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Universiteit Gent Faculteit Letteren & Wijsbegeerte Academiejaar 2012-2013 El espionaje femenino entretejido con la historia europea del siglo XX en la novela española contemporánea Un estudio comparativo de El tiempo entre costuras (2009) de María Dueñas y Dime quién soy (2010) de Julia Navarro Masterproef ingediend tot het behalen van de graad van Master of Arts in de Taal- en Letterkunde: Latijn-Spaans door Dorien Boermans Promotor: Prof. Dr. Elizabeth Amann

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  • Universiteit Gent

    Faculteit Letteren & Wijsbegeerte

    Academiejaar 2012-2013

    El espionaje femenino entretejido con la

    historia europea del siglo XX en la novela

    española contemporánea

    Un estudio comparativo de El tiempo entre costuras (2009) de María Dueñas y

    Dime quién soy (2010) de Julia Navarro

    Masterproef ingediend tot het behalen van de

    graad van Master of Arts in de Taal- en

    Letterkunde: Latijn-Spaans

    door Dorien Boermans

    Promotor:

    Prof. Dr. Elizabeth Amann

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  • 3

    Agradecimientos

    En primer lugar, doy las gracias a mi directora de tesis, la profesora Elizabeth Amann, por los

    consejos y la libertad que me dio durante el proceso de escritura, al igual que por el libro que

    me prestó. Asimismo quisiera agradecer a Carlos Gutiérrez García y a Raquel Escobar

    Molina, por haberme ayudado con la corrección de la gramática española y por ser los

    lectores críticos que necesitaba. Además de esto, estoy agradecido a mis padres, y en

    particular a mi abuela, por siempre haber confiado en mis capacidades y por haberme apoyado

    realizar mis estudios a la Universidad de Gante.

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    Caminante, son tus huellas

    el camino, y nada más;

    caminante, no hay camino,

    se hace camino al andar.

    Al andar se hace camino,

    y al volver la vista atrás

    se ve la senda que nunca

    se ha de volver a pisar.

    Caminante, no hay camino,

    sino estelas en la mar.

    Antonio Machado, Proverbios y cantares XXIX (1912)

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    Índice

    1. INTRODUCCIÓN ......................................................................................................................... 6

    2. PRESENTACIÓN DE LAS NOVELAS Y DE SUS AUTORAS ............................................... 9

    2.1. EL TIEMPO ENTRE COSTURAS .................................................................................................... 9

    2.1.1. Sira Quiroga: entre espía y modista .................................................................................. 9

    2.1.2. María Dueñas ................................................................................................................... 10

    2.2. DIME QUIÉN SOY ..................................................................................................................... 11

    2.2.1. Amelia Garayoa: espía, amante y aventurera.................................................................. 11

    2.2.2. Julia Navarro ................................................................................................................... 12

    3. ANÁLISIS COMPARATIVO .................................................................................................... 15

    3.1. LAS AUTORAS ......................................................................................................................... 15

    3.1.1. Formación, generación y género ..................................................................................... 15

    3.1.2. El papel del espionaje ...................................................................................................... 17

    3.2. LA DEFINICIÓN DE LOS PERSONAJES ....................................................................................... 20

    3.2.1. Las protagonistas: Sira vs Amelia ................................................................................... 20 3.2.1.1. Formación ................................................................................................................................................. 20 3.2.1.2. Carácter ..................................................................................................................................................... 23 3.2.1.3. Relaciones con los hombres ...................................................................................................................... 34

    3.2.2. Personajes secundarios .................................................................................................... 41 3.2.2.1. Los personajes ficticios en El tiempo entre costuras ................................................................................. 41 3.2.2.2. Personajes eclécticos en Dime quién soy ................................................................................................... 44

    3.3. EL ESPACIO ............................................................................................................................. 48

    3.3.1. Escenarios en El tiempo entre costuras ........................................................................... 48 3.3.1.1. El Norte de África: ¿exotismo? ................................................................................................................. 48 3.3.1.2. Madrid y Lisboa ........................................................................................................................................ 51 3.3.2. Paneuropeísmo en Dime quién soy ............................................................................................................... 53

    3.4. LA RELACIÓN ENTRE LA TRAMA Y LA HISTORIA ..................................................................... 57

    3.4.1. Contexto histórico: la neutralidad española en la Segunda Guerra Mundial ................. 57

    3.4.2. Aparición de personajes históricos en El tiempo entre costuras ..................................... 58 3.4.2.1. Juan Luis Beigbeder y Atienza .................................................................................................................. 58 3.4.2.2. Rosalinda Powell Fox ................................................................................................................................ 60 3.4.2.3. Alan Hillgarth ............................................................................................................................................ 62

    3.4.3. Perspectiva: elección del período histórico ..................................................................... 63 3.4.3.1. El tiempo entre costuras: la Guerra Civil vista desde África y la Segunda Guerra Mundial en España .... 63 3.4.3.2. Dime quién soy: inserción de tres hitos en la historia del siglo XX ........................................................... 65

    3.5. ESTRATEGIAS NARRATIVAS .................................................................................................... 68

    3.5.1. La estructura, el tiempo narrativo y el uso de una yo-protagonista en El tiempo entre

    costuras ......................................................................................................................................... 68

    3.5.2. Narración marco y pluralidad de perspectivas en Dime quién soy ................................. 70

    4. CONCLUSIÓN ............................................................................................................................ 73

    5. BIBLIOGRAFÍA ......................................................................................................................... 76

  • 6

    1. Introducción

    En los años 2009 y 2010 se publicaron en España dos novelas que tuvieron un gran éxito en

    las listas de venta: El tiempo entre costuras, de María Dueñas, y Dime quién soy, de Julia

    Navarro. Inmediatamente se convirtieron en best-sellers y fueron traducidas a varias lenguas,

    extendiéndose al extranjero, donde también fueron bien recibidas. ¿Cuál fue la razón de este

    impresionante éxito? Se puede considerar que las cautivadoras tramas han tenido un papel

    fundamental en la valoración positiva de las obras. Ambas novelas tratan del espionaje en la

    convulsa época del siglo XX y, por encima de todo, están protagonizadas por dos valientes

    mujeres que viven aventuras apasionantes. El espionaje es el tema central de ambas novelas y

    resulta relevante que sean dos mujeres españolas las autoras de las mismas. La novela de

    espionaje siempre ha tenido mucho éxito: la trama intrigante, los personajes misteriosos y el

    fondo de los servicios secretos contribuyen a una lectura interesante para el gran público.

    Pensemos por ejemplo en el éxito del espía más famoso en la literatura y en el cine, el

    británico James Bond. El interés en el género únicamente decayó tras de la Guerra Fría, pero

    los ataques terroristas de este siglo devolvieron al lector el interés por profundizar en el

    mundo del espionaje. Así, el éxito del espionaje, contado a través de la novela, ha irrumpido

    con fuerza entre los lectores. En el caso de la literatura española, no es fácil asociar el

    concepto del espionaje con autores españoles. Sin embargo, veremos en nuestro trabajo que

    España sí fue bastante importante en las misiones de los espías e incluso ocupa un papel

    fundamental en nuestras novelas elegidas. Además, si pensamos en la Segunda Guerra

    Mundial o en la Guerra Fría, tampoco pensamos inmediatamente en España. Es cierto que

    este tema no es habitual en la literatura española; sin embargo, Dueñas y Navarro muestran

    que sí es posible: insertan en sus obras la época más convulsa de nuestra historia reciente, a

    través de dar la voz a espías femeninas que están rodeadas por trampas, secretos y personas

    misteriosas.

    Es llamativo que estas autoras escribieran sus novelas con unas tramas tan parecidas, motivo

    por el cual nos pareció interesante profundizar en ellas. Así, este estudio gira en torno a un

    análisis comparativo entre El tiempo entre costuras y Dime quién soy. Merece la pena

    comparar cómo las tramas de ambas novelas se parecen y cómo difieren. Además es

    interesante ahondar en cómo estas autoras presentan la historia de aquella época y qué

    recursos literarios emplean para dar forma a sus novelas originales.

    A modo de introducción ofreceremos un resumen de las novelas, así como la presentación de

    sus autoras. Puesto que se trata de novelas muy extensas, no seremos capaces de ofrecer un

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    resumen detallado, no obstante, en ocasiones, tendremos que explicar una parte del contenido

    para que el análisis sea comprensible.

    El primer capítulo del análisis contiene una comparación entre las autoras, que, como

    veremos, comparten muchas semejanzas. Aparte del hecho de que ambas escribieran sobre el

    tema del espionaje, también observamos analogías en cuanto a su formación, su generación y

    su género. Luego pasaremos a la comparación propiamente dicha entre las novelas,

    empezando con el capítulo más extenso, es decir la definición de los personajes. Primero

    estudiaremos a las protagonistas de nuestras novelas, Sira Quiroga y Amelia Garayoa.

    Investigaremos su formación, su carácter y sus relaciones amorosas para ver en qué medida

    difieren y cómo esto afecta al desarrollo de la trama. La segunda parte de la comparación de

    los personajes consiste en el estudio de los personajes secundarios. Veremos que también en

    este aspecto podemos encontrar algunas semejanzas llamativas entre ambas novelas. Nos

    limitaremos a los personajes más significativos, puesto que no todos son importantes para

    nuestro análisis.

    En el siguiente capítulo nos centraremos en el espacio de ambas novelas, lo que es un aspecto

    de suma importancia. Ambas autoras escogieron escenarios muy específicos para desarrollar

    sus novelas: Dueñas utilizó el ambiente exótico de Marruecos, mientras que Navarro describió

    un número copioso de lugares en su trama. En este capítulo examinaremos por qué las autoras

    eligieron justamente estos lugares y qué efecto tuvieron éstos dentro de la trama.

    En nuestro penúltimo capítulo discutiremos la relación entre la trama y la historia en ambas

    novelas. Como veremos, las autoras coinciden en algunos aspectos en cuanto a la

    representación de la historia, pero no en todos. Ambas abordan la Guerra Civil y la Segunda

    Guerra Mundial, pero observaremos que no siempre lo hacen de la misma manera, así que

    tendremos que matizarlo. Además, Navarro incluye un periódo histórico más amplio en su

    trama, ya que también escribe sobre la Guerra Fría en su obra. Asimismo estudiaremos la

    aparición de unos personajes históricos en El tiempo entre costuras, una particularidad que

    distingue esta novela de Dime quién soy. Otro objeto de estudio en este capítulo será la

    comparación de las perspectivas en ambos libros: ¿cuáles son los puntos de vista frente al

    periódo histórico y por qué las autoras escogieron esta perspectiva?

    En nuestro último capítulo, el más breve, trataremos la comparación de las estrategias

    narrativas: ¿qué recursos literarios están presentes en las novelas y cómo sostienen la trama?

    Con ese apartado terminaremos nuestro análisis comparativo.

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    Antes de empezar con nuestro estudio, conviene destacar que no somos capaces de elaborar

    todos los datos que aparecen en nuestras obras elegidas. Dado que se trata de dos novelas muy

    extensas, tendremos que delimitar nuestro tema de investigación, aunque generalmente sí

    podremos ofrecer un análisis completo, centrándonos en los elementos más fundamentales de

    ambos libros. Sin embargo, siempre hay que tener en cuenta que existen otros datos

    interesantes que, por falta de espacio y de importancia, no podemos incluir en nuestro estudio.

    Ahora pasamos a la primera parte de nuestro trabajo, es decir la introducción general a las

    novelas y a sus autoras.

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    2. Presentación de las novelas y de sus autoras

    2.1. El tiempo entre costuras

    La primera novela que utilizaremos en este análisis se titula El tiempo entre costuras (2009),

    escrita por la autora María Dueñas. En este primer apartado presentaremos un breve resumen

    del contenido, seguido por unas notas sobre la autora y el éxito que ha tenido con su novela en

    los últimos años.

    2.1.1. Sira Quiroga: entre espía y modista

    El tiempo entre costuras narra la historia de Sira Quiroga, una joven modista madrileña que

    vive tranquilamente con su madre y su novio Ignacio en los meses previos a la Guerra Civil.

    Un día conoce a un hombre encantador, Ramiro Arribas, por el cual decide dejar a su novio.

    Viviendo una vida de lujo al lado de su nuevo amor, se deja convencer para acompañarlo a

    Marruecos. Se trasladan a Tánger y posteriormente a Tetuán, la capital del Protectorado

    Español (cf. 3.3.1.1.). En poco tiempo se descubre el carácter de Ramiro, un mero charlatán

    quien abandona a Sira, dejándola sola y embarazada en un país desconocido. Después de

    haberse recuperado de este abandono, además perdió al hijo que esperaba, Sira es recibida en

    la pensión de Candelaria, con la que mantiene un vínculo estrecho durante su estancia en

    Marruecos. Gracias a esta mujer, Sira logra fundar un taller de alta costura en Tetuán para

    obtener ingresos. Rápidamente se convierte en la modista preferida de las mujeres de la clase

    alta de Tetuán, incluso de la británica Rosalinda Powell Fox, la amante del Alto Comisario

    Juan Luis Beigbeder (cf. 3.4.2.). Entretanto ha comenzado la Guerra Civil en España y Sira

    está preocupada por su madre, quien todavía vive en Madrid. Gracias a Rosalinda, se conoce

    al periodista británico Marcus Logan, que ayuda a trasladar a la madre de Sira a Marruecos.

    Pronto Sira siente atracción por este hombre amable, pero un romance entre ellos resulta

    imposible: él debe volver a su país y, después de la guerra, Sira también volverá a Madrid.

    Una vez allí, abre un nuevo taller, a petición de Rosalinda, para recibir a las esposas de

    alemanes influyentes. La tarea de Sira consiste en escuchar sus conversaciones y transmitir la

    información relevante a una persona de contacto. En otras palabras, Sira se convierte en una

    espía para los británicos, un cargo que implica mucha responsabilidad. Al principio se resiste

    a ello pero finalmente, convencida por su madre, decide aceptar esta misión arriesgada. Tiene

    que cambiar de identidad, a partir de ahora se llamará Arish Agoriuq, y aprender las reglas del

  • 10

    espionaje. En su taller obtiene mucha información valiosa sobre los planes de los alemanes en

    la Segunda Guerra Mundial, a través de las conversaciones de las esposas. Además recibe el

    encargo de arreglar un asunto importante en Lisboa: tiene que espiar a Manuel Da Silva, un

    portugués que es sospechoso de colaborar con los alemanes, aunque tiene relaciones con los

    ingleses. Resulta que Da Silva en efecto es un hombre peligroso, que casi logra matar a Sira

    cuando se entera de que ella es una espía. En Lisboa Sira encuentra de nuevo a Marcus Logan

    y, gracias a él, consigue escapar de las manos de los ayudantes de Da Silva.

    La novela tiene un final abierto, en el cual Sira tiene una relación secreta con Marcus y

    además, sigue trabajando como espía. Entraremos más en detalle sobre este recurso literario

    en el último capítulo de nuestro análisis.

    2.1.2. María Dueñas

    María Dueñas (1964) es doctora en filología inglesa y profesora titular en la Universidad de

    Murcia, además de haber impartido docencia en universidades norteamericanas. Es llamativo

    que nunca escribiera una novela antes de redactar El tiempo entre costuras: “Ni era escritora

    ni lo quería ser. La profesora de inglés María Dueñas escribió una novela por placer”

    (Sánchez-Mellado, 2011). En otras palabras, no tuvo ninguna experiencia previa y argumenta

    que nunca tuvo grandes ambiciones de ser una escritora, sino que en algún momento de su

    vida, cuando ya tuvo cierta estabilidad profesional y personal, decidió hacer algo distinto y

    empezó un nuevo proyecto (Cohen, 2012). Su primera novela ha tenido un éxito inmenso y el

    hecho de que se haya convertido en uno de los libros más vendidos de los últimos años

    sorprendió a la editorial, a los libreros e incluso a la propia Dueñas (Fernández Etreros, 2010).

    La difusión tan rápida del libro se debe sobre todo al boca-oreja entre los lectores, las diversas

    críticas publicadas en internet y en los periódicos, la influencia de los blogs y finalmente

    gracias a la agencia Antonia Kerrigan. Las críticas han sido muy positivas, aunque

    naturalmente se han publicado unas opiniones más negativas. Sin embargo, parece que la

    propia autora no hace caso de esas críticas: “¿Que dicen que es un libro de consumo? Me da

    exactamente igual. Estupendo. Que se consuma más, por favor” (Dueñas, 2011).

    La redacción de la novela le llevó aproximadamente un año y, además de esto, previamente

    tuvo que consultar archivos, testimonios, biografías y documentos históricos sobre la historia

    de aquella época. La primera fase de la redacción se centró en la elección del ambiente, es

  • 11

    decir el Protectorado Español de Marruecos. Los motivos de por qué Dueñas escogió

    justamente este lugar serán discutidos más adelante. Posteriormente, durante el proceso de

    documentarse, encontró los personajes que quiso utilizar. Una pareja que le pareció

    interesante fueron Juan Luis Beigbeder y su amante Rosalinda Powell Fox: “Me entusiasmó

    la historia de ellos dos porque inicialmente resultaba increíble que en aquellos momentos

    pudiesen vivir un romance como el que vivieron" (Dueñas, 2010).

    Cabe añadir que la cadena de televisión Antena 3 va a estrenar una serie basada en el libro,

    con la actriz Adriana Ugarte como protagonista en el papel de Sira. Dueñas es consciente de

    que la adaptación no puede ser una copia fiel a su novela, pero confía en que se hará un buen

    trabajo.

    Para concluir con este apartado sobre la autora, quisiéramos mencionar que, además de El

    tiempo entre costuras, Dueñas acaba de publicar una nueva novela, titulada Misión olvido

    (2012).

    2.2. Dime quién soy

    La segunda novela que analizamos en este estudio es Dime quién soy (2010) de Julia Navarro.

    A pesar de su voluminoso contenido, es considerada un best-seller, al igual que El tiempo

    entre costuras. Abarca diversos temas y acontecimientos importantes del siglo XX, desde la

    Guerra Civil hasta la caída del Muro de Berlín. En el primer apartado resumiremos la novela,

    para facilitar el posterior análisis. Enseguida discutiremos brevemente las motivaciones que

    tuvo la autora para escribir esta novela.

    2.2.1. Amelia Garayoa: espía, amante y aventurera

    Dime quién soy narra la vida de Amelia Garayoa, una mujer valiente que vivió en uno de los

    períodos más convulsos del siglo XX. Fue la bisabuela del joven periodista Guillermo Albi,

    quien siguió sus pasos por encargo de su tía y luego de Laura, la prima de la protagonista.

    Amelia desapareció antes de la Guerra Civil abandonando a su familia, a su marido y a su hijo

    Javier, el abuelo de Guillermo. Desde entonces no se supo mucho de ella y la tarea de

    Guillermo consiste en averiguarlo. Cuanto más avanza en su investigación, nota que su

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    bisabuela tuvo una vida muy movida: viajó por muchas ciudades de Europa, e incluso de

    América, conoció a gente muy diversa y llegó a ser espía para los británicos. Investigando la

    vida de su bisabuela, Guillermo recibe la ayuda de varias personas que conocieron

    directamente a Amelia o que tuvieron algún vínculo con esta misteriosa mujer. Amelia tuvo

    hombres importantes en su vida, de los que hablaremos más en detalle en otro capítulo (cf.

    3.2.1.3.). Siendo espía, pasó muchas vicisitudes en aquellos años: fue detenida y torturada

    varias veces, estuvo en un campo de concentración y perdió a muchas personas queridas.

    Como consecuencia de estos acontecimientos acaecidos en su vida, pasó de ser una joven

    inocente sin preocupaciones a una mujer herida por todas las experiencias desagradables.

    Sobrevivió a las crueldades de los nazis durante la Guerra Mundial y se mantuvo fuerte en la

    situación polémica del Berlín de la Guerra Fría. La historia de Amelia termina con la caída del

    Muro en 1989, después de la cual regresó con su familia en Madrid. Asimismo Guillermo

    pone fin a su investigación, lo que significa el final de la novela. No sabemos lo que pasa con

    Guillermo desde entonces, dado que le despidieron ya que estaba más preocupado por el

    proyecto de su bisabuela que por su trabajo como periodista. De Amelia, al contrario, nos

    enteramos de que vivió sus últimos días en paz, rodeada por los suyos. Al final de la novela,

    resulta que fue por encargo de ella que alguien reconstruyera su historia: la propia Amelia

    tuvo Alzheimer y no se acordaba de todo lo que pasó en su vida, así que Guillermo tuvo que

    seguir sus pasos. Además, constatamos que este giro en la trama explica el título de la novela.

    En otro capítulo entraremos detalladamente en la caracterización de los personajes, los lugares

    y el contexto histórico en el que se sitúa la novela. Puesto que se trata de una trama muy

    detallada, no hemos incorporado todos estos contenidos en este breve resumen.

    2.2.2. Julia Navarro

    Julia Navarro (1953) contaba con una dilatada experiencia en el periodismo, disciplina que

    tendrá una gran repercusión en la creación de esta obra. Durante mucho tiempo, su carrera

    literaria se limitó a textos básicamente periodísticos, pero en el año 2004 se atrevió a escribir

    por primera vez una novela. Seis años más tarde, después de haber escrito tres novelas más1,

    publicó Dime quién soy. Los críticos han sido generalmente positivos, aunque algunos opinan

    que utiliza un lenguaje poco literario: “Dime quién soy es un libro para leer en la playa o en el

    1 La Hermandad de la Sábana Santa (2004), La Biblia de barro (2005) y La sangre de los inocentes (2007).

  • 13

    avión, que no solicita nunca el ingenio del lector; es decir que es todo menos literatura. Las

    críticas elogiosas de la prensa siguen siendo un misterio...” (Aranzueque-Arrieta, 2010). Sin

    embargo, la propia autora valora su libro como un gran éxito, dado que engancha a mucha

    gente. Además, la alta cifra de ventas muestra que gran cantidad de personas saben apreciarlo.

    Navarro considera Dime quién soy como la novela más emocionante que ha escrito en su

    carrera profesional y define su propio libro como “una novela de personajes que, sin renunciar

    a la aventura ni a la historia, retrata la memoria del siglo XX y la identidad de esas personas

    anónimas que lo protagonizaron” (Velasco, 2010).

    Hay motivos justificados por los que la autora decidió escribir sobre una época tan convulsa,

    sangrienta y dolorosa de nuestra historia. Su primera motivación fue recuperar, de forma

    novelada, la tragedia del siglo XX: comienza poco antes de la Guerra Civil, pasando por la

    Segunda Guerra Mundial y terminando con la Guerra Fría. No obstante, aunque la intención

    de Navarro consiste en rescatar estos acontecimientos del olvido, no hay duda de que estas

    guerras son temas todavía muy actuales y por lo tanto en absoluto olvidados. La Guerra Civil

    es un ejemplo de un acontecimiento del que los españoles todavía tienen memoria y es

    justamente por esta razón que muchas personas van a sentir Dime quién soy como una novela

    muy cercana (Viñas, 2010). La novela es “una búsqueda de una identidad de un siglo terrible

    que ha dejado cicatrices en todas partes” (Viñas, 2010). Como es lógico, destaca la

    importancia de conocer el pasado: “El pasado tenemos la obligación y el derecho de

    conocerlo. Me parece imprescindible. No podemos saber quiénes somos ni entendernos si no

    sabemos de dónde venimos” (Serna, 2010).

    De esta cita podríamos deducir que es por esta razón por la que el personaje de Guillermo

    hace una búsqueda inmensa para reconstruir la vida de Amelia. Saber lo que pasó con su

    bisabuela, una de las raíces de su familia, le facilitará comprender su propia existencia.

    Un tema importante vinculado con las guerras de aquel período es el del totalitarismo. El

    objetivo de Navarro consiste en denunciar el estalinismo, el fascismo y el nazismo del siglo

    XX, dándoles un papel importante y a menudo negativo en la vida de sus protagonistas:

    “Considero que es un grito contra el estalinismo, el nazismo y el fascismo. En mi opinión, es

    una novela claramente contra los totalitarismos” (Viñas, 2010).

    El segundo tema principal que destaca en la novela es el periodismo, lo que podemos asociar

    con la profesión de la propia Navarro, como ya hemos señalado anteriormente. Este tema lo

    vemos personificado en el personaje de Guillermo, quien, como acabamos de decir, es un

    joven periodista que es despedido por descuidar su trabajo:

  • 14

    [el personaje de Guillermo] “es una llamada de atención sobre los periodistas jóvenes,

    los que sufren más esta mediatización, pues a los sueldos bajos y los contratos

    precarios, suman el miedo a perder el empleo que les lleva a ser más silenciosos y

    menos rebelde de lo que debieran” (García, 2010).

    A lo largo de la novela, constatamos que Guillermo encuentra dificultades trabajando como

    periodista. Además de estar mal pagado, no recibe muchas oportunidades y es precisamente

    por esta razón que acepta el desafío de investigar la vida de su bisabuela. La inserción de este

    personaje es una denuncia indirecta a todos los periodistas jóvenes que sufren el mismo

    destino.

    En conclusión, Navarro tuvo dos razones principales para escribir esta novela: la recuperación

    de los acontecimientos del siglo XX y el periodismo. Los aspectos más importantes para el

    análisis, es decir, el tratamiento de los personajes, el espacio y la historia, los discutiremos

    más adelante, cuando realicemos el análisis comparativo entre ambas novelas.

  • 15

    3. Análisis comparativo

    3.1. Las autoras

    Antes de comenzar con el análisis propiamente dicho, es necesario hacer una comparación

    entre las autoras de las novelas estudiadas, María Dueñas y Julia Navarro. Muestran unas

    semejanzas llamativas, tanto en sus vidas personales como en sus libros. Empezamos con el

    primer aspecto, comparando su formación, la generación a la que pertenecen y finalmente su

    género (3.1.1.). Enseguida seguiremos con el tema más importante que comparten ambas

    novelas, es decir el espionaje (3.1.2.).

    3.1.1. Formación, generación y género

    Primero advertimos una similitud con respecto a su formación: aunque ambas se dedican a

    otra profesión, Dueñas es profesora y Navarro periodista, como ya hemos señalado antes,

    destaca el hecho de que ambas hayan tomado un giro inesperado en su carrera profesional.

    Comenzaron a escribir una novela, una actividad con la que antes no tuvieron ninguna

    experiencia. Es evidente que ya estaban acostumbradas al acto de escribir, si bien de manera

    más académica o periodística. Por ello no cabe duda de que tienen talento para la escritura,

    aun así, no hay que olvidar que la manera de escribir una novela es totalmente diferente de la

    redacción de un artículo científico o periodístico. Parece que ambas han conseguido su

    objetivo con bastante facilidad y nadie esperó que estas novatas tuvieran tanto éxito:

    sorprendieron a mucha gente y sus novelas, accesibles para un gran público, inmediatamente

    se convirtieron en best-sellers. Hay que señalar que El tiempo entre costuras fue la primera

    novela de Dueñas en su carrera como autora, mientras que Navarro ya había escrito otras

    novelas antes de la redacción de Dime quién soy. Por lo tanto, en comparación con la novela

    de Dueñas, Navarro ya tenía más experiencia cuando empezó a escribir el libro estudiado en

    este trabajo.

    La segunda semejanza es que las autoras pertenecen a la misma generación. Como acabamos

    de señalar, se trata de dos novatas: Dueñas publicó su novela en el 2009 y un año más tarde,

    en el 2010, Navarro siguió con la publicación de Dime quién soy. En una entrevista con

    Dueñas, se observa que es muy inusual que los críticos se vuelquen con una novata, al que

    responde la autora:

  • 16

    “Me llaman de todo: debutante, primeriza…, lo de advenediza sólo lo digo yo, en

    broma. Pero me encanta lo de debutante, porque suena al primer baile, como si ahora

    me pusiera de largo… Es cierto, resulta algo extraño que alguien como yo, que no

    conozco a nadie en este mundo, y que vengo de un entorno totalmente ajeno, adquiera

    de pronto este protagonismo.” (Pascual, 2010)

    Se trata entonces de autoras de la literatura reciente y es notable que surgieran dos novelas

    con una trama parecida en un mismo período. Además, los libros tienen un lenguaje más bien

    sencillo, así que no se puede dudar de que atraigan al mismo público. Como consecuencia,

    existe la posibilidad de que se establezca una comparación entre ambas autoras, algo sobre lo

    que reflexiona la propia Dueñas en una entrevista: [sobre Navarro] “ella es un encanto. Lo

    hemos hablado ella y yo muchas veces porque ella no sabía lo que yo escribí, ni yo sabía lo

    que ella escribía, obviamente” (Dueñas, en la entrevista de Cohen, 2012). Basándonos en esta

    cita, podemos excluir la posibilidad de que Navarro se haya inspirado en la obra de Dueñas.

    En la misma entrevista Dueñas menciona que “al leer una, el lector se anima a leer a la otra.

    Aunque los dos libros no tienen nada que ver, sí comparten las circunstancias, los momentos

    y la figura de una mujer activa y comprometida en los tiempos en que las mujeres no tenían

    esta oportunidad” (Dueñas, en la entrevista de Cohen, 2012). Dicho de otro modo, las

    semejanzas en la trama, es decir el espionaje, el período tratado y una mujer como

    protagonista, son probablemente casuales, aunque nos parecen semejanzas muy llamativas.

    Esta última observación, es decir la aparición de una mujer como protagonista, nos permite

    elaborar otra semejanza llamativa, esto es el papel fundamental del género. Ambas novelas

    fueron escritas por mujeres y además tratan de dos mujeres valientes. En general vemos que, a

    lo largo de las novelas, la mujer tiene un papel fundamental, puesto que muchos personajes

    son mujeres fuertes: en El tiempo de costuras encontramos a Candelaria y a Rosalinda y en

    Dime quién soy a la diva Carla Alessandrini. Esta es una similitud muy llamativa, aunque no

    se puede comprobar si las autoras lo han hecho de forma intencionada. El hecho de que las

    novelas tengan el punto de vista de protagonistas femeninas parece más lógico si tenemos en

    cuenta que también fueron dos mujeres las que crearon estos personajes. No obstante, cuando

    se le pregunta si es una novela para mujeres, Dueñas destaca que El tiempo entre costuras no

    sólo está dirigida a un público femenino: “Yo creo que no, en absoluto. De hecho, son

    muchos los lectores hombres que me escriben o se dirigen a mí en encuentros para decirme lo

  • 17

    mucho que han disfrutado la novela” (Dueñas, en el artículo de Fernández Etreros, 2010).

    Además de esto, hay que mencionar la semejanza entre El tiempo entre costuras y una novela

    anterior, también situada en Marruecos, del escritor Ángel Vázquez, titulada La vida perra de

    Juanita Narboni (cf. 3.3.1.1.). Es significativo que también este libro es narrado por la voz de

    una mujer. Sin embargo, sabemos que Dueñas no se ha basado en este libro para escribir su

    novela, por lo tanto no podemos asumir que haya elegido Sira como protagonista por

    influencia de este autor.

    En conclusión, observamos que en este nivel existen bastantes similitudes entre ambas

    autoras. No obstante, la mayor semejanza se encuentra en el nivel de la trama, como veremos

    a continuación.

    3.1.2. El papel del espionaje

    Uno de los temas principales en la trama de ambas novelas es el espionaje, ocupando un papel

    fundamental dentro de los dos relatos. La vida de tanto Sira como Amelia cambia a partir del

    momento en el que entran en el mundo del espionaje. Además, ambas luchan contra el

    nazismo durante la Segunda Guerra Mundial dado que pertenecen al servicio de inteligencia

    de los británicos. En ambas obras aparecen muchos datos sobre los servicios secretos y su

    papel en la historia: el SIS, el SOE, el OSS, el KGB, el Stasi, etc2. Dado que se trata de una

    gran cantidad de información no somos capaces de entrar más en detalle sobre este aspecto en

    nuestro trabajo. Lo que sí haremos es comentar el papel de España como lugar estratégico de

    espías durante la Segunda Guerra Mundial (cf. 3.4.1.). Los servicios secretos de máxima

    importancia en nuestras novelas son el SIS y el SOE: el SIS (Secret Inteligence Service) es el

    servicio de inteligencia exterior del Reino Unido, mejor conocido como MI6, lo que nos

    recuerda a las novelas y las películas de James Bond. El SOE (Special Operations Executive)

    fue una organización durante la Segunda Guerra Mundial, creada por Churchill, “to set

    Europe ablaze” y llevó a cabo espionaje y sabotaje.

    Cabe destacar, en primer lugar, la particularidad de que ambas novelas no tratan de espías

    masculinos, sino de espías femeninas. Esta observación es muy importante, puesto que

    existen muy pocos ejemplos de mujeres que trabajaran como espías y por lo tanto es llamativo

    2 De los servicios secretos mencionados sólo trataremos el SIS y el SOE. El OSS (Office of Strategic Services),

    fue el servicio de inteligencia de los E.E.U.U. durante la Segunda Guerra Mundial. El KGB fue la agencia de

    inteligencia de la Unión Soviética y el Stasi fue el órgano de inteligencia de la República Democrática Alemana.

  • 18

    que ambas autoras eligieran una mujer como protagonista. No obstante, aunque se trata de un

    caso excepcional, sí existían espías femeninas, como muestra el libro Mujeres espías: Intrigas

    y sabotaje tras las líneas enemigas (2008) de Laura Manzanera. La espía más conocida es sin

    duda Mata Hari3, con la que podemos comparar Amelia, como veremos más adelante.

    En su introducción, Manzanera inmediatamente declara lo siguiente:

    “Por lo mismo que la mayoría de las guerras y revoluciones han sido diseñadas y

    ejecutadas por varones, resultaría lógico pensar que también el espionaje ha estado

    monopolizado por ellos. Sin embargo, no ha sido así. [...] Desde la Antigüedad hasta

    hoy, las féminas han formado parte del amplio universo de los servicios secretos,

    animadas por los más diversos motivos: patriotismo o defensa de unos ideales

    políticos o sociales, ansia de aventura, amor o sed de venganza, miedo, dinero, el afán

    de poder, [...].” (Manzanera, 2008:13)

    En segundo lugar destacamos el motivo por el cual ambas protagonistas comienzan con el

    espionaje. En general, el argumento que las estimula es el mismo: ambas temen que una

    nueva guerra pueda destruir a España, así que quieren evitarla cuanto pueden. Se dan cuenta

    de que las huellas que dejó la Guerra Civil todavía no han desaparecido.

    En el caso de Sira es su amiga Rosalinda Fox quien, ya siendo una espía para el servicio de

    los británicos, le ofrece a la modista la posibilidad de participar en el espionaje. Cuando

    propone que Sira abra un taller en Madrid con el objetivo de coser ropa para las mujeres de

    los nazis, la española no se lo puede creer: “La garganta se me obstruyó, y el trago de whisky

    que iba ya camino abajo retornó a la boca y salió disparado en mil salpicaduras. Me limpié la

    cara con el dorso de la mano. Cuando por fin conseguí articular palabra, sólo salieron tres. –

    Estáis locos perdidos” (Dueñas, 2009:364). Está convencida de no hacerlo, hasta que escucha

    los argumentos de su madre:

    “Ve con ellos, hija. Ayuda, colabora. Nuestra pobre España no puede entrar en otra

    guerra, ya no le quedan fuerzas” [...]. Si yo fuera tú, ayudaría a los ingleses, haría lo

    que me pidieran. Ellos trabajan en su propio beneficio, de eso no te queda duda: todo

    3 Una famosa bailarina que fue condenada a muerte por espionaje en 1917. Su nombre verdadero fue Margaretha

    Geertruida (Griet) Zelle.

  • 19

    esto lo hacen por su patria, no por la nuestra. Pero si su beneficio nos beneficia a

    todos, bendito sea Dios.” (Dueñas, 2009:375)

    Finalmente, acepta la misión, para la cual adopta una nueva identidad. A partir de este

    momento, se llamará Arish Agoriuq y trabajará para el SOE como el agente Sidi: “Y respecto

    a su adscripción al Servicio Secreto británico, a partir de este momento usted, para nosotros,

    deja de ser la ciudadana española Sira Quiroga o la marroquí Arish Agoriuq. Será tan sólo la

    agente especial del SOE con nombre clave Sidi y base de operaciones en España” (Dueñas,

    2009:403).

    Amelia al contrario, decide aceptar inmediatamente el encargo cuando Lord James4 le

    pregunta si quiere participar en las operaciones del Almirantazgo5. Aunque Albert protesta,

    Amelia está convencida de hacerlo, pero antes de acceder a la propuesta, necesita saber lo

    siguiente:

    “-Quiero saber si el fin de Hitler puede suponer que las potencias europeas decidan

    restablecer la democracia en España. Quiero saber si van a seguir apoyando y

    reconociendo a Franco.

    A lord James le sorprendió la pregunta de Amelia. Era evidente que la joven sólo

    colaboraría si creía que eso podía beneficiar a España, de manera que se tomó unos

    segundos mientras buscaba las palabras adecuadas para responder a Amelia.

    -No puedo asegurarle nada. Pero una Europa sin Hitler sería diferente. La posición del

    Duce no sería la misma en Italia, y en cuanto a España... es evidente que para Franco

    supondría un duro revés no contar con el apoyo germano. Su posición sería más débil.

    -Bien; si es así, creo que estaría dispuesta a colaborar contra Hitler.” (Navarro,

    2010:508-509)

    Resumiendo, ambas mujeres deciden convertirse en espía por motivos patrióticos: sólo están

    dispuestas a cooperar contra los nazis si el resultado beneficia también a España.

    4 El tío de uno de sus amantes, Albert James (cf. infra).

    5 Forma parte de La Marina Real de los británicos y también llevó a cabo actuaciones en España.

  • 20

    3.2. La definición de los personajes

    Este capítulo de nuestro análisis gira en torno del estudio de los personajes en ambas novelas.

    Primero haremos una comparación entre las protagonistas, Sira y Amelia, para investigar

    cómo difieren con respecto a su formación (3.2.1.1.), su carácter (3.2.1.2.) y sus relaciones

    amorosas (3.2.1.3.). En la segunda parte, analizaremos la importancia de ciertos personajes

    secundarios en las novelas (3.2.2.).

    3.2.1. Las protagonistas: Sira vs Amelia

    3.2.1.1. Formación

    Comparando la formación de ambas mujeres, notamos que este aspecto muestra una de las

    mayores diferencias entre las dos. Percibimos un contraste enorme entre las clases sociales a

    las que pertenecen: Sira es de origen humilde mientras que Amelia proviene de una familia

    burguesa. Así pues, vemos que las protagonistas difieren en este aspecto fundamental, aunque

    ambas terminan siendo espías profesionales.

    El primer capítulo de El tiempo entre costuras presenta la vida de Sira: “Crecí en un entorno

    moderadamente feliz, con más apreturas que excesos pero sin grandes carencias ni

    frustraciones” (Dueñas, 2009:4). Su único familiar es su madre Dolores, una modista humilde

    que trabaja en un taller de costura. A su padre apenas le conoce: es un hombre próspero que

    tuvo una relación secreta con la modistilla de su familia, es decir, la madre de Sira. A causa de

    la diferencia entre las clases sociales, el romance fracasó y durante su juventud Sira no supo

    mucho de su padre, lo que no la parecía afectar. Sin embargo, a lo largo de la novela, lo

    encuentra otra vez y observamos que la relación mejora con el tiempo. En cuanto a su

    formación vemos que Sira sigue los pasos de su madre y empieza a trabajar como modista: “A

    los doce años acabé mi formación y me incorporé en calidad de aprendiza al taller en el que

    trabajaba mi madre. Mi suerte natural” (Dueñas, 2009:4). Además, se aprecia claramente que

    Sira vive en un mundo distinto al de los ricos, al que pertenece Amelia:

    “Contemplé sin apenas ser vista a las señoras más refinadas, a sus hijas y maridos. Y

    como un testigo mudo, me adentré en sus casas burguesas, en palacetes aristocráticos

  • 21

    y en los pisos suntuosos de los edificios con solera. En algunas ocasiones no llegaba a

    traspasar las zonas de servicio [...] pensando en lo extraña que sería la vida en un

    universo como aquél.” (Dueñas, 2009:5)

    A los veinte años conoce a su novio Ignacio, con el que ya se imagina su vida futura. Ya

    tiene la edad adecuada para casarse, lo que es normal para las muchachas como ella, “sin

    apenas oficio ni beneficio, [a quienes] no quedaban demasiadas opciones más allá del

    matrimonio” (Dueñas, 2009:8). En otras palabras, el futuro de Sira ya parece estar

    determinado: se va a casar con Ignacio y seguirá trabajando como modista. Sin embargo,

    dadas las circunstancias cambiantes en Madrid, se ve obligada a dejar este oficio y se propone

    ser funcionaria, como Ignacio. Es justamente esta decisión la que marca el final de su futuro

    previsible, como muestra la primera frase de la novela: “una máquina de escribir reventó mi

    destino” (Dueñas, 2009:3), es decir, buscando una máquina de escribir encuentra a Ramiro

    Arribas, el hombre por el que deja Ignacio.

    Viviendo con Ramiro, Sira descubre la vida lujosa y se aprovecha a menudo de esta nueva

    manera de vivir: “Con él conocí otra forma de vida. Aprendí a ser una persona independiente

    de mi madre, a convivir con un hombre y a tener una criada. […] Y conocí también a otro

    Madrid: el de los locales sofisticados y los sitios de moda; el de los espectáculos, los

    restaurantes y la vida nocturna” (Dueñas, 2009: 26). En otras palabras, empieza a llevar una

    vida muy diferente a la que estaba acostumbrada. Sin embargo, todavía tiene que aprender

    muchas reglas para comportarse de manera adecuada en esta nueva vida. Vemos que su amigo

    Félix (cf. 3.2.2.2.) tiene que enseñarla la etiqueta: “Me instruyó Félix también en algunas

    cuestiones protocolarias. […] Y listo como un zorro, así que, recurriendo a una fuente u otra,

    no le costó el menor trabajo hacerse con las herramientas necesarias para adiestrarme y

    convertirme en una elegante invitada sin sombra alguna de falta de pedigrí” (Dueñas, 2009:

    291). En este sentido vemos otra diferencia con Amelia: Sira no está acostumbrada a este tipo

    de situaciones y tiene que aprender cómo comportarse bien, mientras que Amelia ya conoce

    estas reglas desde su niñez.

    Amelia, al contrario, proviene de una familia burguesa madrileña feliz. Tiene muchos

    familiares, entre los cuales destacan su hermana y sus tres primos, con los que tiene una

    relación estrecha. Obviamente tienen un ama de casa, Amaya, que vive con sus hijos Aitor y

    Edurne en la casa de los Garayoa. Los padres de Amelia son republicanos y, aunque no de

  • 22

    izquierdas, sí son demócratas. En su casa discuten mucho sobre la política y por ello los

    intereses políticos de Amelia se estimulan desde muy pronto: “[...] me interesaba más lo que

    hablaban mi padre y su amigo. No entiendo mucho, pero me gusta la política” (Navarro,

    2010: 49). En una entrevista se pregunta a Navarro si es a causa de este ambiente que Amelia

    se convierte en una anti-fascista visceral, a la que contesta: “[...] por dos razones: por la

    educación que recibe y por las consecuencias de la Guerra Civil, que en la familia de Amelia

    causa los mismos estragos que en todas las familias españolas” (Astorga, 2010). Como

    acabamos de mencionar, la vida de Amelia es muy distinta a la de Sira. Ella sí tiene la

    oportunidad de estudiar y recibe una formación muy cuidada:

    “Por lo visto, el padre de Amelia insistía en que sus dos hijas estudiaran y obtuvieran

    una buena formación; Ambas iban a las teresianas, y recibían clases de francés y de

    piano. Mi tatarabuelo debió de ser un personaje un tanto especial porque de vez en

    cuando viajaba con su familia fuera de España. Amelia contaba en su diario sus

    impresiones sobre Múnich, Berlín, Roma, París, ..., relatos de una niña llena de ganas

    de vivir.” (Navarro, 2010: 45)

    Dicho de otro modo, Amelia recibe una educación mucho mejor que Sira, puesto que vive en

    un ambiente que le permite desarrollarse más. Gracias a su formación y al trabajo de su padre,

    quien viaja frecuentemente por su dedicación al comercio, Amelia ya tiene un conocimiento

    amplio a una edad muy temprana. Desde su niñez ya sabe hablar español, francés e inglés, y a

    lo largo de la novela descubrimos que tiene un talento para los idiomas. Es capaz de aprender

    nuevas lenguas sin grandes dificultades, tales como el ruso o el árabe. En ocasiones esto

    resulta poco verosímil, puesto que Amelia parece ser una mujer perfecta (cf. 3.2.1.2.).

    Otro momento en el que destaca la diferencia entre la clase alta a la que pertenece Amelia y la

    clase más baja, es cuando se encuentra con su amiga Lola. La última, perteneciendo a otra

    clase social, tiene un sentimiento de inferioridad:

    “Con el tiempo he comprendido que [Lola] sentía una secreta envidia por ella. Amelia

    era guapa, elegante, afable, tenía cierta cultura, y sobre todo la pátina que le da a uno

    haber crecido rodeado de cosas bellas, libros, cuadros, muebles... Lola [...] era lo que

    era: una proletaria llena de ilusiones, convencida de que había llegado la hora de

    quienes, como ella, nada tenían.” (Navarro, 2010: 171)

  • 23

    En conclusión, a pesar de que ambas mujeres son presentadas como espías valientes dentro de

    las novelas, su origen es totalmente distinto. Resulta que Sira tiene que ascender de grado para

    llegar al mismo estatus al que pertenece Amelia desde su juventud, es decir la imagen de una

    mujer educada y cultivada. Es evidente que esta diferencia se refleja también en su carácter,

    como veremos en el siguiente apartado.

    3.2.1.2. Carácter

    Si hacemos un estudio del carácter de las protagonistas, encontramos tanto semejanzas como

    diferencias. Antes de empezar, cabe destacar que las mujeres evolucionan en el transcurso del

    relato, pasando por unos momentos cruciales en los que tiene lugar un cambio en su vida y

    asimismo en su carácter.

    En cuanto a las semejanzas, destacan tres aspectos importantes, la mayoría de los cuales se

    encuentra al inicio de esta evolución personal. Observamos que tanto Sira como Amelia

    todavía son jóvenes inocentes, contentas con la vida que llevan y felices con sus novios. A

    primera vista las dos parecen tradicionales, puesto que tienen la intención de casarse pronto.

    Sin embargo, en este momento de su vida vemos que ambas toman una decisión muy drástica:

    abandonan toda su vida conocida en Madrid, es decir sus novios y su familia, y prefieren vivir

    un romance con otro hombre. Esta decisión muestra que ambas jóvenes son muy

    influenciables por los hombres atractivos y encantadores, una característica que retomaremos

    en el apartado siguiente (cf. 3.2.1.3.).

    Además, la pérdida de su familia no parece afectarlas tanto: Sira deja sola a su madre,

    sabiendo que ella no tiene otra persona que su hija, y Amelia es capaz de abandonar a su hijo.

    Esto se debe probablemente al hecho de que todavía sean ingenuas y no conscientes de la

    repercusión de sus acciones en los demás. En este sentido, podemos considerar que muestran

    un comportamiento egoísta, puesto que están interesadas únicamente en su nuevo romance:

    “[cuando se despide de Ignacio] Apenas un minuto después de desvanecerse su

    presencia, yo también me levanté del banco y me marché. Atrás dejé todo mi pasado

    mientras yo emprendía un nuevo tramo de mi vida; una vida que intuía luminosa y en

    cuyo presente inmediato no concebía más gloria que la de los brazos de Ramiro a

    cobijarme” (Dueñas, 2009:25).

  • 24

    Asimismo, en el caso de Amelia, el amor es el factor más influyente para tomar sus

    decisiones:

    “[la prima Laura a Amelia] Y para eso tienes que dejar a tu marido y a tu hijo?

    -¡No me lo digas así! No soportaría que tú también me lo reprocharas, que no me

    entendieras. Estoy enamorada, no sabes cuánto. Sólo cuento los minutos para estar con

    Pierre.

    -¡Amelia, no puedes abandonar a tu hijo!” (Navarro, 2010:128)

    Sin embargo, a lo largo de las novelas, sí es obvio que ambas se arrepienten de sus decisiones

    anteriores. Se dan cuenta de que no se puede deshacer el pasado y como consecuencia deben

    aceptar el peso de la conciencia. Así, intentan rectificar en el presente los errores que han

    cometido: "[Sira es] una mujer fuerte, con determinación y responsable que, después del

    primer tropezón de su vida, no estaba dispuesta a volver a fallar ni a su familia, ni a su país"

    (Dueñas, en el artículo de Intxausti, 2010). Vemos una tendencia parecida en el

    comportamiento de Amelia: “Es una mujer que intenta retomar las riendas de su vida pero

    nunca lo consigue. Vive en una huida permanente y atormentada por el peso de la conciencia

    por cometer errores que ella misma no se perdona.” (Navarro, en la entrevista con Viñas,

    2010). Por decirlo con las palabras de la propia Amelia: “No puedo lamentarme por lo que

    hice en el pasado porque no tengo poder para cambiarlo, pero sí para ser dueña de mi futuro”

    (Navarro, 2010:292).

    Además, a pesar del egoísmo de su juventud vemos que Sira y Amelia sí se preocupan por sus

    familiares. A lo largo de la novela notamos que sus familias ejercen un papel muy importante

    dentro de sus vidas. Sira logra traer a su madre a Marruecos, a pesar de las dificultades del

    transbordo, dado que España está en estado de guerra. Además, retoma el contacto con su

    padre cuando está trabajando como espía en Madrid. Amelia también intenta ayudar a sus

    familiares al ofrecerles apoyo económico mediante un trabajo de secretaria. No obstante,

    Amelia se atreve a hacer cosas mucho más arriesgadas para ayudar a su familia, lo que Sira

    probablemente nunca haría. Por lo tanto vamos a elaborar esta observación más en la parte de

    las diferencias entre ambas protagonistas (cf. infra).

    Otra semejanza es el primer momento crucial que cambiará sus vidas: este momento es

    parecido en ambas novelas y tiene lugar cuando Sira y Amelia son engañadas por Ramiro y

  • 25

    Pierre respectivamente, los amores de su juventud. Son los hombres por los que ellas han

    cambiado toda su vida, a los que han amado incondicionalmente, pero al final han sido ellos

    los que dejaron cicatrices en el alma de las dos jóvenes. Una consecuencia de este engaño es

    que se vuelven desconfiadas hacia los hombres a los que conocen posteriormente. Además, es

    un momento de reflexión personal, una primera situación en la que se dan cuenta de lo que

    hicieron. Sira, después de ser abandonada por Ramiro, despierta desorientada en un hospital:

    “Aquellas semanas inmovilizada en el Hospital Civil de Tetuán sirvieron para poner algo

    parecido al orden en mis sentimientos y para sopesar el alcance de lo que los últimos meses

    habían supuesto” (Dueñas, 2009:65). Quiere volver a Madrid, dado que es el único lugar que

    conoce, pero esto es imposible: se ha declarado el estado de guerra y el tránsito está

    interrumpido. Por consiguiente, Sira tendrá que seguir viviendo en Marruecos y aceptar las

    consecuencias de su propia decisión.

    Asimismo, Amelia es engañada por Pierre, el amor de su vida, que sólo utiliza su relación

    como coartada para cumplir sus asuntos de espionaje en Buenos Aires. Amelia, al contrario,

    piensa que realmente va a empezar una nueva vida en Argentina. Viviendo un tiempo en la

    capital, Pierre recibe la visita de su jefe, Ígor Krisov. Amelia escucha la conversación

    mantenida entre los dos hombres a escondidas y se entera de que Pierre trabaja como espía y

    además que ella es una espía ‘ciega’6. La joven está muy conmocionada por lo que oye: “De

    repente los dos hombres se dieron cuenta de que Amelia estaba en el umbral muy quieta,

    pálida, con los ojos arrasados por las lágrimas” (Navarro, 2010: 283).

    Después de todas estas revelaciones, Amelia ya no se siente la misma: “Se encogió de

    hombros con indiferencia; sentía que ya nada la ataba a aquel hombre por el que tanto había

    sacrificado” (Navarro, 2010:286). El efecto que tuvo el engaño de Pierre en Amelia produce

    en ella un cambio que no pasa inadvertido a sus amigos:

    “-¿Has dejado de querer a Pierre?

    -Puede ser... En realidad, si miro hacia atrás me sorprende haber tomado la decisión de

    fugarme con él, incluso de haberle querido. [...]

    A Gloria le impresionó escuchar a Amelia hablar de aquella manera; de pronto la

    pareció una mujer madura y no la chiquilla dulce y amable cuya compañía todos

    buscaban.” (Navarro, 2010:292)

    6 Una persona que trabaja como espía sin efectivamente saberlo.

  • 26

    En resumen, después de haber perdido la inocencia juvenil, las protagonistas maduran y

    reflexionan sobre los errores cometidos en el pasado. La primera cosa que ambas quieren

    hacer después del desengaño, es regresar a España. Sin embargo, como acabamos de señalar,

    esto no es tan fácil dado que ha empezado la Guerra Civil.

    Esta observación nos permite mencionar la última semejanza importante entre ambas mujeres:

    ninguna de ellas vive esta guerra de manera directa, es decir, ni Sira ni Amelia se encuentran

    en España en aquel momento. Es obvio que sí quieren volver, pero al final ambas tienen que

    quedarse en el extranjero. Por lo tanto, no están acostumbradas, ni conocen de primera mano

    las pésimas situaciones vividas por sus familiares; un aspecto que trataremos más en detalle

    en el apartado de los personajes secundarios (cf. 3.2.2.).

    A continuación, nos centraremos en la gran cantidad de diferencias entre Sira y Amelia.

    Como hemos comentado, las mujeres se quedan sin sus familiares en un país desconocido y

    por eso no tienen otra opción que valerse por sí mismas, lo que las hace más independientes.

    Apreciamos que ambas se convierten en mujeres fuertes y valientes, con mucha

    determinación, no obstante, dos mujeres bastante diferentes. Advertimos cinco diferencias

    destacables en cuanto al grado de autonomía y de audacia, el retrato de las mujeres a lo largo

    de las dos novelas, el comportamiento frente a los familiares y el peso de la conciencia.

    Primero constatamos que Amelia es más independiente que Sira. Esto no quiere decir que Sira

    no sea una mujer fuerte, pero se hace más hincapié en esta característica en el personaje de

    Amelia. En general, ella es una chica muy lista e inteligente y ya desde joven salta a la vista

    que es una persona muy despierta. Además, gracias a ella, los negocios de su padre se salvan

    puesto que, mediante el matrimonio con Santiago, las dos familias mantienen buenos

    contactos. Dicho de otro modo, una chica que aún no ha cumplido los veinte años ayuda a su

    familia:

    “No podía verle el rostro, pero no me costó imaginar que en aquel momento Amelia

    estaba tomando una decisión: ser ella quien venciera las resistencias de Santiago para

    salvar a su familia de las dificultades económicas que afrontaban. Amelia era muy

    novelera, se veía a sí misma como las heroínas de las novelas que leía, y sus padres,

    sin saberlo, le estaban dando la ocasión de demostrarlo” (Navarro, 2010:65).

  • 27

    Además, queda patente que Amelia es una mujer con sus propios ideales políticos, a los que

    defiende con mucha convicción, y por tanto no se deja caracterizar como una mujer

    reprimida: [a Santiago] “¿Crees que le quiero menos por asistir a reuniones políticas? A lo

    que aspiro es ayudar a construir un nuevo mundo en el que Javier no tenga que sufrir ninguna

    injustica. ¿Eso te parece tan malo como para recriminármelo?” (Navarro, 2010:115).

    Amelia es retratada como una chica sensible y emocional con ideales románticos, pensando

    que puede mejorar el mundo con el comunismo. Esta convicción es una característica que no

    encontramos en el personaje de Sira, ella carece de ideales políticos. Esta diferencia

    probablemente se deba a su formación: al contrario de Amelia, Sira nunca tuvo una formación

    refinada ni estuvo en un ambiente donde pudiera despertar algún interés político.

    Pasamos a la segunda diferencia entre las dos protagonistas. Como ya hemos señalado

    anteriormente, Amelia resulta una mujer capaz de todo: parece que sabe solucionar todo tipo

    de problemas, apoyar a su familia y al mismo tiempo trabajar como una espía profesional,

    desarrollar muchos talentos, etcétera. Esta imagen nos da a menudo una impresión de

    inverosimilitud. Sira, al contrario, es retratada como una persona más humana, es decir,

    parece más verosímil.

    En cuanto al talento de ambas mujeres, vemos que Sira tiene un talento notable, es decir la

    costura. Conviene mencionar por qué Dueñas justamente escogió esta profesión para su

    protagonista:

    “Necesitaba a una protagonista que pudiera ser económicamente autónoma en los años

    30 y 40, cuando las mujeres carecían de opciones en la inmensa mayoría de los

    ámbitos fuera del hogar y la familia. La costura me ofrecía potencial para que Sira

    pudiera sobrevivir sin ataduras, y a la vez me permitía usar su taller como enclave para

    acceder a señoras de otro ambiente y nivel social, y utilizar el oficio de la costuras

    como tapadera para otras acciones clandestinas.” (Dueñas, en la entrevista con F.

    Etreros, 2010)

    Sira es una costurera de gran talento y tiene mucho éxito con su taller. Al abrir su negocio

    Madrid, es consciente de que necesita ayuda y recurre a ella, lo que muestra su lado más

    humano: “Ganaba mucho, sí, pero llegó un momento en que no pude dar más de mí y así se lo

    tuve que hacer saber a Hillgarth a través del patrón de una hombrera. [...] El último mensaje,

  • 28

    distinto, transmitía algo más personal: ‘Demasiado trabajo. Sin tiempo para todo. Menos

    clientas o buscar ayuda. Informe por favor’ ” (Dueñas, 2009: 412-413).

    Sira consigue ser una exitosa costurera mientras que Amelia, al contrario, alcanza sus éxitos

    por su belleza física, como se describe en la novela, con la que consigue atraer a los hombres:

    “Pues yo, amigo mío, le envidio, es muy bella. Le será útil a donde va, su inocencia es un

    buen parapeto. Pero tenga cuidado, no es tonta, y algún día puede salir del letargo de la

    melancolía...” (Navarro, 2010:233)

    En ocasiones, la belleza de Amelia es utilizada para atraer a hombres poderosos, como a los

    nazis, semejándose así a una femme fatale. En este sentido, conviene mencionar la semejanza

    con la espía Mata Hari: es considerada como el estereotipo de la femme fatale, así que la

    similitud entre nuestra protagonista y ella es significativa. Además, unos críticos denominan a

    Amelia como una segunda Mata Hari: “Amelia es una mezcla de Mata Hari, Indiana Jones y

    Aviraneta; de temeraria espía, seductora aventurera e infatigable conspiradora” (Sanz

    Villanueva, 2010). El ejemplo más claro lo encontramos cuando la española logra matar al

    coronel Ulrich Jürgens de las SS 7, quien quiere acostarse con Amelia y ella, sin ningún

    reparo, le dispara:

    “Amelia le sonrió y le pidió que la besara. Iba a hacerlo, pero no le dio tiempo. Fue un

    segundo lo que tardó en darse cuenta del frío cañón de la pistola que se apretaba contra

    su vientre y del dolor agudo que le desgarró las entrañas. Cayó al suelo arrastrando a

    Amelia, apretando su cuerpo como si quisiera llevársela con él.” (Navarro, 2010:832)

    De este fragmento vislumbramos la tercera diferencia importante, es decir el grado de audacia

    de ambas espías. Amelia se arriesga con situaciones mucho más peligrosas y por ello es más

    aventurera que Sira. Durante su carrera como espía, se mete en situaciones muy arriesgadas,

    como ilustraremos brevemente aquí. Primero, durante la Guerra Mundial, es detenida en

    Varsovia por ayudar a gente en el gueto y es enviada a la prisión de Pawiak. Allí ve morir a

    unos de sus amigos y este suceso, aparte de las torturas que ella misma sufre, ejerce un gran

    impacto en Amelia. Max, su nuevo amor, sabe liberarla, pero el destino prepara otro

    acontecimiento horrible para Amelia cuando es enviada al campo de detención Ravensbrück.

    7 Las SS, también conocido como Schutzstaffel, fue una organización militar, policial y de seguridad en la

    Alemania nazi.

  • 29

    Vive en condiciones horribles con una salud muy precaria, como afirma un testigo: “Estaba

    extremadamente delgada y tenía el cuello y la espalda surcada por las huellas de los

    instrumentos de tortura” (Navarro, 2010: 909). Afortunadamente, Max consigue nuevamente

    salvarla, provocando un cambio en el comportamiento de Amelia que es observado por las

    demás prisioneras:

    “De repente se puso alerta, había algo en el general inválido que parecía atraer su

    atención. Recuerdo verla correr hacia él gritando ‘¡Max, Max, Max!’ [...] Todas

    nosotras mirábamos asombradas la escena, no entendíamos nada. La española no había

    dicho ni una palabra desde su llegada a Ravensbrück” (Navarro, 2010, 914).

    Después de aquel período negro, la vida de ambos cambia por completo: viven juntos en

    Berlín con el hijo de Max, Friedrich, en una casa pequeña. La guerra destruyó a estas dos

    personas tan fuertes, a causa de un atentado (cf. infra) y la estancia en Ravensbrück: se

    amargaron y aceptaron su destino, que sería vivir el resto de su vida como un par de

    miserables mutilados. Sin embargo, Amelia debe emprender un nuevo encargo: es pedida

    encontrar a Winkler, otro coronel malicioso de las SS y un gran peligro para la seguridad de

    Amelia. Éste ha desaparecido después de la guerra y ahora se está intentando localizarlo.

    Primero Amelia rechaza la petición, no quiere volver a ningún tipo de trabajo que se asemeje

    al espionaje, pero finalmente acepta y se traslada a El Cairo durante unos años. Ahí, encuentra

    a Winkler, que se sorprende de que Amelia aún esté viva. Finalmente Amelia logra matar

    también a Winkler, señal inequívoca de su fortaleza y coraje.

    Durante la Guerra Fría, Amelia se mete en situaciones arriesgadas por última vez: ayuda a

    escapar a personas de un lado a otro del muro de Berlín, a través de las cloacas:

    -¿Sabes, Amelia?, me sorprende que no estés aterrada andando por este lugar, yo he

    tenido ganas de gritar unas cuantas veces – admitió Garin.

    -No es la primera vez que ando por las cloacas...llegué a conocer muy bien las de

    Varsovia. Unos amigos me enseñaron a no tener miedo.

    -Siempre logras sorprenderme. Viéndote... bueno... nadie diría que eres capaz de hacer

    nada de lo que haces.” (Navarro, 2010: 1060).

  • 30

    No obstante, después de un tiempo, es consciente de la peligrosidad de sus acciones y decide

    concluir con ellas.

    Resumiendo, tenemos la impresión de que Sira, aunque pasó por momentos difíciles y

    peligrosos, nunca se hubiera atrevido con aquellos encargos encomendados a Amelia, ni

    sufrió tanto como ella. Además, la pérdida de personas queridas, influyó decisivamente el

    carácter de Amelia. No obstante, cabe destacar otra vez que parece poco verosímil que ella

    sufriera todos estos sucesos sin perder la esperanza: la mayoría de sus amigos y conocidos

    murieron en los campos de concentración o durante la guerra, pero Amelia sobrevivió. Sí

    vemos que ha cambiado definitivamente después de su estancia en Ravensbrück. Esto refleja

    otra característica propia de Amelia: a causa de toda la miseria en su vida se ha hecho una

    persona de sangre fría, alguien que ya no se deja afectar por todo lo que pasa a su alrededor.

    Friedrich toma nota de esta característica:

    “Estaba asustado, y mucho. De repente me daba cuenta de lo cerca que había estado

    del abismo y admiré aún más a Amelia por su sangre fría. Desde pequeño supe que

    ella era especial y que hacía cosas especiales, pero ahora descubría hasta dónde era

    capaz de llegar, y sobre todo me asombraba su frialdad.” (Navarro, 2010:1054)

    La cuarta diferencia entre Sira y Amelia es su comportamiento hacia sus familiares. Como ya

    hemos señalado anteriormente, es cierto que ambas mujeres se preocupan por su familia. Sin

    embargo, tenemos la impresión de que Amelia se preocupa y se vuelca más que Sira

    ayudando a sus familiares. Un ejemplo concreto permite ilustrar esta idea: su tío, estando en la

    prisión por no defender los intereses de los nacionales durante la Guerra Civil, es liberado

    gracias a Amelia. No obstante, debe hacerlo de una manera repugnante: tiene que acostarse

    con un comisario y es violada por él. Para Amelia, sus familiares son de suma importancia y,

    justamente por esta razón, le resulta tan difícil aceptar que perdió el derecho a ver a su hijo.

    Amelia no puede estar en Madrid sin intentar ver a su hijo Javier, lo que va contra la voluntad

    de la familia de Santiago: “-Sí, me atrevo a decirte que no grites al niño y también suplicarte

    que hables conmigo, que lleguemos a un acuerdo que le permite a Javier saber quién soy y

    cuánto le quiero. -Márchate, Amelia, y no vuelvas a acercarte a nosotros o lo pagarás”

    (Navarro, 2010: 765).

  • 31

    Sólo al final de la novela, vemos que Amelia acepta que nunca conocerá a su hijo por sus

    propios errores en el pasado: “No hay un solo día que no piense en mi hijo, en mi hermana, en

    mis tíos, en Laura... pero no puedo dar marcha atrás. El día en que me fui con Pierre... ese día

    terminé con lo mejor de mí misma” (Navarro, 2010:1069). En otras palabras, durante toda la

    novela Amelia está dividida entre la preocupación por su familia y su vocación política: viene

    a Madrid para ver sus familiares pero luego se va de nuevo para emprender otro encargo. Esta

    actitud vacilante no la encontramos en la personalidad de Sira: ella es más equilibrada, sabe

    dividir su tiempo entre su familia y su trabajo de una manera más adecuada.

    En cuanto a la última diferencia, el peso de la conciencia, parece que Amelia tiene más

    dificultades intentando superar el pasado. Como acabamos de decir, le cuesta mucho aceptar

    que nunca formará parte de la vida de su hijo. En lugar de cambiar totalmente su vida y dejar

    atrás el pasado, constantemente vuelve a Madrid, no sólo para ver su familia, sino también

    para ponerse en contacto con Javier. Así, su pasado siempre está presente en su vida actual.

    Sira, al contrario, puede continuar más fácilmente, dado que adopta una nueva identidad. Sin

    embargo, hay dos momentos en los que se enfrenta a su vida anterior: primero cuando tiene

    lugar el reencuentro con su padre (cf. 3.2.2.1.) y luego cuando vuelve a ver a Ignacio. Este

    último encuentro consigue impactar en Sira y es confrontada otra vez con lo que ha hecho en

    el pasado:

    “[...] tú no eres nadie para decirme si te gusta o no el hombre en el que me he

    convertido. Tú no puedes darme a mí lecciones morales, Sira, porque si yo soy malo,

    tú eres aún peor. [...] No eres más que una egoísta que habita una casa inmensa en la

    que se mastica la soledad por las esquinas; una desarraigada que reniega de sus

    orígenes y es incapaz de pensar en nadie que no sea ella misma.” (Dueñas, 2009:455)

    Así pues, este reencuentro con Ignacio es un ejemplo del peso de su conciencia. Cabe

    mencionar que, a pesar de esos encuentros, parece que Sira puede tener una nueva vida sin

    muchas interrupciones de las consecuancias de sus cometidos errores.

    A modo de conclusión de este apartado, hacemos referencia a aquellos momentos cruciales en

    los que vemos cambiar a las protagonistas. Empezamos con Sira, quien, como ya hemos

    mencionado más arriba, cambia por primera vez después del engaño de Ramiro. El segundo

    momento crucial que se menciona en la novela, es cuando tiene que traer unas pistolas a

  • 32

    cambio de dinero para fundar su taller. Es una propuesta de Candelaria con la que Sira se

    siente muy asustada. No obstante, después de haber terminado su misión con gran éxito, se

    siente orgullosa, sorprendida de ser capaz de realizar semejantes cosas. Decide que es la hora

    de adoptar una nueva identidad, más firme y valiente:

    “Con intención de dar la espalda a un bagaje tan patético, resolví afrontar el porvenir

    tras una máscara de seguridad y valentía para evitar con ella que se entrevieran mis

    miedos, mis miserias y la puñalada que aún seguía clavada en el alma. Decidí

    comenzar por el exterior, hacerme con una fachada de mujer mundana e independiente

    [...] Decidí transmutarme y mi elección fue la de adoptar la apariencia de una mujer

    firme, solvente, vivida. Debería esforzarme para que mi ignorancia fuera confundida

    con altanería, mi incertidumbre con dulce desidia.” (Dueñas, 2009: 144)

    Dicho de otro modo, Sira vacila entre dos lados: externamente comienza a crecer, pero

    interiormente sigue siendo una joven insegura. Sin embargo, es un primer paso hacia la

    consecución de una personalidad más adulta y fuerte y el comienzo de su éxito en el taller.

    La próxima etapa en la que la vida de Sira cambia radicalmente es cuando entra en el mundo

    del espionaje. En la novela se enfatiza considerablemente en el cambio de su identidad, no

    sólo psicológicamente, sino también oficialmente: recibe un nuevo pasaporte con una nueva

    identidad y, como ya sabemos, se llamará Arish Agoriuq. Trabajando como espía, Sira se

    convierte en una mujer nada comparable con la joven que era al inicio de la novela. La

    culminación de esta evolución se constata después de su misión en Lisboa:

    “Quizá la palabra que mejor encajara en el sentimiento que me invadía fuera orgullo.

    Por primera vez en mucho tiempo, tal vez por primera vez en toda mi vida, me sentía

    orgullosa de mí misma. Orgullosa de mis capacidades y de mi resistencia, de haber

    superado airosamente las expectativas que sobre mí existían. Orgullosa al saberme

    capaz de aportar un grano de arena para hacer de aquel mundo de locos un sitio mejor.

    Orgullosa de la mujer que había llegado a ser.” (Dueñas, 2009:594)

    Por tanto, el carácter de Sira sufre una transformación durante toda la novela y al final vemos

    que se ha convertido en una mujer totalmente diferente a la chica que era al inicio.

  • 33

    Pasamos a los momentos cruciales en la vida de Amelia, que son más numerosos que en el

    caso de Sira. No obstante, esto es lógico dado que la novela sigue sus pasos durante toda su

    vida, mientras que la historia de Sira termina después de la Guerra Mundial. Además de sus

    estancias en Pawiak y Ravensbrück, hay tres momentos que impactan a Amelia y que la

    obligan a tomar un giro en su vida.

    El primer acontecimiento es cuando sus padres fallecen en la Guerra Civil. Amelia se da

    cuenta de que ya no quiere fallar a su familia y desde este momento decide apoyar más a los

    suyos, como hemos señalado más arriba.

    Otro momento importante es cuando su amiga Carla Alessandrini es ahorcada. Carla era,

    además de una persona muy estimulante, una segunda madre para ella. Amelia se enfada tanto

    que está decidida a matar a Jürgens, el personaje que encarna el mal y uno de los responsables

    de la muerte de Alessandrini.

    Finalmente, el último suceso de gran relevancia es el atentado contra uno de los convoyes de

    militares alemanes, entre los cuales se encuentra también Max, que resulta gravemente herido

    como consecuencia del accidente y sufre mutilaciones por la vida. Este accidente la hace

    reflexionar: siendo una cómplice en el atentado, Amelia se siente culpable de este drama y

    está resuelta no seguir con el espionaje. Después de este acontecimiento es enviada a

    Ravensbrück y, cuando está recuperada, ya no quiere trabajar como espía. Sin embargo,

    Amelia nunca es capaz de dejar el espionaje del todo, ya que sigue trabajando durante la

    Guerra Fría (cf supra). El momento crucial en el que decide terminar definitivamente su

    carrera, es cuando lee en un periódico que hay también ex-nazis que trabajan a su servicio.

    Dado que esto va en contra de sus principios políticos, está decidida acabar con el espionaje

    para siempre.

    En conclusión, apreciamos que Sira y Amelia muestran semejanzas llamativas: ambas son

    mujeres valientes de gran determinación y además, sus familias tienen un papel muy

    importante dentro de su vida. Además parece que se convierten en espías profesionales con

    bastante facilidad. Sin embargo, hemos observado que existen también diferencias: Amelia es

    retratada como una mujer más independiente que puede hacer de todo y que se atreve a hacer

    cosas muy peligrosas, lo que a menudo resulta inverosímil. El carácter de Sira es bastante

    opuesto, ya que ella tiene sus defectos, lo que le da una apariencia más normal. No obstante,

    con respecto a su origen, Sira tuvo que andar un camino más largo para obtener el mismo

    estatus que Amelia, es decir el estatus de una mujer educada y elegante con mucho coraje. En

  • 34

    este sentido, podemos considerar que el crecimiento personal de Sira es equivalente al

    desarrollo de Amelia, aunque no podemos olvidar que esta última pasa por situaciones aún

    más desagradables.

    3.2.1.3. Relaciones con los hombres

    En este apartado estudiaremos las relaciones amorosas que Sira y Amelia tuvieron a lo largo

    de sus vidas y en qué medida los hombres impactaron en su desarrollo personal.

    Comenzamos con Sira, quien tenía tres hombres importantes, siendo estos Ignacio Montes,

    Ramiro Arribas y Marcus Logan. Ignacio es el hombre que simboliza la primera etapa en la

    vida de la joven modista, es decir, su juventud tranquila antes de empezar a evolucionar. Es

    un tipo simpático y Sira se siente segura a su lado, pero llevan una vida poco apasionante:

    “El hombre de mi vida, pensé entonces. El muchacho tranquilo que intuí destinado a

    ser el buen padre de mis hijos. [...] No me llevó a él una pasión turbadora, pero sí un

    afecto intenso y la certeza de que mis días, a su lado, transcurrirían sin pesar ni

    estridencias, con la dulce suavidad de una almohada.” (Dueñas, 2009:7-8)

    Es obvio que se queda con Ignacio sólo porque éste la adora, y además porque no tiene

    conciencia de un amor más intenso: “Yo era su cielo y las estrellas, la más guapa, la mejor.

    Mi pelo, mi cara, mis ojos. Mis manos, mi boca, mi voz. Toda yo configuraba para él lo

    insuperable, la fuente de su alegría. Y yo le escuchaba, le decía tonto y me dejaba querer”

    (Dueñas, 2009:9). Así, cuando conoce a Ramiro Arribas, la decisión de dejar Ignacio no la

    resulta muy dura. Cabe añadir que Ignacio aparece de nuevo en la vida de Sira, lo que es un

    encuentro chocante para ella, como ya hemos mencionado. Se puede considerar que en esta

    reunión Ignacio representa la conciencia de Sira, ya que en este momento revive el pasado.

    Ramiro es el hombre que representa la etapa más errónea en la vida de Sira, sin embargo,

    admite que podría cometer el mismo error otra vez:

    “¿Qué tenía Ramiro, qué me dio para poner mi vida patas arriba en apenas un par de

    semanas? Aún hoy, tantos años después, puedo componer con los ojos cerrados un

    catálogo de todo lo que de él me sedujo, y estoy convencida de que si cien veces

  • 35

    hubiera nacido, cien veces habría vuelto a enamorarme como entonces lo hice.”

    (Dueñas, 2009: 26)

    Se puede considerar a Ramiro como el error juvenil de Sira, quien deja cicatrices

    permanentes en el alma de la joven modista. Así podemos considerar que es responsable del

    cambio en la personalidad de Sira, ya que ella, a partir de entonces, no confía en los hombres

    tras lo ocurrido con Ramiro.

    El siguiente hombre que consigue embelesar a Sira se llama Marcus Logan, un periodista

    británico que la ayuda a trasladar a su madre a Marruecos. Sira no confía en el británico y

    esta sospecha se debe probablemente a la inseguridad que le había causado Ramiro: “Si

    analizaba la situación con frialdad, era consciente de que no había nada que temer: todos mis

    miedos carecían de fundamento y aquella espera no era más que una demostración absurda de

    mis inseguridades” (Dueñas, 2009:281). Además, Marcus es el primero que involucra a Sira

    en espiar a alguien, puesto que, durante una recepción, tiene que averiguar de lo que está

    hablando un grupo de alemanes.

    Cuanto más pasa el tiempo, más confía Sira en Marcus y poco a poco se siente atraída a él:

    “Nos atrajimos Marcus y yo, sí, mucho, y no faltaron ocasiones para que aquello se

    convirtiera en algo más. [...] Pero yo me esforcé por amarrar mis sentimientos; me negué a

    avanzar más y él lo aceptó” (Dueñas, 2009:330). No obstante, Marcus debe marcharse puesto

    que, una vez que la madre de Sira está en camino, su tarea ha concluido.

    Inesperadamente, Sira vuelve a ver a Marcus, sí bien en condiciones no muy óptimas dado

    que ella está en Lisboa para arreglar el asunto de Manuel Da Silva. Este reencuentro la

    transporta al pasado, un pasado que era mejor que la situación actual: “Quise abrazarle,

    decirle sí, Marcus, soy yo. [...] volver a Marruecos, olvidar que existía algo que se llamaba

    Servicio Secreto, ignorar que tenía un turbio trabajo por hacer y un Madrid triste y gris al que

    regresar” (Dueñas, 2009:512). No obstante, vuelve a verlo y al final de la misión en Lisboa es

    Marcus el que la libera de las manos de Da Silva, quien, después de haberse enterado de que

    Sira le está espiando, quiere liquidarla. Volviendo a Madrid en coche, ambos se sienten

    incómodos:

    “-Gracias por protegerme, Marcus – musité entonces.

    No le engañé. Ni le engañe, ni le enternecí, ni le conmoví con mi falso candor.

  • 36

    -¿Con quién estás en esto, Sira? – preguntó lentamente sin despegar la vista de la

    carretera. Me giré y contemplé su perfil en la penumbra. La nariz afilada, la mandíbula

    fuerte; la misma determinación, la misma seguridad. Parecía el mismo hombre de los

    días de Tetuán. Parecía.

    -¿Con quién estás tú, Marcus?

    En el asiento trasero, invisible pero cercana, se instaló con nosotros una pasajera más:

    la suspicacia.” (Dueñas, 2009:583)

    Al final de la novela, todo se resuelve: Marcus también es un agente para los británicos y todo

    está aclarado así que Sira finalmente puede confiar en él por completo. Se da cuenta de que su

    relación no va a ser fácil, pero sí se atreve a hacerlo:

    “-Sabes a lo que nos enfrentamos ¿verdad? Lo sabía. Claro que lo sabía. Nos

    movíamos en pantanos de aguas turbias, en una jungla de mentiras y engranajes

    clandestinos con aristas capaces de cortar como cristal. Un amor encubierto en tiempo

    de odios, carencia y traiciones, eso era lo que teníamos por delante” (Dueñas, 2009:

    607).

    Sin embargo, Sira está convencida que todo saldrá bien: “tuve la certeza rotunda de que

    tampoco en esa misión íbamos a fracasar” (Dueñas, 2009: 607). Dicho de otro modo, es obvio

    que Sira ha crecido dentro de la novela: al final está muy segura de sí misma, sabiendo que no

    va a fracasar en los objetivos que quiere lograr. En cuanto a sus relaciones amorosas, resulta

    que también se ha desarrollado de dos formas. Primero vemos que es capaz de confiar de

    nuevo en los hombres ya que se atreve a empezar una relación con Marcus en tiempos

    convulsos. Además de esto, resulta que Sira no se enamora otra vez de un hombre malo y

    atractivo, dado que no se deja impresionar ni decepcionar por el charlatán Manuel Da Silva.

    Esto quiere decir que también ha aprendido de su error en el pasado, que fue enamorarse de

    Ramiro.

    Si observamos la vida amorosa de Amelia vemos que hubo más hombres en comparación con

    la vida de Sira, cada uno con un papel particular dentro de la trama así como en la vida de la

    mujer bella. Al inicio de la novela, el hombre principal es su primer novio formal que viene a

    ser su marido, o sea Santiago. Luego está con Pierre Comte, el hombre de su vida pero a la

  • 37

    vez el que más la hiere. Después vemos Amelia al lado del americano Albert James y por

    último está con el barón Max von Schumann. En una entrevista de El Imparcial, Navarro

    explica qué representan esos hombres:

    “Gracias a Santiago, el marido de Amelia, relato el final de la II República; Pierre me

    sirve para describir lo que significó la Revolución Soviética y el estalinismo; con

    Albert James sitúo la escena en la Europa de entreguerras; con Max hablo de la II

    Guerra Mundial; y, por fin, con Friedrich [el hijo de Max] cuento lo que fue la Guerra

    Fría. De manera que he tratado de narrar la historia de varios hombres cuyas vidas

    nunca habrían tenido ningún punto en común salvo Amelia.” (Navarro en El

    imparcial, 2010)

    Dicho de otro modo, Santiago, Pierre, Albert y Max representan, cada uno de ellos, tanto un

    perío