el libro de melquisedec

7/17/2019 El Libro de Melquisedec

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EL LIBRO DE MELQUISEDEC¿Qué es el Libro de Melquisedec?

IntroducciónEl Libro de Melquisedec es una traducción al espaol de uno de los !ollos del Mar Muerto encontrado en la cue"n#mero 11$ en el desierto de %umr&n$ al norte del Mar Muerto. 'lgunos le llaman el (ran !ollo de Melquisede)a que en su estado original$ consiste en un con*unto de + rollos cosidos entre s,.

eg#n uentes relacionadas con este (ran !ollo ) lo que se lee en el manuscrito$ el primer rollo que aparece en compendio$ lo escribió Abr!"$ el mismo persona*e que encontramos en el Libro de (nesis en la iblia. Esrollo ue registrado por la mano de 'braham en obediencia al mandato di"ino de ahh$ ) narra lacontecimientos que ocurrieron tiempo antes ) tiempo despus de la (ran Liberación que ahh eectuó pomedio de 'braham ) sus pastores$ en aqulla ocasión en que se liberó a Lot ) los dem&s cauti"os quienes hab,asido tomados prisioneros como consecuencia de la batalla registrada en (enesis cap,tulo 1. ' esta primer historregistrada por 'braham se le conoce como La 4istoria de 5n 6aso. 7ambin se le mandó a 'braham registrar 4istoria de alem$ la cual l escuchar,a ) recibir,a 8de los labios de Melquisedec8$ narrando los acontecimientom&s rele"antes de aqulla 9iudad 'mada. El cap,tulo 13 de la 4istoria de alem es una coneión directa con siguiente historia llamada La 4istoria del 5ni"erso$ )a que en ese cap,tulo se eplica el conteto en que se recibla re"elación por conducto del &ngel de Lu;. Esta 4istoria$ entendemos por lo reerido de la uente$ ) seg#n lregistrado en estos rollos$ ue escrita por Melquisedec ) registrada en seis rollos que ueron cosidos uno a uno *untcon el primer rollo escrito por 'braham. La 4istoria del 5ni"erso es una re"elación que Melquisedec recibió pmedio de 8un &ngel luminoso8 o &ngel de Lu;$ ) la cual estu"o registrando en esos seis rollos durante seis aos.

El c"ino que nos condu#o !st el Libro de Melquisedec

<uestra 4istoria

omos in"estigadores de las escrituras sagradas desde hace m&s de dos dcadas$ una labor que hemos reali;ad"oluntaria ) desinteresadamente$ pues la ra;ón principal de in"olucrarnos en esta misión radica en el "alor genuin) #nico que representa para nosotros el conocimiento contenido en estos tesoros de Escritura. 'l amiliari;arnocon este tipo de bibliogra,a$ uimos conociendo poco a poco algunas de las caracter,sticas que poseen estoescritos antiguos. 9omen;amos a unir partes de la historia humana de la tierra$ seg#n re"elan estos Libroagrados$ ) nos dimos cuenta de que cada uno de ellos nos proporcionaba una parte #nica de inormación "alioque nos iba a)udando a armar el rompecabe;as de una historia m&s completa de todo aquello relacionado con el shumano$ quin es$ de dónde pro"iene ) hacia dónde se dirige.

'l seguir la huella de algunos persona*es ) e"entos importantes narrados en estas escrituras$ reconocimos que estolibros tienen un l,mite de inormación sobre el relato de ciertos persona*es ) acontecimientos. 'l contar con m&escrituras$ pudimos ahondar con m&s detalles esos mismos e"entos ) conocer me*or a esos persona*es$ de tamanera que hemos aprendido a reconocer este principio undamental$ relacionar di"ersos libros sagrados con el ide tener una uente de inormación ma)or que nos a)ude a alcan;ar una "isión m&s amplia sobre los temacontenidos en estas escrituras.5no de los persona*es importantes en la literatura sagrada es Melquisedec$ re) de alem. =ebido a la inormaciónque ten,amos sobre l$ eist,a en nosotros un uerte deseo por conocer m&s sobre cómo estableció la >a; en alem

7ambin$ otro misterio que hab,amos estado buscando era lo relacionado con la m#sica$ pues hasta en ese tiempo$antes de descubrir el $rn Rollo de Melquisedec$ nuestra eperiencia en la m#sica como parte undamental para"orecer la armon,a entre las personas$ entend,amos que eist,a un pasado misterioso concerniente a los or,genes=i"inos de la m#sica. 5na de las primeras palabras en el Libro de Melquisedec$ que tocó nuestro cora;ón musicalueron:





8 Los súbditos de Salem no empuñarían arcos y flechas, mas serían entrenados en el arte musical; Cada habitande Salem tendría siempre al alcance de sus manos un instrumento musical, para expresar por medio de él la paz yla alegría ue auel nue!o reino" #untos, formarían una poderosa oruesta en la lucha contra la desarmonía unace del orgullo y del egoísmo.8 ?4. alem 1:@

Estabamos mara"illados$ de que aquello que hab,amos eperimentado ) amado en nuestra "ida musical$ ahora Eterno nos re"elaba sobre una hermosa ciudad ) un pueblo singular$ donde la m#sica era considerada con tantimportancia$ ) undamental en la preser"ación de la pa; de ese reino. =espus nos enterar,amos en la 4istoria d5ni"erso$ sobre un pasado toda",a m&s antiguo$ cuando el 9reador 8idealiz$8 u 9reación de manera que pudie

8!ibrar acordes armoniosos de justicia y paz% &4. 5ni". 1:2

5no de los temas m&s importantes en nuestra b#squeda de conocimiento sagrado$ ueron el descenlace de la "idaestado 8antes de la fundaci$n de este mundo8$ as, como el descenlace durante la 9a,da de 'd&n ) E"a$ ambotemas relacionados entre s,$ sabiendo nosotros$ que el conocimiento m&s amplio de ambos temas podr,aa)udarnos a comprender m&s claramente nuestro presente ) lo que ser& en el uturo.

Re'elciones( Misterios ) *ro+ec,s en el Libro de Melquisedec

Antes ) des-ués del Libro de Melquisedec

=espus de recibir ) escudriar los contenidos del (ran !ollo de Melquisedec$ ) tras un proceso de con"ersiónlas nue"as re"elaciones que se estaban descorriendo ante nuestro entendimiento$ eperimentamos la realidad dque al salir a lu; este mara"illoso manuscrito$ estaba marcando un punto en el tiempo$ un ntes ) un des-ués en historia humana$ pues se podr& decir$ 8lo ue se sabía antes de ue saliera a luz el Libro de %eluisedec8. esto podemos testiicar debido a la porción de conocimiento que el Eterno nos hab,a concedido alcan;ar antes dencontrar el Libro de Melquisedec.

'#n ho) en d,a todos aquellos que con sinceridad as, lo deseen$ pueden constatar este hecho$ al obser"cuidadosamente lo que se sab,a en el mundo con respecto al >lan de =ios para us hi*os$ ) hacer un comparati"sencillo de lo que ahora podemos saber gracias a la aparición del Libro de Melquisedec$ gracias a las bendicion

que el Eterno nos concede en esta nuestra generación al re"elarnos m&s de u >alabra.Entendemos por eperiencia personal$ que las personas que inalmente reciban en sus "idas el Libro dMelquisedec como Escritura agrada$ lo habr&n alcan;ado hasta despus de recorrer un camino de con"ersión a Lu; adicional que el 9reador re"ela en este manuscrito$ )a que ampliara el conocimiento "erdadero anteriormenrecibido en us otras Escrituras.

'l amiliari;arnos con el car&cter de las escrituras sagradas$ hemos aprendido que estos Libros agrados sdeienden por s, solos$ ) desa,an al mundo con sus re"elaciones$ misterios ) proec,as. Los hombres de esmundo$ a lo largo de la historia han luchado en contra de la autenticidad ) "eracidad de las Escrituras agradas$ han ideado tantas maneras para desacreditar cada conocimiento$ cada re"elación$ cada proec,a$ cada misterio$ cadmilagro contenidos en ellas$ menospreciando as, al 'utor de estas "erdades$ a la Auente de la Lu;.

7ambin es sabido por muchos sobre todas aquellas interpretaciones erróneas de las Escrituras que algunos en mundo han esparcido$ ) es natural que al salir la Lu; del ol$ las 7inieblas de la <oche contrasten con ella. 's, quser& natural que al re"elarse la Lu; contenida en el Libro de Melquisedec$ muchos que hab,an estado en alg#grado de 7inieblas$ )a sea por desconocimiento o por los errores de interpretación escritural$ tengan dos camin para decidir seguir$ uno ser,a reconocer con humildad su ignorancia o su error ) con toda sabidur,a recibir la Ludel Libro$ ) el otro camino ser,a el del recha;o$ ) tal como sucede con las 7inieblas$ tener que estar en el ladopuesto luchando en contra de la Lu; ) des"anecerse o huir cuando esta se maniiesta con toda claridad.

7odos aquellos que aman la 6erdad encontrar&n en el Libro de Melquisedec mucho de las "erdades que hab,aestado buscando por mucho tiempo. B%uin no ha anhelado conocer su origen personalC B%uin no ha deseado co



anhelo conocer a 'qul que nos dio 6ida$ 'qul que ormó el 5ni"ersoC B>or qu nos encontramos en un mundca,do si en el principio no ue as,C B9u&l ue el descenlace 8antes de la undación de este mundo8C B9u&l ser& inal de todo este =rama 5ni"ersal en el uturoC on solo algunas de las "erdades que re"ela este registro sagrado

<uestra oración sincera es que la 6erdad se allegue a la 6erdad$ sabemos que los que se esuer;an por "i"ir en 6erdad recibir&n estas 6erdades contenidas en el Libro de Melquisedec$ pues ser&n dulcemente saboreadas poellos$ )a que son de su misma naturale;a. 'qullos que han amado la 6erdad ) la han procurado durante su"idas tendr&n grandes moti"os para regoci*arse por las 8buenas nue"as de gran go;o8 que recibir&n de este preciadLibro. 9uando se descorra ante ellos el "elo$ ) el >adre ) el 4i*o maniiesten las !e"elaciones de u 'mor$ scora;ón llorar&$ pues sabr&n que Ellos siguen siendo Los Mismos$ ) conocer&n la 6erdadera <aturale;a ) 9ar&ctque Ellos han mantenido desde el comien;o$ probar&n en gran porción el 'mor con el que Ellos les han amaddesde el principi

DhF B9ómo contener mis l&grimas ante las =&di"as de u 'morC Mi cora;ón se desborda al reconocer considerarme ser 8lo dbil del mundo8$ ) en esta humilde condición el Eterno a#n as, obra por nuestro conductMi hermano ) )o no imaginamos ni mucho menos planeamos todo esto que el eor nos ha concedidconcerniente a los misterios ) re"elaciones del Libro de Melquisedec. Es u bra la que se eect#a$ no la nuestrendecimos el camino que comen;ar&n todos aqullos que reciban con sinceridad de cora;ón$ humildad ) e estacosas. El Mes,as$ 'qul que nos amó desde el principio$ 'qul a quin amamos desde el principio$ maniestar& Eternidad de u 'mor a tra"s de us palabras registradas en el Libro de Melquisedec$ nuestro amado Libro.



EL LIBRO DE MELQUISEDECUn Re'elción del .erddero

Cr/cter del Mes,s

Autores de l trducción l es-0ol1Isc R",re2 .r3s ) E2equiel R",re2 .r3s

4o"do de l 'ersión en -ortu3ués deEnoc! Muc!eroni

7raducción al espaol: Gsaac !am,re; 6argas$ ) E;equiel !am,re; 6argas.

'n&lisis$ reerencias$ concordancias$ abre"iaturas$ gr&icas ) caracter,sticas tipogr&icas por: E;equiel !am,re6argas e Gsaac !am,re; 6argas.

7raducción$ an&lisis$ reerencias$ concordancias$ abre"iaturas$ gr&icas ) caracter,sticas tipogr&icas aseguradaconorme a la le). >rohibida la reproducción parcial o total de esta obra sin la autori;ación escrita del autor

autores.

Gmpreso en Monterre) <ue"o León Mico =iciembre 2010

03-2010-0H2+10012I00-01

E5-licción *reli"inr

El orden en que se presentan aqu, estas historias$ sigue la secuencia de acuerdo con el modelo di"ino que ssiguió en el rollo original$ cumpliendo as,$ el mandamiento que ahh dio a Melquisedec ) a 'braham arespecto. El lector sensible podr& percibir el sabio propósito de dicho mandamiento al seguir la lectura en es

mismo orden.Este sagrado registro tiene una estructura precisa ) deinida$ ) en su an&lisis muestra m#ltiples rasgos de s

originalidad$ no solo en su estilo$ sino tambin en la simbolog,a arcaica que utili;a$ donde parecer,a estdescribiendo im&genes gerogl,icas m&s que palabras$ as, como en la utili;ación de pleonasmos ) analog,as$ tcual era el uso com#n en las lenguas m&s antiguas$ ) cu)os rasgos semitas se comparan a los hallados en la iblia en otros libros de igual origen.

>or otra parte$ en algunos "ers,culos se citan cantidades las cuales est&n escritas en orma de n#meros: 2I0$ 1 etc. 7ambin algunas palabras comien;an con una letra ma)#scula a#n cuando estas no aparecen despude un punto o la palabra no amerite por regla comen;ar con ma)#scula. 'dem&s se utili;an las comillas$ el doble triple signo de eclamación$ as, como la orma de combinar una interrogación con una eclamación al mismtiempo. En dichos casos$ sean n#meros$ letras ma)#sculas o signos de epresión$ hemos decidido de*arlos en

orma original en que encontramos escrita esta obra. El lector podr& encontrar signiicados importantes en lonasis que se hacen en determinadas epresiones$ palabras o rases.Las abre"iaturas que utili;amos en esta obra para reerirnos a una cita b,blica$ usamos las com#nmente conocida) para hacer reerencia a las historias ) cronolog,as contenidas en este libro$ las identiicamos de la siguienmanera:

4. 6aso La 4istoria de un 6aso4. alem La 4istoria de alem4. 5ni". La 4istoria del 5ni"erso

9rono. 1 9ronolog,a 1 9rono. 2 9ronolog,a 2



9rono. 3 9ronolog,a 3

'l proundi;arnos en el contenido de estas historias$ comprendimos la rele"ancia que tienen las Janalog,asK comun mapa gu,a que el 5ni"erso nos orece$ re"elando a tra"s de seme*an;as$ la ubicación que tenemos en el tiempdentro de la historia a cumplirse$ es decir$ los acontecimientos ) persona*es del pasado son una Janalog,aK Jseme*an;aK que corresponden a los acontecimientos ) persona*es del presente ) del uturo. La mención particulque el rollo hace sobre ciertos n#meros$ medidas$ ) esti"idades signiicati"as$ nos moti"ó a la necesidad dgraicar de manera sencilla$ el orden cronológico en que los acontecimientos llegaron a consumarse en el pasadllegando a repetir su correspondiente Janalog,aK en el presente ) en el uturo. ?&éase Cronología ', ( y )@ <o debe conundir lo que llamamos Janalog,aK con Jpredestinación o preordinaciónK.

Las cronolog,as graicadas no ormaban parte del rollo original ni de la "ersión en portugus sobre la cual se hi;esta traducción$ sino que ueron diseadas ) aadidas para acilitar una ma)or comprensión del mismo$ ) ueroubicadas al inal del rollo de 'braham debido a que ueron tomadas de sus escritos.

El encabe;ado de cada historia$ la sinopsis de cada cap,tulo$ la asignación numrica de cada p&rrao o "ers,culo$ las reerencias b,blicas ) de otros libros sagrados$ todos estos ueron agregados para presentar con ma)or claridalos escritos del rollo.

A$RADECIMIE64OS

'gradecemos a Enoch Mucheroni por permitirnos lle"ar a cabo esta traducción ) por la "aliosa a)uda quetra"s de su p&gina de internet nos brindó con libre acceso a su etensa inormación as, como tambin a iblioteca 4untingdon de los ngeles 9aliornia. ' >edro (ringoire por sus "aliosas in"estigaciones ) clarinormación que han a)udado a muchos estudiosos in"estigadores a "alorar los rollos ) el halla;go mismo. parun ma)or enriquecimiento intelectual$ recomendamos al lector etensamente los art,culos inormati"os$ libros contenidos en internet de estas uentes relacionadas con estos temas. 's, mismo agradecemos a todos aquellos qude alguna manera han contribuido a la reali;ación de esta obra.

<uestra "erdadera intención es publicar con honor la palabra del eor hasta donde Nl ha re"elado estamos conscientes de que aun re"elar& m&s de u palabra$ ) permanecemos abiertos al conocimiento que lleguenuestras manos )a sea por los descubrimientos arqueológicos o de la manera en que tenga a bien el eor re"elus palabras.

'gradeceremos mucho los comentarios ) sugerencias que el lector tenga a bien maniestarnos al respectde esta obra$ con la inalidad de corregir cualquier error humano cometido en la traducción ) elaboración d presente libro para uturas ediciones.

(racias.

Gsaac !amire; 6argas

E;equiel !amire; 6argas



L 7istori de un .so&Un relto escrito -or Abr!"8

'braham$ habiendo recibido el mandamiento de ahh$ escribe en un rollo los acontecimientos que dieron origea la historia que se conoce como La *istoria de un &aso$ que narra los hechos que enmarcaron La +ra Liberaci$n que el eor eectuó por medio de 'braham$ sus pastores ) aliados. ?6ase 9rono. 1$ 2 ) 3@

C-,tulo 9

braham es informado de la batalla en la cual Lot y muchos son lle!ados cauti!os" braham recibe mandamientodel -terno a fin de efectuar la .+ran Liberaci$n/, esto es, con!ocar y preparar a sus pastores, y preparar un !ascon características especiales"

1 Estaba descansando ba*o la sombra del !oble de Mambr *unto a mi tienda$ cuando "i llegar apresuradamenteuno de los sier"os de mi sobrino Lot. 9asi sin aliento$ l comen;ó a relatarme sobre la tragedia: 4ubo el danterior una batalla entre las ciudades de la planicie$ implicando a cuatro re)es contra cinco. 9omo resultad

odoma ue derrotada ) muchos de sus habitantes lle"ados cauti"os$ entre ellos mi sobrino Lot. La noticia me demu) aligido$ pues al mismo tiempo en que sent,a que era preciso salir en su a)uda$ me "e,a ragili;ado$ sninguna condición.2 iempre ui un hombre pac,ico ) detesto a aquellos que derraman sangre. 7engo muchos sier"os$ pero pocosaben mane*ar espadas ) lan;as$ pues desde la inancia han sido entrenados como pastores. En lugar de espadaslan;as$ ellos mane*an bordones con los cuales conducen los rebaos En lugar de escudos$ ellos cargan "asos en sucinturas$ siempre llenos de agua resca$ para matar su sed ) rerescar a las o"e*as aligidas En lugar de "ino paembriagarse$ cargan su*eto a sus cintos pequeas boti*as con aceite de oli"o$ con los cuales ungen las heridas drebao En lugar de trompetas resonantes$ ellos soplan en cuernos pequeos$ con los cuales con"ocan al rebahacia el corral.3 Gmaginando como ser,a un combate entre mis sier"os ) los e*rcitos de aqullos cinco re)es "ictorioso

comenc a re,r. Mientras releionaba$ la "o; de 'qul que siempre me gu,a$ resonó en mis o,dos$ diciendo: O D'bram$ 'bramF <o menosprecies los instrumentos de los pastores$ pues santiicados por el uego dsacriicio$ habr&n de conquistar la gran liberación. O P El Eterno comen;ó a darme órdenes$ hacindome a"an;ar por la e$ sin saber como tal liberación habr,a dreali;arse.I El primer paso ue la con"ocación de todos los pastores que$ de*ando a sus rebaos$ se dirigieron al !oble dMambr$ tra)endo sus instrumentos pastorales. Eran en total seiscientos pastores.+ rden que "aciaran los *arros$ colocando en ellos el aceite de la boti*a.Q =espus de cumplir ellos esta orden$ ped, que tomara cada uno la lana de una o"e*a$ me;cl&ndola con el aceite dlos *arros.H =espus de estas cosas$ ahh me mandó tomar un "aso grande de barro$ llen&ndolo hasta la mitad con aceite de oli"o.10 'l concluir esta tarea$ el eor me mandó hacer una larga mecha de lana$ enroscando la mitad dentro del aceit) de*ando la otra parte apresada encima del "aso.11 =espus de estas cosas$ ahh me ordenó encender la mecha$ con el uego del altar. 'l aproimarme al uegsagrado que toda",a ard,a sobre el sacriicio de la maana$ una pequea lama saltó hacia la mecha$ ) poco a pocse ue alimentando del aceite$ hasta con"ertirse en una llamarada que pod,a ser "ista de le*os.



C-,tulo :

braham lle!a el !aso sobre sus hombros" Sufrimientos y pruebas en su 0ornada" %uchos no soportan l!erg1enza y abandonan a braham" 2ncredulidad de Sara"

1 9on el "aso en los hombros$ inici una caminata rumbo a las ciudades de la planicie$ siendo acompaado por lo pastores. Luego comen;aron a surgir escarnecedores que$ al "erme con aquel "aso incandescente en pleno d,comen;aron a decir que )o estaba loco. 'l esparcirse esta noticia$ muchos "inieron a mi encuentro$ tra)endconse*os para que )o abandonara aquel "aso que ser,a capa; de destruir toda mi re-utción ) di3nidd delante dtodos ellos.2 9uando )o les habl sobre los e*rcitos ) sobre mi misión con*unta con los pastores$ ellos conclu)eron que dhecho )o estaba loco. Gntentaron tirarme el "aso por la uer;a$ mas aerr&ndome a el$ imped, que lo tiraran de m,.3 '"ergon;ados ante todo esto$ muchos pastores comen;aron a separarse: algunos regresaron hacia sus tiendamientras que otros se unieron a aqullos que se re,an de mi comportamiento etrao. intindome solo con aquel pesado "aso sobre los hombros$ comenc a angustiarme. 'nhelaba encontraralguien con quin pudiera compartir mi eperiencia$ m&s todos me lan;aban miradas de desaprobación.P Me acord de ara$ mi amada esposa En obediencia a la "o; de ahh hab,amos transitado por muchocaminos$ estando ara siempre a mi lado$ anim&ndome a proseguir precisamente en los momentos m&s di,cile9on certe;a ara me traer,a consuelo ) uer;as para continuar irme$ conduciendo el 'so de l sl'ción;I Mientras que a"an;aba por el camino pensando en ara$ la "i en medio de la multitud. 'l dirigirme a ella$ me "sorprendido ) desalentado al "er en sus o*os el mismo menosprecio de aqullos que me llamaban loco por conducen pleno d,a la llama que se hab,a desprendido del al-tar.+ 'cord&ndome de la orden de ahh de que tendr,a que liberar a mi sobrino Lót$ ui andando solo por camino 'l colocarme en el lugar de aqullos que me llamaban loco$ )o les daba la ra;ón$ pues en condicionenormales$ ninguna persona coherente saldr,a de casa$ sin un rumbo deinido$ lle"ando en la espalda en pleno d,a u"aso con una llamarada$ airmando estar marchando contra los e*rcitos de cinco re)es$ para liberar un parient!ealmente da a entender que se trata de la maniestación de una gran locura. >recisamente as,$ ba*o el rencor dtodas las humillaciones ) palabras que hablaban contra m,$ )o a"an;aba rumbo al "alle desconocido.Q 7oda aquella burla ue inalmente disminu)endo$ a medida en que me distanciaba del !oble de Mambr.H 9omen;aron a sobre"enir a mi cora;ón muchas dudas en cuanto a mi uturo. Estaba a "eces aligido con pensamiento de todo lo que hab,a eperimentado$ desde la con"ocación de los pastores hasta ese momento$ podrser$ de hecho$ demostraciones de una locura.10 Lleno de dudas$ comenc a pensar en la posibilidad de abandonar el "aso al lado del camino$ regres&ndom *unto al altar. Nsos eran los conse*os de algunos pastores ) amigos que$ condolidos de mi soledad$ toda",a "en,anmi encuentro$ aconse*&ndome a que "ol"iera 'll,$ dec,an$ que )o podr,a conquistar nue"amente la conian;a de lo pastores$ "ol"iendo a ser$ qui;&s$ hasta el mismo sacerdote honrado como antes lo era. obre el altar$ dec,an$ quhab,a un uego mucho ma)or que aqul que )o cargaba en los hombros.11 Estaba a punto de regresar$ cuando ara "ino a mi encuentro$ cont&ndome sobre el desprecio que mucho pastores lan;aban contra m, Ella estaba consternada$ pues toda aquella deshonra$ reca,a tambin sobre ella$ punto de no sentir m&s deseos de permanecer *unto a aqul altar.12 =espus de alertarme$ ara comen;ó a hablarme de un plan: >odr,amos$ qui;&s$ mudarnos a una ciudadistante$ donde ol"idar,amos todas aquellas "e*aciones.13 l"id&ndome de la "o; que me hab,a mandado seguir rumbo a la planicie$ contest a mi esposa que )o estardispuesto a acompaarla a cualquier lugar$ si ella permit,a que )o lle"ara el "aso. Nl ser,a nuestro altar$ calentande iluminando nuestras noches con su llama.1 'l o,r sobre el "aso$ ara "ol"ió a eno*arse$ airmando no entender mi terquedad al continuar lle"ando sobre lohombros aquel s,mbolo de "ergRen;a ) desprecio. =espus de decirme tales palabras$ me "ol"ió la espaldregresando hacia la tienda.



C-,tulo <

braham entiende el significado del !aso" braham protege a la peueña llama de los fríos !ientos" %uchao!e0as siguen a braham" braham, andando solo, sigue el rastro" Los e0ércitos se burlan de braham amenazan con el exterminio de los cauti!os"

1 'ngustiado por no poder reali;ar el sueo de ara$ prosegu, rumbo al uturo incierto$ siendo orientad#nicamente por la llama$ cu)o brillo aumentaba a medida en que las tinieblas se hac,an m&s densas. 9omencentonces a meditar sobre aquella llama que me acompaaba con su brillo ) calor.2 o estaba acostumbrado a "er el Auego agrado entroni;ado sobre un gran altar de piedras$ en medio de laalaban;as de muchos pastores$ de entre los cuales )o me destacaba como maestro ) sacerdote. En aquellomomentos de adoración$ )o me "est,a con los me*ores mantos$ ) hac,a la pregunta de reali;ar el sacriiciosolamente cuando todos mis sier"os estu"iesen reunidos a mi alrededor$ para que escuchasen mis conse*osad"ertencias. En la hora del sacriicio$ )o le"antaba hacia el cielo mi espada desen"ainada$ )$ con palabraamedrentadoras$ proclamaba la grande;a del eor de los E*rcitos$ El =ios 7odopoderoso que domina sobre lo9ielos ) la 7ierra. 6ibrando la espada en el aire en un mo"imiento amena;ador$ )o representaba delante de m

pastores$ la imagen de un =ios se"ero$ que siempre esta listo para repeler cualquier conrontación. =espus de edemostración de soberan,a ) poder$ tomaba )o una o"e*a de las manos de un pastor$ ) la amarraba sobre el alta>ara que estu"iese bien clara la ira di"ina$ pinchaba )o sobre su cuello$ golpe&ndola se"eramente$ hasta "er perecer. En aquel momento )o descend,a del altar$ ) permanec,a esperando el Auego agrado que *am&s de*ó dmaniestarse sobre el sacriicio.3 o hab,a aprendido desde la inancia a re"erenciar el Auego agrado$ cre)endo que ello era una re"elación "isibde ahh$ el (ran =ios Gn"isible. 4asta entonces$ )o lo "e,a como un Auego Snico e Gndi"isible. 'hora$ transportar en un humilde *arro la llama que se hab,a desprendido del altar$ mis pensamientos se agitaban con surgimiento de un nue"o concepto sobre el 9reador: el concepto de un =ios uridor que es capa; de desprendersdel (ran ahh$ representado por el Auego agrado$ para acompaar al pecador en su *ornada. 'rrepentido$ me postr delante del "aso ) llor amargamente. 7en,a ahora conciencia de que todo el cel

demostrado *unto al 'ltar$ ten,a como inalidad la ealtación de mi orgullo$ ) no la del amor de 'qul que macompaaba por el camino.P #bitamente$ se me grabó en la mente la con"icción de que aquella pequea ll" que se !b, des-rendiddel =ue3o S3rdo( er un re-resentción del Mes,s( que e desprender,a del (ran ahh$ para ser el =io9on <osotros$ compaero en todas nuestras *ornadas. 'l sobre"enirme esta con"icción$ la llama se alegrtorn&ndose m&s brillante ) calurosa.I 9on el cora;ón transormado$ prosegu, por el camino rumbo al "alle$ lle"ando en los hombros el *arro que mhab,a tra,do despus de tanto desprecio$ la alegr,a de una nue"a re'elción sobre el cr/cter del Credor;+ Momentos di,ciles comen;aron a surgir en mi camino$ cuando r,os "ientos "enidos del mar salado comen;aroa arremeterse contra la pequea llama$ pro-curando apagarla. o la amparaba con mi cuerpo$ andando mucha"eces de lado e igualmente de espalda$ mas siempre a"an;ando rumbo al "alle.

Q 'l romper la lu; del d,a$ me encontr a un paso de la planicie. 9omenc a encontrar por el camino muchorebaos que eran conducidos por rudos pastores. ' medida en que a"an;aba entre ellos$ surg,an tumultos conusiones$ pues muchas o"e*as ) cabras se asustaban con mi "aso ardiente$ dispers&ndose por todas partes. Eshi;o que la ma)or,a de los pastores estu-"iesen irritados contra mi presencia en su medio.H abiendo que no podr,a permanecer retenido en ese "alle$ prosegu, de rente rumbo a odoma. Mientras qua"an;aba$ comen;ó a suceder algo interesante: muchas o"e*as$ tiernas ) sumisas$ comen;aron a acompaarmEran pocas al principio$ pero poco a poco su n#mero ue aumentando$ hasta que comenc a caminar con diicultadebido al gran n#mero de o"e*as que me segu,an. ' lo le*os )o pod,a "er a los pastores$ enurecidos$ por la prdidde sus o"e*as m&s bonitas.10 'l llegar a la 9iudad de odoma$ la encontr "ac,a ) de"astada. iguiendo los rastros de*ados por los e*rcitos por la multitud de cauti"os$ ui aproim&ndome cada "e; m&s al blanco de mi misión. 'l llegar a la campia d



=an$ pude a"istar a lo le*os el gran campamento de los soldados$ al pie de una colina. in prisa$ me encamin hacall&$ conduciendo a mi nue"o rebao.11 =esde lo alto del monte$ pude obser"ar el campamento en toda su etensión. 4ab,a millares de soldadoconmemorando su "ictoria Mientras que$ centenares de cauti"os )ac,an amontonados en medio del campa-menthumillados ) sin esperan;a. 'nte esa escena$ estu"e imaginando cómo se podr,a reali;ar la liberación.12 Mi presencia despertó la curiosidad de algunos soldados que$ al "erme con el "aso umigante$ se aproimaroncomen;aron a burlarse. 9uando me preguntaron el moti"o de mi presencia en aquel lugar$ les di*e que "en,aliberar a mi sobrino Lót. Mis palabras se tornaron en moti"o de muchas bromas en todo el campamento =espude esto$ comen;aron a moarse de Lót.13 En poco tiempo$ toda aquella burla se transormó en gritos de "engan;a$ ) proclamaron que$ a la maansiguiente$ todos los cauti"os ser,an eterminados$ comen;ando por mi sobrino.

C-,tulo >

braham se reconforta con la llegada de sus pastores y aliados" Los pastores aprendieron a amar la luz del &as Lealtad de los aliados de braham" 3rientado por la &oz 4i!ina, braham da instrucciones estratégicas" Llamparilla de Lot" Confusi$n y matanza entre los e0ércitos enemigos"

1 Mientras intentaba imaginar lo que ahh podr,a hacer para alcan;ar tan milagrosa liberación$ "i surgir a

le*os un grupo de pastores que se encaminaban en dirección m,a$ "iniendo de odoma. >ens al principio que eralos pastores enemigos que "en,an a arrancarme el rebao conquistado con amor. 7al desconian;a prontdesapareció$ dando lugar a un sentimiento de mucha alegr,a$ cuando descubr, que eran mis ieles pastores. Ellos sueron aproimando en pequeos grupos de doce$ hasta alcan;ar el total de 300 pastores. 'l mirar hacia ellos$ pudnotar en sus semblantes las seales de una gran luc! es-iritul que tu"ieron que enrentar$ para estar de mi ladMe contaron acerca de la eperiencia de muchos compaeros que$ desanimados$ hab,an lan;ado el aceite ) la lanuera de sus "asos$ regres&ndose hacia sus tiendas. Me hablaron de como$ en aquella noche anterior$ hab,aaprendido a amar la lu; de mi "aso$ que para ellos se con"irtió como en una estrella gu,a.2 Me alegraba con la presencia de mis humildes pastores$ cuando llegaron en dirección nuestra 'ner$ EscolManre$ acompaados por quince hombres armados Eran ieles amigos que$ conociendo los peligros quenrentar,amos en aquel "alle$ "inieron en nuestra a)uda. >ara que no apla;&ramos el plan di"i-no$ les ped, qu

permanecieran escondidos hasta el amanecer$ cuando recibir,an orientaciones sobre cómo participar en la misión.3 9omenc a orientar a los pastores$ siguiendo las instrucciones de La 6o; =i"ina que me sonaba desde dentro dla llama: La primera tarea de los pastores$ ser,a cuidar del rebao hasta el anochecer. 'l "ol"er$ orden que amarraran las made*as de lana empapadas en aceite$ en la punta de sus bordonecoloc&ndolos dentro de los "asos que$ deber,an mantenerse suspendidos$ boca aba*o.P 9omenc a encenderlos con el uego de mi llamarada$ hasta que las trescientas antorchas estu"ieron ardiendaunque$ ocultas$ en el interior de aquellos "asos.I rden a cuarenta de mis "alerosos pastores que$ en el momento indicado por una seal que ser,a dada$ deber,aa"an;ar silenciosos hacia el centro del campamento$ circundando a todos los cauti"os que )ac,an amontonados emedio del campamento de las tropas. 'l mismo tiempo$ los 2I0 pastores restantes$ deber,an rodear todo campamento$ esperando la seal de romper los "asos con los cuernos.

+ rientado por La 6o; de la Llama$ les indiqu las seales: 9uando la #ltima antorcha se apagase en campamento$ deber,an estar atentos$ pues una pequea lamparilla ser,a encendida por uno de los cauti"os. 7a pronto como la lamparilla comen;ase a arder$ deber,an correr cada uno hacia su puesto$ e"itando cualquier ruid para no ser descubiertos.Q La seal para ellos de quebrar los "asos con los cuernos$ le"antando mu) en alto la antorcha$ ser,a el apagar dla lamparilla.H =espus de esas orientaciones$ los 2I0 pastores$ ocultos por las sombras de la noche$ se esparcieron por el "all) estaban esperando el momento de colocarse alrededor del campamento Mientras tanto$ los 0 se colocaro próimos a un pasa*e m&s "ulnerable$ a tra"s del cual habr,an de alcan;ar a los cauti"os.10 Era )a alta noche cuando la antorcha del #ltimo soldado se apagó$ sobre"iniendo una completa oscuridad silencio sobre el campamento de las tropas.



11 Entre los cauti"os$ hab,a un hombre en aquella noche$ que "i",a la ma)or angustia de su "ida. Era mi sobrinque$ despus de con"ertirse en el blanco de tantos abusos ) humillaciones$ hab,a tomado conocimiento del castigque les esperaba al amanecer.12 En aquella noche$ Lot ten,a sus pensamientos "ueltos hacia su t,o se acordaba con arrepentimiento dmomento en que me hab,a de*ado *unto al !oble de Mambr$ mud&ndose hacia las campias de odoma. En sdesesperación$ sintió deseo de "ol"er a "er mi a; ) de pedirme perdón por haberse apartado de m,. Tustamente eaquel momento$ Lot ue atra,do por el brillo de una antorcha que ard,a sobre la colina. 'l mirar el brillo$ imaginestar teniendo una "isión$ pues ello mismo le re"elaba la a; de su querido t,o.13 %ueriendo mostrarme su rostro$ Lot palpó en medio de las tinieblas hasta encontrar una pequea lamparilla quhab,a tra,do en su alor*a. Arustrado$ percibió que no hab,a en ella nada de aceite. 9onclu)ó que aquella l/"--3d ) sec( er un s,"bolo de su 'id 'c, ) sin +e;1 in des"iar los o*os de mi rostro iluminado por la llama del "aso$ en un desesperado gesto de e$ Lot palpó mecha de su lamparilla$ descubriendo que hab,a en ella un residuo de aceite. 9ur"&ndose$ comen;ó a herir l piedras del uego$ hasta que una chispa saltó hacia la mecha. in saberlo$ Lot estaba comandando con sus gestolos pasos para una gran liberación.1P Los trescientos pastores al "er el tenue brillo de la lamparilla$ se encaminaron r&pidamente hacia sus puestos$ permanecieron aguardando el apagar de la pequea llama.1I =esde el momento en que Lot se le"antó con su diminuta llama$ )o estaba mirando hacia sus o*os que mirabalos m,os. 6i que su a; tra,a seales de inenarrable angustia ) malos tratos. 's, mismo$ pude leer en sus o*os a;uleque la es-ern2 ) la +e toda",a no le hab,an abandonado.1+ El pequeo uego de la lamparilla de Lot$ con todo$ no resistir,a por mucho tiempo. Era necesario que sapagase$ para seali;ar la gran "ictoria.1Q 9uando la oscuridad "ol"ió a cubrir la a; de Lot$ mis trescientos pastores arremetieron sus cuernos contra lo"asos que manten,an ocultas las antorchas ardiendo. 5n gran ruido$ como de caballer,a en combate resonó potodas partes$ mientras que las antorchas eran suspendidas. Los trescientos cuernos utili;ados hasta entonces paconducir el rebao$ sonaban ahora como trompetas de conquistadores.1H 7odo el campamento se despertó de un solo brinco$ )$ sin saber cómo escapar de tan terrible in"estida que part,de auera ) de adentro$ los soldados comen;aron a luchar entre s, mismos$ mientras que mis pastores permanec,aen sus puestos$ haciendo sonar los cuernos.20 Los cauti"os$ estu"ieron mu) espantados al principio$ mas poco a poco ueron tomando conciencia de la graliberación que estaba oper&ndose en su a"or.21 9uando amaneció$ se re"eló ante nuestros o*os un escenario de completa destrucción 7odo el pueblo estabcubierto por millares de cuerpos rasgados por sus propias espadas ) lan;as. olamente unos pocos consiguierohuir de aquel campamento de muerte$ mas ueron perseguidos por mis dieciocho aliados que estaban armadosiendo alcan;ados en 4ob&$ que esta a la i;quierda de =amasco$ mientras tanto$ los cauti"os$ ahora liberadorecuperaban todas las rique;as de que hab,an sido saqueados por los enemigos.

C-,tulo

La Gran Liberación representa la liberación de Israel en los últimos días. braham descubre ue La +ra Liberaci$n se concretiz$ en ROSH HASHA!. braham predica la fe en el %esías a los cauti!os liberado

in!it5ndoles a purificarse en agua, solo tres lo aceptan" braham rechaza la oferta del rey de Sodoma" braham los fieles deciden conmemorar la "iesta de S#$O% en Salem" Las 6erlas del &aso" 7ien!enida festi!a en Salem -l encuentro de braham y %eluisedec" 8&éase Crono" ', ( y )9

1 =e la cima de la colina$ en tanto que )o "ibraba con la alegr,a de los cauti"os en aquella maana de liberación$ la 6o; de ahh habl&ndome de en medio de la llama:2 O @Est liberción que !o) se concreti2( re-resent l liberción que !e de o-err en los lti"os d,sl'ndo los re"nentes de tus !i#os( del cerco de nu"eross nciones que se lir/n $o3 con -ro-ósito de destruirlos; En aquel d,a en que triunaren sobre mi pueblo$ mi indignación ser& mu) grande$ contender contra l por medio de la peste ) de la sangre llu"ia inundante$ grandes rocas de grani;o$ uegoa;ure har caer sobre l$ sobre sus tropas ) sobre sus muchos pueblos que estu"ieren con l. 's,$ )o m



engrandecer$ *ustiicar mi santidad ) me dar a conocer a los o*os de muchas naciones ) sabr&n que )o so) eeor. sobre la casa de =a"id ) sobre los habitantes de Terusaln derramar el Esp,ritu de gracias ) de s#plicamirar&n hacia m, a quien traspasaron$ ) har&n lamentación como quien se lamenta por un hi*o unignito ) llorar& por l como quien llora amargamente por el primognito. En aquel d,a$ habr& una uente abierta para la casa d=a"id ) para los habitantes de Terusaln$ para remo"er el pecado ) la impure;a8. OU

3 9onsiente de la importancia histórica de aquel d,a de libera-ción$ tom un calendario )$ mir con sorpresa$ puesera Ros! 7s!n/( o d,a de las trompetas. 'qul era el primer d,a de un 'o <ue"o =ie; d,as despus "endr,a o" i-ur( el d,a de la puriicación de los pecados En el d,a 1P$ tendr,a lugar la +iest de Suot$ la alegre iestade las cosechas de otoo.

La llama que para m, se hab,a con"ertido en una representación del Mes,as >rometido$ se apagó en el momentoen que descend, al encuentro de los pastores ) de los muchos cauti"os ahora liberados. Llenos de alegr,a ) deadmiración$ todos quer,an saber como hab,a llegado a ser posible tan grande liberación$ solamente con lautili;ación de aqullas antorchas ) cuernos. Les habl entonces de la importancia de aquel uego que se hab,adesprendido del 'ltar$ para liberarlos en aquel "alle$ identi+ic/ndolo co"o el Mes,s Sl'dor;P 'l "er que todos cargaban en sus cuerpos ) mantos la suciedad de la escla"itud$ los in"it a seguirme hasta el r,oTord&n$ donde todos podr,an baarse$ para la puriicación de sus pecados.I olamente tres personas atendieron la in"itación: Lót ) sus dos hi*as m&s recientes. Los dem&s$ regresaroncontaminados hacia sus casas.+ 'ntes de partir$ el re) de odoma "ino a mi encuentro$ prometiendo darme todas las rique;as recuperada enaquella maana. o rechac su oerta$ para que nunca *am&s alguien pudiera decir que )o me enriquec, con aquelsaqueo.Q >ermanecimos acampados en los m&rgenes del r,o Tord&n$ en las proimidades de Tericó por doce d,as. Enaquellos d,as de rerigerio$ todos se hallaron libres de las impure;as$ de*&ndolas en las aguas del Tord&n. Este era u preparati"o especial para la iesta de uVot que decidimos conmemorar en alem.

H Llenos de alegr,a$ iniciamos una marcha ascendente rumbo a la ciudad de alem$ inconsciente de la eli; sorpresque nos aguardaba. o segu,a al rente teniendo a mi lado a Lót ) sus dos hi*as$ ) detr&s "en,an los 300 pastores$conduciendo el gran rebao.10 ' medida que a"an;&bamos$ comenc a notar que mi "aso que se hab,a quedado "acio al amanecer$ se tornómu) pesado. 'l ba*arlo$ mir sorprendido al descubrir dentro de l muchas perlas de "ariados tamaos ) brillosque se ormaron misteriosamente.11 'l "er nosotros a lo le*os la blanca ciudad$ comen;amos a o,r sonidos de una gran iesta. 'cordes armoniososrepercut,an por los montes$ mientras a"an;&bamos por el camino.12 Mi curiosidad en conocer aquella ciudad ) a su *o"en re) era inmensa$ pues de boca de muchos )a hab,a o,doacerca de su grande;a ) ama. e trataba de un reino dierente de todos los dem&s$ donde los s#bditos eranentrenados no en el mane*o de arcos ) lechas$ sino en el dominio de instrumentos musicales. Melquisedec$ su *o"en re)$ reg,a a todos con un cetro mu) especial: un la#d$ por el cual hab,a pagado un precio ele"ado.13 En tanto crec,a en m, la alegr,a por estarnos aproimando a la 9iudad del (ran !e)$ "imos una multitud "estidde lino ino$ puro ) resplandeciente$ saliendo a nuestro encuentro. 7odos tra,an instrumentos musicales$ mientrascantaban un !i"no de 'ictori; 'l rente de la multitud "en,a un *o"en tocando un la#d$ tra)endo en la rente unacorona repleta de piedras preciosas$ que brillaban ba*o la claridad del sol poniente. o tu"e la certe;a de que aquera el tan aclamado re) de alem.1 'l momento de nuestro encuentro$ quedamos admirados con la salutación que nos hicieron Gnclin&ndosedelante de m,$ Melquisedec airmó:1P OJBendito eres t Abr!"( sier'o del Dios Alt,si"o( que -osee los cielos ) l tierrF ) bendito se elDios Alt,si"o( que entre3ó tus d'ersrios en tus "nos%; G



C-,tulo H +randes re!elaciones de %eluise:dec y su pueblo" Los !encedores son coronados" l ser coronado, braham seconmue!e al obser!ar heridas profundas en las manos de %eluisedec" %eluisedec promete relatar su historia" %eluisedec, al partir el pan y el !ino, es honrado" Las ' perlas como diezmo" Las instrucciones y profecías d %eluisedec"

1 orprendidos por la esti"a recepción$ uimos introducidos en la ciudad$ donde la belle;a de las mansiones )

*ardines nos causó mucha admiración. 7odo all, era puro ) lleno de pa;.2 Auimos recibidos en el palacio real$ ediicado sobre el Monte ión. 'll,$ una nue"a sorpresa nos aguardaba:3 La gran sala del trono$ estaba toda adornada con representa-ciones de nuestra "ictoria sobre los enemigos. 4ab,aen medio de la sala una mesa mu) larga$ cubierta por toallas de lino ino adornadas con hilos de oro ) piedras preciosas. obre la mesa hab,a 30 coronas$ cada una tra)endo la inscripción del nombre de un "encedor. En ungesto que nue"amente nos sorprendió$ Melquisedec$ tomando las coronas$ comen;ó a colocarlas en la cabe;a decada uno de nosotros$ comen;ando por Lot ) sus hi*as. Est&bamos todos admirados por el hecho de que el re) dealem nos conociera indi"idualmente$ ) por tener preparadas aquellas coronas mucho antes de que usemos"encedores. o obser"aba la alegr,a de mis compaeros coronados$ cuando$ tomando una corona seme*ante a la su)a$ el re)de alem se dirigió a m, con una sonrisa. 'l le"antarla sobre mi cabe;a$ not algo que hasta entonces no hab,a

percibido: us manos tra,an cicatrices de heridas proundas. 6encido por un sentimiento de gratitud$ me postr asus pies )$ conmo"ido$ bes sus bondadosas manos$ ba&ndolas con mis l&grimas.P 'l le"antarme$ le pregunt el signiicado de aquellas cicatrices. 9on una tierna sonrisa$ l prometió que ir,a acontarme toda la historia de quel -rós-ero reino( ) de cu/nto le costó obtener su -2;I =espus de coronarnos$ Melquisedec nos hi;o sentar alrededor de la gran mesa$ ) comen;ó a ser"irnos el pan )el "ino ' partir de aquel momento$ comen;amos a !onrrlo co"o Scerdote del Dios Alt,si"o;+ En un gesto de gratitud$ tom el "aso repleto de perlas$ ) lo coloqu a los pies del re). 7om&ndolo en los bra;os$l comen;ó a acariciarlo$ sin atentar hacia el brillo de las perlas. Epres&ndome la gratitud por aquella orenda$ medi*o que aceptar,a el "aso )$ que de las perlas$ solamente aceptar,a el die;mo.Q Gnmediatamente comenc a contar las *o)as$ separando las m&s bellas para el re). 4ab,a un total de 1$0 perlasde las cuales le entregu 9>>; Nl las guardó cuidadosamente en una ca*ita hecha de oro puro$ en cu)a tapa hab,a

lindos adornos con incrustaciones de pequeas piedras preciosas.H =espus de recibir el die;mo que simboli;aba la gran liberación operada por ahh en la planicie$ Melquisedellamó "enir a l a uno de sus s#bditos que era maestro en adornos ) pinturas$ orden&ndole honrar el "aso con unlindo grabado que retratase el momento en que )o lo orend.10 Mientras el *arro era pintado$ Melquisedec comen;ó a contarme la historia de su reino$ desde su undaciónhasta aquel momento en que est&bamos conmemorando la gran "ictoria sobre los enemigos.11 'l de"ol"erme el "aso$ ahora honrado con el m&s bello grabado e inscripciones que ealtaban la *usticia$ lahumildad ) el amor$ el re) de alem me ordenó que lle"ara conmigo el "aso con aquellas perlas. =urante seis ao)o ) mis pastores deber,amos contar a todos la historia de aquel "aso que ue "ictorioso por causa de la llama delaltar. ' todos aquellos que$ con arrepentimiento$ aceptasen la sal"ación representada por su historia$ deber,amosorecer una perla. 'l inal de los seis aos$ las perlas se acabar,an a no habr,a oportunidad de sal"ación.

obre"endr,a entonces el sptimo ao$ en el cual habr,a un tiempo de 3rn n3usti ) destrucción$ cuandosolamente habr,a protección para aquellos que pose)esen las perlas. >or esa ocasión$ las ciudades de la planicieser,an totalmente detruidas por el +ue3o del #uicio( ) los dem&s pueblos que no se arrepintiesen$ ser,an die;mados por grandes plagas.



C-,tulo

Continúan las re!elaciones de %eluisedec" contecimientos ue se !erificar5n en <osh *ashan5, en =om >ipur en la fiesta de Su?ot" Seis años de oportunidad" La santificaci$n del día de reposo, señal de alianza con =ah@éh" La ue&a 'erusal(n re&elada al "inal del s(ptimo a)o" La *enida del +esías" La resurrección de los "ieles "allecidos y trans"ormación de los &i&os &ictoriosos. ,oronación de los justos en la ,iudad Santa. 8&éase Crono)9

1 obre el triuno que acab&bamos de obtener sobre numerosos e*rcitos$ Melquisedec$ despus de repetirme las palabras dichas por el Mes,as$ di#o un se0l que ser, i"-ortnte -r quéllos que 'i'iesen -or l ocsión dl 3rn liberción de Isrel; 'irmó que$ multiplicando las 1 perlas del die;mo por el n#mero de columnas desu palacio$ encontrar,a el ao que trer, su consu"ción l 3rn liberción de Isrel . Mo"ido por lacuriosidad$ comenc inmediatamente a contar las columnas Eran 0 columnas de m&rmol$ adornadas con piedras preciosas.2 'l regresar al re) con el resultado de los c&lculos$ l comen;ó a hacer predicciones sobre los grandesacontecimientos que tendr,an lugar al inal de aqul ao:3 O Al lle3r l -lenitud de los tie"-os( todos los es+uer2os !u"nos en busc de l -2 se +rustrr/n . Enaquel tiempo$ numerosas naciones se aliar&n contra el reino de alem 4abr& una batalla como nunca hubo$ )tod l tierr ser/ csti3d -or el +ue3o =espus de agotar ellos todos los recursos en su deensa$ Gsrael "er&$

con desesperación$ incontables enemigos marchando contra ellos$ con el propósito de eliminarlos. 9omo Lot en sunoche de angustia$ ellos "er&n morir su esperan;a$ cuando$ en !osh 4ashan&$ ha de o,rse en medio de las ruinas dalem$ los acordes armoniosos de un la#d$ tocados por un beduino de la tribu de 7aamireh u m#sica har& renacel +e ) l es-ern2 en un "undo "e#or( donde nción no se le'ntr/ contr nciónF donde ls l/3ri"s( edolor ) l "uerte no e5istir/n "/s; G =espus de consolar a los aligidos con los acordes de su la#d$ el beduino tomar& el "aso con los pergaminos dela tumba de =a"id$ ) lo lle"ar& sobre los hombros. En aquel d,a$ estar&n los pies su)os sobre el Monte de losli"os$ )$ al clamar por la liberación de Gsrael$ habr& un uerte terremoto que agrietar& el Monte por la mitad$surgiendo del oriente hacia el occidente un enorme "alle. En aquel d,a$ toda la tierra de Gsrael ser& uertementesacudida$ sobre"iniendo una total destrucción para todos los e*rcitos enemigos 4abr&$ sin embargo$ sal"ación-r todos quéllos que( con rre-enti"iento( se re+u3iron b#o ls ls del Eterno( ln2ndo le#os de s, los

instru"entos de 'iolenci;P 7oda la humanidad testimoniar&$ con espanto$ las escenas de la liberación de los hi*os de Gsrael. En aquel d,a$muchos pueblos ) poderosas naciones se establecer&n al lado de ahh de los E*rcitos Multitudes de los *ud,osde la di&spora se aproimar&n$ diciendo: <os iremos con "osotros$ porque sabemos que el Eterno est& de "uestrolado.I EL OM I*UR que seguir& a la liberación$ ser& un d,a de puriicación de las impure;as de todos aqullos quaceptaron la sal"ación En aquel d,a acabar& la ce3uer de los !i#os de Jcob( ) mirar&n hacia 'qul a quientraspasaron$ ) llorar&n amargamente por l como se llora por un hi*o unignito.

+ E< L' =IES4A DE SUO4 &COSEC7AS8 ser& derramado el Esp,ritu de =ios sobre toda carne suceder&que$ todo aqul que in"oque el nombre de ahh$ ser& sal"o$ recibiendo una perla del "aso.

Q En el decorrer de los d,as de uVot$ llu"ias de bendiciones caer&n sobre el inmenso "alle$ haciendo surgir a la"ista de todos los pueblos$ en toda la tierra anta$ un para,so repleto de alegr,a ) pa;.H En quel d, los ele3idos de Dios co"-render/n ls -lbrs del libro110 8,dme$ "osotros$ que procur&is la *usticia$ "osotros que busc&is a ahh. Mirad hacia la roca de la cualuisteis ca"ados$ hacia la ca"erna de la cual uisteis sacados. Mirad hacia 'braham$ "uestro padre$ ) hacia ara$aquella que os dio a lu;. Nl estaba solo cuando lo llam$ mas )o lo bendi*e ) lo multipliqu. ahh consoló aión$ consoló todas sus ruinas l transormar& su desierto en un Edn ) su soledad en un *ard,n. En ellaencontrar&n go;o ) alegr,a$ c&nticos de acción de gracias ) sonidos de m#sica8.

11 En aquel d,a los redimidos mirar&n hacia el humilde beduino que liberó de la ca"erna el "aso de 'braham$ )cantar&n con alegr,a:



12 89u&n bellos son$ sobre los montes$ los pies del mensa*ero que anuncia la pa;$ del que proclama buenas nue"as) anuncia la sal"ación$ del que dice a ión: Dh tu =ios reinaF >orque ahh consoló a su pueblo$ l redimióTerusaln. ahh descubrió su santo bra;o a los o*os de todas las naciones$ ) todos los etremos de la tierra "er&la sal"ación de nuestro =ios8.

13 Durnte seis 0os( toda la humanidad$ iluminada por la ma)or re"elación del amor ) de la *usticia de ahhtendr& oportunidad de romper con el imperio del pecado$ unindose a los hi*os de Gsrael en su marcha de puriicación ) restauración del reino de la lu;.U

1 Entonces acontecer& que$ todos los sobre"i"ientes de las naciones que marcharon contra Terusaln$ subir&n$ atras ao$ para postrarse delante del re) ahh de los E*rcitos$ ) para celebrar la iesta de uVot. acontecer& quaqulla de entre las amilias de la tierra que no suba ) no "enga$ atraer& contra s, misma la plaga con la quahh herir& a las naciones que no suban a celebrar la iesta de uVot.

1P En aquellos aos de oportunidad$ sonar& por todas partes del mundo el #ltimo con"ite de misericordia$ en uintento -or que todos los -ecdores se rre-ientn ) se unn en un etern lin2 con !Ké!( diciendo1

1I %As, dice !Ké!1 Obser'd el derec!o ) -rcticd l #ustici$ porque mi sal"ación esta pronta a llegar ) m *usticia$ a maniestarse. iena"enturado el hombre que proceda as,$ ) el hi*o del hombre que en esto se airma$ quguarda el s&bado ) no lo proana ) que guarda su mano de practicar el mal. <o diga el etran*ero que se entregó ahh: O<aturalmente ahh "a a ecluirme de su pueblo$O ni diga el eunuco: O<o ha) duda$ )o no paso dun &rbol seco8O >ues as, dice ahh a los eunucos que guardan mis s&bados ) optan por aquello que es m"oluntad$ permaneciendo ieles a mi alian;a: J4e de darles$ en mi casa ) dentro de mis muros$ un monumento ) unombre m&s precioso del que tendr,an como hi*os e hi*as 4e de darles un nombre eterno$ que no ser& etirpado. en cuanto a los etran*eros que se entregaren a ahh para ser"irlo$ s,$ para amar el nombre de ahh con"ertirse en sus sier"os$ a saber$ todos los que se abstienen de proanar el s&bado ) que se mantienen ieles a malian;a$ )o los traer a mi santo monte ) los cubrir de alegr,a en mi casa de oración. us holocaustos ) susacriicios ser&n bien aceptados en mi altar. En eecto$ mi casa ser& llamada casa de oración para todos lo pueblos8.

1+ En los seis aos de oportunidad$ amael$ el gran engaador$ en un gesto de desesperación$ e"-ler/ todos lrecursos -osibles para impedir la reali;ación de ahh a tra"s de u pueblo. En o-osición l snti+icció

del s/bdo que es l se0l de l lin2 entre !Ké! ) sus esco3idos$ nu"erosreli3iones( lids 3obernntes i"-,os( i"-ondr/n otro d, -r el culto( no -udiendo co"-rr ni 'endetodos quéllos que se "ntu'ieren +ieles l lin2 de !Ké!.

En aquellos aos de pruebas$ los elegidos de =ios sobre"i"ir&n mediante el cuidado de los &ngeles$ que loconducir&n distantes de las ciudades populosas que ser&n castigadas por las siete #ltimas plagas que caer&n soblos impenitentes al inal de los seis aos.1Q =urante los seis aos de la cosecha inal$ el Mes,as ediicar& una <ue"a ) Eterna Terusaln$ adorn&ndola con lohechos de *usticia de us escogidos. Esa <ue"a Terusaln solamente ser& re"elada al completarse toda la *usticdi"ina$ al inal del sptimo ao$ per,odo en que los elegidos de =ios tendr&n como desa,o "i"ir una "ida siculpas$ pues cualquier acto de rebeld,a en aquel tiempo$ estar,a sin epiación$ signiicando una eterna "ergRen; para el 9reador.1H Al co"-letrse los siete 0os( el Mes,s -recer/ en ls nubes del cielo( co"-0do -or tods l!uestes celestilesF Al tocr Su tro"-et en quél 3rn Ros! 7s!n/ $ los ieles allecidos$ resucitar&re"estidos de gloria los "i"os "ictoriosos$ ser&n transormados en un abrir ) cerrar de o*os$ recibiendo cuerpo perectos Tuntos$ todos los redimidos ser&n rrebtdos hacia la <ue"a Terusaln$ en un "ia*e inol"idable qucomen;ar& en el -ri"er d, de l +iest de SuotF =espus de siete d,s de +eli2 scensión( lle3r/n LCiudd Snt -r con"e"orr( delnte del trono( el oct'o d, de l +iest . 9omo si uese un sueo$ lrescatados del eor entrar&n en La 9iudad anta$ encontrando a su lado norte$ el *ard,n del Edn$ en medio d



cual se ele"a el monte ión$ el lugar del trono de ahh. Corondos -or el Mes,s$ los redi"idos entonr/n c/ntico de l 'ictori( haciendo "ibrar por todo el espacio los acordes de sus arpas$ la#des ) lautas.

C-,tulo Continúan las predicciones de %eluisedec" braham y sus pastores proclaman la sal!aci$n represen:tada por historia del !aso y su llama redentora" 3torgan perlas a los creyentes" An tiempo de opor:tunidad antes de lcalamidad" Las perlas del !aso no tenían significado para Sara"

1 Des-ués de -ro+erir tods ests -redicciones$ Melquisedec me di*o que toda la eperiencia que est&bamo"i"iendo$ era -re +i3urti'; >ara que todo el drama se consumase$ ten,amos toda",a delante de nosotroacontecimientos importantes primeramente$ )o deber,a regresar al !oble de Mambr *untamente con mis pastore para proclamar a todos la sal"ación representada por la historia de aquel "aso. 4odo quél que( corre-enti"iento( ce-tse l Mes,s re'eldo( obtendr, el -erdón de sus -ecdos( recibiendo un -erl;

'l inal de seis aos$ al llegar la ",spera de !osh 4ashan&$ las perlas se acabar,an$ no habiendo m&s oportunidade sal"ación. >or aquel tiempo$ el uego del *uicio caer,a sobre las ciudades de odoma ) de (omorra$ habiendterribles plagas sobre todos los inieles.

2 'l o,r tales palabras del re) de alem$ me sobre'ino gran n3usti$ al cordr"e de los lti"os -sos d

SrF o tem,a que ella$ en su incredulidad$ no aceptase una perla. i esto aconteciese$ mis lindos sueos echar,an por tierra$ pues no conseguir,a ser eli; en su ausencia. Le)endo en mis o*os la angustia$ Melquisedec mconsoló con una promesa:3 O Abr"( de qu, seis 0os !Ké! te 'isitr/ en tu tiend( ) tu es-os ser/ curd de su esterilidEll se con'ertir/ ) te dr/ un !i#o que se ll"r/ Isc . O 'l inali;ar la iesta de uVot$ retornamos a nuestras tiendas *unto al !oble de Mambr. ' medida en que ,bamoa"an;ando por el camino$ muchas personas nos rodeaban$ admirados por la belle;a del "aso repleto de perlas todos cont&bamos la historia de su llama redentora$ ) orec,amos las perlas a todos los que cre)endo$ aceptaban lsal"ación.P 9uando llegamos al !oble de Mambr$ una multitud de personas en l esperaba Muchos hab,an o,do hablar dla milagrosa liberación operada a tra"s de aquel "aso que hab,a sido el blanco de tanto menosprecio. 'hora$ todo

estaban enmudecidos al "erlo gloriicado.I Tuntamente con mis pastores$ continuamos proclamando el ininito amor de ahh re"elado por la llama. En#mero de aquellos que procuraban obtener las perlas ue aumentando$ d,a tras d,a$ ) todos ramos elices.+ Los d,as$ los meses ) aos ueron pas&ndose$ ) la cantidad de perlas ue disminu)endo dentro del "asoEst&bamos "i"iendo ahora los #ltimos meses del seto ao$ que era el lti"o de o-ortunidd; ' medida en qulos d,as se pasaban$ aumentaba en mi cora;ón una preocupación ) una angustia$ pues ara hasta entonces no hab,tomado inters en apoderarse de su perla$ a pesar de mis constantes ruegos. En quellos "o"entos de +licción en que cl"b Dios -or l sl'ción de Sr( "i nico consuelo erls lti"s -lbrs del re) de Sle"( de que l +inl de los seis 0os ell ser, trns+or"d;H 6i",amos ahora los #ltimos d,as del seto ao La conciencia de que el tiempo se estaba agotando$ hac,a qumuchas personas me procurasen desde la maana hasta la noche$ para apoderarse de las perlas de la sal"ación. 9o

el cora;ón herido por inepresable alicción$ )o insist,a con ara$ procurando con"encerla de su necesidad etomar$ cuanto antes$ una perla$ pues las mismas se estaban haciendo cada d,a m&s escasas. in considerar mangustia$ ara desdeaba mis solicitudes$ air-mando que aquellas perlas no ten,an ning#n signiicado para ella.



C-,tulo

braham intenta con!encer a Sara sin tener éxito" braham recibe con hospitalidad a tres peregrinos" -l Señocon!ierte a Sara y le bendice, le entrega dos perlas, una para ella y otra para su hi0o" braham cae a los pies d su <edentor y recibe la última perla"

1 =espus de una noche en "ela en que$ desesperadamente$ procur con"encer a mi amada de posesionarse de s perla$ aceptando la sal"ación representada por aquel "aso$ "i el sol surgir tra)endo la lu; del #ltimo d,a O",spera de !osh 4ashan&. O 'l mirar hacia dentro del "aso en aquella maana$ "i que restaban apenas tres perla'l admirarles el brillo$ comenc a imaginar que la m&s brillante ser,a para mi hi*o prometido$ la de brillintermedio ser,a la de ara$ ) la #ltima ser,a la m,a. Ese pensamiento me tra*o ali"io ) esperan;a *ero( l "is"tie"-o( co"encé -reocu-r"e con l -osibilidd de que lle3rn -ersons -rocurndo obtenerlsF S'iniesen( )o no -odr, ne3rles el derec!o ells;2 7omado por esa preocupación$ permanec, sentado ba*o el !oble de Mambr. En el transcurso del d,a$ msobre"ino un gran estremecimiento cuando "i a lo le*os tres peregrinos que caminaban rumbo a nuestra tiend9omenc a clamar a =ios que ellos cambiaran de rumbo$ pero mis clamores no ueron atendidos. =ominado pouna gran amargura$ corr, hasta ellos$ )$ despus de postrarme$ los in"ite hacia la sombra.3 7omando una "asi*a con agua$ comenc a la"arles los pies$ limpi&ndolos del pol"o del camino. 'l "er los pieheridos ) ampollados de aqullos hombres$ sent, compasión por ellos 9omprend, que hab,an "enido de mu) le*oenrentando peligros ) desa,os$ con el propósito de obtener a tiempo las perlas. .i que ellos ern "uc!o "/"erecedores que )o( Sr ) nuestro !i#o -ro"etido; 'l la"ar los pies del tercero$ mi cora;ón que hasta entonces estaba aligido$ se lleno de pa; ) alegr,a Gmaginaben aquel momento$ cu&n terrible ser,a si aqul tercer peregrino$ no se hubiese unido a los dos primeros en aqutra)ecto En ese caso )o estar,a obligado a tomar la #ltima perla$ subiendo sin mi amada a alem. i tu"iera )o qu pasar por esa eperiencia$ la perla que simboli;aba la alegr,a de la sal"ación$ se con"ertir,a para m, en un s,mbode soledad ) triste;a$ pues la larga "ida del cario de ara$ ser,a para m, el ma)or castigo$ como la propia muerte.P =espus de la"arles los pies$ comenc a ser"irles el alimento que ue especialmente preparado para elloMientras les ser",a en silencio$ estaba )o esperando el momento en que me preguntar,an por las perlas. >ero sre"elar ninguna prisa$ ellos hablaban sobre la larga caminata que hicieron$ sobre las ciudades por donde hab,a pasado. o les pregunt si conoc,an alem Ellos me respondieron airmati"amente$ agregando que en aquellos seaos$ muchas obras hab,an sido reali;adas en aqulla ciudad$ en preparación para una gran iesta que estaba poreali;arse dentro de un ao m&s$ por la ocasión de uVot.I Las palabras de aqul tercer peregrino$ el m&s con"ersador de los tres$ comen;aron a traerme$ misteriosamentun sentimiento de esperan;a. 'l mirar hacia sus o*os a;ules$ .i que él se -rec, Melquisedec;+ !ecordaba la #ltima promesa hecha por el re) de alem$ cuando el tercer peregrino me preguntó con una sonrisaQ O'bram$ DB=onde est& ara tu mu*erCFO H 'tónito$ le pregunt:10 O B9ómo sabes mi nombre ) el nombre de mi esposaCO11 El peregrino$ me respondió:12 O<o solamente s "uestros nombres$ sino tambin s que$ de aqu, a un ao "osotros tendris un hi*o que sellamado Gsaac. O 13 'l o,r las palabras del "isitante$ corr, hacia dentro de la tienda a in de llamar a mi esposa$ para que o)ese la palabras de aqul peregrino.1 'l "erla$ el peregrino le preguntó:1P O Bara$ porqu os re,s de mis palabrasCO 1I 'sustada$ ara$ contestó:1+ O Do no re, mi seorF1Q O<o dig&is que no re,steis$ pues )o os "i riendo dentro de la tienda. O 'irmó el peregrino.1H 9onsiente de estar delante de alguien que conoc,a su interior$ ara le preguntó:20 O DB%uin eres t# eorCF



21 O No So) l ll" que se des-rendió del =ue3o del Altr -r estr en el 'so de tu es-oso No So) Mes,s( el !Ké! que su+re !u"illciones ) des-recios -or "or Su -uebloG 22 4abiendo hecho esta re"elación$ el peregrino etendió us manos sobre la cabe;a de ara para bendecirla olhasta entonces "i$ que ellas estaban "rcds -or cictrices seme*antes a las del re) de alem.23 El -ere3rino( con "uc! ternur( co"en2ó !blr l cor2ón de "i "d$ rescat&ndola de su ca"erna dincredulidad:2 O NSr( 'lios eres "is o#os N4odo tu -sdo de incredulidd e in+ertilidd est/ -erdondoF N4en3-r ti un +uturo 3lorioso( -ues t te con'ertir/s en "dre de "uc!os -ueblos ) ncionesG 2P =espus de decir estas palabras$ el noble "isitante se encaminó hacia el "aso e$ inclin&ndose$ tomó de el las tr perlas restantes. =irigindose a ara$ le entregó dos perlas$ ) le di*o::H GUn es -r ti ) l otr es -r tu !i#o Isc; G 2+ 9on la 'id trns+or"d -or el "or de !Ké!( ara se postró agradecida a los pies de aqul peregrino qula hab,a sal"ado en el #ltimo momento de oportunidad. 9uando la "i postrarse sumisa$ "i cor2ón -or tnt0os +li3ido( se ro"-ió en l/3ri"s de le3r, ) 3rtitud( ) c, los -ies de "i Redentor ) Re);2Q =espus de consolarnos con la certe;a de nuestra eterna sal"ación$ el peregrino me entregó la #ltima perl9uando la apret en mis manos sent, una gran lu; de alegr,a ) pa; penetrar todo mi ser$ ) comenc a lbr Eterno -or l certe2 de que tendr, -r sie"-re "i ldo "i querid Sr ) l !i#o de l -ro"es qudentro de un 0o ncer,;

C-,tulo 9P braham acompaña al Señor hasta la colina desde donde el Señor en!ía a sus dos compañeros a una misi$n=ah@éh se lamenta por la destrucci$n ue habr5 de sobre!enir a los habitantes de las ciu:dades de auel hermos!alle. braham intercede por auel pueblo" Bo había diez 0ustos en Sodoma y +omorra" Lamentaci$n de =ah@é Los dos compañeros son en!iados para rescatar a Lot y sus hi0as" braham se postra agradecido a =ah@éh por linter!enci$n en el rescate de sus familiares"

1 =espus de estas cosas$ ahh se despidió de ara ) de los pastores que all, se encontraban$ ) me in"itó a qulos acompaara hasta la colina que esta rente al "alle. 9uando llegamos a aquel lugar$ el Eterno se despidió de sudos compaeros$ en"i&ndolos a una misión especial en odoma.

2 =e la cima del monte contempl&bamos los rtiles "alles ) bosques que$ como un para,so$ se etend,an en ambom&rgenes del r,o Tord&n$ circundando las prósperas ciudades$ dentro de las cuales se destacaban odoma (omorra.< =ue sobre quell colin que( des-ués de l contiend entre "is -stores ) los -stores de Lot( le di lo-ortunidd de esco3er el ru"bo se3uir( -ues no -odr,"os -er"necer #untos; Atr,do -or ls rique2de l c"-i0( él decidió "udrse !ci ll/; 'l mirar hacia mi compaero que permanec,a en silencio desde el momento en que "imos la campia$ msorprend, al "erlo llorando. Le pregunt el moti"o de su triste;a$ ) Nl$ sollo;ando respondió: GEste es -r ", un d, de "uc! triste2( -ues -or lti" 'e2 "is o#os -odr/n -osrse sobre este 'l+értil; NLloro -or los !bitntes de ess ciuddes que no sben que sus d,s cbr/nG I La declaración de ahh me tra*o el recuerdo de todos aqullos cauti"os que hab,an sido liberados seis ao

antes lamentablemente$ csi todos rec!2ron el b0o de l -uri+icción $ regresando inmundos hacia sus casanic"ente Lot ) sus !i#s ce-tron l sl'ción( to"ndo -osesión de sus -erls; >ensando en algun posibilidad de liberación para aqul pueblo$ pregunt al eor:+ O B si acaso eiste en aquellas ciudades$ cincuenta personas *ustas$ a#n as, ser,an ellas destruidasCO Q ahh me di*o que si hubiese cincuenta *ustos$ toda la planicie ser,a perdonada.H O B) si ha) P *ustosCO 10 Oi hubiese all, P *ustos$ todas aquellas ciudades ser,an perdonadas. O 11 9ontinu con mis indagaciones hasta llegar al n#mero die;. ahh me di*o que si hubiese 10 *ustos en aquellciudades$ toda la planicie ser,a perdonada.12 7orturado por una inepresable agon,a de esp,ritu$ !Ké! 'ol'ió llorr "r3"ente$ mientras que co"o; embargada$ pronunciaba un triste lamento:



13 O Sodo" ) $o"orr( cu/nts 'eces quise o #untr tus !i#os( co"o l 3llin #unt sus -olluelodeb#o de ls ls( "s 'osotrs no ce-tsteis "i -rotección. N¿*or qué es que 'osotrs c"bisteis l lu2 d"i sl'ción( -or ls tiniebls de este reino de "uerte? DMis o,dos est/n tentos en busc de( -or lo "enoun -le3ri( "s todo es silencioF NMis "nos est/n e5tendids( -ronts i"-edir el +ue3o del #uicio( "'osotrs rec!2/is "i socorroG 1 Gnclin&ndome al lado de mi suridor compaero$ me un, a Nl en la lamentación. En aquel momento de dolotu"e la certe;a de que Melquisedec tambin sur,a por todos aquellos que hab,an cambiado el amor ) la pa; dalem$ por las ilusiones de aquel "alle de destrucción.1P =espus de un largo llanto$ ahh me consoló$ con la re"elación de sus dos compaeros$ se encontraban eaquel momento en odoma$ con la misión de sal"ar a Lot ) a sus hi*as libr&ndoles de la muerte. us palabras mtra*eron gran ali"io$ ) me postr agradecido a sus pies.

C-,tulo 99

=ah@éh comisiona a braham registrar en un rollo la historia del &aso, así como la historia de Salem, par posteriormente entregarlo dentro del &aso a %eluisedec" 4estrucci$n de Sodoma y +omorra" braham slamenta en extremo"

9 Antes de -rtir( !Ké! "e encr3ó un "isión( diciendo12 O 4o" un rollo 'c,o ) re3istr en él l !istori del 'so ) l !istori de Sle"( con+or"e o,steis de lolbios de Melquisedec; =entro de un ao$ t# ) todos aquellos que aceptaran la sal"ación$ deber&n subir a ale para la iesta de uVot En aquel d,a$ de"ol"er&n al re) de alem el "aso$ oreciendo dentro de l como presente$ rollo. O 3 En aquella misma tarde$ en obediencia a las órdenes de ahh$ comenc a registrar la historia "i"ida por m, por mis pastores$ desde el momento en que part, rumbo al "alle$ lle"ando sobre la espalda el "aso con su llamarad 'l d,a siguiente$ el sol )a iba alto$ cuando$ al mencionar la ciudad de odoma en el manuscrito$ record que aquera el d,a de su destrucción. 9on el cora;ón acelerado$ corr, hacia all& ) me qued espantado con el escenario quse etendió delante de mis o*os: En lugar de aqul "alle rtil$ seme*ante a un para,so$ hab,a un desierto humeantsin "ida alguna En lugar de las ciudades de odoma ) (omorra$ hab,a un cr&ter proundo$ hacia donde las agudel mar salado escurr,an.P %uebrantado ante esa "isión de destrucción$ "ol", a la tienda con el cora;ón entristecido. El recuerdo de tnt-ersons que( -or rec!2r el -erdón di'ino( !b,n sido consu"ids -or el +ue3o( me de*aba proundamendebilitado. En los d,as siguientes$ no encontr uer;as para escribir !egres otras "eces a la colina$ con esperan;a de que todo aquello uese una pesadilla$ pero en lugar del "alle rtil )o solamente consegu,a percibaquel caos.I =emor "arios d,as para que )o "ol"iera a tener el &nimo de proseguir con los escritos del rollo.



L 7istori de Sle"?5n relato escrito por 'braham@

'braham relata La *istoria de Salem seg#n lo escuchó Jde los labios de %eluisedec/ en la ocasión en qusubieron a alem para celebrar la iesta de uVot$ despus de La +ran Liberaci$n. Adon,s$ cansado de liniquidades del pueblo e inspirado en las "irtudes de su amado hi*o$ ediica una ciudad: J un reino diferente a todo

los dem5s/. =espus de "i"ir el *#bilo de la "ictoria ) la lamentación de la perdición$ Melquisedec recibe unre"elación de un &ngel$ en la que le declara que Jtodo auel drama ue estaba !i!iendotenía un sentid prefigurati!o, retratando acontecimientos pasados y futuros, ue en!ol!ían todo el !asto uni!ersoK. ?6ase 9ron1 ) 2@

C-,tulo 9

Adonías , hombre 0usto, busca alcanzar su sueño de 0usticia y paz" -scribe en un pergamino las leyes ue regiríael nue!o reino de paz" 2nicia la edificaci$n de Salem, la cual esta destinada únicamente pa:ra los limpios dcoraz$n"

1 Nsta es la historia de alem seg#n la o, de los labios de Melquisedec en la ocasión de la iesta de uVot$ quincd,as despus de la liberación de Lót ) sus hi*as.2 7odo comen;ó con un sueo en el cora;ón de un hombre llamado Adon,s Nl pose,a muchas rique;as$ peronada apreciaba m&s que a la #ustici ) a la -2 que nac,an de la sbidur, ) del "or.3 9ansado con las in*usticias que predominaban por toda la tierra de 9ana&n$ Adon,s resol"ió ediicar un reinque uese regido -or le)es de "or ) de #ustici. El nombre de la capital de ese reino ser,a alem$ la 9iudad de >a;. Los s#bditos de alem no empuar,an arcos ) lechas$ m&s ser,an entrenados en el arte musical 9ada habitande alem tendr,a siempre al alcance de sus manos un instrumento musical$ para epresar por medio de el la pa; ) alegr,a de aquel nue"o reino. Tuntos$ ormar,an una poderosa orquesta en la lucha contra la desarmon,a que nac

del orgullo ) del ego,smo.P El primer paso de 'don,as para la concreti;ación de su plan$ ue elaborar las le)es del nue"o reino$ las cuales las escribió en un pergamino. Los s#bditos de alem no podr,an "entir$ !urtr$ odir$ ni "tr a sus seme*anteEl or3ullo ) el e3o,s"o eran sealados como causa de todo el mal$ por tanto$ no podr,an eistir en aquel lugar d pa;.I Las le)es del -er3"ino requer,an la pr&ctica de la !u"ildd$ de la sinceridd$ de la "istd$ )$ por encima dtodo$ del amor que es la ma)or de todas las "irtudes.+ =espus de registrar en el pergamino las le)es que regir,an aquel reino$ 'don,as comen;ó a planiicar larquitectura de alem. er,a una ciudad al principio pequea$ con habitaciones para mil doscientas personas. 9omel lugar de su ediicación$ ue elegida una región alta de 9ana&n$ al occidente del Monte de los li"os.Q En poco tiempo$ la reali;ación de 'don,as comen;ó a atraer personas de todas partes que$ de cerca ) de le*o"en,an a conocer los palacios ) las mansiones que estaban siendo ediicados. 'dmirados ante la belle;a de aquelciudad tan blanca$ los "isitantes preguntaban sobre quines ser,an sus habitantes. 'don,as les mostraba pergamino$ diciendo que Sle" se destinb los li"-ios de cor2ón Gquéllos que estu'iesen dis-uestosobedecer sus le)es; G



C-,tulo :

Conclusi$n de la edificaci$n de Salem" +el-uisedec , la inspiraci$n de su padre" donías buscando honrar a u súbdito especial, !e en Samael un refle0o de las !irtudes del propio príncipe" Samael es honrado"

1 La ediicación de la ciudad ue inalmente concluida ) alem se re"eló hermosa como una no"ia adornada$ a espera de su esposo.2 'sentado en su trono$ 'don,as ahora eaminaba a los nu-merosos candidatos a s#bditos que llegaban de toda partes. 'qullos que$ prometiendo idelidad a las le)es$ eran aprobados$ recib,an tres dotes del re): el derecho a unmansión$ "estiduras de lino ino ) un instrumento musical en el cual deber,an practicar.3 La ciudad estaba inalmente repleta de habitantes. Lleno de alegr,a$ 'don,as con"ocó a todos a la iesta dinauguración de alem$ en el transcurso de la cual proclamó un decreto que determinar,a el uturo de aquel reindiciendo: O' partir de este d,a$ que es el dcimo del sptimo mes$ seis 0os ser/n contdos( en los cules todos lo!bitntes ser/n -robdos. Sol"ente quellos que -er"necieren leles( -ro3resndo en l -r/ctic de lle)es del -er3"ino( ser/n con+ir"dos co"o !erederos de este reino de -2; 'qullos que ueren enla;ad por culpas ) transgresiones$ ser&n desterrados por el *uicio. O P Las palabras del re) condu*o a todos a un proundo e5"en de cor2ón( ) se alegraron con la certe;a de qualcan;ar,an la "ictoria sobre todo el or3ullo ) el e3o,s"o$ que son las ra,ces de todos los males.I Adon,s ten,a un hi*o #nico a quin hab,a dado el nombre de Melquisedec. La belle;a$ ternura ) sabidur,a de hi*o amado$ hab,an sido su inspiración para la ediicación ) undación de su reino.+ Melquisedec ten,a doce aos de edad$ cuando alem ue inaugurada. Era el plan de 'don,as coronarlo re) sobrlos s#bditos aprobados$ al inal de los seis aos. Este plan$ lo mantendr,a en secreto hasta el momento oportuno.Q El pr,ncipe$ con sus "irtudes ) simpat,a$ se hi;o pronto mu) querido por todos en alem. Nl ten,a siempre en lolabios una sonrisa ) una palabra de aecto. 'preciaba estar *unto a los s#bditos en sus hogares$ recit&ndoles lale)es del pergamino en orma de lindas canciones que "i",a componiendo. u presencia tra,a al ambiente unatmósera de elicidad ) pa;. Nse amado pr,ncipe pose,a$ de hecho$ todas las "irtudes ne-cesarias para ser re) duna alem 6ictoriosa.H 'don,as hab,a ediicado una mansión especial *unto al palacio$ con el propósito de orecerla al s#bdito cu)a "idepresase m&s perectamente las le)es del pergamino. =iariamente l obser"aba a los habitantes$ buscando entellos a esa persona a la que deseaba honrar.10 >aseaba por las alamedas de alem$ cuando$ por entre el trinar de p&*aros$ 'don,as o)ó una "o; seme*ante a de su hi*o. 'l darse "uelta para "er quin era$ encontró a un bello *o"en que cantaba una canción. 'l contemplar esu a; el brillo de la sabidur,a ) de la pure;a$ 'don,as se alegró por haber encontrado a aqul a quin podr,a honra'qul *o"en$ que era una copia iel del pr,ncipe$ se llamaba S"el.11 9oloc&ndole un anillo en el dedo$ el re) lo condu*o al palacio$ donde$ ue recibido por Melquisedec que loreció muchos presentes$ entre los cuales el derecho de estar siempre a su lado.12 'don,as preparó un gran banquete en honor de amael$ para el cual todos ueron con"idados. 'l contemplarlo lado del re)$ los s#bditos lo aclamaron con alegr,a$ acredit&ndolo ser el propio pr,ncipe.13 Ealtaban con *#bilo las "irtudes de aqul hermoso *o"en$ cuando se maniestó Melquisedec$ coloc&ndose couna sonrisa a la derecha de su padre.1 En el banquete$ amael ue honrado por todos. !ealmente l era digno de residir en la mansión del monte$ puehab,a en l un rele*o perecto de las "irtudes que coronaban al amado pr,ncipe.



C-,tulo <

Las sublimes composiciones de %eluisedec inspiraban al pueblo a actos de bondad y paz" La música preser!andla armonía y la paz" Samael, compañero inseparable de %eluisedec" <e!elaciones impor:tantes de donías a s pueblo sobre el futuro gobierno de una Salem !ictoriosa" Samael, guardi5n de las leyes"

1 Sle" crec,a en elicidad ) pa;. 9on alegr,a$ los s#bditos se reun,an cada d,a al amanecer para o,r$ cantar ) tocalas sublimes composiciones de Melquisedec$ que inspiraban a actos de bondad ) pa;.2 Entre las amistades nacidas ) ortalecidas en "irtud de la m#sica armoniosa$ sobresal,a aqulla que un,a pr,ncipe con amael. =esde que hab,a comen;ado a residir en la mansión del monte$ amael se hab,a con"ertido esu compaero constante. Juntos -sbn lr3s !ors( "editndo sobre ls le)es del -er3"ino. 9oadmiración$ el s#bdito honrado "e,a al hi*o de 'don,as transormar aquellas le)es en lindas canciones. Las dulcmelod,as nac,an de sus labios como el perume de una lor.3 9onsiente de la importancia de la m#sica en la preser"ación de la armon,a ) pa; en alem$ el pr,ncipe$ adem&del canto$ comen;ó a dedicarse a la m#sica instrumental$ siendo su instrumento preerido el la#d. Era por medio dese instrumento que consegu,a epresar con ma)or perección la rique;a de su alma.

=e los seis 0os de -rueb( cinco( +inl"ente -sron. 'don,as$ eli; de "er que hasta entonces todos lohabitantes de alem hab,an permanecido leales a los principios contenidos en el pergamino$ los con"ocó a u banquete$ en el cual har,a i"-ortntes re'elciones;P 4abiendo tomado sus lugares delante del trono$ los s#bditos$ con alegr,a unieron las "oces entonando los c&nticode la pa;$ siendo regidos por amael.I =espus de o,rlos$ el re)$ emocionado$ se dirigió a su hi*o$ abra;&ndolo en medio de los aplausos de la multituagradecida. 7odos reconoc,an que la pa; ) la alegr,a en alem$ eran en gran medida debidas al amor ) dedicaciódel amado pr,ncipe$ que era el autor de aquellas dulces canciones.+ En aquel momento de reconocimiento ) gratitud$ 'don,as re"eló sus planes mantenidos hasta entonces esecreto. 9on "o; pausada$ les di*o:Q O#bditos de este reino de pa;$ mi alma est& repleta de alegr,a por contemplar en este d,a "uestros rostros m&

radiantes que en tiempos pasados. 6uestras "estiduras contin#an blancas ) puras$ como cuando las recibisteis dmis manos. La armon,a de "uestras "oces e instrumentos$ ho) son me*ores.O H 4abiendo dicho estas palabras$ el re) agregó con solemnidad:10 O Un 0o de -rueb tod', rest( l +inl del cul seréis e5"indos; >ermaneciendo ieles como hasaqu,$ seris honrados siendo conirmados como s#bditos de este reino de pa;. <o obstante$ si l3uien +uer!lldo en +lt( ser/ desterrdo( n ) cundo este #uicio nos tri3 "uc! triste2 ) su+ri"iento; O 11 Las palabras del re) lle"aron a los s#bditos a una prounda releión. 7odos$ eamin&ndose$ indagabare"erentes: O N¿Estre"os -robdos?G 12 eguros de que ser,an "ictoriosos$ pues amaban a alem ) sus le)es$ unieron las "oces en un c&ntico epresi"de idelidad. 'l terminar el c&ntico$ 'don,as les re"eló su gran secreto:13 O'qullos que ueren aprobados$ heredando este reino de pa;$ recibir&n como re) a mi hi*o$ a quien dar

trono gloriicado de esta alem 6ictoriosa. O 1 La re"elación del re) ue aclamada por todos con mucho *#bilo. 'don,as$ sin embargo$ toda",a no les habre"elado todo su plan$ por eso pidindoles silencio$ prosiguió:1P OMi hi*o empuar& un cetro es-ecil( en el cual sellar todo el derecho de dominio$ su cetro$ simboli;andtoda la armon,a$ ser& un la#d. O 1I 'nte esta re"elación que a todos sensibili;ó$ el pr,ncipe postr&ndose a los pies de su padre$ lloró moti"ado pomucha alegr,a. Mientras tanto$ todos le aplaud,an con euoria$ anhelando "er el amanecer de ese d,a en que la paser,a "ictoriosa.1+ 'don,as$ llamando a amael a estar *unto a su hi*o$ conclu)ó diciendo:



1Q OEn el gobierno de esta alem "ictoriosa$ ten3o el -ro-ósito de !cer de S"el el -ri"ero des-ués dMelquisedec; ' l ser& coniado el -er3"ino de ls le)es$ debiendo ser el 3urdi/n de l !onr de este reintriun+nte. O

C-,tulo >

Samael se de0a dominar por sentimientos de grandeza y orgullo" %antiene en secreto su plan e intenta impone sus conceptos contrarios a la ley del pergamino" +el-uisedec consigue restaurarlo al camino de la humildad y lrectitud, pero nue!amente recae al de0arse dominar por el orullo y la codicia"

1 amael$ al conocer los planes de 'don,as en cuanto al uturo de alem$ se llenó de euoria. 9ontemplaba ahorisueo aquella ciudad sin igual$ imaginando su uturo de gloria. 9onsiderando las palabras del re)$ de que l serel segundo en el reino$ se de*ó dominar por un sentimiento de ealtación. Nl$ que hasta entonces$ en obediencialas le)es del pergamino$ hab,a "i"ido una "ida de humildad$ co"en2ó enor3ullecerse de su -osición. En de"aneo se sent,a *unto al trono$ teniendo a los s#bditos de alem a sus pies$ aclamando con alaban;as grande;a. amael$ totalmente dominado por ese sentimiento$ no se daba cuenta de que estaba siendo conducido poun camino peligroso. El or3ullo que lo seduc,( estb 3enerndo el e3o,s"o que lue3o se "ni+estr, ecodici.2 5na semana despus de la re"elación de 'don,as$ los s#bditos promo"ieron una iesta en !o"en#eMelquisedec$ el uturo re) de alem. 6indolo aclamado por tantas alaban;as$ S"el tu'o el cor2órrebtdo -or un e5tr0o senti"iento de en'idi( +ruto del or3ullo ) del e3o,s"o; <o pod,a soportar pensamiento de ser de*ado en segundo plano. DB'caso no era l tan hermoso ) sabio como el pr,ncipeCF Era caimposible disra;ar tal sentimiento de inelicidad.3 En tiempos pasados$ amael encontraba indescriptible placer en los momentos en que$ al lado del pr,nciprecitaba las le)es contenidas en el pergamino$ que eran transormadas en lindas canciones. 'hora$ tales momentose tornaron desagradables$ pues aquellos principios contrariaban sus ideales. Decidió( sin e"br3o( no re'elr susenti"ientos de rebelión. oportar,a el anticuado pergamino hasta que$ con su autoridad$ pudiese ecluirlo dnue"o reino que ser,a establecido. ¿6o ser, cso él el 3urdi/n de quells le)es? Esa 8"ictoria8 procuraralcan;ar mediante su inluencia ) sabidur,a. Tu;gando poder inluenciar al hi*o de 'don,as con sus sueos de grande;a$ amael se aproimó hasta l coeuoria$ ) comen;ó a hablarle de las glorias del reino "enidero$ donde los dos$ cubiertos de honores$ disrutar,an dlas alaban;as de una alem "ictoriosa. er,an ellos los hroes del m&s perecto reino establecido entre los hombresP Las delirantes palabras del s#bdito honrado tr#eron -reocu-ción ) triste2 l cor2ón del #o'en -r,nci--ues no re+le#bn ls ense0n2s de "or ) !u"ildd del -er3"ino;I 6iendo a su amigo ,ntimo en peligro$ Melquisedec$ con una ternura *am&s re"elada$ lo condu*o al lado del trondonde$ tomando el pergamino$ comen;ó a leer compasi"amente los siguientes p&rraos:+ O El reino de Sle" ser/ +ir"do sobre l !u"ildd$ -ues est 'irtud es l bse de tod 'erdder3rnde2;Q La !u"ildd es +ruto del "or$ siendo contraria al orgullo$ que puede mantener a una criatura apresada pol"o$ hacindola contentarse con sus limitaciones$ enga&ndola como si las mismas ueran de ininito "alor.H La !u"ildd consiste en el ol'ido de s, "is"o( ) este$ en un 'id de bne3do ser'icio -or los se"e#ntes10 amael$ esor;&ndose por encubrir su indignación ante la lectura del pergamino que para l era anticuado$ dial pr,ncipe$ en tono de conse*o de amigo:11 OMi buen amigo$ reinaremos en una alem "ictoriosa$ que ulgurar& mu) por encima de este pergamino$ cu)o principios ueron cumplidos ielmente en estos aos de prueba. ¿Acso l -len libertd no ser/ l 3lori dSle"? >ues sabed que$ la completa libertad no coeistir& con estas le)es$ cu)o ob*eti"o se encierra al trmino dlos cinco aos. 9orresponde a nosotros dos coronar a alem con el honor de una total libertad$ que generar& unelicidad sin in. 4l libertd es i"-osible que e5ist b#o ls li"itciones del -er3"ino. O 12 El hi*o del re) se estremeció mucho ante las palabras de su amigo$ que e"idenciaban locura. N¿Có"o liberrde ese c"ino de "uerte?



9< 6die en Sle"( de"/s de Melquisedec( conoc, l triste condición de S"el; 9on paciencia$ el pr,ncip procuraba concienti;arlo del "alor real del pergamino$ cu)as le)es no podr,an *am&s ser alteradas$ pues esocasionar,a el in de toda la pa;.1 Los conse*os del pr,ncipe inalmente despertaron su cora;ón. Meditando en sus palabras$ se concienti;ó de estsiguiendo por un camino engaoso.1P 'l "er en los o*os de aqul a quin tanto amaba las l&grimas del arrepentimiento$ el hi*o de 'don,as se alegrcon su "ictoria sobre el orgullo ) el ego,smo.1I Los d,as que siguieron a la liberación$ ueron llenos de reali;aciones El pr,ncipe se mostraba a#n mas amigdispuesto a dar todo de s, mismo de modo que su compaero -udiese -rose3uir triun+nte en el c"ino de !u"ildd. En aquellos d,as de *#bilo$ ue dado a l el honor de conocer el cetro que estaba siendo moldeado.1+ En un momento de descuido$ S"el que !b, 'uelto dis+rutr de -2 en el es-,ritu( -er"itió que scor2ón nue'"ente estu'ier -ose,do -or un senti"iento de 3rnde2( que hi;o desencdenr un nue'tor"ent en su l". Ese senti"iento "e2cl de or3ullo ) codici le sobre"ino en el momento en que pr,ncipe le mostraba el la#d dorado$ en el cual estaba siendo impreso el sello de todo el dominio.

C-,tulo

Samael formula planes de conuista" 6redica a los súbditos una falsa y engañosa doctrina" donías percibe esrebeli$n y predica la exactitud de las leyes del pergamino para lograr la paz y la !er:dadera libertad" %eluisede

les ofrece el perd$n y la oportunidad de !ol!erse a la rectitud" Samael se reúne en secreto con sus seguidores y lere!ela su plan de conuista"

1 =esde su mansión amael contemplaba a alem en su resplandor matinal. .iéndol( cul no'i dornd es-er de su re)$ l codició. En su delirio comen;ó a ormular planes de conquista. a pod,a sentirse ealtadsobre su trono$ teniendo en las manos el cetro precioso. 4odos lo cl"r,n co"o el libertdor de l o-resióde quells le)es. Sle" ser, un reino de co"-let libertd ) -lcer. =ominado por esta codicia$ comen;ómaquinar planes de conquista.2 amael decidió actuar sutilmente entre los s#bditos$ lle"&ndolos a "er en el pergamino alguna imprecisión a libertad real. En su misión de engao$ actuar,a con -rente bondd$ mostrando inters por el crecimiento de elicidad de todos.

3 >oniendo en pr&ctica sus planes$ comen;ó a "isitar a los s#bditos en sus mansiones$ habl&ndoles de las glorias dreino "enidero$ donde disrutar,an una completa libertad. (rande era su inluencia en alem. 7odos admiraban su belle;a ) sabidur,a$ teniéndolo co"o un -er+ec-óstol de l #ustici ) del "or; 6die -od, i"3inr que en "edio de quell t"ós+er de #bilo 3rtitud un tr"- sutil estb siendo colocd( en ls 3rrs de l cul "uc!os -odr,n cer -or descuidP En su seductora misión$ amael no hablaba contra el pergamino$ no obstante$ lo elogiaba por haber e*ercido eaquellos seis aos prontos a inali;ar$ un "isión de -rueb. En su lógica$ sin embargo$ procuraba mostrar que$ eel reino "enidero$ cundo todos estu'iern -robdos$ estr,n -or enci" de quells le)es. us argumentoaparentemente correctos$ le preparaban el camino para airmar abiertamente que$ en el nue"o reino$ la eistencdel pergamino$ ser,a una traba a la concreti;ación de la "erdadera libertad.I Las semillas de la rebelión lan;adas por amael no tardar,an en germinar en el cora;ón de muchos en alem

Esto contec, seis "eses del o" i-ur( cundo el destino de todos ser, selldo. 5n tercio de lohabitantes$ seducido por el terrible engao$ lo ealtaba ahora$ en completo desprecio a las le)es ) al pr,ncipe$ quines *u;gaban de anticuados.+ Adon,s( que su+r, l 'er el sur3i"iento de tod est rebeld,$ con"ocó a los s#bditos a una reunión demergencia. En la a; de todos se pod,a "er las contrastantes disposiciones.Q 9on "o; compasi"a$ el re) comen;ó a re'elrles$ como *am&s lo hab,a hecho antes$ la gran importancia de lle)es re3istrds en el -er3"ino$ "ostrndo que ells ern l bse de tod l -ros-eridd ) -2 . i talle)es uesen ecluidas$ toda elicidad ) gloria se etinguir,an$ dando lugar al caos.H =espus de mostrar la necesidad de las le)es$ Melquisedec$ "o'ido -or un +uerte deseo de sl'r quéllosquienes tnto "b( le'ntó el -er3"ino delnte de todos )( con 'o2 llen de bondd les o+reció el -erdó) l o-ortunidd de 'ol'er inicirse en el c"ino de l -2. us palabras a todos conmo"ió$ logrando qu



hasta el mismo amael estu"iese al principio moti"ado$ sin embargo$ el orgullo le impidió de nue"o arrepentimiento. =e esta manera$ el s#bdito honrado$ cundo tod', -od, "irr rre-entido !ci -er3"ino( se endureció en su rebeld,( decidiendo continur !st el +in . Esta decisión$ toda",a$ no maniestar,a prontamente$ pues hab,a ideali;ado un plan traicionero.10 'l inali;ar el encuentro de oportunidad$ amael con"ocó a sus seguidores a una reunión secreta$ que ureali;ada ba*o el manto de la noche$ *unto al riachuelo de 9edrón que estaba uera de los muros de alem.11 Des-ués de "ldecir el -er3"ino ) todos quéllos que lo de+end,n( co"en2ó !blrles de sus -lnede 'en3n2 ) trición112 O9omo "osotros sabis$ los seis aos de prueba se est&n agotando$ restando$ a partir de ho)$ "einticuatrsemanas para el d,a de la coronación. i "osotros quisierais tenerme como re) en lugar de Melquisedec$ podrobarle el cetro$ apoder&ndome del reino. O 13 amael comen;ó a eplicarles los lan;amientos de la traición$ d&ndoles las debidas orientaciones sobre lmanera de actuar a partir de aquella echa:1 O 6ecesit"os "ntener un -rienci de +idelidd l -er3"ino ) l -r,nci-e !st que lle3ue "o"ento de ctur; El 3ol-e ser/ ddo en l noc!e que ntecede l d, de l coronción; A l "edi noc!+urti'"ente nos usentre"os de Sle"; Robré en es noc!e el cetro )( #untos( !uire"os !ci el -ro+und'lle donde est/n ls ciuddes de Sodo" ) $o"orr; All, nos r"re"os( ) "rc!re"os contr Sle"sub)u3ndo nuestros ene"i3os; Acbre"os entonces con el -er3"ino ) con todos quéllos que re!usren rendir obedienci nuestro 3obierno; G

C-,tulo H

Samael y sus c$mplices fingen fidelidad al reino" %eluisedec confiado le muestra a Samael el lugar secreto dlaúd dorado" Samael traiciona la confianza de %eluisedec preparando a sus hombres y robando el preciadcetro" Samael y sus seguidores marchan hacia el !alle" Salem peligra"

1 obre"inieron d,as de aparente tranquilidad ) pa;$ amael$ ingiendo idelidad$ estaba siempre al lado d pr,ncipe$ demostrando admiración por sus nue"as composiciones que ealtaban las le)es del pergamino. Loseguidores de amael$ de la misma manera$ un,an las "oces en alaban;as que epresaban la grande;a de lo

principios a los cuales repugnaban.2 Melquisedec$ lleno de alegr,a por "er aproimarse el d,a de su coronación$ ensa)aba con los s#bditos loc&nticos de la "ictoria$ los cuales hab,a compuesto especialmente para aquella ocasión. 9on elicidad hablaba todos sobre sus sueos en tornar a alem cada "e; mas llena de honra por su belle;a ) armon,a.3 S"el( en su "ldd ocult( se burlb del -r,nci-e; -re'e, el dolor que le ocsionr, el 3ol-e de ltrición. En aquellos d,as de aparente pa;$ el s#bdito rebelde procuró conocer el lugar en que el cetro estar,a oculto hastel d,a de la coronación. El -r,nci-e( sin descon+ir( le re'eló todo el secreto1 l sl( el co+re con su eni3"( rico estuc!e )( +inl"ente el tesoro; 9ontempl&ndolo el astuto amael se animó al "er impreso en su parcon"ea el sello del dominio 9omprendió que$ aqul que lo pose)era$ tendr,a en las manos el reino de alemolamente algunos d,as$ pensó l$ ) tendr,a ba*o su poder aquel precioso instrumento.

P El sol declinó tra)endo a alem el d,a que signiicar,a "ictoria o derrota.I >oco antes del anochecer$ amael hab,a de*ado el palacio donde hab,a pasado todo el d,a al lado del pr,ncipa)ud&ndole en los preparati"os para la ceremonia de la coronación. =irigindose hacia su mansión$ saludó latinieblas con una mal"ada sonrisa. D9u&nto hab,a anhelado por aquella nocheF+ Mientras que los ieles$ embelesados por la emoción de la eli; "ictoria$ re"isaban ba*o la lu; de candelabros loadornos de sus instrumentos$ de sus "estiduras ) mansiones$ certiic&ndose que ser,an aprobados a la maansiguiente$ amael ) sus seguidores hac,an sus #ltimos preparati"os para blandir el golpe.Q A l "edi noc!e( si3uiendo ls instrucciones de S"el( todos sus se3uidores bndonrosilencios"ente sus "nsiones( diri3iéndose l -ro+undo 'lle de Cedrón( donde es-err,n su nue'o re);



H amael$ a su "e;$ se dirigió a los ondos del palacio$ por donde esperaba entrar sin ser notado$ )endo al encuentrdel cetro. E"itando hacer cualquier ruido$ traspasó el portal$ dirigindose silenciosamente a la sala que guardaba precioso cetro.10 En aquel momento$ el pr,ncipe que$ insomne rodaba en su lecho$ presintiendo alg#n peligro$ se dirigió al cuartde su padre ) lo despertó diciendo:11 O>adre m,o$ o, ruidos de pasos en el interior del palacio. O 12 'cariciando la cabe;a de su hi*o$ 'don,as$ somnoliento le respondió:13 O4i*o$ no te preocupes. 'custate conmigo ) duerme tranquilamente. =e aqu, a poco ra)ar& el amanecer ) tendr&s en las manos el la#d dorado. O 1 El pr,ncipe$ tranquili;ado por las palabras coniables de su padre$ se entregó a un sueo de lindos sueos en que "i",a al lado de amael ) de todos los s#bditos de alem$ los momentos esti"os de la coronación. Mientraque esto suced,a$ el rebelde con las manos temblorosas$ se apoderaba del cetro. En aquel momento$ tu"o la idea dlle"arse solamente el la#d$ de*ando el estuche en su debido lugar. 9on una sonrisa llena de maldad$ imaginó emomento en el que el re) entregar,a a su hi*o aquel estuche "ac,o.1P Lle'ndo consi3o el cetro( S"el se diri3ió -resurd"ente l lu3r donde sus se3uidores lo es-erbnAl encontrrlos( dio -so todo su or3ullo -rocl"ndo19H GA!or )o so) el re) de Sle"; ¿Quién -osee un cetro co"o el ",o? Con él do"ino l tierr ) el "r; M+uer2 est/ en ls tiniebls( -ues tr'és de ells lo conquisté . O 1+ Aeste*ando la "ictoria$ la turba ruidosa se separó para distanciarse de alem$ siguiendo rumbo a las ciudadecorrompidas de la planicie$ donde pre-tend,an armarse para la conquista de su reino.9 El sol -reció en el !ori2onte( tr)endo l lu2 del d, de l e5-ición &o" i-ur @. =espertando de sueo de lindos sueos$ el pr,ncipe se alistó para la ceremonia del *uicio ) de la coronación. 6estiduras especialde lino ino$ adornadas con hilos de oro ) piedras preciosas$ le ueron preparadas. =espus de "estirsMelquisedec se encaminó al encuentro de sus s#bditos$ en el etremo sur de alem. =e all, los conducir,a en unmarcha esti"a rumbo al palacio situado al norte$ sobre el "onte Sión;1H 'don,as$ haciendo sonar un cuerno largo$ con"ocó a todos para la reunión del *uicio. =e*ando sus mansionetodos los restantes se dirigieron hacia la pla;a de la puerta sur$ lle"ando consigo sus instrumentos musicales.20 'l encontrarse con aqullos ieles$ Melquisedec se sorprendió por la ausencia de muchos. Ese misterio le dolen el alma$ pues le ocultaba el rostro m&s querido de su amigo amael.21 =e*ando a sus seguidores reunidos$ el pr,ncipe salió a la b#squeda de los ausentes. En su b#squeda inructuosse dirigió inalmente a la mansión del monte$ donde llamó a amael u "o;$ sin embargo$ no tra*o ninguncontestación m&s all& de un eco "ac,o$ que traduc,a ingratitud.22 Le)endo en el triste 'c,o l trición( sintió 3ns de llorr; En un solo momento le "ino a la mente todo pasado de aqul a quin hab,a buscado con tanta dedicación conser"arlo en su gloria$ a tra"s de conse*os sabio!ecordó aquellos d,as que siguieron a su recuperación D9ómo se hab,a alegrado con la certe;a de que su amignunca m&s "ol"er,a a caerF Lle"&ndolo a presentir la tragedia$ le "ino a la memoria las indagaciones de amaesobre el la#d$ el cual le mostró en un gesto de amistad. El recuerdo de este hecho$ sumado a los pasos o,dos en interior del palacio aquella noche$ le dio la certe;a de que alem corr,a peligro. 6o so-ortndo es -osibilidd dtrición( se -ostró en llnto( !erido -or l terrible in3rtitud de quél quién !b, dedicdo tnto "or;23 9ur"ado por el dolor$ permaneció por alg#n tiempo procurando encontrar alg#n consuelo. ecó inalmente sul&grimas$ decidido a hacer cualquier sacriicio a in de de"ol"er a alem su gloria ) poder$ redimindole el cetro dlas manos de la rebeld,a.

:> Consoldo -or l certe2 de l 'ictori( Melquisedec regresó al lado de los s#bditos ieles. cult&ndoles surimiento$ as, como el moti"o de la ausencia de tantos$ el pr,ncipe los guió en una marcha triunal rumbo palacio

C-,tulo

Los súbditos fieles, a0enos a la traici$n, ele!an c5nticos de triunfo en expectati!a de la coronaci$n de su rey" Lcoronaci$n es truncada debido a la ausencia del cetro" Dodos se afligen y %eluisedec los consuela con l



promesa de rescatar el preciado cetro" %eluisedec sale en su búsueda" Samael, lleno de ira, raspa lainscripciones grabadas en el cetro" %eluisedec enfrenta peligros en busca del cetro y es preser!ado"

1 'l aproimarse al monte ión$ subieron las blanqu,simas gradas de la escalera$ siendo seguido por la multitutriunante. Le dol,a en el alma la epectati"a de "er morir en los labios de los ieles$ en aquella maana$ su alegcanto$ debido al golpe de la traición.2 e encontraba ahora en el interior del palacio$ delante del magn,ico trono que esperaba al *o"en re). En la basdel trono$ )ac,a abierto$ en medio de un arreglo loral$ el -er3"ino de ls le)es. Tunto a l se pod,a "er la lindcorona$ hecha de oro ) piedras preciosas$ as, como el estuche de aqul cetro que simboli;aba toda la armon,a dalem.3 Los s#bditos estaban elices$ pues sab,an que ser,an hallados dignos de heredar aquel reino de pa;. 'guardabaahora el momento de la coronación$ cuando su nue"o re) los regir,a desde su trono con su precioso cetro$ en uc&ntico triunal. En medio de los aplausos de las !uestes 'ictorioss$ Melquisedec se dirigió hacia su padre$ que le recibió coun carioso abra;o. El momento era en "erdad solemne. Ls !uestes se silenciron l e5-ectti' de coronción. El estuche ser,a abierto )$ todos atestiguar,an la ealtación del amado pr,ncipe.P 9on el cora;ón latiendo uertemente por la alegr,a$ 'don,as se agachó hacia el estuche$ abrindocuidadosamente 9uando al encontrarlo "ac,o$ la alegr,a de su semblante dio lugar a una epresión de inepresab preocupación ) triste;a$ pues en aquel cetro se hab,a sellado el destino de aquel reino de pa;.I 'l "er a su padre ) a todos los s#bditos aligidos por la ausencia del cetro ) de tantos amigos que deber,an estacon ellos en aquel momento$ Melquisedec los consoló con l -ro"es de que buscr, el cetro. Gnconscientes dlos riesgos ) peligros que le esperaban al pr,ncipe en su camino$ los s#bditos se despidieron de l$ "indolo partapresuradamente.+ El amanecer de aquel d,a que ser,a el de la coronación$ alcan;ó a los rebeldes distantes de alem$ en camino a lciudades de la planicie. En aquella maana$ amael se llenó de uria al "er que el precioso la#d estaba adornadcon inscripciones de las le)es contenidas en el pergamino. 7omando una piedra puntiaguda$ comen;ó a daar cetro$ rasp&ndole todas las -lbrs de "or ) #ustici. us armoniosas cuerdas estaban ahora desainadas sobsu parte con"ea herida$ mas continuaba siendo precioso$ pues sobre l )ac,a sellado el dominio de alem*oseerlo( si3ni+icb ser el due0o de todo el -oder.Q 'l llegar a la altura en que el camino se ramiicaba$ amael ordenó a sus seguidores que prosiguieran rumbo(omorra$ mientras que l ir,a hasta odoma$ donde permanecer,a por dos d,as$ unindose despus a ellos.H Esperó la noche para entrar en odoma. 9uando entró all,$ caminó por las calles estrechas sin ser notado$ hasencontrar una casa aislada sobre una ele"ación. 4aciendo del cetro su arma$ in"adió la casa matando a sumoradores$ mientras que dorm,an. e posesionó de esa manera de aqulla residencia donde$ solitario$ maquinarsus planes para la toma de alem.10 El atardecer de aquel d,a que seria el de la coronación$ alcan;ó al hi*o de 'don,as al caminar por el pedregocamino rumbo al "alle. us o*os estaban cargados de triste;a ) ans,o se "oltearon hacia el suelo$ en busca de lorastros de los rebeldes. El recuerdo de la ingratitud de aqullos a quines tanto amaba$ lo hi;o llorar. us l&grimarele*ando los #ltimos destellos de aquel sol poniente$ se aseme*aban a 3ots de sn3re +lu)endo de un cor2ó!erido. Nl lloraba no por causa de los peligros que le sobre"inieran en aquella r,a noche$ sino por la ineli; suertde aqullos que hab,an cambiado la pa; de alem por la "iolencia de aquellas ciudades de la planicie.11 Su nico consuelo er el recuerdo de quéllos que( -esr de tods ls tentciones( !b,n -er"necid+ieles; A ellos les !b, -ro"etido de'ol'er el cetro( ) esto lo conse3uir, -esr de culquier scri+icio;12 =espus de una larga noche de insomnio en que el pr,ncipe estu"o recostado al lado del camino$ ra)ó la lu; dun d,a que ser,a decisi"o.13 'l aproimarse a odoma en aquella maana$ el pensamiento de estar tan próimo al cetro de su amada alemhi;o que se ol"idara de toda la atiga$ acortando sus pasos rumbo al desa,o.1 'l abrirse la gran puerta de la ciudad$ le sobre"ino un temor$ al o,r ruidos espantosos de desarmon,a$ qutraduc,an el orgullo$ el ego,smo ) la codicia que all, dominaban en todos los cora;ones$ hacindolos eplotar en lorg,a de una maldad sin in.1P er,a un gran riesgo eponerse a la "iolencia gratuita de aquella ciudad. Este pensamiento lo hi;o detenerse a u paso del portal$ donde estremecido inclinó la rente en una inepresable luc! intern; Er tentdo retirrs-ero luc!b con tods ls +uer2s de su l" contr ese -ens"iento de +rcso;



1I >ensando en la triste suerte de alem$ cu)o dominio estaba siendo pisoteado en el interior de aquella cruodoma$ Melquisedec tomó una irme decisión: como un temerario guerrero habr,a de a"an;ar$ )$ ciertamente a#) cuando tu"iese que hacer rente a la acumulación de todos los peligros$ proseguir,a$ hasta le"antar en sus mano"ictoriosas el cetro amado.1+ !esuelto ) esperan;ado$ atra"esó la puerta de odoma$ ;ambullndose en aquel mundo etrao. 7odo all, era lcontrario de alem$ comen;ando con las piedras &speras ) sucias de sus construcciones. Sodo" er un reino dtiniebls.1Q La presencia contrastante del pr,ncipe pronto ue notada por muchos que$ en tumulto lo cercaban. La pure;a dcar&cter epresada en su magna a; ) el esplendor de sus "estiduras$ los llenaba de espanto$ ) se retiraban com"encidos por una +uer2 in'isible. =ominados por la uria$ comen;aron a perseguirlo a distancia$ decididoshacerlo huir. Le arro*aban piedras ) ango intentando mancharle las "estiduras$ mas no le atinaban$ mientras tantl a"an;aba en su ansiosa b#squeda. Ainalmente desistieron de perseguirlo$ al atardecer.

C-,tulo

%eluisedec después de mucha aflicci$n encuentra el preciado cetro ue era destruido por Samael" La dign postura del príncipe ante las amenazas del traidor" Su firme disposici$n de redimir el cetro a cualuier preci 4olor y sangre como precio del rescate del cetro" La e/piación de +el-uisedec para redimir al cetro0 unsemejanza de la 1/piación de ,risto para redimir a la 2umanidad.

1 El hi*o de 'don,as recorrió todas las calles ) calle*ones en la b#squeda del precioso cetro$ mas ue en "ano. '"er declinar en el hori;onte el sol$ anunciando la llegada de una oscura ) r,a noche m&s$ su cora;ón ue presa duna gran agon,a. 'll,$ en aquel #ltimo calle*ón$ casi "encido por el agotamiento ) por la desesperan;a$ inclinó lrente$ desallecindose en llanto. us labios$ pronunciaron en medio de sollo;os las siguientes palabras:2 G NSle"( Sle"( t no -uedes -erecerF D4 cetro necesit ser redi"ido de ls 3rrs de l rebeld, N¿Mcu/ndo ) dónde 'o) encontrrlo? N no quedn +uer2s en ",( ) l es-ern2 de redi"irlo ntes de lnoc!e "e bndonG 3 El pr,ncipe$ en su suprema angustia$ no percib,a que otro gemido de dolor$ procedente de cuerdas re"entadas dun la#d humillado$ se hac,a o,r en aquel atardecer. #bitamente$ el dbil gemido penetró sus o,dos$ reanim&ndolo con la certe;a de que el gran momento de redención hab,a llegado. ec&ndose las l&grimas$ reunió las #ltimas uer;as corriendo en dirección de una pequecasa situada sobre un monte$ de donde parec,a "enir el sonido.P 'l dirigirse a la puerta entre abierta$ se detu"o al contemplar una escena contrastante$ de humillante escla"itudamael$ en"uelto por un manto sucio$ castigaba el cetro de alem. 7anto el *o"en como el cetro se hallaban tadesigurados$ que no quedaba en ellos casi ning#n rasgo de la gloria perdida. 'quel cetro$ sin embargo$ ciertamentarrasado como estaba$ era mu) "alioso$ pues en l )c, el sello del do"inio de Sle";I La contemplación de aqul que hab,a sido su me*or amigo ) de &quel cetro ideali;ado como s,mbolo de toda armon,a$ en tan tr&gica condición$ conmo"ió proundamente al pr,ncipe$ hacindolo llorar en alta "o;. olamenhasta entonces el s#bdito rebelde percibió su presencia indeseada. Estremecido$ se le"antó$ )$ lleno de ira preguntó:+ O B%u es lo que te tra*o a odomaCO Q Gndicando hacia el cetro daado$ Melquisedec eclamó:H O DDDLa gloria de alem est& destruidaFFFO 10 9on una carca*ada$ amael se burló de su triste;a$ diciendo:11 O'hora )o so) el re) de alem. 6osotros que sois ieles al pergamino$ os con"ertiris en mis escla"os. O 12 in darle importancia a las palabras de arenta de amael$ el pr,ncipe$ mo"ido por una angustia ininita$ le di*o13 O S"el( Sle" est/ !erid -or tu trición; N¿*or qué c"bisteis tu !o3r de #ustici ) "or -or es'lle de in#ustici( odio ) "uerte? 'hora$ si no dese&is "ol"er arrepentido a alem$ de"ul"ele el cetro. Aue paredimirlo que$ menospreciando todos los peligros$ descend, a este "alle hostil. O 1 9onociendo el propósito del pr,ncipe$ el rebelde se llenó de rabia ) cerrando los puos le di*o:1P O Do te odio MelquisedecG 1I 4abiendo dicho esto$ lan;ó el cetro al suelo$ ) pisote&ndolo agregó:



1+ O7engo deseos de hacer lo mismo contigo. O 1Q =elante de esa arenta$ el pr,ncipe no sent, nin3n te"or( sino co"-sión . 7rasport&ndose al eli; pasado$ acordaba de los momentos elices en que ten,a siempre a su lado a amael Nl era un *o"en puro ) humilde dcora;ón N¿*or qué !b, -er"itido ser escl'i2do -or l ilusión del or3ullo ) del e3o,s"o? D9u&n doloroera "er aqul *o"en que$ por su belle;a ) simpat,a$ hab,a sido honrado por encima de todos los s#bditos$ ahorarruinado por la codiciaF DB<o hab,a sido acaso el sueo del pr,ncipe tener *unto a su trono gloriicado$ a aqul quien l consideraba el m&s preciado amigoCF Esta tragedia le her,a el alma. <o obstante$ la triste condición dcetro lo alig,a a#n m&s$ pues este hab,a sido hecho como el s,mbolo de toda la armon,a$ ) estb sienddestruido b#o los -ies de l in3rtitud.1H orprendido de no "er en los o*os de Melquisedec ninguna epresión de temor$ sino de piedad$ amael se sintrustrado en sus arentas que ten,an como ob*eti"o amedrentarlo$ lle"&ndolo a desistir de su misión.20 'nte la digna postura del pr,ncipe$ que en silente dolor lo contemplaba$ se sintió a"ergon;ado. Esa debilidad$ sembargo$ ue desterrada por el orgullo que dominaba su cora;ón. 9omen;ó entonces a planear algo terrible$ parhumillar ) herir al pr,ncipe$ hacindolo surir toda",a m&s. 9on escarnio le di*o:21 GEl cetro de Sle" -odr/ ser tu)o( si consi3ues -3r"e el -recio de su rescte. O 22 9on un brillo en los o*os$ el pr,ncipe le preguntó:23 G ¿Cu/l es el -recio?G 2 amael$ con una sonrisa maliciosa$ pausadamente le contestó:2P OEl precio no es oro ni plata$ sino dolor ) sn3re. 4 deber/s desnudrte co"-let"ente de 'uestr'estidurs( cost/ndote en el suelo; Deber/s so-ortr en es condición( 3ol-es( !st que el sol se -on3; Si testu'iereis dis-uesto so"eterte ",( sin reccionr( el cetro ser/ enter"ente tu)o; O :H Estre"ecido nte tn cruel -ro-uest( el !i#o de Adon,s "iró !ci el sol que re-osb distnte sobrun nube; Co"en2ó entonces trbr un intens luc! en su cor2ón; Al -rinci-io( el !orror del scri+icicsi lo do"inó( ni"/ndolo retirrse( -ero el -ens"iento de 'er Sle" escl'i2d -or l rebeld,( lcondu#o +inl"ente l decisión de -3r el -recio del rescte( entre3/ndose l !u"illnte su+ri"iento;2+ 4abiendo tomado la irme decisión de rescatar el cetro$ el pr,ncipe$ tiró las "estiduras$ coloc&ndolas sobre un piedra. e acostó en seguida en aquel suelo r,o$ con la rente "uelta hacia el poniente.2Q in piedad$ amael comen;ó a a;otarlo$ haciendo uso del propio cetro como instrumento de tortura. (imiend por el dolor de los golpes que lo hac,an sangrar$ el pr,ncipe manten,a la mirada i*a en el sol que parec,a detenersobre la nube. 'turdido por el dolor$ contempló inalmente el sol pronto a ponerse. 'lentado por la "ictoria que aproimaba$ murmuró en "o; ba*a:2H O Sle"( Sle"( de qu, -oco tendré en "is br2os t -recido cetro que( en "is "nos( se con'ertiren un instru"ento de #ustici ) -2; G 30 )endo la promesa que el pr,ncipe hi;o entre gemidos$ amael le "ocieró con uria:31 O 4 su+ri"iento no trer/ nin3n "necer -r Sle"( -ues tus "nos #"/s ser/n c-ces de tocen el cetro; G 32 =espus de hacer esa arenta$ amael se posesionó de una piedra puntiaguda$ prepar&ndose para asestar lo#ltimos golpes.33 Mientras pensaba en la eli; "ictoria de alem$ Melquisedec sintió su bra;o derecho siendo comprimido por lo pies de amael. eguido a este rudo gesto un golpe que lo hi;o contorsionarse en agon,a. u mano hab,a sidca"ada cruelmente$ comen;ando a brotar abundante sangre de la herida abierta. Esa misma "iolencia udescargada despus sobre su mano i;quierda.3 6o so-ortndo l 3on, cusd -or esos des3rrdores 3ol-es( el !i#o de Adon,s( ensn3rentdo( ssu"er3ió en ls tiniebls de un -ro+undo des")o;

C-,tulo

Samael horrorizado de su culpabilidad, abandona al príncipe de0ando 0unto a él, el cetro" %eluisedec recobra econocimiento, toma sus !estiduras y su cetro, hace un 0uramento y parte hacia Salem" Samael no se arrepientContinúa la seme0anza de las experiencias de %eluisedec con las ue habría de !i!ir el *i0o de 4ios



%eluisedec es recibido con aclamaciones por su acto redentor, es atendido por su amoroso padre y el cetro erestaurado"

1 'l cesar de golpear al pr,ncipe$ el s#bdito rebelde ue pose,do por un etrao horror al contemplar en la a; daqul que solamente le hab,a hecho el bien$ el sopor de la muerte. *rocurb no recordr el -sdo( -erirresistible"ente( sent, ser rrstrdo los d,s de su +eli2 inocenci en Sle" . !e"estido de ricas "estidurestaba siempre al lado del pr,ncipe que$ con dedicación$ le enseaba cada d,a sus canciones que hablaban de la pa;2 En los indeseados recuerdos por los cuales era arrastrado$ re"i"ió sus primeros pasos en el camino del orgullodel ego,smo. e acordó de los incesantes conse*os ) ruegos de aqul que hab,a sido su me*or amigo$ para qudesistiera de aquel camino que podr,a conducirlo a la inelicidad.3 Des-ués de ser rrstrdo en recuerdos -or todo quel -sdo de +elicidd destruid -or su cul-( S"tu'o concienci de su in3rtitud; 4orrori;ado por lo que hab,a hecho$ se inclinó sobre el cuerpo ensangrentadde Melquisedec$ ) se desesperó al "erlo sin "ida. <o soportando el peso de la gran culpabilidad$ de*ó aquel lugapresuradamente$ deseando ocultarse le*os$ ba*o las tinieblas de la noche r,a. =espus de un proundo desma)o$ el pr,ncipe comen;ó a recobrar la conciencia En delirios que lo transportabaal seno de su amada alem$ l re"i",a momentos "i"idos ) soados: 9on alegr,a contemplaba la a; de su me*oamigo$ a quin etendió la mano con una sonrisa. >ero su gesto ue rustrado por un proundo dolor. En medio dlos aplausos de los s#bditos "ictoriosos$ recibió de su padre el cetro$ pero al tocarlo$ sintió un dolor irresistible esus manos. Con estos sue0os +rustrdos -or el dolor( Melquisedec des-ertó l relidd . Estaba desnudo$ heridosolitario$ en un lugar peligroso$ le*os del abrigo ) del cario de alem. M&s doloroso era pensar que todo aquelhab,a sido la retribución de alguien que hab,a sido el blanco principal de todas las d/di's de su "or;I El -r,nci-e( sin -oder "o'erse( considerndo l 3rn trición co"en2ó llorr sin consuelo; L"entbno -or su dolor( sino -or l -erdición de quéllos que !b,n c"bido el cri0o ) l #ustici de Sle" -or des-recio ) el odio que los reducir, +inl"ente ceni2s sobre quel 'lle condendo;+ ' tra"s de las l&grimas$ el pr,ncipe contemplaba el cielo que$ seme*ante a un manto entintado de sangre$ setend,a baado en la lu; del sol poniente. e acordó entonces del la#d por el cual hab,a pagado tan alto precioB=ónde estar,a lCQ En su desesperada uga$ amael hab,a de*ado el cetro abandonado *unto al cuerpo herido de Melquisede9uando l lo "io$ se ol"idó de todo el dolor$ ) lo abra;ó con sus manos heridas. 'carici&ndole la parte con"earruinada$ con una sonrisa le di*o:H O 4 eres ",o nue'"ente; @o te co"-ré con "i sn3re%;G 10 amael que$ dominado por el etrao horror$ hab,a huido despus de cometer el horrible crimen$ se detu"o a u paso de la puerta de odoma. 'll,$ impulsado por el orgullo$ se arrepintió con indignación de su laque;a. B>or quhab,a huido despus de coquistar tan grande "ictoriaC B<o era su plan destruir el reino de alem$ para establecer s propio reinoC 'cord&ndose del cetro$ decidió regresar para tomarlo. B>or qu lo hab,a de*ado abandonado *unto cad&"er de aqul odiado pr,ncipeC11 Tuntando sus pocas uer;as$ Melquisedec se dirigió entorpecido al lugar donde hab,a de*ado sus "estiduras.12 =espus de "estirse$ teniendo *unto al pecho el cetro amado$ el hi*o de 'don,as$ con prounda emoción hi;o u *uramento antes de de*ar aquel lugar de su surimiento. 'cariciando el cetro le di*o:13 O Mi "do cetro( +uiste credo co"o un e"ble" de l r"on, que -rocede de l #ustici ) del "o4od l 3lori de Sle" re-osb sobre ti cundo l rebeld, en su in3rtitud te escl'i2ó( rrstr/ndot!ci este 'lle !ostil; Aqu, t +uiste !erido ) !u"illdo( lle3ndo con'ertirte en un instru"ento di"-iedd en ls "nos del tirno; o( sin e"br3o( te redi", con "i sn3re; A!or nuestrs !erids ser/resturds( ) en bre'e sere"os entroni2dos en "edio de ls lbn2s de un Sle" 'ictorios; Cundeste sue0o se concretice( testi3ure"os #untos el +inl de quéllos que se le'ntron contr nosotros -r!erirnos; S"el ) sus se3uidores ser/n de'ordos -or el +ue3o que reducir/ ceni2s Sodo" ) $o"orr O 1 9onclu)endo su solemne *uramento$ el *o"en pr,ncipe$ )a oculto por las tinieblas de la noche de*ó aquelcolina$ ) sobre ella las marcas de su surimiento.1P =esde que el hi*o del re) hab,a partido$ prometiendo regresar con el cetro$ alem "i"ió momentos de indecibansiedad. En llanto$ el re) ) los s#bditos restantes se acordaban de todo aquel eli; pasado deshecho por l



ingratitud de los rebeldes. Lo que m&s les torturaba era la ausencia del pr,ncipe ) del cetro$ sin los cuales todo brillo de aquel reino de pa; se ouscar,a.1I =eseando consolar el cora;ón de sus s#bditos$ Melquisedec a"an;aba en medio de la noche rumbo a los montque rodeaban a alem. '#n debilitado ) herido$ prosegu,a en su marcha ascendente$ esperando alcan;ar su patr por la maana.1+ Aquell noc!e lr3 ) oscur +inl"ente +ue 'encid -or los r)os del "necer; En Sle" l es-ern2de 'ol'er 'er Melquisedec con su cetro estb csi bndond cundo( l "irr !ci el Monte de loOli'os( le 'ieron descendiendo -or el c"ino de $etse"n,; 9uando lo encontraron en el proundo "alle d9edrón$ quedaron asustados con su aspecto: su cara estaba p&lida ) su manto empapado en sangre. >recisamena#n as,$ l sonre,a epresando gran alegr,a.1Q 'l preguntarle ellos sobre el porque de aquellas marcas de sangre$ Melquisedec sacó de deba*o de su manto sumanos heridas$ mostr&ndoles en medio de ellas el cetro redimido.1H Des-ués de contrles los -sos que lo lle'ron l rescte del cetro( los sbditos( en"udecidos( se -ostrrore'erentes sus -ies( cl"/ndolo co"o su redentor ) re);20 En medio de las alaban;as de las huestes redimidas$ el pr,ncipe ue introducido en el palacio real$ donde balos cuidados de su amoroso padre$ deber,a recuperarse de su surimiento. El cetro des+i3urdo( !or "-recido( ser, t"bién resturdo( debiendo con'ertirse un "/s bello que ntes;:9 El d, de l coronción +ue +i#do -r el -ró5i"o o" i-ur. En aquel d,a$ Melquisedec sellar,a con cetro restaurado el triuno de todos los ieles$ as, como la condenación de los rebeldes.

C-,tulo 9P

Samael no encontrando el cuerpo del príncipe ni el cetro, parte hacia +omorra y es recibido como rey por suhombres" Samael y sus seguidores aumentan en la iniuidad y orgullo" 6or medio del terror confabula a los reyede la planicie e incita a la guerra en contra de otros reyes" Samael y sus hombres son !encidos y se esconden ecue!as"

1 >ocos instantes despus de la salida de Melquisedec$ amael llegó al lugar en donde aparentemente lo habde*ado sin "ida$ al lado del la#d. in entender aquella misteriosa desaparición$ prosiguió l hacia (omorra$ dond

sus seguidores lo esperaban. 'l "erlos$ proclamó su 8"ictoria8 sobre el odiado pr,ncipe ) sobre el cetro$ a quienhab,a masacrado en odoma$ no restando a los seguidores del pergamino ninguna esperan;a.2 us palabras agradaron a la turba rebelde$ que comen;ó a conmemorar la 8conquista8 entreg&ndose a la org,a. burlaban ahora de la *usticia ) del amor$ ealtando a amael como re) "ictorioso.3 'hora obtendr,an armas$ con el propósito de a"an;ar sobre alem$ asent&ndole el #ltimo golpe e unieron a elloen sus malicos propósitos$ muchos criminales que ueron recibidos como maestros en el mane*o de arcoslechas.> En su locur( S"el ordenó l e5-ulsión de todo clendrio( -ues en su reino de %libertd% no estr,su#etos nin3n có"-uto de tie"-o. Las le)es de la "orlidd ueron tambin ecluidas$ surgiendo con eun completo caos. Este desorden$ se maniestó de manera m&s patente en el barullo estridente ) cacoónico$ cul -rocl"ron co"o l nue' "sic.

P =ominados por el ego,smo$ amael ) sus seguidores se alimentaban de ilusiones$ inconscientes de que sus d,estaban contados. Los rutos de la rebeld,a no tardar,an en atraer sobre ellos el uego de la destrucción.I =i"idiendo a sus seguidores en grupos pequeos$ amael comen;ó a comandarlos en actos "iolentos quaterrori;aban a los moradores de las planicies >or ese tiempo$ ellos se escond,an en las ca"ernas situadas próimal mar salado. El res-eto ) el "iedo de los 3uerrilleros de S"el( lle'ó +inl"ente los re)es de cutro ciuddes -rocurrlo( -ro-oniéndole lin2s de -2; Ellos eran: ara$ re) de odoma$ ersa$ re) de (omorra$ enaab$ rede 'dama$ emeber$ re) de eboim ) egor$ el re) de ela. >or esa poca$ estos re)es pa-gaban tributos 9ordolaomor$ el re) de Elam que$ acompaado por los e*rcitos de otras cuatro ciudades$ los hab,an sub)ugado eel "alle de idim *unto al mar salado.



Q Aortalecido por las alian;as$ amael se tornó mas osado en sus en"estidas$ lle"ando el terror ) la destrucción a loterritorios de ciudades distantes. Los e*rcitos de 9ordolaomor ) sus aliados que en esos d,as regresaban de otraconquistas$ enurecidos por las pro"ocaciones de amael$ marcharon contra los cuatro re)es$ "encindolnue"amente en el "alle de idim. =ue en es ocsión que lle'ron cuti'os los !bitntes de Sodo"( entrlos cules se encontrb "i sobrino Lót;H 'cobardados delante del uror de los cinco re)es$ amael ) sus seguidores se escondieron en sus cue"as$ al nordel mar salado.

C-,tulo 99

Samael hace preparati!os para conuistar Salem y expone su plan espía" -n camino a Salem, sus recuerdos ltorturan" Salem m5s bella y hermosa ue antes" contecimientos en el día de la coronaci$n"

9 Los doce "eses contdos -rtir del 3rn scri+icio estbn csi -or ter"inr; El cetro( totl"enresturdo( res-lndec, en su estuc!e( "ientrs que el -r,nci-e( i3ul"ente restblecido de ls !eridcusds -or l rebeld,( se le3rb l 'er lle3r el o" i-ur de su coronción; Mientras tanto$ l componlindas canciones que epresaban su amor por alem.2 En aquellos doce meses$ la ciudad de la pa; llegó a ser m&s bella$ siendo adornada cual una no"ia para grandioso d,a de la coronación.< A un se"n -r el o" i-ur( S"el( totl"ente inconsciente de que el d, de su #uicio -ro5i"b$ reunió a sus seguidores$ anunci&ndoles que la próima misión ser,a la conquista de alem. 'ntes dque ellos a"an;aran$ sin embargo$ l subir,a solo para "eriicar los puntos "ulnerables de la ciudad. =espus de ser aplaudido por la turba$ amael partió en su misión de reconocimiento. Mientras que a"an;absolo$ procuraba no acordarse de aqullos momentos que le tra*eran terror por la culpabilidad$ mas$ dominado pouna uer;a superior$ ue arrastrado en sus recuerdos hacia aquel monte de la cruel tortura. 4odo su -sdo co"en2ó 'enirle l "e"ori( co"o un -eso des"orondor;I 9uando despertó de sus recuerdos de los cuales no consiguió huir$ era )a de noche. La oscuridad que lo en"ol"le pareció el presagio de un triste inal. Ese des&nimo$ sin embargo$ procuró desecharlo con el recuerdo del e*rcitque lo esperaba$ listo para cumplir sus órdenes$ en la conquista de alem$ donde no habr,a m&s recuerdos de aqu pergamino.+ El amanecer lo alcan;ó estando próimo a alem. 'l "er el monte de los li"os$ le "ino el recuerdo de la #ltim"e; que lo traspasó$ de*ando tras de s, la ciudad "encida. B9u&ntas noches hab,an pasado desde entoncesC Nl hab perdido la noción del tiempo$ no sabiendo que eactamente doce meses se hab,an pasado. 6o -od, i"3inrque( r)b en quell "0n el o" i-ur( el d, de su #uicio;Q 'l llegar a la cumbre del monte de los li"os en aquella maana$ amael se sorprendió al "er que la ciudad hab,a tornado m&s bonita que antes 7oda ella estaba adornada de ramos ) de lores$ como una doncella a la espede su no"io. sin embargo$ alem estaba abandonada$ no teniendo ninguna seal de "ida en todas sus mansioneEsto lo hi;o concluir que los golpes que hab,an aniquilado al pr,ncipe ) al cetro$ hab,an tra,do como consecuenctodo aquel abandono. l no sb,( sin e"br3o( que en quel "o"ento todos los re"nentes de quel reino( sencontrbn ocultos en el 3rn slón del -lcio( es-erndo el "o"ento "/s 3lorioso( de l coronción dMelquisedec;H Gmagin&ndose ealtado sobre el trono abandonado$ teniendo a sus pies a los e*rcitos "ictoriosos$ el rebeld penetró en la ciudad$ dirigindose apresuradamente al palacio. 'l cru;ar el portal principal que da entrada al saló principal$ se llenó de asombro al "er all, reunidos una multitud de ieles. obre un tablado de oro$ adornado dlores talladas en piedras preciosas$ se encontraba el trono "ac,o. En la base del trono estaba el pergamino de lle)es$ una corona de oro llena de piedras preciosas ) el estuche que hab,a de*ado "ac,o en aquella noche de ltraición. in entender el enigma$ amael se escondió por detr&s de una columna$ temiendo ser reconocido$ ) smantu"o obser"ando.10 Los s#bditos$ con la epresión de eli; epectati"a miraban hacia el trono "ac,o. ¿Dónde encontrbn ell"oti'os -r tod es le3r,( si !b,n -erdido su re) #unt"ente con el cetro? amael se preguntaba sob



ese misterio$ cuando 'don,as$ aplaudido por los s#bditos$ se encaminó *unto al trono. 9on una "o; llena democión por la "ictoria$ el undador de alem anunció que hab,a llegado el momento tan soado de la coronació5n grito de triuno resonó por los aires cuando$ anunciado por su padre$ entró el pr,ncipe amado encamin&ndose edirección del trono. Al 'erlo cubierto -or un "nto de 3lori( S"el +ue -ose,do -or un terrible -'or( -rocuró !uir; =escubrió$ sin embargo$ que todos los portales del gran salón estaban cerrados por uera.11 =io inicio la ceremonia de la coronación. Era un momento en "erdad solemne. 'don,as$ en un gesto re"erenttomó la rica corona$ coloc&ndola en la rente de su hi*o. Gnclin&ndose despus hacia el estuche$ lo abricuidadosamente$ sacando de l el la#d restaurado$ cu)a belle;a ) brillo eran mu) superiores a su primecondición$ al salir de las manos de 'don,as su laudero. ent&ndose en el trono en medio de las aclamaciones de los#bditos$ Melquisedec co"en2ó tocr el cetro( scndo de él cordes de "uc! r"on, ) -2; 4odos squietron -r o,r sus nue's co"-osiciones que e5-resbn su -ro+undo "or -or el cetro ) -or todquel reino de -2;12 (ran emoción in"ad,a el cora;ón de todos en ese momento$ lle"&ndolos a las l&grimas. S"el( sin +uer2-r reccionr( se sent, torturdo -or quellos cordes que lo torturbn !ciendo re'i'ir en su "ente suo-ortuniddes -erdids( en un tortur terrible -r su concienci;13 Melquisedec hab,a compuesto para ese momento especial$ canciones que retrataban los momentos mdestacados de la historia de alem 9uando comen;ó a cantar sobre la amistad que hab,a tenido por amael$ su "ose embargaba por las l&grimas que no consegu,a contener. D7riste era para l cantar sobre la ca,da de aqul quhab,a sido su ma)or amigoF Cntó entonces sobre el lto -recio que tu'o que -3r -or l reconquist dcetro( que re-resent l !onr de Sle";1 'l contemplar aquellas manos marcadas por las cicatrices$ tocando con tanta maestr,a ) cario el cetrrestaurado$ los s#bditos tomados por una uerte emoción$ se postraron en llanto.9 Al 'er en ls "nos de Melquisedec quél ld que( en sus "nos !b, sido un Instru"ento de torturS"el co"-rendió( de"sido trde cu/nto !b, errdo( des'i/ndose de los conse#os del -r,nci-eF 9u&nt"eces aqullas manos sobre las cuales hab,a descargado toda aquella "iolencia hab,an sido etendidas en uesuer;o de sal"arlo$ ) l las hab,a despreciado negligentemente. NA!or( er de"sido trdNNNE5tre"d"ente trde

C-,tulo 9:

#ubilosa proclamaci$n y coronaci$n de %eluisedec" Sellamiento de ciudadanía a los fieles" Samael se presentadesafía al rey" Sellamiento del 0uicio contra Samael y sus seguidores"

1 Los sbditos triun+ntes que( re'erentes( !b,n sido conducidos todo quel -sdo de +elicidd( triciódolor ) triun+o( unieron +inl"ente ls 'oces en un #ubilos -rocl"ción12 .erdderos ) #ustos son tus -rinci-ios( o! re) de Sle"; Di3no eres de reinr en 3lori ) "#estd entre loloores de tus +ieles( -orque en tu scri+icio nos librste de ls "en2s de ls tiniebls( !ciendo rencer enuestro cor2ón l le3r, del "necer;3 Ese c&ntico de ealtación ue seguido por la ceremonia de la conirmación de todos los ieles en su "ictoria. Ehi*o de 'don,as$ con su cetro redimido$ comen;ó a sellar con un toque especial del cetro$ la "ictoria de cada une ormó para lo cual una larga ila de ieles ealtados.> Los sbditos con+ir"dos( "edid en que ibn recibiendo el toque de -robción del re)( se colocbn ldo derec!o del trono( donde -er"nec,n 3urdndo -or l con+ir"ción de los otros;P Las miradas que$ iluminadas de alegr,a$ hab,an acompaado el sellamiento de los #ltimos *ustos$ se posaron sobla igura etraa de S"el que( do"indo -or un +uer2 irresistible( se enc"inb cbi2b#o en direcciódel trono; Su s-ecto er !orrible1 su se"blnte !b, sido de+or"do -or el "lF sus 'estidurs estbsucis ) "l olientesF todo en él re-u3nb( l -unto de que ndie lo reconoció;I En medio del asombro de los s#bditos$ Melquisedec se le"antó de su trono como herido por un gran dolor =sus labios los s#bditos o)eron una dolorosa eclamación:+ O NNNS"el( S"elG



Q La igura deplorable de aqul que hab,a sido tan bello$ llenó a todos de triste;a$ ) comen;aron a llorar. Ellos lamentaban por moti"o de que sab,an que el destino de amael ) de todos aquellos que lo hab,an seguido$ pudhaber sido mu) dierente$ si ellos hubiesen atendido a los amorosos ruegos de 'don,as ) de su hi*o. ¿Acso no erel -ln del re) ) el sue0o de Melquisedec el tenerlo co"o el -rotector del -er3"ino( siendo el se3undo e!onr en quél reino?H amael que$ reconociendo su des"entura$ se hab,a aproimado cabi;ba*o hacia el trono$ al presenciar toda aquellamentación$ ) engaado nue"amente por el orgullo$ *u;gando que se trataba de una demostración de debilidad dsus enemigos. 'l acordarse de su e*rcito que ortiicado lo esperaba en la planicie$ lo engaó con la certe;a de quser,a "ictorioso sobre alem. 9on este pensamiento$ le"antó la rente marcada por el odio )$ mirando al re)$ le"anel puo cerrado ) lo desaió$ desdeando su autoridad$ con la amena;a de quitarle el trono.10 '#n que condolidos por su perdición$ los s#bditos de alem no soportaron la osada arenta de aqul enloquecid *o"en que$ despus de causar tanto surimiento$ toda",a era capa; de le"antarse con tan grande desa,o.11 El re) 'ictorioso que con tnto -lcer !b, selldo con su cetro l conquist de los +ieles( lo le'ntdoloros"ente -r el sell"iento de l triste suerte de los rebeldes; Gnmo"ili;ado por una uer;a etraS"el$ sin des"iar los o*os del cetro$ o)ó de los labios del re) la proclamación de su *uicio ) de todos suseguidores:12 >risioneros de una uer;a in"isible$ estar,an retenidos en sus ca"ernas por seis aos$ siendo despus "isitado por el uego del *uicio que los destruir,a *untamente con las ciudades que con ellos se aliaran.

C-,tulo 9<

An 5ngel se le aparece en sueños a %eluisedec, le da instrucciones y le muestra en !isi$n la Salem Celestia %eluisedec, el protector de las m5s amplias re!elaciones de 4ios" La historia de Salem, una seme0anza de lhistoria del Ani!erso" %eluisedec se conmue!e y rinde honra al %esías, al descubrir ue se con!irti$ en un seme0anza de El" 7atalla por el cetro disputado" 4ía del 0uicio final"

1 'l ir a la cama despus de aquel d,a de tantas emociones$ el *o"en re)$ inmerso en los recuerdos de aqul pasadde elicidad ) dolor$ rodaba en su cama sin sueo. 9uando inalmente se durmió$ tu'o un sue0o "usi3ni+icti'o;

2 En el sueo$ se le -reció un /n3el lu"inoso$ que slud/ndolo con un sonris( le di#o que todo el Uni'ersco"-0b con tención todo quel dr" que estb 'i'iendo( "is"o que ten, un sentido -re +i3urti'retrtndo conteci"ientos -sdos ) +uturos( que en'ol',n todo el 'sto uni'erso;

3 Las palabras del &ngel despertaron en Melquisedec un gran deseo de conocer la historia de ese drama cósmico.

Conociendo su 'i'o deseo( el /n3el lo rrebtó en el sue0o re'el/ndole un +uturo distnte . =elante de suo*os se maniestaron las glorias de una nue"a ) esplndida alem$ cu)as murallas ) mansiones estaban hechas piedras preciosas Los portales de la ciudad eran de perlas. us amplias a"enidas eran de oro puro. L ciudd ercudrn3ulr ) se etend,a por centenares de Vilómetros. Estaba di"idida en dos sectores distintos: <orte ) uAl sur se ele'bn incontbles "nsiones( !bitciones eterns de /n3eles ) de seres !u"nos redi"idos '

norte hab,a un lindo -r,so el cual el /n3el re'eló ser el #rd,n del Edén . 'll,$ en ambos bordes del r,o de "ida$ hab,a campos repletos de todo tipo de "egetación$ con lores ) rutos en abundancia. 6i",an all, en perecarmon,a$ todas las especies de insectos$ a"es ) animales.P En medio del para,so se pod,a "er una montaa ulgurante$ la cual el &ngel airmó ser el monte ión$ el lugar dtrono de =ios. Era de aquel monte que emanaba el r,o de la "ida$ lu)endo por toda la ciudad.I 9uando hubieron alcan;ado la cumbre de la montaa sagrada$ el re) de alem estu"o deslumbrado con escenario "isto a su alrededor. e encontraba en la parte m&s ele"ada de ión la m&s linda de todas lediicaciones re"elado por el &ngel como el palacio del =ios. 'quella magniica construcción era sustentada posiete columnas$ todas de oro transparente$ incrustadas de lindas perlas. 'lrededor del palacio$ lorec,a la m&euberante "egetación: hab,a all, el pino$ el ciprs$ el oli"o$ la murta$ la romasera ) la higuera$ dobl&ndose al pesde sus higos maduros.



+ Mientras que se admiraba ante la belle;a de aquel lugar$ el &ngel le di*o que a ning#n ser humano le hab,a siddado el pri"ilegio de "er el interior de aquel palacio de =ios. ' l le ser,a dado este honor$ pues ue escogido paser el portador de las m&s amplias re"elaciones sobre el reino de la lu;.Q 'l traspasar con re"erencia uno de los portales de perlas$ se postraron en adoración$ mientras que o,an el c&nticde una multiplicidad de seraines$ que circundaban el trono$ en constante alaban;a a 'qul que Era$ que Es ) quiempre er&.H 'l mirar hacia 'qul que estaba sentado sobre el trono$ Melquisedec se sorprendió al descubrir la igura de uhombre. Nl estaba cubierto por un manto de lino ino$ de una blancura sin igual$ ) ten,a sobre la cabe;a una coronormada por siete coronas sobrepuestas$ repletas de piedras preciosas.10 'l mirar hacia las manos que sustentaban el cetro$ el hi*o de 'don,as se sorprendió al descubrir en ellcicatrices de heridas$ seme*antes a aqullas en sus manos. El &ngel le airmó ser el Mes,as$ la maniestación "isiblde ahh$ el =ios in"isible.11 'tra,do por el cetro resplandeciente$ con el cual el Mes,as gobernaba sobre todo el 5ni"erso$ el re) de alem"io en l el sello del dominio$ ) en l escrito el nombre: Gsrael.12 'rrebatado por una prounda emoción$ Melquisedec se postró ante el !e) de aquella alem eterna$ )$ re"i"iendall, la historia de su pequea ciudad$ tu"o el deseo de conocer el gran drama de la historia uni"ersal. 9onociendo deseo de su cora;ón$ el &ngel le di*o:13 O'hora te dar a conocer la historia de esta gloriosa alem. 7odo lo que te uere mostrado en la "isión$ deber&t# registrar ielmente en seis pergaminos que ser&n cosidos uno al otro$ ormando un #nico rollo. 7# tendr&s seaos para escribirlos. 'l inal de los siete aos$ t# recibir&s de las manos de un anciano un "aso conteniendo urollo especial$ con muchas re"elaciones importantes$ destac&ndose la historia de alem. 7# tomar&s ese rollo$ ) coser&s como el primero de los siete$ ormando un #nico rollo. =espus de sellarlo$ t# ) el anciano lo guardar&n eel "aso$ lle"&ndolo hacia una cue"a que )o les mostrar al norte del mar salado$ donde permanecer& ol"idado hasque lleguen los #ltimos d,as$ cuando ser& rescatado ) re"elado al mundo por medio de un pequeo beduino. O 1 =espus de decirle al re) de alem estas palabras$ el &ngel lo condu*o en "isión a un ininito pasado$ cuando 5ni"erso toda",a no eist,a.1P 5na historia mu) parecida con la de alem comen;ó a desplegarse delante de sus o*os pero$ en una dimensióininitamente ma)or$ comen;ando por la creación del reino de la lu;. 9on admiración contempló la ormación d billones de mundos ) estrellas$ repletos de "ida ) elicidad que comen;aron a girar en torno de la alem 9elestiael para,so de =ios.1I u atención se "ol"ió despus hacia el m&s bello de todos los querubines que$ honrado por el 9reador$ comen;a habitar con Nl en u palacio. 5na eter-nidad de elicidad ) pa; parec,a encantar aquel reino$ cuando la mismeperiencia de ego,smo ) rebeld,a "i"ida por amael$ comen;ó a repetirse en la "ida de aqul &ngel amado.1+ Escenas de una gran rebelión comen;aron a ser mostradas a Melquisedec$ implicando a todos los habitantes de5ni"erso. El querub,n honrado$ seme*ante a amael$ hab,a seducido a un tercio de las huestes que$ comen;aronre"erenciarlo como re).1Q En medio de las escenas de aquel gran conlicto$ el re) de alem atestiguó la creación del planeta 7ierra$ sobrla cual surgió el hombre como cetro racional de aquel reino disputado.1H 9on agon,a "io el momento en que el *ee de la rebelión se aproimó sutilmente al para,so$ apoder&ndose del shumano$ despus de seducirlo con tentaciones. )ó entonces su bramido$ en una proclamación de "ictoria. ' partde ese momento$ el enemigo de =ios comen;ó a arruinar al ser humano$ apagando en l todos los rasgos de lgloria di"ina$ como amael hab,a hecho con el cetro.20 u propia eperiencia$ al declarar en aquella maana a los s#bditos de alem su decisión de ir en la b#squeddel cetro perdido$ comen;ó a repetirse delante de us o*os.21 !euniendo a las huestes que hab,an permanecido ieles a u gobierno$ el 9reador comen;ó a re"elar un plan drescate: Nl habr,a de ir en la b#squeda del hombre$ ) lo redimir,a$ aunque esto le costase un sacriicio ininit=elante de esta re"elación$ el hi*o de 'don,as se postró conmo"ido$ al descubrir que en su "ida hab,a tenido lhonra de retratar al propio Mes,as.22 7odo el drama "i"ido por el hi*o de 'don,as en su angustiante b#squeda$ hasta el momento de su suplicio por redención del cetro$ ue ganando amplitudes en aquella "isión que abarcaba toda una eternidad. =elante de suo*os desilaban escenas de una gran batalla que$ sin tregua se etender,a hasta el d,a del *uicio inal$ cuando Mes,as "ictorioso empuar& el cetro redimido$ sellando con l la condenación de todas las huestes rebeldes.



C-,tulo 9>

%eluisedec tu!o conocimiento de la +ran liberaci$n debido a las re!elaciones ue le fueron manifestadas por 5ngel del Señor" braham, Sara, 2saac, Lot y sus dos hi0as, así como los pastores y fieles, son recibidos con 0úbilen Salem, para celebrar La Fiesta de Su?ot" braham entrega el rollo a %eluisedec, y éste lo cose uniéndolo suyo" 4espués de leer parte del rollo de braham, %eluisedec bendice al peueño 2saac y profetiza concernienal futuro del rollo"

1 ' tra"s de las re"elaciones recibidas del &ngel$ Melquisedec tomó conocimiento de la gran liberación alcan;addie; d,as antes de su coronación$ en !osh 4ashan&$ cuando delante de trescientos pastores con sus "asoencendidos$ e*rcitos de cinco re)es hab,an ca,do$ saliendo libres los cauti"os.2 9onociendo nuestra intención de subir a alem por la ocasión de uVot$ el re) hi;o preparati"os para una graiesta$ en la cual conmemorar,amos *untos la "ictoria sobre toda la desarmon,a generada por el orgullo ) por ego,smo.3 Aue por esto que al llegar nosotros a alem$ uimos sorprendidos con toda aquella honor,ica recepción. El ocuparme con el relato de todos esos acontecimientos$ me hi;o pasar por todo este sptimo ao$ casi sin notasus d,as$ que pasaron "eloces. Estamos ho) a las puertas de un nue"o !osh 4ashan&$ cuando los 300 pastoretocar&n los cuernos$ con"ocando a todos aquellos que posean las perlas$ para la reunión solemne de om Wipu

9inco d,as despus seremos recibidos en alem para la iesta de uVot.P La certe;a de que acontecimientos importantes toda",a deber&n ser relatados hasta el momento en que el "asser& de*ado en la cue"a$ me hace reser"ar un espacio en el rollo$ en el cual registrar$ d,a tras d,a$ los hechos$ hasla consumación de esta historia.I 4o) es !osh 4ashan&$ el d,a m&s eli; de mi "ida$ pues mis bra;os podr&n abra;ar inalmente al hi*o de promesa. La primera cosa que ara hi;o al recibirlo$ ue colocarle en su manita derecha la segunda perla que Mes,as le hab,a dado en el d,a de su con"ersión$ en la cual estaba escrito el nombre Gsaac que signiica 8risa8$ nombre de Melquisedec ) el nombre de alem.+ =os d,as antes del om Wipur$ Gsaac ue circuncidado$ conorme a la orden de ahh.Q =esde que los pastores comen;aron a tocar sus cuernos en !osh 4ashan&$ todos aquellos que pose,an perlas d"aso$ de*aron sus tiendas$ dirigiendose en grupos pequeos$ para estar *unto al !oble de Mambr.

H 'l llegar el om Wipur$ el d,a de la reunión solemne$ mis pastores me inormaron que todos aquellos que hab,arecibido perlas$ hab,an comparecido a la reunión$ no altando ninguna persona. Era mara"illoso "er la alegrestampada en el semblante de toda aquella multitud$ que anhelaban la subida a alem. 7odos ten,an una historque contar$ de cómo ueron mal comprendidos ) humillados por aquellos que no recibieron la sal"aciórepresentada por las perlas. El #nico consuelo que ten,an en aquel tiempo$ pro"en,a de la certe;a de que subir,analem para la iesta de uVot.10 En el primer d,a de la iesta de uVot$ la multitud ue subdi"idida en grupos pequeos de doce personas$ parsubirnos en orden hasta alem.11 7eniendo el "aso con el rollo en mi espalda$ me coloqu al rente de la multitud$ siendo seguido por araGsaac$ que "en,an montados en un camello Luego detr&s "en,an Lót ) sus hi*as ) un poco mas atr&s$ los tresciento pastores seguidos por todos los ieles.

12 Gnici&bamos nuestro ascenso cuando$ acompaado por todos sus s#bditos$ apareció Melquisedec "iniendo nuestro encuentro$ haciendo "ibrar por los aires el sonido esti"o de muchos instrumentos musicaleconmemorando la gran "ictoria.13 =espus de saludarnos$ el hi*o de 'don,as nos condu*o en una marcha esti"a hasta introducirnos a las puertde alem$ que se encontraba ahora m&s bonita que antes.1 =elante del trono$ todos los redimidos ueron coronados por Melquisedec$ comen;ando en seguida el gra banquete.1P (rande ue la alegr,a del re) de alem cuando le entregu el "aso con mi manuscrito. Lle"&ndome a una saespecial del palacio$ l me mostró los seis manuscritos en los cuales hab,a registrado la historia del 5ni"erso$ seg#como le hab,a sido mostrada en su sueo.1I 'l recibir mi manuscrito$ l lo cosió a los dem&s$ llegando a ser el primero del gran rollo.



1+ En el #ltimo d,a de la iesta de uVot$ el rollo ue abierto delante de toda la multitud de ieles. =espus de leeuna buena parte de mi manuscrito$ el hi*o de 'don,as$ tomando en sus bra;os al pequeo Gsaac$ airmó:1Q OEn la descendencia de ste nio habr& de cumplirse todas las cosas escritas en este manuscrito. O 1H 4abiendo dicho esto$ el re) lo bendi*o$ de"ol"indoselo a ara.20 =espus de bendecir a Gsaac$ Melquisedec comen;ó a hablar sobre el uturo del rollo que permanecer,a por cacuatro milenios oculto en una cue"a$ siendo inalmente encontrado por un beduino de la tribu de 7aamireh. 'l salde su cue"a$ el rollo enrentar,a la oposición de muchos eruditos que lo declarar,an apócrio. 6endr,a$ sin embargel momento$ en que sus re"elaciones ser,an conirmadas$ ) muchos ser,an transormados por sus mensa*e prepar&ndose para el d,a del *uicio inal.



L 7istori del Uni'erso?5n relato escrito por Melquisedec@

!e"elaciones que un &ngel del eor maniestó a Melquisedec en un sueo que tu"o lugar la noche siguiente a scoronación$ un ao despus de recuperar el cetro de alem$ habiendo pagado el precio de su rescate con dolor sangre.

C-itulo 9 -l -terno !i!i$ una eternidad antes de crear el Ani!erso" %undo de Luz" %onte Si$n" <ío de la !ida" #ardín d -dén" #erusalén, la ciudad de paz" Lucifer, el primogénito de los 5ngeles" Leyes del gobierno di!ino" Libertad descoger" Gngeles, ministros del reino de la luz" Ani!erso" bismo de tinieblas, prueba de fidelidad" Separaci$entre la luz y las tinieblas"

1 'ntes que eistiese una estrella para brillar$ antes que hubiese &ngeles para cantar$ )a hab,a un cielo$ el hogar deEterno$ el #nico =ios. >erecto en sabidur,a$ amor ) gloria$ "i"ió el Eterno una eternidad$ antes de concreti;ar lindo sueo $ en la creación del 5ni"erso.2 Los incontables seres que componen la creación ueron$ todos$ ideali;ados con mucho cario. =esde el diminu&tomo hasta las gigantescas galaias$ todo mereció u suprema atención. 'mador de la m#sica$ =ios ideali;ó 5ni"erso como una gran orquesta que$ ba*o u regencia$ deber,a "ibrar acordes armoniosos de *usticia ) pa;. >acada criatura Nl compuso una canción de amor.3 El Eterno estaba mu) eli;$ pues us sueos estaban por reali;arse. Mo"indose con ma*estad$ inició u obra dcreación. us manos moldearon primeramente un mundo de lu;$ ) sobre l una montaa ulgurante sobre la cuestar,a para siempre airmado el trono del 5ni"erso. 'l monte sagrado =ios llamó: ión. =e la base del trono$ el Eterno hi;o brotar un r,o cristalino$ para representla "ida que de Nl luir,a hacia todas las criaturas. 9omo sala del trono$ creó un lindo para,so que se etend,a pocentenas de Vilómetros alrededor del monte ión. 'l para,so llamó: Edn. 'l sur del para,so$ en ambos m&rgendel r,o de la "ida$ ueron ediicadas numerosas mansiones adornadas de piedras preciosas$ que se destinaban a lo&ngeles$ los ministros del reino de la lu;.P 9ircundando el Edn ) las mansiones angelicales$ constru)ó =ios una muralla de *aspe brillante$ a lo largo de cual pod,an ser "istos grandes portales de perlas. 9on alegr,a$ el Eterno contempló la 9apital soada. La ciudad esu esplendor era como una no"ia adornada$ pronta para recibir a su esposo.I 9ariosamente$ el gran 'rquitecto la llamó: Terusaln$ la 9iudad de la >a;. =ios estaba por traer a la eistencia la primera criatura racional. er,a un &ngel glorioso$ de entre todos el de ma)or honra. 'dornado por el brillo de la piedras preciosas$ ese &ngel "i"ir,a sobre el monte ión$ como representante del !e) de re)es delante del 5ni"erso+ 9on mucho amor$ el 9reador comen;ó a moldear al primognito de los &ngeles. 7oda sabidur,a aplicó ormarlo$ hacindolo perecto. 9on ternura le concedió la "ida el hermoso &ngel$ como despertando de u proundo sueo$ abrió los o*os ) contempló la a; de su 'utor. 9on alegr,a$ el Eterno le mostró las belle;as d para,so$ habl&ndole de us planes$ que comen;aban a concreti;arse.Q 'l ser conducido al lugar de su morada$ *unto al trono$ el pr,ncipe de los &ngeles estaba agradecido )$ con "omelodiosa$ entonó su primer c&ntico de alaban;a. =e las alturas de ión$ se descubr,a$ a los o*os del hermoso &ngeTerusaln en su inmensidad ) esplendor. El r,o de la "ida$ al desli;ar sereno en medio de la 9iudad$ se aseme*abauna larga a"enida$ rele*ando las belle;as del *ard,n del Edn ) de las mansiones angelicales.H En"ol"iendo al primognito de los &ngeles con u manto de lu;$ el Eterno comen;ó a hablarle de los principioque habr,an de regir el reino uni"ersal. Le)es ,sicas ) morales deber,an ser respetadas en toda la etensión dgobierno di"ino. Las le)es morales se resum,an en dos principios b&sicos: amar a =ios sobre todas las cosas ) a pró*imo como a , mismo. 9ada criatura racional deber,a ser un canal por medio del cual el Eterno pudiederramar a otros "ida ) lu;. =e esa orma$ el 5ni"erso crecer,a en armon,a$ elicidad ) pa;.10 En el reino de =ios$ las le)es no ser,an impuestas con tiran,a Los s#bditos ser,an libres. La obediencia debersurgir espont&nea$ en un gesto de reconocimiento ) gratitud. En ese reino de libertad$ la desobediencia tambiser,a posible. El resultado de tal comportamiento ser,a el "aciamiento de las uer;as "itales.



11 =espus de re"elar al hermoso &ngel las le)es de u gobierno$ el Eterno le conió una misión de graresponsabilidad: ser,a el protector de aquellas le)es$ debindolas honrar ) re"elar al 5ni"erso listo para ser creado9on el cora;ón rebosante de amor a =ios ) a los seme*antes$ le corresponder,a ser un modelo de perección: ser,Lucier$ el portador de la lu;. El pr,ncipe de los &ngeles agradecido por todo$ se postró ante el amoroso !e) prometindole eterna idelidad. El Eterno continuó u obra de creación$ tra)endo a la eistencia a innumerablhuestes de &ngeles$ los ministros del reino de la lu;.12 La 9iudad anta ue poblada por esas criaturas radiantes que$ elices ) agradecidas$ un,an las "oces e bell,simos c&nticos de alaban;a al 9reador. =ios tra,a ahora a la eistencia el 5ni"erso que$ repleto de "ida$ girarentorno de u trono airmado en ión. 'compaado por us ministros$ partió hacia la grandiosa reali;ación=espus de contemplar el "ac,o inmenso$ el Eterno le"antó las poderosas manos$ ordenando la materiali;ación dlas multiormes mara"illas que habr,an de componer el 9osmos.13 u orden$ cual trueno$ repercutió por todas partes$ haciendo surgir$ como por encanto$ galaias sin n#merrepletas de mundos ) soles Opara,sos de "ida ) alegr,aO$ todo girando armoniosamente entorno del monte ión'l presenciar tan grande hecho del supremo !e)$ las huestes angelicales se postraron$ haciendo repercutir por espacio iluminado un c&ntico de triuno$ en salutación a la "ida.1 7odo el 5ni"erso se unió en ese c&ntico de gratitud$ en promesa de eterna idelidad al 9reador. (uiados por Eterno$ los &ngeles comen;aron a conocer las rique;as del 5ni"erso. En esa ecursión sideral$ estaban admiradoante la inmensidad del reino de la lu;. >or todas partes encontraban mundos habitados por criaturas elices que lorecib,an en iesta. Los &ngeles nos saludaban con c&nticos que hablaban de las buenas nue"as de aquel reino d pa;.1P 7an preciada como la "ida$ la libertad de escoger$ a tra"s de la cual las criaturas podr,an demostrar su amor 9reador$ eig,a una prueba de idelidad. 9on el propósito de re"elarlo$ el Eterno condu*o las huestes por entre espacio iluminado$ hasta aproimarse a un abismo de tinieblas que contrastaba con el inmenso brillo de lagalaias. ' lo le*os$ ese abismo se hab,a re"elado insigniicante a los o*os de los &ngeles$ como un puntillo sin lu; pero a medida de su acercamiento$ se mostró en su enormidad.1I El 9reador$ que a cada paso re"elaba a los &ngeles los misterios de u reino$ estaba all, silencioso$ comguardando para , un secreto. Las tinieblas de aquel abismo consist,an en la prueba de la idelidad. 6olte&ndoshacia las huestes$ el Eterno solemnemente airmó: O87odos los tesoros de la lu; estar&n abiertos a "uestrconocimiento$ menos los secretos ocultos por las tinieblas. ois libres para ser"irme o no. 'mando la lu; estarligados a la Auente de la 6ida8. O 1+ 9on estas palabras$ hi;o =ios separación entre la lu; ) las tinieblas$ el bien ) el mal. El 5ni"erso era libre paescoger su destino.

C-,tulo :

Ana eternidad de armonía y paz" Lucifer, trasmisor de las re!elaciones del 6adre a sus 5ngeles" sambleas e planetas capitales" La obediencia a las leyes di!inas, fundamento de progreso y felicidad" Lucifer es atraído polas tinieblas del abismo" Lucifer, creado para la Luz" 2nter!enci$n de un 6adre amoroso" La gran lucha interior d Lucifer" -l don del libre albedrío" Deoría de la ciencia del bien y del mal" Fundamentos del reino del -ternoDraici$n de Lucifer y de un tercio de las huestes" -l -terno ad!ierte sobre el rompimiento de la Fuente de la &ida

-l Ani!erso puesto a prueba" -l inconsolable llanto del 6adre" -l misterioso abismo, significado simb$lico dreino de la rebeldía" Comienzo de la creaci$n del planeta Dierra"

1 El tan esperado sueo del 9reador se concreti;aba. 'hora$ como >adre carioso$ conduc,a a las criaturas a tra"de una eternidad de armon,a ) pa;. En "irtud del cumplimiento de las le)es di"inas$ el 5ni"erso se epand,a eelicidad ) gloria. 4ab,a un uerte celo de amor$ que a todos un,a uertemente. Los seres racionales$ dotados de lcapacidad de un desen"ol"imiento ininito$ encontraban indescriptible placer en aprender los inagotables tesoros dLa abidur,a di"ina$ transmitindolos a los seme*antes. Eran como canales por medio de los cuales La Auente de Eterna 6ida nutr,a a todos de amor ) lu;.2 En Terusaln$ los ministros del reino se reun,an ante el soberano !e)$ siempre prontos a cumplir us propósitoEra a tra"s de Lucier que el Eterno pon,a de maniiesto us designios. =espus de recibir una nue"a re"elació



l prontamente la transmit,a a las huestes angelicales. Nstas$ a su "e;$ la compart,an con la creación. En cleb"uelo los &ngeles se dirig,an hacia los planetas capitales$ donde$ en grandes asambleas$ se reun,an lrepresentantes de los dem&s mundos. En muchas de esas asambleas$ Lucier se hac,a presente$ llenando a lo participantes de alegr,a ) de admiración. >erecto en todas las "irtudes$ l los cauti"aba con su simpat,a.3 <ingun otro &ngel consegu,a re"elar como l los misterios del amor del Eterno. El 5ni"erso$ aliment&ndose de Auente de la 6ida$ se epand,a en una eternidad de perecta pa;. La obediencia a las le)es di"inas era undamento de todo progreso ) elicidad. 'unque conscientes del libre albedr,o$ *am&s hab,a subido al cora;ón dninguna criatura el deseo de apartarse del 9reador. 's, ue por mucho tiempo$ hasta que tal problema irrumpió ela "ida de aqul que era el m&s ,ntimo del Eterno. Lucier$ que hab,a dedicado su "ida al conocimiento de los misterios de la lu;$ se sintió poco a poco atra,do plas tinieblas. El !e) del 5ni"erso$ a los o*os de quien nada puede ser encubierto$ acompaó con triste;a sus pasoen el camino descendente que lle"a a la muerte. 'l principio$ una pequea curiosidad lle"ó a Lucier a aproimarsa aqul abismo proundo. 9ontempl&ndolo$ comen;ó l a indagar el porqu de no poder comprender su enigma.P !egresando a su lugar de honra$ *unto al trono$ se postró ante el di"ino !e)$ suplic&ndole: O>adre$ dameconocer los secretos de las tinieblas$ as, como me re"elas la lu;. O 'nte la petición del hermoso &ngel$ el Eternocon "o; epresi"a de triste;a$ le di*o: O4i*o m,o$ t# uiste creado para la lu;$ que es "ida. O 9on"encindose dque el 9reador no le re"elar,a los tesoros de las tinieblas$ Lucier decidió comprender por s, mismo el enigma. Tu;gaba capacitado para tanto. 9on esta triste decisión$ el pr,ncipe de los &ngeles permitió que surgiese en scora;ón una mancha de pecado que podr,a traer una cat&stroe para el 5ni"erso.I olo =ios sab,a lo que pasaba en el cora;ón de Lucier. El &ngel$ que hab,a sido creado para ser el portador de lu;$ estaba di"orci&ndose en pensamientos del bondadoso 9reador que$ en un esuer;o de impedir el desastre$ rogaba permanecer a u lado. 5na tremenda lucha comen;ó a trabarse en su interior. El deseo de conocer el sentidde las tinieblas era inmenso$ con todo$ los ruegos de aqul amoroso >adre$ a quin no quer,a tambin perder$ torturaban. 6iendo el surimiento que su actitud causaba al 9reador$ a "eces demostraba arrepentimiento$ pe"ol",a a caer.+ 'ntes de crear el 5ni"erso$ =ios )a hab,a pre"isto la posibilidad de una rebelión. El riesgo de conceder libertad las criaturas era inmenso$ mas$ sin este don$ la "ida no tendr,a sentido. El Eterno no quer,a reinar sobre robot programados para hacer solamente u "oluntad. El quer,a que la obediencia uese ruto del reconocimiento ) damor$ por eso decidió correr el gran riesgo. 'unque prosegu,a en la b#squeda del sentido de las tinieblas$ Lucino pretend,a abandonar la lu;.Q e esor;aba por llegar a una combinación entre esas partes que$ en el reino del Eterno$ coeist,an separadaAinalmente$ con un sentimiento de ealtación$ concibió una teor,a engaosa$ que pretend,a presentar al 5ni"erscomo un nue"o sistema de gobierno$ superior al gobierno del Eterno. =enominó a su teor,a Jla ciencia del biendel mal8. Estructurada en la lógica$ la ciencia del bien ) del mal se re"eló atra)ente a los o*os de Lucie pareciendo descorrer un sentido de "ida superior a aqul orecido por el 9reador$ cu)o reino posibilitaba solamenel conocimiento eperimental del bien.H En el nue"o sistema$ habr,a equilibrio entre el bien ) el mal$ entre el amor ) el ego,smo$ la lu; ) las tinieblas. lo largo del tiempo en que madurara en su mente la ciencia del bien ) del mal$ Lucier sabr,a guardarla en secredelante del 5ni"erso. 9ontinuaba en su puesto de honra$ cumpliendo la unción de >ortador de la Lu;. iembargo$ por m&s que procuraba ingir$ su semblante )a no re"elaba alegr,a en ser"ir al Eterno. El di"ino !e)$ qusur,a en silencio$ procuraba$ por medio de us re"elaciones de amor$ preparar a las criaturas racionales para lgran prueba que se aproimaba.10 ab,a que muchos dar,an o,do a la tentación$ "ol"indole la espalda. La noche de la prueba har,a sobresalir$ siembargo$ a los "erdaderos ieles Oaqullos que ser",an al 9reador no por inters$ sino por amor. O'l "er que hora de la prueba llegaba$ ) que Lucier estaba listo para traicionarlo delante del 5ni"erso$ el Eterno$ que *am&hab,a cesado de re"elar los tesoros de su sabidur,a$ se torno silencioso ) contemplati"o.11 El silencio hi;o re"i"ir en el cora;ón de las huestes el recuerdo de aquella primera ecursión sideral$ cuanddespus de mostrarles las rique;as del reino de la lu;$ =ios se tornó silencioso ante aqul abismo. e acordaban us palabras: 87odos los tesoros de la lu; estar&n abiertos a "uestro conocimiento$ menos los secretos ocultos plas tinieblas. ois libres para ser"irme o no. 'mando la lu; estaris ligados a la uente de la "idaK. Lucier$ quhab,a comen;ado a codiciar el trono de =ios$ le indagó el moti"o de u silencio. El 9reador$ contempl&ndolo coininita triste;a$ le di*o: 84a llegado la hora de las tinieblas. 7# eres libre para reali;ar sus propósitosK.



12 6iendo que el momento propicio para la propagación de su teor,a hab,a llegado$ Lucier con"ocó a los &ngel para una reunión especial. Las huestes$ deseosas de conocer el signiicado del silencio del >adre$ tomaron sulugares *unto al magn,ico &ngel$ que siempre les hab,a re"elado los tesoros del reino de la lu;. Lucier comen;ó sdiscurso ealtando$ como de costumbre$ el gobierno del Eterno. En una amplia retrospecti"a$ les recordó lagrandiosas re"elaciones que los hab,an enriquecido en toda aquella eternidad.13 El silencio di"ino$ lo presentó como siendo la indicación de que el 5ni"erso hab,a alcan;ado la plenitud dconocimiento que pro"en,a de la lu;. 9allando$ el Eterno les abr,a camino para el entendimiento de misterios a#no soados$ guardados hasta entonces m&s all& de los l,mites de u gobierno. orprendidas$ las huestes tomaroconocimiento de la eperiencia de Lucier sobre las tinieblas. 9on elocuencia$ l les habló de la ciencia del bien del mal$ indic&ndola como el camino de las ma)ores reali;aciones.1 El eecto de sus palabras pronto se hi;o sentir en todo el 5ni"erso. La pregunta era decisi"a ) eplosi"generando por primera "e; discordia. Los seres racionales$ en su prueba$ habr,an de optar por permanecesolamente con el conocimiento de la lu;$ el cual Lucier airmaba haber llegado a su l,mite$ o a"enturarse en conocimiento de la ciencia del bien ) del mal. En el comien;o$ los &ngeles se debatieron ante la pregunta$ siendluego despus todo el 5ni"erso puesto a prueba. >arec,a que la ciencia del bien ) del mal habr,a de arrebatar ma)or parte de las criaturas$ sin embargo$ poco a poco$ muchos que al principio se empaparon con la teor,adespertaron de la ilusión de la misma$ reairmando su idelidad al reino de la lu;.1P 'l inal de ese conlicto$ que se arrastró por largo tiempo$ se re"eló un tercio de las estrellas del cielo al lado dLucier$ ) las restantes$ aunque conmocionadas por la prueba al lado del Eterno. La ciencia del bien ) del mal u proclamada por Lucier como un nue"o sistema de gobierno. B>ero cómo e*ercerlo$ si el Eterno continuabreinando en iónC <ecesitaban encontrar una manera de ba*arlo de all,. El conse*o$ ormado por los &ngelerebeldes$ comen;ó a tratar de eso. =ecidieron$ inalmente$ solicitarle el trono por un tiempo determinado$ en el cu podr,an demostrar la ecelencia del nue"o sistema de gobierno. En caso de que uese aprobado por el 5ni"erso$ nue"o sistema se establecer,a para siempre en caso contrario$ el dominio retornar,a al 9reador.1I Aue as, que Lucier$ acompaado por sus huestes$ se aproimó arrogante delante de 'qul >adre suridohacindole tal petición. El Eterno no era ambicioso$ sólo quer,a el bien para us criaturas. i la ciencia del biendel mal consistiera realmente en un bien ma)or$ no e opondr,a a su implantación$ cediendo el trono a sudeensores. M&s Nl sab,a que aquel camino conducir,a a la inelicidad ) a la muerte. Mo"ido por u amo protector$ el 9reador desatendió la petición de las huestes rebeldes$ que se apartaron enurecidas.1+ 'l serles negado el trono$ Lucier ) sus huestes comen;aron a acusar al di"ino !e)$ proclamando ser sgobierno de tiran,a. 'irmaban ser su permanencia en el trono la m&s patente demostración de u arbitrariedaB<o les hab,a concedido libertad de escogerC B>or qu neutrali;arla ahora$ impidindoles poner en pr&ctica usistema de gobierno superiorC Las acusaciones de las huestes rebeldes repercutieron por todo el 5ni"erso$ haciend parecer que el gobierno del Eterno era in*usto. Esto tra*o prounda angustia a aquellos que permanec,an ieles reino de la lu;.1Q <o sabiendo como reutar tales acusaciones$ esas criaturas$ enmudecidas por el dolor moral$ anhelaban momento en que nue"as re"elaciones procedentes del 9reador pudiesen aclararles los misterios de ese graconlicto. Las acusaciones ) blasemias de las huestes rebeldes alcan;aron el punto culminante cuando el Eternen un gesto sorprendente$ se le"antó de u trono$ como pronto a de*arlo. Los inieles$ en la epectati"a de unconquista$ se aquietaron$ mientras que un sentimiento de temor penetraba en el cora;ón de los s#bditos de la lu;.1H BEntregar,a Nl el dominio de toda la creación$ para librarse de las "iles acusacionesC =e acuerdo con la lógica partir de la cual Lucier undamentaba sus ensean;as$ no le quedaba otra alternati"a al 9reador. En esta tremendepectati"a$ el 5ni"erso acompaaba los pasos de =ios. En un gesto de humildad$ el 9reador e despo*ó de corona ) de u manto real$ coloc&ndolos sobre el blanco trono. En u semblante no hab,a epresión dresentimiento o de ira$ sino de ininito amor ) triste;a. 9on solemnidad$ el Eterno proclamó que el momendecisi"o hab,a llegado$ cuando cada criatura deber,a sellar su decisión al lado de la lu; o de las tinieblas.20 En una amplia re"elación$ alertó de las consecuencias de un rompimiento con la Auente de la 6ida. 9on unmirada de ternura el 9reador contempló a sus hi*os. Era una mirada de humildad$ que lleno de amor$ suplicaba paque permanecieran a u lado. Gncontables criaturas$ conmo"idas$ correspondieron a u mirada de bondad$ mientrque una multitud se mantu"o cabi;ba*a. Lucier ) sus seguidores estaban conscientes de la seriedad de aqumomento. 7oda",a era posible dar "uelta atr&s en sus planes$ entreg&ndose arrepentidos al di"ino >adre qusiempre los hab,a amado.



21 Mientras cabi;ba*os consideraban sobre la decisión inal$ Lucier ) sus adeptos o)eron el c&ntico de aquelloque$ en reconocimiento ) gratitud$ se colocaban a lado del Eterno. La #ltima lucha se trababa en el cora;ón de loinieles que$ estremecidos$ llegaron a pensar en retirarse. Ainalmente$ el recuerdo del reciente gesto di"indespo*&ndose de la corona$ les dio la certe;a de que el gobierno les ser,a entregado. 6iendo que el 7ron permanec,a "ac,o$ Lucier ) sus huestes$ dominados por la codicia$ rompieron deiniti"amente con el 9reador. '"er un tercio de los s#bditos atra"esar las di"isiones de la eterna separación$ =ios de*ó eternar el dolor angustiantque por tanto tiempo martiri;aba u cora;ón$ 9ur"&ndose en inconsolable llanto.22 9ontemplando a us hi*os rebeldes$ ele"ó la "o; en una lamentación dolorosa: D84i*os m,os$ hi*os m,osF Da n puedo llamarlos as,F D%uisiera tanto tenerlos en mis bra;osF DMe acuerdo cuando con cario los ormF D5stedsurgieron elices ) perectos$ en acordes de esperan;a en eterna armon,aF D6i", para ustedes$ cubrindolos de glor) poderF D5stedes ueron mi alegr,aF B>or qu sus cora;ones cambiaron tantoC Bh qu m&s podr,a )o haber hech para hacerlos permanecer conmigoC D4o) m, alma sangra de dolor por la eterna separaciónF23 DB9ómo mirar hacia los lugares "ac,os donde tantas "eces regoci*antes ele"aron las "oces en hosannas esti"asin "enirme a la mente una me;cla de elicidad ) dolorCF D<ostalgia ininita in"ade )a mi ser$ ) s que ser& eterna4o) mi cora;ón se rompió ) se quebrantó Dlas cicatrices cargar para siempreF =espus de proclamar en llanto tadolorosa lamentación$ el Eterno$ se dirigió a Lucier$ el causante de todo el mal$ diciendo: 87# recibiste un nombrde honra al ser creado. 'hora no te llamar&n m&s Lucier$ sino at&nas$ el enemigo del 9reador ) de us le)es=espus de lamentar la perdición de las huestes rebeldes$ el Eterno$ en pasos lentos$ se ausentó del *ard,n del Edlugar del trono 5ni"ersal.2 B=ónde ser,a ahora u moradaC Las huestes ieles acompaaban re"erentes us misteriosos pasos de abandonoque parec,an descorrer un uturo di,cil$ de surimientos ) humillaciones. Bcupar,an los rebeldes el trono di"in proan&ndolo como dominio del pecadoC Esta indagación torturaba el cora;ón de los s#bditos del Eterno. =e*andu amada 9iudad$ el eor de la lu; se condu*o$ en medio de las glorias del 5ni"erso$ en dirección del abisminmenso$ respecto del cual hab,a callado hasta entonces. 'll, e detu"o una "e; m&s$ enmudecido$ mientras qu parec,a leer en las tinieblas un uturo de grandes luchas.2P 'nte el surimiento del Eterno$ epresado en la triste;a de su semblante$ los ieles pudieron inalmentcomprender el signiicado de aqul misterioso abismo: consist,a en una representación simbólica del reino de rebeld,a. En el rostro entristecido de =ios se maniestó$ por in$ un brillo que a los ieles animó. Le"antando lo poderosos bra;os ante las tinieblas$ ordenó en alta "o;: 84a)a lu;.8 Gnmediatamente$ la lu; de u presencia inundel proundo abismo )$ triunando sobre las tinieblas$ re"eló un mundo inacabado$ cubierto por aguas cristalina9on ese gesto$ el Eterno iniciaba una gran batalla por la rei"indicación de u gobierno de lu; batalla del amocontra el ego,smo de la *usticia contra la in*usticia de la humildad contra el orgullo de la libertad contra escla"itud de la "ida contra la muerte.2I atalla que$ sin tregua$ se etender,a hasta que$ en el amanecer anhelado$ pudiese el di"ino !e) retorn"ictorioso al santo monte ión$ donde$ entroni;ado en medio de las alaban;as de los redimidos$ reinar,a pasiempre en perecta pa;. Las tinieblas$ en su uga$ sealaban hacia el aniquilamiento inal de la rebeld,a. Las aguaabundantes que cubr,an aqul mundo$ hasta entonces oculto$ simboli;aban la "ida eterna que para los ieles serconquistada por el amor que todo sacriica. El mundo re"elado era la tierra. 6isitada por las tinieblas ) por la luella ser,a el palco de la gran lucha. Los ieles se regoci*aban ante el triuno de la lu; en aqul primer d,a$ cuando latinieblas en su uria rodaban sobre el planeta$ sucumbindolo en densa obscuridad.2+ La lu;$ que parec,a "encida$ renació "ictoriosa en un lindo amanecer. 'l ra)ar la lu; de un segundo d,a$ Eterno ordenó: 84a)a una epansión en medio de las aguas$ ) ha)a separación entre agua ) aguasGnmediatamente$ el calor de u lu; hi;o que una inmensa cantidad de "apor se ele"ase de las aguas$ en"ol"iendo e planeta en un manto de transparencia ail. urgió as, la atmósera$ con su me;cla perecta de gases que ser,aesenciales para la "ida que en bre"e coronar,a el planeta. El 9reador$ contemplando la epansión$ la llamó 8cielos2Q La atmósera$ que llena de brillo en"ol",a la tierra$ se ensombreció al sobre"enir el crep#sculo de otro atardece

C-,tulo <

Continúan las obras de la Creaci$n" Separaci$n de las aguas" &egetaci$n" -l 0ardín de -dén es transferido en nue!o planeta" Los grandes luminares" Criaturas marinas" Criaturas !ol5tiles" Criaturas terrestres" Creaci$n d d5n, el primer hombre" d5n se postra en re!erente adoraci$n" -stado paradisiaco de la tierra" d5n se admir



de una criatura y la llam$ .cordero/" -l cordero, una seme0anza del -terno" La promesa de una compañera" - sueño profundo de d5n" -!a es creada para d5n" An manto real y una corona dados al hombre como honra d -terno" d5n y -!a muestran sumisi$n al colocar a los pies del Creador su corona" -l hombre, mayordomo fiecetro racional y 5rbitro de la creaci$n" d5n y -!a son concientizados sobre Satan5s" -l 5rbol de la !ida y e5rbol de la ciencia del bien y del mal" Satan5s opta por el engaño como arma para lograr ue el hombre coma de fruto prohibido"

1 'l ser "encidas las tinieblas en el tercer d,a$ el 9reador continuó u obra$ haciendo aparecer los inmensocontinentes que toda",a estaban ba*o la supericie de las aguas. 9on las manos le"antadas ordenó: 8T#ntense laguas deba*o de los cielos en un lugar ) apare;ca la porción seca.8 En pronta obediencia$ las cristalinas agucedieron su posición superior a la porción seca que se le"antó$ sobreponindose a ellas. En las regiones ba*as de ltierra$ las aguas continuar,an rele*ando el brillo celestial$ siendo un rerigerio para las criaturas sedientas. En egesto de humildad$ las aguas preiguraban al 9reador$ que en la gran lucha hab,a descendido al m&s proundabismo para hacer renacer en las almas sedientas la "ida eterna.2 9ontemplando la a; de aqul nue"o mundo$ el Eterno denominó a la parte seca 8tierra8$ ) al recogimiento de laaguas llamó 8mares8. 9on su poderosa "o; continuó$ ordenando: 8>rodu;ca la tierra hierba "erde$ hierba que dsemilla$ &rbol ruct,ero que d ruto seg#n su especie$ cu)a semilla est en ella sobre la tierra.8 En obediencia mando di"ino$ la supericie sólida del planeta se re"istió de toda suerte de "egetación: lindos prados a loreacampos re"erdecientes entrecortados por r,os cristalinos$ bosques sin in donde &rboles rondosos de*aban colgrutos sabrosos de ininidades de especies. La tierra era como una tela donde el 9reador$ por el poder de palabra$ coloreaba cuadros de belle;a sin par.3 Mientras que con admiración las huestes contemplaban las belle;as de aquella creación$ se sorprendieron reconocer sobre el nue"o planeta el *ard,n del Edn$ lugar del trono di"ino. El Eterno$ por el poder de u palabrlo hab,a transerido hacia el seno de ese mundo especial$ donde en *usticia ser,a conirmado el gobierno d5ni"erso. En aquel d,a prima"eral$ la brisa acarició mansamente los "erdes bosques ) los prados en lor$ inundandla atmósera con un sua"e aroma ) rescor. 9on-templando u obra$ el 9reador con elicidad eclamó: 84e aqutodo es mu) bueno.8 Euberante$ el planeta cumplió un d,a m&s en su armoniosa rotación. Las huestes ieles ahor pod,an comprender me*or la importancia de la lu; di"ina. u ausencia hab,a ouscado$ en aquella noche$ l belle;as de ión. En ese nue"o d,a$ el 9reador epresar,a u gran poder$ dando a la tierra luminares que la llenar,ade lu; ) calor. Esos luminares permanecer,an para siempre como s,mbolos de la presencia espiritual del Eterno$ que es la uende toda la lu;. 9ontemplando el espacio oscuro ) "ac,o que se etend,a alrededor de la tierra$ con potente "oordenó: 84a)a luminares en la epansión de los cielos$ para que ha)a separación entre el d,a ) la noche sean ell por seales ) para tiempos determinados$ para d,as ) aos. sean por luminares en la epansión de los cielos paalumbrar la tierra.8 Gnmediatamente$ el espacio se tornó radiante por el brillo del sol ) por el rele*o de planetassatlites. 'nte esta demostración de poder$ las huestes ieles se arrodillaron en re"erente adoración. En el cuartd,a$ el Eterno creó los mundos de nuestro sistema solar no para ser habitados como la tierra$ sino para el equilibridel sistema.P Llenaron tambin el cielo de ulgor$ ablandando las tinieblas de las noches terrenales. 6ol"iendo los o*os hacia tierra$ las huestes se alegraron por "erla radiante en colores. Mu) próima de ella se pod,a "er la luna que$ con srele*o plateado$ ahu)entar,a las proundas sombras nocturnas. En"ueltos por ese escenario encantador$ los hi*de la lu;$ regoci*antes$ saludaron el amanecer del quinto d,a$ que ser,a de muchas sorpresas. El Eterno tornar,a tierra esti"a por la presencia de ininidades de especies de animales irracionales que habitar,an toda la supericdel planeta. Esa creación tendr,a continuidad en el seto d,a.I Le"antando las poderosas manos$ el 9reador$ mirando primeramente hacia las aguas cristalinas$ orden8>rodu;can las aguas abundantemente reptiles de alma "i"iente.8 =e inmediato$ las aguas se tornaron ondulant por la presencia de incontables especies de reptiles que$ elices ) agradecidos$ este*aban la eistencia en ucontinuo nadar ) saltar. =esde los seres microscópicos hasta las grandes ballenas$ todos aparecieron en complearmon,a$ rele*ando en su naturale;a el amor del 9reador. >oniendo los o*os sobre la atmósera ail que reposabsobre los re"erdecientes bosques$ el Eterno continuó: 86uelen las a"es sobre la a; de la epansión de los cielos>or medio de u orden$ los 9ielos se llenaron de p&*aros coloridos que$ "olando en todas direcciones$ ten,an en cora;ón un c&ntico de gratitud por la "ida. Este c&ntico llenó el aire$ me;cl&ndose con el perume de los arbustoloridos.



+ 9ontemplando con placer a us criaturas terrenales$ el Eterno las bendi*o diciendo: 8Aructiicad ) multiplicaos henchid las aguas en los mares$ ) las a"es multipl,quense en la tierra.8 !egoci*antes$ las huestes ieles presenciaroel amanecer del seto d,a. B qu crear,a =ios en ese nue"o d,aC Esta pregunta reinaba en la mente de todos loseres racionales. Estaban seguros de que algo mu) especial estaba por acontecer. Le"antando los poderosos bra;oel Eterno ordenó: 8>rodu;ca la tierra alma "i"iente conorme a su especie: ganado$ reptiles ) bestias sal"a*es de ltierra$ conorme a su especie.8 u "o; poderosa ue prontamente o,da )$ en los bosques ) en los campos$ se pod"er el resultado de u poder creador.Q 'nimales de todas las especies despertaron a una eistencia eli;$ en medio de un para,so de perecta pa;. Ltierra se tornaba etremadamente bella$ cual princesa adornada para recibir a su re) ) seor. B%uin ser,a ese seespecialC Mo"indose con ma*estad$ el Eterno ba*o a las glorias del nue"o mundo$ dirigindose al *ard,n del Edlugar del trono di"ino. Los &ngeles de la lu; lo acompaaron re"erentes$ detenindose cual nubes sobre los cieldel para,so. 7odo el 5ni"erso obser"aba con proundo inters el desen"ol"imiento de los actos del 9reador$ erespuesta a las acusaciones de sus enemigos.H El momento era decisi"o. 7odo indicaba que el Eterno demostrar,a no ser tirano ni ego,sta$ coronando a alguiesobre el monte ión. atan&s ) sus seguidores no dudaban de que el reino les ser,a entregado ) reinar,an "ictoriosoen el seno de aquel antiguo abismo$ donde las tinieblas ) la lu; ahora se entrela;aban. Los s#bditos de la lu; sestremecieron ante esa perspecti"a. Tunto a la uente del r,o de la "ida$ el Eterno se arrodilló solemnemente )$ colos elementos naturales de la 7ierra$ comen;ó a moldear$ con mucho cario$ una criatura especial. =espus dalgunos instantes$ estaba etendido delante del 9reador el cuerpo$ a#n sin "ida$ del primer hombre. El Eterno contempló )$ despus de acariciarle la cara r,a ) descolorida$ le sopló en las ",as de la nari; el aliento de "ida ) hombre comen;ó a "i"ir.10 9omo despertando de un sueo$ el hombre abrió los o*os ) contempló la dulce a; de u 9reador quesonriendo$ le besó la cara ahora colorida ) llena de "ida. e emocionó al o,r al Eterno decirle con "o; sua"e ) llende aecto: 8DMi hi*o$ mi querido hi*oF8 >or haber nacido de la tierra$ el primer hombre recibió el nombre de 'd&n7om&ndolo por la mano$ el Eterno lo le"antó. in percibir el escenario de ulgor que lo circundaba$ 'd&n$ en ugesto de gratitud por la eistencia$ en"ol"ió al 9reador en un tierno abra;o$ postr&ndose en re"erente adoracióLas huestes ieles que admiradas atestiguaban la grandiosa reali;ación di"ina$ emocionadas ante el gesto humanse postraron tambin en re"erente adoración.11 5nieron entonces las "oces en un c&ntico de *#bilo en salutación a aqulla criatura especial$ que despertabhacia la "ida en un momento tan decisi"o para el 5ni"erso. 9on el cora;ón lleno de elicidad$ 'd&n se unió a lo&ngeles en su c&ntico de loor. u "o;$ al repercutir por los alrededores loridos$ se me;cló al canto de las a"es ) mugir de los animales que se aproimaban esti"amente. En un paseo de sorpresas inol"idables$ 'd&n uconcienti;ado de las belle;as de su hogar. 9on admiración$ contempló el monte ión$ donde brotaba el r,o de "ida$ en una cascada de lu;. El glorioso monte )ac,a coronado por un lindo arco iris. En sus pasos$ siguió el cursdel r,o cristalino$ que desli;aba sereno en medio de las mara"illas del Edn.12 e admiraba de los &rboles altos que$ empapados por la brisa$ de*aban colgar de las ramas abundantes loresrutos. e inclinaba aqu, ) all&$ atra,do por el resplandor de piedras preciosas que por todas partes adornaban csped. 9on intensa alegr,a$ 'd&n tomaba conocimiento de las ininidades de especies de animales que poblaban *ard,n. 7odos eran mansos ) sumisos ) "i",an en perecta armon,a ) elicidad. =etenindose en sus pasos$ 'd&n admiró de la blancura ) ternura de un animalito que brincaba en el csped. 'proim&ndose$ lo tomó en sus bra;odedic&ndole un especial aecto. D>ues que agradable era acariciar su blanca lanaF us dulces o*os rele-*aban u brillo de amor ) humildad. 4ab,a algo de especial en aquel animalito. 'ectuosamente$ 'd&n lo llamó 8cordero8.13 9on el animalito en sus bra;os$ 'd&n miró agradecido hacia el Eterno ) Lo adoró. 9ontemplando us blanc"estiduras$ us o*os epresi"os de un amor sin par$ 'd&n descubrió que ten,a en los bra;os un s,mbolo de su 'utoAeli;$ eclamó: 8h$ eor$ este corderito re"estido de tan blanca lana$ con mirada epresi"a de tanto amor$ parece a 7i. o quiero tenerlo siempre *unto a m,.8 bser"ando los animales$ 'd&n percibió que ellos disrutabade un compaerismo especial. 6e,a por todas partes pare*as elices que "i",an el uno para el otro. us pensamientose "ol"ieron hacia u 9ompaero. Miró a su alrededor ) estu"o sorprendido de no "erlo. El Eterno se hab,ocultado a propósito$ torn&ndose in"isible.1 'd&n se sent,a solitario en medio de aquel para,so. B9on quin compartir,a su elicidad ) su amorC hab,a all, lanimales$ pero ellos eran irracionales$ no pudiendo compartir de sus ideales. <ac,a en su cora;ón$ al caminsolitario en aquel atardecer$ un deseo ardiente de encontrar a alguien que pudiese estar siempre a su lado. Mientra



que 'd&n miraba hacia las distantes colinas en la esperan;a de "er a alguien$ el Eterno se presentó a su lado ) ldi*o: 8<o es bueno que el hombre est solo le har una compaera.81P 'd&n estu"o eli; al o,r del 9reador esa promesa$ *ustamente en el momento en que tanto anhelaba tener alguien para que estu"iera siempre "isible a su lado. 7omado por un proundo sueo$ 'd&n se reclinó en el pechde su amoroso 9reador que$ con caricias$ le hi;o adormecer. En su subconsciente surgieron los primeros sueocoloridos: 9ontempla la mirada tierna del Eterno o)e el sonido armonioso de la m#sica angelical descubre lamara"illas al derredor: el monte ión con su arco iris el r,o de la "ida los prados en lor los animales que lsaludaban en iesta. e repiten en su sueo las escenas que lo en"ol"ieron en su anhelo mira al derredor en lesperan;a de encontrar a su compaero$ m&s no lo "e. e siente solitario en su sueo$ ) eso lo hace buscar a alguiecon quin poder compartir su eistencia.1I u mirada se etiende por campias re"erdecientes$ di"isando a lo le*os colinas loridas. Mientras caminesperan;ado$ siente la mansa brisa acariciarle el cabello sua"emente. 9on"ersa con la brisa: 8Drisa$ t# pareces sea quin tanto busco t# me acaricias el cabello besas mi cara t# tienes el perume de los "erdes arbustosF Di ) pudiera "er tu a;$ la besar,a si )o pudiera tocar tu cabello$ har,a largas tren;as ) las adornar,a con las lores dnuestro *ard,nF8 =espus de caminar en el sueo por los prados del para,so$ 'd&n se detu"o mientras qucontemplaba el paisa*e alrededor. e admiró de no "er el eecto de la brisa en las ramas loridas. B>ero cómo$ si sent,a c&lidamente en el rostroC1+ 9omen;ó entonces a despertar de su sueo. 7oda",a con los o*os cerrados se acordó del momento en qusomnoliento$ se recostó en el pecho del Eterno. Ber,a la brisa el toque de us manosC 9on esta interrogante abrilos o*os ) se emocionó al contemplar una linda mu*er que$ con las manos perumadas$ le acariciaba con amor cara. Era la brisa de su sueo la promesa de un 9reador que solo quer,a hacerlo eli;. 'hora 'd&n era complet pues ten,a a E"a$ que era carne de su carne ) huesos de sus huesos. 7om&ndola por la mano$ 'd&n la in"itó a dar u paseo de sorpresas inol"idables. Mostrar,a a su compaera las belle;as de su hogar.1Q ensibili;ada E"a se deten,a a cada paso$ atra,da por las lores que ehalaban sua"es perumes por los p&*aroque trinaban alegres cantos por los animales que los segu,an sumisos por la "egetación de ricos matices por laguas cristalinas del r,o de la "ida que brotaban en cascada desde el monte ión. 7odo en el para,so era perecto bello$ mas nada se igualaba al ser humano$ creado a la imagen de =ios. e "ol"ieron el uno para el otro eadmiración ) caricias. Empapados por ese amor$ permanecieron hasta el atardecer. 9on deleite$ la *o"en pare*comen;ó a contemplar el sol poniente que$ a tra"s de ra)os rosados$ coloreó el cielo en un lindo arrebol.1H Era el seto d,a que llegaba a su inal$ dando lugar a las horas de un d,a especial: El s&bado. Ese d,a$ en ssigniicado$ ser,a solemne para todos los s#bditos del Eterno$ pues su amanecer traer,a la "ictoria para el reino de lu;. El sol$ que durante el seto d,a hab,a alegrado la naturale;a con su brillo ) calor$ se ocultó$ de*&ndola en r,asombras. Los alegres p&*aros$ silenciando sus trinos$ buscaban sus nidos mientras que los otros animales recog,an. olamente la pare*a permaneció inmó"il$ procurando di"isar$ en el #ltimo destello que se apagaba en hori;onte$ la esperan;a de un nue"o amanecer. Gn"estigaban el sentido de las tinieblas cuando$ por entre loarbustos$ "ieron un lindo lugar$ cu)os ra)os plateados baabanos ra)os plateados baaronito la naturale;a en sua"luminosidad.20 7odo el cielo estaba iluminado por el resplandor de las estrellas. 'dmirados$ descubrieron que la nochsolamente era tinieblas cuando se miraba hacia aba*o. 'd&n ) E"a en su inocencia no sab,an que aquella nochsimboli;aba el uturo sombr,o de la humanidad. 9uando lo comprendiesen$ estar,an conortados al contemplar ulgor de los cielos: el lugar hablar,a de esperan;a ) las estrellas centellantes atestiguar,an el inters de las huestede la lu; en aclararles las tinieblas morales$ dando aliento a los pecadores. Mas ser,an iluminados apenas aquelloque$ des"iando los o*os de la tierra$ contemplasen los altos cielos.21 =espus de contemplar por alg#n tiempo el cielo en su luminosidad$ la pare*a$ se acordó de las belle;as de para,so$ "ol"ió los o*os$ buscando di"isarlas. Estaban$ sin embargo$ ocultas en medio de las sombras. D9u&ndeseaban el amanecer$ pues solamente l traer,a consigo el para,soF 'nte el anhelo del cora;ón humano$ el Eternapareció en medio de las tinieblas$ de"ol"iendo a la pare*a la alegr,a de encontrarse nue"amente en un *ard,colorido. aados por sua"e lu;$ caminaban ahora por prados re"erdecientes ) loridos. El brillo del 9readodespertaba la naturale;a por donde pasaban$ coloreando ) alegrando todo en derredor.22 La pare*a$ admirada$ aprendió que al lado del Eterno podr,an tener un para,so en plena noche. intindossomnolientos$ 'd&n ) E"a se recostaron en el rega;o del amoroso >adre$ que los hi;o adormecer dulcementesperan;ados en un despertar eli;. =e*&ndolos sobre el sua"e csped$ el Eterno se ele"ó dirigindose al lado de lhuestes contemplati"as. 6ol"er,a a maniestarse al amanecer$ haciendo despertar a la pare*a para el m&s solemn



acontecimiento$ que reducir,a al pol"o las m&s "iles acusaciones de los enemigos. La noche oscura ) r,a$ a tra"de sus largas horas$ parec,a burlarse de la lu;. Buscar,a para siempre las belle;as de la creaciónC Dh$ *am&sF Esol no retroceder,a ante la imponencia de las tinieblas aparecer,a en bre"e como un libertador$ arrebatando con suc&lidos ra)os la naturale;a de las r,as garras$ d&ndole "ida ) color.23 En un #ltimo desa,o$ las tinieblas se tornaron densas en las horas que antecedieron el amanecer. La nocharremet,a sus uer;as para luchar por el dominio usurpado. Ainalmente$ apareció en el este un destello que parechablar de esperan;a en un nue"o d,a. El cielo poco a poco se tornó colorido de un ro*i;o "i"o. Las tinieblaimpotentes se retiraron ante la uer;a creciente de la lu; ) ueron consumidas en su uga. La naturale;a comen;ódespertarse de la larga noche$ rele*ando en su seno los nost&lgicos ra)os. Alores se abrir,an$ ehalando perumde alegr,a animales ) a"es$ silenciados por la noche$ un,an las "oces en un c&ntico triunal en salutación amanecer de aquel d,a grandioso.2 La negra noche hab,a llegado al inal$ dando lugar a la lu; del d,a soado Od,a que para =ios ten,a un sentidespecial$ pues preiguraba la "ictoria inal de u reino sobre el dominio de la rebeld,a. O El Eterno ahordespertar,a a us hi*os humanos que$ baados por la lu; de u presencia$ hab,an dormido con la esperan;a de uamanecer eli;. En una marcha esti"a$ todas las huestes santas$ con c&nticos de "ictoria$ lo acompaaron rumbo para,so baado en lu;. 9uando )a estaban próimos$ el 9reador se detu"o contemplando a la pare*a adormecida$eclamó sua"emente: 8=espierten hi*os m,os.8 u "o; penetró en los o,dos de 'd&n ) E"a$ despert&ndolos para m&s eli; comunión.2P D9u&n deprisa ra)ó la tan esperada maana$ tra)endo en su lu; el dulce para,so$ perdido en aquella nocheF 9oalegr,a la pare*a saludó a su di"ino 9reador$ unindose a los &ngeles en ant,onas triunales. El 5ni"erso "i",a umomento en "erdad solemne. En aquella maana esti"a$ el Eterno habr,a de re"elar la grande;a de u car&cteque es *usticia ) amor. Las acusaciones de que u gobierno era de ego,smo ) tiran,a ser,an reutadas. ' los o*os dtodas las criaturas racionales del "asto 5ni"erso$ =ios condu*o a la *o"en pare*a al monte ión$ lugar del trondi"ino.2I 'll,$ ante el estremecimiento de las huestes enmudecidas$ el 9reador$ en un gesto sorprendente$ cubrió ahombre con el manto real$ coloc&ndole sobre su cabe;a la corona que hab,a sido codiciada por Lucier. Mo"id por prounda gratitud por la suprema honra conerida$ prounda parto'd&n ) E"a se postraron re"erentecolocando a los pies del 9reador su corona preciosa$ en seal de sumisión. iguió a ese gesto humano un grito d"ictoria que sacudió toda la 9reación. Los hi*os de la lu;$ que por tanto tiempo hab,an surido arentas humillaciones ante las constantes acusaciones de las huestes rebeldes$ ealtaron en retumbante alaban;a al =io bendito$ que en u obra de *usticia desmintió a los enemigos$ re"elando u car&cter de humildad$ desprendimien) amor.2+ 7eniendo constituido al hombre como el seor de toda la creación$ el Eterno$ con "o; solemne$ comen;ó concienti;arlo de la grandiosidad de su misión. 9omo un ma)ordomo iel$ deber,a cuidar del para,so$ manteniendlimpia la uente del r,o de la "ida. Las le)es de la *usticia ) del amor$ undamentos del reino de la lu;$ deber,an sehonradas. 9omo un cetro racional$ le corresponder,a al hombre$ en un gesto de reconocimiento ) gratitud$ aceptlibremente el gobierno de 'qul que lo creó. Las huestes$ que mara"illadas atestiguaban la re"elación ddesprendimiento di"ino$ comprendieron que el eor de la Lu; no gobernar,a m&s el 5ni"erso$ a no ser con consentimiento humano.2Q El hombre$ por la "oluntad del Eterno$ ue hecho el &rbitro de la creación en su glorioso ser$ hecho a imagen d9reador$ resplandec,a el sello del dominio eterno. =espus de re"elar a la pare*a la ininita honra ) responsabilidade su misión$ el 9reador los concienti;ó del conlicto espiritual que se trababa por la conquista del dominiuni"ersal: Lucier$ que por incontables eras hab,a ser"ido al di"ino !e) en ión$ hab,a sido corrompido por orgullo ) por el ego,smo$ siendo seguido por un tercio de las huestes racionales buscaban ahora destronar Eterno$ deshonr&ndolo con "iles acusaciones.2H 4abiendo re"elado al ser humano la dolorosa situación en que el 5ni"erso se encontraba$ el Eterno$ en un gestsolemne$ les mostró dos &rboles altos que$ cargados de grandes rutos$ se ele"aban en ambas orillas del r,o qunac,a del trono. 'l que se ele"aba a la derecha el eor re"eló ser el &rbol de la "ida monumento del reino de llu;. 'l que se ele"aba en la otra orilla re"eló ser el &rbol de la ciencia del bien ) del mal Os,mbolo de la rebeld, O 9omiendo del ruto del &rbol de la "ida$ el hombre maniestar,a su sumisión al 9reador$ que es la Auente de "ida ) de la lu;. 9omer del otro &rbol ser,a entregar al enemigo el dominio de ión.30 El ine"itable resultado de ese paso ser,a la muerte eterna$ no solamente para el ser humano$ sino para toda creación$ que se reducir,a al caos ba*o la uria de la rebeld,a. =espus de contemplar demoradamente los do



&rboles altos$ que eternaban en sus rutos tan ininita responsabilidad$ 'd&n se postró ante el 9reador$ diciend8=igno eres eor de reinar sobre el 5ni"erso$ pues por 7# sabidur,a$ amor ) poder todas las cosas ueron creada) subsisten.8 El s&bado$ emblema del triuno di"ino$ se hinchió de alaban;as.31 7odos los hi*os de la lu; se unieron al ser humano en el m&s armonioso c&ntico de ealtación a 'qul cu)grande;a es sin par. Aue con espanto que atan&s ) sus seguidores atestiguaron la grandiosa reali;ación del Etern>resenciaron con amargura la alegr,a de los ieles ante la coronación del hombre$ acontecimiento que lan;ó potierra las uertes acusaciones que ellos hab,an le"antado contra el gobierno di"ino. Llenos de ira ) rustracióconsideraban ahora su triste condición. 9u&n terrible ) humillante les era el pensamiento de "er sus planes drebeld,a des"anecerse delante del 9reador$ seme*antes a las sombras de aquella noche.32 i pudiesen$ pensaban$ llenar,an el s&bado de tinieblas$ borrando de la mente de los s#bditos del Eterncualquier esperan;a de "ictoria. Ainalmente$ en sus consideraciones$ atan&s ) sus liderados comprendieron que lequedaba una oportunidad: en medio del *ard,n del Edn$ en las alturas de ión$ se ele"aba$ *unto al r,o de la "ida$ &rbol de la ciencia del bien ) del mal. astar,a un gesto humano$ nada m&s$ ) tendr,an ba*o su poder$ para siemprel dominio codiciado. B>ero cómo seducirloC 'nimado ante la perspecti"a de una conquista$ atan&s buscó$ coingeniosidad$ ormular un plan de aborda*e. ab,a que$ si allase en su tentati"a$ todas las esperan;as de triuno shabr,an disuelto$ desmoron&ndose todos sus sueos de a"entura. 9onclu)ó que el engao habr,a de ser su poderosarma.33 O DB'caso no hab,a sido a tra"s de l que consiguió dominar un tercio de las huestes celestialesCF Esperar, por lo tanto$ un momento propicio para armar su emboscada. O

C-,tulo >

-l -dén, un reino de eterna alegría" &isita e instrucci$n diaria del -terno" -l traba0o, fuente de desarrollo d facultades" tra!és de !isitas de seres celestiales, d5n y -!a aduirieron conocimiento sobre la rebeli$n d Lucifer" 4ios re!ela a Sus huestes las intenciones malignas de Satan5s y en!ía a dos 5ngeles para ad!ertir ahombre" Satan5s se posesiona de una serpiente para engañar a -!a" rgumentos de Satan5s para hacer caer -!a" 2ntensa lucha interna de d5n ante la condici$n caída de su esposa" d5n come del fruto, permanece al ladde su esposa pagando el alto precio de su rebeli$n" %ara!illosa re!elaci$n del plan de rescate" La naturaleza dlas creaciones y de d5n y -!a cambia" -l 6adre les promete !estiduras duraderas"

1 En el Edn reinaba la dulce calma de una perecta pa;. >or todos lados los amables pa*arillos hac,an o,r sualegres trinos en alaban;a constante al 9reador. 7oda la naturale;a al lorecer parec,a proclamar un reino de eternalegr,a. Los animales en unión brincaban por todas partes$ siempre sumisos al hombre$ el seor de aqul para,sencantador. 7odo era elicidad para la pare*a pero esta se tornaba m&s intensa en la rotación de aquellos d,a prima"erales. El arrebol$ que con su belle;a coloreó el cielo preanunciando las oscuras noches$ les anunciabtambin el momento de la "isita diaria del Eterno. Tuntos$ ba*o la lu; de u presencia$ pasaban largo tiempo en elcon"ersación.2 9on &nimo$ la pare*a contaba al eor las sorprendentes mara"illas que iban descubriendo cada d,a en naturale;a. =ios$ con cario$ les descubr,a el signiicado de cada ser. D9u&n agradecidos estaban por las lindlecciones aprendidas a us piesF 'l paso de cada d,a$ ma)or eran el amor$ el respeto ) la admiración por e

grandioso 9reador. D9u&n bueno hab,a sido Nl$ tra)ndolos a la eistencia ) concedindoles un hogar tan lleno ddeliciasF 'l despertar ellos hacia las alegr,as de cada d,a$ les "en,a a la memoria las caricias ) el dulce canto dEterno$ que los hac,a adormecer todas las noches.3 La "ida de 'd&n ) E"a en el Edn no era de ociosidad. ' ellos ue recomendado el cuidado del *ard,n. ocupación no era astidiosa$ al contrario$ era agradable ) re"igori;ante. El 9reador hab,a indicado el traba*o comuna uente de beneicios para el hombre$ a in de ocuparle la mente ) ortalecerle el cuerpo$ desarroll&ndole todlas acultades. En la acti"idad mental ) ,sica$ el hombre encontraba un ele"ado placer. Era com#n a la *o"en pare*recibir "isitas de seres celestiales. ' los "isitantes siempre ten,an no"edades que relatar ) preguntas que hacer. >asaban largo tiempo o)endo dellos hablar sobre las mara"illas del reino de lu;. ' tra"s de esos "isitantes$ 'd&n ) E"a comen;aron a teneamplio conocimiento de la rebelión de Lucier ) de sus eternas consecuencias. ' los "isitantes$ 'd&n ) E"a siemp



ped,an que les ensearan los armoniosos c&nticos celestiales. D9ómo se deleitaban al unir las "oces al coangelicalF En u omnisciencia$ =ios ten,a conocimiento de la terrible intención del enemigo.P 9on"ocando a us huestes principales$ Les re"eló con pesar el inminente peligro que cern,a sobre el 5ni"ersoatan&s habr,a de armar una emboscada$ a in de lle"ar al hombre a comer del &rbol de la ciencia del bien ) demal. 'nte esa re"elación$ los hi*os de la lu; estu"ieron temerosos$ pues conoc,an la tremenda acilidad de atan&en enla;ar criaturas inocentes ) atarlas en sus mallas de muerte. En el solemne concilio$ decidieron en"iar$ courgencia$ mensa*eros para ad"ertir al hombre del gran peligro.I =os poderosos &ngeles ueron encargados de esa decisi"a misión. Gnmediatamente$ los mensa*eros comisionadoirrumpieron por las puertas de Terusaln$ alcan;ando el seno del espacio ininito. En instantes$ traspasaroinmensidades$ cru;ando galaias en el percurso. >enetraron en el t#nel de la constelación de rión$ aproim&ndosal nue"o sistema. >od,an ahora di"isar a poca distancia el planeta a;ul$ donde el destino del 5ni"erso estaba por sedeterminado.+ En el Edn$ hab,a rela*ación. La *o"en pare*a continuaba en sus inocentes acti"idades$ disrutando el placer de u"i"ir eli;. Le*os estaban de pensar que en aquel momento todo o todos los hi*os de la lu; estaban tensos$ pensanden su uturo amena;ado. 6ieron entonces en el limpio cielo la seal de la aproimación de los "isitantes celestiale) a ellos le"antaron los bra;os en una alegre salutación. in embargo$ 'd&n ) E"a se admiraron$ por no "er en semblante de ellos la misma alegr,a.Q Los "isitantes tra,an en la a; una epresión de ansiedad que ellos no pod,an entender. Gntentaron cambiarles triste acción$ cont&ndoles los nue"os descubrimientos hechos en el para,so. Los mensa*eros$ toda",a$ no teniendtiempo disponible como en otras ocasiones$ los interrumpieron con palabras de ad"ertencia. atan&s habr,a darmarles una emboscada$ a in de lle"arlos a comer del ruto del &rbol de la ciencia del bien ) del mal. i dierao,do a la tentación$ har,an sucumbir toda la creación en el abismo de un eterno caos.H Los &ngeles les recordaron que el reino les hab,a sido coniado como un sagrado depósito$ debiendo$ en una "idde idelidad$ honrar a 'qul que por amor e despo*ó$ coloc&ndose en una posición de husped del ser human'd&n ) E"a deber,an ser irmes ante las insinuaciones del enemigo$ pues as, sellar,an la eterna "ictoria del reino dla lu;. 4abl&ndoles de la eli; recompensa que le seguir,a a su triuno$ los &ngeles re"elaron que era el plan de =iola transerencia de la Terusaln 9elestial hacia la 7ierra. 'll,$ nue"amente acoplada al para,so$ permanecer,a pasiempre.10 el hombre$ sumiso al 9reador$ reinar,a por los siglos sin in sobre el monte ión$ en medio de las alaban;as dlas huestes uni"ersales. M&s todo eso depend,a enteramente del posicionamiento humano rente a las tentaciondel enemigo$ que har,a de todo para arrebatarle el reino. 'd&n ) E"a estu"ieron temerosos al conocer los planes datan&s$ m&s ueron consolados al saber que l no podr,a hacerle ning#n mal$ or;&ndolos a comer del ru prohibido. i$ por "entura$ procurase intimidarlos con su poder$ todas las huestes del Eterno "endr,an en su a)uda11 Los mensa*eros de la lu; conclu)eron su misión recomendando a la pare*a permanecer "igilantes$ teniendsiempre en mente la responsabilidad que sobre ellos reposaba. <o deber,an separarse uno del otro$ ni siquiera pun momento$ pues a solas podr,an ser seducidos. 'd&n ) E"a$ agradecidos por las ad"ertencias de los &ngeleunieron las "oces en un c&ntico de promesa en una eterna "ictoria. Estaban seguros de que *am&s abandonar,an bendito 9reador$ o)endo la "o; del tentador.12 'nimados ante la promesa humana$ los dos mensa*eros regresaron al seno de la Terusaln 9elestial donde$ *unta las huestes santas$ aguardar,an con ansiedad el anhelado triuno. atan&s "io aproimarse al para,so a lomensa*eros ) o)ó el canto del hombre prometiendo una eterna "ictoria. Ese c&ntico hi;o que su en"idia ) odiaumentara de tal manera que no los pod,a contener. =i*o entonces a sus seguidores que en bre"e har,a silenciaaquella "o; irritante. 4ar,a todo para transormar las alaban;a humana en blasemias al 9reador.13 Las huestes rebeldes estaban curiosas por conocer los planes de su *ee$ mas ueron ad"ertidas por l de qudeber,an esperar hasta que todo estu"iese para siempre determinado. i el hombre o)ese su "o;$ comiendo del rutdel &rbol de la ciencia del bien ) del mal$ ser,a "ictorioso$ pose)endo para siempre el dominio del 5ni"erso. Ecaso de que el hombre resistiese$ permaneciendo iel al 9reador$ )a no habr,a ninguna esperan;a para ellos. E para,so parec,a estar en"uelto por una eterna seguridad$ pero en el semblante del hombre se pod,a "er unepresión de miedo.1 =esde que los &ngeles partieron$ 'd&n ) E"a permanec,an silenciosos$ meditando con re"erencia sobre enorme responsabilidad de su misión. >ensaban en la seriedad de aquella inminente prueba que habr,a de sellar suturo ) el de toda la 9reación. 'nimados$ sin embargo$ ante el pensamiento de la "ictoria$ unieron una "e; m&s la"oces en un c&ntico que epresaba la certe;a del triuno anhelado. Esa melod,a quitó de sus mentes todo el mied



de derrota )$ alegres$ corrieron por los prados re"erdecientes$ acompaados por los ogosos animales que parec,aconmemorar la gran conquista.1P e sent,an seguros en su para,so$ totalmente ol"idados del peligro de un posible asalto. atan&s$ que obser"abatentamente a la pare*a$ percibió que estaba llegando su oportunidad. e aproimó de orma in"isible al para,so$estu"o esperando el me*or momento para armar su emboscada. Gnconscientes de la presencia del enemigo$ la pare*continuaba en su desprendida alegr,a$ *ugando despreocupadamente con los animales. En el semblante trastornadde atan&s se estampó una sonrisa maliciosa$ al presenciar un descuido de la pare*a: en su ealtación$ hab,ade*ado de atender la #ltima recomendación de los mensa*eros$ apart&ndose el uno del otro.1I El astuto enemigo$ no perdiendo tiempo$ se posesionó de una serpiente$ la m&s bella del para,so$ hacindoaproimarse graciosamente a E"a. E"a$ que sentada en el csped *ugaba con los animales$ percibió la presencia dla atracti"a serpiente$ cu)o cuerpo rele*aba los colores del arco iris. Estu"o admirada al "erla coger lores ) rutodel *ard,n$ deposit&ndolos a sus pies. 'gradecida$ la tomó en los bra;os$ dedic&ndole aecto.1+ 7eniendo conquistado el aecto de la mu*er$ atan&s$ en su astucia$ comen;ó a atraerla para que estu"iera *untal &rbol de la ciencia del bien ) del mal. in darse cuenta del peligro$ E"a acompaó a la serpiente hasta el &rbol dla prueba. 'll,$ teniendo en los bra;os al enemigo oculto$ le acarició ) le di*o palabras de cario. 7eniendo en loo*os el brillo de la seducción$ la serpiente se puso a hablar. us palabras eran llenas de sabidur,a ) ternura ) su "ocomo la de un &ngel.1Q E"a apenas pod,a creer lo que "e,a. u alegr,a se "ol"ió inmensa por tener en los bra;os una criatura taant&stica. 9omen;aron a con"ersar sobre muchas cosas: el amor las belle;as del *ard,n el poder del 9reador. E"estaba admirada ante el conocimiento tan etenso de la serpiente$ que discurr,a con maestr,a sobre cualquier temEn"uelta por esa eperiencia$ E"a se ol"idó totalmente de su compaero. <i siquiera pasaban por su mente laad"ertencias de los &ngeles. 'd&n$ enteramente ol"idado de los conse*os de los mensa*eros celestiales$ se habapar-tado en la compa,a de algunos animales.1H =espus de cierto tiempo$ sobre"ino con ,mpetu en su mente el recuerdo de las ad"ertencias recibidas. onaroen sus o,dos con claridad las #ltimas palabras pronunciadas por los &ngeles: 8<o se aparten el uno del otro... <o sseparen ni por un instante$ pues es peligroso.8 u cora;ón latió uertemente al no "er a E"a a su lado. Le"antentonces la "o; en un ansioso grito. u "o;$ al repercutir por las bó"edas del para,so$ con todo$ no tra*o consiguna respuesta. El silencio casi lo soocó. En su alicción se puso a correr de un lado para el otro$ busc&ndola$ e"ano.20 En esa ansiosa b#squeda$ sintió la brisa acariciarle el cabello ) recordó su primer sueo. Ese recuerdo$ nobstante$ se deshi;o ante el pensamiento del peligro que los amena;aba. 9on la mente tomada por un gran sentidde culpabilidad$ 'd&n apresuró el paso en la angustiosa b#squeda. B=ónde estar,a su amadaC BLa en"ol"er,atiempo en sus bra;os$ libr&ndola de caerC M&s de una "e; ele"ó la "o; en un ansioso grito que repercutió por todel *ard,n: 8BE"a$ dónde te encuentrasC8 esperó una respuesta$ pero o)ó solamente un eco "ac,o que lo desesperó. acordó del &rbol de la ciencia del bien ) del mal all, era el #nico lugar en donde su compaera podr,a seengaada.21 Esperando obstruir la #nica oportunidad del enemigo$ a"an;ó en dirección al lugar de la prueba. u cora;ólatió uertemente al contemplar a lo le*os la copa del &rbol prohibido. 9on la serpiente en sus bra;os$ E"a linterrogó respecto de muchas cosas. e mara"illó al percibir que la serpiente la sobrepu*aba grandemente econocimiento. Llena de curiosidad$ preguntó a la serpiente: O B=ónde est& la uente de tu tan gran saber!espóndeme$ pues quiero tambin poseerla. O in perder tiempo$ atan&s$ sealando hacia el &rbol de la ciencdel bien ) del mal$ respondió: Oall, esta la uente de todo mi saber. O 22 Nl le contó entonces una mentirosa historia: di*o que era una serpiente como las dem&s$ comiendo de los rutodel para,so. >robando cierto d,a de aquel ruto prohibido$ recibió$ como por encanto$ todas las "irtudes. Mirandhacia el &rbol de la ciencia del bien ) del mal$ E"a estaba sorprendida ) conundida. DB>ri"ar,a el 9reador en samor algo tan bueno a sus criaturasCF 6indola sorprendida$ atan&s preguntó: O BEs as, que =ios di*o: <comeris de todos los &rboles del *ard,nC O E"a$ inquieta$ le respondió: O =e los rutos de los &rboles del *ardcomemos$ mas del ruto de ese &rbol que "os dec,s ser uente de sabidur,a$ di*o =ios: 8<o comeris de l$ para quno mur&is.8 O La serpiente en tono de desdn di*o: OEso es also. i uese as,$ )o habr,a muerto.23 9iertamente el Eterno les prohibió comer de ese &rbol para impedir que el hombre llegue a recibir como Nconociendo todas las cosas. O Las palabras seductoras de la ser-piente causaron conusión en la mente de E"a. BEquin coniar,aC 7en,a en mente el recuerdo de la orden del 9reador ) de su sentencia$ pero al mismo tiempo ten,



delante de s, una prueba palpable que Lo contradec,a. 'turdida$ comen;ó a dudar del car&cter del Eterno. En udesa,o$ la serpiente cogió rutos del &rbol prohibido ) comen;ó a saborearlos.2 9olocando un ruto en las manos de la mu*er$ la estimuló a comer$ diciendo: O B<o di*o el Eterno que salguien tocase ese ruto morir,aCO 5n completo silencio reinaba sobre el 5ni"erso. En cada planeta habitado$ lohi*os de la lu; contemplaban impotentes aquella angustiante escena. El uturo de ellos estaba en *uego. ETerusaln hab,a gran conmoción. >oderosos &ngeles se presentaron delante del 9reador$ solicitando permiso padesenmascarar al cobarde enemigo$ oculto en aquella serpiente. El Eterno$ sin embargo$ les impidió tal acción. i uso de la uer;a uese la solución$ )a la habr,a aplicado.2P =eb,an respetar el libre albedr,o concedido al hombre$ pudiendo l maniestar su elección ba*o la tentación denemigo. Los hi*os de la lu; sur,an inmensamente al "er a la mu*er dudando de 'qul que tan bondadosamente lehab,a dado la "ida ) la oportunidad de reinar en aquel para,so. DB9ómo pod,a dudar de quin les dedicaba tanamorCF 'd&n$ que en una uerte esperan;a de asegurar la acariciada "ictoria se apresuraba en su corrida$ contempla lo le*os a su amada$ sentada *unto al &rbol de la prueba.2I DB%u hac,a E"a en aquel lugar tan peligrosoCF 5n presentimiento horrible le sobre"ino$ al acordarse una "em&s de las ad"ertencias recibidas$ mas procuró desterrarlo con el pensamiento de que alcan;ar,a a su esposa antede que alg#n mal le ocurriese. E"a "acilaba en su con"icción al contemplar el ruto en sus manos. >or algunomomentos el uturo le pareció sombr,o ) aterrador$ pero "enció ese sentimiento$ pensando en las glorias que habr,de conquistar al comer aquel ruto. 7oda",a un tanto indecisa$ le"antó lentamente las manos hasta tocar el ruto colos labios.2+ Los s#bditos del reino de la lu;$ estremecidos$ se inclinaron arrebatados de gran espanto. >arec,a casi imposiblen ese momento$ que la mu*er "ol"iera atr&s. Mientras que p&lidos los ieles indagaban sobre una posibesperan;a$ presenciaron con horror la terrible decisión de E"a: 4ab,a resuelto romper para siempre con el 9readotorn&ndose cauti"a de la muerte. El Eterno$ que en silente dolor contemplaba aquella escena de rebelión$ inclinó lrente teniendo la a; baada en l&grimas.2Q <o pod,a soportar el dolor de aquella separación. Los ieles$ que en p&nico se cre,an "encidos$ ueroconcienti;ados de que no todo estaba perdido. i 'd&n resistiese la tentación$ permaneciendo iel al Eterno$ sellar,a la gran "ictoria. E"a$ que hab,a sido ",ctima de un engao$ podr,a ser concienti;ada de su error$ sienda"orecida con el perdón di"ino. 9uando 'd&n en su angustiosa corrida alcan;ó el lugar de la prueba$ )a erdemasiado tarde. entada *unto al r,o$ E"a saboreaba despreocupadamente el ruto prohibido.2H 'd&n se estremeció. Ber,a el mismo ruto de la pruebaC En un gesto de esperan;a miró hacia el &rbol de ciencia del bien ) del mal$ mas en llanto reconoció la triste condenación. Lleno de triste;a contempló a su esposamas no encontró palabras para despertarla de la tan amarga realidad. En completa desesperación$ ele"ó la "o; euna dolorosa eclamación: 8E"a$ E"a$ qu es lo que est&s haciendo8. 'l comer del ruto prohibido$ la mu*er utomada por emociones que la hicieron imaginar haber alcan;ado una esera superior de "ida. 'l o,r la "o; de sesposo$ toda",a tomada por las emociones ilusorias$ le"antó la rente estampando una sonrisa$ pero se sorprendió "erlo llorando.30 9on prounda amargura$ 'd&n procuró saber la ra;ón que la hab,a lle"ado a rebelarse contra el Eterno. E" prontamente$ comen;ó a contarle la ant&stica historia de la sabia serpiente. atan&s sab,a que esa historia de serpiente *am&s con"encer,a al hombre a comer del ruto del &rbol prohibido. >recisaba encontrar una manera sutde lle"arlo a sellar su suerte siguiendo los pasos de su esposa. 7eniendo a E"a ba*o su poder$ resol"ió hacer de elel ob*eto tentador. 'guardar,a el momento oportuno para enla;arlo. En el d,a en que de l comiereis$ ciertamenmoriris. El recuerdo de esta sentencia de*aba a 'd&n mu) aligido.31 La epectati"a de "er a su amada alleciendo en sus bra;os$ era demasiado para soportar. Esta alicción$ siembargo$ ue disminu)endo$ al "er que ella continuaba eli; ) cariosa a su lado$ como si ning#n mal le hubiesacontecido. 'li"iado$ 'd&n "ol"ió a sonre,r$ correspondiendo a los aectos de su compaera. e rindió a las mdulces emociones$ le*os de saber que era el enemigo quien lo en"ol",a en aquellos abra;os. En ese momento dembeleso$ E"a comen;ó a hablarle de su eperiencia con la ciencia del bien ) del mal.32 Le habló de los tesoros de la sabidur,a que le hab,an sido abiertos. En su nue"o reino$ "i"ir,a mu) eli;. iembargo$ esa elicidad ser,a incompleta sin la participación de su esposo. Le habló de la imposibilidad dretroceder en sus pasos$ e insistió para que l la siguiera. =espus de hablarle de su decisión$ E"a$ con una dulcsonrisa$ le etendió las manos conteniendo un ruto$ pidindole que lo comiese en una demostración de su amor poella. 9on la "o; tentadora en sus o,dos$ 'd&n se sentó en el csped en prounda releión.



33 u a; se tornó nue"amente p&lida ) sus manos temblorosas. 7em,a rebelarse contra el 9reador$ pero al mismtiempo comprend,a que no conseguir,a "i"ir separado de su compaera$ a quin amaba con ininito amor. E"a ercarne de su carne$ la etensión de su ser. e sent,a angustiado al tener que tomar una decisión tan seria. La palidedel rostro de 'd&n se rele*ó en el semblante de todos los ieles al Eterno. )eron la insinuación del enemigo percibieron con horror la "acilación del hombre. La indecisión de 'd&n los de*aba desesperados.3 i obedeciese l aquella propuesta de atan&s$ toda elicidad ser,a eternamente desterrada. En las decisiones dser humano estaba el destino de todo el 5ni"erso. B'tender,a l a la solicitud de atan&sC =espus de intensa luchinterna$ 'd&n miró hacia su compaera a ella se hab,a unido en promesas de una eterna entrega. <o la de*ar,a solahora. 9ompartir,a con ella los resultados de la rebelión. 7omó entonces de las manos de E"a un ruto )$ en ugesto precipitado$ lo lle"ó a la boca.3P >rocurando apagar la "o; de su conciencia$ que le hablaba de una eterna perdición$ 'd&n se lan;ó en los bra;ode su esposa$ disrutando el alto precio de su rebelión. atan&s$ con gritos de triuno$ de*ó el para,so$ "olandr&pidamente *unto a sus innumerables huestes$ que aguardaban ansiosas el resultado de tan arriesgada tentati"a. 'saber de la desgracia humana$ se unieron en una estruendosa iesta. e sent,an seguros. ión ahora les pertenec por derecho$ pudiendo all, establecer un reino eterno$ *am&s siendo molestado por las le)es del Eterno.3I En todo el 5ni"erso los hi*os de la lu; sur,an ) lloraban la derrota. <unca hubo tanta triste;a ) horror ante uturo. Las "oces que "i",an para entonar alaban;as al 9reador proer,an ahora lamentaciones. El Eterno$ qu"encido por el ininito dolor e hab,a postrado en llanto ante la ca,da del hombre$ no estaba$ empero$ sorprendidGncluso antes de crear el 5ni"erso )a hab,a pre"isto ese triuno de la rebeld,a )$ en u sabidur,a ) amor$ habideali;ado un plan de rescate que lo implicar,a en un inmenso sacriicio.3+ ecando las l&grimas de u llanto$ e propuso actuar poderosamente en a"or de us ieles aligidoimpidiendo que stos ca)eran en las manos de los enemigos. En esa misteriosa inter"ención que aparentementdepon,a contra la *usticia$ el Eterno ordenó que us m&s poderosos &ngeles circundasen inmediatamente el *arddel Edn$ impidiendo que atan&s tomase posesión del monte ión. 9onsoladas ante la maniestación di"ina$ l potentes criaturas$ en pronta obediencia$ rompieron el espacio ininito$ rodeando en instantes el para,so$ en el sendel cual el ser humano$ trastornado )a por el pecado$ "i",a el negror de una noche que ser,a larga ) cruel.3Q iendo la autoridad del Eterno undamentada en la *usticia$ Bde qu manera podr,a *ustiicar us accionedelante de los enemigosC B<o hab,a entregado por u "oluntad el reino al hombre$ ) ste por libre elección no hab,a sometido a atan&sC Mientras que sorprendidas las criaturas racionales consideraban las acciones decisi"de =ios$ o)eron u potente "o; que$ repercutiendo por toda la creación$ tra,a la re"elación del gran misterio Ore"elación tan mara"illosa que a partir de aquel momento$ por toda la eternidad$ ocupar,a la mente de los ielesiendo tema para las m&s dulces meditaciones. O 3H El Eterno habló primeramente sobre la terrible condenación que pend,a sobre el hombre ) toda la creación. =i*que$ al desligarse de la Auente de la 6ida$ el hombre se hab,a precipitado en tan proundo abismo que no podr,a salcan;ado por u bra;o de *usticia ) poder. 4umillado ) torturado por las garras del enemigo$ no le quedaba hombre otra suerte m&s all& de la muerteOruto doloroso de su espont&nea rebelión. O 9onsiderando la situacióhumana$ las huestes de la lu; no "e,an posibilidades de triuno. ab,an que solo el hombre podr,a retomar dominio del enemigo$ de"ol"indolo al 9reador.0 >ero el ser humano$ eternamente escla"i;ado en su naturale;a$ ser,a incapa; de tal "ictoria. 9on "o; melodios) llena de ternura$ =ios re"eló el plan de la redención$ diciendo: 8En "erdad$ el hombre cosechar& el ruto de srebelión en una terrible muerte. <o puedo$ con mi poder$ cambiarle la suerte. i actuara as,$ ser,a in*usto delante dmi decreto. >ero har caer toda la condenación sobre un ubstituto que surgir& en la descendencia humana. Es4ombre no traer& en sus manos las argollas de la muerte$ siendo inocente e incontaminado en u naturale;a.1 9omo representante de la ra;a humana$ enrentar& a atan&s ) lo "encer&. =espus de triunar en esa batall probando que el amor es m&s uerte que el ego,smo$ que la "erdad es m&s uerte que la mentira$ que la humildad m&s poderosa que el orgullo$ el iel ubstituto le"antar& las manos "ictoriosas no para saludar la gran conquistsino para tomar de las manos de la humanidad escla"i;ada la copa de su condenación. orber& as,$ sumiso$ el c&lide la eterna muerte.2 Ese inmenso sacriicio abrir& a los seres humanos una oportunidad de ser redimidos$ "ol"iendo a los bra;os d9reador$ *untamente con el dominio perdido.8 Las huestes$ sorprendidas ante la re"elación del Eterno$ indagaron lidentidad de Ese ubstituto. El 9reador$ con una sonrisa amorosa$ les di*o: 8o ser ese 4ombre. Mi Esp,ritreposar& sobre una "irgen$ ) en ella ser& engendrado un 4i*o anto. Ese *o"en ser& di"ino ) humano. En shumanidad$ l ser& sumiso a la di"inidad que en Nl habitar&. Los redimidos "er&n en Nl al >adre de la Eternidad$ e



9reador ) !edentor$ el !e) de los re)es. u nombre ser& oshua ?nombre hebraico que traducido signiica eEterno sal"[email protected] 'sumiendo la naturale;a humana$ =ios podr,a pagar el alto precio del rescate$ muriendo en lugar dlos pecadores.3 Las huestes de la lu; se quedaron enmudecidas al conocer el plan del 9reador. El pensamiento de "erlo a Nsometerse a tan penoso sacriicio$ a in de redimir el dominio perdido$ era demasiado para soportarlo. <o hab,a$ sembargo$ otra esperan;a de "ictoria$ a no ser a tra"s de esa amorosa entrega. =espus de disrutar el alto precidel pecado$ la *o"en pare*a se sintió mal. Gnicialmente sintieron un gran "ac,o en el cora;ón$ que luego urellenado por el remordimiento ) por la triste;a. >ercibieron que$ inspirados por la codicia$ hab,an sellado su trissuerte ) la de toda la creación. Les parec,a o,r a lo le*os el gemido de un 5ni"erso "encido. El sol$ que los hab,a llenado de "ida ) calor en aquel d,a$ se ocultaba en el hori;onte$ anunci&ndoles una negrnoche. El arrebol$ que antes all, les hab,a anunciado el eli; encuentro con el 9reador$ parec,a en"ol"erlos en unsentencia de que *am&s despertar,an hacia un nue"o d,a. <o osaban siquiera mirar hacia la cima$ temiendo "er casobre ellos el ra)o del *uicio que los reducir,a a pol"o. 9on la mirada dirigida hacia el suelo r,o$ les "en,a a lmemoria la sentencia: 8En el d,a en que de l comiereis$ ciertamente moriris.8 L&grimas desesperadas rodaban esus rostros al aguardar el tr&gico inal. 'l considerar el moti"o de su rebelión$ 'd&n comen;ó a recriminar a sesposa por haber dado o,dos a la serpiente.P E"a$ a su "e;$ buscando ecusarse$ lan;ó la culpabilidad sobre el 9reador$ diciendo: 8DB>or qu el Etern permitió que la serpiente me engaaraCF8 El amor que reinaba en el cora;ón humano desaparec,a$ dando lugar orgullo ) al ego,smo$ que se und,an en resentimientos ) odio. u naturale;a )a no era pura ) santa$ sincorrompida ) llena de rebeld,a. 7odo estaba cambiado. Gncluso la mansa brisa que antes all, los hab,a baado ecaricias rerescantes$ congelaba ahora a la culpable pare*a.I Los &rboles ) las canteras loridas$ que eran su deleite$ consist,an ahora en obst&culos al caminar sin rumbo eaquella noche. El propósito de atan&s en llenar el s&bado de tinieblas parec,a haberse cumplido. En aquella nochno eist,a siquiera el rele*o plateado del claro lunar para hablarles de esperan;a. Las estrellas centellantesuspendidas en el oscuro cielo$ estaban ouscadas por el dolor. a*aban sobre el mundo las tinieblas de una largnoche de pecado Osombras ba*o las cuales tantos se arrastrar,an sin la esperan;a de un amanecer. O Era alnoche )a ) las tinieblas parec,an en"ol"er a la triste pare*a en eternas sombras.+ <i siquiera meditaban en sus pocas palabras$ soocadas por la agon,a$ de un amanecer. 9abi;ba*os$ andabantientas de aqu, para all&$ en la epectati"a del *uicio inminente$ que los reducir,a al r,o pol"o$ ol"idados ba*aquellas tinieblas sin in. 'pareció repentinamente un brillo en el cielo$ que iba aumentando a medida que saproimaba a la tierra. La pare*a se estremeció$ pues sab,an que era el 9reador que "en,a a darles el castigo6encidos por el p&nico$ se pusieron a correr$ distanci&ndose del monte ión$ el lugar de la "ergon;osa ca,dTustamente hacia all& "ieron al 9reador dirigirse. Ellos$ que siempre corr,an al encuentro del amoroso >adratra,dos por u lu;$ ahora hu,an desesperados en busca de lugares oscuros$ ) de denso bosque.Q El Eterno$ mo"ido por ininito amor$ comen;ó a seguir los pasos de la pare*a ugiti"a. Mientras caminablloraba al recordar los momentos elices que hab,a pasado *unto a ellos en aquel para,so. D9omo se habtransormado todoF us hi*os no consegu,an "er m&s en Nl un >adre de amor$ sino alguien que$ airado$ buscabcastigarlos. Mo"ido por un uerte anhelo de abra;ar a us hi*os humanos$ =ios hi;o repercutir la "o; en unindagación: 8B'd&n$ dónde os encontr&isC8 u "o;$ al sonar en medio de las tinieblas$ tra,a consigo solamente ueco "ac,o que hablaba de ingratitud ) rebeld,a.H D9omo deseaba en"ol"er a la pare*a en un ardiente abra;o$ ) con palabras de cario conesarle que u amor erel mismoF 'l "er a us hi*os hu)endo de u presencia$ el Eterno ue embargado de un gran dolor. 'nte u miraturbado de l&grimas$ se etend,a el uturo de la ra;a humana. D9u&ntos$ engaados por atan&s$ huir,an de presencia en el transcurso de la larga noche de pecado$ *u;gando en Nl un eor tirano$ que "i"e buscando altaslaque;as en los pecadores$ a in de castigarlosF El 9reador$ a#n as,$ no desistir,a de buscarlos por los "allsombr,os del reino de la muerte$ hasta conquistar un pueblo arrepentido. 'd&n ) E"a$ ehaustos por la presurouga$ se escondieron por entre el olla*e al pie de una higuera.P0 !econociendo su desnude;$ procuraban hacer delantales cosiendo aquellas ho*as. 6estidos as,$ cre)eron podlibrarse del sentimiento de "ergRen;a ante el 9reador. El Eterno$ aproim&ndose al lugar donde la pare*a sescond,a$ preguntó: O B'd&n$ dónde est&isC O <o pudiendo ocultarse m&s de =ios$ 'd&n se le"antó *untamencon su compaera )$ cabi;ba*os$ se presentaron ante el 9reador$ postr&ndose trmulos a us pies. <o consiguieroencararlo m&s$ debido al sentimiento de culpabilidad.



P1 El 9reador$ cariosamente$ los tomó de las manos$ le"ant&ndolos del suelo$ )$ con una epresión de triste;a eel semblante$ les preguntó: O B>or qu hu,an de m,C B'caso comieron del ruto del &rbol de la ciencia del biendel malC O 'd&n$ todo tembloroso$ con "o; entrecortada por sollo;os de temor$ respondió: OLa mu*er que mdiste por compaera$ ella me dio del ruto ) )o com,. O 9on esta respuesta$ 'd&n buscaba ecusarse$ lan;ando culpa sobre su esposa.P2 6olte&ndose hacia E"a$ el Eterno le preguntó: O B>or qu hiciste esoCO E"a prontamente Le respondió: O'quella serpiente me engaó ) )o com,. O 'mbos no quer,an reconocer la culpa$ lan;&ndola sobre otros. En poca palabras$ atribu,an al 9reador la responsabilidad por todo el mal practicado: B8>or qu les hab,a concedido el libalbedr,oC B>or qu hab,a creado a la mu*erC B>or qu hab,a creado a la serpienteC8 ilente$ =ios obser"aba a uhi*os que$ t,midos ) desconcertados$ permanec,an delante de ,.P3 9on prounda triste;a$ Nl pre"ió que esa ser,a la eperiencia de incontables seres humanos en el transcurso dla historia. D9u&ntos habr,an de perderse por no reconocer la propia culpaF D9u&ntos procurar,an *ustiicarslan;ando sus errores sobre los dem&s ) hasta sobre el mismo 9readorF 9on blandas palabras$ el Eterno procurhacerlos reconocer su culpa. olamente reconociendo su necesidad$ podr,an ser a)udados. Mirando hacia lr&giles "estiduras te*idas por manos pecadoras$ di*o a la pare*a: O4i*os$ esas "estiduras soinsuicientes$ inmediatamente sec&ndose se deshar&n. 6osotros precis&is de "estiduras duraderas$ que puedan cubr"uestra desnude;$ libr&ndoles de la condenación. i "osotros quisierais$ o puedo darles esa "estidura. O P 'nte las palabras bondadosas del 9reador$ que tra,an esperan;a$ la pare*a se postró arrepentida$ desprendindosde sus ilusorias "estiduras$ s,mbolos de su racaso. 'oraban ahora las "estiduras de la sal"ación$ prometidas por di"ino >adre.

C-,tulo

4ios re!ela los efectos de la caída y el 6lan de <edenci$n" -l doloroso sacrificio del cordero, un símbolo dSal!ador" Se pro!een las !estiduras prometidas" -l Creador ser5 el *ombre ue los sal!ar5" -n la pare0a sintensifica el amor y gratitud hacia el Sal!ador" -stremecimiento de las huestes malignas ante la inter!enci$n d -terno y la re!elaci$n del 6lan de <escate" -l -terno acompaña a la pare0a fuera del 0ardín" Satan5s intenta dnue!o apoderarse del ser humano enfrent5ndolos con furia, pero es repelido por 4ios, y sus amenazas silenciadas %alas consecuencias de la ciencia del bien y del mal" La fe del hombre en las !erdades re!eladas de la redenci$

-l -terno, compañero del ser humano en su 0ornada sobre la tierra" Baturaleza del Creador respecto a la guerra -l traba0o edificante contraataca muchos ataues de Satan5s" <e!elaciones recibidas al construir el altar" 4omundos refle0ados en la naturaleza caída" An cordero inmaculado guiado y preparado por 4ios" -n el sacrifici se muestra una representaci$n del conflicto entre el bien y el mal" La llama encendida, símbolo del perd$n di!ino La naturaleza, aún en su estado caído, re!ela el 6lan de <edenci$n"

1. =espus de contemplar a us hi*os que$ arrepentidos$ )ac,an a us pies$ el Eterno los tomó cariosamente por lamanos ) los le"antó. e alegraba en poder re"elar al hombre ca,do el plan de la redención. 9on ternura$ =iocomen;ó a descubrirles primeramente los amargos resultados de su ca,da$ diciendo: 84i*os$ "osotros sellasteis destino de toda la creación en las garras de la muerte. La desarmon,a )a penetra la naturale;a$ procurando destruen ella todas las "irtudes.

2 El abismo en el cual "osotros os sumergisteis por la desobediencia es por dem&s proundo para que pod&is salcan;ados por mi poderoso bra;o. 's,$ desligado de la Auente de la 6ida$ no resta m&s al ser humano otra suerm&s all& de la muerte.8 =espus de pronunciar estas palabras que re"elaban una triste suerte$ el Eterno in"itó a pare*a a seguirlo. 9abi;ba*os$ 'd&n ) E"a$ en llanto$ siguieron al 9reador en us pasos de *usticia$ que loencaminaba al lugar de la "ergon;osa ca,da$ donde supon,an encontrar el doloroso inal.3 En esa dolorosa caminata$ sollo;aban al recordar su pasado de gloria deshecho por la ingratitud. D9omo les dol,en el alma la terrible epectati"a de ser reducidos$ *untamente con la creación$ a r,as ceni;as ba*o la oscuridad daquella noche de pecadoF Mientras caminaban$ contemplaban a tra"s de las l&grimas las belle;as adormecid baadas por la lu; de =ios. 6e,an a los inocentes animales$ que no ten,an conciencia del gran dolor. #bitamente$ pare*a se detu"o$ "encida por intenso llanto sus "acilantes pasos los hab,a lle"ado *unto a un cordero$ el animalim&s querido.



DBus o*itos de dul;ura tambin se habr,an de apagarCF ec&ndoles las l&grimas$ el Eterno les ordenó tomar en lo bra;os al inocente cordero. En"ol"indolo *unto al pecho$ acompaaron silenciosos los pasos del 9reador$ hasalcan;ar la c#spide del monte ión$ lugar de la "ergon;osa ca,da. 9ontemplando all, los restos de los rubros rutocon ,mpetu les "ino a la mente el recuerdo de la sentencia di"ina: 8En el d,a en que de l comiereis$ ciertamentmoriris.8 El terrible momento hab,a llegado. El hombre culpable deber,a beber el amargo c&li; de la muertsucumbiendo sin esperan;a.P 9onsciente de su perdición$ la pare*a percibió$ con horror$ que las manos que les hab,an tra,do a la "idempuaban ahora un cuchillo puntiagudo de piedra. 7emblorosos$ se postraron ) esperaron por el cumplimiento dla *usta sentencia. Mientras enmudecidos por el miedo$ 'd&n ) E"a esperaban el golpe que los reducir,a a pol"sintieron el sua"e toque de las manos di"inas que los le"antó hacia una nue"a "ida. La condenación$ sin embarghabr,a de recaer sobre un substituto.I 9olocando en las manos de 'd&n el cuchillo$ el 9reador le di*o: OEl cordero morir& en lugar d"osotros. O 'd&n deber,a sacriicarlo. 'sustada ante la orden de =ios$ la pare*a$ en llanto$ se puso clamar: O Deor$ el corderito no$ el es inocenteFO 9on epresión de *usticia$ el Eterno agregó: O i el no muer"osotros no podris tener las "estiduras de las cuales habl. O 'nte la insistencia del 9reador$ 'd&n$ todtembloroso$ en un esuer;o doloroso$ cla"ó en el pecho del corderito aquella aguda piedra. El golpe ue atal$ ) animalito$ "ertiendo su preciosa sangre$ se sumergió en las tinieblas de una noche sin in.+ 9ontemplando al corderito inerte sobre la hierba ensangrentada$ la pare*a ele"ó la "o; ) lloró. 9omen;aban comprender la enormidad de su tragedia. D9uan terrible era la muerteF Ella$ en su poder$ hab,a apagado toda la lude los o*os del inocente animal. Gnclin&ndose silente sobre el cuerpo inerte del cordero$ el Eterno remo"ió la pire"estida de blanca lana ) con ella hi;o t#nicas para cubrir la desnude; de la pare*a. =espus de "estirlos le preguntó con cario: O B6osotros entendisteis el sentido de todo estoC O En prounda releión$ por entre sollo;ode reconocimiento ) gratitud$ la pare*a eclamó: O DEl murió en nuestro lugar$ para darnos sus "estidurasF O Q 'd&n ) E"a$ aunque hab,an comprendido aquella realidad ,sica$ estaban le*os de entender el signiicado de aquacontecimiento. ' ellos el 9reador re"elar,a el misterio del di"ino amor. 9on epresión de ininita misericordi=ios comen;ó a re"elar al ser humano el sentido de aquel doloroso sacriicio$ diciendo: El inocente corderito$ quho) padeció$ simboli;a a un hombre que habr& de nacer. En sus o*os habr& la misma ternura$ el mismo amo!e"estido por una "ida *usta$ como la blanca lana que cubr,a al cordero$ ese hombre crecer& como un renue"sobre la 7ierra$ no teniendo en las manos las ataduras del pecado. En su apariencia$ ese hombre no traer& la pompde un re)$ por eso ser& despreciado por muchos.H er& un hombre de dolores$ pues caer& sobre s, el peso de todas las pro"ocaciones. En su idelidad al reino de lu;$ ese hombre luchar& contra el enemigo usurpador$ "encindolo inalmente. =espus de triunar en sus luchatomar& sobre s, la carga de "uestra condenación que le causar& una terrible muerte. Nl ser& traspasado por causa d"uestra rebelión ) molido por "uestras iniquidades. er& oprimido ) humillado$ m&s no abrir& su boca$ como ecorderito que ho) se entregó pac,icamente. ucumbiendo en la muerte$ l os conceder& los mritos de su "ictoriEn"ueltos por sus "estiduras de *usticia$ estaris libres de la condenación.10 La "ida eterna alcan;aris as,$ mediante el sacriicio de ese hombre *usto que habr& de nacer. 'd&n ) E"a$ quen una me;cla de gratitud ) dolor escucharon la re"elación de tan grande sal"ación$ indagaron re"erentes respecto de ese hombre especial que en su descendencia habr,a de surgir$ a in de cumplir tan inmenso sacriicio. E9reador$ mir&ndolos tiernamente$ mo"ido por un amor que supera la misma muerte$ los en"ol"ió en un cariosabra;o ) re"eló: O Do ser ese 4ombreFOorprendidos ante la declaración del Eterno$ 'd&n ) E"a estu"ieroinmó"iles$ mientras que contemplaban u tierno semblante.11 9omprendiendo el signiicado del tremendo sacriicio$ se postraron a us pies ) con l&grimclamaron: O D<osotros somos merecedores de la muerte eor$ m&s 7# eres inocente ) no debes surir en nuestrlugarFO ec&ndoles las l&grimas$ el Eterno con ternura les habló: O4i*os m,os$ o les amo con un eterno amor. morir en lugar de "osotros. O 'nte esta conirmación$ la pare*a ele"ó la "o; en una lamentación doloros=ec,an: O D<osotros matamos al 9readorF D<osotros matamos al 9readorFO Mas =ios comen;ó a consolar a pare*a con palabras de esperan;a$ diciendo: O=espus de beber el c&li; de la eterna muerte$ o retomar la "idasubir al cielo.12 Gnterceder all, por el hombre perdido$ concediendo a todos aquellos que$ arrepentidos$ aceptaren mi sacriicilas "estiduras de mi "ictoria. Tuntos$ triunaremos inalmente sobre el reino del pecado que se deshar& en ceni; ba*o nuestros pies. 9rear entonces un nue"o 9ielo ) una nue"a 7ierra$ donde #nicamente la *usticia ) el am



reinar&n. 6i"iremos as, para siempre$ en un reino de perecta armon,a ) pa;. O El 9reador$ que acompaado por l pare*a permanec,a toda",a sobre el monte ión$ conclu)ó us re"elaciones diciendo:13 8El *ard,n del Edn estar& ahora "ac,o. El ser humano$ durante la larga noche de pecado$ "agar& en su eilio. <andar&$ sin embargo$ solo: el Eterno$ tambin peregrino$ pisar& con el hombre todo el camino espinoso$ hasta pod *untos subir al monte perdido$ triunando gloriosamente sobre el reino de la muerte. El &rbol de la ciencia del bie) del mal monumento de la rebeld,a ser& entonces deshecho$ dando lugar a un &rbol glorioso que$ uniendo su copal &rbol de la "ida$ se tornar& en el arco conmemorati"o de la gran "ictoria. obre el santo monte redimidreposar& entonces para siempre el trono uni"ersal$ que por los ieles triunantes ser& llamado: el trono de =ios ) d9ordero.81 'd&n ) su compaera$ despus que o)eron palabras tan conortadoras ) llenas de esperan;a$ ele"aron la "o; eun c&ntico de gratitud ) alaban;a. 9onoc,an ahora el ininito amor de su 9reador ) estaban dispuestos a ser"irlo=espus de consolar a la pare*a$ =ios los lle"ó hacia uera del Edn. <o les ue &cil despedirse de aquel precioshogar all, hab,an despertado a la "ida en los bra;os del Eterno all, disrutaron momentos de elicidad pura$ ecompa,a del 9reador$ de los &ngeles ) de los dóciles animales. 5na nostalgia ininita parec,a en"ol"er a la pare*en sus pasos de abandono. Aue con espanto que atan&s ) sus s#bditos presenciaron la inter"ención del Eterno.1P Aueron sacudidos ante la sorprendente re"elación del plan de rescate. 9on rabiosa rustración$ comprendieroque$ si de hecho la promesa di"ina se concreti;ase$ no restar,a ninguna esperan;a. =espus de considerar sobrtodo lo que hab,a acontecido$ una gran ira se apoderó de su cora;ón. <o estaba dispuesto a reconocer la redenciódel ser humano. 4ar,a todos los esuer;os por retenerlo$ *untamente con el reino que le hab,a sido entregado9uando la pare*a$ acompaada por el 9reador$ alcan;ó el "alle herido por la muerte$ amanec,a. 'll, atan&s loenrentó con uria$ en un intento de apoderarse nue"amente del ser humano.1I La pare*a estu"o temblorosa en la a; del enemigo$ pero las manos protectoras de =ios los calmaroEpresando en el semblante la irme;a de una *usticia que es eterna$ el Eterno silenció las amena;as del enemigcon las siguientes palabras: 8El ser humano me pertenece$ pues o lo compr con mi sangre8. 'l caminar esilencio *unto al 9reador$ 'd&n ) E"a obser"aban con triste;a las seales de la muerte estampadas en aquelnaturale;a antes tan llena de "ida. Las bellas lores$ que hab,an desbotonado para ehalar aromas eternos$ pend,aahora marchitas Dlos pa*arillos$ que con alegr,a los saludaban en cada amanecer con sus trinos$ "olaban ahodistantes$ haciendo sonar tan tristes cantosF 7odo estaba cambiado en la naturale;a.1+ La ciencia del bien ) del mal no hab,a tra,do ning#n bien al 5ni"erso$ sino un intenso conlicto espiritual ,sico. 'nte las consecuencias de"astadoras de su ca,da$ la pare*a$ "encida por una inepresable triste;a$ se postrarrepentida ) lloró amargamente. =ios$ que tambin compungido por el dolor contemplaba el escenario desolado procuró$ con palabras de esperan;a$ conortarlos. Les habló sobre el nue"o 9ielo ) la nue"a 7ierra que un dcrear,a$ donde la pa; ) el amor "ol"er,an a reinar en cada cora;ón. 'll, "i"ir,an siempre *untos$ no tra)endo en rente las marcas de la triste;a$ sino coronas de eterna "ictoria.1Q 'll, secar,a las l&grimas de sus rostros ) estas *am&s "ol"er,an a humedecer sus o*os. 'mparando a 'd&n )E"a en sus pasos$ el 9reador los condu*o a tra"s de un "alle herido$ hasta alcan;ar el pie de una colina. Lsubieron en lentos pasos$ mientras intercambiaban palabras de &nimo ) esperan;a. us pies alcan;aron inalmenel sua"e csped que cubr,a la cima espaciosa de aquella colina. Era sobre aquel lugar que la pare*a "e,a a cada d,el sol declinar$ baando el cielo ) los "alles de un ro*o "i"o$ como la sangre que hab,a chorreado del pecho decordero.1H 6ol"indose hacia el lado oriental$ la pare*a$ en una me;cla de dolor ) nostalgia$ contempló a lo le*os lo paisa*es que los en"ol"ieron en aquel pasado tan eli;. 'l di"isar el monte ión$ que ma*estuoso se ele"aba emedio del Edn$ lloraron al acordarse de la ca,da. D9u&n dbiles hab,an sidoF El sol declinaba en su *ornadanunciando la llegada de una triste noche m&s O la primera uera del para,so.O En un calmado gesto$ el Eternmostr&ndoles el "alle sobresaliente de la colina$ les habló con cario: 8'qu, ser& "uestra pro"isoria morada. =esdaqu, podris contemplar el para,so que por alg#n tiempo permanecer& en la 7ierra$ hasta ser recogido a su lugar dorigen$ en el seno de la Terusaln 9elestial.20 'll,$ protegido por la *usticia$ aguardar& el amanecer de la "ictoria. 9uando ese gran d,a llegue$ regresaremo *untos a ión$ donde seremos coronados en gloria$ en un reino de eterna elicidad ) pa;8. =espus de decir esta palabras$ =ios ordenó a la pare*a que constru)esen en aquel lugar un altar de piedras$ sobre el cual cada semana$ ela noche que antecede al s&bado$ deber,an inmolar un cordero$ en memoria de u acriicio.21 9omo seal de u presencia$ ) para la certe;a de que sus pecados ser,an perdonados$ Nl encender,a un uegsobre el altar$ el cual durar,a toda la noche$ hasta consumir por completo la orenda del sacriicio. >ara que el s



humano pudiese airmar su e sobre las "erdades re"eladas$ ) no en la maniestación "isible de la persona d9reador$ Nl habr,a de permanecer in"isible desde aquel momento en adelante. olamente en ocasiones especialecuando se hiciese necesario u aparición o la de &ngeles para nue"as re"elaciones ) ad"ertencias$ esto ocurrir,9ontemplando a us hi*os entristecidos en aquel momento en que ser,an de*ados aparentemente solos.22 El Eterno les di*o con amor: 84i*os$ aunque "osotros teng&is que permanecer en este ambiente hostil$ n precis&is temer$ pues o permanecer al lado de "osotros. er un compaero amigo en esta *ornada lle"ar sobmis hombros "uestros dolores$ "uestros anhelos$ "uestras luchas. 9uando$ tentados por el enemigo$ estu"ieren punto de ceder$ podr&n encontrar abrigo en mis bra;os$ que siempre estar&n etendidos para sal"arlos )$ si alg#d,a "osotros no resistiereis$ ) por la uria del enemigo ueseis arrastrados hacia las proundidades del abismo$ no odesesperis cre)endo no tener esperan;a$ pues o estar all, para acudirlos con mi perdón ) uer;a.23 7engan siempre en mente el signiicado de las "estiduras recibidas de mis manos$ pues ellas hablan de lredención que al hombre pertenece. =escansen hi*os m,os$ en mis bra;os de amor.8 =espus de consolar a la pare*con estas promesas$ el 9reador$ "iendo que estaban soolientos por el cansancio$ los hi;o reclinar en u rega;o )como de costumbre$ los acarició dulcemente hasta adormecerlos. 'l "erlos ol"idados en su sueo$ =ios lloró pre"er el surimiento que eperimentar,an al despertar. 9on el cora;ón partido por el dolor causado por aquelseparación ,sica$ el 9reador de*ó a la pare*a dormida sobre la hierba$ despus de besarles los rostros )a marcado por el surimiento.2 u lu; se disipo al tornarse in"isible$ dando lugar a las tinieblas de aquella primera noche uera del para,so. Eel subconsciente de la pare*a comen;aron a desilar sueos coloridos de un pasado eli;. e encontraban una "em&s en medio las belle;as del Edn$ saciados por una alegr,a eterna. 'gradecidos por la "ida$ corr,an por locampos loridos$ *ugando con los animales. 9on elicidad un,an las "oces a los &ngeles en los armoniosos c&nticoen alaban;a al 9reador. 7antas escenas lindas desilaban en su subconsciente$ pero esos sueos se tornaro pesadillas$ hacindoles re"i"ir su tragedia.2P 'goni;antes despertaron en medio de la oscuridad de aquella primera noche en el eilio. <o consiguiendconciliar el sueo$ la pare*a permaneció en llanto hasta ser consolados por el amanecer que les re"eló a lo le*os enost&lgico para,so. =ios$ aunque in"isible$ permanec,a al lado de 'd&n ) E"a all, en la colina. El surimiento dellos era u surimiento$ como tambin la esperan;a de que un d,a retornar,an "ictoriosos a ión. 'nte la miradcontemplati"a del 9reador$ se re"elaba el uturo sombr,o de la humanidad. 9on pesar$ "e,a incontables criatura pereciendo sin sal"ación$ por recha;ar u amor. L&grimas mo*aron u rostro$ al pre"er al enemigo empleando todastucia a in de retener a los seres humanos ba*o su dominio.2I Larga ser,a la noche del pecado$ ) reida la batalla por la reconquista del reino perdido. El triuno de la lurequerir,a de parte de =ios un sacriicio inmenso. En la persona del Mes,as$ a su tiempo$ l nacer,a entre lohombres$ con la misión de pagar el precio del rescate. >or medio de Nl muchos ser,an liberados de las garras denemigo: todos aqullos que Lo aceptasen como al"ador ) !e). 9ontra sos elegidos$ el enemigo arremeter,todas las uer;as procurando hacerlos caer. En su "isión del uturo$ el 9reador contempló con alegr,a el triuninal de los redimidos.2+ 4ab,an sido etremadamente probados$ mas en todo ueron m&s que "encedores por medio de 'qul que loredimió de las tinieblas hacia el reino de la lu;. =espus de ante"er los surimientos que se deri"ar,an de la gralucha$ el Eterno etendió la mirada por las planicies cauti"as$ contemplando all, a las huestes rebeldes dispuest para la lucha. El ob*eti"o de esos e*rcitos$ era apoderarse nue"amente del ser humano$ en el cual estaba sellado derecho de dominio sobre el 5ni"erso. 9ontrario a la naturale;a del 9reador es la guerra$ mas para la deensa dus hi*os$ estaba dispuesto a utili;ar u poder.2Q u uer;a$ sin embargo$ solamente ser,a utili;ada con *usticia. i el ser humano recha;ase esa proteccióorecida mediante el sacriicio del Mes,as$ =ios nada podr,a hacer para impedir que l mismo pereciese en lgarras del enemigo. 'd&n ) E"a$ sin embargo$ se hab,an arrepentido de su gran pecado$ recibiendo por lmisericordia de =ios "estiduras de sal"ación$ simboli;adas por las pieles del cordero sacriicado. Tustiicado por entrega de la pare*a$ el Eterno con"ocó a us poderosos e*rcitos para la pelea. En pronta obediencia las huestes dla lu; irrumpieron por el espacio sideral en dirección a la 7ierra$ circundando cual uerte muralla la colin portadora de aquel tesoro redimido por la sangre del di"ino !e).2H 'l ser humano le ue conerido en el Edn el deber de cuidar de la naturale;a: preparaban canteras para lalores cosechaban rutos para manutención dirig,an a los animales en su inocente "i"ir$ adiestr&ndolos para qules uesen #tiles. Esas ocupaciones hab,an sido para ellos uentes de desen"ol"imiento ) placer. 'hora$ a pesar dlas ad"ersidades$ deber,an continuar reali;ando ese deber. El traba*o en s,$ reali;ado seg#n las órdenes del 9reado



)a anular,a muchos ataques del enemigo. Las primeras ocupaciones de la pare*a en aquella maana$ les tra*re"elaciones del gran amor de =ios$ hasta entonces desconocidas.30 'l reunir las piedras para la construcción del altar$ eperimentaron el dolor de heridas que chorreaban sangrcomo tambin la atiga que hacia emanar sudor. intiendo ) contemplando todo en la propia carne$ amaron m&s al"ador$ para quin el altar construido preiguraba heridas ma)ores$ que "erter,an toda u sangre$ como tambiatigas que minar,an toda la sal"ia de u "ida. La mirada de nostalgia ) de esperan;a de la pare*a de ahora eadelante$ *am&s se posar,a en el Edn distante$ sin discernir primero el altar de los sacriicios.31 Ese altar$ con sus manchas de sudor ) sangre$ permanecer,a como una remembran;a del dolor ) del surimientque$ despus de humedecer los labios de los seres humanos$ transbordar,a en la copa del 9reador. =espus dcontemplar por largo tiempo el para,so de la "ida eterna que se etend,a mucho m&s all& de aquel altar oscuro dmuerte$ la pare*a eperimentó el dulce ali"io del descanso. =eseosos de conocer los paisa*es de su nue"o hoga'd&n ) E"a$ animados por la esperan;a$ salieron a pasear.32 us pasos los conduc,an por caminos de sonrisas ) de l&grimas de encantos ) desilusiones de lores qudelicadas desabotonaban$ baadas en perume$ ) de lores despetaladas$ tumbadas marchitas ) sin olor de animaltoda",a dóciles ) sumisos ) de animales enemigos$ eroces ) amena;adores. La pare*a discern,a en su paseo ladi"isas de dos mundos: el de la lu; ) el de las tinieblas del amor ) del ego,smo de la esperan;a ) del desespero dla armon,a ) de la desarmon,a de la "ida ) de la muerte. Esa "isión les llenó de triste;a ) lloraron largamente. Etriste;a aumentar,a toda",a m&s en el uturo$ cuando descubriesen la proundidad de esas di"isas en el seno de sdescendencia.33 eis arreboles )a hab,an coloreado los cielos anunciando a la pare*a las noches oscuras ) r,as que con su mantde tinieblas deshac,an todas las im&genes "i"as$ menos la esperan;a de "ol"erlas a "er coloridas en el amanecer dlu;. e acercaba ahora la hora del sacriicio$ cuando el rudo altar$ abrasado en su *usticia clamar,a por sangre. i nle oreciesen la orenda$ eplotar,a con certe;a$ en"ol"iendo todo el mundo con sus llamas a no habr,a entonceamanecer$ ni esperan;a de Edn a lorecer.3 D9u&n preciosa es la sangreF Dangre es "ida "ida es lu;F D>ara un ser aquella noche se tornar,a eterna$ siamanecerF Ese ser deber,a asumir la culpa de todo el mundo$ dando su sangre al rudo altar. B%uin se orecer,aDB%uin "erter,a la sal"ia de la "ida$ hasta "er el #ltimo destello apagarse en su cieloCF 'd&n ) E"a despus dreleionar por largo tiempo$ contemplando la cuna de la muerte construida por sus manos$ se miraron inquietocon esa pregunta decisi"a: B%uin se orecer&C Esa indagación nacida de su culpabilidad$ hi;o "ibrar en proundo de sus remembran;as la "o; del bendito 9reador en u re"elación de ininita bondad: O Jo los amo coun eterno amor o morir en "uestro lugar 8. O 3P 'gradecida$ la pare*a se postró re"erentemente ante el sediento altar$ "indolo por la e$ saciado por el don deterno amor. En aquella tarde del seto d,a$ =ios somet,a al ser humano a una tremenda prueba de e. Ellos ten,adelante de s, el altar de piedras$ construido conorme a la orden di"ina$ mas no hab,a ninguna o"e*a para esacriicio. En su anhelo$ se acordaban del Edn$ donde hab,a muchos rebaos. 'l "er el sol caer en el hori;onte'd&n ) E"a comen;aron a clamar a =ios por socorro$ pues sab,an que solamente un milagro podr pro"idenciarles$ en aquel #ltimo momento$ un cordero para el sacriicio.3I ' los o*os de los habitantes del 5ni"erso$ el gran milagro por el cual el ser humano clamaba$ )a se procesabacasi una semana: (uiado por el 9reador$ un inmaculado cordero hab,a de*ado el Edn ) seguido los rastros de l pare*a en su caminata hacia el eilio. En su larga *ornada$ ese animalito tu"o que enrentar muchos desa,os peligros$ mas protegido ) guiado por el Eterno prosegu,a en su misión. 9uando las sombras del anocheccomen;aron a en"ol"er la colina$ la pare*a que "i",a tan dura prueba de e$ discernió un puntito blanco que saltaben el csped "iniendo en dirección a ellos. ' medida en que se aproimaba$ aquel bulto parec,a hablar desperan;a$ de "ida ) calor.3+ 'l "er que el gran milagro hab,a acontecido$ corrieron al encuentro del cordero$ en"ol"indolo en los bra;os. Nestaba atigado$ mas no descansar,a: dar,a descanso. Estaba sediento$ mas no beber,a: dar,a de beber al altar quclamaba por sangre. 'quel cordero ten,a "oluntad de "i"ir en los bra;os del hombre$ mas morir,a$ para que st pudiese "i"ir en los bra;os de =ios. Era un perecto simbolismo del !edentor que de*ar,a u gloria$ "iniendo e b#squeda del pecador. Las tinieblas de una noche preigurati"a m&s ba*aron lentamente en"ol"iendo toda naturale;a en su prisión.3Q u uer;a$ sin embargo$ ser,a abatida delante del ser humano$ por el brillo de un uego especial$ encendido plas manos del perdón di"ino sobre el cuerpo sin "ida del inocente cordero. 7odo estaba preparado para el dolorosgolpe: acto que apagar,a de aquellos o*itos dulces el #ltimo destello de "ida$ sumergindolos en la r,a oscuridad d



una eterna noche: oscuridad que generar,a lu; r,o que generar,a calor muerte que generar,a "ida O doninmerecidos O rutos del di"ino amor orecidos a las manos pecadoras$ prestas a herir. En medio de la silennoche el altar clama el hombre triste eclama$ mientras el cordero$ mudo$ no reclama al ser etendido para muerte. Las manos que constru)eron el altar se le"antan ahora$ no para acariciar como antes$ sino para herisangrando el precio del perdón.3H olo un gesto$ nada m&s$ ) el destello se apagar& para siempre de los o*os inocentes$ haciendo brillar en la aculpable la lu; de la sal"ación. 'd&n$ temblando duda en compasión. En el corderito manso ) sumiso$ presto morir en su lugar$ "e al al"ador prometido. 9on el cora;ón arrepentido$ en un esuer;o doloroso$ cla"a el cuchilde piedra en el pecho del animalito que perece en sus manos sin siquiera dar un gemido. El poder de la nochinmediatamente es abatido por el brillo del uego de la aceptación. u lu; re"ela al ser humano su tr&giccondición: 6iendo las manos manchadas por la sangre inocente$ la pare*a se siente culpable por aquella muerte.0 En llanto se arrodillan ante el altar que )a no les reclama sangre$ sino orece lu;$ aceptando el inmerecid perdón. Le"ant&ndose$ la pare*a contempla demoradamente el cuerpo herido del pobre corderito$ sin podagradecerle por la rique;a concedida a cambio de su tan rudo golpe. aados por la sua"e lu; del sacriicio$ 'd&n su compaera permanecen silentes a meditar$ hasta ser "encidos por un proundo sueo. !ecost&ndose en el suecubierto de hier"a sua"e$ adormecen dulcemente ba*o los c&lidos ra)os del perdón$ seguros de que su brillo ) calo perdurar,an hasta ser las tinieblas de aquel s&bado des"anecidas completamente por el ulgurante sol.1 La lu; del cordero$ desde que ue encendida sobre el altar en aquella noche$ permanec,a en constante guerra colas tinieblas. En "arias "eces crec,a en brillo ahu)entando a lo le*os la r,a oscuridad$ baando la naturale;a con sura)os de "ida. En "eces$ las tinieblas tra)endo su "iento r,o$ casi arrancaban por completo la llama. Esta$ siembargo$ en un gran esuer;o se alimentaba de la sangre del cordero$ lan;ando a lo alto su ardiente llaminundando de lu; ) calor todo aquello que hab,a alrededor.2 El conlicto entre la lu; nacida del sacriicio ) las tinieblas en aquella noche$ descubr,a a los ieles del 5ni"ersmuchas lecciones importantes O "erdades que ocupar,an sus mentes por toda la eternidad. O En aquella llama$ )uere ardiente en su brillo$ )a uere ustigada por los "ientos de la noche$ los ieles "e,an una representación deconlicto milenario entre el bien ) el mal conlicto que sin tregua se etender,a hasta el amanecer eterno. EEterno$ en prenda de u uturo sacriicio$ hab,a encendido en medio de las tinieblas$ la lu; de la "erdad$ ) esa ser,mantenida encendida en el cora;ón del ser humano$ en "irtud de u sangre que ser,a derramada para remisión de culpa.3 9ontra esa lu;$ el enemigo arremeter,a todos los "ientos r,os de la maldad$ desterrando del cora;ón de muchosu dulce brillo. D9u&ntos )acer,an perdidos por recha;ar la lu; del perdón di"ino$ siendo en"ueltos por las tinieblade la oscura nocheF =espus de largas horas de combate$ surge en el cielo las seales del amanecer. La oscuridaque con ira hab,a lan;ado sus "ientos sobre la llama que no muere procurando desterrarla$ se torna conusa ante laseales del amanecer. El cielo teido de un ro*o "i"o$ hace recordar la sangre que hab,a brotado del pecho dcordero para que la llama del perdón pudiese iluminar la noche humana. En medio del colorido de sangre$ surge en el hori;onte el ulgurante sol$ tra)endo en sus calientes ra)os el sabode la "ictoria$ en"ol"iendo todo con su "ida. El amanecer en su nost&lgico aecto$ acaricia el distante para,slle"ando de su amado seno en su brisa matinal el aroma de la nostalgia$ en un mensa*e de consuelo ) esperan; para las criaturas suridoras del "alle de la muerte. aados por los c&lidos ra)os ) por la brisa de la esperan;a$ pare*a despierta en un s&bado m&s$ cu)o simbolismo apunta hacia el descanso en el reino de =ios$ al culminar gran conlicto entre la lu; ) las tinieblas.P M&s all& de aquel altar cubierto de ceni;as$ 'd&n ) E"a contemplan demoradamente el nost&lgico para,so'unque distantes en su eilio$ se alegran con la certe;a de que el sacriicio del Mes,as har& ra)ar para ellos es&bado de s&bados: aqul de l&grimas para siempre desterradas de sol siempre a brillar en un l,mpido cielo dcorderos siempre "i"os a *ugar por el csped d,a sin anochecer$ cuando no habr& m&s altar cubierto de sangre ceni;as. uspiran por ese d,a de gloria$ cuando =ios e har& eternamente "isible$ lle"ando en las manos las marcade u ininito amor por us hi*os.I 'ntes de la ca,da$ el ser humano$ as, como todas las huestes celestiales$ aprend,an a los pies del 9reador que co paciencia les enseaba los tesoros de la sabidur,a contenidos en el "asto compendio de la naturale;a. 7odo en 5ni"erso$ desde el diminuto &tomo hasta el ma)or de los mundos$ testiicaba en su perecta eistencia del car&ctdel di"ino !e). Muchas ensean;as$ sin embargo$ permanecieron ocultas en las p&ginas de ese gran libro en per,odo que antecedió a la ca,da: Eran como las estrellas que$ ocultas durante el d,a$ re"elan su brillo al ba*ar lsombras de la noche.



+ 7eniendo la naturale;a cauti"a$ el enemigo$ en el intento de bloquear la re"elación de la Eterna sabidur,introdu*o en ella manchas de ego,smo$ destrucción$ inelicidad ) muerte. <o sab,a que esas manchas har,ae"idenciar en la a; de la creación la proundidad de la *usticia ) amor de =ios$ lle"ando a los ieles a amarlo re"erenciarlo a#n m&s. >ara la pare*a$ as, como para todos los hi*os de la lu;$ la naturale;a herida rompió su "elore"elando nue"os aspectos de la bondad del 9reador ocultos hasta entonces.Q 'd&n ) E"a que estaban acostumbrados a las lores eternas en el para,so$ aquellas que no las "ieron desabotonalas "e,an ahora surgir en tiernos botones$ en medio de las amena;as de espinos prontos a herirlas. Esas tiernalores$ sin importarse estar con los espinos$ ehalaban perumes sua"es de alaban;a ) gratitud$ *am&s cans&ndode agradar el ambiente. 9uando ustigadas por los r,os "ientos de la noche$ esas lores no se resent,an$ sino quorec,an su aroma$ que transormaba la uria de los "ientos en brisas perumadas de un amanecer.H Mo"idos por prounda gratitud$ la pare*a acompaaba atentamente el ministerio de amor de aquellas lores qu *am&s se cansaban de bendecir$ oreciendo su belle;a ) perume como ali"io para aquellos que eran heridos por lorudos espinos. 'quellas lores singulares ) puras$ despus de mostrar en su corta "ida que el perdón ) el amor som&s uertes que todos los "ientos ) espinos$ en un #ltimo esuer;o de comunicar alegr,a$ ehalaban su perumca)endo marchitas ) sin "ida sobre el suelo r,o. 'll,$ ol"idadas$ se transormaban en insigniicante pol"o que edispersado por el "iento.P0 La muerte de las lores$ aunque pareciese racaso$ re"eló a la pare*a el misterio del renacimiento de la "idMuriendo$ las lores daban "ida a los rutos que$ a su "e;$ despus de ser"ir de alimento$ donaban sus semillallenas de "ida. En la muerte de esas semillas$ renac,a el milagro de la "ida$ multiplicando los &rboles con sus lorelistas a repetir la ensean;a del amor ) del sacriicio. La naturale;a$ por tanto$ incluso manchada por el pecadre"elaba el misterio oculto del plan de la redención. 9ada lor a desabotonar en medio de los espinos$ en su cor"ida de amor$ era un s,mbolo del al"ador que nacer,a entre los espinos de la maldad$ para consolar con su perumel cora;ón de los aligidos.P1 eme*ante a la lor$ el Mes,as despus de probar que el amor ) el perdón son m&s uertes que todos los "ientdel odio que la "erdad ) la *usticia del reino de =ios son ma)ores que todos los engaos e in*usticias del reino denemigo$ "erter,a la sal"ia de su "ida$ muriendo para redimir a los culpables.

C-,tulo H

d5n y -!a dedicados al traba0o edificante" La colina lleg$ a ser una miniatura del -dén" 6rotecci$n y cuidadodi!inos" -xperiencias al obedecer el mandamiento sobre el sacrificio" La astuta trampa del enemigo, mirar hacilos símbolos del sacrificio como portadores de perd$n y !ida" d5n y -!a ofrecen sacrificios al Señor, el -terno sles manifiesta consol5ndolos y pre!iniéndolos del peligro" 6romesa del nacimiento de su primogénit <esponsabilidades hacia su hi0o" Bacimiento de Caín" -l nacimiento de Caín les recuerda la promesa del futurnacimiento del %esías" La niñez rebelde de Caín" -l enemigo se burla del sufrimiento de 4ios y Sus fieles e intenthacer desistir a 4ios de Su plan de redenci$n" -l -terno afirma Su solemne promesa" d5n y -!a hacen sacrificio y ruegan por su hi0o, el -terno se les manifiesta" -l -terno se re!ela a Caín y le narra la historia de Lucifer y deSol" 6romesa del nacimiento de bel" Caín, al igual ue Lucifer, es arrastrado por su orgullo a una falsa ilusi$n 4ios procuraría todas las formas a fin de sal!ar a Caín

1 9onsolados por las re"elaciones de la naturale;a$ 'd&n ) su compaera$ alumnos en la escuela del surimientaprend,an cada d,a a amar m&s al al"ador. 9rec,an en sabidur,a$ humildad ) santidad. 7odas las "irtuddestruidas por el pecado$ renac,an en el cora;ón. 9on &nimo la pare*a se dedicaba al traba*o ediicante: plantaba *ardines que por el poder de =ios se llenaban de perumadas lores ) deliciosos rutos. u hogar en el eilio con"ert,a en un reugio para los animales perseguidos de los "alles. La colina$ ba*o la protección de los &ngeles dla lu;$ se con"irtió en una miniatura del Edn distante. Entre los animales reunidos ) domados con amor$ hab,amuchas o"e*as.2 'd&n ) E"a no consegu,an poner los o*os sobre esos dóciles animales destinados al sacriicio$ sin probar en l proundo del alma una me;cla de dolor ) gratitud. En la noche que anteced,a a cada s&bado$ 'd&n ten,a$ por ordedel 9reador$ el repetir el doloroso acto. D9u&nta amargura ) arrepentimiento sobre"en,an a la pare*a al descendlas tinieblas de la noche del sacriicioF D9u&nto consuelo les tra,a la llama del perdón que *am&s hab,a de*ado d



brillar sobre el altar$ en aquellas noches pre igurati"asF El decisi"o "alor del sacriicio$ para que la "ida pudielorecer ba*o la protección di"ina$ lle"ó a la pare*a a "alori;ar inmensamente a su pequeo rebao.3 9ada seto d,a$ no obstante$ comen;ó a traer consigo$ m&s all& del dolor$ una inquietud: O B%uin donar& ssangre al altar cuando la #ltima o"e*a pere;caCO ' los o*os de la pare*a mara"illada$ aconteció al in el milagro damor$ reno"&ndoles la esperan;a de "i"ir otras semanas ba*o el brillo de la llama del perdón: una o"e*a$ la m&gorda de ellas$ comen;ó a sangrar como en sacriicio =e su dolor$ les nacieron cuatro corderitos. Llenos de alegr) gratitud$ 'd&n ) E"a se postraron ante el al"ador in"isible$ teniendo en las manos aquellas nue"as criaturitaque tra,an en sus o*os la misma ternura ) disposición para el sacriicio. eguros de que nue"os milagros multiplicar,an sus d,as$ la pare*a unió su "o; como antes$ en un c&ntico dgratitud ) adoración al 9reador que$ como los corderitos nacer,a tambin del dolor para cumplir en su "ida ma)or de todos los sacriicios$ para la sal"ación de la humanidad. El Eterno$ aunque in"isible a los o*os de uhi*os humanos$ permanec,a mu) cerca$ acompaado por un e*rcito de &ngeles$ en incansable ministerio de cuidad) protección. La pare*a estaba inconsciente de que la dulce calma ) pa; reinantes en aquella colina$ as, como todsu prosperidad$ eran rutos de tan intensa lucha.P i sus o*os uesen abiertos hacia las escenas que ocurr,an in"isibles$ ser,an arrebatados de espanto D9u&n terriblera el enemigo ) sus huestes en sus constantes in"estidas con el propósito de arruinar al ser humano$ arrebat&ndode las manos del 9readorF 6iendo que el empleo de la uer;a no le redundar,a en "ictoria$ el enemigo en su astuciideali;ó una trampa con la cual pudiera enla;ar a la pare*a. !euniendo a sus e*rcitos$ les re"eló sus planediciendo: OJ'l ser humano le ue ordenado sacriicar corderos$ como s,mbolos del al"ador "enidero.I Los tentaremos a mirar hacia esos s,mbolos como portadores de perdón ) "ida$ hacindolos poco a poco ol"idla realidad del sacriicio prometido por =ios. er& un proceso lento$ pero de una "ictoria segura8. O El 9readconociendo el peligro de esa trampa$ se entristeció$ pues al mirar hacia el uturo$ pudo "er a tantos hi*os u)osiendo des"iados del camino de la sal"ación. D9u&ntos se apegar,an a los s,mbolos *u;gando encontrar en ello"irtudF =ios en su amor ) cuidado$ no los de*ar,a inconscientes del peligro que los amena;aba.+ ab,a Nl cu&nto 'd&n ) su compaera amaban a aquellos corderos que$ al morir sobre el altar$ les orec,an lu;calor. A&cilmente podr,an ser inducidos a "erlos como uentes de "ida ) lu;$ comen;&ndolos a re"erenciar. Muchasemanas )a hab,an pasado$ tra)endo consigo las noches de dolor ) sacriicio$ seguidas por los d,as de esperan;a nostalgia de 'qul >adre carioso$ el cual despus de hacerles promesas ) secar sus l&grimas$ e hab,a tornadin"isible delante de sus o*os. 9ada d,a que pasaba$ tra,a a la pare*a una nue"a carga de nostalgia$ hacindoloindagar en cada atardecer: O B9u&ndo besaremos nue"amente u a;C DB9u&ndo seremos en"ueltos por u bra;os$ caminando ba*o la lu; de u amorCF O D9u&nta nostalgia sent,an de aquellas noches ednicas$ cuandadormec,an en el sua"e rega;o de su di"ino >adreFQ 5na semana m&s de traba*o ) lecciones aprendidas estaba inali;ando. El sol en su declinar anunciaba otra nochde arrepentimiento ) de sangre inocente a baar el altar. La silente pare*a estaba le*os de imaginar que en esnoche$ el doloroso golpe que siempre era seguido por el uego$ les re"elar,a la a; bendita del >adre. 9on las manoestremecidas$ 'd&n le"antó al cordero que$ mudo$ no hi;o ninguna resistencia al ser colocado sobre el altaL&grimas rodaron en su rostro al pensar que un inocente animal m&s se ;ambullir,a en las odiadas tinieblas de muerte$ para generar la lu; con su sangre.H Es doloroso sacriicar$ mas no ha) otro camino de sal"ación. Snicamente a tra"s de la sangre derramada dcordero$ podr&n "i"ir para contemplar en el uturo la a; del >adre. En un penoso esuer;o 'd&n hace caer aquell piedra puntiaguda sobre el corderito que$ en un gemido de dolor derrama su sangre. 5na Lu; gloriosa pronto disiplas tinieblas inundando toda la colina con sus ra)os de "ida. ' tra"s de las l&grimas la pare*a entonces contempen medio del uego del altar$ al 9reador. En un gesto de amor$ =ios abre us bra;os como antes$ ) con una sonriscamina hacia el tan anhelado abra;o.10 in encontrar palabras que epresen su inmensa nostalgia$ la pare*a se lan;a a u pecho ) llora amargamente. Edi"ino >adre$ conmo"ido$ tambin llora$ mas procura consolar a sus hi*os$ con su dulce sonrisa. 9on emoción l pare*a contempla la a; del >adre$ en"ol"indola con besos ) carios. El amor de ellos por Nl hab,a sidintensiicado por el surimiento. 'gradecidos ) elices$ caminan al lado del 9reador$ mostr&ndole los *ardincargados de lores ) rutos. Le cuentan de las lecciones aprendidas *unto a la naturale;a Le muestran el rebadomado por el aecto.11 Gluminados por la sua"e lu; del Eterno >adre$ la pare*a se sienta a us pies como antes$ para o,r us ensean;aEl 9reador$ mir&ndolos con ternura$ pasa a ad"ertirlos del peligro. rient&ndolos acerca de los sacriicios dcorderos$ que eran importantes en el sentido de mantener siempre en la mente la certe;a de un al"ador "enide



que$ como los corderos$ ser,a sacriicado para redención de los pecadores. Los corderos$ sin embargo$ no pose,en s, poder para perdonar las culpas$ pues consist,an apenas en s,mbolos del Mes,as !e).12 =espus de ser ellos concienti;ados del peligro de apegarse a los s,mbolos buscando encontrar en ellos sal"ación$ la pare*a recibió la incumbencia de transmitir esas orientaciones a sus descendientes. =espus dad"ertir al ser humano$ el 9reador colocó la mirada sobre las o"e*as que )ac,an dormidas *unto a su cr,a$ eclamó: O D9u&n bellos son los corderitosF O La pare*a$ en una me;cla de elicidad ) dolor agregó: O DEllocuando est&n despiertos saltan de placer$ ol"idados de que al nacer ) al morir causan tanto dolorFO 13 =espus de contemplar a los corderitos$ =ios miró a la pare*a con ternura$ re"el&ndoles algo que los sorprendi) alegró: O9uando de stos corderos treinta ) seis ha)an subido al altar$ "uestros bra;os en"ol"er&n al primer hi*que$ como ellos surgir& tambin del dolor. Ese hi*o en su inancia les traer& alegr,a saltando como los corderitos e"uestro hogar. =eberis instruirlo con dedicación en las le)es de la armon,a$ mostr&ndole el camino de lredención. 9omo "osotros$ l ser& libre para escoger el rumbo a seguir. 'ceptando la ensean;a$ su "ida ser"ictoriosa recha;&ndola$ caminar& hacia la derrota.1 'd&n ) E"a o)eron con alegr,a la promesa di"ina$ pero al mismo tiempo eperimentaron en lo proundo del sun temor al concienti;arse de la responsabilidad que tendr,an. ab,an que atan&s har,a todos los esuer;os palle"ar al nio prometido a la perdición. Era alta noche cuando el 9reador$ despus de acariciar a sus hi*os$ los de*dormidos sobre el sua"e csped. =espus de la promesa$ cada corderito lle"ado al altar hac,a latir m&s uerte en e"ientre materno la esperan;a de la alegr,a que en bre"e alcan;ar,an.1P 7reinta ) seis inalmente descendieron a las tinieblas cumpliendo el tiempo determinado por el 9reador en quel primer nio recibir,a la lu;. 9on las manos toda",a manchadas por la sangre del sacriicio$ 'd&n amparó a sesposa que$ a los pies del altar se postró "encida por el dolor que le tra*o el primer hi*o. El pequeo nio no tra,a ela cara la alegr,a de la libertad$ sino el llanto de su prisión Ese llanto durar,a la noche entera$ si no uese por e brillo de aquella llama ardiente de esperan;a que$ pronto atra*o la atención de sus o*itos atentos. En"ol"indolo coalegr,a$ E"a consolada de su surimiento$ di*o: 8'lcanc del eor la promesa8. Le dio entonces el nombre de 9a,1I =espus de en"ol"er al beb con las pieles sua"es de un cordero$ la pare*a permaneció despierta a meditaMuchos eran los pensamientos que ocupaban sus mentes: pensamientos de alegr,a$ de gratitud$ de esperan;a ) danhelo por el sentido de la responsabilidad que ahora pesaba sobre sus hombros. 'cariciando con ternura pequeo nio$ la pare*a maduró en su eperiencia$ comprendiendo me*or el misterioso amor de =ios que$ pasal"ar a us hi*os$ e dispuso a morir en lugar de ellos.1+ 'd&n ) E"a no estaban solos en sus releiones: todos los seres inteligentes del 5ni"erso consideraban cointers el uturo de aqul indeenso beb que en el interior pose,a un reino de dimensiones ininitas$ al sdisputado por los dos poderes en lucha. DB%uin ser,a el eor de su "idaCF DB9aminar,an sus pies por el caminascendente que lle"a a la "ida$ o la ruta descendente que termina en el abismo de una muerte eternaCF 6iendo anio esbo;ar su primera sonrisa$ la pare*a s#bitamente se acordó de la promesa del 9reador que era conirmada ecada sacriicio: Nl nacer,a de la mu*er como nio$ con la misión de redimir a la humanidad.1Q B<o ser,a 9a,n )a el cumplimiento de la promesaC DEl inante con sus o*itos brillantes de alegr,a se parec,a tanta los corderitos que nac,an ) crec,an con la misión de ser sacriicadosF 9onsiderando as,$ la pare*a apretando al hi* *unto al pecho comen;ó a llorar sin consuelo. D9u&n terrible$ ser,a orecer a su hi*o inocente al rudo altarF >ara pare*a compungida por el dolor$ apareció al in el sol brillante haciendo re"i"ir con sus c&lidos ra)os las promesque sealaban hacia un al"ador que$ toda",a en el uturo$ nacer,a tambin del dolor para cumplir el eterno plan dredención.1H endecido por el 9reador ) en"uelto por el amor ) cuidado de los padres$ el nio se desarrollaba en snaturale;a ,sica ) mental$ torn&ndose cada d,a en el ob*eti"o ma)or de una incansable batalla entre las huesteespirituales. 'd&n ) E"a$ ansiosos por hacerlo comprender las "erdades de la sal"ación$ lo tomaban en los bra;en cada amanecer )$ al borde del altar le sealaban el Edn distante$ contando aquellas historias de emoción lacuales el pequeo 9a,n toda",a no consegu,a comprender.20 9u&l ue la alegr,a de aquellos padres$ al "erlo en una maana de sol$ sealar con su manita hacia el hogar de nostalgia$ pronunciando el nombre sagrado del 9reador. Emocionados lo tomaron en los bra;os$ pidindole qurepitiera ese sublime nombre que$ cual lla"e de elicidad$ siempre les descubr,a un para,so de eterno amor. 7odalas huestes de la lu; se inclinaron con alegr,a al o,r al pequeo nio pronunciar el nombre del di"ino !e).21 Las semanas se iban pasando tra)endo consigo nue"as ",ctimas hacia el altar$ ) el pequeo 9a,n$ blanco de atención ) cuidado de =ios$ de las huestes de la lu; ) de aquellos amorosos padres incansables en la misión dinstruirlo$ agrupando sus pocas palabras$ siempre curiosas con todo comen;ó a interrogar. El d,a declinaba cuand



el muchacho$ que )ac,a en el rega;o de su madre$ le preguntó: OMadre$ B>or qu el sol siempre se "a as,$ de*anda la gente en el r,o de la oscuridadCO8E"a$ sorprendida contempló a su hi*o$ sin encontrar palabras parcontestarle la pregunta que le tra*o el recuerdo del pasado de elicidad destruido por su culpa.22 =espus de un momento de silencio$ besando la cara del pequeo 9a,n$ le di*o: OJ4i*o$ un d,a el sol "end para quedarse$ tra)endo en sus ra)os un mundo solamente de armon,a )a no habr&n animalitos para combatir$ corderitos para morir sobre el altar8O El pequeo 9a,n deseando "er ra)ar pronto ese d,a$ di*o a madre: OJMadre$ maana el sol nacer& en el para,so D>ide para que l se quedeF 's, podr *ugar$ *ugar$ ) nuncm&s dormir8. O 'nsioso en "er ra)ar el d,a que no tendr,a in$ el pequeito 9a,n solamente se durmió hastdespus de hacer a su madre prometer que pedir,a al sol permanecer.23 5n nue"o d,a de sol radiante a caminar por el cielo surgió para 9a,n$ tra)endo en sus ra)os alegr,a ) caloMientras *ugaba en el *ard,n$ sus o*itos curiosos se "olteaban muchas "eces hacia el sol que parec,a acariciarlo couna sonrisa de esperan;a. 6indolo$ sin embargo$ caminar en dirección del occidente$ el pequeo corrió hacia smadre$ pregunt&ndole: OJMadre$ BNl prometió quedarseC8OE"a$ tom&ndolo en los bra;os$ le sonrió procurandhacerlo comprender con palabras simples$mientras le sealaba el distante para,so$ la historia de la redención.2 El sol "endr,a un d,a para quedarse. 9a,n$ insatisecho con las palabras de la madre$ demostró no tener pacienc para esperar ese d,a que )ac,a en un uturo distante. !epet,a en llanto: O8Do quiero el sol ahora$ maannoF8O E"a$ pacientemente$ procuró calmar a su hi*o$ hablando sobre la lu; de =ios$ que puede con"ertir la nochen d,a. Nl lo amaba ) podr,a henchir su cora;oncito de brillo$ de alegr,a ) paciencia. >odr,a as,$ esperar eli; el d,de sus sueos. alanceando la cabecita en recha;o al consuelo de la madre$ 9a,n pronunció entre sollo;os: O8quiero al sol porque )o puedo "erlo$ al Eterno no8. O 2P 9omo una lecha dolorosa las palabras de rebeld,a de 9a,n penetraron en el cora;ón de E"a$ hacindola lloramargamente. Los ieles en todo el 5ni"erso se unieron a ese llanto. 5na triste;a ininita se cern,a sobre el cora;ódel 9reador recha;ado. e esbo;aba en los gestos de 9a,n los primeros pasos por el camino descendente de rebeld,a. D9u&ntos lo seguir,an rumbo a la muerteF Gnconsciente de la triste;a que se hab,a abatido sobre el reino dla lu;$ 'd&n$ al "er el sol declinar en el hori;onte$ de*ó su traba*o en el campo dirigindose hacia la casa.2I 7en,a un c&ntico en el cora;ón al caminar hacia un encuentro m&s con los su)os. 'l acercarse al altar$ "io *unta l a su compaera postrada en llanto. El pequeo 9a,n )ac,a all, tambin llorando. 7om&ndolo en los bra;o'd&n le preguntó con ansiedad: O8B%u sucedió hi*o m,oC8O 9a,n tristemente respondió: O8Mam& de*ó ir al stoda",a8O amparando al hi*o con su bra;o i;quierdo$ 'd&n puso su mano derecha sobre el hombro de E"a$ m&s nencontró palabras para consolarla. La rase dicha por su hi*ito$ pareció rasgarle el cora;ón$ hacindolo re"i"ir ca,da. =espus de re-leionar$ 'd&n sintindose culpable respondió a 9a,n: O8Aue pap& quien de*ó ir al stoda",a hi*o m,o8. O 2+ 9on sollo;os de gran triste;a$ 'd&n se unió a ellos en llanto. El recuerdo del al"ador$ sin embargo$ lo consolecando sus l&grimas ) las de su hi*ito$ le di*o con ternura: O8>odemos alegrarnos hi*ito$ pues =ios promethacer el sol para siempre brillar en el cielo l ser& como el uego que aparece en el altar$ epulsando a las tinieblade la noche8O. 9on los o*itos "ueltos hacia el #ltimo claro del arrebol$ 9a,n permaneció sin consuelo. En aquatardecer$ no hubo como de costumbre una alegre cena. La pequea amilia$ entristecida$ permaneció silente meditar por largas horas$ hasta que soolientos durmieron ba*o la lu; de las estrellas.2Q El enemigo ) sus huestes$ en sarcasmo de maldad se burlaban en aquella noche del surimiento de =ios ) uieles. !epitiendo las palabras de rebeld,a del pequeo 9a,n$ se *actaba como "encedor. En un desa,o al 9read pronunció: O DMira como este mi pequeo escla"o te recha;aF Lo mismo se dar& con todos aquellos que han dnacer. Esto) seguro que el derecho del dominio *am&s saldr& de mis manos. O 7odas las huestes rebelderepitieron en eco las arentas del engaador$ humillando a los s#bditos de la lu; que sur,an del lado del Etern9on sus arentas$ el enemigo procuraba hacer a =ios desistir de u plan de redención. i eso sucediese$ su reino dtinieblas se etender,a por toda la eternidad$ suplantando el dominio de la lu;.2H En respuesta al desa,o del enemigo$ el Eterno solemnemente airmó: O'unque todos me recha;aren$ cumplir la promesa. O El 9reador no soportaba el pensamiento de "er al pequeo 9a,n caminar hacia l perdición. >or l interced,a cada d,a$ oreciendo ante la *usticia u sangre que "erter,a. ngeles poderosos guardaban en cada momento$ espantando las tinieblas espirituales que lo acechaban procurando "ol"erlo insensiba los beneicios de la sal"ación$ que eran ilustrados por los s,mbolos. 'd&n ) E"a en su incansable ministerio damor$ todos los d,as enseaban a 9a,n las lecciones espirituales ilustradas en la naturale;a.30 En cada s&bado procuraban airmar en su mente *u"enil la esperan;a de una "ida eterna$ que ser,a ruto desacriicio del al"ador. Nl despus de "i"ir una "ida sin pecado$ morir,a como un cordero$ para poder epulsar pa



siempre las tinieblas. 9a,n se conmo",a a "eces con las ensean;as$ mas casi siempre cuestionaba "acilant!ebeldemente preguntaba: O DB>or qu amael se ue a rebelarCF O9ierta noche$ rehusando o,r los conse*os dsus padres$ los acusó de todo el mal diciendo: O8i ahora no tenemos un sol a brillar$ es por culpa de "osotros.8 O31 La contemplación del Edn distante baado en sol hi;o nacer en el cora;ón *u"enil de 9a,n pensamientos da"entura. Nl comen;ó a pensar: 8Este para,so no est& tan le*os como airman pap& ) mam&. DB>or qu esperar surir tanto tiempoCF DNl es tan belloF DEs de l que surge todos los d,as el solF i lo conquist&ramos$ ser& &cdetener la lu; en su uente 's, "i"iremos en un para,so de eterno sol. Las ideas de a"entura de 9a,n$ llenaron cora;ón de 'd&n ) E"a de triste;a. 6ieron que su inters era solamente por el tiempo presente l soaba con u para,so de elicidad ) lu; conquistado por su uer;a.32 En sus planes$ no sent,a la necesidad de un al"ador O B>ara qu$ si era tan *o"en$ inteligente$ lleno de "idade idealesCO as, dec,a. Los d,as de luchas$ intercesiones ) sacriicios por el destino de 9a,n se ueron pasandoportunidades preciosas para apegarse al al"ador surg,an cada d,a delante de l$ mas todas las recha;aba$ una puna. En su incredulidad llegó a dudar de la eistencia de ese =ios$ el cu&l *am&s hab,a "isto. ' los padres qualigidos pero siempre con paciencia$ procuraban librarlo de la perdición hacia la cual estaba caminando$ prometun d,a$ despus de sonre,r con aire de incredulidad$ creer en el 9reador ) en u plan de sal"ación$ si se diera caso de que Nl se "ol"iese "isible en la hora del sacriicio.33 9on ardiente e$ aquellos padres comen;aron a clamar al Eterno. u presencia "isible podr,a$ quin sabe$ sal"a aqul hi*o amado que cada d,a se "ol",a m&s rebelde. El 9reador o)ó el clamor de los padres aligidos. 'unqusab,a que su aparición di,cilmente quebrar,a en el cora;ón del *o"en 9a,n su esp,ritu rebelde$ estaba dispuestosatisacer la petición. Etender,a los bra;os amigos a 9a,n$ procurando con amor conquistarle el cora;ón.3 9omo conoc,a sus anhelos ) sueos de a"entura$ &cilmente Nl podr,a identiicarse con l$ cauti"&ndolo$ pues Ntambin era 'lguien que siempre hab,a cargado en el pecho sueos de a"entura DB<o hab,a sido la creación d5ni"erso una gran a"enturaCF DB<o hab,a sido u sueo "erlo incrustado de soles ulgurantes$ iluminando billonde mundos con su brilloCF DB<o era tambin el ma)or de los u)os atra"esar el "alle de la muerte$ en la b#squedde la conquista del Edn distante$ uniendo para siempre el sol en su cieloCF D7en,an muchas cosas en com#nF 9aestaba curioso en aquel d,a seto.3P En la a; de los padres$ "e,a el &nimo ) la alegr,a$ rutos de una e grandiosa. Estimulado por esa epresión dconian;a$ el *o"en comen;ó a a)udarles en los preparati"os para el santo s&bado. El ol inalmente se escabullrodando hacia el poniente$ de*ando como de costumbre su rastro de nostalgia que anunciaba miedo. En medio dlas tinieblas$ 9a,n discernió la igura blanca del cordero siendo le"antado hacia el altar por las manos del padre Oese incansable sacerdote que siempre estaba implorando al 9reador por la sal"ación de su amado hi*o. O 3I 9on la mano le"antada$ 'd&n se preparaba para el golpe que podr,a$ quin sabe$ romper en el cora;ón de 9asu incredulidad$ haciendo nacer en un solo momento la creencia en la sal"ación. =e sus labios se escapa entoncla plegaria de la e: O >adre Eterno$ o)e mi petición DMi hi*o precisa de 7iF DDolamente una mirada 7u)a podconquistarlo. 6en eorFF O Esta oración sincera ca)ó en los o,dos de aqul hi*o conmo"indolo. olamente plegaria )a ser,a suiciente para con"encerlo de la eistencia real de un al"ador.3+ Mientras seca las l&grimas de la emoción$ 9a,n se estremece al o,r el ruido del golpe de la muerte. 7odo ersolemne en aquel momento DB6endr,a el 9reador del mundo en respuesta a la oración de amorCF DB9ómo lencarar,a en su incredulidadCF 5n uerte brillo en"ol"ió pronto toda la colina baando tambin el "alle orientaLos o*os bien abiertos de 9a,n se posaron entonces en los o*os amables del 9reador$ que tra,a en la a; un brillsuperior al del sol$ mas no ouscante.3Q 9ontempl&ndolo con admiración$ 9a,n eclamó: O DNl es *o"en como )o$ ) se parece al olFO'd&n ) E"conmo"idos por la gran nostalgia ten,an deseos de saltar al pecho del al"ador ) besarlo$ pero de*aron que Nl sencontrase primero con 9a,n. 9on alegr,a$ "ieron al precioso hi*o en"uelto en los bra;os del gran amigo$ que er parecido a su astro. =espus del largo abra;o$ =ios abra;ó ) besó tambin a la querida pare*a$ compaeros en surimiento. 9on alegr,a$ salieron a pasear por los *ardines de la colina.3H 'l centro iba el 9reador ) 9a,n$ ) a los lados 'd&n ) su compaera. D9u&nta elicidad eperimentaban en eso pasosF Estaban completos. 9a,n$ conquistado por el aecto del >adre Eterno$ Le mostró sus animales de estimació) su pequeo *ard,n cargado de lindas lores. D9omo estaba encantado de "erlos coloridos en aquella nochdeshecha por el brillo del 9reador$ como ba*o la lu; del d,aF >arec,a hasta como si el mismo ol hubiese ba*adoellos. 'l pensar en el ol$ 9a,n como lo amaba mucho$ comen;ó a hablar sobre l diciendo: O D9omo l es bello buenoF 9uando l se "a no obstante$ de*a en sus l&grimas de sangre un sentimiento de triste;a ) temor.



0 7odo desaparece en su ausencia: los animales$ el *ard,n Dhasta los pa*arillos silencian sus cantosF... >ero basta l decir que "a a aparecer )$ todo se llena de encanto La naturale;a se despierta de su mansedumbre$ pareciendtoda",a temer a las tinieblas$ mas cuando las "e huir$ permanece alerta ) canta DLos animales$ los pa*arillos$ e *ard,n$... todo "uel"e a un eli; "i"irF DDDMas$ esta elicidad siempre acabaFFF O 1 =espus de hablar estas palabras$ 9a,n mirando al 9reador indagó curioso: O>ap& siempre dice que uiste quien creó al ol. BEs "erdadCO 9on una sonrisa de sinceridad =ios le contestó que s,.O B9uando t# le hiciste eel principio$ con-tinuó 9a,n$ l )a hu,a hacia el ponienteCO ONl nunca hu)e$ respondió el Eterno$ es el mundquien hu)e de l. DNl esta triste con esa ingratitudFO O B>ero cómoCO >reguntó 9a,n$ contemplando curioso a; de lu;. 9on palabras cariosas$ =ios comen;ó a contarle la historia de Lucier que$ en su ingratitud desterró dsus o*os ) de los o*os de una multiplicidad de criaturas$ el brillo de u a; Oel ol 6erdadero. O 2 =espus de actuar as,$ engaó a muchos diciendo que el ol era quien hu,a de ellos. 9on su astucia$ continuó 9reador$ el &ngel rebelde procuró arrastrar al ser humano hacia las tinieblas$ ) lo consiguió. El ol en aquel d,lloró tantas l&grimas de sangre$ que baó todo el cielo. En su #ltimo suspiro de lu;$ sin embargo$ l le prometió amundo )a arrebatado por las tinieblas$ "ol"er un d,a a brillar para siempre$ llenando todo su seno de "ida.3 =espus de decirle estas palabras$ el Eterno mirando a aquel *o"en$ con epresión de triste;a en los o*oconclu)ó diciendo: O4o)$ el &ngel rebelde promete a sus seguidores que ir& con su uer;a a detener el sol$ pero *am&s conseguir& reali;ar ese plan$ pues no posee el la;o que podr,a detenerlo: el amor. O 9abi;ba*o$ 9a,n o)ó dlos labios del 9reador esa historia de promesas$ la cual )a se hab,a cansado de o,r de sus padres. Esa historia no daba placer$ pues mostraba una noche larga de sacriicios sobre el altar$ ) de un al"ador a perecer en dolor. En realidad$ 9a,n no "e,a ra;ones para todo eso. DB>orqu no desterrar le*os el surimiento coloreando ltinieblas de lu;CF En un esuer;o de conquistarlo$ el Eterno con mucho amor miró a aqul *o"en insatisecho$ ) di*o que$ solamente la sangre de u sacriicio podr,a hacer al ol brillar para siempre$ en un reino de eternelicidad ) pa;. <o hab,a otro camino para esa conquista. >or ello$ deber,a ser paciente$ descansando ba*o cuidado.P =espus de con"ersar por largo tiempo con 9a,n$ en la tentati"a de hacerlo reconocer su necesidad de sal"acióahh "olte&ndose hacia la pare*a$ comen;ó a consolarlos con la promesa del nacimiento de otro hi*o. 7reinta seis sacriicios m&s ser,an contados$ ) sus bra;os en"ol"er,an al segundo hi*o. <acer,a tambin del dolor$ matraer,a en los o*os el brillo ) el consuelo de la sal"ación. u testimonio de idelidad ser,a perpetuado por todas lageneraciones$ en el s,mbolo de un altar cubierto de sangre. Las semanas se iban pasando$ tra)endo a la pare*nue"as de alegr,as ) triste;as: de un cora;ón lleno de "ida a latir en el "ientre de E"a$ ) de un "ac,o con olor dmuerte a crecer en el cora;ón del *o"en 9a,n.I 'unque l se hab,a deslumbrado ante la maniestación de =ios$ esa aparición en nada le cambió su manerarrogante de pensar sobre el sentido de la "ida. Nl no "e,a sentido en los sacriicios orecidos en el altar. En los d,aque siguieron a su encuentro con el 9reador$ l argumentaba con sus padres diciendo: Oi )o uese poderocomo el Eterno$ )o *am&s me someter,a al sacriicio para reconquistar el reino perdido. Nl es uerte$ ) brilla comel sol. Nl podr,a con una sola palabra epulsar todas las tinieblas$ de"ol"indonos el para,so.+ DB>ara qu tanto surimientoCF O 9on ese argumento$ 9a,n se supon,a m&s sabio que el 9reador. %uin sabe sen un próimo encuentro tendr,a oportunidad de aconse*arlo. =e esa orma$ el *o"en 9a,n se sumerg,a cada "em&s en el abismo del orgullo ) del ego,smo Olugar de ilusiones hacia donde se dirig,a$ O pensando estcaminando hacia la "ictoria. DB<o hab,a sido Lucier *unto con un tercio de las huestes celestiales atra,dos por esmisma ilusiónCF El =ios bondadoso$ toda",a$ no sellar,a el destino de 9a,n sin antes procurar de todas las ormsal"arlo de la ruina eterna.Q Esa gracia inmerecida$ ruto del di"ino amor$ ser,a concedida a todo el ser humano que "iniese a nacer en smundo.

el libro de melquisedec

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