el punto de partida de la revolución internacional

Upload: joserutts

Post on 04-Jun-2018

218 views

Category:

Documents


0 download

TRANSCRIPT

  • 8/13/2019 El punto de partida de la revolucin internacional

    1/7

    El punto de partida de la revolucin

    internacional

    Antorcha nm. 8, mayo de 2000M.P.M. (Arenas)

    Algunas personas han echado en falta en nuestra labor de denuncia de la guerra imperialista unos

    planteamientos y consignas claras o realistaspara movilizar a las masas. A qu se puede atribuir

    que no hayamos propuesto nada para conseguir la pazy el desarme, llamando, en cambio a

    transformar la guerra imperialista en guerra civil revolucionaria? es que no resultara ms usto

    plantear otras alternativas como, por eemplo, la consigna de huelga generalcomo medio de

    detener la guerra? !ste puede parece un procedimiento mucho ms comprensible y realizable que

    la transformaci"n de la guerra imperialista en guerra civil, pero con ello no s"lo no contribuiramos

    a clarificar al movimiento revolucionario, sino que tenderamos a desviarlo por un camino falso.

    Ante todo hay que tener en cuenta, como ya hemos e#plicado otras veces, que, dada la situaci"n dedesconcierto y desorganizaci"n en que se encuentra el movimiento obrero y comunista

    internacional, actualmente no se puede plantear, como se hizo en ocasiones anteriores, la

    posibilidad de revoluci"n para antes de que estalle la guerra imperialista o como medio de evitarla.

    $a revoluci"n socialista no ha podido impedir la guerra que hoy ya es una realidad, pero esta guerra

    s puede, como ha sucedido otras veces, crear las condiciones que hacen falta para el triunfo de la

    revoluci"n proletaria. !ntre esas condiciones que se pueden ir creando en el curso de la guerra

    imperialista o hacia el final de la misma, destaca, de manera particular, el debilitamiento de los

    !stados, la radicalizaci"n del movimiento de masas, as como la formaci"n de sus destacamentos de

    vanguardia capaces de organizarlas y de conducirlas a la lucha por el derrocamiento de la burguesa.

    %ientras tanto, debemos ser precavidos y difundir consignas que permitan elevar la moral y la

    conciencia poltica de los trabaadores, tales como contribuir a la derrota de la propia burguesay

    transformar la guerra imperialista en guerra civil. &uede parecer que, actualmente, estas consignas

    no dicen nada'o dicen menos que la que llama a la huelga general, por eemplo(. )in embargo,

    desde nuestro punto de vista, dicen todo lo que se puede decir en estos momentos para contrarrestar

    la propaganda o las alternativaschovinistas, pacifistas y conciliadoras que propagan los diversos

    grupos y partidos reformistas y revisionistas.

    &uesto que no se trata de pedir a los imperialistas que se desarmenni de llevar a cabo de forma

    inmediata una acci"n de masas capaz de detener la guerra'cosa hoy da poco menos que

    imposible(, lo ms que podemos hacer es prevenir a las masas y ayudarlas a estar preparadas para

    que destruyan el sistema capitalista, que ha originado la guerra y todos sus males, en el momento en

    que aparezcan todas las condiciones favorables para ello. !stas condiciones habrn de aparecer,inevitablemente, a medida que se e#tienda y se agrave el conflicto, aumenten las cargas y sacrificios

    que la oligarqua financiera impone siempre a las masas y stas se vean obligadas a tomar una

    posici"n resuelta contra el sistema. &ara preparar y acercar ese momento debemos difundir las

    consignas que llaman a la derrota militar de la propia burguesa y a la transformaci"n de la guerra

    imperialista en guerra civil, ya que no pueden e#istir otras consignas que e#presen meor, desde una

    posici"n de principios, internacionalista y verdaderamente revolucionaria, los intereses del

    proletariado.

    )obre este particular, no est de ms recordar aqu el resumen que hizo $enin en *+ de las

    ense-anzas de la primera guerra imperialista mundialA propsito de la lucha contra el peligro de

    la guerra, pienso que la mayor dificultad reside en vencer el prejuicio de que es un asunto simple,claro y relativamente fcil. espondemos a la guerra con la huelga o la revolucin!" he ah lo que

    dicen generalmente a la clase obrera los ms destacados dirigentes reformistas y, con frecuencia,

  • 8/13/2019 El punto de partida de la revolucin internacional

    2/7

    el aparente radicalismo de esta respuesta satisface, tranquiliza, a los obreros, cooperativistas y

    campesinos. #al vez la actitud ms justa sera comenzar por refutar esta opinin de la manera ms

    categrica" declarar que sobre todo ahora, despu$s de la reciente guerra, slo la gente ms tonta o

    los mentirosos ms empecinados pueden asegurar que semejante respuesta al problema de la lucha

    contra la guerra tiene alg%n valor& declarar que es posible /responder/a la guerra con la huelga,

    as como es posible /responder/a la guerra con la revolucin en sentido literal, en el sentido ms

    simple de estas e'presiones(. $enin recomienda a continuaci"n0ay que e#plicar a la gente cul es la situaci"n real, hasta qu punto es grande el

    misterio de que est rodeado el nacimiento de una guerra y hasta qu punto la

    organizaci"n habitual de los obreros, aun cuando se llama revolucionaria, es impotente

    ante una guerra realmente inminente.

    0ay que e#plicar a la gente, de la manera ms concreta, c"mo ocurrieron las cosas

    durante la 1ltima guerra y por qu no podan ocurrir de otro modo. 0ay que e#plicar

    sobre todo la importancia del hecho de que la cuesti"n de la /defensa de la patria/ se

    plantea inevitablemente, y de que la mayora de los trabaadores la zana,

    inevitablemente, a favor de su burguesa. '*(

    !sta situaci"n que describe $enin y elgran misterioque rodea o encubre el nacimientode la guerra

    no se modific" esencialmente antes de la 22 3uerra %undial, aun cuando ya entonces, como es bien

    sabido, se haba consolidado la primera revoluci"n socialista de la historia y las ideas comunistas

    haban conquistado a la vanguardia proletaria en prcticamente todos los pases capitalistas

    desarrollados, as como en la mayor parte de las colonias y pases dependientes. !ntre los factores

    que intervienen en este resultado, $enin destaca el defensismoen que la burguesa plantea toda

    guerra de rapi-a, lo que hace que la mayora de los trabaadores zanjenla cuesti"n a favor de su

    burguesa. !n realidad, $enin no hace sino confirmar, sobre la base de la e#periencia, lo que ya

    !ngels haba anticipado que sucedera en una carta escrita a 4ebel el de diciembre de *55

    6onsiderara una guerra europea como una calamidad7 esta vez sera terriblementegrave7 el chovinismo se desatara por muchos a-os pues cada pueblo luchara por su

    e#istencia. !n 8usia, todo el trabao de los revolucionarios, que estn en vsperas de una

    victoria, sera aniquilado7 en Alemania, nuestro partido sera inmediatamente sumergido

    y destruido por la ola del chovinismo. $o mismo ocurrira en 9rancia.

    )in embargo, esta predicci"n un tanto catastr"fica o pesimista, cierta para el comienzo de la guerra,

    como la e#periencia puso de manifiesto, sera corregida ms tarde por el propio !ngels, como el

    mismo $enin habra de destacar en su artculo)alabras prof$ticas

    0e aqu c"mo uzgaba 9ederico !ngels la futura guerra mundial, hace ya ms de treinta

    a-os

    &ara &rusia:Alemania, en la actualidad no es posible ya ninguna otra guerra que la

    guerra mundial. ; sta ser una guerra mundial de escala y ferocidad sin precedentes.

  • 8/13/2019 El punto de partida de la revolucin internacional

    3/7

    terminar todo esto y quien ser el vencedor en esta contienda7 pero un solo resultado es

    absolutamente indudable el agotamiento general y la creaci"n de las condiciones para

    la victoria definitiva de la clase obrera. =al es la perspectiva si el sistema de la mutua

    competencia en los armamentos, llevado a sus e#tremos da, al fin, sus inevitables frutos.

    0e aqu, se-ores reyes y estadistas, a d"nde ha llevado a la viea !uropa vuestra

    sabidura. ; si no les queda otro remedio que empezar la 1ltima gran danza guerrera, no

    vamos a afligirnos mucho >... &uede ser que la guerra tal vez nos releguetemporalmente a un segundo plano, puede ser que nos quite algunas de las posiciones ya

    conquistadas. &ero cuando hayan desatado las fuerzas que ms tarde no seris ya

    capaces de dominar, cualquiera que sea el curso de los acontecimientos, al final de la

    tragedia os convertiris en ruinas y el triunfo del proletariado, o habr sido conquistado

    ya, o ser, a pesar de todo, inevitable. '(

    !n el comentario que sigue a esta cita de !ngels que nosotros hemos e#tractado, $enin e#plica

    Alguna que otra cosa prevista por !ngels se realiz" de modo distinto, pues no poda

    esperarse que el mundo y el capitalismo no sufrieran cambios en el transcurso de los

    treinta a-os de desarrollo imperialista vertiginosamente rpido. &ero lo ms asombrosoes que tantas de las cosas previstas por !ngels se estn cumpliendo @al pie de la letra

    !sto se debe a que !ngels hizo un anlisis de clase irreprochablemente e#acto y las

    clases y sus relaciones recprocas siguen siendo las mismas.'B(

    *as clases y sus relaciones recprocas siguen siendo las mismas. !sta afirmaci"n hecha por $enin

    en *+*5, es decir, despus de que se hubiera cumplido laprofeca cientficade !ngels, puede

    parecer contradictoria y hasta fuera de lugar si no se repara en que, como comenta el mismo $enin

    ms adelante en el te#to que acabamos de citar,+ngels describe las consecuencias acumuladas

    %nicamente por la poltica /e#terior/, sin referirse a la guerra interior, es decir, a la guerra civil, sin

    la cual no ha ocurrido todava ninguna revolucin importante en la historia, sin la cual no se ha

    imaginado el trnsito del capitalismo al socialismo ning%n mar'ista serio. si la guerra e'teriorpuede continuar por cierto tiempo sin provocar el /desorden irremediable/en el /mecanismo

    artificial/del capitalismo, es evidente, que la guerra civil ya no es posible imaginrsela sin

    semejantes consecuencias.

    Ah tenemos e#puesto el cuadro completo, que describe de forma admirable la relaci"n e#istente

    entre la guerra imperialista 'e'teriorpor naturaleza( y la guerra civil desencadenada por ella y que

    deber conducir a la revoluci"n socialista y cuyas consecuencias no pueden ser otras que las de

    provocar el desorden irremediableen el mecanismo artificial del capitalismo, ya que s"lo de esta

    manera se podrn cambiar las relaciones sociales que engendran la guerra. !sas relaciones sociales

    y la e#istencia de las clases vinculadas a ellas, por una serie de circunstancias que no viene al caso

    detenernos a estudiar aqu, no se han modificado en lo ms esencial desde el final de la primera

    guerra imperialista mundial hasta hoy, e incluso se podra decir que en ciertos aspectos se ha

    producido un retroceso, por lo que tambin se puede afirmar, como entonces lo hiciera $enin, que

    las clases y sus relaciones recprocas siguen siendo las mismas. $o cual significa que la guerra

    e#terior que ya ha comenzado podr continuar por cierto tiempo sinprovocar el desorden, pero que

    ese desorden irremediablellegar el da en que las masas obreras y otros amplios sectores de la

    poblaci"n abandonen su defensismoo patrioterismo y pasen a la acci"n contra el !stado de su

    propia burguesa7 de manera que la guerra ser, con toda probabilidad, tal como ha sucedido en

    otras ocasiones, el punto de partida de la revolucin internacional.

    !sto no nos e#ime de la obligaci"n de analizar hist"ricamente 'desde el punto de vista del

    materialismo dialctico( la guerra imperialista en curso, evitando aplicar los clich$sms al uso, tal

    como desde hace ya varios a-os est intentando hacer nuestro &artido. Algunos de esosjalonesquehan marcado esta trayectoria son bien reconocibles, no obstante conviene recordarlos a fin de sentar

    una lnea que nos permita orientarnos en el futuro. 0ace ms de diez a-os publicamos en

    http://f/Biblioteca/antorcha.org/cast/punto.htm#n2http://f/Biblioteca/antorcha.org/cast/punto.htm#n3http://f/Biblioteca/antorcha.org/cast/punto.htm#n3http://f/Biblioteca/antorcha.org/cast/punto.htm#n2http://f/Biblioteca/antorcha.org/cast/punto.htm#n3
  • 8/13/2019 El punto de partida de la revolucin internacional

    4/7

    8esistencia n1m. *C 'noviembre, *++D( un artculo '*a contradiccin -este-este( en el que se

    avanzaba un anlisis del desarrollo de las principales contradicciones de nuestra poca, a la vez que

    se concretaban algunos aspectos que han dado lugar a la presente situaci"n, especialmente en

    !uropa. $a conclusi"n que se desprende de dicho anlisis es que, hoy por hoy, las contradicciones

    interimperialistas estn pasando a un primer lugar. %eses antes, en medio de la borrachera

    pacifistaque haba provocado el final de laguerra fra, en el 2nforme al &leno del 6.6., celebrado

    en agosto del mismo a-o, ya se llamaba la atenci"n sobre este problema +l enconamiento de lascontradicciones interimperialistas es otro factor importante de la actual situacin que deber ser

    tenido en cuenta. +stas contradicciones siempre han e'istido, aunque ms o menos mitigadas

    debido a la identidad de intereses de la burguesa y de los +stados capitalistas que les mantiene

    enfrentados a los pases socialistas y a los movimientos revolucionarios. )ero %ltimamente sus

    disputas y rivalidades estn pasando a un primer plano. +l derrumbamiento del socialismo en los

    pases del +ste de +uropa y la perspectiva de un debilitamiento de la /00, han despertado los

    apetitos y las ansias de reparto. +l olor del botn e'cita a las fieras y $stas han comenzado la

    lucha, desplazando el centro de gravedad de las tensiones, desde otras regiones del globo, al centro

    y al este de +uropa. +sta lucha habr de traer graves consecuencias.

    Ena de esas consecuencias, sin duda la ms importante de toda la serie de actos de piratera quevenan cometiendo los !!EE en todo el mundo :por cuanto supuso unsaltocon el que acab" de

    configurarse la nueva situaci"n, el nuevo orden internacional: fue la guerra de agresi"n llevada a

    cabo contra 2raF.

    $os !stados Enidos :aseguramos entonces en la

  • 8/13/2019 El punto de partida de la revolucin internacional

    5/7

    Eni"n )ovitica, todo eso ha incitado al imperialismo yanFi a buscar una salida a la

    grave crisis que padece por el camino de la guerra.

    6omo se ha podido leer, entre los factores que configuran la nueva situaci"n, contbamos con la

    posibilidad de un corrimientode algunas de las nuevas potencias militares del lado de los pases

    socialistas. !ste es, sin duda, el punto ms floo de nuestra declaraci"n. ; se e#plica por la

    confianza que a1n tenamos en que, dada la crisis en que se hallaba sumida la E8)) 'o lo que a1nquedaba en pie del !stado )ovitico(, pudiera producirse una fuertesacudidaen su seno capaz de

    restablecer en poco tiempo su antigua posici"n en el mundo y de manera que obligara a un

    replanteamiento de su poltica interior. !n ello podan estar igualmente interesados otros !stados y

    pases, como la 2ndia, 2rn, etc., y formar un frente com1n anti:imperialista favorable a la

    revoluci"n popular. ...+n

    una situacin como $sta no hay lugar para las ilusiones pacifistas ni para las prcticas polticas

    ms o menos reformistas. 6ay que oponer resistencia al r$gimen capitalista en todas las formas

    posibles, desarrollar la desobediencia civil, negarse a pagar los impuestos, reforzar la

    organizacin clandestina y hacer preparativos en todos los terrenos para impulsar la guerra

    revolucionaria.

    =anto aquella apreciaci"n de las consecuencias inmediatascomo las medidas que se proponen para

    hacerles frente nos parecen fundamentalmente ustas y adecuadas siempre, claro est, que se tomen

    como lo que realmente son, es decir, como una apreciaci"n y orientaci"n general que deber ser

    precisada en cada momento o situaci"n concreta.

  • 8/13/2019 El punto de partida de la revolucin internacional

    6/7

    antimperialista y adaptar su tctica a las condiciones de la lucha contra la burguesa imperialista en

    cada pas. !n cualquier caso, todo esto habr de ser realizado sobre las s"lidas bases revolucionarias

    e internacionalistas del mar#ismo:leninismo. $a ruptura con el revisionismo tiene que ser radical7

    esto no ha de suponer una renuncia al legado hist"rico y a las tradiciones del movimiento comunista

    internacional. =ampoco habra que descartar la posibilidad de rescataruna parte de los vieos

    aparatosen uno u otro caso particular, lo que podra suceder sobre todo en pases como 6hina en

    una situaci"n de grave crisis econ"mica y poltica o de abierto enfrentamiento con el imperialismo.

  • 8/13/2019 El punto de partida de la revolucin internacional

    7/7

    comienzo de la guerra civil(, sino de aprovechar las mismas contradicciones interimperialistas y sus

    consecuencias sobre las condiciones de vida y la conciencia de decenas de millones de trabaadores,

    para encender la llama de la revuelta, desencadenar la guerra civil y arrasar con el sistema

    moribundo de la burguesa.

    !sta es la 1nica tctica acertada, la que corresponde aplicar a la situaci"n que hemos descrito, pues

    tiene en cuenta no s"lo la situaci"n actual y la que se puede crear llegado un momento, sino tambin

    los intereses fundamentales del proletariado internacional.

    Hotas

    '*( $enin, Ibras 6ompletas, tomo BB, !diciones )ociales, &ars, *+JB.

    '( 9. !ngels, $ondres, *K de diciembre de *55L.

    'B( $enin, + de ulio de *+*5, Ibras 6ompletas, tomo L.