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Paramilitarismo en Colombia: Representaciones sociales de víctimas del paramilitarismo, Municipio Ataco Tolima, frente a la justicia transicional expuesta en la ley 975 de 2005 (Estudio de Caso) Juan Sebastian Sanabria Mape En Colombia se han podido apreciar diferentes fenómenos como la conformación de grupos insurgentes: Ejército de Liberación Nacional (ELN), Fuerzas revolucionarias de Colombia (FARC), entre otros, hasta la posterior conformación de grupos contrainsurgentes como las AUC y su respectiva participación de la violencia en Colombia. El término de paramilitar hace referencia a ejércitos independientes que reciben apoyo de élites locales, regionales y fuerzas armadas (Arjona, 2005, pág. 26), no todas son conformadas por el estado, pero este las tolera ya que tienen un mismo enemigo y gozan de una autonomía organizacional (AUC). En Colombia los primeros indicios de grupos para- estatales se visibiliza en el año de 1994 - 1998 con el presidente Ernesto Samper quien estimula la conformación de las asociaciones comunitarias de vigilancia rural o CONVIVIR, de esta forma se regulariza el paramilitarismo con el decreto de ley 356 de 1994 en donde se estipulan las condiciones para el servicio de seguridad privada en zonas de combate en donde el orden público fuera precario, comienza así a vincularse nuevamente la población civil en la protección de sus propiedades, pero esto tiende a cambiar cuando se logra observar que se ha conformado un ejército paramilitar como tal. Si bien en el gobierno Samper se regulariza el paramilitarismo, es necesario tener en cuenta que tras la muerte del caudillo Jorge Eliecer Gaitán en 1948, y la constante opresión del Estado dirigida a los campesinos del departamento del Tolima, se gestan grupos de autodefensas que

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Paramilitarismo en Colombia:

Representaciones sociales de víctimas del paramilitarismo, Municipio Ataco Tolima, frente a la justicia transicional expuesta en la ley 975 de 2005 (Estudio de Caso)

Juan Sebastian Sanabria Mape

En Colombia se han podido apreciar diferentes fenómenos como la conformación de grupos insurgentes: Ejército de Liberación Nacional (ELN), Fuerzas revolucionarias de Colombia (FARC), entre otros, hasta la posterior conformación de grupos contrainsurgentes como las AUC y su respectiva participación de la violencia en Colombia. El término de paramilitar hace referencia a ejércitos independientes que reciben apoyo de élites locales, regionales y fuerzas armadas (Arjona, 2005, pág. 26), no todas son conformadas por el estado, pero este las tolera ya que tienen un mismo enemigo y gozan de una autonomía organizacional (AUC). En Colombia los primeros indicios de grupos para- estatales se visibiliza en el año de 1994 - 1998 con el presidente Ernesto Samper quien estimula la conformación de las asociaciones comunitarias de vigilancia rural o CONVIVIR, de esta forma se regulariza el paramilitarismo con el decreto de ley 356 de 1994 en donde se estipulan las condiciones para el servicio de seguridad privada en zonas de combate en donde el orden público fuera precario, comienza así a vincularse nuevamente la población civil en la protección de sus propiedades, pero esto tiende a cambiar cuando se logra observar que se ha conformado un ejército paramilitar como tal.

Si bien en el gobierno Samper se regulariza el paramilitarismo, es necesario tener en cuenta que tras la muerte del caudillo Jorge Eliecer Gaitán en 1948, y la constante opresión del Estado dirigida a los campesinos del departamento del Tolima, se gestan grupos de autodefensas que les permite hacer frente a las constantes atropellos por parte de los agentes del estado que robaban sus tierras y que además los veían como objetivos militares por su ideología liberal, es así como se conforma el comando sur del Tolima integrado por liberales Gaitanistas y liberales Comunistas; el ejército en un intento por reducir al máximo las acciones de este grupo hizo presencia permanente en esta región, como consecuencia de ello se dan fuertes y constantes enfrentamientos en zonas como Rioblanco, Planadas, Bilbao, el limón entre otros; hacia finales de 1951 las diferencias políticas entre liberales y comunistas provocan la ruptura del comando sur del Tolima y un posterior enfrentamiento entre ellos; el retiro de las tropas por parte del ejército en el municipio de Herrera permite que los liberales tengan un control total sobre esa zona, con esto los comunistas enfocan su accionar militar a combatir a la fuerza militar del Estado y a su vez a la fuerza liberal liderada por los Loaiza. (Sentencia Bloque - Tolima,2014, pág. 109); Tras el marco de desmovilización auspiciado por el General Rojas Pinilla, los grupos liberales desistieron de las armas en octubre de 1953, según la circular del 25 de septiembre del mismo año, pero los comunistas decidieron no desmovilizarse por el

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riesgo que significaría para sus vidas entregar las armas, en vista de que se estaban conformando cuadrillas de paramilitares limpios1, por tanto se decidió continuar con la lucha armada. La conformación del Batallón de San Antonio en aras de combatir ciertas bandas delincuenciales que hurtaban el ganado y el bandolerismo, posibilitó la conformación de grupos de autodefensas campesinas comandadas por el entonces coronel Pedraza, con estas primeras intenciones de proteger al ganado logran hacer presencia en zonas como las Hermosas, cañón del Tetuán y la lejía, además de incursionar en el campamento denominado el Davis (Sentencia Bloque - Tolima, 2014), con ello se logra disipar a los liberales comunes; además se logra establecer relaciones con terratenientes de la zona, así se acuerda presionar a los grupos armados que tenían aun influencia en gran parte de esa región para que desistieran de las armas y se desmovilizaran, es el caso del Mariachi que si bien era liberal aún estaba bajo la jurisdicción del Davis. Es así como guerrilleros limpios que se acogían a planes de desmovilización se convertían en agentes del Estado, de esta forma se estructura un ejército contrainsurgente con una jerarquización similar al ejército nacional, y comandado por el “General peligro” cuyo comando central tenía asiento en Herrera- Tolima. Según las declaraciones de paramilitares desmovilizados, los liberales comunistas que luego se denominaron Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) fueron los actores que desencadenaron el levantamiento de armas por parte de autodefensas campesinas contrainsurgentes, puesto que los abusos, extorciones y demás, eran constantes contra la población civil: “A mediados de 1983, el grupo de los liberales limpios adoptó el nombre de rojo Atá, Rojo en honor a su ideología liberal y Atá, en reconocimiento al río que rodea la región2 con el propósito de hacerle frente a la subversión, la cual había declarado objetivo militar a varias familias del sur del departamento del Tolima” (Sentencia Bloque - Tolima, 2014, pág. 125) es por ello que se logra conformar un grupo suficientemente fuerte como para combatir a las FARC.

“En total llegaron a ser 12 integrantes, que se conformaron en un lapso de 20 días, la mayoría menores de edad, entre 14, 15, 16 y 20 años, quienes portaban escopetas, revólveres, carabinas de la “U” de 18 tiros, y algunos fusiles punto 30, armas que tenían guardadas quienes venían combatiendo la subversión y a quienes estas nuevas generaciones llamaban “los viejos de la guerra” (SentenciaBloque - Tolima, 2014)3.

Si bien, estos grupos en principio se levantan en armas primero por falta de presencia del Estado, y segundo por los constantes abusos por parte de las guerrillas a la población civil, es pertinente precisar que estos grupos logran ejercer un control sobre gran parte del

1 Paramilitares limpios, se hace referencia a los grupos de liberales que accionaban en conjunto con la fuerza militar del Estado. 2 Audiencia Pública de Legalización y Formulación de Cargos, sesión 1, 14 de mayo de 2013, interviene elpostulado Norbey Ortiz Bermúdez [00:41:57]. 3 Presentación realizada por la Fiscalía 56 de la Unidad Nacional para la Justicia y la Paz, en desarrollo de la audiencia concentrada de formulación y aceptación de cargos, realizada los días 23 de abril y 14 de mayo de 2013, la he tomado textualmente de la sentencia anteriormente citada. (Las Cursivas son mías).

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territorio del sur del Tolima, además del poder político y económico, gracias a las alianzas establecidas con diferentes terratenientes del sector, como bien lo explica (Chavarría,2010, pág. 7)

“… es necesario acentuar que aunque muchos grupos paramilitares explican su origen como un acto de defensa ante los secuestros y extorsiones de las guerrillas, una vez que se habían integrado económicamente a las regiones colombianas, en el fondo hay intereses sobre la forma de distribución del poder político a nivel local, lo que puso en la mira como objetivo militar a cualquier persona o grupo con ideología política no oficialista y generó fuertes vínculos y compromisos entre grupos paramilitares y élites políticas locales” (Romero, 2003: 41 y 118 y ss., 2007a y 2007b;Valencia, 2007).

Tras la conformación de pequeños grupos armados que pasaron a llamarse Rojo Atá y que sus acciones iban encaminadas a repeler y a evitar el control de las FARC en el sector, fue necesario establecer alianzas que le permitiesen mayor presencia en el sector, para esto se considera de vital importancia el entrenamiento de sus hombres y una eventual financiación, partiendo de esto se logra concertar una reunión en 1997 con Carlos Castaño, quien en 1997 consolida la confederación de las AUC siendo él la figura política de esta organización que logra reunir los diferentes grupos paramilitares dispersos en el país (Chavarría, 2010), este les ofrece armas, entrenamiento militar y 50 hombres que se unieron a sus filas, según lo expone (Salazar, 2010), este grupo se integra a las (AUC) bajo el mando del “Cirujano” enviado por Carlos Castaño. En la lucha por el control del territorio del Tolima, Las Autodefensas del Tolima cometen asesinatos a la población civil, acusándolos de auxiliares de la guerrilla como es el caso de la ejecución en agosto de 2000 del concejal de Ataco Ancizar Mendez y al vicepresidente de la junta de acción comunal Ricardo Rodriguez quienes fueron llevados cerca del centro de salud de la inspección de Santiago Pérez donde fueron ultimados frente a los demás pobladores quienes intentaban persuadir a este grupo de reconsiderar tan atroz acción.4 Es así como las AUC bajo la comandancia de “Elías” comete una serie de masacres en el Sur y Norte del Tolima intimidando a los pobladores de esta región, a su vez logra alianzas con terratenientes que estaban cansados con las extorsiones de las guerrillas presentes en estos sectores, la llegada de Diego Martinez alias “Daniel” tras la muerte de “Elías” permite la conformación de dos frentes del Bloque Tolima: Frente Norte que tenía presencia los municipios de Lérida, Líbano, Murillo, Ambalema, Venadillo entre otros, y el Frente Sur que seguía teniendo presencia en los municipios de Coyaima, Guamo, Ataco, Chaparral, entre otros. (Salazar, 2010).

El 15 de julio de 2003 se firma el acuerdo de Santa Fe de Ralito en Tierralta, Córdoba y un año después, el 1 de julio de 2004, se instala allí la Mesa Única para los Diálogos de Paz,

4 Estos asesinatos son citados por Bernardo Pérez Salazar en su trabajo “expresiones regionales del paramilitarismo en Colombia” tomados del CINEP, tras unos leves errores en la locación de los asesinatos me he permitido incluir el lugar exacto de estos, puesto que he estado en este lugar varias veces y no corresponde al lugar mencionado en la cita.

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cuyo propósito común para las partes es “el logro de la paz nacional, a través del fortalecimiento de la gobernabilidad democrática y el restablecimiento del monopolio de la fuerza en manos del Estado”, así como la reincorporación de la población civil(Chavarría, 2010, pág. 636). Este se efectuó bajo el mandato del presidente Álvaro Uribe Vélez, quien logró la desmovilización y sometimiento de este grupo contrainsurgente en donde se dejan claras las intenciones de las partes (Otero, 2006) que posteriormente son materializadas en la ley que logra legitimar este proceso ante la Corte Penal Internacional y el pueblo colombiano, esta: “tiene como objetivo facilitar los procesos de paz y la reincorporación individual o colectiva a la vida civil de miembros de grupos armados organizados al margen de la ley, garantizando los derechos de las víctimas a la verdad, justicia y reparación” (Ley 975, 2005); bajo este marco legal se procede a identificar a las víctimas consideradas por la ley 975 de 2005 en su Art 5 : “La persona que individual o colectivamente haya sufrido daños directos tales como lesiones transitorias o permanentes que ocasionan algún tipo de capacidad física, psíquica o sensorial, sufrimiento emocional, pérdida financiera o menoscabo de sus derechos fundamentales…” posterior a estipular quienes son las víctimas es preciso indagar los hechos por el cual se llevaron a cabo este tipo de actos, para que las víctimas tengan conocimiento de ello; pues el derecho a la verdad es fundamental tanto para las víctimas de las graves violaciones de derechos humanos como para el conjunto de la sociedad colombiana (Isa, Abril de 2008); el conocimiento de los hechos -la verdad-, depende del desmovilizado y su versión libre. En esta instancia las víctimas tienen que esperar a que el victimario reconozca los delitos5 para así hacer efectivo el decreto 3391- 29 de Septiembre de 2006, (Ley 975, 2005) el cual expone los programas restaurativos para la reconciliación nacional, partiendo de una verdad que depende estrictamente del agresor o en este caso los miembros de grupos paramilitares y de las guerrillas como las FARC, ELN, entre otros, la cual pretende:

a)propiciar la reconstrucción personal de la víctima y el victimario como sujetos sociales; b) recuperar la situación emocional de la población afectada; c) fortalecer la organizaciones sociales a través de capacitación especializada y acompañamiento en los procesos de reconciliación que estimulen la participación activa y responsable de las víctimas, las comunidades y los ofensores; d) propender por la elaboración de la memoria histórica del proceso de reconciliación; e) propiciar el restablecimiento de las víctimas en el plano emocional y social; f) impulsar la vinculación de las víctimas y de los desmovilizados a proyectos productivos o programas de generación de ingresos y capacitación vocacional que posibiliten su acceso a empleos productivos estimulando el apoyo por parte del sector privado y la sociedad civil para facilitar su reinserción social.

5 Quedan fuertes dudas en este proceso, en vista de que asesinatos cometidos por estos grupos no fueron reconocidos y por tanto quedan por fuera del proceso de reparación integral.

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El decreto ha pretendido darle una reparación integral a las víctimas, la ley 975 de 2005

Artículo 6o (Ley 975, 2005): El Estado tiene el deber de realizar una investigación efectiva que conduzca a la identificación captura y sanción de las personas responsables de delitos cometidos por miembros de grupos armados al margen de la ley, asegurar a las víctimas de esas conductas el acceso a recursos eficaces que reparen el daño infligido y tomar todas las medidas destinadas a evitar la repetición de estas violaciones.

Artículo 7o; El derecho a la verdad, la sociedad y en especial las víctimas tienen el derecho inalienable, pleno y efectivo de conocer la verdad sobre los delitos cometidos por grupos armados organizados al margen de la ley y sobre el paradero de las victimas del secuestro y desaparición forzada. A través de principalmente la versión libre reflejada en el Decreto 4760 DIC. 30/05 actuaciones previas a la recepción de versión libre.

Artículo 8o; El derecho de las víctimas a la reparación comprende las acciones que propendan por la restitución, rehabilitación, satisfacción y la garantía de no repetición de las conductas…

Teniendo un conocimiento más claro de los apartados de la presente ley, ha sido pertinente hacer un seguimiento a como se ha ejecutado hasta ahora, que vacíos han quedado, y lo más importante es si tras la ejecución de la ley, la víctimas se sienten integralmente reparadas, para ello se ha considerado como parte fundamental de la investigación, escuchar esas voces que por temor han decidido callar y no reclamar frente a la implementación de esta ley, para ello se debe indagar la existencia de concordancia o no entre los significados que se le dan a los conceptos de verdad, justicia y reparación propuestos por el Estado colombiano y las víctimas.

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PREGUNTA DE INVESTIGACIÓN

1. ¿Qué representación social tienen las víctimas del paramilitarismo, (en el Municipio de Ataco-Tolima) respecto a la reparación integral expuesta en la ley 975 de 2005?

2. ¿Cuáles son las concepciones que tienen las víctimas del paramilitarismo, (en el Municipio de Ataco-Tolima) respecto a la reparación integral expuesta en la ley 975 de 2005?

OBJETIVOS

OBJETIVO GENERAL

1. Explorar las representaciones sociales que tienen las víctimas del paramilitarismo, (en el Municipio de Ataco-Tolima) respecto a la reparación integral expuesta en la ley 975 de 2005.

2. Explorar las concepciones que tienen las víctimas del paramilitarismo en el municipio de Ataco-Tolima, respecto a la reparación integral expuesta en la ley 975 de 2005.

OBJETIVOS ESPECÍFICOS

A) Conocer los programas desarrollados por parte del Estado, encaminados a la reparación integral de las víctimas del paramilitarismo en el municipio de Ataco del Tolima.

Es necesario tomar una decisión respecto a la pregunta de investigación y el objetivo general, además de asesorarme frente a los obj. Específicos.

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B) Indagar las consideraciones de las víctimas respecto a lo que es justicia, verdad y reparación.

C) Evidenciar la existencia o no, de casos en el que según las víctimas no se les hizo un debido proceso de reparación integral.

ESTADO DEL ARTE

Se pretende en este trabajo presentar un balance de los estudios realizados del fenómeno del paramilitarismo en Colombia, las víctimas que ha dejado, y el papel que tienen estas en el proceso de desmovilización (ley 975 de 2005) ley de justicia y paz. Es de resaltar que para el caso de las víctimas del paramilitarismo no se logró recopilar el material necesario que nos permita identificar con claridad la satisfacción de estas con la ley de justicia y paz, por tanto se hará un abordaje muy superficial en este tema que sin duda alguna será de gran importancia en el trabajo que se está realizando, puesto que existe aproximaciones a las víctimas y además nos permite visualizar como concibe el estado la reparación integral de estas.

Para la elaboración del estado del arte se ha escogido artículos que por su condición de ser producción científica son de gran credibilidad, y cuyas fuentes pueden ser más confiables además muchos de estos artículos han sido publicados por universidades con un amplio bagaje en este campo.

Es de aclarar que el orden de estos será de acuerdo al año en el que se han publicado los artículos, tomando como punto de iniciativa el texto de Alexander Gonzales Chavarría titulado: Justica transicional y reparación a las víctimas en Colombia, publicado en la Universidad Nacional Autónoma de México en el año de 2010; en este artículo hace un balance del conflicto armado colombiano en donde se identifican los actores de este y se hace énfasis en el actor paramilitar y todo lo que caracteriza el fenómeno del paramilitarismo, el objetivo de este actor es contextualizar el conflicto armado del país que se originó a partir de 1964 y a partir de este hacer un detallado estudio de cómo surgió el paramilitarismo, sus diferentes manifestaciones con claras diferencias, sus vinculaciones con miembros de la fuerza pública, políticos, y demás entidades estatales.

La revisión bibliográfica debe ser entre 27 y 4 de Abril.

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Para el autor, existen diferentes manifestaciones del paramilitarismo: autodefensas elementales, grupos de protección a terratenientes, ejércitos privados de narcotraficantes y el paramilitarismo propiamente definido, entendido este último como grupo armado ilegal apoyado por algunos sectores del ejército colombiano en el marco de la guerra contra insurgente tomado de (Medina, 1990). Para Chavarría existen una serie de factores a tener en cuenta que posibilitaron la conformación de estos grupos paramilitares, como es el estatuto del expresidente Turbay en su período de 1978 – 1982 en donde utilizando instrumentos legales autoriza la conformación de grupos privados de autodefensas, en este hilo de ideas los paramilitares iniciaron como grupos de autodefensas que estaban inconformes con los secuestros, extorsiones de las guerrillas que presenciaban o tenían control de estas zonas, pero su interés inicial muta hacia un interés en la distribución del poder a nivel regional y local, se configura un sentimiento de desprecio hacia la oposición del oficialismo, se hacen seguimientos a esos líderes o dirigentes, a su vez se configuran alianzas, vínculos y compromisos entre estos grupos y élites locales esta premisa está sustentada en (Restrepo, 1988- 2003), en este auge del paramilitarismo se observa una gran expansión territorial basado en el terror, las masacres y asesinatos múltiples, para esto fue necesario organizar estos pequeños grupos federalizarlos para así conformar las Autodefensas Unidas de Colombia (AUC) dicha organización construye un discurso antisubversivo cuyo epicentro es el Urabá antioqueño.

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ReferenciasSentencia Bloque - Tolima, 110016000253-200883167 (Tribunal superior del Distrito judicial de

Bogotá sala de justicia y paz 19 de Mayo de 2014).

Arjona, S. K. (2005). El poder paramilitar, una perspectiva teórica. Bogotá: Planeta.

Chavarría, A. G. (2010). Justicia transicional y reparación a las víctimas en Colombia. Revista Mexicana de Sociología, núm 72, 629-658.

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Ley 975, R. U. (25 de julio de 2005). Fiscalía General de la Nación. Obtenido de www.fiscalía.gov.co

Medina, C. (1990). Autodefensas, paramilitares y narcotráfico en Colombia: Oriigen, desarrollo y consolidación. El caso de Puerto Boyacá. Bogotá: Documentos periodísticos.

Otero, H. J. (2006). En H. J. Otero, Evolución del conflicto Armado en Colombia e Iberoamerica Tomo II (págs. 57-63). Cali, valle del cauca : Universidad Autónoma de Occidente.

Restrepo, J. (1988- 2003). El conflicto en Colombia: ¿Quién hizo a quien? un enfoque cuantitativo. Bogotá: Norma.

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