1. Tipos de consumibles

Se entiende por consumible aquel elemento que acaba agotándose y que hay

que cambiar. Son elementos que una vez agotados no pueden seguir realizando

su función, pero no inutilizan el sistema.

1. Consumibles de impresión

En este grupo incluimos el contenedor del producto impresor (tinta, tóner, cera,

etc.) y el medio en el que se escribe (papel, etiquetas, etc.).

La gama de consumibles es muy amplia. Los principales tipos de cartuchos y

carretes para imprimir son:

Cartuchos para impresora de inyección de tinta

Cartucho tóner para impresora láser

Cartuchos para impresora de tinta sólida

Carrete para impresora matricial

Carretes para impresora de sublimación de tinta

Carrete para fax

En cuanto al medio de impresión, lo habitual es imprimir sobre papel tipo folio,

pero existe una gran variedad de tipos de papel. Además del papel, otro medio

para imprimir son las etiquetas y los sobres.

2. Consumibles de energía

Los consumibles de energía se utilizan para subministrar electricidad a un

componente del sistema para su funcionamiento. Entre otros, serían las pilas y

las baterías.

Los portátiles vienen equipados con una batería que se utiliza para que puedan

funcionar de forma autónoma, sin necesidad de estar conectado a la corriente

eléctrica.

La batería está compuesta por celdas donde se almacena la energía. Por regla

general, a más celdas más duración. Existen diferentes tipos de baterías, pero las

más utilizadas en la actualidad son las de iones de Litio. Las pilas son utilizadas

para los dispositivos inalámbricos.

3. Consumibles de información

Los consumibles de información son todos aquellos soportes que se utilizan para

almacenar datos (cd, dvd, pen drive, tarjeta de memoria.).

2. Medidas de conservación y reciclaje de consumibles

1. Conservación de consumibles de impresión

Los cartuchos y carretes se venden precintados y envasados al vacío. La bolsa

que resguarda el cartucho lo protege de la humedad y, en la medida de lo posible,

del calor.

El cartucho solo debe desprecintarse y sacarse de su bolsa cuando vaya a ser

utilizado. No hay que esperar a que el cartucho se esté acabando para

recambiarlo, ya que cuanta menos tinta quede más fácil se seca.

No desmontes el cartucho, y menos aun cuando esté colocado en la impresora o

tenga tinta. En cuanto a los medios de impresión, antes de utilizar uno en una

impresora determinada hay que verificar que ese medio es compatible con el

tipo de impresora.

La conservación del papel tiene que ver sobre todo con la humedad y el calor.

2. Medidas de reciclaje de consumibles de impresión

En cuanto a los cartuchos y carretes, aunque sean de uso único, se pueden

reciclar. Todos los cartuchos que se reciclan se venden posteriormente a los

fabricantes o a otras empresas para que los rellenen y se vendan de nuevo,

reutilizando el mismo contenedor, con lo que se hace un gran trabajo a favor del

medio ambiente. Los cartuchos reciclados son más baratos que los originales y

ofrecen prácticamente las mismas garantías.

Para algunos modelos de cartucho el proceso de reciclaje es más complejo e

incluso puede exigir resetear su circuito.

3. Conservación de consumibles de energía

Una batería bien tratada puede durar muchos años, mientras que si se descuida

desde el primer día podría no llegar al año. Antes de usas por primera vez una

batería es recomendable cargarla por completo y durante las siguientes cinco o

seis recargas esperar a que se descargue por completo. De esta manera

conseguimos que la batería se adapte a sus niveles máximos y mínimos.

Es importante no agotar la batería ni tampoco guardarla cuando está cargada

completamente, pierde eficiencia. Un aspecto importante en la conservación de

baterías y las pilas es la limpieza de conexiones. Para limpiarlas utilizaremos un

paño impregnado en alcohol o disolvente específico.

Hay que evitar conectar la batería si existen humedades en los contactos, ya que

se podría producir un cortocircuito. Las pilas y las baterías se depositan siempre

en puntos de recogida específicos.

4. Conservación de consumibles de información

El mayor desgaste que tienen los soportes ópticos es el físico. Si el disco no se

protege es casi seguro que acabará rayándose y se perderá toda la información

guardada en él. Hay que mantener los discos en sus cajas o fundas cuando no los

utilicemos.

La suciedad, el polvo, las fuentes de calor o el exceso de luz son solo algunos de

los factores que influyen negativamente en su vida útil. Limpiar un disco con

productos inadecuados puede acabar dejándolo inutilizable.

Los discos magnéticos no son tan frágiles físicamente y aguantan mejor el calor

y la humedad, sin embargo, hay que alejarlos de los campos eléctricos ya que

podrían borrarlos o inutilizarlos.

5. Conservación de consumibles de información

En España hay empresas como Cederika o Blipvert que se encargan de realizar la

recogida selectiva de discos.

En los disquetes, la carcasa puede tirarse al contenedor amarillo pero el interior

del disco no es reciclable directamente, hay que llevarlo a un punto de recogida

selectiva o al Punto Limpio.

3. Procedimientos de substitución de consumibles

1. Substitución de cartuchos y carretes

Los cambios de cartucho son bastante limpios y sencillos, pero aun así es

conveniente realizarlos con unos guantes, ya que las manchas de tinta son

bastante escandalosas y difíciles de quitar. La substitución de los cartuchos de

tinta debe hacerse cuando la impresora lo indique. Para substituir un cartucho

de tinta es necesario que la impresora esté conectada a la corriente.

En el caso de las impresoras láser, el cartucho de tóner es más voluminoso y no

va colocado en ningún cabezal. El reemplazo consiste únicamente en abrir la

tapa, sacar el cartucho vacío y meter el cartucho nuevo. Para substituir el

cartucho de tóner no es necesario que la impresora esté conectada a la corriente.

Un mismo cartucho puede servir para diferentes modelos de impresora. En las

especificaciones del cartucho se facilita una lista con las compatibilidades.

2. Sustitución de pilas y baterías

La mayoría de los dispositivos que funcionan mediante pilas o baterías

incorporan un medio para avisar al usuario de un nivel bajo de energía. El

reemplazo de pilas y baterías debe hacerse siempre con el dispositivo apagado y

desconectado de la corriente.

Mezclar pilas nuevas con gastadas provoca que las nuevas se desgasten más

rápido y, al final, el rendimiento es menor y la solución más cara.

3. Alimentación de papel y etiquetas

La capacidad de las bandejas de alimentación de los dispositivos de impresión es

limitada y, en consecuencia, habrá que aprovisionarlas cuando se vacíen.

En aparatos que tengan la bandeja interna habrá que extraerla para colocarlos.

No es necesario que estén conectados a la corriente para poder realizar esta

operación.

No hay que sobrepasar la cantidad máxima de alimentación recomendada por el

fabricante del dispositivo de impresión.