el mariscal george duby

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Guillermo tiene ya treinta años y esta en una posición bastante envidiable. Sin embargo hay un detalle importante, aun es "bachiller",esto es, no esta casado. Según Duby, esto hacía que Guillermo se centrara en sus obligaciones como caballero las cuales eran de tres tipos. Lo primero de todo es la fidelidad, no faltar a la palabra dada. El problema surje cuando el caballero se ve dentro de varios grupos a los que debe lealtad ¿A quién obedece? Tendrá que obedecer al mas próximo, a su señor directo. Si sirviendo a su señor faltaba a otros, realmente no se consideraba falta. En segundo lugar era el de luchar, pero no de cualquier modo sino de acuerdo a unas normas. Por ejemplo, no luchar junto a villanos, ni utilizar artimañas ni trucos poco honorables. "El valiente no busca otra protección que la detreza de su caballo de batalla, la calidad de su armadura y la devocion de los camaradas de su rango cuya amistad le flanquea." Esto llevará a actuar a Guillermo de forma muy temeraria, conducta por la cual sera reprendido en mas de una ocasión. En último lugar esta la liberalidad. El darlo todo. Repartir las riquezas. El conservar el dinero, atesorarlo era visto con asco por los caballeros, pues era cosa de villanos y usureros. Sin embargo, aquí Duby nos habla de un choque entre el ideal caballeresco y la cruda realidad. Estos preceptos fueron elaborados en un tiempo en el que la riqueza en forma de dinero escaseaba. Sin embargo hacia el siglo XII se había producido un crecimiento importante de la economía monetaria, introduciéndose en las formas de vida de las gentes. Los caballeros tocan las monedas con repugnancia, y sin embargo se ven cada vez mas obligados a utilizarlo, porque todo cuesta dinero, especialmente el equipamiento. Luego Duby nos habla de la posibilidad de una cuarta virtud, en relación a la temeridad: el ganarse el amor de las damas. No obstante luego nos aclara que este punto es dudoso, pues la figura femenina tiene escasa presencia en el relato del que se vale. Es porque este es un mundo de hombres. La mujer, en sus escasas apariciones en el relato de Juan aparece mas como moneda de cambio, como objeto, no como persona. Naturalmente

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Guillermo tiene ya treinta años y esta en una posición bastante envidiable. Sin embargo hay un detalle importante, aun es "bachiller",esto es, no esta casado. Según Duby, esto hacía que Guillermo se centrara en sus obligaciones como caballero las cuales eran de tres tipos.

Lo primero de todo es la fidelidad, no faltar a la palabra dada. El problema surje cuando el caballero se ve dentro de varios grupos a los que debe lealtad ¿A quién obedece? Tendrá que obedecer al mas próximo, a su señor directo. Si sirviendo a su señor faltaba a otros, realmente no se consideraba falta.

En segundo lugar era el de luchar, pero no de cualquier modo sino de acuerdo a unas normas. Por ejemplo, no luchar junto a villanos, ni utilizar artimañas ni trucos poco honorables. "El valiente no busca otra protección que la detreza de su caballo de batalla, la calidad de su armadura y la devocion de los camaradas de su rango cuya amistad le flanquea." Esto llevará a actuar a Guillermo de forma muy temeraria, conducta por la cual sera reprendido en mas de una ocasión.

En último lugar esta la liberalidad. El darlo todo. Repartir las riquezas. El conservar el dinero, atesorarlo era visto con asco por los caballeros, pues era cosa de villanos y usureros. Sin embargo, aquí Duby nos habla de un choque entre el ideal caballeresco y la cruda realidad. Estos preceptos fueron elaborados en un tiempo en el que la riqueza en forma de dinero escaseaba. Sin embargo hacia el siglo XII se había producido un crecimiento importante de la economía monetaria, introduciéndose en las formas de vida de las gentes. Los caballeros tocan las monedas con repugnancia, y sin embargo se ven cada vez mas obligados a utilizarlo, porque todo cuesta dinero, especialmente el equipamiento.

Luego Duby nos habla de la posibilidad de una cuarta virtud, en relación a la temeridad: el ganarse el amor de las damas. No obstante luego nos aclara que este punto es dudoso, pues la figura femenina tiene escasa presencia en el relato del que se vale. Es porque este es un mundo de hombres. La mujer, en sus escasas apariciones en el relato de Juan aparece mas como moneda de cambio, como objeto, no como persona. Naturalmente las mujeres de la nobleza. Eran entregadas por los señores a otros como una forma de "pago", de "recompensa". Mediante el matrimonio con una mujer de alta cuna se asciende rápidamente en la escala jerárquica. Además tambié servían como moneda de cambio en relaciones diplomáticas. Casando tal hombre con tal mujer el interesado se procuraba el afecto del tal hombre, limando las posibles asperezas y odios del pasado. Del mismo modo tampoco era raro que se deshicieran de estas mujeres con la misma facilidad. Si dejan de ser útiles son devueltas como un objeto de que ya no se obtienen beneficios.

Según parece en el tiempo en el que fue escrita la canción de la que se vale Duby los torneos se encontraban ya en cierta decandencia. No obstante Duby tiene ciertas reservas sobre esta afirmación. Se sustenta en que Juan en su canción les dedica bastante atención además de

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situarlos con una precisión excelente. Incluso Duby llega a afirmar que es el mejor documento que conoce acerca de los torneos. Tal y como nos cuenta la canción de Juan, el torneo era anunciado quince días antes. La noticia se extendía a una velocidad pasmosa. Duby presupone la presencia de heraldos que cumplían la funcion informativa, pues eran capaces de reconocer a tal o cual caballero según su heráldica. A estos torneos solían acudir los ya nombrados "bachilleres" y caballeros errabundos, aunque no era común que vinieran solos. Lo normal es que se formaran los grupos antes. Las grandes casas acudían al completo bajo su estandarte dirigidas por sus respectivos jefes o lugartenientes. Estos torneos se celebraban sobre terrenos rurales en los que se marcaban las llamadas "lizas", areas donde los participantes se podían retirar momentaneamente para descansar antes de volver al combate. Estaba prohibido vulnerar estas zonas neutrales y las faltas de este tipo se castigaban con cierta dureza. No siempre se hacían estos juegos sobre terreno abierto. El realizarlo en zonas con accidentes naturales o no, añadía tensión al torneo, abriendo nuevas posibilidades. Una vez comenzaba el juego, el objetivo era sencillo: derrotar al enemigo, herirlo, hacer ques se batiera en retirada. Pero además, y como un combate real, se luchaba para ganar un botín, como armas y caballos, y hacer prisioneros. Además servía como sístema de criba, y seleccionar a los mejores "depredadores". Pero eso se dejaba a los bachilleres, los jóvenes. No estaba bien visto este comportamiento por parte de los grandes señores, casados y mayores. Estos se preocupaban simplemente por no ser echos prisioneros. El combate acababa cuando caía la noche o cuando uno de los grupos había sido prácticamente vencido. Pero la cosa no terminaba aquí. Aun hay que curar a los heridos, retirar a los muertos (la muerte en estos juegos no era algo extraño) y preguntar por los caídos y los prisioneros. Además los heraldos se encargaban de divulgar las clasificiaciones y de entregar los premios. Luego se llevaba a cabo el reparto del botín, de las ganancias obtenidas en combate. Y se hacía de una forma similar a como se hacía en los combates reales: Los bienes obtenidos ivan a manos de los jefes, los cuales los repartían. Finalmente se concluía el encuentro con una fiesta en la que los participantes dilapidaban rapidamente las ganancias obtenidas, al estar poco acostumbrados a poseer dinero.

Hay que señalar que estos torneos estaban mal vistos por la Iglesia, que los condenaba, porque alejaba a los hombres de bien de sus deberes como guerreros de Dios.

Con cuarenta años, Guillermo se encuentra en la cúspide de su carrera deportiva. Es aquí cuando le sobreviene el desastre. Llevados por la envidia y el odio, los compañeros de Guillermo insinuna que este se acuesta con la esposa de su señor, Enrique el Joven, en 1182. El señor no da crédito a lo que oye y expulsa de su presencia a Guillermo. Ahora bien, ¿Qué hay de cierto en dichas acusaciones? La canción de la que se vale Duby dice que es una completa calumnia, una invención fruto de la envidia. No obstante, Duby observa que posteriormente Guillermo parece casi orgulloso de tales habladurías, sin llegar a afirmarlas o desmentirlas,

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dejando flotar la duda. Al fin y al cabo, se aprovecha del "prestigio" que da el haber sido el amante de una reina. Exiliado entre los suyos, Guillermo vuelve a ser un caballero errante. No obstante, nos dice Duby, no le faltan posibilidades. En efecto, su fama es grande y muchos quisieran tenerlo en sus grupos para futuros torneos. Pero Guillermo es sagaz, y sabe que los mejores beneficios que puede obtener son los que le puede dar el rey. Por tanto, rechaza los ofrecimientos de otros señores y parte en peregrinaje a Colonia, supuestamente para encontrar el perdón. Realmente Enrique el Joven pronto se dio cuenta que necesitaba a Guillermo a su lado, y mas aun en ese momento, pues había vuelto a declararle la guerra a su padre, Enrique II, , por lo que lo perdona. Pero los problemas no acaban aquí. Nada mas haber sido perdonado, Enrique el Joven muere por una enfermedad. La muerte del jefe solía marcar la desintegración de los grupos y bandas. Y lo peor de todo, moría en medio de una guerra contra su padre Enrique el Viejo, guerra que Guillermo apoyaba, dejando a Guillermo frente a un futuro incierto. Sin embargo, Enrique II liberó a Guillermo de las deudas que había dejado su hijo, sin mas. Pero no todo estaba perdido. Guillermo era cruzado, y su señor Enrique el Joven le había encomendado en su lecho de muerte, el llevar su cruz al Santo Sepulcro, en Jerusalén. Para Duby esto le viene bastante bien al mariscal, porque así podrá alejarse de la escena política un tiempo mientras se calman las cosas.

Pocos datos arroja el documento acerca del viaje de Guillermo a Jerusalén, lo cual es sin duda desconcertante. Duby piensa que quizas sea por respeto del precepto templario que prohibía toda vana jactancia, ya que se convirtió en miembro de dicha orden. Lo único que se nos cuenta es que estuvo dos años en Siria, donde se ganó la amistad de muchos, y de que ganó el amor del rey Guy de Lusignan, el mismo que perdería Jerusalen en 1187 gracias a Saladino. Ese mismo año Guillermo vuelve a su tierra natal, entrando al servicio del anciano monarca Enrique II como uno de sus "familiares". Duby nos señala que no es tan buena posición como nos puede parecer a simple vista, y es que el viejo rey estaba ya próximo a morir, a la vez que su hijo Ricardo combatía con él. Pero no es solo eso. Sucede que Guillermo aun es bachiller, no está casado, y ya casi tiene cincuenta años. Pero el estar soltero no es porque le hayan faltado oportunidades. Las ha tenido, pero las ha rechazado, porque se reservaba para lo que pudiera darle el rey. Llegados a este punto solicitó al rey Enrique que le casará, a lo cual este accedió entregándole a Helvis de Lancaster, lo que le dotaría además del feudo del padre de esta, antiguo senescal del rey. Pero dos años mas tarde Guillermo solicitó algo mejor, en base a los grandes éxitos que había obtenido en el Maine, por lo que le fue dada Isabel de Striguil, la cual le dotaría nada menos que de setenta y cinco feudos. Pero para desgracia de Guillermo Enrique II moría en verano de 1189, antes de poder casarse. Esto representaba un problema gravísimo para Guillermo, el cual estaba enemistado con el heredero y nuevo rey Ricardo. Pero para sorpresa de todos, Ricardo perdona a Guillermo, y no solo eso, sino que además permite que se case con la mujer que le habia prometido su padre. La fortuna sonreía a Guillermo. Por fin conseguía lo que buscaba, un lugar donde establecerse.

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Los terrenos que obtuvo Guillermo gracias a su matrimonio fueron, cuanto menos, significativos: el castillo de Striguil, la fortaleza de Goodrich, el castillo de Orbec y la mitad de Longueville, ademas de importantes territorios en Irlanda. Sin embargo las cosas no son tan sencillas, pues el rey va a conservar gran parte de la herencia. Una práctica típica. El monarca, aunque ha accedido a entregar a Isabel, retendrá los beneficios de las tierras. Guillermo, teniendo en cuenta la magnificencia del regalo que le ha sido concedido, no dice nada al respecto.

A partir de entonces su esposa se convertirá en su mayor tesoro. La llevará a todas partes y la mantendra bien protegida, pues es gracias a ella que posee lo que posee. En este punto Duby hace una reflexión acerca del poder en este período. Porque en aquel entonces la importancia de las personas no se medía en base a sus rentas y dineros, sino en base al poder que poseían. Es cierto que antes de casarse Guillermo ya tenía poder, pero de un tipo distinto. Poseía muchas amistades y apoyos, personas dispuestas a ayudarle hasta el final. Por lo que para Duby no es tan extraño que Ricardo perdonara a Guillermo. Es que realmente no le quedaba otra, la figura del mariscal se le presentaba demasiado fuerte como para intentar derribarla. Así que lo agasaja, y al darle a Isabel, le hace ascender en la escala jerárquica, pasando a tener un poder permanente. Tal y como afirma Duby, el hombre aquí vale mucho mas que la mujer, pero un hombre sin casar no tienen nada. Un bachiller solo posee derechos de herencia, lo cual es poca cosa, pues casi nunca llegaban a ejercer tal poder. A lo único a lo que aspiraban era a ser mantenidos por el lider del linaje al cual pertenecieran. Estan en lo mas bajo. No tienen poder. Así es como empezó Guillermo, y se ha acabado convirtiendo en el señor que otrora sirviera, como Patricio de Salisbury.

Además gracias al texto, Duby nos muestra como funcionaba el poder en la sociedad feudal. Todo partía de la amistad, en la que cada una de las capas sociales eran servidas por las de abajo y a su vez servían a las que tenían por encima. Estas jerarquías venían determinadas de muchas maneras: por edad, por parentesco, por relaciones de vasallaje, por relaciones políticas, etc... Esta complejidad derivaba en situaciones contradictorias para las personas, al deber lealtad a unos y otros. Todo este sistema se sustenta sobre dos pilares fundamentales: la paz entre los iguales y la sumisión a los que estaban por encima a la par que la benevolencia para los que estaban por abajo. De acuerdo con contextualizar al lector de conceptos claves para el entendimiento del texto; empezare por definir que es un mariscal y añado que las profesiones o los deberes de la época eran hereditarios; por consiguiente Guillermo el mariscal viene de un padre mariscal. Los mariscales vivían como domésticos; alimentados, vestidos por la corte y esperaban de esta su generosidad; se encargaban a todo lo que atañe a los caballos, eran subordinados por oficiales mayores como el condestable, encargado de las cuadras señoriales. También se hace referencia en la corte del rey de Inglaterra, que sus deberes se extendían a controlar los servicios de armas, el uso de los dineros que se empleaban

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en la guerra y mantener el orden en el entorno del soberano. Duby nos introduce en el mundo de la caballería, sus reglas, costumbres internas, en el linaje noble, el amor cortés, el matrimonio, en la intriga política y los intereses señoriales de Inglaterra y Francia; empezando en tiempos de Enrique II, pasando por Ricardo Corazón de León y culminando con Juan sin Tierra. El autor nos acerca a las costumbres de la época a través de un personaje muy notable que sin tener título señorial alguno, alcanzó a ser conde mariscal (mariscal se deriva de su segundo nombre heredado de la posición de su padre); Guillermo el mariscal, hermano menor de una familia cuyo padre era caballero; sin un futuro prometedor, pues nunca esperó heredar; el pequeño es introducido a muy temprana edad (Duby precisa entre los 8 y 10 años) en el mundo de las cabalgadas, de las cuadras, de los almacenes de armas, de la caza, las emboscadas y los retozos viriles de la corte inglés. El autor lo denomina la banda de los caballeros donde los recién llegados tenían un carácter de subyugados; es decir, que el pequeño Guillermo debía hacerse a sí mismo y dependía tanto de su agilidad como de su destreza para obtener honor y prestigio derivados de su valor. De este modo Guillermo de Tancarville lo ciñe solemnemente con la espada en la primavera de 1167, emblema del derecho, del deber de combatir y es a partir de aquí cuando es considerado adulto (capital), obteniendo un poder sobre sí mismo. El principal interés del señor de Tancarville, es tomar un rebaño de futuros guerreros que le pertenecerán para siempre por los lasos de la amistad; multiplicando su propia prole mucho más de lo que habría podido engendrar.En general la sociedad de la época, el autor la denomina como grumosa: irresistiblemente, los individuos eran forzados a aglutinarse, agregándose a grupos y era así como cada uno avanzaba en la vida. De este modo Guillermo el mariscal avanza ya como caballero torneando y ganando prestigio bajo preceptos morales y éticos cómo: procurar no dar muerte a los caballeros y se prohibía en todo caso atacar por la espalda. Por otro lado se condenaba al vasallo que se levantara contra su señor. Es el caso; cuando Guillermo reaccionó contra Patricio tras haberse levantado contra su tío. Esta hazaña tuvo una rápida propagación donde se hace alarde de su gran coraje; al ir a su auxilio sin armadura ni yelmo; consiguió enfrentarse a sesenta y ocho hombre, hasta que un rival lo ataco por la espalda y consiguió atravesar su pierna, dejándolo herido; fue raptado y secuestrado. Este hombre al cual defendió era el lugarteniente del rey, lo que propagó su fama en la corte y al poco tiempo pagaron su rescate. Se afirma que este acto fue decisivo en la carrera de caballero para Guillermo, pues este acontecimiento fortuito hizo que lo transfirieran a la corte del soberano y cambiaría su futuro para siempre. Parte de la ética caballeresca se enmarca en tres grandes preceptos: La Fidelidad, La proeza y la liberalidad. La fidelidad se refiere a cumplir la palabra, al no traicionar la fe jurada. La proeza hace alarde al valor de combatir e intentar vencer conforme a ciertas leyes (un caballero no lucha con villanos). Por último la liberalidad se refiere a que un caballero debe ser amplio con su dinero al no restringirse invitar y gastar sus arcas; se creía que de la generosidad se extraía la fuerza. Una vez instaurado en la corte; Guillermo fue nombrado para guardar y enseñar al joven Enrique heredero al trono, de este modo toma una especie de puesto de alcalde de palacio, donde vela por el señor todavía adolecente. Sin embargo a pesar de su gran posición este no poseía nada; ni un surco de tierra, aparte de su caballería, la fama y el honor. Aunque el deporte del torneo era lucrativo, vemos que el acto de gastar cuanto se pueda, es visto con

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honor y enciende consigo el deseo entre las mujeres, así como evita vergüenza que es sinónimo de aumentar el honor. Tener dinero era visto con malos ojos, ya que no tenía sentido; pues ponerlo a rentar intereses representaba un acto reprochable de usura, así como retenerlo era amarlo, por lo tanto pecado (parte del precepto bíblico: “raíz de todos los males es el amor al dinero”). Dada la rápida propagación de los torneos, donde este representaba el eje central de la caballería; la iglesia se pronunció y declara que los torneo son una trampa del diablo; en cuanto desvía a los caballeros de los asuntos importantes y fundamentales como las cruzadas, ya que era más probable morir en un torneo que en la guerra. Sin embargo esta declaración no tiene mayor trascendencia, pues la mayor parte de duques, condes y monarcas eran los promotores; en consecuencia omitieron dicho pronunciamiento. Durante el siglo XII hubo una rápida propagación por toda Francia de torneos, donde cada uno de ellos era anunciado con quince días de anticipación y los registros indican que tal propagación en semejante distancia, supone un sistema perfeccionado de comunicaciones y la intervención de un numeroso cuerpo de informadores. Se puede afirmar que la función publicitaria estaba desempeñada por los llamados heraldos; profesionales de la identificación de los jugadores y de la propaganda. En consecuencia podemos afirmar que para la época era una gran industria, que movía toda clase de bienes y que atraía toda clase de comerciantes; así se constituyó como un deporte bien pago, mayor a la media de la época. El principal carácter del torneo era de festividad; dado que el botín obtenido era para despilfarrarlo en la fiesta de clausura del mismo; en cambio la guerra era para obtener un botín que sería guardado para beneficio de la compañía. Al cabo de los años Guillermo el mariscal nota el afán por acentuarse con una renta y asegurar su vejes y tras aventurarse en una cruzada; consiguió prestigio, honor y una pequeña renta; al obtener un pequeño feudo. Sin embargo esta renta era precaria y no llenaba sus expectativas. De este modo el mariscal ve como objetivo recibir una esposa que fuese una rica heredera y establecerse en su lecho, en su casa, en su señorío. Tal como era la costumbre de la época; donde el soberano estaba en el derecho de dar en matrimonio a las viudas y huérfanas de sus vasallos muertos y distribuirlas entre los solteros cercanos de acuerdo a los servicios prestados. Es así como consigue que el rey Enrique II le entregue como esposa a la doncella de Striguil, la cual representaba sesenta y cinco feudos y medio. Este es el giro que Guillermo el mariscal consigue en su vida tras la boda; al convertirse en señor y dueño de un patrimonio extraño. Así subió de golpe en la escala de dignidades; de simple caballero, se elevó al grado superior; la baronía real. Finalmente cuando Juan sin tierra casi moría, Guillermo recibe el máximo honor del rey, tras declarar que era el único indicado en cuidar su herencia; le otorgo la tutela del heredero y por añadidura la regencia del reino. Finalmente Guillermo muere lentamente en su mansión bajo los preceptos caballerescos de una muerte suntuosa, es decir que hay una serie de actos en secuencia donde el moribundo ve llegar la muerte y en esta medida empieza a despojarse de lo terrenal para pasar a lo celestial, presenciado por un gran número de espectadores que están atentos a cualquier postura, palabra o gesto. Guillermo antes de morir de forma organizada y responsable; casa a casi todas sus hijas (con rentas específicas, derivadas de los feudos), menos una a la que no había encontrado el esposo indicado (deber que debe ejercer su primogénito) y reparte su herencia bajo un testamento. Luego de su muerte, Guillermo el joven decide levantar un monumento en nombre de su

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padre, a través de una canción; la cual tiene como objetivo mantener presente al difunto a lo largo de la historia y es así, de esta fuente; donde hoy conocemos la proximidad de la cultura caballeresca y nos aproximamos a este gran personaje medieval que bajo preceptos sociales logro grandes proezas que pocos han alcanzado; como es la regencia del reino y el respeto de los monarcas.Considero que Duby logra aterrizar de manera excelente el personaje de la época, para describir aspectos sociales fundamentales y dar al lector una idea de la idiosincrasia del siglo XII.