el amor segun gustavo becquer

7
El verdadero amor según Bécquer El amor es el motor de nuestras vidas. Como San Pablo le escribió en su carta a los Corintios: “Si no tengo amor, no soy nada”: "Aunque yo hablara todas las lenguas de los hombres y de los ángeles, si no tengo amor, soy como una campana que resuena o un platillo que retiñe. Aunque tuviera el don de la profecía y conociera todos los misterios y toda la ciencia, aunque tuviera toda la fe, una fe capaz de trasladar montañas, si no tengo amor, no soy nada. Aunque repartiera todos mis bienes para alimentar a los pobres y entregara mi cuerpo a las llamas, si no tengo amor, no me sirve para nada. El amor es paciente, es servicial; el amor no es envidioso, no hace alarde, no se envanece, no procede con bajeza, no busca su propio interés, no se irrita, no tiene en cuenta el mal recibido, no se alegra de la injusticia, sino que se regocija con la verdad. El amor todo lo disculpa, todo lo cree, todo lo espera, todo lo soporta. El amor no pasará jamás. Las profecías acabarán, el don de lenguas terminará, la ciencia desaparecerá."(San Pablo). Es, también, uno de los temas más importantes de la literatura de todos los tiempos. Abundan las obras en las que los personajes están dispuestos a hacer lo que sea para lograrlo. Sin embargo, muchas veces se confunde el amor con otro tipo de sentimientos. El amor libera, no esclaviza. A través del análisis de dos leyendas de Gustavo Adolfo Bécquer “La ajorca de oro” y “El monte de las ánimas” demostraremos que no puede llamarse amor al sentimiento que provoca la perdición del ser amado. Para comenzar, analizaremos “La ajorca de oro”. Esta leyenda se puede situar en el Romanticismo, donde a la

Upload: juani-cid

Post on 18-Feb-2016

217 views

Category:

Documents


1 download

DESCRIPTION

Gustavo Adolfo Becuqer explica en dos de sus ibras como es el amor veradero.

TRANSCRIPT

Page 1: El amor segun Gustavo Becquer

El verdadero amor según Bécquer

El amor es el motor de nuestras vidas. Como San Pablo le escribió en su carta a

los Corintios: “Si no tengo amor, no soy nada”:

"Aunque yo hablara todas las lenguas de los hombres y de los ángeles, si no tengo amor, soy como una

campana que resuena o un platillo que retiñe.

Aunque tuviera el don de la profecía y conociera todos los misterios y toda la ciencia, aunque tuviera

toda la fe, una fe capaz de trasladar montañas, si no tengo amor, no soy nada.

Aunque repartiera todos mis bienes para alimentar a los pobres y entregara mi cuerpo a las llamas, si no

tengo amor, no me sirve para nada.

El amor es paciente, es servicial; el amor no es envidioso, no hace alarde, no se envanece,

no procede con bajeza, no busca su propio interés, no se irrita, no tiene en cuenta el mal recibido,

no se alegra de la injusticia, sino que se regocija con la verdad.

El amor todo lo disculpa, todo lo cree, todo lo espera, todo lo soporta.

El amor no pasará jamás. Las profecías acabarán, el don de lenguas terminará, la ciencia

desaparecerá."(San Pablo).

Es, también, uno de los temas más importantes de la literatura de todos los tiempos.

Abundan las obras en las que los personajes están dispuestos a hacer lo que sea para

lograrlo. Sin embargo, muchas veces se confunde el amor con otro tipo de

sentimientos. El amor libera, no esclaviza. A través del análisis de dos leyendas de

Gustavo Adolfo Bécquer “La ajorca de oro” y “El monte de las ánimas” demostraremos

que no puede llamarse amor al sentimiento que provoca la perdición del ser amado.

Para comenzar, analizaremos “La ajorca de oro”. Esta leyenda se puede situar

en el Romanticismo, donde a la mujer se la presenta de dos maneras: mujer ángel y

mujer demonio. En esta obra de Bécquer la primera impresión que tiene el personaje

de Pedro Alonso sobre María Antúnez es que es una mujer ángel. Debido a que él la

encuentra sola, llorando cree que es una mujer honesta, bondadosa. Pedro como

estaba enamorado de ella quería saber que le pasaba para ver en qué forma podía

ayudarla. María le cuenta a Pedro sobre una ajorca de oro que ella había visto en la

iglesia de la ciudad mientras rezaba y que también había soñado con ella. María

soñaba con tener esa joya. Mientras que Pedro intentaba hacer todo lo posible para

ayudarla. Aquí es donde aparece la mujer demonio en María Antúnez ya que al ver que

Page 2: El amor segun Gustavo Becquer

Pedro estaba dispuesto a hacer todo para que ella esté satisfecha y dejara de llorar,

hace comentarios que llevan a Pedro a querer conseguirle la ajorca de oro del Sagrario

de la Catedral de Toledo. La mujer demonio es perversa, hace sufrir al hombre. Esta

reacción de María hace que Pedro decida robar la joya de la Virgen. El día de la fiesta

religiosa en la Catedral, Pedro esperó a que todos se fueran. Cuando el lugar estaba

desierto Pedro entró; ya estaba decidido en lo que iba a hacer. Él amaba a María y no

soportaba verla sufrir. No obstante María no amaba a Pedro como él la amaba a ella,

María utilizaba a Pedro jugando con sus sentimientos para su beneficio. Cuando Pedro

se acercó a la estatua de la Virgen, la miró fijamente y cerró los ojos, se sentía

inseguro. Como si no estuviese solo, como si alguien o algo querían impedirle que

robara la ajorca de oro. Luego, se trepó a la Virgen, tomó la joya y bajó, pero sus ojos

permanecían cerrados. Al abrirlos vio como la iglesia se había llenado de estatuas que

lo miraban fijamente. La iglesia estaba llena de estatuas de guerreros, ángeles,

villanos, santos, obispos, todo era horrible. Finalmente Pedro se desmayó. Al otro día

los trabajadores de la iglesia lo encontraron tirado frente a la estatua de la Virgen. Se

acercaron a él, aún tenía la ajorca de oro en su mano y con el poco aliento que tenía

exclamo “¡Suya, suya!” mirando a la Virgen. Esta leyenda de Bécquer muestra lo que un

hombre está dispuesto a hacer por la mujer que ama. Esto es el amor verdadero, es un

amor platónico, impredecible. Como Bécquer alguna vez dijo: “El amor es un misterio. Todo

en él son fenómenos a cual más inexplicable; todo en él es ilógico, todo en él es vaguedad y

absurdo.”(Gustavo Adolfo Bécquer). En esta frase él está diciendo que cuando uno está

enamorada no hace cosas lógicas o cosas que se puedan entender, sino lo que cree

mejor para su amada.

Asimismo, otra leyenda de Bécquer “El monte de las ánimas” también narra

una historia sobre el amor verdadero. Esta leyenda cuenta como Alonso y Beatriz, que

están enamorados, van a una expedición de cazadores al monte de las ánimas junto a

sus padres, los condes, pero no podían pasar la noche allí porque era 1 de noviembre,

día de Todos los Santos. Se decía que en esa fecha, en el monte de las ánimas, los

antiguos guerreros que habían luchado por Soria salen de sus tumbas y corren con los

animales del monte. Una vez en casa de los condes, Alonso le ofrece una joya como

regalo a Beatriz ya que en poco tiempo dejarían de verse, ella no quiere aceptarlo

porque eso significaba un compromiso aunque luego él la convence y lo acepta. Por lo

Page 3: El amor segun Gustavo Becquer

que Alonso le exige un regalo por parte de ella. Ella le dice que le iba a regalar un

pañuelo azul que extravió mientras cruzaban el monte de las ánimas y que si lo quería

debía ir a recuperarlo. Alonso estaba dispuesto a hacer todo por Beatriz porque la

amaba pero no se sentía lo suficientemente valiente como para ir al monte de las

ánimas de noche. Sin embargo, luego de ver la sonrisa en el rostro de Beatriz, Alonso

no puede soportarlo y decide ir al monte. Aquí podemos observar como Beatriz

indirectamente actúa como una mujer demonio ya que de alguna manera obliga a

Alonso a arriesgar su vida por obtener un regalo de ella. Alonso va al monte. Esa noche

Beatriz no podía dormir y se puso a rezar, se sentía culpable de que algo le pase a

Alonso por culpa suya. Con esta última actitud de Beatriz podemos decir que el amor

verdadero también está presente en ella. Al otro día se despertó más tranquila. Pero

luego vio en su reclinatorio el pañuelo azul que había ido a buscar Alonso pero este

estaba sangriento y desgarrado. Ergo, cuando los servidores del conde fueron a

notificarle a Beatriz la muerte de su amado Alonso que había sido devorado por los

lobos en el monte de las ánimas la encontraron paralizada. “Cuando sus servidores llegaron

despavoridos a noticiarle la muerte del primogénito de Alcudiel, que a la mañana había aparecido

devorado por los lobos entre las malezas del Monte de las ánimas, la encontraron inmóvil, crispada,

asida con ambas manos a una de las columnas de ébano del lecho, desencajados los ojos, entreabierta la

boca; blancos los labios, rígidos los miembros, muerta; ¡muerta de horror!”(“El monte de las ánimas”,

capítulo III). Más aún se dice que días después de esto un cazador que logró pasar la

noche en el monte de las ánimas vio como los cuerpos de los guerreros de Soria se

levantaron de sus tumbas y perseguían a una mujer con los pies desnudos y

ensangrentados caminaba alrededor de la tumba de Alonso. Este último

acontecimiento nos hace pensar que esa mujer era Beatriz y que estaba totalmente

arrepentida de que Alonso haya muerto por culpa suya. Por lo que en esta leyenda el

amor verdadero existe en ambos personajes. A pesar de que la mujer demonio de

Beatriz llevó a Alonso a la muerte, ella también lo amaba.

En fin tanto “La ajorca de oro” como “El monte de las ánimas” son leyendas en

las que el amor verdadero es la temática central. En la primer leyenda, Pedro se

compromete a robar la joya de la Virgen con tal que su amada, María, deje de llorar,

aunque esto lo lleve a su perdición. Por lo tanto el sentimiento de María hacia Pedro

no es amor verdadero, sino un amor egoísta. Por otro lado, en “El monte de las

Page 4: El amor segun Gustavo Becquer

ánimas” Alonso decide ir al monte de noche a buscar el pañuelo azul teniendo en

cuenta los peligros que esto implica. Él lo hace ya que está enamorado de Beatriz. Esto

llevó a la perdición a Alonso; de modo que lo que Beatriz siente por Alonso no es amor

verdadero, aunque luego ella se arrepiente de lo ocurrido y queda paralizada al saber

de su muerte. En pocas palabras, el amor verdadero es desinteresado e incondicional,

no conoce fronteras y no es crítico, es dar sin pedir nada a cambio, es genuino,

cariñoso y busca la felicidad de la otra persona. En mi opinión en el ideal inalcanzable

al que aspiran los protagonistas, paradójicamente encuentran su perdición,

quebrantando una prohibición.

Page 5: El amor segun Gustavo Becquer

Bibliografías:

Bécquer, G. (1871). La ajorca de oro. España.

Bécquer, G. (1871). El monte de las ánimas. España.

Biblia, Carta San Pablo a los Corintios.

Amor, https://es.wikipedia.org/wiki/Amor.

Romanticismo, https://es.wikipedia.org/wiki/Romanticismo.

Frases de amor de Gustavo Adolfo Bécquer, http://frases-

citas.euroresidentes.com/2012/11/escritor-espanol-perteneciente-al.html.

Ricardo Kirschbaum (2005). Amor. Gran Enciclopedia Universal Espasa Calpe

(vol. 3, pp. 640-641).

Ricardo Kirschbaum (2005). Romanticismo. Gran Enciclopedia Universal Espasa

Calpe (vol. 34, pp. 10250-10251).