editorial deliriodelirio.es/fragmentos/bizarrofragmento.pdfnico munuera sonia navarro ... nuestro...

20
bizarro ERNESTO CASTRO CÓRDOBA FERNANDO CASTRO FLÓREZ ÁNGEL ANTONIO RODRÍGUEZ AVELINO SALA DAVID SÁNCHEZ USANOS DOMINGO SÁNCHEZ BLANCO DOMINGO SÁNCHEZ ZARZA EDITORIAL DELIRIO

Upload: trankhue

Post on 20-Mar-2018

213 views

Category:

Documents


0 download

TRANSCRIPT

Page 1: EDITORIAL DELIRIOdelirio.es/fragmentos/bizarrofragmento.pdfNico Munuera Sonia Navarro ... nuestro poeta en la Soledad II a la hora de describir una red de pescar: ... Leoncio, hijo

biza

rro

SO

S4.8

bizarroEl concepto de “bizarro” es sumamente ambiguo; ni siquiera está claro etimológicamente cuál es su verdadero sentido y origen. Algunos defienden que procede del vasco “vicarra” hombre de barba o pelo en pecho. Otros le dan el sentido que aparece en la Divina Comedia de Dante referido al “spirito bizarro” como espíritu furioso o iracundo al referirse a uno de los personajes de su Infierno que se da mordiscos a sí mismo. Por el contrario, en francés se define “bizarre” como lo “extraño” o lo “extravagante”. En el Diccionario de la Real Academia de la Lengua Española “bizarro” aparece como “valiente, esforzado, generoso, lúcido y espléndido”, mientras que “bizarría” añade el sentido de “colorido o adorno exagerado”. Lo cierto es que no hay una definición única sobre el concepto, ni a nivel lingüístico ni a nivel de teoría del arte. Respecto de esto último, en el mundo artístico, lo “bizarro” se suele entender como lo extremo, lo rechazable, lo extremado, lo estéticamente desagradable, lo feo, lo monstruoso, lo repugnante, lo que provoca repulsión o lo abyecto. En el seno del Festival SOS4.8 (Murcia, 2010) se ha organizado una exposición titulada “Bizarro”. Un blog, en el que se comenzó como un contubernio caníbal, ha (re)calentado la cosa durante medio año. En este libro se recogen materiales de ese delirio así como intentos (frustrados afortunadamente) de “definir” tan desconcertante asunto. [Fasten Seat Belt].

9 788493 749545

ErnEsto Castro CórdobaFErnando Castro FlórEzÁngEl antonio rodríguEz

avElino saladavid sÁnChEz usanos

domingo sÁnChEz blanCo domingo sÁnChEz zarza

EDITORIAL

D E L I R I O

Page 2: EDITORIAL DELIRIOdelirio.es/fragmentos/bizarrofragmento.pdfNico Munuera Sonia Navarro ... nuestro poeta en la Soledad II a la hora de describir una red de pescar: ... Leoncio, hijo

BIZARROSOS 4.8

Page 3: EDITORIAL DELIRIOdelirio.es/fragmentos/bizarrofragmento.pdfNico Munuera Sonia Navarro ... nuestro poeta en la Soledad II a la hora de describir una red de pescar: ... Leoncio, hijo
Page 4: EDITORIAL DELIRIOdelirio.es/fragmentos/bizarrofragmento.pdfNico Munuera Sonia Navarro ... nuestro poeta en la Soledad II a la hora de describir una red de pescar: ... Leoncio, hijo

BIZARROSOS 4.8

Con intervenCiones de

Ernesto Castro CórdobaFernando Castro Flórez

Ángel Antonio RodríguezAvelino Sala

David Sánchez UsanosDomingo Sánchez Blanco y

Domingo Sánchez Zarza

Edición al cuidado de Ernesto Castro Córdoba

EDITORIAL

D E L I R I O

Page 5: EDITORIAL DELIRIOdelirio.es/fragmentos/bizarrofragmento.pdfNico Munuera Sonia Navarro ... nuestro poeta en la Soledad II a la hora de describir una red de pescar: ... Leoncio, hijo

Primera edición: abril 2010

BIZARRO. SOS 4.8

Colección Río de Oro, 2

© 2010, de los textos: los propios autores.© 2010, EDITORIAL DELIRIO S.L.www.delirio.es / [email protected]

Diseño del libro: Fabio de la FlorDiseño de la cubierta: Festival SOS 4.8

Impreso en Iberoprinter, Salamanca, España.

ISBN: 978-84-937495-4-5Depósito Legal:

Prohibida su reproducción total o parcial por cualquier medio de impresión o digital, en forma idéntica, extractada o modificada, en castellano o en cualquier otro idioma, sin la autorización expresa de la editorial.

Page 6: EDITORIAL DELIRIOdelirio.es/fragmentos/bizarrofragmento.pdfNico Munuera Sonia Navarro ... nuestro poeta en la Soledad II a la hora de describir una red de pescar: ... Leoncio, hijo

7

Bizarro comenzó como «Contubernio Caníbal». Ángel Antonio Rodríguez me invitó a hacer un taller en AlNorte 2009 en el que quería que también interviniera Bernardí Roig con que ya había tenido una experiencia similar en el Laboratorio de Arte Jovén que dirige Sergio Porlán en Murcia. Finalmente, como andaba dándole vueltas a los libros de Jenkins sobre «convergencia cultural», pensé que era mejor contar con mucha más gente. Así tiré, como es mi costumbre, de Domingo Sánchez Blanco y me dispuse a implicar a otros amigos y colegas: Maite Centol y Orson San Pedro. Mi hijo Ernesto se sumó entusiasmado y también David Sánchez Usanos que firmó en el blog como «Heterodoxo». Más tarde apareció con una energía inmensa Domingo Sánchez Zarza. Durante tres meses desplegamos una actividad febril que sedimentó en el taller del mes de diciembre del 2009 en Gijón donde comimos oficios en plan frenético. A los pocos días llegó la tristísima noticia del fallecimiento de Orson San Pedro. Desde el principio mi intención era prolongar el Contubernio en Bizarro que es el proyecto que he preparado para el festival SOS 4.8 en Murcia. Este libro es una pequeña inmersión en un blog que tiene más de un millar de entradas y en el que triunfa la lógica del delirio.

Fernando Castro Flórez

Leyenda

(ECC) Ernesto Castro Córdoba(FCF) Fernando Castro Flórez(AAR) Ángel Antonio Rodríguez(AS) Avelino Sala(DSU) David Sánchez Usanos(DSB) Domingo Sánchez Blanco(DSZ) Domingo Sánchez Zarza

Page 7: EDITORIAL DELIRIOdelirio.es/fragmentos/bizarrofragmento.pdfNico Munuera Sonia Navarro ... nuestro poeta en la Soledad II a la hora de describir una red de pescar: ... Leoncio, hijo

8

Artistas participantes en BIZARRO, proyecto expositivo para el SOS 4.8 de Murcia:

Baltazar Torres. (Portugal)Domingo Sánchez Blanco. (España)Samantha Sweeting. (Inglaterra)Kaoru Katayama. (Japón)Pelayo Varela. (España)Jesús Segura. (España)Javier Pividal. (España)Manuel Saiz. (España)Regina José Galindo. (Guatemala)Yukihiro Taguchi. (Japón)José Bechara. (Brasil)Arturo Cariceo. (Chile)Cristián Silva. (Chile)Tony Capellán. (República Dominicana)Jorge Pineda. (República Dominicana)Marlon de Azambuja. (Brasil)Sofia Mutter. (Dinamarca)Rebecca Junker. (Suecia)Los Rodroc. (Rumanía)Paco Cao. (España)Martín Lejarraga & Ana Martínez. (España)Fernando Iglesias. (España)Daniel Jacoby. (Peru)Cagon & Crista (EEUU)Chus Cortina (España)V Virrey de Sicilia. (España)

Page 8: EDITORIAL DELIRIOdelirio.es/fragmentos/bizarrofragmento.pdfNico Munuera Sonia Navarro ... nuestro poeta en la Soledad II a la hora de describir una red de pescar: ... Leoncio, hijo

9

La pieza de Martin Lejarraga & Ana Martínez, CARAVANA_SOS 4.8, es una furgoneta-museo que tiene obras a tamaño reducido. Los artistas que van dentro de ella –y que por lo tanto forman parte de la exposición– son los siguientes:

CharrisSicreAngela AcedoJR AmondarainArakiJavier ArceEduardo BalanzaArnal BallesterRosalía BanetCantabellaAmy BennettJuan Manuel Castro PrietoEduardo CortilsJuan Manuel Díaz BurgosDis BerlinCésar Fernández AriasDamián FloresFodMarcelo FuentesMiguel FructuosoJuana JorqueraAbi LazkozMiki LealMaider LópezChema MadozGuillermo Martín Bermejo

Fernando Martín GodoyMateo MatéSantiago MayoTomás MendozaEugenio MerinoTeresa MoroSofía MoroMP&MP RosadoManu MuniateguiandikoetxeaNico MunueraSonia NavarroJulian OpieMaría OrtegaPaco PometRuth Quircethe Royal Art LodgeFernando RenesGamaliel RodríguezManuel SaroJosé Luis SerzoTeresa Tomásel TonoPaco de la TorreJuan UgaldeDaniel Verbis

Page 9: EDITORIAL DELIRIOdelirio.es/fragmentos/bizarrofragmento.pdfNico Munuera Sonia Navarro ... nuestro poeta en la Soledad II a la hora de describir una red de pescar: ... Leoncio, hijo

“warning & danger: los textos que vienen a continuación en esta compilación bizarra están llenos de erratas, aberraciones or-tográficas y otros desafueros. No son deliberados aunque tampoco pueden corregirse. Su caracte-rística principal es la velocidad, el delirio y la voluntad de actuar como un derechazo al mentón. Todos los ortodoxos de la lengua deben aceptar las disculpas que damos por adelantado”.

Page 10: EDITORIAL DELIRIOdelirio.es/fragmentos/bizarrofragmento.pdfNico Munuera Sonia Navarro ... nuestro poeta en la Soledad II a la hora de describir una red de pescar: ... Leoncio, hijo

11

Ahí los tenéis, malditos, saciaos del hermoso espectáculo

Ernesto Castro Córdoba

Comprender el significado de lo bizarro supone comprender la capacidad que tiene algo Otro de producir un bombardeo de detalles. No en vano, en el Barroco se solía utilizar el término bizarro como sinónimo de oscuridad y dificultad de comprensión. De hecho, solemos encontrar referencias a Góngora como «el poeta de lo bizarro» o simplemente «el bizarro», por su capacidad de «originar», a través de la palabra, mundos nuevos no comprensibles en su totalidad, pero rabiosamente atractivos merced a su alteridad exhibida –hasta el límite de lo inhóspito diríamos–. He aquí la clave del extrañamiento producido por la obscenidad de lo bizarro: no hay mirada que lo traspase, pero tampoco que lo eluda. Así, una de las primeras imágenes en relación con lo bizarro sería aquella utilizada por nuestro poeta en la Soledad II a la hora de describir una red de pescar: «laberinto nudoso, de marino/ Dédalo, si de leño no, de lino/ fábrica escrupulosa, y aunque incierta,/ siempre murada, pero siempre abierta.» Opacidad, rechazo y, por otro lado, posibilidad siempre abierta, se dan cita en lo bizarro, quien lo duda.

El sentimiento pulsional de lo bizarro puede, tal vez, ser esclarecido a la luz de la análoga pulsión de muerte, tal y como fue descrito por Platón en el Libro IV de la República. Allí, Leoncio, hijo de Aglayon, a la vista de los «cadáveres que estaban echados por tierra al lado del verdugo comenzó entonces a sentir deseos de verlos, pero al mismo tiempo le repugnaba y se retraía; y así estuvo luchando y cubriéndose el rostro hasta que, vencido

Page 11: EDITORIAL DELIRIOdelirio.es/fragmentos/bizarrofragmento.pdfNico Munuera Sonia Navarro ... nuestro poeta en la Soledad II a la hora de describir una red de pescar: ... Leoncio, hijo

12

de su apetencia, abrió enteramente los ojos y, corriendo hacia los muertos, dijo: «¡Ahí los tenéis, malditos, saciaos del hermoso espectáculo.» A pesar de las conexiones entre el unheimlich freudiano y la bizarría barroca, lo bizarro siempre va un punto más allá de lo siniestro, adentrandose en el peligroso y cínico campo de la risa hacia lo trágico de la vida del otro, risa que rápidamente se transforma en mueca y que hace tomar conciencia al espectador de carácter teatral –en un sentido genérico: artificial– del propio acto voyarista que supone esta indiferente contemplación de los males de un ser sintiente que sufre, cuyo sufrimiento no despierta la compasión, sino una burla, un escarnio, un objeto ironía hacia aquello que constituye el margen de lo establecido. El teatro del absurdo también podría tomar el nombre «de bizarro». Lo mismo cabe decir del género burlesco; siguiendo la tradicional distinción entre lo satírico y lo burlesco, según la cual lo sátira es un subgénero de lo bufo que articula su mofa desde el núcleo de un sistema de valores establecidos contra los acontecimientos periféricos que son objeto de escarnio generalizado y estereotipado las más de las veces (véanse los miles de poemas quevedianos contra cornudos, alcahuetas y otras gentes del malvivir); frente a ella, lo burlesco implica la asunción de una suerte de antivalores por parte del poeta, que suelen conducir a un rechazo o indiferencia respecto de la opinión pública (véase a Góngora en su famoso «ándeme yo caliente/ y ríase la gente» en calidad de documento anticipatorio del principio de tolerancia jeffersoniano y la libertad negativa de J.S. Mill). De nuevo regresamos al parnaso español, al mismo tiempo que afirmamos que la sátira bizarra, a pesar de encontrarse al servicio de la ideología dominante, no ha de ser necesariamente conformista. A pesar de todo, la distinción burlesco–satírico es mucho más líquida de lo que los expertos quisieran. En este sentido, aquello que comienza como deliberado rechazo al sistema bien puede terminar en el enemigo perfecto

Page 12: EDITORIAL DELIRIOdelirio.es/fragmentos/bizarrofragmento.pdfNico Munuera Sonia Navarro ... nuestro poeta en la Soledad II a la hora de describir una red de pescar: ... Leoncio, hijo

13

para ella, esto es, aquel alterego que el sistema requiere para verse reflejado en calidad de unidad inmune; no obstante necesita de la «resistencia» para reconocer su identidad.

Aquí ya hemos avanzado mucho en nuestro concepto al cobrar conciencia de que, entre las múltiples cosas que combate la presencia bizarra, se encuentra la in-diferencia, la contemplación distanciada y tranquila (¿burguesa?), al mismo tiempo sustentada por una identificación catártica; si algo busca (y encuentra) el supuesto género de lo bizarro es la producción de un sistema de diferenciación, con una pequeña particularidad: la comprensión estructural o de sentido por parte del philosophe no supone una suspensión de sus capacidades sorpresivas y distanciadotas. Con lo bizarro no hay identificación, en la medida que no hay dilucidación total de lo exhibido descarnadamente, a pesar de que maneje unas pocas variables temáticas. Aquí van unas cuantas que se me ocurren: la sordidez, lo pornográfico, lo burlesco-satírico, como dijimos. Por sus características podríamos afirmar que es la verdadera antítesis de lo sublime, dentro de su misma lógica de intensidad sensible y terribilitá. Recordemos la archiconocida formulación de Edmund Burke al respecto: «Todo lo que resulta adecuado para excitar las ideas de dolor y peligro, es decir, todo lo que es de algún modo terrible, o se relaciona con objetos terribles, o actúa de manera análoga al terror, es una fuente de lo sublime; esto es, produce la emoción más fuerte que la mente es capaz de sentir.»

A modo de cierre que justifique éste, mi desbarre, quisiera incluir un fragmento del Kant pre-crítico. En una obra con el título de «Investigacio-nes sobre el sentimiento de lo bello y lo sublime» el sabio de Königsberg se dispone a aplicar tales conceptos estéticos en el análisis de diferentes realidades que hoy llamaríamos sociales, pero que para el Kant de 1764 respondían a una determinación intrínseca fundamental: se trata del gé-

Page 13: EDITORIAL DELIRIOdelirio.es/fragmentos/bizarrofragmento.pdfNico Munuera Sonia Navarro ... nuestro poeta en la Soledad II a la hora de describir una red de pescar: ... Leoncio, hijo

14

nero y el espíritu de las naciones, fundamentalmente. El fragmento final dedicado al espíritu español es revelador para nuestra actual reflexión:

«El español es serio, taciturno y veraz. Hay pocos comerciantes en el mundo más honrados que el español. Tiene un alma orgullosa y es más sensible a las grandes acciones que a las bellas. Como en su composición se encuentra poco de dulce y bondadosa benevolencia, frecuentemente es duro e incluso cruel. El auto de fe se mantiene no tanto por la superstición sino por la inclinación del pueblo hacia la extravagancia[abenteuerliche], que se emociona al ver el rito de un espectáculo a la vez venerable y terrible en la cual el sambenito, pintado con figuras diabólicas, es arrojado a las llamas por una devoción frenética. No se puede decir que el español sea má altivo o enamorado que cualquiera de otro pueblo, sino que lo es de una manera extravagante[abenteuerliche], que resulta extraña y fuera de lo habitual. Dejar a un lado el arado y pasearse por el campo de labor vistiendo una capa y una larga espada hasta que el extranjero que pasa por ahí se aleja; o en una corrida, en la cual por única vez las mujeres de la comarca son vistas sin velo, señalar con un particular saludo a su bien amada y, en su honor, arriesgar enseguida su vida en un peligroso combate con un animal salvaje, son acciones desusadas y extrañas que distan mucho de lo natural. […] Por lo tanto, las lecciones de la sana razón tendrían que vencer en España grandes obstáculos, no por tener que expulsar la ignorancia, sino porque se opone a ella un gusto extraño que considera que lo natural es vulgar y que no cree experimentar jamás un sentimiento sublime si su objeto no es extravagante [abenteuer].»1

Abenteuer es la palabra que más me interesa del irónico fragmento, aquella que sirve de puente entre nuestro «bizarro» y un modo à la hispana

1 Immanuel Kant: Observaciones sobre lo bello y lo sublime, Ed. FCE, Madrid, 2005, pp. 50–56.

Page 14: EDITORIAL DELIRIOdelirio.es/fragmentos/bizarrofragmento.pdfNico Munuera Sonia Navarro ... nuestro poeta en la Soledad II a la hora de describir una red de pescar: ... Leoncio, hijo

15

de concebir lo sublime; término que se encuentra inexactamente traducida por extravagancia. Ferdinand de Saussure, en su Curso de Lingüística General, realiza una interesante tentativa de dilucidación diacrónica del posible origen etimológico de la susodicha palabra alemana. Según su interpretación Abenteuer es la evolución de una expresión popular compuesta por el término «atardecer» (Abend, con el mismo significado en el alemán de nuestros días) y una forma verbal sajona, bastante arcaica, perdida en nuestros días, del verbo «narrar/contar historias» (/türren/); literalmente es «lo que se cuenta al atardecer». En este sentido, la extravagancia se encontraría asociada al génesis de las formas de transmisión no escrita: el cuento como forma de representación simbólica primigenia que, tomando como tema motivos de la vida cotidiana, los transforma en algo extraordinario por medio de la exageración. El significado del término ha cambiado ligeramente desde entonces. Hoy día se ha perdido aquél tono de extravagancia peyorativa que recoge el uso que hace Kant del término en su texto, para pasar a asumir el significado más neutro de «aventura/peripecia». Para hacer la mezcla más rica podríamos señalar otra posible vía de interpretación: aquella que partiría de la relación entre el término (Abenteuer) y el actual teuer («caro/costoso») con el objetivo de iniciar una reflexión acerca del «valor» y el «precio» del relato en las sociedades antiguas. Quede solamente apuntado. A modo de conclusión diremos que si la extravagancia de lo abenteuerlich se asocia a las narraciones extravagantes (carentes o no de valor) en torno al fuego de la noche, lo bizarro –ahora hablo desde mi personal experiencia– es una forma de sedimentación progresiva de lo ordinario en una forma extraña, fragmentaria, no comprensible fuera del contexto vivencial del que surgieron, una suerte de sórdido Secreto que a pesar de diferir radicalmente de nosotros, nos interpela. El objetivo de esta recopilación no ha sido otro que el mantener esa interpelación en toda

Page 15: EDITORIAL DELIRIOdelirio.es/fragmentos/bizarrofragmento.pdfNico Munuera Sonia Navarro ... nuestro poeta en la Soledad II a la hora de describir una red de pescar: ... Leoncio, hijo

16

su fresca (y fragmentaria) constitución. Ante ella el lector experimentará –con total probabilidad– un placer análogo al que sugiere un miembro cercenado, un torso o un muñón: la nostalgia acerca de las posibilidades de lo que «pudo haber sido lo Bizarro» continúan siendo múltiples, secretas y mitológicas.

Page 16: EDITORIAL DELIRIOdelirio.es/fragmentos/bizarrofragmento.pdfNico Munuera Sonia Navarro ... nuestro poeta en la Soledad II a la hora de describir una red de pescar: ... Leoncio, hijo

17

Cantinelas

Fernando Castro Flórez

Mondo Bizarro es el título del décimo segundo álbum de estudio de la banda The Ramones, editado en 1992. Tal vez los temas más brillantes del disco sean Poison Heart y la versión un clásico de The Doors Take It as It Comes. Este retorno al punk tras los patéticos merodeos en los que intentaron descafeinar su música acercándola al pop, estaba marcado, en buena medida, por el cansancio y la amargura. Todos recordamos que significa Sympathy por the Devil. Como rastros de la pirotecnia punk o del fondo de un pantano surgen frases sueltas: «At home he feels like a tourist». Lo malo es que la mad parade hoy es «global. No son los escupitajos verdes o los insultos más descarnados lo que nos afectado para siempre. En plena regresión infantil sabemos donde comenzó el trauma. Para Mike Kelley, Walt Disney, el autor de Fantasía, encarna la verdadera cultura oficial de nuestra época –la forma más limpia y transparente del pop–, respecto a la cual el arte sería un ritual paralelo que ocurre fuera de la cultura. Todas aquellas fábulas animalísticas materializan lo unncany, ese retorno de lo reprimido (la reiterada revelación de pulsiones ocultas e inconfesables) tan extendido en las prácticas artísticas.

Lo cierto es que todo el esfuerzo estético está destinado a ingresar en el olvido: dieses Nichts an Stimme. Aquel fantástico cuento de Kafka sobre el canto de Josefina, la ratita, comenzaba apuntando que eso no era nada del otro mundo. Se trataba de algo banal que, sin embargo, suena como si fuera extraordinario. Una vez más triunfa lo que llamaremos la excepcionalidad de

Page 17: EDITORIAL DELIRIOdelirio.es/fragmentos/bizarrofragmento.pdfNico Munuera Sonia Navarro ... nuestro poeta en la Soledad II a la hora de describir una red de pescar: ... Leoncio, hijo

18

lo trivial. El canto de Josefina se te mete en la cabeza. En realidad Josefina no canta sino que silba y ese sonido se toma como si fuera un himno: «Además –apunta Peter Szendy– el silbido, el gesto de silbar, connota a la vez la autoridad de la llamada (se silba para llamar a alguien o para controlar a una muchedumbre) y la fragilidad de lo efímero (se silba para señalar una desaparición súbita o improvisada)». También silbamos entre las ruinas o por puro miedo. No es inusual que nos entreguemos al placer de tararear la cantinela de turno. Eso que, como en el pueblo de los ratones, es un perfecto himno a la nada. En el momento del éter estético nadie parece incomodarse con las raciones glamourosas de cosas que están completamente desordenadas. Esa «cronología» pretendidamente «fenomenológica» no es tanto un modo de hacer mundos cuando la contundente manifestación de que, aceptada la consigna punk de que no hay futuro, lo mejor que algunos pueden hacer es dejar que las cosas estén a la mano, dispuestas sin orden ni concierto, facilotas para todos los amantes del canturreo intrascendente. Karaoke, de verdad, para todos los públicos.

Ni siquiera hace falta aplicar el Tratamiento Ludovico, basta con hacer un poco de zapping para pasar de la sobredosis-catastrófica de los noticiarios a la empanada mental del reality show. John Cobra es un epifenómeno del freakismo aunque añade sanas dosis de brutalidad macarra y patetismo delirante; pretendía ser un rapero y, finalmente, no era otra cosa que un cretino superlativo. Eurovisión es, en cierta medida, la meca de lo bizarro, bien es verdad que inconsciente. El arte contemporáneo no está, ni mucho menos, situado en un pedestal que le mantenga a salvo del tsunami de la tontería sino que forma parte de ese «desarreglo». Con todo, no basta con asumir la regresión infantil o pretender, a la manera del Dogma, que se ha completado la arqueología del idiota. Lo que Camnitzer denominó «arte

Page 18: EDITORIAL DELIRIOdelirio.es/fragmentos/bizarrofragmento.pdfNico Munuera Sonia Navarro ... nuestro poeta en la Soledad II a la hora de describir una red de pescar: ... Leoncio, hijo

19

boludo» ha terminado por tener rango académico y los chistes de la estética contemporánea necesitan, irremediablemente, de las risas enlatadas.

El intento de ciertos comportamientos del arte actual de ejecutar un «retorno (brutal) a lo real» provoca, con demasiada frecuencia, ataques de narcolepsia. De sobra sabemos que el bostezo es más efectivo que un comentario cripto-hermeneútico. Y también puede suceder que lo pretendidamente divertido genere déjà vu. Tal vez más allá de los discursos pretenciosos (panfletarios y pseudo-radicales) o de la decoración pompier pueda desplegarse una experiencia estética de lo genuinamente bizarro. Pero al convocar esa palabreja hemos arrastrado toda la ambivalencia del mundo: valiente, osado, estrambótico, generoso, espléndido, exagerado, caprichoso. En la Divina Comedia de Dante el «spirito bizarro» aparece como el rasgo de unos personajes iracundos que se dan mordiscos a sí mismos. Caeríamos en la impostura si pensáramos que nosotros podemos remover las regiones infernales (como quería Freud retornando Virgilio: «Acheronta movebo»), a nosotros nos basta con intentar evitar el iceberg que nos aguarda como nuestro destino cierto. En el final de la utopía del arte la cantinela, como la orquesta del Titanic, sigue imponiendo su ley. Mejor eso que una canción de cuna o el estribillo de una de Mecano: «en una fiesta me colé». Lo malo es que para esas letanías no hay sacacorchos.

Page 19: EDITORIAL DELIRIOdelirio.es/fragmentos/bizarrofragmento.pdfNico Munuera Sonia Navarro ... nuestro poeta en la Soledad II a la hora de describir una red de pescar: ... Leoncio, hijo

20

Breves historias de cólera sin ser Dios

Domingo Sánchez Blanco

Un día sí y otro no me paso por la quilla. En el mástil la lona de la vela no para de bramar con los labios rotos y el viento no da cobertura, ¡porca miseria¡. Hay tanta luz en las ideas que de haber elegido el dinero, sería multimillonario. Las ideas caducan en el pozo craneal, brocal de roca y hueso al fondo; abajo, en el hondo se oyen mis ideas, agua pura y fresca que nace de dentro.

Las carpas tienen los ojos a cada lado. Voy a grabar dos escenas: una arreglando una furgoneta y otra copulando con cuerpo de hombre y de mujer.

La partitura sobre la penetración y mecánica de las carpas se la encargaré a un chelista, que a la vez quiero que interprete la melodía.

El techo de la furgoneta, a modo de ballena, ejemplar de mamífero inteligente, gigante ardiente, elefante por su color y dureza; podrían ser amantes y creyentes.

A penas quince minutos para arrancar a sudar, moviendo un saco de arena y medio de cemento, en el Gallo para ir terminando el wáter. Tengo que reconocer que no hay nada más placentero que tener un wáter en el lugar donde estoy trabajando, se lo cuento a todo el mundo que me encuentro sin que venga a cuento y creen que se lo digo por provocar y es porque las condiciones se limitan a un reducido lugar común.

Parece la vida loca. Las ideas las rifo entre comidas y vinos. Abierto a proyectos de enseñar hablando, grabando, filmándonos, aseverando

Page 20: EDITORIAL DELIRIOdelirio.es/fragmentos/bizarrofragmento.pdfNico Munuera Sonia Navarro ... nuestro poeta en la Soledad II a la hora de describir una red de pescar: ... Leoncio, hijo

21

nada, dejando que el otro hable del sueño eterno, que se sienta como todo lo defendido. No era tierra quemada , era una tierra singular, sin carácter negativo, caeremos en la determinabilidad de la propiedad. Reino inquieto.

Osco y oscuro que ni el que lo hace se lo cree. Yo logro las cosas por desesperación, a base de terquedad y pesadez, si huyera moriría, pronto, de ahogo, sin remedio, porque mi naturaleza no se conforma con nada

Tengo distintas partes del cuerpo marcadas con tinta debajo de la piel: dibujos, nombres, escenas… que he ido realizando a lo largo de mucho tiempo. Contaré como anécdota que los puse a la venta diciéndole a un amigo, buen amigo, conocedor y curioso del arte, como bien tangible. El caso fue que el aparato comercial que tenía me venía bien para ponerlo en funcionamiento, enmarcado en una tradición muy antigua: vender tu propia piel al contado y a la finalización del contrato, o sea, la muerte, él correría con los gastos del despellejamiento y curtido de los dibujos, situaciones o bocetos escritos y tatuados en mi carne.

En aquellos momentos, la verdad sea dicha, no disponía de pasta y la historia me funcionaba perfectamente, como una inversión para el coleccionista que tendría que creérselo a pies juntillas y esperar, con mucha paciencia, que el desenlace especulativo se pudiera llevar a cabo, que por otro lado sería lo de menos porque el acto de la acción estaba hecho. Paja pura y dura, paja mental que el puto socio tenía que desarrollar; pero su propio acojono dejó patente que ni hay vendedores, ni galeristas… y lo peor, que nadie entra al trapo del concepto «ARTE» Ejemplo radicalmente concreto del desinterés de todo el juego obligatorio del noble juego creativo.