ensayo · ensayo boletÍn de la escuela de artes y oficios artÍsticos de barcelona 11 5 ualario...

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ENSAYOBOLETÍN DE LA ESCUELA DE ARTES

Y OFICIOS ARTÍSTICOS

DE BARCELONA

115 UAlARIO

SEA BIEN VENIDA..., por Lope de Vega • GLOSARIO PEDAGÓGICO, por Federico Marés • FIN DE CURSO EN LALONJA, por Angel Marsá • LA EXPOSICIÓN DE TRABAJOS DE LA ESCUELA DE ARTES Y OFICIOS EN EL FIN DE

CURSO 1958 - 1959, por Juan CortésCONSERVATORIO DE LAS ARTES DEL LIBRO LOS ARTISTAS EN EL

HOMENAJE A VÍCTOR CATALA, por J. B. Solervicens • EN OCASIÓN DE UN HOMENAJE. NARCISO MONTURIOLY LA ESCUELA DE LA LONJA, por J. M. Garrut • EL MONUMENTO A GOYA • A DON CÉSAR MARTINELL, por

Juan Subías • PIO XII Y EL ARTE • JUAN CENTELLAS RAIG, por F. M. LAS MIINIATURAS. RETRATOS,

por José A. Gomis • SECCIÓN INFORMATIVA

;j A

LA INMACULADA

CONCEPCI6N

Escuela andaluza. Siglo XVII

Escultura en talla

policromada

en oro. Museo Federico Mares

IOTA PIJLCIIRA ES MARIA

Sea Bien venidala, blanca Nina,venga norabuenael Nino de perlas.Esta blanca Ninamess que azueena,que pace su blaneurala nieve negra,porque stilt) pudotocar en ellael sol. euya lumbrele deja enters;que no la deshizocon tanta fuerza,porque de sus rayonfue vidriera:esta blanca Au POra

que lava y peinacon sus pupas manordel sol las hebras,fugitiva vienede las tinieblasdel Mayor tiranoque hay en la tier•a,que pensti. atrevido,con su violenciaeclipsar la gloriesde vuestra villa.Sea Bien venida.la blanca Nina.venga norabnenael Nino de perlas.

LOPE DE VEGA

GLOSARIO PEDAGÓGICOMEDITEMOS SOBRE LA MARCHA

Por .Federico 7l4arésDirector de la Escuela de Artes

y Oficios Artísticos de Barcelona

«Ensayo» acaba de cumplir el quinto año desu publicación. Este hecho, verdaderamente no-table, dadas las difíciles circunstancias de susubsistir, nos ha inducido a proponérnoslo contoterna del Glosario de hoy. Y al meditar sobreél, al revisar los Glosarios publicados en losnúmeros anteriores, nos ha entrado la duda, lainquietante duda sobre la eficacia de la laborrealizada en el transcurso de estos años.

Y otra vez ha vuelto a preocuparnos el pocointerés que despierta todo intento ilusionado,todo empeño en elucidar los problemas de lasenseñanzas artísticas; y de nuevo hemos refle-xionado sobre la indiferencia de la mayoría delas Escuelas al desentenderse, de una maneraincomprensible, de los problemas que tan di-rectamente les afectan.

Deseábamos que en esta sección del Glosa-rio, abierta a todas las inquietudes, colabora-ran las Escuelas de España, tal como se les in-vitó en su día desde estas páginas, interesándoseen señalar deficiencias y orientaciones que per-mitieran concretar el contenido del plan de re-forma requerido por las circunstancias, y siem-pre con el objetivo de que la enseñanza artísticadejara en su anacronismo de ser una pura fic-ción, para pasar a ser realidad viva.

Aspirábamos a que esta sección del Glosariofuera un exponente de nuestras actividades, unaaportación de inquietudes al acervo común, unainvitación constante a los profesores de las Es-cuelas hermanas, con la finalidad de aunar ini-ciativas y puntos de vista en la difícil tarea deabrir cauce a las directrices generales de la reno-vación de nuestra enseñanza.

Iniciamos un razonar que sólo podía conver-tirse en diálogo por la colaboración. Obtenerlaen la medida suficiente era, pues, para nosotros

un postulado fundamental y gratísimo. Enten-díamos que sólo esa aportación podría dar viday sentido a este Glosario. Nada podía interesar-nos tanto corno la experiencia de la lección que,día a día, cada profesor recoge en la propiaEscuela. Los resultados más notables y el reflejo e inquietudes morales e intelectuales de cadauno, era necesario que fuesen conocidos por to-dos, estudiados y valorados en intercambio fe-cundísimo. Nada más halagador para nosotrosen la tarea que nos trazamos, que la compene-tración de los profesores de todas las Escuelasy el mutuo estímulo para una constante supe-ración.

A los que henos mantenido cierta desmesu-rada inclinación en creer en la generosidad delos demás, nos apena ver cómo a los pocos ilu-sos que, a Dios gracias, aún andan por los ca-minos del Señor, con ansias de predicar lasverdades y enderezar las virtudes, se les restacon el silencio, el aliento que merece toda obradirigida al mejoramiento común.

En las circunstancias actuales, ante las co-rrientes demoledoras que pretenden socavar losprincipios fundamentales de la formación artís-tica, creíamos que nuestro propósito merecía lasaportaciones de unos y el aliento de todos. Es-tableciendo el clima adecuado, se habría podidodefinir la auténtica posición de las Escuelasfrente a sus problemas acuciantes.

Pero al reflexionar hoy, sobre la marcha,ante la perspectiva de un año que se nos va yotro que va a empezar, pensamos en si vale ono la pena de insistir, glosario tras glosario,sobre un tema que parece no interesar —siem-pre salvando las excepciones— a aquellos aquienes debería interesar preferentemente. Elpropósito a que el «Glosario» se mantuvo fiel,

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no pudo iniciarse en circunstancias de mayoroportunidad, cuando el Ministerio de EducaciónNacional, al aprobar la nueva ley de EnseñanzaTécnica, iba a interesarse por la preparación dela nueva ley de Enseñanza Artística.

Estas reflexiones nos aconsejan a la postreun cambio. Y aunque lamentando el tiempo noaprovechado, no hemos de resistirnos a esa in-novación. Ya que bien pudiera suceder que, en

el cambio, lográsemos despertar un interés in-útilmente esperado hasta ahora, y con esteinterés, el consiguiente estímulo del profeso-rado y de la enseñanza que, a fin de cuentas,es lo que perseguimos e importa preferente-mente.

Y esto es lo que vamos a ver en el próximoglosario, al intentar si por otros caminos logra-mos alcanzar mejores resultados.

Trabajos de la sección de tipografía

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EI Presidente de la Diputación, Excmo. Sr. Marqués de Castell-florite, acompañado de su esposa e hija, visita la exposición de final de curso

FIN DE CURSO EN LA LONJAPor Angel . 1/tarsá

Profesor de Técnica e Historia

de las Artes Decorativas

Es ya tradición de rango barcelonesa cerrar latemporada artística, al filo de los meses veranie-gos, con la muestra de fin de curso en la bicente-naria Escuela de la Lonja, hoy denominada Escue-la de Artes y Oficios Artísticos, y en sus siete sec-ciones, distribuidas a todo lo ancho de la plani-metría ciudadana. Año tras año vamos dandocuenta de esta importante manifestación de unadocencia ejemplar de las artes plásticas y de losnobles oficios, integrados en el prodigioso renacerde la artesanía en nuestro país. Si durante doscenturias la Escuela de la Lonja ha sido canterade grandes artistas, esta gloriosa tradición no ha

sufrido merma con el tiempo, antes al contrario,se viene intensificando en una medida que señalacon justeza la ejemplaridad de sus planes de es-tudios, de su celosa y competente dirección —comose sabe, a cargo del maestro escultor don FedericoMarés—, y de su bien seleccionado claustro deprofesores.

Todas las técnicas artísticas y artesanas son en-señadas y practicadas en sus aulas próceres, y cen-tenares de alumnos, de uno y otro sexo, recibenallí los conocimientos indispensables para des-arrollar sus facultades, en una conjunción perfectaentre la teoría y la práctica de las diversas moda-

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E.w

Aula de dibujo del natural

lidades plásticas que integran sus asignaturas. Eldibujo, la pintura, la escultura, el grabado, la en-cuadernación, el retablo, la policromía, los estam

-pados, el diseño de modas, el cartel, la decoración,el mueble, la alta tipografía, la talla en yeso, cuan-tos géneros y procedimientos abarcan las BellasArtes y las artes suntuarias y aplicadas, así comoel dibujo lineal, mantienen, en la Escuela de laLonja y en sus secciones, el prestigio de una tra-dición modélica y ejemplar, que Barcelona con-serva intacta gracias a esta también modélica yejemplar institución docente.

Cumplirían, los barceloneses, un plausible deberde ciudadanía visitando esa extraordinaria expo-sición de fin de curso que todos los años se cele-

bra en las aulas de la Lonja. Allí verían la capaci-dad creadora naciente de centenares de futurosgrandes artistas y artesanos. A esta visita deberíaañadirse la de las nuevas aulas del Instituto de lasArtes del Libro, sección especializada de la Escue-la de Artes y Oficios Artísticos, que desde hace unpar de años viene funcionando en sus nuevos lo-cales del antiguo Hospital de la Santa Cruz. Lasgentes apresuradas de hoy han perdido un pocoel gusto por las cosas bellas, y esta visita podríarepresentar un retorno a la emoción estética ol-vidada, más necesaria, acaso, ahora que nuncapara elevarse por encima del materialismo domi-nante.

En la Lonja se forjan, con el esfuerzo mancomu-

Una clase de escultura de la Sección Urbana 2.' Aula de Dibujo Artístico. Sección Urbana, 3."

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Composición Decorativa (Pintura)

nado de profesores y alumnos, los futuros artistasy artesanos encargados de perpetuar el primadoartístico que siempre ostentó, con legítimo orgu-llo, nuestra ciudad. Prestarle el calor de la presen-cia admirativa de los barceloneses en sus aulas,convertidas en tantas otras salas de exposiciones,

sería un modo digno de testimoniar a la Escuelade la Lonja, a su director y a su profesorado, elagradecimiento ciudadano, así como un estímulopara que perseveren en su preclara labor. En laseguridad, además, de que cuanto allí puede ad-mirarse es totalmente digno de admiración.

Aula de realizaciones de la Sección 6.'

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ESPAÑOL

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Trabajos realizados en la clase de arte publicitario

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EI Alcalde, Excmo. Sr. D. José María de Porcioles, visita la Escuela de la Lonja acompañado del Director y profesores

LA EXPOSICION DE TRABAJOS

DE LA ESCUELA DE ARTES Y OFICIOS

EN EL FIN DE CURSO 1958-1959.Por luan Cortés

Profesor de Nociones Generales de Arte

Año tras año, nuestra vieja Escuela de Artes yOficios Artísticos, al finalizar el curso docente, nosda cuenta, en vasta exposición instalada en susaulas, de los trabajos realizados por su alumnadodurante el ejercicio. Estos trabajos, claro está, hansido objeto de previa selección, la cual, si puedeparecer difícil por el gran número de obras, ensa-yos, estudios y realizaciones de todo género que seha reunido, es en realidad facilitada por la calidadde los mismos, máxime tratándose, con la exhibi-ción, mucho menos de poner en valor una deter-minada personalidad —bastante las hay que aso-man prometedoras y, algunas, satisfactoria reali-dad ya—, que de dar cuenta al público visitante

del desarrollo de las distintas disciplinas que enla veterana institución son cursadas.

Orgulloso puede estar el claustro de profesoresy, a la cabeza de ellos, el director de la Escuela,don Federico Marés Deulovol, bajo cuya iniciativahan tomado las enseñanzas que en ella se cursanla brillante orientación que las gobierna desde haceya cerca de los quince años, orgullosos pueden es-tar, repetimos, de la extensa simpatía de que gozasu sistema docente entre los jóvenes deseosos deobtener una educación técnica y artística que leshaga aptos en la profesión que ejercen o, simple-mente, les dote de unos conocimientos que, contodo y su aparente carencia de aplicación prácti-

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Atila de escultura aplicada y realizaciones

ca en sus actividades devengables, les han de dotar de una ductilidad espiritual y de una capacidadde comprensión mucho más amplia que la generaly les ha de permitir un máximo desarrollo de suscualidades.

El carácter acogedor y amable de la Escuela, encuyos métodos cuenta tanto la exigencia de unaeficacia positiva en las disciplinas que son su obje-to cual la comprensión de la idiosincrasia peculiarde toda incipiencia, con el ímpetu y la inquietudque acostumbran serle consubstanciales, obtienede su alumnado la más entusiasta adhesión. Así,son infinitos los muchachos que por falta materialde cabida en la matrícula tienen que verse priva-dos de asistir a sus aulas, a pesar de que por par-te de la dirección se hacen verdaderos esfuerzospara dar entrada en ellas al máximo número desolicitantes.

Como es ya costumbre inveterada, en esta oca-sión que nos ocupa de la exposición de trabajos defin de curso, se da cuenta al público de una laborespléndida en todas y cada una de las distintasenseñanzas de la Escuela, que siguen su prósperamarcha. Estas enseñanzas, confiadas a un profeso-rado tan experto en su especialidad como liberaly comprensivo en su trato con los discípulos, quie-nes por la latitud de criterio que gobierna la laborde la institución, se hallan plenamente facultadospara que el talento que puedan poseer dé de sítodo aquello de que sea capaz. A este fin, la ayu-da, la orientación, el buen consejo y la vigilanciadel maestro se combinan en una serie de estímulosque son el mejor acondicionamiento para llevar acabo una provechosa tarea.

El Dibujo Lineal, de cuya clase está encargadoel profesor don Antonio Vega, que es, al mismo

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Un ángulo de la clase de realizaciones de pintura sobre tabla

tiempo, secretario de la Escuela, se halla dedicadaal más ceñido estudio de la especialidad, llevadoen cuidada progresión, para pasar, en sus últimasetapas, al trazado de planos, realizaciones de pers-pectivas, la descripción y análisis de arquitecturasreales a través de su estudio directo, etc.

La clase de Dibujo Artístico, en sus dos vertientes de Dibujo Estatuario y Dibujo Artístico Supe-rior, está regida por los profesores don Luis Mun-tané Muns y don Antonio García Morales. El ob-jetivo de estas aulas es el estudio de la forma hu-mana sobre modelos en yeso, primero, y sobre elnatural, después. De lo simple a lo más complica•do en los modelos vaciados, durante el primer pe•ríodo y con el enfrentamiento a las dificultades dela interpretación del natural en el segundo, losestudiantes, sin imposición de estilo ni manerapor parte del maestro, pero sí con la obligación deuna clara y plausible motivación, desenvuelven sutemperamento delante de los problemas que sutrabajo les plantea.

Quien se halla al frente de la clase de Escultura Decorativa es el director de la Escuela, don Fe-derico Marés; el que está encargado de ella es elprofesor don José María Bohigas. Aquí, las prác-ticas de la estilización se desarrollan bajo un cri-terio que, dando a la fantasía y a la invención suparte debida, no da nunca de lado la ponderaciónen lo imaginativo ni la observación de los elemen-tos del natural.

El Modelado Superior está encargado al profe-sor don Eudaldo Serra. En esta aula se practicael estudio de las formas naturales, se observan losjuegos y relaciones de las mismas, su proporción ymecanismo, aunque, como corresponde al espírituque caracteriza la Escuela en esta su brillante épo-ca actual, con una libertad completa para quecada alumno se manifieste según su peculiar ta-lento y sensibilidad, como en las otras clases delmismo plan donde la enseñanza deja de ser pura-mente técnica para conceder el suficiente espacioa toda posible expresión temperamental.

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Clase superior de dibujo, del antiguo y del natural

La clase de Talla en madera y piedra está con-fiada al profesor don Emeterio Vélez, quien cuidade aleccionar a los alumnos en esta laboriosa téc-nica, procurando proporcionarles no la falaz habi-lidad superficial que les permita una fácil satisfac-ción en un tràbajo intrascendente, sino dotarlesde una preparación en profundidad que les fa-culte para afrontar con el máximo éxito todas lasdificultades que entraña una seria ejecución.

Está a cargo del profesor don Juan Cuyás laclase de Talla Ornamental, donde se realizantrabajos de todo género relacionados con la espe-cialidad, con el estudio profundizado de sustemas técnicos y de la interpretación de los esti-los a través de una exigencia que es el mejor camino para alcanzar la más idónea capacidad parala creación de una obra personal.

La clase de Policromía y Retablo viene confiadaal profesor don Jorge Alumá Sans, quien ha sabidodotar la docencia de esta antigua y prestigiosatécnica de la pintura al huevo de un acento mo-dernísimo, en concordancia con el cual se desen-vuelven eficazmente las facultades de sus discí-pulos.

Cuidan de la dirección de la clase de TécnicasDecorativas y Decoración Textil, las profesoras au-xiliares doña Carmen y doña Pilar Pérez-DoIz Riba.

Las disciplinas de esta clase son, principalmente,el dibujo de modistería, los proyectos y realizacio-nes para estampación, ejecuciones en «batik», etc.,logradas con positivo buen gusto y perfecta ade-cuación.

Don Fulgencio Martínez Surroca tiene a su car-go el aula de Arte Publicitario, cuyas distintas fa

cetas en carteles, folletos y demás, son estudiadasbajo todos los aspectos artísticos y psicológicosinherentes a este tipo de trabajos donde hay quetenerlos tan en cuenta por su específica finalidad..

Rige la clase de Artes del Mueble el profesordon Tomás Sayol. Bajo su dirección se realizanserios trabajos en el estudio de las estructuras delmueble, de sus pormenores de construcción, deco-ración y estilos diversos, sin dejar de tener en cuen-ta su función, todo lo cual lleva a cabo con tanexacta profesionalidad que sus proyectos de muebles de interiores podrían permitir sin la menorenmienda su ejecución inmediata.

La clase de Técnica del Yeso se halla dirigidapor el profesor don Martín Roca, auxiliado por donManuel Margaix. Pocas enseñanzas como ésta sontan provechosas para una especialidad que, contodo y su gran importancia, a no ser por la aten-ción que en la Escuela se le otorga, quedaría abandonada en manos de las rutinas de taller. Talla y

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Un ángulo de la clase de modelado al natural

vaciado en escayola de proyectos corpóreos de edi-ficios a escala, maquetas, detalles decorativos, cons-trucción de moldes, terrajas, etc., en toda su vastavariedad, son realizados aquí con espléndido re-sultado.

Culminan las enseñanzas de la Escuela en lasclases de Pintura Decorativa y Procedimientos Téc-nicos. En la primera, de la cual es profesor donFrancisco Labarta, son puestos en práctica los re-sultados de las sucesivas disciplinas por las cua-les ha pasado el alumnado. En grandes composicio-nes y proyectos, en bosquejos y esbozos de deco-ración, los alumnos de la misma se ven en libertadde desarrollar todas sus dotes y posibilidades sincoacción alguna.

La segunda, de la que cuida el profesor don Ge-rardo Carbonell, está dedicada a la aplicación de

esas mismas dotes y posibilidades a toda clase derealizaciones sobre cualquier objeto y en cualquiermaterial, desde la ornamentación mural a la vi-driería, a la cerámica y al mobiliario, en una per-suasiva demostración de empuje y buen gusto enla mayoría de sus trabajos.

Forma renglón aparte en las enseñanzas de laEscuela la sección de las Artes del Libro, con mag-nífica vitalidad de que era elocuente anuncio su

actividad anterior en el angosto ámbito donde te-nía que desarrollarse. Esta actividad ha tenidoocasión de intensificarse enormemente con ocasiónde su transformación en Conservatorio de las Ar-tes del Libro y su instalación en los anchurososlocales de que hoy dispone en los bajos del antiguohospital de la Santa Cruz. Un cuadro de profesoresbajo la recomendación del profesor don Hermene-gildo Alsina, expertísimo y vigilantes por la lim-pieza técnica y la orientación del gusto de sus alum-nos, en el corto período de actuación del Conser-vatorio —no hace más de un año que viene fun-cionando— da prueba de la más eficaz docenciaen todos los sentidos en que se practica. Son susprofesores en calcografía, xilografía y litografía,don Antonio 011é Pinell, don Jaime Pla, don JuanComelaran; de tipografía, don Felipe Bachs y En-rique Tormo; de encuadernación, don Antonio Co-rrales, José Saz; de restauración de libros, donJesús Vallina, y de técnica mecánica, don PedroMarés. Sus grabados en todos los procedimien-tos, sus composiciones bibliográficas y sus encua-dernaciones, de un primor y de una belleza absolu-tas, son verdaderamente ejemplares y garantía deun prodigioso plantel de maestros en sus especia-lidades.

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Proyectos de estampados, y dibujo de modas

Preciosa y " utilísima es la función que ejercenlas distintas Secciones de Distrito de la Escuela ensu labor preparatoria del alumnado para su ingre-so ulterior en la Central. Un profesorado plena-mente compenetrado con las orientaciones que ri-gen la marcha de las enseñanzas de nuestra viejay querida «Llotja» realiza en ellas una labor de

grandísimo interés, como ha podido verse, igual-mente, en las sendas exposiciones de fin de cursoque en las mismas han tenido lugar y que hantestificado la calidad y la exigencia de sus discipli-nas, destinadas a poner en su máximo rendimien-to las aptitudes de los discípulos que las mismascursan.

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Trabajos de encuadernación artística, en la exposición de hn de curso

CONSERVATORIO DE LAS ARTESDEL LIBRO

Las enseñanzas del CONSERVATORIO se orientan,ante todo, a mantener viva la tradición de la nobleartesanía del Libro, velando por su más limpiaconservación. Ello sólo puede conseguirse estimu-lando, dentro de la personal experiencia del tra-bajo manual, los goces que en él puede encontraruna sensibilidad desvelada, y cultivando, a la vez,el sentido de responsabilidad que hizo posibles lasviejas ediciones, gloria de las prensas barcelonesas.

Por ello, es misión preferente del CONSERVATO-

RIO, seleccionar sus técnicas y revalorizar sus pro-cedimientos, al objeto de contrarrestar los peli-gros de una época excesivamente inclinada a lamecanización. Sin perjuicio de valorar cuantasaportaciones puedan beneficiar, en el terrenoeconómico-industrial, a la mayor expansión yalcance de la actividad editora, siempre que nosea en merma de su calidad artística, el CONSER-

VATORIO recoge toda inquietud tendente a una másperfecta proyección de las Artes del Libro.

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Una de las antiguas aulas de las Artes del Libro, en la Lonja

MODALIDADES DE LA ENSEÑANZA

Las enseñanzas que se cursan en el CONSERVA-TORIO ofrecen, principalmente, dos modalidades:Enseñanza de Especialización, para la formaciónprofesional selectiva de tipógrafos, ilustradores,encuadernadores y restauradores; y Enseñanza deconocimientos generales para editores, bibliófilos,bibliotecarios, coleccionistas y cuantos sienten in-terés por las Artes del Libro.

La enseñanza de especialización, enseñanza bási-ca, se compone de tres cursos: Un primer cursode carácter preparatorio, un segundo curso de es-pecialización y un tercero de realizaciones prác-ticas. El curso preparatorio tiene en realidad ca-rácter de orientación y se compone de nociones deDibujo Lineal, Dibujo Artístico e Historia y Téc.nica del Libro.

Al final de los cursos, los que hubieren termina-do, podrán solicitar el certificado de la especiali-

dad respectiva que concede el Conservatorio, me-diante un ejercicio de reválida.

La enseñanza de conocimientos generales del li-bro se da mediante el desarrollo de cursillos teó-ricos y prácticos.

Se organizan, además, cada año, ciclos de con-ferencias y exposiciones monográficas sobre temasrelacionados con el Libro: tipografía, grabado, en-cuadernación, etc.

El horario de las clases es de 7 a 9 de la noche.

CURSOS DE AMPLIACIÓN. — Para los alumnos quedeseen perfeccionar en alguna de las especialida-des estudiadas, existe la modalidad de los «Cursosde Ampliación».

ESTUDIOS LIBRES. — En calidad de alumnos li-bres, podrán ser admitidas las personas que deseenconocer alguna de las técnicas, sin sujeción al plangeneral, en cuyo caso no tendrán derecho algunoal certificado oficial de estudios del CONSERVATORIO.

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Una de las perspectivas de las nuevas aulas del Conserxatorio de las Artes del Libro, instalado en el edificio del antiguo Hospital de la Santa Cruz,Siglo XV

PLAN

CURSO PREPARATORIO

Nociones de Dibujo lineal. — Dibujo ArtísticoHistoria y Técnica del Libro.

ARTE Y TÉCNICA TIPOGRÁFICOS DOS CURSOS

Preliminares I

Estudio de los materiales y utensilios en la tipo-grafía. — Los caracteres tipográficos. — Su estu-dio, clasificación y empleo. — Composición tipo-gráfica a mano. — Cálculos para la elección detipos y medidas. — Del manucristo a la impresión.

El Libro

II

La maqueta tipográfica. — Arquitectura tipográ-fica. — La decoración tipográfica en el libro. —

Empleo de los tipos adecuados para cada obra.Corrección y compaginación. — Los procedimien-tos tipográficos en la ilustración del libro. — Es-tudio de la composición mecánica. — La tipografíacomo auxiliar de otros sistemas de impresión.

ESTAMPACIÓN TIPOGRÁFICA DOS CURSOS

IEstudio y definición de los principios de estam

-pación. — Los elementos y materiales en la es-tampación. — Las técnicas manuales del grabadotipográfico. — Su estampación manual y la estam

-pación mecánica.

II

Nociones de Fotomecánica en la tipografía. -Teoría y estética del color. — Impresiones poli-

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Pruebas de grabado calcográflco, xilografía y litografía

cromas. — Contramoldes tipográficos. — El arregloy recorte manual y mecánico en la estampación. -Policromía a base de trepa y serigrafía.

XILOGRAFÍA DOS CURSOS

IPrincipios fundamentales de la xilografía. — Di-

bujo en blanco y negro, lineal, a masas planas, ymodelado por claro oscuro. — Prácticas elemen-tales de talla al hilo. — Prácticas elementales detalla a testa.

II

Diversos ejercicios de talla al hilo, dibujo mo-nocromo. — Ejercicios de talla al hilo a dos omás planchas. — Talla a testa. Dibujo monocro-

mo. — Ornamentación del libro (viñetas, colofones,capitales, etc.). — Ilustración del libro.

Xilografía policroma.

Camafeo. — Todo color. — Estampación ma-nual del grabado (pruebas de artista). — Grabadoa la manera japonesa.

CALCOGRAFÍA DOS CURSOS

IGeneralidades del grabado en metal o calcogra-

fía. — Preparación de la plancha. — Herramien-tas. — Grabado a la punta seca. — Barnices ybarnizado. — Grabado al aguafuerte. — Prácticadel grabado al buril. — Prácticas de estampacióncalcográfica.

20

Un ángulo de la sección de Tipografía

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II

Grabado al aguatinta con reservas y a la goma.Grabado al barniz blando. — Grabado a la maneranegra. — Grabado al buril. — Grabado aplicado ala ilustración. — Estampación sobre diversos pa-peles. — Estampación editorial. — Estampacióna la plancha perdida.

La decoración en la encuadernación: Dorado decortes y cincelado. — Gofrado y dorado en peque-ños hierros. — Dorado a prensa. — Cuero incisoy repujado. — Decoración manual de papeles deguardas.

RESTAURACIÓN DE LIBROS ANTIGUOS

DOS CURSOSLITOGRAFÍA DOS CURSOS

Preparación de la piedra litográfica. — Prepa-ración de los motivos que se dibujarán sobre laseperficie de la piedra. — Manipulación para darfijeza al dibujo sobre la piedra. — Litografía a lapluma, lápiz y lavado. — Litografía policroma. -Proceso de litografía a partir del descubrimientode Senefelder. — Los procedimientos y utensilios.La estética en el oficio. — Estampación a la prensaen negro y colores.

Restauración de libros impresos, manuscritos ydocumentos. — Examen de impresos, manuscritosy documentos para restaurar. — Impresos: lavar,encolar, restaurar, remarginar y planchar. — Ma-nuscritos: lavar, rebajar tintas y poner velo. -Pergaminos : limpiar, planchar y restaurar. — Lim-pieza de grabados.

HISTORIA Y TÉCNICA DEL LIBRO

UN CURSO

ENCUADERNACIÓN ARTÍSTICA DOS CURSOS

I

Estudio de los materiales componentes de unaencuadernación. (Papel, cartón, tela, cueros, etc.,etc.). — Encuadernación a la rústica, encartona-dos «Bracíel» y medias encuadernaciones. — Cosi-do en sus diferentes variedades.

II

Encuadernación en piel (badana, pergamino,chagrin, marroquin, becerro, pasta española). —

Materiales y formas del libro a través de lostiempos. — Nociones de Paleografía. — Monumen-tos bibliográficos anteriores y posteriores a la in-vención de la imprenta. — El libro incunable. -La figura del impresor-editor. — Dibujantes y gra-badores de caracteres. — El grabado y la encua-dernación en la historia del libro. — El libro es-pañol, en particular. — Los grandes maestros de latipografía en España. Obras más importantes. -Técnica de la estimación y valorización del libroantiguo. — Nociones de técnica editorial. — Or-ganización de bibliotecas.

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LOS ARTISTAS A VÍCTOR CATALÀ

A.1 homenaje a D. , Catalina Albert, celebrado enLa Escala, con motivo de los 90 años de la escri-tora, no faltaron los artistas. Esa presencia, quehubiera sido siempre justificada por los méritosliterarios de la gloriosa autora de Solitud, adquie-re una doble significación si se tiene en cuentaque tampoco las actividades artísticas han sidoajenas al talento y a las capacidades de la damaque ha inmortalizado el pseudónimo de «VíctorCatalà ». Recordemos, al respecto, que en algunasde las ediciones de su magna novela, la efigie dela escritora nos es dada en un autorretrato. Es,aquel autorretrato, una excelente muestra de laobra artística de D. !, Catalina. Obra de juventud,porque la vocación literaria se impuso pronto, enla novelista, de una manera absorbente; pero, obratan admirable, que recientemente suscitó el intere-santísimo libro de Joaquín Folch y Torras tituladoEls dibuixos de Víctor Català, seguido de una ex-posición en el barcelonés Círculo de S. Lluc, queobtuvo, desde todos los puntos de vista, un éxitorotundo.

No podían, pues, de ninguna manera, faltar losartistas en el reciente homenaje. Y no fue casual

Por 7. 13. Solervicens

Profesor de Historia y Técnica del Libro

que el grupo que los representaba estuviese presi-dido por el director de nuestras Escuelas, Fede-rico Marés. Tiene, de antemano, Marés, académicay profesionalmente, la representación de todos losartistas de Cataluña. Reúne, además, la infrecuen-te condición, entre artistas, de no ser una inteli-gencia externa al quehacer literario ni a la curio-sidad universal del humanismo. Y todavía otrotítulo: es, como D.' , Catalina, una de las grandesfiguras que ha dado el Ampurdán.

Por todo ello, no puede extrañar tampoco a na-die que fuese, precisamente, Federico Marés quiensugiriera, en el curso del homenaje, la oportuni-dad de promover la petición del premio Nobelpara D.a Catalina, idea que fue acogida con unagran ovación y que es perfectamente proporcio-nada al valor de Solitud y a los juicios formu-lados, en ocasión del mismo homenaje, por publi-cistas tan prestigiosos como Manuel de Mon-toliu, Octavio Saltor, Baldomero Argente, ArturoLlopis, Pedro Voltes, Santos Torroella, así como,en notas editoriales, por diversos periódicos, en-tre los cuales hay que destacar «Diario de Barce-lona» y la revista «Canigó ».

Nuestro director Excmo. Sr. D. Federico Marés, con la ilustre novelista Víctor Català, en el día de su homenaje en La Escala. (Ampurdán)

Escultura de Federico MarésBusto de Narciso Monturiol que el Excmo. Ayuntamiento de Barcelona y la Comisión del homenaje dedican al insigne inventor, al cumplirse elprimer centenario del "Ictíneo". Inaugurado en el Museo Marítimo, en la sala Monturiol, donde se exponen los planos y maquetas del submarino

y otros recuerdos del gran ampurdanés

EN OCASIÓN DE UN HOMENAJE.

NARCISO MONTURIOLY LA ESCUELA DE LA LONJA

Por 1. .7vt." Clarrut

Profesor de Dibujo Artístico (Sección 6. »)

S i repasamos la vida de muchos hombres ex-traordinarios, comprobaremos que, pese a sobresa-lir en aspectos determinados, dedicaron sus inquie-tudes a actividades múltiples y que sus conoci-mientos llegaron a un nivel ayudados por otrosque están totalmente al margen de los motivospor los cuales les conocemos o les admiramos.Este es el caso de Monturiol, el ampurdanés ge-nial, cuyo talento es hoy reconocido por sus apor-taciones a la navegación submarina.

Narciso Monturiol y Estarriol nació en Figue-ras el 28 de septiembre de 1819, y murió en SanMartín de Provençals en 1885, cuando este muni-cipio no había sido agregado aún a Barcelona.Hijo de padres modestos y segundo de los cincoque tuvo el matrimonio, como segundón, fue yapredestinado para el estudio, realizándolos en lasuniversidades de Cervera, Barcelona y Madrid,donde cursó la carrera de leyes. En nuestra ciu-dad vive con su amigo Gibert, que tanto influyóen su vida, en una casa de huéspedes de la callede Montesión, hacia 1838 y ya comienza a demos-trar cualidades intelectuales en escritos y polémi-cas. Más tarde se convierte en un inventor ilus-tre, y de ello quedan hechos patentes que, ana-lizados, nos ofrecen la entereza humana de un granpersonaje. Hombre idealista, inventor por natura-leza, espíritu en constante elucubración, vivaz einquieto en cada uno de los muchos aspectos enque puede considerársele, vemos en él a un poeta,un poeta de sentimiento, un poeta absoluto si«poesía» en recto sentido etimológico, significa«creación». Monturiol fue creador en cada uno delos ángulos que podamos tratarlo, que intentemosestudiarlo, incluso como artista plástico. Y aquíradica el interés que puede tener para nosotros.

Si su actuación puede ofrecer puntos diversosy su vida presenta lagunas para los que traten debiografiarle, tenemos algún dato del Monturiolpintor, que nos sugiere un comentario. Cuandotodos los jóvenes que quieren ser artistas asis-

ten a la Lonja, els nois de Llotja como se les co-nocía a los que frecuentaban las aulas de nuestraEscuela, único centro donde acudían los que que-rían aprender oficio y arte en estas disciplinas,Monturiol también se dedicaba a ellas y si no pode-mos afirmar que fue alumno de la misma, sin dudase formó en el ambiente de artistas alumnos que lafrecuentaban, los que más tarde constituirían elcuadro de personalidades del arte y profesoradoque llenó el medio siglo.

Monturiol fue buen dibujante y buen pintor, queno llegó a dedicar su vida a esta profesión, peroque demostró unos conocimientos del arte del di-seño y del colorido. Gran observador del alma hu-mana, parece que dedicó un tiempo a la pinturade retratos para cubrir sus necesidades económi-cas. No alcanzó a ser un gran artista porque suspropósitos y sus ilusiones le llevaron a otros de-rroteros, tal vez por no encontrar en las artes plás-ticas el camino idóneo para sus inquietudes. Re-cordamos un retrato de juventud, la «Señorita Ca-rolina Sunyer », óleo propiedad de don AugustoPi y Sunyer, descendiente de la retratada, que noes una obra nada desdeñable y que demuestra un

singular talento. Algún tratadista afirma que fuediscípulo de Ramón Martí Alsina, a pesar de queéste era diez y seis años más joven que Monturiol,a quien le hizo un magnífico retrato al óleo quehoy figura en el Museo Marítimo de Barcelona,como pasará a presidir la «sala Monturiol» de di-cho Museo, el busto recientemente acabado porotro ilustre ampurdanés, el escultor Federico Ma-rés. Representa para el genial inventor lo que elviolín para Ingres y hace patente el sentir de sutiempo, este deseo enciclopédico del medio siglo,del brazo de un Luis Vermell, un Claudio Loren-zale, un Miguel Fluxench, un Joaquín Espalter, oun José Arrau, que contemporáneos suyos, debie-ron ser cuando no compañeros, admiradores. Cir-cunstancias suficientes para que la Escuela se sumeal homenaje que le ofrenda la ciudad.

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Bloque central del monumento con la figura de Goya

J:U

aPerspectiva del proyecto de Monumento a Goya

EL MONUMENTO A GOYA

Nuestra revista no podría quedar al margen dela celebración de un acontecimiento de tal cate-goría artística, y que tanto nos afecta a nosotros,como es la resolución de la comisión organiza-dora del monumento al pintor de Fuendetodos.La prensa de toda España, y especialmente la deZaragoza, ha dedicado toda la preferencia a reseñary dar a conocer el proyecto aprobado. Bien lo me-rece el cumplimiento de una deuda tan acariciadacomo la que Zaragoza tenía pendiente con una desus más altas glorias, uno de los pintores másgrandes de todos los tiempos.

Nuestro deseo hubiera sido que fuese nuestrodirector señor Marés, autor del monumento, quien

escribiera estas líneas, dándonos a conocer su pro-yecto; pero ante sus reiteradas negativas, muycomprensibles, nos hemos decidido a reproduciralgunos fragmentos de la prensa de Zaragoza quecon tanta simpatía y comprensión supo recoger laidea y apreciar la obra del artista. Nuestro reco-nocimiento a Heraldo de Aragón, Amanecer, ElNoticiero y la Hoja del Lunes.

«Zaragoza no ha pagado aún —después de másde un siglo— la deuda de gratitud que tiene con--traida con Francisco de Goya y Lucientes, el pintornacido en Fuendetodos, que marcó un hito en lapintura universal y que ha dado a España una glo-

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Boceto del grupo de Chisperos, en uno de los céspedes

ria imperecedera. Varios intentos se hicieron a lolargo de los años, pero todos ellos quedaron falli-dos, al faltar, más que los medios materiales, unverdadero deseo de enaltecer al sordo inmortal. Asíse da el caso, muy pintoresco, de que Goya no po-see en esta ciudad sino la dedicación de una ca-llejuela de ínfimo orden, aunque en ella quedealgún vestigio —más memorístico que real— dela vida de Goya.

Afortunadamente para todos, esta deuda y esteolvido van a quedar saldados gracias a la acertadainiciativa y al altruismo de un entidad económica,el Banco Zaragozano, entidad que, haciendo honora su apellido, ha antepuesto el valor emocional deéste al rigorismo económico de su función pecu-liar.

Un monumento a Goya, en su tierra natal y jun-

to al Pilar, donde figuran varias obras geniales delcoloso pintor, tenía que tener la grandeza y dig-nidad debidas. Se hizo, con tal fin, un concursonacional público, juzgado por una Comisión mixta,integrada por el propio alcalde y otros represen-tantes de la ciudad, conjuntamente con los direc-tivos del Banco citado y representantes de la RealAcademia de Bellas Artes de San Fernando y des-tacadas personalidades de la crítica española.

Pero en los bocetos y anteproyectos presenta-dos, de ambición algunos, no se encontró lo que sepretendía. El Jurado declaró desierto el concurso.En realidad los bocetos ofrecidos no podían llenar,plenamente, un concepto moderno y estético queencuadraba en el grandioso marco de la ampliadaplaza del Pilar.»

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Boceto del grupo de las Majas que decoran el césped

En el salón del Gran Hotel, se celebró una in-teresantísima reunión, en la que estuvieron presen-tes, el Ayuntamiento, el presidente de la Asocia-ción de la Prensa, señor Blasco Ijazo, Directoresde «Heraldo de Aragón», «Amanecer», «Noticiero»y «Hoja del Lunes», miembros de la Comisión en-cargada del homenaje a Goya en pleno con el Con-sejo de Administración del Banco Zaragozano, re-presentado por su presidente, don GumersindoClaramunt Pastor; vicepresidente, don SalustianoLon, y los consejeros señores Pérez Perruca, donMoisés Calvo, don Pedro Hernández Luna y donAntonio García Bernal, y el secretario general, donAlberto Escudero.

Don Federico Marés que además de ilustre es-cultor —su obra es bien conocida en todo el mun-do—, es un notable orador, hizo uso de la palabra

para ambientar su obra con un bosquejo de lamisma, en los siguientes términos:

«La figura de Goya requiere, a nuestro entender,ser destacada en el monumento con toda la gran-deza de su personalidad y de su genio.

»Siempre fuimos reacios a centrar el interésde los monumentos en la figura, o busto del ho-menajeado, por considerar que es la obra y no lafigura la que se trata de perpetuar como recorda-ción y ejemplo a las generaciones.

»Pero en el caso excepcional de Goya, su ex-traordinario valor humano, su figura, van tan uni-das a su obra, que consideramos que no sólo soninseparables, sino que una y otra se complementany se refuerzan. Sin esta compenetración no seríaposible comprender ni justificar muchos aspectosde su genio.

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»Por esta circunstancia tan destacada que con-curre en la personalidad y en la obra de Goya, he-mos considerado que el elemento clave del monu-mento no puede, ni debe ser otro, que la propiafigura del genial artista aragonés.

»Por ello hemos procurado que el núcleo urba-nístico del monumento, y éste, a la vez, en susplanos y líneas generales converjan en la figura deGoya.

»Se ha procurado también que el trazado gene-ral del monumento y de su urbanización tenganun sentido de monumentalidad sobria, en conso-nancia con su emplazamiento, y que sea compati-ble con el arte de todos los tiempos, al margencíe modas y esnobismos pasajeros.

»Teniendo en cuenta la irregular urbanizaciónele la plaza de Nuestra Señora del Pilar —la enor-me dimensión longitudinal de su planta— se haprocurado crear un centro urbanístico autónomoque, sin desentonar del plan general, preste al mo-numento el adecuado marco ambiental de que ca-rece su emplazamiento.

»Sin ello no sería posible logro alguno, por em-peño que se pusiera y acierto que lograra el ar-tista.

»Por otra parte, no se hace otra cosa que repetirlo que ya se hizo en su día con el Monumento a losCaídos. Esta solución presupone una mayor armo-nía en la plaza, al compensar la masa verde delextremo opuesto, con lo que el trazado de la urba-nización general ganaría en perspectiva y en be.lleza.

»Centra, pues, el monumento la figura de Goyade gran tamaño, fundida en bronce a la cera per-dida, en actitud de diseñar dos de sus más carascreaciones proyectadas sobre el césped, evocandolas praderas con sus majas y chisperos.

»Desde su frente, de todos los ángulos visualesde la plaza de Nuestra Señora del Pilar, se desta-cará la mole pétrea del monumento y, preferente-mente, la silueta en bronce de Goya. Tan solo cuan-do el visitante, atraido por la gloria del pintor ge-

nial, penetre en la intimidad recoleta del jardínque cierra unos arbustos recortados a la medidajusta, un poco abstraido del bullicio de la ciudad,se le aparecerán los personajes goyescos que, bajola mirada escrutadora de su creador, reviven denuevo sobre el césped, presentes también al ho-menaje que Zaragoza rinde al inmortal aragonés.»

«En el proyecto presentado por el artista el mo-numento está formado por varios elementos quese conjugan perfectamente, integrando una uni-dad perfecta, que se independiza de la totalidadde la gran plaza del Pilar, pero sin romper launidad de ésta.

La obra cumple plenamente su fin y encaja ma-ravillosamente en el cuadro donde va a levantarse,circunstancias muy difíciles de conseguir y que sinduda Marés ha resuelto, primero por su tempe-ramento artístico y por su maravilloso sentido,pero luego por un afán que le embargó de servira la ciudad y de ofrecer a Goya en la proporciónque su relieve mundial merecía un monumentodigno de su figura.

Marés ha sabido conjugar todos los elementosque habían de ofrecer un logro completo de la ideay de su contenido. Ha resuelto primero de todouna difícil circunstancia: la de las proporcionesde la obra. El monumento a Goya que ha bocetadoMarés, es en realidad una glorieta, como un oasisen la enorme extensión de la gran plaza y constadel monumento propiamente dicho: un monolitoo pedestal sobre el que se alza altiva y orgullosala figura del pintor, en bronce, frente a una pra-dera en cuyo césped se levantan motivos de suscuadros, figuras goyescas en bronce, también, todoello rodeado de un macizo y al fondo unos árbo-les que ambientan el conjunto. Sencillamente unlogro muy difícil, plenamente conseguido. Sinduda, ha de gustar plenamente el día de su inau-guración que se ha señalado para las fiestas delPilar de 1960.»

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El Excmo. Señor José María de Porcioles, Alcalde de Barcelona, conversando con D. César Martinell

A DON CÉSAR MARTINELL.Por Juan Subías

Profesor de Historia del ArteEscuela Central

Àtendiendo al amable requerimiento de nuestroquerido Director Don Federico Marés, nos es muygrato tributar un cordial homenaje a Don CésarMartinell, con motivo de su jubilación de Profesory Secretario, de nuestra Escuela.

Huelga decir que esta jubilación es para todosnosotros exclusivamente administrativa y que noreza para nada con Ensayo, cuyas páginas se vie-nen honrando con su preciadísima colaboración.Tampoco es dable olvidar que si este privilegio dela edad aparta a Don César de las que fueran tancaras obligaciones, no es posible que le separende la vida de un Centro Docente para él tan que-

rido, y al que ha dedicado sus desvelos y energíasinteligentes.

Y a esta sazón es justo hacer constar cuánto hasignificado la figura del Sr. Martinell en las acti-vidades de esta su LONJA. Fidelísimo colaboradoren todo momento de la Dirección más que fructí-fera de Don Federico Marés, ha venido siendo DonCésar prestigioso elemento de este Centro del cualirradian tantas actividades artístico-docentes en lapropia Barcelona y por ende todo el Principado.

A su afecto hacia la institución en que ha forma-do generaciones de alumnos, tenemos el testimo-nio de su influjo y el material y palpable que nos

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dejara en su libro, aquel en que trazara la vida ylas contingencias de esta Escuela desde su funda-ción hasta nosotros. Sin pretensión de justipre-ciarla ni la menor loanza, puede y debe afirmarseque el libro del Señor Martinell es ejemplar yúnico para el conocimiento del prestigioso organis-mo casi bisecular al que él tanto ha contribuidocon el suyo a mantener en su elevado nivel educa-dor y formativo.

Sería absurdo, en la presente nota, que no tienemás finalidad que hacer constar a Don César todoel afecto y consideración de su amigo el Director,y el de todos sus no menos amigos —compañeros—, pretender un bosquejo tan solo de la múl-tiple personalidad de este egregio valor de nues-tro tiempo. Sus actividades en calidad de conferen-ciante, sus libros, su profusa labor profesoral,suman tantas cualidades a su figura, que le danproporciones de extraordinaria. Si a ello aña-dimos lo esencial de su ser, su calidad humana,tendremos un esbozo impreciso aún, de quien esDon César Martinell Brunet a quien desde estaspáginas enviamos nuestro más cordial saludo,mientras le auguramos aquella segunda fase exis-tencial del que, habiendo sido emperador romano,

abandona el ajetreo ciudadano y se vuelve a suscampos, para seguir desde los mismos, mientrasapaciblemente recoge los frutos de su agro, bene-ficiándonos a todos con los de su inteligencia y subondad. Ello no obstante, con una condición quesi no es previa, sea esencial: que desde estas pá-ginas, y más aún, desde la Escuela, siga sintiéndosebien a nuestro lado.

Su gran amigo y compañero, el más antiguo, eldirector, con delicadeza suma, brindó ya un silen-cioso homenaje a Don César ante su jubilación, su-mándole al grupo de Profesores y alumnos que rea-lizó el último viaje por España. El Sr. Martinell nodejó de captar lo que aquel gesto significara, yprodigó su simpatía en el decurso del viaje, tantocomo enseñanzas ante el conjunto innumera-ble de monumentos y obras de arte que se ibancontemplando. Correspondencia de tales atencio-nes y muestra del reconocimiento de las mismas,fue el espontáneo aplauso que le dedicaron losalumnos al despedirle, ante la puerta de su casa.Que ellos resuenen en sus oídos, admirado donCésar, simbolizando los de toda la Escuela, por mu-chos años.

PIO XII Y EL ARTE

... «Quisiéramos señalar aquí a la pléyade de ar-tistas que tanto amamos las excelsas posibilidadesdel arte.»

... «La función del arte consiste en romper elrecinto estrecho y angustioso de lo finito... y abrircomo una ventana a su espíritu, que ansía lo in-finito.»

... «El artista es por sí mismo un privilegiadoentre los hombres, pero el artista cristiano es, encierto sentido, un elegido, porque es propio de loselegidos contemplar, gozar y expresar las perfec-ciones de Dios.»

... «Llenad esta misión con empeño; con todovuestro amor. A fin de que Ella os asista, Nós in-vocamos por vosotros a la Virgen María, toda San-ta y hermosa, inspiradora de los verdaderos ar-tistas.»

... «Gozo del artista que en toda criatura ve res-plandecer la luz del Creador. Noble misión del ar-

tista que ayuda a los más insensibles y distraídosa ver, a gozar de la belleza natural de las cosasmás humildes y, a través de ella, de la bellezadivina, y —mientras los pies siguen tocando latierra— a levantar los ojos hacia el cielo, haciaDios.» (19-V-1948).

... «En este orden intelectual, la unión de artis-tas católicos, que celebran su I Congreso, ocupaun lugar preeminente. Lo que es natural teniendoen cuenta que el arte es, en cierto aspecto, la ex-presión más viva, la más sintética del pensamientoy del sentimiento humano, la más ampliamenteinteligible, ya que, hablando directamente a lossentidos, el arte no conoce la diversidad de len-guas, sino sólo la diversidad extraordinaria, suges-tiva de temperamentos y de mentalidades. Ade-más, por su delicadeza, el arte, auditivo o visual,penetra en la inteligencia y en la sensibilidad del

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espectador o del oyente con más profundidad quela palabra, escrita o hablada, que, con su preci-sión analítica, insuficientemente matizada, no pue-de alcanzar aquella perfección. Por estas dos ra-zones, el arte ayuda a los hombres, no obstantelas diferencias de caracteres, de educación, de ci-vilización, a conocerse, a comprenderse o, al me-nos, a adivinarse mutuamente, y, por consiguiente,a unir sus respectivos recursos para completarselos unos con los otros.»

... «Recibid, hijos míos, nuestras felicitacionespor haber cumplido la tarea que os incumbe y ha-beros propuesto, frente a una «cultura sin espe-ranza», considerar al arte como «fuente de unaesperanza nueva». Haced, pues, que se esparza so-bre la tierra, sobre la humanidad, el reflejo de labondad y de la luz divina, y habréis contribuido,ayudado al hombre a amar «todo lo que hay deverdad, de pureza, de justicia, de santidad, deamable.»

... «Que la Virgen Inmaculada, espejo de la jus-ticia y del esplendor de Dios, Reina de la Paz, ya quien bien podemos llamar Reina de las Artes,os inspire y os asista; que Ella haga descendersobre vosotros las gracias de su Hijo, en prendade las cuales os damos, así como a todos los ar-tistas católicos, nuestra Bendición Apostólica.»(Al Congreso Internacional de artistas católicos.6-IX-1950).

... «No es necesario que expliquemos a vosotros—que lo percibís en vosotros mismos, frecuente-mente, como noble tormento— uno de los carac-teres esenciales del arte: aquel que consiste en sucierta intrínseca «afinidad» con la religión, que enalgún modo convierte a los artistas en intérpretesde las infinitas perfecciones de Dios y particular-mente de su belleza y armonía.»

... «Cuanto más el artista vive la religión, tantomejor preparado está para hablar el lenguaje delarte, para entender sus armonías, para comunicarsus latidos.»

... «Los soberanos maestros del arte cristianoresultaron intérpretes no sólo de la belleza, sinotambién de la bondad de Dios, revelador y re-dentor.»

... «Las almas cultivadas, elevadas, preparadaspor el arte, están más dispuestas a percibir la rea-lidad religiosa y la gracia de Jesucristo.»

... «Incluso sin proponéroslo como finalidad ex-presa, tratad de educar los espíritus (tan fácilmen-te inclinados hacia el materialismo) en la noblezay en el gusto espiritual, aproximadlos los unos alos otros, vosotros a quienes es dado hablar unlenguaje qúe todos los hombres pueden compren-der. Que ésta sea la razón a la cual tienda la voca-ción artística que debéis a Dios; misión tan nobley tan digna que basta por sí sola para dar a vues-tra vida cotidiana, frecuentemente dura y ardua,la plenitud y el confiado empuje.» (8-IV-1952).

... «El Arte, como expresión estética del espí-ritu, si lo refleja en su verdad íntegra o, al me-nos, no lo deforma positivamente, es de suyo cosasagrada y religiosa en cuanto interpreta la obrade Dios; mas si su contenido y su finalidad sonlos que Fray Angélico escogió para su arte, en-tonces se eleva a la dignidad de ministerio deDios, reflejando un mayor número de perfeccio-nes.» (Del discurso al inaugurar la exposición deF. Angélico en el Vaticano. 20-IV-1955).

... «Es propio del artista no el reproducir me-cánicamente lo real ni sujetarse a las solas posi

-bilidades técnicas de los instrumentos, sino, sir-viéndose de ellos, elevar y dominar la materia, sinalterarla ni sustraerla a la realidad.» (21-VI-1955).

... «El arte, ciertamente, se ha de contar entrelas manifestaciones más nobles del ingenio huma-no, ya que mira a expresar con obras humanasla infinita belleza de Dios, de la que es como unreflejo. La libertad del artista no se encuentra,por el hecho de estar sujeta a la ley divina, coar-tada o suprimida, sino más bien se ennoblece yperfecciona.»

... «La Iglesia ha tenido y tendrá siempre engran honor a estos artistas y les abrirá amplia-mente las puertas de los templos, pues para ellaes muy grata y no pequeña ayuda la que ellos lebrindan con su arte e industria para ejercer conmás eficacia el ministerio apostólico.» (25-XII-55).

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JUAN

CENTELLAS

RAIG

Juan Centellas y señora, creadores de las becas que llevan su nombre, acompañados de los profesoresseñores Marés y Cortés. Fotografía tomada en la plaza del Vaticano, después de la visita al Santo

Padre, durante el viaje de estudios de los alumnos a Italia

E nsayo se honra hoy en destacar en sus pági-nas, con todos los merecimientos, un gesto de au-téntico mecenazgo artístico, de un ex alumno denuestra escuela, que bien pudiera servir de ejem-plo y estímulo para otros muchos que, con mayo-res posibilidades, olvidan cuales son los deberesde una posición social más o menos privilegiada.

Juan Centellas Roig, el ex alumno a que nos re-ferimos, al correr de los años 1910 a 1915, cadanoche, después del trabajo diurno en los talleresBechini, colaborando en la labor de reproducir enmármol o piedra las obras de los escultores Lli-mona, Arnau y Blay, —para citar tan solo algu-nos de los maestros destacados de la época—,asistía a las clases nocturnas de escultura de laLonja, afanoso de disciplinarse en el modelado yel conocimiento de la forma.

Juan Centellas, en aquella época de alumno en

nuestras aulas seculares de la Lonja, glorioso se-millero de artistas y artesanos, supo apreciar decerca el esfuerzo, el duro batallar de los que conmás vocación que recursos luchaban iluminadospor la fe e impulsados por un entusiasmo sin lí-mites, para abrirse camino en las difíciles disci-plinas de las nobles artes.

Y, sobre todo, supo y pudo valorar muy de cer-ca el sacrificio de abnegados compañeros que, sinapoyo alguno, carentes de medios, en plena luchaveían truncarse sus más puras ansias y vivasilusiones. Y a través de los años no olvidó la trage-dia y el dolor de aquellos a quienes la adversidadtruncó una carrera llena de esperanzas, de posi

-bilidad cierta en el mundo del arte.Para ellos mantuvo la nostalgia de sus mejores

recuerdos; y cuando la vida rodeóle de una si-tuación económica desahogada, fruto de no pocos

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desvelos, pensó en ofrecer a los futuros escultoreslo que a otros muchos les fue difícil, cuando nonegado. Decidió entonces crear unas becas anualesque facilitaran el estudio a algún escultor joven deprobados merecimientos y escasos recursos. Y an-ticipándose, y como prueba, estableció para losalumnos destacados de las Escuelas Superiores deBellas Artes de San Jorge, y la de Artes y OficiosArtísticos, del curso 1958-59, unas becas para unviaje a Italia de ampliación y complemento de susestudios. Previo concurso-oposición, fueron seis losalumnos galardonados, cuatro de la Escuela Su-perior de Bellas Artes y dos de la de Artes y Ofi-cios Artísticos. Las becas les permitieron cono-

cer y estudiar los más importantes museos y mo-numentos de Roma, Florencia, Nápoles, Pisa, Sie-na y Pestum.

Con noble empeño y mejor espíritu cristianocomprendió que hay una ley humana inscrita enla conciencia de cada uno, que nos obliga y quenada existe mejor y más duradero en la vida, quela complacencia y el gozo de proporcionar al quelo merece y necesita, el estímulo y el aliento deuna ayuda oportuna y eficaz.

Y que toda noble ambición en el mundo delarte y del espíritu, merece la estima y apoyo delque pueda prestarlos.

F. M.

Aula de Dibujo Lineal de la Sección 5.°

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Siglo XVII Siglo XVI

Sii lo XVII Siglo XVI

Siglo XVII

Miniaturas Españolas de autor anónimo

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LAS MINIATURAS

RETRATOSPor ]osé .A. Cg. ornis

E i vulgo lo aplica equivocadamente a toda pin-tura en pequeño tamaño, incluso a las minucio-sas copias reducidas de cuadros mayores. Pero talnombre tiene una aplicación precisa por su técnicay que se deriva de su origen.

La decoración de los misales y libros iluminadosse hacía principalmente en las iniciales de los ca-pítulos, a menudo en gran tamaño, y la base deesta iluminación era el color rojo, cuyo equivalen-te en latín era minium, o rojo de plomo, y por elloa los ilustradores se los llamó riiiniatores, de dondederivan «miniatura» y «miniaturista». Cómo y cuán-do estos nombres se aplicaron a los que pinta-ban retratos en lugar de iluminar libros, no pue-de precisarse, pero en el siglo xviii pasó a ser estapalabra la que da idea de una pintura de pequeñotamaño con técnica peculiar.

Al principio se habían llamado pequeños retra-tos. Petit Portrait, en Francia; Painting in Little,en Inglaterra, y, realmente, a los pintados al óleode los siglos xvi y xvii corresponde designarlos así:«pequeños retratos» o «retratos en pequeño».

No obstante, se califican justificadamente comominiaturas los retratos sobre marfil de tamaño ex-traordinario, alguna vez en una reunión de hojassólidamente unidas con refuerzos por el reverso.Y por ser mayores no dejan de ser miniaturas, enoposición a la creencia vulgar.

Es la técnica empleada por los miniaturistaspara dar en un retrato pequeño todo el relieve dela personalidad retratada, como si fuese en tamañonatural, lo que caracteriza el retrato miniatura. Noel tamaño.

No es frecuente que esa cualidad aparezca enlas pintadas en España en época decadente parael arte pictórico en nuestro país y, con frecuencia,por aficionados mejor que por artistas. Esto con-tribuye mucho a que no se haya apreciado en loque vale y significa el arte de la miniatura retratoentre nosotros.

Exige ésta que su ampliación a través de unapotente lupa o en fotografía mantenga la firmezay vigor del trazo y no desmerezca en expresión elsemblante del sujeto retratado.

Se caracteriza la miniatura por una posición delmodelo apenas afectada, como sorprendida en laintimidad de su vida ordinaria, sin adornos exage-rados y con ausencia completa de la rigidez de unapersona que se prepara a ser retratada.

Orígen de la Miniatura

La iluminación de los códices puso en el ador-no de las iniciales flores o figuras. Con el tiempoéstas representaron los personajes importantes re-lacionados con el texto: al principio, imágenes desantos o emblemáticas, luego, retratos, y en las eje-cutorias se pintaban los de los reyes que concedíanlos títulos y los de los beneficiados adorando lasimágenes de la Virgen o de los Santos Patronos desus familias. Dio esto pie para que aquellos retratosse hiciesen más tarde separados; al comienzo, enhonor de personas eminentes; luego, de los fami-liares, y vino con ello la moda lujosa del retratosobre pergamino con la técnica de la iluminación.

En Inglaterra, Hans Holbein, alemán que pasóa la corte de Enrique VIII, puede afirmarse quefue el primero que pintó allí retratos miniatura.Se quiere atribuir la profusión de los retratos suel-tos en miniatura en aquel tiempo al hecho de or-ganizar Enrique VIII una expedición en que de-bían acompañarle buen número de sus cortesanosy por haber comenzado Holbein a pintar en pe-queño personajes de la familia real, encargarontambién los expedicionarios para llevarse consigo,o dejarlos en sus lugares, retratos de unos y deotros, de los que no han quedado muchos, perolos existentes parecen dar razón al citado supuestoorigen de la producción de miniaturas.

A continuación de Holbein padre trabajó suhijo, Holbein el joven.

A continuación de los Holbein, los ingleses Hil-liard, los Oliver, padre e hijo, de origen francés,Hoskins, Flatman, Dixon, Lawrence, Crosse y otrosmantuvieron el arte del retrato miniatura en mu-cha estima y son ciertamente admirables los quese conservan de aquel tiempo en buen estado.

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W 00

Anónimo español. Siglo XVI Dominico Theotocopuli, El Greco

En Francia, los Clouet, especialmente François.pintaron en pergamino, en tamaño mayor que losingleses, pequeños retratos de personajes de laCorte. Después, otros artistas siguieron el procedi-miento. Emplearon los colores de acuarela congoma, sobre pergamino o papel fuertemente enco-lado.

Italia tuvo un artista que pintó retratos pareci-dos, en Inglaterra principalmente. Se llamó Fede-rico Zuccaro.

En España tales retratos existen en las ejecuto-rias de nobleza de los siglos xvi y xvii, pero nopasaron a ser pintados en retratos sueltos. Abun-daron, en cambio, los pequeños retratos al óleo, so.bre cobre, madera y otras materias, de los queexisten numerosos ejemplos, de calidad excelentealgunos, que reciben atribuciones a los mejort,spintores de aquellos tiempos.

Hacia principios del siglo xviii comenzó a pin-tarse sobre el reverso plano de las tapas de las ca-jas de marfil, corrientes a la sazón como objetospara regalo. Para éstas se adoptó la gouache, queda más consistencia al color. Rosalba Carriera, ve-neciana, se dedicó a ello en 1720.

Al encontrarse medio de cortar el marfil en ho-jas finas, proporcionando con ello un fondo casinatural para las carnaciones, tomó el retrato minia-tura extenso desarrollo, debido a la elegancia yel atractivo que supieron darle, aprovechando aquelfondo, los artistas que en él se especializaron.

T. H. Colding, en su interesante obra Aspectsof Miniature Painting (Copenhague, Edimburgo,Londres, 1953), encuentra un origen anterior delarte de la miniatura en los yerres égloinisés del si-glo xiv y las imágenes pintadas o esmaltadas deba-jo de cristal de roca en relicarios de siglos ante-riores.

Técnica

Existen numerosos manuales y obras, inclusoen castellano, que tratan del procedimiento de pin-tar la miniatura. Hilliard, en el siglo xvii, ya es-cribió detalladamente sobre su manera. En Españase publicó en 1743, y en segunda edición en Ma-drid (1872), una Guía de aficionados a la Miniatu-ra, por don Cirilo Gamarra, de la que dijo Francis-

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Henry Done

1797

Luis Vermell1858

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co Menéndez, este «pintor de miniaturas más an-tiguo de SS. MM. y AA.» era «preciosa antorchapara guía», y luego, «no antorcha, astro refulgente,iluminando el español hemisferio, esparcirá sus fa-vorables influjos en los preparados ingenios de susfelices hijos». Ciertamente, como otros autores ex-tranjeros hicieron, apura la materia con instruc-ciones para formar la paleta, la preparación y elempleo de los colores y de los pinceles, y cuantoayudar pudiera a pintar bien la miniatura, segúnsu criterio.

Una obra por Federico Villot: Hall (París, 1887),contiene detalladas observaciones sobre la técnicade la miniatura en Francia y en Inglaterra.

De Hall, el mejor miniaturista de escuela fran-cesa, aunque nacido en Suecia, se dice: «Sus re-tratos son tratados de manera enteramente distin-ta de la que acostumbran emplear los pintores deminiatura; no se ve en ellos la fatiga del poilati-llé; nada de forzado; nada de trabajado; el trazoes libre y la manera amplia». Esta manera ampliay su acierto en emplear la transparencia del mar-fil hicieron que se le diera el calificativo del «V.inDyck» de la miniatura.

De Cosway, el coloso pendant de la escuela in-glesa en el siglo xvrii, se ha dicho: «Su agradableestilo de dar color a los retratos de sus modelos,añadiéndoles gracia, belleza y elegancia, siempreconservando el parecido del personaje, que habíapenetrado del estudio de los modelos griegos, leganó un favor enorme.»

«Cosway deleitaba con la expresión que daba alos ojos de sus retratos, que acostumbraban seracabados con extrema delicadeza, en lo cual ningúnotro artista le sobrepasó.»

«Fue él quien inició la moda de pintar sólo unojo en una miniatura.»

El marfil como fondo es la materia más conve-niente para diseñar y pintar sobre él las tonalida-des de la piel, pues su superficie fina y suave admi-te los trazos del pincel y permite, cuando se em-plean diestramente, que los colores aparezcan bri-llantes.

En el Manual Hoepli dedicado a la miniaturaretrato, el compilador L. de Mauri define la mi-niatura «como los modernos la entendemos» de«una acuarela sobre marfil muy minuciosa, unapintura de pequeñas dimensiones en la que se usande modo especial colores disueltos en el agua en-gomada». «El artista debe dejar que obre sus efec-tos el fondo, de igual modo como hace a veces elhábil músico, dejando al descubierto de todo acom-

pañamiento un hermoso motivo del cual intentahacer resaltar los primores. Toques justos y valien-tes deben animar y dar calor a la obra; la correc-ción del dibujo debe ser su base sobre la cual nose debe transigir nunca... Debe, por consiguiente,el pintor poner bien en relieve los trazos de loscuales deriva la expresión; bien en evidencia losgrandes planos y pasar sobre el resto y apenas to-carlo. En suma: debe evitar todo trazo inútil quepueda complicar o confundir su labor, en tantoque hará resaltar con energía todo cuanto es de-cisivo y apto para dar carácter a su tema.»

Pierre Lespinasse, en su introducción a La Mi-niature Française au XVIIIè,ne siècle (Van Oest,1929), escribe: «En cuanto a la manera de ponerlos colores ha sido diferente según las épocas. Seemplearon sucesivamente el temple, la acuarela, lagouache, el lavado. Estas modificaciones se expli-can por los cambios en escoger la materia en quese pintaba. En la Edad Media la miniatura erasobre vitela; el tono, algo amarillento en ocasio-nes, no era siempre uniforme y, por consiguiente,no debía transparentar. Era preciso, además, some-ter la vitela a cierto número de preparativos, la-minarla, pasarla la piedra pómez, lavarla con hielde carpa para suprimir las partículas grasientas.Esta preparación por sí sola hubiera sido insufi-ciente si no se hubiese pasado una o varias capasde agua engomada antes de aplicar los colores so-bre la vitela.»

«Por supuesto, la idea de evitar el fondo no sele ocurriría a un artista medieval, puesto que latradición era cubrirlo y hacer brillar suntuosamen-te el oro. Cuando la iluminación cedió el paso ala miniatura propiamente dicha y el marfil reem-plazó al pergamino, se le ocurrió al pintor la ideade hacer intervenir en su paleta el color de estamateria. Desde entonces dio sencillamente un la-vado a sus blancos, es decir, sustituyó el agua opa-ca por el agua transparente, dando lavado a losdetalles que deseaba hacer resaltar con toques másvivos. En el siglo xix, bajo la influencia de los in-gleses, el papel reemplazó a menudo al marfil y,por lo tanto, los procedimientos de la acuarelaa los de la gouache. Esta nueva técnica implicauna modificación de los medios de expresión. Lasuavidad del fundido y del puntillado fue susti-tuida por el frotado.»

«La paleta del miniaturista es muy sencilla.Para el retatro el artista agrupa a un lado los tonosde la carne con mucho blanco en el centro, por-que el blanco se mezcla a todos los colores... Si el

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Andrew Plimer. Siglo XVIII

C. Sicardi. 1802 J. L. Comte. Siglo XVIII

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George Engleheart. Siglo XVIII Samuel Shelley. Siglo XVIII

artista trabaja del natural, debe haberse hecho an-tes un dibujo a la acuarela muy acabado. Pintaprimero ampliamente en tonos uniformes sobre lasuperficie que quiere cubrir; luego, cuando estacapa se ha secado, vuelve sobre ella con el poin-tillé (pointillé redondo o pointillé a rasgos).»

«Los colores básicos se combinan para imitarlos tonos del ser viviente que se retrata, y trazosde púrpura y de verde realzan el conjunto.»

«La pintura en miniatura es un arte de medioslimitados. De varias maneras se puede alcanzarun buen resultado, pero un punto es esencial: lostonos suaves difícilmente pueden conseguirse conla sola acuarela y raramente con la tintura al óleo.Existen, en cambio, en el marfil, que, en contrastecon los colores que se le apliquen, adquirirá en de-terminados puntos el vigor y la profundidad queno se obtendrían de otra manera.»

El miniaturista, en cuanto artista perfecto, debesaber dibujar, como esencial condición, y esto secomprueba en los grandes miniaturistas de lasescuelas extranjeras, pero no siempre en las mi-niaturas españolas que, como se ha dicho, fue-ron generalmente pintadas por aficionados o pocomás.

La diferente manera de emplear los colores yde manejarlos, la técnica especial en pintar losojos, los labios, el cabello, caracterizaron el estilode cada miniaturista, y su examen y conocimientoayudan en gran manera a la atribución correcta delos retratos, muchas veces dejados sin firma o conaditamento posterior de ella, pero falsa.

Un detalle importante son los fondos, que esco-gidos acertadamente dan gran relieve a la figura

retratada. Los ingleses tuvieron mucha tendenciaa poner fondos claros, incluso azul celeste, a susproducciones. Los franceses usaron más el paisajey los interiores, ya que su técnica era más abun-dante de color.

Se empleó mucho el pointillé en Francia, perofue desapareciendo y dominó entre los grandesminiaturistas el lavado, ayudado de la gouach,-.Para dar relieve a ciertas sombras y pliegues delropaje se reforzaba el color con la goma.

En la época del Imperio en Francia, imitándolode algunos ingleses, Isabey y otros pintaron sobrepapel con tenues colores, procedimiento que sub-sistió, por más que la generalidad de los miniatu-ristas se atuvo al marfil como campo de su obra.

Generalmente se pinta a ojo desñudo, pero hayejemplo de miniaturistas que empleaban la lupa.Algunos prefirieron los pinceles de petit gris a losde marta, y, en cierto límite, se servían del raspa-dor.

La paleta de un miniaturista la componían 16 ó18 colores...

Tanto el pergamino como el marfil se prepara-ban de modo distinto, naturalmente, para su másapropiado empleo. El marfil, liso de por sí, se afi-naba más con la piedra pómez. No hay que decirque el papel destinado a un retrato miniatura setrataba exactamente como se hace para la acuare-la corriente.

Para dar más vigor a los retratos se recurría,sobre todo en Francia, a colocar en el dorso unahoja sutil de papel plateado o dorado, llamadopaillon. En algunos casos la mala calidad de la ma-teria colorante de éste contribuia a alterar los co-

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P. P. Pommayrac. 1860

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lores de la miniatura, que también son susceptiblesde oxidarse.

La mayor parte de los buenos miniaturistas te-nían sólida formación, sobre todo en Inglaterra.

La influencia de Tiziano se considera acertada-mente haber tenido allí capital importancia en lapintura de retratos en el siglo xvii... La prácticaque Peter Oliver adquirió al pintar copias en miniatura de las pinturas venecianas de la Colecciónde Carlos I influyó en su estilo.

Isaac Oliver, en Italia mismo, copió a los gran-des maestros, especialmente al Parmiggiano.

También Samuel Cooper copió de Van Dyck.Bernard Lens, de Rubens, de Van Dyck y de Pous

-sin. Jacques Antoine Arlarn lo había hecho delCorreggio.

Georges Engleheart había igualmente copiado aReynolds, cuya maestría atrajo también a otrosartistas.

Ya se ha dicho que Cosway estaba penetradodel clasicismo griego.

Colecciones y Coleccionistas

Dada la condición de intimidad que ya se pia

dicho había originado la producción de retratosminiaturas, es natural que permaneciesen tales ob-jetos en el seno de las familias de los retratados.

Si estas familias eran numerosas y manteníansu alto abolengo durante varias generaciones, elconjunto de sus retratos formaba por sí solo unacolección que se mantenía, naturalmente, fuera delalcance y aun de la contemplación de las gentes.

En la segunda mitad del siglo xix se formaronpor aficionados del delicado arte colecciones deretratos ajenos a la familia de los adquirientes.

En Inglaterra, la costumbre de hacer la liqui-dación de las herencias por venta en subasta, cau-saba la dispersión de patrimonios artísticos que nopodían conservarse en bloque. A tales subastasconcurrían, en una u otra forma, como comprado-res, los familiares del causante que deseaban con-servar, y rescataban así al precio del mercado aque-llos objetos que tenían en especial estima.

Pero estas subastas daban ocasión al aficionadopara adquirir bellos objetos que no eran fácilmen-te asequibles de otra manera. Con el tiempo estasventas se hicieron más frecuentes, y, despertandoel interés de mayor número de personas, vinierona constituir un mercado de miniaturas y contribu-yeron a su verdadera valoración.

Así, al tiempo mismo que algunos poseedoresse deshacían de conjuntos familiares, otros forma-ban valiosas colecciones, no sólo en Gran Bretaña,sino también en Francia y otros países.

De las que tienen origen tradicional, aparte lascolecciones de los monarcas de Inglaterra, de Ho-landa y alguna otra, 'subsisten la de considerablevalor artístico del duque de Portland, en WelbeckAbbey, y la del duque de Buccleuch, en MontaguHouse, en Inglaterra.

En Francia se conserva, en el Museo de Char.-tilly, la que había formado el príncipe de Condé,y en el seno de algunas familias de antigua noble-za existen conjuntos apreciables de miniaturas he-redadas.

Se subastó en París la importante colección que

Florentino de Craene. Siglo XIX

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Antonio Maria Esquivel. 1836 Juan Bautista Ugalde. Siglo XIX

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Achille E. Mouret. 1843Eugen Humel. 1870

perteneció a la familia del mariscal Nev, príncipede Moskowa, formada totalmente por miniaturasdesde la época Imperio hasta el comienzo del Ro-manticismo.

Como colección familiar tenemos en España lamuy interesante de la Casa Ducal de Alba, que su-frió algunas lamentables pérdidas.

El señor Ezquerra del Bayo, reunió una muyapreciable colección de miniaturas que en su ma-yor parte tenía depositada en el Palacete de laMoncloa al estallar la guerra de liberación, y fueprobablemente sepultada al derrumbarse éste bajorepetidos bombardeos. No se encontró rastro deellas. La parte restante fue distribuida entre variosadquirientes, y una selección procedente de aqué-lla forma un bello adorno en una señorial man-sión de Palma de Mallorca.

Colecciones importantes formadas por aficio-nados han sido donadas a museos, como la colec-ción Doistau, en el Louvre, y la que figura en laWallace Collection, en Londres.

Famosas fueron las colecciones formadas porel Dr. Propert, Mr. Joseph, baronesa Burdett-

Coutts. Mr. Hawkins, en Inglaterra; Mr. Mimerely Mme. Polès, en Francia; Mr. Warneck, en Viena,y sobre todo, por el número y calidad de buenaparte de ella, la ya mencionada que Mr. PierpontMorgan reunió a principios del presente siglo y sevendió por su hijo en Londres en 1935.

Recientemente se ha vendido la que formó envida un industrial, inteligente aficionado a la mi-niatura francesa, Mr. Weber, de la que no se co•noce catálogo y se dijo obtuvo en venta privadadieciocho millones de francos.

El famoso coleccionista banquero Mr. DavidWeil, aficionado al arte del siglo xviii, reunióunos cuatrocientos esmaltes y otras tantas minia-turas de escuela francesa casi exclusivamente, quecon toda su colección clásica fueron cambiados porun conjunto de arte moderno en condiciones queno se han divulgado, como no se conoce el exactoparadero actual de aquéllas.

En España abundan los poseedores de miniatu-ras, también retratos familiares en buena parte.Por una repentina afición de un industrial catalán,don Rómulo Bosch y Catarineu, se reunió en su

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P. A. Hall. Siglo XVIII

Anónimo español. Siglo XIX

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Francisco Goya. Siglo XVIII M. M. Daffinger. Siglo XIX

posesión en los años 1923 a 1925 la mayoría deestas miniaturas de factura española que existían,a la que añadió muy notables ejemplares de lasescuelas francesa e inglesa.

El procedimiento para la formación de este importante conjunto se pareció mucho al que habíaempleado Mr. Pierpont Morgan para formar elsuyo, habida cuenta del diferente ambiente y valorartístico de los objetos comprados. Al primsro acu-dían con sus ofertas los marchands d'art y algunosparticulares con abundantes ofertas de retratoshasta entonces ignorados y, de igual modo, los deEspaña, más corredores que marchantes, propor-cionaron al señor Bosch un número considerablede miniaturas que éste, con voluntad tan resueltacomo la de Mr. Morgan, adquiría con mínimo re-gateo.

Este conjunto, actualmente en posesión de donJulio Muñoz, contiene el más interesante fondo deminiatura española que existe, tanto al óleo comosobre marfil. Celoso de su colección, el señor Mu-ñoz ha procedido a su catalogación, con lo cualadquirirá mayor valor para el estudio de la minia-tura española, especialmente, con material únicoen calidad y en número, pues contiene más retra-tos que ninguna otra colección del mundo.

Selecta muestra de dicha Colección Muñoz seexhibe en ésta un nutrido grupo de coleccionistasde Madrid y Barcelona, a los que añade con sa-tisfacción el que suscribe una representación delas que reunió, preferentemente de escuelas ex-tranjeras.

Cada una de las exposiciones de miniaturas quese ha celebrado ha contribuido en gran manera adespertar el interés por ellas, al facilitar su cono-cimiento al público no acostumbrado.

La de París de 1906 fue una manifestación quevaloró mucho este objeto de arte en Francia. Porcoincidir con el afán de Mr. Pierpont Morgan porformar una importante colección, se motivó un alzaespectacular de los precios, que no se sostuvocuando tal magnate cesó en sus compras.

Mr. Samuel Redgrave, en su introducción alCatálogo de la Exposición de Londres de 1865, es-cribía: «No parece fuera de razón esperar queeste conjunto conduzca a un más general apreciodel valor de las obras que nos quedan y tienda asu mejor conservación, pues es ciertamente dolo-roso ver cuántas excelentes miniaturas han estadoexpuestas al sol hasta que su color ha sido que-mado por completo, mientras otras han sufrido

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G. Ducker. Siglo XIX Rivero. Siglo XVIII - XIX

igualmente de la humedad (1) o de la ausencia dela más simple protección esencial para obras detan extremada delicadeza. Pero, todavía peor quetodo son las toscas, burdas reparaciones que mu-

(1) En los tiempos modernos hay que lamentar los efectos de laproximidad a la calefacción.

chas han sufrido, destruyendo todo trazo del genioque las caracterizó en su tiempo.»

Hemos de confiar que también esta exposición,organizada por Amigos de los Museos, de gran va-lor artístico, produzca resultados semejantes ennuestro público inteligente y culto.

JOSE A. GOMIS

Las miniaturas que se reproducen pertenecen a las colecciones de la Real Academia

de Bellas Artes de San Terrlaudo, -Museo Romántico de Madrid, a las particulares de laDuquesa de Montoro; Duquesa `Vda. de Salobral de 7'^adrid, a la de los señoresGomis, Tulio Vfuñoz, Jorge Callús, losé 7Yiladonriu, de Barcelona, de Arturo Parera

Mariano Tomás, 7Curt 77enrn1ie, luan farcía Lorna, Juan Lafora CÇarcía,

de .Madrid, Teresa Borra, `Vda. de Cabanyes Ricardo DiezCampaña, Federico Jvfa rés, Jederico Torelló, 7-tilda

7-loéhstiu de Barcelona y Eduardo Salas

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SECCIÓN INFORMATIVA espíritu de modernidad y eficacia, cuyos resultados estána la vista de todos.

La Vanguardia Española, 28-VI-1959

La exposición de fin de curso

de la Escuela de Artes y Ofi-

cios Artísticos vista por los

críticos de Prensa y Radio

En la sede central de la Casa Lonja, así corno en las dis-tintas sucursales de distrito y en los locales del antiguohospital de la Santa Cruz, donde funciona su Conser-vatorio de las Artes del Libro, la vieja Escuela de Artes yOficios barcelonesa tiene instalada su acostumbrada expo-

sición de fin de curso, por la que reitera, una vez más, laeficacia de sus enseñanzas, en las cuales, dentro de la nzásexigente preparación, se da cabida a la rebusca y salida ala iniciativa personal del alumnado.

Por ello no es de extrañar que muchas de las aulas dondeesta manifestación tiene lugar —particularmente, corno esnatural, aquellas donde las facultades individuales puedenmejor manifestarse, pasadas ya las disciplinas primeras—,asuman un carácter mucho menos que escolar para poder

parangonarse con más de una de las colectivas que se acos-tumbra contemplar en las salas de exposición profesionales.Vennos, aquí, las aplicaciones técnicas de la pintura a pro-

yectos murales de decoración, a la cerámica, etc.; las rea-lizaciones en el arte del retablo; las ejecuciones escultóricasen piedra, así conto los estudios del natural, la talla artís-tica de la madera, los proyectos publicitarios, desarrolladoscon ingenio, buen oficio y, en muchos de los casos, reve-lando unas positivas cualidades puestas en vías de rendirtodo aquello de que son capaces. Interesantes son, igual-mente, dentro de su especialidad, los estampados y los dibu-jos de modas, la ebanistería y la decoración de interiores,

la talla del yeso para proyectos arquitectónicos y ornamen-

tación, el estudio de estructuras, etc., todas cuyas seccionesdan razón de un criterio docente al mismo tiempo que am-plio y comprensivo con respecto al temperamento de cadaalumno, exigente y riguroso en lo que se refiere a las nece-sidades técnicas de cada especialidad, dando suelta al sen-tinziento de cada cual sin que ello represente ningún me-noscabo para el oficio correspondiente. Merece señalarseaparte, por su índole especial, la sección del Conservatoriode las Artes del Libro, donde el grabado en todas sus for-mas, la litografía, la tipografía y la encuadernación se ha-llan cultivadas con perfección y gusto inmejorables.

La que fue durante continuados decenios la reserva maspródiga y brillante de nuestro artesanado, como, también,palenque donde se ejercitan en sus primeras armas ntáxi-nzos artistas casi sin excepción, la bicentenario Escuela deNobles Artes (pues tal fue su nombre primitivo) lo que eshoy más que nunca, con renovada vitalidad gracias a laorientación que ha sabido dar a sus enseñanzas la direc-ción del escultor don Federico Marés, quien, entregado contodo su fervor al servicio del cargo que en buena hora lefue confiado, ha suscitado en la veterana institución un

Ayer tarde y con selecta concurrencia tuvo efecto la inau-guración de la exposición de los trabajos seleccionados dela Escuela de Artes y Oficios Artísticos, realizados por losalumnos durante el curso 1958-1959. Se empezó por los delConservatorio de las Artes del Libro, magníficamente ins-talado en la planta baja del antiguo Hospital de la SantaCruz y del cual forman parte como profesores los señoresAlsina, 011é Pinell, Bachs, Tormo, Pla, Commelerán, Soler-vicens y otros. Los visitantes, entre los que se hallaban latotalidad de los críticos de arte barceloneses, recorrieronlas secciones de tipografía, ilustración y encuadernación,admirando los trabajos de composición, estampación y lasbellas encuadernaciones exhibidas, oyendo las explicacionesdel director de la Escuela, don Federico Marés, y de losdistintos profesores y maestros.

A continuación se trasladaron al edificio de la Lonja, don-de se halla la central de dicha Escuela, recorriendo lasdiversas aulas de la misma donde han sido expuestos lostrabajos. Entre los profesores recordamos a los señoresLabarta, Muntané, Carbonell, Sayol, García Morales, Alsinay Cuyás, presididos por el referido director don FedericoMarés. Los visitantes contemplaron con complacencia losmúltiples trabajos de composición decorativa, procedimien-tos técnicos, escultura y talla, policromía y retablo, estam-pados, arte publicitario, artes del mueble, técnica del yesoy distintas clases de dibujo, probatorios de la disciplinaescolástica, del aprovechamiento de los alumnos, muchosde los cuales se hallaban presentes, y de la transformacióny mejora que la Escuela con sus varias sucursales ha con-seguido en estos últimos años, constituyendo un centro deconsiderable importancia en la actualidad.

Diario de Barcelona, 20-VI-1959

Conforme anticipamos en nuestra crónica del pasadolunes, y al igual que en años anteriores, la prestigiosa Es-cuela de Artes y Oficios Artísticos de Barcelona ha clausu-rado las actividades del curso 1958-59 con una nutricia ybrillante exposición de trabajos realizados por sus alum-nos. Amablemente invitados por el director de aquel Cen-tro docente, el ilustre y laureado escultor don Federico Ma-rés, los críticos de Arte de la Prensa y Emisoras localesefectuaron una visita a la sede central de la Escuela, donde,como en sus diversas sucursales, se exhiben los referidostrabajos, en las mismas aulas en que se cursan las respec-tivas disciplinas.

Gentilmente atendidos por el señor Marés y por los pro-fesores de la Institución, nuestro recorrido se inició porla clase de Dibujo Lineal, a cargo del profesor y secretariode la Escuela, arquitecto don Antonio Vega, cuyos alumnospresentan admirables realizaciones, de una pulcritud im-

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pecable y de una precisión perfecta en la reproducción dearquitecturas reales, trazado de perspectivas, levantamientode planos, etc. Pasamos luego a la sala de Dibujo Artístico,que profesan los renombrados pintores don Luis MuntanéMuns y don Antonio García Morales, bajo cuyas expertasenseñanzas está formándose un plantel de futuros artistasque, sea cual fuere el camino que más tarde emprendanlibremente, contarán con el sólido bagaje de un estudioconcienzudo del que nunca habrán de arrepentirse.

La visita continuó luego a través de las aulas donde seexponen los trabajos de Composición Decorativa, Procedi-mientos técnicos, Escultura Decorativa, Modelado Superior,Talla en piedra y en madera, Policromía y Retablo, Técnicadel yeso, Artes del Mueble, Arte publicitario y DecoraciónTextil, cuyo detallado comentario exigiría un espacio deque no disponemos. Digamos sólo que el magisterio de pro-fesores tan acreditados como los señores Labarta, Car-bonell, Bohigas, Serra, Sayol, Alumá y demás que compo-nen el competentísimo claustro docente de la Escuela, que-da evidenciado en las muestras respectivas de la labor desus alumnos, llamados a mantener viva y pujante la tradi-ción de una artesanía inteligente y fecunda, orientada porel criterio de sano eclecticismo conceptual —nunca reñidocon una firme base de adiestramiento técnico— que la Di-rección ha sabido imprimir a todas las enseñanzas.

La visita que glosamos tuvo un magnífico prólogo en lagirada previamente a la Sección de las Artes del Libro,convertida en Conservatorio e instalada espléndidamente,desde el pasado año, en unas amplias dependencias delhistórico edificio del antiguo Hospital de la Santa Cruz.Se exponen allí interesantísimos trabajos de rica y variainspiración y de factura perfecta, correspondientes a lasenseñanzas de grabado xilográfico —a cargo del prestigiosoespecialista don Antonio 011é Pinell— y al aguafuerte, queprofesa don Pla, así como pruebas tipográficas de exqui-sito gusto y piezas de encuadernación artística, realizadascon un auténtico alarde de primorosidad técnica y de di-versidad estilística en la concepción de sus motivos or-namentales. Son profesores de Tipografía y de Encuader-nación don Felipe Bachs y don Hermenegildo Alsina, res-pectivamente.

Una vez más, la exposición de fin de curso de la Escuelade Artes y Oficios Artísticos constituye un balance por de-más elocuente de sus tareas y, sobre todo, de la remozaday dinámica vitalidad adquirida por la vieja «Lonja» desdeque —pronto se cumplirán tres lustros— el espíritu inquie-to y creador, a la vez clásico y moderno, de Federico Ma-rés, supo infundir nuevos alientos y ambiciones a ese cen-tro docente de tan antigua solera ciudadana, asistido porun profesorado eficiente y entusiástico, cuyos talentos ysensibilidad artística son el mejor instrumento de los de-signios pedagógicos de tan esclarecido director.

E. FOYÉIloja del Lunes, 29-VI-1959.

La Escuela de Artes y Oficios Artísticos de Barcelona ex-

pone...

No, así no puedo comenzar; parecería una instancia. Todoaquello de «acude y con el debido respeto», o «conto mejorproceda», vendría solo. Lo que yo me proponía decir es

que el alto centro docente que dirige el maestro Marés,ilustre escultor y prócer mecenas, expone sus trabajos defin de curso.

Es ésta tina noticia de todos los años en igual tiempo.Pero tenía ganas de comentarla alguna vez. Hace tiempoesperaba la oportunidad de hablar de la labor eficiente

de la Escuela. Casi todo el inundo la conoce; más, quizá,por su nombre —o apodo— antiguo: la Escuela de «Llotja ».Pero, así y todo, siempre hay quienes no tienen idea, ypor la actualidad de la noticia ésta puede ser motivo decontento.

Los periodistas estamos siempre atareados. No nos queda—desgraciadamente— mucho tiempo para dedicarlo a vi-

sitar exposiciones, ni instituciones cono ésta que da gloriaal país y es orgullo —desde 1775, en que se fundara— de laciudad.

Por sus aulas ha pasado lo mejor de nuestra historiaartística. Picasso, Viladomat, Campeny, Fortuny... y hastaun santo: el padre Claret. El profesorado ha sido siempreescogido entre lo mejor de la tierra. Basta, cono botónactualísimo de muestra, citar algunos nombres, conzenzan-do por el secretario César Martínez, siguiendo por el pres

-bítero Ferrando Roig y por los nonzbres igualmente ilustresde Subías, Cortés, Marsá, Bachs, 011é Pinell, Solervicens,Olivar, Verrié, Pérez Dolz, Garrut, Labarta García Mo-rales, Alsina, Muntané, etc.

Por sus aulas —repito— ha pasado y pasa lo mejor delpaís. Muchos de los alumnos de hoy —en Dibujo artístico,en Historia y Técnica del Libro, en Artes Decorativas, en

Grabado, etc.— serán mañana famosos. Como quien nole da importancia, Marés y sus colaboradores realizan unalabor sin propagandas, pero eficacísima, continuadora delprestigio que ha tenido siempre la «Llotja ». Y sin ánimode rebajar en nada el pasado, sin afán de sacar las cosasde su quicio, me atrevería a decir que ahora, incluso, se

ha superado. Cada año es más importante la exposiciónde fin de curso.

O exposiciones, porque actualmente la Escuela no tienebastante con la central, instalada en la antigua Lonja. Sieteotros centros, en distintos sectores de la ciudad, contribu-yen a facilitar el acceso a sus aulas a gente que, de otro

modo, debiendo trasladarse a la central, encontrarían mu-chas dificultades.

He dicho antes y se me ha ido el santo al cielo —que essu sitio— que los periodistas no tenemos tiempo para visi-tarla. Sólo de tarde en tarde, como en estos días en queen cada una de sus aulas hay exposición de fin de curso—hasta el 30—, podemos permitirnos una escapada. Y cadaafeo son mayores y más numerosas las sorpresas. Pareceimposible que una ciudad que vive del negocio y para elnegocio sepa hacerlo, también, por y para el arte en todassus manifestaciones.

Pero si uno no va a la Escuela —que bien lo necesitaríaen cualquiera de las acepciones posibles—, ésta viene a

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buscarle periódicamente. A la exquisita y fina atención deldirector, el laureado académico y arraigo Marés, debo reci-bir, como un mensaje espiritual, la revista «Ensayo»—aunque se llame modestamente Boletín—, órgano de laEscuela. Se trata —dígolo a punto y seguido porque meurge— de una de las publicaciones más importantes deuna ciudad que las tiene, en todos conceptos, rneritísimas.«Ensayo» es algo aparte, algo «diferente» para decirlo conel estilo nuevo que ha agotado todos los adjetivos.

Tirada en papel «couché» y tipográficamente perfecta,ella sola se recomienda por el aspecto. Pero hay que añadira la presentación material un contenido único, tanto por lacalidad excepcional de sus trabajos —ya se, comprende,dado el prestigio del profesorado que la redacta—, contopor las reproducciones en grabados, fotografías, etc. Cada

cuaderno es un pequeño tratado de arte, cada número unajoya bibliográfica. Yo rne deleito leyéndola y «inirant sants ».Es, también, una constante exposición como éstas de finde curso que me he permitido recomendarles a ustedes.Cuando hayan ido dirán y me lo agradecerán:

—¡Lo que me habría perdido! Realmente, Barcelona, porsólo esto, puede doblar campanas de gloria.

BUSQUETS MOLAS

El Correo Catalán, 26-VI-1959

Con motivo de la clausura de curso hemos visitado elConservatorio de las Artes del Libro, instalado en el ex-hospital de la Santa Cruz y San Pablo y la Escuela de laLonja, invitados gentilmente por el director de ambas em-presas culturales, don Federico Marés. En verdad, las dosinstituciones rinden espléndidos servicios a la nación. ¡Quéprofundas emociones se siente tacteando (porque el arteentra, a veces, por el contacto de los dedos) la piel de loslomos o de las tapas de esas encuadernaciones dirigidaspor ese mago llamado Alsina, maestro de maestros quelucha por conservar una técnica, difundiéndola entre sus

discíplos: y los asombrosos grabados de la clase de 011éPinell, Pla, que exigen una exposición por sí solos: o losbellos trabajos tipográficos de los alumnos (y alumnas)del profesor F. Bachs Mensa, que nos devuelve el viejosabor artesano de una página bien compuesta. A los escri-tores yo les aconsejo visiten esta exposición: amarán asu trabajo con más fuerza después de ver lo que es un librobien hecho.

En cuanto a la Escuela de la Lonja, bajo la dirección declon Federico Marés ha adquirido una trayectoria concordecon nuestro tiempo. Sin renunciar al dibujo artístico, susprincipales enseñanzas se orientan hacia un arte utilitario:decoración, cartelismo, mobiliario, yeserías, esmaltes, poli-cromado para la estatuaria, decoración textil, vaciado...Todo un universo de abejas rumorosas parecen los alumnostrabajando bajo la pauta serena de unos maestros quetraspasan sus experiencias a las nuevas generaciones: quesalvan una sabiduría de siglos en honor de la santa, de lasagrada continuidad.

Felicitamos públicamente a don Federico Marés por estalabor abnegada y heroica: entre sus muchos quehaceresencuentra un hueco para derramar su generosa personalidaden estas empresas donde se alían la artesanía, la inteligen-cia y la cultura.

RAFAEL MANZANORadio Nacional de España, 26-VI-1959.

ANTE EL TRICENTENARIO

DEL TRÁNSITO DE VELÁZQUEZ

La Escuela Superior de BellasArtes de San Jorge

Acaece en el próximo 1960 el tercer centenario de lamuerte del mayor pintor de todos los tiempos, don DiegoVelázquez de Silva, acontecimiento que será objeto en todaEspaña de condigna conmemoración. A la misma no podíadejar de añadirse nuestra ciudad, donde tan vivo y activoes el sentimiento artístico de las gentes y donde tan esti-mada es la pintura, a la cual ha dado Barcelona ilustrescultivadores que en cl maravilloso genio del pintor de Fe-lipe IV han encontrado el más alto ejemplo para su propiacreación.

Han sido anunciados ya diversos actos que tendrán lugaren nuestra urbe con motivo de dicho aniversario. Entrelos mismos, han de revestir extraordinario relieve los quele ha de dedicar la Escuela Superior de Bellas Artes deSan Jorge, tan atenta a la puesta en valor de las aptitudesde su alumnado, que por obra de sus expertos profesoresy dirección realiza una labor provechosísima para el encau-zamiento de las jóvenes vocaciones.

Para celebrar dicho tricentenario, la Escuela ha invi-tado a distintos ilustres especialistas a ocupar su tribunapara glosar la obra del magnífico pintor. Al mismo tiempo,en forma de cursillos especiales, su cátedra de Historiadel Arte desarrollará un ciclo de conferencias alusivas atemas y aspectos velazqueños dedicados a sus discípulos.En estos cursillos se proyectarán por primera vez intere-santísimas transparencias en color, que han sido adquiri-das al efecto por la Escuela.

La Escuela de Artes y OficiosArtísticos

Organizará durante el próximo semestre de 1960, un ciclode conferencias y cursillos, con proyecciones en color, enrelación con los antecedentes históricos anteriores a la obradel gran maestro y dedicando particular atención a lavida y el arte de Velázquez.

En la central y en las secciones sucursales, disertarán,respectiva y sucesivamente, los profesores Subías, Olivar,Marsá, Cortés y Verrié.

Se revestirá de la mayor importancia dichos actos con-memorativos y asistirán a las conferencias de las seccio-nes urbanas los directivos de la Escuela y el profesoradode la Central.

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Decretos del Ministerio de

Educación Nacional B. O. del

Estado

Don Federico Marés fue nombrado presidente de lostribunales de oposición para profesor de Litografía, Es-tampación Tipográfica y Restauración del Libro, vacantesen la sección del Conservatorio de las Artes del Libro, dela Escuela de Artes y Oficios Artísticos, y la de Grabadode la Escuela Superior de Bellas Artes de San Jorge.

Y vocales de los respectivos tribunales mencionados:Luis Muntané, Hermenegildo Alsina, Felipe Bachs, JuanSolervicens, Juan Subías, Antonio 011é Pinell, Marcial Oli-var e Inocencio Soriano.

Nombramientos Oficiales

Nuestro querido compañero, el ilustre crítico de artedon Juan Cortés, tras brillantes oposiciones realizadas enMadrid, acaba de ser nombrado profesor de Iniciación alEstudio de la Historia del Arte, en esta Escuela.

Su reconocida competencia, su larga labor en el estu-dio de la Historia de las Artes, sus desvelos en favor delos artistas jóvenes, su inteligencia, su trato y su com-prensión humana, acreditan por anticipado los resultadosque la Escuela y los alumnos habrán de recoger de suejercicio profesoral.

Don Antonio 011é Pinell, nuestro compañero del Con-servatorio de las Artes del Libro, donde profesa Gra

-bado ha triunfado nuevamente en Madrid, tras premiosasy reñidas oposiciones, ganando la cátedra de Grabado denuestra Escuela, Superior de Bellas Artes. Huelga decirque los brillantes resultados de su labor artística y peda-gógica en la Escuela de la Lonja, en su filial del Conser-vatorio, son garantía más que suficiente para justificarlos éxitos pedagógicos del mismo en nuestro primer Cen-tro docente del Arte.

En recientes oposiciones . realizadas en Madrid, don JuanCommelerán ha logrado alcanzar un rotundo éxito en lamateria de su especialidad, la litografía, adscrita al Conser-vatorio de las Artes del Libro de nuestra ciudad; al auguraral señor Commelerán los más rotundos éxitos en sus ense-ñanzas y prácticas pedagógicas, nos es grato destacar losconocimientos de nuestro compañero en la técnica y elArte que ya heredara de su padre, gran maestro en el ejer-cicio de la misma.

Enrique Tor izo Freixes, tras una brillante oposición ce-lebrada en Madrid, fue proclamado profesor de Estampa-ción Tipográfica con destino al Conservatorio de las Artesdel Libro, filial de esta Escuela. Sus ejercicios, con aporta-ciones y realizaciones, de notable perfección y carácter,confirmaron una vez más la preparación idónea de nuestrocompañero, persona que, a su competencia, une su ex-

tensa relación con el sentir de las Artes Gráficas de suciudad.

Para el desempeño de la cátedra de Pedagogía del Di-bujo en la Escuela Superior de Bellas Artes de San Jorge,ha sido nombrado don Rafael Santos Torroella, personaidónea por su formación y sus dotes de conferenciante,para profesar una tan importante disciplina. Sus trabajosartísticos, su erudición y su talento permiten augurar óp-timos resultados en beneficio del alumnado de nuestra Es-cuela Superior.

Por oposición celebrada en Madrid ha sido nombrado,después de realizar unos interesantes ejercicios, profesorde Modelado y Vaciado de nuestra Escuela don Tomás Bel.

Mediante oposiciones celebradas en Madrid, don JesúsVallina acaba de ser nombrado profesor de Restauracióndel Libro.

El nuevo profesor cursó sus estudios en el Laboratoriode Restauración de la Biblioteca Central.

En el año 1948, la Diputación le concedió una beca corno

ampliación de conocimientos en el Instituto de Patologíadel Libro, de Roma, bajo las órdenes del profesor donAlfonso Gallo.

Actualmente desempeña el cargo de jefe de Laboratoriode Restauración de la mencionada Biblioteca Central y deprofesor de Restauración de Impresos y Manuscritos de laEscuela de Bibliotecarias de Barcelona, de la Excma. Dipu-tación de Barcelona.

De su gran competencia confía el Conservatorio de lasArtes del Libro una fructífera labor pedagógica.

Distinciones al profesorado

La Hispanic Society of America, de Nueva York, fun-clada por el ilustre hispanista Mr. Huntington, acaba dedistinguir a nuestro director don Federico Marés con elnombramiento de miembro correspondiente de tan presti-giosa entidad.

En un céntrico restaurante de nuestra ciudad celebróseun agasajo íntimo al profesor de Historia y Técnica delLibro en nuestra Escuela, nuestro querido compañero

don Juan Bta. Solervicens. Organizaron el acto los concu-rrentes a la tertulia de bibliófilos habitual en el establecí-miento que posee en la calle de Boters el culto libreroanticuario don José Sala Badal. Con éste, que en términossentidísimos ofreció el ágape, sentáronse en la presidencialos ilustres historiadores doctor don José Senabre, pbro.,archivero del Obispado, y doctor don José Gramunt, genea-logista, notario del Colegio de Barcelona quién pronuncióun brindis rebosante de cordialidad. Asistieron al acto,sosteniendo el interés con constantes comentarios relativos

a libros y ediciones, el docto bibliógrafo italiano don EnzoFerrajuoli, el eximio maestro encuadernador señor Bruga-1/a, y los distinguidos bibliófilos señores Alvarez Arbiol,

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Joan Oliveras, Moragas, Mañosas, Cirera, Pujol, Pach, Pa-ïzella...

Don Juan Bta. Solervicens contestó al afecto de todos conpalabras llenas de agradecimiento y de emoción.

La Escuela, profesores y alumnos se suman al merecidohomenaje dedicado al compañero tan querido y admiradode todos.

La Sociedad de Arqueología del Sur de Francia ha dis-tinguido a nuestro compañero J. P. Verrié con la conce-sión de la medalla de colaborador.

Cuando ya en prensa este número de ENSAYO correspon-diente a Navidad, nos enteramos del homenaje que un

grupo de antiguos alumnos dedicaron al profesor de estaEscuela Lonja D. Francisco Labarta.

No podía nuestra revista silenciar tan grata noticia, la-mentando tan sólo que no llegara la información a tiempopara dedicarle el espacio que merece. Es de lamentar, noobstante, que la comisión organizadora del homenaje nohubiere puesto en conocimiento de la Escuela, para quelos compañeros y amigos hubieran tenido ocasión de su-marse a los actos celebrados en su honor.

Ha sido nombrado por la superioridad, a propuesta dela Dirección, secretario de la Escuela a D. Antonio VegaCasas, en sustitución de D. César Martinell, que ha cesadoen el cargo por jubilación. De la actividad del nuevo se-cretario mucho confía y espera la Escuela, la que se con-gratula y hace votos para que su labor sea fructífera enbien y provecho de la enseñanza.

Actividades del personal

docente

Don Juan Subías pronunció una conferencia en el Salónde Actos de la Escuela Superior de Bellas Artes, dedicadaa comentar con proyecciones el viaje de becarios que laEscuela realizó a Italia, en el nies de septiembre. El niisntoprofesor acompañó a un grupo de estudiosos de la pin-tura medieval en visita contentada al Museo Catedralicio.

Corrió a cargo del mismo profesor de la Escuela Supe-rior de Bellas Artes y de la Lonja, el acompañar y explicarel Museo Románico Gótico de Montjuich, a los profesoresy alumnos de la Escuela de Artes y Oficios de Valencia, ensu viaje de fin de curso.

Con anterioridad, el mismo profesor les había hecho co-nocer los valores que, para el conocimiento de la evolu-ción de la plástica hispana, contiene, cronológicamente or-denados, el Museo Marés.

Nuestro compañero don Antonio García Morales fuenombrado miembro del Jurado de Pintura de la III Bienalde Arte de Montblanc, de este año 1959.

El profesor de Teoría del Arte, don Angel Marsá, ensu competente labor artístico-literaria, ha pronunciado va-

liosísimas conferencias, entre las que se destacan las si-guientes:

«Panorama de la pintura catalana actual», en el CírculoCatalán de Madrid. «Homenaje a Ciará», en el Real Círcu-lo Artístico de Barcelona. «Teoría del nuevo estilo», en elCírculo de Bellas Artes de Lérida. «Afirmación y negacióndel arte abstracto», para el Club de Estudiantes de PuertoRico, en la Casa Americana de Barcelona. «La vida artís-tica en Barcelona», lecciones para el cursillo de Guías eIntérpretes oficiales de Barcelona. «El dibujo infantil», enel Instituto Municipal de Educación de Barcelona. «Lastendencias estéticas de nuestro tiempo», en la Casa de

Cultura de Sabadell. «Formación estética en las escuelas»,en el cursillo de verano del Servicio Español del Magis-terio, en Barcelona.

Aparte de su densa y acreditada labor literaria y pe-riodística en pro del arte, ha formado parte de varios

jurados, tanto artísticos como literarios; entre ellos sedestacan los siguientes:

Artísticos: de originales para christmas, en Tarragona;III Bienal de Arte de Montblanch; premios «Sitges» depintura; IV Concurso Provincial de Arte de la Excma. Di-putación Provincial de Gerona; I Salón de Noviembre deBarcelona; concurso de pintura y escultura del CírculoArtístico de «Sant Lluc »; certamen literario de Ntra. Se-ñora de Port; premios de Novela, Teatro y Poesía de la«Fundación March »; premio «Ciudad de Barcelona» denovela, etc., etc.

El profesor de Procedimientos de Ilustración del Libro,don Jaime Pla Pallejá, realiza una brillante campaña desdeel año 1957 en el Conservatorio de las Artes del Libro.

Reconocida es su competencia en las artes del grabado

calcográfico, especialmente dedicado a la ilustración dellibro. Su evidente maestría puede seguirse a través de lasobras por él editadas o dirigidas. Entre ellas destacan«Coses benignes », de Ruyra (Rosa Vera, 1945); «20 Tan-kas», de Carles Riba (Rosa Vera, 1945); «La Malvestat d'O

-riana», de J. Carner (Rosa Vera, 1953); «Viaje a la Alca-rria», de C. J. Cela (Papeles de Son Armadans, 1958), etc.

Su capacitada labor artística ha sido premiada condiferentes galardones, como el 1 cr premio de grabado enla Exposición Municipal de Bellas Artes de Barcelona(1953); premio del gobierno de Cuba en la II Bienal His-pano-Americana (Santiago de Cuba, 1953); 1.0< premio deEx-libris para la Biblioteca de los Museos de Arte de Bar-celona (1956), etc. Ha realizado una quincena de exposi-ciones de sus obras en el curso de su vida artística, asícomo la confección de un tratado de las técnicas del gra-bado calcográfico, publicado por la Editorial Gustavo Gilien el año 1957.

El señor Tormo pronunció durante su reciente estanciaen Madrid, una conferencia en la Escuela Nacional de ArtesGráficas, a petición de sus directivos, desarrollando el tema

«Técnica de Estampación Xilográfica», siendo aplaudido yfelicitado por alumnos y profesores de aquel Centro.

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BIBLIOTECA

C. BARGES. — Guía del maquinista tipógrafo. Ed. Gus-

tavo Gili, 1959.

Desde hoy engrosa nuestra biblioteca esta reciente edi-ción, sumamente útil para los alumnos del Conservatorio delas Artes del Libro, en particular para los que cursan laespecialidad de Arte y Técnica Tipográficos.

C. Bargés, experto conocedor y práctico en la estampa-ción tipográfica, expone a través de los treinta y sietecapítulos en que divide la obra, de modo sencillo y claro

hasta los más ínfimos pormenores, enseñando lo que pu-diéramos llamar secretos del arte de imprimir.

En esta obra, especialmente concebida para los ya ini-ciados en las técnicas de la estampación tipográfica, encon-trarán los interesados en este arte datos valiosos, para elejercicio de su cometido, especialmente en los enumeradosen la IV Parte de la obra, algunos de los cuales es menesterinsistir, como lo hace el autor, para sacar el máximo ren-dimiento de las modernas máquinas tipográficas. Felici-temos desde aquí, por medio de estas breves líneas, elacierto de Editorial Gili por la publicación de esta clase deobras de alto valor pedagógico que, además del interés queencierran, están pulcramente editadas.

Este undécimo número de "ENSAYO", Boletín de la Escuela de Artes

y Oficios Artísticos de Barcelona, fue proyectado y confeccionado en la

clase de Artes del Libro de la Escuela, y se terminó de iu l rimir en

la víspera de la Natividad del Señor de 1959