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VII CUMBRE DE LAS AMÉRICAS, ¿QUÉ ALTERNATIVAS? SÁBADO 11 de abril de 2015 / Año 3 / N° 105 AFP

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VII CUMBRE DE LAS AMÉRICAS, ¿QUÉ ALTERNATIVAS?

SÁBADO 11 de abril de 2015 / Año 3 / N° 105

AFP

VII Cumbre de las Américas, ¿Qué alternativas?

INTRODUCCIÓNLas siete cumbres de las Américas fueron orga-nizadas por la Organi-zación de los Estados

Americanos (OEA) para reunir a los je-fes de Estado y de Gobiernos de nuestro hemisferio. El objetivo inicial de estas cumbres fue la imposición del Tratado de Libre Comercio (ALCA) que Washing-ton quiso y aún quiere imponernos.

Pero a partir de la V cumbre, ce-lebrada en Mar del Plata, tres presi-dentes: Fidel, Chávez, Kirchner, Lula y Evo (que aún no lo era, sino que actuaba desde la calle, desde los sin-dicatos cocaleros del trópico, desde los movimientos sociales y pueblos originarios) le dieron la estocada de muerte al ALCA

Desde la primera Cumbre de las Américas, celebrada en 1994, precisa-mente en Miami, nuestra América La-tina y el Caribe ya no son las mismas. En primer lugar, dejaron de ser ‘el patio trasero’ del imperio norteño, aunque este último se empeña con el deseo de continuar siéndolo.

Desde entonces fueron muchos los cambios profundos sucedidos en Las Américas. Brasil, Venezuela, Bolivia, Ecuador, Argentina, entre otros, ya no tienen los mismos gobiernos domina-dos por las elites tradicionales y, sobre todo, por la dependencia de EEUU.

A nivel regional, la OEA, el instru-mento creado por EEUU, funcional a su dominio de la región, se ha ido de-bilitando. Al mismo tiempo se han ido forjando varios instrumentos para la in-

tegración de nuestra región en función de intereses propios.

Allí están el ALBA, Unasur, Celac, como el reforzamiento del Mercosur, dando un marco de referencia total-mente ajeno a los intereses imperiales. Es así que las últimas tres cumbres de las Américas no terminaron con la típi-ca ‘declaración final’ debido al choque frontal entre la posición de EEUU con el resto del continente.

Ya en la VI Cumbre de Las Américas celebrada en Cartagena de Indias se ad-virtió a EEUU que Cuba tiene que estar presente en pie de igualdad, como los demás países hermanos, en la próxima, en la actual VII. Para muchos, éste es el motivo detrás de la decisión de Obama de intentar reanudar las relaciones con la mayor de las islas caribeñas.

Pero si la caída de la Unión Soviética le privó al imperio del ‘enemigo’ tra-dicional a nivel global durante más de medio siglo, por lo cual tuvo que inven-tar otros enemigos, como el terrorismo de Al Qaeda.

En este marco de referencia, sus me-didas respecto a Cuba le privan de su enemigo ‘hemisférico’. De este modo, además de otros factores, Venezuela está para ocupar este lugar. Es así que se puede explicar el exabrupto de decla-rar a Venezuela como amenaza grave a la seguridad nacional del Imperio más poderoso de la historia humana y, lo es pese al inicio de su decadencia, ya en el plano financiero y económico, pero no en el militar y en la subversión y el terrorismo de estado.

Pero vayamos por partes.

Redacción internacional

2 11 de abrilde 2015 311 de abril

de 2015

CONFLICTOS O PUNTO DE BIFURCACIÓN

Es un punto de referencia que las tres últimas cumbres han sido un rotundo fracaso para la política hegemó-nica e imperial de Estados Unidos: la de Mar del Plata, Argentina, 2005, donde se le dio la estocada final al proyecto hegemónico para todo el continente deno-minado El Área de Libre Comercio de Las Américas (ALCA), por la decisión resuelta y la voluntad política de al menos tres gobernantes: Hugo Chávez Frías, Ig-nacio Da Silva y Néstor Kirchner (Evo Morales aún no estaba en la presidencia, pero actuó desde la agitación de la calle, desde los movimientos sociales). El proyec-to buscaba no sólo convertir a todos los países de esta parte del mundo en un gran mercado para la indus-tria estadounidense, sino también era una proyecto privatizador y negador de los Estados nacionales, por cuanto estos quedarían reducidos al rol de meros ad-ministradores de los intereses de las transnacionales y sus socios y serán llevados en su lucha competitiva por atraer inversiones, permitir la destrucción del medioambiente y ajustar perpetuamente hacia la baja los salarios y las condiciones laborales.La Cumbre de Puerto España, Trinidad y Tobago, 2009, donde las voces pedían la presencia de Cuba en estas reuniones fue un clamor que tuvo que escuchar el Presidente de EEUU, así como la condición estable-cida por muchos jefes de Estados de asistir siempre y cuando Cuba estuviera presente en las próximas cumbres. La de Cartagena de India, Colombia, 2012, donde la amenaza comenzó a concretarse con la no presencia de los presidentes Rafael Correa (Ecuador) y Daniel Ortega (Nicaragua) en particular por la ausencia de Cuba en esa cumbre.Estas tres últimas cumbres tuvieron el denominador común de no consensuar la declaración final precisa-mente porque las reivindicaciones o propuestas de América Latina y El Caribe fueron ignoradas por el todo poderoso del norte.Pero en la III cumbre de Quebec, en 2001, ocurrió lo que nadie imaginaba. Ante la incredulidad de una mayoría de gobernantes serviles, Hugo Chávez, presi-dente de la República Bolivariana de Venezuela, dejó plasmado de su puño y letra y calzado con su firma en el documento final su rechazo al engendro anexionis-ta. Hay que remontarse a aquella época para calibrar la dimensión histórica de la actitud asumida por Chávez en medio del ambiente triunfalista predominante en la derecha internacional, con la Unión Soviética des-integrada, el socialismo presuntamente muerto y el anuncio por los ideólogos del imperio estadounidense

de un mundo de eternos libre mercado y democracia neoliberal. Pero el dirigente venezolano sólo estaba avisando de una rebelión mucho mayor. Detrás de aquel gesto estaban el ‘caracazo’, el alzamiento indio de Chiapas, las puebladas que ya anunciaban el advenimiento de gobiernos nacional-populares en Argentina, Bolivia, Nicaragua, Ecuador, Brasil, Uruguay.Fue en la Cumbre de las Américas de Mar del Plata, en 2005, cuando en la cresta de una gran ola de rebeldía de los pueblos de nuestra América contra el neolibe-ralismo, la acción mancomunada de Fidel, Chávez, Kir-chner, Lula y Evo —desde la calle, aún no era presiden-te— hundió el ALCA para siempre y marcó un punto de giro sin retorno en la historia de la Patria Grande.Después nada fue igual en nuestras tierras. Con Chávez y Fidel había nacido el ALBA en La Habana en 2004, que luego sumaría, además de Venezuela y Cuba, a 9 países más, y surgieron la Unasur en 2007 y la Celac en 2011.En la siguiente cumbre de Puerto España (2009), América Latina y el Caribe exigieron la presencia de Cuba y el levantamiento del bloqueo que hoy la sigue asfixiando. En la que se celebró después en Cartagena (2012), todos los mandatarios expresaron categórica-mente su negativa a concurrir a otra Cumbre donde no estuviera invitada La Habana.Ello explica en parte el acuerdo al que arribó el presi-dente Barack Obama con su homólogo de Cuba, Raúl Castro, de anunciar el 17 de diciembre del año pasado el inicio del proceso hacia el restablecimiento de rela-ciones entre Cuba y Estados Unidos. Y es que Washing-ton no podía llegar a esta Cumbre de las Américas sin algún cambio positivo hacia Cuba que presentar ante los mandatarios de la región. Y es que Cuba no acepta que puedan restablecerse las relaciones sin que Obama ordene sacarla de la espuria lista de patrocinadores del terrorismo, aunque algo parecería moverse rápidamente en esa dirección.Al intento de crear otro enemigo del Imperio en nues-tro hemisferio, Venezuela se le enfrentó no sólo con la masiva y unitaria reacción del pueblo bolivariano, sino con una abrumadora solidaridad continental, de modo tal que un alto vocero de la Casa Blanca se vio obliga-do a moderar la retórica pues la protesta internacional y del pueblo de Venezuela, que ha firmado por millo-nes contra el arrogante decreto de Obama fueron en crescendo. Señal del cambio de época liderado por el pueblo de Chávez, el ALBA, Unasur y la Celac han pedi-do su revocación.

Cumbre de las Américas 2005, en Mar del Plata, Argentina. En este encuentro, Chávez, Kirchner y Lula, como presidentes, dieron la estocada de muerte al ALCA. Evo Morales también lo hizo, pero no como presidente, sino como dirigente de los movimientos sociales.

En las cumbres del ALBA, Unasur y Celac son habituales los encuentros paralelos de los movimientos sociales y pueblos originarios. No lo es, por la naturaleza de las cosas, en las cumbres organizadas por la OEA. El cambio de época ha impuesto la V Cumbre de Pueblos Originarios, en Panamá.

Wikiped

iafond

oind

igen

a.org

LAS CUMBRES DE LAS AMÉRICAS IMPERIO Y DECADENCIA

Las cumbres de las Américas fue-ron iniciadas en 1994 por iniciativa de la OEA con la finalidad de pre-parar el terreno para la imposición del ALCA en nuestro continente, y fueron las siguientes:• I Cumbre de las Américas, del 9 al 11 de diciembre de 1994, en Mia-mi, Estados Unidos.• II Cumbre de las Américas, del 18 al 19 de abril de 1998, en Santiago, Chile.• III Cumbre de las Américas, del 20 al 22 de abril de 2001, en Quebec,

Canadá.• IV Cumbre Extraordinaria de las Américas, del 12 al 13 de enero de 2004, en Monterrey, México.• V Cumbre de las Américas, del 4 al 5 de noviembre de 2005, en Mar del Plata, Argentina.• VI Cumbre de las Américas, del 14 al 15 de abril de 2012, en Cartage-na de Indias, Colombia.• VII Cumbre de las Américas, a celebrarse del 10 al 11 de abril de 2015 en la ciudad de Panamá, Panamá.

En primer lugar habrá que apuntar que el derecho co-lonial como el imperial ya son derechos caducos. Pero la situación propia del Imperio es aún peor. A raíz de los atentados terroristas del 11 de septiem-bre, la ‘Ley Patriota’ amplió los poderes policiales del Gobierno de Estados Unidos y ahora el valor de la li-bertad está supedito al hecho de que cada ciudadano es sospechoso de ser “terrorista en potencia”, y si estos lo son, con mucha más razón los son todos los habitan-tes del planeta.En febrero de este año, el gobierno del presidente Oba-ma presentó su ‘Estrategia de Seguridad Nacional’, en la cual define las orientaciones fundamentales de la polí-tica de seguridad interna y externa de EEUU y sin mayor

pudor establece que “el Gobierno de Estados Unidos no tiene mayor responsabilidad que proteger al pueblo estadounidense. Sin embargo, “nuestras obligaciones no terminan en nuestras fronteras” y “adaptamos nuestras responsabilidades para garantizar la seguridad interna-cional, ya que sirve a nuestros intereses”.Dicho en términos llanos, EEUU, según la doctrina Obama, tiene derecho a intervenir en cualquier parte del mundo a favor de sus intereses, sin importarle ni derecho internacional ni derecho humanitario. Estos sólo son pretextos para las intervenciones del Imperio contra nuestros pueblos o los pueblos de cualquier continente del sur. En fin, un león herido es bastante peligroso.

VII Cumbre de las Américas, ¿Qué alternativas?

INTRODUCCIÓNLas siete cumbres de las Américas fueron orga-nizadas por la Organi-zación de los Estados

Americanos (OEA) para reunir a los je-fes de Estado y de Gobiernos de nuestro hemisferio. El objetivo inicial de estas cumbres fue la imposición del Tratado de Libre Comercio (ALCA) que Washing-ton quiso y aún quiere imponernos.

Pero a partir de la V cumbre, ce-lebrada en Mar del Plata, tres presi-dentes: Fidel, Chávez, Kirchner, Lula y Evo (que aún no lo era, sino que actuaba desde la calle, desde los sin-dicatos cocaleros del trópico, desde los movimientos sociales y pueblos originarios) le dieron la estocada de muerte al ALCA

Desde la primera Cumbre de las Américas, celebrada en 1994, precisa-mente en Miami, nuestra América La-tina y el Caribe ya no son las mismas. En primer lugar, dejaron de ser ‘el patio trasero’ del imperio norteño, aunque este último se empeña con el deseo de continuar siéndolo.

Desde entonces fueron muchos los cambios profundos sucedidos en Las Américas. Brasil, Venezuela, Bolivia, Ecuador, Argentina, entre otros, ya no tienen los mismos gobiernos domina-dos por las elites tradicionales y, sobre todo, por la dependencia de EEUU.

A nivel regional, la OEA, el instru-mento creado por EEUU, funcional a su dominio de la región, se ha ido de-bilitando. Al mismo tiempo se han ido forjando varios instrumentos para la in-

tegración de nuestra región en función de intereses propios.

Allí están el ALBA, Unasur, Celac, como el reforzamiento del Mercosur, dando un marco de referencia total-mente ajeno a los intereses imperiales. Es así que las últimas tres cumbres de las Américas no terminaron con la típi-ca ‘declaración final’ debido al choque frontal entre la posición de EEUU con el resto del continente.

Ya en la VI Cumbre de Las Américas celebrada en Cartagena de Indias se ad-virtió a EEUU que Cuba tiene que estar presente en pie de igualdad, como los demás países hermanos, en la próxima, en la actual VII. Para muchos, éste es el motivo detrás de la decisión de Obama de intentar reanudar las relaciones con la mayor de las islas caribeñas.

Pero si la caída de la Unión Soviética le privó al imperio del ‘enemigo’ tra-dicional a nivel global durante más de medio siglo, por lo cual tuvo que inven-tar otros enemigos, como el terrorismo de Al Qaeda.

En este marco de referencia, sus me-didas respecto a Cuba le privan de su enemigo ‘hemisférico’. De este modo, además de otros factores, Venezuela está para ocupar este lugar. Es así que se puede explicar el exabrupto de decla-rar a Venezuela como amenaza grave a la seguridad nacional del Imperio más poderoso de la historia humana y, lo es pese al inicio de su decadencia, ya en el plano financiero y económico, pero no en el militar y en la subversión y el terrorismo de estado.

Pero vayamos por partes.

Redacción internacional

2 11 de abrilde 2015 311 de abril

de 2015

CONFLICTOS O PUNTO DE BIFURCACIÓN

Es un punto de referencia que las tres últimas cumbres han sido un rotundo fracaso para la política hegemó-nica e imperial de Estados Unidos: la de Mar del Plata, Argentina, 2005, donde se le dio la estocada final al proyecto hegemónico para todo el continente deno-minado El Área de Libre Comercio de Las Américas (ALCA), por la decisión resuelta y la voluntad política de al menos tres gobernantes: Hugo Chávez Frías, Ig-nacio Da Silva y Néstor Kirchner (Evo Morales aún no estaba en la presidencia, pero actuó desde la agitación de la calle, desde los movimientos sociales). El proyec-to buscaba no sólo convertir a todos los países de esta parte del mundo en un gran mercado para la indus-tria estadounidense, sino también era una proyecto privatizador y negador de los Estados nacionales, por cuanto estos quedarían reducidos al rol de meros ad-ministradores de los intereses de las transnacionales y sus socios y serán llevados en su lucha competitiva por atraer inversiones, permitir la destrucción del medioambiente y ajustar perpetuamente hacia la baja los salarios y las condiciones laborales.La Cumbre de Puerto España, Trinidad y Tobago, 2009, donde las voces pedían la presencia de Cuba en estas reuniones fue un clamor que tuvo que escuchar el Presidente de EEUU, así como la condición estable-cida por muchos jefes de Estados de asistir siempre y cuando Cuba estuviera presente en las próximas cumbres. La de Cartagena de India, Colombia, 2012, donde la amenaza comenzó a concretarse con la no presencia de los presidentes Rafael Correa (Ecuador) y Daniel Ortega (Nicaragua) en particular por la ausencia de Cuba en esa cumbre.Estas tres últimas cumbres tuvieron el denominador común de no consensuar la declaración final precisa-mente porque las reivindicaciones o propuestas de América Latina y El Caribe fueron ignoradas por el todo poderoso del norte.Pero en la III cumbre de Quebec, en 2001, ocurrió lo que nadie imaginaba. Ante la incredulidad de una mayoría de gobernantes serviles, Hugo Chávez, presi-dente de la República Bolivariana de Venezuela, dejó plasmado de su puño y letra y calzado con su firma en el documento final su rechazo al engendro anexionis-ta. Hay que remontarse a aquella época para calibrar la dimensión histórica de la actitud asumida por Chávez en medio del ambiente triunfalista predominante en la derecha internacional, con la Unión Soviética des-integrada, el socialismo presuntamente muerto y el anuncio por los ideólogos del imperio estadounidense

de un mundo de eternos libre mercado y democracia neoliberal. Pero el dirigente venezolano sólo estaba avisando de una rebelión mucho mayor. Detrás de aquel gesto estaban el ‘caracazo’, el alzamiento indio de Chiapas, las puebladas que ya anunciaban el advenimiento de gobiernos nacional-populares en Argentina, Bolivia, Nicaragua, Ecuador, Brasil, Uruguay.Fue en la Cumbre de las Américas de Mar del Plata, en 2005, cuando en la cresta de una gran ola de rebeldía de los pueblos de nuestra América contra el neolibe-ralismo, la acción mancomunada de Fidel, Chávez, Kir-chner, Lula y Evo —desde la calle, aún no era presiden-te— hundió el ALCA para siempre y marcó un punto de giro sin retorno en la historia de la Patria Grande.Después nada fue igual en nuestras tierras. Con Chávez y Fidel había nacido el ALBA en La Habana en 2004, que luego sumaría, además de Venezuela y Cuba, a 9 países más, y surgieron la Unasur en 2007 y la Celac en 2011.En la siguiente cumbre de Puerto España (2009), América Latina y el Caribe exigieron la presencia de Cuba y el levantamiento del bloqueo que hoy la sigue asfixiando. En la que se celebró después en Cartagena (2012), todos los mandatarios expresaron categórica-mente su negativa a concurrir a otra Cumbre donde no estuviera invitada La Habana.Ello explica en parte el acuerdo al que arribó el presi-dente Barack Obama con su homólogo de Cuba, Raúl Castro, de anunciar el 17 de diciembre del año pasado el inicio del proceso hacia el restablecimiento de rela-ciones entre Cuba y Estados Unidos. Y es que Washing-ton no podía llegar a esta Cumbre de las Américas sin algún cambio positivo hacia Cuba que presentar ante los mandatarios de la región. Y es que Cuba no acepta que puedan restablecerse las relaciones sin que Obama ordene sacarla de la espuria lista de patrocinadores del terrorismo, aunque algo parecería moverse rápidamente en esa dirección.Al intento de crear otro enemigo del Imperio en nues-tro hemisferio, Venezuela se le enfrentó no sólo con la masiva y unitaria reacción del pueblo bolivariano, sino con una abrumadora solidaridad continental, de modo tal que un alto vocero de la Casa Blanca se vio obliga-do a moderar la retórica pues la protesta internacional y del pueblo de Venezuela, que ha firmado por millo-nes contra el arrogante decreto de Obama fueron en crescendo. Señal del cambio de época liderado por el pueblo de Chávez, el ALBA, Unasur y la Celac han pedi-do su revocación.

Cumbre de las Américas 2005, en Mar del Plata, Argentina. En este encuentro, Chávez, Kirchner y Lula, como presidentes, dieron la estocada de muerte al ALCA. Evo Morales también lo hizo, pero no como presidente, sino como dirigente de los movimientos sociales.

En las cumbres del ALBA, Unasur y Celac son habituales los encuentros paralelos de los movimientos sociales y pueblos originarios. No lo es, por la naturaleza de las cosas, en las cumbres organizadas por la OEA. El cambio de época ha impuesto la V Cumbre de Pueblos Originarios, en Panamá.

Wikiped

iafond

oind

igen

a.org

LAS CUMBRES DE LAS AMÉRICAS IMPERIO Y DECADENCIA

Las cumbres de las Américas fue-ron iniciadas en 1994 por iniciativa de la OEA con la finalidad de pre-parar el terreno para la imposición del ALCA en nuestro continente, y fueron las siguientes:• I Cumbre de las Américas, del 9 al 11 de diciembre de 1994, en Mia-mi, Estados Unidos.• II Cumbre de las Américas, del 18 al 19 de abril de 1998, en Santiago, Chile.• III Cumbre de las Américas, del 20 al 22 de abril de 2001, en Quebec,

Canadá.• IV Cumbre Extraordinaria de las Américas, del 12 al 13 de enero de 2004, en Monterrey, México.• V Cumbre de las Américas, del 4 al 5 de noviembre de 2005, en Mar del Plata, Argentina.• VI Cumbre de las Américas, del 14 al 15 de abril de 2012, en Cartage-na de Indias, Colombia.• VII Cumbre de las Américas, a celebrarse del 10 al 11 de abril de 2015 en la ciudad de Panamá, Panamá.

En primer lugar habrá que apuntar que el derecho co-lonial como el imperial ya son derechos caducos. Pero la situación propia del Imperio es aún peor. A raíz de los atentados terroristas del 11 de septiem-bre, la ‘Ley Patriota’ amplió los poderes policiales del Gobierno de Estados Unidos y ahora el valor de la li-bertad está supedito al hecho de que cada ciudadano es sospechoso de ser “terrorista en potencia”, y si estos lo son, con mucha más razón los son todos los habitan-tes del planeta.En febrero de este año, el gobierno del presidente Oba-ma presentó su ‘Estrategia de Seguridad Nacional’, en la cual define las orientaciones fundamentales de la polí-tica de seguridad interna y externa de EEUU y sin mayor

pudor establece que “el Gobierno de Estados Unidos no tiene mayor responsabilidad que proteger al pueblo estadounidense. Sin embargo, “nuestras obligaciones no terminan en nuestras fronteras” y “adaptamos nuestras responsabilidades para garantizar la seguridad interna-cional, ya que sirve a nuestros intereses”.Dicho en términos llanos, EEUU, según la doctrina Obama, tiene derecho a intervenir en cualquier parte del mundo a favor de sus intereses, sin importarle ni derecho internacional ni derecho humanitario. Estos sólo son pretextos para las intervenciones del Imperio contra nuestros pueblos o los pueblos de cualquier continente del sur. En fin, un león herido es bastante peligroso.

4 11 de abrilde 2015

CONCLUSIÓNHay dos variables que nos pueden ayudar a entender qué está pasando respecto a Venezuela. Una se llama petróleo, y la otra, el posneoliberalismo. Pero si vamos más allá de estos dos ele-mentos tan obvios como permanentes, descubrimos que detrás de la rama de Venezuela hay todo un bosque llamado América Latina y una serie de intereses que encabeza el complejo indus-trial-militar estadunidense, lobby golpista que se sustenta sobre dos patas que se entrelazan, los intereses de las trasnacionales españolas en la región, con Felipe González de cabildero mayor del reino, y una serie de operaciones de contrainsurgencia me-diática para desgastar cualquier opción que se salga del sendero trazado, sea posneoliberal, como Venezuela, Bolivia o Ecuador, o simplemente reformista, como Honduras o Paraguay. Y, en medio de esta ecuación, un hombre, de apellido Maduro, al que la historia le puso en un lugar que nunca buscó. Un hombre al que hay que desmitificar, al que no se le puede pedir que sea lo que no es, un hombre al que hay que apoyar porque apoyarlo es respaldar la posibilidad de seguir transformando, avanzando, descolonizando y, en definitiva, profundizando proyectos que con distintos ritmos, matices e intensidades, sirven por vez pri-mera a las mayorías sociales y no a unas élites minoritarias. Este es el escenario en el que llegamos a la Cumbre de las Américas, organizada por la OEA en Panamá los días 10 y 11 de abril, para la que necesitamos hacer uso de un diagrama de dispersión, una gráfica que se puede usar para examinar la posible relación entre dos variables llamadas en este caso Cuba y Venezuela. Después de declarar fracasada su política hacia/contra Cuba, Es-tados Unidos necesita seguir manteniendo un enemigo externo en el otrora patio trasero, y ese no podía ser otro que Venezuela, el país con las reservas de petróleo probadas más grandes del mundo y el que dejó atrás el fin de la historia que los intelectua-les del imperio se empeñaron en teorizar. Pero una vez más, igual que el teorema de Chávez vino a contra-decir las tesis de Fukuyama demostrando que era posible acce-der al gobierno y a continuación tomar el poder para, desde una

Evo Morales le pidió a Maduro firmar el reclamo para derogar el decreto imperialista. Antes de llegar a Panamá pasó por Caracas para expresar su amor y solidaridad con el pueblo bolivariano.

Ben Rhodas fue uno de los altos funcionarios de la Casa Blanca que intentó, sin éxito, minimizar las reacciones abrumadoras y negativas al decreto injerencista de Obama.

AVN

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BIBLIOGRAFÍA

En éste trabajo se consultó:1. Hugo Chávez; El gran ausente-presente en PanamáÁngel Guerra Cabrerahttp://www.rebelion.org/noticia.php?id=1974832. El vis a vis en la VII Cumbre de las AméricasPor Franklin Gonzálezhttp://www.avn.info.ve/contenido/vis-vis-vii-cum-bre-am%C3%A9ricas3. Venezuela, punto de bifurcaciónPor Katu Arkonadahttp://www.telesurtv.net/bloggers/Venezuela-punto-de-bifurcacion-20150404-0003.html4. Stella Calloni denuncia guerra sucia contra América Latinahttp://www.telesurtv.net/news/Stella-Calloni-denuncia-guerra-sucia-contra-America-Lati-na-20150404-0047.html5. Las redes militares del Pentágonohttp://www.infonews.com/2015/04/04/mundo-192831-las-redes-militares-del-pentagono.php6. La CIA ya tiene lista su “delegación venezola-na” a la Cumbre de PanamáPor Jean-Guy Allardhttp://www.rebelion.org/noticia.php?id=197263&titular=la-cia-ya-tiene-lista-su-%22delegaci%F3n-venezolana%22-a-la-cumbre-de-panam%E1-7. El conflicto Estados Unidos-Venezuela y la VII Cumbre de las AméricasPor Carlos Faziohttp://www.avn.info.ve/contenido/conflicto-estados-unidos-venezuela-y-vii-cumbre-am%C3%A9ricas

propuesta de izquierda y nacional-popular, refundar el Estado y redistribuir la riqueza, el teorema de Maduro va a demostrar a Brzezinski que el nuevo orden mundial ya no pasa más por un imperio en decadencia por muy peligroso que éste sea en su descenso y pérdida de hegemonía, que hoy América Latina y el Caribe tienen instrumentos para hacer frente al caos destructivo desde la integración política, económica, energética, científica, tecnológica, alimentaria y cultural.Panamá va a ser el inicio del fin de la era Obama, y la constata-ción del fracaso de su política exterior hacia nuestra América. Seguramente aumentará el número de bases militares, segu-ramente se seguirán produciendo golpes blandos contra las democracias nacional-populares, pero al pasado ya no vamos a volver jamás.