Ciudad: Cochabamba

Fecha: 02/09/13

Entrevistada: Eduardo Nogales

UNIR Cochabamba

AC.- La Daniela me resumió el tema así, en Cochabamba es muy complejo, entender la escuela como un espacio de reproducción o un espacio de innovación o transformación, que viene a hacer el horizonte en el que la cultura de paz y la gestión deberían contribuir. Tú ¿cómo reflexionarías al respecto?

EN.- Hemos hablado varias veces a partir de la experiencia que tuve yo como responsable de la reforma educativa en Cochabamba, últimamente Oruro después Cochabamba, tratando de que se materialice la reforma educativa en la transformación curricular en el aula con dos proyectos gigantescos: el famoso PEN o Proyecto Educativo de Núcleo y el Proyecto Educativo Municipal. El objetivo era materializar en aula, no en teorías, la transformación curricular, ahí me di cuenta el fenómeno de lo que implica una transformación curricular de terreno. Una transformación curricular, una transformación educativa, o una transformación pedagogía esencialmente es una transformación de la mente y en cuento sea una transformación de la mente tiene que ocurrir inicialmente en la mente y no en el aula. Encarar desde la materialidad del mundo que es el aula o técnico tiene una serie de dificultades porque se puede diseñar, objetivos, metodologías, didácticas e instrumental transformadores, pero si es que el sujeto que va a realizar la transformación, tiene un modelo mental que no está acorde con todo ese diseño curricular fracasa el proceso. Ocurre lo mismo y es uno de las grandes reflexiones que tengo con la reforma anterior es exactamente eso, que no se desarrollaron apropiadamente estrategias de corto, largo y mediano plazo. ¿Cómo con ellos, que iban a ser sujetos de la transformación curricular educativa podríamos llevar acabo con más éxito del que se ha tenido? Se ha dejado mucho énfasis en los documentos, en los diseños, diseño mal desarrollado para la capacitación permanente. Hay Unidades Educativas que están en los quintos infiernos, llamadas Unidades Seccionales porque la educación en Bolivia tiene un diseño urbano y rural que no se ha roto aunque digan que es popular, que no se ha roto el núcleo escolar y sus satélites. Es verdaderamente heroico lo que pasa con esas maestras que van por primera vez a esas seccionales y las encuentras en la soledad absoluta trabajando con los niños. En el caso de la cultura de paz son paradigmas que tocan logos o sea conocimientos y tocan actitudes o sea valores: tocan cosas tangibles y cosas intangibles, los valores son cosas intangibles, son un conjunto de aspectos, consideraciones, construcciones, símbolos, ritos, liturgias que hacen parte de esa continuidad de valores que se dan desde la infancia, en cambio el conocimiento son cosas bien concretas que se van a la aritmética, a ese tipo de conocimiento. Como es un paradigma que va tocar integralmente varias cosas va a ser siempre difícil la transformación educativa cuando se apela exclusivamente, yo llamo a un extremo de dinamitis, dinamitis es

una especie de obsesión con las dinámicas, no digo que está mal si no insuficiente. Además se intenta ir a una transformación mental, un modelo mental me refiero, cuando directamente creemos, intentamos que esta transformación hacia la cultura de paz y resolución de conflictos sólo se toque a una parte de la comunidad educativa. La experiencia que tuve es que no puedes hacer transformación curricular en aula si no atacas, si no tocas y consideras la Junta de Distrito, la Junta Escolar, el profesorado, los Directores, los administrativos, el conjunto incluyendo a quienes se supone hacen el seguimiento continuo del proceso educativo formal que son los servicios educativos departamentales, las Direcciones Distritales y en este caso específico lo que pasa con Fe y Alegría que tiene un equipo técnico que se supone que debería estar trabajando en el seguimiento, acompañamiento, mejoramiento de lo técnico, es el segundo punto que se debe considerar para una transformación curricular que es un cambio de paradigma, no es cambio de un conocimiento, es un modelo mental que se tiene respecto la violencia, respecto a la paz, respecto a lo que consideramos como historia, como contexto histórico social y político, económico, es mucho más delicado y complejo. Tercero, un diseño curricular de esta naturaleza debe elaborarse según los grupos que conforman esa comunidad educativa. No es lo mismo educar con el mismo modelo a un grupo de profesores que tiene licenciatura, etc., que ir a formar a un grupo de padres, por la diversidad algunos son analfabetos funcionales, hay una diversidad, pero además aquí estamos hablando – y cuando hablo de la comunidad educativa es de los alumnos más- de que debe enfocarse un trabajo con los alumnos, los alumnos también requieren un trabajo diferenciado al de los padres y de los profesores, no debe ser un modelo unívoco. Si solo consideramos estos tres elementos que puede uno seguir desarrollando, el contexto, las TIC, el debilitamiento del monopolio de la información que era la escuela, el momento crítico que tiene la propia escuela formal en el mundo, pero está ahí, ¿qué haces ante una escuela que ya no es atractiva frente a lo que son las TIC?, las técnicas de información contemporánea celular, Internet, Facebook, Twitter, las redes sociales. Y la nueva lógica de socialización del joven y del niño contemporáneo que ya no es el barrio, el juego, la cachina, ya no es. Sus roles, sus niveles de socialización son más complejos delicados y peligrosos: la calle, el barrio, el grupo, el bullyng que se está convirtiendo en una institución de socialización o sea la violencia se está constituyendo como un ente de socialización, esos contextos que están ahí son terribles. Habría siempre dificultades en obtener resultados concretos a corto plazo cuando el tema es tan complejo, tendríamos que tener intervenciones más integrales considerando estos componentes. Después se puede hablar aparte del modelo mismo.

AC.- Entiendo tu visión global, ayer hablando con las escuelas y el equipo, decíamos: un conflicto, el que sea, es una totalidad y esa totalidad no es porque falta un mejor reglamento, o porque falta mejor capacitación o porque hay bullyng si no porque todos estos elementos de los que me estas comentado, cultura tecnología, influencias externas, trabajo, pobreza, analfabetismo de la familia, capacitación insuficiente de los profesores, se entretejen y brota un conflicto X que no es sino la punta del iceberg. Entonces lo que tú me comentas es que una

propuesta con dinámicas alternativas, activas, motivadoras, integrales, en la teoría, uno: con los colegas, con los Directores solamente, segundo: no trabajar además de con los colegas docentes y sus Directores, con la comunidad, los papás, la Junta Escolar, la Junta de Vecinos el Director Departamental y su equipo, Fe y Alegría como institución ese ámbito interinstitucional súper complejo, las organizaciones que estarán alrededor de la escuela, la organización de estudiantes, la parroquia, cuántos actores que están alrededor, por un lado. Por otro lado, el contexto legislativo, político, geográfico, cultural y además si tienes un diseño curricular que parece homogéneo no podríamos influir efectivamente en ese conflicto.

EN.- Para todo es sistema y las teorías de la complejidad contemporáneas y la ciencia de la complejidad definitivamente te hace ver que hemos roto la escuela de la modernidad, estamos en un proceso despedazado de la modernidad, su enfoque de la escuela esté hecho añicos, y ¿qué es la modernidad? la centralidad y la fragmentación, estudias y enfrentas las realidades que son fragmentadas, para intervenir solo esa parte. Esa visión del fragmento todavía está, si bien el proyecto de la modernidad, está caído, pero todavía queda ese enfoque en la mentalidad. Se entiende, no es que de la noche a la mañana los modelos mentales insertos en la cabeza acaban, están abandonándose lentamente lo que siglos ha depositado en los sedimentos de la memoria, del sujeto y del subconsciente y a cada rato aparece esa modernidad vencida, la extrema racionalización de las cosas, logos por encima de todo lo que son las otras cosas, sobre los valores, pero se está abandonando. Entramos con la cultura de paz a las escuelas con un paradigma postmoderno, si bien es antiguo el anhelo de paz, pero como enfoque, como proyecto societal y estatal –porque está inserto en la Constitución Política del Estado- es postmodernidad es decir después de la modernidad. No me voy a esa máxima y coherente relación que has hecho sino hasta donde es posible lo útil y lo práctico, digo comunidad educativa en todos sus componentes y con enfoques pedagógicos diferenciados, instituciones que están alrededor de ellas, SEDUCA, Direcciones distritales, el equipo técnico de Fe y Alegría, por lo menos debemos apostar a una normativa como la Avelino Siñani y Elizardo Pérez, que creo que están apostando también a algo de una cultura de paz, no tengo a ciencia cierta un conocimiento de fondo. Pero, en todo caso, todo esto que estrechamente en forma directa está interrelacionado como subsistema de un sistema mayor, debería contemplar su interior, para trabajar en forma integral, un modelo mental, estamos yendo hacia un modelo mental, que no debemos privilegiar lo técnico sino el enfoque integral multidisciplinario y complejo de los actores de este subsistema. Estoy hablando de sistemas y subsistemas, pero no en términos de lo que la educación habla, sino por ejemplo el sistema nacional, que dentro la lógica de la teoría compleja es un sistema que a la vez va a ser subsistema de algo mayor: son redes altamente integradas. Pero no me estoy yendo a eso, simplemente a lo operativo de lectura, el subsistema departamental de educación, con sus otros pequeños subsistemas como Fe y Alegría hacen. Entonces estoy indicando que nos ha faltado esa visión integral, que necesariamente requerimos y de ahí que a veces identificamos causalidades ilusorias.

AC.- Ahora entiendo esa aclaración que haces, ayer y viendo en Tarija, en La Paz, El Alto y ahora Cochabamba, también he visto que los colegas, encuentran –con las experiencias que está desarrollando UNIR en sus escuelas de Fe y Alegría- indicios de hacer una práctica personal y profesional distinta. Entre unos y otros sobre todo, ¿por qué? Porque la escuela como tú dices y bien sabes, hay conflictos en la gestión, más allá, que salen de las reglas, de las normas, son cuestiones personales, llega al nivel interpersonal, porque eso modelos mentales, de género, autoritarios, verticalistas, machistas y demás, se van reproduciendo permanentemente y hay así ciertos conflictos interpersonal que medran la gestión institucional de la escuela, entre Director y profesores, entre profesores y demás. Ahora, con las técnicas, estás dinámicas que evidentemente son insuficientes, con la propuesta de cultura de Paz y gestión constructiva de conflictos, yo siento que los colegas encuentran una forma distinta de afrontar esos conflictos y una forma distinta de abordarlos y no de no ahogarlos o de ahondarlos, sino más bien de gestionarlos o de manejarlos o bien de solucionarlos si es que eso es posible. Por otro lado, encuentran en ello las posibilidades de abordar su trabajo profesional de otra manera, con los chicos y los testimonios son elocuentes, probablemente insuficientes, pero son elocuentes porque las profesoras se emocionan al encontrar una alternativa en sus modos de relacionamiento con estos aspectos de conflictos y su trabajo profesional.

ED.- Yo te he enfocado una visión grande, ahora analicemos ahora, lo que concretamente es el proceso de aprendizaje, que tiene su propia historia de lucha interna hasta que por fin advertimos que desde el 2010, 2011 recién empezamos a pensar los resultados, a armar de mejor manera el proceso de aprendizaje. Y se fue con fuerza el 2012, que recién es el enfoque que tú conoces y eso es comprensible, las instituciones también maduran, se desarrollan, cometen tropiezos, aciertos. Una institución como UNIR, reflexiva, crítica, intensa y que permanentemente se discute: cuesta. Ese modelo está enmarcado en, lo que te decía, postmodernidad: razón, ciencia, positivismo, todo lo que es valores, espíritu, creencia, fue desechado por la humanidad. Entonces, la apuesta es absolutamente contemporánea, absolutamente pertinente al mundo y al país, la urgencia de trabajar nuevos paradigmas para una sociedad que está entrando a nuevos aspectos y UNIR se convierte en una vanguardia en el país, a pesar de que les fue difícil. Es impresionante lo que ha pasado en el congreso, ya no estamos solos, no estamos hablando como si nosotros nomás nos comprendiéramos. No, han pasado muchas cosas positivas en estos nueve años, me emociona saber que se está posicionando de una manera tan fuerte el trabajo y el movimiento de cultura de paz en el país. Entonces, la pertinencia, no solamente a una cuestión coyuntural, sino a una cosa mayor, planetaria y también del país. Ahora, por supuesto, que lo que hemos hecho entre el 2011, 2012 y 2013, aún con la vista todavía parcial, de lo mencionado arriba, es posible. No hay otro campo en lo que es educación para la gestión constructiva, cómo lo hemos enfocado