excélsior de valor...2018/08/26  · a quella clase que impartía huberto batis se lla -maba taller...

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ÓPERA EN EL MERCADO PÁSELE, MARCHANTA Como parte del programa Ópera en el Mercado, verduleros, carniceros y polleros se convirtieron en intérpretes del bel canto durante las funciones improvisadas que se ofrecieron ayer en los mercados Argentina y Tacubaya Becerra, de la delegación Miguel Hidalgo. El proyecto impulsado por el INBA con la colaboración de la Secretaría de Desarrollo Económico (SEDECO), se lleva a cabo desde mayo y finalizará en noviembre. En la imagen, el tenor Dante Alcalá, canta convertido en taquero. Fotos: Elizabeth Velázquez HISTORIA DE VALOR En el antiguo Palacio de los Condes de San Mateo de Valparaíso se conserva un rico acervo documental sobre la historia financiera, social y cultural de México. [email protected] @Expresiones_Exc EXCELSIOR DOMINGO 26 DE AGOSTO DE 2018 POR LUIS CARLOS SÁNCHEZ [email protected] T ambor, el percherón mestizo que sirvió de modelo a Manuel Tolsá para esculpir su célebre Caballito, pertenecía a la Hacienda Jaral del Berrio. Sus dueños, los Marque- ses de Jaral del Berrio y Condes de San Mateo de Valparaíso habían recibido el título del pro- pio rey, Carlos III, quien los designaba “para que se hicieran cargo de gran parte de la economía de la Nueva España”. Ellos construirían después un célebre palacio que sigue en pie hasta ahora. El Palacio de los Condes de San Mateo del Valparaíso, ubicado entre las calles de Isabel La Católica y Venustiano Carranza, en el Cen- tro Histórico de la Ciudad de México, se convir- tió con los años, en 1883, en la oficina principal del recién fundado Banco Nacional Mexicano. Los archivos y documentación de aquella ilustre familia virreinal, incluido el de su ilustre Tam- bor, así como el extenso acervo sobre la historia bancaria y financiera de los últimos 135 años en México, así como de otros acontecimientos so- ciales, culturales y económicos de la última cen- turia, se conservan en ese mismo edificio como uno de los tesoros mejor guardados de la ciudad. En lo que fuera la antigua bóveda del Banco Nacional de México, con su impenetrable y lu- josa compuerta Panzer, la misma de los tanques alemanes, se resguarda el Archivo Histórico Ci- tibanamex, depósito de historia con más de 90 mil unidades documentales. “Un espacio académico de esta índole con la apertura, la visión y el compromiso que tenemos, no se tiene en otro lado: por el trabajo que se le ha dedicado, por lo que tenemos como acervo y por la propia historia con nuestro pasado de más de 130 años”, dice el coordinador Fernando Co- rona, quien hoy ofrece una conferencia sobre el acervo en la feria Zona Maco Foto y Salón. En un recorrido por el sitio, Corona explica a Excélsior que el archivo de Citibanamex se fue conformando a través del tiempo con diferentes colecciones, pero no fue sino hasta 1991 cuando se configuró su creación y un año después abre al público. Con apoyo de El Colegio de México y el Archi- vo General de la Nación (AGN), el acervo se or- ganizó para conformar un corpus al servicio de la investigación y la academia. De sus más de 90 mil unidades documentales, unas 80 mil corres- ponden a fotografías pero sus colecciones tam- bién incluyen objetos tan reconocibles como las tarjetas de crédito, los cajeros automáticos o la parafernalia bancaria que, a modo de promocio- nales, ha acompañado a los mexicanos. “Tenemos la colección fotográfica de la his- toria bancaria más importante en México, una gran colección de libros de economía, finanzas, historia, revistas, documentos desde la época vi- rreinal hasta los que tienen que ver con el banco, actas constitutivas, minutas, memorias, estatu- tos, correspondencias, documentos como las actas de consejo de administración”, dice Coro- na. En el sitio se conserva, además, una extensa colección numismática mexicana: “Hay mate- riales del Imperio de Iturbide, los primeros bille- tes de 1822, 23, todo ello nos ayuda a conformar una historia particularmente rica”. La colección, sin embargo, no se limita a la historia bancaria o financiera. A través del archi- vo es posible asomarse a la historia de la pro- pia nación. Además del archivo de los mismos Condes de San Mateo de Valparaíso, hay ahí do- cumentos virreinales y otros más curiosos como una peculiar carta con la que se le reclama al banco una deuda en el extranjero luego de que los documentos que la amparan se han hundido junto con el Titanic. El Banco Nacional de México fue fundado el 2 de junio de 1884 como resultado de la fusión en- tre el Banco Nacional Mexicano y el Banco Mer- cantil Mexicano; se trata del primer gran banco privado del país con funciones de banco de Es- tado y banco comercial. Toda esa historia está contenida en el archivo. Hay, además, “mucho material de historia de México, de la vida social, fenómenos que han pasado en paralelo a la historia bancaria, los Juegos Olímpicos, movimientos estudiantiles, los temblores, materiales hemerográficos pro- ducidos por el mismo banco como la primera revista Club Deportivo Banamex (1930); la acti- vidad corporativa: videos de inauguraciones, de la creación de alguna innovación como la tarjeta de crédito o el auto banco. Tenemos acciones y bonos y objetos desde chequeras, tarjetas y ma- teriales corporativos creados por el banco como alcancías, ábacos, juegos para niños. Es una his- toria amplia”, dice Corona. Conocido por pocos, el Archivo Histórico Ci- tibanamex está abierto a todo el público. Si bien no se trata de un archivo de estantería abierta, sus materiales pueden ser consultados en su misma sede: el antiguo Palacio de los Con- des de San Mateo de Valaparaíso. ARCHIVO CITIBANAMEX Fernando Corona, a la entrada de la bóveda donde se conserva el archivo; las compuertas, elaboradas por la empresa alemana Panzer, resguardaron durante varios años los valores del banco. Publicaciones de diversa índole, así como imágenes históricas forman parte del acervo. Una colección de alcancías, desde principios del siglo XX, también han sido conservadas. DÓNDE Y CUÁNDO 3 La conferencia Legado y Patrimonio del Archivo Histórico Citibanamex será ofrecida hoy como parte de Zona Maco Salón, a las 13:00 horas, en la Sala de conferencias del Hall D del Centro Citibanamex, que se localiza en Av. del Con- scripto 311, Lomas de Sotelo, Hipódromo de las Américas. Además de la historia financiera, se pueden conocer objetos promocionales bancarios. El compositor también fue escritor y director. NOTIMEX expresiones@gimm.com.mx El acervo documental so- noro de Carlos Chávez, que incluye las grabaciones his- tóricas del Cabrillo Music Festival, bajo el periodo de dirección del compositor y director de orquesta, ingre- sará a la Fonoteca Nacional el próximo 29 de agosto. La casa de los sonidos de México recibirá para su res- guardo, preservación y difu- sión el acervo documental sonoro de Chávez, mate- rial considerado un tesoro y que abre la oportunidad de escuchar y replantear las in- terpretaciones de este genio del siglo XX, informó el re- positorio sonoro. La importancia y gran- deza del Cabrillo Music Fes- tival se debe a que, en cada temporada, se conforma- ba la orquesta con músicos destacados y seleccionados minuciosamente que serían dirigidos por el mexicano. Chávez (1899-1978) fue un destacado compositor, maestro, escritor, creador de instituciones y director de orquesta. Director mu- sical del referido festival de 1970 a 1973, elaboró todos los programas y dirigió la orquesta del encuentro. Destacan grabaciones de María Teresa Rodríguez como solista, interpretando el Segundo concierto para piano, de Johannes Brahms, y el Concierto para clavecín, de Manuel de Falla. Los estrenos de obras del mismo Chávez son sig- nificativos, sobre todo la cantata Prometheus, cuya correcta inclusión en el ca- tálogo del maestro podrá hacerse a partir de este re- gistro. La entrega del ar- chivo sonoro se realizará durante una sesión de escu- cha pensada especialmente para conocer y disfrutar de la riqueza del archivo. Tonatiuh de la Sierra, poseedor legal de los docu- mentos sonoros, que le fue- ron obsequiados por Carlos Chávez, hará la entrega. FONOTECA Chávez nutre acervo Foto: AP Foto: Archivo Excélsior

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Page 1: Excélsior DE VALOR...2018/08/26  · A quella clase que impartía Huberto Batis se lla -maba Taller de Revista Literaria. Estaba inclui-da en el plan de estudios de Lengua y Literatura

ÓPERA EN EL MERCADO

PÁSELE, MARCHANTAComo parte del programa Ópera en el Mercado, verduleros, carniceros y polleros se convirtieron en intérpretes del bel canto durante las funciones improvisadas que se ofrecieron ayer en los mercados Argentina y Tacubaya Becerra, de la delegación Miguel Hidalgo. El proyecto impulsado por el INBA con la colaboración de la Secretaría de Desarrollo Económico (SEDECO), se lleva a cabo desde mayo y finalizará en noviembre. En la imagen, el tenor Dante Alcalá, canta convertido en taquero.

Fotos: Elizabeth Velázquez

HISTORIA DE VALOR

En el antiguo Palacio de los Condes de San Mateo de Valparaíso se conserva un rico acervo documental sobre la historia financiera, social y cultural de México.

[email protected] @Expresiones_Exc

EXCELSIORdOmIngO 26 dE agOStO dE 2018

POR LUIS CARLOS SÁ[email protected]

T ambor, el percherón mestizo que sirvió de modelo a Manuel Tolsá para esculpir su célebre Caballito, pertenecía a la Hacienda Jaral del Berrio. Sus dueños, los Marque-

ses de Jaral del Berrio y Condes de San Mateo de Valparaíso habían recibido el título del pro-pio rey, Carlos III, quien los designaba “para que se hicieran cargo de gran parte de la economía de la Nueva España”. Ellos construirían después un célebre palacio que sigue en pie hasta ahora.

El Palacio de los Condes de San Mateo del Valparaíso, ubicado entre las calles de Isabel La Católica y Venustiano Carranza, en el Cen-tro Histórico de la Ciudad de México, se convir-tió con los años, en 1883, en la oficina principal del recién fundado Banco Nacional Mexicano. Los archivos y documentación de aquella ilustre familia virreinal, incluido el de su ilustre Tam-bor, así como el extenso acervo sobre la historia bancaria y financiera de los últimos 135 años en México, así como de otros acontecimientos so-ciales, culturales y económicos de la última cen-turia, se conservan en ese mismo edificio como uno de los tesoros mejor guardados de la ciudad.

En lo que fuera la antigua bóveda del Banco Nacional de México, con su impenetrable y lu-josa compuerta Panzer, la misma de los tanques alemanes, se resguarda el Archivo Histórico Ci-tibanamex, depósito de historia con más de 90 mil unidades documentales.

“Un espacio académico de esta índole con la apertura, la visión y el compromiso que tenemos, no se tiene en otro lado: por el trabajo que se le ha dedicado, por lo que tenemos como acervo y por la propia historia con nuestro pasado de más

de 130 años”, dice el coordinador Fernando Co-rona, quien hoy ofrece una conferencia sobre el acervo en la feria Zona Maco Foto y Salón.

En un recorrido por el sitio, Corona explica a Excélsior que el archivo de Citibanamex se fue conformando a través del tiempo con diferentes colecciones, pero no fue sino hasta 1991 cuando se configuró su creación y un año después abre al público.

Con apoyo de El Colegio de México y el Archi-vo General de la Nación (AGN), el acervo se or-ganizó para conformar un corpus al servicio de la investigación y la academia. De sus más de 90 mil unidades documentales, unas 80 mil corres-ponden a fotografías pero sus colecciones tam-bién incluyen objetos tan reconocibles como las tarjetas de crédito, los cajeros automáticos o la parafernalia bancaria que, a modo de promocio-nales, ha acompañado a los mexicanos.

“Tenemos la colección fotográfica de la his-toria bancaria más importante en México, una gran colección de libros de economía, finanzas, historia, revistas, documentos desde la época vi-rreinal hasta los que tienen que ver con el banco, actas constitutivas, minutas, memorias, estatu-tos, correspondencias, documentos como las actas de consejo de administración”, dice Coro-na. En el sitio se conserva, además, una extensa colección numismática mexicana: “Hay mate-riales del Imperio de Iturbide, los primeros bille-tes de 1822, 23, todo ello nos ayuda a conformar una historia particularmente rica”.

La colección, sin embargo, no se limita a la historia bancaria o financiera. A través del archi-vo es posible asomarse a la historia de la pro-pia nación. Además del archivo de los mismos Condes de San Mateo de Valparaíso, hay ahí do-cumentos virreinales y otros más curiosos como una peculiar carta con la que se le reclama al banco una deuda en el extranjero luego de que los documentos que la amparan se han hundido junto con el Titanic.

El Banco Nacional de México fue fundado el 2 de junio de 1884 como resultado de la fusión en-tre el Banco Nacional Mexicano y el Banco Mer-cantil Mexicano; se trata del primer gran banco privado del país con funciones de banco de Es-tado y banco comercial.

Toda esa historia está contenida en el archivo. Hay, además, “mucho material de historia de

México, de la vida social, fenómenos que han pasado en paralelo a la historia bancaria, los Juegos Olímpicos, movimientos estudiantiles, los temblores, materiales hemerográficos pro-ducidos por el mismo banco como la primera revista Club Deportivo Banamex (1930); la acti-vidad corporativa: videos de inauguraciones, de la creación de alguna innovación como la tarjeta de crédito o el auto banco. Tenemos acciones y bonos y objetos desde chequeras, tarjetas y ma-teriales corporativos creados por el banco como alcancías, ábacos, juegos para niños. Es una his-toria amplia”, dice Corona.

Conocido por pocos, el Archivo Histórico Ci-tibanamex está abierto a todo el público.

Si bien no se trata de un archivo de estantería abierta, sus materiales pueden ser consultados en su misma sede: el antiguo Palacio de los Con-des de San Mateo de Valaparaíso.

ARCHIVO CITIBANAMEX

Fernando Corona, a la entrada de la bóveda donde se conserva el archivo; las compuertas, elaboradas por la empresa alemana Panzer, resguardaron durante varios años los valores del banco.

Publicaciones de diversa índole, así como imágenes históricas forman parte del acervo.

Una colección de alcancías, desde principios del siglo XX, también han sido conservadas.

DÓNDE Y CUÁNDO

3 La conferencia Legado y Patrimonio del Archivo Histórico Citibanamex será ofrecida hoy como parte de Zona Maco Salón, a las 13:00 horas, en la Sala de conferencias del Hall D del Centro Citibanamex, que se localiza en Av. del Con-scripto 311, Lomas de Sotelo, Hipódromo de las Américas.

Además de la historia financiera, se pueden conocer objetos promocionales bancarios.

El compositor también fue escritor y director.

[email protected]

El acervo documental so-noro de Carlos Chávez, que incluye las grabaciones his-tóricas del Cabrillo Music Festival, bajo el periodo de dirección del compositor y director de orquesta, ingre-sará a la Fonoteca Nacional el próximo 29 de agosto.

La casa de los sonidos de México recibirá para su res-guardo, preservación y difu-sión el acervo documental sonoro de Chávez, mate-rial considerado un tesoro y que abre la oportunidad de escuchar y replantear las in-terpretaciones de este genio del siglo XX, informó el re-positorio sonoro.

La importancia y gran-deza del Cabrillo Music Fes-tival se debe a que, en cada temporada, se conforma-ba la orquesta con músicos destacados y seleccionados minuciosamente que serían dirigidos por el mexicano.

Chávez (1899-1978) fue un destacado compositor, maestro, escritor, creador de instituciones y director de orquesta. Director mu-sical del referido festival de 1970 a 1973, elaboró todos los programas y dirigió la orquesta del encuentro.

Destacan grabaciones de María Teresa Rodríguez como solista, interpretando el Segundo concierto para piano, de Johannes Brahms, y el Concierto para clavecín, de Manuel de Falla.

Los estrenos de obras del mismo Chávez son sig-nificativos, sobre todo la cantata Prometheus, cuya correcta inclusión en el ca-tálogo del maestro podrá hacerse a partir de este re-gistro. La entrega del ar-chivo sonoro se realizará durante una sesión de escu-cha pensada especialmente para conocer y disfrutar de la riqueza del archivo.

Tonatiuh de la Sierra, poseedor legal de los docu-mentos sonoros, que le fue-ron obsequiados por Carlos Chávez, hará la entrega.

FONOTECA

Chávez nutre acervo

Foto: AP

Foto: Archivo Excélsior

Page 2: Excélsior DE VALOR...2018/08/26  · A quella clase que impartía Huberto Batis se lla -maba Taller de Revista Literaria. Estaba inclui-da en el plan de estudios de Lengua y Literatura

Aquella clase que impartía Huberto Batis se lla-maba Taller de Revista Literaria. Estaba inclui-da en el plan de estudios de Lengua y Literatura Hispánicas –carrera de la Facultad de Filosofía y Letras de la UNAM– como “materia optati-

va” de los últimos semestres. De hecho, yo la tomé dos años después de haber egresado, debido a la huelga estudiantil de 1999, que fue larga y costosa en términos académicos.

Uno de mis compañeros de aula era Hiroshi Takahashi –hoy director editorial del rotativo El Sol de México– y quien, espero, no me deje mentir en la siguiente anécdota.

En la última clase del taller citado, sólo una compañera tuvo los arrestos, entre todos los condiscípulos, de confron-tar a Huberto, ese ogro generoso que no toleraba las im-pertinencias de sus alumnos. La valiente estudiante (cuyo nombre es Cristina Gaytán y a la postre, dedicada a la po-lítica, llegando a ser legisladora federal por el PRD) pidió la palabra y le dijo a Huberto, no despojada de temor, que en ninguna parte del curso nos había enseñado a hacer revista alguna. Y era cierto, pero nadie estaba dispuesto a desdeñar los chismes “formativos” sobre las vacas sagradas de la li-teratura que Batis solía contar en cualquiera de sus clases.

Sintiéndose increpado, el profesor, que nunca se des-pegaba de su silla, se calló por un momento. Y ese silencio tensó el ambiente de inmediato. Yo no sabía si aplaudirle a Cristina su arrojo o pedirle al resto de mis compañeros que le diéramos una oportuna silbatina por “atreverse” a impor-tunar al maestro. Por supuesto, nos quedamos impávidos.

Tras escuchar a la compañera y luego de un breve resue-llo, Batis solamente expresó un desganado “¿Ah, sí?” y le pidió a la propia Cristina, ya engallada por fortuna, que fue-ra corriendo al salón de maestros por un gis y un borrador.

En lo que eso sucedía, Batis miraba fijamente a la ven-tana que da a las siempre conspicuas Islas de Ciudad Uni-versitaria. Ni se había inmutado. No se le notaba feliz, pero tampoco incómodo.

En fin, que Cristina volvió con el encargo y Batis se dis-puso a levantarse de su asiento. A pesar de que ya era un hombre mayor y era víctima de un padecimiento ocular, lo-gró ponerse al frente del pizarrón para borrar por completo las palabras que estaban escritas en él.

Terminado el procedimiento magisterial más clásico de todos, tomó un gis y escribió al centro del pizarrón la pala-bra Excélsior, a la que luego dibujó una cuadrícula que la enrejaba. Y entonces comenzó una cátedra que daba cuenta de la historia del periodismo contemporáneo de México, a partir de 1976, cuando se suscitó, orquestado por el gobier-no de Luis Echeverría, el llamado “golpe a Excélsior”, que sacó del timón del llamado Periódico de la Vida Nacional al célebre periodista mexicano Julio Scherer.

Después de escribir aquella palabra de nueve letras y encerrarla en un rectángulo de gis, Batis prosiguió su la-bor frente al pizarrón desplegando flechitas que, primero, conducían a dos grandes proyectos desprendidos de esa raíz llamada Excélsior. Por una parte, el proyecto Proceso, encabezado por el propio Scherer y que apostaba a partir de entonces por un periodismo semanal, que buscaba bu-cear más profundo en los temas nacionales. Por otra parte, el proyecto que fundó y dirigió Manuel Becerra Acosta, y al que llamó unomásuno y se trató de uno de los diarios más propositivos y frescos de la segunda mitad del siglo XX. Lue-go de mencionar esos dos pilares informativos (el semana-rio y el diario), brotaron los nombres de aquellos periodistas que trataron de refundar un oficio que debía lidiar con el lo-pezportillismo, esa cueva petrolera de Alí Babá que saqueó al país a pesar de que prometió defenderlo perrunamente.

De hecho, uno de esos nombres era el del propio Batis, que fungió como subdirector editorial de unomásuno en sus primeros años de circulación y después se quedó con la di-rección del célebre suplemento cultural Sábado, en el que el fundador –junto con Carlos Valdés– de la revista cultural Los cuadernos del viento en 1960 dio las mejores muestras de su ya famosa erotomanía.

Desde luego, yo iba registrando cada palabra y cada de-talle de aquel mapa de navegación que pintaba con gis el maestro Batis y mostraba con claridad la ruta del periodis-mo mexicano hasta entonces.

Luego, con el pasar de los años y por distintas circunstan-cias, tuve el privilegio de trabajar bajo el mando de algunos de esos periodistas que se han vuelto referencia moderna de un oficio que sigue dándome de comer.

Así que sí, una sola clase de Huberto Batis valió por todo el curso. Y quizá, al menos para mí, por prácticamen-te toda la carrera universitaria. Una sola clase de Huberto Batis, ese memorioso lenguaraz que nunca se sujetó a la corrección política y cuya actitud frente a sus alumnos (for-males e informales) era el perfecto antídoto en contra de la ignorancia, la altanería y el engreimiento de muchos. Y esa actitud que causaba temor, siempre lo he pensado, era a fi-nal de cuentas un sistema a través del cual el maestro Batis picaba la cresta a sus estudiantes para saber de lo que eran capaces. Las opciones eran dos: retirarse antes de saltar al ruedo de una redacción o crecerse al castigo y sobrevivir en dos profesiones (la literatura o el periodismo cultural) que dan muchas satisfacciones, pero la misma proporción de sinsabores.

Por supuesto, aquella clase de la que doy fe no fue un augurio ni un aviso astral de mi futuro laboral, pero lo cierto es que seis años después tuve la oportunidad de sumarme a la filas de un Excélsior rescatado y renovado para fortuna de los lectores mexicanos. Y aquí sigo, agradecido con la vida por haber sido alumno de Batis, que murió el miérco-les pasado a los 84 años. Aquí permanezco todavía, en la trinchera cultural de un periódico que se enfila a cumplir, en marzo próximo, 102 años de existencia.

Aquí sigo, y, sí, aún conservo aquella libreta y aquellos apuntes.

Cuarto de forros

VÍCTOR MANUEL [email protected]

POR LUIS C. SÁ[email protected]

“No es una funcio-naria de escritorio”, dice Carmen Beatriz López Portillo sobre Alejandra Frausto,

la “egresada” de la Facultad de Derecho de la UNAM que eligió la promoción cultural por sobre los juzgados. Auto-denominada como una per-sona “institucional” a la que no importan los colores par-tidistas, Frausto camina con muy pocos tropiezos hacia la oficina principal de la Secre-taría de Cultura, desde donde despachará a partir del 1º de diciembre como parte del go-bierno de Andrés Manuel Ló-pez Obrador.

Quienes la conocen coin-ciden que dos de los grandes valores de quien fuera cola-boradora cercana del exgo-bernador priista de Guerrero, Ángel Aguirre, son la lealtad y la capacidad de escuchar, cualidades que este año la lle-varán a cumplir 20 años en la administración pública y que, proyectados, son la con-sumación de dos fructíferas décadas que la iniciaron en la cultura desde abajo, como ayudante de la Dirección de Difusión Cultural de la Uni-versidad del Claustro de Sor Juana, que en el año de 1998, encabezaba su amiga, tam-bién abogada, Lucía Rafael.

“Lucía se fue a hacer una maestría a Francia, Alejan-dra trabajaba aquí con ella y se había desempeñado muy bien. Lucía me dijo: ‘Creo que Alejandra sería capaz de con-tinuar con este proyecto’, y yo acepté su recomendación”, recuerda López Portillo, rec-tora del Claustro. Ese lugar y las amistades que ahí forjó se convirtieron en el funda-mento de una carrera rápida y ascendente que ahora colo-carán a Frausto al frente de la principal institución adminis-tradora de la cultura.

El Claustro sería para Ale-jandra la posibilidad de entrar en contacto con todo lo que ahora es: ahí tuvo una apro-ximación más cercana con los textiles tradicionales que ahora le encanta vestir y que compra en la primera opor-tunidad; de poner en mar-cha proyectos que buscaban vincular la cultura con la co-munidad, idea que hoy pare-ce delinear su proyecto para la materia en todo el país; de sentirse parte de una élite de mujeres interesadas en la cul-tura con las que sigue reu-niéndose para comer, tomar una copa de vino o intercam-biar noticias; conocer a per-sonajes fundamentales para su ascenso político, como Ra-fael Tovar y de Teresa, pero sobre todo vincularse con

RETRATO HABLADO

:25EXCELSIORDOmIngO 26 DE agOStO DE 2018

López Obrador hasta llegar a convertirse en una integrante más de su gabinete.

En sólo dos años, de 1995 a 1997, Frausto se vinculó con lo que había estudiado al ocu-par la Subdirección de Aten-ción a Población Vulnerable de la Contraloría Interna de la PGR. En 1998, su perfil cam-bio cuando Lucía Rafael le dejó su puesto. Después de una serie de actividades aso-ciadas a la cultura con el ar-tista Ariel Guzik, regresaría al Claustro, donde se quedó hasta 2006. Fue por esos años cuando López Obrador apa-reció también, mientras era jefe de Gobierno de la Ciudad de México. López Portillo re-memora: “El licenciado Ló-pez Obrador inauguró nuestra primera sede en 2003, la de Regina, él vino e inauguró, hi-cimos un súper evento. Ale-jandra lo conoció y después participó en actividades con él al final de su gobierno, par-ticipó y después se sumó con él”.

GLAMUR CULTURALAlejandra Frausto sigue apa-reciendo glamorosa en algu-nas imágenes de archivo de la revista Quién. Su inclinación por las sociales es innegable: su boda con el cineasta Mi-chael Rowe se realizó a todo

lujo en Los Cabos, mientras se desempeñaba como di-rectora de Culturas Popula-res del Conaculta, durante la administración de Tovar y de Teresa. Ahí estuvieron, en las primeras filas, sus amigas Guadalupe Loaeza (“¡Todos los invitados acabamos bo-rrachos!”, escribiría la perio-dista en su cuenta de Twitter) y, por supuesto, la escritora Laura Esquivel, otra morenis-ta a quien Frausto ya ha co-locado como su subsecretaría de Diversidad Cultural.

A Ángel Aguirre, dice, no lo conocía, pero él fue quien le habló para ofrecerle la di-rección del Instituto Guerre-rense de la Cultura, quizás el cargo que más le manchó, sobre todo por su relación con los medios de comunica-ción. Severos, registraron que Frausto sigue sin aparecer en el Registro Nacional de Profe-sionistas, a pesar de que en su currículo registra que egresó de la UNAM; también afirma-ron que los proyectos que tan-to presumió, como la creación de orquestas infantiles y juve-niles, ya existían en el estado y que, incluso, alardeaba de ha-ber sido creadora del Circuito de Festivales de la Ciudad de México cuando coordinó esa iniciativa de 2004 a 2006.

Con todo, la lealtad y el

Gracias, HubertoUna sola clase de Batis valió por todo el curso, y quizá, por toda la universidad.

ALEJANDRA FRAUSTO

Dos décadas en el ramo le bastaron a la funcionaria para perfilarse hacia la principal dependencia cultural

Ilust

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Zep

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agradecimiento de Frausto son reconocidos. Ella misma lo demostró cuando organizó a su amiga Laura Esquivel una gran presentación de su nove-la El diario de Tita en el Museo Nacional de Culturas Popula-res, siendo la responsable de esa dirección, o cuando in-tentó prolongar su multicita-do proyecto Cine Sillita a nivel federal, después de impulsar-lo en el estado de Guerrero.

A Tovar y de Teresa tam-bién habría de serle fiel (cir-cula la versión de que éste habría sido quien le rentó un departamento en la ciudad a su regreso de Guerrero), dise-ñando el programa México en armonía, que se convirtió en estandarte del dos veces pre-sidente de Conaculta al inicio de su administración, aunque, al final la iniciativa terminaría por ser olvidada.

“Es una mujer leal, una mujer coherente, a mí me consta”, insiste su amiga Ló-pez Portillo.

“De verdad que es capaz de sacrificar un puesto si no coincide con lo que ella cree, con lo que siente, con lo que piensa, es una mujer coheren-te, capaz, leal, yo creo que tie-ne el carácter y la convicción y valora los valores, su cualidad más importante es la cohe-rencia y su lealtad”, concluye.

RÁPIDO ASCENSO

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26: EXPRESIONES dOmINgO 26 dE agOStO dE 2018 : EXCELSIOR

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EXCELSIOR : dOmIngO 26 dE agOStO dE 2018 EXPRESIOnES :27

2.Desde Musiquito del talón –que mereció el Premio Nacional de Cuento Joven Co-mala 2013–, el sonorense Alfonso López Corral (Navojoa, 1979) ha centrado su es-critura en espinosas microhistorias que hacen honor al caluroso ambiente de su

región. En su tercer libro, retrata con fluidez y fino humor una sociedad sórdida en la que siempre hay un retén o una enfer-medad que sortear. Estos seis cuentos exploran la fragilidad de un momento en la vida de sus personajes, una vida que está conformada de casualidades y atrapada en una lucha por la sobrevivencia. Si la vida es azar, la pluma de López Corral es sutileza. –Nahum Torres

1.La travesía que emprende Imanol Caneyada en 49 cruces blancas, cuyo tema toral es el incendio en la guardería ABC, el 5 de junio de 2009, no res-ponde a la inquietud periodística sino a la explo-ración íntima de personajes llevados al límite de sus posibilidades. Narrada en primera persona,

con José González como personaje central, la obra agobia de-bido a las atmósferas febriles y áridas donde acontece todo: la muerte, la corrupción, la cooptación y el tráfico de influencias. González vuelve al mundo de los ministerios públicos con el fiel propósito de desentrañar un nudo apretado por el dinero y las influencias. – mario alberTo medraNo

TÍTULO: Cien caballos en el mar

AUTOR: Alfonso López Corral

EDITORIAL: Paraíso Perdido, México, 2017; 105 pp.

TÍTULO: 49 cruces blancas

AUTOR: Imanol Caneyada

EDITORIAL: Planeta, México, 2018; 286 pp.

DOS PARA LLEVAR