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PROYECTO MINCYT-BIRF: ESTUDIOS DEL SECTOR AGROINDUSTRIA SERIE DOCUMENTOS DE TRABAJO N° 3 ESTADO DEL ARTE Y TENDENCIAS DE LA CIENCIA Y TECNOLOGÍA DEL PROCESAMIENTO DE ALIMENTOS

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Page 1: Estado del arte y tendencias de la ciencia y tecnología del

PROYECTO MINCYT-BIRF: ESTUDIOS DEL SECTOR AGROINDUSTRIA

SERIE DOCUMENTOS DE TRABAJO N° 3ESTADO DEL ARTE Y TENDENCIAS DE LA CIENCIA Y TECNOLOGÍA DEL

PROCESAMIENTO DE ALIMENTOS

Page 2: Estado del arte y tendencias de la ciencia y tecnología del

Pensel, Norma Ana Estado del arte y tendencias de la ciencia y tecnología del procesamiento de alimentos. - 1a ed. - Buenos Aires: Ministerio de Ciencia, Tecnología e Innovación Productiva, 2014. E-Book.

ISBN 978-987-1632-18-3

1. Ciencias. 2. Alimentos. I. Título CDD 664.028

Fecha de catalogación: 04/08/2014

Page 3: Estado del arte y tendencias de la ciencia y tecnología del

Consorcio:Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA)

Universidad Nacional del Litoral (UNL)Asociación Civil GRUPO REDES – Centro REDES

Fundación Banco Credicoop (FBC)

El contenido de la presente publicación es responsabilidad de sus autores y no representala posición u opinión del Ministerio de Ciencia, Tecnología e Innovación Productiva.

CIUDAD AUTÓNOMA DE BUENOS AIRES, OCTUBRE DE 2013.

PROYECTO MINCYT-BIRF: ESTUDIOS DEL SECTOR AGROINDUSTRIA

SERIE DOCUMENTOS DE TRABAJO N° 3ESTADO DEL ARTE Y TENDENCIAS DE LA CIENCIA Y TECNOLOGÍA DEL

PROCESAMIENTO DE ALIMENTOS Norma Pensel (Compilador)

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AUTORIDADES

■ Presidenta de la Nación

Dra. Cristina Fernández de Kirchner

■ Ministro de Ciencia, Tecnología e Innovación Productiva

Dr. Lino Barañao

■ Secretaria de Planeamiento y Políticas en Ciencia, Tecnología e Innovación Productiva

Dra. Ruth Ladenheim

■ Subsecretario de Estudios y Prospectiva

Lic. Jorge Robbio

■ Director Nacional de Información Científica

Lic. Gustavo Arber

■ Director Nacional de Estudios

Dr. Ing. Martín Villanueva

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PROYECTO MINCyT-BIRF: ESTUDIOS DEL SECTOR

AGROINDUSTRIA

El Proyecto fue desarrollado bajo el contrato de servicios de consultoría firmado entre

el Ministerio de Ciencia, Tecnología e Innovación Productiva de la Nación,

representado por el Lic. Jorge Robbio, Subsecretario de Estudios y Prospectiva y el

Consorcio representado por el Ing. Carlos Casamiquela, Presidente del INTA, el Dr.

Albor Cantard, Rector de laUNL, el Dr. Lucas Luchilo, Presidente del Grupo REDES y el

Lic. Darío Dofman, Director Ejecutivo de la FBC.

El Proyecto fue conducido por una Mesa de Coordinación integrada por los

representantes institucionales del Consorcio: Roberto Bocchetto (INTA) - Director del

Proyecto; Matías Ruiz (UNL); Fernando Porta (Grupo REDES) y Gustavo Marino (FBC) –

Administrador del Proyecto. La compusieron además los coordinadores de las tres

actividades del Proyecto: Actividad 1: Ana María Ruiz (INTA) (agosto 2011–marzo

2012) y Javier Vitale (INTA) (abril 2012–setiembre 2013); Actividad 2: Graciela Ghezan

(INTA); Actividad 3: Eduardo Matozo (UNL). Por su parte, integraron el equipo técnico

central como Especialistas Seniors, Javier Medina Vásquez (Consultor Actividad 1);

Fernando Porta (Actividad 2) Marcelo Grabois (UNL) - Actividad 3; y Emanuel

Buenamelis (Consultor Sistema de Información).

El Proyecto fue asistido por un Consejo Asesor integrado por: María Cristina Añón

(SIDCA – CONICET – UNLP); Ricardo Cravero (Q Innova); Gustavo Idígoras (Business

Issue Management); Héctor Laiz (INTI); Carlos León (PROSAP); Mercedes Nimo

(COPAL); Consolación Otaño (MAGyP); Enzo Zamboni (Diagramma SA).

El Proyecto contó como contraparte del Consorcio el siguiente Equipo Técnico del

Ministerio de Ciencia, Tecnología e Innovación Productiva de la Nación, Dirección

Nacional de Estudios: Martín Villanueva (Director), Alicia Recalde, Manuel Mari,

Ricardo Carri, Adriana Sánchez Rico, Miguel Guagliano, Vanesa Lowenstein y Nicolás

Hermida; Dirección Nacional de Información Científica: Gustavo Arber (Director),

Sergio Rodriguez, Natalia Djamalian y Sebastián Balsells.

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2

ÍNDICE

PRÓLOGO ............................................................................................................................. 3

1. Presentación ..................................................................................................................... 8

2. Introducción .................................................................................................................... 10

3. Estado del arte y tendencias de la ciencia y tecnología del procesamiento de

alimentos a nivel mundial ............................................................................................... 13

3.1. Antecedentes y perspectivas ................................................................................. 13

3.2. Tendencias del consumo mundial de alimentos ................................................... 15

3.3. Vislumbrando el futuro de los alimentos ............................................................... 18

3.4. Tecnologías emergentes de procesamiento .......................................................... 26

3.5. Bibliografía ............................................................................................................... 45

4. Estado del arte y tendencias de la ciencia y tecnología del procesamiento de

alimentos en Argentina .................................................................................................. 51

4.1. Antecedentes y perspectivas ................................................................................. 51

4.2. Tendencias .............................................................................................................. 56

4.3. Bibliografía ............................................................................................................... 65

5. Tecnologías transversales del procesamiento de alimentos ........................................ 66

5.1. Calidad Integral ........................................................................................................ 66

5.2. Producción más Limpia .......................................................................................... 78

5.3. Biotecnología ........................................................................................................... 88

5.4. Nanotecnología ..................................................................................................... 102

5.5. Tecnologías de la Información y la comunicación (TIC) ...................................... 115

6. Bibliografía ............................................................................................................. 122

Page 7: Estado del arte y tendencias de la ciencia y tecnología del

3

PRÓLOGO

El Ministerio de Ciencia, Tecnología e Innovación Productiva de la Nación se propuso

estudiar las trayectorias en el desarrollo de tecnologías y estrategias innovadoras de

las principales cadenas agroindustriales y la industria de alimentos en general, en

línea con los objetivos nacionales de desarrollo. En el marco del “Programa para

Promover la Innovación Productiva y Social”, desarrolló el Proyecto “Estudios del

Sector Agroindustria”, con el apoyo financiero del Banco Internacional de

Reconstrucción y Fomento.

El Consorcio integrado por el Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA), la

Universidad Nacional del Litoral (UNL), la Asociación Civil Grupo REDES (Centro de

Estudios sobre Ciencia, Desarrollo y Educación Superior – Centro REDES) y la

Fundación Banco Credicoop (FBC) fue el encargado de ejecutar el Proyecto. El INTA

tuvo bajo su responsabilidad la coordinación del Consorcio y la dirección del

Proyecto, mientras que la Fundación Banco Credicoop actuó como administrador. El

Proyecto se desarrolló entre agosto de 2011 y setiembre 2013.

Las actividades del proyecto han sido desarrolladas en estrecha articulación con el

nivel directivo y los equipos técnicos de la Subsecretaría de Estudios y Prospectiva -

Secretaría de Planeamiento y Políticas en Ciencia, Tecnología e Innovación Productiva

del Ministerio. Además, contó con un Consejo Asesor compuesto por calificados

referentes del ámbito público y privado del sistema de innovación y del sector

agroindustrial.

El Proyecto tuvo como finalidad analizar el estado del arte, las tendencias y

prospectiva de la agroindustria alimentaria argentina en el contexto mundial,

haciendo foco en el procesamiento de alimentos y planteando una estrategia de

innovación tecnológica e institucional que contribuya al desarrollo nacional y regional

con inclusión y equidad social.

El Proyecto fue diseñado para contribuir a los siguientes objetivos generales:

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Incrementar la competitividad de la agroindustria alimentaria argentina,

procurando una mayor densidad tecnológica, perfil innovador y valor agregado.

Impulsar la dinámica y el esfuerzo innovador de la agroindustria alimentaria,

detectando obstáculos para mejorar la competitividad sistémica y la capacidad de

industrialización.

Expandir el desarrollo de tecnologías y estrategias innovadoras, privilegiando

el desarrollo territorial, la producción limpia y la salud ambiental.

Identificar estrategias que mejoren el ingreso, el empleo, la calidad de vida de

las regiones y la inserción competitiva de las PyMEs agroindustriales.

Fortalecer la capacidad de formulación y gestión de las políticas públicas para

asegurar impactos sustanciales de la innovación tecnológica e institucional.

Se seleccionaron cinco cadenas agroalimentarias con potencialidad para alcanzar los

objetivos propuestos: maíz, carne porcina, lácteos bovinos, olivo y frutas finas. Estas

cadenas fueron seleccionadas por su potencial de crecimiento productivo e

innovación, agregado de valor, y aporte al desarrollo social y regional, contribuyendo

a identificar patrones de innovación tecnológica e institucional relevantes para

orientar la estrategia futura del sector agroalimentario.

Los factores de cambio de la industria alimentaria argentina fueron agrupados en

tecnológicos e institucionales, incluyendo además las acciones y medidas de política

que, actuando interactivamente, pueden vigorizar la construcción social de futuro.

Los factores tecnológicos comprenden las tecnologías transversales al sistema

agroalimentario y las específicas de cada cadena seleccionada para el estudio. Las

transversales abarcan las tecnologías de procesamiento de alimentos, la aplicación

de tecnologías en los campos de la calidad integral y la producción limpia (prevención

y mitigación), junto a las tecnologías emergentes (biotecnología, nanotecnología y

TIC). Los factores institucionales (no tecnológicos) fueron asociados específicamente

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5

con los marcos regulatorios, poniendo foco en el análisis de los sistemas de calidad y

de propiedad intelectual.

La integración del análisis del sistema agroalimentario y las cadenas seleccionadas

con los factores de cambio -considerando el marco nacional y mundial- permitió

delimitar el estudio diagnóstico de la situación actual, el relevamiento de tendencias y

la construcción de futuros. A partir de ese conocimiento, se elaboró una Agenda de

Investigación, Desarrollo e Innovación (I+D+i) que señala, por una parte, los factores

tecnológicos e institucionales críticos para promover la innovación de la agroindustria

alimentaria argentina y, por otra, las acciones e instrumentos de política pública que

pueden orientar el trayecto hacia el escenario deseable al año 2030.

Este escenario está consustanciado con los objetivos de desarrollo del país que se

aproximan a través de los propios del proyecto.

El proyecto se desarrolló sobre la base de tres actividades:

Actividad 1: Prospectiva tecnológica y no tecnológica.

Elaboró tendencias y generó conocimientos prospectivos sobre los alimentos y la

industria alimentaria mundial. Caracterizó y estudió las tendencias de las tecnologías

de procesamiento de alimentos, las comprometidas con la calidad integral y la

producción limpia, contemplando también las tecnologías emergentes (biotecnología,

nanotecnología y TIC).

Sobre esa base, construyó escenarios al 2030 de la agroindustria alimentaria

argentina y de las cadenas agroindustriales seleccionadas.

Actividad 2: Diagnóstico técnico y socio-económico.

Elaboró el diagnóstico socio-económico y relevó la problemática tecnológica de las

cadenas agroindustriales seleccionadas. Identificó las restricciones y requerimientos

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de las empresas para mejorar su desarrollo socio-técnico y competitivo. A partir de

ese conocimiento, analizó la conducta y desempeño de las cadenas agroalimentarias

seleccionadas con la finalidad de identificar los patrones tecnológicos y los

determinantes de su dinámica innovadora, así como los principales obstáculos al

proceso de innovación en la industria de alimentos.

Actividad 3: Vigilancia tecnológica e inteligencia competitiva (VTeIC).

Instaló y aplicó los recursos que posibilitan ejecutar procesos de VTeIC con fuentes

nacionales e internacionales. Estudió el estado de la técnica y tendencias de las

cadenas agroindustriales seleccionadas y, a su vez, seleccionó y analizó segmentos

tecnológicos que constituyen puntos críticos para el desarrollo de estos sectores.

Complementariamente, relevó las capacidades de producción de conocimiento

científico-tecnológico, institucional y formación de recursos humano (RRHH) a nivel

mundial y nacional.

Cada actividad conformó un grupo de trabajo con profesionales de las cuatro

instituciones del consorcio. Estos grupos de trabajo interactuaron además con

diferentes especialistas internos y externos. El Proyecto mantuvo un diálogo fluido

con los actores del sector gubernamental, del sistema científico-tecnológico y del

sector productivo, tanto a nivel nacional como internacional a través de una consulta-

dirigida a expertos-tecnólogos (70), consulta-abierta a expertos (encuesta “Delphi”:

420), encuesta virtual a empresas (180), entrevista presencial en profundidad a

empresas (105), y talleres de trabajo entre los equipos técnicos y especialistas (250).

Este intercambio fue complementado por encuentros de síntesis y validación con el

Consejo Asesor y las instancias de decisión política y equipo técnico del Ministerio.

El trabajo integrado de las tres actividades posibilitó generar los siguientes estudios:

marco conceptual y metodológico del Proyecto; diagnóstico y prospectiva de la

industria alimentaria mundial y argentina al 2030; estado del arte y tendencias de la

ciencia y tecnología del procesamiento de alimentos; incertidumbres críticas de la

agroindustria alimentaria argentina en el contexto mundial; conducta y dinámica

innovadora de empresas en las cadenas agroalimentarias; conducta, dinámica y

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patrones tecnológicos de las cadenas agroalimentarias seleccionadas; capacidades

de I+D del sistema agroalimentario y cadenas de valor; marcos regulatorios en la

industria de procesamiento de alimentos; vigilancia tecnológica e inteligencia

competitiva de las cadenas y segmentos tecnológicos seleccionados; y visión

prospectiva de las cadenas agroindustriales seleccionadas al 2030.

Estos 23 estudios se publican en la Serie Documentos de Trabajo del Proyecto. Estos

trabajos constituyen a su vez la base de referencia para fundamentar los contenidos

del documento-síntesis del Proyecto: “Trayectoria y prospectiva de la agroindustria

alimentaria argentina: Agenda estratégica de innovación”.

Cabe resaltar por último que este Proyecto ha servido para avanzar en la construcción

de un modelo de organización y gestión orientado a estudiar la industria alimentaria

argentina con anclaje regional y territorial. A partir de esta experiencia, es posible

consolidar un espacio de trabajo interinstitucional concebido como un observatorio

que articule las actividades en ciencia, tecnología e innovación con las oportunidades

y problemas del desarrollo agroalimentario, buscando sustentar la formulación e

implementación de la política científico-tecnológica nacional en el marco del Plan

Nacional de Ciencia, Tecnología e Innovación Productiva – “Argentina Innovadora

2020” y del proceso de integración del MERCOSUR y de la región sudamericana.

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1. PRESENTACIÓN

El Proyecto del Ministerio de Ciencia, Tecnología e Innovación Productiva de la

Nación y el Banco Internacional de Reconstrucción y Fomento, denominado Proyecto

MINCyT-BIRF: “Estudios del Sector Agroindustria” elaboró un diagnóstico

prospectivo a nivel mundial y nacional de la agroindustria alimentaria. El diagnóstico

permitió relevar las principales dimensiones que enmarcan el comportamiento de la

agroindustria alimentaria argentina en el contexto mundial.

En ese marco se elaboró el estado del arte y tendencias de la ciencia y tecnología del

procesamiento de alimentos a nivel mundial y nacional poniendo foco en la aplicación

de las tecnologías transversales: tecnologías de procesamiento de alimentos, calidad

integral, producción más limpia y tecnologías emergentes (biotecnología,

nanotecnología y tecnologías de la información y comunicación -TIC).

En este documento se presentan las tendencias resultantes de ese trabajo colectivo,

generada sobre la base de la consulta a expertos internacionales y nacionales

referentes en los diversos temas. La información generada es producto de un

proceso participativo amplio, que ha construido consensos y establecido prioridades

sobre las incertidumbres críticas tecnológicas y no tecnológicas más importantes que

atañen al futuro de la agroindustria alimentaria argentina y el procesamiento de

alimentos. Estos consensos y la definición de tales prioridades constituyen las bases

para la construcción de los escenarios de la agroindustria alimentaria y de las

cadenas productivas seleccionadas como así también en la definición de una agenda

de investigación, desarrollo e innovación.

Este estudio fue respaldado por una encuesta sobre tecnologías de alimentos

realizada aproximadamente a 70 expertos (del sector científico-tecnológico,

empresarial y gubernamental), con la finalidad de comparar las tecnologías aplicadas

en el país respecto a las tendencias futuras en el mundo y establecer las respectivas

brechas de conocimiento. Complementariamente se realizaron entrevistas en

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profundidad sobre los temas transversales de índole tecnológica, con foco de

aplicación en procesamiento de alimentos.

Esta etapa de trabajo se complementó con el análisis de capacidades en I+D

relacionada a la ciencia y tecnología de alimentos a nivel mundial y nacional. Se

abordaron diferentes tipos de capacidades: generación de conocimientos científicos,

producción de conocimientos tecnológicos, capacidades institucionales y

capacidades de formación de recursos humanos, con la finalidad de identificar

aquellas que deberían ser fortalecidas en el Sistema Nacional de Innovación.

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2. INTRODUCCIÓN

La “cadena de valor agroindustrial” es un sistema dinámico que implica la

combinación de dos procesos productivos, el agropecuario y el industrial, para

transformar de manera rentable los productos provenientes del campo. Es un

conjunto de piezas que van desde la fase de producción, seguida por la del

procesamiento hasta la comercialización nacional e internacional, que se encuentran

en equilibrio dinámico y que definen el trayecto que recorren los agroalimentos

desde el campo hasta llegar al consumidor.

El complejo sistema de la agroindustria presenta muchas variables que impactan y

modifican el éxito de su desarrollo, y atraviesan las etapas productivas de pre-

cosecha, cosecha, tratamiento post-cosecha, industrialización, embalaje, transporte,

almacenamiento y los controles de calidad en las diferentes etapas de la distribución.

Estos últimos requieren de “alianzas estratégicas” entre actores del sector público-

privado.

También se concibe a la agroindustria como un conjunto de procesos de

transformación aplicados a materias primas de origen agropecuario y forestal que

abarcan desde la primera agregación de valor hasta la obtención de productos finales

con mayor grado de elaboración, constituyendo así uno de los subsectores con

mayor relevancia para el país, ya que se vincula estrechamente con el resto de los

sectores de la actividad económica. En consecuencia, la agroindustria requiere de

integración y coordinación tanto técnica como económica de procesos y/o

actividades de las cadenas de valor agroalimentarias.

La situación científica y tecnológica actual está caracterizada por una trascendencia

creciente de las tecnologías emergentes y convergentes y la incesante proliferación

de nuevas disciplinas, subdisciplinas y áreas de conocimiento, presentando múltiples

desafíos concretos para los planificadores de políticas de ciencia y tecnología,

estrategias y gestores de las instituciones.

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El desafío de la integración de tecnologías que en el mundo evolucionan rápidamente

como la nanotecnología1, la biotecnología y las Tecnologías de la Información y la

Comunicación (TIC) al procesamiento y desarrollo de nuevos alimentos, merece un

análisis amplio y profundo para establecer el estado actual y a partir de allí, los cursos

de acción posibles o, mejor aún, deseables a fin de posicionar a la agroindustria

alimentaria argentina como una fuente genuina y sustentable de productos con

agregado de valor.

Asimismo, tomando en cuenta el estudio de la Organización de las Naciones Unidas

para la Alimentación y la Agricultura (FAO2, por su siglas en inglés) denunciando que

aproximadamente un tercio de los alimentos para consumo humano producidos en el

mundo cada año se pierden o desperdician (aprox. 1.300 millones de toneladas),

pone sobre relieve que el desarrollo y aplicación de estas tecnologías adquiere aún

mayor relevancia dado su potencialidad para facilitar mejoras en los productos,

procesos e insumos relacionados con la extensión de la vida útil de los alimentos.

Esto aporta a la seguridad alimentaria dado que, si bien sigue siendo necesario

aumentar la producción, un tercio de este aumento podría desperdiciarse si no se

mejoran prácticas y aplican/desarrollan tecnologías para minimizar la perdida y

desperdicio de alimentos. Además los avances que se produzcan en esta área

redundarán en la reducción de perdidas en la distribución de alimentos a nivel local y

en la exportación.

Atendiendo a estos desafíos, el presente documento ha sido elaborado por un grupo

numeroso y variado de expertos con el objetivo de contribuir al estado actual y de las

posibles tendencias de la ciencia y tecnología de alimentos a nivel nacional y

mundial. En sus tres capítulos se analizan el estado del arte y tendencias de la ciencia

y tecnología del procesamiento de alimentos a nivel mundial, enfatizando, en el caso

1 La “revolución Nano” tiene un tremendo potencial de mejora para la agroindustira, con grandes

desafíos en el área de minimización de riesgos, ya que su completa utilización implica la introducción y/o aplicación de nano-partículas en distintas etapas de la producción de alimentos.

2 J. Gustavsson et al. (2011). Global food losses and food waste – Extent, causes and prevention. FAO, Roma.

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nacional, las tecnologías tanto específicas como transversales en el procesamiento

de alimentos, con atención de su impacto y tendencias en la aplicación.

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3. ESTADO DEL ARTE Y TENDENCIAS DE LA CIENCIA Y LA

TECNOLOGÍA DEL PROCESAMIENTO DE ALIMENTOS A NIVEL

MUNDIAL

Claudia González y Sergio Vaudagna

3.1. Antecedentes y perspectivas

El desafío de afrontar la seguridad alimentaria mundial durante el próximo siglo esta

afectado por una serie de eventos, como la crisis económica mundial desatada hacia

fines del 2008, el impacto del cambio climático, el crecimiento demográfico, el

proceso de urbanización y la necesidad de gestionar de forma sostenible ésta y otras

demandas en rápido crecimiento en el “mundo de la energía y el agua”, las cuales se

describen a continuación.

• Cambios demográficos: según estimaciones de la Organización de las Naciones

Unidas se espera que la población mundial aumente de los 6.900 millones

actuales a más de 9.000 millones en el 2050, el 98% de ese crecimiento se

producirá en los países en desarrollo y emergentes. La población urbana mundial

se duplicará. Entre tanto, en muchos países desarrollados las poblaciones irán

envejeciendo y estabilizándose. En 2020 las personas de más de 65 años

representarán aproximadamente una quinta parte de la población mundial. Este

porcentaje será aún mayor en países desarrollados como Italia, Alemania y Japón.

Los modelos demográficos locales serán cada vez más diversos. La clase media

mundial continuará su crecimiento, con la mayor parte de este crecimiento

concentrado en las economías emergentes. El crecimiento global de la población

unido a los cambios demográficos inducirá un incremento de la demanda por

alimentos y un cambio en el perfil de esas demandas. Los cambios en la velocidad

y en los niveles de urbanización tendrán también un impacto considerable en el

mercado de los alimentos. Con el desarrollo económico, los individuos migrarán a

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las áreas urbanas buscando nuevas oportunidades, incorporándose en el mercado

económico e incrementando en consecuencia la demanda por alimentos,

particularmente los alimentos procesados. Cada año, 65 millones de personas se

suman a la población urbana del mundo, esto equivale a la adición de 5 ciudades

del tamaño del Gran Buenos Aires.

• Clima global y otros cambios ambientales: uno de los cambios que producen y

producirán impacto sobre la producción de alimentos es el aumento del CO2 y

otros gases del efecto invernadero. Este incremento, conduce a un aumento de

las temperaturas medias, un cambio en los patrones de precipitación y aumento

de la incidencia de eventos meteorológicos extremos (tormentas, inundaciones,

sequía, calor agobiante), a la vez que incrementa la acidificación de los mares y

océanos. Otro de los importantes cambios previstos por efecto del cambio

climático es en la distribución y severidad de enfermedades y plagas en animales

y plantas. Sin embargo, no descartemos que así como se generan amenazas, los

cambios en el clima pueden ofrecer también nuevas oportunidades para la

producción de alimentos en algunas partes no tradicionales del mundo.

• Impactos ambientales producidos por la agricultura y la alimentación: los

potenciales impactos negativos incluyen el aumento del uso del agua y el suelo, la

erosión y la degradación del suelo, la pérdida de la biodiversidad, así como

mayores emisiones de gases del efecto invernadero y la contaminación (química o

microbiológica) cada vez mas preocupante de cuerpos de agua superficiales y

subterráneos.

• Disponibilidad de recursos claves para la agricultura: estos son cada vez más

limitados, en particular el suelo apto, el agua dulce y la energía. En la actualidad,

ya se prevén otros recursos limitantes tales como el fosfato mineral (un nutriente

esencial para las plantas). La escasez de recursos puede ser exacerbada por la

creciente competencia que genera el desarrollo urbano e industrial.

Page 19: Estado del arte y tendencias de la ciencia y tecnología del

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• Factores sociales: incluyen la urbanización, el cambio demográfico, los problemas

de tenencia de la tierra, la gobernanza y la seguridad internacional, las

preferencias, elecciones, gustos, hábitos y prácticas que afectan tanto la demanda

como el consumo de alimentos, así como los estándares de vertido de residuos

líquidos y sólidos de la industria alimentaria. Pueden describirse otros factores

que afectarían en forma significativa los hábitos y patrones del consumo, estos

son: la presencia creciente de la mujer en el mercado laboral, el mayor número de

actividades que desarrollan diariamente los individuos, y la tendencia a la

reducción del número de habitantes por hogar. Por otro lado, un mayor nivel de

educación ha permitido que el individuo este más capacitado para decidir aquellos

alimentos que considera más apropiados para consumir.

• Factores económicos: incluyen los temas de comercio, tenencia de la tierra, el

marco regulatorio, la asequibilidad y la accesibilidad (especialmente en los países

en desarrollo) asociada a la globalización. Es importante llamar la atención acerca

de los cambios en la economía mundial, ya que la expectativa era una marcada

tendencia al aumento de los ingresos per capita hacia el 2020, pero la actual crisis

económica, que afecta a los grupos económicos líderes, esta poniendo en duda

esa proyección. En suma, el panorama económico global se prevé distinto al de

principios de siglo. En la actualidad, los países y las empresas de Asia y América

Latina desempeñan un papel más destacado e influyente en las normas del

comercio internacional, las finanzas, la innovación y en el modelo de gobierno.

3.2. Tendencias del consumo mundial de alimentos

En las últimas dos décadas se han sucedido complejos cambios a nivel social,

tecnológico, económico, ambiental, político y cultural: el relativo incremento del

poder de compra de la población, un mayor nivel de educación, nuevas ofertas

tecnológicas que permiten obtener un enorme y más fácil acceso a la información,

avances científicos-tecnologicos que han incrementado la expectativa de vida

Page 20: Estado del arte y tendencias de la ciencia y tecnología del

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favoreciendo el aumento de la población de edad avanzada, así como cambios en la

estructura y organización de la familia que reducen el número de hijos por pareja y

mantienen a la mujer más horas fuera de su hogar. Estos cambios han afectado la

vida de la población y han impulsado cambios en la cantidad y calidad de las

demandas en relación a los alimentos que consumen. Consecuentemente, los ejes

del desarrollo tecnológico de los próximos años deben estar orientados a satisfacer

las exigencias del “nuevo consumidor”, que a nivel internacional se concentran en:

“alimentos más placenteros y sensorialmente más atractivos”, “alimentos que

contribuyan a mejorar la salud”, “alimentos que sean convenientes y prácticos de

consumir”, “alimentos de alta calidad y con inocuidad asegurada”, y “alimentos

confiables, producidos en forma más limpia y con compromiso ambiental”, entre

otras.

No puede soslayarse, por otro lado, la mirada que ciertos sectores de los

consumidores tienen sobre los alimentos procesados, que los ha llevado a tener una

percepción negativa sobre los mismos. Sin duda la mayor parte de los consumidores

valora aspectos tales como la consistencia, la amplia disponibilidad y la conveniencia

que aportan y promueven los alimentos procesados. Aquella percepción negativa,

aunque minoritaria, puede afectar las agendas de los organismos de control

(inocuidad) y de los organismos de I+D, en particular apoyados por los medios

masivos de comunicación. Algunos de los factores que han contribuido a la

percepción negativa del consumidor incluyen el aumento de la prevalencia de la

obesidad, el uso intensivo de agroquímicos o de aditivos, el escaso contacto entre

los consumidores y los sectores de producción e industria de alimentos, las llamadas

crisis alimentarias (inducidas por contaminantes biológicos y químicos), el impacto

ambiental por la masiva descarga de efluentes, y la preocupación del consumidor por

algunos ingredientes específicos tales como sal o azúcar en el desarrollo e impacto

de enfermedades, en particular durante la infancia. Paralelamente, el desarrollo e

incremento de nichos y sectores asociados a los alimentos regionales u orgánicos,

con los desafíos y problemáticas que conllevan, puede explicarse, en parte, como

una respuesta dirigida a aquellos sectores no satisfechos con el procesamiento

industrial de los alimentos.

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El documento preparado por la Federación de Industrias del Estado de San Pablo y el

Instituto de Tecnología de Alimentos de ese estado brasileño, publicado en el año

2010 (Brazil Food Trends 2020), incluye una interesante identificación de los

requerimientos y tendencias más recientes de los consumidores en el mundo,

basado en el análisis de documentos estratégicos generados por instituciones

internacionales de referencia.

Dichas tendencias fueron enmarcadas en las siguientes cinco categorías.

• Propiedades sensoriales y placer: esta tendencia se relaciona fundamentalmente

con el mayor nivel de educación, información e ingresos de la población. Tales

características favorecen que el consumidor valore de manera incremental las

artes culinarias y las nuevas experiencias gastronómicas, mostrando interés por

los sabores y texturas regionales y étnicas. Esto favorece el incremento de los

productos con alto valor agregado, considerados gourmet o premium.

• Salud y bienestar: en este caso se consideran factores como el envejecimiento de

la población, los avances científicos que relacionan la dieta con ciertas

enfermedades, y el mayor poder adquisitivo de la población como elementos que

definen la necesidad del consumidor por un estilo de vida mas saludable. Dicha

impronta segmenta los alimentos en alimentos funcionales, productos que

controlan el peso, productos naturales que van mas allá del requerimiento por

alimentos orgánicos. En cuanto a los alimentos funcionales, se solicitan entre

otros, alimentos que promueven la aptitud mental y física, alimentos asociados a

la salud cardiovascular y gastrointestinal, productos energéticos y productos que

restauran el vigor mental y la relajación. El sobrepeso y la obesidad demandan

productos con calorías reducidas, y que supriman el apetito.

• Conveniencia y practicidad: la aceleración del ritmo de vida en los centros urbanos

y los cambios que afectan las estructuras familiares tradicionales, son factores que

estimulan la demanda de productos que ahorran tiempo y esfuerzo en el momento

del consumo. Esta tendencia segmenta el mercado hacia productos listos para

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usar, cocinar o consumir, de fácil preparación, fácil apertura y cierre, en envases

descartables. Para el consumo fuera del hogar se plantean alimentos envueltos en

forma individual y/o en porciones pequeñas.

• Calidad y confiabilidad: los consumidores más conscientes y mejor informados

demandan productos con inocuidad y calidad asegurada, aprecian la garantía de

origen y las etiquetas de certificación que aseguren que se ha dado cumplimiento

a los códigos de buenas prácticas y a los programas de control de riesgo. Esto

conduce a tomar en consideración ciertos aspectos ligados a la confiabilidad de

los productos, tales como la trazabilidad y las garantías de origen, los certificados

de manejo de la calidad y de la inocuidad, el etiquetado y otras formas de

comunicación que las empresas pueden utilizar para informar a los clientes acerca

de los atributos de calidad de sus productos. Éstas y otras estrategias contribuyen

a construir la confianza en sus marcas y ganar la preferencia del consumidor.

• Sustentabilidad y ética: las demandas de calidad de productos y procesos han

inducido la aparición de consumidores que se preocupan por el ambiente y que

están interesados en contribuir a las causas sociales y/o ayudar a los pequeños

agricultores familiares mediante la compra de sus productos. En cuanto a la

sustentabilidad del ambiente, los aspectos apreciados por los consumidores de

muchos de los países son: una menor huella de carbono y de agua, la reducción

del impacto ambiental, el bienestar animal, el etiquetado ecológico, y el uso de

envases reciclables.

3.3. Vislumbrando el futuro de los alimentos

Teniendo en cuenta los factores determinantes de las tendencias futuras en el

consumo de alimentos y tomando las demandas planteadas por el consumidor que

fueron categorizadas e incluidas en el documento intitulado “Brazil Food Trends

2020”, se estima que los alimentos del futuro y las innovaciones tecnológicas

Page 23: Estado del arte y tendencias de la ciencia y tecnología del

19

necesarias para producirlos se orientarán hacia los ítems que a continuación se

describen.

3.3.1. La innovación en productos (desarrollo vs. diferenciación)

Varias son las estrategias destinadas a innovar en la producción de alimentos: entre

ellas podemos citar el desarrollo de un “nuevo” producto en base a necesidades o

preferencias o “modas sociales” que plantea el consumidor; la modificación de un

producto existente produciendo un cambio en el color, sabor u otra propiedad

sensorial; la incorporación de un componente que sea beneficioso para la salud

(alimentos funcionales). Asimismo, un aspecto de la innovación asociado con las

llamadas “tecnologías blandas” es la diferenciación de productos mediante la

implementación de certificados de calidad, de inocuidad, de procedencia o de

sustentabilidad.

• Productos con muy alto valor agregado: orientados a un público con alto poder

adquisitivo, con gran acceso a la comunicación, con oportunidad de viajar por el

mundo, adepto a las modas, etc. Por ejemplo los productos “gourmet” o

especialidades; los productos étnicos; los productos exóticos/interactivos

(productos que despiertan estímulos sensoriales y hacen escapar de la rutina

diaria); productos artísticos (proponen la recreación de un plato de restaurante en

la casa, que colaboran en construir momentos de ocio/entretenimiento, productos

para ocasiones festivas, o productos para regalo); productos destinados a

consumidores “aficionados a las comidas, atraídos por aires de sofisticación y

novedad; productos con aromas/sabores exóticos, productos con nuevas texturas,

productos de la categoría “indulgencia sin culpa” (aquellos que se ofrecen en

tamaño reducido y con porciones o calorías controladas); productos súper-

premium (productos de calidad excepcional con beneficios asociados, como por

ejemplo el chocolate negro, con diferentes combinaciones de flavours gourmet,

vendidos bajo certificación de comercio justo o de producción orgánica);

productos “gastronómicos” o “tipo-restaurante” (productos listos para consumir,

Page 24: Estado del arte y tendencias de la ciencia y tecnología del

20

comidas semi-preparadas o congeladas destinados a cumplir el sueño de comer

en casa un plato gourmet preparado por un chef célebre).

• Productos valorados por su origen, procedencia, proceso de manufactura y

trazabilidad: se busca garantizar que los productos hayan sido producidos con

ingredientes que no contienen sustancias “no orgánicas” como agroquímicos,

antibióticos, hormona, etc. y que posean el mayor nivel de calidad posible

(características de naturales, de frescura). Calidad percibida en base a las

características del procesamiento (tecnología moderna y mantenimiento de las

normas). Productos naturales y productos orgánicos. Productos con trazabilidad e

identificación de origen. Los sistemas de trazabilidad se usan para lograr una

identificación exacta y oportuna de los productos, su origen, su ubicación dentro

de la cadena agroalimentaria y la posibilidad de determinar el origen de un

problema de inocuidad alimentaria en forma rápida y eficiente.

• Alimentos de calidad e inocuidad asegurada: seguridad a lo largo de la cadena, en

los procesos y en los procedimientos de fabricación, distribución y

almacenamiento con el fin de reducir riesgos. Alimentos con garantías de

conservación. Gestión de riesgo, sistemas de aseguramiento de la calidad e

inocuidad (HACCP, ISO 22000, etc.), sellos de calidad y aprobación de etiquetas

como procedimiento de valoración de alimentos ligados al territorio. Credibilidad

de la marca, etiquetado con información más precisa e individualizada y nuevos

métodos de etiquetado más veloces y mejorados, así como otros canales de

comunicación con los consumidores. Envases activos e inteligentes.

• Productos orientados al cuidado de la salud y al bienestar: alimentos frescos,

naturales y más nutritivos; productos de dieta (no sólo para el control de peso sino

también para consumidores con requerimientos específicos como diabéticos,

ancianos, bebés); productos saludables y más nutritivos (naturales, inocuos,

simples, con menos sal, azúcar o grasa); mínimamente procesados; frescos

cortados y envasados (frutas, vegetales de hojas verdes, legumbres); productos

veganos; alimentos más nutritivos (fortificados o enriquecidos).

Page 25: Estado del arte y tendencias de la ciencia y tecnología del

21

• Productos para alimentación controlada (control de peso, diabetes, ancianos,

embarazadas, alérgicos, celiacos, etc.): productos dietéticos, bajas calorías

(productos para el control del peso y dietas); productos conteniendo ingredientes

para saciar el apetito o con propiedades para quemar calorías.

• Alimentos funcionales (alimentos que contribuyen a mejorar la salud mas allá del

efecto nutricional): el efecto funcional se puede obtener a través de la

incorporación de compuestos al alimento, potenciando la actividad de

componentes existentes o separando/degradando componentes dañinos para la

salud; alimentos funcionales para mejorar el bienestar (mejora del rendimiento

físico y mental, reducción del estrés, mejora del estado de la mente, reducción de

la fatiga, aumento de la vitalidad); productos energéticos; alimentos de relajación;

productos para el estado de ánimo; productos con propiedades cosméticas;

productos con propiedades para retardar el envejecimiento.

• Productos que proponen valorar la conveniencia y practicidad: los productos

donde se debe hacer más foco son los productos listos para consumir y los

snacks, sin perder de vista las propiedades sensoriales y de mejora de la salud,

introduciendo estilos y prácticas de cocción más refinadas y variadas, aconsejados

por el talento y creatividad de un buen chef.

• Productos que promueven la sustentabilidad y la ética: esta tendencia adquiere

dimensiones que trascienden las necesidades y los deseos individuales, y en

cambio valora aspectos como consumo solidario, preocupación por el impacto del

consumo en el medio ambiente, preocupación por el bienestar animal y por las

prácticas éticas dentro de las empresas, entre otros.

• Consumir haciendo el bien: productos que establecen vínculos con organizaciones

humanitarias, los llamados productos de “comercio justo”, productos con

sistemas de certificación de prácticas comerciales éticas, productos no asociados

con el maltrato animal, productos que no pongan en peligro la preservación de

especies en peligro de extinción, entre otros.

Page 26: Estado del arte y tendencias de la ciencia y tecnología del

22

3.3.2. Innovación en productos alimentarios intermedios

Los productos alimentarios intermedios son ingredientes o productos

complementarios que cumplen funciones específicas una vez que han sido

incorporados al alimento durante el proceso de elaboración y continuan presentes en

el producto final, en su forma original o modificada. Dentro de este grupo se

encuentran los aditivos, sustancias con/sin valor nutricional que son incorporadas a

los alimentos con el objeto de prevenir cambios; preservar, incorporar o aumentar los

aromas, el color o el sabor, modificando o manteniendo el estado físico del alimento.

La perspectiva futura no indica un gran aumento del número y tipo de ingredientes,

debido a las dificultades técnicas para el aislamiento y extracción de los mismos. Sin

embargo, se espera que se haga énfasis en mejorar los métodos aplicados a los

ingredientes ya conocidos con el objeto de aumentar la cantidad extraída y/o mejorar

la calidad de la extracción. Se prevé un aumento pronunciado del uso de ingredientes

naturales, con una producción que tiende a ser económica, social y ambientalmente

sostenible. Se espera que se incremente el consumo de productos que contienen

antioxidantes, vitaminas y minerales. Sin lugar a dudas las enzimas tendrán un rol

decisivo en el futuro, ya que hoy su uso se limita sólo a algunos segmentos de la

industria alimentaria.

En general, se espera que el consumo de alimentos funcionales continúe su

tendencia de creciendo en la próxima década, pero es aconsejable tener en cuenta la

posibilidad de que haya presiones que los empujen en la dirección contraria, ya que

la Unión Europea está realizando una revisión exhaustiva de las normas y

reglamentos que rigen los productos funcionales. El uso de “bio” y “nano”

ingredientes llegará, sin dudas, a revolucionar la industria alimentaria. Sin embargo,

es muy incierto visualizar todos los usos que la biotecnología y la nanotecnología

permitirán, en el futuro, en materia de desarrollo de productos alimentarios

intermedios en particular y en la tecnología de alimentos en general3.

3 Ver en este documento dentro del capítulo 5 los temas 5.3: Biotecnología y 5.4: Nanotecnología.

Page 27: Estado del arte y tendencias de la ciencia y tecnología del

23

Solo para citar algunas tendencias, se prevé lo siguiente.

• Producción de ingredientes que toleren la variación de las temperaturas de

procesamiento (almidones modificados, gomas, fibras, emulsificantes).

• Aplicación de la modificación genética para el desarrollo de materias primas

adaptadas a procesos tecnológicos específicos.

• Producción, mejora y aplicación de conservantes naturales (bacteriocinas y

lactoferrinas).

• Obtención de ingredientes naturales, económica-social y ambientalmente viables

(por ejemplo enzimas).

• Uso de técnicas biotecnológicas para la fortificación de alimentos.

• Combinación de ciencias técnicas genómicas y nutricionales para la identificación

de biocompuestos activos, desarrollo de nuevos marcadores en alimentos.

• Aplicación de nanotecnología y de tecnología de alimentos en el desarrollo de

sistemas inteligentes para la absorción de ingredientes.

• Uso de nanocápsulas como vehiculo para ingredientes y aditivos.

3.3.3. Innovación en envases

El envase es una parte integral del producto y debe ser visto como un sistema apto

para contener, proteger, preservar, comunicar y transportar, evitando pérdidas

durante la fabricación, distribución y consumo. Los envases -además de la tradicional

función de protección y preservación del producto- cumplen una importante función

otorgando ventajas competitivas al producto, incrementando su valor y funcionalidad

Page 28: Estado del arte y tendencias de la ciencia y tecnología del

24

a la vez que influyen en la frecuencia de consumo. En líneas generales se propone la

sustitución de materiales tradicionales por nuevas alternativas, el desarrollo de

envases flexibles con prestaciones mejoradas en materia de propiedades de barrera,

de capacidad de cierre y apertura fáciles, de mantenimiento de la higiene, con

asepsia mejorada y cuidado del ambiente.

Uno de los objetivos principales de los envases es establecer un canal de

comunicación entre el fabricante del producto y el consumidor. El diseño del envase

debe dar al consumidor, además de funcionalidad, una experiencia sensorial.

Innovaciones en las formas y tamaños, junto a nuevas técnicas de impresión, tienden

a diferenciar los productos de la competencia, revitalizan las marcas y atraen al

consumidor. El aumento de la indulgencia allanará el camino para los envases

premium destinados a productos gourmet, preferiblemente ofrecidos en pequeñas

porciones. El envase puede también ser utilizado como vehículo para el

entretenimiento y la relación interactiva con las generaciones más jóvenes. En este

sentido, se proponen envases sofisticados, conmemorativos, ediciones limitadas,

con transparencias, con efectos estéticos, etc.

En la búsqueda de comidas saludables, el envase debe actuar como una herramienta

de información al consumidor, como por ejemplo exponiendo la aprobación de

asociaciones de la salud o programas de calidad de terceras partes así como

información de tipo nutricional, indicando porciones de calorías limitadas. Se plantea

la importancia del desarrollo de envases que favorezcan la retención de nutrientes

durante la cocción.

Las demandas de envases de conveniencia por parte del consumidor se relacionan

con la facilidad de preparación en un tiempo corto y la posibilidad de consumir el

producto en diferentes lugares, en porciones individuales y personalizadas.

En cuanto a los requerimientos de confiabilidad y calidad del producto, existen varias

tecnologías disponibles como por ejemplo transmisores de radio frecuencia (RFID)

para la trazabilidad del producto, indicadores de frescura, absorbentes y emisores de

Page 29: Estado del arte y tendencias de la ciencia y tecnología del

25

compuestos para el interior de los envases; envases inteligentes, con dispositivos de

grabación e indicadores de humedad, temperatura, oxígeno, nivel de maduración, y

microorganismos; o envases activos, con absorbedores de oxígeno, etileno y CO2,

desecantes, emisores de etanol, antimicrobianos. Todas ellas son tecnologías que

requieren mayores estudios para transformarlas en viables desde el punto de vista

técnico y económico.

Desde el punto de vista de la sostenibilidad ambiental, el envase (o sistema de

embalaje) debe evaluarse a partir de un enfoque más amplio e integral, teniendo en

cuenta el ciclo de vida completo, desde la extracción de la materia prima hasta la

disposición final. Esto último incluye la preocupación de los consumidores respecto

de los factores que afectan directamente al ambiente y la sociedad como, por

ejemplo, la reducción del consumo de energía, el uso de materias primas renovables,

el reciclaje y los programas para estimular la reutilización de envases post-consumo;

la revalorización de los materiales; la reducción de emisiones; la reducción de

residuos sólidos; el análisis del ciclo de vida de los productos para la determinación

de la huella de carbono, etc. Es decir, el requerimiento de una responsabilidad social

corporativa a través de toda la cadena productiva.

3.3.4. Legislación y nuevos productos

La legislación como factor impulsor o restrictivo del desarrollo y la aplicación

industrial de nuevas tecnologías es un agente fundamental en la relación de las

empresas productoras de alimentos y los procesos de innovación (tanto en la gestión

como en el desarrollo tecnológico).

El marco regulatorio se transforma así en una herramienta que clarifica las acciones

que una empresa puede abordar y supone una garantía para el consumidor, por lo

tanto van a tener mayor impacto en productos alimentarios intermedios, nuevas

tecnologías de preservación y procesamiento, envases (uso y comercialización de

materiales biodegradables, reciclables y activos), biotecnología (inversión segura de

Page 30: Estado del arte y tendencias de la ciencia y tecnología del

26

las empresas en este tipo de productos, generación de confianza en el consumidor,

facilidad en la comercialización internacional), desarrollo de nuevos productos

(desarrollo de alimentos funcionales o diferentes de los tradicionales requiere del

desarrollo de un marco normativo específico), etiquetado (cualquiera de los

desarrollos previos va a requerir información clara y precisa en las etiquetas que

conduce a la modificación su contenido y formato, así como el desarrollo de

metodologías para hacer más fácil y rápida la lectura y que permitan contener una

mayor información). En este concepto se incluyen las Agencias de Inocuidad (Control)

Alimentaria, cuyo objetivo fundamental es la protección de la salud pública,

contribuyendo a que el alimento destinado al ser humano sea apto para el consumo,

garantice la calidad nutricional y promueva la salud.

La legislación no debe estar asociada al desarrollo de alguna tecnología en particular,

sino que debe regular la aplicación y extensión del conjunto de tecnologías que se

desarrollen.

3.4. Tecnologías emergentes de procesamiento

El objetivo principal de las tecnologías emergentes es mantener la calidad sensorial y

nutricional de los alimentos, mediante la reducción del tiempo total de tratamiento y

la disminución de la exposición de los alimentos a temperaturas elevadas pero

garantizando la inocuidad de los mismos. Estas tecnologías permiten obtener

alimentos procesados con calidad sensorial y nutricional similar a los alimentos

frescos o recién cocidos. A su vez, las mismas buscan minimizar el impacto

ambiental de los procesos industriales mediante la disminución del consumo de

energía y de agua y la reducción de efluentes. A las tecnologías emergentes las

clasificaremos en tecnologías de procesamiento “térmico” y “no térmico”. Las

primeras son aquellas en las cuales el cambio de temperatura es el factor principal de

procesamiento. Asimismo, en las tecnologías no térmicas, la temperatura puede

cambiar, en forma moderada, pero no es el principal factor involucrado en el

procesamiento de los alimentos.

Page 31: Estado del arte y tendencias de la ciencia y tecnología del

27

Tecnologías de procesamiento térmico

El calentamiento es, probablemente, la forma más antigua de procesar los alimentos

y ha sido usado por el hombre durante milenios. Sin embargo, la tecnología utilizada

para calentar los alimentos durante su procesamiento ha tenido una evolución

significativa fundamentalmente en el transcurso del siglo XX y hasta el presente. Las

tecnologías como el calentamiento óhmico, calentamiento dieléctrico (microondas,

radio-frecuencia) y calentamiento inductivo han sido desarrollados para reemplazar, o

al menos complementar, los métodos tradicionales de calentamiento basados en la

diferencia de temperatura como fuerza impulsora (conducción, convección y

radiación). Todos ellos tienen en común que el calor es generado en el interior del

alimento, lo cual tiene una incidencia directa tanto en la eficiencia energética como

en el cambio de la temperatura.

Calentamiento óhmico

Éste sistema de calentamiento, también denominado calentamiento Joule, implica la

circulación de corriente eléctrica a través del alimento, el cual se encuentra en

contacto con electrodos cargados. Difiere de los otros métodos de calentamiento

eléctrico al utilizar electrodos inertes en contacto con el alimento y aplicar

frecuencias no restringidas (excepto las específicamente asignadas a microondas y

radio-frecuencias) y también longitudes de onda no restringidas. El calor se genera en

el interior de los alimentos por la resistencia eléctrica de los mismos, lográndose un

calentamiento rápido y uniforme (penetra a través de todo el alimento en forma

instantánea), en contraste con el calentamiento convencional por procesamiento

térmico (conducción o convección).

En consecuencia, la aplicación de este método de calentamiento permite obtener

productos más uniformes, más estables y de mejor calidad sensorial y nutricional que

los productos procesados térmicamente. En particular evita la sobre cocción,

Page 32: Estado del arte y tendencias de la ciencia y tecnología del

28

característica central de los tratamientos térmicos de preservación de alimentos

convencionales. Las aplicaciones potenciales del calentamiento óhmico incluyen la

mayoría de los tratamientos térmicos: cocción, escaldado, deshidratación,

evaporación, pasteurización y esterilización. Se puede aplicar en sistemas

descontinuos (utilizados para cocción, por ejemplo de productos cárnicos) o en

procesos continuos, los cuales son más apropiados para líquidos viscosos

(particularmente los no newtonianos) y fluidos con partículas.

Actualmente el calentamiento óhmico es utilizado a nivel industrial en América del

Norte, Europa y Asia para el procesamiento aséptico de productos de alta o baja

acidez conteniendo partículas, los cuales se comercializan como listos para consumir,

presentan alta calidad y son estables a temperatura ambiente. Esta aplicación

reemplaza a los tratamientos térmicos a ultra-alta-temperatura (UAT) especialmente

en alimentos líquidos conteniendo partículas sólidas con tamaños superiores a 1–1,5

cm. En los tratamientos UAT convencionales, para garantizar la letalidad requerida en

el punto frío de las partículas grandes, se debería sobre-procesar la fase líquida o

procesar las dos fases por separado, utilizando sistemas complejos como los

intercambiadores de doble cono. La aplicación del calentamiento óhmico en sistemas

continuos de procesamiento aséptico también permite el procesamiento sin utilizar

superficies de intercambio de calor y resulta ideal para productos sensibles a daños

por cizallamiento, debido a que utiliza velocidades de flujo baja.

El calentamiento óhmico es un proceso simple, con bajo costo de mantenimiento y

de bajo impacto ambiental. Las principales desventajas son los costos de instalación

elevados y la falta de información generaliza y de procedimientos de validación.

Calentamiento mediante radiaciones electromagnéticas (microondas, radio-

frecuencias e infrarrojo)

En el caso de microondas y radio-frecuencia el calentamiento se produce debido a

que la energía dieléctrica induce la fricción molecular de moléculas de agua. El

Page 33: Estado del arte y tendencias de la ciencia y tecnología del

29

campo eléctrico alternando a alta frecuencia fuerza a las moléculas polares (por

ejemplo agua) a realinearse constantemente. El movimiento molecular es muy rápido

y produce la generación de calor en el interior del alimento debido a la energía

disipada por la fricción molecular. Las frecuencias utilizadas en microondas pueden

variar dependiendo de la aplicación y del país. Por ejemplo, en los Estados Unidos se

aplican frecuencias de 2450 MHz para los hornos domésticos y 2450 y 915 MHz para

sistemas industriales. En otros países las frecuencias utilizadas en microondas

pueden ser 433,92 MHz, 896 MHz y 2375 MHz. En el caso de radio-frecuencia, las

frecuencias autorizadas son 13,56; 27,12 y 40,68 MHz. El calentamiento por

microondas es afectado significativamente por el contenido de humedad de los

alimentos, resultando mejor el calentamiento cuanto mayor es el contenido de agua.

En los dos métodos de calentamiento (microondas y radio-frecuencias) los

microorganismos son inactivados fundamentalmente por efecto térmico y si bien

puede existir un efecto de la radiación (componente no térmico) sobre la inactivación

de los microorganismos, este efecto es despreciable para las condiciones operativas

utilizadas normalmente. A su vez, ambas radiaciones no tienen la suficiente energía

como para producir la ruptura de enlaces covalentes, por lo que ambas corresponden

al grupo de energías no ionizantes.

El calentamiento por microondas se aplica tanto a nivel doméstico (calentar alimentos

preparados y líquidos y cocinar alimentos crudos) como industrial. Este método es

bien conocido y aceptado por los consumidores. Las principales aplicaciones del

calentamiento por microondas en el procesamiento de alimentos son

recalentamiento, horneado (panificados), cocción, escaldado, atemperado (productos

cárnicos), pasteurización (leche fluida), esterilización (productos preparados), secado

(pastas, snacks, tortas de arroz inflado, trozos de cebolla) y liofilización. Las

aplicaciones industriales orientadas a la preservación de alimentos son escasas. En

Europa y Japón se comercializan algunos productos procesados por microondas. A

su vez, en los Estados Unidos, la Food and Drug Administration (FDA) aprobó la

esterilización por microondas en un sistema continuo (puré de batata envasado en

forma aséptica) y en un sistema semicontinuo (para alimentos preenvasados). En

Page 34: Estado del arte y tendencias de la ciencia y tecnología del

30

ambos casos la regulación de aplicación es la correspondiente a alimentos de baja

acidez envasados.

Los principales problemas asociados a la aplicación industrial del calentamiento por

microondas son las dificultades vinculadas al control del proceso y al alto costo

energético. Los cambios de las propiedades dieléctricas de los productos durante el

calentamiento no están aun completamente entendidos o modelados y la validación

de los procesos debe ser realizada en forma individual para cada producto, hechos

que retardan la adopción de la tecnología a escala industrial.

El calentamiento por radio-frecuencia presenta algunas ventajas en relación al

calentamiento por microondas, como la penetración a mayor profundidad en el

alimento (debido a que utiliza mayores longitudes de onda). Por otra parte, la

construcción de sistemas de calentamiento de mayor capacidad es más simple en el

caso de radio-frecuencia que en el calentamiento con microondas y su aplicación en

procesos continuos es directa. El calentamiento por radiofrecuencia se presenta

como una alternativa para alimentos particulados debido a la mayor velocidad y

uniformidad del calentamiento y a la capacidad de penetración en el alimento. La

adopción de esta tecnología por parte de la industria no se ha dado debido a la falta

de información sobre propiedades dieléctricas de los alimentos, la necesidad de

desarrollos que incorporen los avances tecnológicos y la evaluación apropiada de su

potencial económico.

En el caso del calentamiento por infrarrojo (IR), la energía es absorbida por el

alimento y convertida en calor y su extensión depende de la superficie y del color del

alimento. La conductividad térmica de los alimentos es un factor limitante en el

calentamiento infrarrojo. La profundidad de penetración en el alimento es menor en

el caso de la energía radiante (infrarrojo) que en la energía dieléctrica (microondas y

radio-frecuencia). Se utiliza mayoritariamente para modificar la calidad sensorial de

los alimentos (cambio de color, sabor y aroma), aunque recientemente se han

evaluado, a escala piloto, diferentes tratamientos (combinados o secuenciales)

orientados a la preservación de diversos productos: combinación de escaldado y

Page 35: Estado del arte y tendencias de la ciencia y tecnología del

31

secado de productos frutihortícolas, aplicación secuencial de IR y liofilización de

frutillas, pasteurización de almendras con IR, etc.

Procesamiento sous vide

Uno de los métodos tradicionales utilizado en Francia para la preparación de comidas

es la cocción en papillote, la cual consiste en cocinar a los alimentos envueltos en

papel apto para horno. Es así que en la década del 60, utilizando este concepto e

impulsado por el desarrollo de envases plásticos seguros y estables aún a

temperaturas elevadas, fue posible el desarrollo de la cocción sous vide. El chef

Georges Pralus, en 1967, observó que envasando una terrina de fois gras en una

bolsa plástica al vacío y sumergiéndola en un baño de agua caliente a temperatura

controlada obtenía pérdidas de peso por cocción significativamente menores a la

cocción tradicional. También observó una mejora en las propiedades sensoriales

debido a que la película plástica formó una barrera que evitaba la pérdida de aromas

causada por la evaporación y la preservación de la textura natural debido a la

aplicación de bajas temperaturas de cocción.

La tecnología sous vide integra el grupo de tecnologías denominadas cook-chill. Para

diferenciarlas de las otras tecnologías de ese grupo, el Sous Vide Advisory Committee

(SVAC, 1991) estableció la siguiente definición para ese sistema de cocción-

pasteurización: “sous vide es un sistema en el que los alimentos crudos o

parcialmente cocidos son envasados al vacío dentro de una bolsa o recipiente de

laminado plástico, cocidos-pasteurizados en un sistema de cocción controlado,

enfriados en forma rápida y finalmente almacenados a temperaturas de refrigeración,

particularmente entre 0-3°C”.

Dado que la tecnología de cocción-pasteurización sous vide es un sistema de

procesamiento mínimo de los alimentos, en su formulación no contienen

preservantes o bien están presentes en cantidades reducidas, en comparación con

las que normalmente utiliza la industria. Una de las ventajas principales del sistema

Page 36: Estado del arte y tendencias de la ciencia y tecnología del

32

sous vide es que la cocción se realiza a temperaturas moderadas y en forma

controlada (con variaciones de temperatura entre 0,5 y 1ºC). Este aspecto resulta

relevante en la cocción de carnes de diferentes especies, debido a que la misma

debe realizarse en rangos específicos de temperatura, a fin de minimizar el efecto

sobre las proteínas miofibrilares y favorecer la solubilización del colágeno. Otra de las

ventajas asociadas a la cocción bajo vacío es la extensión de la vida útil de los

productos, ya que la baja presión de oxígeno inhibe el deterioro microbiológico y

reduce la oxidación de los lípidos, ambos generadores de off-flavors durante el

almacenamiento en frío. La calidad sensorial también se mantiene ya que previene

las pérdidas por evaporación de agua y de compuestos volátiles (determinantes del

flavor) durante la cocción. Además, se conserva la calidad nutricional de los alimentos

debido a las menores pérdidas por oxidación o difusión de nutrientes, como las

vitaminas.

Otro aspecto fundamental del envasado al vacío es el ambiente anaeróbico que se

genera, el cual promueve la ausencia de microflora aerobia alteradora. En estas

condiciones se pueden desarrollar microorganismos patógenos anaerobios estrictos

o facultativos. En la tecnología sous vide, los patógenos relevantes para el diseño del

proceso térmico son los microorganismos formadores de esporos, Clostridium

botulinum (tipo E y cepas no proteolíticas tipos B y F), C. perfringens y Bacilus cereus

y, entre las células vegetativas, L. monocytogenes. En el caso de abuso de

temperatura durante el almacenamiento serían relevantes Salmonella spp,

Staphlylococcus aureus y Escherichia coli. Generalmente, en los productos sous vide,

el pH, la actividad de agua y la concentración de sal presentan valores más elevados

que los que limitan el crecimiento de estos microorganismos patógenos. Por esta

razón, para garantizar la inocuidad de este tipo de alimentos, se utiliza una

combinación de tratamiento térmico, temperatura de almacenamiento y limitación del

tiempo de vida útil. En Europa, los protocolos de BPM para alimentos sous vide

(ACMSF y Chilled Food Association) recomiendan asegurar una reducción de 6 ciclos

logarítmicos (6D) de esporas de Clostridium botulinum no proteolítico (tipo B)

mediante pasteurización térmica o combinación de tratamientos. Los tratamientos

térmicos recomendados son relativamente severos, (90°C–10 min en el punto frío del

Page 37: Estado del arte y tendencias de la ciencia y tecnología del

33

producto o tratamiento de letalidad equivalente), los cuales pueden comprometer la

calidad sensorial del alimento. En América del Norte, las recomendaciones se basan

en los principios y prácticas del sistema HACCP y sugieren a los procesadores aplicar

combinación de diferentes barreras (tecnología de obstáculos), adecuadas a cada

producto en particular, realizar ensayos de desafío para validar la eficacia de esas

barreras y utilizar indicadores tiempo-temperatura para evaluar las condiciones de

almacenamiento y distribución de los productos. En los Estados Unidos se

recomienda diseñar el tratamiento de pasteurización para lograr 7 reducciones

decimales de Salmonella spp en productos cárnicos (USDA) y 6 reducciones de L.

monocytogenes en productos preparados con carne de pescado (FDA).

Para lograr productos sous vide de vida útil extendida resulta necesario combinar el

tratamiento de pasteurización térmica con otras barreras adicionales (ácidos

orgánicos, sal). Otra alternativa que se ha utilizado en los últimos años, es congelar

los productos luego de la pasteurización, lo que permite extender la vida útil en forma

significativa y evitar los problemas de abuso de temperatura en la cadena de frío

cuando los productos se comercializan en zonas geográficas extensas, como en

América del Norte.

Tecnologías de Procesamiento no Térmico

Procesamiento con altas presiones

El procesamiento con altas presiones, también denominado procesamiento con altas

presiones hidrostáticas (APH) consiste en la aplicación de una presión constante,

entre 100 y 900 MPa (megapascales) por tiempos cortos (<10 min), sin elevación

significativa de la temperatura de los alimentos. En los equipos disponibles a escala

industrial la máxima presión que se aplica es 600MPa, a temperatura ambiente o de

refrigeración. Si bien existen equipos para tratamiento semicontinuo de alimentos

fluidos a granel (por ejemplo, jugos de frutas), la mayoría de los equipos disponibles

son de tipo discontinuo, para el tratamiento de alimentos sólidos, semisólidos o

Page 38: Estado del arte y tendencias de la ciencia y tecnología del

34

líquidos envasados. Los alimentos que incluyen aire en su estructura como pan o

mousse no se pueden tratar con altas presiones porque se afectaría su estructura

debido a la diferencia en la compresibilidad entre el alimento y el aire. Tampoco se

aplica a alimentos con actividad de agua muy baja (frutas secas, especias).

Asimismo, los envases deben ser flexibles para asegurar la transmisión de la presión

(no se utilizan envases de vidrio o metal). En general, las APH a temperaturas de

refrigeración o ambiente producen la inactivación de microorganismos vegetativos y

enzimas, sin modificar los atributos sensoriales y las propiedades nutricionales

(particularmente vitaminas) de los productos. Es por ello que su característica más

importante es la conservación de la “frescura” de los alimentos. Además, los

tratamientos con APH permiten duplicar o triplicar la vida útil de los alimentos

respecto a los productos no tratados. En relación a la inactivación de

microorganismos vegetativos patógenos, las altas presiones permiten alcanzar

importantes reducciones decimales en los recuentos de Listeria monocytogenes,

Escherichia coli y Samonella spp. Es por ello que en 2006, el Food Safety and

Inspection Service (FSIS, USDA, Estados Unidos) reconoció a la alta presión como un

tratamiento de pasteurización post-envasado adecuado para lograr productos listos

para consumir (feteados/porcionados/pelados) libres de L. monocytogenes, en

combinación con un agente antimicrobiano (Listeria rule Alternative I).

A su vez, los tratamientos con APH satisfacen el requerimiento de la Food and Drug

Administration (FDA, Estados Unidos) de asegurar cinco reducciones decimales de

microorganismos patógenos (particularmente E. coli O157:H7) en jugos. La

combinación de alta presión y temperatura permite inactivar esporos bacterianos. En

este sentido, en 2009 la FDA aprobó un proceso de esterilización térmica asistido por

alta presión, que fue enmarcado en la regulación para alimentos envasados de baja

acidez. Este proceso aprovecha el calentamiento rápido y uniforme hasta la

temperatura final deseada, que se produce durante la compresión cuasi adiabática

hasta la presión prefijada. A su vez, luego de unos pocos minutos (tiempo de

mantenimiento), la presión es liberada (descompresión) y la temperatura del producto

Page 39: Estado del arte y tendencias de la ciencia y tecnología del

35

retorna al valor original. Este proceso resulta menos severo sobre la calidad sensorial

y nutricional de los alimentos que la esterilización térmica convencional.

En la actualidad, en los países desarrollados, se comercializan más de 150 productos

tratados mediante la tecnología APH. La aplicación comercial más importante es la

pasteurización fría y la mayor cantidad de productos comerciales son productos de

origen vegetal (incluyendo jugos) así como productos cárnicos y en menor proporción

alimentos de origen marino y productos lácteos. Resulta importante la cantidad de

jugos premium, licuados y purés de frutas y hortalizas tratados con APH disponibles

en los países desarrollados. Varios de esos productos son elaborados a partir de

materias primas orgánicas y en su preparación no se incorporan aditivos,

aprovechando la estabilidad que le otorga el tratamiento con APH, sumado a la

ventaja de la alta calidad sensorial y nutricional (alto contenido de vitaminas) de la

materia prima. A su vez, se destaca la cantidad de productos listos para consumir

producidos en base a carnes preparadas de diferentes formas (curadas, marinadas,

cocidas).

En estos productos también se aprovecha la posibilidad que brinda la tecnología APH

en relación a la reducción o eliminación de agentes conservantes (etiquetado limpio),

para ofrecer al mercado productos más naturales. En el caso de algunos productos

de origen marino la tecnología se utiliza a nivel comercial para optimizar la separación

de la carne de conchas y caparazones (ostras, langostas, etc.). En relación a los

productos lácteos, parecería poco probable que la tecnología APH desplace en el

futuro próximo a los tratamientos térmicos como tecnología de pasteurización de

leche fluida. Sin embargo habría algunos nichos de productos lácteos para los cuales

el tratamiento térmico resulta inadecuado y para los que se podría mejorar la

inocuidad y extender vida útil a través de las altas presiones, por ejemplo en quesos

frescos y quesos preparados con leches crudas.

Debido al efecto sobre las macromoléculas, las altas presiones pueden inducir

efectos específicos en la textura y microestructura de un determinado alimento, por

lo que se utilizan también para el desarrollo de nuevos productos y optimizar

procesos convencionales de la industria de los alimentos. En este sentido, se han

Page 40: Estado del arte y tendencias de la ciencia y tecnología del

36

realizado varios estudios para evaluar el efecto de la tecnología de altas presiones

sobre el tiernizado y curado de carnes y madurado de quesos. Además se ha aplicado

la tecnología APH como etapa previa a operaciones unitarias o procesos industriales

convencionales como escaldado o deshidratación de productos frutihortícolas,

extracción ó infusión de compuestos activos en productos vegetales, etc. A su vez,

pueden ser aplicados otros procesos convencionales durante el tratamiento con APH,

como por ejemplo, gelación, congelación (pressure shift freezing) y descongelación

(pressure assisted thawing). Cabe señalar que todas estas aplicaciones especiales de

las altas presiones han sido estudiadas a escala de laboratorio o planta piloto pero no

han sido incorporadas a nivel industrial hasta el presente.

Uno de los principales inconvenientes asociados a la tecnología APH es el carácter

discontinuo de los sistemas, lo que determina que la producción sea baja. Otro

inconveniente es que el costo de inversión es elevado. En relación a este aspecto, en

los Estados Unidos existen algunas empresas que ofrecen el servicio de tratamiento

APH y la logística asociada. En consecuencia, empresas medianas y pequeñas

pueden acceder a esta tecnología para el tratamiento de sus productos sin la

necesidad de grandes inversiones.

Por último, debe señalarse que la tecnología APH consume menos energía que las

tecnologías convencionales de procesamiento térmico, por lo que los productos

tratados con altas presiones resultan competitivos a nivel comercial.

Campos eléctricos pulsados

La tecnología basada en campos eléctricos pulsados de alta intensidad (sigla en

inglés PEF) es un método de preservación de naturaleza no térmica basada en la

aplicación de campos eléctricos para inactivar microorganismos patógenos y

controlar microorganismos alteradores en alimentos líquidos o semilíquidos. Esta

tecnología se limita a productos que puedan ser transportados por bombas para su

tratamiento continuo, ya que los sistemas discontinuos resultan caros e ineficientes.

Page 41: Estado del arte y tendencias de la ciencia y tecnología del

37

A su vez, la aplicación a alimentos sólidos en polvos resulta ineficaz debido a la baja

fuerza dieléctrica del aire y la reducida humedad de los materiales. Sin embargo, la

tecnología PEF ha sido aplicada con éxito a alimentos semisólidos (yogur, arroz con

leche), líquidos viscosos y líquidos con partículas suspendidas (caviar en solución

salina, sopa de arvejas), siempre que puedan ser bombeados. Mediante la tecnología

PEF, pueden ser inactivadas la mayoría de las células vegetativas, aunque los esporos

bacterianos son más resistentes y existe controversia sobre la efectividad de esta

tecnología en su inactivación. Este aspecto se presenta como un obstáculo para la

aplicación de PEF en la esterilización comercial de alimentos.

El mecanismo de inactivación de los microorganismos por efecto de los campos

eléctricos pulsados aun no ha sido completamente establecido, pero la mayoría de

los trabajos en este campo sugieren que los PEF producen la disrupción de la

membrana celular. La ventaja principal de la tecnología PEF, en relación a la

pasteurización térmica, es la retención del color, sabor (flavor), textura y valor

nutricional de los productos frescos (no tratados), asegurando similar nivel de

inocuidad que la pasteurización. La preservación de los atributos sensoriales y las

propiedades nutricionales se debe a que el tratamiento se realiza a temperaturas

moderadas, a menudo a temperatura ambiente. Resulta además particularmente

interesante en el procesamiento de productos que contienen componentes sensibles

al calor, como proteínas del suero e inmunoglobulinas. Otra ventaja importante es su

bajo costo operativo en relación a los tratamientos térmicos.

En este método, el alimento es ubicado en una cámara de tratamiento que dispone

de dos electrodos conductores montados sobre un material no conductor. Se aplica

un pulso de alto voltaje a los electrodos para inducir un campo eléctrico de alta

intensidad sobre el alimento ubicado entre los electrodos. El pulso generado por la

descarga de energía eléctrica desde un capacitor es extremadamente corto (1-100

microsegundos), mientras el intervalo entre descargas es comparativamente largo (1

milisegundo). El número de pulsos puede variar de 1 a 100 y el tiempo de tratamiento

total es generalmente inferior al un segundo. La intensidad del campo eléctrico es

directamente proporcional al voltaje aplicado a través de los electrodos e

Page 42: Estado del arte y tendencias de la ciencia y tecnología del

38

inversamente proporcional a la distancia entre los electrodos. La tecnología PEF

usualmente requiere voltajes en el rango 20 a 60 kV. Los campos eléctricos tienen un

efecto volumétrico, asegurando una aplicación rápida y homogénea del principio letal

a través de todo el producto tratado.

En estudios de laboratorio y planta piloto, la aplicación de la tecnología PEF ha

resultado exitosa en la extensión de vida útil de jugos de frutas, huevo líquido y leche,

como un sustituto o complemento de la pasteurización térmica. Si bien actualmente

están disponibles equipos PEF a escala industrial (existen al menos tres compañías

que producen equipos tanto a escala piloto como comercial), han sido escasas las

aplicaciones comerciales de esta tecnología en el campo de la preservación de

alimentos. El primer producto comercial fue una línea de jugos de frutas

pasteurizados mediante PEF, los cuales fueron introducidos en Oregon (Estados

Unidos) en agosto de 2005 por la empresa Genesis Juice Corporation, luego que el

producto fue aprobado por la FDA. En 2007, la empresa quebró y vendió la marca

comercial y actualmente los jugos Genesis Juice (orgánicos) disponibles en el

mercado son pasteurizados mediante la tecnología APH.

Otras aplicaciones de la tecnología PEF que han sido exploradas son la extracción de

contenido celular, a través del aumento de la permeabilidad de la membrana celular.

Este efecto ha sido aprovechado para incrementar el rendimiento en la producción de

jugos de frutas, mejorar la extracción de componentes de interés comercial

(pigmentos, flavors) e incrementar la eficiencia de extracción en el proceso de

producción de azúcar a partir de remolacha. Otras aplicaciones que se evaluaron

fueron la infusión asistida (con PEF) de solutos en tejidos biológicos y la

descontaminación de aguas residuales de la industria alimentaria. En relación a esta

última aplicación, cabe señalar que en 2006 se ha instalado en Arizona una planta

industrial (10.000 l/h) para el tratamiento de aguas residuales, la cual continúa hoy

operando. Se espera que una investigación más profunda relativa a la aplicación de la

tecnología PEF en la preservación de alimentos y el desarrollo de nuevos sistemas de

potencia pulsada y el diseño y construcción de cámaras de tratamiento robustas y de

Page 43: Estado del arte y tendencias de la ciencia y tecnología del

39

larga duración, permitan que los equipos PEF resulten menos costosos y se

incremente la aplicación de la tecnología a escala industrial.

Ultrasonido

Se define como ultrasonido a las ondas sónicas con frecuencias mayores que el

umbral de la audición humana (16-20 kHz). Actualmente se considera que la mayoría

de los fenómenos que ocurren durante la sonicación se deben al efecto de

cavitación. Este efecto se produce por la formación y evolución

(expansión/compresión) de burbujas de gases que se producen por los ciclos de

compresión y expansión que generan las ondas de sonido al propagarse en un medio

líquido. La cavitación puede ser “estable” (se produce en ultrasonido de baja

potencia, cuando las ondas sónicas son de frecuencia alta y amplitud baja, a

presiones entre 1 y 100 kPa) o “transiente” (se produce en ultrasonido de alta

potencia, por colisión de burbujas debido a aumento de tamaño con incremento de

temperatura y presión). El efecto del ultrasonido depende del número de burbujas

bajo cavitación y la intensidad de las implosiones de las burbujas (cavitación

transiente). El número de burbujas bajo cavitación aumenta al disminuir el umbral

respectivo (depende de la frecuencia de las ondas de ultrasonido, del radio inicial de

la burbuja, de la presión hidrostática y de la temperatura) y al incrementar la amplitud

de las ondas de ultrasonido. A amplitudes mayores, la mayoría del volumen del

medio líquido está sometido a cavitación.

Diferentes factores pueden afectar la efectividad de la tecnología de ultrasonido,

aunque en el procesamiento de alimentos los más importantes son la frecuencia y la

amplitud de las ondas de ultrasonido, presión hidrostática y temperatura. El

ultrasonido puede ser dividido en tres rangos de frecuencias: ultrasonido de potencia

(16-100 kHz), ultrasonido de alta frecuencia (100 kHz-1 MHz) y ultrasonido diagnóstico

(1-10 MHz). El ultrasonido de potencia es el utilizado para la mayoría de las

aplicaciones sonoquímicas y en general los procesos operan en el rango óptimo de

17-24 kHz, a la cual se obtiene la máxima energía de cavitación. A frecuencias muy

Page 44: Estado del arte y tendencias de la ciencia y tecnología del

40

altas (1 MHz), la cavitación esta más impedida y a frecuencias superiores a 2,5 MHz

no se produce. La amplitud minima de presión acústica depende de las

características fisicoquímicas del líquido y del gas disuelto. La presión hidrostática y

la temperatura también influyen sobre la cavitación. Presiones hidrostáticas muy altas

minimizan la cavitación porque evita la difusión de gas desde las burbujas. A su vez,

el umbral de cavitación decrece a medida que la temperatura incrementa (el umbral

se vuelve cero a la temperatura de ebullición del líquido).

El uso de la tecnología de ultrasonido de alto poder en la industria de los alimentos

se ha extendido a numerosas aplicaciones, las cuales se pueden clasificar en los

siguientes cinco grupos: extracción; emulsificación/homogeneización/molienda;

limpieza/sanitización/preservación; anti-espumado y modificación de viscosidad.

El ultrasonido se aplica con el fin de extraer compuestos orgánicos a partir de plantas

y semillas, como por ejemplo la extracción de azúcar de remolacha azucarera,

proteínas de la soja, polifenoles y sólidos de hojas de té, de antocianinas e

incremento de la densidad del color en mostos durante la vinificación de vinos Pinot

Noir y Cabernet Sauvignon. Estas son alternativas económicas y sustentables (por

menor consumo de energía y/o reemplazo de solvente por agua) a los métodos de

extracción tradicional. Cavitus Pty Ltd. ha desarrollado sistemas comerciales para

extracción utilizando ultrasonido de alta potencia para su aplicación en la industria de

bebidas y alimentos.

Otra aplicación del ultrasonido es el mezclado eficiente de líquidos inmiscibles, a

través de la energía de cizallamiento generada por la cavitación. En estos casos se

obtienen emulsiones muy finas altamente estables. Se evaluó su utilización en

productos como jugos de frutas, mayonesas y ketchup, en los cuales se redujo o se

eliminó la incorporación de emulsificantes para mantener la estabilidad de los

mismos.

En relación a la aplicación como antiespumante, el ultrasonido de alto poder se utiliza

para romper espumas a través de un transductor de alta energía, el cual no interfiere

Page 45: Estado del arte y tendencias de la ciencia y tecnología del

41

con el proceso y puede ser fácilmente instalado en las líneas de proceso existentes.

Se aplica en procesos de llenado de latas de alta velocidad y también en la disipación

de espumas en fermentadores de cerveza.

Actualmente, se observa un interés creciente en la aplicación de ultrasonido de alta

potencia en la preservación de alimentos. La aplicación de ultrasonido a presión

atmosférica sería eficaz en la inactivación de células vegetativas pero no en la

inactivación de esporos bacterianos. Los tratamientos con ultrasonido presentan la

ventaja que las diferentes especies de bacterias patógenas presentan un rango de

sensibilidad más acotado (los tiempos de reducción decimal difieren como máximo 5

veces) que en el caso de la pasteurización térmica. La combinación de ultrasonido

con presión (manosonicación) permite incrementar la eficacia del ultrasonido para

inactivar células vegetativas y también resulta eficaz en la invactivación de esporos

bacterianos, aunque en forma limitada, lo cual restringiría su aplicación como método

de esterilización de alimentos. La combinación de calor y ultrasonido bajo presión

(manotermosonicación) posibilitaría una inactivación de bacterias más rápida,

permitiendo reducir el tiempo de tratamiento por efecto aditivo o sinérgico.

En general, la aplicación de la manosonicación y manotermosonicación, con el objeto

de incrementar la inocuidad y extender vida útil de los alimentos, presenta ventajas

si se aplica en alimentos sensibles a los tratamientos térmicos o cuando la materia

prima esta contaminada con especies bacterianas que presentan muy alta resistencia

a los tratamientos térmicos o cuando se observa protección de los microorganismos

a la inactivación térmica, por efecto de los componentes del alimento.

Radiación ultravioleta

Esta tecnología se clasifica como no térmica. La radiación ultravioleta (UV) se

encuentra en el rango 100 a 400 nm de longitudes de onda del espectro

electromagnético, entre el espectro de luz visible y el de rayos X. A su vez, el rango

de radiación UV se subdivide en tres espectros: UV-A (315-400 nm -nanómetros), UV-

Page 46: Estado del arte y tendencias de la ciencia y tecnología del

42

B (280 – 315 nm) y UV-C (200-280 nm). La radicación UV-C se denomina la radiación

UV germicida debido a que la mayoría de los microorganismos absorbe radiación UV

a 254 nm, lo cual produce desplazamiento de electrones y ruptura de enlaces en el

ADN, evitando la multiplicación de microorganismos patógenos vegetativos. La

longitud de onda más efectiva para la inactivación de microorganismos es

aproximadamente 260 nm, debido a que estas longitudes de onda son

específicamente absorbidas por el ácido desoxirribonucléico (ADN) celular, pero dado

que la composición del ADN varía entre especies de microorganismos, normalmente

el rango de absorción de radiación UV-C que se indica es 260–265 nm. La longitud de

onda correspondiente a la emisión principal de las lámparas de mercurio de baja

presión (253,7 nm) se encuentra en ese rango. La presencia de suspensiones densas

de células y/o altas concentraciones de solutos reducen la penetración de la

radiación UV-C y disminuye su efecto germicida, por lo que será necesario

incrementar la dosis de radiación UV-C.

La radiación UV es un método adecuado para desinfectar superficies y corrientes de

fluidos como agua y aire y alimentos líquidos con baja absorción en el rango de

longitudes de onda de UV-C. Debido a su baja penetración se utiliza para desinfectar

superficies sólidas (lisas y sin polvos), incluyendo la esterilización de envases y

materiales para envasado como botellas, contenedores, tapas y envolturas. Se utiliza

en la etapa de llenado aséptico de productos esterilizados a granel en sistemas de

flujo con tratamientos a ultra alta temperatura. La aplicación más exitosa de la

tecnología UV-C en desinfección ha sido en el tratamiento de aguas para consumo

humano y aguas residuales. La aplicación a otros líquidos depende de las

características de absorción de los mismos. En este sentido existe un creciente

interés en la aplicación de la radiación UV para la pasteurización de jugos de frutas y

néctares ya que este tratamiento permite conservar el aroma, color y contenido de

vitaminas inalterados, a diferencia de los tratamientos de pasteurización y

esterilización térmica. A su vez, consume menos energía que la pasteurización

térmica.

Page 47: Estado del arte y tendencias de la ciencia y tecnología del

43

La desventaja principal de la luz UV como desinfectante es su baja penetración, por lo

que los microorganismos para ser inactivados deben estar expuestos en forma

directa a la radiación. Los microorganismos protegidos por sólidos, como partículas,

polvo o recubrimientos, no son afectados por la radiación.

Plasma frío

El plasma es el cuarto estado físico de la materia y se genera por la aplicación de

energía térmica o de campos eléctricos y magnéticos usando fuentes de

radiofrecuencia o microondas a algunos gases específicos. El plasma gaseoso resulta

eléctricamente conductivo debido a la ionización y la liberación de electrones. A su

vez, el plasma contiene iones, radicales y moléculas cargadas en estados energéticos

excitados, los que decaen a niveles de menor energía liberando fotones de diferente

longitud de onda en el espectro visible y ultravioleta. El plasma puede ser de alta

temperatura (gases completamente ionizados) o plasma fresco (cool), frío (cold) o de

baja temperatura. En este último el gas es parcialmente ionizado y la energía

aplicada es solo la necesaria para mantener el flujo de electrones.

El plasma puede ser generado y mantenido bajo vacío o a presión atmosférica,

mediante campos eléctricos a partir de corriente directa, corriente alterna, corriente

directa pulsada, radio frecuencia, microondas o rayos láser. Asimismo, puede ser

producido con cualquier gas aunque generalmente se utilizan gases inertes

(nitrógeno, argon, helio) y el gas específico se selecciona en función de la aplicación.

Los gases inertes como el argón se utilizan para descontaminación superficial debido

a que generan luz UV y requieren menor energía para la ionización, resultando más

sencillo mantenerlos fríos.

En los últimos años ha comenzado a desarrollarse la aplicación del plasma frío en la

industria farmacéutica y alimenticia, orientada fundamentalmente a la

descontaminación y modificación de la funcionalidad de superficies de materiales

biomédicos y dispositivos. Las aplicaciones principales incluyen el reemplazo de

Page 48: Estado del arte y tendencias de la ciencia y tecnología del

44

fumigación o irradiación en productos como hierbas y especias. Otras aplicaciones

posibles serían la desinfección superficial de polvos, huevos en cáscara, carnes,

pescados, vegetales frescos en reemplazo de tratamientos químicos existentes u

otros tratamientos para higienizar superficies.

Las ventajas del plasma frío para su aplicación en alimentos son: la ausencia de

residuos, la rapidez en su aplicación, el efecto bactericida (debido a la luz UV) y el

hecho a que el plasma revierte a un gas inerte cuando se desconecta la fuente de

energía. Si bien la luz UV pulsada se aplica comercialmente para la descontaminación

superficial de envases, su aplicación a la superficie de alimentos estaría limitado por

el denominado “efecto sombra”. A su vez, en aquellas situaciones donde el plasma

frío presenta un efecto bactericida o fúngico limitado, puede ser utilizado para aplicar

recubrimientos antimicrobianos o antifúngicos. El plasma frío ha resultado efectivo en

la inactivación de células y esporos bacterianos sobre superficies, obteniéndose

reducciones mayores a 4 ciclos log.

Existen diferentes empresas e instituciones que trabajan en el desarrollo y la

aplicación de diferentes prototipos de plasma frío para aplicaciones en alimentos

(escala laboratorio o piloto), por ejemplo Commonwealth Scientific and Industrial

Research Organisation (CSIRO) en Australia o Leibniz Institute for Plasma Science and

Technology en Alemania, sin embargo aún no se dispone de equipos de escala

industrial, con la excepción de la tecnología e-beam de baja energía.

Tecnologías de membranas

Este tema es tratado en este documento dentro del Capítulo 5, en el ítem 5.2:

“Producción más limpia”.

Page 49: Estado del arte y tendencias de la ciencia y tecnología del

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4. ESTADO DEL ARTE Y TENDENCIAS DE LA CIENCIA Y

TECNOLOGÍA DEL PROCESAMIENTO DE ALIMENTOS EN

ARGENTINA

Claudia González, Sergio Vaudagna, Ricardo Rodríguez,

Martín Irurueta, Mónica Chávez y Roxana Páez

4.1. Antecedentes y perspectivas

El análisis del estado de la ciencia en el mundo y particularmente en Iberoamérica

realizado por la RICyT (Red Iberoamericana de Indicadores de Ciencia y Tecnología)

ofrece una idea acabada de la situación actual y las tendencias en tecnología de

alimentos además de proporcionar el marco para avanzar en la situación particular de

Argentina.

La estructura socioeconómica de América Latina durante el periodo 1999-2008 tuvo

un incremento del producto bruto interno (PBI), el cual fue acompañado por un

aumento de las inversiones en ciencia y tecnología, especialmente en lo que a I+D

se refiere. Se estima que el sector privado (empresas) participa en esta inversión con

aproximadamente un 35-45%. En cuanto al número de investigadores EJC

(equivalencia jornada completa) dedicados al desarrollo de actividades científicas-

tecnológicas, el bloque de América Latina y Caribe ha logrado un notable incremento

durante el periodo de 10 años estudiado. Sin embargo, este número representa un

porcentaje bajo respecto del número total de investigadores EJC del resto del

mundo. Al respecto, la mayor parte de estos profesionales trabajan en I+D en el

sector privado. De ellos, los profesionales dedicados a las ciencias exactas y

naturales, así como a la ingeniería y tecnología representan un número pequeño

comparado con los profesionales de otras ciencias, como las sociales y humanas.

Page 56: Estado del arte y tendencias de la ciencia y tecnología del

52

Como resultado de las crisis de orden interno ocurridas en muchos de los países de

la región, así como a situaciones particulares que marcaron tendencias a nivel

mundial, se han podido definir ciertos factores que afectarían el perfil del

consumidor. En Iberoamérica se han producido cambios en la estructura social que

no siempre fueron parejos. Este periodo de crecimiento se caracterizó por ser

inclusivo y permitir la reducción de los niveles de desigualdad de ingresos de manera

importante, aunque comparado con otras regiones del mundo esta desigualdad

continua siendo significativa. Respecto a la reducción de la pobreza, objetivo central

de muchos de los países de la región, se ha logrado disminuir con creces (40%) y se

considera una propensión a continuar con esa tendencia.

Específicamente en lo que toca a la ciencia y tecnología de los alimentos, es posible

afirmar que su impacto en el sector macroeconómico, así como en el aspecto social

y político de Iberoamérica ha tenido y tiene una importancia altamente significativa. Si

bien la actual coyuntura ha favorecido el intercambio con el mercado internacional,

produciéndose un aumento de la exportación de productos agroalimentarios a la

Unión Europera, los Estados Unidos y a los mercados asiáticos, se percibe que para

mantener la competitividad de los productos se requerirá, en el futuro, un mayor

grado de innovación y de desarrollo tecnológico, así como la incorporación de más

normas de calidad así como mayor eficiencia en la gestión y comercialización de los

productos agroalimentarios. Con este marco de referencia, se realizó un análisis de la

información contenida en las bases de datos bibliográficas y de patentes de

invención, manera fin de obtener información relativa a la investigación y a la

aplicación industrial, respectivamente4, se consultó la base de datos de la

Organización Mundial de la Propiedad Intelectual (WIPO).

Por otro lado, en el grupo iberoamericano, los cinco países que se destacan por

concentrar la mayor producción científica son España, Brasil, Portugal, Argentina y

4 Luchilo, L. (2013). Capacidades de I+D del sistema agroalimentario y cadenas de valor: Proyecto

MINCyT-BIRF: Estudios del Sector Agroindustria. Serie Documentos de Trabajo N*11, Cap. 2. Buenos Aires, Julio.

Page 57: Estado del arte y tendencias de la ciencia y tecnología del

53

México. En el caso de Argentina, las disciplinas de mayor peso fueron Química

Aplicada, Bioquímica y Biología Molecular, Nutrición y Dietética, Biotecnología y

Microbiología Aplicada, Microbiología Ingeniería Química y Química Analítica, en ese

orden. Se pone de relevancia un único bloque temático fuertemente ramificado,

conformado por 34 disciplinas y articulado en torno a tres subnúcleos: Biotecnología

y Microbiología Aplicada, Microbiología y Agricultura y Ganadería, indicativo de los

patrones y tendencias en investigación en el campo de la tecnología de alimentos en

nuestro país.

En lo referente a las patentes de invención, se abre un análisis interesante enfocado

en el desarrollo tecnológico, dando cuenta de la evolución de las actividades

orientadas a la creación de nuevos productos y procesos.

La producción tecnológica iberoamericana en ciencia y tecnología de alimentos

alcanzó el 4% de las patentes concedidas en 2005-2009. Los países que destacan en

este rubro son España, Brasil, México, Portugal y Chile. A nivel mundial, la titularidad

de las patentes se sitúa en torno a las grandes empresas multinacionales, en cambio

el liderazgo en patentes en Iberoamérica lo posee el CSIC de España, una institución

de investigación y del sector público, con lo que se insinúa un débil entramado

empresarial en la región.

En el periodo citado, los principales campos de aplicación de la patentes en

alimentos en el mundo fueron: alimentos o productos alimenticios y su tratamiento;

ciencias médicas o veterinarias; cocción en horno (equipamiento para

preparación/tratamiento de masas para cocción en horno); bioquímica (cerveza,

bebidas alcohólicas, vino, vinagre, microbiología, enzimología y técnicas de mutación

o genética); química orgánica; y carnicería (tratamiento de la carne, aves o pescado).

Mientras que en Iberoamérica, el orden de los temas fueron: alimentos; ciencias

médicas o veterinarias; bioquímica; química orgánica; cocción en horno y carnicería.

Es importante destacar que los rubros alimentos y productos alimenticios,

concentran las dos terceras partes de las patentes de ciencia y tecnología de

alimentos de Iberoamérica (64%).

Page 58: Estado del arte y tendencias de la ciencia y tecnología del

54

Es importante destacar la diferencia -entre los países tecnológicamente desarrollados

como USA y Japón, y otros con nivel inferior de desarrollo como España, Brasil o

México del bloque iberoamericano- en cuanto a las demandas alimentarias de sus

poblaciones. En América Latina, en muchos de los casos, la demanda se orienta a

alimentos en general y a alimentos nutritivos en particular, mientras que en los países

más desarrollados se requieren alimentos de mejor calidad, con nuevas aptitudes,

tanto nutricionales, como de salud y sensoriales. Además, las diferencias observadas

en el desarrollo de las investigaciones (publicaciones científicas) con respecto al

desarrollo tecnológico y en particular su transferencia al sector productivo (estudio de

patentes), se presentan como una situación a mejorar y superar, reclamando la

intervención del Estado.

La ciencia y la tecnología de alimentos deben afrontar también otros desafíos como

los cambios ambientales, la utilización de la energía y nuevos problemas de salud y,

por tanto, se requiere de un profundo conocimiento y un alto grado de desarrollo e

innovación para generar fuentes de alimentos alternativas, nuevos productos y

nuevos procesos. América Latina tiene la gran ventaja de poseer fuentes para la

obtención de nuevos alimentos basadas en la biodiversidad tanto animal como

vegetal.

La Argentina es un importante exportador de productos agropecuarios y

agroalimentarios. Sin embargo, su principal fortaleza exportadora ha sido hasta ahora

la exportación de commodities con bajo valor agregado. Teniendo en consideración

los nuevos escenarios planteados a nivel mundial y frente a la demanda actual y

futura de alimentos, la estrategia argentina debe tender a promover la innovación

tecnológica del sector agroalimentario para adaptarse y aprovechar las nuevas

oportunidades y exigencias de este nuevo mercado internacional e incorporar así

elementos importantes que permitan dar un mayor valor agregado a los alimentos

que se exportan.

Dentro de este marco general las empresas necesitan desarrollar y/o tener acceso a

conocimientos y tecnologías vinculadas a actividades innovativas que les permitan

Page 59: Estado del arte y tendencias de la ciencia y tecnología del

55

ganar competitividad y mercados. Estas actividades deben estar vinculadas a

determinados aspectos del proceso productivo, como desarrollo de nuevos

productos, diferenciación/segmentación de productos, mejora continua de la calidad,

utilización de tecnologías de procesamientos destinadas a asegurar inocuidad

preservando la calidad, adaptación de los procesos productivos a las propiedades de

la materia prima, mejora en la conservación y transporte de productos precederos,

desarrollo de atributos específicos dirigidos a grupos poblacionales especiales.

Existen dos áreas específicas de vacancia que tienen una importancia estratégica

central. La primera está vinculada a la utilización de la biotecnología. Hasta ahora la

Argentina ha podido modernizar su producción agropecuaria manteniendo la

competitividad internacional, apoyándose en la transferencia internacional de

tecnología. Sin embargo, hay evidencia de que el país comienza a tener un retraso en

el acceso a tecnologías de punta. Por otra parte, en una visión de largo plazo, es

necesario recordar que, a medida que la tecnología es desarrollada por la empresa

privada, en su mayor parte internacional, el acceso se hará oneroso para el país y

potencialmente, bajo ciertos escenarios de relaciones internacionales, de difícil

acceso. Asimismo las aplicaciones de la biotecnología, las TIC y otras tecnologías de

alta densidad científica requieren, en muchos casos, una investigación

específicamente enfocada en las condiciones particulares del país. La segunda área

de importancia estratégica está relacionada con la base científica disponible en zonas

ecológicas para las cuales se requiere generar conocimientos y tecnologías

especialmente referidas a procesos productivos, tecnologías de alimentos y

conservación de los recursos naturales.

En cuanto a las tecnologías de alimentos, es poco el conocimiento actualizado que se

tiene respecto de estudios relacionados con tecnologías emergentes de

procesamiento y el aprovechamiento de temáticas transversales como biotecnología,

nanotecnología, TIC, etc., para mejorar productos y procesos u obtener alternativas

de procesamiento. Consecuentemente, el grupo de trabajo diseñó una encuesta que

fue remitida a profesionales de disciplinas múltiples pertenecientes al ámbito privado

(empresas productoras de alimentos), a universidades públicas y privadas y a

Page 60: Estado del arte y tendencias de la ciencia y tecnología del

56

organismos nacionales de ciencia y técnica. Además se tuvo especial consideración

en realizar la consulta en diferentes regiones del país.

4.2. Tendencias

Del total de las 70 encuestas enviadas se recibió el 44% de respuestas. Si bien éstas

fueron concisas estuvieron suficientemente fundamentadas como para dar claridad a

la respuesta. Las preguntas menos respondidas fueron las relacionadas con

herramientas nanotecnológicas y tecnologías de la información y la comunicación

TIC, alegando insuficiente conocimiento.

Respecto de las tecnologías de transformación y elaboración de alimentos que se

utilizan en la Argentina, resulta imposible enumerarlas a todas ya que depende

mucho de la cadena de valor considerada. Sin embargo, existe un consenso en que

se implementan la mayoría de las tecnologías tradicionales que se utilizan a nivel

mundial, las que se pueden agrupar en tecnologías basadas en transferencia de calor

y/o masa, tecnologías de filtración, centrifugación, homogenización, fermentación,

extrusión, molienda, etc., dependiendo del producto procesado. En cuanto a las

tecnologías de preservación, también se utilizan las tecnologías tradicionales y en

particular las de naturaleza térmica como por ejemplo, deshidratación, concentración,

esterilización, pasteurización, refrigeración y congelación, así como las tecnologías de

obstáculos, entre las que se mencionan, envasado en atmósfera modificada (incluye

vacío), reducción de aw (cantidad de agua libre en el alimento), acidificación, etc.

Las pequeñas y medianas empresas (PyME), dependiendo de la escala de producción

y del tipo de procesamiento requerido, utilizarían la mayoría de las tecnologías

convencionales, al menos las más económicas y de menores requerimientos.

En general en las grandes empresas, aun no se han incorporado las denominadas

“tecnologías emergentes de preservación”. Sin embargo, cada vez más se están

utilizando algunas de las tecnologías emergentes por ser consideradas más limpias,

Page 61: Estado del arte y tendencias de la ciencia y tecnología del

57

pensando en el cuidado del ambiente o aquellas que por sus características

contribuyen a la diferenciación de los alimentos y por consiguiente generan nuevos

productos en respuesta a los requerimientos de los consumidores actuales.

En cuanto a la posibilidad de adoptar a futuro las tecnologías emergentes, objeto de

estudio y desarrollo a nivel mundial, se ha establecido una gran diferencia entre las

grandes empresas productoras de alimentos y las PyME. En principio solo las

grandes empresas tendrían el capital y la capacidad técnica para incorporarlas. En

cuanto a las “tecnologías que podrían aportar un salto cualitativo en las empresas” se

identificaron 3 grupos dependiendo de las veces que fueron seleccionadas por los

encuestadores:

Grupo I (prácticamente seleccionadas por todos los encuestadores): tecnologías de

membrana, tecnologías cook-chill, packaging activo, altas presiones hidrostáticas.

Grupo II (consideradas un número importante de veces): calentamiento por

radiaciones electromagnéticas, calentamiento óhmico, ultrasonido, homogeneización

por alta presión.

Grupo III (menos posibilidades de implementación): CO2 en fase densa, campo

eléctrico pulsado, secado supercrítico, plasma frío.

Las PyME no estarían en condiciones de incorporar estas innovaciones tecnológicas

debido a que requieren equipamiento de alto costo e infraestructura específica, así

como personal idóneo para su manejo, requerimiento que la mayoría de estas

empresas no podrían asumir al menos en el corto plazo. Solo aquellas tecnologías

que poseen menores exigencias y son más económicas (tecnologías de membranas,

tecnologías cook-chill eventualmente packaging activo) podrían ser incorporadas

lentamente sobre la base de que aportan una mayor calidad al producto final. En el

caso de las tecnologías emergentes que requieren una importante inversión, la

alternativa sería que una empresa o grupo de empresas realice la inversión asociada a

la tecnología y ofrezca el servicio del procesamiento y la logística necesaria para el

Page 62: Estado del arte y tendencias de la ciencia y tecnología del

58

tratamiento de alimentos producido por otras firmas. A nivel internacional existen

antecedentes sobre esta alternativa, por ejemplo en los Estados Unidos con la

tecnología APH y en Argentina y otros países con la tecnología de irradiación.

En relación al estudio y desarrollo de tecnologías emergentes de preservación en el

sector de I+D de Argentina se cuenta con experiencias en tecnología sous vide,

ultrasonido, PEF, altas presiones hidrostáticas, tecnologías de obstáculos, packaging

activo, tratamientos con ozono e irradiación. Sin embargo, en la mayoría de los casos,

el equipamiento utilizado es de escala de laboratorio debido a que las limitaciones en

el financiamiento han restringido el acceso de los grupos de investigación a equipos

y sistemas de escala piloto. Otro inconveniente que se presenta es que las empresas

proveedoras del equipamiento en general no cuentan con representación en el país y,

en algunos casos, los equipos y sistemas demandan mantenimiento intensivo y

repuestos costosos (por ejemplo, altas presiones hidrostáticas).

La aplicación de herramientas biotecnológicas en el procesamiento de alimentos no

ha sido, hasta el momento en la Argentina, muy aprovechada y, esencialmente, se

han incorporado en las grandes empresas, al menos en forma más diversificada. En

el caso de las PyME las aplicaciones están dirigidas a los procesos fermentativos y/u

otros procesos que requieren enzimas. En cambio, en las grandes empresas, su

utilización ha sido más profusa y se relaciona con el desarrollo de vacunas y

obtención de transgénicos (OGM’s), aislamiento y extracción de enzimas de utilidad

alimentaria, selección/producción de flora microbiana con función específica en los

procesos (probiótica, coagulante, prebiótica, iniciadora, inhibidora, etc.), desarrollo de

películas destinadas a envases, técnicas de detección de contaminantes tanto

químicos como microbiológicos, desarrollo y control de reactores biológicos. Sin

embargo, comparada con el potencial que la biotecnología ha promovido en las

empresas a nivel internacional, Argentina solo está en sus comienzos.

Por consenso los encuestados indicaron que los profesionales argentinos dedicados

a la investigación científica y desarrollo tecnológico tienen capacidades desplegadas

en el área de la biotecnología y son muchas y variadas las temáticas en la cuales han

Page 63: Estado del arte y tendencias de la ciencia y tecnología del

59

incursionado. De hecho, e independientemente de esta encuesta, es profusa la

información que se tiene a través de las publicaciones periódicas, tanto nacionales

como extranjeras, patentes, bases de datos y otras fuentes científico-tecnológicas

argentinas en relación con el aporte que la biotecnología ha realizado y realiza, tanto a

nivel de producción primaria como de tecnología de procesamiento, dando cuenta de

la probada capacidad científica y tecnológica que poseen los profesionales

argentinos dedicados a la biotecnología.

Este análisis permite inferir que el “cuello de botella” estaría fundamentalmente

relacionado con la industria procesadora de alimentos que necesita, en principio, un

conocimiento más amplio de las ventajas que puede aportar la biotecnología así

como las propuestas que la ciencia tiene disponible y volcar luego ese conocimiento

en las etapas de procesamiento correspondientes. Sin duda, este compromiso

requiere de una importante articulación entre los profesionales de ciencia/tecnología

y empresa, de manera de conocerse las demandas que surgen a nivel del

procesamiento de alimentos y las capacidades ya instaladas y desarrolladas por las

instituciones de I+D para transformarlas finalmente en una innovación tecnológica.

En cuanto a los desarrollos nanotecnológicos, la situación es totalmente opuesta. Si

bien hay grupos científicos y proyectos asociados a nanotecnología, estos no son

numerosos y no muchos de ellos se enfocan en la aplicación de la nanotecnología en

tecnología de los alimentos. Solo a manera de ejemplo se destacan algunos de los

estudios con relación a este tema: películas preparadas en base a materiales

nanolaminados o a las cuales se les incorporó nanocompuestos,

micronanoencapsulado de aditivos o compuestos bioactivos, nanosensores para

diagnóstico, cuantificación o control del deterioro, modificaciones físico-química de

matrices alimentarias con aplicaciones de nanocompuestos, etc.

Algunos de estos desarrollos han sido implementados por un número acotado de

grandes empresas, fundamentalmente debido a que muchas de ellas no tienen un

conocimiento acabado de esta tecnología así como de sus potenciales aplicaciones.

Page 64: Estado del arte y tendencias de la ciencia y tecnología del

60

Este es probablemente el motivo principal que explica el retraso en su desarrollo e

innovación.

Sin duda, la nanotecnología es una ciencia que tendrá un impacto enorme en el

procesamiento de alimentos en nuestro país en un futuro mediato. Sin embargo, se

plantea como necesario desarrollar una mayor capacidad científico-tecnológica y

profundizar en desarrollos relacionados con los alimentos para lograr ese impacto.

Las tecnologías de la información y la comunicación (TIC) han tenido un impacto

substancial en aquellas empresas donde se han instalado, fundamentalmente porque

ofrecen una mayor velocidad de transferencia, control on-line y facilidad para

compartir conocimiento y experiencias. Las actividades que ha impulsado van desde

las básicas (sistemas de gestión y comercialización, trazabilidad) hasta las

relacionadas con Vigilancia Tecnológica e Inteligencia Competitiva, pasando por

procesos controlados por programas inteligentes para el funcionamiento de sus

equipos, implementación de procedimientos de los sistemas de calidad, generación

de gráficos de control, de bases de datos corporativas integradas, software de

simulación/modelado, entre otras. Las empresas han implementado estas

tecnologías en algunas de sus etapas productivas con el fin de simplificar el volumen

y favorecer el ordenamiento de la información.

Se considera también trascendente el uso de estas herramientas en investigación,

específicamente para el diseño de experiencias, análisis y procesamiento de datos

experimentales, graficación, así como el uso de software específico, como los

requeridos para microbiología predictiva, para la optimización y resolución de

modelos matemáticos. Su utilidad se extiende también a la actualización de la

información y del estado del arte de un tema.

Sin embargo, a nivel de industrias, aún no está muy incorporado el concepto de TIC,

al menos no con el amplio espectro de posibilidades que ofrece5. En cuanto a las

PyME, estas distan mucho de estar en condiciones de incorporarlas.

5 Ver en este documento dentro del capítulo 5 el tema 5.5: TIC.

Page 65: Estado del arte y tendencias de la ciencia y tecnología del

61

La calidad integral fue presentada como “un concepto asociado con la preservación

y/o mejora de los aspectos relacionados con la inocuidad, la nutrición, las

características sensoriales y físico-químicas, la estabilidad, los procesos de

conservación y de gestión de la calidad, incluyendo la trazabilidad, el cuidado del

medio ambiente y la dimensión simbólica asociada a los alimentos con identidad

territorial, necesarios para la innovación de productos, procesos y/o servicios

agroalimentarios en un marco de equidad”. La utilización de este enfoque para definir

la calidad integral tuvo una amplia y consensuada adhesión, especialmente dentro de

la industria productora de alimentos. A nivel de organismos de investigación se

mencionó que este enfoque requería de un trabajo multi y transdisciplinario. Sin

embargo, existirían ciertas limitaciones en cuanto a conocimientos y equipamiento

que impedirían llevarlo adelante en forma integrada.

En la actualidad se están desarrollado varias líneas de trabajo relacionadas con la

recuperación de efluentes para su revalorización y el cuidado del medio ambiente,

aplicación de antimicrobianos de origen biológico para la obtención de productos

más naturales, aplicación de tecnologías emergentes para extender vida útil

conservando o mejorando las propiedades sensoriales y nutricionales de los

alimentos, la valorización de alimentos por su identidad asociada al territorio como

mecanismo de diferenciación de la economías regionales, estudio de propiedades

nutricionales y sensoriales vinculadas a sabores locales o regionales, desarrollo de

herramientas analíticas para contribuir la trazabilidad, etc.

Las empresas entienden que es necesario producir más y mejores alimentos,

contribuir a la nutrición integral de la población, ofreciendo alimentos saludables y

teniendo como objetivo el cuidado del medio ambiente. Por otro lado, consideran que

esta es una nueva forma de competencia que se plantea en el mercado actual,

siendo este también un modo de obtener capacidades para la mejora continua, sobre

la base de que la competitividad es producto de la sostenibilidad y de la innovación.

Este concepto global forma parte del “plan estratégico” de muchas de las grandes

empresas, consecuentemente se plantea como importante contribuir mas

profundamente desde la investigación.

Page 66: Estado del arte y tendencias de la ciencia y tecnología del

62

Las PyME, en cambio, consideran básicas aquellas cuestiones relacionadas con la

preservación y la inocuidad y, más recientemente, con las características sensoriales.

La nutrición, los aspectos físico-químicos y la estabilidad todavía no han adquirido

relevancia, mientras que recién comienza a ser apreciada la gestión de calidad. La

trazabilidad importa si se relaciona con las reglamentaciones o los servicios y el

cuidado del ambiente no se entiende aún como un concepto asociado a la

elaboración de alimentos y las que lo aceptan consideran que debe ser resuelto por

organismos oficiales. En cambio resulta muy interesante lo arraigado que está el

concepto de “dimensión simbólica asociada a los alimentos con identidad territorial”,

ya que es considerado como un valor agregado que incrementaría el caudal de ventas

de sus productos a través de la diferenciación.

Producir bajo el paraguas de la calidad integral requiere de conocimientos,

capacitación, inversión y decisión y, en general, las pequeñas empresas necesitan

colaboración para llevar adelante esta iniciativa y para cumplir con todos los criterios

involucrados. Es importante destacar que existe una gran variabilidad en la

adecuación de las PyME a este concepto.

Otro aspecto considerado, por su vital importancia en la conservación del ambiente,

es el concepto de “tecnologías más limpias” (P+L: producción más limpia). Este

concepto tuvo un mayor impacto en las grandes empresas, donde tanto las

orientaciones de políticas como la posibilidad de obtener ventajas impositivas, han

impulsado que se gestione el aspecto medio ambiental de una manera más

responsable, logrando una mayor conciencia a nivel gerencial, capacitando al

personal e incorporando nuevas tecnologías para mejorarlo. Muchas de ellas cuentan

hoy con programas de P+L implementados o próximos a implementarse. En general

los esfuerzos están dirigidos al concepto de responsabilidad social compartida, uso

eficiente de la energía, reciclado de envases y tratamiento de efluentes.

En las PyME el interés por las tecnologías más limpias esta gobernado por las

regulaciones vigentes y la exigencia por parte de las autoridades nacionales.

Actualmente están comenzando a trabajar en el control de efluentes y

Page 67: Estado del arte y tendencias de la ciencia y tecnología del

63

ocasionalmente en la incorporación de alguna tecnología que contribuya a la

reducción de desechos, particularmente los sólidos. Las empresas más pequeñas

utilizan tecnología más limpia sobre todo cuando están apoyadas económicamente

por el Estado.

No se distinguen muchos proyectos de I+D relacionados con esta temática. En

investigación aplicada se estudia la optimización de tecnologías limpias. Algunas de

las temáticas generales incluidas son: buenas prácticas ambientales, separación y

reciclado de residuos, generación de subproductos con valor agregado, tratamiento

de efluentes con generación de biogas, generación de biodiésel y bioetanol, etc.

Una pregunta clave fue: “¿Considera que la formación actual de los profesionales

vinculados a la disciplina Ciencia y Tecnología de los Alimentos en Argentina es la

adecuada para asumir las demandas tecnológicas de los próximos 10 años?”. El

espacio temporal señalado es arbitrario y fue solo colocado para dar un margen a la

pregunta. Las respuestas recibidas fueron sumamente variadas pero no

necesariamente disímiles, aunque de una riqueza insospechada.

El grupo que considera que sí, plantea la necesidad que la información académica se

adecue a las nuevas tendencias y tecnologías, debiendo trabajar en conjunto con el

sector industrial y los graduados del sector, de lo contrario se perdería el impulso

logrado. Consideran importante también potenciar la formación de los profesionales

en el extranjero. Si bien desde las universidades y los centros de investigación existe

un compromiso, se requieren mejorar la formación universitaria haciendo planes de

estudio más específicos, incorporando una mayor y mejor formación experimental,

con mayor disponibilidad de equipamiento y plantas piloto en las unidades

académicas o convenios con centros de I+D que dispongan de las mismas y

mediante pasantías en la industria. Si bien hay industrias que no son fuertemente

demandantes de nuevas tecnologías, el advenimiento de las multinacionales está

produciendo un cambio a ese respecto.

Page 68: Estado del arte y tendencias de la ciencia y tecnología del

64

El sector industrial piensa que debiera reforzarse en las universidades la visión

holística para comprender los negocios y poder satisfacer las necesidades futuras

sobre bases más reales y reforzando aspectos claves como las energías alternativas,

la administración de deshechos y las TIC.

Otro aspecto considerado fue la desigualdad en la formación profesional entre las

diferentes universidades tanto públicas como privadas del país. Si bien se han

tomado acciones tendientes a homogenizar las competencias (a través de la

Comisión Nacional de Evaluación y Acreditación Universitaria –CONEAU y la

Asociación Universitaria del Sector Alimentario -AUSAL), parecería que estas no

fueron suficientes o el resultado aún no se ha llegado a percibir.

En el otro extremo están los que dicen “no”, ya que consideran que la formación es

adecuada para las tecnologías instaladas, pero no para las tecnologías emergentes

de próxima aplicación. Por otro lado, entienden que los cambios realizados en los

programas de las carreras de grado en ciencia y tecnología de los alimentos, han

tenido en cuenta que el egresado universitario se especializara en temas específicos

en cursos de posgrado. Sin embargo, en su mayoría, estas especializaciones son

generales y no definidas, transformándose en ampliaciones de temas estudiados en

la universidad.

Muy interesante resultó el comentario de un grupo de empresas que respondió

diciendo que en principio la respuesta seria “sí”, pero la experiencia lograda mediante

la observación de la práctica les permite aseverar que a los profesionales de la

disciplina tecnología de alimentos les falta una mirada integral del sector para

comprender mejor la potencialidad de las tecnologías a implementar. En general,

están demasiado enfocados en la “tecnología” propiamente dicha y esto no les

permite tener una visión del contexto, de los mercados, de los costos, de la viabilidad

de la tecnología y del impacto en la cadena, en la región o en el consumidor, entre

otros muchos factores. Faltando además integración con las demandas de la

industria.

Page 69: Estado del arte y tendencias de la ciencia y tecnología del

65

Una frase concreta que integraría todas las posiciones sería “para mejorar la

formación profesional haría falta una revisión constante de la currícula de manera de

incluir efectivamente el estudio de temas de vanguardia, así como la inversión en

equipamiento moderno para la realización de actividades prácticas”.

4.3. Bibliografía

Ministerio de Ciencia, Tecnología e Innovación Productiva de la Nación, 2009.

“Tendencias y escenarios de la innovación en el sector agroalimentario. Proyecto

2020: Escenarios y Estrategias en Ciencia, Tecnología e Innovación” Buenos Aires,

Argentina.

Red Iberoamericana de Indicadores de Ciencia y Tecnología (RICyT), 2010. “El Estado

de la Ciencia. Principales indicadores de Ciencia y Tecnología

Iberoamericanos/Interamericanos”. Redes. Buenos Aires, Argentina.

Page 70: Estado del arte y tendencias de la ciencia y tecnología del

66

5. TECNOLOGÍAS TRANSVERSALES DEL PROCESAMIENTO DE

ALIMENTOS

Calidad Integral: Ricardo Rodríguez, Martín Irurueta y Sergio Vaudagna

Producción más limpia: Sergio Vaudagna y Claudia González

Biotecnología: Claudia González y Ricardo Rodríguez

Nanotecnología: Claudia González y Ricardo Rodríguez

Tecnologías de la información y la comunicación: Martin Irurueta y Marcelo Bosch

5.1. Calidad Integral

La calidad integral se define como “aquellas acciones destinadas a la preservación

y/o mejora de los aspectos relacionados con la inocuidad, la nutrición, las

características sensoriales y físico-químicas, la estabilidad, los procesos de

preservación y de gestión de la calidad, incluyendo la trazabilidad, el cuidado del

medio ambiente, y la dimensión simbólica asociada a los alimentos con identidad

territorial, necesarios para la innovación de productos, procesos y/o servicios

agroalimentarios en un marco de equidad”. Este concepto opera como marco

conceptual de las actividades de investigación, desarrollo e innovación (I+D+i) que

deberían ser llevadas adelante para potenciar las capacidades del sistema

agroalimentario y agroindustrial argentino.

La heterogeneidad productiva de nuestro país y las especificidades propias de la

industria alimentaria condicionan fuertemente el cambio tecnológico, encontrándose

el proceso innovativo en las industrias estrechamente condicionado por el carácter

biológico de la producción, la tecnología de producto, la importancia estratégica de la

Page 71: Estado del arte y tendencias de la ciencia y tecnología del

67

constitución de sistemas locales y sectoriales de innovación para la circulación del

conocimiento y la necesidad de crear capacidad de respuesta rápida en las empresas

ante cambios en la conducta de sus consumidores.

Los desafíos más importantes pasan por conocer las especificidades mencionadas y

disponer de capacidades locales para una efectiva generación, difusión y apropiación

social de conocimientos. Los alimentos y en particular su consumo, son reconocidos

como un elemento fundamental en el momento de evaluar la condición de salud y

bienestar del ser humano. Los consumidores en los países desarrollados gastan

entre el 10% y 15% (países en vías de desarrollo 25%-30%) de sus ingresos en

alimentos –incluyendo las comidas fuera del hogar- cifra que representa

aproximadamente la mitad de lo que se invertía en este rubro en la década del 60. A

medida que las economías de los países progresan, de la mano de la urbanización,

de los altos ingresos y del incremento de la población, cambian los patrones de

consumo –incluyendo el de los alimentos- aumentando la demanda de productos de

calidad y con inocuidad asegurada (IA).

Los consumidores desean alimentos que satisfagan sus demandas y percepciones y

esto se ve reflejado, consecuentemente, en productos de alta calidad y de fácil

preparación. Los productos frescos o que posean características que denoten

frescura, se imponen con facilidad en los mercados, del mismo modo lo hacen los

productos con menor contenido de azúcar, sal, agentes preservantes, o sometidos a

procesos y tratamientos menos severos. A partir de estas tendencias, desde la

tecnología de los alimentos y desde la evaluación de riesgos alimentarios se aportan

herramientas para producir alimentos de alta calidad, seguros, y con mínimos riesgos

–idealmente sin riesgos- para la salud pública. Paralelamente estas cualidades surgen

como fuertes demandas del mercado actual.

Las denominadas crisis en la seguridad sanitaria (inocuidad) de los alimentos han

impactado fuertemente en los patrones de consumo y comercialización. En la Unión

Europea (UE), por ejemplo, luego de las crisis asociadas a los episodios de

encefalopatía espongiforme bovina (BSE por sus siglas en inglés: bovine spongiform

Page 72: Estado del arte y tendencias de la ciencia y tecnología del

68

encephalopathy) de 1996 y 2000, los consumidores reaccionaron fuertemente,

disminuyendo significativamente la compra y el consumo de carne bovina. Se

documentaron caídas de las ventas de 30%-40% y aún superiores y,

consecuentemente, se afectaron seriamente la producción, el procesamiento y la

comercialización de carne, no sólo en los países europeos sino también en los países

que exportan a ese bloque (las exportaciones de la UE después del brote epidémico

de Fiebre Aftosa en 2001 cayeron en más del 80%). Estas situaciones han impactado

profundamente en los ámbitos de la producción, la industria, en los organismos de

fiscalización y en las agendas de los centros de investigación respectivos.

Adicionalmente, los consumidores exigen, cada vez más, que se brinde “garantía”

sobre las características deseables de los productos. Es así que aparece la demanda

de los mercados por la trazabilidad e identidad preservada en las cadenas

agroalimentarias, así como la adecuada aplicación de reglamentos técnicos, normas y

sistemas de certificación de producto. Por lo tanto, los productores, elaboradores y

comercializadores de alimentos, perciben la necesidad de adecuarse a estos

requerimientos del mercado y, en sintonía con esas demandas, entienden que es

fundamental contar con herramientas técnicas y tecnologías que contribuyan a

satisfacer a esos requerimientos.

En este sentido, las acciones que se han tomado en tecnología de alimentos a nivel

mundial están dirigidas al diseño, mejora y diferenciación de productos, procesos y

servicios, con los esfuerzos concentrados en la mejora continua de la calidad, el

agregado de valor y el incremento de la capacidad técnica para aportar a la

innovación del sector. En consecuencia, los productos más valiosos serán aquellos

que incorporen o aumenten la participación de bienes o servicios de alto valor

agregado, o que incorporen un mayor porcentaje de trabajo calificado y de

conocimientos generados en forma local. Ese debería ser el objetivo del sistema

agroalimentario y agroindustrial, teniendo como marcode referencia el concepto de

calidad integral de los alimentos.

Las actividades científicas y técnicas dirigidas al agregado de valor se basan en tres

aspectos fundamentales:

Page 73: Estado del arte y tendencias de la ciencia y tecnología del

69

• Calidad intrínseca

La obtención de agroalimentos con agregado de valor, capaces de comercializarse

adecuadamente en el mercado nacional e internacional, es una prioridad para el

desarrollo agroindustrial de un país y consecuentemente para la creación de más y

mejores fuentes de empleo. La cadena agroindustrial argentina -incluyendo

agroalimentos- representa más del 35% de los empleos, más del 45% del agregado

por la producción de bienes y más del 55% de las exportaciones del país. Para que

aquel objetivo sea alcanzado, es de fundamental relevancia la inocuidad alimentaria

(IA) en todas las etapas de la producción, procesamiento y comercialización de los

productos y servicios conexos asociados al sector agroalimentario.

El impacto económico de las Enfermedades Transmitidas por Alimentos (ETA) puede

ser medido por los perjuicios económicos que ocasiona al

productor/procesador/comercializador a través del retiro del producto del mercado

(recalls), la pérdida de la confianza asociada a la marca del producto con las

consecuente disminución en las ventas y también por los costos respectivos en el

sistema de salud. Por ejemplo, dentro de las ETA, aquella asociada a la enfermedad

producida por Escherichia coli O157:H7 tiene en Argentina costos de tratamiento

médicos estimados en U$S 2 millones/año, en tanto que en EE.UU. se han calculado

costos por U$S 405 millones/año. Por otro lado, informes de la Autoridad Europea en

Inocuidad Alimentaria (European Food Safety Authority, EFSA) que recopilan el

número de rechazos de alimentos importados a la UE, detectados a través de su

Sistema de Alerta Rápido para Alimentos y Piensos (RASFF, Rapid Alert System for

Food and Feed), han indicado la presencia de residuos de pesticidas, micotoxinas y

contaminantes microbiológicos en alimentos exportados desde nuestro país al

principal mercado importador de alimentos de Argentina. En estos casos los niveles

de contaminantes detectados superaban los límites tolerables por las normativas

respectivas y se indicaba que ponían potencialmente en riesgo la salud de la

población. Adicionalmente, la detección de residuos de nitrofuranos en miel en el año

2006 provocó el quebranto de miles de pequeños productores apícolas de Argentina

Page 74: Estado del arte y tendencias de la ciencia y tecnología del

70

que no pudieron vender su producto o tuvieron que hacerlo a precios fuera de

mercado. La IA, como un componente fundamental de la calidad integral de un

alimento es sobresaliente en todo el SA desde la gran empresa a la Agricultura

Familiar (AF) -productor, procesador, comercializador, prestador de servicios- tanto

para los mercados de exportación, como los del consumo interno.

En esta línea se han identificado demandas y oportunidades de I+D a partir de

requerimientos de las cadenas, los servicios sanitarios de inocuidad y calidad

(fiscalización agroalimentaria) y los emanados del desarrollo de los territorios. Las

áreas identificadas son las que a continuación se describen.

o Estado de situación de los peligros para la IA6 en las cadenas agroalimentarias:

este punto requiere que en la producción primaria se releven y caractericen los

contaminantes biológicos determinantes de la inocuidad final de los alimentos y

se brinde información para evaluar cuali-cuantitativamente el grado de

contaminación presente en los diferentes pares peligro/cadena agroalimentaria.

El avance de esta área requiere del desarrollo y la aplicación de tecnologías y

metodologías rápidas, sensibles y económicas para grupos de contaminantes y

su posterior cuantificación.

6Inocuidad/seguridad alimentaria: condición de los alimentos que resulta de una producción/elaboración,

un almacenamiento y una manipulación adecuada, de tal modo que no puedan producir daño a la salud

del consumidor, previniendo, por lo tanto, intoxicaciones o infecciones alimentarias y evitando o

minimizando los peligros químicos, físicos y biológicos, que pudieren haber estado asociados

(adaptado de Cliver, D., 1990). Sanidad: en el concepto amplio se entiende por la sanidad, calidad

(referida a “sano”) y nutrición de los alimentos. Conjunto de servicios y acciones profesionales para

preservar la salud pública e individual y garantizar al consumidor la ingestión de alimentos aptos con

los principios nutritivos adecuados a sus requerimientos fisiológicos. Calidad: es la condición en que

un alimento específico satisface los deseos del consumidor o de un conjunto de consumidores, y es el

carácter del alimento que concuerda con la especificación técnica prevista o implícita, y que responde

a los patrones de sanidad, nutricionales, de especie, tipificación, variedad y tipo de presentación y

conservación. No corresponde aplicar este término para determinar un nivel de calidad (extra, 1ra, etc.)

sino exclusivamente para la definición que se indica. Inocuidad: es la garantía de que un alimento no

causará daño al consumidor cuando el mismo sea preparado o ingerido de acuerdo con el uso a que

se destine. (SENASA, 2006).

Page 75: Estado del arte y tendencias de la ciencia y tecnología del

71

o Situación y cambios en las prácticas agropecuarias y del procesamiento y sus

efectos sobre la IA. Se requiere información precisa acerca del efecto que los

cambios productivos y de proceso generan sobre la inocuidad final de los

alimentos (por ejemplo mayor almacenaje de cereales en silo bolsa y su efecto

sobre la producción de micotoxinas, mayor producción de carne a feedlot y su

impacto en la contaminación microbiológica de las carnes, aplicación de nuevas

tecnologías de procesamiento y su impacto sobre la inocuidad, ingreso de

nuevos agroquímicos para el control de plagas).

o Mitigación de situaciones de riesgo en IA. Información para trazar las vías por la

que se transmiten las contaminaciones a lo largo de una cadena

agroalimentaria. Metodologías para contribuir a la trazabilidad analítica del

producto. Alternativas tecnológicas de mitigación de los peligros desde la

producción primaria. Estudios de análisis y evaluación de riesgos en IA.

La calidad intrínseca incluye, además, el desarrollo de metodologías analíticas

innovadoras, así como la identificación de nuevos parámetros para evaluar calidad y

la identificación de atributos que permitan diferenciar alimentos. En ese sentido, el

estudio (identificación, aislamiento y cuantificación) de compuestos bioactivos –

sustancias que pueden dar “funcionalidad a un alimento”- le otorgarían características

diferenciales a los alimentos que los contienen y el consecuente agregado de valor.

Además, la bioactividad de un componente del alimento depende de parámetros tan

diversos como la concentración de todos los compuestos bioactivos presentes, la

interacción entre ellos y con la matriz del alimento, etc. Por tanto, es importante

encarar el estudio evaluando no solo la presencia y cantidad de estos compuestos

sino también su biodisponibilidad.

Por otra parte, dado que la fortificación de alimentos continue siendo una valiosa

estrategia para paliar las deficiencias nutricionales de importancia epidemiológica

nacional en grupos vulnerables, la aplicación de la tecnología de microencapsulado

Page 76: Estado del arte y tendencias de la ciencia y tecnología del

72

sigue siendo una demanda de la industria alimentaria y, por su carácter de innovador,

requiere aún de modificaciones y adaptación.

La identificación en alimentos de genes expresados diferencialmente en respuesta a

determinadas situaciones constituye un enfoque novedoso, ya que permite la

manipulación genética para dar a los alimentos las características deseadas, y por

otro lado permite predecir el comportamiento y las implicancias de esta expresión

genética en los aspectos de calidad durante su comercialización. Un estudio

sistematizado de estos fenómenos será de gran importancia para el manejo de los

procesos de deterioro de la calidad.

• Los procesos de manufactura y preservación

A nivel industrial, las tecnologías más aplicadas en el procesamiento de alimentos

son las de naturaleza térmica (calentamiento, deshidratación, evaporación, cocción,

fritado, escaldado, esterilización fuera y dentro del envase, pasteurización,

congelación, refrigeración, etc.). Los tratamientos térmicos se basan en la

transferencia de energía calórica debido a la existencia de una diferencia de

temperatura (fuerza impulsora) entre el alimento y el medio calefactor/refrigerante.

Sin embargo, los procesos térmicos son costosos debido al consumo de energía

elevado y a los tiempos de proceso largos (en general los alimentos presentan

conductividades térmicas bajas). A su vez, la mayoría de los alimentos son sensibles

a los tratamientos térmicos, afectándose sus componentes, estructura, etc. Por esa

razón, desde la segunda mitad del siglo XX se han realizado esfuerzos por optimizar

las tecnologías de naturaleza térmica existentes y desarrollar nuevas tecnologías

(térmicas y no térmicas). Así, se desarrolló el tratamiento de alimentos a granel en

sistemas continuos (tratamientos alta temperatura-corto tiempo, en inglés HTST),

aplicando temperaturas en el rango 135-150ºC y tiempos muy cortos (<10 seg) y el

envasado aséptico consecutivo. También se optimizó el procesamiento térmico de

alimentos envasados, aplicando diferentes estrategias (rotación de envases, nuevos

Page 77: Estado del arte y tendencias de la ciencia y tecnología del

73

envases, diseño de tratamientos considerando letalidades integradas y cook values,

tratamientos a temperatura variable de autoclave, etc.).

A su vez, en los últimos 25 años se han desarrollado las denominadas “tecnologías

emergentes”. El objetivo principal de estas tecnologías es mantener la calidad

sensorial y nutricional de los alimentos, mediante la reducción del tiempo total de

tratamiento y la disminución de la exposición de los alimentos a temperaturas

elevadas, garantizando la inocuidad de los mismos. Estas tecnologías permiten

obtener alimentos procesados con calidad sensorial y nutricional similar a los

alimentos frescos o recién cocidos. A su vez, buscan minimizar el impacto ambiental

de los procesos industriales mediante la disminución del consumo de energía y de

agua y la reducción de efluentes. Por otro lado, algunas de estas tecnologías se

aplican en el tratamiento de efluentes de la industria alimentaria para recuperar

componentes de interés comercial.

• La gestión de la calidad

Los actuales patrones de consumo, hacen que los consumidores exijan, entre otros,

alimentos con características específicas, de origen conocido, con garantías de los

datos consignados en el etiquetado nutricional y en relación con los atributos de valor

utilizados en su diferenciación. Consecuentemente, la organización y el

fortalecimiento de una Red de Laboratorios de Análisis de Calidad permitirá ampliar el

número de técnicas utilizadas, validarlas mediante el desarrollo de nuevos protocolos

como así también mejorar la calidad técnica de los alimentos mediante la

implementación de un sistema ajustado a las normas ISO 9000 e ISO 17025, la

capacitación continua de sus recursos humanos (RRHH) y la generación un ámbito de

discusión entre los profesionales de la Red. La calidad se obtiene por un proceso de

administración que se denomina Gestión de la Calidad, el cual conduce a la reducción

de costos y al aumento de la productividad, la competitividad y la calidad.

Page 78: Estado del arte y tendencias de la ciencia y tecnología del

74

La calidad ha sido central en el funcionamiento de los mercados y aumentos de

competitividad. Los estándares de calidad han contribuido a minimizar las

heterogeneidades de la producción. En relación con el desarrollo de los sistemas de

calidad, es importante señalar que durante la segunda mitad del siglo pasado se

produjo una evolución gradual, desde la inspección hacia la gestión de la calidad,

para poder asegurar que los consumidores reciban productos que responden a lo

ofrecido y declarado por los elaboradores (Centro de Comercio Internacional, 2004).

A fin de describir conceptualmente esta evolución, debemos decir que en la

inspección, una o más características de un producto se examinan, miden o ensayan

y se comparan con especificaciones, para lograr la conformidad. Los productos que

no resultan conformes, se reprocesan, reclasifican, se aceptan con concesiones o se

rechazan. Esta situación muestra que el empleo de la inspección para mejorar la

calidad es lento, costoso e ineficaz. Por otra parte, en el Control de la Calidad (CC), se

controla el proceso mediante la retroalimentación de los motivos por la cuales se

obtiene un producto defectuoso. El CC incluye establecer especificaciones de los

parámetros que deben controlarse, los planes de control, los controles e

inspecciones, los diagnósticos y acciones definidas y el control sobre las variaciones

que se hayan corregido.

A su vez, el aseguramiento de la calidad, incluye la planificación y el seguimiento de

todo lo que tiene que ver con la calidad en la empresa. Incluye la definición de la

política y objetivos de la calidad, el desarrollo de un manual de calidad, la realización

de auditorías periódicas, la eliminación de la causa fundamental de los problemas

encontrados y los exámenes periódicos por la alta dirección. Finalmente, en la

gestión de la calidad se incluye además el enfoque al cliente y la introducción del

concepto de la mejora continua de los procesos, junto con otras actividades del

aseguramiento de la calidad.

Diversos sistemas y especialistas consideran que la calidad de los alimentos debe ser

construida a partir del punto de vista de los consumidores. Es el consumidor, en

definitiva, quien decide qué alimento comprar, además de cuándo, dónde y cómo

Page 79: Estado del arte y tendencias de la ciencia y tecnología del

75

hacerlo. Por otra parte, como la producción de alimentos comprende una suma de

actividades, procesos y etapas, a lo largo de la cadena alimentaria –concepto de

cadena de valor- es relevante, entonces, tener en cuenta aquel enfoque para

comprender la importancia del papel de la calidad en las cadenas agroalimentarias.

Los principales factores que influyen en la decisión de compra por parte del

consumidor incluyen, por un lado, conceptos de calidad, valor y experiencia y por el

otro, los aspectos ligados a características del producto, motivos de compra y

dimensiones de la calidad. La decisión de compra se relaciona con la percepción de

calidad y valor. Entre estos se señalan, dos aspectos claves de la calidad: por un

lado, calidad como concepto de “realidad objetiva” que engloba “lo que el producto

posee” y, por el otro, calidad como concepto de “realidad subjetiva”, que incluye “lo

que el consumidor recibe u obtiene”. Adicionalmente, la calidad es habitualmente

evaluada por el consumidor en relación con el costo del producto, concepto afectado

a su vez por el precio. El contar con un producto de calidad superior es ampliamente

reconocido como la principal fuente de ventajas competitivas. Sin embargo, la

satisfacción del consumidor es determinada por la relación entre la calidad esperada

y la calidad experimentada. Por lo tanto, se espera que, un producto de alta calidad y

con un buen valor, resulte en un consumidor satisfecho que, a su vez, podrá repetir la

compra de ese producto.

La motivación del consumidor para comprar un alimento también ha sido relacionada

con las características del producto, motivos de compra y dimensiones de la calidad.

Las características –o atributos mesurables del producto-, son estudiadas

generalmente con herramientas aportadas por las ciencias duras (por ejemplo la

ciencia y tecnología de alimentos), en tanto que desde las ciencias blandas, como la

sociología y la mercadotecnia, se aportan bases para el estudio del comportamiento y

las actitudes del consumidor. Las características del producto incluyen sus atributos

y la manera en que son percibidos por el consumidor. Las características del

producto incluyen, por ejemplo, el color y aroma de una fruta o de un producto

cárnico; en tanto que los motivos de compra son identidades abstractas, por

Page 80: Estado del arte y tendencias de la ciencia y tecnología del

76

ejemplo, la acción de disfrutar un sabor, o la satisfacción de alguna necesidad, que

motiva el accionar del comportamiento del consumidor.

Los especialistas, identifica tres categorías de dimensiones de la calidad: la

observada, donde la calidad puede ser evaluada al momento de la compra (por

ejemplo la apariencia); la experimentada, donde la calidad solamente puede ser

evaluada después de la compra (terneza de la carne, textura de una fruta, entre

otras); y la dimensión basada en la “creencia”, donde la calidad solamente puede ser

basada en la confianza (la seguridad de los alimentos, la producción orgánica, o la

condición basada en una característica o componente ligado a la protección de la

salud, la denominación de origen, o libre de OGM, o el grado en que una determinada

producción es amigable con el medio ambiente, o con el trato a los animales

productores de alimentos). En general, los alimentos son identificados y

seleccionados por el consumidor cada vez más, por esta última dimensión de la

calidad.

La calidad de un alimento es predominantemente caracterizada por la experiencia –es

decir después de la compra del producto y, de manera creciente en las últimas

décadas, por los aspectos relacionados con las creencias. Sobre la base de estas

premisas, puede decirse que para sus decisiones de compra, los consumidores

deben formar las denominadas “expectativas de compra”, que generalmente se

fundamentan en algún tipo de fuente de información y que se han dado en llamar

“indicios sobre la calidad”. Éstas, a su vez, son divididas en dos grupos: los “indicios

intrínsecos de la calidad” que comprenden las características físicas del producto (por

ejemplo, el sabor de una fruta, o la terneza de la carne son inferidos de los colores

respectivos del producto) y los “indicios extrínsecos de la calidad” que incluyen toda

la información restante, (como precio, marca, presentación, propaganda, etc.).

Es bien conocido que la satisfacción del consumidor por un producto y

consecuentemente la probabilidad que repita la compra, está dada por la relación

entre la “expectativa de la calidad” y la “calidad experimentada”. Diversos estudios

indican que la dimensión de la calidad experimentada –incluyendo los placeres

Page 81: Estado del arte y tendencias de la ciencia y tecnología del

77

ligados a los sentidos y especialmente el sabor- es la más importante para

conformar, o no, las expectativas al momento del consumo del producto. Sin

embargo, otros atributos de calidad, algunos de los cuales parecieran que se

expanden en las tres dimensiones mencionadas, son cada vez más importantes.

Entre estos, se incluyen características medibles u observables a largo plazo tales

como los beneficios para la salud y el que los métodos de producción sean

sustentables y seguros y/o amigables con el medio ambiente.

La inocuidad de los alimentos, por otro lado, es una característica de calidad

fundamental que exige la implementación de normas en el ámbito nacional (Código

Alimentario Argentino) y del MERCOSUR para su aseguramiento. Las Buenas

Prácticas de Manufactura (BPM) y las Buenas Prácticas Agrícolas (BPA), entre otras,

son algunas de las herramientas básicas para la obtención de productos seguros para

el consumo humano. Por otra parte, además de la inocuidad, los consumidores

buscan características diferenciales en los productos agroalimentarios, entre las

cuales se encuentran aquellas ligadas al territorio donde son elaborados. Esta

herramienta está siendo utilizada en forma creciente para la promoción del desarrollo

de los espacios rurales. En el contexto de las negociaciones de la OMC se reconocen

dos sellos de calidad por el origen geográfico: la Indicación Geográfica Protegida

(IGP) y la Denominación de Origen Protegida (DOP). En el contexto del MERCOSUR

se reconoce una gran diversidad de situaciones, tanto en lo concerniente al grado de

avance en las legislaciones nacionales, respecto a estas herramientas de

diferenciación como así también en la configuración de las instituciones que regulan

su aplicación.

Muchos consumidores de los países desarrollados están conscientes que en el

mundo las riquezas están divididas de manera muy desigual, por lo que se ha

buscado algún tipo de certificación destinada a cerrar o, al menos, acortar la brecha

entre los productores de los países en vías de desarrollo y los consumidores de los

países desarrollados, sobre la base del entendimiento y respeto mutuos, y normas de

justicia. Las iniciativas con un sello de calidad del Comercio Equitativo o Comercio

Justo han agregado una nueva dimensión a esta experiencia. Particularmente, en los

Page 82: Estado del arte y tendencias de la ciencia y tecnología del

78

alimentos denominados regionales o territoriales se ha propuesto que la calidad sea

abordada desde enfoques que integren la complejidad de sus múltiples dimensiones.

Estos enfoques privilegian como atributo el valor simbólico de los alimentos, que ha

sido estudiado considerando la calidad como una construcción social,

comprendiendo diversas matrices productivas y distintas condiciones ambientales

(Champredonde y Muchnik, 2010).

5.2. Producción más Limpia

El concepto de producción más limpia se refiere a “la aplicación continua de una

estrategia ambiental preventiva integrada a procesos, productos y servicios para

incrementar la eficiencia total y reducir los riesgos para el ser humano y el medio

ambiente”, según lo establece el Programa de las Naciones Unidas para el Medio

Ambiente (PNUMA).

El objetivo esencial de una industria es transformar la materia prima en un producto

comerciable. La generación de residuos y emisiones durante el proceso productivo

puede ser considerada como una pérdida del proceso y un mal aprovechamiento de

la materia prima empleada. Por lo tanto, representa un costo adicional del proceso

productivo. A su vez, la generación de residuos origina impactos económicos

importantes asociados a los costos de tratamiento y disposición final de éstos.

El enfoque tradicional con que se ha abordado el control de la contaminación,

considera como primera opción reducir los contaminantes después de que se hayan

generado por los procesos industriales, exigiendo la aplicación de tecnologías de

etapa final o "fin de tubo" (end of pipe), que muchas veces alcanzan costos elevados

obstaculizando la competitividad de las empresas, especialmente en el caso de las

PyME.

Page 83: Estado del arte y tendencias de la ciencia y tecnología del

79

La Producción más Limpia, en cambio, invierte o reorienta la jerarquía de gestión de

los contaminantes, considerando las oportunidades de prevención de la

contaminación mediante:

• reducción de los residuos en el origen;

• reutilización y el reciclado;

• tratamiento o control de la contaminación;

• disposición final.

En los procesos industriales este concepto involucra la reducción de la cantidad y

toxicidad de las emisiones y de los residuos antes que salgan del proceso y la

conservación de la materia prima y la energía. En el caso de los productos, la

producción más limpia contribuye a mitigar el impacto ambiental vinculado, por

ejemplo, a la utilización de materiales de envasado (películas, tapas, etc.) necesarios

para mejorar la estabilidad y asegurar la inocuidad de los productos durante su vida

útil. Este último concepto supone evaluar la nueva tecnología sobre la base de las

normas y estándares establecidos por la legislación ambiental.

Los principales recursos utilizados por la industria para el procesamiento de

alimentos son:

• agua: tradicionalmente la industria alimentaria ha sido usuario de una gran

cantidad de agua. Ésta se utiliza como ingrediente, como fuente de la limpieza

inicial e intermedia, como medio de transporte de materias primas altamente

eficiente y es el principal agente utilizado en la maquinaria de la planta y áreas de

desinfección. Aunque el uso del agua será siempre una parte de la industria de

procesamiento de alimentos, la práctica de “reducir su uso” se ha convertido en el

principal objetivo para la prevención de la contaminación.

Page 84: Estado del arte y tendencias de la ciencia y tecnología del

80

• Materias primas: los recursos agrícolas abundantes y productivos, las condiciones

de clima favorables y las modernas tecnologías, son factores importantes para

proporcionar, a la industria alimentaria, una amplia variedad de materias primas de

alta calidad.

• Energía: en comparación con otras industrias, la industria de procesamiento de

alimentos no se considera de alto consumo energético. Las instalaciones, por lo

general, requieren de energía eléctrica que es suministrada por empresas de

servicios públicos locales para hacer funcionar la maquinaria responsable de la

elaboración de alimentos. En cambio, el uso de combustibles fósiles es bajo o

inexistente.

En general, los temas ambientales de vital importancia en relación a la aplicación de

tecnologías más limpias en la industria de los alimentos son:

• aguas residuales: los temas de mayor interés son la demanda bioquímica de

oxígeno (DBO), sólidos suspendidos totales (SST), la carga excesiva de nutrientes,

es decir, compuestos de nitrógeno y fósforo, los organismos patógenos y

residuos de cloro y niveles de plaguicidas.

• Residuos sólidos: la mayor preocupación son los residuos orgánicos y los

envases. Los residuos orgánicos, es decir, las cortezas, las semillas, la piel y los

huesos de las materias primas, son resultado de las operaciones de

procesamiento. Los residuos inorgánicos generalmente incluyen artículos de

embalaje (exceso), es decir, plástico, vidrio y metal. Los desechos orgánicos están

buscando un mercado cada vez mayor para la recuperación de componentes y

reventa y las empresas utilizan cada vez más productos biodegradables y

reciclables para el envasado. El exceso de embalaje se ha reducido y los

productos reciclables como aluminio, vidrio y polietileno de alta densidad (HDPE)

se están utilizando sólo cuando corresponde.

Page 85: Estado del arte y tendencias de la ciencia y tecnología del

81

Cada segmento de la industria procesadora de alimentos genera residuos en

diferentes porcentajes respecto de la materia prima que ingresa al proceso. La

industrialización de productos frutihortícolas produce aguas residuales con alto

contenido de sólidos solubles o en suspensión (ácidos orgánicos, azúcares,

almidones, sales y residuos de plaguicidas). También esa industria produce residuos

sólidos, originados en los productos descartados (por daños o defectos físicos o

biológicos) o bien desechos provenientes de los procesos de separación (hojas,

tallos, cáscaras, etc.). Las etapas que producen residuos sólidos son las etapas de

selección, pelado, descorazonado y cortado. Por otra parte, las etapas de lavado,

escaldado, enfriado, pelado y cortado producen efluentes líquidos. En particular, la

etapa de escaldado puede generar altos volúmenes de efluentes líquidos con alta

demanda bioquímica de oxigeno (DBO) si se utilizan escaldadores que utilizan agua

en la etapa de calentamiento y/o enfriamiento. Los residuos sólidos se utilizan en la

producción de compost, en la producción de alimentos balanceados para mascotas o

en rellenos sanitarios.

En la industria cárnica, la faena de animales y despostada de carcasas genera

residuos constituidos por sangre, pelos, huesos, tripas, vísceras, grasa, que además

del problema ambiental, son fuentes de contaminación de microorganismos

patógenos como Salmonella spp y Shigella spp. Los efluentes de esta industria

pueden presentar valores altos de DBO y niveles considerables de cloro cuando los

tratamientos implican etapas de curado e incorporación de salmueras. Los residuos

pueden ser aprovechados para la obtención de subproductos debido a que los

mismos son ricos en nitrógeno y materia orgánica. En la industria láctea también se

generan residuos gaseosos (gases de calderas), polvos (leche y suero en polvo) y

sólidos (material de envasado, productos vencidos o defectuosos) y efluentes

líquidos. En relación a los efluentes líquidos, la lactosa es el principal aportante de

DBO y el lactosuero resultante de la elaboración de quesos puede alcanzar DBO del

orden de 40.000 a 50.000 mg/L.

La producción de azúcar genera contaminantes atmosféricos, como cenizas volátiles

(producto de la combustión del bagazo de caña), combustibles empleados en el

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82

proceso, vapores de fermentación y de las unidades de sulfitación. El procesamiento

de aceites vegetales genera, fundamentalmente, contaminación a nivel de aguas

dada la alta concentración de materia orgánica.

Esta descripción evidencia la necesidad por parte de la industria, de extremar los

esfuerzos e incorporar estrategias para prevenir la contaminación, además de utilizar

tecnologías más limpias en las operaciones de procesado, logrando así la reducción

de desechos que impactan negativamente sobre el ambiente.

Las estrategias para la aplicación de tecnologías más limpias en la industria

alimentaria se orientan hacia las siguientes acciones.

• Un cambio en los insumos utilizados: la sustitución o reemplazo parcial de

compuestos químicos por ingredientes de origen natural se asocia con el

concepto de producción más limpia en el proceso de producción de alimentos.

Ejemplo de estas aplicaciones son la utilización de extractos naturales, sustancias

natural-idénticos, pigmentos y colorantes de origen vegetal que emplean vehículos

acuosos en lugar de oleosos o a base de alcoholes pesados. A su vez, los

materiales de envasado (películas, bolsas, tapas) constituyen uno de los grupos de

insumos que más compromete el medio ambiente.

En este sentido, los biotecnólogos han focalizado su atención sobre productos

clásicos de la industria química como los plásticos. Los plásticos convencionales

representan un problema ambiental desde el momento en que son obtenidos a

partir de combustibles fósiles y no son biodegradables. Por esto, la búsqueda se

ha orientado al desarrollo de plásticos biodegradables a partir de materias primas

renovables, derivadas de plantas y bacterias (plásticos a partir de almidón,

bacterias o plantas modificadas genéticamente). Además, son cada vez mayores

los esfuerzos por establecer programas de reciclado pos consumo de envases de

alimentos y bebidas.

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83

Existe una tendencia a la producción de envases de mayor tamaño, orientados a

usos especiales o familias numerosas. Sin embargo, el concepto actual de envase

sustentable va mas allá del producido con materias primas de fuentes renovables

o envases reciclables. El desarrollo de nuevos envases también debe incorporar

las dimensiones económica (influencia del costo del envase en el producto) y

social (interés de los consumidores por efecto sobre el cambio climático, huella de

carbono, etc.) de la sostenibilidad.

• Cambios de los procesos tecnológicos: la utilización de nuevas tecnologías en las

líneas de proceso de materias primas y productos agroalimentarios permite la

reducción del consumo de energía y de agua y la disminución de residuos,

efluentes y emisiones. A continuación se presentan algunas tecnologías nuevas y

sus posibles aplicaciones.

o Tecnologías de membranas: permiten una separación selectiva de uno o

más componentes de un líquido, a través de una membrana y sin cambio de

fase. La fuerza impulsora de la separación es el gradiente de presión

hidráulica. El proceso puede ser realizado en forma continua y totalmente

automatizado.

Las membranas se clasifican en función de su valor de cut-off, el cual se

refiere al peso molecular de la molécula más pequeña que puede ser

retenida por la membrana. Entre estas tecnologías se encuentran la

microfiltración (MF), la ultrafiltración (UF), la nanofiltración (NF), la ósmosis

inversa (OI) y la electrodiálisis (ED). Entre ellas, el proceso UF es el que

mayor aplicación ha encontrado en la industria alimentaria, seguido por MF,

OI y NF. Excepto la tecnología de OI, la cual consiste esencialmente en un

proceso difusivo, los otros procesos de separación con membranas son

principalmente métodos para el fraccionamiento o concentración de

alimentos líquidos, en los cuales los componentes son separados de

acuerdo a su peso molecular.

Page 88: Estado del arte y tendencias de la ciencia y tecnología del

84

Esta tecnología consume menos energía que las de separación

convencional. Presenta mayor eficiencia de separación y permite obtener

productos de mayor calidad. A su vez, es una herramienta valiosa para

aplicar estrategias de producción más limpia. En este sentido, se puede

utilizar MF y UF en la clarificación y desinfección de aguas residuales,

tratamiento de agua mediante OI, para su uso en torres de enfriamiento,

condensadores, intercambiadores de calor y agua para calderas. En la

industria láctea se aplica UF en la extracción y concentración de proteínas

del suero y en la producción de fermentos lácticos con la eliminación de los

inhibidores del crecimiento celular y concentración de la biomasa hasta los

niveles del producto comercial.

En la industria cárnica se utiliza la tecnología de membranas para la

preconcentración del suero sanguíneo, en la concentración de proteína para

producción de gelatinas, en la concentración-recuperación de proteínas de la

salmuera residual del curado de carnes y pescados, entre otras. En el

procesamiento de productos frutihortícolas la tecnología de membranas es

utilizada en la recuperación de proteínas vegetales y de productos y

subproductos de aguas de lavado (azúcares, aceites esenciales, proteínas).

La aplicación en la industria azucarera fue la primera utilización de esta

tecnología en alimentos y se emplea en la desmineralización de melazas y en

la recuperación de azúcar de las aguas de lavado antes de la etapa de

evaporación-concentración. Finalmente, en el procesamiento de aceites y

grasas se aplica en la recuperación de aceites de disolventes y de aguas de

lavado.

o Extracción con fluidos supercríticos: esta tecnología utiliza fluidos en

condiciones supercríticas, es decir a temperatura-presión superior al punto

crítico, en las que los fluidos en estado gaseoso presentan propiedades de

solvatación, alto coeficiente de partición y baja viscosidad. En el campo de

los alimentos, esta tecnología se ha utilizado en la extracción de aceites

esenciales, tratamiento de residuos sólidos y líquidos y control de

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85

reacciones enzimáticas, entre otros. El uso de esta tecnología impacta en el

medio ambiente debido a que evita el uso de solventes orgánicos y ofrece la

posibilidad de emplear inmediatamente la torta de extracción sin necesidad

de hacer tratamientos de purificación adicionales ni desecharla como

residuo.

o Campos eléctricos pulsados: la tecnología basada en campos eléctricos

pulsados de alta intensidad (sigla en inglés PEF: Pulsed Electric Field) es un

método de naturaleza no térmica cuya aplicación principal es la

pasteurización fría de alimentos líquidos o semilíquidos. Un estudio detallado

respecto al impacto ambiental del proceso completo de producción de jugo

de zanahoria, demostró que la etapa de pasteurización fría por PEF o APH en

términos de energía y emisión de CO2, resultan despreciables en relación a

los parámetros correspondientes a la producción/reciclado o incineración del

packaging (botellas de polietileno de alta densidad). Otras aplicaciones de la

tecnología PEF que se evaluaron en los últimos años son la extracción y la

infusión asistida de solutos en tejidos biológicos y la descontaminación de

aguas residuales de la industria alimentaria. En relación a esta última

aplicación, cabe señalar que en 2006 se ha instalado en Arizona, una planta

industrial para el tratamiento de aguas residuales, la cual continua hoy

operando.

o Procesos fotoquímicos: procesos directos como el tratamiento con radiación

ultravioleta (UV) o indirectos como radiación UV en presencia de

catalizadores como óxido de titanio o peróxido de hidrógeno se utilizan en el

tratamiento de aguas contaminadas con residuos de pesticidas. La

utilización de los sistemas indirectos mejora la eficiencia de la degradación

debido a que los procesos directos presentan velocidades de reacción muy

bajas. Otra tecnología correspondiente a este campo es la que se basa en la

aplicación de pulsos de luz de alta intensidad y corta duración. Su mayor

aplicación en el tratamiento de aguas se ha orientado fundamentalmente a la

desinfección, es decir a la inactivación de microorganismos patógenos. Sin

Page 90: Estado del arte y tendencias de la ciencia y tecnología del

86

embargo, en los últimos años se ha evaluado su aplicación en el tratamiento

de aguas provenientes del lavado de productos frutihortícolas que pueden

estar contaminadas con residuos de pesticidas. En el tratamiento de aguas

con pesticidas organofosforados se observó una rápida degradación de los

compuestos, aunque se registraron diferencias entre los compuestos y el

tipo de sistema utilizados.

o Biotecnología: resulta de interés la utilización de enzimas en el tratamiento de

residuos o en la fabricación de los productos. Esta estrategia permite reducir la

utilización de tratamientos químicos costosos y contaminantes. En este

sentido, existen ejemplos de aplicación como la extracción de aceite de colza

mediante tecnología enzimática que es alternativa al uso de hexano como

solvente. La enzima utilizada es extraída de cepas de Aspergillus niger que

participa en el proceso de extracción y, al mismo tiempo, separa proteínas que

pueden emplearse como suplemento alimenticio para animales. Otras

aplicaciones son la utilización de efluentes ricos en nutrientes para producir

biomasa y la producción de enzimas extracelulares a partir de microorganismos

cultivados en esos sustratos (por ejemplo, proteasas, lipasas y amilasas

producidas a partir de Bacillus subtilis en efluentes del proceso de producción

de harina de mandioca). De esta manera, las tecnologías enzimáticas permiten

reemplazar o reducir la utilización de sustancias químicas agresivas con el

ambiente transformándolos en procesos más limpios y seguros.

o Biorremediación: consiste en la utilización de microorganismos, enzimas,

hongos o plantas capaces de degradar deshechos peligrosos a fin de remover

los contaminantes orgánicos (efluentes y residuos sólidos domésticos e

industriales, petróleo, pesticidas, etc.), inorgánicos (mercurio, plomo, cobre,

cianuros, etc.) y gaseosos (metanos, compuestos volátiles, etc.) del medio

ambiente. A partir de la modificación genética es posible incrementar su

capacidad de degradación de los contaminantes.

Page 91: Estado del arte y tendencias de la ciencia y tecnología del

87

• Reciclaje, Recuperación y Reutilización de Residuos: numerosas etapas del

procesamiento dentro del amplio engranaje productivo generan residuos

intermedios que pueden tratarse o recuperarse con bajos niveles de inversión para

luego reutilizarse. En algunos casos puede, incluso, derivarse una línea de

subproductos que minimice los volcados o la generación de residuos sólidos,

aumentando así los niveles de productividad de la empresa. En este sentido, es

vital definir los siguientes tres aspectos que dirigen esta estrategia.

o Reciclaje: convertir un residuo en insumo o en un nuevo producto.

o Reuso: utilizar un residuo, en un proceso, en el estado en el que se

encuentre.

o Recuperación: aprovechar o extraer componentes útiles de un residuo.

A continuación se presentan algunos de los variados ejemplos asociados a esta

estrategia.

Procesamiento del suero en la industria láctea: es un producto que

generalmente se considera residuo y es vertido a los cuerpos de agua sin

ningún tratamiento previo. Dada su composición en proteínas, grasa y

carbohidratos (lactosa), es un sustrato ideal para aprovechar en procesos

fermentativos y para la obtención de otros productos, como por ejemplo

producción de etanol (por fermentación con la cepa Kluyveromyces fragilis),

procesos de desmineralización, hidrólisis de lactosa y producción de metano,

etc.

Aprovechamiento de los desechos del alcaucil: el 70% en peso de la flor del

alcaucil corresponde a las hojas externas o brácteas no destinadas al

consumo humano. Sin embargo, estos desechos son útiles para la

alimentación animal y están destinados a la elaboración de forrajes ensilados.

Por otra parte, la alcachofa contiene sustancias con aplicabilidad terapéutica

Page 92: Estado del arte y tendencias de la ciencia y tecnología del

88

como cinarina, cinaropicrina, inulina, flavonoides y sales potásicas. Otro de los

aspectos interesantes de este vegetal es el gran contenido de ascorbato

peroxidasa (APX), PPO y POD, enzimas con una alta utilización biotecnológica.

Aceites obtenidos de la cáscara de cítricos: la industria de los cítricos genera

un residuo importante de cáscaras. Tradicionalmente, del albedo de la cáscara

se extrae pectina, empleada como gelificante en otras industrias. Las técnicas

de extracción de aceites esenciales de este residuo, además de ofrecer una

alternativa adicional de aprovechamiento del producto para fines comerciales,

disminuyen la carga de compuestos hidrófobos en las aguas residuales. Se

emplean técnicas de arrastre con vapor de agua, presión en frío, destilación al

vacío e incluso extracción supercrítica.

Biomasa resultante de la industria de oleaginosas: el empleo de la biomasa

obtenida de los residuos del procesamiento del aceite de palma como fuente

de energía, representa para esta industria una alternativa novedosa,

económica y limpia, como manejo de residuos.

Residuos de la industria pesquera: los residuos sólidos de la industria del

pescado pueden aprovecharse para la elaboración de numerosos

subproductos ya que están constituidos por proteínas, lípidos, carbohidratos,

nitrógeno no proteico y minerales, entre otros. Por ejemplo puede obtenerse:

harina, aceites (ricos en ácidos grasos omega 3), ensilados e hidrolizados,

concentrados de proteínas, tejido conectivo, quitina y quitosano, insulina,

proteasas, entre otros.

5.3. Biotecnología

La irrupción de la biología molecular ha cambiando la forma de producir alimentos. La

biotecnología puede entenderse como el uso de un proceso biológico para resolver

problemas o transformar un producto con el fin de hacerlo más útil. En la actualidad

Page 93: Estado del arte y tendencias de la ciencia y tecnología del

89

se dispone de una serie de herramientas tradicionales y modernas como el cultivo

celular, la bioquímica, la ingeniería genética y la genómica, todo reunido bajo el

concepto de “biotecnología”.

El nuevo conocimiento biológico tiene hoy un valor económico diferente, que puede

cambiar radicalmente la producción de bienes y servicios, por lo que se plantean

nuevos retos no sólo para la biología, sino para la economía y la sociedad toda. Sin

embargo, la sociedad en general se enfrenta al dilema de los Organismos

Genéticamente Modificados (OGM). Las principales líneas de acción en biotecnología

vegetal han incidido básicamente en la cadena primaria de producción,

consecuentemente la percepción de su utilidad, por parte del consumidor, ha sido y

es escasa. Sin embargo, más recientemente, cierta líneas de acción como la

transformación de plantas para aumentar las propiedades nutritivas o incluso para

ejercer control sobre ciertas patologías, están modificando la percepción pública de

la biotecnología.

En el mundo existen hoy importantes restricciones legislativas para la aprobación de

nuevos OGM. Particularmente esto ocurre en la Unión Europea. La legislación

europea en materia de etiquetado, trazabilidad de OGM y nutrición, que entró en

vigor en 2004, es calificada de “complicada en el cumplimiento y de difícil control”

dada la falta de materiales de referencia para comprobar tanto la ausencia como la

presencia de OGM.

El importante esfuerzo realizado en el Proyecto Genoma Humano (finalizado en 2003)

ha permitido desarrollar importantes conocimientos científicos y tecnológicos, así

como cosechar el interés y la voluntad de la sociedad hacia la biotecnología, que

actualmente se está enfocando, además, hacia a otros sectores como el agrícola-

ganadero y la acuicultura.

Las principales tendencias mundiales de la aplicación de la biotecnología en general y

de la genómica en particular, en los distintos sectores han sido las siguientes.

Page 94: Estado del arte y tendencias de la ciencia y tecnología del

90

• Incremento de la calidad de los productos, incluida la orientación de la producción

(alimentos) hacia la prevención y tratamiento de enfermedades.

• Incremento de la productividad y resistencia de las especies, variedades y razas,

tanto vegetales como animales, dotando de una mayor capacidad competitiva a

las explotaciones.

• Implantación de criterios de sostenibilidad en la gestión de las explotaciones,

limitando el consumo de insumos y el impacto sobre el medio ambiente e

incrementando la sanidad de las explotaciones.

• Control sobre la reproducción animal, dirigiendo la producción de la descendencia

por criterios económicos, industriales y comerciales.

• Mejora del control sanitario, con el objetivo de dar respuestas rápidas y eficaces a

las crisis alimentarias y la prevención de epizootias.

• Utilización de microorganismos, plantas y animales como biofábricas, la

conversión de bacterias, cultivos o animales de granja en fábricas para la

producción controlada y de costo bajo, por ejemplo materias primas.

• Generación de nuevas vías de eliminación y reutilización de residuos de la industria

de manera natural y controlada.

• Desarrollo de nuevas especies comestibles, para incrementar la oferta de

alimentos satisfaciendo la demanda del consumidor por nuevos productos.

• Potenciación del uso no alimentario de las tierras agrarias y explotaciones

ganaderas, generando productos para la industria.

Las herramientas biotecnológicas que se disponen para alcanzar estos objetivos,

son:

Page 95: Estado del arte y tendencias de la ciencia y tecnología del

91

• la genómica y su aplicación a la explotación de la variabilidad natural: bajo el

nombre genérico de tecnologías genómicas o de aplicación al estudio del genoma,

se incluyen todas aquellas que estudian los distintos productos resultantes de la

expresión de los genes y que pueden ayudar a definir el estatus bioquímico de la

célula, tejido o ser vivo bajo estudio. Estos productos incluyen todos los pasos

subsiguientes en la expresión génica como RNAs, proteínas y metabolitos. Así, al

grupo de herramientas que estudian el conjunto de dichos productos se les

denomina transcriptómica, proteómica y metabolómica, respectivamente. La

estrategia de aplicación de las herramientas genómicas en biotecnología

agroindustrial se aproxima cada día más a aquella utilizada en los procedimientos

de descubrimiento y desarrollo de nuevos fármacos de la industria farmacéutica.

• La mejora genética de las producciones y selección asistida por marcadores: la

técnica de PCR se ha convertido en la herramienta esencial de la biología

molecular y juega un papel de liderazgo en prácticamente todas las técnicas que

se aplican al análisis y caracterización de genomas actuales. Una de sus

principales aplicaciones es la amplificación y posterior detección de secuencias de

ADN que caracterizan una especie o variedad. Dichas secuencias de ADN se

denominan marcadores moleculares y son altamente específicas, permitiendo

incluso la diferenciación entre individuos de una misma especie en base a su línea

germinal. La secuenciación de los genomas vegetales y animales ha abierto el

camino para realizar mapeos de genomas. En el futuro, parece razonable que se

puedan realizar análisis de alta resolución de la diversidad genética dentro de una

misma especie (mediante la re-secuenciación de los genes a partir de colecciones

de genotipos). Este esfuerzo generaría información genética suficiente para

permitir, por ejemplo, el estudio de asociaciones entre las características

agronómicas visibles y sus causas moleculares.

• El cultivo in vitro y la micropropagación: en el laboratorio y bajo condiciones in

vitro, se obtiene la multiplicación de especies vegetales (propagación de clones,

semillas artificiales, protoplasmas regenerativo, etc.). Al conjunto de técnicas que

permiten esta multiplicación vegetativa se las denomina técnicas de

Page 96: Estado del arte y tendencias de la ciencia y tecnología del

92

micropropagación e incluyen, además, otras técnicas conocidas, como el cultivo

de tejidos y la embriogénesis somática o generación de un embrión a partir de una

célula vegetal adulta. El desarrollo de tecnologías para la mecanización y

automatización del proceso de micropropagación reducirá tiempos y costos. La

mecanización se aplicaría sobre procesos de cultivo y transferencia de material,

mientras que la automatización se relaciona con el cultivo líquido de tejidos y

células en biorreactores. En cuanto al reino animal, es importante señalar que

también es posible clonar, mediante técnicas de transferencia nuclear, individuos

altamente productivos. Otra importante área de desarrollo de la biotecnología

aplicada a la producción ganadera serán las tecnologías de sexado de esperma,

que aseguren la descendencia del género deseado.

• El desarrollo de nuevas variedades: en la historia evolutiva, las especies vegetales

han ido incorporando nuevos juegos de cromosomas, es decir, una mayor

dotación genética, que les han permitido adquirir herramientas moleculares para

adaptarse a un mayor número de hábitats y sobrevivir a condiciones climáticas

más adversas. La posibilidad de incorporar nuevos juegos de cromosomas es

explotada para la generación de nuevas especies y variedades. Una de las

principales preocupaciones de la industria semillera es el desarrollo de nuevas

variedades en menores tiempos y con una dotación genética estable, que limite la

aparición de variaciones o heterogeneidad en el genoma de los cultivos o animales

objeto de producción. En este sentido se han desarrollado programas para

producir líneas puras a partir de polen o de ovocitos, siendo estas líneas puras

utilizadas para el cultivo directo o para la obtención de híbridos.

• La transformación genética: la transformación genética de cultivos y animales es

una importante herramienta para mejorar la productividad y la calidad, así como

para adaptar las producciones a intereses industriales o del consumidor. En cuanto

al controvertido tema del impacto ambiental de los OGM, la mayoría de los

estudios científicos y agronómicos sostienen que los cultivos, sean

convencionales o transgénicos, tienen un impacto sobre el ambiente, siendo

importante avanzar en estudios de transformaciones que limiten la diseminación al

Page 97: Estado del arte y tendencias de la ciencia y tecnología del

93

medio del gen insertado. Una de las líneas de trabajo más importantes sobre la

transformación de plantas y microorganismos de interés agronómico o industrial

es la modificación dirigida. Con ella, en lugar de introducir el gen de interés o

realizar mutaciones al azar, se intenta controlar el lugar exacto donde se hace la

inserción del gen o produce la mutación. En los próximos años es posible que se

desarrollen técnicas que permitan tanto la inserción específica de un gen en un

lugar del genoma, a través de la recombinación homóloga, como la extracción

específica de ciertos genes de interés. Es factible que en los próximos años se

cultiven plantas transformadas tanto a gusto del consumidor como de la industria,

incluyendo usos alimentarios y no alimentarios. En la actualidad se están llevando

a cabo estudios de costo-beneficio entre la producción de compuestos de interés

en fermentadores y la producción en plantas o animales. La temática de las bio-

fabricas -cuya aplicación data de varios años- permitirá producir metabolitos y/o

proteínas de interés en tecnología de alimentos a partir de microorganismos,

plantas y animales transformados genéticamente, con el fin de generar alimentos

dirigidos a grupos poblacionales específicos.

• La sanidad animal y vegetal: en el procedimiento diagnóstico del estado sanitario

se ha incluido el denominado diagnóstico molecular, que involucra la identificación

de secuencias genéticas, ácido desoxirribonucleico y ácido ribonucleico

(ADN/ARN), para determinar la existencia de patógenos o caracterizar el estado

sanitario de las producciones de manera confiable y rápida. Estas tecnologías se

están miniaturizando e integrando en dispositivos de fácil uso e incluso portátiles.

En profilaxis, existe toda una nueva generación de vacunas que en lugar de utilizar

extractos atenuados de patógenos (vivos o muertos) para producir una reacción

inmune, utilizan directamente las proteínas inmunizantes producidas por

recombinación genética (vacunas recombinantes) o bien utilizan directamente los

genes responsables de provocar una reacción inmune frente a una infección

(vacunas de ADN). Por su costo, en la actualidad se están solo desarrollando

vacunas para animales de compañía y para especies acuícolas. Sin embargo, es

previsible que todos los conocimientos desarrollados en genómica puedan

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94

aplicarse para el desarrollo de nuevas vacunas y fitosanitarios que incidan sobre

las causas moleculares de los procesos infecciosos.

• El sector agroalimentario: cuando los sistemas de innovación demandan valor

agregado, diversificación y adecuación a los diferentes tipos de sistemas

productivos para responder a las demandas del mercado de alimentos, están

demandando la participación de la biotecnología, aun cuando el espectro

tecnológico para esa especialidad esté aun un poco más restringido. La

biotecnología en la industria de los alimentos comprende el uso de tecnologías

biológicas para la producción, transformación y preservación de alimentos, así

como para la producción de materias primas, aditivos y coadyuvantes. Su

aplicación es creciente también en los aspectos bioanalíticos, de aseguramiento

de la calidad y en el control de contaminantes en alimentos. Aplicaciones

relevantes, a nivel de empresas del MERCOSUR, incluyen organismos adicionados

a productos lácteos (leches saborizadas, yogures, fermentos y levaduras

recombinadas utilizadas en la elaboración de vinos, quesos) así como aditivos y

colorantes empleados en productos cárnicos y frutas desecadas. Encuestas

realizadas a cien empresas del sector agroalimentario de Argentina (granos,

aceites, harinas, panificación, lácteos, cárnicos, golosinas), revelaron que 46%

utilizan insumos derivados de la biotecnología, en tanto que una proporción menor

(8%) utilizan la tecnología en los procesos productivos. Una proporción destacada

de los encuestados (43%) manifestó que la producción de sus empresas se vería

beneficiada con el uso de innovaciones biotecnológicas en sus productos y

procesos.

Las primeras generaciones de alimentos modificados genéticamente, dirigida a los

consumidores y productores, están ya en producción hace varios países. Esta nueva

generación incluye a los alimentos funcionales, la unión de la nutrición y la

farmacéutica en la nutracéutica, la producción de sustancias de alto valor industrial, la

aparición de nuevas fibras naturales y la utilización de la biomasa para producción de

energía, entre otras aplicaciones. La genómica estructural abre nuevos campos de

desarrollo para las proteínas. El potencial impacto de predecir la conformación de una

Page 99: Estado del arte y tendencias de la ciencia y tecnología del

95

proteína, su capacidad biológica y las posibilidades de la ingeniería para un

determinado proceso, generan posibilidades enormes para la medicina y los

agroalimentos.

En el sector agroalimentario, la biotecnología ha aplicado las herramientas y técnicas

basadas en métodos moleculares y genómicos con el fin de mejorar la alimentación,

la nutrición, la salud y el bienestar. Esto ha ofrecido la posibilidad de una mayor

eficiencia para los productores y procesadores, así como beneficios adicionales para

los consumidores.

En los alimentos, la biotecnología podría permitir el uso mejor y más eficiente de las

materias primas y productos derivados, a través de enzimas mejoradas o nuevas, y

de microorganismos optimizados para la fermentación. Esta herramienta científica

también puede contribuir a mejorar la inocuidad alimentaria y a asegurar la

trazabilidad en toda la cadena alimentaria. Buscando introducirnos en la microbiología

de alimentos y caracterización de organismos patógenos y alteradores mediante el

uso de herramienta biotecnológicas, se puede indicar que los datos recogidos hasta

la fecha en relación a las bacterias patógenas ya han proporcionado información

relevante. Así, casi la mitad de los marcos de lectura abiertos (ORF) secuenciados no

poseen ninguna función conocida, sugiriendo que es necesario comenzar a entender

cómo estas bacterias que sobreviven y reaccionan a su entorno. A partir de la

comparación entre secuencias completas de bacterias, se produjo la transmisión

horizontal del material genético en mayor proporción de la que se pensaba

previamente. La transmisión horizontal de genes rápidamente puede transformar una

bacteria comensal en un patógeno potencial, a través de la puesta en común de un

gran número de genes de virulencia relacionados (islas de patogenicidad), o de genes

que codifican para la resistencia a antibióticos.

Otra área muy interesante para abordar con la genómica, como fuerza impulsora, se

relaciona con la comprensión de la expresión global del genoma bacteriano, en

función de la variación de las condiciones ambientales donde se desarrolla. Esto ha

permitido estudiar y caracterizar condiciones relevantes para la ecología microbiana

Page 100: Estado del arte y tendencias de la ciencia y tecnología del

96

de los alimentos. Para este fin se han desarrollado y aplicado los denominados

“microarrays” o "chips" de oligonucleótidos de ADN que permiten obtener los "perfiles

de expresión", es decir, el estudio de los ARN mensajeros. Los microarrays pueden

colaborar en desentrañar la función, aun desconocida, de numerosos genes. Con el

uso de microarrays de ADN, se pueden analizar los perfiles de transcripción del

genoma de prácticamente cualquier microorganismo de interés. Por ejemplo, se han

utilizado biochips de ADN para asignar más de 100 genes y sus perfiles de expresión

en organismos tales como Haemophilus influenzae y Streptococcus pneumoniae. Se

pueden establecer también qué genes fueron activados o desactivados en

condiciones ambientales diferentes. La tecnología de microarrays ofrece

oportunidades sin precedentes, particularmente para los métodos de diagnóstico y

detección: se utilizan para desarrollar sistemas rápidos de identificación de bacterias

patógenas y alteradoras, que permiten realizar análisis de mutaciones e investigar la

interacción proteína-ADN.

Los métodos de caracterización molecular pueden identificar los diferentes clones

(organismos genéticamente idénticos que descienden de un ancestro común) a nivel

de especie bacteriana. Estas técnicas moleculares se utilizan para caracterizar

físicamente las bacterias en base a su composición del ADN (genotipo) o en la

producción de proteínas, ácidos grasos, hidratos de carbono, o de otros contenidos

bioquímicos (el fenotipo o “quimiotipo”).

Con la evolución de la biotecnología, muchos procesos complejos ya han sido

automatizados y miniaturizados y vinculados a equipos de control que guían las

operaciones, incluyendo el análisis de datos. Como las tecnologías se han expandido,

se está ahora en condiciones de generar datos más oportunos en una unidad de

menor costo. De particular interés para aquellos involucrados en el análisis

bioquímico de los microorganismos son los procedimientos que han sido adaptados

o que no son susceptibles de realizarse por otras técnicas, ya que ofrecen los análisis

de manera rápida y económica. Enormes bibliotecas con bases de datos informáticas

(bioinformáticas) están disponibles para ayudar al reconocimiento de patrones para la

detección e identificación de microorganismos, basados en el análisis de células

Page 101: Estado del arte y tendencias de la ciencia y tecnología del

97

enteras, elementos genéticos, o químicos derivados. Los métodos automatizados

están ahora disponibles para la detección, identificación y tipificación de los

componentes biológicos o cambios estructurales que ocurren debido a presiones o

influencias externas. Versiones de laboratorio de sofisticados dispositivos permiten

además, un mejor transporte y un uso eficiente del espacio de laboratorio.

Tanto en seguridad de los alimentos (inocuidad) como en calidad alimentaria estas

técnicas biotecnológicas permiten:

• la detección rápida y sencilla de contaminantes de origen microbiológico.

• La identificación del microorganismo generador de la contaminación a nivel de

especie.

• La localización del origen de la contaminación en la cadena de producción (control

de puntos críticos).

• La detección rápida y sencilla de especies microbianas de interés para las

características del alimento.

• El estudio de la resistencia bacteriana enfocada a través de la genómica.

La pirosecuenciación se ha insertado con fuerza en el sector de I+D en general, y de

aseguramiento de la calidad en el sector agroalimentario en particular. Se basa en la

síntesis de una cadena de ADN complementaria a la muestra problema. El proceso se

basa en una cascada enzimática que da lugar a la emisión de luz cada vez que un

nucleótido se incorpora a la cadena en síntesis. Las enzimas involucradas en el

proceso son ADN polimerasa, ATP sulfurilasa, Luciferasa y Apirasa. Acoplado al

proceso de gelificación, permite mantener estables los diversos componentes de una

reacción durante largos periodos de tiempo en las más variadas condiciones de

almacenamiento. Este procedimiento conjunto, mejora la calidad de los resultados de

la pirosecuenciación, perfeccionando la resolución de las secuencias en un 90%

Page 102: Estado del arte y tendencias de la ciencia y tecnología del

98

respecto a métodos estándar y aumentando en un 35% la longitud de los fragmentos

a secuenciar. Esta tecnología se ha aplicado para la identificación de diferentes

organismos (E. coli, L. monocytogenes, S. aureus, Salmonella, Lactobacillus, B.

cereus, etc.) y grupos microbianos de interés (mesófilos, termófilos, aerobios,

anaerobios, Clostridium sulfito reductores, hongos y levaduras) en diferentes

matrices alimentarias.

Otro enfoque interesante para la utilización de la biotecnología, es la reducción de

emisiones de CO2. Esta demanda requiere la descarbonización de la agricultura que

se lleva a cabo a través de la utilización de materias primas diseñadas para reducir las

emisiones de CO2 de la ganadería, la conversión de CO2 en combustible metano (uso

de enzimas de diseño), el uso de residuos orgánicos para la síntesis de biogás

mediante digestión anaeróbica, el uso de algas para absorber el CO2, el desarrollo de

alimentos de larga duración para permitir el transporte bajo en carbono, y el reciclaje

de los residuos para producir fertilizantes no derivados del petróleo.

Una aplicación de gran impacto es la utilización de la biotecnología industrial, para:

• la detección de nuevos biocatalizadores (enzimas) en la naturaleza: el aumento de

datos a partir de la secuencia genómica es una enorme reserva sin explotar que

pueden codificar para enzimas útiles. Los nuevos biocatalizadores resultantes de

los enfoques genómicos requieren enfoques computacionales complementarios

con el fin de identificar rápidamente las enzimas candidato.

• El desarrollo de enzimas por ingeniería: alternativas a las tradicionales tecnologías

basadas en procesos químicos. Mejoramiento de la calidad ambiental por

reducción del consumo de energía y mayor biodegradabilidad. Obtención de

productos de alta calidad y mínima contaminación, dado que las enzimas son más

especificas, poseen menos reacciones secundarias y, consecuentemente, menor

formación de productos secundarios.

Page 103: Estado del arte y tendencias de la ciencia y tecnología del

99

• La estabilización e inmovilización de enzimas: es un proceso en el que se confina

o localiza a la enzima en una región definida del espacio, para dar lugar a formas

insolubles que retienen su actividad catalítica y que pueden ser reutilizadas

repetidamente. De forma más amplia puede decirse que es el proceso por el cual

se restringen, completa o parcialmente, los grados de libertad de movimiento de

enzimas, orgánulos, células, etc. por su unión a un soporte.

• El desarrollo de plantas como biofábricas: contribuye a la sostenibilidad

ambiental, dado que el objetivo de la biofábrica sería hacer un uso directo de la

luz solar, CO2 inorgánico y nutrientes de bajo costo para la producción de

compuestos.

Por otro lado, las técnicas biotecnologías son poderosas herramientas que podrán

ser utilizadas para caracterizar y restringir la formación de biofilms bacterianos en la

producción e industrialización de alimentos. Los biofilms están formados por

comunidades de microorganismos que crecen embebidos en una matriz de

exopolisacáridos y se adhieren a una superficie inerte, un tejido vivo o un alimento.

En esencia, si hay bacterias presentes, cualquier superficie que combine abundante

humedad y nutrientes es susceptible de ser cubierta por la formación de biofilms. En

la industria alimentaria este desarrollo es relevante, no solamente por los aspectos

ligados a la vida útil del producto y a la salud pública, sino también por la toma de

muestras para los análisis microbiológicos y para los procedimientos de limpieza y

sanitización. Las diferentes bacterias que forman un biofilm son capaces de

comunicarse entre ellas mediante el mecanismo de señales entre células conocido

como “quorum sensing -QS”, coordinando así la formación del biofilm. El biofilm les

permite a las bacterias sobrevivir en escenarios impredecibles y bajo condiciones de

stress, tales como cambios de temperatura, pH, secado, rayos ultravioletas, entre

otros.

Encuestas realizadas entre especialistas en ciencias biológicas acerca de las áreas de

la microbiología más influyentes en el nuevo milenio, han dado un amplio consenso

en dos temas: el análisis de los genomas bacterianos y el proceso de formación de

Page 104: Estado del arte y tendencias de la ciencia y tecnología del

100

biofilms. No hay duda que la disponibilidad de la secuencia completa de numerosos

genomas microbianos ejerce un notable efecto sobre diversos campos de la

agricultura, la biología y la industria. El desarrollo de la genómica y de la proteómica

ha hecho posible que se puedan identificar los genes que se expresan de forma

diferente cuando las bacterias se hallan formando parte de biofilms. Esto, a su vez,

abre la posibilidad de identificar estrategias de control de los biofilms, mediante la

utilización de sustancias supresoras o de inactivación enzimática de las moléculas

que facilitan la comunicación entre las bacterias de la comunidad.

La utilización de herramientas biotecnológicas para la obtención de alimentos

funcionales es una de las más destacadas tendencias futuras, ya que puede aplicarse

para:

• mejorar las propiedades saludables y funcionales de los aceites por cambios en el

perfil de ácidos grasos.

• Mejorar la calidad (aumento de aminoácidos esenciales) y cantidad de proteínas

de las materias primas.

• Modificar los carbohidratos mejorando sus propiedades funcionales. Por ejemplo

el almidón, modifica en los alimentos las propiedades de textura, solubilidad,

viscosidad, gelatinización, estabilidad del gel, transparencia. La inulina (fructano

utilizado como endulzante baja calorías, fuente de fibra dietaria y agente

espesante) puede utilizarse en biofábricas (papa).

• Incrementar el contenido de vitaminas en plantas: beta carotenos y otros

carotenoides (canola, arroz dorado, papa, tomate), vitamina E (maíz, soja),

vitamina C (cereales y granos, frutillas), ácido Fólico (tomates), antioxidantes

(papas, tomate, berenjena).

• Incrementar la disponibilidad de minerales traza (fierro, zinc, selenio: Fe, Zn, Se).

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101

• Identificar fitonutrientes y compuestos nuevos (isoflavonas, fitoesteroles y

fitoestenoles, probióticos, etc.).

• Reducir sustancias antinutricionales (ácido fítico, inhibidor de tripsina, lectinas,

saponinas, cianógenos, micotoxinas, etc.).

• Reducir alérgenos en alimentos por identificación de proteínas alergénicas en los

8 principales alimentos (leche, huevos, pescados, crustáceos, trigo, maní, nueces

de árbol y soja) considerados alergénicos.

• Misceláneos: cerveza (regula el flavor) y vino (aumenta los antioxidantes),

producción de café descafeinado.

Finalmente y en un aspecto más relacionado con la química de los alimentos, la

biotecnología podría ser utilizada para reemplazar la síntesis química por

microorganismos capaces de realizar la secuencia de reacciones necesarias entre el

sustrato y el producto final. De esta manera, la fermentación podría ser utilizada con

frecuencia en procesos de producción farmacéutica, agroquímica, de aditivos

alimentarios, aminoácidos, vitaminas y enzimas.

Por otro lado, un concepto que se ha instalado en el sector científico-tecnológico es

el de la nutrigenómica. La dieta representa uno de los factores externos claves a los

cuales se ven expuestos los genes. Por una parte, la expresión genética resulta en

proteínas que gobiernan las vías bioquímicas y por lo tanto la existencia humana. Los

nutrientes, por su lado, gobiernan la concentración de diferentes proteínas en

distintos órganos, funcionando como reguladores de la transcripción y traducción

genética, en el procesamiento del ARN nuclear, en la estabilidad del ARN mensajero

y en su degradación. Asimismo, los factores genéticos pueden conferir

susceptibilidad o resistencia a una enfermedad y pueden determinar la severidad o

progresión de la misma. Muchas enfermedades comunes no son causadas por

variación dentro de un solo gen sino que son causadas por complejas interacciones

entre múltiples genes.

Page 106: Estado del arte y tendencias de la ciencia y tecnología del

102

El campo de estudio que se ha dado en llamar Genómica Nutricional o Nutrigenómica

explica cómo los genes y los productos derivados de ellos, interactúan con los

químicos dietarios para modificar el fenotipo e inversa y cómo los genes y sus

productos metabolizan los nutrientes a través de las células. Es un enfoque

multidisciplinario para investigar el efecto de la dieta y de las variaciones genéticas

individuales, como factores de riesgo respecto de enfermedades crónicas. Esta

nueva tecnología permitirá evaluar y prescribir una dieta y un estilo de vida adecuado

para individuos con una composición genética única. Esto seguramente provocará un

cambio de paradigma de un enfoque de mercado masivo a uno más personalizado e

individualizado. Este enfoque requiere de un trabajo multidisciplinario donde converja

el conocimiento aportado por varias ciencias y tecnologías. Aún a nivel internacional,

se requiere todavía un importante periodo de investigación.

5.4. Nanotecnología

La nanotecnología es el estudio, diseño, creación, síntesis, manipulación y aplicación

de materiales, aparatos y sistemas funcionales a través del control, como también, la

explotación de fenómenos y propiedades de la materia a nano escala. El campo de

esta ciencia utiliza estructuras en la escala de los 1-100 nanómetros. Cuando se

manipula la materia a una escala tan minúscula de átomos y moléculas, se es capaz

de manifestar fenómenos y propiedades totalmente nuevas. Por lo tanto, los

científicos utilizan la nanotecnología para crear materiales, aparatos y sistemas

novedosos y poco costosos con propiedades únicas. La nanotecnología promete

soluciones vanguardistas y más eficientes para los problemas ambientales, así como

muchos otros que enfrenta la humanidad.

Mientras la nanotecnología está en una etapa que podría calificarse de pre-

competitiva con aplicaciones limitadas en la práctica, las nanopartículas en cambio,

se están utilizando en un buen número de industrias para usos electrónicos,

magnéticos y opto-electrónicos, biomédicos, farmacéuticos, cosméticos,

energéticos, catalíticos y en ciencia de los materiales.

Page 107: Estado del arte y tendencias de la ciencia y tecnología del

103

A manera de ejemplo se pueden citar algunos de los adelantos recientes

relacionados con estas disciplinas, particularmente en las áreas donde más han

avanzado.

• La nanotecnología y la medicina.

o Los principales desafíos en el área de la salud están relacionados con el

nanodiagnóstico, las aplicaciones en medicina regenerativa (implantes, terapia

celular, ingeniería celular), la nanobiotecnología aplicada a la administración de

fármacos, y la secuenciación genética.

o Diseño de nanopartículas que se introducen en las moléculas causantes de la

supresión del sistema inmune para inhibirlas.

o Nueva generación de biosensores y técnicas de imagen que facilitan el

diagnóstico de enfermedades.

o Diseño de biomateriales que tienen en su interior estructuras nanométricas que

contribuyen a la fabricación de tejidos artificiales para sustituir tejidos naturales

dañados.

o Desarrollo de un sistema basado en nano-imanes para purificar la sangre,

liberándola de agentes patógenos, otorgando enormes ventajas al proceso

actual de diálisis.

o Desarrollo de nanopartículas sensibles a la glucosa, que se inyectan debajo de

la piel y miden en forma continua el nivel de glucemia.

o Tratamiento de enfermedades degenerativas como el Alzheimer, el SIDA, las

enfermedades cardiovasculares, etc.

Page 108: Estado del arte y tendencias de la ciencia y tecnología del

104

o Desarrollo de nanosensores de ADN para la detección de enfermedades, que

identifican si un transcriptoma es normal o patológico en forma preventiva.

o Desarrollo de sistemas de diagnóstico no invasivos para la monitorización de

trombos o hemorragias, y de sistemas de diagnóstico y tratamiento de

apoplejías y embolias. Sistemas de suministro de anticoagulantes o factores de

coagulación.

• La nanotecnología, la electrónica y la física. En esta área del conocimiento los

desarrollos han sido numerosos y muy exitosos:

o sistemas de detección de explosivos o generadores de energía a partir del

sonido.

o Generación de electricidad mediante la utilización de nanotubos de carbono

recubiertos de combustible que producen calor por descomposición.

o Nuevas pantallas de televisión basadas en el uso de nanocompuestos.

o Visualización de mapas en tres dimensiones.

o Producción de vehículos más limpios, seguros y con un costo menor utilizando

nanomateriales.

o Desarrollo de sensores de tacto artificiales que imitan la funcionalidad de los

dedos humanos con el fin de perfeccionar el funcionamiento de los robots

actuales.

o Modificación superficial, desarrollo de capas y recubrimientos con tecnologías

limpias. Capas nano- estructuradas.

Page 109: Estado del arte y tendencias de la ciencia y tecnología del

105

o Desarrollo de nanomateriales y nanocompuestos que permiten mejorar las

propiedades de los materiales en reemplazo de materiales convencionales

utilizados para prótesis neurológicas cuyo rendimiento se deteriora con el

tiempo y reaccionan a cambios del entorno.

o La nanotecnología y la física cuántica están íntimamente unidas. La criptografía

cuántica con la que se busca garantizar el secreto de las comunicaciones, o la

teleportación que pretende transmitir las propiedades de un objeto a otro, son

una muestra de las aplicaciones de la física cuántica, y en ellas como en

muchas otras la nanotecnología es indispensable.

• La nanotecnología y el ambiente. Estas aplicaciones se relacionan

fundamentalmente con la producción agrícola; el tratamiento y remediación de

aguas; la remediación de la contaminación atmosférica, y la detección y el control

de plagas.

En contraste, la aplicación de la nanotecnología en la industria alimentaria es

bastante más limitada. Sin embargo, ciertos descubrimientos nanotecnológicos

han comenzado a impactar en la industria de los alimentos y otras industrias

asociadas que afectan aspectos importantes que van desde la inocuidad

alimentaria hasta la síntesis de nuevos alimentos e ingredientes.

• La nanotecnología y la alimentación en el mundo. La nanotecnología va a permitir

que se puedan consumir alimentos más saludables, resistentes y de mayor vida

útil. Sin embargo, todo lo nuevo es observado con cierto escepticismo y pueden

existir razones; recientemente la Comisión Europea ha estudiado, junto a los

científicos, la posibilidad de regular todas aquellas aplicaciones nanotecnológicas

relacionadas con la alimentación.

Distintas organizaciones, que velan por los intereses de los consumidores,

solicitan que este campo se regule y se aumente la prudencia con respecto a los

materiales nanotecnológicos, planteando la necesidad de conocer cómo pueden

Page 110: Estado del arte y tendencias de la ciencia y tecnología del

106

afectar estas nuevas aplicaciones el organismo humano y el medio ambiente. En

este sentido, la FSA (Food Standard Agency-UK) ha iniciado dos proyectos: el

primero orientado a estudiar las posibles vías de ingreso de los nanomateriales al

cuerpo humano y cómo se metabolizarían una vez ingresados. El segundo

proyecto se orienta a la caracterización, detección y cuantificación de

nanopartículas en alimentos.

Las leyes de seguridad, los métodos de pruebas de seguridad y los

procedimientos en salud laboral no son suficientes para medir la exposición y

evaluar los riesgos de los nanoalimentos, nanoenvases y productos químicos

nanoformulados. No hay aún una exacta comprensión de la interacción de las

nanopartículas con las células vivas y las implicaciones para la industria y los

consumidores. Tampoco son claros los reglamentos que rigen la evolución de los

nanomateriales, los sistemas que verifican la seguridad, el destino y disposición

vía la remediación. Son necesarios estudios experimentales y pruebas de

investigación para generar datos de peligro y exposición, necesarios para las

evaluaciones de riesgos en respuesta a la preocupación sobre los posibles efectos

tóxicos producto de la exposición a las nanopartículas.

En resumen, los avances científicos deben ser supervisados meticulosamente y se

hace necesario aplicar una legislación que regule la aplicación de materiales

nanotecnológicos en la industria alimentaria, informar además a través del

etiquetado aquellos alimentos que han sido desarrollados con métodos o

compuestos nanotecnológicos y permitir que los consumidores decidan al

momento de seleccionar el producto.

La utilización actual de la nanotecnología en el procesamiento de alimentos se

centra principalmente en desarrollar nuevos envases, alterar algunas propiedades

de los alimentos, y en darle funcionalidad a los alimentos. Ejemplos de la

nanotecnología como una herramienta para el logro de nuevos avances en la

industria alimentaria son los siguientes:

Page 111: Estado del arte y tendencias de la ciencia y tecnología del

107

• Materia primas. Las propiedades funcionales de muchas materias primas, así

como el eficaz procesamiento de los alimentos, se deben al uso de

nanoestructuras como celulosa o almidón, que controlan procesos como la

gelatinización y afectan al valor nutricional de los alimentos. También las

nanoestructuras que se incluyen en las interfases de aceite-agua o aire-agua

determinan la estabilidad de las espumas y emulsiones alimentarias. Un mayor

conocimiento de la naturaleza de las nanoestructuras presentes en los alimentos

permitirá mejorar los criterios de selección de las materias primas y la calidad e

inocuidad de los productos alimenticios.

• Complementos de alimentos. La estrategia general consiste en poner a punto

nanotransportadores o nanomateriales para mejorar la absorción y

biodisponibilidad de sustancias nutritivas incorporadas, como vitaminas, nutrientes

y minerales. La encapsulación y los sistemas de distribución transportan, protegen

y distribuyen los ingredientes de los alimentos funcionales a su sitio de acción

específico. Este enfoque es aún incipiente y se espera que a futuro se logren

sistemas más avanzados y específicos.

• Materiales de contacto con los alimentos. En la actualidad, algunos

nanocompuestos son ya utilizados como material de embalaje o de recubrimiento

para controlar la difusión de gases y prolongar el tiempo de conservación de

diversos productos. Cada vez se utilizan más compuestos basados en la

nanotecnología para elaborar materiales de contacto con los alimentos dotados de

propiedades antimicrobianas. Las actuales investigaciones sobre ese tipo de

superficies tienen por objeto conseguir sensores capaces de detectar la

contaminación bacteriana y reaccionar contra la misma. Se espera incrementar la

seguridad en la fabricación, procesamiento y transporte de productos alimenticios

a través de sensores para la detección de patógenos y contaminantes.

Ya se han comenzado a utilizar sistemas que integran la detección, localización,

presentación de informes, y el control remoto de los productos alimenticios y que

Page 112: Estado del arte y tendencias de la ciencia y tecnología del

108

pueden aumentar la eficacia y seguridad en el tratamiento y transporte de

alimentos.

Un ejemplo de aplicación indirecta de la nanotecnología en la industria alimentaria

son los microprocesadores (chips) de silicio que se vienen fabricando desde hace

más de dos décadas. La creciente complejidad de estos dispositivos en materia

de tecnología del etiquetado, abrirá nuevas posibilidades de información en los

envases que serán capaces de ofrecer toda clase de datos sobre el alimento que

contienen.

Las aplicaciones de las nanociencias y la nanotecnología en la cadena

agroalimentaria van desde uso actual, como por ejemplo, las membranas,

antibacterianas, filtros, envases, al probable, como por ejemplo, sensores para

agentes patógenos y contaminantes, monitores ambientales, acoplados a

dispositivos de alarma, de teledetección y seguimiento y, finalmente, al menos

probable, como es la creación de cantidades ilimitadas de alimentos por síntesis.

Algunos analistas de mercado han indicado como las áreas más prometedoras la

de los envases inteligentes, la de conservantes y la de los alimentos interactivos.

Además, todos parecen coincidir en que el desarrollo de alimentos nuevos o

modificados molecularmente en sus estructuras es un campo muy prometedor.

Sin embargo, el uso real y uso potencial de la nanociencia y la nanotecnología en

el sector de alimentos, piensos, y plaguicidas, requieren aún mayores estudios

(EFSA, 2009).

En relación a las futuras tendencias de la nanotecnología en el sector alimentario,

es necesario tomar en cuenta que el procesamiento de alimentos es una industria

manufacturera multitecnológica que involucra una amplia variedad de materias

primas, altos requerimientos de seguridad, y procesos tecnológicos

correctamente regulados. Consecuentemente, se pueden beneficiar de la

nanotecnología cuatro áreas principales en la producción de alimentos: el

desarrollo de nuevos materiales funcionales, el procesamiento en nanoescala, el

Page 113: Estado del arte y tendencias de la ciencia y tecnología del

109

desarrollo de productos y los métodos y diseño de instrumentos para la inocuidad

alimentaria y la bioseguridad.

Aun cuando se percibe un gran número de potenciales aplicaciones de la

nanotecnología en la industria alimentaria, muchas pueden ser difíciles de adoptar

comercialmente porque son demasiado caras o poco prácticas para la aplicación a

escala industrial. Lo más probable es que la limitada aplicación de la

nanotecnología en la industria de la alimentación actual cambie a medida que las

tecnologías de nanofabricación sean más rentables.

Las potenciales tendencias en nanotecnología y alimentos estarían orientadas a:

• monitoreo de la calidad: el aseguramiento de la calidad en la industria alimentaria

y de los bioprocesos se plantea como de suma importancia porque los

consumidores demandan alimentos inocuos y sanos y los gobiernos imponen

estrictas normas para garantizar la seguridad (inocuidad) y la higiene de los

alimentos.

• Aseguramiento de la calidad: los nanosensores pueden proporcionar

aseguramiento de la calidad mediante el rastreo y captura de datos de

microorganismos, toxinas y contaminantes a lo largo de la cadena de elaboración

de alimentos. Se estima una amplia implementación de nanosensores en el

envasado de alimentos a fin de controlar su calidad durante las diversas etapas del

proceso logístico, garantizando la calidad del producto hasta el momento del

consumo.

• Envasado de los alimentos: el propósito es aumentar la vida útil, evitar el deterioro,

el ingreso de bacterias, o la pérdida de nutrientes. Los polímeros nanocompuestos

son la clave para futuros avances en envases flexibles, inteligentes y activos. Estos

envases producidos por la nanotecnología serán capaces de autorepararse en

caso de rasgaduras o perforaciones, evitando así fugas o contaminaciones.

Tendrán también la capacidad de responder a cambios en las condiciones

Page 114: Estado del arte y tendencias de la ciencia y tecnología del

110

ambientales como por ejemplo, temperatura y humedad. Los envases inteligentes

cobran importancia cuando sus contenidos se están deteriorando y alertan de ello

a los consumidores, mientras que el envase activo tiene la propiedad de despedir

conservantes (antimicrobianos), sabores, colores o suplementos nutricionales en

los alimentos cuando comienza a deteriorase.

• Recubrimiento de los alimentos: la nanotecnología puede proveer distintas

alternativas para crear nuevas películas laminadas o nanolaminas apropiadas para

el uso en la industria de los alimentos. Estos recubrimientos comestibles y

películas han comenzado a utilizarse en una amplia variedad de alimentos

incluyendo frutas, verduras, carnes, chocolate, dulces, productos de panadería y

papas fritas. Estas películas actúan como barreras para la humedad, lípidos y

gases. Alternativamente, podrían mejorar las propiedades de textura de los

alimentos o servir como transportadores de agentes funcionales, tales como

colorantes, saborizantes, antioxidantes, nutrientes y antibióticos.

• Almacenamiento de alimentos: la nanotecnología puede ofrecer absorbedores de

oxígeno para carne procesada en trozos, cerveza, bebidas, pastas cocidas y

bocadillos listos para consumir; hojas de absorción de la humedad para carne

fresca, aves y pescados; y bolsas removedoras de etileno para el envasado de

frutas y verduras.

• Uso de películas de envasado activo: para el control selectivo de la transmisión de

oxígeno, y enzimas que afectan el aroma. Es otro de los adelantos que avanzará

con el enfoque de la nanotecnología. La modificación de la superficie de

materiales a tamaño nanométrico mediante agentes de dispersión podrá actuar

como sustrato para la enzima oxidorreductasa. Actualmente se está investigando

la aplicación de nanomateriales conteniendo partículas de arcilla para retener el

CO2 dentro de los envases y extender la vida útil de las bebidas gasificadas.

• Desarrollo de los llamados envases verdes: se desarrollan en base a

nanocompuestos bio-degradables. Estos envases se preparan a partir de

Page 115: Estado del arte y tendencias de la ciencia y tecnología del

111

biopolímeros naturales tales como el almidón y la proteína y tienen la ventaja de

proporcionar mejores propiedades organolépticas como el aspecto, olor y sabor.

Se pueden desarrollar nanofibras antimicrobianas naturales y de gran resistencia a

partir de quitina (polímero natural y principal componente de los caparazones de

bivalvos).

• La trazabilidad, seguimiento y protección de marcas: la nanotecnología puede

ayudar a las industrias suministrando autenticación, seguimiento y rastreo de un

producto alimentario para evitar la falsificación, prevenir la adulteración y el desvío

de productos destinados a un mercado específico. Esta ciencia les provee de

complejos nanocódigos de barra de carácter invisible conteniendo la información

del lote, pudiendo ser directamente encriptado en los productos alimenticios y/o el

embalaje.

• Encapsulación y distribución de compuestos: el sistema de nanoencapsulación

ofrece numerosas ventajas incluyendo la facilidad de manejo, una mayor

estabilidad, protección contra la oxidación, retención de ingredientes volátiles,

enmascaramiento del sabor, liberación controlada de la humedad, control del pH,

liberación consecutiva de varios ingredientes activos, cambios en las

características de sabor, percepción organoléptica duradera y biodisponibilidad

mejorada.

• Producción de nanomateriales a partir de plantas o microorganismos modificados

genéticamente y a partir de materiales de desecho como paja y otros materiales

celulósicos: ciertas nanopartículas biopoliméricas de rango nanómetrico se

pueden producir utilizando biopolímeros como las proteínas o polisacáridos. Los

ingredientes funcionales pueden ser encapsulados en estas nanopartículas que se

forman y liberan en respuesta a determinados factores ambientales

desencadenantes.

• Encapsulamiento y entrega de ingredientes funcionales polares, no polares, y/o

anfifílicos: utilizando coloides de asociación (micelas de surfactante, vesículas,

Page 116: Estado del arte y tendencias de la ciencia y tecnología del

112

bicapas, micelas inversas, y cristales líquidos). Las principales ventajas de la

asociación de los sistemas coloidales son que se forman de manera espontánea,

son termodinámicamente favorables y suelen ser soluciones transparentes. Las

dimensiones de muchos coloides de asociación están en el rango de 5 a 100 nm.

• Uso de homogeneizadores de válvula de alta presión: permite generar emulsiones

con diámetros de gota de menos de 100-500 nm (nanoemulsiones). Ciertos

componentes de los alimentos funcionales pueden ser incorporados dentro de las

gotas, en la región interfacial, o en la fase continua, produciendo una

desaceleración de los procesos de degradación química debido a las propiedades

de la capa interfacial que las rodea.

• Liberación de nutracéuticos y compuestos bioactivos: los compuestos bioactivos,

son componentes nutricionales extra que, normalmente, se producen en

pequeñas cantidades en los alimentos. Ejemplos de ellos son el beta-caroteno de

las zanahorias, el licopeno del tomate, beta-glucano de la avena, ácido omega-3 de

aceite de salmón, ácido linoleico conjugado del queso, Lactobacillus del yogur e

isoflavonas de la soja. La nanotecnología tiene un excelente potencial para

mejorar la eficiencia en la liberación de nutracéuticos y compuestos bioactivos de

los alimentos funcionales destinados a mejorar la salud humana. Se puede mejorar

la solubilidad y la biodisponibilidad, así como proteger la estabilidad de los

micronutrientes y compuestos bioactivos durante el procesamiento,

almacenamiento y distribución.

• Sistemas de encapsulamiento: las emulsiones múltiples nanoestructuradas

permiten crear sistemas de encapsulación novedosos con nuevas propiedades de

entrega. Los componentes de los alimentos funcionales pueden ser encapsulados

dentro de la fase acuosa interna, la fase de aceite, o la fase acuosa externa,

haciendo posible el desarrollo de un sistema de entrega único que contiene varios

componentes funcionales. Esta técnica también podría ser usada para separar dos

componentes de la fase acuosa, ya que podrían reaccionar negativamente entre si

estando presentes en la misma fase.

Page 117: Estado del arte y tendencias de la ciencia y tecnología del

113

• Liberación de potenciadores del sabor, color o elementos nutritivos: los alimentos

interactivos permitirán a los consumidores modificarlos en función de sus propias

necesidades nutricionales o gustos. El concepto de “alimentos a demanda” se

basa en que miles de nanocápsulas que contienen potenciadores del sabor, color

o elementos nutritivos permanecen latentes en la comida y sólo serán liberadas

cuando son activados por el consumidor. Los alimentos funcionales capaces de

aportar una cantidad apropiada de calcio a los consumidores con osteoporosis o

alimentos con nanofiltros diseñados para retener las moléculas susceptibles de

provocar reacciones alérgicas son sin duda temas de innovación. A largo plazo los

nanosensores se podrían utilizar para detectar el perfil individual de una persona y

activar la emisión de las moléculas apropiadas personalizando el alimento según

sus gustos o necesidades.

• Control del tamaño y estructura de los alimentos: estos atributos afectan su

funcionalidad, proporcionando las propiedades de sabor, textura y estabilidad que

el consumidor desea. La nanotecnología tiene la capacidad de controlar el tamaño

y la estructura de los alimentos, ofreciendo alimentos más saludables (con menos

grasa, menos sal), con propiedades sensoriales deseables, ingredientes con

propiedades mejoradas y la potencial eliminación de determinados aditivos, sin

pérdida de la estabilidad, por ejemplo en las emulsiones y ayudas inteligentes para

eliminar los alérgenos en el procesamiento de alimentos. La reducción del tamaño

de las moléculas de los alimentos a cristales en nanoescala genera más partículas

y una superficie de área total mayor. Las partículas más pequeñas mejoran la

“untabilidad” y la estabilidad de los alimentos, permitiendo, por ejemplo desarrollar

productos saludables de bajo contenido en grasa.

• Utilización en los materiales de embalaje: estimaciones de mercado de las

aplicaciones nanotecnológicas actuales y de corto plazo sugieren que los

materiales de embalaje de alimentos ya representan la mayor parte de la fracción

del mercado global de nanoalimentos. Además, se ha estimado que los envases

derivados de la nanotecnología (incluidos los envases de alimentos), llegarán hasta

el 19% de la cuota de productos de la nanotecnología con aplicaciones en la

Page 118: Estado del arte y tendencias de la ciencia y tecnología del

114

industria de bienes de consumo global en 2015 (EFSA, 2009). Un factor que

contribuye a esta rápida evolución comercial puede ser la posibilidad de corregir o

incorporar los nanomateriales presentes en los polímeros de plástico, de tal

manera que no haya una significativa exposición al consumidor.

• Evaluación de riesgos (ER): es un proceso científico donde se evalúa la

probabilidad de ocurrencia de los efectos nocivos para la salud humana/animal o el

ambiente. El paradigma tradicional para la ER se compone de cuatro etapas:

identificación del peligro, caracterización del peligro, evaluación de la exposición y

la evaluación de riesgos. El riesgo para la salud se define como la combinación de

la probabilidad de ocurrencia de efectos adversos para la salud y la gravedad de

ese daño. El paradigma tradicional de la ER es considerado un punto de partida

adecuado para hacer frente a los problemas de seguridad adicionales que puedan

surgir debido a las características de los nanomateriales incluyendo su aplicación

en los alimentos y el área de la alimentación.

En este análisis es importante considerar las características y propiedades especiales

de los nanomateriales, tales como la reactividad de superficie por el tamaño pequeño

y la capacidad de translocación a través de las membranas biológicas así como las

interacciones de los nanomateriales con la matriz que los rodea y los efectos

inesperados como resultado de esta interacción. Esto sugiere la necesidad de una

correcta identificación de la presencia de nanopartículas -incluyendo su

caracterización física- que se utilicen en el sector de alimentos y piensos. Por otra

parte, es esencial para el eventual futuro desarrollo de modelos predictivos de ER,

disponer de un detallado conocimiento de las propiedades y atributos físico-químicos

y toxicológicos de un número representativo de nanomateriales. En esta línea se hace

muy crítico plantear el desarrollo de técnicas para la identificación y caracterización

de nano partículas, (EFSA, 2011). En resumen, el éxito de la nanotecnología en la

industria de los alimentos y de los bioprocesos dependerá de la percepción de los

consumidores y de la aceptación social.

Page 119: Estado del arte y tendencias de la ciencia y tecnología del

115

5.5. Tecnologías de la Información y la Comunicación (TIC)

A partir del cambio de paradigma tecno–económico introducido por la extraordinaria

explosión de las TIC, el conocimiento empieza a adquirir importancia para la actividad

económica. Es así que en la empresa se aborda la valorización del conocimiento

como todo aquello que es capaz de expresarse agregando valor a su producción. La

consecuencia más destacada de este fenómeno es la incorporación del conocimiento

como un insumo de alta relevancia para agregar valor a la producción de bienes y

servicios. Esto ha dado lugar a la Economía Basada en el Conocimiento (EBC) o a la

Sociedad del Conocimiento, en la cual la innovación tecnológica de productos y

procesos es el motor del desarrollo socio económico.

Cuando se habla de TIC en las cadenas agroalimentarias, se piensa en los diferentes

procesos que las recorren, algunos a lo largo de toda la cadena (trazabilidad,

sistemas de gestión, sistemas de logística, negocios on-line) y otros en determinados

segmentos (automatización en diferentes etapas como por ejemplo clasificación

automatizada de frutas en base a visión óptica), sistemas de monitoreo, control (local

o remoto) y alarmas en el almacenamiento, procesamiento y/o distribución.

Pero también se piensa en las redes de empresas, en clusters, en integración vertical

y horizontal, en ecosistemas de I+D+i, en integración público privada y en

participación en los mercados globales. Ninguno de estos aspectos puede siquiera

considerarse sin el análisis del papel de las TIC.

Hay tres fenómenos que caracterizarán los arreglos organizacionales de la industria

moderna: convergencia, descentralización y virtualidad7. El primero, tiene que ver no

sólo con la dinámica de las fusiones empresariales, sino con un ecosistema

tecnológico cada vez más intrincado donde la combinación de conocimientos muy

diversos proporciona ventajas competitivas de corto plazo. El segundo, parece

responder a una fuerza que se opone y complementa a la concentración y al

7 Ministerio de Ciencia, Tecnología e Innovación Productiva de la Nación (2008). Libro Blanco de la Prospectiva TIC – Proyecto 2020, pág. 78.

Page 120: Estado del arte y tendencias de la ciencia y tecnología del

116

paradigma tradicional de economía de escala. El tercero, permite la creación de

unidades de negocio, de I+D o de innovación, que trasciende las estructuras

formales, rígidas. Los tres aspectos se complementan y se basan en el uso intensivo

de la información y el conocimiento.

Dado que la diversidad de procesos agroindustriales es muy grande, incluso dentro

de una misma cadena y que las TIC constituyen, a su vez, un enorme conjunto de

tecnologías que van desde el hardware, las redes y los satélites, hasta los sistemas

de información, la inteligencia artificial y la robótica, sólo podemos hacer una amplia

aproximación a la temática y marcar algunas tendencias. Por otra parte la intersección

agro-industrial presenta problemáticas bien distintas según se haga foco en los

aspectos más primarios o más industriales de las cadenas; de manera que una

prospectiva de las TIC para la agroindustria deberá mirar también las tendencias en la

industria en general a mediano plazo.

En términos generales, la prospectiva internacional en TIC y las aplicaciones a las

cadenas de abastecimiento de alimento sugiere que para sostener una actividad

competitiva en los mercados globales se deberá gestionar más y mejor información a

lo largo de toda la cadena de valor (incluyendo ambos extremos: producción y

consumo), en lo posible en tiempo real, trazable y georeferenciada. La información

deberá estar disponible por distintos medios, especialmente en Internet y por

telefonía celular.

Desde el punto de vista de la intervención en las actividades, los procesos, que ya

tienden a la automatización (por razones de costos, seguridad, calidad y

disponibilidad de mano de obra), requerirán mejores sensores (de todo tipo), más

capacidad de manejo integrado de altos volúmenes de datos, mejor capacidad de

toma de decisiones (humana y asistida) y mejores métodos de acción/re-acción y

control. Todo esto implicará intensificar el desarrollo de la mecatrónica, la optrónica y

la robótica (todas implican o cruzan con las TIC).

Page 121: Estado del arte y tendencias de la ciencia y tecnología del

117

Por otra parte, los sistemas de información que tradicionalmente gestionan los

sistemas de producción (en sentido amplio) deberán agregar otros aspectos como la

gestión de los residuos sólidos, de los efluentes, de la energía y del agua utilizada.

Esto quizás requiera de reformas de líneas de procesos y/o expansión de los

sistemas de información y control. La industria del futuro, además de altamente

tecnificada, deberá ser flexible y ágil para responder al entorno socio-ambiental

cambiante.

En materia de aplicaciones de georreferenciación basada en satélites de

posicionamiento, las predicciones sugieren que seguirá creciendo tanto en alcance

como en precisión, de la mano de las nuevas constelaciones de satélites de última

generación (Galileo/Glonass) y traccionada por la necesidad de expandir y mejorar los

sistemas de trazabilidad, que constituyen la base de los mecanismos de

aseguramiento y control de la calidad, así como, generación de confianza en los

consumidores. Estos últimos, desean cada vez más información acerca de los

productos que consumen y también influir en las decisiones sobre desarrollo de

nuevos productos.

Para todo esto se requiere una fuerte interacción entre las disciplinas tradicionales de

las cadenas agroalimentarias con ingenieros informáticos, electrónicos, mecatrónicos

y de telecomunicaciones. Vale la pena insistir en la integración como tendencia

tecnológica, asociada no sólo a cambios en la industria sino también a cambios en

los sistemas de I+D, educación y extensión, ya que no se puede promover lo que se

desconoce.

En la actualidad, es probable que falte también una concepción integrada de cadenas

y/o negocio propulsado y/o traccionado por el conocimiento. La falta de

sistematización de procesos y tecnologías deja libre un terreno fértil para

“arquitectos” tecnológicos capaces de visualizar el hilo conductor de la información y

el conocimiento. Este nuevo rol integrador de agrónomos y extensionistas debe

construirse, apoyado por una nueva institucionalidad que reconozca a las disciplinas

no tradicionales, como contraparte tecnológica del saber biológico y ambiental.

Page 122: Estado del arte y tendencias de la ciencia y tecnología del

118

Circulando entre la metagenómica de poblaciones microbiológicas, los

nanosensores, y los microactuadores, ascendiendo hasta las observaciones macro de

satélites y sus sensores remotos, pasando por sistemas de trazabilidad integrados a

una gestión inteligente en tiempo real y asistida por máquinas precisas y semi-

autónomas, se puede construir una visión de la “agroindustria del futuro”. Una que

podrá hacerse realidad sólo si se trabaja desde ahora interdisciplinariamente, con un

horizonte de largo plazo y con una visión ampliamente compartida.

Algunas metáforas conceptuales utilizan la “inteligencia” como signo distintivo del

futuro y se habla de agricultura inteligente, logística inteligente, manufactura

inteligente, ciudades inteligentes y muchas otras acepciones. Podemos interpretar

“inteligente” como la mejor forma de utilizar los recursos para lograr los objetivos

deseados. Poniendo algunos ejemplos:

• la optimización del uso del agua, la energía, el espacio, el tiempo, el suelo y otros

recursos naturales.

• La minimización de residuos, polución, trastornos colaterales en la salud y en los

estilos de vida.

• La optimización del uso del conocimiento y otras capacidades humanas

distribuidas para la toma de decisiones y para la innovación.

Como resulta obvio, todo intento de hacer las cosas más inteligentemente, requiere

tanto de información, como de capacidad de tomar decisiones en tiempo y forma, así

como de recursos humanos cada vez más formados para resolver situaciones

complejas, anticipar el futuro próximo e innovar. Asimismo, la cantidad altamente

creciente de datos conlleva a que una de las mayores áreas de incertidumbre sea la

velocidad con la que grandes volúmenes de datos pueden ser procesados y

utilizados con seguridad. Se espera que del continuo desarrollo de software y

hardware, surjan nuevas soluciones que permitan la recolección, análisis y uso de

mayor cantidad de datos.

Page 123: Estado del arte y tendencias de la ciencia y tecnología del

119

A continuación se hace un listado de temáticas/tecnologías basadas en TIC de amplio

uso y/o potencial en la agro-industria, compilado de distintos documentos de

prospectiva tanto industrial, como agrícola y de TIC. Algunas son de carácter

disciplinario más cercano a la ciencia básica mientras que otras son tecnologías en

uso o en desarrollo. Casi todas estas áreas y tecnologías se entrecruzan.

• Códigos de barras.

• RFID (siglas de Radio Frequency IDentification, en español identificación por

radiofrecuencia).

• Intercambio electrónico de datos (EDA).

• Modelación, simulación y diseño de operaciones.

• Monitoreo remoto y control.

• Automatización y control.

• Mecatrónica, optrónica

• Robotización.

• Redes de sensores y de multisensado.

• Sistemas de posicionamiento.

• Sistemas de información georeferenciados, web-mapping.

• Sistemas embebidos.

• Sistemas expertos y de soporte de decisiones.

Page 124: Estado del arte y tendencias de la ciencia y tecnología del

120

• Sistemas y nuevos conceptos de negocios “e”8.

• Redes sociales virtuales.

• Telecomunicaciones celulares y satelitales.

• Desarrollos para dispositivos móviles.

• “Internet of things”.

• Software y código abierto.

• Interfaces.

• Ambiente Inteligente.

• Inteligencia artificial y ciencias cognitivas.

• Máquinas “conscientes”.

• Bioinformática.

• Bioestadística, geoestadística y métodos computacionales.

• Computación en grid y de alto desempeño9.

• Simulación y modelado (técnico y social).

• Algoritmos complejos y evolutivos.

8 Por ejemplo: ebusiness, elogisTIC, ecommerce, etc. 9 Según Wilkipedia: “El término grid se refiere a una infraestructura que permite la integración y el uso colectivo de ordenadores de alto rendimiento, redes y bases de datos que son propiedad y están administrados por diferentes instituciones.

Page 125: Estado del arte y tendencias de la ciencia y tecnología del

121

• Investigación operativa.

• Mecánica, química y biología computacional.

Es necesario entender que “la relación entre las TIC y la industria es de ida y vuelta:

las TIC pueden ayudar a la modernización y renovación de la industria, pero es

necesario modernizar y renovar la industria para que las puedan apropiar”10. Esta

advertencia lleva a considerar la necesidad de impulsar programas de promoción

integral que incluyan temas de educación, formación, innovación y gerenciamiento de

tecnologías emergentes, para una nueva generación de empresarios, tecnólogos e

investigadores que sean capaces de cooperar desde la diversidad de conocimiento y

capacidades, para la construcción de un ecosistema innovador de nivel internacional.

La relativa baja tasa de adopción y penetración de las TIC en la agroindustria local y

en las cadenas que la sustentan, confirman esta necesidad y torna estratégica esta

área de vacancia.

Por último, los sistemas de información de las cadenas agroindustriales tendrán que

elaborar estrategias para que los consumidores (individualmente u organizados) sean

actores del proceso de innovación11. Las ciencias sociales (economía, sociología,

antropología y psicología social, entre otras) tienen mucho que agregar a las

tecnologías más “duras” que han sido mencionadas en los párrafos precedentes.

Simplemente porque las TIC son, en el fondo, sociotécnicas; esto es sistemas que

implican a seres humanos interactuando.

10 Ministerio de Ciencia, Tecnología e Innovación Productiva de la Nación (2008). Op. Cit., pág. 105. 11 Piénsese por ejemplo en las investigaciones de comportamiento y/o satisfacción de consumidores.

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PROYECTO MINCyT-BIRF: ESTUDIOS DEL SECTOR AGROINDUSTRIA

Documento-Síntesis y Serie Documentos de Trabajo

Documento-Síntesis:

Trayectoria y prospectiva de la agroindustria alimentaria argentina: Agenda

estratégica de innovación. Roberto Bocchetto; Graciela Ghezan; Javier Vitale;

Fernando Porta; Marcelo Grabois y Ciro Tapia.

Serie Documentos de Trabajo:

Marco conceptual y metodológico del Proyecto. Roberto Bocchetto, Javier Vitale,

Graciela Ghezan y Marcelo Grabois.

Diagnóstico y prospectiva de la agroindustria alimentaria mundial y argentina al

2030. Marcelo Saavedra y Flory Begenisic.

Estado del arte y tendencias de la ciencia y tecnología del procesamiento de

alimentos. Norma Pensel (Comp.).

− Estado del arte y tendencias de la ciencia y tecnología del procesamiento de

alimentos a nivel mundial. Claudia González y Sergio Vaudagna.

− Estado del arte y tendencias de la ciencia y tecnología del procesamiento de

alimentos en Argentina. Claudia González, Sergio Vaudagna; Ricardo

Rodríguez; Martín Irurueta; Mónica Chávez y Roxana Páez.

− Tecnologías transversales del procesamiento de alimentos.:

Page 136: Estado del arte y tendencias de la ciencia y tecnología del

132

Calidad Integral. Ricardo Rodríguez, Martín Irurueta y Sergio Vaudagna.

Producción más limpia. Sergio Vaudagna y Claudia González.

Biotecnología. Claudia González y Ricardo Rodríguez.

Nanotecnología. Claudia González y Ricardo Rodríguez.

Tecnologías de la información y comunicación (TIC). Martín Irurueta, y Marcelo

Bosch.

Incertidumbres críticas de la agroindustria alimentaria argentina en el contexto

mundial. Javier Vitale; Ana María Ruiz, Carina Santi; Vanina Giraudo y Fernando

Solanes.

Conducta y dinámica innovadora de empresas en las cadenas agroalimentarias.

Fernando Porta y Patricia Gutti, con la colaboración en la construcción y análisis

de la base de datos de: Héctor Bazque; Romina Amaya Guerrero; Carolina

Cerrudo, Noelia Amarillo; Rodrigo Cajide y Fernando Peirano.

Conducta, dinámica y patrones tecnológicos de la cadena del maíz. Mercedes

Goizueta.

Conducta, dinámica y patrones tecnológicos de la cadena de carne porcina.

Gisela Benes y Juan Erreguerena.

Conducta, dinámica y patrones tecnológicos de la cadena de lácteos bovinos.

Andrés Castellano.

Conducta, dinámica y patrones tecnológicos de la cadena de olivo.

Jésica De Angelis; Cecilia Fernández Bugna y Fernando Porta.

Page 137: Estado del arte y tendencias de la ciencia y tecnología del

133

Conducta, dinámica y patrones tecnológicos de la cadena de frutas finas. María

Laura Viteri y Gisela Benes.

Capacidades de I+D del sistema agroalimentario y cadenas de valor. Lucas

Luchilo.

Marcos regulatorios en la industria de procesamiento de alimentos.

− Calidad Integral. Gerardo Gargiulo.

− Propiedad Intelectual. Germán Linzer y Ezequiel Paulucci.

Vigilancia tecnológica e inteligencia competitiva de la cadena de maíz. Marcelo

Grabois; Cristina Cámara; Daniel Scachi; Eduardo Matozo; María Victoria Luque;

Clara De Hertelendy; Virginia Ferrero; Alejandro Regodesebes; Martín Patiño, y

Rolando Gonzalez.

Vigilancia tecnológica e inteligencia competitiva de la cadena de carne porcina.

Marcelo Grabois; Cristina Cámara; Virginia Ferrero; María Victoria Luque;

Alejandro Regodesebes y Ricardo Rodríguez.

Vigilancia tecnológica e inteligencia competitiva de la cadena de lácteos bovinos.

Marcelo Grabois; Cristina Cámara; Clara De Hertelendy; María Victoria Luque;

Alejandro Regodesebes y Ricardo Cravero.

Vigilancia tecnológica e inteligencia competitiva de la cadena de olivo. María

Victoria Luque, Cristina Cámara; Matías Ruíz; Marcelo Grabois y Facundo Vita.

Page 138: Estado del arte y tendencias de la ciencia y tecnología del

134

Vigilancia tecnológica e inteligencia competitiva de la cadena de frutas finas.

Cristina Cámara; Marcelo Grabois; María Victoria Luque; Alejandro Regodesebes

y María Elida Pirovani.

Vigilancia tecnológica e inteligencia competitiva en tecnologías de

procesamiento de alimentos. Marcelo Grabois (Comp.).

− Estudio de vigilancia tecnológica e inteligencia competitiva: envases activos e

inteligentes. Miguel Guagliano; Adriana Sanchez Rico; Marcelo Grabois;

Sergio Vaudagna y Cristina Cámara.

− Estudio de vigilancia tecnológica e inteligencia competitiva: altas presiones

hidrostáticas. Germán Linzer; Ezequiel Paulucci; Marcelo Grabois y Sergio

Vaudagna.

Visión prospectiva de la cadena de maíz al 2030. Susana Brieva y Ana María

Costa.

Visión prospectiva de la cadena de carne porcina al 2030. Ana María Costa y

Susana Brieva.

Visión prospectiva de la cadena de lácteos bovinos al 2030. Mónica Mateos y

Ciro Tapia.

Visión prospectiva de la cadena de olivo al 2030. Pablo Gómez Riera y Facundo

Vita.

Visión prospectiva de la cadena de frutas finas al 2030. Pablo Gómez Riera; Iván

Bruzone y Daniel Kirschbaum.

Page 139: Estado del arte y tendencias de la ciencia y tecnología del

135

Page 140: Estado del arte y tendencias de la ciencia y tecnología del

Godoy Cruz 2320 (C1425FQD)Ciudad Autónoma de Buenos Aires - República Argentina

www.mincyt.gob.ar