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EL PARO Y LA SALUD DE LOS TRABAJADORES

Los paros y las huelgas han sido a lo largo de la historia un instrumento fundamental en la lucha de lostrabajadores por conquistar mejores condiciones de trabajo. Una de las jornadas más significativas de la historiaobrera contemporánea ocurrió en Chicago con el llamado a huelga general para el primero de mayo de 1886 conel objetivo de reducir la jornada laboral a ocho (8) horas diarias de trabajo. Así mismo, las huelgas insurreccionaleshan sido un instrumento clásico en la teoría revolucionaria para la confrontación a los gobiernos reaccionarios, ylas huelgas patronales un instrumento en las luchas políticas de los patronos contra los gobiernos progresistas, elreciente ejemplo chileno nos recuerda las huelgas de transporte y otros sectores productivos contra el gobiernode Allende, que ya se ha comprobado fueron financiadas por el gobierno de los Estados Unidos.

En Venezuela también existe una trayectoria de huelgas y paros en la lucha por las reinvidicacionessociales y laborales.

Lo que nunca se había visto en Venezuela era una huelga general o “paro cívico”, como se le denominó,que se extendió desde diciembre del 2002 hasta febrero del 2003 y en el que el sector empresarial con centralesy organizaciones sindicales - que deben representar los intereses de los trabajadores - unieron sus esfuerzos conlos de los medios de comunicación y la oposición política, manteniendo una paralización de las actividadesnacionales durante dos meses, sin conseguir sus objetivos políticos, pero con gravísimas implicaciones económicasy sociales para el país y los trabajadores.

Los costos sociales del paro son significativos. La federación de escuelas privadas, la cual desde el iniciose sumó al llamado a paro cerrando las escuelas, y la acción de los gremios pertenecientes a los viejos partidospolíticos del “status” logró paralizar casi completamente por tres meses la educación venezolana. Unos ochomillones de escolares de los niveles preescolar, escuela básica y secundaria quedaron sin clases por tres meses.Las universidades aunque divididas en opinión también redujeron notablemente su actividad.

La empresa privada se vio particularmente afectada. Las grandes empresas redujeron fuertemente suactividad. Los dueños de centros comerciales cerraron, obligando con ello a cerrar a pequeños comerciantes enel momnto que esperaban realizar las principales ganancias del año, pero sin exonerarlos de los pagos de alquileresy servicios.

Las consecuencias se vieron y aún no todas su superan al finalizar la huelga. El efecto del paro petrolerosobre la caída inmediata en los ingresos fiscales, la quiebra de pequeños comercios e industrias por la reducciónde la demanda, el incumplimiento o el atraso en los pagos a proveedores, etc.; se tradujo en quiebras y pérdidasimportantes de empleos, y en definitiva en un aumento de los niveles de pobreza de la población. No es sorprendenteque el crecimiento significativo de la pobreza en el corto plazo genere un aumento de la tasa de delitos e inclusoen los niveles de violencia social.

Impacto sobre la salud

En primer lugar se destaca el impacto sobre los servicios de salud. Muchos hospitales y ambulatorioscerraron sus puertas, manteniendo sólo la atención de emergencias. En algunos estados se paralizaron losprogramas preventivos, la consulta materna infantil, el suministro de información epidemiológica y, por supuesto,los afectados son la población trabajadora y de menores ingresos que no cuenta con recursos para recurrir a laasistencia médica privada. La cuantificación de los efectos de esa paralización es casi imposible, sin embargo,es evidente que los sectores que conducen el gremio médico, estrechamente vinculados a los partidos políticosde la “vieja Venezuela” se plegaron a la convocatoria demostrando una vez más el divorcio entre el gremiomédico tradicional, la ética médica y las necesidades de salud de la gente.

EDITORIAL

Un área de particular importancia fue la de la salud mental. Las campañas de propaganda y terrorismopsicológico adelantadas desde los medios de comunicación, principalmente televisivos impactaron profundamentela mentalidad de importantes sectores, sobre todo de las capas medias de la población, a las que se programó,con tácticas bien conocidas, para exacerbar sus odios y temores, induciéndolas a participar de un paro,garantizándole una victoria imposible, y sembrando resentimientos y frustración entre hermanos. El impacto deese paro sobre la salud mental del venezolano puede tener alcances inimaginables, desencadenando conflictossociales y enfrentamientos y afectando hasta las generaciones futuras.

Por último, el impacto para los trabajadores se evidencia en el cierre de numerosas fábricas y empresas,incremento en el desempleo, deterioro aún mayor de las ya precarias condiciones de trabajo, y perdida de lasventajas competitivas del mercado, lo que se traduce también en afectación de la salud mental. En el caso de lostrabajadores activos, tanto del sector formal como informal de la economía, el deterioro de las condiciones detrabajo y la conmoción social y económica se traduce en un incremento de los accidentes de trabajo y de lasenfermedades laborales.

Por todo lo anterior, no queda más que condenar la paralización irresponsable del país y alertar sobrefuturas acciones que puedan desencadenarse para lograr objetivos políticos en desmedro de los interesesnacionales y de las grandes mayorías. Reconstruir el país requiere el esfuerzo de todos y todas.

Trabajo y salud en niños, niñas y adolescentes trabajadores del sector agrícola / Ma. del Carmen Martínez,Virginia Blanco

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ARTICULO

Trabajo y salud en niños, niñas y adolescentestrabajadores del sector agrícola

Ma. del Carmen Martínez 1, Virginia Blanco 2

1 Magíster en Salud Ocupacional, Docente Investigador del IAES “Dr. Arnoldo Gabaldon”2 Especialista en Salud Ocupacional.

Resumen

Se dan a conocer las condiciones de trabajo ysalud de niños, niñas y adolescentes del sector agrícola,trabajo que en gran parte es considerado como invisibleya que se realiza en familia y no necesariamente lo hacefácil o aceptable. El mismo se realizó en una comunidadagrícola rural, del Estado Aragua. Venezuela (1998-1999),donde se identificaron 154 niños, niñas y adolescentes,con participación de 58. Se establecieron 3 grupos deacuerdo al tiempo de la jornada laboral, la actividad laboraly la exposición a plaguicidas: Grupo Levemente expuesto(17.2%), Grupo Moderadamente expuesto (44.8%) yGrupo Altamente expuesto (37.9%). Resultados: el 51.7%pertenece al género femenino, con edades entre 7 y 12años, el 89.5% son alfabetas, iniciando su educaciónbásica entre los 7 y 9 años de edad, el 98.3% pertenecea una familia nuclear completa. El 60.3% vive en casascon precarias condiciones, con sistemas inadecuados desuministro de agua potable y disposición de excretas,hacinamiento en el 7% de los casos. En cuanto al trabajo,60.3% comienza a trabajar entre los 7 y 11 años de edad,para ayudar a sus padres con los gastos, el trabajo esrealizado en forma permanente, con una relación detrabajo de tipo familiar. El 44.8% de los niños yadolescentes trabaja entre 4 a 8 horas diarias, la actividadmás frecuente es la recolección de frutas (coincide conel grupo moderadamente expuesto). En cuanto a laremuneración, sólo el 72.4% la recibe. La exposición afactores de riesgo es percibida por el 94.8%, el calor esel riesgo de mayor magnitud, seguido por los efectos delsol y los plaguicidas. El 29.3% ha sufrido algún accidentede trabajo, el grupo moderadamente expuesto con 15.5%en edades entre 7 y 12 años. Heridas por herramientascortantes en el 59.9% de los casos. El 79.3% no utilizanequipos de protección personal. Morbilidad reportada:parasitosis intestinal, diarreas, caries dentales, síndromeviral, infecciones de la piel, alteraciones respiratorias yneurológicas, todas estas patologías pudieran estarrelacionadas con la actividad laboral, debido a quepermanecen descalzos, están expuestos a plaguicidas,mantienen posiciones incómodas y permanecen de piedurante su jornada labor. La mitad (50%) presentamanifestaciones agudas por exposición a plaguicidas.Todo esto, sin contar con personal de salud que evalúe y

controle la exposición a los factores de riesgo en el trabajoy sus condiciones de salud.

Palabras claves: Trabajo Infantil, menor trabajador.

Abstract

The labour conditions and health of working kidsand teenagers in the agriculture sector, from a ruralcommunity of ‘Tovar’ Municipality, located in AraguaState (1998-1999), is outlined identifying 154 workingkids and teenagers, with 37% (58) participants. Accordingto the labour journey time, labour activity and exposureto pesticides, 3 groups were established: Slightly exposed(17.2%), Moderately exposed (44.8%) and Highlyexposed (37.9%). Results: 51.7% are female and agedbetween 7 and 9 years, 89.5% are illeterate, initiatingtheir basic education from 7 to 9 years old, 98.3% belongsto a complete nuclear family. 60.3% lives in houses withprecarious conditions and inadequate basic services, 7%of the cases are in accumulations. Concerning the labour60.3% start working from 7 to 11 years old, to help theirparents with the expenses. The work is done permanently,with a family labour relationship 44% of the kids andteenagers work from 4 to 8 hours daily, the most frequentactivity is the fruit recollection (coinciding with themoderately exposed group). In account of, theremuneration only 72.4% receives it. The exposure torisk factors is perceived by 94.8%, the heat is the riskon major magnitude, followed by the sun effects andpesticides. The 29% have suffered some labour accident,the moderately exposed group with 15.5% aged between7 and 12 years. Wounds with cutting tools in a 59.9% ofthe cases. The 79.3% do not use personal protectionequipment. Reported Morbidity : Intestinal Parasite,Diarrhea, tooth caries, viral syndrome, skin infections,breathing and neurological alterations, all these pathologiescan be related with the labour activity, since they remainbear foot, are exposed to pesticides, remain inuncomfortables postures and keep standing during thewhole labour journey. Half (50%) presents acutemanifestations caused by their exposure to pesticides. Althis, without health personnel attendance to evaluate andcontrol their exposure to the risk factors at work and itshealth conditions.

Key Words: Infant Work, Underaged work

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Salud de los Trabajadores / Volumen 11 Nº 1 / Enero 2003

Introducción

“El trabajo infantil destruye al ser humanodos veces, como niño y como adulto”

(Barnen, Radda. 1995).

En América Latina y Venezuela no se excluye,los niños, niñas y adolescentes trabajadores tienen unapresencia cada vez mayor en el mercado laboral comoproducto de la intensa crisis económica, la que hagenerado altos costos sociales y políticos, profundizadosaún más por la aplicación de programasmacroeconómicos de ajuste estructural; de esta manerase ha agudizado la pobreza y la marginalidad por lo quese ha abierto paso a la creciente incorporación de unmayor número de niños y adolescentes al trabajo(DATANALISIS.1998).

Según cifras que maneja el Fondo de lasNaciones Unidas para la Infancia (UNICEF), paramediados de 1998 en el mundo en desarrollo trabajanmás de 250 millones de niños entre 5 y 14 años, lo queequivale a uno de cada cuatro niños y en muchos casoslo hacen en condiciones de peligro o explotación(UNICEF 1999).

En Venezuela conviven 9.583.885 niños, niñasy adolescentes, que representan el 41.3% de lapoblación total. De ellos, sólo 2.290.549 recibenexcelente educación, gozan de servicios de salud ycomen por lo menos 3 veces al día y por supuesto, notrabajan. (DATANALISIS 1998). No obstante el76.1%, es decir 7.293.336 restantes, son pobres y másde la cuarta parte engrosan la lista del rubro extremo(estrato E de la clasificación socioeconómica de lapoblación) en la cual se encuentran quienes están bajola tutela de padres que ganan 100 mil bolívaresmensuales o menos (actualmente 67$); la familia estáconformada en promedio, por más de cinco personas ylas condiciones de vivienda son precarias (CECODAP.1998).

De acuerdo a lo señalado por la OIT, si bien eltrabajo de niños, niñas y adolescentes está difundidotanto en las zonas rurales como urbanas, existe unatendencia a ocultarlo, pues el trabajo en menores de 14años fue prohibido en 1982. En consecuencia, no resultafácil presentar un cuadro completo del trabajo en niños,niñas y adolescentes en el ámbito internacional. A latemprana edad de 6 años, el niño campesino comienza

a participar en el trabajo productivo y se inicia tambiénsimultáneamente en la división social del trabajo, basadaen el género: los niños pastorean, recolectan leña ypasto, traen agua, siembran y cosechan y las niñasordeñan, cocinan, hilan y cuidan a sus hermanos. Serniño campesino y ser niño, niña o adolescente quetrabaja, es lo mismo. El trabajo es parte esencial de lavida del campesino. (O.I.T 1997).

Con relación a la edad mínima permitida paratrabajar, Venezuela no se pliega a la recomendacióninternacional de los 15 años, contenida en el Convenio182 de la OIT, sino a la excepción para los países conproblemas en su economía y en el sistema educativo.De esta manera la Ley Tutelar del Menor, como laLey del Trabajo establecen los 14 años como edadmínima aceptable para trabajar en empresas,explotaciones y establecimientos comerciales,industriales y mineros (Ley Tutelar del Menor 1984,Ley Orgánica del Trabajo 1990)

A pesar de existir una edad límite, la Ley delTrabajo introduce flexibilidades, algunas yacontempladas en la Ley Tutelar del Menor, queestablecen entre los 12 – 13 años la posibilidad detrabajar con previa autorización del Instituto Nacionaldel Menor o las autoridades del Ministerio del Trabajo,“siempre que sean adecuadas con su estado físico ygaranticen la continuidad educativa”.

También por la realidad misma del ámbito rural,una excepción se hace para los niños, niñas yadolescentes del campo, quienes pueden trabajar apartir de los 10 años. “Conscientes de que la mismaestructura económico-social de la sociedad venezolanaes la que exige en múltiples ocasiones el trabajo precozde los niños y adolescentes como un modo desubsistencia personal y hasta familiar, se permite eltrabajo de menores de catorce (14) años y mayores dediez (10), única y exclusivamente en los trabajosrurales”. (I.N.A.M, 1980).

El sesgo legalista en el tratamiento del problemadel trabajo de los niños y adolescentes ha hecho quelas soluciones se enfaticen sobre la abolición progresivay la regulación del trabajo de niños, niñas y adolescentesa través de leyes, sin embargo no se ha tratado deprofundizar en las causas y consecuencias de estefenómeno y, por sobre todo en pensar cuales son laspolíticas sociales que deberían atacar su origen y

Trabajo y salud en niños, niñas y adolescentes trabajadores del sector agrícola / Ma. del Carmen Martínez,Virginia Blanco

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realidad actual. Siendo así, las leyes no pasan más alláde las buenas intenciones declaradas, mientras el capitalsustrae los beneficios de una mano de obra barata, defácil acceso y que le permite evadir la normativa deseguridad social.

En este sentido es importante señalar que elPrograma Internacional para la Erradicación delTrabajo Infantil (IPEC), adelanta investigaciones enCentroamérica donde es importante la incorporacióndel niño al trabajo agrícola en plantaciones y en las quese registran características similares en cuanto la bajaescolaridad de los padres, incorporación de los niños alas escuelas pero con actividad laboral adicional losfines de semana o en periodos vacacionales, los salariosde los niños incluidos en el salario de los padrestrabajadores y que el salario percibido por los niñosdebe ser incorporado a los gastos domésticos (Pearsony Jensen, 2001).

Datos aportados por la Oficina Central deEstadística e Informática (OCEI), en los censos detrabajadores de 1981 y 1991 ubica la población de niños,niñas y adolescentes trabajadores (entre 10 y 17 años)con un aumento de 8,5% y 13,9 % respectivamente,en relación a la población trabajadora adulta en general(OCEI 1999). Esta cifra tiende a incrementarse cadaaño y para el primer semestre de 1998 la OCEI, reportaque existen 569.757 niños y adolescentes que trabajanen promedio ocho horas diarias, de los cuales 139.021tienen menos de 13 años, el 75,7% del total tienenentre 13 y 17 años (OCEI,1998).

De acuerdo a los datos aportados por el BancoInteramericano de Desarrollo (BID) en su informeanual, en Latinoamérica existen áreas laborales dondehay una ubicación de niños, niñas y adolescentes entre5 y 14 años como son: agricultura 70,9%; fabricaciónindustrial 8,3%; venta y restauración 8,3%; servicios6,5%; transporte y almacenamiento 3,8%; construcción1,9%; y minas 0,9% ( BID 1997).

Los niños, niñas y adolescentes que trabajan yen especial los que trabajan en el sector agrícola, nohan sido considerados como trabajadores, sin embargo,es importante tomar en cuenta que el hecho de que eltrabajo se realice en casa o en una familia nonecesariamente lo hace más fácil o aceptable. En lospaíses desarrollados, la abrumadora mayoría de los niñosque trabajan lo hacen en la agricultura, en empresas

familiares o no, durante las vacaciones escolares yfuera de las horas de escuela, pero sobre todo en épocade cosecha-siembra, efectuando tareas muy diferentes,que a veces pueden ser pesadas y peligrosas(OIT.1980). En la agricultura carencial de muchospaíses tercermundistas es común que los niños formenparte del equipo de trabajo constituido por toda la familia:realizan tareas como desherbar, esparcir abono y cuidarlas plantas, pero muchas veces participan en los trabajospesados de los adultos: labranza, siembra fumigación ycosecha. (OIT 1980).

El trabajo infantil puede representar una parteconsiderable de la fuerza de trabajo en la agriculturacomercial ,asociada a la producción de rubros como elcafé, cacao, caucho y otros productos básicos, tal comolo reportan estudios realizados en Brasil, México yKenya donde el 25 y el 30% de la fuerza de trabajoestá constituido por menores de 15 años (OIT. 2000).

No se trata únicamente de que los niños, niñas yjóvenes no puedan efectuar trabajos tan pesados comolos adultos, o que una misma cantidad de trabajo puedatener consecuencias más graves para ellos; ocurretambién que los niños, niñas y adolescentes reaccionanal ambiente de trabajo en forma diferente a la de losadultos. Están más expuestos que éstos a las lesionesprofesionales, por falta de atención, fatiga, juicioserróneos y conocimiento insuficiente del proceso detrabajo, y también por que los equipos, las máquinas,las herramientas y la planta física de la mayor parte delos lugares de trabajo están diseñadas para los adultos.(OMS 1997).

La utilización de plaguicidas más eficaces, quesi bien representan beneficios y progreso, no dejan deser factor de riesgo para la salud de los trabajadoresde la agricultura y muy especialmente en los niños yadolescentes trabajadores del sector agrícola, quienesdesempeñan sus actividades sin ningún sistema deprotección, convirtiéndose en una problemáticaocupacional y de salud pública de gran envergadurapara cualquier país que se interese en la protección delos niños y adolescentes agricultores.

En resumen, es evidente que el empleo de manode obra infantil en las condiciones en que se suelerealizar la actividad agrícola, la cual genera frecuentesaccidentes laborales y enfermedades profesionalestipificadas para los adultos, también es nociva para el

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Salud de los Trabajadores / Volumen 11 Nº 1 / Enero 2003

niño, la niña y los adolescentes de manera directa eindirecta y sus secuelas perdurarán en la vida adulta.

Cuando un niño decide incorporarse al trabajo,cree estar tomando una decisión individual, pero no esrealidad, ha sido impulsado por la actitud de los padresy de todo el tejido social en que está inserto. Aceptaasí un papel que lo hace victima e incluso cómpliceinvoluntario de una situación injusta. Una vez admitidaesta premisa, se hace evidente que el entorno familiar(padres u otros familiares) se beneficia directa oindirectamente de la explotación de sus niños, noconsideran que están cometiendo un acto deliberadode despotismo, más bien creen que les asiste un derechonatural a aprovechar todos los recursos familiares (OIT.1980).

El trabajo de los niños, niñas y adolescentes delsector agrícola con mucha frecuencia se asocia a laservidumbre por deudas, una de las peores formas detrabajo infantil. Las familias mas pobres cuyo trabajode la tierra no les permite la subsistencia pueden verseen la necesidad de ofrecer a sus hijos en servidumbrepara que realicen trabajo agrícola o doméstico a fin depagar deudas o subsistir (OIT. 2001).En definitiva laresponsabilidad de que los niños, niñas y adolescentesestén incorporados al campo laboral es de la sociedaden su conjunto.

Existen actualmente varias alternativas paraevaluar la calidad de vida, una de ellas es la capacidadpersonal, es decir, lo que sean capaces de hacer laspersonas en varios aspectos de la vida y de suexpectativa de vida. Se necesita saber de la salud y delos servicios médicos, conocer de su educación, y nosólo de la disponibilidad de ésta sino de su naturaleza ycalidad, se requiere información del trabajodesempeñado, si es satisfactorio o monótono, sidisfrutan de alguna medida que dignifique su existencia,además saber de las relaciones familiares y lasrelaciones intergéneros, saber cómo la sociedad permitea las personas imaginar, maravillarse, sentir emociones(amor y gratitud); es decir puede encasillarse ytabularse.

El presente trabajo se plantea como objetivodeterminar las condiciones socioeconómicas, de trabajoy salud de los niños, niñas y adolescentes trabajadoresdel sector agrícola en una Comunidad del MunicipioTovar, del Estado Aragua; para lo cual se contempla

la distribución por edad y género del grupo de estudio,se describen las características generales del estratosocioeconómico al que pertenecen, la escolaridad, laconformación del grupo familiar, las condiciones devivienda (desde el punto de vista de servicios), lasituación laboral actual en el sector agrícola en cuantoa condiciones y medio ambiente de trabajo, la edad deinserción de niños y adolescentes al campo de trabajo,la naturaleza de las actividades realizadas, los factoresde riesgo asociados al trabajo y los principalesproblemas de salud que aquejan a estos niños, niñas yadolescentes trabajadores. Esto con la meta de dar aconocer las condiciones en que se desarrollan nuestrosniños en el campo y la de promover el desarrollo depolíticas que garanticen una mejor calidad de vida através del binomio gobierno-sociedad.

Marco Metodológico

Se desarrolló un estudio descriptivo, durante elperiodo octubre 1.998 enero 1.999, en un grupo deniños, niñas y adolescentes trabajadores del sectoragrícola, residentes en la comunidad “Las Hernández”del Municipio Tovar, del Estado Aragua, quedesempeñan labores agrícolas de recolección de frutas,sembrar, ayudar en la a aplicación plaguicidas, aplicardirectamente plaguicidas, mezclar plaguicidas, podar,o cualquier otro tipo de actividad agrícola, recibieran ono remuneración por dicha labor y que quisieranparticipar en el estudio.

Se identificaron 109 niños y niñas en edadescolar de la comunidad y 45 adolescentes, de los cuales40 niños y niñas y 18 adolescentes cumplían con losrequisitos antes mencionados, por lo que la población aestudiar estuvo conformada por 154 trabajadores.

Los niños, niñas y adolescentes y sus respectivosrepresentantes fueron informados sobre el proyecto arealizar, obteniendo su aprobación. En algunos casos,el instrumento de recolección de la información fueaplicado a los representantes de algunos niños y niñasque por su edad no sabían responder.

Se diseñó y utilizó como instrumento para larealización del estudio, una encuesta de 39 preguntasagrupadas en seis partes: datos de identificación,escolaridad, grupo familiar y vivienda, trabajo, saludreproductiva, condición de salud y el examen clínicointegral.

Trabajo y salud en niños, niñas y adolescentes trabajadores del sector agrícola / Ma. del Carmen Martínez,Virginia Blanco

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Se realizó una prueba piloto de 5 encuestas paraprobar la comprensión de las preguntas y el tiempo deejecución de la misma, dando como resultado preguntasde fácil comprensión y un tiempo promedio de 7 minutospor participante para las respuestas, además de 10minutos para la evaluación clínica.

En el aspecto del Trabajo se contempla lasiguiente información:

Edad de inicio de la actividad laboral, el motivode inicio, actividades anteriores, horario de trabajo,remuneración percibida, beneficios, si trabaja en familiao con terceros, tipo de actividad agrícola que realiza,productos agroalimentarios con los que trabaja, seinvestigó sobre el conocimiento y percepción de dañoa la salud del proceso laboral y los factores de riesgoslaborales, se les interrogó a cada niño, niña yadolescente si sentían alguna molestia durante o despuésdel trabajo, como dolor, cansancio, fatiga ó algún otrosíntoma en alguna parte de su cuerpo . Se interrogósobre el uso de equipos de protección personal durantela ejecución de las actividades laborales, además de laocurrencia de accidentes en el trabajo.

El grupo de estudio se clasificó de acuerdo a laexposición a diversos factores de riesgos en leve,mediano y altamente expuestos, tomando enconsideración las características de la actividad y eltiempo de exposición.

Levemente expuestos : los niños, niñas y adolescentes,quienes realicen una actividad laboral basada en la podade matas, limpieza de terrenos, siembra y recolecciónde frutos y vegetales (excepto durazno y fresas) y quedicha actividad tenga una duración entre 1 y 4 horasdiarias.

Medianamente expuestos:a) Los niños, niñas y adolescentes cuya actividad

laboral este basada en la siembra y recolecciónde duraznos y fresas (por la frecuencia deaplicación de plaguicidas en estos cultivos, yaque se realiza cada 15 días o cada mes); cuyaduración sea menor de 9 horas por jornada.

b) Los niños, niñas y adolescentes que realicen lasactividades del primer grupo (levementeexpuestos) pero que empleen en ella de 5 a 8horas diarias.

Altamente expuestos: son los niños, niñas yadolescentes

a) Quienes realicen una actividad laboral basadaen la mezcla de plaguicidas, fumigación o ayudaen la fumigación independientemente del tiempode exposición.

b) Quienes además realicen las actividades delprimer y segundo grupo pero empleando de 9 a12 horas diarias.

En el examen clínico se evalúan los signosvitales, examen físico con reporte de hallazgos porórganos y sistemas, evaluación del estado nutricional ydel crecimiento, empleándose las variablesantropométricas peso y talla, las cuales se analizaroncon los indicadores peso/talla (P/T), peso/edad (P/E) ytalla/edad (T/E), según las pautas de la OMS, vigentes.

Resultados

Fueron evaluados un total de 58 niños, niñas yadolescentes trabajadores del sector agrícola donde elrango de edad estuvo entre 3 y 17 años con promediode 11.8 años y una desviación estándar de +/- 3.06(Gráfico Nº 1). De acuerdo a la distribución por edad,el 67%, mas de la mitad, es menor de 12 años, lo quehabla de cómo niños de tan corta edad estánincorporados a las actividades laborales. De ellos, 28(48,3%) eran del género masculino y 30 (51,7%) delgénero femenino.

Gráfico Nº 1Distribución por edad de niños, niñas y adolescentestrabajadores del sector agrícola, "Las Hernández",

Municipio Tovar, Estado Aragua. 1999

Fuente: Encuesta niños, niñas y adolescentes trabajadores del sectoragrícola

< 6 años7 - 12 años

13 - 17 años

0%

10%

20%

30%

40%

50%

60%

Edades

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Características Socioeconómicas:

Escolaridad: el 89.5% del grupo de estudio sonalfabetas y seis (10.5%) son analfabetas, en este grupose incluyen niños, niñas y adolescentes que no sabenleer y escribir, a pesar de haber comenzado la educaciónbásica.(Cuadro Nº 1).

La edad de inicio en la actividad escolar oscilaentre 4 y 9 años de edad con un promedio de 6.64años y una desviación estándar de +/- 0.92. Se observaque el 50.9% de los niños, niñas y adolescentes delsector agrícola comienzan a estudiar entre las edadesde 7 a 9 años.(Cuadro Nº 2).

Alfabetismo Nº %

Total 57 100

Alfabetas 51 89.5Analfabetas* 06 10.5

Fuente: Encuesta*Se excluye a un niño de 3 años que no estudia.

Cuadro Nº 1Alfabetismo. Niños, niñas y adolescentes trabajadores

del sector agrícola. “Las Hernández”, Municipio Tovar,Estado Aragua. 1999.

4 - 6 28 49.17 - 9 29 50.9

Edad (años) Nº %

Total 57* 100

Fuente: Encuesta*Se excluye un niño de 3 años que no ha iniciado la escuela.

Cuadro N° 2Edad de Inicio escolar. Niños, niñas y adolescentestrabajadores del sector agrícola. “Las Hernández”.

Municipio Tovar, Estado Aragua. 1999.

Con respecto a la condición escolar actual, 48de ellos (84.2%) se encuentran estudiando, 43 (75.4%)en el nivel de primaria (primero a sexto grado) y 14(24.6%) en el nivel de secundaria (básico ydiversificado, total 5 años); 9 de ellos (15.8%) dejaronde estudiar al culminar el sexto grado de educaciónbásica (Cuadro Nº 3).

Veintiocho de ellos (49.1%) han repetido algúngrado durante sus estudios; 22 (38.6%) una vez y 6(10.5%) han repetido dos veces algún grado escolar.

Encontramos niños con 8 años de edad en elprimer grado de educación básica, así como niños de10 años de edad en segundo grado de educación básicae igualmente adolescentes de 16 y 17 años en séptimogrado.

Estructura familiar:

Para cincuenta y siete niños, niñas yadolescentes (98.3%) el tipo de familia es el nuclearcompleta, conformada por padres y hermanos con unnúmero de personas promedio de 5.7 y una desviaciónestándar de +/- 3. Sólo uno de los niños (1.7%) vivecon amigos y no con sus padres.

La relación habitante/habitación fue, enpromedio 2.4 +/- 0.2 en un 86% de los casos,encontrándose la condición de hacinamiento (más de 3habitantes por habitación) en sólo un 7% de los casos,es decir una relación habitante/habitación de 5.

Características de la vivienda:

Se encontró que 35 de los niños, niñas yadolescentes trabajadores (60.3%) viven en casasconstruidas con bahareque (barro y pasto) y 23 (39.7%)en casas con paredes de bloque. Con respecto a ladisposición de las excretas, el 69% de los casos tienenletrinas o pocetas; es de hacer notar que en un 31%de las viviendas no cuentan con ningún sistema dedisposición de excretas. En un 93% de los casos, elsuministro de agua potable a estas viviendas no es através de tuberías sino por conección con mangueraproveniente de un tanque de agua general, quesuministra la Alcaldía del Municipio Tovar .

Nivel Educativo Condición escolar Total

Estudia deDejó estudiar

Nº (%) Nº (%) Nº (%)

Primaria 43 (75.4) - - 43 (75.4)

Secundaria 5 (8.8) 9 (15.8) 14 (24.6)

Total 48 (84.2) 9 (15.8) 57* (100)

Fuente: Encuesta*Se excluye un niño de 3 años que no ha comenzado a estudiar.

Cuadro Nº3Nivel educativo y condición escolar. Niños, niñas yadolescentes trabajadores del sector agrícola. “LasHernández”, Municipio Tovar, Estado Aragua. 1999.

Trabajo y salud en niños, niñas y adolescentes trabajadores del sector agrícola / Ma. del Carmen Martínez,Virginia Blanco

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Actividad Laboral:

La edad de inicio en actividades laborales varíaentre 2 y 13 años con una media de 7.5 años con D.Sde +/- 2.3. El 60.3% de los niños, niñas y adolescentescomenzaron a trabajar entre la edad de 7 a 11 años,pero es importante señalar que el 32.8% de elloscomenzaron a trabajar cuando tenían entre 2 y 6 años(Gráfico N°2)

En el Gráfico N° 3 se presenta la informaciónsobre la relación de trabajo; la misma es en el 72.5%de los casos familiar y en el 27.5% no familiar. Alplantearse la relación de trabajo y pago deremuneración, encontramos que el 72.4% de los niñosy jóvenes trabajadores reciben remuneración. Sepresenta la situación en dos niños, con relación de trabajono familiar, que no reciben remuneración.

2-6 Años7-11años

>12 años

0%

10%

20%

30%

40%

50%

60%

70%

EdadesEdades

Gráfico Nº 2Edad de comienzo en actividades laborales de niños,

niñas y adolescentes trabajadores del sector agrícola,comunidad "Las Hernández", Municipio Tovar,

Estado Aragua. Enero 1.999

Con respecto a los antecedentes laborales, el41.4% ayudaba en el hogar, un 3.4% realizaba trabajosfuera del hogar y el 55.1% no tiene antecedenteslaborales (Cuadro Nº 4 ).

Ocupación anterior Nº %

Ayudaba en el hogar 24 41.4Otro trabajo 2 3.5Ninguna actividad 32 55.1

Total 58 100

Cuadro Nº 4Antecedentes laborales. Niños, niñas y adolescentestrabajadores del sector agrícola. “Las Hernández”,

Municipio Tovar, Estado Aragua. 1999.

Fuente: Idem.

Sobre la motivación a la actividad laboral, el63.8% señaló la necesidad de ayudar a sus padres, el17.2% por necesidad de acompañar a sus familiares,el 10.3% por aprender el oficio y un 8.6% por iniciativapropia.(ver cuadro Nº 5).

Gráfico Nº 3Relación de trabajo y remuneración en niños, niñas y

adolescentes trabajadores del sector agrícola, comunidad"Las Hernández", Municipio Tovar, Estado Aragua.

Enero 1.999

0%

10%

20%

30%

40%

50%

Familiar No familiar

Remuneración

Noremuneración

Relación de trabajo

Familiar No familiar

Fuente: Encuesta.

El monto de la remuneración en los casos derelación de trabajo no familiar, oscila entre los 1.001 y2.000 bolívares diarios por su actividad laboral (1,4$).Los niños, ñiñas y adolescentes que trabajan con suspadres y que reciben remuneración, la misma es de unmonto menor, llega en algunos casos a Bs.1.000 (0,6$).

Motivo Nº %

Ayuda a la familia 37 63.8

Acompañar a familiares 10 17.2

Aprender el oficio 6 10.4

Por iniciativa propia 5 8.6

Total 58 (100)

Fuente: Encuesta.

Cuadro Nº 5Motivación al trabajo. Niños, niñas y adolescentes

trabajadores del sector agrícola. “Las Hernández”,Municipio Tovar, Estado Aragua. 1999.

Fuente: Encuesta.

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ARTICULO

Salud de los Trabajadores / Volumen 11 Nº 1 / Enero 2003

Las actividades laborales a las que estáincorporado el grupo de estudio son: 55.2% recolecciónde frutos y vegetales, en este rubro se incluye niñosque sólo recolectan o siembran y los que realizan ambasactividades al mismo tiempo. El 29.3% se dedica aactividades relacionadas con la fumigación, es decirniños que mezclan plaguicidas, sostienen manguerasde fumigación y/o niños que fumigan directamente loscultivos. El 15.5% es decir, 9 de los niños se dedicasólo a la poda de matas y/o limpieza de terrenos.(Gráfico N°4)

Durante la entrevista y la evaluación clínica,prácticamente todo el grupo de niños y adolescenteevaluados refirió percibir condiciones en el trabajo quepueden afectar la salud.

El 96.4% percibe que el calor es la condición enel trabajo de mayor magnitud y que puede afectar lasalud, seguido por los efectos del sol con 69.1%, laexposición a los plaguicidas en el 36.4%, eldesplazamiento de grandes distancias 27.3% y enquinto lugar la bipedestación prolongada con 25.5% defrecuencia (Cuadro Nº 7).

RecolecciónFumigación

Limpieza de

terreno

0%

10%

20%

30%

40%

50%

60%

Tipo de actividad

Gráfico Nº 4Tipo de actividad realizada por niños, niñas y

adolescentes trabajadores del sector agrícola, comunidad"Las Hernández", Municipio Tovar, Estado Aragua.

Octubre 1998 - Enero 1999

Fuente: Encuesta.

Tiempo Nº %

4 16 27.6

5 - 08 40 69.0

9 - 12 2 3.4

Total 58 100

(horas/día)

<

Cuadro Nº 6Jornada laboral. Niños, niñas y adolescentes

trabajadores del sector agrícola. “Las Hernández”,Municipio Tovar. Estado Aragua. 1999.

Fuente: Encuesta

Es de hacer notar que de acuerdo a la actividadrealizada por los niños, niñas y adolescentes unos estánen mayor contacto con plaguicidas que otros. Los quese dedican a la recolección de duraznos y fresas estánmas expuestos a los plaguicidas que los que recogencafé, debido a la frecuencia de fumigación de loscultivos. Igualmente, los que ayudan en la fumigacióny los que fumigan propiamente tienen aún más contactocon los plaguicidas, de allí la importancia de lasactividades al momento de la evaluación de lascondiciones de salud de cada grupo en particular.

A los fines de clasificar la exposición se investigóademás sobre la duración de la jornada laboral diariaobteniéndose los siguientes resultados: la misma varíade 1 a 12 horas, con un promedio de 4.3 horas

(D.S +/-1.7). El 69% de los niños, niñas y adolescentestrabajan de 5 a 8 horas al día y el 27.5% trabaja entre1 y 4 horas al día. (Cuadro Nº 6).

Factores de riesgo Nº %

Calor 53 96.4Efectos del sol 38 69.1Plaguicidas 20 36.4Desplazamientos 15 27.3Bipedestación prolongada 14 25.5Levantamiento de carga 9 16.4Posiciones incómodas 9 16.4Movimientos repetitivos 5 9.1Objetos cortantes 3 5.5Frío 1 1.8

Cuadro Nº 7Factores de Riesgos Percibidos. Niños, niñas yadolescentes trabajadores del sector agrícola.

“Las Hernández”, Municipio Tovar,Estado Aragua. 1999.

Fuente: Encuesta.

Trabajo y salud en niños, niñas y adolescentes trabajadores del sector agrícola / Ma. del Carmen Martínez,Virginia Blanco

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ARTICULO

En el Cuadro N° 8 se presenta la frecuencia ydistribución del grupo de estudio de acuerdo al gradode exposición laboral a los diferentes factores de riesgo:

Es notorio como el 82,8% de los niñosestudiados debieron ser incorporados en los grupo deexposición Moderada y Alta, dada las condiciones deexposición a plaguicidas y al tiempo de la jornadalaboral.

En lo que respecta a los accidentes de trabajo,el 29.3% (17 casos) de los niños, niñas y adolescentestrabajadores estudiados, refirieron haber sufrido unaccidente laboral en el último año y en el grupomoderadamente expuesto a los diversos factores deriesgos fueron más frecuentes. El 70.7% restante norefirió haber sufrido algún tipo de accidente en eltrabajo.(Cuadro Nº 9). Sin embargo al analizarestadísticamente la diferencia entre los tres grupos(nivel de significancia del 5%), no se encontródiferencia significativa Cuadro 9-A).

X crítica(gl= 2, & =0,05) = 5,99X calculada =0,82

De los accidentes de trabajo reportados, lasheridas por herramientas cortantes son las de mayorfrecuencia (64.7%), caídas de alturas se presentaronen el 23.5% y contusiones en el 11.8%.

Si nos referimos al uso de equipos de protecciónpersonal, sólo el 20.7% de los niños, niñas yadolescentes refirieron su uso y los más frecuentesson: mascarillas en un 50%, botas un 41.7% ysombreros en un 8.3%; el 79.3% refiere no usar ningúnequipo de protección personal durante la jornada detrabajo.

Hábitos psicosociales:

Cincuenta y uno (87.9%) de los niños, niñas yadolescentes trabajadores no refieren hábitostabáquicos, ni refiere ingerir bebidas alcohólicas; sólotres (5.2%) del grupo de estudio, refiere hábitostabáquicos (una cajetilla a la semana), cuatro (6.9%)refiere hábitos alcohólicos(cerveza) de maneraocasional(días de fiesta).

Salud reproductiva:

Con respecto al estado civil 56 (96.6%) de losniños, niñas y adolescentes son solteros y sólo 2 (3.4%)tienen pareja pero no viven juntos en el mismo hogar.Seis niños y adolescentes (10.3%) iniciaron relacionessexuales entre los 13 y 15 años de edad. De las niñasninguna refiere embarazo y por consiguiente no tienenhijos.

Asistencia médica:

En referencia a la posibilidad de asistenciamédica, el 65.5% consulta y es asistido en algún centroasistencial cuando enferma, bien sea en los Núcleos

Exposición Nº %

Leve 10 17.2Moderada 26 44.9Alta 22 37.9

Total 58 100

Cuadro Nº 8Distribución por exposición a factores de riesgo.

Niños, niñas y adolescentes trabajadores del sectoragrícola. “Las Hernández”, Municipio Tovar,

Estado Aragua. 1999.

Fuente. Datos de la investigación.

Accidente Grupos de riesgo Total

Leve Moderado Alto

nº (%) nº (%) nº (%) nº (%)

Si 3 (5.2) 9 (15.5) 5 (8.6) 17(29.3)No 7 (12.1) 17 (29.3) 17 (29.3) 41(70.7)

Total 10 (17.3) 26 (44.8) 22 (37.9) 58 (100)

Cuadro Nº 9Accidentes de trabajos por Grupo de Exposición.

Niños, niñas y adolescentes trabajadores del sectoragrícola. “Las Hernández”, Municipio Tovar,

Estado Aragua. 1999.

Fuente: Datos de la investigación.

Accidentes Grupos de riesgo Total

Leve Moderado Alto

Si 2,93 7,62 6,45 17No 7,07 18,38 15,55 41

Total 10 26 22 58

Cuadro Nº 9-AFrecuencias esperadas para las frecuencias

observadas del cuadro Nº 9

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ARTICULO

Salud de los Trabajadores / Volumen 11 Nº 1 / Enero 2003

de Atención Primaria cercanos, El Ambulatorio delMunicipio o al Hospital de la Ciudad más cercana (LaVictoria). Sin embargo un porcentaje considerable(34.5%) no recibe asistencia médica, por encontrarseen zonas muy alejadas, de difícil acceso y sin transportecolectivo. Algunos señalaron que sus padres se venobligados a automedicarlos, sobre todo cuandoenferman en las horas nocturnas que deben esperar aldía siguiente para ser trasladados.

Morbilidad:

Con respecto a las causas de morbilidad referidasen los últimos doce meses, se observa que los niñosubicados en la categoría moderada y altamenteexpuestos, muestran similar incidencia de morbilidad ymayor que en el grupo considerado como de exposiciónleve; se encontró una alta incidencia de parasitosisintestinal, caries dental y síndrome viral, como primerastres causas de morbilidad, seguidas por diarreas,infecciones en piel, cefaleas, mareos o debilidad,alergias, dolores osteomusculares, asma, bronquitis,amigdalitis y fiebre (Cuadro Nº 10). En estos gruposde exposición, estadísticamente no hay diferenciasignificativa al analizar la proporción poblacional conun nivel de significancia del 5%; la diferencia obtenidaes aleatoria.

Cuadro Nº 10Morbilidad de acuerdo a la Exposición. Niños, niñas y adolescentes trabajadoresdel sector agrícola. “Las Hernández”, Municipio Tovar, Estado Aragua. 1999.

Morbilidad Riesgo de exposición Total

Leve Moderado Alta

nº (%) nº (%) nº (%) nº (%)

Parasitosis intestinal* 8 (13.5) 15 (25.9) 11 (18.9) 34 (58.6)Caries dental* 5 (8.8) 11 (18.9) 11 (18.9) 27 (46.6)Sindrome viral 3 (5.2) 13 (22.4) 10 (17.2) 26 (44.8)Diarrea** 2 (3.5) 10 (17.2) 9 (15.5) 21 (36.2)Infección de piel* 1 (1.7) 9 (15.5) 3 (5.2) 13 (22.4)Cefalea** 2 (3.5) 5 (8.6) 5 (8.6) 12 (20.7)Mareo y/o debilidad** 1 (1.7) 5 (8.6) 2 (3.5) 8 (13.8)Alergia** 2 (3.4) 4 (6.9) -- --- 6 (10.3)Dolores osteomusculares*** 1 (1.7) 2 (3.4) 3 (5.2) 6 (10.3)Asma, bronquitis** 1 (1.7) 2 (3.5) -- --- 3 (5.2)

* Enfermedades que pudieran estar relacionadas a sus condiciones de vida y al ambiente de trabajo, considerando que este grupo de trabajadorespermanece sin calzado en muchas ocasiones cuando están realizando sus actividades laborales.** Enfermedades que expresan alteración del sistema nervioso, respiratorio y gastrointestinal que pudieran estar relacionadas con laexposición a factores de riesgo, como por ejemplo, el uso de plaguicidas en los diferentes cultivos.*** Alteraciones osteomusculares relacionadas con las posturas ( posición incómodas, bipedestación prolongada, etc.) adoptadas por estegrupo de trabajadores en el momento de la recolección, siembra y fumigación de los cultivos.Exposición a plaguicidas:

Entre las manifestaciones agudas, compatiblescon exposición a plaguicidas, y referidas por el 57.1%del grupo de estudio (30), se encuentran: cefalea en un33.3%, dolor abdominal en un 23.3%, mareos en un23.3%, somnolencia y rinorrea en un 20%. Otrossíntomas, fueron, náuseas, vómitos, sialorrea, diarrea,visión borrosa, disnea leve, fasciculaciones en párpados,labios y lengua, además de debilidad muscular. Todas,manifestaciones relacionadas con el trabajodesempeñado (Cuadro N° 11).

Sin embargo a un nivel de significancia del 5%,no hubo diferencia estadísticamente significativa quepermita afirmar que las proporciones de riesgo deexposición son diferentes, por lo tanto las diferenciasexistentes entre los grupos se deben al azar.

Crecimiento y desarrollo

Si nos referimos al crecimiento y desarrollopondoestatural, observamos en 62.1% de los niños yadolescentes un crecimiento normal; sin embargo, el29.2% presenta algún grado de retardo en elcrecimiento y el 24.2% presenta algún grado dedesnutrición aguda (Cuadros Nº 12, 13 y 14). Al analizarla proporción de los grupos de riesgos a un nivel designificancia del 5% estadísticamente no se encontródiferencia entre los grupos de exposición con respectoal desarrollo pondoestatural.

Trabajo y salud en niños, niñas y adolescentes trabajadores del sector agrícola / Ma. del Carmen Martínez,Virginia Blanco

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ARTICULO

Efectos Grupos de riesgos Total

Leve Moderado Alto

nº (%) nº (%) nº (%) nº (%)

Cefalea 3 (9.9) 4 (13.3) 3 (9.9) 10 (33.3)Dolor abdominal 1 (3.3) 4 (13.3) 2 (6.6) 7 (23.3)Mareos 2 (6.6) 2 (6.6) 3 (9.9) 7 (23.3)Somnolencia - --- 2 (6.6) 4 (13.3) 6 (20.0)Rinorrea 1 (3.3) 3 (10.0) 2 (6.7) 6 (20.0)Náuseas y vómitos - --- 2 (6.7) 3 (10.0) 5 (16.7)Sialorrea 1 (3.3) 1 (3.3) 3 (10.0) 5 (16.7)Diarrea - --- 1 (3.3) 1 (3.3) 2 (6.7)Visión borrosa - --- 1 (3.3) 1 (3.3) 2 (6.7)Disnea - --- - --- 2 (6.7) 2 (6.7)Fasciculaciones en labio,párpados - --- - --- 2 (6.7) 2 (6.7)Debilidad muscular 1 (3.3) 1 (3.3) - --- 2 (6.7)

y lengua.

Cuadro Nº 11Manifestaciones agudas compatibles con exposición

a plaguicidas de acuerdo a grupo de riesgo.

Diagnóstico clínico:

Es de hacer notar, que para el momento delexamen físico sólo 9 niños del grupo en estudio seencontraban asintomáticos (15.5%). El 89.5% de losniños niñas y adolescentes, reveló algún signo o síntomade enfermedad. Se concluyeron diferentes diagnósticosclínicos, y tomando en cuenta la clasificación por grupos

Percentiles nº %

> 97 (Obesidad) 2 3.4

97 - 90 (Zona crítica de Obesidad) 2 3.4

90 - 10 (Peso normal para edad) 40 69.0

10 - 3 (Zona crítica de bajo peso) 7 12.1

< 3 (bajo peso para edad) 7 12.1

Cuadro Nº 12Relación Peso/Edad .Niños, niñas y adolescentes

trabajadores del sector agrícola. “Las Hernández”,Municipio Tovar. Estado Aragua. 1999.

Fuente: Encuesta.

Percentiles nº %

>90 (talla sobre lo normal) 5 8.6

90 - 10( Talla normal) 36 62.1

10 - 3(Zona crítica para talla bajo) 10 17.2

3 - -3DS(leve talla baja) 5 8.6

-3 - -4DS(Moderada talla baja) 1 1.7

<-4DS (grave deterioro de la talla) 1 1.7

Cuadro Nº 13Relación Talla/Edad .Niños, niñas y adolescentes

trabajadores del sector agrícola. “Las Hernández”,Municipio Tovar. Estado Aragua. 1999.

Fuente: Encuesta.

Percentiles nº %

>90 (crecimiento y desarrollo

90 - 10 (crecimiento y desarrollo

10 - 3 (Zona crítica) 10 17.2

3 - -3DS (leve deterioro del

3 - -4DS (Moderada deterioro

<-4DS (grave deterioro del

sobre lo normal) 3 5.2

Normal) 39 67.2

crecimiento y desarrollo) 2 3.4

del crecimiento y desarrollo) 3 5.2

crecimiento y desarrollo) 1 1.7

Cuadro Nº 14Relación Peso/Talla Niños, niñas y adolescentes

trabajadores del sector agrícola. “Las Hernández”,Municipio Tovar. Estado Aragua. 1999.

Fuente: Encuesta.

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ARTICULO

Salud de los Trabajadores / Volumen 11 Nº 1 / Enero 2003

de exposición, los resultados se presentan en losCuadros Nº 15, 16, y 17.

Las causas de morbilidad del grupo altamenteexpuestos es similar, los tres primeros lugares son losmismos diagnósticos. En los tres grupos, se reportanotros diagnósticos como son: parasitosis intestinal,síndrome gripal, hernia umbilical, obesidad y otitisexterna.

En lo que respecta a las expectativas de futurode los niños, niñas y jóvenes trabajadores del sectoragrícola, se pudo conocer que el 51.7% desea continuarsus estudios y el 48.3% restante desea continuar conlas actividades laborales en la agricultura. Sin embargo,todos sugieren que se implementen planes de educaciónpara el trabajo y se les mejoren las condiciones de vidapara poder obtener mejor provecho de la tierra y tenermejores cultivos.

Discusión

El rango de edad de niños, niñas y adolescentestrabajadores estudiados en el sector agrícola se ubicóen la edad de 7 a 12 años que coincide con el trabajode los niños y jóvenes trabajadores del sector urbano,(Betancourt, s/f ), quienes en un 58.6% tenían menosde 14 años a pesar de los instrumentos legalesexistentes en el país el cual prohíbe el trabajo en laetapa escolar.

Con respecto al género se aprecia un porcentajede participación similar para ambos géneros, lo cual nocoincide con lo encontrado en la bibliografía consultadani con los trabajadores urbanos, donde el géneromasculino tiene un 82.5% de participación en el trabajoque el género femenino, quien tiene un 17.5%(Betancourt s/f, Barroso 1997). Es de hacer notar queesta igualdad de condiciones según la Organización

Entre los diagnósticos establecidos seencontraron, en los tres primeros lugares, en el grupolevemente expuestos: caries dentales en 70%,desnutrición en alguno de sus grados en un 40% yanemia en un 40%.

En lo que respecta al grupo moderadamenteexpuestos: las caries dentales ( 65.4% ) y la desnutriciónen alguno de sus grados ( 38.5%) también fueron lasprimeras causas. El tercer lugar lo ocupan lasenfermedades dermatológicas en un 19.2%, entre ellas,dermatitis por contacto, dermatomicosis y piodermitis;todas muy probablemente relacionadas con el trabajo,ya que estos niños, niñas y adolescentes trabajadoresestán en contacto permanente con tierra, plaguicidas yroce con plantas como durazno y fresa que sonaltamente sensibilizantes y responsables de lesionesdérmicas de carácter alérgico.

Diagnósticos nº %

Caries dental 17 65.4Desnutrición 10 38.5Enfermedades dermatológicas 7 26.9Síndrome gripal 5 19.2Anemia 4 15.4Aparentemente sanos 3 11.5Parasitosis intestinal 2 7.7Hernia umbilical 2 7.7Obesidad 2 7.7

Fuente: Encuesta.

Cuadro Nº 16Diagnósticos clínicos. Grupo Moderadamente

expuesto a factores de riesgos laborales

Diagnósticos nº %

Caries dental 7 70.0Desnutrición 4 40.0Anemia 4 40.0Parasitosis intestinal 3 30.0Enfermedades dermatológicas 2 20.0Aparentemente sanos 3 30.0

Cuadro Nº 15Diagnósticos clínicos. Grupo Levementeexpuesto a factores de riesgos laborales

Fuente: Encuesta.

Diagnósticos nº %

Caries dental 18 81.8Anemia 10 45.5Enfermedades dermatológicas 7 31.8Desnutrición 4 18.2Parasitosis intestinal 3 13.6Aparentemente sanos 3 13.6Síndrome gripal 2 9.1Hernia umbilical 1 4.5Otitis externa 1 4.5

Cuadro Nº 17Diagnósticos clínicos. Grupo Altamenteexpuesto a factores de riesgos laborales

Fuente: Encuesta.

Trabajo y salud en niños, niñas y adolescentes trabajadores del sector agrícola / Ma. del Carmen Martínez,Virginia Blanco

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ARTICULO

Internacional del Trabajo indica condiciones desubdesarrollo que son compartidas por un gran númerode países latinoamericanos (OIT,1980).

Al analizar la escolaridad se encontró un granporcentaje de alfabetas, pero que iniciaron sus estudiosentre los 7 y 9 años de edad, encontrándose un altoporcentaje estudiando actualmente, en su mayoría enel nivel de primaria. Un pequeño porcentaje, dejó deestudiar y pertenece al nivel de secundaria, lo que adiferencia de las referencias bibliográficas es contrarioa lo reportado, ya que no refleja una importantedeserción escolar; la causa de que ese pequeñoporcentaje de niños y jóvenes no estudien, es la lejaníade los centros educativos y la falta de medios detransporte para la población (el transporte a lacomunidad es sólo los días lunes y jueves a las 7:00amy 6:00pm).

Debido a estas circunstancias los niños, niñas yadolescentes se ven obligados a no continuar sueducación básica (hasta el noveno grado) y en su lugarse dedican a trabajar la tierra con sus padres ofamiliares, poniendo en evidencia la incursión de losniños, niñas y jóvenes a actividades laborales antes definalizar su educación básica como lo exigen las leyesy los Convenios Internacionales en la materia, tal cualreza en el artículo Nº138 de la Convención Internacionalde los Derechos del Niño (Citado por UNICEF 1991),donde se expone que la edad mínima de acceso alempleo o al trabajo no deberá ser inferior a la edad enque cesa la obligación escolar, en todo caso, a los 15años.

Si comparamos el porcentaje de deserción deeste grupo con el trabajo de niños trabajadores urbanos,encontramos una diferencia porcentual importante yaque la deserción escolar en éste se acerca al 44% y enel sector urbano a 23%. (Betancourt s/f , Barroso 1997)

En lo que respecta al grupo familiar, se pudoobservar que más de la mitad viven con sus padres yhermanos conformando en promedio un grupo familiarde 5 +/- 3 personas lo que confirma lo numeroso delgrupo familiar en este grupo de trabajadores, semejantea una investigación realizada en los menorestrabajadores del sector informal quienes en un 48%viven en un grupo familiar de 5 a 6 miembros(Betancourt s/f). Condición que los ubica de acuerdo alas características socioeconómicas en el estrato Edonde el tamaño de la familia es de 5.4 miembros, lo

cual afirma el incremento sostenido de la pobreza enVenezuela, durante los últimos años, esto contrastafuertemente con los grandes logros a nivelmacroeconómico del país en los últimos años.Efectivamente, muchos se preguntarán en qué sebeneficia el país logrando tantos beneficios económicossi el 80% de la población permanece en estado depobreza (CECODAP 1998).

Si revisamos las condiciones de las viviendas eneste sector, un alto porcentaje (60,3%), habita enranchos de bahareque, con dos habitaciones paradormir, suministro de agua por mangueras y disposiciónde excretas en pocetas, letrinas o en el peor de loscasos al aire libre, lo que demuestra una vez más lasprecarias condiciones de vivienda de esta población.En contraposición con lo descrito en los niñostrabajadores del sector urbano quienes habitan en un57% en casas con suministro de agua por tuberías y el91% posee adecuada disposición de excretas. (Barroso1997). La literatura en cuanto a condiciones de viviendase refiere, hace hincapié en la necesidad del aspectoestético externo y muy especialmente el interno el cualdebe favorecer el bienestar psicológico y facilitar eldescanso (Contreras 1982).

Si analizamos que el motivo de inicio al trabajoen el 63.8% de los casos, es para ayudar almantenimiento del grupo familiar, el 17.2% porquedeben acompañar a sus familiares; un 10.3% paraaprender el oficio y un 8.6% por iniciativa propia; estasafirmaciones coinciden con los reportes internacionales,donde si preguntamos a los niños por qué trabajan, nosresponden: “para ayudar a mi mamá o a ni papá”,algunos dirán que “necesitan dinero para comprar útilesescolares, un pantalón o zapatos” (Manfied 1994).Igualmente coincide con los menores trabajadores dela economía informal, quienes comienzan a trabajar ensu mayoría (70%) por necesidad filial y un 45% pornecesidad de ingresos propios (Betancourt, s/f).

En cuanto a la remuneración percibida, la mismase ubica por debajo del salario mínimo (100.000Bs.mensuales/ 2.500 Bs. Diarios ); se considera que estesalario no recompensa el tipo de trabajo realizado yaque exponen su salud y hasta sus vidas en las diferentesactividades del campo. Es opinión de los niñossalvadoreños, que sería justo que devengaran salariossimilares al de los adultos (Centro de Atención alMenor.1996).La remuneración la destinan para sumanutención y para dárselas a sus padres, lo que

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ARTICULO

Salud de los Trabajadores / Volumen 11 Nº 1 / Enero 2003

coincide con otras afirmaciones hechas en Venezuelacon respecto al trabajo infantil y adolescente en el sectorurbano, en cuanto que la mayoría entrega el total deldinero devengado a su familia, aunque en algunos casosello representa una proporción muy pequeña del ingresototal del hogar (CECODAP 1998).

El número de horas trabajadas es variableencontrándose límites entre 1 y 12 horas diarias conpromedio de 4.3 horas al día. El 69% trabaja entre 5 y8 horas, un 27.5% trabaja entre 1 y 4 horas al día y un3.4% trabaja entre 9 y 12 horas diarias, valores nadadespreciables si se considera que ellos deberían dedicarese tiempo para estudiar y recrearse y no para trabajar,ya que en este caso no es tanto la cantidad de horastrabajadas sino, el momento dedicado al trabajo, es decir,estos niños van a la escuela en las mañanas, y en latarde en lugar de ir a descansar para hacer sus tareasescolares, deben dedicarse al trabajo hasta las 6:00pm,restándole tiempo al descanso. “Debo trabajar aunquesea medio tiempo para ayudar a mi mamá”, estaexpresión pertenece a uno de los niños entrevistados,la cual coincide con otros trabajos, donde el 22% delos niños laboran entre 6 y 11 horas, un 38% trabajaentre 1 y 5 horas; 19% lo hacen en medio tiempo ysólo 3% tienen su tiempo libre (CECODAP 1998 ) .Un 8.6% dedica las horas de la tarde al trabajo, un17.3% las horas de la mañana; un 1.6% a las horasnocturnas; un 9.5% se dedica al trabajo en los tresturnos y un 60.9% a dos turnos (DATANALISIS 1998)

Si nos referimos a los factores de riesgo en eltrabajo de este sector, se puede apreciar que un altoporcentaje del grupo estudiado refiere la existencia yexposición a dichos factores, encontrando que, el 96.4%percibe el calor como el factor de riesgo de mayorimportancia, seguido por las radiaciones solares en un69.1%; exposición a plaguicidas en un 36.4%;desplazamiento a grandes distancias en un 27.3% ybipedestación prolongada en un 25.5%.Contrario a lapercepción a factores de riesgo en los niños, niñas yjóvenes trabajadores del sector urbano donde el 65.9%refiere exposición a factores mecánicos; el 63.6%factores químicos como el humo; el 36.3% a factoresfisiológicos. (Barroso 1997).

En cuanto a los accidentes laborales el 29.3%reporta haber sufrido al menos un accidente de trabajodurante los últimos doce meses y de ellos las heridasproducidas por herramientas cortantes reportan mayorporcentaje (64.7%); coincidiendo con las peticiones de

un grupo de niños salvadoreños que solicitan que «noles obliguen a trabajar con maquinarias ni con machetespara evitar lesiones en sus cuerpos» (Centro deAtención al Menor 1996) e igualmente coincide conlos accidentes de trabajo reportados en niños y jóvenestrabajadores urbanos donde el 54.5% reportan heridascomo el accidente más comúnmente ocurrido.(Barroso 1997).

Debemos hacer un llamado de alerta en cuantoal uso de equipos de protección personal de este grupode trabajadores ya que un gran porcentaje (79.3%) nolos utiliza y como se menciona anteriormente el 94.8%refiere exposición a factores de riesgos laborales, loque confirma las declaraciones del Instituto Nacionalde Atención al Menor (INAM 1980), en cuanto a quelos niños, niñas y adolescentes realizan jornadaslaborales bajo permanente exposición a situaciones deriesgo.

Respecto a la asistencia médica en este grupode trabajadores, se reporta que el 34.5% no recibe dichaasistencia, lo cual coincide con lo señalado en elPrograma Internacional para la Erradicación delTrabajo Infantil (IPCE) de la OIT , donde se afirmaque...“Venezuela ocupa el cuarto lugar en AméricaLatina en materia de niños que trabajan en laboresagrícolas...... sin ningún tipo de seguridad social”.(CECODAP.1998).

Con respecto a la morbilidad reportada, losprimeros lugares son ocupados por enfermedades talescomo: caries dental, desnutrición, parasitosis,infecciones de piel, cefaleas, mareos, alergias, doloresosteomusculares y alteraciones de las vías respiratorias,coincidiendo con los diagnósticos reportados en losniños y jóvenes trabajadores del sector urbano(Barroso 1997); enfermedades que aunque no hayaasociación estadísticamente significativa con laexposición, pudieran estar relacionadas con el ambientede trabajo y la propia actividad laboral, dado que losniños, niñas y jóvenes al no utilizar calzado, ropa detrabajo adecuada y/o equipos de protección personalespecíficos para la actividad laboral, por su mismacondición de niños, pero con relativo poco tiempo deexposición hace que no se defina un perfil deenfermedad laboral semejante al de los adultos , peroya existen daños a la salud. Por otro lado también estárelacionado o es una consecuencia directa de lascondiciones socioeconómicas, que los ubica comopoblación en estado de pobreza y con deficientes

Trabajo y salud en niños, niñas y adolescentes trabajadores del sector agrícola / Ma. del Carmen Martínez,Virginia Blanco

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servicios sanitarios (PROVEA 1999) . La mala nutriciónproteica constituye un factor que agrava lasusceptibilidad a numerosos agentes tóxicos como porejemplo exposición-intoxicación por plaguicidas (Mendes 1982)

Si se habla de morbilidad por plaguicidas, en elgrupo de estudio se reportaron manifestaciones clínicaspor el contacto con ellos en un 51.7%; hecho que guardarelación directa con las formas de trabajo de este grupo,a quienes no se les instruye sobre el manejo de lassustancias químicas y mucho menos sobre los efectosen los seres humanos.(Grajales 1998). Lasintoxicaciones laborales por plaguicidas, principalmentelas agudas por organofosforados, se señala como unose los problemas más importantes de salud ocupacionalen trabajadores agrícolas, causa preocupación ademásla posibilidad de los efectos teratogénicos de laexposición a largo plazo (Mendes 1982).

Conclusiones

Sin perder de vista de que se trata de un trabajodescriptivo, el propósito es mostrar una realidad quesucede en nuestro país y que muchos desconocen. Apesar de que los resultados no dan una asociaciónestadística significativa para afirmar los hechosplasmados, no hay que olvidar que el grupo de estudioes una población altamente vulnerable a las condicionespropias que les toca vivir y que si se tomaran en cuenta,este esbozo podría servir para continuar desarrollandotrabajos de investigación que estadísticamenteconfirmen esta realidad realidad.

En las condiciones de vivienda de los niños, niñasy adolescentes trabajadores se puede apreciar unmanifiesto deterioro de los valores ambientales quebenefician al ser humano. El acceso a los serviciospúblicos básicos como agua, aseo urbano, transporteentre otros, son muy deficiente o no disponen de ellos.

El trabajo realizado por los niños, niñas yadolescentes no es tomado en cuenta y un ejemplo de

ello son todas las actividades agrícolas riesgosas querealizan en el medio rural. De allí, que al clasificar a lapoblación en grupos de exposición a diversos factoresde riesgos en el trabajo y el tiempo de exposición, sepudo clasificar en 3 grupos bien definidos. Existencaracterísticas que los definen como tales, y quedescriben al trabajador agrícola.

Existe una edad mínima de admisión al empleo,que constituye la regla general y que admiteexcepciones, ya sea permitiendo el trabajo en menoresa esa edad, o por el contrario estableciendo límitesmayores en caso de peligros para la salud, seguridad omoral. La edad general para acceder a la actividadlaboral en Venezuela son los catorce años, sin embargose puede observar como desde muy temprana edad,los niños y niñas del medio rural se incorporan aactividades laborales con su familia, sin prever el peligroque representa esta decisión. En el grupo de estudio ellímite de edad comprende desde los 3 a los 17 años,donde el mayor porcentaje está ubicado en los 7 y 11años de edad.

Los niños que comienzan a trabajar a tempranaedad, ven limitadas sus posibilidades de continuar sudesarrollo educativo y de obtener mejores ingresos afuturo. A pesar de que a partir de los 6 años se adquiereel principio del trabajo, el niño y/o niña desconoce suimportancia social, las tareas se asumen como juego yse conjuga juego-trabajo, expresión inicial del trabajoinfantil.

La situación de ilegalidad en las relacioneslaborales los deja indefensos y los expone a condicionespeligrosas que podrían perjudicar en forma irreversiblesu estado de salud física y mental.

Es importante insistir en que el trabajo infantildebe ser abolido, requiriendo para esto tres aspectosfundamentales a considerar: legislación, disminución dela pobreza y universalización de la enseñanzaobligatoria.

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Salud de los Trabajadores / Volumen 11 Nº 1 / Enero 2003

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Referencias bibliográficas

El trabajo como determinante de la salud / Leopoldo Yanez 21

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El trabajo como determinante de la saludLeopoldo Yanes 1

1 Investigador del Centro de Estudios en Salud de los Trabajadores (CEST). Magister en Salud Ocupacional.

Resumen

El estudio del proceso de trabajo y la salud noes una preocupación reciente. Desde el siglo pasado, ydebido a los cambios que sobre las condiciones de viday salud de los trabajadores generó la RevoluciónIndustrial, diversos estudiosos identificados con la causade los trabajadores, comenzaron a evaluar el impactode la misma sobre la salud de la población trabajadora.Desde esta época se plantea el conflicto entre dosmaneras de abordar los problemas de la salud de lostrabajadores. Una, que comenzaba a vislumbrar quelos problemas de la salud de los trabajadores estabanvinculados a la manera como los trabajadores seinsertaban en el proceso productivo; y la otra quecentraba su acción en dos vertientes: la primera queprivilegiaba la atención médica curativista, y la segunda,que consideraba al ambiente de trabajo en función deriesgos específicos, fundamentalmente los denominadosfactores de riesgos físicos y químicos.

Es en la década de los sesenta, en el marco deun proceso global de auge de las luchas sociales y delcuestionamiento de la organización capitalista deltrabajo, cuando de nuevo cobra fuerza la posición queplantea que la salud tiene una estrecha relación con elproceso de trabajo en tanto que espacio concreto deexplotación y en este sentido, entiende a la salud obreracomo expresión concreta de esa explotación, y la luchapor la defensa de la salud obrera como un campoprivilegiado de la lucha anticapitalista.

El presente ensayo busca sistematizar losavances desarrollados desde la perspectiva de la SaludColectiva en relación al tema de la salud, el trabajo y laenfermedad en el marco de las relaciones sociales dela producción.

Palabras claves: Trabajo, salud, salud ocupacional

Abstract

The study of working process and health is nota new preoccupation. From the last century, and owingto the life conditions and health changes originated bythe industrial revolution; distinct studious, identified withthe workers cause, began to evaluate its impact on theworking population´s health. Since this time the conflictis stated within two ways to approach the workershealth problem. One, that began to suspect the worker´shealth problems were related to the way they insertedin the productive process; and the other one centeredits action on two flowing: the first one granted the Curemedical attention, and the second, which consideredthe working environmental on function of specific risks,fundamentally the denominated physical and chemicalrisks.

It´s in the sixties decade, with the frame of aglobal process apogee for social fights and the doubtof capitalist organization, when the position that healthis closely related with the work process takes over,and this also generates room for exploitation, in thissense the workers´ health is understood as a concreteexpression of the exploitation, and the fight for theworkers´ health and as a field of the anti capitalist fight.

The present assay seeks to systemize thedeveloped advances from the collective healthperspective related with health fact, the work andsickness in the frame of social relations production.

Key Works: Work, health, ocupational health.

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Salud de los Trabajadores / Volumen 11 Nº 1 / Enero 2003

Introducción

El estudio del proceso de trabajo y la salud no esuna preocupación reciente. Desde el siglo pasado, ydebido a los cambios espectaculares que sobre lascondiciones de vida y salud de los trabajadores generóla Revolución Industrial, diversos estudiosos franceses,alemanes e ingleses -identificados con la causa de lostrabajadores-, comenzaron a estudiar el impacto de lamisma sobre la salud de la población trabajadora. Entreellos destacan Villerme, Guépin, Penot y Benoiston deChateauneuf entre otros (Dejours, 1990; Rosen, 1972).Mark y Engels dedican gran parte de su obra a analizarlos efectos que sobre la salud de los trabajadores comouna de las expresiones concretas de la explotacióncapitalista (Ver “El Capital”, tomo 1, de Marx, y “Lasituación de la Clase Obrera en Inglaterra” de Engels).

Desde esta época se plantea el conflicto entredos maneras de abordar los problemas de la salud delos trabajadores. Una, que comenzaba a vislumbrar quelos problemas de la salud de los trabajadores estabanvinculados, de alguna manera, a la manera como lostrabajadores se insertaban en el proceso productivo; yla otra, que en definitiva fue la dominante, con una visiónparcelada de la salud obrera que centraba su acciónen dos vertientes: la primera que privilegiaba la atenciónmédica curativista, y la segunda, que consideraba alambiente de trabajo en función de riesgos específicos,fundamentalmente los denominados riesgos físicos yquímicos, y los accidentes de trabajo. Esta parcelizaciónencuentra su sustento científico en lo que hoy se conocecomo el Modelo Médico, el cual identifica laenfermedad como el resultado de la acción de agentesespecíficos, que son los “riesgos”, y su solución lacentra en la acción curativa. Esta visión no permiteclarificar la compleja relación entre el proceso detrabajo y la salud, ya que una parte importante de lasalud es ubicada fuera de la esfera del trabajo, que eslo que se ha denominado “la enfermedad común”, y laotra, la que reconoce como “enfermedad del trabajo”,se restringe, en última instancia, a una relaciónunicausal entre los diferentes riesgos presentes en elambiente de trabajo con una visión principalmenteindemnizatoria. Subrayamos la expresión “en últimainstancia”, porque el modelo médico ha desarrolladopropuestas multicausales, que aunque permiten unamejor descripción del problema, las mismas no lograntrascender sustancialmente la concepción unicausalde la relación salud-enfermedad.

Es en la década de los sesenta, en el marco deun proceso global de auge de las luchas sociales y del

cuestionamiento de la organización capitalista deltrabajo, cuando de nuevo cobra fuerza la posición queplantea que la salud tiene una estrecha relación con elproceso de trabajo en tanto que espacio concreto deexplotación y en este sentido, entiende a la salud obreracomo expresión concreta de esa explotación, y la luchapor la defensa de la salud obrera como un campoprivilegiado de la lucha anticapitalista.

Simultáneamente se presenta en este período,elementos dentro del mismo campo médico quecuestionan la validez del Modelo Médico por suincapacidad de resolver los problemas de la salud de lapoblación en general -por una parte, permanecían comocausas importantes de mortalidad enfermedadesconsideradas como resueltas por la ciencia médica,mientras que las nuevas patologías se presentaban conuna frecuencia cada día mayor-, a pesar del crecimientode los servicios de salud.

En palabras de Laurell y Noriega (1989),“...retorno a la fábrica para descifrar la realidad, salidadel hospital para entender la enfermedad.” Estas fueronlas premisas y el marco histórico que permitieronretomar la exploración de la relación salud-trabajopara entender el carácter social del proceso salud-enfermedad y de sustentar una nueva práctica enrelación a la salud obrera.

La relación Salud-Trabajo

Al analizar el discurso sanitarista dominantepodemos concluir que los problemas generales de saludde una sociedad determinada son analizados desde laperspectiva de las poblaciones agrupadas por lasdenominadas variables sociodemográficas (edad, sexo,ubicación geográfica, etc.), y no desde la perspectivade los trabajadores. Se analizan los problemas de saluddesde la óptica del consumo y de las conductas oactitudes, y no de la producción ni de la actividadlaboral (Breilh, 1994). Esta manera de analizar larealidad sanitaria de la sociedad, si bien permitióavances en la solución de los problemas de salud, sinembargo hoy día muestra severas limitaciones para darrespuesta a esa misma realidad. Se puede afirmar quea pesar de los avances de la ciencia médica, todavíapermanecen como principales causas de mortalidadaquellas enfermedades consideradas como resueltaspor esa misma ciencia; y por otra parte, a pesar delcrecimiento de los servicios de salud, éstos no parecenresolver los problemas relevantes de salud de lapoblación (Laurell y Noriega, 1989).

El trabajo como determinante de la salud / Leopoldo Yanez 23

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A grandes rasgos, y para el objetivo de esteestudio, podemos ubicar tres momentos del discursosanitarista que se corresponden con tres nivelesdiferentes de análisis de la relación salud-enfermedad(Pacheco, 1989; Rojas, 1982). Un primer momento serefiere a la enfermedad como un proceso que sepresenta en un organismo determinado, y para resolverel problema de salud que lo afecta se requiere delconcurso de la medicina y otras ciencias afines (labiología, la bacteriología, la fisiología, la anatomía, etc.)En base a las teorías, métodos, técnicas e instrumentosdisponibles se realiza un diagnóstico de la enfermedadpara lo cuál se elaborarán previamente hipótesis depresunción, sobre todo cuando el cuadro clínico escomplejo. El diagnóstico permitirá iniciar el tratamientode la enfermedad a fin de restablecer la salud y eliminaro reducir al máximo las secuelas discapacitantes(Pacheco, 1989). Este momento encuentra su ubicaciónen el modelo que considera un solo tipo de causas de laenfermedad. Su interés está centrado en eliminar el olos agentes patógenos, físicos o químicos que ocasionanla alteración de las funciones “normales” del organismo.Es lo que se ha denominado como el Modelo Médico.Este modelo orienta la búsqueda de la causa queprodujo la enfermedad pero de acuerdo con unaconcepción de ésta. El ideal aquí es establecer unarelación en la que una causa es necesaria y suficientepara que se produzca una determinada enfermedad. Sise logra esto, podrá incidirse en forma directa einmediata en el agente patógeno, físico o químico quedaña la salud (Rojas, 1982).

La base teórica de este modelo se encuentranresumidos en los postulados de Koch: elmicroorganismo se halla siempre con la enfermedad,de acuerdo con las lesiones y la etapa clínicaobservadas; el microorganismo no se encuentra enninguna otra enfermedad; el microorganismo, aisladode quien padece la enfermedad y cultivado durantevarias generaciones, reproduce la enfermedad. Lapresencia “regular” y “exclusiva” del microorganismodemuestra una relación causal. En el caso de lamedicina del trabajo tradicional, este modelo tuvo y auntiene una amplia dominancia, es la práctica médica quebusca una relación unicausal entre el ambiente detrabajo y sus consecuencia sobre la salud, tanto en elcaso de las enfermedades ocupacionales como en losaccidentes de trabajo. Es la búsqueda de un agente ode una causa que puede determinar la aparición deuna patología o de un suceso en el caso de los accidentes(Rojas, 1982).

Este nivel de análisis e interpretación de laenfermedad, y la consecuente práctica médica, es elde la medicina curativa que busca la reincorporaciónde las personas a las actividades que desempeñabanantes de enfermarse o accidentarse. De acuerdo coneste enfoque, para resolver el problema de saludindividual, basta la acción competente del equipo desalud, apoyada en una infraestructura médicaadecuada. Cualquier otra consideración es secundaria.Toda la información sociodemográfica requerida parala historia clínica (sexo, ocupación, edad, escolaridad,etc.), se presenta como datos aislados, abstractos, quepoco o nada dicen de las verdaderas causas por lasque los individuos se enferman o se accidentan (Breilh,1994).

En el segundo momento del discurso sanitario,el individuo ya no se concibe en forma aislada, sinocomo parte de una comunidad que tiene determinadascaracterísticas socioeconómicas y culturales, y estáexpuesto a un determinado riesgo de contraerenfermedades. De acuerdo con esto, se analizanalgunos elementos con los que está relacionada laenfermedad: factores sociales, económicos, culturales,físicos, químicos, etc., a fin de establecer regularidadesempíricas entre estos factores y el tipo, frecuencia ygravedad de la enfermedad. La enfermedad se vinculapor lo tanto, con condiciones deterioradas de vida y detrabajo: hacinamiento, falta de agua potable,desnutrición, educación médica deficiente, presenciade factores físicos, químicos o mecánicos en el mediode trabajo y que resultan adversos a la salud. Se adoptaun Modelo Multicausal que permite incorporar elelemento social para poder comprender la enfermedaden cuanto que se consideran variables que hacenmención de aspectos sociales, pero que no permitenuna comprensión profunda del verdadero significadode lo social al quedarse en lo meramente descriptivo(Rojas, 1982). Es el modelo de la historia natural de laenfermedad de Leavell y Clark, que rebasa al modelounicausal en la búsqueda de las causas de laenfermedad, pero es un enfoque ahistórico ymecanicista que no permite establecer una jerarquíaentre los factores sociales y físicos, sino sólo señalarelaciones externas inmediatas entre los fenómenos(Betancourt, 1995; Breilh, 1994). Este enfoquerepresenta sin duda, un avance cuantitativo respectoal anterior en la concepción de la salud y la enfermedad,y en las prácticas para prevenir los daños y elrestablecimiento de la salud.

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Salud de los Trabajadores / Volumen 11 Nº 1 / Enero 2003

En el tercer momento se busca conocer lascausas fundamentales de la enfermedad y la muerte,los elementos condicionantes del acceso real a losservicios médicos, de la esperanza de vida en los sereshumanos, no vistos en forma abstracta sino como sereshistóricos que pertenecen a grupos sociales que trabajany viven de determinada manera, resultado de la formaen que se estructura y organiza la sociedad paraproducir y reproducirse. En este nivel se trata dedescubrir los nexos internos entre los fenómenos a finde establecer leyes que orienten la búsqueda de lascausas determinantes y condicionantes de laenfermedad y de los demás eventos relacionados conla misma, y permitan plantear alternativas de solucióndentro de una formación social históricamentedeterminada (Betancourt, 1995; Laurell y Noriega,1989; Rojas, 1982).

Este tercer nivel supone a su vez un enfoqueque supera a los anteriores, ya que implica un cambiocualitativo en el análisis y comprensión del procesosalud-enfermedad. Lo central del planteamiento de estemomento del discurso sanitarista es que el procesosalud-enfermedad, aún cuando se manifiesta enorganismos concretos, es un fenómeno social cuyascausas deben buscarse en la estructura misma de lasociedad a fin de determinar por qué existen situacionesdiferenciales entre las clases sociales respecto al tipo,frecuencia y gravedad de la enfermedad; esperanzade vida y muerte; y en el acceso real a los serviciosmédicos, replanteando además la discusión sobre laconcepción misma de la salud y la enfermedad.

En los tres niveles que hemos descrito puedenemplearse métodos, técnicas e instrumentos paraobtener información empírica de la realidad concreta;la diferencia estriba en el tipo de realidad que se estudiaen cada nivel.

En el primero, la realidad es el individuo y sehace abstracción de sus condiciones materiales deexistencia, ya que el interés radica en resolver a labrevedad posible un problema de salud, y el métodoque se utiliza es el clínico. El segundo nivel se refiere ala búsqueda de un conocimiento sobre una realidad enla que el individuo ya no se concibe aislado del acontecerfísico y social; pero la realidad que se investiga es lofenoménico, lo externo e inmediato de los vínculos yaspectos de los elementos físico-sociales y su relacióncon el proceso salud-enfermedad. Aquí puedenemplearse diversos métodos y técnicas que la prácticaha demostrado que son de gran utilidad para alcanzar

conocimientos objetivos, con la limitación que se hancentrado en los aspectos externos. Estos métodos ytécnicas pueden ser, entre otros, el experimento social,la observación, la encuesta o la entrevista.

En el tercer nivel, se estudia a la realidad en suconjunto, en sus múltiples nexos y determinaciones; esla realidad vista como una totalidad concreta, histórica,en la cuál se encuentran y desarrollan todos los procesosy objetos. En este nivel de análisis, el proceso salud-enfermedad es parte de esa totalidad. Por tanto, laexplicación de dicho proceso se encuentra en la basematerial de la sociedad, es decir, en la forma en queésta se organiza para producir y reproducirse.

En este nivel de análisis se recurre también alos métodos y técnicas antes mencionados, pero talesherramientas se encuentran ubicadas en unaperspectiva teórica que da cuenta de determinadaconcepción del mundo, de la sociedad, de los fenómenosinherentes a ésta, y que guía, además el manejo de losmétodos y técnicas de investigación, así como laaplicación de los resultados de los estudios.

Este tercer momento del discurso sanitaristase caracteriza fundamentalmente en definir larelación salud-enfermedad como un proceso queincorpora el análisis de la realidad social como unode los elementos determinantes del mismo, demanera que se habla del proceso salud-sociedad yque tiene su expresión más estructurada en elconcepto salud-trabajo-enfermedad.

El contexto histórico de este planteamiento seubica en el marco de un auge importante de la lucha declases a finales de los años sesenta e inicios de lossetenta, que plantea un cuestionamiento global de laorganización capitalista del trabajo. Es decir, ocurrejusto cuando renace –contra la parcialización de laproblemática del mundo laboral impuesta por la lógicade la negociación problema por problema- una visiónque recupera al proceso de trabajo como el espacioconcreto de la explotación. De ahí no hay un paso largopara recuperar a la salud obrera como expresión-igualmente concreta-, de esta explotación.

Simultáneamente, en esta época se desarrollaun movimiento dentro del mismo campo de la medicinaque cuestionaba la validez del modelo médicodominante. Durante aquellos años no sólo se daba ladesmitificación de la inevitabilidad de una determinadamanera de organizar la producción social, sino también

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una reflexión crítica sobre las prácticas socialesimperantes, entre ellas la práctica médica. Surge deesta manera, la crisis de la medicina como crisis de unparadigma científico y de una práctica. Esta crisis semostraba con particular fuerza en América Latina.(Laurell, 1983).

Desde la perspectiva de la medicina social, lasalud de los trabajadores se convirtió en un temaprivilegiado para la construcción de un nuevo modo deentender y analizar el proceso de salud-enfermedadcolectiva como proceso social. Independientemente delos puntos de partida de los investigadores para estudiarla producción social del proceso salud-enfermedad,hubo una tendencia a converger en el tema salud-trabajocomo eje central para la comprensión de la maneracomo se articula la salud-enfermedad en el procesosocial.

Es importante señalar que el estudio del procesode trabajo y la salud obrera no ha sido una preocupaciónreciente. El impacto de la revolución industrial enEuropa durante el siglo XIX fue tan espectacular yexpoliador de la vida obrera, que necesariamente seconvirtió en una temática de estudio y de acción. Marxy Engels dedican una parte de su obra a analizar esteproblema como una de las expresiones concretas de laexplotación capitalista, basándose en diversos estudiosrealizados sobre todo en Inglaterra. De igual manera,existieron en Francia y Alemania corrientes importantesde médicos identificados con la causa obrera, quedocumentaron, a través de una serie de estudios, losefectos devastadores de la industrialización sobre lasalud y la vida obrera entre los que destacan Villerme,Guépin y Penot, Benoiston de Chateauneuf (Dejours,1990; Rosen, 1972).

La situación era tan seria, que de hecho poníaen peligro la reproducción de la fuerza de trabajo alsuperar las tasas de mortalidad a las de natalidad. Esdecir, la reproducción de la fuerza de trabajo sólo teníasolución mientras existiera la posibilidad de transferirpoblación de las zonas rurales a las urbanas. Estepermite comprender el por qué de la violencia delproceso de expropiación de los campesinos libres detoda Europa, especialmente de Inglaterra (Marx, 1959).Estos fueron los inicios del proletariado inglés:expropiados como campesinos, echados a los caminoscomo vagabundos, y castigados por no tener trabajo.Por supuesto que estos campesinos se vieron obligadosa migrar del campo a la ciudad e incorporarse a lasfilas del naciente proletariado inglés.

De la necesidad compartida por el capital y eltrabajo de modificar las condiciones creadas por laindustrialización, surgieron medidas que fueronhegemonizadas finalmente por la burguesía. De estamanera se tendió a parcializar la problemática de lasalud de los trabajadores enmarcándola en dosvertientes; la de la atención médica y la de los “riesgosdel trabajo”. Con esta visión resulta oscurecida lacomprensión de la compleja relación entre el procesode trabajo y la salud por cuanto una parte importantede ella es ubicada fuera del trabajo, se restringe a losriesgos físicos, químicos, biológicos y mecánicos, a losque se trata de dar respuesta desde la prevención vistaésta como en proceso exclusivamente técnico,desvinculada de las relaciones de la producción, ycuando ésta falla, proceder a la indemnización, siendomuchas veces ésta última la de mayor peso en laspolíticas patronales.

Es importante destacar que la “realidad cotidianadel trabajo” ha sido un área inaccesible no solamente ala mirada del sanitarista, sino también de la mayoría delos observadores y analistas de la sociedad. El ambientefabril es considerado como un “ghetto” o área de lasociedad al que no hay acceso para el estudio de lascondiciones de vida y salud, y que por el contrario esun espacio reservado a las relaciones privadas entrepersonas. La fábrica, aún siendo un espacio“especialísimo” de lo público, donde se expresanrelaciones y derechos fundamentales del ser humano,sigue siendo considerado como un área dondepredomina fundamentalmente el concepto de lapropiedad privada, individual. Derechos fundamentalescomo el de la salud, el trabajo, la organización, la libreexpresión del pensamiento, quedan coartados y limitadosal traspasar los límites de la sacrosanta propiedadprivada. A partir de la puerta de acceso a lasinstalaciones, los derechos fundamentales del serhumano quedan sometidos a un derecho que parecierasuperior a los anteriores: el derecho de propiedad. Seplantea entonces una reconceptualización del espaciolaboral para que deje de ser ámbitos de la experienciaindividual, de lo “privado”, y se conviertan en áreassocializadas y legítimas, de acción y transformaciónpara garantizar los derechos humanos fundamentales.

Algunas precisiones de carácter teórico en larelación salud-trabajo

Cuando analizamos la visión de la salud de lostrabajadores que se tiene desde las distintasconcepciones presentes en la literatura científico-social,podemos observar como la mayor parte de ella la define

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Salud de los Trabajadores / Volumen 11 Nº 1 / Enero 2003

bajo la concepción tradicional de la medicina ósimplemente como un indicador del impacto del trabajosobre los trabajadores. En este sentido es a la medicinasocial -o epidemiología crítica-, a quién le hacorrespondido problematizar y avanzar hacia una nuevaconcepción de ella planteando “...la necesidad deentender a la salud-enfermedad no sólo como un procesobio-psíquico sino ante todo como un proceso social”(Laurell y Noriega, 1989).

El aporte central de esta corriente reside en elplanteamiento de la necesidad de entender el nexo bio-psíquico (proceso salud-enfermedad) como la expresiónconcreta en el ser humano del proceso histórico en unmomento determinado, es decir, los procesos biológicosy psíquicos humanos sólo pueden ser entendidos en sucontexto histórico. Esta posición plantea una rupturafundamental con la concepción médica tradicional queentiende los procesos biológicos y psíquicos humanoscomo procesos naturales y, por tanto, ahistóricos.Identificar el carácter social del proceso salud-enfermedad equivale a reconocer que los procesosbiopsíquicos no son ahistóricos e inmutables, sino queasumen formas históricas específicas que caracterizana los distintos grupos sociales.

Levins y Lewontin (1985) formularonteóricamente el problema de historicidad de losprocesos naturales al plantear que las formas históricasde la biología humana son la expresión de la capacidaddel cuerpo para responder con plasticidad ante suscondiciones específicas de desarrollo, es decir, sonprocesos de “adaptación” que en esta concepción sedistinguen en dos aspectos esenciales de la concepciónde adaptación manejada por la fisiología y la corrientedarwiniana dominante: en primer lugar, no se trata deuna adaptación que restablece un equilibrio inicial, sinoque produce una nueva condición corporal; en segundolugar, estos procesos de adaptación no son teleológicosen el sentido de que ocurren para alcanzar un objetivodeterminado. En esencia, significan la transformaciónde los procesos biológicos y psíquicos con el desarrolloo la destrucción de potencialidades y capacidades.

Para abordar el nexo biopsíquico humano comouna expresión de las condiciones concretas del procesohistórico, es imposible mantener el instrumentalmetodológico y técnico de la medicina tradicional. Sehace necesaria la construcción de un nuevo objeto deconocimiento. Un primer problema que aparece es elcómo “pensar” el hecho de la historicidad de la biologíahumana (Laurell y Noriega, 1989). En el marco de esta

propuesta, el abordaje de la biología humana no esposible desde los procesos celulares ó sub-celulares,cómo tradicionalmente se ha venido realizando, debidoa que esta historicidad se manifiesta en un nivel decomplejidad diferente al nivel celular o sub-celular. Hayque abordarlo en el nivel de complejidad que representael cuerpo humano en su integralidad. Es aquí donde seexpresa el concepto de estereotipos de adaptación ó“modos de andar por la vida” (Tambellini, 1975), siempredejando claro que el concepto de adaptación quepermite entender la historicidad de los procesosbiológicos es diferente del concepto de adaptaciónentendido como un continuo retorno a lanormalidad. Es decir, se entiende la adaptación masbien como procesos complejos, multidireccionales, loscuales no siempre significan un retorno a la normalidaddel organismo.

Esta manera de concebir o de construir el objetode científico de estudio proceso salud-enfermedadcolectivo tiene implicaciones importantes que esnecesario explicitar. Una primera consecuencia es quecentra la atención en las características del procesobiopsíquico complejo y no en la enfermedad clínica, esdecir, permite analizar otras dimensiones de la saludque la clínica no reconoce, pero que pueden significarun grave “malestar” corporal y psíquico. Es decir, abrelas posibilidades para el estudio de otras nuevasrealidades hasta ahora no reconocidas como“problemas de salud” por la visión dominante de laciencia médica. Otra consecuencia es que esta manerade abordar el proceso salud-enfermedad obliga a unavisión histórica, dinámica, que reconoce que las formashistóricas biopsíquicas específicas, son estereotipos deadaptación presentes pero que a la vez hunden susraíces en el pasado, y prefiguran el “malestar” futuro.Un tercer elemento inherente a esta construcción delobjeto científico destaca que el proceso salud-enfermedad colectiva caracteriza a las colectividadeshumanas definidas en función de su inserción específicaen los procesos sociales. Por tal motivo, es en éstas -en las colectividades humanas-, en donde se puedenestudiar sus expresiones concretas, y no en individuosaislados o en una suma de individuos. Pero esimportante comprender que no son colectivosahistóricos y difusos, sino grupos sociales definidos porsu manera de inserción en la sociedad, es decir, en elproceso productivo, donde se encarna el nexobiopsíquico históricamente específico.

Si entendemos el trabajo como la relación queestablece el ser humano con la naturaleza para su

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aprovechamiento, en determinadas condicioneshistóricas; y que es el lugar que ocupa el ser humanocon relación a ese proceso de trabajo lo que nos da lapista para entender el lugar que ocupa en una sociedadhistóricamente determinada; será a partir del estudiodel proceso laboral que podremos entender losestereotipos de adaptación que corresponden a losdiferentes sectores de esa sociedad concreta (Laurelly Noriega, 1989).

El problema de la construcción del objeto deestudio de la medicina social se ubica en el cómoconceptualizar la subsunción de lo biológico en lo social.A pesar de que los procesos de adaptación se expresanen los individuos concretos, para poder comprenderloses necesario comprender el “ambiente” como unproducto de la realidad social, y que además,dependiendo de la inserción del individuo en ese“ambiente” presentará distintas modalidades que soncaracterísticas de la manera de insertarse en el procesosocial. Es decir, los estereotipos de adaptación o“modos de andar por la vida”, son característicos delas colectividades humanas concretas, más allá de lascaracterísticas individuales de cada individuo que laintegra.

Como expresión de los planteamientosanteriores, se puede ir construyendo el nuevo objetode estudio -la relación salud-trabajo-enfermedad-, apartir de donde se puede generar el nuevo conocimiento.Entendiendo que los estereotipos de adaptacióncaracterizan a las colectividades humanas, es en éstasdonde podemos estudiar el nexo bio-psíquico y no enlos individuos aislados. Es por ello que una herramientade primera línea para abordar el estudio de la relaciónsalud-trabajo-enfermedad es la epidemiología, la cualha tenido que sufrir a su vez profundastransformaciones en sus bases conceptuales para darrespuesta a los nuevos problemas que surgen de estapropuesta.

El Proceso de Trabajo

Uno de los procesos más importantes en elproceso de transformación del mono en ser humano,es la creación y uso de la herramienta mediante lautilización de materiales que aportaba la naturaleza demanera directa -piedras, madera, huesos-, hace cercade cinco millones de años. De esta manera el serhumano comienza a actuar sobre la naturaleza paratransformarla en la perspectiva de obtener beneficiosde acuerdo a sus necesidades (Betancourt, 1995). La

diferencia fundamental entre el trabajo consideradocomo el intercambio constante entre los seres humanosy la naturaleza y la actividad de los animales es que enel caso de los primeros se realiza de manera consciente,con la participación del pensamiento, mientras que enlos segundos -los animales-, es una actividad meramenteinstintiva, donde no existe la prefiguración del productode la actividad. Este elemento va a ser clave al analizarel proceso de trabajo-alienación en el modo deproducción capitalista y sus efectos sobre la salud.

El ser humano nunca produjo bienes de maneraaislada. Desde sus inicios, el trabajo tuvo una baseeminentemente social. El trabajo individual es sólo uncomponente del trabajo social que no se expresa deforma directa sino en trabajo acumulado. De maneraque aunque el ser humano produce para satisfacer susnecesidades, esta satisfacción no se materializa en elpropio acto de producir, sino que logra su concreciónen el momento del consumo. De manera que paraestudiar el proceso de producción y reproducción debienes materiales, es necesario estudiar el momentode la producción y el momento del consumo comouna unidad dialéctica, inseparable uno del otro.

Esta unidad dialéctica entre el momento de laproducción y el momento del consumo tienen suexpresión específica en el proceso salud-enfermedado expresado de mejor manera, proceso salud-trabajo-enfermedad. El momento de la producción estávinculado con las condiciones de trabajo y elmomento del consumo con las condiciones de vida.Esta unidad dialéctica condiciones de trabajo-condiciones de vida va a tener como resultante lospatrones de desgaste o su expresión más completa:los perfiles de salud-enfermedad de las poblacionessocialmente determinadas (Ver Gráfico N° 1).

Gráfico N° 1Relación Momento Productivo

Momento Reproductivo

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La Salud Ocupacional ha asumido históricamenteel espacio que se corresponde con el momentoproductivo (Condiciones de Trabajo), sin embargo, lastendencias actuales del empleo en el marco de lasnuevas formas de la organización del trabajo hacenque esta separación (momento productivo vs.momento reproductivo) se haga cada día menossignificativa. Especial interés cobra en este sentido lasituación de la mujer trabajadora en las que no es posibleentender su proceso salud-trabajo-enfermedad tomandocomo referente y de manera aislada uno de estos dosmomentos del proceso de producción capitalista.

Estos procesos de producción y de consumo, asícomo las relaciones entre los seres humanos y entreéstos y la naturaleza, han cambiado a través de lahistoria, cambiando con ello las condiciones de trabajo,de vida y las expresiones de salud. El desarrollo de lasfuerzas productivas, la presencia de una amplia variedadde procesos laborales, la incorporación de formasproductivas regidas por sistemas de cooperación o dedivisión del trabajo, por la separación entre la concepcióny la ejecución, por la posesión o no de los medios deproducción, por la incorporación de la máquina y deprocesos automatizados, han definido las formas deenfermar o morir de los trabajadores (Betancourt, 1995).

Aunque el proceso de trabajo es el procesobásico de todas las sociedades, sólo se concreta bajoformas históricas particulares. En tal sentido, a objetodel presente trabajo, interesa analizar la forma que elproceso laboral asume en las sociedades capitalistas.

Para comprender las características que asumeel proceso de trabajo en el modo de produccióncapitalista hay que tener presente que su finalidad esla extracción de plusvalor, de manera que hay analizarel proceso de producción en sus dos facetas: el procesode valoración o de producción de plusvalor, y el procesolaboral o de producción de bienes. La característicaesencial del proceso de producción capitalista es queal mismo tiempo que es un proceso laboral, técnico, deproducción de bienes (valores de uso), es el procesode producción de valor de cambio o simplemente valor.

El proceso laboral, en este sentido, no es másque un medio del proceso de valorización del capital, elcual le impone su lógica. Estudiar el proceso laboralequivale a descubrir bajo qué formas concretas elcapital consigue extraer y maximizar la plusvalía,problema que está indisolublemente ligado a la lucha

de clases, dado que el capitalista no sólo persiguevalorizar su capital, sino que está obligado a hacerloenfrentado a la resistencia obrera. Lastransformaciones del proceso laboral capitalista laspodemos explicar entonces, como las solucionesconcretas específicas dadas a los problemas demaximizar la plusvalía. Es decir, expresan por una partela necesidad de incrementar incesantemente laproductividad del trabajo, fuente única de valor, y porla otra, la estrategia del capital para enfrentar y anularla estrategia obrera de resistencia a la explotación(Laurell, 1984).

Esto significa que si bien el proceso laboral esy puede ser visto como un proceso técnico, su esenciaes social y económica. Cada uno de sus elementos, yla interacción dinámica entre ellos, son comprensiblesúnicamente en esta perspectiva analítica. La conversiónde un objeto de trabajo, no es un hecho fortuito, sinoque obedece a la posibilidad de convertirlo en unproducto realizable en el mercado con ganancia. Losinstrumentos de trabajo no son el simple resultado deldesarrollo científico-tecnológico sino también, lamaterialización de determinadas relaciones de clase.El consumo de la fuerza de trabajo al realizarse eltrabajo, finalmente, sintetiza las características delobjeto, de los instrumentos y una determina-dacorrelación de fuerza entre el capital y el trabajo, y seexpresa bajo formas concretas de desgaste obrero.

Al analizar los orígenes del proceso devalorización, una primera interpretación se refiere ala competencia intercapitalista, apareciendo aquí elelemento de la productividad identificada con eldesarrollo y la incorporación de nueva tecnología. Estaprimera visión, si bien es importante, elude el elementocentral para comprender la cuestión tecnológica, quees la relación capital-trabajo (Laurell, 1990). Es decir,para comprender el proceso de valorización de lamercancía no basta entender que éste se desarrolla encondiciones de competencia intercapitalista, sino antetodo, que es un campo de lucha entre las fuerzasantagónicas del capital y el trabajo.

Esta lucha, cuando se presenta en condicionesordinarias, es decir, cuando no se cuestiona ladominación capitalista, se expresa como la disputa porel plusvalor ó plusvalía generada en el proceso laboral,y al mismo tiempo, por el cómo usar la fuerza de trabajo.Ambas luchas tienen momentos en que se expresande una manera concentrada, tal es el caso de las

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movilizaciones obreras ó en las discusiones de lacontratación colectiva. De igual manera, tieneexpresiones cotidianas en los lugares concretos detrabajo. Allí se expresan en la conflictividad en elproceso laboral concreto, en la indisciplina, elenfrentamiento personal capataz-trabajador, el saboteoimperceptible de la producción, etc.

Otro elemento importante a destacar es que elproceso de trabajo no está aislado del consumo, sinoque ambos constituyen una unidad. Son dos momentosde un mismo proceso en el cual el consumo estádeterminado por la producción. Esta unidad entre trabajoy consumo, que en el marco de la lucha de clases originadeterminadas prácticas de clase, es lo que permitedescubrir la existencia de patrones específicos dedesgaste reproducción obrera, que se expresan en lasfisonomías de clase y en el proceso salud-enfermedad.Así mismo las formas distintas de enfermar y morir delas clases y fracciones de clase, no son más quemanifestaciones singulares del proceso de desgaste-reproducción.

Conceptualizar el problema de esta maneratiene una serie de consecuencias teóricas y prácticas.Por una parte, permite constatar la determinación socialdel proceso bio-psíquico humano, y por otra, explica laesencia social de este proceso, lo que nos coloca encondiciones de ir reconstruyendo sus elementosconcretos y reconocer sus determinaciones.

Entender la enfermedad como unamanifestación singular de un proceso, resuelve losdilemas causalistas, ya que pone en el centro, no tal ocual entidad gnoseológica, sino el proceso mismo quepuede expresarse bajo formas distintas en diferentesmomentos. Esto nos libera definitivamente de las trabasdel pensamiento médico tradicional respecto a lacausalidad específica en sus vertientes de mono ymulticausales, y nos ubica en el camino de unpensamiento auténticamente preventivo. De allí que lasimple búsqueda de cómo prevenir o curar unaenfermedad determinada, deviene en un esfuerzo pordesentrañar cómo lograr el desarrollo óptimo de laspotencialidades bio-psíquicas humanas.

Asumir estos planteamientos tiene efectosprofundos sobre la práctica. Primero, porque revelanque hay un vínculo íntimo entre el trabajo y la salud,que no se agota en algunos factores de riesgo externosy determinadas enfermedades, sino que el trabajo es a

la vez un modo biológico y psíquico de vivir. No setrata de luchar contra la posibilidad de contraerdeterminadas enfermedades, sino porque el desgastesea menor. Significa hacer consciente que el capital nosólo expropia el producto del trabajo, sino que lo hacebajo formas que tienen repercusiones precisas en lavida obrera cotidiana. Significa que no es posible ganaren el consumo lo que se perdió en la producción.

El transformar profundamente los patrones dedesgaste / reproducción obrera, pasa por la disputa dela repartición del excedente, pero la cuestión centrales el control sobre el proceso de trabajo o proceso deproducción.

De manera esquemática podemos decir que elproceso de producción lo podemos desdoblar en susdos componentes: el proceso de valorización y elproceso laboral, donde las necesidades del proceso devalorización se constituyen en el determinante principalde la conformación específica del proceso laboral. Sinembargo, el proceso de producción está en el centrodel conflicto entre el capital y el trabajo, de maneraque otro de los determinantes de la conformación delproceso laboral concreto es la manera como seexpresan las estrategias de valorización y deresistencia.

La importancia de entender cuales son losdeterminantes de la conformación del proceso laboralreside en el hecho de que es en este proceso donde seconcreta una forma particular de trabajar que implicaun uso específico del cuerpo y la mente del trabajador(Laurell, 1990). En última instancia, el proceso laboralestá conformado por el objeto de trabajo, losinstrumentos de trabajo y el trabajo propiamente dicho.Los dos primeros constituyen la base técnica del procesolaboral, y el trabajo propiamente dicho va a estar definidopor la organización y la división del trabajo en un procesolaboral concreto. Sus características van a estardefinidas por la lógica y dinámica del proceso laboral,es decir, la forma específica que asume su base técnicay la organización y división del trabajo. Sin embargo,es necesario una segunda lectura para poder descifrarla relación entre el proceso laboral y nuestro objetoespecífico de estudio: el proceso salud-enfermedadcolectivo. Para ello es necesario el estudio de la otracara del proceso laboral que es la dimensión social ybiopsíquica y desarrollar ésta conceptualmente. Laurell(1990), desarrolla un esquema que permite visualizaresta propuesta:

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Gráfico N° 2Proceso de Producción – Proceso de Desgaste

Tomado de Laurell: La Construcción Teórico-Metodológica. En: Para la Investigación sobre la Salud de los Trabajadores

Las herramientas de la medicina tradicional nopermiten dar respuesta a la nueva conceptualizaciónde la medicina social, en el análisis del proceso laboraly el nexo bio-psíquico. Al producirse una ruptura conrelación al objeto de estudio, necesariamente tiene queproducirse una ruptura con el instrumental metodológicoque lo acompaña. Así, ni la concepción tradicional del“riesgo” como agentes nocivos aislados que puedencausar enfermedad ni la concepción de los “factoresde riesgo” presentes en el modelo epidemiológicomulticausal, resultan suficientes para el enfoque teóricoque propone la corriente de la medicina social. Se hacenecesario construir nuevas categorías de análisis.

Una primer categoría de análisis, necesaria parareconstruir a nivel de los procesos intelectuales unarepresentación coherente de la realidad es la de“desgaste”, entendida como la pérdida de capacidadpotencial y/o efectiva, biológica y psíquica y engloba alos procesos biopsíquicos en su conjunto (Laurell, 1990).La razón de abarcar con este concepto tanto lascapacidades efectivas como las potenciales es parapermitir analizar no sólo la destrucción biopsíquico,repentina o lenta, sino también los obstáculos aldesarrollo de potencialidades en estos dos terrenos. Esimportante esta preci-sión ya que introduce un elementonovedoso, debido a que el desgaste puede expresarseo no en lo que la medicina reconoce como patología.Además, obliga a considerar los procesos de desgasteno solo en el marco del proceso productivo, sino además,y de manera muy importante, en el del proceso

reproductivo, de reposición y desarrollo de lascapacidades bio-psíquicas.

Por su complejidad, la categoría desgaste esdifícil mostrarla directamente, por lo que la mayoría delas veces sólo es posible captarla a través de alguna desus dimensiones o mediante indicadores. Los másusados, en este sentido, son los síntomas y signosinespecíficos, el perfil patológico, los años de vida útilperdidos, el envejecimiento acelerado y la muerteprematura. Los tres últimos carecen de sentido salvoque se presenten con relación a un referente social,cuyo procedimiento de selección debe ser explícito.

Los procesos de desgaste no pueden sercomprendidos primariamente en la individualidad decada trabajador, sino que es una categoría quecaracteriza a las colectividades humanas. Es decir, aúncuando los procesos de desgaste se expresan a travésde los individuos que integran la colectividad, no es sinoen ella donde adquiere pleno significado y visibilidad.Esto adquiere vital importancia en la comprensión deque el proceso de desgaste no es una fatalidad ciega,sino que está moldeado por la acción de la propiacolectividad.

Una segunda categoría es la de “carga laboral”,con la cual se pretende lograr una conceptualizaciónmas precisa en lo que hasta ahora se ha conocido comocondiciones ambientales con relación al proceso laboral.Se intenta resaltar en el proceso laboral a los elementos

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de éste que interactúan de manera dinámica entre sí ycon el cuerpo humano, generando procesos deadaptación que se traducen en desgaste, entendido éstecomo la pérdida de la capacidad potencial y/o efectivacorporal y psíquica (Laurell y Noriega, 1989).

Es necesaria una primera aproximación a larealidad por medio de la descomposición de las cargasen tipos específicos, incluso incluyendo los riesgosparticulares. Ahora bien, esto no quiere decir que larecomposición sea la simple suma de las partes, debidoa que sólo es posible lograr una comprensión global delos procesos de desgaste a partir de la dinámica globaldel proceso laboral. Un segundo paso analítico, consisteen la reconstrucción de las cargas laborales con la lógicaglobal del proceso laboral como punto de partida. Eneste sentido, para lograr una mejor comprensión de lascargas laborales es conveniente agruparlas en dosgrandes grupos: las que tienen una materialidad externaal cuerpo y que al interactuar con él genera una nuevamaterialidad interna, éstas son las cargas físicas,químicas, biológicas y mecánicas, y las que sóloadquieren materialidad en el cuerpo humano, éstas sonlas psíquicas y las fisiológicas.

Las cargas físicas, químicas, biológicas ymecánicas pueden ser detectadas y hasta cuantificadassin involucrar al cuerpo humano, tienen de esta manerauna materialidad externa a él. Todas estas cargas alinteractuar con el organismo, sufren un cambio decalidad debido a que pierden su materialidad externapara generar transformaciones en los procesoscorporales. Así, el ruido en el ambiente cobraimportancia en la medida en que genera procesospatológicos que van más allá de la simple pérdidaauditiva.

Las cargas fisiológicas y psíquicas, sólo tienenmaterialidad en el cuerpo humano. Pero así como lascargas del primer grupo al interactuar con el organismosufren una transformación cualitativa, de la mismamanera este segundo grupo de cargas también generanprocesos similares, de tal manera que el conceptualizarestas cargas no es posible al margen del cuerpohumano, pero al mismo tiempo, cobran materialidad enprocesos corporales transformados.

La descomposición y agrupamiento de lascargas en distintos tipos, sólo es un primer pasoanalítico. El segundo paso sería la recomposición óreconstrucción de las cargas laborales a la luz delproceso laboral concreto.

Esta recomposición es evidente en el efectopotenciador de las cargas de un mismo grupo, demanera tal que no sólo se suman sino que incrementansus efectos sobre los procesos bio-psíquicos humanos.Pero es en la interacción entre las cargas de distintosgrupos donde se logra una mejor visualización de lanecesidad de analizarlas en conjunto y en el marco delproceso laboral.

Betancourt (1995) y Breilh (1994) introducenelementos adicionales que permiten ir más allá de losplanteamientos de Laurell con relación a las cargaslaborales. En efecto, estos autores hablan de procesosmás que de cargas dándole una connotación másamplia al concepto desarrollado por Laurell. Planteanla existencia de procesos peligrosos (que se relacionancon el concepto de carga de Laurell) y la existenciade procesos favorables o protectores. Estaconceptualización de los autores antes señalados esimportante ya que permite rescatar los elementospositivos del trabajo y eliminar o combatir los elementosdestructivos.

Los avances propuestos por la corriente de laMedicina Social han abierto brechas para elplanteamiento de nuevos problemas de la salud en eltrabajo. Uno de los que ha tenido mayor relevancia esel referido al enfoque de género. La visión de géneroha permitido hacer visibles problemas que antespermanecían ocultos. En el área de la salud de lostrabajadores esta perspectiva ha permitido establecerlas claves para la comprensión de la distribución desigualde la enfermedad al interior de los procesos productivos,al estar la distribución del empleo estrechamenterelacionado con la discriminación entre hombres ymujeres. Los llamados “ghettos de empleo” al interiorde las fábricas permiten comprender esta distribucióndesigual de la enfermedad: empleos para hombre(caracterizados por “altas exigencias” y elevadosniveles de exposición a condiciones peligrosas detrabajo) vs. empleos femeninos (caracterizadossupuestamente por “bajas exigencias” y bajos nivelesde exposición a condiciones peligrosas de trabajo). Estamitología con relación a los empleos femeninos ymasculinos ha sido develada por la perspectiva degénero en el abordaje de la salud en el trabajo. Estudiosrealizados han puesto al descubierto la falsedad de laafirmación que los empleos femeninos son de bajaexigencia, y al mismo tiempo han develado la trampade la visión masculina de la producción con relación aque los hombres pueden soportar peores condicionesde trabajo. Este último ha sido un argumento que ha

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permitido exponer a los trabajadores a condiciones alas que ningún ser humano (sea hombre o mujer) deberíaser expuesto en el desarrollo de su actividad de trabajo.

Entre algunos de los problemas teóricos sobrelos que es necesario profundizar en el debate actual delos problemas de la salud desde una perspectiva degénero podemos ubicar los siguientes: las categoríasque expliquen la salud; la construcción histórica de losgéneros; las diferentes nociones de reproducción quepermitan profundizar en el conocimiento de losproblemas de la mujer; y el trabajo doméstico comoparte fundamental de la vida cotidiana de lastrabajadoras (Garduño, 1993).

En la perspectiva de la salud colectiva oepidemiología crítica -entendidas como una propuestaalternativa al enfoque médico tradicional- se proponecomo alternativa para analizar el proceso salud-trabajo-enfermedad en su articulación con el nivel más generalde la dinámica social la categoría de análisis“reproducción social” en tanto que integra los dosmomentos fundamentales de la organización social: laproducción de bienes (momento productivo) y elconsumo de los bienes producidos para la reproducciónde la fuerza de trabajo y la realización de la mercancía(momento reproductivo). Esta propuesta ha permitidoavanzar en la explicación y distribución diferencial dela enfermedad y de la muerte, es decir, ha permitidodevelar el carácter social del proceso salud-trabajo-enfermedad.

En los estudios desarrollados en estaperspectiva, por razones de construcción del saber, deuna u otra manera, siempre se ha privilegiado algunode los dos momentos (el productivo o el reproductivo)para explicar la determinación del proceso salud-enfermedad colectiva. Los estudios que parten delmomento productivo analizan los procesos de trabajogenerando conocimientos que se concretan en la luchapor la salud laboral para cambiar, en última instancia,las relaciones entre el capital y el trabajo; mientras quelos estudios que parten del momento reproductivohan permitido conocer algunos de los determinantesdel proceso salud-enfermedad que se generan por las“condiciones de vida” de los diferentes grupos sociales.

La aplicación empírica en problemas de saludcolectiva de esta visión dicotómica de la dinámica social,permite entender y clasificar las patologías y las causasde muerte de acuerdo a su origen, privilegiando sólouna parte de la vida -la productiva ó la reproductiva-,

aunque en última instancia se reconozca la síntesis dedeterminaciones en el cuerpo mismo de los individuospor la interacción de las exigencias de esos dos ámbitos.En el caso de las mujeres trabajadoras, que cumplen eldoble papel de trabajadoras y de amas de casa, los dosmomentos -el productivo y el reproductivo- se mezclanen la vida diaria y el límite de sus fronteras es imposiblede definir. Las mujeres -en su papel de ama de casa,-en los espacios llamados de reposición, realizan tareasde producción de bienes y servicios que las desgastan.Además, en el desarrollo de su actividad laboral, noabandonan su responsabilidad sobre sus familias, detal forma que trabajan en la reproducción de sí mismasy de los demás.

Metodológicamente es posible, en algunossectores y/o grupos sociales, entender por separado laproducción y la reproducción, pero en el caso de lasalud-enfermedad de las trabajadoras, esindispensable situar ambas categorías como un“continuum” en el que desarrollan su vida. En estesentido, analizar la generación de problemas de saluden la mujer trabajadora desde alguno de los momentos,sin considerar el otro, puede llevar a perder o encubrirparte de su explicación y de su compleja determinación.La doble inserción de la mujer al trabajo, en losmomentos de producción y de reproducción social, asícomo la especificidad de la reproducción biológica,deben ser abordados en el estudio de la salud de lamujer trabajadora. (Acevedo, 1993)

Podemos ubicar tres niveles de explicación delos problemas de la salud de la mujer sobre los que esimportante plantear algunas reflexiones. El abordajedesde el punto de vista de la reproducción en el sentidobiológico, los que la abordan desde la perspectiva de lavida doméstica como el lugar de la reproducción de lacapacidad de trabajo, y los que la explican desde laperspectiva de la construcción histórica de los génerossituándose en el nivel más abstracto de lareproducción social (Breilh, 1991).

Al aplicar las categorías de género y lasacepciones de reproducción social en el análisis delos tres papeles centrales de la mujer en la estructurasocial encontramos que existe una extrapolación entresus funciones de reproducción biológica -como madre-de reproducción de la fuerza de trabajo -como ama decasa-, y en la reproducción mas general como invisiblesoporte social. A partir de esta perspectiva podemossituar distintos momentos en la determinación de dañosen la salud.

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En el primer nivel encontramos una contradicciónentre el valor socialmente conferido a la reproducciónde la especie y la responsabilidad que la mujer ha deasumir en forma individual, que se concreta en undiscurso que eleva la maternidad a un rango superior,casi “celestial” -situación que limita a las madres alhogar-, pero al mismo tiempo se les reconoce menorjerarquía en un mundo de competencia y trascendencia.Esta contradicción se expresa aún con mayor crudezaen el ámbito del ambiente de trabajo, donde existe unadoble visión del “ser madre”: por una parte se considerauna obligación, la función femenina por excelencia, peroque se considera inapropiada cuando entre encontradicción con la posibilidad de generar ganancias.Esta contradicción se expresa en una aprobación /desaprobación social de las madres -en especial delas mujeres embarazadas- que laboran fuera del hogar.Esta contradicción llega a su máxima expresión en losperíodos de crisis económica y en las tendenciasactuales de la configuración del hogar, donde cada vezson más comunes los hogares monoparentales, dondela carga económica es asumida exclusivamente por lamujer. Ejemplo concreto de esta contradicción entre lamaternidad y el trabajo se expresa en las políticasdesarrolladas por muchas empresas donde solicitan“certificados de esterilización” a las mujerestrabajadoras para eludir la protección legal que alogrado la mujer en el ámbito de las leyes. Otraexpresión de esta contradicción es la falta de apoyocolectivo a la maternidad (ausencia de guarderías,carencia de servicios básicos de apoyo a la maternidad,etc.) que representan una fuente de tensión permanenteen la vida de la mujer trabajadora.

El segundo nivel sobre el que se hace necesariauna reflexión, es el de la vida doméstica, que comprendela reposición de la capacidad de trabajo. Es el momentode la renovación constante de la capacidad productivadel individuo para trabajar, a partir de su sobrevivenciaestricta y de su recuperación como parte de un gruposocial específico. Las tareas que esto requiere segeneran en el hogar, ámbito de la realización de cadaindividuo y de la familia como núcleo social primario.

El tercer nivel de explicación es un análisis masgeneral, que intenta explicar con mayor claridad laconstrucción de los géneros que delimitan la vidadiferenciada de hombres y mujeres e influye en unanálisis más particular.

Capitalismo y desgaste obrero

El advenimiento del capitalismo marca uncambio radical en la relación del ser humano con lanaturaleza y, por tanto, en la manera como se expresael desgaste del productor directo. Sin embargo, seríauna simplificación extrema concluir de allí que el modode producción capitalista se caracteriza por un patrónúnico de desgaste. Aún el conocimiento superficial dela realidad desmiente que así ocurre, lo que sugiere lanecesidad, no de abandonar el planteamiento general,sino el analizar el proceso histórico de desarrollo delcapitalismo para poder descubrir cuáles son lasmanifestaciones de sus transformaciones en el desgasteobrero.

Esto equivale a analizar los cambios ocurridosen el proceso laboral que se traducen en relacionesdistintas entre los medios de producción y el trabajo,que a su vez originan modos diferentes de consumir lafuerza de trabajo y que se expresa en formasespecíficas de desgaste obrero.

Aún admitiendo que cada proceso tienecaracterísticas singulares, parece posible construir unatipología de “proceso laboral / patrón de desgaste”sobre la base del reconocimiento de las principalesformas distintas de resolver el problema de la extracciónde plusvalía a partir o teniendo como referente lacompetencia intercapitalista y la resistencia obrera. Lapresencia asincrónica de procesos laborales, que puedenser vistos en una perspectiva histórica como etapassucesivas de maduración del proceso productivocapitalista, no invalida este enfoque analítico sinosolamente señala la necesidad de especificar quécircunstancias concretas les generan y cómo secondicionan mutuamente.

Una primera gran división de los procesoslaborales capitalistas está dada por las etapas desubsunción formal y subsunción real del trabajo alcapital1 -y se expresa de manera simple como la formaque adopta el control del capital sobre el trabajo-, queen términos de plusvalía corresponden respectivamenteal predominio de las formas absolutas y relativas deésta. La etapa de subsunción formal se puede considerarcomo la etapa de transición hacia el modo de produccióncapitalista propiamente dicho. Es decir, es una etapa

1 De acuerdo con Marx, entendemos por subsunción cuando “...el proceso de trabajo se convierte en instrumento del proceso de valorización, delproceso de autovaloración del capital: de la creación de plusvalía...” (Marx, K. El Capital, Cap. VI. Fundo de Cultura Económica. 2ª edición. 1959)

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que se abre con la redefinición de las relaciones deproducción, pero todavía no hay una forma productivacapitalista propia. El modo de producción capitalista seestablece con la subsunción real, que sin embargoevoluciona constantemente pasando por el maquinismo,el taylorismo-fordismo y la automatización. A cada unade estas etapas y subetapas hay una conformaciónespecífica del proceso laboral que implica formas dedesgaste distintas.

En términos generales son dos los problemasesenciales que el capital tiene que resolver para podermaximizar la plusvalía. En primer lugar, tiene quecontrolar el proceso de trabajo para poder convertir lafuerza de trabajo comprada por él en trabajo realizado,es decir, materializado como valor. El control se logra,a través de formas cada vez mas avanzadas de divisióndel trabajo que conllevan a la separación entre laconcepción y la ejecución del trabajo y ladescalificación creciente del obrero mediante laapropiación de su saber-hacer. Como expresión de loanterior, es necesario el desarrollo de una tecnologíaque materialice el control al transferir la iniciativa obreraa la máquina; se convierte al obrero en un factor objetivodel proceso de producción. El segundo problemaplanteado al capital es incrementar la productividad deltrabajo, que logra ampliando la base productiva, esoes, desarrollando los instrumentos de trabajo.

En este sentido, consideramos importanteanalizar dos elementos significativos en el procesolaboral como son la división y organización del trabajoy las características de la tecnología, fundamentadasen la comprensión de los patrones de desgaste de lapoblación trabajadora. De hecho, en cada etapa oestadío de desarrollo de las fuerzas productivas,encontramos formas distintas de desgaste obrero. Desdela Cooperación Simple, hasta las fábricasautomatizadas, la población trabajadora presenta “tipos”de desgaste característicos.

Los escenarios de las luchas por la salud

A cada período del capitalismo no solo hancorrespondido formas concretas de desgaste, sinotambién, formas concretas de resistencia obrera. Vemosasí como los trabajadores en el inicio del capitalismodesarrollaron formas concretas de lucha centradasfundamentalmente en la lucha por la supervivencia. Nohabía espacio para la defensa de la salud. Era la vida ola muerte lo que se jugaba el trabajador cada día. Eranlos tiempos de la explotación brutal del trabajador, de

la acumulación originaria capitalista. Frente a lavoracidad de la burguesía, el movimiento obrerorespondió con la lucha por la disminución de la jornadade trabajo y por el aumento de salarios. En este período,el movimiento obrero adquiere bases sólidas y tomaconciencia de su poder como fuerza política. Laconquista primordial en este período se puede sintetizaren la conquista del derecho a la vida.

Elementos destacables que se pueden observardurante este período son las largas jornadas de trabajoque alcanzan las 12, 14 y hasta 16 horas; el empleo delos niños en la producción industrial, a veces a partirde los 3 años, aunque la mayoría de las veces a partirde los 7. La falta de higiene, promiscuidad, agotamientofísico, accidentes de trabajo y sub-alimentaciónpotencian sus efectos y crean las condiciones de unaelevada morbilidad, gran mortalidad y esperanza de vidamuy reducida.

La gravedad de la situación se expresa en larevisión médica para la conscripción militar: “EnAmiens, hacia 1830, para encontrar 100 conscriptosaptos para el servicio militar, se necesitaban 153 jóvenesde las clases altas y 383 de clases pobres” (Bron, 1968:citado por Dejours, 1990).

Con relación a las condiciones de trabajo de laépoca, y sobre todo los accidentes de trabajo, los autoresde la época señalan que la intensidad de las exigenciasdel trabajo y de la vida misma amenazaban a la manode obra. Los autores de la época compararon losefectos de estas condiciones sobre los trabajadores conlos efectos de las enfermedades contagiosas.

Las concentraciones obreras creadas por lasnecesidades de la producción hacen surgir nuevasrelaciones que permiten al Estado ser progresivamenteautónomo de la tutela patronal no sin resistencia porparte de ésta última. La aparición de federacionessindicales, asociaciones y partidos políticos obreros, danal movimiento obrero una dimensión significativa sobretodo a partir de la Comuna de París. Lasreivindicaciones obreras alcanzan un nivel propiamentepolítico.

Durante este período se dan procesos desigualesde avances en relación a las conquistas de lostrabajadores. Muchas veces los logros alcanzados seráncuestionados nuevamente por las leyes que haránregresar a situaciones anteriores por vía deinnumerables derogaciones y por el rechazo de la

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aplicación de las mismas. Entre un proyecto de ley ysu voto se tendrá que esperar a menudo de diez a veinteaños. En Francia, por ejemplo, la aprobación de lasupresión de la libreta obrera tardó nueve años; treceaños para el proyecto de ley sobre la reducción deltiempo de trabajo de mujeres y niños; once años parala ley de higiene y seguridad; quince años para la deaccidentes de trabajo; cuarenta años para la jornadade 10 horas; veinticinco años para la jornada de ochohoras (Dejours, 1990).

Es solamente a partir del final del siglo XIX queson arrancadas las leyes sociales que conciernenespecíficamente a la salud de los trabajadores. Comodato histórico y como expresión de las condiciones devida y trabajo de la población trabajadora, vale la penarescatar los comentarios y burlas que causó laaprobación de la Jubilación para el conjunto detrabajadores de más de 65 años. Esta Ley fue llamadapor el movimiento sindical y por los trabajadores“Jubilación de los muertos” ya que en esa época sóloel 15% de los franceses llegaban a esa edad.

Con el desarrollo de la resistencia obrera, yubicada en el tiempo entre la Primera Guerra Mundialy la década de los sesenta, el movimiento obrero centrasu lucha en la protección a la salud. Resguardar elcuerpo de los accidentes, prevenir las enfermedadesprofesionales y las intoxicaciones causadas por losproductos industriales, garantizar a los trabajadores elcuidado y tratamientos adecuados, son los temascentrales alrededor de los cuales se organizan las luchasobreras de este período. Podemos ubicar este períodocomo el de la lucha por las condiciones y medioambiente de trabajo.

La consolidación de la organización de lostrabajadores y el alcanzar la dimensión de fuerzapolítica le permite asumir nuevas tareas en este período.Se puede decir, de manera esquemática, que laorganización de los trabajadores se tradujo por laconquista primordial del derecho a la vida, incluso silas condiciones de existencia estaban lejos de serhomogéneas para el conjunto de la clase obrera(Dejours, 1990). De hecho, aparece una mayordiversidad de reivindicaciones. Uno de los ejes queestructuran estas nuevas reivindicaciones es el de laprotección de la salud.

Dejours (1990) plantea tomar la referencia dela Primera Guerra Mundial (1914 - 1918) debido al saltocualitativo que se observa en la producción industrial,

el esfuerzo de producción para las necesidades de laguerra, las inéditas experiencias de reducción de lajornada de trabajo en las industrias de armamentos,etc. El vacío dejado por los muertos y los heridos deguerra en la reserva de mano de obra, los esfuerzospara la reconstrucción, la reinserción de losdiscapacitados en la producción, generan lascondiciones de una transformación de la relación serhumano–trabajo.

La aparición del taylorismo y del fordismo comoformas privilegiadas de organización del trabajo van atener repercusiones importantes sobre la aparición denuevos problemas a la salud de los trabajadores. La“organización científica del trabajo” se va a expresarcomo nuevas tecnologías de sumisión y dedisciplinarización del cuerpo del trabajador que haránnacer tensiones desconocidas hasta entonces,principalmente referidas a los tiempos y ritmos detrabajo. Los resultados exigidos son absolutamentenuevos y hacen aparecer al cuerpo como principal puntode impacto de los daños del trabajo. La fatiga física yano afecta únicamente a los trabajadores que hacentareas pesadas, sino al conjunto de los obreros de laproducción masa. Con la separación radical del trabajomanual y trabajo intelectual, el sistema de Taylor, alneutralizar la actividad mental del trabajador deja elcuerpo fragilizado y explotado, sometido a los impulsosde la organización del trabajo, sin su protector naturalque es el aparato mental. Tendremos entonces uncuerpo enfermo o en peligro de estarlo.

A partir de la guerra van a ser superadasimportantes etapas, al mismo tiempo que se perfila unanueva diversificación de las condiciones de trabajo yde salud. El movimiento obrero intenta obtener mejorasen la relación salud-trabajo, y medidas de mejoramientoaplicables al conjunto de los trabajadores.

Sin embargo, este proceso es desigual y va adepender de las relaciones específicas de fuerza enlos diferentes segmentos de la clase obrera. Allí dondees más fuerte, es decir, donde los trabajadores sonsuficientemente numerosos –las grandes empresa-,donde el trabajo tiene un valor económico estratégico–sectores de punta o centros vitales de la economíanacional-, la evolución de la relación salud-trabajo serámás rápida. Por el contrario, en las empresas aisladas,en las regiones poco industrializadas, donde lostrabajadores ocupados son pocos y el nivel desindicalización es bajo, y donde la población detrabajadores inmigrantes es importante, las condiciones

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de trabajo van a ser incomparablemente peores enrelación a las primeras.

En razón del desarrollo del movimiento obrero anivel nacional, y del papel del Estado como interlocutorprivilegiado, se pueden establecer más fácilmente lavinculación causa-efecto entre una lucha determinaday una ley específica que en el período anterior,vinculación que no se disocia por la inercia del tiempotranscurrido que por lo general es corto.

La guerra favorece las iniciativas a favor de laprotección de una mano de obra que se ha vistoreducida tanto desde el punto de vista numérico comode la constitución física misma, por las necesidades delfrente de lucha. Los principales progresos se cristalizanalrededor de la jornada de trabajo, de la medicina deltrabajo y de la curación de las afecciones contraídasen el trabajo.

Si bien ya desde 1898 existían leyes en Franciaque preveían la creación de dispensarios de fábricas acargo de empresas privadas de seguros, y existíandecretos de 1913 que condujeron a ciertas empresas aorganizar exámenes médicos de ingreso y de controldurante el período de trabajo, es en 1915 que aparecenlas bases de una verdadera medicina del trabajo con lainspección médica de las fábricas de guerra,organizadas por A. Thomas. Después de la SegundaGuerra esta tendencia se acentúa con lainstitucionalización de la medicina del trabajo en ciertossectores, sobre todo en las minas, mientras que ciertosempleadores contratan a título individual un médico,ante todo para hacer una selección previa al ingreso, ypara protegerse de ciertos riesgos que son ahora másarticulados con penalizaciones financieras. Poco a pocose va elaborando una doctrina implícita de la medicinadel trabajo.

La última época de este período de la lucha delos trabajadores por la salud que podemos ubicar a partirde la década de los cuarenta, el movimiento obrerocontinúa desarrollando su acción para la mejora de lascondiciones de vida (duración de la jornada de trabajo,vacaciones, jubilaciones, salarios), perosimultáneamente se desprende el frente específico queconcierne a la salud. Estas reivindicaciones se refierenprincipalmente a la prevención de accidentes, la luchacontra las enfermedades, el derecho a la atenciónmédica, es decir, la salud del cuerpo. Dejours (1990)plantea que este segundo período de la “historia de lasalud de los trabajadores” se caracteriza por larevelación del cuerpo como punto de impacto de laexplotación.

La peligrosidad de las máquinas, los productosindustriales, los gases y los vapores, los polvos tóxicos,los parásitos, virus y bacterias son progresivamentedesignados y estigmatizados como causa delsufrimiento físico. De 1914 a 1968, es progresivamenteel tema de las condiciones de trabajo el que ocupa elprimer lugar dentro de las reivindicaciones obreras enel frente de la salud. La lucha por la supervivenciadejó el lugar a la lucha por la salud del cuerpo.

A partir de 1968, y como corolario a 50 años delucha, el movimiento obrero desarrollará jornadasimportantes de lucha a nivel mundial por lo que sedenominó las condiciones y medio ambiente de trabajo.En este período se desarrollan luchas que reflejan elagotamiento del modelo taylorista-fordista expresadasen formas no convencionales de resistencia obrera: elausentismo, el “turn-over”, los paros de producción, elsabotaje, las huelgas salvajes son las expresiones máscomunes de la resistencia obrera. La insurgencia obreraa nivel mundial se manifiesta en grandes movilizaciones.“Mayo de 1968” en Francia, el “otoño caliente” deItalia, los mineros de Asturias en España, las huelgasde los automotrices en Detroit, son referenciasobligadas de este período.

Después de 1968 se plantea una nueva etapa en“la historia de la salud de los trabajadores” signada porla transición de las luchas de lo que hemos denominadosobre las condiciones y medio ambiente de trabajo enmedio de un desarrollo desigual de las fuerzasproductivas, de las ciencias, de las técnicas, de lasmáquinas, del proceso de trabajo, de la organización yde las condiciones de trabajo que produjeron situacionesmuy complejas y heterogéneas para poder reducirlas aun análisis genérico de la relación salud-trabajo. Sinembargo, en el seno mismo de este complejo mosaicode situaciones y de fenómenos, se puede identificaruna nueva temática que amplía la problemáticatradicional de las cuestiones de salud y se refiere a lasalud mental.

A partir de 1968, la temática referida a losaspectos de la salud mental y el trabajo cobran cadavez más importancia y plantean nuevos retos y nuevasreivindicaciones a los trabajadores en la relación salud-trabajo.

Existen varias razones que dan cuenta de estefenómeno. La primera se refiere al agotamiento delsistema taylorista-fordista de producción. Lainsurgencia obrera contra este modelo de organizacióndel trabajo llevó a un replanteamiento del mismo en

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todos los terrenos: en el económico, en el del controlsocial y en el terreno ideológico. En el primero, lashuelgas, los paros de producción, el ausentismo, el “turn-over”, el sabotaje de la producción condujo a buscarsoluciones de recambio de modelo. En relación al controlsocial, este sistema ya no da más pruebas de susuperioridad. Lejos estamos de las afirmaciones deTaylor acerca de las ausencias de huelgas en lasfábricas que adoptaron la organización científica deltrabajo (O.C.T). En el área del terreno ideológico esdonde hay un mayor cuestionamiento del modelotaylorista, tanto por los trabajadores como por parte dealgunos empresarios.

La reestructuración de las tareas, comoalternativa de la O.C.T. provoca amplias disputas sobrela finalidad del trabajo y sobre la relación “serhumano-tarea”, poniendo el acento sobre la dimensiónmental del trabajo no solamente industrial, sinoabarcando todas las ramas de la producción, incluyendoal sector terciario y de las nuevas industrias. En lastareas de oficina, reputadas como “no productoras dedaño” aparecen cada vez más en evidencia los efectosde esta actividad sobre la salud. La sensibilidad frentea las cargas intelectuales y psicosensoriales del trabajoen algunas actividades de oficina, así como lasactividades que tienen una débil carga física pero altosniveles de peligrosidad del proceso productivo (industriapetroquímica, nuclear, del cemento, etc.) confronta aestos trabajadores a nuevas condiciones de trabajo yles hace descubrir sufrimientos insospechados de losque nunca antes se tuvo conciencia. Nos estamosrefiriendo a los problemas vinculados directamente conla salud mental.

La pregunta que surge de esta última etapa queestamos viviendo está referida a qué es lo que podemosubicar como fuente específica de nocividad para lasalud mental. Podemos responder que si la lucha por lasobrevivencia (de las primeras etapas del modo deproducción capitalista) se correspondía con la luchacontra la excesiva duración de la jornada de trabajo, yla lucha por la salud del cuerpo conducía a denunciarlas condiciones y ambiente de trabajo; la lucha por lasalud mental se corresponde a la lucha centradafundamentalmente en el problema de la organizacióndel trabajo

Hoy en día el movimiento obrero atraviesa poruna de sus crisis mas profundas. Se evidencia en lacrisis de la organización sindical como instrumento delucha de los trabajadores. A pesar de ello, se comienzana estructurar formas de resistencia, aunque incipientes,

que van señalando el rumbo de los nuevos combatesque deberá desarrollar la clase obrera para la conquistade mejores condiciones de salud y trabajo.

Aunque de manera incipiente, nuevos sectoresde trabajadores comienzan a exigir el derecho aconocer, con suficiente anticipación, los planes deintroducción de nuevas tecnologías y cambios deprocesos para poder preveer los cambios en lascondiciones de trabajo. La lucha por la disminución yla regulación de la jornada de trabajo (períodos depausas-descansos) es otro elemento que cada díaaparece con mayor frecuencia en las estrate-gias deresistencia obrera. De la misma manera, frente a laaparición, cada día de mayor cantidad de sustanciasquímicas en los procesos productivos, el llamado “rightto know” o derecho a conocer las características delas sustancias con las que se trabajan y sus efectossobre la salud, se hace presente con mas fuerza entrelos trabajadores.

Globalización y salud de los trabajadores

En términos de la nueva realidad laboral quegeneran los nuevos procesos tecnológicos, uno de losproblemas más importantes en relación a los efectosde la introducción de nuevas tecnologías se refieren alas nuevas patologías asociadas a los nuevos procesostecnológicos. Siendo la globalización de la economíauna estrategia del capital para incrementar la tasade extracción de plusvalor, la misma llevaasociada nuevas formas de subsunción del trabajoal capital donde una de sus expresiones es laintensificación del trabajo.

La necesidad de seguir incrementando laproductividad y problemas de orden técnico, impulsanel desarrollo de los procesos laborales automáticos.Estos procesos significan la reducción definitiva de laparticipación obrera en el proceso laboral a funcionesde vigilancia (Gilly, 1981).

Podemos hablar de dos tipos de procesosautomáticos: los discretos y los continuos. Los procesoscontinuos son aquellos que significan la transformaciónfísica o química del objeto de trabajo e implican sistemascerrados. Su automati-zación depende en gran medidade consideraciones técnicas.

Los procesos automáticos de flujo continuo, quese presentan por ejemplo en la industria química,petroquímica y metalúrgica, se caracterizan porque

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trabajan con objetos de trabajo frecuentementepeligrosos y contaminantes. Esto significa que losobreros involucrados en ellos están expuestos aproblemas de intoxicaciones agudas y crónicas y aefectos cancerígenos (Levinson, 1975). Aunque losproductores directos están expuestos al riesgo mayor,éste también se extiende al territorio que rodea lafábrica y lo podemos observar por un sinnúmero deintoxicaciones masivas poblacionales (Bopal y Sceveso)e incrementos en la muerte por cáncer en zonasaledañas a este tipo de indus-tria (Berlinger, 1977; Blot,1977). En Venezuela podemos citar el caso de LosHornitos, poblado situado en la Costa Oriental del Lagode Maracaibo, al lado de la Petroquímica de “ElTablazo” y el de la contaminación mercurial en laPetroquímica de Morón ampliamente reseñados por laprensa nacional.

Las formas concretas que asume la labor, secaracteriza por un esfuerzo físico bajo, donde predominael sedentarismo, la inmovilidad; la monotoníacombinados con una concentración y tensión alta. Elpapel desempeñado por el operador es observarinstrumentos de medición, corregir algunos parámetroso eventualmente tocar “la alarma” si algo anormalsucede. La combinación de una inmovilidad casiabsoluta y la conciencia de que en cualquier momentopuede ocurrir una catástrofe suscita situaciones de grantensión que se expresan en fatiga, stress y una floridapatología psicosomática y nerviosa (Garduño, 1979).

A esto se agrega la utilización, en muy altafrecuencia, del trabajo por turnos. Dado que parar laproducción implica una serie de problemas técnicos,aunque en algunos casos no es imposible, hay casisiempre una sistemática violación de la legislaciónrespecto a la duración de la jornada laboral. El casomas evidente de esta violación es la práctica de “doblarturnos”. A pesar de que las razones que suscitan laprolongación de la jornada aparecen como de ordentécnico, las repercusiones en el desgaste obrero sonevidentes, no solo por que se trabaja durante mas horas,sino también, porque la exposición al riesgo seincrementa. En este sentido, habría que recordar quelas normas de los límites máximos permisibles estáncalculados en base a una exposición de ocho horas yque en muchos casos, la prolongación de la jornada nosólo significa un incremento proporcional del riesgo,sino que traspasa el umbral a partir del cuál el daño seestablece definitivamente (Laurell, 1984).

El proceso laboral automático discreto, puedeser visto como la solución capitalista técnico-organizativa mas avanzada a la producciónanteriormente realizada por medio del maquinismo. Esla respuesta del capital al agotamiento de laorganización fordista de la producción. Como procesolaboral, el automático discreto no se restringe a seruna forma técnica de producir sino, es ante todo, es unmétodo de gestión de la fuerza de trabajo (Shaiken,1981). Así, en sus formas mas avanzadas, la principalinnovación consiste en la introducción del controlcomputarizado sobre el proceso laboral, que a su vezredunda en formas nuevas de trasladar el objeto detrabajo y de realizar las tareas que excluyen laparticipación activa del trabajador. El desgaste de estetipo de trabajo -el automático discreto-, o masexactamente, de no-trabajo, ha sido poco estudiadohasta el presente, pero apunta hacia los efectos de lahipoactividad y el stress, que probablemente semanifestarán en desórdenes mentales, problemaspsicosomáticos y la patología del stress.

En resumen, esta intensificación del procesolaboral se basa en el esfuerzo sistemático de atencióny disciplina mental que exige el control de instrumentoscomplejos y la toma de decisiones rápidas duranteperíodos prolongados, combinados con bajo esfuerzofísico y la monotonía del trabajo. Opera a través de laeliminación de los tiempos muertos (porosidad de lajornada de trabajo) generados por la falta decoordinación de los diferentes procesos productivos ypor medio de esfuerzos de la administración por imponerla completa subordinación del comportamiento deltrabajador a los requerimientos directos e indirectos decalidad de la producción (puntualidad, responsabilidad,pulcritud, orden). Aunque esta tendencia aparezcaasociada a otras que, para grandes sectores detrabajadores, hagan más interesante y cooperativo eltrabajo, la generación de un trabajo intensivo generaun mayor desgaste de la capacidad laboral deltrabajador, que tiende a generar un nuevo tipo de fatigamental y nerviosa, la cual se traduce en nuevos tiposde enfermedades ocupacionales características de lanueva época: la neurosis y el stress. Esta realidad es laque podemos observar en los países donde se hanadelantado procesos de reconversión industrial basadosen la introducción de nuevas tecnologías caso Japón,Europa, Estados Unidos y los países asiáticos (Corea,Tailandia, Madagascar, etc.).

Es necesario aclarar que hay procesosautomáticos discretos con grados muy diversos de

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complejidad que desde el punto de vista de lasofisticación tecnológica poco tiene que ver. Porejemplo, los procesos automáticos presentes en laindustria mexicana están, por regla general,caracterizados por su baja complejidad y su tecnologíarelativamente sencilla. Sin embargo, desde el punto devista de las características del trabajo, tanto procesoscomplejos, como sencillos, son semejantes.

Finalmente habría que apuntar que al mismotiempo que los procesos automáticos discretostransforman el modo de trabajar, tiene profundasconsecuencias sobre las condiciones de la lucha obrera,donde una de las variables más importantes es ladisminución del número de obreros necesarios pararealizar la producción. En la fase de transicióntecnológica se agudiza la competencia ínter obrera,dado que se acompaña generalmente de despidosmasivos frente a los cuales, los sindicatos han tenidograndes dificultades de responder coherentemente yunificados. Después de esta primera fase, queda dentrode la planta un número reducido de operarios fijos ensu puesto de trabajo, con poca posibilidad deinteracción. A nivel del conjunto de la sociedad, losdespidos masivos significan la reconstitución del ejércitoindustrial de reserva, hecho que pone al movimientoobrero en una situación desventajosa. El uso capitalistade la automatización no es solo un modo de incrementarla productividad, sino una medida política de controldentro de la fábrica y que tiende a cambiar globalmentela correlación de fuerzas entre el capital y el trabajo.

En nuestros países, esta realidad no se manifiestade una manera tan definitiva. La ley del desarrollodesigual y combinado del capitalismo también seexpresa en los procesos de cambio tecnológico yreconversión industrial. En América Latina y enVenezuela en especial, la reconversión industrial seexpresa como cambio de patrones tecnológicos enalgunas ramas industriales muy específicas, como esel caso de la industria petrolera y petroquímica, por elpapel que juegan en el proceso mundial de acumulación.En la gran mayoría de las industrias, la reconversiónindustrial tiene que ver, de una manera mucho másimportante, con cambios a nivel de la organización deltrabajo. Es decir, la reconversión industrial en nuestropaís se ha centrado en el incremento de los ritmos deexplotación de la fuerza de trabajo para mantener losmismos niveles de “rentabilidad”. En este sentido, esimportante señalar la estrecha relación entre losactuales índices de desempleo y subempleo y laspolíticas empresariales de “ahorro” de mano de obra.

Varios estudios (Dejours, 1990), han analizadoel impacto sobre la salud de una situación de desempleo.En términos generales, todos estos estudios coincidenen que una de las manifestaciones típicas que sepresentan en situación de desempleo o de amenaza ala estabilidad en el trabajo se expresa en un incrementode las tasas de morbilidad de la población en estasituación con especial fuerza en las enfermedadespsicosomáticas y los trastornos psicológicos. La mismaprecariedad del empleo conlleva a que el trabajador sesobreexponga a riesgos a los que en condicionesnormales de estabilidad laboral se negaría. De allípodemos observar el incremento en los índices deaccidentabilidad y su estrecha relación con el aumentode los índices de desempleo.

Asociado a las nuevas formas de organizacióndel trabajo en el período actual, están las patologíasasociadas a los trabajadores de oficina, los “cuello-blanco”, en los cuales la automatiza-ción ha penetradocon mayor énfasis. Esto plantea la necesidad derepensar, a la luz de las nuevas realidades económicas,las concepciones tradicionales en relación a los perfilespatológicos y patrones de desgaste de la clasetrabajadora. El estudio de condiciones de trabajo y saludde estos nuevos sectores, hoy en día cobran unaimportancia que antes no tenían. El uso masivo determinales de computación han introducido en el debatede la salud de los trabajadores, los efectos que losmismos puedan tener sobre la salud obrera. El efectode las radiaciones no-ionizantes sobre el embarazo estema de discusión mas intenso cada día. Pero nosolamente se discuten los efectos que determinadosagentes físicos o químicos pueden tener sobre la saludde los trabajadores, sino también, y quizás con mayorintensidad, los trabajadores se plantean lasconsecuencias que las nuevas tecnologías pueden tenersobre la “organización” del trabajo y la satisfacción enel desempeño de las tareas; cómo las nuevastecnologías “eliminan” o controlan los tiempos muertosy fijan al trabajador al puesto de trabajo.

La reconversión industrial y el cambiotecnológico se expresan hoy en nuestro país en lacoexistencia de viejos riesgos y viejos procesos, -enlos que la intensificación de la explotación de la manode obra es una necesidad para la supervivencia delcapital, a costa de la salud de los trabajadores-, connuevos procesos y nuevos riesgos laborales yambientales que afectan, no solo a la poblacióntrabajadora, sino a todo el medio ambiente.

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A modo de conclusiones

Las dramáticas transformaciones que estánocurriendo en el proceso de trabajo, producto de lanueva etapa del modo de producción capitalista,plantean nuevos retos para el estudio de la salud de lostrabajadores.

La crisis actual del proceso de trabajo, es la crisisde la versión fordista del modelo taylorista, pero no deeste último en cuanto que el taylorismo constituye laforma capitalista predilecta de organización del trabajo(Rajchemberg, 1984). Paralelamente a la revolucióntecnológica y como parte de ella -en sentido amplio-,está teniendo lugar otra revolución de tipo organizacionalque, en conjunción con la primera, está transformandola organización taylorista del trabajo, destruyendo losfundamentos de la organización fordista de tipo semi-militar, altamente jerarquizada y especializada, sobrela que se edificó la estructura de la empresa capitalistaen el siglo actual.

Lo expresado anteriormente sólo constituye elseñalamiento de una tendencia general que de ningunamanera será unidireccional. Coexistirá necesariamentecon la subsistencia de áreas económicas atrasadas y,aún con retrocesos a formas más primitivas deorganización de la producción como, por ejemplo, lasindustrias de uso intensivo de fuerza de trabajo deEstados Unidos o Europa Occidental, fuertementeerosionadas por las exportaciones de los países “endesarrollo”, como la confección o el calzado. En ellas,una de las principales respuestas defensivas haconsistido en el impulso a los talleres clandestinos“underground”- que operan con tecnología primitiva ymano de obra inmigrante pagada con salariosmiserables.

Estos planteamientos parecieran prefigurar unanueva estrategia de desarrollo capitalista. La imagende un país computarizado quizás resulte halagadora alos ojos del común de la población, pero un ligero análisisde la realidad nos indica que esta visión esprofundamente equivocada: en nuestros países, la leydel desarrollo desigual y combinado se expresa en lacoexistencia de sectores punta de la economía conprocesos tecnológicos de un alto grado deautomatización con otros procesos, muy importantes,donde aún permanecen los viejos esquemas deproducción. Mas aún, al interior de procesos altamenteautomatizados encontramos otros donde predominanformas tradicionales de organización del trabajo(Rajchemberg, 1990).

Desde la perspectiva de la salud de lostrabajadores, esta tendencia plantea nuevos retos a losque hay que dar respuestas. La coexistencia de viejascondiciones de trabajo y viejos procesos laborales connuevas formas de organización de la producción quegeneran nuevas condiciones de trabajo y nuevosprocesos laborales será la expresión normal de losperfiles de salud-enfermedad de la poblacióntrabajadora.

Otro elemento a destacar, en el marco de lastendencias a la desregulación del empleo es lareaparición de formas arcaicas de explotación. Hoydía vemos aparecer cada vez con más fuerzaexpresiones de las relaciones de trabajo quepensabamos superadas como es el esclavismo y eltrabajo infantil que cada día cobran más fuerza en elmundo.

De igual manera, se observan tendencias a volvera etapas superadas en relación a la jornada de trabajo.Día a día vemos como la extensión de la jornada detrabajo tiende a incrementarse de forma paulatina sinque exista ninguna reacción ni de las autoridades, ni delos sindicatos, ni de los trabajadores mismos queencuentran en la extensión de la jornada de trabajo lamanera de recuperar la pérdida del poder adquisitivodel salario. Hoy en día es común jornadas de trabajosuperiores a las 10 o 12 horas de trabajo tanto para lostrabajadores de base, como para los profesionales yempleados.

Otro elemento a destacar es la multiplicidad deempleos o actividades de trabajo, tanto al interior delcentro de trabajo como hacia afuera. Al interior delcentro laboral se expresa en la plurifuncionalidad opolivalencia de los asalariados. Hacia el exterior, eltrabajo complementario en áreas radicalmente distintasa la actividad laboral principal, para complementar losingresos. Esta realidad plantea nuevas dificultades almomento de caracterizar la actividad de trabajo. Alinterior de la fábrica será cada día más difícil poderencontrar las exposiciones ocupacionales a condicionesdefinidas de trabajo, y hacia el exterior de la fábrica,las múltiples actividades plantean problemas dedefinición de la exposición ocupacional, de manera quecada vez más la separación entre momento productivoy momento reproductivo tiende a desdibujarse y aconvertirse en un solo “momento”.

Otros elementos novedosos en relación a la saludde los trabajadores los podemos ubicar en los nuevos

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temas o problemas que se plantean: la violencia, elacoso moral y sexual, la discriminación de género, etc.expresan de alguna manera estos nuevos retos a lasalud ocupacional.

Estas nuevas realidades nos plantean lanecesidad de profundizar en la conceptualización de larelación salud-trabajo y en el desarrollo de nuevas

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Necesidad de Formación en Salud Ocupacional en la carrera de Bioanálisis de la Universidadde Carabobo / Rita Rincón Gil

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Necesidad de Formación en SaludOcupacional en la carrera de Bioanálisisde la Universidad de Carabobo

Rita Rincón de Gil 1

1 Licenciada en Bioanálisis. Magíster en Investigación Educativa. Especialista en Salud Ocupacional.Investigadora de la Unidad de Ergología. Postgrado de salud Ocupacional. Universidad de Carabobo.

Resumen

La presente investigación tuvo como objetivoestablecer la necesidad de formación en SaludOcupacional, en estudiantes de la escuela de Bioanálisisde la Universidad de Carabobo. Estudio descriptivo,donde se llevó a cabo un diagnóstico de necesidadesen base a bibliografía consultada, directrices de laOrganización Mundial de la Salud, OrganizaciónPanamericana de la Salud, Organización Internacionaldel Trabajo, la actividad profesional de la autora,Normativa Legal vigente en el país y cuestionario quese aplicó a 162 estudiantes de la Escuela de Bioanálisis.(30 % de la población bajo estudio). Se utilizó el análisisde frecuencias y la relación porcentual de datos,encontrándose que el 53% de los encuestados noconoce suficientemente los aspectos de SaludOcupacional, el 90.13% desconoce las NormasCOVENIN, se consideran expuestos a riesgosQuímicos (47.4%), a Biológicos (32.8%) y Físicos(20.1%). EL 80% no utiliza protección respiratoria. El40.74 % de los laboratorios, no cuentan con normas,procedimientos y manuales de seguridad. El 93.21 %manifestó la necesidad de un programa o asignaturade Salud Ocupacional, con temas de seguridad, tóxicosquímicos, riesgos, planes de emergencia, normas y leyes,que les permita tener un conocimiento claro sobre losfactores de riesgos a que pueden estar expuestos ycomo prevenirlos. Los estudiantes consideran que losaspectos de Salud Ocupacional no han sido losuficientemente abordados por las diferentesasignaturas de la carrera de Bioanálisis. Seevidenciaron los limitados conocimientos que poseenlos estudiantes de Bioanálisis respecto a la SaludOcupacional. Se recomienda el diseño de un programapara tal fin.

Palabras claves: Salud Ocupacional, Riesgos en elLaboratorio.

Abstract

The present investigation had as objective toestablish the formation necessities in OccupationalHealth, in students of the school of Bioanálisis.University of Carabobo. I study descriptive, it wascarried out a diagnosis of necessities based on consultedbibliography, guidelines of the World Organization ofthe Health, Pan-American Organization of the Health,International Organization of the Work, the author’sprofessional activity, Normative Legal effective in thecountry and questionnaire that it was applied 162students of the School of Bioanálisis. (the population’s30% under study). It was used the analysis offrequencies and the percentage relationship of data,being that 53% of those interviewed doesn’t know theaspects of Occupational Health sufficiently, 90.13%ignores the Norms COVENIN, they are consideredexposed to Chemical risks (47.4%), to Biological(32.8%) and Physical (20.1%). 80% doesn’t usebreathers. 40.74% of the laboratories, they don’t havenorms, procedures and manuals of security. 93.21%manifested the necessity of a program or subject ofOccupational Health, with topics of security, chemicaltoxics, risks, emergency plans, norms and laws that itallows them to have a clear knowledge about the risksto that they can be exposed and as preventing them.The students consider that the aspects of OccupationalHealth have not been it sufficiently approached by thedifferent matters of the career of Bioanálisis. Thelimited knowledge were evidenced that the students ofBioanálisis possess regarding the Occupational Health.The design of a program is recommended for such anend.

Key words: Occupational health, Risks in theLaboratory.

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ARTICULO

Introducción

La sociedad exige constantemente cambios enel proceso enseñanza-aprendizaje y dentro de larelación educación-sociedad se espera que el sistemaeducativo se adapte a las nuevas realidades ynecesidades existentes, ya que las transformacionesen la ciencia y los avances tecnológicos, hace que secuestione como se está impartiendo la enseñanza y sise están egresando profesionales conscientes de losfactores de riesgos a que están expuestos en suambiente de trabajo y en concordancia con losrequerimientos de salud ocupacional del país.

La educación debe concebirse como unapráctica social que opera empíricamente como unarealidad dada. Toda práctica educativa acontece en elcontexto histórico de la formación social. La educaciónes un proceso que no puede ser ni extemporáneo nianacrónico. Por lo tanto, debe estar a la altura de lostiempos, nutriéndose de los problemas actuales y siendoexpresión del saber vigente en la ciencia y la filosofíade su propia época.

Sin embargo a pesar de que existen hoy día ennuestro país, instituciones de educación superiorabocadas a la enseñanza de la salud ocupacional, hastaahora, la misma es considerada poco desarrollada, yaque son limitadas las investigaciones en el área y lasque existen son producto del trabajo disperso yatomizado de investigadores que cuentan con poco oningún apoyo institucional, según lo señala Feo (1991).Esto aún sigue vigente, a pesar de los esfuerzos dealgunos investigadores, y algunas experiencias muyvaliosas que han contribuido a mejorar la expectativade vida, relacionada con la prevención de enfermedadesy accidentes en el ámbito laboral.

Por lo tanto, la educación como proceso sociales determinante para la consecución de sus fines comosería en este caso, crear conciencia en los estudiantes,de una actitud adecuada hacia la salud ocupacional, loque se lograría a través del desarrollo de conductasdirigidas a la población estudiantil fundamentalmente,y en este nivel de formación, los individuos asimilaráne irán incorporando los principios de seguridad, lo queles permitirá prevenir lesiones y/o patologías laborales.Por lo tanto, un individuo formado por un sistemaeducativo que estimule el desarrollo de prácticasseguras en el trabajo y cree en el sujeto la necesidadde conocer los riesgos a los que se expone, será la

primera garantía de la disminución de la ocurrencia deaccidentes y enfermedades ocupacionales.

Así lo expresa la Organización Mundial de laSalud (OMS) desde 1990, cuando establece que eladiestramiento de los estudiantes (la futura poblacióntrabajadora), debe ser uno de sus principales objetivos,de allí que, crear conciencia de la importancia quetienen para la salud personal, las condiciones y elambiente en el lugar de trabajo y saber valorar la saludpersonal.

Los países en desarrollo como el nuestro sufrenuna escasez de personal preparado en SaludOcupacional y la importancia de formarlos lo evidencióel comité mixto de la Organización Internacional delTrabajo (OIT) y la Organización Mundial de la Salud(OMS), quienes detectaron que las necesidades deformación de personal en esta área son imprescindiblese importantes y que debe haber una coordinación deesfuerzos a nivel mundial por parte de los Gobiernos,Universidades, Colegios Profesionales y todos los entesinvolucrados, con el fin de establecer objetivos, técnicasy métodos adecuados para desarrollar programaseducativos para la prevención de la salud en eltrabajador. OPS/OMS/ OIT (1992)

Igualmente, la Organización Panamericana dela Salud (OPS) (1990) en su plan de acción para laInstrumentación de las Estrategias Regionales de Saludpara todos en el año 2000, incluye el área de la saludde los trabajadores donde contempla una serie deenfoques como son la participación de estudiantes,trabajadores y empresarios para reducir la invalidezpor accidentes y enfermedades relacionadas con eltrabajo; conocimiento sobre las enfermedadesocupacionales, control de los factores ambientales enlos lugares de trabajo a través de programas deprevención, capacitación, información, educación,formación y asesoramiento en materia de saludocupacional.

En base a lo antes expuesto, el estudiante deBioanálisis apoyado en el conocimiento de lascondiciones en el ambiente de trabajo y de larepercusión que éstos tienen en su salud, puede jugarun papel fundamental en la lucha por su salud individual;de allí que la formación del futuro trabajador en elconocimiento de los riesgos a que estará expuestos ensu medio laboral, su eliminación y el control de losmismos, deben ser las metas prioritarias de las

Necesidad de Formación en Salud Ocupacional en la carrera de Bioanálisis de la Universidadde Carabobo / Rita Rincón Gil

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instituciones universitarias, cuyo fin sea egresar futurosprofesionales que conozcan y puedan enfrentar losriesgos que son inherentes a su profesión.

En este orden de ideas, uno de los profesionalesafectados por los riesgos que se presentan en elejercicio de su profesión, es el Licenciado enBioanálisis, ya que desde que inicia su carrera hasta elfinal de la misma y luego en su trabajo, está expuesto anumerosos riesgos, como son: físicos, químicos,biológicos, incompatibilidades ergónomicas ypsicosociales, con el agravante de que en el pensumde estudios de la carrera, aún no se ha diseñado unprograma educativo que contenga componentescurriculares y estrategias metodólogicas donde seimparta información y formación referida a saludocupacional y que capacite a los estudiantes deBioanálisis de la Universidad de Carabobo, en este casoparticular, a obtener conocimientos que les permitandesenvolverse de la manera más segura posible, en sufuturo ámbito laboral.

Objetivo General de la Investigación

Establecer la necesidad de formación en SaludOcupacional en la carrera de Bioanálisis de laUniversidad de Carabobo.

Reconstrucción del Objeto de Estudio

Los riesgos del trabajo en laboratorios no sonsólo más complejos hoy día que en el pasado, sino quecoexisten antiguos y nuevos y, a medida que aparecennuevos virus, bacterias, y químicos, surgen nuevasenfermedades de difícil identificación relacionadas conel trabajo. Por otro lado, la relación entre salud y trabajoha sido estudiada a lo largo de la historia en múltiplesoportunidades, señalando al trabajo, como ese factorfundamental en el desarrollo de la persona y de lasociedad, que si no se realiza de forma adecuada, podrácausar grandes problemas a la salud de los trabajadores,por los riesgos derivados del trabajo.

Es así como Ramazinni, (citado por Omaña,1989), señaló los riesgos de algunos de los profesionalesde la medicina, cirujanos, químicos, comadronas yfarmacéuticos, perfectamente extrapolables a laactualidad, como es el riesgo de manipulación einhalación de productos químicos en los laboratorios yel riesgo infeccioso, entre otros.

Por otra parte, Trumbull y Greiner, (citado porGestal Otero, 1989), señalaron en un estudio

conducidos por ellos que encontraron 16 casos dehepatitis, durante un período de tres años en cuatrohospitales, y que la mayoría de los afectados estabanen contacto frecuente con sangre y derivados. SegúnGestal Otero (1989), muchas personas han perdido lavida al contraer la enfermedad que han estadoinvestigando en sus laboratorios. Como ejemplo de loexpuesto anteriormente, se tiene que un científicollamado Luis Uillier, discípulo de Pasteur, falleció decólera en 1823, prematuramente a los veintisiete años,contraído en Alemania cuando investigaba laenfermedad; igualmente, Otto Ermeier, también fallecióde cólera al manipular las heces de un paciente. Peroquizás, el primer caso fatal de infección adquirida en ellaboratorio fue el del médico Vienés Kollestcka quienfalleció en 1849, al parecer de una septicemiaestreptócóccica, adquirida al cortarse una mano cuandorealizaba una autopsia.

En una investigación realizada en Francia entrelos años de 1970 y 1974, Estienne, Río y Stoessel (1977),encontraron que de 2.159 accidentes en 96 laboratorios,el 13.5 por ciento del personal, había tenido unaccidente por lo menos durante los cinco años delestudio. Villagrasa et al. (1989), reflejan en su trabajoque la mayor frecuencia de accidentes ocurre enenfermeras y auxiliares y la forma habitual es porpunciones con objetos cortantes y agujas, y el sitio másfrecuente donde se producen estos accidentes son loslaboratorios con un 11.7 por ciento, ocupando el tercerlugar de importancia.

Botia et al. (1993), explican que en los centroshospitalarios existen riesgos derivados del propio trabajo,entre ellos enfermedades y accidentes laborables, yque los más comunes corresponden a los pinchazoscon agujas; siendo las manos las partes del cuerpoque se lesionan con mayor frecuencia y las lesionesguardan relación con el tipo de actividad y con el lugardonde se producen. Rycroft (1980), refiere que el 20por ciento del personal de laboratorio tiene problemascutáneos, debido a la acción irritante de los ácidos, álcalisy otras sustancias químicas que se usan en esos sitiosde trabajo. Fernández y Cruz (1986), señalan losriesgos de peligrosidad variable a los que está sujeto elpersonal de los laboratorios médicos, alguno de loscuales son potencialmente letales, entre ellos se destacael de contraer infecciones con los agentes patógenosobjeto de trabajo o con otros no sospechados que seencuentran presentes en las muestras que se recibenen el laboratorio.

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ARTICULO

Dornelles Scheneider (1992), refiere en suinvestigación que la amenaza de una enfermedad aguda,la posibilidad de secuelas tales como la hepatitiscrónica, la cirrosis y el carcinoma hepatocelular y lamuerte, debidas al contagio ocupacional por el virus dela hepatitis B, son extremadamente preocupantes paralos trabajadores que tienen contacto con la sangre yotros materiales biológicos humanos. Campollo (1993),considera que tanto los médicos como los técnicos delaboratorios tienen un riesgo mayor que la poblacióngeneral de contraer infecciones que se transmiten porcontacto con sangre o sus derivados y que elconocimiento y aplicación de las medidas universalesde seguridad es uno de los aspectos más importantespara minimizar el riesgo de adquirir este tipo deenfermedades.

Montero (1993), investigó la reducción deaccidentes de trabajo mediante el cambio de conductade los trabajadores hacia la seguridad, encontrando queel grado de conocimientos sobre los riesgos y la formade evitarlos, el uso de métodos activos de aprendizaje,favorece una reacción positiva y se constituye en unade las herramientas educativas más efectivas que logradisminuir significativamente los accidentes de trabajo.

En Venezuela, pocos son los estudios que se hanrealizado para determinar la incidencia deenfermedades y/o accidentes ocurridos en loslaboratorios y otros centros de salud.

Iturraspe (1989), expresa en su libro que una delas cosas que más preocupa es el elevado nivel dedesconocimiento de los daños que ocasionan los riesgosa los que estén sometidos los trabajadores en el procesode trabajo y los factores que los facilitan lo cual noslleva a la necesaria figura de la educación, formacióne intercambio de información de profesionales de lasalud en seguridad laboral.

Espino (1993), relaciona en su estudio alsíndrome de inmuno deficiencia adquirida (SIDA), comoriesgo biológico del trabajador de la salud, y que debehaber una toma de decisiones frente a la posibleexposición, y propone que la comprensión, prevencióny el control de esta enfermedad, puede ser posible, através de la educación objetiva en el lugar de trabajo.

Rincón (1994), encontró que un 90 por ciento delos laboratorios del Distrito Valencia en Carabobo notienen equipos de seguridad ni planes preventivos para

solventar la situación de emergencia que pudiesepresentárseles en el trabajo; igualmente, detectaron queun 85 por ciento de los trabajadores de dichos centrosdesconocen los efectos a su salud que pueden ocurriren el ejercicio de esa profesión.

Martínez y Nava (1996), realizaron un análisisde las historias de los trabajadores con lesionesdermatológicas de origen ocupacional diagnosticadasdurante un período de 10 años (1985-1994) en laDirección de Medicina del Trabajo del InstitutoVenezolano de los Seguros Sociales, en la Victoria EdoAragua, y encontraron que de un total de 578enfermedades ocupacionales diagnosticadas, 229 (39.6porciento), fueron dermatosis ocupacionales, producidaspor substancias químicas, lamentablemente, no estándesglosadas por profesión u oficio.

García (1995), considera que la falta deinformación existente sobre los riesgos a la salud,inherentes a los productos químicos (carcinógenos,teratogénicos y mutagénicos) contribuyen a fomentarsu uso irresponsable y a incrementar los accidentes y/o enfermedades laborales.

Cumino et al. (1998), señala en su trabajo elestudio de ocho laboratorios de cultivos celulares en laCiudad de Córdoba encontrando la presencia demicoplasma en diecisiete líneas celulares continuas,correspondiendo al 80 por ciento. Se analizó la relaciónentre las condiciones de trabajo de cada laboratoriocon la contaminación de sus líneas celulares. Se hallóun índice de contaminación por micoplasmas de un 35por ciento. Llegando a la conclusión que este contribuyea sugerir condiciones de trabajo que tiende a aumentarel riesgo de contaminación.

Bello (1997), expresa que la investigación acciónen dicha área a partir de un enfoque es una prácticaque podría generar insumos para la elaboración ydesarrollo de programas en función de lasparticularidades de cada espacio, de su problemática yde los recursos humanos disponibles.

Lemus (1997), Salcedo (1997), obtienenresultados que revelan la sobrecarga de trabajo físico,mental y psíquico, los riesgos físicos, químicos,biológicos, ambientales y tecnológicos relacionados conlas patologías presentadas por los trabajadores dediferentes industrias e instituciones de la Región deCarabobo, donde concluyen que la falta de información

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con respecto al uso de equipos de protección, laidentificación de estresores laborales y la divulgaciónpor parte de las Universidades de métodos seguros detrabajo contribuiría a mejorar la calidad de vida deltrabajador.

Leoni, V. et al. (2000), realizaron un estudiopara evaluar la presencia de riesgos en los trabajadoresy en el ambiente del área de la salud, debido a losagentes químicos usados y los residuos generados enlaboratorios químicos y clínicos de diagnóstico.Concluyendo que la salud los trabajadores estácorrelacionada con los riesgos ambientales del trabajo.

Hossini,Ch et al. (2000), ejecutaron unainvestigación sobre el conocimiento y actitudes de losprofesionales del cuidado médico con respecto al SIDAy al riesgo de transmisión ocupacional del VIH y lascondiciones de trabajo en dos hospitales marroquíes.Encontrando que el personal sabía mucho sobre losmedios generales de la transmisión del VIH, pero menossobre la contaminación ocupacional posible.

Echanove, A. et al. (2001), efectuaron unestudio sobre transmisión ocupacional delMycobacterium tuberculosis a los médicos ytrabajadores en un hospital en Lima, Perú. Seencontraron índices altos de TB Pulmonar activa entremédicos de este hospital, y la adquisición ocupacionalen el personal de laboratorio.

Gautrin, D. et al. (2001), desarrolló unainvestigación sobre incidencia de asma ocupacional enaprendices expuestos a animales de laboratorio en elHospital de Montreal. Donde se concluye que losaprendices muestran una alta incidencia de asmaocupacional, sensibilidad de las vías áreas a la pre-exposición, así como una alergia asociada a los animalesdomésticos.

Kilroy, N. (2000) este estudio investiga sobre elefecto de la incompatibilidad ergonómica referente ala postura y síntomas músculo esqueléticos encientíficos biomédicos femeninos. En conclusión, lainvestigación dio lugar a una mejora en postura y unadisminución de síntomas músculo esqueléticos.

Gitelmman, J. (2001), realizó un estudio entécnicos de laboratorio en Israel como grupo del peligroocupacional. Se aplicó un cuestionario a lostrabajadores y se encontró que las infecciones eran

adquiridas por procedimientos inadecuados en ellaboratorio. El análisis estadístico reflejó que lostécnicos de laboratorio en Israel no conocen losprocedimientos básico sobre bioseguridad, debido a lafalta de instrucción sobre seguridad y desinterés en losempleados. No se elaboran guías de consulta y lamayoría de los técnicos de laboratorio no toman lasprecauciones contra la hepatitis B. La incidencia delos accidentes en el laboratorio por autoinoculacióncon agujas es alta y las infecciones adquiridas sonsimilares a la reportada en la literatura.

Una alternativa para minimizar los riesgospresentes en el trabajo del Laboratorio, es adquirir unaadecuada formación en cuanto a los tipos de riesgosexistentes como són; riesgos físicos: como electricidad,altas temperaturas, radiaciones, entre otros, que puedenproducir accidentes. Riesgos químicos: producidospor aquellas substancias como ácidos, álcalis, solventesy otros, con los cuales se trabaja y que en determinadomomento pueden afectar diferentes órganos y producirenfermedades que pasan desapercibidas o se leatribuyen otras etiologías. De la misma manera, aldeterminar las incompatibilidades ergonómicas, comomalas posturas y mobiliario no adecuado al tipo detrabajo, se podrían evitar enfermedades invalidantes.Imprescindible establecer los riesgos psicosocialesproducidos por las sobrecarga de trabajo, estrés pormanejo de pacientes difíciles y/o agresivos, guardias oturnos extenuenates, escasa tecnología o dificultad enel manejo de la misma, manejo de las relacionesinterlaborales, satisfacción económica y laboral entreotros.

Metodología

Es una Investigación epidemiológica de tipodescriptiva, con una población de 539 alumnos delrégimen anual que cursan estudios de Bioanálisis de laFacultad de Ciencias de la Salud de la Universidad deCarabobo. La muestra seleccionada estuvoconformada por 162 estudiantes de la población antesmencionada. Para la obtención de la muestra, se utilizóel muestreo de tipo no probabilístico, en sujetosvoluntarios.

Instrumento

Se aplicó un instrumento de tipo cerrado, divididoen 4 aspectos: Conocimiento de Salud Ocupacional,Naturaleza del Riesgo, Equipos de Seguridad,Factibilidad de un Programa de Salud Ocupacional. Este

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instrumento fue validado por tres expertos en el área yse aplicó un instrumento piloto que luego fue corregidoy aplicado.

Resultados y Discusión

Los resultados que se presenta corresponden alos datos obtenidos de las encuestas aplicadas, y elanálisis de los mismos parten de las conclusionesobtenidas en ellos.

En el Gráfico Nº 1 se observa el desconocimientoque existe sobre aspectos de Salud Ocupacional(53.1%), lo que coincide con Montero (1993), Hossini,Ch et al. (2000); Normas preventivas (COVENIN)(90.13%) y primeros auxilios (90.12%) entre los 162estudiantes encuestados. De ellos, se encontró que un(56.79 %) desconoce la naturaleza del factor de riesgoal que están expuestos en el laboratorio, aspecto quetambién refiere Gitelmman, J (2001).

La percepción de la muestra estudiada (GráficoNº 2) en cuanto a los tipos de riesgos a que estánexpuestos, fue de un 32.85% para riesgos biológicos,20.01% para riesgos físicos, 47.4% para riesgosquímicos, no considerando los psicológicos ni lasincompatibilidades ergonómicas como tales. Lo quecoincide con Leoni, V et al. (2000), Kilroy, N (2000).

Con respecto a los equipos de seguridadexistentes en el laboratorio (Tabla 1), se observa queel 100 por ciento respondió que no existen salidas deemergencia, un 45.06 por ciento refirió que no en todoslos laboratorios existen duchas de emergencia ylavaojos.

Al preguntarles si el laboratorio cuenta con planesde seguridad, un 65.43. por ciento respondió que noconocen. En cuanto a si el laboratorio cuenta conmanuales de seguridad, un 40.74 por cientorespondieron que no los poseen. El 74.69 por cientoindica que no conocen si se realiza monitoreo ambientalpara verificar las concentraciones de tóxicos en elambiente de trabajo. Gitelmman, J (2001); el 32.71 porciento refiere que no usan equipos de extracción.

En referencia a los equipos de protección queutilizan los estudiantes en el trabajo del Laboratorio,(Gráfico Nº 3), el 66.6 por ciento, contestó que usanguantes de látex para todo tipo de trabajo. (ya seamanipulación de químicos, o de muestras biológicas).Un 35 por ciento, utilizan pipetas automáticas paradispensar las muestras biológicas y reactivos químicos.

El 67.6 por ciento refiere que usan batas de laboratorio,solamente. El 83.3 por ciento manifiesta que no usantapa bocas cuando manipulan las muestras biológicasy el 55.6 por ciento no usa lentes de protección.Además, el 80 por ciento no usa máscara con cartuchoantigases cuando manipula solventes o sustanciasextremadamente tóxicas.

A la pregunta sobre si consideraban que lasdiferentes asignaturas del pensum de la Escuela deBioanálisis de la Universidad de Carabobo abordabansuficientemente los aspectos relacionados con la SaludOcupacional, un 80 % respondió negativamente. Un93.2 % de la muestra estudiada, considera que debeexistir una asignatura de Salud Ocupacional en elPensum de la Escuela de Bioanálisis de la Universidadde Carabobo. (Gráfico Nº 4).

Conclusiones

1.- Las respuestas dadas por la muestra estudiada,revelan que los estudiantes de la Escuela deBioanálisis de la Universidad de Caraboboposeen limitados conocimientos sobre SaludOcupacional.

2.- A través del instrumento que se les aplicó a losestudiantes de Bioanálisis, se encontró que ellosen su mayoría (90.12 por ciento, item 63),manifestaban la necesidad de programas de estetipo. Igualmente, los alumnos en un altoporcentaje (93.21 por ciento), están de acuerdoen que exista una asignatura que les permitatener un conocimiento claro sobre saludocupacional y los factores de riesgos a quepueden estar expuestos en el área laboral, ysobre todo que les permita prevenirlos. Aspectoséstos que llevaron a confirmar la necesidad deformación en el área.

3.- Los estudiantes no conocen suficientemente losequipos de seguridad tanto personal comogeneral para lograr un desempeño seguro altrabajar en el laboratorio.

4.- Los estudiantes no conocen las Leyes y Normasque existen sobre Salud Ocupacional y seguridaddel trabajador.

5.- Los Laboratorios de la Escuela de Bioanálisisde la Universidad de Carabobo no cuentan contodos los equipos de seguridad necesarios parapreservar la salud de los estudiantes.

6.- Los laboratorios de la Escuela de Bioanálisis dela Universidad de Carabobo no cuentan conmanuales ni planes de emergencia.

Necesidad de Formación en Salud Ocupacional en la carrera de Bioanálisis de la Universidadde Carabobo / Rita Rincón Gil

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ARTICULO

Gráfico N° 1Conocimiento sobre Salud Ocupacional

Fuente: Instrumento aplicado. Valencia, 2000

Gráfico N° 4Factibilidad del Programa

Fuente: Instrumento aplicado. Valencia, 2000

Tabla N° 1Equipos de Seguridad

Fuente: Instrumento aplicado. Valencia, 2000

Gráfico N° 3Uso de Equipos de Seguridad

Fuente: Instrumento aplicado. Valencia, 2000

Gráfico N° 2Naturaleza del Factor de Riesgo

Fuente: Instrumento aplicado. Valencia, 2000

PREGUNTAS

1. Salida de Emergencia

SI

0

RESPUESTAS

2. Depósito

3. Ducha / Lava ojo

4. Plan de seguridad

5. Manuales

6. Monit. Ambiental

7. Extracción

% NO CONOCE % N° %

TOTAL

27

11

52

11

0

66

0

16,67

6,8

32,09

6,8

0

40,74

NO

162

%

81

45

73

66

41

33

100

50

27,77

45,06

40,74

25,30

32,71

0

54

106

37

85

121

43

0

33,33

65,43

22,83

52,46

74,69

26,54 162 100

162 100

162 100

162 100

162 100

162 100

162 100

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Recomendaciones

1. Sugerir a las Autoridades de la Escuela deBioanálisis de la Universidad de Carabobo elDiseño de un Programa Educativo para laPrevención de Riesgos Ocupacionales como sepropone en esta investigación, que contengatemas como, Salud Ocupacional y Epidemiologia,Higiene Ocupacional, El Laboratorio como áreaespecial de riesgo, Enfermedades Ocupacionalesen el Laboratorio, Métodos de Control yPrevención y Fundamentos Legales y Eticos deSalud Ocupacional

2. Que se dote de equipos de seguridad general ypersonal en todos los laboratorios de la Escuelade Bioanálisis y entrenamiento en el uso de losmismos.

3. Diseñar campañas educativas para sensibilizary concienciar tanto a los educadores como a losestudiantes en la prevención y protección de lasalud laboral.

4. Organizar programas de inumizaciones pararubéola, tuberculosis, hepatitis, en la comunidaduniversitaria de la Escuela de Bioanálisis de laU.C.

5. Realizar monitoreo ambiental y biológicoperiódicamente.

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Globalización y Salud de los Trabajadores / Oscar Betancourt 53

NOTA CIENTIFICA

Globalización y Salud de los TrabajadoresOscar Betancourt 1

1 Investigador, Director de la Fundación Salud Ambiente y Desarrollo. Ecuador.Trabajo presentado en el V Encuentro Nacional de Salud de los Trabajadores y el X Encuentro Regional de Salud de los Trabajadoresdel estado Lara. CENFORLASIN-UCLA-EFO-CEST-UAST-ATRINCA-LA JORNADA. Barquisimeto, Noviembre del 2001.

Introducción

Existen múltiples razones para afirmar que elanálisis de la salud y de los denominados “riesgos deltrabajo” (para nosotros procesos peligrosos), solamentedesde lo que sucede al interno del centro de trabajo,resulta por demás insuficiente.

Lo que sucede al interno del centro de trabajo,las características de los procesos peligrosos y de losproblemas de salud, al igual que la posibilidad decontrolarlos tienen sus raíces en ámbitos que van másallá de los espacios laborales.

En otras palabras, para entender y poderintervenir es necesario conocer los factoresdeterminantes que definen ciertas formas de producción,sus condiciones de trabajo y los problemas de saludcorrespondientes.

Esos determinantes se corresponden con lamanera como se encuentra organizada la sociedad ensus aspectos económicos, políticos, culturales,ideológicos y en las relaciones internas y externas.

Los cambios que suceden en la sociedad sereflejan también en las condiciones de trabajo y en lasalud de la población trabajadora.

Nadie puede negar que este nuevo siglo hainiciado con una sociedad que viene experimentandocambios trascendentales en todos los órdenes. Se handado importantes cambios en la ciencia y en la técnica,en la microelectrónica e informática, pero más quenada en los sistemas de comunicación.

Estos cambios han infiltrado y han modificadolos modos de vida y varias expresiones de la sociedad.Son innegables los cambios en la producción y consumode alimentos, en las características anatomo-funcionalesde los grupos humanos, en la expectativa de vida, en eldesarrollo de conocimiento y en general, en la capacidadde producir bienes y servicios.

Sin embargo, estos cambios experimentados noson homogéneos. A pesar de estos grandes avances,

“inmensos grupos poblacionales experimentan cambiosen su modo de vida, aumentando la pobreza y lainequidad, muchas instituciones públicas en el ´tercermundo´ desaparecen o se debilitan notoriamente,mientras que otras privadas crecen exorbitantemente,circula monstruosas cifras de dinero con gran celeridad,se empequeñecen el tiempo y el espacio, la propianaturaleza expresa malestares globales, viejasenfermedades re-emergen mientras que otras nuevasnos atormentan, unos pocos empiezan a mirar elpresente y el futuro como un reto o un negocio, mientraslos más, perplejos, lo ven como un abismo” (Granda,2000).

A pesar que las estadísticas no siempre reflejanla realidad, desde hace una década los mismosorganismos internacionales han alertado de la tragediaque invade a amplias mayorías poblacionales. Sobre elbillón de personas viven en condiciones de pobrezaabsoluta, 100 millones de personas no disponen devivienda, 900 millones mayores de edad son analfabetos,150 millones de niños menores de cinco años sondesnutridos (Granda, 2000).

No han sido sólo los grupos humanos los quehan sufrido los impactos de los cambios en la sociedad,la naturaleza y el ambiente presenta múltiples problemas“generados por las sociedades urbano-industrial, comoel efecto invernadero, la destrucción de la capa deozono, las lluvias ácidas, la producción de miles decontaminantes del agua, del suelo y del aire y laexplotación intensiva de los recursos naturales norenovables que ponen en riesgo la sobrevivencia delPlaneta” (Revista Brasileira de Saúde Ocupacional,1998).

Estos cambios también han invadido el mundodel trabajo, ocasionando una diversidad de expresionesen la organización y división del trabajo, en las relacionesempleado-empleador, en los salarios, en las condicionesde trabajo, en los procesos peligrosos y en el estado desalud de los trabajadores/as y sus familias.

Se está viviendo un cambio de época dentro deuna dinámica que se ha dado en llamar proceso deglobalización. Muchos hablan de este término, sin

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Salud de los Trabajadores / Volumen 11 Nº 1 / Enero 2003

embargo, se han dado infinidad de interpretaciones yde posiciones. Unos la defienden y otros la combaten.

A propósito de la salud de los trabajadores, es laoportunidad para discutir algunas particularidades quecaracterizan a esta época de globalización. En buenaparte de este documento se intentará analizar estasparticularidades y en ese marco, descubrir los cambiosque están sucediendo o que sucederán en el mundo deltrabajo.

De manera resumida se tratará sobre losprincipales aspectos que caracteriza a la globalización,se analizarán los impactos en diferentes ámbitos de lasociedad y, de manera particular, en el mundo del trabajoy de la salud. A manera corolario se señalarán algunaspropuestas dirigidas a la construcción de una vida másdigna y solidaria.

¿Qué es la Globalización?

Existe una infinidad de documentos, escritos yensayos que hablan sobre la globalización de la épocaactual, cada quien lo hace a su manera, la mayoría deforma compleja y poco comprensible para el común delos mortales. Por ello se intentará en esta ocasiónabordar el tema de manera didáctica y sencilla.

Comencemos por las concepciones oficiales, lasNaciones Unidas dice que “la globalización no es nuevapero la era actual posee caracteres distintivos. Lareducción del espacio y del tiempo y la desaparición defronteras están conectando las vidas de las personasen una forma profunda, como nunca antes” (Taylor,2001).

Los que la defienden afirman que “laglobalización constituye el marco de referencia paraintegrarse en las corrientes internacionales de comercio,inversión y tecnología” (Acosta, 1997).

Sin embargo, en los mismos sectores de poderse ha intentado reducir a la globalización al ámbitoestrictamente económico, lo que algunos autores handenominado globalismo. La noción de globalismorefleja el interés principal que tienen los grupos de poderde priorizar o absolutizar el espacio del mercado,desconociendo las dimensiones culturales, ecológicas,políticas y sociales (Beck, 1998).

A pesar que los grupos de poder tienen estasintenciones reduccionistas, acordes a sus intereses y

en contraposición al criterio de globalismo, laglobalización encierra una serie de “procesos en virtudde los cuales los Estados nacionales soberanos seentremezclan e imbrican mediante actorestransnacionales y sus respectivas probabilidades depoder, orientaciones, identidades y entramados varios”(Beck, 1998).

La globalización surge como una propuestaideológica totalizante del neoliberalismo.

Acosta (1997) explica con claridad que la palabraglobalización fue recogida como el estandarteideológico de esos afanes totalizantes. “Recoge elinstrumentario neoliberal, concepción radical delcapitalismo que tiende a absolutizar el mercado hastaconvertirlo en el medio, el método, y el fin de todocomportamiento humano inteligente y racional. Segúnesto, están subordinados al mercado la vida de laspersonas, el comportamiento de las sociedades y lapolítica de los gobiernos”.

En otras palabras, los ideólogos delneoliberalismo han tomado como única expresión de laglobalización al globalismo, es decir al interés de quelas leyes del mercado impongan los cambios en todoslos ámbitos de la sociedad.

La expansión del mercado hacia ámbitosinternacionales es muy antiguo, presente desde la épocade los conquistadores, se acentuó con las revolucionesindustriales, también venidos desde los países europeosque en esos momentos ostentaban el poder. Se dio unaexpansión o mundialización del poder, de la economíaen torno al capital. Estos procesos, con característicasbastante diferentes se expresa en la actualidad comoglobalización.

En la actualidad estamos en presencia de unaglobalización de la economía, de los mercados, de lacompetencia por un puesto de trabajo, de la producción,de la prestación de servicios, de las finanzas, de lainformación y de la vida en general (Beck, 1998).

La esencia de la globalización no hay que verlasólo en la arista económica o del mercado comoapunta el globalismo, es necesario entenderla como unproceso que tiene muchas expresiones, incluye cambiossociales, ideológicos y políticos.

Levitt, citado por Sánchez (1997) indica que enla globalización existe una convergencia de los

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mercados en el mundo entero, haciendo de laglobalización y de la tecnología los dos principalesfactores de las relaciones internacionales (Levitt, citadopor Sánchez, 1997).

Por su lado, Kenichi Ohmae señala que laglobalización es un proceso a través del cual lasempresas más internacionalizadas tratan de redefiniren su beneficio las reglas del juego antes impuestaspor los Estados nacionales.

Surgimiento de la Globalización

En la expansión del capitalismo a nivel mundialhan existido épocas de globalización y dedesglobalización. No existe un acuerdo para fijar elmomento en que reaparece esta nueva faceta de laglobalización.

Para unos, este nuevo proceso surge en los años50 del siglo XX, favorecido por los avances tecnológicosespecialmente en la comunicación y el transporte.

Otros, como Castells (1998) consideran quereaparece un poco más tarde. “Se originó en lacoincidencia histórica, en los últimos años de la décadade los 60 y los mediados del 70, de tres procesosindependientes: la revolución de la tecnologíainformática, la crisis económica tanto del capitalismocomo del estatalismo, y su subsecuente reestructuración;y la aparición de movimientos sociales culturales talescomo el libertarismo, los derechos humanos, elfeminismo y el ambientalismo. La interacción entreestos procesos, y las reacciones que estos gatillaron,dieron a luz una nueva estructura social dominante, lasociedad red; una nueva economía, la economíainformacional/global; y una nueva cultura, la cultura dela realidad virtual” (Castells, 1998).

Es innegable que la presencia de la informáticay de la microelectrónica imprimen nuevas condicionespara el resurgimiento de la globalización con otrosmatices.

A partir de los años 70 del siglo pasado, con elincursión de la tecnología de la información, vacambiando el paradigma de desarrollo y la visión delmundo. Los avances logrados en el campo de lainformación conducen a la humanidad a un cambiode la época del industrialismo a la época delinformacionalismo (Castells, 1998). Es el aspectocentral que ocasiona cambios en todos los ámbitos dela vida social.

De Souza (1998) anota que a partir de esadécada se han dado tres cambios importantes:

- Revolución tecnológica de la información- Crisis económica y reestructuración del

capitalismo y Estatismo- Explosión global de los movimientos sociales y

culturales (feminismo, ambientalismo,libertarianismo, especialmente sexual; derechoshumanos, etc.)

Estos cambios han producido transformacionesestructurales en las relaciones de producción, poder,experiencia y cultura.

Otro de los aspectos fundamentales de estosúltimos años y que ha favorecido la instauración delproceso de globalización, es la formación de redes parala organización de la mayoría de las actividades de lasociedad. Castells sugiere que la red es la nuevamorfología social de la sociedad del Siglo XXI (DeSouza, 1998).

En América Latina la Globalización sigue almodelo anterior (desarrollista, de sustitución deimportaciones y de fuerte protagonismo del Estado).Se instaura una globalización inducida, alimentada porla ideología de querer pertenecer al primer mundo.

Esa instauración en América Latina genera lapresencia de un amplio grupo social que para los años60 podría ser calificado como marginal, es decir, almargen de la modernización e industrialización. En lasdécadas de los 80-90 es un grupo excluido, expulsadodel mercado de trabajo. Posteriormente adopta lascaracterísticas de desechable, esto quiere decir quela sociedad puede prescindir de él por indeseable, einclusive puede ser eliminado (Gallardo, 1994).

Independientemente de la discusión de los añosen que reaparece, con la globalización se produce unaruptura de las etapas precedentes de la economíainternacional que se mantenían con un fuerte controlestatal. Surge una economía globalizada, en donde laseconomías nacionales quedarían descompuestas yrearticuladas en el seno de un sistema de transaccionesy procesos que operan directamente a nivelinternacional (Sánchez, 1997).

Se hace presente así una globalizaciónheterogénea, en la que se unen los países que tienengrados de desarrollo similares (Estados Unidos, Canadá,

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Inglaterra, Alemania, Francia, Japón, etc.) y establecenrelaciones inequitativas con los denominados paísesen desarrollo (América Latina, África, Asia).

Características de la Globalización

Para entender mejor las múltiples expresionesde la globalización se hará primero una caracterizacióngeneral y luego se recuperará sus expresioneseconómicas, políticas e ideológicas.

Características generales

Hay que estar muy concientes que laGlobalización es una nueva etapa de desarrollo delcapitalismo hegemónico, que tiene como centro a lospaíses con mayor poder económico de Europa y Asia,del Canadá y Estados Unidos. Es también una fase dedesarrollo del capitalismo dependiente de nuestrospaíses.

De Souza (1998) realiza una caracterización muysencilla de la globalización que delata la esencia deeste proceso:

- Bajo el proceso de globalización, el crecimientoeconómico, moldeado por la innovacióntecnológica y facilitado por la flexibilidadorganizacional y gerencial asume el status de unfin en sí mismo. El crecimiento y la exportaciónson fines en sí mismos.

- Han sido desplazados los objetivos sociales deconstrucción de mejores condiciones de vida, deniveles de vida más altos y de mejor calidad.

- El objetivo es crecer, crecer y crecer, exportar,exportar y exportar. Hay que preguntar, ¿elcrecer para qué?, ¿exportar para qué?, ¿quiénesse benefician?, ¿cómo ese crecimiento oexportación pueden beneficiar a la mayoría dela sociedad?.

- La única preocupación de los países “centrales”e inclusive de los nuestros es el “desarrolloeconómico”. Sin embargo, se ha visto en variospaíses la existencia de altos indicadoreseconómicos y con los peores indicadoressociales. Brasil, por ejemplo, se ubica entre ladécima economía global pero es el tercer paíscon la peor distribución de ingresos, es el cuartoexportador mundial de productos de origen

agropecuario pero con la séptima población peoralimentada del Planeta (De Souza, 1998).

Esto que se ve en el Brasil, se encuentra enmuchos países de capitalismo dependiente. Entre otrascosas se debe a que el proceso de globalización quese viene dando en la época actual es de tiponortecéntrico y unipolar (Gallardo, 1994).

Se denomina nortecéntrico porque como ya seha dicho, el proceso de globalización se da en funciónde los intereses de acumulación de los países centrales.Las necesidades de la población mundial y del ambienteestán supeditadas a la lógica de un mercado capitalistamundial.

Es unipolar por la predominancia como únicapotencia mundial a los Estados Unidos que saliófortalecida en el período posterior a la Guerra Fría,sumado al hecho que mantiene el control de losorganismos internacionales y de los tratados de librecomercio.

La globalización como proceso es un fenómenoque se presenta de manera desigual para diversos países,regiones internas, sectores de actividad, industrias yempresas. Son procesos de “integracióninternacional” y de “desintegración nacional”(Acosta, 1997).

Se generan procesos de desarrollo locales,integrados a lo internacional pero desintegrados alinterno. Esos desarrollos locales, denominados por elPresidente de la SONY como “glocalización” sondependientes de los intereses del capital internacional.

El poder en el conocimiento

Los países centrales son los que ostentan elpoder, anteriormente sustentado en la fuerza y eldinero, ahora en el conocimiento. Con ese podersometen a los países dependientes.

En la historia de la humanidad el poder se hasostenido en tres elementos:

- Fuerza- Dinero- Conocimiento

Desde la revolución de la invención de laagricultura (hace 10 mil años) hasta la revolución

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industrial, la fuerza fue el elemento central del poder.A partir de la Revolución Industrial hasta fines del sigloXX ha sido el dinero en el que se ha respaldado elpoder.

En el momento actual, el conocimiento se ubicacomo líder absoluto del poder. El conocimiento seráusado para producir más dinero y más fuerza, que a suvez serán utilizados para producir más conocimiento,que, a su vez servirán para cambiar las realidadessociales y materiales.

La revolución en la tecnología de la informaciónes la responsable por la predominancia del conocimientoen las relaciones de poder, éste está siendo acaparadopor los que monopolizan el conocimiento. Los otrosmonopolios tienden a debilitarse o a supeditarse almonopolio del conocimiento.

Las empresas transnacionales son los actoresglobales con más poder para decidir o influenciardecisiones antes definidas dentro del Estado Nación.El conocimiento como fuente de poder y éste, comofuente de riqueza, se encuentran integrando la nuevajerarquía social en la época de la información (DeSouza, 1998).

Los grupos que ostentan el poder son los quepromueven la globalización, son, a su vez, los queinducen a las naciones y organizaciones para que siganel “ejemplo” de manera pasiva, el objetivo es reproducirlas condiciones que garanticen el logro de sus intereses.

La historia he demostrado que las sociedadespoderosas, con ambiciones hegemónicas yexpansionistas, cuando entraron en relaciones deintercambio con sociedades menos poderosas lohicieron a través de relaciones asimétricas de poder(De Souza, 1998).

Características políticas e ideológicas

La globalización invade también el ámbitopolítico, para ello generalmente cuenta como aliados alos grupos de poder locales. Con este sustento, lasrelaciones que se establecen entre los países(gobiernos) permite a los empresarios y a sus asociadosreconquistar el poder de negociación política, siemprea la orden de los intereses de los grupos hegemónicos.

La economía que actúa a nivel mundial socavalos cimientos de las economías nacionales y de los

Estados nacionales, lo que desencadena unasubpolitización de nuevo alcance y de consecuenciasimprevisibles (Beck, 1998).

De Souza (1998) es claro al plantear que en esosintentos de expansión del capital, la globalización esuna recolonización que utiliza forma hábiles para lasnegociaciones multilaterales y mecanismos deimplementación supra y transnacionales dirigidos adebilitar a los gobiernos nacionales de los países endesarrollo.

Existe un juego de poder entre el podercorporativo de las grandes transnacionales y losgobiernos de los países desarrollados. Estos, endesventaja solo cumplen su papel subsidiario en ladivisión internacional del trabajo.

Los países en desarrollo son obligados a cumplirlas reglas y procedimientos impuestos, sin contar conlas mismas oportunidades políticas.

En resumen estaríamos viviendo:- Globalización como uniformización del

crecimiento económico- Globalización como movilidad del capital y

vulnerabilidad para el trabajo- Globalización como mercantilización de la ciencia

para el lucro y no ciencia para las mayorías- Globalización como exclusión y no como

integración- Globalización como instauración de un gobierno

corporativo mundial disfrazado- Globalización como institucionalización

internacional de la desigualdad.

Globalización y neoliberalismo

El Neoliberalismo y el neoconservadorismo sonlos referentes ideológicos del proceso de globalizaciónque se ha descrito.

Para que se desarrolle la acumulación global delcapital es necesario difundir e incrustar por todo ladola ideología neoliberal, la ideología del mercado,aniquilando la ideología del Estado nación.

Uno de los mecanismos es hacer aparecer alsector público como el causante de todos los males yal privado como la solución a todos los problemas. EnAmérica Latina se ha visto con dolor un procesoincontenible de desprestigio de las instituciones del

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Estado para justificar la privatización de los serviciospúblicos, especialmente de los que resultan másrentables para los dueños del capital.

Los ideólogos del neoliberalismo pregonan elfin de todo, fin de la historia, fin de las ideologías, fin delas utopías, fin de pensamiento crítico. En cambiorealizan una apología a las propuestas neoliberales. Seintenta globalizar homogeneizando el pensamiento.

Las expresiones comerciales, financieras,productivas y tecnológicas de la globalización sonpresentadas por los ideólogos del neoliberalismo comoprocesos innovadores y llenos de muchas bondades.

Para conseguir este paraíso se plantea lanecesidad de abrir los mercados, facilitar la inversiónextranjera y retirar la injerencia del Estado de losámbitos económicos y de bienestar social.

Son reveladoras las palabras de un empresarioecuatoriano. “Las sociedades organizadas con lapropuesta del liberalismo en lo político y en lo económico,ha proporcionado a sus poblaciones más prosperidad,más bienestar general y más pleno ejercicio de losderechos ciudadanos, que las que han intentado hacerlobajo el socialismo, en cualquiera de sus variantes”(León, 1997).

La aplicación de la ideología neoliberal, sustentode la globalización ha demostrado lo contrario. “Elneoliberalismo tiende más al abuso que a la armonía, almonopolio que a la igualdad, a la sobreexplotación queal uso racional de la fuerza de trabajo” (Loyzaga, 1997).

En palabras de Cristina Laurell, “elneoliberalismo se opone radicalmente a la universalidad,igualdad y gratuidad de los servicios sociales” (Laurell,1992).

Loyzaga (1997) sintetiza las expresionesconcretas de lo que ha sucedido en nuestros paísescon la aplicación de los principios neoliberales. Afirmaque en la década de los 80, en la mayoría de los paísesde América Latina, la ideología neoliberal se haconcretado en varias políticas económicas, políticas ysociales caracterizadas por:

- Desregulación acelerada de los procesoseconómicos a través de la disminución delpresupuesto para el gasto público y el casiabandono de lo social.

- Inicio de la privatización de las empresasparaestatales y estatales

- Políticas tendientes a asegurar una mayor tasade ganancia del sector empresarial a costa dedescenso en el precio de la fuerza de trabajo

- Caída vertiginosa de los ingresos de la mayoríade la población

El neoliberalismo, sustentado en la privatizaciónde las empresas manejadas por el Estado y laliberalización de la economía no ha traído aparejado unimpulso económico autosostenido ni ha mejorado lainiciativa empresarial o la innovación tecnológicanacional, ni ha logrado mercados más libres y máscompetitivos. Más bien ha generado mayorconcentración de la riqueza en pocos y una dependenciamás profunda del capital y de la creatividad extranjeros(Laurell, 1992).

Implicaciones

Socio-económicas y políticas

El mundo en el cual vivimos no es un mundoglobalizado, es un mundo en el cual existen a la vez, yde manera contradictoria, fuerzas de globalizacióneconómica y tendencias a la fragmentación cultural ya la individuación (Turaine, 1998).

Varios autores revisados por Granda (2000)describen un panorama preocupante pero objetivo. “Elnuevo mundo, del que estamos hablando, estáproduciendo sin lugar a dudas un incremento de lainequidad, polarización de las poblaciones y crecienteexclusión social, reemergencia de enfermedadesantiguas que se suman con nuevas. Por otro lado, unode los aspectos más salientes de la época es laseparación cada vez más abismal entre la lógicaglobalista de la red de flujo del capital y la lógica delmundo cotidiano de los trabajadores y masaspoblacionales, lo cual genera una nueva y complejacontradicción entre la Red y la Identidad (Net and Self),que está llevando a que los excluidos construyan sumundo al margen de los excluyentes (Castells, 1998).Bauman, a su vez advierte que los ricos, quecasualmente son los actores con más recursos y mayorpoder en la escena política, no necesitan de los pobresni siquiera para la salvación de sus almas... Baumancomplementa, los pobres no son los hijos de Dios, conlos que se practica la reparadora beneficencia, no sonel ejército de reserva,... no son consumidores,... notienen ninguna utilidad” (Granda, 2000).

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Es importante reflexionar que el proceso decambio no es uniforme. Por su propia naturaleza laglobalización es desigual y desequilibrador. En esteproceso existen trabas crecientes a los flujosmigratorios que contrastan con la libre circulación decapitales. Las importaciones de los países de AméricaLatina son más a favor de las exportaciones de losEEUU (Acosta, 1997).

La globalización no solo ha afectado a los paísesdependientes y a la relación con los países centrales.En éstos, el compromiso de los distintos grupos socialeses también diferente.

En las economías centrales existe también unaumento del desempleo y crecimiento del sector de losservicios. Sin embargo, en las sociedades pauperizadasse está viviendo la destrucción de las economíashistóricas, acentuación de la dependencia (reactividad),aumento del desempleo, aparecimiento de nuevo tipode pobres y aumento del deterioro ambiental. Todo estodebido a la presión de los países centrales por tornarlesen puntos de inversión privilegiada y en economías deexportación controladas.

A los países empobrecidos se los usa comolugares para el turismo (socio-económicasprescindibles), proveedores de energéticos y derecursos naturales, basureros de desechos tóxicos oreservas ambientales. Existe represión de lasmigraciones, narcotráfico y prácticas económicas opolíticas distintas a las de los países centrales,desplazamiento de lo ético, lo solidario y cualquierexpresión de espiritualidad por el poder-dinero y poder-tecnología (Gallardo, 1994).

Los cambios en el mundo financiero es del ordendel día, comprometiendo a la población más vulnerables.Se ha visto con dolor como los jubilados y numerosaspersonas de las capas medias han perdido sus ahorrosen manos de especuladores nacionales einternacionales.

Por otro lado, el futuro de la familia es inciertoporque la ideología neoliberal, instrumentalizada a travésde los medios de comunicación (TV, Internet, etc)promueven el individualismo, la indiferencia, violenciay con ello la fragmentación irreversible de la familia.

Se va difundiendo de manera impresionante lacultura de la realidad virtual. Con la tecnología dela información el tiempo se comprime se hace

atemporal, el espacio pierde su dimensión material, lahistoria se deshistorializa. Se aniquila la dimensiónespacio-tiempo (De Souza, 1998).

Valores e intereses dominantes se estánconstruyendo sin referencia ni al pasado ni al futuro.Las culturales de los pueblos tienden a difuminarse.

La TV trae a los hogares la realidad de cualquierparte del mundo. Pero la realidad es la realidad que losmedios de comunicación presentan. Los que controlanlas redes de comunicación aumentarán su poder demanera vertiginosa, así pueden cambiar la realidadreal (realidad no virtual) a su antojo (De Souza, 1998).

El supuesto enriquecimiento material continuo yel crecimiento económico constante, promovido por losdefensores de la globalización ha ocasionado undeterioro progresivo del ambiente. Los países centralessustentado en la producción manufacturera y un sistemaconsumista ha ocasionado serios desequilibriosambientales en el mundo. Los países subdesarrollados,proveedores de materias primas también han contribuidoa este fenómeno (Acosta, 1997).

La deuda ecológica es cada vez más grandedebido a la tala de los bosques, explotación y exportaciónde los recursos naturales no renovables y a lasemisiones de residuos de distinto tipo. El impacto no essolamente en las personas que se encuentrandirectamente relacionadas con ciertas actividadesproductivas, la salud y seguridad en el trabajo no puededesvincularse de los estudios ambientales.

Implicaciones en el trabajo

Como se ha visto, el proceso de globalización esbastante complejo, atraviesa todos los ámbitos de lasociedad, en tal virtud, las implicaciones en el mundodel trabajo son igualmente amplias y complejas.

En el mundo del trabajo se tienen modificacionessociales y modificaciones técnicas. Las primeras seencuadran en las relaciones de producción y demanera particular en las relaciones entre elempleador y el trabajador, cruzados por las políticaslaborales de una sociedad determinada. Las técnicas,en cambio se expresan en los cambios al interno delproceso de trabajo particular. Unos y otros van acrear condiciones particulares que se expresarán enformas saludables o patogénicas de nuevo tipo.

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Los profesionales de la salud y seguridad en eltrabajo han centrado su atención especialmente en losaspectos técnicos, es por ello que no se puede teneruna visión integral de lo que está sucediendo con lasalud de amplios grupos de trabajadores y trabajadoras.

Para tener una aproximación a la manera cómoestá impactando la globalización en la salud de lostrabajadores, es necesario remitirse a los cambios enlos dos ámbitos del mundo del trabajo.

A pesar de estos vacíos, existen algunas pistasque orientan sobre las nuevas condiciones que vansurgiendo y que con seguridad se encuentran influyendoen el estado de salud de los grupos laborales. Se haráuna revisión de los cambios más relevantes.

Cambios en las relaciones de producción y enlas relaciones laborales

Aprovechando de las facilidades que ofrecen loscambios en el transporte y comunicación, existe unanueva división internacional del trabajo.

Los países centrales asumen la producción enámbitos que requieren de la presencia de la tecnologíade punta, en correspondencia con la concentración delpoder surgido desde el conocimiento.

Para los países de capitalismo dependiente quedala producción de bienes y servicios tradicionales. Esmás, no pueden adaptarse fácilmente a estos cambios,por muchos años más se continuará trabajando en elsector primario de la economía, con alguna participaciónen el sistema de exportación modernizado en lossistemas “primario-exportadoras modernizadas”, dondese suman las riquezas naturales (petróleo, minería,madera, pesca, turismo) con los esfuerzos del serhumano (Acosta, 1997).

Las grandes empresas se dedican a producirbienes que requieren alta excelencia, por ejemplo elmotor de un vehículo, las actividades que no requierende alto nivel tecnológico y del conocimiento sondelegados a los países dependientes. En el mismoejemplo sería el ensamblaje de las otras partes delvehículo.

La utilización de muchas empresas para cerrarel círculo productivo, fenómeno que se ha dado enllamar “terciarización”, es una de las principalesexpresiones de la globalización y de esta divisióninternacional del trabajo.

Los países centrales se han convertido enexportadores de tecnología de punta (generada porellos) para que sean utilizadas por los paísesdependientes, creando nuevas formas de inequidad enla generación del conocimiento e inclusive en ladistribución de los impactos en la vida, en el ambientey en la salud de la población laboral.

La industrialización sustentada en lasexportaciones creó mayores espacios para las mujeresen las Zonas de Libre Comercio (FTZ) donde no seaplican las leyes laborales. En Sri Lanka y Bangladeshla mayor parte de la fuerza de trabajo es femenina,especialmente en la industria del vestido. Escaracterístico de estas formas de trabajo los bajossalarios, trabajo a destajo con alto grado de inseguridadlaboral. Son tareas repetitivas, monótonas, requierenconcentración y dedos ágiles (Taylor, 2001).

Inclusive, a nivel nacional se constituye unmercado de trabajo dual con gran desigualdad en lacalidad del trabajo y en los ingresos económicos. Losque ocupan los “trabajos chatarra”, especialmente enel sector de los servicios, reciben salarios cercanos alnivel de pobreza y carecen casi por completo deprestaciones sociales (Laurell, 1992).

Granda (2000) no deja de alertar que lasrelaciones de producción han cambiado en esta nuevaépoca, convirtiendo a la productividad y a lacompetencia en los ejes centrales de la sociedad. Lapoblación laboral tienen que mantenerse en constantecambio para cumplir con los requerimientosinnovadores.

De los cambios en las relaciones de producciónsurge una globalización del capital y unalocalización del trabajo. La primera se logra a travésde la eliminación del tiempo y del espacio gracias a losmedios electrónicos. La localización del trabajo se lograa través de la flexibilización y desregulación del trabajo(De Souza, 1998).

La desregulación del trabajo se expresa en ladiversidad de cambios de las relaciones contractualesy la flexibilización, en los cambios de la organización ydivisión del trabajo al interno del centro laboral.

En el primer ámbito, los cambios en laslegislaciones laborales han permitido que las empresasy las instituciones del estado incorporen nuevas formasde relación empleado-empleador. Surge con fuerza eltrabajo a tiempo parcial, el trabajo compartido, la pérdida

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NOTA CIENTIFICA

de la estabilidad laboral, disminución de los salarios,eliminación o modificación de cláusulas que garantizanmejores condiciones de trabajo (estabilidad, movilidaden el puesto, medidas de higiene y seguridad) y hastapérdida del empleo.

Es por eso que otra expresión de los cambios enel trabajo es el crecimiento impresionante de laexclusión social. Emerge el “cuarto mundo”, el mundode los “innecesarios”, de los “excluidos”. La economíainformacional (economía inmaterial) puede existirsin la participación de millones de trabajadores de laeconomía material. El cuarto mundo son losirrelevantes que son excluidos de las políticaseconómicas y olvidados de las políticas sociales (DeSouza, 1998).

En Gran Bretaña, el reconocido país del empleo,solo un tercio de la población en edad de trabajar seencuentra plenamente empleada (Granda, 2000). Elcambio tecnológico incorporado a la producción, loscambios de materias primas y de energía importadahan ocasionado pérdida de los puestos de trabajo.

Al hablar de flexibilización laboral, estamosexperimentando una infinidad de cambios en laorganización y división del trabajo que sumados a loscambios tecnológicos han generado una mayorproductividad y competitividad.

Se han generado cambios de la producción enmasa (fordismo) a otros caracterizados por suflexibilidad. De maquinarias unifuncionales se vapasando a máquinas polifuncionales y flexibles que llevaa la formación de un aparato productivo “ágil, flexibley de empuje a gran escala” (Acosta, 1997). Lo que esnecesario estudiar son los impactos en la calidad de lascondiciones de trabajo y en la salud del personalinvolucrado.

Haciendo un resumen de los cambios en elmundo del trabajo como consecuencia de laglobalización y neoliberalismo se tendría los siguientes(Loyzaga, 1997).

- Reducción del salario real- Racionalización y reestructuración del gasto

público- Desempleo y subempleo masivo- Elevación de precios, tarifas e impuestos- Debilitamiento o desarticulación de los contratos

colectivos, protegiendo la mano dura de losempresarios

- Limitaciones legales o políticas al ejercicio delderecho de huelga

- Suprimir las relaciones laborales con elmecanismo de desaparecer empresas mediantela quiebra, la fusión o la venta de las mismas

- Cambiar las relaciones laborales con el cierre yreapertura de las empresas.

- Eliminación de los contratos colectivos- Intervención de los sindicatos en cuestiones

productivas (reconversión industrial)- Supresión de prestaciones- Establecimiento del precio de la fuerza de trabajo

con nuevos criterios, introduciendo el referentede productividad como elemento fundamental.

- Modificación de las cláusulas que protegen a lostrabajadores de que el empleador alargue lajornada de trabajo o los cambios de turno

- Reducción de las plazas de base- Congelación y cancelación de plazas (puestos

de trabajo) en el sector público- Aumento de las empresas intermediarias o

contratistas- Se comprimen escalafones- Ampliación de las cargas de trabajo y puesta en

marcha nuevos mecanismos de vigilancia,supervisión y control

- Libertad para emplear a trabajadores eventuales- Libertad para contratar o utilizar nuevo personal

sin la intervención de los sindicatos- Instituir la movilidad en los puestos, turnos, sitio

de trabajo- Incorporación de la polivalencia

Impactos en la salud y seguridad en el trabajo

Los cambios en el mundo del trabajo, comoconsecuencia de los procesos de globalización hantenido expresiones diversas en cada uno de los países.Pero, más que nada han sido vertiginosos, encorrespondencia también a los cambios tan rápidos enel campo de la informática y de las comunicaciones.

En la bibliografía internacional existen pocosestudios que tomen como objeto de estudio a la relaciónentre globalización, salud y seguridad en el trabajo. Esnecesario realizar varios estudios de tipo epidemiológicopara conocer los cambios en los perfiles de salud-enfermedad de los grupos laborales.

No se puede desconocer la infinidad deinvestigaciones de tipo clínico que día a día surgen eneste campo, sin embargo, para establecer las relacionesentre los cambios socio-económicos-políticos y las

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NOTA CIENTIFICA

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condiciones de trabajo y salud, es necesario realizarotro tipo de abordajes teórico-metodológicos.Precisamente son este tipo de estudios los que hacenfalta para tener una aproximación de la influencia de laglobalización en la salud y seguridad en el trabajo.

Sin embargo, los cambios que se han visto en elmundo del trabajo y los hallazgos de varios estudios,permiten detectar los nuevos problemas que vansurgiendo en este cambio de época.

Es obligación de los profesionales, técnicos y delos trabajadores, impulsar estudios que den cuenta deesta nueva realidad. Estudios que pueden ofrecer loselementos necesarios para promover intervencionesadecuadas para la consecución de mejores condicionesde trabajo y de salud.

Para adelantar en este intento, se presentará demanera condensada los principales cambios en la saludy seguridad en el trabajo.

- Existe un crecimiento acelerado de lainestabilidad laboral que con seguridad estaráafectando la salud mental de la población laboral.Se debe poner atención a las manifestacionespsicosomáticas, al estrés, a la fatiga y a lostrastornos de la personalidad.

- A lo anterior se suma la pérdida de los beneficiosde la seguridad social y dentro de ello la falta decobertura de la atención de salud de la poblaciónlaboral y de su familia.

- Para mantener el puesto de trabajo, la poblaciónlaboral está cediendo conquistas importantes enel cuidado de la salud. Si se pueden manteneralgunas prestaciones sociales, éstas son ahorade menor calidad y de cobertura reducida. A lapoblación de más alto riesgo y que no resulta“rentable” para las aseguradoras privadas, sonremitidas a los servicios públicos, ahogados porlas reducciones del presupuesto.

- La incorporación de nuevas tecnologías y nuevasformas de organización y división del trabajo traeconsigo también otras condiciones para larealización personal o para los problemas desalud.

- Fruto de este cambio ha surgido una ampliavariedad del denominado “teletrabajo”, que adiferencia del tradicional trabajo a domicilio, elcontrol impuesto por el empleador, gracias a losadelantos de la comunicación, imprimecondiciones particulares de patogenicidad.

- El teletrabajo cambia los espacios y los tiemposde las formas de trabajo convencionales. Sondiferentes también las relaciones empleado-empleador. La calidad de las condiciones detrabajo y el cuidado de la salud, a su vez es deresponsabilidad del propio trabajador. Ladesprotección que resulta de todo esto imprimenuevas características a la posibilidad deenfermar y morir.

- La incorporación heterogénea de los procesosde globalización hace que en los centros detrabajo coexistan problemas tradicionales con losemergentes. Es necesario poner atención a losprocesos peligrosos de épocas precedentes y alas que van surgiendo por los cambios que seviven.

- No es nueva el ingreso de substancias tóxicasen los procesos de trabajo, lo que sucede es queen este mundo globalizado, las puertas estánabiertas para que ingresen con mayor facilidadsubstancias que en los países centrales han sidodescartadas.

Retos

Sería inadecuado estigmatizar de maneradogmática los avances de la ciencia y de la tecnología,particularmente de la informática y de las bondades dela comunicación. Peor todavía, atribuir las inequidadesy el deterioro de las condiciones de vida al desarrollotecnológico y al aporte de las ciencias.

De lo que se trata es de utilizar estos mismosrecursos en un contexto diferente y en formas derelación diferentes. Como contrapropuesta, esnecesario construir un proyecto nacional de desarrollo,basado en otros principios (equidad, solidaridad,independencia, eticidad participación activa de distintosactores sociales y respeto a la naturaleza). Construcciónde un proyecto que garantice una inserción racional(no pasiva) al mercado mundial, asumiendo de maneraconciente y crítica los riesgos , limitaciones y suspotencialidades (Acosta, 1997).

Es necesario cambiar el paradigma de losdefensores de la globalización económica (globalismo).No debemos ser instrumentos de este tipo deglobalización que beneficia a unos pocos.

No se trata de construir una sociedad conexcluidos e incorporados irreflexivamente a la economíay sociedad mundiales y a la nueva división internacional

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NOTA CIENTIFICA

del trabajo. Se trata, más bien, de crear una opciónestratégica de participación en el mercado mundial queparta de una mayor integración interna, actuando conlibertad desde nuestros espacios locales y regionales(Acosta, 1997).

Se debe reflexionar desde los intereses yperspectivas de los actores sociales locales, generarconocimientos y acciones comprometidos con lasnecesidades, realidades, desafíos y problemas de estosactores sociales.

Vale la pena cerrar estas reflexiones con unaporte de un intelectual comprometido que tuve elprivilegio de conocerlo al compartir el espacio de unavión: (De Souza, 1998).

Cada nación o país debería construir un marcode referencia autóctono, moldeado por la filosofía,valores, principios, realidades, necesidades yaspiraciones que mejor representen sus intereses haciael futuro. Para ello se deberían dar los siguientes pasos:

- Interpretar de forma original y comprometida conlas realidades, necesidades y aspiraciones decada pueblo para lograr los cambios locales queestán transformando la época actual.

- Identificar las características básicas ydeterminantes de la época emergente.

- Proyectar las implicaciones de los cambios enmarcha y de las características de la épocaemergente para el futuro de las actividades quedesarrollan las naciones y organizaciones.

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Referencias bibliográficas

Dificultades y logros en la investigación de los efectos del trabajo sobre los trastornos del ciclo menstrualen el personal de enfermería de dos hospitales de la ciudad de Maracay, Venezuela. / Aismara Borges

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NOTAS Y REFLEXIONES

Dificultades y logros en la investigación delos efectos del trabajo sobre los trastornosdel ciclo menstrual en el personal deenfermería de dos hospitales de la ciudadde Maracay, Venezuela

Aismara Borges 1

1 Magister en Salud Ocuapcional

Introducción

El desarrollo de un estudio de prevalencia sobrelos efectos del trabajo en los trastornos del ciclomenstrual de una muestra del personal de enfermería(302 trabajadoras) de dos hospitales de la ciudad deMaracay, Venezuela; primera en nuestro país sobre estatemática y con una muestra representativa de lapoblación seleccionada, nos ha permitido realizar unaserie de reflexiones sobre las dificultades confrontadasy los logros obtenidos, al investigar con el rigor científicoestablecido por el paradigma de la ciencia positivista ylos principios metodológicos de la epidemiología, dentrodel contexto de un país como Venezuela –y más aúnen una ciudad de provincia como Maracay- el cualconfronta graves problemas económicos y sociales queconllevan a que las políticas gubernamentales no denprioridad a la investigación científica, lo cual no ocurre,con tanto impacto, en países de Norteamérica y Europa.

El confrontar múltiples obstáculos para eldesarrollo del estudio, tales como: las dificultades paraacceder a la información bibliográfica actualizada, lacarencia de canales de comunicación eficaces en laslíneas de dirección de nuestros hospitales, la falta deacuerdos y coordinaciones inter-institucionalesnecesarias para el cumplimiento de las diferentes etapasde la investigación, los obstáculos para el acceso aregistros confiables y automatizados, y la condición delredoble laboral (el hecho de trabajar 18 horas o máspor semana, bien sea en el mismo hospital o en otrocentro asistencial, además de su jornada habitual en elhospital donde se le realizó la encuesta) como unarealidad laboral de las trabajadoras, que introdujo elreto de un análisis complejo del estudio de la exposición

laboral, fueron algunas de las dificultades vividas quequeremos discutir en este papel de trabajo, así comolas estrategias desarrolladas para sortear estosproblemas que retrasaron la investigación y los logrosobtenidos en un proceso donde, finalmente la necesidadde las trabajadoras de ser tomadas en cuenta, de poderhablar sobre sus condiciones de trabajo y el interésprincipal de la investigadora de conocer tal realidad,permitió la obtención de resultados que son necesariosdivulgar y discutir para el avance de la experticiacolectiva de los(as) que hacemos investigación en saludocupacional de las mujeres en el país, para beneficiode las trabajadoras necesitadas de soporte científicosobre sus condiciones de trabajo que las enferman yluego poder exigir mejores condiciones laborales y enúltima instancia para el avance del conocimientocientífico, en este caso de la temática específicaestudiada: Los trastornos menstruales y su relación conel trabajo, temática relativamente reciente, polémica ypoco priorizada por los estudios epidemiológicos en elcampo de la salud ocupacional.

1. Falta de apoyo a la Investigación Científica yobstáculos para acceder a la informaciónbibliográfica actualizada

Hacer investigación científica en un país comoVenezuela, tiene entre las múltiples dificultades queconfrontar, el escaso apoyo a la investigación, dada lacarencia en el país de políticas públicas y recursos paraavalar este tipo de actividad, así como el poco desarrollode una cultura que le dé importancia a la investigación.Esto se traduce entre otras cosas, en la falta de soporteeconómico para las instituciones que realizaninvestigación. En la mayoría de los casos, las

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NOTAS Y REFLEXIONES

Universidades y Centros de Investigaciones autónomos,sólo consiguen pequeñas subvenciones de algunosorganismos nacionales o regionales para el desarrollode la ciencia y contradictoriamente en muchos casosel soporte financiero mayor viene dado por organismosinternacionales a través de convenios de cooperación.

De manera concreta, la ausencia de recursosconlleva a dificultades para la estructuración de equiposde trabajo, con asistentes de investigación financiadospor los propios proyectos o instituciones, la carenciade presupuestos para costear los gastos de traslado alos lugares donde se realiza el terreno del estudio, elpoco acceso a los recursos tecnológicos necesarios parael desarrollo de los proyectos y a la informaciónbibliográfica, completa y actualizada del sujeto deinvestigación, etc. Este conjunto de condiciones limitala ejecución y progreso de las investigaciones, el tipode diseño de estudio que podría realizarse (p.ej.:estudios longitudinales) e inclusive el nivel deprofundidad de análisis que las mismas pudieranalcanzar si se contara con toda la infraestructuranecesaria.

En el caso específico de nuestra investigación,no escapamos a la realidad descrita anteriormente. Enprincipio la misma se dio en el marco de un Conveniode Cooperación Internacional llamado: “Mujer, Trabajo,Salud”, entre un Centro de Investigación de laUniversidad de Québec de Montreal y nuestro Centrode Investigación de Salud y Trabajo de la Universidadde Carabobo Núcleo Aragua, financiado por unorganismo de cooperación internacional del Canadá.Luego la investigadora responsable del estudioconfrontó la ausencia de un equipo de trabajo directo,entrenado y financiado para realizar el trabajo deinvestigación. Por otra parte, el acceso a la bibliografíapertinente al sujeto de estudio sólo fue posible obtenerlapara el inicio de la investigación, gracias a que elConvenio contempló la estadía de la investigadora enla ciudad de Montreal, accediendo a las bibliotecas ycentros de documentación de las principalesUniversidades y Centros de Investigación en el áreade salud y trabajo, donde se encontraba la informaciónactualizada. De no haberse contado con la posibilidadde realizar la revisión bibliográfica del tema en Canadá,con los recursos existentes en las bibliotecasvenezolanas para ese momento, años 95-96, no hubiesesido posible realizar una exhaustiva puesta al día delconocimiento del tema para delimitar el problema deestudio, a fin de que esta investigación pudiese contribuira avanzar en esta área del saber que estudia los

trastornos menstruales y su posible relación con lascondiciones de trabajo. Afortunadamente en los últimoscuatro años (1999-2002) encontramos a nivel de internetmayor información bibliográfica actualizada, a la cuales posible acceder, de esta manera la informacióndigitalizada viene a llenar un vacío en materia deactualización bibliográfica de nosotros los investigadores(as) venezolanos (as) y latinoamericanos (as).

2. Canales de comunicación ineficaces en laslíneas de dirección de nuestros hospitales.

En la primera etapa de la investigación fuenecesario el contacto con las autoridades, direccionesy jefaturas de los centros hospitalarios donde habría derealizarse el estudio: El Hospital de la Salud Pública(HSP) y el Hospital de la Seguridad Social (HSS), asícomo con los representantes gremiales y sindicales delas trabajadoras de enfermería, a fin de informarlessobre los objetivos del proyecto de investigación,sensibilizarlas sobre su importancia, solicitar la debidaautorización y apoyo institucional para la ejecución delestudio así como para recaudar la informaciónpreliminar disponible sobre la población de interés. Esteproceso se efectuó a través de un primer envío de unnúmero de comunicaciones escritas a las autoridadespertinentes (Dirección de Enfermería de la Corporaciónde Salud del Estado Aragua, Direcciones de losHospitales, Direcciones y Jefaturas de Enfermería,Jefatura de los Colegios de Enfermería y de la SeccionalRegional del Sindicato de Empleados y Obreros delMinisterio de Salud), de las cuales se obtuvieron escasasrespuestas, por lo cual realizamos un segundo envío decomunicaciones y añadimos visitas y conversacionespersonales con algunas de esas autoridades, dondeconstatamos que la información, en algunos casos, nohabía llegado a sus destinatarios oportunamente,mientras que en otros, simplemente había sido ignorada.

Muchas de las autoridades contactadaspersonalmente, manifestaron de forma verbal un graninterés por la investigación, pero en la práctica y con elpaso del tiempo, tal interés no llegó a concretarse enun compromiso activo, es decir no hubo hechos tangiblesque fueran más allá de un mero permiso escrito quepermitiera nuestra entrada como investigadores a loscentros hospitalarios.

Además de los retrasos mencionados, se sumóla falta de continuidad administrativa de algunasautoridades, con remociones de algunos jefes(as),reestructuración administrativa de la Corporación de

Dificultades y logros en la investigación de los efectos del trabajo sobre los trastornos del ciclo menstrualen el personal de enfermería de dos hospitales de la ciudad de Maracay, Venezuela. / Aismara Borges

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NOTAS Y REFLEXIONES

Salud (principal ente gubernamental regional de lasalud) con la desaparición de la Dirección Regional deEnfermería, etcétera; lo cual ameritó la reinversión deuna gran cantidad de tiempo en la difusión de lainformación a las nuevas autoridades. Es importanteseñalar que, en cada etapa del desarrollo de lainvestigación fue necesario volver a notificar y recordara las autoridades mencionadas el objetivo de lainvestigación, los objetivos de la etapa del trabajo en laque nos encontrábamos y también informar quecontábamos con autorizaciones de los jefes(as)anteriores. Todo esto ilustra la ineficacia en elfuncionamiento de los canales regulares de informacióny de dirección, lo cual fue uno de los principales factoresque retrasó la fluidez de la investigación en susdiferentes etapas.

Si bien la investigación en el campo de la saludocupacional confronta dificultades para el acceso a loscentros de trabajo y la recolección de la informaciónde fuente directa en la gran mayoría de los países delmundo, dado los controversiales intereses que la saluden el trabajo plantea (intereses opuestos entretrabajadores y empleadores), resulta muy contrastantela situación de esta dinámica de información ycoordinación en nuestra investigación, con algunas delas experiencias reportadas en la literatura deinvestigaciones similares en el campo de la saludocupacional en otros países como Canadá, EstadosUnidos, Francia, y los países escandinavos donde, enestos casos, los investigadores trabajaron en un marcode acuerdos interinstitucionales, por ejemplo: En elestudio de Mergler y Vézina (1985) sobre trastornosmenstruales y condiciones de trabajo en mataderos depollo y fabricas de conservas en el Québec, lainvestigación se condujo en estrecha cooperación conlos representantes sindicales locales, que en esemomento discutían su contratación colectiva y requeríanintroducir cláusulas referentes a la salud y la seguridaden el trabajo. El sindicato local contactó a losrepresentantes de Salud y Seguridad de laconfederación a la cual pertenece y éstos, a su vez, secomunicaron con el Centro de Investigaciones para elEstudio de la Salud y el Medio Ambiente (CINBIOSE)de la Universidad de Québec de Montreal (UQAM),institución que desde hace muchos años mantiene unacuerdo de servicio con la Central Sindical Nacional(CSN) y la Federación de Trabajadores del Québec(FTQ) en el contexto de la estructura de Servicio a laColectividad (“Service a la Collectivité”) de dichaUniversidad (Mergler, 1987). Es necesario destacar queeste convenio específico entre el grupo de investigacióncanadiense CINBIOSE, la CSN y la FTQ, es único en

América del Norte y sorteando múltiples obstáculosdurantes sus años de desarrollo, ha generadoimportantes avances en materia de reivindicacionessindicales de mejores condiciones de trabajo endiferentes grupos de trabajadores y trabajadorasafiliados a dichas centrales sindicales. Asimismo, enalgunos de los países mencionados, es posible contarcon permisología oficial consecuencia de una obligaciónlegal para la evaluación de la salud de los(as)trabajadores(as), por ejemplo: en Francia, en unainvestigación similar a la mencionada anteriormente, elestudio se realizó en el contexto del examen médicoanual obligatorio de los(as) trabajadores(as), con lacooperación activa de los servicios médicosocupacionales de las empresas (Messing et al. 1992).Si bien es cierto, que estos ejemplos pudieran no ser lanorma de la dinámica de investigación en saludocupacional de los países industrializados, son ejemplosmuy lejanos a la realidad común de nuestra incipienteactividad investigativa en este campo.

En nuestro caso, a pesar de todas las dificultadespara contactar a las autoridades y acceder a lainformación, dentro de un contexto organizacionalanárquico, nos planteamos como estrategia para vencerdichos inconvenientes, establecer relación persona apersona con algunas enfermeras (informantes claves)que por diferentes razones (trabajadoras conconocimiento previo en Salud Ocupacional, por razonesacadémicas, sensibilizadas por sufrir los síntomas queíbamos a investigar, etcétera), cooperaron en granmedida para permitirnos el enlace no sólo con lasjefaturas más inmediatas a las trabajadoras de base,sino también con las trabajadoras mismas; relación quefinalmente facilitó el desarrollo del proyecto. Además,estas informantes claves se convirtieron en un grupode apoyo operativo que suministró información sobreel sector, sobre la dinámica organizacional con la quese realiza el trabajo de enfermería en sus hospitales yque promovió la convocatoria y ejecución de los talleresde información con las trabajadoras. No obstante, elapoyo y el entusiasmo de estas trabajadoras, para laejecución de los talleres, también enfrentamosdificultades de comunicación y organización, tales como:falta de tiempo por parte de las trabajadoras para asistira los talleres, planificados inicialmente para ocho horas,lo que nos obligó a reducir su duración a cuatro horas;además de la ausencia de permisos formales y laplanificación respectiva de parte de las direcciones deenfermería de ambos hospitales para seleccionar yautorizar la asistencia a los talleres de las trabajadorasinteresadas en participar.

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NOTAS Y REFLEXIONES

3. Talleres de información y sensibilización

Como investigadores asumimos el principio éticoque considera a los sujetos en estudio, con derecho aposeer una información básica sobre el tema que se vaa investigar, ¿Para qué le sirve al investigador(a) elestudio que realiza? ¿Para qué puede servirles elestudio a ellos(as) como trabajadores(as)?, por lo cualdecidimos realizar talleres de información ysensibilización, como espacios de encuentro paraescuchar sus opiniones y conciliar en el estudio, de serposible, los intereses de investigadores y trabajadores.

Asimismo, estos talleres fueron nuestra primeraestrategia de contacto directo con las trabajadoras aobjeto de: 1) Informar sobre el tema de la investigación.2) Explorar su interés frente al mismo. 3) Explorar lapercepción sobre sus condiciones de trabajo yproblemas de salud. 4) Acercamiento preliminar a lascondiciones de trabajo particulares de estastrabajadoras.

Se realizaron dos talleres, uno en cada hospitalseleccionado, con grupos de 20 trabajadoras delpersonal de enfermería, en los cuales se explicaron losobjetivos del trabajo y sus alcances. Luego, escuchamoslas inquietudes y opiniones de las trabajadoras. A travésde esto, pudimos darnos cuenta del poco interés queen un principio tenía este grupo de mujeres por lostrastornos menstruales y su posible relación con lascondiciones de trabajo como tema de investigación.Escuchamos expresiones como éstas: “Como culturageneral, me parece muy interesante conocer sobrela dismenorrea pero, para nosotras, el estrés quenos produce trabajar con tantos pacientes y conpocos recursos, es un problema más importante”.Otra trabajadora comentó “Los dolores de espaldason muy frecuentes en nosotras las enfermeras, yopor ejemplo sufro de la columna y, muchas veces,cuando termino mi guardia, no aguanto el dolor...”y otra mujer dijo, “También sufrimos mucho dedolores en las piernas, yo creo que se debe a quepasamos muchas horas de pie...”

Constatar que los trastornos menstruales, enprimera instancia no resultó ser un problema de saludsentido por las trabajadoras, nos planteó un problemaético como investigadores en términos de cómo conciliarnuestro interés científico sobre este tema con losintereses de las trabajadoras, razón por la cual surgióel compromiso de incorporar en la investigación el tema

de la lumbalgia, referido por ellas como un problemade salud más relevante. No fue difícil concretar esteacuerdo pues en la revisión bibliográfica,particularmente del tema de la lumbalgia, nosencontramos con un vacío sobre la contribución realde la menstruación a la frecuencia de aparición eintensidad de la lumbalgia, por lo cual explorar lafrecuencia de la lumbalgia con y sin la menstruación,nos brindó la oportunidad de profundizar en estadiscusión. La necesidad ética de la conciliación deintereses entre investigadores y trabajadores tambiénha sido reportada por otros estudios, por ejemplo eltrabajo de Tissot y Messing (1995) con trabajadorashospitalarias del Québec, donde en el marco de unainvestigación diseñada inicialmente para estudiar losefectos de las radiaciones ionizantes sobre el productodel embarazo, se incorporó el estudio de otros factoresde riesgo y sus efectos a la salud, entre ellos lossíntomas perimenstruales, producto de las discusionescon los representantes sindicales.

En cuanto a la percepción de las trabajadorassobre sus condiciones de trabajo, surgieron dosproblemas particulares. El primero, la percepción delaborar con un alto ritmo de trabajo, específicamenteen las trabajadoras del hospital de la salud pública, através de comentarios como: “Yo trabajo en elservicio de emergencia de adultos, y tengo tantospacientes que atender, porque hay muy pocopersonal, por lo que normalmente debo hacer doso más tareas al mismo tiempo...” Otra trabajadoraexpresó, “Yo trabajo en emergencia pediátrica, enplanta baja y en mi servicio frecuentemente nocontamos con todos los recursos ni medicamentospara atender a los pacientes. A veces, tengo quesubir hasta el piso ocho, al servicio dehospitalización de medicina interna, para conseguirun antibiótico que alguna colega me facilita comoun favor, para poder cumplir el tratamiento a unpaciente pobre cuya familia no tiene dinero paracomprarlo”.

El segundo problema fue la condición del redoblelaboral, es decir, las enfermeras manifestaron que aconsecuencia de los bajos salarios que perciben, losniveles de inflación, y en general la crisis económicade nuestro país Venezuela, se ven obligadas a emplearseen otro centro asistencial, o como suplentes de algunacompañera en el mismo hospital donde trabajan, con elfin de aumentar sus ingresos, condición de trabajo quegenera mayor tiempo de exposición a los riesgos

Dificultades y logros en la investigación de los efectos del trabajo sobre los trastornos del ciclo menstrualen el personal de enfermería de dos hospitales de la ciudad de Maracay, Venezuela. / Aismara Borges

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NOTAS Y REFLEXIONES

laborales, sensación de fatiga y una importantedisminución del tiempo para el descanso, la recreacióny la atención de sus responsabilidades familiares.Producto de esta realidad, como investigadores, nospareció importante construir indicadores sobre laintensidad del ritmo de trabajo y tomar en cuenta elredoble laboral al momento de la elaboración delcuestionario, como instrumento esencial de recolecciónde información del estudio.

A pesar de las dificultades y retrasos antesmencionados para el desarrollo de los talleres, podemosconcluir que se lograron sus objetivos principales.

Talleres de Sensibilización ¿Fuente de Sesgos?

La realización de este tipo de talleres, previos ala etapa de recolección de datos de una investigación,puede interpretarse como una fuente de sesgo para elestudio, pero en nuestro caso, pensamos que éstos seconstituyeron en una herramienta importante parainformar a las trabajadoras y garantizar su participaciónen el mismo. Por una parte, es necesario señalar quelos talleres se realizaron en una etapa inicial de lainvestigación, sólo con un grupo pequeño detrabajadoras (40 de una población de 440) y el tiempotranscurrido (más de un año) entre los talleres y laaplicación del cuestionario fue lo suficientementeamplio como para descartar que la información discutidaen dichos talleres influyese sensiblemente en lasrespuestas a las preguntas del cuestionario y enconsecuencia en los resultados de la investigación. Porotro lado, en las investigaciones de salud se ha señaladoa la memoria selectiva como una fuente de sesgo de lainformación pues se ha establecido que un sujetofrecuentemente afectado por un síntoma, está másinteresado en participar en un estudio que investiguedicho problema que un sujeto que no lo esté (Bryant H,1992), por lo cual podría pensarse que los talleres desensibilización estimulan la participación de éstossujetos. En nuestro estudio podemos sostener que estetipo de sesgo no influyó sobre los resultados dada laestrategia de selección de la muestra con el uso delistados aleatorios y a la alta tasa de participación queobtuvimos (84%). Además en nuestro caso, pensamosque el estudio de la dismenorrea, principal trastornomenstrual de la investigación, no pudo ser fuente delsesgo de memoria selectiva ya que, como lomencionamos anteriormente, este síntoma y los otrostrastornos menstruales investigados, no fueron elcentro de interés del personal de enfermería.

4. Obstáculos para el acceso, confiabilidad yautomatización de los registros.

Otro de los obstáculos confrontados en eldesarrollo de la investigación fue la falta deautomatización de los registros, así como sudesactualización, la dificultad para acceder a ellos, yla falta de datos completos en la mayoría de los mismos.

Para llevar a cabo nuestro estudio necesitábamosdisponer de información preliminar sobre el sector detrabajadoras de la enfermería de los dos hospitalesseleccionados, para conocer mejor las característicasde los y las trabajadores(as) y del trabajo que realizaban,datos como número total de los trabajadores en cadacentro de trabajo, su distribución por sexo paraseleccionar sólo a las mujeres, su distribución pordepartamentos y turnos de trabajo, fecha de nacimiento,antigüedad laboral, etc. No fue fácil obtener estainformación debido, por ejemplo, al hecho de que en elHospital de la Seguridad Social (HSS) toda lainformación de nómina existía en registros manuales,desactualizados, que en el caso especifico de las listasdel personal de enfermería incluía al personal jubiladoy al personal de limpieza. Por su parte en el Hospitalde la Salud Pública (HSP), aunque los listados delpersonal fueron suministrados de manera automatizada,éstos pertenecían a nóminas de dos años anteriores.En ambos hospitales, los listados del personal a loscuales accedimos estaban incompletos. No existía unadistribución por sexo (de manera anecdótica podemosseñalar que la selección de hombres y mujeres lahicimos manualmente, identificando el género de lostrabajadores por la asociación empírica con susnombres), afortunadamente este ejercicio no fuecomplicado dado la escasez de personal masculinodentro del sector de enfermería (<10% de la fuerza detrabajo) y al hecho de que las enfermeras informantesclaves nos ratificaron quiénes de sus compañeros eranhombres o mujeres. De igual forma, una proporciónimportante de los listados no poseían las fechas denacimiento, lo cual era indispensable en nuestro estudiopara conocer la edad de las trabajadoras, pues era uncriterio de inclusión de la investigación tener una edad< 45 años. Por otra parte, algunos de los departamentoslistados, en la realidad no existían, por ejemplo laUnidad de Quemados del HSP y las trabajadoraspertenecientes, en teoría a dicha Unidad, laboraban enotros departamentos. Igualmente, la mayor parte delas trabajadoras aparecían adscritas al Departamentode Enfermería pero el listado no indicaba eldepartamento de trabajo específico en el que laboraban,

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NOTAS Y REFLEXIONES

llámese pediatría, obstetricia, etc., y tampoco existía eldato correspondiente al turno de trabajo. Siendo éstosdatos, vitales para localizar a las trabajadoras.

Frente a este caos en la fuente primaria paralistar la población, tomamos la decisión de conseguirlos datos directamente de las jefas de enfermeríaquienes nos suministraron los listados de lastrabajadoras a su cargo, hechos también en formamanual pero más actualizados. Con estas múltipleslistas, creando una base de datos en DBASE, cruzamosla información, obteniendo listados más limpios ycompletos que luego fueron enriquecidos y/ocorroborados por la información proveniente de laexperiencia de las mismas jefas departamentalesquienes conocían “casi de memoria”, la distribución delpersonal a su cargo por servicios y por turnos, y fueroncapaces de indicar quiénes estaban de reposo, depermiso, quiénes estaban embarazadas o en fase delactancia, etc. Después de todo este proceso, finalmenteobtuvimos los listados definitivos de las trabajadorasde cada hospital.

La reflexión acerca del acceso a los registrosconfiables y actualizados representa un punto de partidacrucial, en toda investigación. A diferencia de nuestraexperiencia aquí en Venezuela, donde la informaciónpoblacional automatizada y confiable es escasa,observamos en la literatura que en algunasinvestigaciones de países industrializados, como porejemplo en el estudio de Sundell et al., (1990), en Sueciasobre factores que influenciaron la prevalencia yseveridad de la dismenorrea en mujeres jóvenes, losautores accedieron a los registros para la selección dela población y muestra a partir de la base de datos delRegistro de Población Nacional de la ciudad deGoteborg, donde encontraron los datos de edad ydirección de residencia, importantes para la fase deselección y contacto con la muestra de interés. Esimportante resaltar que dichos autores realizaron unprimer estudio sobre la prevalencia de la dismenorreaen una muestra representativa de las mujeres residentesde la ciudad de Goteborg en el año 1982 y cinco añosdespués en una segunda fase tipo estudio longitudinal,a través de la misma base de datos pudieron contactaral 91% de las participantes del primer estudio.

5. Imposibilidad de trabajar con cuestionariosauto-administrados

Al revisar la literatura internacional sobreestudios de corte transversal en salud ocupacional,

notamos que la mayoría de las investigaciones queemplean el cuestionario autoadministrado comoprincipal herramienta de recolección de datos, el mismoes enviado a las participantes a través del correo obien, a través de redes organizacionales del trabajocomprometidas con la investigación (jefes inmediatoso representantes sindicales) (Sundel et al. 1990; Tissoty Messing, 1995). Los cuestionarios son llenados porlos(as) participantes y reenviados a los(as) responsablesde la investigación a través de los mismos mecanismos;reportándose en muchos casos, buenas tasas departicipación.

Para nuestra percepción, estos procedimientosno sólo reflejan la eficiencia de los canales decomunicación y de dirección organizacional de loscasos comentados, sino que además son expresionesde la cultura de países donde existe, entre otros valores,la confianza en el funcionamiento de sus serviciospúblicos (p.ej.: el correo) y el hábito de la comunicaciónescrita, producto de un alto nivel educativo de lapoblación general y una elevada calidad de vida. Por elcontrario, en nuestro país, la realidad cultural yorganizacional es muy distinta. Por un lado, los serviciospúblicos en muy pocos casos funcionan de maneraeficaz por lo que, en lo que concierne al sistema decorreos, se corre el riesgo de que una encomiendapueda tardar semanas y hasta meses en llegar a sudestinatario, razón por la cual la gran mayoría de losvenezolanos hemos rechazado rutinariamente, el usode este servicio como recurso de comunicación. Porotro lado, como lo mostramos anteriormente, no existeuna cultura organizacional que ejecute canales decomunicación eficientes, ocasionando que lascomunicaciones escritas (cartas, memos, permisos) nolleguen a su destino o no sean leídas ni respondidasoportunamente en muchos casos. Asimismo, los nivelesde escolaridad y particularmente los hábitos de lecturay escritura nos son precisamente característicasdeterminantes de nuestra cultura como pueblo, aunquesi son hábitos y valores exclusivos de ciertas elitessociales. Por el contrario, la comunicación oral si es unrasgo peculiar de nuestra idiosincrasia, que se traduceen hablar abiertamente de ciertos temas que en otrospaíses se reservan a la privacidad.

Por otro lado, experiencias previas de nuestroequipo de investigación han arrojado tasas departicipación muy bajas cuando empleamos el métodode los cuestionarios auto-administrados. En cambiocuando realizamos los cuestionarios con el método dela entrevista persona a persona, las tasas de

Dificultades y logros en la investigación de los efectos del trabajo sobre los trastornos del ciclo menstrualen el personal de enfermería de dos hospitales de la ciudad de Maracay, Venezuela. / Aismara Borges

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participación son más elevadas; creemos que esto sedebe precisamente a esa cultura oral que noscaracteriza.

En nuestro estudio sobre trastornos menstrualesy condiciones de trabajo, a pesar de que la menstruaciónpareciera entrar en la esfera de lo privado, lasenfermeras, en su mayoría no se sintieron inhibidas dehablar sobre el tema. La disposición a participaraportando la información requerida, se brindó casitotalmente con una gran espontaneidad; sólo sepresentaron dos exigencias: la primera, la necesidadde conocer nuestra identificación como investigadores,para verificar que no veníamos en representación delempleador con función supervisora, debido al temorocasionado por la posibilidad de perder su trabajo, yla segunda exigencia fue el estricto respeto alanonimato, con el compromiso de la confidencialidadde la información suministrada por las trabajadoras.Respetar estas dos exigencias planteadas por lasparticipantes, resultaron ser estrategias para ganar suconfianza, elemento que también contribuyó a obteneruna alta tasa de participación de las mismas. Es porello, que en este trabajo, la fase de aplicación delcuestionario se realizó con un formato anónimo,solicitando únicamente el consentimiento verbal de lastrabajadoras. Sabemos que el temor de los(as)trabajadores(as) a perder su empleo por participar enuna investigación donde se le demanda su opinión sobresus condiciones de trabajo, es un problema general conel que nos enfrentamos los(as) investigadores(as) ensalud ocupacional, en todos los países del mundo.

Aunque el uso de cuestionariosautoadministrados para la recolección de informaciónen los estudios transversales es una práctica común enlos países industrializados, la validez de su informaciónha sido cuestionada en diversos artículos científicos(Bernard et al., 1993; Torgen et al., 1999; Trinkoff etal., 2001), debido a que es posible que los(as)encuestados(as) podrían sobreestimar sus respuestas,contribuyendo al problema de la clasificación erróneade la exposición (específicamente en el campo de lasalud ocupacional) y por lo tanto aumentar la posibilidadde introducir sesgo a los resultados. De este modo, laimposibilidad de aplicar cuestionarios autoadministrados,que en primera instancia se presentó como unadificultad para nuestra investigación, tuvo lapotencialidad de convertirse en una fortalezametodológica, dado que la aplicación del cuestionariopersona a persona, con entrevistadoras entrenadas,aunado a las al clima de cooperación establecido entre

los investigadores y los sujetos, trajeron como beneficiouna alta tasa de participación y un aumento de laconfiabilidad de las respuestas obtenidas en elcuestionario. Hecho comprobado cuando se observóla concordancia de las respuestas con las informacionesdadas por las trabajadoras en los talleres previos y losdatos obtenidos en las fase de las observacionesergonómicas preliminares de los puestos de trabajo.

6. Toma de conciencia sobre las cargas laboralesy domésticas ¿Una ganancia inesperada de estainvestigación?

Durante la aplicación del cuestionario mediantela técnica de entrevista, las trabajadoras expresaronque por primera vez se sentían “tomadas en cuenta”,que sus preocupaciones por las condiciones de trabajo,eran escuchadas. Percibimos que de alguna manera,el hecho de cuantificar el número de pacientes queatendían, los que debían bañar o darles comida; elnúmero de veces que realizaban actividades demanipulación de los pacientes, y reflexionar sobre laintensidad de su ritmo de trabajo, les permitió tomarconciencia real de la carga física y mental querepresentan estas actividades y exigencias de su trabajocomo enfermeras hospitalarias.

Por otra parte, incluimos en el cuestionario, unaserie de preguntas sobre las horas que ellas invertíanen el trabajo doméstico, frente a lo cual manifestaronque nunca antes habían sido interrogadas sobre esteaspecto de sus vidas. Igualmente, al responder a estaspreguntas del cuestionario, las trabajadoras tuvieron queconsiderar por ejemplo, ¿Cuánto tiempo empleaban enla realización de los quehaceres del hogar tales como:planchar, cocinar, limpiar, etc.? ¿Para estas actividadescontaban o no con ayuda? De cierta forma la toma deconciencia de su carga de trabajo tanto en el hospitalcomo en el hogar, se puede apreciar como una gananciano esperada de esta investigación.

El hecho de que las trabajadoras se percatasenpor sí mismas del significado del trabajo en la casa yreportasen la información sobre su carga de trabajodoméstico, contribuyó a alcanzar uno de los objetivos,emanado del enfoque de género planteado inicialmenteen el proyecto general de la investigación, el cual fue:Determinar la posible asociación entre el trabajodoméstico y los trastornos menstruales.

Al cruzar los datos del trabajo doméstico conotras variables que formaban parte del análisis,

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NOTAS Y REFLEXIONES

sorpresivamente encontramos una asociación entre ladismenorrea y horas de trabajo doméstico, dando comoresultado que a mayor número de horas de trabajodoméstico, mayor es el riesgo de padecer dismenorrea[OR=1,2 (IC 95% = 1.00-1.04) por cada hora detrabajo doméstico] Ante a este resultado nospreguntamos ¿Será el trabajo en el hogar una de lascausas de la dismenorrea?. No hay hasta ahora unaexplicación fisiológica que los relacione, pero no dejade tener importancia la aparición de tal hallazgoepidemiológico, al punto de llegar a asumir las horasde trabajo doméstico como una covariable significativaa incluir en el modelo final explicativo de regresiónlogística del estudio, porque estuvo siempre presenteen los análisis univariados de cada uno de los factoresde riesgo; siendo el único trabajo de investigación hastala actualidad, que reporta esta asociación (Borges etal., 2002a)

7. El redoble laboral ¿Una realidad de trabajo ennuestro país?

Como lo señalamos anteriormente, durante eldesarrollo de los talleres de información surgió comouna condición particular de trabajo del personal deenfermería, el redoble laboral. En consecuencia,creímos necesario introducir en el cuestionariopreguntas referentes a esta condición. Para ellocontemplamos en una primera parte del instrumento,preguntas referentes a la historia y la exposición a losfactores de riesgo laborales del primer centrohospitalario, y una segunda parte que repetía laspreguntas pero con respecto al segundo centro detrabajo. Posteriormente, a partir de la información detodas estas variables sobre actividades y operaciones,así como los indicadores de percepción de intensidadde ritmo de trabajo, construimos variables derivadasque dieron cuenta de la carga total de exposición a losdiferentes riesgo de trabajo explorados; ya queconsideramos que de alguna manera era necesariomostrar esta complejidad laboral, puesto que siúnicamente dábamos a conocer la exposición de lastrabajadoras en un solo centro de trabajo, no estaríamosreflejando su exposición laboral total.

Efectivamente, en el ejercicio de nuestro campode salud ocupacional, el hecho de que el redoble laboralse presente como una situación de trabajo cada vezmás frecuente en diferentes grupos de trabajadores(as),introduce varios problemas, por un lado ¿Cuál es lamejor manera, metodológicamente hablando, de explicaresta situación? ¿Cómo considerar el efecto de los

riesgos en la salud, en el caso de los(as)trabajadores(as) que se redoblan? ¿Acaso los riesgosactúan de manera sumatoria, sinérgica o exponencial?Por otro lado, ¿A quién responsabilizar de la salud enel trabajo cuando existe más de un empleador? Por elmomento, no tenemos las respuestas definitivas a estasinterrogantes, no obstante pensamos que nuestraprimera responsabilidad como investigadores es mostraresta complicada realidad laboral y su potencial impactoen la salud de los(as) trabajadores(as). Hasta hoy, noconocemos otras investigaciones en el campo de lasalud ocupacional que den cuenta de este fenómenodel redoble laboral.

Conclusión

Estas reflexiones a partir de las vivencias denuestra investigación, nos enfrenta a una complejarealidad nada fácil de abordar bajo los principiosmetodológicos de la investigación científica dentro elmarco rígido del positivismo.

De manera empírica, sabemos que estasdificultades no son exclusivas del campo de la saludocupacional sino que son extensivas a otras áreas dela investigación, tanto en las ciencias fácticas, comoen las ciencias sociales. De igual manera sabemos, quecon ciertos matices, son problemas inherentes a larealidad latinoamericana. Asimismo, cuando citamosejemplos concernientes a investigaciones provenientesde países industrializados de Norteamérica y Europa,no queremos de ningún modo generalizar o afirmar estospaíses no se tropiezan con las mismas u otrasdificultades, ya que la investigación en salud ocupacionales un terreno de complejas confrontaciones ideológicasy de intereses, que intervienen en la dinámica deavances y retrocesos de la investigación que procuragenerar conocimiento para el mejoramiento y/otransformación de las condiciones de trabajo parahombres y mujeres.

En Venezuela, el científico(a) que tome ladecisión de llevar a cabo cualquier tipo de investigacióncon el nivel de rigurosidad que el mismo amerite, tienela necesidad de planificar las diferentes fases delproyecto, así como los recursos necesarios para suejecución y el cronograma de trabajo, de maneraflexible y creativa, a fin de poder lograr sus objetivoscon éxito en el marco de un contexto desorganizadocomo el de nuestro país. La flexibilidad y creatividadson herramientas que se deben tener presentes paraevitar las dificultades en el manejo de las estrategias

Dificultades y logros en la investigación de los efectos del trabajo sobre los trastornos del ciclo menstrualen el personal de enfermería de dos hospitales de la ciudad de Maracay, Venezuela. / Aismara Borges

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de investigación, y llegar incluso a planificar losinconvenientes potenciales, en el abordaje de lapoblación y muestra, en la búsqueda de la informaciónconfiable, etc.

En una sociedad que no da prioridad a lainvestigación científica, entre otras razones por poseeruna cultura de la inmediatez para dar respuesta a lasnecesidades básicas de alimentación, vivienda ytrabajo; los científicos conscientes de la importanciade investigar para conocer la realidad y transformarla,debemos asumir un liderazgo con iniciativas que tiendana convocar el apoyo de la sociedad civil y -en nuestrocaso particular, a trabajadores y empleadores- así comoa los entes gubernamentales y privados, a fin deimpulsar cambios a corto y mediano plazo, como laautomatización de registros más confiables de los datosde la población, creación de centros de documentaciónacadémica y científica, dotación de los mismos conbibliografía actualizada, mayor apoyo financiero y sudistribución justa a los diferentes centros deinvestigación del país, y un marco legal que proteja y

fomente la investigación, entro otros. Asimismo,impulsar cambios a largo plazo que generen laconvicción dentro de la población general de quepriorizar el conocimiento y la educación son motoresdel desarrollo de un país.

Agradecimiento

A la Asociación de Universidades y ColegiosCanadienses (AUCC) y a la Agencia de CooperaciónInternacional (ACDI) del Canadá, quienes financiaronla formación doctoral y la investigación a partir de lacual se hacen estas notas y reflexiones, en el marcodel Proyecto de Cooperación Internacional “Mujer,Trabajo y Salud” entre el Centro de Estudios de lasInteracciones entre la salud y el Medio ambiente(CINBIOSE) de la universidad de Québec en Montrealy el Centro de estudios en Salud de los Trabajadores(CEST) de la Universidad de Carabobo, así como a laFundación para el Desarrollo de la ciencia y Tecnología(FUNDACITE) – Aragua por el co-financiamientootorgado.

Bernard B., Sauter S., Petersen M., Fine L., Hales T.(1993). NIOSH Health hazards evaluation reports: LosAngeles Times. Atlanta, GA: Centers for DiseaseControls, National Institute of Occupational Safetyand Health. HETA 90-013-2277

Borges, A. (2002)a. Trastornos menstruales ycondiciones de trabajo en Personal de Enfermeríahospitalario en Venezuela. Artículo científico Nº 1.Parte de la Tesis para optar al título de Doctor enCiencias del Medio Ambiente, de la Universidad deQuébec a Montréal. Canadá.

Borges, A. (2002)b. Lumbalgia con y sin lamenstruación. Artículo científico Nº 2. Parte de la Tesispara optar al título de Doctor en Ciencias del MedioAmbiente, de la Universidad de Québec a Montréal.Canadá.

Bryant, H. (1992). L’exposition professionnelle et lafonction de reproduction. Table ronde de recherche

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Referencias bibliográficas

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NOTAS Y REFLEXIONES

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75Percepción del riesgo de cáncer de piel por exposición solar. A propósito de una experiencia en Cuba /Roberto Rodríguez, Antonio Granda, Joaquín Hechavarría, María Azze.

NOTAS Y REFLEXIONES

Percepción del riesgo de cáncer de pielpor exposición solar. A propósitode una experiencia en Cuba

Roberto Rodríguez García1, Antonio Granda Ibarra 2, Joaquín Hechavarría Miyares3, Maríade los A. Azze Pavón4

* Tema presentado en la Convención Internacional de Medio Ambiente, celebrado en la Cuidad de la Habana, 2001.1.Especialista en Dermatología. Master en Salud Ocupacional. Profesor e Investigador. INSAT.2.Doctor en Ciencias Médicas. Especialista en Medicina del Trabajo. Profesor e Investigador. Escuela Nacional de Salud Pública.3.Especialista en Neumología. Master en Salud Ocupacional. Profesor e Investigador. INSAT.4.Especialista en Radiología. Jefe de Servicio de Radiología. Jefe de Departamento de Medios Diagnósticos. Profesor. Hospital Universitario Enrique Cabrera.Instituto Nacional de Salud de los Trabajadores - INSAT. Calzada de Bejucal, Km. 7½, Arroyo Naranjo, Ciudad Habana, Cuba.Teléfonos: 537-578134, Fax: 537-578341, e-mail: [email protected]

Introducción

La piel está en una continua e intensa interaccióncon influencias ambientales como ningún otro órgano,por ello puede ser considerada como un órgano señalcuando dichas influencias son nocivas, lo que manifiestala necesidad de incrementar los esfuerzos investigativosnecesarios en este campo.

Constituye una preocupación general el deteriorodel medio ambiente como resultado de la propiaactividad humana dado el intenso uso de sustanciasquímicas que conducen a cambios climáticos y ladisminución de la capa de ozono como consecuencia delos contaminantes atmosféricos cuyo resultado es elincremento de la radiación ultravioleta solar efectivaque llega a la superficie terrestre, y el calentamientode la tierra, la desertización y deforestación. El Ozonode las capas externas de la atmósfera actúa como unaeficaz pantalla protectora, la atmósfera absorbemuchas de las radiaciones perjudiciales de la luzultravioleta de longitud de onda corta. Otros factoresgeográficos también influyen en la intensidad de lairradiación, como la latitud geográfica, altitud sobre elnivel del mar, época del año, etc.

La radiación solar puede actuar como uniniciador, un promotor, un cocarcinógeno y un agenteinmunosupresor. Existen criterios recientes que la luzultravioleta puede ser capaz de activar virosis y tieneefectos inmunológicos que pudieran exacerbarenfermedades infecciosas y es preocupante laposibilidad de que la exposición ultravioleta pudieraactivar el virus de inmunodeficiencia humana queacelere el inicio del SIDA. Así se plantea la relación deposible exacerbación de estas enfermedades asociadas

a una exposición incrementada de luz ultravioleta conla depleción del ozono estratosférico.

Consideramos, pues, la causa ambiental másimportante la exposición de la población susceptible ala luz solar, aunque otras sustancias químicas como elarsénico y derivados del carbón y petróleo constituyenun peligro químico industrial, así como también laexposición a radiaciones ionizantes (Rayos X).

Hablamos de población susceptible en lacarcinogénesis por la luz solar, haciendo referencia afenómenos de la individualidad como la relativainmunidad que se observa en la población negra en todoslos países y la mayor susceptibilidad de la piel blancaen aquellos individuos con iris azul o gris, pelirrojos ypecosos, sin capacidad de broncearse, que desarrollansiempre quemaduras por exposición solar.

La frecuencia de mutaciones genéticas en p 53,un gen supresor de tumor, es una de las lesionesgenéticas más comunes en el cáncer de piel y los datosde investigaciones realizadas al respecto sugieren quela exposición crónica a la luz solar es responsable de laacumulación de estas mutaciones. En el cáncer de pieltipo melanoma, tumor epidermógeno de peor pronósticose plantea la predisposición genética ligada alcromosoma 9. El gen CDKN2 es un candidato que atraea la susceptibilidad de este tumor.

Múltiples factores de riesgo se asocian a laetiopatogénesis del cáncer de piel, como la edad, el sexo,fenotipo de la piel, exposición solar, educación, estilode vida y ocupación, este último de nuestro mayorinterés al dedicarnos a la salud ocupacional. Si bien laexposición solar y la ocupación están íntimamente

Salud de los Trabajadores / Volumen 11 Nº 1 / Enero 200376

NOTAS Y REFLEXIONES

relacionadas por ser el principal carcinógeno en elambiente laboral, no podemos obviar, por una parte, laexposición recreacional u ociosa y, por otra, laexposición a carcinógenos químicos industriales, quemerecen ser individualizados.

En estudios realizados sobre cáncer cutáneo nomelanoma que incluyen el carcinoma basal y elcarcinoma espinocelular, se observa un riesgoincrementado en hombres (2:1), edades avanzadas,complexión clara con tendencia fácil a quemaduras,exposición solar ocupacional en carcinomas tardíos, asícomo exposición solar recreacional en la infancia enlos carcinomas en edades tempranas, historia dequemaduras a repetición, daño solar previo no malignoy exposición a radiaciones ionizantes en tratamientosprevios durante la infancia por tiña capitis oagrandamiento del timo.

Existen evidencias considerables del efectodesfavorable de múltiples ocupaciones para la saludque requieren de nuestro seguimiento y de estudioscuidadosamente planificados que nos permitan tomaracciones preventivas primarias en función de garantizarla calidad de vida de nuestros trabajadores comoestrategia de nuestra política de salud.

La elevada frecuencia del cáncer de piel en laactualidad representa un grave problema de salud quese incrementa con mayor riesgo en zonas con elevadonúmero de horas de sol como ocurre, en lo particular,en nuestro país y con una tendencia crecientejustificada, en parte, por el deterioro medio ambientalresultado de la propia actividad del hombre, todo lo quemotiva nuestro interés en abordar el tema con el objetivode valorar la percepción del riesgo cutáneo por dichaexposición en una población trabajadora de la industriabásica atendida en la casa matriz de los serviciosmédicos de la industria básica mediante el conocimientosobre conductas y actitudes frente a la exposición solary la necesidad o no de futuras acciones preventivas através de programas de intervención para el uso deprotectores solares.

Experiencia cubana y perspectivas futuras

El cáncer de piel es la forma de cáncer másfrecuente en el hombre y de particular interés ennuestro país por el alto riesgo de desarrollarlo dado suubicación geográfica. Su prevención parte delconocimiento sobre conducta y actitudes frente a la

exposición solar por lo que se decidió valorar lapercepción del riesgo cutáneo por dicha exposiciónmediante el estudio de variables dependientes delfenotipo de piel, exposición solar, educación y estilo devida, en una población trabajadora como parte de unainvestigación nacional.

Se realizó un estudio descriptivo a una serie de120 trabajadores atendidos en la consulta deDermatología del Profilactorio Nacional Obrero delMinisterio de la Industria Básica durante el primertrimestre del año 2001. El universo estuvo conformadopor la totalidad de trabajadores enviados a dichaconsulta para la valoración de alteracionesdermatológicas encontradas en la consulta inicial declasificación.

Se procedió a la confección de un modelo deencuesta para la recogida de la información que incluyócaracterísticas sociodemográficas como la edad, sexoy nivel de escolaridad, otras variables dependientes dela individualidad como color y tipo de piel según suhabilidad para el bronceamiento así como antecedentespersonales y familiares de cáncer de piel y número dequemaduras solares; aquellas variables relacionadas conel tipo de exposición solar, durante la infancia,adolescencia, ocupación y recreación, clasificándoseen ligera, moderada o severa en correspondencia a síse trataba principalmente bajo techo, mitad bajo techoy aire libre o principalmente aire libre, además deaspectos relacionados con la conducta y actitud deltrabajador frente a dicha exposición según suconocimiento de beneficio o daño que produce el solpara la salud y sus hábitos relacionados con el uso demedios de protección solar.

La historia personal y/o familiar de cáncer depiel fue baja, lo que atribuimos a las característicasdemográficas de la serie estudiada, donde a pesar deprevalecer la raza blanca, se observa una buenahabilidad para desarrollar el bronceamiento de la pielcomo ocurre en personas blancas de pelos y ojosnegros, menos susceptibles al daño que produce estaexposición, además de estar posiblemente influenciadopor el alto nivel educacional predominante como factorcontribuyente en el estilo de vida de este grupo detrabajadores.

Se destaca la importancia de la mayor intensidadde la exposición durante la infancia y la adolescencia,así como durante el tiempo de ocio, lo cual pone de

77Percepción del riesgo de cáncer de piel por exposición solar. A propósito de una experiencia en Cuba /Roberto Rodríguez, Antonio Granda, Joaquín Hechavarría, María Azze.

NOTAS Y REFLEXIONES

manifiesto los patrones de estilo de vida de nuestrapoblación, aún tratándose de un grupo de trabajadorescon alto nivel educacional como factor atenuante porposeer un mejor conocimiento de las consecuenciasde esta exposición, y que se pone de manifiesto en losresultados observados, que reflejan una baja incidenciade quemaduras solares previas, así como la mayorincidencia en la adecuada interpretación de los efectosbeneficiosos y dañinos para la salud que producen laexposición solar fundamentalmente basados en lanecesidad de protección en las horas comprendidasentre las diez de la mañana y las dos de la tarde. Sinembargo, a pesar del adecuado nivel de información,es pobre la utilización de los recursos disponibles parauna real protección, posiblemente relacionado connuestro clima tropical que rechaza la utilización deropas protectoras de manga larga y donde no existe elhábito de usar cremas protectoras como pantallassolares eficaces. El poco uso de la sombrilla debe irasociado al hecho de la prevalencia del sexo masculino,sin dejar de considerar por esto que es uno de losmedios más usados, en general, en nuestra población,después del uso de gafas para el sol.

Estudios epidemiológicos realizados en Canadáy Australia destacan la incidencia del cáncer de pielno melanoma directamente relacionado con laexposición solar acumulativa en la vida, sin embargo,la relación con el cáncer de piel tipo melanoma seplantea más por exposición intermitente intensa comoserían los baños de sol en vacaciones, que por unaexposición crónica durante todo el año, igualmente sedestaca la importancia de la protección solar durantela infancia, siendo más frecuente la incidencia decáncer en nativos que en aquellos que emigran despuésde los quince años de edad.

Por otra parte, se considera el cáncer de pieltipo melanoma menos común en trabajadores expuestosal sol, adjudicado a un efecto protector delbronceamiento producido por la exposición solar

crónica y observándose más comúnmente en las clasessociales más altas y educadas.

Otros estudios consideran a esta población demayor riesgo y plantean el incremento del nivel deprotección solar mediante programas de intervenciónque mejoren el pronóstico de los carcinomas existentesasí como disminuyan la incidencia de nuevos tumores.

En sentido general, se encontró un adecuado nivelde información sobre los efectos beneficiosos y dañinospara la salud como consecuencia de la exposición alsol; sin embargo, la utilización de los recursos disponiblespara la protección solar es pobre y no existe una actitudconsecuente con la percepción de riesgo que tienenestos trabajadores, por lo que se sugiere realizar unaintervención en estos lugares de trabajo dirigida aincrementar el uso de protectores solares.

Existen evidencias del alto riesgo de desarrollarcáncer de piel por exposición al sol, las defuncionesque ocasionan cada año y el costo importante para lacomunidad por esta razón, todo lo que justifica lanecesidad de desarrollar acciones preventivas quelimiten la exposición a la luz ultravioleta.

El Instituto Nacional de Salud de losTrabajadores, INSAT, constituido en diciembre de 1977,es el centro nacional de referencia de Salud de losTrabajadores y tiene como objetivo principal garantizarla atención médica integral al trabajador cubano asícomo establecer y perfeccionar las actividades de lavigilancia epidemiológica nacional en Salud de losTrabajadores. Precisamente, contamos en estosmomentos con una línea de investigación que presentacomo salida principal instaurar un Sistema de Vigilanciaen Salud que nos permita prevenir las diferentesafecciones derivadas de la exposición solar en nuestrapoblación trabajadora. Es importante que cada paísdiseñe sus propias estrategias, que les faciliten enfrentarlas consecuencias negativas de esta exposición.