vulnerable
desempleada o subempleada, a través de su estrategia de capacitación para el
abordaje de la problemática de la juventud, como sector más afectado por la
falta de formación profesional y empleo, así como otros sectores tales como
madres solteras, población urbano-marginal, jóvenes en riesgo de exclusión
social, población penitenciaria, adultos mayores y discapacitados entre otros.
Además de los esfuerzos del Estado están lo que realiza la iglesia
católica a través de los Religiosos Salesianos que trabajan en toda
Centroamérica, quienes preocupados, por este problema han buscado la
inserción socio laboral de la juventud marginada; los Salesianos se han
enfocado en crear procesos educativos adaptados a las necesidades de estos
jóvenes con el lema: casa que acoge, parroquia que evangeliza, escuela que
encamina hacia la vida, patio donde se comparte la amistad en un ambiente
salesiano.
El Centro Juvenil “Don Bosco” se ha convertido en un lugar de la ciudad
donde todo joven es bienvenido, y es atendido por sacerdotes y hermanos
religiosos, además cuenta con los servicios de psicólogos, profesores y
voluntarios de diversas especialidades. El centro cuenta con patios de juego, lo
que lo ha convertido en escuela, en donde los jóvenes pueden socializarse con
muchachos de otros barrios, comparten experiencias y sobre todo reciben
orientación espiritual, que muchos la necesitan para encausar sus acciones.
A este esfuerzo se ha sumado la Iglesia Católica del Municipio de
Mejicanos, que comienza a funcionar en el año de 1986 como Centro Técnico
Vocacional, y estaba abierto a los jóvenes provenientes de l área metropolitana
de San Salvador (AMSS) y del interior de la Republica. El centro fue fundado
por la Pastoral Social de la Parroquia “San Francisco de Asís de Mejicanos en
1986, orientado a la búsqueda de soluciones para la problemática de
capacitación e inserción laboral. El centro daba prioridad a personas de
escasos recursos económicos y luego de capacitarlos les ofrecía los servicios
de colocación de empleos.
Cabe mencionar que el Centro “Rafael Palacios” de Mejicanos obtiene
financiamientos del ayuntamiento de Bilbao (España) o sea de la Cooperación
Española.
Para el año 2004, el centro se planteó un cambio estratégico, tanto en
sus objetivos como en las expectativas; denominándose a partir de ese año
como: Centro de Formación y Orientación Padre “Rafael Palacios”, en honor al
sacerdote salvadoreño asesinado durante el pasado conflicto armado por
fuerzas de seguridad nacional.
Este centro atiende en cinco áreas, ellas son:
Formación técnica
Inserción laboral
Participación juvenil ciudadana
Atención psicológica
Adiós Tatuajes.
El proyecto “Adiós Tatuajes” es clave para el logro de la inserción o reinserción
social, ya que a pesar de capacitarse el tatuaje representa la marca y el
estigma que le impide acceder a un empleo.
Hasta agosto del 2006 se han inscrito en los diversos cursos 770
personas entre adolescentes, jóvenes y adultos, con pertenencia o no a los
grupos de maras.
Los cursos que el centro ofrece actualmente son: Computación,
Cosmetología, Dibujo y Pintura, Panadería. Electricidad l y ll, Modistería,
Música, Piñatería, Reparación y Mantenimiento de PC, Sastrería, Taller de
Velas y Taller de Floristería.
En este trabajo de investigación se busca, descubrir algunos factores que
están incidiendo positiva o negativamente, para que lo s jóvenes capacitados se
inserten laboralmente, ya sea ofreciéndoles un trabajo, o facilitándole fondos
económicos para que instalen su propio taller.
Se mantiene especial interés en conocer las acciones que en torno a la
inserción laboral realiza este centro, y o tras instituciones del Estado que
trabajan con este propósito.
La problemática investigada permite hacer algunos aportes orientados a
valorar las acciones que se realizan actualmente, así como aportar algunos
elementos que ayuden a mejorar estas acciones sobre todo las que viene
realizando la Iglesia Católica de Mejicanos, a través del Centro de Formación y
Orientación “Padre Rafael Palacios”
1.2. Justificación
Uno de los flagelos que enfrenta la sociedad salvadoreña, en los últimos
años es sin duda alguna el problema de la violencia, de manera específica la
violencia juvenil, con todas sus formas y consecuencias; a tal grado que el
Estado ha resultado incapaz de encontrar soluciones que ayuden al joven con
pertenencia a los grupos de maras o pandillas; y sin que ello conlleve a generar
más violencia, capturas e incluso la muerte. No resulta ético ni humano
combatir la violencia con más violencia, como lo está haciendo el Estado
Salvadoreño.
Sin embargo, muchas organizaciones no gubernamentales, iglesias y
universidades vienen proponiendo e incluso realizando acciones un tanto
diferentes orientadas a formar y capacitar en un oficio a éstos jóvenes para que
tengan una alternativa de ser ú tiles a su familia y a la sociedad.
La juventud salvadoreña, históricamente no ha tenido la facilidad de
encontrar un empleo que le asegure su reproducción soc ial, igual podría decirse
del acceso a la educación que lo prepara para enfrentar la vida de una manera
diferente a la de sus padres u otros familiares.
En este trabajo de investigación se ha abordado los esfuerzos del Estado
y de otras organizaciones no gubernamentales, orientadas a la capacitación y
tecnificación de los jóvenes con pertenencia o no a los grupos de maras, ya que
la capacitación y la inserción laboral son acciones de prevención, tanto para el
ingreso a la mara o para la violencia social; la juvenil principalmente, pue sto que
es un mecanismo de rechazo a la falta de atención por parte del Estado, ya que
es más evidente la exclusión institucional que la prevención y la inclusión social.
Por estas y otras razones el equipo investigador consideró como muy
relevante el estudio de la problemática de la inserción social y la violencia
juvenil ya que se relaciona con la calidad de vida del salvado reño, con su
productividad, con su marco jurídico, con sus relaciones familiares y sociales,
con los niveles educativos, etc.; así mismo es un problema de actualidad que
involucra a todo el tejido social e incluso rebasa las fronteras patrias, siendo hoy
día una problemática regional y por que no decirlo mundial, sólo que las formas
de atacarlo son diferentes en cada país.
La problemática investigada permite valorar las acciones que se realizan
actualmente, así como aportar algunos elementos que ayude n a mejorar estas
acciones, sobre todo las que viene realizando la Iglesia Católica de Mejicanos,
a través del Centro de Formación y Orientación, “Padre Rafael Palacios”.
1.3. Planteamiento del problema
En El Salvador previamente al conflicto armado (década 1970 – 1980), la
sociedad agro exportadora generaba y mantenía su propia dinámica de
exclusión y, dada su naturaleza agraria, este fenómeno se expresaba
principalmente en el área rural. A este mundo agrario, en lo económico y
político, correspondía estructuras autoritarias, que sometían o excluían a las
mayorías de la participación en las decisiones nacionales. Para esos años era
evidente la presión social rural, manifestándose principalmente en la población
sin asentar y sin tierra. La presencia de viviendas de paja dispersas indicaba la
residencia temporal de campesinos en búsqueda de una parcela de tierra para
cultivar maíz o esperando una oportunidad de trabajo en las plantaciones
agrícolas.
En la zona norte del país, a lo largo de las tierras fronterizas, era
evidentes los asentamientos espontáneos y las formas primitivas del uso de la
tierra para obtener su subsistencia.
La presión social y demográfica se canalizaba con la migración hacia la
costa Atlántica de Honduras y una vez cerrada esta oportunidad con la guerra
de 1969, en ambos países, la presión se orientó directamente hacia el área
urbana de San Salvador y los Estados Unidos, en esos momentos.
Aunado a esta situación el conflicto armado de los años ochenta motivó
más para la emigración internacional, especialmente hacia Estados Unidos,
Canadá y Australia, este fenómeno se dió con mayor intensidad en el área rural,
provocando la desintegración acelerada de los grupos familiares; los jóvenes
emigraban por seguridad en sus vidas o por no ser re clutados por ambos
bandos. Los jefes de hogar no tenían la misma suerte.
La guerra provocó una serie de traumas en los jóvenes que vivieron esa
experiencia y significó el debilitamiento de las estructuras de formación y
transferencia de valores, así como de los mecanismos sociales familiares de
control y seguridad social.
Durante los 12 años de conflicto crecieron y se desarrollaron los grupos
de maras o pandillas que son agrupaciones nacidas en Estados Unidos
producto del racismo, y se constituyen como una forma de autoprotección e
integración ante un medio que los rechaza y los persigue, son mecanismos de
respuestas adaptativas para la sobre vivencia de la población excluida y se
reciben en el país por medio de las deportaciones, produciéndose a la vez un
fenómeno de transculturación.
Los deportados, sobre todos los mayores, han conocido otros ambientes y han
adquirido nuevas experiencias, lo cual, al socializar sus aventuras; les permite
asumir liderazgo, respeto y capacidad de reclutamiento; paralelo a esto están
los medios de comunicación social, quienes no establecen como punto
prioritario la formación de los jóvenes, por el contrario impulsan una línea de
diversión, evasión de su realidad y alta incitación al consumismo desmedido en
los hábitos y preferencias.
La violencia se ha convertido en un problema serio de salud pública por
la cuantía del daño a la salud y la integridad de la persona y a la vida misma;
por eso no puede pasarse por alto, ya que estadísticamente hablando es un
serio problema. Desde el año 1995 hasta la fecha, prácticamente los homicidios
a causa de la violencia, ocupan el primer lugar de mortalidad del país. En los
traumas causados por la violencia, tanto en la violencia que conlleva a la
muerte, como en la que no, siempre hay un trauma social.
Sin embargo, en nuestro país son muy pocas las instituciones que
brindan apoyo a los jóvenes que tienen la intención de transformar o modificar
sus vidas; y si existen tienen que trabajar con instituciones extranjeras para
costearse los gastos que éstas generan, ya que por parte del Estado no existen
políticas de inserción o prevención ante estos fenómenos que nos están
consumiendo cada vez más.
En varios documentos se señala a El Salvador como uno de los países
mas violentos de América Latina, después de Colombia, y más sí recién ha
salido de un conflicto armado de doce años de guerra civil, en el que
aproximadamente 1.5 millones de salvadoreños y salvadoreñas tuvieron que
emigrar, principalmente a los Estados Unidos, en calida de indocumentados o
ilegales, siendo el segundo grupo en esta categoría después de México. Según
FEPADE, en el fenómeno de las migraciones y retornados a El Salvador se
puede constatar que:
“a) Las acciones de reinserción de emigrantes y refugiados provenientes
de Centroamérica y afectados por la guerra, han sido responsabilidad
fundamentalmente de las organizaciones no gubernamentales (ONG’S) e
iglesias, con el apoyo de organizaciones internacionales, en el marco de aliviar
situaciones vinculadas al conflicto .
b) Se constata la ausencia de una política de reinserción o integración
para los deportados”5
El modelo económico neoliberal y los tratados de libre comercio han
venido a agravar aún más la situación de pobreza de los amplios sectores
sociales, y por tanto aumenta el fenómeno de la exclusión social que viven los
jóvenes en El Salvador. Esta exclusión hace evidente la falta de oportunidades
educativas sobre todo en el campo, en donde la exclusión territorial persiste y
los jóvenes deben emigrar a las ciudades, buscando mejorar sus condiciones
de vida, lo que influye en el desarrollo de conductas urbanas en un ambiente
hostil, siendo esto parte de la exclusión social y la migración por medio del
trabajo doméstico infantil, explotación sexual, trabajo en las calles, entre otros.
Un estudio realizado por Cruz José Miguel y Portillo Peña Nelson, en su
libro “Solidaridad y Violencia en las Pandillas del Gran San Salvador . Más Allá
5 Fundación Empresarial para el Desarrollo Educativo. Los Jóvenes en situación de Exclusión Social.
Capítulo 2. Colección FEPADE. El Salvador, 1997. Pág. 21
de la vida loca” (1998 p. 56) muestra “que el 93.3% de los miembros integrantes
de maras saben leer y escribir y el 75.9% actualmente no estudia, además, el
74.5% no trabaja, o sea que de 4 jóvenes 3 no estudian ni trabajan”.6
De todo lo anterior se puede inferir que se necesita una política de
prevención o mejor aún de inclusión social que dé soporte e integre a estos
jóvenes, tanto a su familia, como al trabajo y a la sociedad.
Es importante mencionar en este trabajo , la posición y visión de la iglesia
católica en torno a exclusión y marginación de la que son víctimas los jóvenes
de América Latina y por supuesto los jóvenes salvadoreños. En el documento
de Puebla; Conferencia General del Episcopado Latinoamericana (1984) en el
número 28 dice: “Vemos, a la luz de la fe, como un escándalo y una
contradicción con el ser cristiano, la creciente brecha entre ricos y pobres. El
lujo de unos pocos se convierte en insulto contra la miseria de las grandes
masas”7. Lo anterior hace referencia a las grandes diferencias existentes en el
mundo de hoy, sobre todo urbano; barrios pobres donde no existen condiciones
mínimas de vida, para el desarrollo y la sobrevivencia digna de las y los
jóvenes.
Además, el documento de Puebla (1984) señala, que se observan;
“rostros de jóvenes, desorientados por no encontrar lugar en la sociedad;
frustrados, sobre todo en zonas rurales y urbanas marginales, por falta de
oportunidades de capacitación y ocupación”.8
6 Fundación Empresarial para el Desarrollo Educativo. Los Jóvenes en situación de Exclusión Social.
Capítulo 2. Colección FEPADE. El Salvador, 1997. Pág. 21 7 III Conferencia General del Episcopado Latinoamericano. PUEBLA La Evangelización en el presente y
en el futuro de América Latina. México, 1984 Pág. 48. 8 Op. Cit Pág. 49
Es en este contexto en el que se enmarca la investigación teniendo como
punto de referencia el Centro de Formación y Orientación Padre “Rafael
Palacios” de la Iglesia Católica de Mejicanos; puesto que viene desarrollando
actividades de capacitación y orientación a niños, jóvenes y adultos, desde el
año 1986 como alternativa de inserción o reinserción productiva de los
integrantes de estos grupos.
El trabajo de capacitación y orientación de la Iglesia Católica de
Mejicanos se orienta a ayudar a los jóvenes para que se capaciten en un oficio
o trabajo técnico y se inserten o reinserten laboralmente en la sociedad; y como
consecuencia se alejen de la violencia, y se conviertan en jóvenes útiles a su
familia y productivos para la sociedad.
Personas capacitadas por la institución en los últimos ocho años
Año No. de personas formadas
1998 200
1999 440
2000 450
2001 356
2002 368
2003 250
2004 450
2005 405
Para el año 2006 se incluyeron los siguientes cursos:
Floristería
Taller de Velas
Modistería y
Cosmetología; totalizando hasta el mes de agosto 770 personas
atendidas, en los diferentes cursos.
Ante la problemática antes descrita y con el fin de co nocer mejor la
situación, el grupo investigador se plantea como objetivo general:
Evaluar los factores que están incidiendo positiva o
negativamente en jóvenes con pertenencia o no a las maras, que
han sido capacitados en el Centro de Formación y Orientación
Padre “Rafael Palacios” de la Iglesia Católica de Mejicanos.
Para alcanzar el objetivo general se formulan los siguientes objetivos
específicos:
Identificar factores sociales e institucionales que influyen de
manera positiva o negativa la inserción laboral de jóvenes
vinculados a la violencia o a las maras.
Analizar los esfuerzos estatales o privados que conlleven a la
inserción laboral de jóvenes vinculados a la violencia o a las
maras.
1.4. Alcances y limitaciones
Alcances
La violencia juvenil es una expresión del joven para hacerse notar y reclamar
espacios de atención tanto familiar como social; la violencia es el resultado de
múltiples problemas, tanto de orden estructural como social; en cuanto los
excluye y margina.
La atención a los jóvenes por parte del Estado se lleva acabo con un abordaje
y tratamiento distinto de los adultos; tanto que ha construido centros de
internamientos para jóvenes en donde deben incorporarse a los talleres para
aprender un oficio; con ello el Estado busca prepara rlos para que se inserten al
mercado laboral. Además de estos esfuerzos están los que desarrolla el
Institu to Salvadoreño de Formación Profesional (INSAFORP). En el caso de los
jóvenes con problemas de delincuencia y que han sido detenidos y privados de
libertad; el juez les da la oportunidad de asistir a un centro de capacitación bajo
la modalidad de Libertad Asistida.
La Procuraduría Para la Defensa de los Derechos Humanos, es la responsable
de velar porque el Estado a través de sus cuerpos de policía n o violenten los
derechos de los jóvenes; además de pedirle al Estado el desarrollo de
programas de atención integral.
Por su parte la iglesia católica también ejecuta programas de capacitación
laboral y la inserción en una fuente de trabajo, como una de la s formas
efectivas para incorporar a los jóvenes productivamente y por tanto evitar su
incorporación a los grupos de mara y su participación en las acciones de
violencia.
El Plan de Educación 2021 elaborada por una comisión de alto nivel , ha
identificado una serie de factores que están incidiendo en los jóvenes; para el
caso señala que en la búsqueda de modelos referentes muchas veces provoca
que los jóvenes se desorienten y tomen caminos equivocados.
Además una investigación realizada por la Federación Latinoamericana de
Ciencias Sociales (FLACSO) refleja que 37 de cada cien estudiantes del nivel
medio en el Área metropolitana de San Salvador han participado en riñas
callejeras.
El Plan de educación 2021 enfatiza que los fenómenos delincuencia,
desintegración familiar, marginalidad y violencia , siguen incidiendo sobre todo
en los centros escolares de Educación media, acelerando el fenómeno de la
violencia estudiantil expresados en maras o pandillas juveniles.
Para contrarrestar esta situación propone la creación de ambientes de
convivencia armoniosa, y el desarrollo de acciones que contribuyan a generar
espacios de interacción y desarrollo juvenil, a fin de presentar nuevos desafíos
a los jóvenes para canalizar creativa y positivamente sus energías.
El Plan 2021, se plantean una serie de programas, con los cuales busca incidir
en la situación que enfrenta la población escolar a nivel general y con ello
contribuir a la prevención de acciones de violencia y preparar a los jóvenes
para la vida; es decir educarlos, capacitarlos e insertarlos en un puesto de
trabajo.
Los programas básicos son: EDUCAME, COMPITE, PODER, COMPRENDO Y
REDES.
Limitaciones.
Los trabajos de investigación realizados en torno al fenómeno de la violencia de
los jóvenes vinculados a las maras y su inserción laboral, dejan entrever
algunas limitantes; entre ellas, que los trabajos tienen un punto de partida de
carácter político, con claras tendencias a señalar a los jóvenes como los
causantes de una serie de problemas, sin considerar la contraparte institucional
y social que margina y excluye a las amplias mayorías empobrecidas; y que a la
larga vino generando estos grupos de maras, que para hacerse notar en la
sociedad realizan todo tipo de acciones, en su mayoría violentas y por tan to
ilícitas, es decir penadas por la ley.
Sólo el hecho de pertenecer a la mara los tipifica como integrantes de
asociaciones ilícitas, lo que ya da lugar a la detención y procedimiento judicial.
El Plan de Educación 2021 con sus programas planteados enfrenta una serie
de limitantes, siendo la principal de ellos que su propuesta tiene un carácter
político, alejado de toda realidad y por tanto difícil de implementar; además está
orientado a un sector muy especial de la población y de las ciudades
principales. La población rural tiene poca participación en este Plan de
educación.
Mediante el Plan Mano Amiga, el Estado desarrolla una serie de programas
orientados a capacitar a los jóvenes en un oficio o en un trabajo técnico, ya sea
a través del Ministerio de Gobernación o de la Policía Nacional Civil (PNC); sin
embargo, se percibe que estos programas están cargados de Estigma Social e
institucionales, lo cual deja claro que no se busca una solución integral al
problema, es decir, que se percibe una limitante de orden objetivo e ideológico.
Por otra parte, la violencia juvenil no tiene expresiones individuales, sino que
obedece a una expresión social de grupo, un defensor de sus propios intereses
de grupo, los cuales son muy cohesionados y coercitivos por su s in tegrantes.
Por eso nos preguntamos: ¿son los jóvenes violentos, o son ellos los que han
sido violentados?, a lo que este grupo de investigadores llegó a la conclusión de
que son los jóvenes los que han sido violentados, debido a los procesos de
marginación y exclusión social ya descritas en este trabajo.
Además se identifican otras limitantes, como el caso de no abordar la
problemática en forma integral y mucho menos de darle seguimiento a la
reinserción o inserción en el área productiva, tal es el ca so de los esfuerzos del
INSAFORP, que únicamente capacita a los jóvenes pero no da seguimiento a la
inserción laboral a pesar de contar con la estrecha colaboración del Instituto
Salvadoreño de la Niñez y la adolescencia (ISNA), y del Instituto Salvadoreño
de Desarrollo de la mujer (ISDEMU) ambas instituciones cuentan con un grupo
de profesionales del área social entre Trabajadores Sociales, Psicólogos y
Educadores.
Lo mismo ocurre con los esfuerzos que hacen otras instituciones y organismos,
que no le dan seguimiento a la inserción laboral, argumentando escasez de
personal o inseguridad para sus vidas en los lugares de residencia de estos
jóvenes.
Existe una limitante institucional con respecto al apoyo financiero, y es que, el
Centro no cuenta con apoyo de la empresa privada mucho menos de parte del
sector estatal, quien es el ente indicado para apoyar estos procesos de
inserción o reinserción social.
Entre algunas limitantes para darle seguimiento a la inserción laboral están: el
grado de peligrosidad de estos grupos, la inseguridad existente en los lugares
de residencia, así como el hecho de brindar una dirección falsa ; además las
instituciones privadas tienen pocos recursos para llevar a cabo estas tareas.
Para superar estas limitantes, el grupo investigador busca recolectar toda la
información que requiere el trabajo a través de los jóvenes que están recibiendo
capacitación en el Centro de Formación y Orientación Padre “Rafael Palacios ”
para luego hacer el análisis cualitativo de la información obtenida y valorar el
alcance de los objetivos propuestos.
1.5. Recuento de conceptos y categorías a utilizar
Agresión: proviene del latín Agressio, acción y efecto de agredir, que
implica agresión, provocación o ataque; este concepto está íntimamente
relacionado con el de violencia; se entiende por violento aquella acción o
persona que está fuera de su estado natural; es una situación en la que se
aplica la fuerza de manera irracional y generalmente se hace uso de las armas
de “fuego” o arma “blanca” con el objetivo de agredir, e incluso matar.
En el caló pandilleril los actos delictivos o violentos experimentan
diversos nombres; por ejemplo una persona que ha sido herida en un acto
violento se le denomina “hacer un corte” , el robo se llama “ponerle a alguien”.
Otro concepto de gran utilidad en el presente trabajo es el de Cultura, el
cual literalmente expresa el conjunto de rasgos que caracterizan los modos de
vida de las personas actuando en sociedad, tales rasgos se manifiestan a
través del modo de actuar y pensar de los individuos que forman la sociedad.
De ahí que la cultura se relaciona con el de transculturación ya que en el
estudio de la violencia que nos ocupa se plantean algunos modos violentos de
actuar y han sido traídos al país por jóvenes agrupados en maras y que han
vivido en los Estados Unidos; en ese proceso han sido transculturizados.
Con esto no se quiere decir que la llamada “Cultura de la violencia” ha
sido importada desde el exterior, sino más bien que ha sido agravada o
acrecentada por modos y rasgos de acción externa.
No menos importante es la categoría de Exclusión Social, ya que, ésta es
entendida para efectos del presente trabajo , como la privación de espacios, y
condiciones de las personas, y habilidades de estas para el desarrollo integral
del ser humano y para que éste pueda convivir armónicamente con los demás
en convivencia social. En esta misma línea de interpretación se ve claramente
que Exclusión Social, es el no participar activamente en las decisiones y modos
de proceder en lo que a convivencia social se refiere, ya que, excluido es o son
todos aquellos que están ausentes de la participación social, tal interpretación
se relaciona fuertemente con el de marginación, ya que marginados son todos
los individuos que están excluidos de la participación social, vale decir que no
son tomados en cuenta en la construcción de políticas o estrategias de
desarrollo social y económico.
En su mayoría, los grupos de Maras o pandillas, son personas
marginados y excluidos de los procesos de desarrollo de la familia y de la
sociedad.
Para finalizar, tenemos el concepto de la pobreza que denota no sólo
privación de oportunidades, sino también la carencia de bienes materiales, falta
de oportunidades educativas, jurídicas, económicas, etc. La pobreza está
íntimamente ligada a la Exclusión Social y marginación del individuo como ente
social.
En resumen, esos aspectos negativos que se aplican a los grupos de
maras y pandillas, se hacen más evidentes, cuando estos jóvenes buscan la
forma de capacitarse para insertarse laboralmente, puesto que prevalece en la
sociedad el estigma social para con ellos, lo que imposibili ta la inserción laboral
y por tanto, los esfuerzos gubernamentales, individuales y sociales quedan
nada más como buenas voluntades.
Por eso es necesario revertir estos conceptos negativos para los jóvenes ,
para que puedan en el corto tiempo convertirse en seres útiles a su familia y a
la sociedad.
CAPITULO II MARCO TEÓRICO
2.1. Fundamentación Teórico – Metodológica
En la actualidad se manifiestan diferentes puntos de vista acerca de la
violencia, que día a día enfrentan los salvadoreños y salvadoreñas. Por ello se
hace necesario realizar un análisis histórico de la realidad violenta que se vive
desde hace muchos años. Autores como Martín Baró, considera necesario
tener presente “La perspectiva histórica para encontrar un sentido psico – social
de las diversas formas de violencia. De hecho, la guerra es la realidad más
totalizadora en la vida actual de El Salvador, e incluso las otras muchas formas
de violencia que aparecen sólo se pueden entender adecuadamente por
referencia al contexto de confrontación bélica.” 9
Para este autor, es importante considerar el aspecto psico – social de la
violencia humana enmarcada en el contexto del pasado conflicto armado, el
cual generó vicios y condiciones tendientes a la reproducción de conductas y
acciones violentas. También este autor plantea que “El modelo histórico sobre
la violencia humana parte de dos presupuestos fundamentales:
a) Existe una naturaleza específica del ser humano, naturaleza abierta a
potencialidades de todo tipo, entre ellas la de la violencia y la agresión; b)Esta
naturaleza es de carácter histórico, la historicidad de la naturaleza humana
significa desde el punto de vista social que cada persona se materializará en el
marco de otra sociedad concreta, como parte y expresión de unas fuerzas
sociales”.10
9 Martín Baró, Ignacio. Acción e Ideología. El Salvador 1997. UCA Editores P. 360. 10 Op cit. 401
Es decir, el ser humano es un ser abierto a la violencia y a la agresión
de acuerdo a las circunstancias de exclusión y marginación en que se
encuentren los individuos y las exigencias que cada persona experimenta.
Esto es más claro en la medida que comprendemos el funcionamiento de
la sociedad salvadoreña, la cual se encuentra dividida en dos grupos sociales
antagónicos, cuyos intereses también lo son: la burguesía frente al proletariado,
que en sentido más amplio es lo que se conoce como lucha de clases.
“Expresándose como producto del dominio de una minoría rica sobre una
mayoría pobre, lo que hace más grave y evidente el estado de violencia
dominadora de los pocos sobre los muchos, de los poderosos sobre los
impotentes. Esto se ha denominado violencia estructural y que ha sido
denunciada como un desorden establecido.”11 Entendiéndose como violencia
estructural aquella organización social en la que el Estado deliberadamente
protege y fomenta mediante mecanismos jurídicos, económicos, educativos y
políticos.
Otro modelo presentado por Martín Baró es el “enfoque instintivista”, el
cual presenta la violencia como el p roducto de fuerzas instintivas en el ser
humano. Este enfoque fue explicado mucho antes por Segismundo Freud, el
cual consiste en un impulso (carga energética) que hace tender el organismo
hacia ese fin (pulsión) Se trata de una visión meramente biológica y que tiene
como principal limitante el hecho de que la violencia es y constituye una visión
ahistórica que se contrapone al enfoque histórico.
El enfoque ambientalista por el contrario presenta la violencia y agresión
como el producto de fuerza presentes en el medio externo. Este enfoque
11 Op cit. 405
presenta dos modalidades: primero el modelo frustración – agresión y el modelo
más aceptado actualmente del aprendizaje social de la violencia.
El primero plantea la agresión como producto de la frustración, en donde
la conducta agresiva es producto de un cúmulo de frustraciones. Esta visión
sociológica plantea que existen momentos o situaciones en las cuales las
personas no pueden lograr sus objetivos más soñados o deseados socialmente
por medios comunes. La agresión se vuelve entonces una forma peculiar de
lograr los objetivos, aunque muchas veces como suele suceder al margen de la
ley.
El aprendizaje social sostiene que la mejor forma y más efectiva para
adquirir comportamientos violentos y/o agresivos lo constituye el aprendizaje
directo, es decir, mediante procesos que refuerzan los comportamientos
agresivos realizados por la misma persona. Dicho de otra manera basta con
observar el espectáculo de la violencia para que se produzca el aprendizaje.
Esta visión se manifiesta en la realidad salvadoreña y de hecho posee un
doble aspecto: por un lado, los jóvenes adquieren el conocimiento sobre nuevas
formas de comportarse agresivamente y por otro experimentan un refuerzo
positivo o negativo, según la conducta violenta observada, ya sea premiada o
castigada.
Para Martín Baró. “Uno de los factores que con más facilidad desata los
comportamientos violentos es la posibilidad de realizarlos. La configuración de
situaciones de poder, real o simbólico, es una de las fuentes principales de la
violencia social”.12
12 Op. Cit. 413
El joven que se encuentra en un momento dado, al frente de una
agrupación como las maras o pandillas, apoyado por las armas en la mano se
vuelve uno o varios sujetos potencialmente listos para ejercer violencia en
cualquier lugar.
La violencia también está relacionada con la cultura de la violencia, que
en los últimos años se define como “Una sociedad que ha utilizado la violencia
en el establecimiento de reglas y asignación de recursos y los ha hecho
recurrentes en el tiempo, termina por institucionalizar la violencia a tal punto que
se convierte en un componente del sistema cultural que dinamiza el ser y
quehacer de una sociedad”.13 Este fenómeno tiene sus raíces en la historia de
la violencia misma, y es el resultado de la pobreza, exclusión social y profundas
injusticias; de hecho no es un fenómeno nuevo como tampoco puede ser
adjudicado al pasado conflicto armado. La cultura de la violencia a la que están
acostumbrados (as) los y las salvadoreñas se remonta a los tiemp os de
conformación de la República, en donde hubo entre otras cosas autoritarismo,
represión, explotación, censura, desprestigio, persecución y muerte. Dicho
problema no parece reconocer límites, credos, ideologías, incluso estatus
socioeconómico, de ahí la preocupación por la progresiva y constante magnitud
del problema que día a día va incidiendo asombrosamente en la población
salvadoreña, sin que se esté generando propuestas de solución, por el contrario
se está fomentando.
Otros autores como Reiss y Roth definen la violencia “como el
comportamiento interpersonal que intencionalmente amen aza, atenta o de
hecho inflige un daño físico”.14
13 Violencia en una sociedad en transición PNUD. Pág. 116 14 Eric. Ideso, Idies. Iudop Maras y Pandillas de Centroamérica, Vol. I. UCA, Publicaciones, Nicaragua,
2001. Pág. 22.
Puede verse que este autor, comparte con los otros autores, la definición pero
él señala que el fin último de la violencia es siempre causar daño físico o
psicológico de manera planificada o preconcebida. Estos mismos autores, Reiss
y Roth (1999) Pág. 27, han señalado la importancia de ciertos factores de
riesgo que contribuyen a que se materialice el hecho violento, tanto en
individuos como grupos sociales.
Entre los factores principales están:
Factores Macrosociales: concentración de la pobreza, estructura de
oportunidades, declive del capital social, socialización sexual, acceso a
armas entre otros.
Factores Microsociales: tipo de organización comunitaria, los mercados
ilegales, las pandillas, la desorganización y destrucción familiar.
Factores Individuales de orden psicosocial: El temperamento, el consumo de
drogas y alcohol, respuestas sociales aprendidas, percepción sobre la
penalización o sobre los dividendos de la violencia, habilidades sociales y de
comunicación, etc.
Factores Individuales de orden Biológico: capacidades neurobiológicas
determinadas por el nacimiento y procesos de envejecimiento, historial de
uso de sustancias psicoactivas, exposición a neurotoxinas, etc.
En el mismo sentido, Orpinas (citado en la obra Maras y Pandillas en
Centroamérica), propone “un modelo de análisis más circunscrito según el cual
los factores de riesgo de la violencia juvenil están constituidos por una serie de
elementos que al interactuar en conjunto, aumentan las probabilidades de que
el joven se conduzca en forma violenta”15
Los factores que identifica este autor son:
Factores Ambientales: una cultura de violencia; medios de comunicación
promoviendo la violencia en sus contenidos, condiciones de pobreza,
15 Op. Cit. 27 – 28
exposición a la violencia comunitaria, in fluencia de los padres,
características familiares.
Factores Personales: retoma la noción de autosuficiencia, despreocupación
por consecuencias de actos, habilidades/destrezas para resolver problemas
(habilidades sociales) creencias y valores que apoyan la agresión.
Factores de orden conductual: se encuentra el consumo de alcohol, de
sustancias psicoactivas y la tenencia de armas.
Puede inferirse la coincidencia y similitud de estos autores en su
señalamiento, respecto a la violencia, en el sentido de tomar en cuenta
factores conductuales, personales y ambientales para explicar las causas de la
misma. Además se puede evidenciar cómo la violencia se justifica en la medida
del entorno en que se ha desarrollado el joven desde su concepción, que se va
transmitiendo de generación en generación, convirtiéndose en su modus
vivendi.
De igual manera al señalar el consumo de drogas y de bebida s
alcohólicas, como desencadenantes del fenómeno de la violencia. La
Organización Mundial de la Salud, en la Conferencia Mundial para la Salud
(1981) citado en el documento Violencia y Salud, define la violencia como la
imposición interhumana que produce dolor y sufrimiento inevitable.
Además, la violencia en El Salvador, a través de los años ha sido
ejercida por personas o grupos dominantes en cada época de la historia, en un
principio para apropiarse de las tierras, para dominar y hacer prevalecer el
trabajo forzado y para resistir y ejercer el poder político entre otros, lo que se
traduce en el desarrollo de una cultura de violencia, significa que una sociedad
que ha utilizado la violencia en el establecimiento de reglas y asignación de
recursos y los ha hecho recurrentes en el tiempo, “termina por institucionalizar
la violencia, a tal punto que se convierte en un componente del sistema cultural
que dinamiza el ser y que hacer de una sociedad”. 16
Para efectos de la presente investigación se entiende por cu ltura: Un
concepto que engloba la conducta humana, “vista como una construcción
personal y social capaz de generar en individuos y grupos humanos, signos de
identificación y diferenciación, así como establecer pautas de lo “socialmente
aceptable”, establecer una normativa cuyo cumplimiento in tegra o en caso
contrario, excluye y sanciona”.17
Significa entonces que esta conceptualización incluye toda la actividad
humana, tanto las formas de convivencia como el lenguaje, las creencias y las
costumbres entre o tras formas.
De acuerdo con los autores aquí mencionados se puede resumir que el
fenómeno de la violencia juvenil está ligado directamente con factores si se
quiere integrados, es decir, pobreza, falta de oportunidades de todo tipo:
educativas, laborales, de salud, desintegración de la familia producto de la
emigración forzada a la que obligó en gran medida el pasado conflicto armado
que vivió El Salvador y que continúa siendo una dinámica constante a raíz de
las condiciones de vida (exclusión social y marginación), entendida esta última
como la exclusión de grandes grupos sociales que no participan de las
decisiones y programas de desarrollo social del país a la cual se enfrentan las
mayorías, de manera especial los jóvenes.
Con todo este escenario puede visualizarse claramente que las penas
drásticas no han sido ni serán solución a tan agudos problemas de la juventud y
que por el contrario deberá trabajarse preferentemente en la prevención,
16 Violencia en una sociedad en transición: PNUD, 2000. Pág. 116 17 Op. Cit. 116
capacitación y generación de empleo. Esta idea debe ser retomad a por
instituciones estatales o privadas de manera especial por el Viceministerio de la
Juventud, Secretaría Nacional de la Familia, el Instituto Salvadoreño de la Niñez
y Adolescencia (ISNA), por el Instituto Salvadoreño de Desarrollo de la Mujer
(ISDEMU), por el Instituto Salvadoreño de Formación Profesional (INSAFORP)
y la empresa privada. Solo de esta manera puede aspirarse a detener y afrontar
el flagelo de la violencia social que hoy por hoy constituye uno de los más
grandes y difíciles retos para la familia, el estado y la sociedad en general.
Con todo este panorama, es necesario visualizar la problemática que nos
ocupa desde la perspectiva del Trabajo Social a fin de darle un enfoque
adecuado. El Trabajo Social cuenta con tres niveles específicos d e intervención:
individual, grupal y comunal; aclarando que para efectos de la presente
investigación se enfocará a la atención grupal, ya que la institución investigada
trabaja con jóvenes capacitándolos de manera grupal.
El Trabajo Social, como profesión humanística, considera que todo acto
humano incluye dos elementos, persona y situación, o sea que se trata de un
conjunto de realidades y aspectos subjetivos que influyen mutuamente.
El método de Trabajo Social de grupos es un proceso socio – educativo que
ayuda a los individuos a mejorar el funcionamiento social por medio del
intercambio de experiencias. Refuerza los valores sociales ubicándolos en la
realidad para promover su cooperación y responsabilidad en una acción
integradora con el proceso de desarrollo humano.
Para comprender porqué es un proceso social, es necesario realimentar
la presencia de los actores a través de la interacción constante que conlleva a
la capacitación del individuo en el grupo para su desarrollo social. El proceso
educativo enfoca el desarrollo de la personalidad del individuo con integridad,
con actitudes positivas que le permiten reflejar en su ambiente (en su entorno)
un desarrollo humano basado en aspiraciones y satisfacciones con
trascendencia a la familia, comunidad y nación.
Las funciones del método de Trabajo Social de grupo son:
“Sociales
Educativas
Promocionales
Preventivas
Rehabilitadoras y
Autogestionarias “18
En este sentido, el Trabajo Social de Grupo toma en cuenta al individuo
como sujeto de la sociedad, tratando en todo momento de promover la
integración del mismo, para incorporarlo en el desarrollo local, nacional y
regional. Es un medio para alcanzar niveles de participación que conlleven a un
desarrollo, promoviendo condiciones de vida digna y relaciones sociales
satisfactorias.
Los objetivos de Trabajo Social están enfocados a:
“Capacitar a los miembros del grupo para que: conozcan la importancia de
una sociedad democrática, basada en los derechos humanos, y participen
en forma eficaz en el cumplimiento de obligaciones y derechos sociales.
Orientar a los integrantes del grupo, para la reflexión continua y
sistemática sobre la importancia de generar redes de relaciones sociales
satisfactorias que eliminen acciones que promuevan violencia familiar,
comunal y nacional.
18 Muñoz Elías, Enma Ruvilia, Metodología de Trabajo Social II, Guatemala, 1995 Pag. 14
Estimular el crecimiento personal, para promover alcances
autogestionarios, fortaleciendo la organización social.
Promover la acción integral del individuo dentro del grupo, para el
desarrollo de la creatividad como fuente de crecimiento personal y grupal”19
Vale la pena entonces recordar que el ser humano necesita lograr la
satisfacción y que se le reconozca, desarrollando actitudes de ayuda y
cooperación, a través del estímulo y el reconocimiento de su propio valor como
joven. Además de la aceptación como necesidad de afecto, comprensión y
amistad, lo cual provoca como resultado seguridad en sí mismo, y en el entorno
en que se desarrolla.
Por otra parte, y como un esfuerzo de la Iglesia Católica de Mejicanos, a
través del Centro de Formación y Orientación Padre “Rafael Palacios”, viene
trabajando con los sectores sociales de bajos recursos o ingresos económicos,
varios cursos entre: oficios y capacitación técnica, con los que busca
contrarrestar la incorporación de los jóvenes a los grupo s de maras y por tanto
evitar las acciones de violencia, protagonizadas por estos grupos.
El Centro de Formación y Orientación cuenta con un cuerpo de
profesores capacitados y de calidad para lograr la capacitación y el aprendizaje
de un oficio; además de contar estructuralmente con una unidad de búsqueda
de colocación de estos jóvenes denominada como “bolsa de trabajo”, que
consiste en un banco de datos de los jóvenes capacitados para proporcionar
sus datos a las posibles empresas empleadoras.
Las acciones de la bolsa de trabajo se orienta en dos direcciones; la
primera que se limita a orientar a los jóvenes cuando estos buscan un empleo;
19 Op Cit. Pag. 15
la segunda busca colocar de manera directa a los jóvenes capacitados. Este
proceso se define como inserción laboral. Es decir, que una vez la persona ha
sido capacitada, lo lógico es que se inserte en un puesto de trabajo. La iglesia
tiene como finalidad con este centro, capacitar a los jóvenes en un oficio o
técnica para facilitarle la inserción laboral. Sin embargo, también es necesario
señalar que la inserción de estos jóvenes no se da tan fácilmente, ya que se
enfrenta al estigma social; es decir, que se enfrentan a un fenómeno de
rechazo, infundado quizá o bien como resultado de la valoración o experiencias
vividas por la población.
El estigma no valora el empeño y el esfuerzo de los jóvenes por
capacitarse o instalar su propio negocio, que al igual que busca un empleo,
merece y necesita se le tenga confianza, ya sea por apoyarlo económicamente
o para la venta y aceptación de sus servicios y/o productos.
La lucha por superar el estigma social es una tarea de todos, tanto del
Estado como de la familia y la sociedad en general, si realmente se quiere
hacer de ellos seres útiles.
2.2. Construcción del Marco Empírico
2.2.1. Hallazgos
Este trabajo se orientó a recolectar información de los sujetos que están
siendo capacitados en un oficio o preparación técnica, en el Centro de
Formación y Orientación, Padre “Rafael Palacios”, de la Iglesia Católica de
Mejicanos que busca hacer de los jóvenes seres útiles a su familia y a la
sociedad; pero sobre todo prevenir la incorporación de ellos en los grupos de
maras o pandillas: y si tienen pertenencia, ayudarlos en su rehabilitación y
reinserción laboral.
Para recolectar la información se diseñó un instrumento de preguntas
cerradas, orientadas a valorar los objetivos de esta investigación. Este
instrumento se administró a los jóvenes entre 12 y 30 años de edad, y se hizo
en el Centro de Formación y en algunas comunidades donde residen. Este
trabajo de campo requirió de 5 días hábiles y un fin de semana en un período
comprendido del día 11 al día 17 de Diciembre de 2006. Una vez completado
los cuestionarios se procedió a vaciarlos en tablas para facilitar su presentación.
Además, se diseñó una Guía de Entrevista que contiene ocho aspectos,
y fue administrada al recurso humano responsable del Centro y profesores
encargados del desarrollo de los cursos. Esta información sirvió para completar
o verificar la información proporcionada por los jóvenes. Además se diseñó una
Guía de Observación, con la que el equipo de investigadores buscó establecer
las características de los jóvenes para valorar su pertenencia o simpatía por los
grupos de maras. Los resultados de esta información son los que a
continuación se presentan.
Se partió de una muestra de 91 personas que por razones ajenas a este
grupo sólo se obtuvo una muestra real de 70, los cuales se distribuyen en el
género siguiente:
TABLA 1
Género de personas encuestadas
Género Fr %
Masculino 61 87.14
Femenino 9 12.86
TOTAL 70 100
FUENTE: Cuestionario administrado a los jóvenes capacitados en la institución
El cuadro muestra que el 87.14% de las personas que se capacitan son
del género masculino, lo que nos induce a sostener que es el género que más
se inclina por participar en estas organizaciones y el 12.86% corresponden al
género femenino. Puede decirse que los patrones culturales están presentes,
ya que son los hombres los que siguen teniendo participación en su
preparación; sin embargo, puede inferirse que un grupo de mujeres aún cuando
es reducido ha buscado su preparación técnica. Es claro por los resultados que
las mujeres tienen aspiraciones por aprender un oficio y de esta manera
generar ingreso económico para su grupo familiar.
TABLA 2
Edades de las personas encuestadas
Edades Fr %
10 – 15 años
16 – 20 años
21 – 25 años
26 – 30 años
Mas de 30 años
24
27
8
2
9
34.28
38.57
11.43
2.86
12.86
TOTAL 70 100
FUENTE: Cuestionario administrado a los jóvenes capacitados en la institución
Los datos resultan muy interesantes, ya que el 34.28% de ellos se ubican entre
las edades de 10 y 15 años, están entre la pubertad y la adolescencia; son
fáciles de incorporarlos a los grupos de maras o pandillas, pero también tienen
interés en capacitarse o en aprender un oficio , que les permita insertarse a un
puesto de trabajo; un 65.72% se ubicaron entre los 16 y 30 años, que
igualmente muestra el interés por aprender un oficio, siendo estos quienes
tienen mayor posibilidad de insertarse en la actividad laboral.
TABLA 3
Estado Familiar de las personas encuestadas
Estado Familiar Fr %
Solteros (as)
Casados (as)
Acompañados (as)
Divorciados (as)
Viudos
58
7
2
1
2
82.86
10.00
2.86
1.43
2.85
TOTAL 70 100%
FUENTE: Cuestionario administrado a los jóvenes capacitados en la institución
El cuadro muestra que el 82.86% de las personas son solteros, esto indica que
son jóvenes sin más compromiso que su grupo familiar; y por lo tanto son los
más propensos a participar en grupos de conducta irregular. Aunque en menor
escala, pero es importante mencionar que existe un 10% de personas unidas en
matrimonio.
TABLA 4
Integración de estos grupos familiares
Integrantes Fr %
Padre, madre y hermanos
Padre y hermanos
Madre y hermanos
Otros parientes
38
4
23
5
54.29
5.71
32.86
7.14
TOTAL 70 100
FUENTE: Cuestionario administrado a los jóvenes capacitados en la institución
La desintegración familiar está presente en estas personas, ya que el 32.86%
de ellos viven únicamente con la madre y hermanos, o sea que hay ausencia
del padre en estos grupos familiares; es decir, que hace falta el modelo
paternal que es quien debe ayudar a orientar y proteger a los hijos; hay adem ás
un 5.71% que vive con su padre y hermanos, faltando el modelo maternal.
Sin embargo, un 54.29% forman una familia integrada, conformada por los
progenitores y los hijos; además, el 7 .14% expresaron que viven con sus
abuelos, la razón es que los papás se fueron para los Estados Unidos y
quedaron al cuidado de ellos.
TABLA 5
Tenencia de la vivienda de estos grupos familiares
Tenencia Fr %
Propia
Alquilada
Con promesa de venta
En comodato
50
15
2
3
71.43
21.43
2.86
4.28
TOTAL 70 100
FUENTE: Cuestionario administrado a los jóvenes capacitados en la institución
En cuanto a la tenencia de la vivienda, el 71.43% expresó que es propia, es
decir que es del grupo familiar y no pagan ningún valor por ella, el 21.43% la
alquila, el 2.86% la está pagando todavía y el 4.28% la tiene en comodato, es
decir, que le han dado lugar donde vivir, a cambio de que la cuiden para evitar
que la destruyan o saqueen, ya que están en lugares de alto grado de
peligrosidad, en las zonas de Mejicanos y Cuscatancingo.
La tenencia de la vivienda en alguna forma está sujeta a la obtención de
ingresos, y éstos dependen de contar con trabajo remunerado.
TABLA 6
Trabajaba anteriormente
Respuestas Fr %
SI
NO
29
41
41.43
58.57
TOTAL 70 100
FUENTE: Cuestionario administrado a los jóvenes capacitados en la institución
Puede verse que el 41.43% de estas personas ha tenido anteriormente un
trabajo, y muchos de ellos lo tienen todavía; sin embargo, el 58.57% no ha
trabajado antes. En este grupo se ubican los jóvenes entre 10 y 15 años de
edad, razón por la cual están bajo el dominio de sus padres o familiares y no
tienen necesidad de trabajar.
TABLA 7
Pertenecen o simpatizan con algún grupo de maras
Respuestas Fr %
SI
NO
NO CONTESTA
2
60
8
2.86
85.71
11.43
TOTAL 70 100
FUENTE: Cuestionario administrado a los jóvenes capacitados en la institución
Como era de esperar, los jóvenes no aceptan fácilmente pertenecer o
simpatizar con algún grupo de maras. Del grupo investigado únicamente el
2.86% expresó categóricamente su pertenencia a estos grupos, mientras el
85.71% manifestó no tener ninguna afinidad con dichos grupos, el 11.43% se
negó a contestar la pregunta; sin embargo, por sus características pueden
inferirse que si pertenecen a cualquiera de los grupos de maras, pero les es
difícil aceptar esta situación.
TABLA 8
Presencia de grupos de maras en el lugar de residencia de las personas.
Respuestas Fr %
SI
NO
LO DESCONOCE
28
26
16
40.00
37.14
22.86
TOTAL 70 100
FUENTE: Cuestionario administrado a los jóvenes capacitados en la institución
El 40% de los encuestados reconocen que donde ellos residen, existe
presencia de grupos de maras, pero no por ello pertenecen a estos grupos; el
37.14% manifestó que no hay grupos de maras, mientras el 22.86% expresó
desconocer la existencia o presencia de éstos grupos en sus lugares d e
residencia, lo cual es preocupante desconocer esta situación, dado la influencia
que ejercen sobre la juventud y su capacidad de persuasión y convencimiento
de nuevos miembros, quienes en algún momento pueden realizar acciones
violentas o delictivas, perjudiciales para la población, en especial para la
juventud.
TABLA 9
Participación de estos jóvenes en acciones de los grupos de maras.
Respuestas Fr %
SI
NO
6
64
8.57
91.43
TOTAL 70 100
FUENTE: Cuestionario administrado a los jóvenes capacitados en la institución
Como se puede observar en la tabla, es mínima la acepción de los jóvenes en
cuanto a su partición directa en acciones delictivas que identifican a los grupos
de maras. Es evidente el temor que tienen en aceptar está situación, pues en
cuadro # 7 únicamente dos jóvenes dijeron pertenecer a los grupos de maras;
sin embargo, en acciones de estos grupos han participado cuatro jóvenes más.
Pero, el 91.43% manifestó que no ha participado en ninguna acción de estos
grupos, lo cual no es del todo confiable.
TABLA 10
Han realizado acciones ilícitas alguna vez
Respuestas Fr %
SI
NO
9
61
12.86
87.14
TOTAL 70 100
FUENTE: Cuestionario administrado a los jóvenes capacitados en la institución
Puede observarse la tendencia de los jóvenes a no aceptar su pertenencia a los
grupos de maras así como las acciones que identifican a estos grupos, ya que
sólo el 12.86% ha reconocido haber cometido acciones de tipo ilícitas , es decir
contrarios a la ley. Sin embargo la gran mayoría o sea el 87.14% nie ga
categóricamente todo vínculo con las acciones de estos grupos.
TABLA 11
Ha sido detenido alguna vez por realizar estas acciones.
Respuestas Fr %
SI
NO
9
61
12.86
87.14
TOTAL 70 100
FUENTE: Cuestionario administrado a los jóvenes capacitados en l a institución
El 12.86% de los jóvenes afirmaron haber participado en acciones ilícitas
propias de los grupos de maras, por lo cual en su momento fueron detenidos
por la Policía Nacional Civil. Como se puede observar , es el mismo porcentaje
del cuadro #10 que aceptaron haber realizado acciones ilícitas, esto indica que
son los mismos jóvenes. Mientras el 87.14% negó toda relación con este tipo de
acciones.
TABLA 12
Tipo de acción realizada
Tipo de acción Fr %
Robo
Lesiones
5
4
55.55
44.45
TOTAL 9 100
FUENTE: Cuestionario administrado a los jóvenes capacitados en la institución
Tal como se mostró en la tabla #11, sólo nueve personas han reconocido tener
afinidad con los grupos de maras, y han manifestado que fueron detenidos por
la autoridad, aceptando además que el tipo de delito más frecuente fue el robo
con un 55.55% seguido del delito de lesiones con el 44.45% no se reporta la
extorsión, que es el delito que últimamente se está cometiendo por las maras.
TABLA 13
Como llegaron a este centro de formación y orientación
Respuestas Fr %
Por vivir en el lugar
Remitido por Tribunal
Por medio de amigos
Reclutado por el centro
12
5
13
40
17.14
7.14
18.57
57.15
TOTAL 70 100
FUENTE: Cuestionario administrado a los jóvenes capacitados en la inst itución
La razón de ser de este centro, es ayudar a las personas integrantes de grupos
de maras, acción que realizan directamente a través de su personal; de ahí que
el 57.15% expresó que ha sido reclutado por el centro; significa que la
institución está logrando sus objetivos incorporando cada vez más a los jóvenes
para prevenir su incorporación a cualquier grupo de maras; el 17.14% manifestó
que reside en el lugar y vale la pena hacer uso de sus servicios, el 7.14% son
jóvenes remitidos por un tribunal; estos jóvenes gozan de libertad asistida; es
decir, que evalúan su comportamiento y le dan un voto de confianza, para que
salgan del centro en el día a prepararse, un 18.57% han llegado al centro
porque los han invitado sus amigos que están capacitándose o bien han
concluido su capacitación.
Aún cuando el centro fue creado en 1986 para ayudar a los sectores de bajos
recursos o en condiciones de extrema pobreza, en la actualidad otorga becas a
los de escasos recursos, pero también cobra una cuota por los cursos que
imparten.
TABLA 14
Costo de sus estudios en el Centro de Formación
Costo Mensual Fr %
$4.00
$5.00
$10.00
$15.00
$20.00
Becados
2
20
3
9
4
32
2.86
28.57
4.29
12.86
5.71
45.71
TOTAL 70 100
FUENTE: Cuestionario administrado a los jóvenes capacitados en la institución
Los datos del cuadro son evidentes por sí solos, ya que permite ver que los
jóvenes pagan un valor por su capacitación, los precios oscilan entre $ 4 y
$20.00 dólares, en algunos casos reciben media beca o beca completa esto
depende de la condición económica que tengan los aspirantes a aprender un
oficio. Existe un porcentaje bastante considerable (45.7%) que son becados por
los tribunales correspondientes, o por otras instituciones.
TABLA 15
Persona o institución que paga los estudios de estos jóvenes
Respuestas Fr %
Padre y Madre
Tribunal
Becados por la Iglesia
Becados por otras instituciones
36
2
7
25
51.43
2.86
10.00
35.71
TOTAL 70 100
FUENTE: Cuestionario administrado a los jóvenes capacitados en la institución
Los datos muestran que el 51.43% cancelan una cuota, y se la pagan sus
padres, el 2.86% es el tribunal quien le paga la cuota; becados directamente por
la iglesia el 10.00% y becados por otras instituciones representa el 35.71%.
Es de hacer notar que los jóvenes tienen quién les financié sus estudios, lo que
demuestra el fácil acceso a los cursos de capacitación por parte del centro. Es
más, los jóvenes con más dificultad para acceder a los cursos, son becados
incluso por la Iglesia (10%).
TABLA 16
Cursos y/o capacitaciones que imparte la institución
Cursos que se ofrecen Fr %
Dibujo y pintura
Corte y Confección
Electricidad domiciliar
Reparación y Mantenimiento de computadora
Computación
12
5
20
20
13
17.14
7.14
28.57
28.57
18.57
TOTAL 70 100
FUENTE: Cuestionario administrado a los jóvenes capacitados en la institución
La tabla nos muestra que entre los oficios de mayor predilección por estos
jóvenes están: electricidad domiciliar, y reparación y mantenimiento de
computadoras (20% cada uno) lo cual está acorde a los avances tecnológicos
de la sociedad, y que por tanto pueden accesar más rápidamente a un empleo
dependiente, o en último caso instalar su propio taller.
TABLA 17
Tiempo de estar capacitándose en la institución
Tiempo de estar preparándose Fr %
1- 3 meses
3 – 6 meses
6 – 12 meses
Mas de 12 meses
55
13
1
1
78.57
18.57
1.43
1.43
TOTAL 70 100
FUENTE: Cuestionario administrado a los jóvenes capacitados en la institución
El centro ofrece cursos que van de los 3 a los 6 meses, aún cuando algunos
pasan hasta un año por diversos motivos; como todo proceso de aprendizaje,
este tipo de capacitación debe ser evaluado; por las instancias
correspondientes, lo cual no fue nuestro objetivo.
TABLA 18
Valoración que hacen los jóvenes de su proceso de aprendizaje
Respuestas Fr %
Excelente
Muy bueno
Bueno
Regular
32
29
6
3
45.71
41.43
8.57
4.29
TOTAL 70 100
FUENTE: Cuestionario administrado a los jóvenes capacitados en la institución
La valoración que los usuarios del servicio hace de la institución está entre muy
bueno y excelente con un 87%, lo que muestra la importancia y grado de
aceptación que se tiene de dichas capacitaciones.
TABLA 19
La enseñanza está de acuerdo a las habilidades a estas personas .
Respuestas Fr %
SI
NO
57
13
81.43
18.57
TOTAL 70 100
FUENTE: Cuestionario administrado a los jóvenes capacitados en la institución
Para el 81.43% de estos jóvenes, la enseñanza responde a sus habilidades, sin
embargo, para el 18.57% no responde a sus habilidades, lo cual p uede deberse
a la falta de orientación pertinente.
Por otra parte, uno de los principales problemas que enfrentan los salvadoreños
una vez capacitados es la falta de un puesto de trabajo, lo cual es más difícil
para los jóvenes con pertenencia a los grupos de maras.
Este centro no sólo capacita a los jóvenes, si no que además
administrativamente cuenta con una Bolsa de Trabajo, que está a cargo de una
persona; sin embargo, no todos los jóvenes conocen de esta instancia creada
para ayudarlos a obtener un trabajo.
TABLA 20
Conocim iento de estas personas sobre la Bolsa de Trabajo
Respuestas Fr %
SI
NO
25
45
35.71
64.29
TOTAL 70 100
FUENTE: Cuestionario administrado a los jóvenes capacitados en la institución
En base a esta información el 35.71% de las personas tienen conocimientos de
la Bolsa de Trabajo que tienen esta institución, lo que ofrece a ellos alguna
oportunidad para conseguir un empleo una vez capacitados; pero la gran
mayoría 64.29% de las personas expresaron no saber de su existencia.
Al indagar en el centro acerca de la efectividad de la Bolsa de Trabajo, se
conoció que hacen una labor de dos formas; a la primera le llaman de
Orientación, en la que brindan información de empresas donde pueden ser
colocados y la forma cómo deben de presentarse en estos lugares; del año
2004 al 2006 ha orientado un total de 350 jóvenes, pero no saben cuantos
realmente han sido colocados en un puesto de trabajo; la segunda forma, es la
que definen como Inducción; es una acción más directa con los jóvenes, y a
decir verdad del centro, bajo esta forma directa, han logrado insertar 80 jóvenes
capacitados del año 2005 al 2006.
Creemos que esta Bolsa de Trabajo, debe fortalecerse en cuanto a recursos
humanos para que cumpla el objetivo de una manera más eficaz, ya que la
inserción laboral es la estrategia más viable y humana ante el flagelo de la
delincuencia juvenil.
TABLA 21
Lo que esperan las personas una vez concluyan su capacitación
Respuestas Fr %
Que lo empleen
Instalar su propio taller
No sabe
30
15
25
42.86
21.43
35.71
TOTAL 70 100
FUENTE: Cuestionario administrado a los jóvenes capacitados en la institución
Es claro que toda persona que se esté preparando en un oficio o en un área
técnica, espera que una vez concluida su formación logre coloca rse en un
empleo. Tal como lo muestra la presente tabla, el 42.86% de los jóvenes
esperan insertarse en un puesto de trabajo, o en su caso el 21.43% desea
instalar su propio taller, desde luego que esto hace necesario otro elemento
como es el apoyo o financiamiento para el establecimiento del mismo. Es aquí
donde hace falta una política real de integración del sector juvenil por parte del
Estado, que atienda y promueva estas opciones de inserción como mecanismo
para prevenir el flagelo de la violencia juvenil, o en su defecto evitar que los
jóvenes vean en las pandillas la “solución a sus problemas”.
TABLA 22
Está buscando trabajo
Respuestas Fr %
SI
NO
NO QUIERE TRABAJAR
16
41
13
22.86
58.57
18.57
TOTAL 70 100
FUENTE: Cuestionario administrado a los jóvenes capacitados en la institución
El 22.86% de estas personas expresaron que si han buscado trabajo, y que a la
fecha no han logrado obtenerlo, el 58.57% fue categórico al decir que no han
buscado un trabajo, y lo peor aún es que el 18.57% no quiere trabajar, esto es
comprensible pues puede ser las personas que están en el rango de edades
entre 10 y 15 años y que no necesitan un trabajo de manera urgente, ya que no
tienen compromisos de hogar e hijos a quien sostener.
TABLA 23
Respuestas recibidas por estas personas al buscar un empleo.-
Respuestas Fr %
De aceptación
De rechazo total
De indiferencia
No han buscado
6
6
4
54
8.57
8.57
5.71
77.15
TOTAL 70 100.00
FUENTE: Cuestionario administrado a los jóvenes capacitados en la institución
En la presente tabla se ratifica que 16 personas (22.86%) han hecho gestiones
para obtener trabajo, y de ellos sólo 6 fueron objeto de buena aceptación por
parte de quien les atendió, pero sin lograr el objetivo propuesto (empleo), los
restantes 10 solicitantes fueron objeto de rechazo o indiferencia por su presunta
participación en maras.
El mayor porcentaje (77.15%) no han buscado trabajo o no quieren trabajar.
TABLA 24
Valoración que hacen estas personas con relación al rechazo recibido.
Respuestas Fr %
Estigma con estos grupos
Falta de confianza
Para evitar problemas
70 100.00
TOTAL 70 100
FUENTE: Cuestionario administrado a los jóvenes capacitados en la institución
Los jóvenes creen que el rechazo obedece al Estigma que la sociedad tiene con
estos grupos, es decir, el 100% expresó que el rechazo obedece al estigma que
se ha creado hacia ellos, o sea que no creen que están rehabilitados y
preparados para enfrentar nuevas situaciones, sobre todo la de convivir con
otros jóvenes y de sentirse personas útiles.
Por otra parte, vale la pena recordar los discursos del gobierno y de sus
instituciones, que por largos años han venido expresando el deseo del Estado
por hacer de estos jóvenes entes útiles a su familia, a la productividad y a la
sociedad; para ello han hablado del desarrollo de programas y proyectos
orientados a capacitarlos, a rehabilitarlos y a reinsertarlos en un puesto de
trabajo; reconocen que es la única forma de evitar su pertenencia a esto s
grupos y su accionar violento como único med io para lograr sus objetivos no
satisfechos.
TABLA 25
Cree usted que el Estado está interesado en reinsertarlo laboralmente
Respuestas Fr %
SI
NO
11
59
15.71
84.29
TOTAL 70 100
FUENTE: Cuestionario administrado a los jóvenes capacitados en la institución
La percepción que tienen los jóvenes de los programas que impulsa el Estado
para insertarlos en un puesto de trabajo es más que evidente, ya que el 84.29%
manifestó que el Estado no muestra ningún interés para inse rtarlos en un
puesto de trabajo.
Este equipo investigador considera que el Estado Salvadoreño intenta
únicamente adaptar y ajustar al joven a un proceso de reducir sus actitudes
violentas, para impedir o eliminar conflictos a través del ajuste y la adaptación;
sin embargo esto no es suficiente, debe trabajarse en políticas estatales de
inclusión juvenil y sobre todo en donde se tome en cuenta la realidad de este
grupo social vulnerado.
TABLA 26
Conocimientos de estas personas de un programa o proyecto orientado a capacitarlos y
a reinsertarlos laboralmente.
Respuestas Fr %
Si
No
20
50
28.57
71.43
TOTAL 70 100
FUENTE: Cuestionario administrado a los jóvenes capacitados en la institución
De estas personas, únicamente el 28.57% manifestó tener conocimientos de la
existencia de otros esfuerzos como el que realiza la iglesia de Mejicanos,
mientras que el 71.43% fue claro en decir; que no saben que existan otros
centros como éste.
El grupo investigador considera que son poquísimos los centros que capacitan
a jóvenes; esto hace evidente el descuido por parte del Estado de la atención a
este grupo vulnerado en sus derechos más elementales, como es la de recibir
educación o capacitación técnica para enfrentarse a la etapa productiva de todo
ser humano.
TABLA 27
Ha sido beneficiado con algún programa o proyecto anteriormente
Respuestas Fr %
Si
No
20
50
28.57
71.43
TOTAL 70 100
FUENTE: Cuestionario administrado a los jóvenes capacitados en la institución
Puede verse que el mismo porcentaje que manifestó conocer de otros
programas de esta índole, es el mismo que hoy está expresando haber sido
beneficiado 28.57%, supuestamente refiriéndose al centro de formación
investigado; mientras que un 71.43% expresó que no han recibido ningún
beneficio hasta ahora por parte del Estado o de otra institución; muy a pesar de
que el Estado ha manifestado por los medios de comunicación , interés por la
reinserción de los jóvenes pertenecientes a grupos de pandillas especialmente.
2.3. Formulación Teórico – Metodológico de lo Investigado
Este trabajo de investigación tiene como propósito evaluar los factores
que inciden positiva o negativamente en jóvenes que están vinculados o no a
las maras y que son capacitados en el Centro de Formación y Orientación,
Padre “Rafael Palacios” de la Iglesia de M ejicanos: al final del trabajo de campo
y vaciada la información este equipo de investigación puede afirmar la relación
que existe entre los factores sociales, la capacitación y los esfuerzos
institucionales y estatales por insertar a los jóvenes en un pue sto de trabajo.
El trabajo de investigación lo realizaron estudiantes egresados de la
Carrera Licenciatura en Trabajo Social, con el objetivo de poner en práctica los
conocimientos teóricos metodológicos en el abordaje de un problema que
afecta a los sectores sociales, como es la violencia expresada por los jóvenes
simpatizantes o no con los grupos de maras, o con pertenencia.
Los grupos de maras tienen una gran facilidad por enrolar a otros
jóvenes a su grupo, la manera de hacerlo es haciéndolo sentir bien, valorar
algunas habilidades y sobre todo darles el apoyo que en sus hogares no se les
brinda.
Este Centro de Formación y Orientación de la Iglesia Católica de
Mejicanos, orienta sus esfuerzos a capacitar a los jóvenes en un oficio para que
puedan insertarse en el mercado laboral. En función del trabajo , este equipo de
investigadores identifica algunas conclusiones o inferencias:
Al inicio del trabajo se hacía mención a la categoría de jóvenes y que hoy
se identifica del género masculino 61 y del género femenino 9; lo que
permite señalar que los patrones de la cultura machista en este grupo
están presentes, ya que participan mas personas del género masculino.
Además, podemos decir que estas personas se concentraron en las
edades de 10 a 20 años (51) y entre 21 y más de 30 años (19). Este
equipo de investigadores definió que se iban a investigar personas entre
12 y 30 años; sin embargo, las personas mayores de 30 son las que
acompañan a la mayoría de jóvenes, quienes son hijos o nietos.
Es interesante hacer notar que en este grupo de personas investigadas 58
de ellas se ubican en la categoría de solteros, es decir, sin mayores
compromisos familiares, que bien puede ser un elemento negativo o
positivo para aprender un oficio o insertarse laboralmente.
Con mucha frecuencia se señala que los jóvenes integrantes de grupos de
maras pertenecen a familias desintegradas, que en este caso 38
(54.29%) integran una familia tradicional, el resto viven con la madre, el
padre y otros parientes.
Se señala además, que los jóvenes que integran estos grupos forman
familias de pocos ingresos o de extrema pobreza; en este caso el 100%
dispone de una vivienda, ya sea propia, alquilada, con promesa de venta
o dada en comodato; por lo que puede decirse que el factor económico en
estos jóvenes es aceptable.
En un principio el equipo de investigadores dedujo que muchos de estos
jóvenes pertenecían o simpatizaban con los grupos de maras, sin
embargo, en forma categórica únicamente dos reconocieron pertenecer a
estos grupos, pero al contrastar esta información con la tabla No. 9 y 10;
se concluyó que 6 jóvenes reconocen haber participado en acciones de
estos grupos, y que 9 han realizado acciones ilícitas entre ellas robo y
lesiones y por ello han sido capturados.
En cuanto a la capacitación que reciben en el centro , las personas tienen
que cancelar un valor económico para ser atendido , valor que va desde
$4.00 hasta $20.00. Del grupo objeto de investigación 32 de ellas estudian
becados: (7 son becados por la iglesia y 25 por otras instituciones) y el
resto si paga su cuota.
La capacitación técnica o el aprendizaje de un oficio se concentró en tres
cursos: Electricidad Residencial, Reparación y Mantenimiento de
computadoras y Computación, 53 personas reciben estos cursos; 17
reciben Dibujo y Pintura y Corte y Confección.
El curso de Corte y confección tiene una duración de 6 meses, Dibujo y
Pintura 10 meses, Reparación y Mantenimiento de computa doras, tiene
un promedio entre 3 y 9 meses, Electricidad entre 5 y 6 meses y manejo
de Programas de Computación, 6 meses.
Aún cuando no es el objetivo de este trabajo evaluar el aprendizaje que
han tenido las personas en estos cursos, a partir de la valoración que ellos
hacen puede decirse que 67 calificaron su aprendizaje entre bueno y
excelente, únicamente 3, la calificaron de regular; esta información fue
verificada por medio de los profesores, quienes reafirmaron que todos
ellos muestran interés por aprender un oficio o capacitarse técnicamente,
señalando que es el área de computación lo que más les atrae, por otra
parte, 57 personas (81.43%) expresaron que los cursos que reciben están
de acuerdo a sus habilidades.
Una limitante encontrada en esta institución es el desconocimiento que la
mayoría de entrevistados tienen sobre la Bolsa de Trabajo , ya que
únicamente 25 (35.71%) manifestaron conocer de esta iniciativa del
centro.
Al indagar acerca de las acciones realizadas por el Centro para colocar a estas
personas en un puesto de trabajo, se conoció que las acciones las realizan de
dos formas: una a través de la orientación e inducción, que consiste en indicarle
dónde debe presentarse y la forma en que debe hacerlo; en este proceso el
Centro ha orientado a 350 personas; sin embargo, no sabe cuantos de ellos
fueron colocados. La otra forma es la colocación directa, que consiste en
atender solicitudes de los posibles empleadores, en este esfuerzo , este centro
colocó 80 personas entre enero y agosto de 2006.
Puede decirse que esta institución está logrando su objetivo de capacitar e
insertar a los jóvenes en un puesto de trabajo.
Además del total de la muestra que se investigó únicamente 25 de ellos
no saben que hará una vez finalice su capacitación; lo anterior es un
grave problema, ya que la colocación no depende del centro, si no de la
persona.
Relacionado con lo anterior puede decirse que únicamente 16 personas
de las investigadas, han buscado colocarse en un puesto de trabajo; 6
recibieron respuestas de aceptación, 6 fueron de rechazo total, 4 fueron
recibidos con indiferencia; es más, las 16 personas fueron categóricos al
decir que las respuestas obtenidas estaban influenciadas por el estigma
que la sociedad tiene con los grupos de mara.
Además en la parte referida a los alcances se señaló los esfuerzos que
hace el Estado por preparar a estos jóvenes que integran grupos de mara
e insertarlos laboralmente, puesto que considera que es la forma de evitar
las acciones violentas o la incorporación de más jóvenes a estos grupos;
sin embargo, de acuerdo a la información obtenida en este trabajo ,
únicamente 11 personas creen que el Estado tiene interés por hacer de
ellos personas útiles, ya sea a su familia o a la sociedad, 20 personas
manifestaron haber sido beneficiado con este tipo de programas
desarrollados por el Estado.
2.4. Desarrollo y Definición Teórica
Partiendo de la lectura y el análisis realizado para conocer, comprender y
explicar el fenómeno de la violencia expresada por los jóvenes , este equipo de
investigadores egresados de la Carrera de Trabajo Social, considera que los
modelos o enfoques acerca de la violencia, tienen que ver con la historia de la
violencia misma y con la historicidad de la naturaleza humana ; esto implica que
la violencia; se concreta en cada realidad social y momento , de acuerdo a las
circunstancias en las cuales se desarrolla la persona; para el caso salvadoreño
esta conducta se materializa en una sociedad dividida en dos clases sociales
opuestas entre si; ésto de acuerdo al materialismo histórico , es decir, la
burguesía frente al proletariado, situación que ha conducido a una violencia
estructural por parte de ese grupo, apoyado por el Estado, ejercida contra una
mayoría sin condiciones de vida digna. Esta idea se apoya en los hallazgos
encontrados en el grupo de personas entrevistadas del Centro de Formación y
Orientación Padre “Rafael Palacios” de la Iglesia Católica de Mejicanos; donde
se reafirma que las secuelas del pasado conflicto armado (de los años (1980 –
1991) continúan reproduciéndose generacionalmente, apoyado en el
aprendizaje social directo de la violencia (modelaje) y de las condiciones
sociales que desatan la posibilidad de realizarlas, tales como el poder real o
simbólico, acceso a las armas, exclusión y marginación social, entre otras
condiciones.
En este mismo sentido la percepción de los jóvenes investigados acerca
de los programas de capacitación que impulsa el Estado para capacitarlos y
reinsertarlos, es negativa ver (Tabla 25); ya que el 84.29% opina que el Estado
no está interesado en tal propósito, esto explica el comportamiento antisocial
expresado por los jóvenes, induciéndolos a acciones violentas y actos ilícitos.
En este escenario social, la función del profesional de Trabajo Social, es
importante, ya que parte de su quehacer profesional y operativo , es habilitar a
los miembros del grupo hacia un proceso de sensibilización y concientización
personal, capaz de establecer las relaciones sociales a un nivel óptimo de
funcionamiento, lo que conduce paulatinamente a mejorar la interacción social
de cada miembro del grupo.
En este orden, la cultura de la violencia, es un aspecto de suma
importancia para la comprensión y abordaje del fenómeno, ya que ésta se
arraiga en la cultura de la pobreza, la exclusión y la marginación social y
económica, aunado a profundas injusticias sociales como el a utoritarismo, la
represión, la censura y muerte. En este sentido se constató que las personas en
proceso de capacitación en la institución , cancelan una cuota que oscila entre
los $ 4 y $ 20 dólares, lo que hace difícil a juicio del grupo de investigadores
una capacitación masiva de personas (ver cuadro 14 y 15), aún cuando
pareciera que la cantidad no es mucha; sin embargo, para muchos
salvadoreños es difícil obtener esta cantidad, ya que amplios sectores sociales
no cuentan con un trabajo estable que les asegure ingresos mensuales.
De igual manera la aplicación por parte del Estado de penas drásticas en
el orden jurídico, como el Plan Mano Dura y Super Mano Dura, difícilmente
serán parte de una solución real a la problemática de la violencia y las maras;
en opinión del equipo, cualquier plan o iniciativa (privada o estatal) que no parta
de las necesidades reales y concretas de los jóvenes, estará condenada al
fracaso; y sobre todo, alejada de una salida ética y humana, que respete los
derechos de este sector vulnerado, como es la juventud, que según la
Constitución de la República son la base de la sociedad, y por tanto, son el
futuro inmediato, siendo responsabilidad del Estado prepararlos para hacer de
ellos personas productivas, útiles a su familia y a la sociedad.
La labor del profesional en Trabajo Social a nivel institucional, debe ser la
de orientar, habilitar y animar a las personas para pensar, sentir y actuar con
claridad y responsabilidad; además deberá traba jarse en el descubrimiento de
las potencialidades de cada uno de sus miembros, situación que no se
desarrolla en el Centro donde se llevó a cabo la investigación y que a juicio del
equipo de investigación es determinante para el éxito de esta iniciativa de la
Iglesia Católica o de cualquier otra institución, que trabaja en la formación
técnica de las personas para facilitarles su incorporación laboral.
Kisnerman, Natalio. (Citado por Emma Ruvilia Muñoz Elías) , sostiene
que: “el método de Trabajo Social de grupo , es un instrumento esencial de
motivación y de educación social de los ciudadanos, tendientes a restablecer
las relaciones sociales a nivel óptimo y orientar a los integrantes del grupo para
reflexionar sistemáticamente sobre redes de relaciones sociales satisfactorias,
que eliminen las acciones que promuevan violencia familiar y social a distintos
niveles”20. Se constató que en este Centro de Formación y Orientación se
realiza un pequeño esfuerzo por trabajar algunos aspectos educativos de orden
cívico – democrático, es decir, de respeto, de colaboración, de solidaridad y de
ayuda mutua. Sin embargo, no existe un proceso educativo que se oriente al
desarrollo de la personalidad con actitudes positivas y en un ambiente óptimo
de desarrollo humano.
De igual manera el equipo investigador considera que la labor del
profesional en Trabajo Social, debe ir encaminada al establecimiento de
relaciones de empatía, respetando en todo momento las necesidades por las
cuales el individuo se asocia y sobre todo estimulando las acciones creadoras y
20 Muñoz Elías; Emma Ruvilia: Metodología de Trabajo Social II: Universidad Rafael Landivar:
Guatemala. 1995. Pag. 16
de bienestar social, tan necesaria en este estado de crisis social que se vive
actualmente en El Salvador.
Finalmente, este equipo de investigadores considera que en tanto los
Centros de Capacitación como el investigado y otros, no form en parte de un
proyecto de nación, difícilmente las personas participarán de tales iniciativas, ya
que éstas no parten de su propia realidad y sobre todo no hay seguimiento a la
labor de capacitación realizada, ni mucho menos esfuerzos suficientes por
insertarlos en un puesto de trabajo.
CAPITULO III: MARCO OPERATIVO
3.1. Descripción de los sujetos investigados
Este trabajo de investigación se realizó en el Centro de Formación y
Orientación Padre “Rafael Palacios” de la Iglesia Católica del municipio de
Mejicanos, partiendo de que en el se atendían jóvenes con pertenencia o
simpatizantes de los grupos de maras; y que además realiza ban acciones
violentas; tanto que el trabajo de investigación inicial llevaba como título “Impacto
de los Programas realizados por la Iglesia Ca tólica en la disminución de la
violencia juvenil en el municipio de Mejicanos, San Salvador, junio – diciembre
2005.”
Sin embargo, luego de recolectar la información que el trabajo requería se
verificó la pertenencia de estos jóvenes a los grupos de maras y puede inferirse
que por apariencia física y conductual no sobrepasan el número de nueve, dos
aceptando pertenecer a un grupo de maras y siete reconociendo el desarrollo de
acciones de violencia callejera con el agravante de haber sido detenido s por la
Policía Nacional Civil.
Puede ser que como fruto de estar recibiendo capacitación o tecnificación
en un oficio, así como estar recibiendo orientación de tipo religiosa y de
comportamiento, puede percibirse que ya estos jóvenes, no participan
directamente en las acciones de estos grupos y más bien se encuentran en un
proceso de reintegración familiar, social, educativa y con miras a la búsqueda de
insertarse en un puesto de trabajo.
Además, un buen número de ellos demostraron interés por instalar su
propio taller o una pequeña empresa, dependiendo del oficio o tecnificación
recibida, vale destacar que en esta labor de capacitación y orientación que
desarrolla el centro, ha logrado involucrar a miembros del grupo familiar, que en
algunos casos son la madre, el padre o hermanos mayores. Por ello podemos
conceptualizar que el grupo inicial que se tuvo como objeto de investigación con
pertenencia o vinculación a las maras, actualmente es un grupo más bien de
integración familiar de amigos o compañeros, que tienen un único propósito, el
cual es, desvincularse por completo de la mara y convertirse en personas útiles ,
tanto a su grupo familiar como a la sociedad; y si logran colocarse en un puesto de
trabajo, poner su propio negocio o taller, se convertirán en un grupo
económicamente productivo que vendrá a generar ingresos propios y a lo mejor,
más fuentes de trabajo.
Puede afirmarse entonces que aún cuando el centro no está realizando a
cabalidad un proceso de inserción laboral si ha logrado que estos jóvenes vean
desde otra óptica los problemas que enfrentaban y busquen la forma de ser útiles
o bien servir de ejemplo para sus antiguos compañeros.
3.2. Procedimiento para la recopilación de datos.
El trabajo de investigación se realizó en el Centro de Formac ión y
Orientación Padre “Rafael Palacios”, de la Iglesia Católica de Mejicanos; en la
aproximación inicial que se hizo, se conoció que el centro atiende jóvenes de
ambos géneros, que buscan aprender un oficio o tecnificarse. La Iglesia Católica
de Mejicanos busca evitar el desarrollo de acciones violen tas, o bien prevenir que
se incorporen a los grupos de mara, que en la actualidad son un fenómeno social.
Con ese conocimiento previo se reorientó el trabajo de investigación,
titulado: “Factores que influyen en la inserción laboral de los jóvenes vinculados a
la violencia o a las maras, que han sido capacitados en el Centro de Formación y
Orientación Padre “Rafael Palacios”, de la Iglesia Católica de Mejicanos; año
2006”.
Para definir la muestra se consideró trabajar con los jóvenes de ambos
géneros que su edad fuera entre 12 y 30 años, los cuales sumaros 240 personas.
Para determinar la muestra se empleó la fórmula estadística para poblaciones
finitas, la cual se denota de la siguiente manera:
n= Q.P.Z)1N(
N.Q.P.Z2
2
Mediante la aplicación matemática se determinó una muestra de 91
personas de ambos géneros; sin embargo, en el Centro de Formación se logró
administrar 51 cuestionarios a igual número de personas; para completar la
muestra se buscaron domiciliarmente, pero las direcciones proporcionadas en el
Centro, no eran correctas y únicamente se obtuvieron 19 direcciones correctas.
Finalmente se tuvo una muestra de 70 personas de ambos géneros entre 10 y 30
años.
Para recolectar la información se diseño un cuestionario de 27 preguntas; 4
de identificación general y 23 de datos específicos, con relación a los objetivos
propuestos. El cuestionario fue llenado directamente por el equipo de
investigadores con la información proporcionada por las personas; esto para evitar
que proporcionaran información que no fuera útil a este trabajo.
Además, se diseñó una guía de entrevista para llevarla a cabo con el
personal que labora en el Centro; también se diseñó una guía de observación ,
para observar los aspectos de apariencia física y de comportamiento de los
jóvenes.
Luego de administrar el instrumento se tiene una muestra de 61 personas
del género masculino y 9 del género femenino, y en las edades de: entre 10 y 15
años, 24; entre 16 y 20 años 27; entre 21 y 25 años 8; entre 26 y 30 años 2; y con
más de 30 años 9. Este último grupo corresponde a personas adultas que
acompañan a los más jóvenes, y que también están aprendiendo un oficio.
De este grupo 58 personas poseen estado familiar de solteros, mientras
que 7 son casados, 2 acompañados, 1 viudos y 2 divorciados. De los jóvenes
únicamente 2 aceptan pertenecer a los grupos de mara, sin embargo, 9 reconocen
que han realizado acciones ilícitas y además han sido detenidos por la Policía
Nacional Civil; 5 de ellos detenidos por robo y 4 por lesiones.
Por otra parte únicamente 16 personas, han buscado trabajo, 41 no lo han
hecho y 13 no quieren trabajar; 6 personas expresaron haber sido rechazados; sin
embargo, las 70 personas expresaron de alguna manera que la sociedad tiene con
ellos un estigma social, lo que dificulta su inserción laboral.
Completada la muestra, se diseñó un cuadro de frecuencia simple, para
vaciar la información; la tabulación se realizó por conteo simple de respuestas
proporcionadas a los atributos evaluados; con ello, se llenó la columna de las
frecuencias; la columna del porcentaje se obtuvo aplicando la fórmula de la Regla
de Tres Simple.
3.3. Desarrollo de la Prueba Piloto
El equipo de investigadores y el asesor, consideraron que era necesario
realizar una prueba piloto, antes de proceder a administrar el cuestionario; la
prueba piloto se aplicó a 15 personas de ambos géneros; luego de revisar la
información obtenida y dada la dificultad en algunos casos para dar respuestas, el
cuestionario fue corregido, en el sentido de mejorar la redacción, suprimir y
agregar preguntas.
3.4. Técnicas para el análisis de datos
Un método que ayuda al análisis de este tipo de información , es proceder a
realizar interpretación de los valores porcentuales de cada atributo evaluado; y
luego completar el proceso con un análisis cualitativo del porqué se obtuvieron
esos resultados. En ese proceso se realiza una descripción de los resultados,
utilizando la información trabajada en el avance uno; en lo con cerniente a los
antecedentes del problema, alcances y limitaciones y el recuento de las categorías
y conceptos.
Finalizado el proceso de interpretación y análisis, se procedió a la
construcción del Marco Empírico, que contiene los hallazgos en el trabajo de
campo; utilizando para ello la información de los cuadros en el orden que el equipo
de investigadores consideró que eran útiles.
Una parte muy importante en este trabajo , es el esfuerzo del equipo para
construir un cuerpo teórico del fenómeno investigado, utilizando para ello teoría y
método propio del Trabajo Social, lo que le proporciona a los resultados finales un
carácter objetivo del problema investigado.
RECURSOS HUMANOS
- 3 alumnos egresados de Trabajo Social
- 1 Asesor
- 3 miembros actuando como Jurados Evaluadores
RECURSOS LOGÍSTICOS:
- Transporte
- Compra de libros
- Fotocopias
- Utilería de escritorio
- Digitación
- Reproducción de instrumentos
- Anillados
Cronograma de actividades
TIEMPO
ACTIVIDADES DE INVESTIGACIÓN
DOCUMENTAL
2 0 0 6 2 0 0 7
OCTUBRE NOVIEMBRE DICIEMBRE ENERO FEBRERO MARZO
1 2 3 4 1 2 3 4 1 2 3 4 1 2 3 4 1 2 3 4 1 2 3 4
1. BÚSQUEDA DE INFORMACIÓN BIBLIOGRÁFICA
UCA
2. BÚSQUEDA DE INFORMACIÓN BIBLIOGRÁFICA
UES
3. BÚSQUEDA DE INFORMACIÓN BIBLIOGRÁFICA
CORTE SUPREMA DE JUSTICIA.
4. BÚSQUEDA DE INFORMACIÓN BIBLIOGRÁFICA
UNIVERSIDAD PEDAGÓGICA.
5. LECTURA Y FICHADO DE MATERIALES
6. DISCUSIÓN DE CATEGORÍAS Y CONCEPTOS.
7. DISCUSIÓN DEL USO DE LOS MATERIALES.
8. ELABORACIÓN DEL AVANCE No. 1
INVESTIGACIÓN DE CAMPO
9. VISITAS PREVIAS AL CENTRO DE FORMACIÓN
Y ORIENTACIÓN PADRE “RAFAEL PALACIOS”
10. ELABORACIÓN DE INSTRUMENTOS
11. ADMINISTRACIÓN DEL INSTRUMENTO
12. PROCESAMIENTO DE LA INFORMACIÓN
13. INTERPRETACIÓN Y ANÁLISIS DE DATOS
14. ELABORACIÓN DEL MARCO EMPÍRICO
15. ELABORACIÓN DEL AVANCE No. 2
16. ELABORACIÓN DEL AVANCE No. 3
Marco Conceptual
4. Índice prelim inar
Este trabajo de investigación se orientó al conocim iento teórico de los grupos
de maras y sus acciones de violencia; así como al conocimiento de las acciones
que viene desarrollando el Estado y otras instituciones orientadas a brindar
capacitaciones técnicas y en un oficio a éstos jóvenes, para insultarlos en un
puesto de trabajo.
Es ese orden, en el marco conceptual se hace referencia al origen de las
maras, que queda señalado para la década de los años 50, 60 y que son un
problema causados por múltiples factores, se señala que surgieron en los Estados
Unidos y fueron trasladadas a El Salvador de una manera forzada, ya que fueron
deportados. El problema de las maras se vuelve internacional y hasta cierto punto
tienen un carácter cultural.
En El Salvador se reconoce la mara 18 y la MS, las dos realizan acc iones entre
ellas para control de territorio y control del mercado de la droga. Estos grupos son
señalados por el gobierno como los promotores de la violencia, del tráfico de
drogas, del crimen organizado y de las extorsiones.
Este grupo plantea que los jóvenes integrantes de maras son el resultado de la
poca comunicación con sus padres, de la marginación y de la exclusión, que se da
tanto en el hogar como en la sociedad en general. Además, son el resultado del
proceso de modificación de la estructura familiar, es decir, ausencia de un
miembro progenitor, ya sea por migración a Estados Unidos, muerte o abandono
del grupo. Como bien señala FEPADE en su estudio , que como resultado de esta
exclusión es fácil identificar cuatro grupos, estos son:
Los jóvenes empobrecidos, marginados y excluidos
Los grupos de maras
Los deportados por actividades delictivas, los desmovilizados de ambos
bandos y
Los niños de la calle.
En esta misma parte del marco conceptual se hace referencia a las respuestas
del Estado para enfrentar el fenómeno de las maras, acciones que se identifican
con la capacitación y la búsqueda de la inserción familiar, laboral y social; estas
acciones se identifica con las que realiza el INSAFORP así como las que realiza la
Iglesia Católica a través del Centro “Juvenil Don Bosco” y del Centro de Formación
y Orientación Padre “Rafael Palacios” de la Iglesia Católica de Mejicanos.
Además, contiene el planteamiento del problema que hace referencia a la
estructura agro – exportadora, que para mantenerse incorporó la exclusión de los
sectores rurales; además los efectos del conflicto armado que tuvo lugar durante
12 años con efectos negativos para la familia rural principalmente, que al no
encontrar formas de reproducción en su lugar de origen emigraron hacía los
Estados Unidos, que como resultado de su poca preparación y educación ,
rápidamente fueron incorporados a estos grupos de maras, que al cometer un
ilícito son deportados hacía el lugar de origen en este caso El Salvador.
En este apartado se ha trabajado la parte referida a la violencia juvenil, vista
como una expresión del joven para hacerse notar y reclamar espacios de
atención, tanto familiares como sociales; y es que la violencia como queda
señalada en este trabajo es el resultado de múltiples problemas, siendo el
principal los de orden estructural, puesto que los excluye y los margina.
Sin embargo, algunos esfuerzos se vienen realizando por parte del Estado y
sus instituciones, así como de otros organismos; entre ellos el INSAFORP y la
Iglesia Católica, específicamente la de Mejicanos, que es el lugar donde se ha
realizado el presente estudio.
Las principales limitaciones identificadas, es que los esfuerzos que se realizan,
tiene como punto de partida una visión política, con claras tendencias a señalar a
los jóvenes como causantes de muchos problemas, principalmente de la violencia
social y de algunas acciones ilícitas.
El plan mano dura y el plan mano amiga , aún cuando consideren que es
necesario capacitar a los jóvenes en un oficio para inse rtarlos en un puesto de
trabajo, en esencia no logra concretarse la inserción laboral, puesto que estos
jóvenes se enfrentan a un problema de rechazo social , que es el resultado del
Estigma Social que la sociedad tiene para con estos grupos.
Marco Teórico
En este apartado, se resume el esfuerzo de este grupo de investigadores por
elaborar estas categorías de orden teórico , que sirva como base para otros
trabajos orientados a esta misma situación.
La percepción de los jóvenes acerca de estos programas qu e impulsa el
Estado es negativa, un 84.29% opina de esta manera, dejando en claro un
comportamiento antisocial de éstos jóvenes y generando por ello acciones
violentas y actos delictivos.
Además, el Centro les da cierta orientación cívico - democrática, lo cual de
alguna manera ha modificado el comportamiento de estos jóvenes, tanto así, que
ya no participan directamente en las acciones de violencia , por el contrario, se
encuentran en un proceso de acercamiento familiar, social y educativo, y con
miras, a la búsqueda de lograr insertarse a un puesto de trabajo.
Por eso, puede afirmarse que aún cuando el Centro no está realizando a
cabalidad el proceso de inserción laboral, si ha logrado que éstos jóvenes vean
desde otra óptica los problemas que enfrenta y busquen la forma de ser útiles , así
como servir de ejemplos a otros jóvenes que aún pertenecen a estos grupos.
Especial abordaje teórico tiene en este apartado la función social del
profesional en Trabajo Social, caracterizado por su sensibilización y
concientización, puesta al servicio de estos grupos. El profesional en Trabajo
Social es capaz de lograr establecer relaciones sociales a un nivel óptimo de
funcionamiento, lo cual conduce necesariamente a mejorar la interacción social de
cada miembro de un grupo.
En este trabajo de orden teórico, especial atención tiene la cultura de la
violencia y por tanto requiere todo un proceso de comprensión y abordaje del
fenómeno, ya que la violencia está enmarcada en la cultura de la pobreza, la
exclusión, la marginación social y económica; aunado además, a las injusticias
sociales, al autoritarismo, la represión, la censura y la muerte.
Se deja señalado que la labor del profesional en Trabajo Social, debe ir
encaminada al establecimiento de relaciones de empatía, respetando en todo
momento las necesidades personales por las cuales el individuo se asocia y sobre
todo estimulando las acciones creadoras y de bienestar social, tan necesarias en
el Estado de crisis social que vive El Salvador actualmente.
Marco Operativo
Los hallazgos de la investigación de campo realizada en el Centro de
Formación y Orientación Padre “Rafael Palacios” de la Iglesia Católica de
Mejicanos, permitió conocer que atienden personas que buscan ser capacitadas
técnicamente o en un oficio como alternativa para insertarse en un puesto de
trabajo o bien, reinsertarse en su grupo familiar. Es de aclarar que el número de
menores de edad no han buscado trabajo precisamente por ser menores.
Cuando se inició el trabajo de la investigación se partió de que todos los que se
encontraban recibiendo capacitación, pertenecían a las maras o simpatizaban con
ellos; sin embargo del total de la muestra que en un principio se asumió que tenían
pertenencia o simpatizaban con los grupos de maras, una vez realiza do este
trabajo únicamente 2 aceptan pertenecer a este grupo, sin embargo 9 en total han
sido detenidos por la policía bajo cargos de acciones ilícitas.
Además, a pesar de que el objetivo básico del Centro es capacitarlo e
insertarlos en un puesto de trabajo, no todas las personas han buscado la forma
de hacerlo, los y las que lo han hecho, expresaron haber sido rechazados/as,
basado en el Estigma Social que se tienen con ellos; además, la instancia creada
en el Centro para hacer esta labor, no le da mayor seguimiento, e incluso no tiene
la divulgación suficiente, para que éstos jóvenes la reconozcan como medio a
través del cual ellos pueden ser colocados en un puesto de trabajo.
En principio las personas de esta investigación, eran jóvenes con pertenencia o
simpatizantes a grupos de maras, y que además realizaban acciones de violencia;
pero una vez realizado el trabajo de investigación se verifico la pertenencia de
éstas personas a grupos de maras y puede inferirse por apariencia física y
conductual con pertenencia a grupos de maras, no sobre pasa a un grupo de 9.
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Labores año 2005”
7. Martín Baró, Ignacio “Acción e ideología, Psicología Social desde
Centroamérica”, UCA-editores, El Salvador. 1997.
8. “Maras y Pandillas en Centroamérica, “UCA -publicaciones, Volumen I – II y
III. UCA-Editores Managua, Nicaragua, 2004.
9. Muñoz Elías, Emma Ruvilia, Metdología de Trabajo Social II
Editorial Universidad Rafael Landivar, Guatemala, 1995.
10. Niñez, Adolescencia y Justicia . “Revista del programa intersectorial hacia un
Sistema de Justicia Juvenil”.El Salvador, enero -abril, 2000
11. Ramos, Carlos Guillermo,PNUD, “Violencia en una Sociedad en Transición”.
Ensayos PNUD El Salvador 2000.
12. Rojas Soriano, Raúl. “Guía para Realizar Investigaciones Sociales “. Editorial
Plaza y Valdez, México D. F 1987-2000
13. Rosales, Carlos “VIII Coloquio, Violencia y Salud “. Universidad de El Salvador,
Facultad de Medicina. Del 23 al 27 de noviembre 1998.
14. Santacruz Giralt, Maria y Portillo Peña, Nelson. “Agresores y Agredidos:
Factores de Riesgo de la Violencia Juvenil en las Escuelas” UCA -
editores, El Salvador 1999.
15. Santos de Escobar, Aída Luz y otros. Ensayos sobre Justicia Juvenil El
Salvador 2004.
UNIVERSIDAD PEDAGÓGICA DE EL SALVADOR
FACULTAD DE EDUCACIÓN
ESCUELA DE SALUD Y MEDIO AMBIENTE
LICENCIATURA EN TRABAJO SOCIAL
PRUEBA PILOTO
CUESTIONARIO
El objetivo de este instrumento, es recolectar información de estos jóvenes para
inferir si el centro está logrando los objetivos a través de los programas de
formación y orientación; es decir, si los jóvenes logran capacitarse, insertarse o
reinsertarse laboralmente y sobre todo si se persiguen en ello que ha habido una
disminución de sus acciones violentas.
DATOS DE IDENTIFICACIÓN:
1. Género ___________
2. Edad: ____________
3. Nivel Educativo: ________________________________________________
4. Estado Familiar: ________________________________________________
DATOS ESPECÍFICOS
1. Tenencia de vivienda
Propia ______ alquilada _____ promesa de venta _____ comodato _______
2. Quienes integran su grupo familiar?
Padre - madre – hermanos _______
Padre – hermanos ________
Madre – hermanos __________
3. Ha trabajado anteriormente? SI ____ NO ____
4. Ha buscado trabajo actualmente? SI ____ NO ____
5. Cual ha sido la respuesta recibida? De rechazo: _______________
De Aceptación: ________________ De indiferencia: ____________
6. Si fue de rechazo la respuesta , a que cree usted que se deba?
Estigma con estos grupos: __________ Falta de confianza: __________
Evitar problemas: _________________
7. Pertenece o simpatiza con algún grupo de mara?
SI ____ NO ____ No contesta _________
8. En su lugar de residencia hay presencia de estos grupos?
SI ____ NO ____ Lo desconoce ________
9. Ha participado alguna vez en acciones de estos grupos? SI ____NO _____
10. Ha sido detenido alguna vez por realizar acciones con estos grupos?
SI ____ NO ____
11. Ha realizado algunas vez acciones ilícitas? SI ____ NO ____
12. Qué tipo de acciones: __________________________________________
____________________________________________________________
13. Ha sido privado de libertad por algunas acciones realizadas? SI ____ NO __
14. Cómo llegó a este centro:
Por vivir en el lugar _______
Remitido por tribunal competente _______
Por amigos (as) _______
Reclutado por el centro _______
Para aprender un oficio _______
15. Cuánto paga por su asistencia al Centro? ____________________________
16. Quién le paga la asistencia al Centro?
Becado ________ Tribunal ___________ Otros _________
Padres ________ Iglesia ___________
17. En qué área se está capacitando?
Reparación y mantenimiento de computadoras ______________
Computación __________ Floristería __________
Corte y confección __________ Cosmetología __________
Modistería __________ Elaboración de velas __________
panadería __________ Electricidad __________
Piñatería __________ Dibujo y Pintura __________
18. Cuánto tiempo tiene de estar en los cursos?
1 a 3 meses ____________ 3 a 6 meses ________
6 a 1 año _____________ más de 1 año _______
19. Cómo valora su proceso de aprendizaje?
Excelente ____ Muy bueno ____ Bueno _____ Regular _____ deficiente _____
20. Considera usted que la enseñanza está de acuerdo a sus habilidades y
destrezas? SI ____ NO ____ No sabe _________
21. Sabe usted si el Centro se encarga de colocar a los jóvenes una vez han
finalizado su curso: SI ____ NO ____ No sabe _________
22. Considera usted que es efectiva la bolsa de trabajo del Centro para buscarles
colocación?
SI ____ NO ____ No la conoce _________
23. Que le gustaría hacer una vez finalizado su curso?
Que lo empleen _______ pone su propio taller ______ otros ______
24. Cree usted que el Estado está interesado actualmente en insertar lab oralmente
a los jóvenes con pertenencia o no a los grupos de maras?
SI ____ NO ____
25. Conoce usted algún programa de este tipo aparte del Centro?
SI ____ NO ____
26. Ha sido usted beneficiado con un programa de este tipo?
SI ____ NO ____
27. Qué tipo de trabajo le consiguieron? _______________________________
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FACULTAD DE EDUCACIÓN
ESCUELA DE SALUD Y MEDIO AMBIENTE
LICENCIATURA EN TRABAJO SOCIAL
GUÍA DE ENTREVISTA
Objetivo: Mediante este instrumento se buscará obtener información de las
personas encargadas del Centro de Formación y Orientación “Padre Rafael
Palacios” de Mejicanos, así como de los responsables de la formación y
orientación.
Aspectos a abordar:
¿Desde cuando trabaja en el centro?______________________ _________
¿Cuál es su rol dentro del centro? _________________________________
¿En qué programas percibe que hay mayor participación de los jóvenes?
_____________________________________________________________
¿A su juicio, el joven se siente interesado en los programas? SI ___ NO ____
A veces ______
¿Cree usted que a partir de la capacitación recibida el joven se incorpora
laboralmente? _________________________________________________
¿Considera usted que persiste en la sociedad el estigma con los jóvene s en
cuanto a la mara? SI ___ NO ____
¿Considera usted que el joven ha sido realmente rehabilitado? SI ___ NO __
¿Todos los jóvenes que inician los programas, realmente los finalizan? SI ___
NO ____ ¿Por qué? ________________
Si no los finaliza, ¿Cuál cree usted que es la causa o la razón?
____________________________________________________________
El Centro le da seguimiento a los jóvenes preparados para insertarlos
laboralmente? SI ___ NO ____
Si no le da seguimiento, cuál cree que es la razón: ____________________
_____________________________________________________________
Cuál es la efectividad de la bolsa laboral del centro:____________________
_____________________________________________________________
A cuántos jóvenes logra colocar el centro en el año: ___________________
_____________________________________________________________
En qué áreas es más fácil colocar a los jóvenes capacitados: ____________
_____________________________________________________________
Además de colocarlos laboralmente, que otro tipo de ayuda les proporcionan
en el Centro: _________________________________________________
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LICENCIATURA EN TRABAJO SOCIAL
GUÍA DE OBSERVACIÓN
Dentro del proceso de investigación científica la observación es necesaria y
elemental, ya que mediante ella se establece una relación directa entre el
investigador y el sujeto investigado.
El objetivo de esta observación es captar algunos aspectos físicos y acciones
conductuales de estos jóvenes, los cuales servirán para el análisis final de los
resultados.
Aspectos a observar:
Aspecto Físico:
Vestuario
Cabello
Tatuaje
Aditamentos
Vocabulario
Forma de caminar
FACHADA PRINCIPAL DEL CENTRO DE FORMACION Y ORIENTACION
PADRE “RAFAEL PALACIOS” DE LA IGLESIA CATOLICA DE MEJICANOS.
UNIDAD DE BOLSA DE TRABAJO DEL CENTRO DE FORMACION Y
ORIENTACION PADRE “RAFAEL PALACIOS”.
COMPUTACION .
MANTENIMIENTO Y REPARACION DE COMPUTADORAS .
DIBUJO Y PINTURA.
PANADERÍA