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La Paz, octubre de 2012 Página Periódico mensual Diciembre 2012 Qollasuyu Bolivia Año 6 Número 76 Edición electrónica El Zapatismo, ¿otro indianismo? Los pueblos indígenas tuvieron siempre experiencias desastrosas con los movimientos armados de izquierda. ¿El zapatismo en México será una excepción a esta regla? ¿Podrá abrir paso a una concepción más integrada y armónica entre los diversos actores sociales de un país?

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La Paz, octubre de 2012 Página

Periódico mensualDiciembre 2012QollasuyuBoliviaAño 6Número 76

Ediciónelectrónica

El Zapatismo, ¿otro indianismo?Los pueblos indígenas tuvieron siempre experienciasdesastrosas con los movimientos armados de izquierda. ¿Elzapatismo en México será una excepción a esta regla? ¿Podráabrir paso a una concepción más integrada y armónica entrelos diversos actores sociales de un país?

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La Paz, octubre de 2012 Página

Depósito legal 4-3-116-05

e-mail:[email protected]

www.periodicopukara.com

Teléfonos: 7151904871280141

Calle México Nº 1554, Of. 5La Paz, Bolivia

Director:Pedro Portugal MollinedoComité de redacción:Nora Ramos SalazarDaniel Sirpa TamboPaúl Coca SuárezCarlos GuillénFélix Chambi

Colaboran en este número:Mauricio Mamani PocoacaDavid Ali CondoriOdin Ávila RojasPedro Hinojosa PérezAuireliano Turpo Ch.Jorge Calle EspinozaAntonio Alipaz

Candidatosindígenas

Portada: Dibujo extraído de: http://laotratijuana.blogspot.com/

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Lo triste es quequedensacrificados losvalores yprincipios,necesarios parauna verdaderatransformación.

¿SOCIALISMO COMUNITARIO, ELHORIZONTE DE NUEVO ESTADO?

Mauricio Mamani Pocoaca

El 7 de octubre del presente año en Cambio-Reportajes: GarcíaLinera, se refería a una nueva alternativa, el socialismo comunitario,el horizonte de nuevo Estado para el sector agropecuario tradicionaly decía: “La comunidad agraria, caracterizado por el trabajo encomún, se constituye como el pilar principal del socialismocomunitario, horizonte trazado por el Gobierno Nacional para elEstado en construcción, y como la cúspide del actual modelo deeconomía popular”. Si esas son las intenciones del Estado Pluri-nacional; pues, es un gran engaño al pueblo y es engañarse a símismo. En la actualidad, estamos viviendo en un periodo de purodiscursos y anuncios de proyectos que es la canción de moda alcompás de millones; pero la realidad es totalmente diferente. Lossueños del comunitarismo es un pensamiento retrógrado y eshistoria del pasado.Hoy, el mismo Estado destruye la supervivencia del comunitarismo

con su programa de Saneamiento de Tierras por intermedio delInstituto Nacional de Reforma Agraria, INRA. El término es hastamal aplicado. “Sanear un campo consiste en desaguarle porcanalizas descubiertas. Avenar un terreno es hacer desaparecersu humedad con el auxilio de tubos subterráneos; es perfec-cionamiento, que permite la producción en la superficie ocupadapor los desaguaderos, no es moderno, los antiguos hacían uso deél; mas el empleo de tubos de barro, que constituye, por decirloasí, la característica del drenaje moderno, es de reciente invención,como se puede ver en el capítulo primero de esta obra”. Así lodefinía el Ingeniero Albert Larbalètrier en su Manual Práctico deSaneamiento de las Tierras de Labor en 1852. Por lo visto nadatiene que ver con la reterritorializacion y la llamada “titulación detierras” en las comunidades originarias.La Ley INRA, durante la época del gonismo fue considerada como

una de las leyes malditas, costó varias vidas de los campesinos enlos bloqueos de caminos y hoy es la verdadera maldición de Gonial campesinado, en especial al sector tradicional andino. El 24 demayo de 2012 los campesinos de Jach´a Suyu Pacajaqi, presentaronal Presidente constitucional del Estado Plurinacional la solicitud desuspensión del Saneamiento de Tierras. En su contenido decían:“Hoy en nuestras propias tierras o territorios sufrimos una infinidad

de abusos con el Saneamiento de Tierras, en nuestras comunidadesestá generando conflictos o enfrentamiento entre hermanos, entrefamilias, entre comunidades, etc., por otro lado los encargadosdel saneamiento están cobrando exageradamente el dinero la sumade 3.000 hasta 6.000 bolivianos por cada parcela, es una imposiciónautoritaria al cual consideramos nuevo despojo de tierras, apenasvivimos en surcofundio y tenemos una vivencia de miles de añosen posesión ocupando nuestros territorios ancestrales.Señor Presidente, para evitar enfrentamientos entre hermanos y

el cobra abusivo de dinero ilícito solicitamos a su autoridad que selevante y se anule el saneamiento de tierras en los territoriosoriginarios milenarios y así mismo se respete los documentosancestrales, coloniales y otros documentos de propiedad”.A pesar de esta solicitud INRA continúa destruyendo la unidad

familiar y subdividiendo las comunidades y fomentando el minifundioimproductivo en las comunidades del altiplano. Los conflictos entrefamiliares, entre padres e hijos, e incluso entre comunidadesvecinas están de moda. De esta realidad sus autoridades en lascomunidades se aprovechan en cosechar dinero de sus bases cono sin motivo.INRA, el Instituto Nacional de Reforma Agraria, para el campesinado

es una enfermedad incurable, la tierra esta fraccionalizada y en elfuturo no habrá producción como antes, y la migración campo -ciudad aumentará; porque no existe otra alternativa. Esas actitudesdestructivas hacen pensar que el Estado Plurinacional es enemigode los campesinos altiplánicos del occidente y de los indígenas deloriente.

Hace pocos años, la noticia deque la indígena quechua SabinaCuellar se presentaba comocandidata a la gobernación porChuquisaca, aliada a las fuerzasconservadoras contrarias a EvoMorales, provocó revuelo yescándalo entre los militantes deizquierda. Era la época en que,según esas personas, el indiosólo podía tener un aliado: elMAS. Desde entonces mucha agua

corrió bajo esos puentes. Elpartido de gobierno rompió convarios de sus más destacadosmilitantes indígenas, acusados unos de borrachos, otros decorruptos y alguno de orate. Se reprimió a indígenas en Caranavi.Hubo muertos en enfrentamientos con mineros quechuas y, quedarádestacado en los anales históricos el enfrentamiento entre elgobierno y los indígenas del TIPNIS. En este contexto, el hecho de que en las próximas elecciones

para gobernación en el Beni el MAS no tenga un candidato indígena,ya no es noticia relevante. Aunque sí es digno de análisis que unindígena, Pedro Nuni, se presente como candidato opositor,apoyado por el ex aliado del MAS, el Movimiento Sin Miedo. El partido de gobierno enfrentará a ese indígena y al candidato

de la unión de la oposición, Carmelo Lens, con su candidata quees una ex reina de belleza, la Miss Jessica Jordán, quien ademásde representar la artificialidad y el racismo subyacente en Boliviaen esos certámenes de belleza, es una hacendada e integrantede la oligarquía regional en ese departamento. ¡Cómo han cambiadolas cosas en tan pocos años! Estas elecciones en el Beni prefiguran las próximas elecciones

generales en Bolivia. Evo Morales ha desgastado la legitimidad delindio como candidato. Ya no le servirá a él, en el caso más queprobable de que se presente a la reelección, su naturaleza indígenapara asegurar votos. Tampoco es factible que a un indígena opositorle sirva de pedestal esa sola condición. Lo determinante se jugará en la manera cómo se articulen alianzas

y coaliciones. De parte de los indígenas se abre la posibilidad derelacionarse con aquellos sectores que la ideología gubernamentalanatemizaba y execraba. De parte del gobierno continuará suapertura hacia los sectores que antes presentaba como suscontrarios y enemigos. Lo triste, en esta lógica, es que quedensacrificados los valores y principios, indispensables para unacorrecta gestión, y sobre todo para una verdadera transformación.

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El libro «Los dilemas de la minería»:

El indígena como realidadeconómica transformadoraPedro Portugal Mollinedo

1 Los dilemas de la minería. Henry Oporto (ed.). Fundación Vicente Pazos Kanki.La Paz, 2012.

La presentación pública se realizó el martes 27 de noviembre, a horas 19:00 enel Salón Illimani del Hotel Radisson, La Paz.

Recientemente fue presentado el libro “Los dilemas de la minería”1.Este libro propugna ideas novedosas para entender por qué lo que enBolivia debería ser una avenencia en la bonanza económica, se haconvertido en un conflicto. Henry Oporto, en el citado libro, señala lafatal disyuntiva que parece asechar: “…o se persiste en un caminodestructivo que hará retroceder por décadas a la minería, convertidaapenas en una actividad que languidece, o se da un golpe de timónpara reencauzar el desarrollo minero hacia el desafío de la competitividady la modernización, en el marco de una nueva política sectorial…”.Ese necesario “golpe de timón” para que sea eficiente debe ser

entendido desde diversas perspectivas. El libro indicado publica unartículo mío, bajo el título de “Comunidades Indígenas y ExplotacionesMineras”, que busca aportar desde un ángulo sociológico e histórico aese objetivo común. En ese espíritu, me parece importante desarrollary profundizar algunos elementos implícitos en mi citado artículo.Lo primero es determinar la naturaleza de los conflictos que las comu-

nidades protagonizan en relación con la minería. Los medios de comuni-cación, desde hace mucho tiempo, nos informan de tomas e interven-ciones de minas privadas por parte de comunidades. Los conflictosentre mineros asalariados del Estado y mineros cooperativistas,presentan también otro enfoque de una misma evidencia: En Bolivia, lapoblación de origen indígena, sea esta habitante de comunidades ointegrante de un sector productivo estatal o privado, no manifiestauna oposición a la extracción minera, sino que expresa más bien elinterés de participar protagónicamente en su explotación.Esta evidencia, que fue ya hace varios años explicitada por investiga-

dores como Ana María Aranibar, no ha recibido la atención que merecepor parte de los poderes públicos y privados. Fundamentalmente porquehasta ahora ni el gobierno ni los privados ponen en cuestionamientolas bases fundadoras del sistema social y político que vivimos.Sin embargo, ese sistema es defectuoso e injusto. Es inviable y si

continúa tal como no sólo provocará, como lo ha hecho, la consolida-ción de desigualdades escandalosas y de marginamientos indebidos,sino que complotará radicalmente contra la estabilidad y la perspectivade un proyecto común en estas tierras. Esta realidad, que debe serremediada, es la segregación y supeditación de la población originariaa partir de la llegada de los españoles a esta parte del continente en1532.A las consecuencias de ese hecho histórico, social y política podemos

darle denominaciones distintas, lo mismo que al proceso que ha deresolverlo. Quizás la díada colonización – descolonización, sea la quemejor convenga. Pero, en términos políticos, lo importante no es cómose denomina a priori algo, sino cómo se diseña su solución. Así, aquellollega a ser consecuencia de esto.En los momentos que vivimos, la solución de este problema se ha

confundido lejos de esclarecerse. El actual gobierno que tomó funda-mento de legitimidad en la situación que indicamos y que hizo de ladescolonización uno de sus ejes de cambio, parece paralizado por eldescubrimiento de realidades que suponía, pero de las que ignoraba sunaturaleza.Es así que la actual administración quiso resolver este problema en

base de dos supuestos. Primero, que el mundo indígena estaba obsesio-nado por el problema de identidad cultural y de que esa identidad searticulaba en torno a una cosmovisión de tipo pachamamista. Segundo,que, como consecuencia de lo anterior, la población indígena era porta-dora de modelos de organización social, de dinamismo productivo y deintercambio radicalmente diferentes a los occidentales y, sobre todo,

a todo aquello que tenga tufo de iniciativa individual o de mecanismode tipo capitalista.La realidad ha desmentido esas apreciaciones, lo cual sería positivo

si sólo se tratara de una investigación académica o de una discusiónintelectual, al ser una contingencia que nos aproximaría más alconocimiento verdadero del fenómeno. Tratándose de políticas públicasy de prácticas administrativas de gobierno, es más bien desastroso.Cuando un gobierno ve desmentido sus mitos fundadores, tiene sólodos salidas: la reconversión o la fuite en avant.Sobre la reconversión me refiero a volver a las intuiciones iniciales de

algunos de los principales personeros de este gobierno. Esas intuiciones,aun cuando inacabadas y esquemáticas, eran susceptibles de generarun conocimiento y una práctica más acorde con nuestra realidad.Empero, es más tentador, desde una posición gubernamental, la fuiteen avant, es decir, para salir de una situación desesperada utilizar losmismos mecanismos (y las mismas creencias) que nos pusieronjustamente en la condición entrampada que se quiere superar.El pachamamismo, fundamentado más en el esoterismo y el culturalismo

occidental que en nuestras propias tradiciones, ha sido la ideologíaque ha conducido al gobierno al actual impasse. La teoría se quedó enel papel y la práctica demostró al indígena emprendedor, racional,moderno, productivista, desarrollista y hasta capitalista, así sea en suestadio primario y salvaje, como el de los cooperativistas mineros.El pachamamismo ha quedado en el papel, pero no en cualquier papel.

Se trata de nuestra Constitución Política del Estado y de muchas delas principales leyes y reglamentaciones con las cuales queremos diseñarel nuevo andamiaje de este novel y sorpresivo Estado Plurinacional. Yaquí veremos las trabas y obstrucciones al proceso del MAS, que noprocederán de ningún bloque político opositor, ni de algún grupo externode interés económico. Vendrán del interior mismo del gobierno. Dequienes toman aun en serio los dislates pachamamistas y de quienesestán obligados a un mínimo de coherencia para articular esos postu-lados con la banal gestión común de los hechos sociales y económicos.Pero esas trabas vendrán también de los indígenas. Una contradicción

(y no edulcorada tensión creativa) se la tuvo ya con los indígenas delTIPNIS respecto a la consulta previa. Si no se reconvierten lasaproximaciones generales, en la minería se producirá la parálisis delámbito productivo, porque las comunidades (aun cuando su lógicaprofunda no corresponda con los deslices administrativos pacha-mamistas) utilizarán esa misma consulta previa como recurso queterminará paralizándolas, así como a las empresas y al mismo Estado.Se frustrará así la emergencia del indígena como racionalidad económicatrasformadora, para confirmar surol colonial de solamente fuerzasocial perturbadora.Sin embargo, es posible un nuevo

modelo de coordinación de intere-ses comunarios indígenas, corpo-rativos y estatales. No se tratade “salvar el momento”, de res-guardar -inmediatistamente- algúninterés empresarial, gubernamen-tal o ideológico. Sino de darnoscuenta de que se están replan-teando los elementos que puedenarticularse para finalmente reme-diar el trauma colonial que sufri-mos. Para que ello sea posible esnecesario crear un nuevo estadode pensamiento, que pueda gene-rar nuevas prácticas políticas. Lalectura de “Los dilemas de la mine-ría”, puede contribuir a esa tarea.

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David Ali Condori*

Suma Qamaña:

La utopía del «vivir bien» enEl Alto

El Vivir Bien (Suma Qamaña) parece ser una consigna que no se traduce en políticas municipales en la ciudad de ElAlto. La alta burocracia que caracteriza a toda administración en Bolivia es acentuada en esa ciudad, pobladaespecialmente de migrantes aymaras. La insatisfacción es preludio a las acciones violentas, en las que la población deEl Alto tiene una bien merecida fama en Bolivia.

* David Ali Condori es estudiante dela Carrera de Sociología de laUniversidad Pública de El Alto.Email: [email protected]

El «vivir bien» parecemás retórica esotéricadel gobierno central,que no la asume ni lapoblación, ni losgobiernos locales,como es el caso de laciudad de El Alto, LaPaz.

I. IntroducciónEn este articulo queremos

reflexionar acerca del “Vivir Bien”en la ciudad de El Alto, puestoque en los últimos años estetema ha sido muy difundido porel actual Gobierno de Evo Mora-les. Por eso, en el año 2006 elMinisterio de Planificación delDesarrollo presentó el PlanNacional de Desarrollo deno-minado “Bolivia Digna, Soberana,Productiva y Democrática paraVivir Bien” donde se mencionaque “La nueva propuesta dedesarrollo se basa en la con-cepción del Vivir Bien, propia delas culturas originarias eindígenas de Bolivia” (PlanNacional de Desarrollo, 2007:2). Asimismo, en la actualConstitución Política del Estadoaprobado mediante un refe-réndum en el año 2009, en supreámbulo ya se anuncian losvalores fundamentales del paísvinculados con los principios delVivir Bien, sobre todo en elArtículo 8 de la mencionadaCarta Magna sostiene que: “ElEstado asume y promueve comoprincipios ético-morales de lasociedad plural: ama qhilla, amallulla, ama suwa (no seas flojo,no seas mentiroso ni seasladrón), suma qamaña (vivir

bien), ñandereko (vida armo-niosa), teko kavi (vida buena),ivi maraei (tierra sin mal) yqhapaj ñan (camino o vidanoble)” (Constitución Política delEstado, 2008: 4).En ese contexto, en el año 2007

el Gobierno Municipal de El Altodirigido por el ex alcalde FanorNava elaboró el Plan de Desa-rrollo Municipal (PDM) deno-minado “Suma Qamaña- VivirBien” en el cual se resalta el“consenso, inclusión, accesodemocrático y social a los bienesy servicios; vivir bien todos y nounos cuantos… sin asimetrías depoder, vivir en armonía con lanaturaleza, vivir en equilibrio conlo que nos rodea” (GobiernoMunicipal de El Alto- PDM, 2007:23). Sin embargo, en la actualgestión del Alcalde Edgar Patanaesta visión no es asumido conmucha visibilidad. Así, por

ejemplo, en el Plan OperativoAnual (POA) 2011 no se observala lógica del Vivir Bien como unavisión central, sino como algoaislado y secundario, en talsentido solo se resalta “El Altocambia”. Por otro lado, tampoco los

dirigentes vecinales en El Alto seapropian de la paradigma delVivir Bien, por eso en los espa-cios de toma de decisión colec-tiva1 no se debate esta cuestión,sino sólo se habla de obras deinfraestructura y saneamientobásico que hace falta en lasdiferentes urbanizaciones.Por tanto surgen algunas

incógnitas como: ¿Por qué en elGobierno Autónomo Municipalde El Alto no se discute con lamisma intensidad que en elGobierno Central el tema delVivir Bien?, ya que el municipiode El Alto está dirigido por el

mismo partido político, elMovimiento Al Socialismo (MAS),que está en funciones degobierno central. Y sí en algúnmomento se asume estaconcepción del Suma Qamaña,¿cómo se puede aplicar en laspolíticas públicas de un municipiourbano como El Alto? Por otraparte, ¿por qué los dirigentesvecinales no se empoderan delparadigma del Vivir Bien en ElAlto?En el transcurso del presente

artículo, intentaremos respon-der a estas interrogantes,porque nos parece importantereflexionar esta temática, ya quehasta ahora el Vivir Bien o BuenVivir sólo se ha quedado ensimples discursos del actualGobierno indigenista del MAS yno se han visto hechosconcretos que impacten en lasociedad.

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II. Breve enfoqueconceptual del Vivir Bieno Buen VivirPara Huanacuni “Los términos

utilizados en español paradescribir el suma qamaña(aymara) o sumak kausay(quechua) son ‘Vivir Bien’,utilizado en Bolivia, y ‘buenvivir’, utilizado en Ecuador”(Huanacuni, 2010: 15).Según el autor la palabra suma

(aymara) se traduce en:plenitud, sublime, excelente,magnifico, hermoso y qamañaen: vivir, convivir, estar siendo.Entonces “… la traducción de‘suma qamaña’ que más seaproxima es ‘vida en plenitud’.Actualmente se traduce como‘Vivir Bien’” (Ibídem).Por otro lado, sumak (quechua)

se traduce en: plenitud, sublime,excelente, magnifico, hermoso,superior y kawsay en: vida, serestando. “Por lo tanto el Sumaqamaña o Suma Kawsay es elproceso de la vida en plenitud”(Ibídem).Por su parte Niel considera que

“El concepto del Buen Vivir –Vivir Bien o Sumak Kawsay –Suma Qamaña, en lengua kichway aymara, es realmente unafilosofía utópica que surge de lascosmovisiones y de las con-cepciones andinas de la vida. Sebasa en varios fundamentosprincipales como la comple-mentariedad, la reciprocidad, ladualidad, el carácter comu-nitario” (Niel, 2011:39)En esa misma lógica David

Choquehuanca señala que: “Vivir Bien es recuperar la

vivencia de nuestros pueblos,recuperar la Cultura de la Viday, recuperar nuestra vida encompleta armonía y respetomutuo con la madre naturaleza,con la Pachamama, donde todoes VIDA, donde todos somosuywas, criados de la naturalezay del cosmos, donde todossomos parte de la naturaleza yno hay nada separado, dondeel viento, las estrellas, lasplantas, la piedra, el rocío, loscerros, las aves, el puma, sonnuestros hermanos, donde latierra es la vida misma y el hogarde todos los seres vivos”(Choquehuanca, 2010: 10)Todos estos autores expresan

una visión utópica del SumaQamaña o Sumak Kawsay, yaque en la realidad empírica aúntodavía no se llega aplicar esteparadigma del Vivir Bien o vidaen plenitud. En ese contextotampoco la población (sobretodo urbana como El Alto) estáentendiendo perfectamente enqué consiste el Vivir Bien, por

eso algunos consideran que “elpretender establecer el principiode ‘Vivir Bien’ es un intentoretrogrado y peligroso” (Soria,2011:9). Por lo tanto todavíahay que seguir trabajando elcómo se puede llegar a concre-tizar en políticas públicas, másallá de las propuestas como “Lageneración de comunidadesproductivas… Recuperar yproducir semillas sanas, sinalteración genética” (Huanacuni,2010:81) Por esta razón Ascarrunz

sostiene que “Si los principiosdel Vivir Bien son ecológicos yéticos así como el respeto de lapluralidad (en un sentido eco-nómico, político y cultural), lagestión pública debiera estarguiada por ellos y toda decisiónde carácter económico debierapreguntarse por sus impactosreales en la vida de las personasy en la reproducción de sus con-diciones, en un marco respe-tuoso de regeneración natural”(Ascarrunz, 2011: 435).Evidentemente, la gestión

pública debería estar guiadabajo los principios del Vivir Bien,para que esto no se quede enun simple postulado utópico,lejos de la realidad, ya que lavida en plenitud, complemen-tariedad, la reciprocidad,dualidad y la armonía con lanaturaleza hay que vivirla.III. “Vivir Bien”, lejos de

la realidad en El AltoMientras que en el Gobierno

Central el Canciller DavidChoquehuanca casi en todossus intervenciones siempremenciona el “Vivir Bien”, sinembargo no pasa lo mismo enel Gobierno Autónomo Municipalde El Alto, pues los servidorespúblicos del municipio de El Altoestán más ocupados en publi-citar el eslogan de “Ahora sí, ElAlto cambia”. Al parecer elAlcalde Edgar Patana no tiene unequipo que tenga principiosideológicos que propugnen elparadigma del Vivir Bien. En esaperspectiva muchos funcionariosde la Alcaldía de El Alto noentienden qué es Suma Qamañay mucho menos tienen la ideade cómo implementar políticaspúblicas en el marco del VivirBien. Entonces, los principio yvalores de la Constitución Políticadel Estado Plurinacional deBolivia quedan en un simpleexpresión retorica, lejos de larealidad.Sin embargo, es importante

pensar en cómo aplicar losprincipios del Vivir Bien enpolíticas públicas en El Alto,aunque no en el sentido eso-térico como plantea el Gobierno

indigenista del MAS, sino desdeel punto de vista más operativo.En tal sentido consideramos quevivir en plenitud en la ciudad deEl Alto es tener seguridadciudadana, hospitales de tercernivel, educación, serviciosbásicos, el servicio de trans-portes, empleos y otros, ade-más de las calles y avenidasasfaltadas (aunque esto puedeser contrario a los principios delVivir Bien), porque los habitan-tes urbanos tienen el ideal deque sus calles y avenidas estén“sembrados de cemento”, yaque las principales demandas delas Juntas Vecinales de El Altocasi siempre suele ser eladoquinado o asfaltado de lascalles y avenidas, construcciónde canchas deportivas, cons-trucción de sedes sociales entreotros. Esto nos hace pensar quelos dirigentes vecinales másapuestan por la modernidad quepor los postulados del Vivir Bienpor eso no discuten, ni se empo-deran de este paradigma, perotampoco hay instituciones quepromuevan el Suma Qamaña enla urbe alteña. Por otro lado, queremos enfa-

tizar que la mayoría de los alte-ños no viven bien, sino que so-breviven (por no decir que vivenmal), razón por la cual, las callesy avenidas de esta joven ciudadestán llenas de comerciantesinformales que en muchos casosgeneran inmensas trancaderasde autotransporte, a esto sesuma la delincuencia y lainseguridad ciudadana.No obstante, algunos funcio-

narios de alto rango delGobierno Municipal de El Alto,viven bien, comen bien, se vis-ten bien, tienen autos de lujo ytienen celulares corporativos,mientras otros piden limosna enlas calles vendiendo dulces. ¡Quéironías de la vida! Por eso deci-mos que el Vivir Bien, está lejosde la realidad en la ciudad de ElAlto.IV. Consideraciones

finalesPara concluir queremos señalar

que falta mucho por hacer en latemática del Vivir Bien, porquehasta ahora sólo se presentacomo una utopía de buenasintenciones. Sí bien posible-mente antes nuestros pueblosindígenas vivían bajo losprincipios del Suma Qamaña, enla actualidad cuesta recobraresos postulados ya que algunoslo consideran como algo atávico,por eso los dirigentes vecinalesen El Alto no se empoderan delVivir Bien, porque ellos apuestanpor el desarrollo y la moder-nidad. De igual manera ese

principio no se traduce en obraspúblicas concretas y muchosfuncionarios públicos delGobierno Autónomo Municipalde El Alto ni siquiera entiendenel Suma Qamaña, por tanto esteparadigma no se manifiesta enpolíticas públicas en esta urbe.Por otra parte los autores que

teorizan el Vivir Bien tratandode recobrar los principios de lospueblos indígenas, tampocoplantean el cómo se puede llegara concretizar el Suma Qamañaen hechos concretos en losdiferentes espacios urbanos orurales de nuestro país, portanto consideramos que la vidaarmoniosa está aún lejos de larealidad.Notas:

1 Así por ejemplo en los informesde las diferentes comisiones delXVII Congreso Ordinario de laFederación de Juntas Vecinalesde El Alto, realizado en la Zonade Villa Dolores los días 27, 28 y29 de julio de 2012, no se abordóla temática del Vivir Bien.

BIBLIOGRAFÍA:

ASCARRUNZ, Beatriz2011 “El Vivir Bien como sentido

y orientación de políticaspublicas”. En: Farah, Ivonne yVasapollo, Luciano (coords.). Vivirbien: ¿Paradigma no capitalista?La Paz: Plural editores.

CHOQUEHUANCA, David2010 “Hacia la reconstrucción

del Vivir Bien”. En: América Latinaen Movimiento Nº 452. Quito:ALAI.

HUANACUNI, Fernando2010 Vivir Bien/Buen Vivir.

Filosofía, políticas, estrategias yexperiencias regionales. La Paz:III-CAB.

NIEL, Maïte2011 El concepto del buen vivir.

Madrid: Universidad Carlos III deMadrid.

SORIA, Alberto2011 “El di lema del suma

qamaña: ¿’Vivir Bien’ o ‘Vivirmejor’?”. En: Periódico mensualPukara Nº 59. La Paz.

FUENTES DOCUMENTALES:

ASAMBLEA CONSTITUYENTE,HONORABLE CONGRESO NACIONAL2008 Constitución Política del

Estado. La Paz: Vicepresidencia

GOBIERNO MUNICIPAL DE ELALTO2007 Suma Qamaña Vivir Bien,

Plan de Desarrollo Municipal. ElAlto: Dirección de Planificación

MINISTERIO DE PLANIFICACIÓNDEL DESARROLLO2007 Plan Nacional de Desarrollo

“Bolivia Digna, Soberana,Productiva y Democrática paraVIVIR BIEN”. La Paz.

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Luchas de nuestros pueblos:

¿Es el movimiento zapatistaotro indianismo?Odin Ávila Rojas

América Latina tiene unariqueza profunda en saberesprovenientes de las resis-tencias y trayectorias mismasde los pueblos amerindios quela habitan, debido en gran partea que éstas en diferentes gra-dos y formas contienen unamemoria histórica ancestralanclada con un continuo poten-cial descolonizador que hadesembocado en expresionesque van desde el núcleo comu-nitario local hasta aquellasorganizaciones sociopolíticascon programas ideológicos deluchas a niveles nacionales eincluso internacionales.Precisamente, un ejemplo de

estas experiencias es el zapa-

tismo que se hace público apartir de 1994 en México. El cualademás de ser un movimientoque reivindica lo indio, tambiénse ha preocupado por incluir alas poblaciones mestizas subal-ternizadas en los procesosdescolonizadores frente a ladominación del capital neoliberal,así como los modelos eurocén-tricos de la política.Los zapatistas o neozapatistas

tal como son llamados poralgunos académicos, puedenubicarse en el amplio espectrode los indianismos latinoame-ricanos, porque a pesar de susingredientes mestizos-subalter-nos, consigue recuperar unaparte importante de esas prác-ticas, sabidurías y cosmovisióncaracterísticas de las sociedadesindígenas en el Sureste mexica-no. No debe olvidarse que unode los rasgos de cualquiercorriente de emancipación india-nista es asumir antes quecualquier identidad de clase entérminos marxistas su natura-

leza india, es decir, demostrarque el potencial organizativo delo indio reside más bien en suhistoricidad y acumulación dememoria ancestral.El Ejercito Zapatista de Libe-

ración Nacional es un caso quepone a discusión la tensión entrelas estrategias de izquierdasmestizas y los despliegues deluchas bajo lógicas indias. Estarelación rígida ha tratado deencausarse por los zapatistas demanera democrática, porquepara ellos, la idea de nación ypueblo deben ser reflejadasmutuamente. La idea democrá-tica que ellos tienen, pretendearticular las subalternidadesindígenas con los subsuelosmestizos a nivel nacional. Demodo resumido es la perspec-tiva del “mundo donde quepanmuchos mundos”, una frasemulticitada que condensa loscontenidos de la rebeldía chiapa-neca con los deseos y propuestapara transformar la realidad enuna condición plural y por medio

de métodos democráticos deacción colectiva.Por cierto, el anterior plan-

teamiento recuerda “lo nacional-popular”1 zavaleteano, el cualconsiste en la interconexión delos niveles democratizadores delas clases dominadas con laformación estatal que ellosmismos intentan crear. Puedeverse esto como la capacidadque tienen las colectividades enpleno movimiento para concen-trar y darle sentido común a lasdiferentes expresiones de luchaque tiene una sociedad. Sinduda, es también un tiempo dedialogo entre movilizaciones,organizaciones y en generalsujetos que recobran cons-ciencia de la necesidad de tejerlo indio colonizado con el restode las clases subalternas de lanación.Aunque Zavaleta refiere a una

realidad especifica como la boli-viana de mediados del siglo XX,la categoría expuesta por él,señala una problemática que

El EjercitoZapatista deLiberación Nacionalpone a discusión latensión entre lasestrategias deizquierdas mestizasy los despliegues deluchas bajo lógicasindias. Esta relaciónrígida ha tratado deencausarse demanerademocrática, porquepara los zapatistas,la idea de nación ypueblo deben serreflejadasmutuamente.

Desde hace varios años la insurgencia zapatista en la región de Chiapas, México, concentra la atención mundial.En particular porque es una región de alta concentración poblacional maya. La evolución de la relación entreel zapatismo y los pueblos originarios de esa región será altamente significativa, si tomamos en cuenta quesiempre ha sido desastroza para los pueblos originarios la existencia de movimientos armados izquierdistasen sus regiones. Fuente ilustración: losangelespress.org

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comparten casi todas las nacio-nes latinoamericanas: la urgen-cia de producir una articulacióncolectiva de cada una de lossectores, grupos, organismosciviles y en general sujetos paraconstruir un núcleo políticodemocrático descolonizado decualquier tipo de dominación.Los zapatistas durante su tra-yectoria han hecho en no pocasocasiones, esfuerzos por abrirun horizonte alternativo en unpaís que después de la “Revo-lución Mexicana en 1910” noconsigue implementar una arti-culación eficaz de sus flujosmovilizatorios que deriven enuna organización real y radicalde la politización desde abajo,“muy abajo”2 y a la “izquierda”3.Para los zapatistas, ¿qué sig-

nifica el abajo y a la izquierda?,son coordenadas propuestaspor ellos para convocar a lapoblación mexicana con el finde reconstruir la vida política ysocial nacional, impulsada a partirde las alianzas de las subte-rraneidades indias y mestizascríticas más profundas. Enpalabras de la Sexta Declaraciónde la Selva Lacandona:

“Bueno, pues en México loque queremos hacer es unacuerdo con personas yorganizaciones mero deizquierda, porque pensamosque es en la izquierda políticadonde mero está la idea deresistirse contra la globa-lización neoliberal, y de hacerun país donde haya, paratodos, justicia, democracia ylibertad. No como ahorita quesólo hay justicia para losricos, sólo hay libertad parasus grandes negocios y sólohay democracia para pintar lasbardas con propaganda elec-toral. Y porque nosotrospensamos que sólo de laizquierda puede salir un plande lucha para que nuestraPatria, que es México, no semuere”.4

Debe aclararse que las “izquier-das” mexicanas a lo largo de lahistoria del siglo pasado, repre-sentan y juegan un papel dereferentes organizativos movili-zatorios para las nuevas gene-raciones. Inclusive, en algunoscasos como el zapatismo de1910, llegan a convertirse en unelemento del imaginario políticoy social tanto del EZLN como demuchas movilizaciones y orga-nizaciones del siglo XXI que sedeclaran anticapitalistas y seasumen antisistémicas en unaamplia gama de sentidos. Hayque considerar que los zapa-tistas se proponen con claridadno llegar a reproducir prácticasfundamentalistas que la izquier-

da tuvo en décadas anteriores,en donde hubo una distorsiónentre el deber ser y lo quees.La rebeldía zapatista tiene en

su memoria una pluralidad desujetos y luchas históricas porla libertad, justicia, igualdad,dignidad, humanidad y desco-lonización de la patria. Razónpor la cual, la enunciaciónzapatista reactiva y vuelve aponer en la mesa de la discusión,la resistencia del indio a lacolonización del orden occidentalmoderno. Una pugna todavía sinresolverse entre ambas partes.En este sentido, el zapatismo sedespega de manera notable dela tradición indigenista mexicanade pactar con las institucionesestatales y se perfila como unaoriginal corriente indianista queademás de darle vigencia aldebate sobre descolonizar enMéxico, consigue introducir a lascolectividades mestizas subal-ternas en ésta. En especial aldemostrar la necesidad impe-riosa de la nación para auto-determinarse y reconstruirse así misma.

En conclusión: el movimientozapatista desdobla su proyectopolítico contra cualquier formade dominación que ponga enriesgo la humanidad, naturalezay convivencia del hombre, aligual que combate las existen-tes estructuras, prácticas ylógicas de poder alimentadas porel capitalismo neoliberal, lamodernidad estatal, así comoaquellas instituciones liberalesantidemocráticas. Por supuesto,lo anterior incluye los esfuerzospor eliminar el racismo predo-minante a nivel nacional, latino-americano y en cada región delmundo. Para el EZLN, la con-quista europea fue una “guerrade razas” como diría MichelFoucault con desventaja totalsobre los pueblos de América,quienes tenían formacionescomunitarias opuestas a lossistemas occidentales.

Uno de los rasgos más sustan-ciosos del zapatismo a lo largode su existencia es su capacidadimaginativa para repensarconceptos políticos y socialesdesde su propia realidad enpleno movimiento. Esto conllevahacer una reflexión universaldesde microcosmos que puedenresultar ser fuentes de alterna-tivas comunitarias de vida oaportar componentes para laelaboración de futuras opcionesviables para transformar lasociedad mexicana en suconjunto.

Fuentes de información

COLL LEBEDEFF, Tatiana,“Desde las orillas con amor,vicisitudes y trapisondas de laizquierda latinoamericana”, en;OTHÓN QUIROZ, José, LÓPEZ-SAAVEDRA, Nicolasa, Et. Al.(Coords.), Izquierdas: nuevas yviejas, México, UAM-A-Eón,2011, p.p. 29-72.

COMITÉ CLANDESTINOREVOLUCIONARIO INDÍGENA-COMANDANCIA GENERAL delEJÉRCITO ZAPATISTA DELIBERACIÓN NACIONAL, SextaDeclaración de la SelvaLacandona, desde las Montañasdel Sureste Mexicano, 2005, en;Rebeldía, México, 2005, 20 p.

FERNÁNDEZ CHRISTLIEB,Paulina, “El EZLN y la GBI enChiapas: derechos indígenascontra corporaciones trasna-cionales”, en; Revista Mexicanade Ciencias Políticas y Sociales,México, UNAM-FCPyS, No. 188-189, mayo-diciembre,2003,p.213-265.

FOUCAULT, Michel, Genealogíadel racismo, Argentina, Altamira,2001, 223 p.

REINAGA, Fausto, Lapodredumbre criminal delpensamiento europeo, Bolivia,Ediciones Comunidad Amautica

Mundial, 1982,144 p.

ZAVALETA MERCADO, René,Lo nacional-popular en Bolivia,Bolivia, Ediciones Plural, 2008,212 p.NOTAS:

1 ZAVALETA MERCADO, René, Lonacional-popular en Bolivia,Bolivia, Ediciones Plural, 2008,212 p.

2 Para los zapatistas “muyabajo”, son las clases ysubsuelos dominados por laspolíticas del capital y loestatal-moderno.

3 Al entenderse en un sentidoplural. En México como en elresto de Latinoamérica vandesde lo más institucional ycorrupto hasta las formas máséticas, antisistémicas y críticas.Véase: COLL LEBEDEFF, Tatiana,“Desde las orillas con amor,vicisitudes y trapisondas de laizquierda latinoamericana”, en;OTHÓN QUIROZ, José, LÓPEZ-SAAVEDRA, Nicolasa, Et. Al.(Coords.), Izquierdas: nuevas yviejas, México, UAM-A-Eón,2011, p.p. 29-72.

4 COMITÉ CLANDESTINO REVOLU-CIONARIO INDÍGENA-COMAN-DANCIA GENERAL del EJÉRCITOZAPATISTA DE LIBERACIÓNNACIONAL, Sexta Declaraciónde la Selva Lacandona, desdelas Montañas del SuresteMexicano, 2005, en: Rebeldía,México, 2005, p.p. 16-17.

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Estudios del Banco Mundialindican que el consumo calóricoalimentario de los pobres delmundo declina 0.5% cuando losprecios medios de los alimentosse incrementan en un 1%. Porconsiguiente, se estima quepara el año 2025 existirán 1.2mil millones de personas cróni-camente hambrientas.Por su parte, el Instituto de

Investigación de Políticas deAlimentación Internacional(IFPRI) en Washington D.C.,manifiesta a su vez que:» El maíz subirá en un 20%

para el 2010, 41% para el 2020.» Las oleaginosas (soya, colza,

girasol) subirán en un 26% parael 2010 y en un 76% para el2020.» El trigo subirá en un 10 %

para el 2010 y en un 30% parael 2020.De la misma manera, se sabe

que existen hoy más personasperenemente hambrientas queen 1996 (800 millones), cuandose trazaron las metas delMilenio; al presente existen 854millones. Por lo que existenrecomendaciones para el sector

agrícola que pasan desde:» Fomentar el desarrollo de

mercados internos de alimen-tación» Fomentar la construcción y/

o mejoramiento de Caminosvecinales» Producción en Mosaico

(multiple cropping)» Fomentar granjas pequeñas

que tienden a utilizar más manode obra y cuidado de tierras.» Auspiciar vías de producción

alternativas al monocultivo.La FAO señala los sectores más

vulnerables: Quienes no poseentierras, los habitantes de losbarrios marginales y los trabaja-dores agrícolas. Además, cuan-do el consumo disminuye, lasmujeres y los niños son quienesmás sufren ya que, en la mayoría

de los hogares, se tiende apriorizar a los hombres a la horade racionar los alimentos.Mientras el incremento de los

precios de los alimentos repre-senta una clara amenaza paramuchas personas pobres en lospaíses en desarrollo, tambiénpodrían representar una opor-tunidad para aquellos que vivende la agricultura.Asimismo la FAO, señala que

las causas para el sostenidoincremento de los precios de losalimentos son varias, entre lasprincipales están:» La disminución de la

producción agrícola debido a lasmalas condiciones meteoroló-gicas que están, probablemen-te, relacionadas con el cambioclimático.

» El aumento de la demandadestinada a los biocombustibles.» Las restricciones aplicadas a

las exportaciones y las comprasdescontroladas provocadas porel pánico, ya sea por elincremento de los precios y/o laconsiguiente escases de losmismos.» Causas económicas, como la

depreciación del dólar, los tiposde interés bajo y la especulaciónfundamentalmente.Debemos estar dispuestos por

lo tanto a entrar en la producciónintensiva por la presencia de unmercado interesante que pre-senta precios atractivos, asi-mismo estar en condiciones deindustrializar las materias primasagrícolas para añadir mayorvalor agregado.

Economía:

Crisis y oportunidad de laagricultura bolivianaPedro Hinojosa Pérez

El incremento de losprecios de losalimentosrepresenta una claraamenaza paramuchas personaspobres en los paísesen desarrollo, perotambién podríanrepresentar unaoportunidad paraaquellos que vivende la agricultura.

La agricultura es la actividad económica del futuro. En Bolivia, sin embargo, de más en más existe elabandono de esta actividad economica por parte de agricultores, especialmente de origen aymara y quechua.Es común observar extenciones importantes de tierras antes agrícolas y ahora escasamente trabajadas,como lo muestra esta fotografía tomada cerca de Toralapa, en Cochabamba. En este fenómeno resalta el roldeterminante de ausencia al respecto de políticas estatales y municipales.

Foto: Pedro Hinojosa Pérez

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En Bolivia la agricultura es unode los sectores más importantesde la economía nacional, puesdesde hace más de 50 años ocu-pa casi el 40% de la población.Asimismo, genera el 56% de ocu-pación en mano de obra y conti-núa aportando solamente al PIBnacional con una constante casiinvariable de 16% mientras quela población, de manera ince-sante, continúa aumentando.Sin embargo, es uno de los

sectores de la actividad econó-mica que desde hace tiempomerece un injusto abandono porparte del Estado y de losMunicipios. Este aspecto redun-da en que la mayor pobreza estéubicada en el área rural. Recien-temente, con la escasez dealimentos que se presenta enforma más continua, podemosadvertir su dimensión y la ver-dadera importancia que debemerecer.Sabemos que tenemos un gran

potencial no explotado por elconstante abandono de la gentedel área rural, quedando exten-sas tierras sin cumplir unafunción social. Esta deserción delcampo no «es adrede» sino quese debe a que no existen lasmínimas condiciones paraproducir.Es imperioso que los municipios

garanticen mínimamente tambiénel suministro de agua, obtenery proporcionar un sistema deprecios actualizado a los pro-ductores para poder incitarles enel cultivo que consideren másrentable en el mercado.Pero también el Estado debe

suministrar los ingredientesnecesarios para provocar la pro-ducción agrícola:«Para enfrentar la prioridad en

materia de políticas públicasdebería ser la creación deempleos, tanto en la agriculturacomo en la economía rural noagrícola.Los ingredientes básicos de

una economía rural dinámica sonuna agricultura en rápido creci-miento y un clima favorable parala inversión» (Banco Mundial,2008).Mientras no existan políticas de

desarrollo agropecuario viablesdejando de lado la letra bonita,está lejos el abastecimientoseguro y abundante en losmercados.En la ausencia de políticas

sociales, el cambio climático haráde las suyas. De las mismamanera, los pobladores urbanosmientras no posean concienciade lo que es vivir y trabajar enel campo no pueden manifes-tarse con interpelaciones ydeben consumir en mutis lo queexiste en el mercado y al precio

del día, porque tampoco existiráexpectativa de elección.Si queremos evitar una inflación

vía precios de los alimentodebemos encarar seriamentepolít icas agropecuarias deacuerdo al tipo de clima y deincito a esta actividad.Según el sexto Informe Nacio-

nal sobre Desarrollo Humano,2.3 millones de ciudadanos deesta condición económica son“vulnerables” y corren el riesgode caer en la pobreza. Ademásindica que tres de cada diezbolivianos viven en la extremapobreza.De acuerdo a este informe en

Bolivia se establece que seis decada diez bolivianos viven en lapobreza y tres de cada diezviven en la extrema pobreza, loque retrata a un país profun-damente desigual. Asimismo, seestablece que el país necesitarámás de cinco años para superarlos índices negativos de pobre-za, la desigualdad y la exclusiónsocial. Estos datos son fun-damentales, por lo que esperaque el Gobierno ejecute progra-mas y planes dirigidos a unadecuado sistema de salud,educación y empleo. La situa-ción urge: “Se debe ajustartodas las políticas públicas paragarantizar de manera universallas condiciones mínimas parauna vida digna donde todostengan acceso a una educaciónde calidad y a un sistema desalud adecuado, un trabajoestable y bien remunerado”,según este informe.En ocho años, la clase media

de la población boliviana aumen-tó, pero el ascenso social quese ha registrado entre 1992 y2007 es vulnerable, si tomamosen cuenta el informe sobreDesarrollo Humano. Los estratosmedios crecieron del 30% al36% de la población y repre-sentan a 3,6 millones de ciuda-danos. Sin embargo, los exper-tos del PNUD evalúan que cercade 2,3 millones de estaspersonas corren el riesgo derecaer en la pobreza. De lamisma manera, se detectó quela concentración de la riqueza enBolivia todavía está en pocasmanos. El 20 por ciento de lapoblación más rica acapara másdel 60 por ciento de los ingresos,mientras que el 20 por cientomás pobre sólo alcanza a recibirel 2 por ciento de esos ingresos.El sector agropecuario presenta

un descenso gradual en su apor-te al PIB. A pesar de ese des-censo continúa ocupando unlugar importante en el mismo,por el hecho de que una partede la población vive de ella.Según Jemio y Andersen cier-

tos productos agrícolas son los

que abarcan el 80% de lasuperficie sembrada, siendo losmás importantes la soya, con el37,9% del área total, y el maízcon 14%. Los mayores rendi-mientos sin embargo corres-ponden a la papa (5.4 TM/hec-tárea). La soya y el girasolpresentan elasticidades ligera-mente mayores a la unidad, loque muestra que la expansiónde la producción de estos culti-vos ha requerido la incorpo-ración en forma proporcional, desuperficie de tierra adicional, porlo que el rendimiento ha perma-necido constante.Otros productos, como el

trigo, maíz, y arroz, presentanelasticidades más bajas. Lamenor elasticidad correspondea la papa (0,025), lo que implicaque las variaciones en la pro-ducción de este producto, haciaarriba o hacia abajo, se ha dadoa través de cambios en elrendimiento, permaneciendo lasuperficie sembrada prácti-camente constante a través deltiempo.El clima es un recurso natural

que afecta a la producciónagraria. Su influencia en uncultivo determinado, no dependesólo de las característicasclimáticas de la localidad en queesté situado, sino también engran medida de las condicionesen que se desarrolla la produc-ción. Es decir, tiene tanta impor-tancia el nivel de exposición delcultivo al clima, como el nivel devulnerabilidad.La demanda de la mayoría de

los productos agrícolas es denaturaleza inelástica y bastanteestable de año en año, debidofundamentalmente a que elcambio en los gustos de losconsumidores tiene lugar deforma más lenta. Esto hace quela variación en el rendimientoagrario, al producir cambios im-portantes en la oferta de dichosproductos, puede provocartambién importantes variacionesen los precios de mercado.De acuerdo a últimos informes

respecto sobre Índice deHambre Global [IHG] se indicaque el país en su conjuntopresenta deficiencias respecto ala alimentación ya que ocupamosel último lugar en Sud América.Asimismo si tomamos en cuentalos índices de pobreza tambiénse observa que nos falta muchopor mejorar.El rubro más importante dentro

la agricultura constituye loscultivos con una media de 67%,le sigue la ganadería con unamedia de 28% y los otrossectores con un 5%. La agri-cultura no comercial representaun 75% y se desarrolla prin-cipalmente en el altiplano y

valles, en pequeñas parcelas, enlos cuales viven aproxima-damente 700.000 familiascampesinas.La agricultura comercial con-

tribuye con el 25 % restante yse desarrolla en el orienteboliviano, en grandes exten-siones de tierra, escasamentepobladas. La productividad esbaja comparada con las obser-vadas en los países vecinos. Eldiferencial tecnológico muestrauna brecha significativa para lamayoría de los cultivos, lo cualrepresenta una posición muydesventajosa frente a dichospaíses. En términos de com-petitividad comercial, es conclu-yente que la baja productividadde la mano de obra rural y labaja productividad de la tierraexplican en lo fundamental queel 94% de la población ruraldedicada a las actividadesagropecuarias viven en condi-ciones de pobreza y que de esteporcentaje el 34% vivan encondiciones de pobreza extrema.Este último dato significa que nisiquiera alcanzan a satisfacersus necesidades básicasnutricionales.

AGRICULTURA YTRANSGÉNICOS EN BOLIVIAFrente a todo pronóstico, los

últimos indicadores sobre elavance de cultivos genética-mente modificados, demuestranque América del Sur se estáconstituyendo en la despensade granos transgénicos delmundo con un total de casi el38% del área sembrada. (…)El hemisferio americano es

donde se siembran más cultivostransgénicos del mundo. 128.6millones de hectáreas (80%) deun total de 160 millones de hec-táreas sembradas en 2011. Los10 países que más lo siembranen orden de importancia son:Estados Unidos con 69M ha;Brasil 30.3, Argentina 23.7, India10.6, Canadá 10.4, China 3.9,Paraguay 2.8, Pakistán 2.6,Sudáfrica 2.3 y Uruguay 1.3, elnuevo país es Bolivia con900.000 mil ha.En el caso de la soya, entre

Brasil, Argentina, Paraguay, Uru-guay y Bolivia siembran más dela mitad de la producción mun-dial lo que es una contribuciónsin precedente a la seguridadalimentaria del mundo.Por otro lado, recientemente

Brasil ha liberado una variedadde frijol genéticamente modifi-cada con resistencia al mosaicodorado. Siendo el frijol un cultivoimportante en la canasta fami-liar brasilera habrá que mantener-se expectante de su evolución.

Fuente: Periódico Jornada, La Paz,lunes 21 de mayo de 2012

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A propósito de «Alegato por un marxismo indio»:

El materialismo histórico deformala interpretación tawantinsuyanaAureliano TurpoChoquehuanca*

* [email protected]

La masacre de Sendero Luminoso a los indígenas en el Perú es el argumento fuerte de quienes rechazan todaingerencia marxista en los asuntos indígenas. En la foto, el cadaver de un masacrado en Lucanamarca. En esacomunidad de Ayacucho el 3 de abril de 1983 sesenta y nueve quechuas fueron «ajusticiados» por Sendero Luminoso.De estos, once mujeres, diez y ocho niños y ocho adultos mayores fueron ejecutados de la manera más horrenda, conhachas y machetes, al puro estilo polpotiano en Camboya. Fuente foto: www.rpp.com.pe

Se lee en el mensuario “Pukara”Nº 74 del mes de octubre delaño que va acabando, lo siguien-te: “El materialismo histórico esla ciencia que comprende lasleyes más generales quegobiernan el desarrollo social (…)Los principios dialécticos o pará-metros marxista, son paraexplicar la sociedad.” Entende-mos que el marxismo es la fuen-te principal para entender elmaterialismo dialéctico e histó-rico del modo de produccióncapitalista, que los llamadosclásicos del marxismo le handado prolífera difusión, querecorrió el mundo como unfantasma, convirtiéndose final-mente en uno de los instru-mentos del colonialismo mentaldel período republicano, de lahoy llamada América del Sur, enparticular.Para nadie es novedad que la

sociedad industrial europea, fueel caldo de cultivo para queCarlos Marx y Federico Engels,hayan recreado su teoría eco-nómica y filosófica y demostrarque el sistema capitalista es elresultado de la sucesión de losmodos de producción que llegaa universalizarse y constituirseen un dogma para la explicaciónde los distintos procesoscivilizatorios del mundo, demanera particular de la sociedadcomunitaria de ayllus delTawantinsuyu, que responden alos florecimientos culturalesregionales (FCR), no así a losmodos de producción de lassociedades clasistas de Europa,Asía y África.Ahora bien, la realidad concreta

como dicen los pupilos de Marx,se ha desvanecido, por cuantoel “socialismo científico” que sepretendió escenificar en la RusiaZarista y la Europa del Este, hannegado el carácter científico delmaterialismo histórico, ya que la

superestructura y la baseeconómica socialista se que-daron en el nivel del desarrollopre-capitalista, consolidandouna burocracia gobernante delPC y consecuentemente unadictadura pequeño burguésasecante, que no expresó lavoluntad soberana del prole-tariado ruso en particular. En unapalabra, se constata el fracasodel “socialismo científico” y porsupuesto, la llamada “sociedadcomunista”. ¿Qué pensar de larepública popular de China, serála réplica del fracasado socialimperialista de Rusia? ¿Qué pasócon el materialismo histórico ydialéctico en los países socia-listas de la Europa del Este?El marxismo a lo largo de su

recorrido fantasmal por nuestrarealidad concreta, es decir, porSudamérica y por el Perú oli-

gárquico en particular, el mar-xismo se ha convertido en elevangelio dogmático del geno-cidio y el etnocidio. Mariáteguifue el primer impulsor del dogmamarxista en el Perú, cuyoresultado ha sido la proliferaciónde pequeñas sectas marxistasmariateguistas, que terminaronen “el parlamento burgués” y,los genocidas y etnocidasmariateguistas polpotcianos de“Sendero Luminoso”, que ter-minaron bañándose en la sangrede inocentes kechuas, aymarasy amazonenses del Perú-Tawan-tinsuyano, que la Comisión dela Verdad ha testimoniado lasatrocidades de la guerra suciano declarada de los “marxistasmariateguistas”.Es importante señalar, que

Mariátegui no tenía conocimientodel “indio” y su problema, sino

cuando, el azangarino (Puno)Ezequiel Urviola y Rivero, llegaa Lima en 1920 como Apode-rado General y Defensor delConsejo de Defensa e Instruc-ción Indígena del Departamentode Puno; toma un primer con-tacto con Pedro S. Zulen Urviolaque fue un incansable defensordel indio y garrote de losgamonales de Puno y del Perúhacendario. Estando en Limahizo denuncias y peticiones, quela prensa limeña las acogió. Fuemiembro del Comité Pro DerechoIndígena Tawantinsuyu (1919-1927), destacando como Secre-tario General del Comité Centraldel Tercer Congreso NacionalIndígena Tawantinsuyu en 1923,como consta en las actas delcongreso y en otros documen-tos que testimonian su luchaanticolonial terrateniente.

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Dentro de las muchas deman-das que hizo para frenar elabuso de los gamonales y loscuras, fue la necesidad de formarun “Tribunal de Arbitral deTítulos… y solicita que se paseuna relación de todos los me-moriales enviados a la Cámarade Diputados para pedir la anu-lación de los títulos falsos”; tam-bién demando la Separación dela Iglesia y el Estado, señalandoque: “en un país como el Perúde civilizados, cómo podemosaceptar que por la fuerza nosimpongan el clero católico, sureligión mercantilista que hasembrado la desconfianza… Quelos bienes de las iglesias pasena la socialización del Estado, paralocales de obreros e indios”. AquíUrviola ya anunciaba la necesidadde un Estado laico que todavíano llega.Mariátegui y Zulen únicos asis-

tentes no indios al Congreso, nosolamente se informaron delproblema del indio y de losatropellos de los terratenientesy autoridades mestizas quecometían en los departamentosde Cusco, Puno, Arequipa, Aya-cucho, Huancavelica y Apurímac.Fue Ezequiel Urviola que instru-yó al “marxista convicto yconfeso José Carlos Mariátegui”,sobre la situación del INDIO, loque le hará decir que “Urviolarepresenta la primera chispa deun incendio por venir… Hoy noimporta ya que Urviola no exista.Basta que haya existido”(1927), confirmando además suaprendizaje sobre el indio y susderechos a la tierra y el terri-torio, cuando afirma que “Lasolución del problema del indiotiene que ser una soluciónsocial. Sus realizadores debenser los propios indios”.Sin embargo, los marxistas

mariateguistas cupulares, esdecir, los llamados “líderes”,fueron los obstáculos para queel “indio” sea gestor de su propiodestino histórico y político anti-colonial, debido a que el mestizopequeño burgués dogmatizadocon el marxismo leninismo, esta-linismo, maoísmo, cerraron vio-lentamente la solución delproblema del indio a la tierra yel territorio. Lo más cercano aeste hecho es lo ocurrido conlos movimientos indios de ladécada del 80 del siglo pasado,debido a la infiltración de losmarxistas al seno de las orga-nizaciones que retomaban lalucha política como pueblosindios y no como simples clasessociales, postulando para ello,EL INDIANISMO, como instru-mento de lucha ideológica ypolítica. El materialismo histórico

está lejos de interpretar cientí-ficamente el Tawantinsuyu, en lamedida de que no es un modode producción ni una etapa detransición del feudalismo alcapitalismo, formulado por elpartido comunista del Perú enla década del 70 del siglo XX,que terminaron en el parlamentoburgués.A estas alturas de la historia

del colonialismo interno repu-blicano neoliberal peruano, estiempo de descolonizarse de losdogmas demo-liberales y deldogma socialista marxista, quese reviste hoy de socialismoandino-amazónico del siglo XXI,impostando el neo indigenismode izquierda, en su versión dela indianidad y su materialismohistórico andino del “Qhapaqñan”, de clara postura de discri-minación positiva. El capitalismoy el socialismo son hermanosgemelos del occidente europeo,en consecuencia, son la conti-nuación del colonialismo euro-español que se afirmó con elcristianismo, la castellanizacióny el ateísmo socialista, duranteel período republicano.Ante esta realidad del colo-

nialismo interno republicanoneoliberal peruano, el caminohistórico y político es primero ladescolonización mental de losdogmas extra continentales yafirmarnos en nuestra identidadpluricultural, en nuestra perte-nencia territorial y nuestra per-sonalidad etnohistórica tawan-tinsuyana, como un baluarte denuestra lucha por la autodeter-minación política como pueblosy naciones ancestrales del Perú-Tawantinsuyano. Es lamentableque muchos antropólogos,sociólogos e historiadores no sehayan descolonizado de los con-ceptos y categorías de análisisoscurantistas de los ilustradosdespóticos de Europa y haganun esfuerzo por entender elproceso civilizatorio tawantin-suyano a partir de sus topo-nimias kechuas y aymaras prin-cipalmente.Para el cumplimiento de esta

propuesta histórica y política delsiglo XXI, es necesario conso-lidar nuestra lógica de pensa-miento cósmico tawantinsuyano(ideología y política) y conse-cuentemente, nuestra organi-zación de lucha, para impulsarla realización de la AsambleaConstituyente Comunitaria ysancionar la Ley de Leyes detodas las sangres del Perú-Tawantinsuyano, la reconsti-tución del Hallin Kausay y delEstado Plurinacional Confe-derado de Pueblos y Naciones,como reto del tercer milenio.

Marxismo, liberación ydescolonizaciónJorge Calle Espinoza

“¡Qué!.. ¿Nosotros los Kechuas no pensamos? ¡El Kechua piensa!…¡He ahí la lucha de ideas! ¡La lucha de cerebros!”. Esa es unasolemne frase en el artículo “Alegato por un marxismo andino: Marx,Mariátegui y los indios”, publicado por Pukara, Nº 74. El indio piensarevolucionariamente. Felicito a Pukara por una de sus más acertadaspublicaciones y paso a explicar por qué es así que lo creo.Significa el surgimiento de una corriente indianista imparable y que

logrará la descolonización, pues se libera de la sujeción intelectualy política occidental y genera la necesidad de construir un nuevocuerpo de interpretación política de nuestra realidad. Esos elementoshan, en la experiencia mundial, precedido a los movimientos políticosde descolonización en el resto del mundo. Y será una corrienteverdaderamente kechua, que nace en Acoria, Huancavelica.Algunos primarios dirán: ¿cómo va a ser liberación de la sujeción

intelectual y política occidental si reivindican al marxismo, que esoccidental? Es liberación, porque descarna los mecanismos de esadominación y denuncia las artimañas de que se ha valido el criollooccidentalizado para seguir dominando al indio. La dominación no escosa etérea de ideas. Es cosa concreta. Si hablamos de colonizaciónno nos referimos a asuntos de cultura, idioma, vestir, diferencias enel pensar. La colonización es la usurpación del poder político, unapoblación encima de otra que quita el poder político, la explotaeconómicamente, la elimina incluso físicamente. Esa dominación sevisibiliza porque el colonizador tiene exterioridades que le diferencian:su manera de ser, el color de su tez, su vestimenta, etc. Es decir,su raza y cultura. Como tiene su raza y cultura el colonizado. Peroeso no es la esencia. Son sólo expresiones y tienen importanciarelativa, pero lo esencial es el hecho social, histórico y político.Cuando atacamos la esencia de algo vamos a lo fundamental y

cuando nos perdemos en lo insustancial distraemos y frustramosnuestra lucha de liberación. Y es necesario saber que para seguiren el poder el criollo ha sido hábil en distraernos (además dereprimirnos). El español primero y el criollo después, ha utilizadocontra nosotros muchas armas. Pero el arma es el instrumento, noes el mal en sí. El mal es quien lo utiliza y para qué lo instrumentaliza.Entre esas armas está la ideología política del marxismo. En realidadel criollo utilizó al marxismo contra el indio, como utilizó TODAS lasherramientas teóricas que tuvo en su poder, incluido el indigenismo.En la liberación el colonizado se libera utilizando contra el colonizador

todas las armas, las suyas y las que puede arrebatar al explotador.Y entre esas armas están las herramientas de análisis histórico ysocial: ¡Está el Marxismo! Lo que indico podrá parecer evidente, sindiscusión, pero no es así, pues el criollo mantiene la dominaciónsobre el indio controlando su cerebro y como lo controla ahora es através del culturalismo. El culturalismo es una abominación que sirveal occidente. Nos hace creer que somos como seres de otradimensión, en los cuales no tienen ningún efecto las leyes socialesy ni siquiera las leyes fisiológicas que son universales.El occidente ha creado el pachamamismo. Ha distraído a nuestros

hermanos haciendo que repitan imbecilidades y se comporten comoniños, bailando en torno a fogatas, haciendo imprecaciones a diosesinexistentes, disfrazándose como imaginan se vestían nuestrosantepasados. El occidente y sus operadores son los que antesdividían a nuestras organizaciones oponiendo a la descolonizaciónemergente sus principios de una sola nación bajo los postulados delas clases sociales. Ahora ellos financian el pachamamismo y difundenideas imbéciles sobre la identidad india. Ellos utilizaban al marxismocontra el indio, y ahora tratan de apartar al indio del racionalismopolítico y de la utilización de herramientas como el marxismo.Son los criollos que han llenado libros sobre la «identidad india», y

la «cosmovisión andina», con categorías que les permiten hablar ennombre del indio. Algunos de nuestros hermanos han reproducidoesas ideas, mal copiado esos conceptos, creándose una identidadficticia y paralizadora. A esos hermanos los colonizadores le hanimbuido horror al pensamiento transformador y efectivo, fosilizándolospara ponerlos en su estante como prueba de la verdad de susinventos. Es hora de salir de esa payasada, de combatir y liberarnos.Asumamos todos una de las frases del citado artículo publicado enel Pukara Nº 74: “EL PROBLEMA DEL INDIO NO ES ASUNTO DEASIMILACIÓN O INTEGRACIÓN A LA SOCIEDAD DOMINANTE CRIOLLA,EL PROBLEMA DEL INDIO ES PROBLEMA DE LIBERACIÓN”.

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Respuesta a José Luis Saavedra:

El indio tampoco es el «doctorcitode pezuña hedionda enzapatada»Antonio Alipaz

Fausto Reinaga en La RevoluciónIndia aclaraba contra los mando-nes racionalistas de cualquiertiempo y lugar que el ser indio “noes el ‘campesino’ de ‘pezuñahedionda enzapatada’; no es unaclase social integrante de una so-ciedad burguesa abstracta, inexis-tente en Bolivia. El indio es unaraza: una raza milenaria y una cul-tura milenaria. Una raza fuerte,fortísima que ha resistido la arre-metida sanguinaria del occidente.El indio es una cultura invencida einvencible.” (Reinaga, 1970/2001:39). Creo que Reinaga quería decircon esto, y especialmente paralos jóvenes, que siempre hay disi-mulados entre nosotros buscandoaprovecharse de las genuinas con-quistas del pueblo, de cualquierpueblo subyugado en el mundo.Por este motivo, es necesariohacer caso del siguiente consejo:“Lo útil e inútil deben, como gene-ralmente sucede con Dios y el dia-blo, marchar juntos, y el hombreha de elegir.” (Gandhi, s.f.: 278).Esto debe ser así porque en el

artículo “La docta ignorancia dela Dra. Alison Spedding”, José LuisSaavedra acaba su (des) persona-lizada crítica de Alison SpeddingPallet, haciendo notar que en elpaís “el debate de la descoloni-zación se intensifica desde y apartir de la insurgencia contempo-ránea de los pueblos andinos:aymara y quechua.” (Saavedra,2012: 7). Creo que esta alusión alos pueblos andinos como principiode las acciones descolonizadorasen Bolivia, no es otra cosa másque un mañoso subterfugio —abusivo de todo lo que esa gentehace en busca de su libertad—para desahogarse de su resentidaimpotencia intelectual o, en el peorde los casos, para refrendar esedesvencijado estereotipo de unrenegado Fausto Reinaga.¿Cuántas más son las veces que

Wankar Reynaga debe recordarnosa muchos de nosotros sobre lacautela que debemos tener contraesos intelectuales despóticos, almomento de realizar nuestra orga-

nización política kheswaymarapara la descolonización?: “Lo malono es inútil. Enseña. El criollopolítico es típico. No tiene cara,tiene máscaras. No diferencia ver-dad de mentira, sino niveles deconveniencia. Encaja en variospartidos al mismo tiempo, inclusoenemigos. No lucha por una líneapolítica, usa todas. De temercuando alaba y sonríe. Se dividepara simular cantidad, firma convarios nombres declaraciones ymanifiestos. Comienza a crear par-tido, generalmente antes de elec-ciones, con la pintura, no con loscimientos. En aviso pagado en laprensa la primera declaración opi-na sobre política internacional ynacional, promete todo a todos,luce revolucionario con condenasa la opresión en general.” (Reyna-ga, 1977/2009: 312). Pienso queen esta descripción psicológica delos criollos muy bien puedeincluirse algún ‘qulla’ farsante.Afirmo esto de Saavedra porque

las descalificaciones supuesta-mente contundentes que hace deltexto de Spedding, parecen a lomenos un pésimo remedo de losoriginales de Fausto Reinaga. Haylibros de este último (e. g., TesisIndia) en la que su prosa alcanzalas mejores distinciones dialécti-cas, condensando en muy pocasexpresiones una auténtica invecti-va penetrante, dinámica, demole-dora. De esta manera, ¿qué auto-ridad categórica puede haber enlas negaciones de José Luis Saa-vedra cuando, por otra parte,apenas justifica su posicionamien-to de intelectual qulla postcolonialdiciendo que “en los Andes,emerge un horizonte epistémicoradicalmente distinto del logocen-trismo moderno occidental, que yase prefigura en el propio adve-nimiento del pachakuti y el consi-guiente retorno de las wak’as.”?(Saavedra, 2012: 7)Ahora, del texto de Spedding,

Descolonización. Crítica y proble-matización a partir del contextoboliviano (2011), sólo cabe regis-trar algunas minucias de forma-lidad. Después de leer los siempresugestivos análisis críticos de laautora, en este caso, sobre losantecedentes históricos de ladescolonización, sus principales

actores y enunciados, algunosdesarrollos supuestamente repre-sentativos en Latinoamérica y,finalmente, las actuales carica-turas en Bolivia, cualquiera puedepercatarse de que no existe ningu-na correlación entre las partes dela exposición que, por lo menosen los títulos, anuncia ‘a partir’, locual, dado el índice de contenidos,debiera expresar ‘para llegar’ o‘hacia’ el contexto boliviano. Entodo caso, si la intención del mismocontinuara afirmándose, entonces,sería necesaria la inversión delorden de los contenidos temáticosjunto con la respectiva reflexión,iniciándose ésta última, en conse-cuencia y efectivamente, a partirdel contexto boliviano, abriéndosedespués a las tramas latinoame-ricanas y profundizando en el resto—histórico, si se quiere— delmundo occidentalizado y/oorientalizado. Este detalle essignificativo porque desde elenfoque analítico contemporáneode las prácticas del lenguaje,sintaxis y prosodia hacen mucho,si es que no todo, del esquema,proceso y producto del enunciado.Mejor aún, creo que el análisis

crítico puede hacerse sólo a partirdel contexto boliviano, como dealguna manera se postula en elinteresante asunto del QuintoHorizonte: “La estructura formalde naciones-Estado independien-tes persiste hasta hoy, pero yopongo una fecha nominal de 1980ó 1985, para el inicio del QuintoHorizonte, señalado por la gene-ralización de la democracia parla-mentaria como forma de gobiernoen la región, procesos de integra-ción económica y política a travésde organizaciones como MERCO-SUR y UNASUR, y de integracióncultural indicada por las tele-novelas oriundas de uno u otropaís pero consumidas en toda laregión, la difusión internacional dela cumbia chicha y sus derivados,y en el campo de la alta cultura elllamado boom de la literaturalatinoamericana, si bien esto tuvosu auge en los años 1960 y fuemás bien un signo precursor delinicio de un periodo del Horizonte.”(Spedding, 2011: 111-112).No obstante de lo propuesto en

este entramado de caracterizacio-

nes descolonizadoras, todavía fal-taría conocer el tiempo y/o espa-cio concretos que le tocaríadesempeñar a Bolivia, ya que, deser así como se ha descrito, lasituación disminuida de su exis-tencia tanto económica y políticacomo social y cultural, no permi-tiría una participación equitativadel conjunto o partes de la pobla-ción nacional en los escenarioslatinoamericanos así dispuestos. Nisiquiera los aspectos culturalesdenotados en el consumo masivode telenovelas y cumbias podríaconvencernos de alguna fehacien-te integración regional que no seala misma del lugar donde se ori-ginan y difunden: Brasil y Vene-zuela (telenovelas), Argentina yPerú (cumbias). Tal vez, ¿nohubiera sido mejor acordarse delteatro popular (David Santalla enla comedia y en la tragedia…) ode la comercializada música andina(Kjarkas, hace ya tiempo inter-nacionales)?Del último inciso del pasaje

citado, referido a la incidenciainternacional de la literatura lati-noamericana, por supuesto quedaprobado que ninguna letra originalde la misma ha salido nunca denuestros escritores, ni siquiera delos más alienados imitadores deGabriel García Márquez o MarioVargas Llosa. A lo sumo, quizás,sólo pueda destacarse de nuestra‘alta cultura’ aquello que desde lostiempos coloniales —si es quetodavía no mucho más antes delas épocas del Tawantisuyu o losseñoríos aymaras— continúapersistiendo en el silogismo alto-peruano que viene apalabrándosemetódicamente en la pueril intelli-gentsia boliviana que dice todo sindecir nada. Sin embargo y a fuerzade razones plausibles, debe reco-nocerse que la propuesta de AlisonSpedding tiene mayores aporta-ciones de valor si es que, a fin decuentas, tuviéramos que compa-rarlas con muchas otras de nues-tros actuales pensadores locales,ya sean estos indios, mestizos,blancos o lo que fuera.Entonces, ¿habremos de que-

darnos con Fausto Reinaga en laesperanza insatisfecha de unaUniversidad India que albergue alos mejores hombres y mujeres de

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nuestro alrededor? A lo mejor,paradójicamente, el amauta nohabría elegido ahora tanto entrenuestros aindiados brutosintelectuales como mejor entre losamigos sinceros de los indios, yasean estos extranjeros como unaantropóloga inglesa: “La UIK -Universidad India del Kollasuyu- noserá una repetición de la uni-versidad mestiza, desde luego. Elpensamiento de la UIK será elpensamiento de los más grandessabios del mundo; de los grandeshombres y de todas las latitudesde la historia humana y de la tierra,que a lo largo de estos 4 siglos ymedio, han comprendido y defen-dido al indio. Vendrán y vivirán enla UIK en carne y espíritu, AlfredoMétraux, el sabio que vivió ypadeció entre los chipayas deBolivia, y presidió en la UNESCO alos sabios del mundo que estu-diaron la raza y el racismo; ven-drán los sabios-mayas DomingoMartínez Paredes, Ignacio Maga-loni Duarte, Ignacio RomerovargasYturbide; los etnólogos RafaelGirad (maya-suizo), Erland Nor-denskjold (antropólogo sueco); losindianistas Luis E. Valcárcel,Victoria de la Jara y Cohen, Guiller-mo Carnero Hoke… vendrán en fin,Paulo Freire, Iván Illich, HerbertS. Klein, Alejandro Lipschutz,Cornelius Zondag, Thomas Barthel(que acaba de descubrir la lecturadel quipus), Rodolfo Kusch…”(Reinaga, 1971/2010: 51)

FUENTES CONSULTADAS

GANDHI Mohandas Karamchand(s.f.), “Indian Opinion” en Unaautobiografía o la historia de misexperimentos con la verdad, Kraft,Buenos Aires.

REINAGA Fausto (1970/2001), “A lajuventud” en La revolución india,2da edición, Ediciones FundaciónAmaútica “Fausto Reinaga”, La Paz.

REINAGA Fausto (1971/2010),“Revolución cultural” en Tesis India,La mirada salvaje, 4ta edición, LaPaz.

REYNAGA Wankar (1977/2009),“Descolonizar Los Andes esindianizarlos o los kheswaymarasliberamos Los Andes o no hayliberación alguna” en Tawa IntiSuyu. 5 siglos de guerra india, 8vaedición, Producciones GuaraCultural, Chukiagu-MarkaKollasuyu.

SAAVEDRA José Luis (2012), “Ladocta ignorancia de la Dra. AlisonSpedding” en periódico mensualPukara. Cultura, sociedad y políticade los pueblos originarios (ediciónelectrónica), Qollasuyu-Bolivia,número 75, año 6, noviembre2012, pp. 6-7.http://www.periodicopukara.com/archivos/pukara-75.pdf (14:13 06/11/2012)

SPEDDING Alison (2011),Descolonización. Crítica yproblematización a partir delcontexto boliviano, ISEAT, La Paz.

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El sábado 10 de noviembre de 2012, en acto público celebrado en el auditorio del CEMSE en LaPaz, se presentó la Fundación para el Desarrollo y Conocimiento Andino Pukara, DyCA PUKARA.

Esta Fundación tiene personería jurídica mediante Resolución Administrativa Departamental Nº827/2012, emitida el 24 de agosto de 2012 por el Dr. Cesar Hugo Cocarico Yana, gobernador deldepartamento de la Paz.

Son miembros fundadores de DyCA PUKARA Berta Acarapi, Pedro Portugal Mollinedo, DanielSirpa Tambo, Edgar Maydana y Humberto Chalco.

El objetivo principal de esta Fundación es: “Constituir una organización que mediante la concepcióny ejecución de proyectos, planes y programas, basados éstos en la diversidad cultural, la insercióncreativa en un contexto global contemporáneo, los derechos de género y el respeto del medioambiente, pueda poner en valor los elementos del mundo indígena y popular para que así contribuyanal diseño de una nueva identidad boliviana, concebida ésta como el pleno desarrollo de la autoestimaindividual y colectiva, el establecimiento de referencias comunes para todos y la instauración delbienestar individual, social y cultural.”

Tiene como objetivos específicos:1. Plantear, viabilizar y ejecutar planes y proyectos de investigación en el campo de las ciencias

sociales, destinadas a conocer e interpretar la conformación, estructura y características de lasociedad boliviana, específicamente en sus sectores populares e indígenas.

2. Concebir y ejecutar programas, planes y proyectos en las áreas que permitan impulsar eldesarrollo productivo en todos sus componentes, en base a las características culturales de losdistintos sectores nacionales y a las necesidades de articulación e integración nacional y mundial.

3. Establecer mecanismos que permitan difundir al más vasto público los objetivos, logros ytrabajo institucionales, a fin de crear una conciencia colectiva fundamentada en los valores depluralidad, tolerancia y bien común.

4. Fomentar, concretar y ejecutar proyectos a nivel educativo y cultural, en donde se profundicela pluralidad y se reconozca los derechos establecidos en la Constitución y las leyes, en observaciónde las leyes y disposiciones en vigencia y sujeta a las respectivas autorizaciones administrativas.

DyCA PUKARA se encuentra en pleno proceso de organización, para lo que requiere la coordinacióny relación con todas las personas e instituciones que sean afines a sus objetivos. Quienes deseentomar contacto con DyCA PUKARA pueden escribir a: [email protected]

Presentación de la Fundación Para elDesarrollo y el Conocimiento Andino - Pukara,

DyCA PUKARA

En el sentido de las manecillas del reloj: Parte del público invitado al acto de presentación. El Director deDyCA PUKARA haciendo uso de la palabra. Parte de la exposición de publicaciones indígenas, a partir de1980. DyCA PUKARA es proyección institucional de la labor periodística de Pukara, el cual a su vez tienesu raíz en el trabajo de Chitakolla y del boletín que editaba esa organización en los años 80 y que hacíaparte de un vasto movimiento de prensa indígena en esa época. Fotos: Pukara