~08
J88 no. 126
Zemdman Merino, Hugo, 1 Y:H. Problemas antropoh'>gicos y ul6picos del conoci
micnto / Hugo Zemehnan ... Mexico: [1 Colegio de :\Iexico, Centro de Estudios Sociologic-os, 1995.
209 p. ; 17 em. - - Qornadas ; 126)
ISBN 968-12-065G-8
1. Conocimiento. Tcoria del 2. Utopias~. SocioJagia del conorimiento.
Ponada de Monica Diez Martinez Dibujo: Sin Ututo de Tomas G6mez Robledo
Primera reimprcsi6n, 1997 Primer a edici6n, 1996
D.R. © EI Colegio de Mexico Camino al Ajusco 20 Pedregal de Santa Teresa 10740 Mexico, D.F.
ISB" 968-12-0656-8
Impreso en Mexico/ Printed in Mexiw
INDICE
Aclaraci6n 11
Prefacio 13
Conocimiento y etica. A manerd de introducci6n 25
El pensamiento critico y su expresi6n dialectic a 35 Angulos de pensamiento 35 Hacia una propuesta critica del pensar lH En torno de algunas implicaciones 50
Subjetividad y realidad social 55 Implicaciones metodol6gicas 72
E1 proceso de cambia y las dimensiones micro y macrosociales 77
Estudio de una comunidad 78 Determinad6n de los puntas de
articulaci6n H4 Perspectivas 94
Ideas metodo16gicas para el estudio de sujetos sociales 97
Desafios de conocimiento 97
7
R PROHLF:>'lA~ DEL CONOCl\llFNTO
Antecedentes conceptuales Especificidad de la problematica Cuestiones metoclo16gicas Nuevas dimensiones de 1a objetividad Conocimiento y praxis Esquematizaci6n metodol6gica Observaci6n final
100 103 117
123 125 127 129
En torno del problema metodo16gico de las mecliaciones 131
La mediaci6n como 16gica cle razona-miento 1:72
EI momento hist6rico 138 Composicion de las dinamicas heteroge-
neas 145 La cuesti6n de los par:imetros 147 EI fen6meno como objeto y su situaci6n 154 Manejo de 1a dimension temporal 15') Articulaci6n y reeorte del problema 161 Funci6n metodol6gica de 1a mediaci6n 165 Mediaci6n y variable 168
Reflexiones sabre el discurso econ6mico 17.3 Algunos vacios epistemo16gicos: perdida
del sujeto 0 fragmcntaci6n de la realidad 173 Delimitaci6n de la realidad 174 EI problema de la adccuaci6n de la
teoria y de Sll aplicaci6n 176 Teoria econ6mica y contexto de
opciones 179 Maximizaci6n y viabilidad 183
iNDICE 9
EI caracter ahist6rico del pensamiento economico 186
Conclusi6n 1R7 Operacionalidad y especificidad concep-
tual en el razonamiento econ6mico 190 Conclusiones 205
r
I
SUBJETIVlDAD Y REALIDAD SOCIAL
La contradicci6n que .'iC plantel entre individuo y sociedad puede cucstionarse cuanda no contrihuye a estimular las potencialidades de los individuos. Pero no se avanZ3 nada en 13 sllperacion de esta COnlrJ.diccion si uno se lirnita a formubr advertencias relativas 3. que el hombre no puedc quedar supcditado a1 desarrollo de las estructuras sodates; asimislllo, (uando se argumenta que no tiene sentido hablar de las potencialidades del individuo si touavia no se han logrado las condiciones esrructurales de una equidacl hasiea. La cuesti6n central consistc en que el plano de satisfacci6n de las l1ccesidades dd individuo fl'
conace un {nnbito con Iimites dinamicos: 10 que cn un momento aparece como la liberaci6n del hombre, un mumento posterior se define como insatisfactorio y limitante para su pIenn desarrollo.
Si bien es verclad que no tiene sentido satisfaeer las neeesidades no materiales en una situaci6n de paupcrismo de la poblaei6n, tampoco 10 tienc restringirse a las necesidades b{lsicas partiendo del presupucsto de que 10 demjs llega por S1 solo como producto fatal de habersc resuelto exitosamente el problema de aqudlas. Dcbcmos tener claro
56 PROBI.EMAS OEL CO~OClM1E]\TO
,', "hombre se dcspliega en campo:" que 1a \. Ida del. '" uevas esperanzas,
; " plios y ncos en n cad a vez mas .lm - '1 ", {' del hombre coo-
"b re a que ~ se 10 que (ootn lly \_ . < ,Ie sus horizontes - , '" p laClon '- . ' l1cve una constante am era valorado, e inclu-de vida, pues 10 que :lyer °do se convierte en una
desconocla, mas tar e ~ ,', so se , . 'mera llnpol1anClJ. exigencia valonca de pn 'menta el content-. . , n que expen
Esta transformaClo , ,', ie cada hombre, -1 ., 1 eOlUO V1ve0C1.l (
do del munuo 1 ea t, dialectica entre 10 fl . )oe sobre es a
exige que se re ext( \ 10 que le es exter-, . del hom )fe y subjetivo Y pnvatlVO 1 ' lidad que pucde coo-
> ' presenta a re.l no pero que It'· , d 0 haeer un plantea-
\ se trata es e n quistar. De 0 que L 'd' 'd 0 v sociedad ni menos
1 I, ,t entre in IVI U .' , miento c ua IS a . d' "\l10 0 a la SOCle-, 11ecomo!filVh.. dc privileglar al 10111)r \ ' ntr"f los canaJes me-o s"noee enco ~ . dad C01110 un to 0, .1 \ nr,'nuece como indl-
1 ~ . 1 hom )re se e '-1. ' diante los cua es e . . , ',1 a 1a vel. que la
, \' 'xpenencta SOCIa, , viduahsta, c e su e , '_\' d de los hombres
. - • '1" ~ ta de 13 capaCil a _ ' sOCledact sc .I Imen , " \ 't()S protag,omcos. , 1 ~ dlC10n ee SUje . Para asumlr a lon " \',d e individuo obe-. ' / nlfe souce <-
La contraeilcClon ~ . c>' 't. es produeto de . t nCla de que es e
elece a Ia orcuns a, mo tales, no ago-\" "oenles que, co ,
ciertas cone !Clones ,s 'I ; d ' P',ra alcanzar su espeCl, 'poslbl lua es. ~
tan SllS prOpl:1S, I > ars'e como producto , r 'd de)e neg , ficidad, e\ me tVI 1..10 , "to v no mera circuns-
Para ser SU)C " \ social. 0 sea que, ' , 't~ Sll libertad en e \ . - debe conqUls ar '
tancia, e1 horn)1 e /. I' esta lihertad con-n histonco, era ' marcO del desarro 0 . l' eamente un producto . / I 'cr Slmu tan , tiene la tenSion c e s ", . "1ncreta) Y una fuerza
1 1'1 . Hd es Slempre c,,- . ' hist6rico (a Ixt, '-' 'f nWlr) las condlClo-
( tiende a trans 0 ~ que transforma () , ' b' ~tividad que las trasciende, nes historieas en UO,l Sll JC
SLBJFI1VIDAD Y REALlDAD SOCIAL 57
En este sentido, 1a historicidad de 10 social constituye una negaci6n de la individualidad, mientras que esta, en tanto conciencia y vivencia, representa una poteneialidad de historia, La individualidad es negada por la historia en la medida en que la sustitllye como slljeto, pero, a la vez, es L1na potencia en tanto los sujetos sociales de 13 historia son potenciados por el desarrollo de las individualidades que los componen. Es esta una relaci6n dialectica que constituye el fondo mismo en el cLla1 debe hacerse la ref1exi6n sobre la historicidad de 10 individual y 1a subjetividad de la historia concehida como apropiaci6n de 10 social total.
Desde esta perspectiva, historicidad y subjetividad conforman la realidad como un proyccto de vida social en el que pueden distinguirse dos dim ensiones: la totalidad de 13 sociedad que se desarrolla con SLI propio ritmo, y su aprobaci6n por parte de los slljetos -10 que se traduce en cielta direccionaliclad del desenvolvimiento de 13 sociedad. Por 10 tanto, cuando Sl:' habla de desarrollo (social y humano) significa que 1a sociedad asume una forma de organizaci6n que est:l abierta a 1a posihilidad de transformarse en objeto de apropiaci6n por parte de 1a subjetividad individualidad; en consecuencia, el desarrollo de la sociedad consiste no solamente en generar nuevas y rnejores condiciones dl' vida y reproducci6n del hombre, sino, ademas, en mayores aperturas que fJciliten que 10 social pueda enriqUl'cerse de la subjetividad indi\'idual y social.
Por elio, e! desarrollo no puedl' consistir exclusivamente en niveles de vida, sino en capaciuad de
r
58 PKom.E!\'lAS DEL C00!OCIMIFKfO
vida: no s610 en aeceso a una mayor cantidad de satisfactores de la mas variada diversidad, sino en creaci6n de satisfactores de confonnidad con una 16gica de ensanchamiento de la subjetividad que exprcs
e 1a
potencialidad del sujeto individual, en vez de restringirse a la 16gica de la reproducci6n materiaL Como 10 han mostrado los analisis de Bahro, el desaflo esta en lograr una organizaci6n que liquide "aqueilas condiciones que, en vez de hombres hhrcs, engendran indivicluos subalternos, una especie de hormigas pensantes":' 10 cual cs producro de que (Oda "relaeion de poder"' produce subalternidad, "que es un verdadero sistema de sullalterniciac1" que termina POf generar 'un sistema de irresponsabilidad organizaeta".! E1 desarrollo no s6\0 ha de consistir en ellog
ro
de determinadas metas, sino en Ja capacidad de definir opcio
nes de vida; aunque ello no signifique negar
que en la clclenninaci6n de opdones incide la logica de las estructuras sociales, en tanto determinadas por el roder 'l sus requerimientoS de mant~nimiento y
consoHdacioo. pl desarrollo humano consiste en la constante ampliacion de la subjetiviclad como fuerza modeladora de 1a sociedad. Para poder armonizarl
o can el
desarrollo social exige que se pueda organizar a la sociedad con base cn relaciones socialcs que no impliquen d0111ioaci6n economic a ni politica, a pesar de que sabemos que en toda sociedad ha sido
I Rud()lf Rahro, POl" HI! COl11l1nismo del1wcrat!co, B~ucdona. Font~lIn;.1f'1. 1981. p 33
, Ihid., p. 3 t
:"L'B.lFTlVlDAD Y R ' EALlIHD SOCIAL S9
1a divi5i6n d I c trabajo I' l~~nto para estrllcturar<\,;~e h~ servido de funda-510n de hahl- d L ommacion L' -tarc"! 1 ar e un desarrollo h ,a prcten-
~ (e generar t 1 umano pIa t I sea base I, , . Ina c ivisi(m del t ' I " n ea a eual s c c nmguna relaei(m do dL! ):'1
0 que no
, .,upone l'ntrar en un , __ , l otlllnaci(m,lo la hlstoria y obilga a L ~cIILno no transitado por apoyo en ningtln pasad(l)na rdlcxi(m historica SIll
EI r10hlema de I dl\. 15H')O del t I a poslhllIclacl de org ncs de [Jade! :'~)~Jo que no entrdnc ciJf::~~a! und utopLl lusta ~l d~J ItralsLldado descle el Plan(~l~~( [(1)del 'SO" I ' a 115toru co I" _ (e a
. (lei lsmo r<:."ll ,. . n as t'xperien'·· cron s . I " expreslon I U:l2>
, .' OCla que tennina '~L ~ una organiza-estatrS11lO credent _. ~ pOl' lCmfundirse ' dr!a de h r" ' c c uya legitimad6n" (on un , . < eptl'sentJcio no proven-
cumrirmiento <:.'ticaz In 0 delegaci6n, sino d'l mOI'ens de I' , ( e su tarea ' c de Est, I a II1dustnalizaci6n"'< como '"gcns
J( 0 denunciado pur I) . en el socialismo cuarenta, .. I Jnnckoek _ e Estado en los aft - ,
~~!~,~1C) de todo el ap,~!(~)~')() d~m[Jledador uni\'crs~~ ~ d que eS'1 . pro uccion ,. -<
individ " expenencia no ' que . ~ uo y todas sus ,'" pucda rcscatar al
Clon. Como _I ' posrhl1ldades I f ' () )serv" Ros'! I ' c e construe-IXIa la vicb pol't' " ,~.uxemhurgo ,',
I. . I Ica en t( f ' 51 se 'lS-
C ISlpa en tod' 'I' )( 0 un pais l I 1, . < , I' L ,'s as lOstitu " '" ,! vIda sc Li Ilurocraci't' , '-. Llones pllhlicas' '
L se LOITVlertc en el ~ . " \ egeta; y unrco elcmento
\ En ric Tell() ''1'1 BaI\'ehma. fl. ,).,.' 's()ciali,~m() inc:i1 ) . l'I1 .11ielllral Tonto, I1ll111
, [bid.. p, ll() +(),
60
activo".~ por 10 tanto, pueae afirmarse que 1a vieja idea marxista de que el desarrollo de ea(h uno sea la condici6n para el desarrollo de todos, y que el desarrollo de todos sea 1a condici6n para el desarrollo de cada uno, aun no se ha alcanzado Y cons-
tituye 1a gran utopia pendiente. La capacidad subjetiva de apropiaci6n de 10 real
que estii en constante expansi6n, sin sujeci6n a la 16gica contrapuesta del roder, define la real humanidad del cambia en las estructuras del trabajo; pero esta capacidad no se ha ensanchado, quizas por ser todavia embri6n de aqueUa forma superior de organizaci6n sodal en 1a que esta posibilidad sea ya una reaUdad. En las sociedades sometidas a re1aciones de dominaci6n se aprecia que las potencialielael
es elel
hombre estin agotadas, ya que enfatizan la dimensit)n politica unilateral en vez ele rescatar y estim
ular
en el sujeto transformador de la reaUdad su capacidad integraua para forjar proyeetos de vida en los que \a politica devenga en historia hecha conciencia
y presente. Se trata de tornar vigente la vieja afirmacion de Kautsky de reseatar 1a voluntad de vivir Y la conciencia del hombre, pues, aunque "la voluntad de vivir no depende de 1a conciencia", la conciencia detennina "las formas de 1a vo1untad de vivir en eada caso especial"; ya que si, ademas del instinto, "1a conciencia dirige 1a voluntad Y que 1a forma de 1a voluntad depende de 1a manera como la concien-
" Ihid .. p. 96
SiTJ3.1ET\VIDAD· . ) REALJDAD sou Ai 0]
cia conoce I' , ' <IS condlCio d fundi dad de e.t nes e existencia y de 1 h b' s e conocim' " a pro-
u lera que "des' lento, si previam tO~Ckl)S nuestros es~~:~:):Us;I:luntad Cdel hombre~~t~ s con pura perc Ida".6 . nan prodigado '
El desarrollo social c hombre Clundo 1a di ,.~)~tradice el desarrollo del relaciones de dr)n . ~ls10n del trabajo inv I h "maClon 0 uera
d
tral aJo deja de ser una e' pue~, en ese contexto el e homb xpreS10n de 1 , re para reducirse . ~s potencias
~uyo cumplimiento' a .una funClon mediant mdividuo en la SOci~:ldma];enaliza la inserci6n de~ nes p d < • ero ., ~l , ue cn darse' ' c
eua es otras op . social? para establecer hI" ~ C10-. ' re auon Con 10
La respuesta a est'l dentes. Hist6ric ' , pregunta carece de . relaci()n h" amente, el trahajo ha antece-
aSlca necesaria ,. resultado ser la rentes modos de intera . ,~ara caracterizar los difebres, de tal fonna que c C~10~ social entre los homdescartar por no corres ua qUIer otra relaci6n se debe trollo de la sociedad N' ponder a la realidael del de' ttah" , ' 0 obstant I sa-
aJo como fen6meno v c e, e predominio del ~a tendido a confundirs~ ~.mo categoria de analisis
e que el trabaJ'o h' . 'el' a aceptaci6n de 1a iel .
n
aSI 0 un f ~ e<l ante para el fu' . enomeno d ' T nCIonamlento I I eterml-
111 lca que tenga que ace t C ~ a sociedad no sig~omo categoria de analisis p F~rse su omnipotencia ,~ mserci6n del individuo ~ , tra~)aJo, como modo
CIon, no agota el co l' n el SIstema de proel mp eJo mund d uc-a e las relaciones
:) Karl Kautsky El c . ci6n 76 1968 " ' ammo del poder M" . , , p. 'loS ,. CX1CO. Grijalbo Colec-
62 PROBLE.'vIAS lYE!. COi\'OCl:"'11F'\irO
se puede prett.:nder \ re Y' que no ' " lob sadales del hom) '. ,< del hombre reduCleoc ~
agotar 1a compren:'lodn
sus determinanteS cstruC\ ]11ano e, . {lnicamente a
. laciol1es de turales. " n"unto de sus re . El hombre es el C<~ ~ 1 . _ nciencia (no nnpor-
" t'lmblen cs co ,", l") d lcci6n- , pero < _ f1 " del "ser soua , pro 1.. \"" como rt.:: qo d"f ._ , "esta Sl' exp lC.
1. . 1 blema de los I e U 51 trentd ,\ pro .
conciencia que nos en . ~, el hombre como sllJeto. rcntes planos en que act~.a division del trabajo "erea No podemos olvidar q~el :lltern'idad en 1a medida en
. " a1 de 1a su 1a ", la r ero la base pnne tP, de manera vanae . , . cluve a1 pueblo,. t de fUl1nones que ex . 1 ~ciSJV'llnen e, d
' pre definitiva 'y' (e ',< . < n de La volunta Slem de h iormaClO omniabarcadoras y ~
\" - el conp.-mto de genera . 1 1 bre como La acepci6n de 10~ " ~ entronca lon la ldea
. de producclOn . , ->' con-sus rclaClones " . ,',1 cuya evoluClon t.S
\ 1 hombre histoncO-sOCia , . d I Pero el hombre ( e - , d l' sone de.. - ~, comitante con la e. a , h idea de sujeto al tuante como conciencia rell1lte ~1 d ~l devenir histC)rico. La en momentoS con~~~;os de~ ropio scr social y ~e conciencia como v lS10~ ". P])OSihkS transforma a1
de aCClones - L a a la sus horizonteS . FI sUI'eto cncam' . , sUjeto " , hombre hist6rico en L l' tad de accion que no se
f ada en vo un . l' medi-historia tran orm ~ , is-trabaJo, en .1 , r 'tes de h prax, \'dad restringe a los lml d' ' las esferas de la rea 1 da en que involucra a (el' lats b~J'o, 10 que plantea tras
, d· specto e.e fa mediatlza as reL " l' l' d
I -u unidimenslona iC.l . cene. er s
I t 1) '1() .- R. Uahro, op, C .. -' .-
Sl-I-lJl:'IIVIDAD Y llEALIDAD SOcrAl 63
La voluntad de acci6n encarna una subjetividad en proceso de ampliaci6n conforme se enriquece la capacidad de apropiaci6n de 10 real, y, por 10 mismo, se produce una ampliacion de la propia conciencia del sujeto. Pero esta 16gica de b conciencia no opera fluiclamente, pues la ampliaci6n de la subjetividad tropieza con ohst:1culos provenientcs de la estructura social que impidcn que la conciencia transforme al hombre hist6rico-social en sUjeto; de ahi que ]a historia tienda a clevenir en \'oluntad de acci6n pero identificada con el poJer dominante.
A eSle respecto se ha sehalado que la alineaci6n resultante de b tecnologla moJerna y de la organizaci6n industrial del trabajo impide que, por 10 menos partiendo de la situaci6n de trabajo, se desanolle esta conciencia. Ocurre 10 mismo con la manipulaci6n masiva propia de los medios dl' comunicaci6n, todo 10 cual obJiga a rcflexionar sobre cujJ serb el plano de la sociedad donde se pueda conjugar objetivamenre la condici6n de hombre hist6rico y de sujeto. Esto es, entre las condiciones estmcturales que conforman 1£1 csencia social del individuo y su capacidad reactiva consciente; entre eI ser integrante de una clase y su condici6n de protagonista 0
sujeto activador de aquella. Proceso que nos remite necesariamente a la funci6n de estandarizaci6n cultural de la tecnica, )', por 10 mismo, de la suhjetividad individual, de manera que cada vez mas esta deja de tener una capacidad reactiva singular.
Como 11a afirmado Mumford, en relaci6n con la invenci6n de la fotografia: "r. .. J lleg6 a su apogeo el proceso de despersonalizaci6n .. [puesl con e! per-
64 PROBLEMAS DEL CO"lOCIMIE"lTO
feccionamiento de un metodo medl.nieD, se democratiz6 la lorna de imagenes por un mero registro de sensaciones" ,K Sin embargo, 10 verdaderamente relevante, desde el punto de vista de la vida, es c6mo se acelera con el progreso tecnico el proceso de integraci6n cultural y personal de manera tal que. como afirma este autof, la "(mica forma de orden y de interrelaci6n consiste en adaptarse a las organizaciones y mecanismos automaticos que gohiernan en verdad nuestra existencia cotidiana", perdiendose "1a capacidad esencial de que las personas se gobiernen a 51 mismas -la libertad de tomar decisiones, de decir 51 0 no en terminos de nuestras propias finalidades" Y Todo 10 cual tiene lugar, con el agravante de que la l6gica de la tecnica, "a diferencia de 1a sencilla artesania, no reconoce limites en nada",l0 Contrariamente, 1a teenita se caracteriza par la constante trasgresi6n de los limites, can e1 resu1-tado de que el hombre se transforma, como senala Garcia Bacca, mas que en un ser raeional, en un "explosivo de la realidad, [de manera que] tal es su definitivo Y definiente uso- el uso que e1 hombre ha hecho de su definici6n natural, de su ser".11
Conjugar ambas dimensiones del hombre, ser hist6rico Y sujeto, exige plantear formas de argani-
~ Lewis Mumford, Arle y tecnica, Buenos Aires, Nueva Vi
sion. 1957. p. 70 ~ Ibid .. p. 10l
1" J.D. Garda Bacca, Hagin de fa tecnica, Barcelona. Anthro-
pos. 1987, p. 126 II Ibid., p. 147.
SCB./ET1VIDAD Y REALI DAD SOcrAL 65
zacion social que resuelvan ta " . tre trabaja y el resto d I' " nto l~ d1soclacion en-. ,~ e a v1d,1 socIal C I
SlClon entre ser indi'd I h' ~. ' omo a opo-~ .. VI ua - Istonco v . .
tonco. Efectivame t I. l' I ser soclal-his-
In e, as <- lstorsio I'
ugar de trabaJ'o no d nes a lenantes del - pue en comp .
mente con mecanl' ensarse exclusiva-smos prop' d I I
vive en el caso d'l 1- lOS e ugar donde se , eooreroydelt'b'd
en general 0 en I " . ra 3p or urbano " e caso de la p hi "
per su localismo somet" d I a aClon rural, rom-F ,len a a a un . f
mas global Se req' d a In ormacion , , Ulere e desarroll . esta direcci6n para d as teoricos en organizaei6n. I po er formular alternativas de
ntentemos po I ' ideas. . r 0 menos fijar algunas
Se puede formular el estimulaci6n del ' . problema en terminos de
protagonrsmo del h b ral de la poblacion) 1- om re (en gene-
con L)aSe en I" autonomia respecto dIE' d una re aClon de d e sta 0 medhnt C
e organizaci6n social q , II' < e una Jorma c' ~ ue amaremos de 'I Ion sociaL La caraeteristica b' " mOVI iza-
organizaci6n consiste _ aSlCa de esta forma de
f . en que su cont '1
armada por I'IS eXI' _ . enK 0 esta con-. ,genCIas y ~ . vlduos (Y'l sea ~ , proposltos de los incli-
< que esten definid de vida 0 no) _ ., _ as como proyectos
, en vez de estar r d 'd cucion de rnetas s ' . e uel 0 a Ia conse-
• L upenrnpuesta' 1 nante en el Clmbito nacion I ,\T S ,por e pader domi-t d . J . 1 ~o se trata p a, e 19norar 1a If>giea d _ f' ' or supues-, c unelonamiento' . I
lmpo, ne Ia estructura 1 , d ~ SOCI3 que (e po er- mas b' I pretencle es reivin _I' , ' _ ' len 0 que 5C
, d (!Car un movimient - d I capaz e enriquecer h d ~t·, . ,~ () e )ase ,t ~. < e lOlClon de fine t' ' es rateglcos para la - " d' d' s actlcos y soue <I naCIonaI , De otra parte, tampoco se deb' " . Idea con una re) , . -e confundlr est'l manUel y anac ~'. . < ron rea remvindicacion
i
l
66 PROBLE;\IAS nEt CONOCll>llf]\;TO
d d !amana pe-o - 0 de la sociecla e '. --vi,
de 1a comunidad, . hs relaciones Vl5-a -rcdommen (. . des-
quenO, en 1a que.p ., de las distanciadoras y. ' . . n SI.lStltllClOn d . . No Hene
Pnmanas e . ',,' seeun arias. - I' relaoones. . , para humamzac oras d ncias" utoplstas
. '. ~'r "contraten e. ensa-sentldo dlsena . a\liliclacl obhga a un p
-llva mexor rocesos C J'
Pniento realista. , mo los que analizara 1 ocesos co . \_ 0 Pensamos en pr. n el capita 1Sm )
L. l' ,do aErma que, e , icos \Vallerstem - Clian d "los faelores econom . como economla-mun
0, 'rena mayor de 1a que \ ) de una a \ total-eran en e sent , . ede contro ar
~~alquicr entida(~. P~)1t:l~~n~~~ia_mundo capitalista "".J', va que una 'tal acumubdo,
mente, J . 1 nente el cap I d'd recompensa esenc~a I mano, en mayor me I a induyendo el capl:al, ,1:1
U en crudo, de manera, ~l~e
I, fuerza de traha] , ~'" d estas cuahftca-que a , _ eograf1ca e , - - \-, distribuClon g , fuerte tendenc1a la m,l ~ \ " 'see una -- nes ocupaciona es po, C'tuaci6n que se agu-uo L 'mento ..:>1 hacia su automantenll " 1 i mercado Ja refuerzan
, > "las fuerzas c e ." "\a ausen-diza porerue '" contexto en que ~, en vez de minarla , en u~ " central en la econom1a-
, de un mecanismo polIt1co. ducci6n ue fuerzas oa Htkil la mtro d los muntio hace muy e l' nala distribuci6n e '
. de contrarrestar a 1 capaces < .,., H J. laci6n de benetiClos . . d es una remo e
Lo Clue est:l plante<~ dO j' _ Estado desde Ja base ClC ac \ "~
\ ,- lnes entre so , las re ae It '
1.
. 'r '/iU/ nllmdifll, vol. Ff moderllo Sl~ ( " Illlmanud \\·;dkrstdn.
\k'i;lCO, Sig\o ::\..."\.1. 191'-:
',' lhie! .. P i91.
'. Ibid .. p. -19:'
s( T13.JF.TIVTDAD Y REAL/DAD SOcrAl 67
de sus procesos estructuradores. No se persigue dl'terminar las regulaciones que rigen a estos uitirnos, sino definir el modo de construirlos, su constructividad misrna, partiendo del fundamento proporcionado por los microdinarnismos. EI Estado, como estrLlctura institucionalizada de centros de decisi6n, y la sociedad, como el ambito en el que se despliegan las practicas sociales de los diferentes grupos sociaks (con sus consiguientes relaciones de caracter politico, econ6mico, cultural), dehen ser reexaminados desde la perspectiva del movimiento propio de su constituci6n. No como productos hist6ricos, 0 como arma7.ones, sino como cspacios de diseno posible donde se reali7.an 0 frustran los distintos slljetos sociales e individuales, El reexamen propuesto implica entender al Estado como un proceso de creaci6n del mismo Estado y a 1a sociedad como la transformacion del homhre hist6rico-social cn sujeto y. a la invcrsa, del slIjeto en homhre-hist6rico,
Los planteamientos ameriores se prl'ocupan por resolver la distinci(m entre 10 que es estar historicamente determinado y c6mo se l'S en esa misma deterrninaci6n como individuo; en otras palahras, c()mo el indi\"idllo se ahre hacia 10 que 10 detcrmina, pern, a la vez, como se relaciona con estas cJetcnninaciones en terminos de su apropiacion. A este respecto, cabe mencionar que los enfoques del individualismo metodol6gico, pOl' ejemplo la teoda de la I11m'i!iZJ
ci6n de recursos, J pesar de buscar el rescate del individuo, soslayan esta dialectica en tanto no rl'sue1-ve la constituci6n de 10 individual desde 10 macro. ya que enfatiza unilateralmente la constitLlci(m de 10
F r
68 . CO,<OC1:-..llEl\TO
PROHlX\,lA~ Dl: L
d ' estar orientada "'\'pcsar e , . macro desde \0 in(ltdVldl~,\()·g~lca de la a((i6n col~:t1~
. 'enW ea. . . d' d constltLl at esclareClffil , /, 105 Sub]etl\,l <1 ! ~ h 1:7 ,"de 10 que llama nan /a se r~C()nstru) {'
V'l L;V . d csta teon , . " • . ~ en el casU e . ,', k hs aCClones
yente, qu(:, _ de 1a logKa (.. . ' .. , 'rtic estrictamente, 'n los tip os de SLljt'.a pa do sc centra e \ . mo'Vt-'odividuales (nan ' , o'izaciones de os I las orga . \)ser "onforman L - _ 1ueden 0, -(OS que c . . j(J No obstante, se 1- 'ue 1a
. n(05 sOC1ale~. 1) se CODstata q mle i ~laci6n cuane <- • ,', 1 no un vat puntos (e re ,'onstrucci6n SoUd. ,
," 0 cI)\ectiva es una ( acClO 1- ,1
ociuc(o naturaL . ~ r de separaCton de as pr \ elaClon \ \ prde-E1 punto (. e f , cf lcctlCa de as
, se encuentra en la 1a sus acciones: enfoques ' . , 'nt1uyen en" "d'
"as del indiv1duo que 1 . oes son func10n e reno ",. 7 elecClO " , ' . ' ._
, 51' \"S deClSlOnes ) I' Ilel'as estan h1Stort Pues L a. , .. " re ·ere. " f' 'ncias, y est.1S P . derse smo a esns pre ef(~, puecle enten .
c~~1ente determinadas, nOe e1 individuo est3., :ne~la-, tir de la manera en qu \ de articulaClOn con
pd.r , or su moc 0 t' . nW do hist6ricamente p . \ la idea del mm 1m,Ie =>
'. En este sentt( 0, ", \ contorme el colectt\oo. J -'\. -is eqll1ltbr.1co 'te un an~l IS . molecular penm
l'uhfic Goods .(' lleclU'eflctio li 'JheLof!,ic(!! J) . , ) "s 19(rl.
I' l\'l~lIKl\r oboo, .. \ l"ni\"crsJt~ Ire, .. ' . . \ 'n' 'o((;nJllpS. Han.lfl '" " Irc(:' :\loblh7,:ll!OO ,ULl .
and the I UJn\'\'C',rthV, Zald t\byer. .. Rcsot 4 ,eriu1Il Journal oj , .. lohn .' l... " \' . <'11, 11 \
" , \ p'lfnal r 1(.~or) . k' Bxkwarl to 1 \,In\'cmenb: 1· \1 . 'r "100 mg· - 1
Socia. . ) 19:;; Zald : ;l')'L, . I' Future ot t le - "' logy. num. H_, \ ' l',lst :l1ld t K. _
.'iO(lO ~ ., _ Renections on I. lL: .. en Morn" Aldom ')' Look For\\"\l~\.T 'Hinn Iksearch prugr:l~ll_: I mOI'ell/ellls thcory. Resource r"lJo)\ 17,. ) Froi/tiers 1/1 .'O( 1(/ 1(9) Carol \\L"CJllr~ {cotn1:
S. - ".,\e J.·niyersity Press. _. l",tema
' - 'c!Kut 1, £I -tor r e . _ :-\ew Haven, Connt _ - " \' -d Friedh('r~- ,at : (T: ' ~- \lichd Cremer Y 1· .. r,1.II_ {-"tinl. :">lexi(o. Pama. 1)
" ' '" 11'10 (/CC101l 1.-0«: [as restncC10;JO [
,'>l __ BJET!\ Il )A]) Y Rl:AU])Af) SQUAL 69
induye b relaci6n individuo-colectivo en ambas direccioncs sin privilegiar a ninguna.
Cabe ahora recordar el an;ilisis que del surgimien to de la economia-munJo, en el siglo XV1, lleva a cabo Wallerstein, cuando menciona las distintas alternativas que tuvieron las burguesias europcas para ciml'ntar su descnvokimiemo. Senala J bs "hurguesias que tomaron concil'ncia, pero Jentro de los limites de una naci(m-Estado"; pero agrega: "[".1 darameme esta no era 1<1 (mica posibilidad. Podrian haber tornado concicncia de SI mismas como una clase mundial" Entre estos grupos menciona a las comunidades de banqueros-comerciames internacionales. "En cl apogeo de Carlos V eran muchos en los Paises Bajos, en el sur de Alemania, l'n el norte de Italia f. .. J que ligahan sus esperanzas a las aspiraciones impl'riales de los J-Iabsburgos"; pero con el fracaso del imperio, las burguesias de Europa "se dieron cuenta de que su futuro social Y l'conomico estaba ligado a los ESlados del Centro". Ii<
Lo anterior es un claro ejl'mplo ell' estos procesos estructuraclorcs y de los esfuerzos de construccion social de los sujctos sociales en los que operan tanto macrodinamismos como dinamismos exprl'sivos de planos micro16gicos de la realidad. Es 10 q LIe pasa hoy en dia con las burguesfas latinoamericanas que han encontrado aparenternente llna alternativa para la constnJCci6n de su orden politico en d marco de una integraci6n econ6mica, y que, a semejan-
Ik op. eil" p. ''196
70 I'ROGl.F\lAS DEl. CO'\iOClJl.llE:\TO
za de los culrivaJores capitalistas de la periferia, que estudiara \'('alkrstein, sacrifican "de buena gana las raices culturalcs locales a cambin de la participaci6n
en culturas mundiaks".l~l El proceso de creacion del Estado se refiere a1
forjamiento de las instandas de definici6n de alternativas de acd6n, de manera que no haya que restringirse a 1a estnlCtura institucionalizaJa y a1 uso que de ella puedan hacer, segun sus intereses, los diferentes sujctoS sociales a traVes de sus representantes politicos. La sociedad, por su paIte, como el ambito de despliegue de las practicas sociales, se rcfiere a 1a capacidad de iniciativas de los distintos grupos para expresarse en mllitipies tipos de practicas, de acuerdo con Sll eontenido y grado de organizaci6n, mediante las euales contribuyen a asegurar su reprodueci6n social e ideo16gica, asi como a determinar rclaciones de dominaci6n 0 equilihrio con los otroS
grupos socia1cs, POl' su enfasis en la perspectiva reconstructiva de
su movimiento (como es 1a creaci6n de instancias de decisi6n Y e1 proceso de definici6n de alternativas y 1a capaddad para desplegar practicas sociales), este modo de conceptualizar las re1aciones Estadosociedad se vincula con 10 que llamamos organizaci6n de 1a movilizaci6n social, la cua1 debe conjugar a1 hombre como hist6rico-socia1 Y como sujeto,
Si examinamos con atenci6n 1a conceptualizad6n expuesta, podemos conduir que, tanto 1a crea-
l~ Idem
'il'BJJ::TI\'fDAD Y RE ALJDAD SOC1AL
ci~n de instancias de dedsL6 mas generico, e1 despll' -' '_ n, ~omo, en el sCnlido cas' 'I tguc de I .. , SOCIa es tien 1 fllCIJtivas de ~ , I ' ' en ugar en d -. ~' ' practr-a rea!lda:{ social: aquellos de t:tt:m1na~los planos de
una slmblOsis de 10 11l'sto~ ,', mc c, en vmud de clat·s de ' 11(0 V 1 ' I' ,e
n separarse la ' ,~ ,0 mc IvicJuaJ n , cond1Clon I ' 0 pue-sUJcto Con conciencia' I ce ser hist6rico y la d su acci6n sus detem;i (o~de el hombre aSUI1le ('~ perder 1 nauones ill" a capacidad d as generales " duaL e reaetuar como sujeto i~cli:~~
Lo clicho su ci6n a ' pone un rl'scate del ' ' las posturas centrad ,SUjeto en oposi-
autorreferenciales as en La Idea de siste ' rna ' " que, Como e 1 mas
nn, mas al1a de la' . . n e caso de Luh-
Po" , s mtenclO 1 SlCIones te6rl' v nes, levan '1 ,>, , , (',lS puranl c ... sumlr
poslbilidad de reaetuaei6n e~t; descriptivas casi sin y de los agrupa ' p parte de los h L mlentos SOC', 1 . omlJres que se disuelven en ' ~a es, en 1a medida e fu 'd Sll proplO ' ' 'I ,n era e1 analisis ' - - <lIS amlento d " d t _ " por lrrelev' ' epn 0 ropologica 20 ante, a 18 dimel1s'-, .. lon an-
En este sentido ses sociales se mll~:n s~ pue~e olvidar que las da-aungu a traves cI ' e oeurre que la .1' _ . . e sus miemhros apoya e ectlva Jed - . ' ,
en una masa 'Ictll . on de clase se h b ' , ante ' , om re de 1a clase reco ,qlJ(~ no peonite que el
reactuaci6,n, De ah1 que, ~~zca l~U propi,? espacio de de los sUJetos t negJr el earacter J , engamos e rna sa permitan en el ' que rescatar niter' - ' , marco de 10 l' lOS que co eetlvo el , reconoci-
20 Cf " 1 ' !gnaC'lo !ZllZCjU" uhmann 0 la _. - IZ3, fa \(}(ledad \ 1990, (eorla Como ('selinda/n, 111 hombres \lkla!)
Barcclona \ j , nt 1f()POS
E==-' 1,- '
\
\
72
I':TO EM ,S J)FL CONoctMIEI
PROBL., ,. "
. d dande se pueda reactuar , del espaClo des e
ffitento L acrosocia1. 1 bre el fen6meno m .' , ede consicierar a
so pectlva se pu Desde esta pefs . / de sujeto COfiU-
ar la nnClon' . posibilidad de reCUper 1 pie de los sesgoS prop lOS nitario siempre que se 1m anto esta concibe a 1a
I gia en eu ' \ d en de 1a antropO 0, crura social aea)a a, comunidad como una estru rte de realidad en e1
"1 moun reco dn veZ de defml~ a co icro_macrosodales se pue e
qUe las re\aClones m f 'I'd d partiendo de las promayor aCt I a
reconstruir con .
Pias practicas sOClales . , f ma de estructura so-
'd d se tfans Of . se La comum a .' cuyo intenor '
_' delrmltado en , - d .. -1 en un espauo de creacion e eta el proceSQ pueden observar tanto d terminar alternativas .. / para e ~
instancias de deC1s10~ , idad para desplegar prac-de accion, como la capac
d ' pueden rastrear los
t'leas' pero, ademas, don. e sdee mayores dimens1o-, spaclOS .
vlnculos can otrOS e. 1 ':6n entre estos espaClOS,
neS y el modo de ~rtl~u. ~C1 mas (ompleja, permit:n los que, en Su eo~)u~ac~onl macrosoeial de la socteUegar a reeonstrUlf e mve
dad nacionaL
IMPLICACIONES ~1ETOl)Ot6GICAS
1 - e1 del hombre-sujeto E1 esfuerzo por rescatar ~ _ pa~nto de la sociedad no eon~ciente en el desenvo Vl~~O por entender a esta
ede desgajarse del esfue '/ I ' Ie rescata como pu h bresoose ' en movimiento. Al om . :ta cuando esta inmerso
rotagomS 10 sujeto aetuante Y P 1 eonteeimientoS; por en el eurso general de os a
SUB./ETIVIDAD Y RJ::ALIDAD SOCIAL 73
que es necesario desarrollar una metodologia que destaque los procesos microsociales de canstituci6n, donde la acci6n de los hombres es esencial,21 sabre 10 que esta cristalizado en la historia.
Sin embargo, euando se trata de representar conceptualmente la realidad, se tropieza con obstaculos, en cuan'to a aprehender el movimiento de la realidad, especialmente las relaciones entre los micro y macrodinamismos. Se plantea con urgencia la necesidad de armar un sistema de informaci6n que sea eongruente con esta exigencia.
En general, las representaciones que se hacen de Ia realidad obedecen a lin sistema de infonnaci6n basado en la 16gica de metas y condiciones necesarias para su logro; esto es, informaci6n sobre datos que pennitan reconstruir la viabilidad de un fin detenninado, pero que hagan posible definir cuales son las altemativas de fines viables. No queremos con ello decir que la informaci6n corriente que se eontenga en un sistema no pennita fijar metas, sino, mas bien, que no surge con daridad el campo de altemativas, que es una determinacion cualitativa antes que una mera inferencia a JYJ.rtir de ciertos datos disponibles. Lo clicho se reiaciona con la idea de una visi6n coherente pero abiena sabre 1a realidad,
En efeero, debe buscarse un sistema de observabies que, siendo delimitados, no respondan estrictamente a una derivaci6n teoricd, en oposicion a 1a idea c1<isica de indicadores que se apoya, expl1cita 0
21 Se esta elaborando, en es(e sentido, una propues(a metodal6gica sahre la subjetividad social constiruyente.
74 PHOH1.Ell;lAS DEL CO:-.JOCIlvnE~TO
implicitamente, en detenninados supuestoS teoricos, Los indicadores de desarrollo, aunque de manera particular los de crecimiento economico, se refieren a fen6menos particulares que pueden ser el resultado (por ejemplo, ingreSo nacionall de una serie de condiciones; 0 bien ser las condiciones (por ejemplo, inversi6n) que permitan el logro de ciertoS fines.
La relaci6n que se establece entre los procesos
es (earica porque ret1eja un modelo de la reaUdad. Esta perspectiva impide un razonamiento articulado sobre 1a reaUdad como totalidad que no se reduce a relaciones te6ricas. La diferencia entre un enfoque te6rico Y otrO que no 10 es reside en que eI primero requiere de un listado de procesos previamente definidos, en tanto que el segundo, solamente de ciertos universos de observacion en cuyo interior se pucdan determi
nar
distintos fen6menos 0 procesos especificos. E1 primer enfoque 10 denominaremos normativo; eI segundo,
procesual. El enfoque procesual de la estructura del siste-ma de informaci6n armoniza meior con el rescate del sujeto consciente para el anaUsis y la comprensi6n de los procesos sociales, por cuanto el hombre, en tanto sujeto constructor de reaUdad, se p1antea a esta como un producente. Vroducente que requiere de indicadores que den cuenta del modo en que diferentes esferas de 10 real pueden llegar a articu-1arse en su praxis; 10 que, por consiguiente, obliga a considerar a los contextos que especifiqu
en hist6ri
camente 10 puramente normativo. Lo normativo se opone a 10 posible ya que,
mientras aquel se restringe a dar cuenta de si se pro-
SUI./EllVIDAD Y RE Al.lDAJ) SOC1Al.
gresa 0 no en '·1 I 'b ~ ogro d~ d POSt Ie atiende' l' ' eterminadas ' ' e a ,I potencial' 1 d metas, 10
n L1na situaci6n dada El . lC a que Sl' contiene p(~der reflejar la ade~uac~~ntldo de 10 normativo es mlentras que 10 I). "bl on entre medios y f' d OS! e se ori ,mes gen. e alternativas viabl' enta a definir eI mar'
Se ha' es. . ce necesario di' . . qll1ere como opciones (f' stmgUlr entre 10 que se es p '[ I . tOes n' ' , OSI) e. Para.11 . .' ormattvos) V I niv 1 I ~ 0 se tJene' ' 0 qu~ " e es (e analisis qu que distinguir ent '
El cam d e, en genenl' . rc ~ , po e 10 que se' < , se confunden noshco normativo ~ qUlere corresponde a1 d" ' ap' . . que po d' 13g-roplado de . f ,r me 10 de .' 10 ormaci6n.> ~ un sistema no en la' . ' ensena si . consecuci6n d I se progresa 0
a la logica de I 'f e () deseable, Cor razo . os mes, que es I d . responde namlento ecu· no' . a ommante <> I 1 . mlCO E ~n e
ectura respond ' I . . n un terreno te ~ . ~ , e a a Idea d one. 0 de re,~ normativos, en partie 1 .. e proyectar indicadotatl~a. segun distintos pa u, aI .de natura1eza cuanti-paclO. . rametros de t' ,. lempo y es-
S10 embargo 1a d f' . . ~ recon' ' e mIClOn d f bl oClmiento de 10 que e mes necesita el
e, que no requiere de . eds. objetivamente posi-porque de 1 10 Kadores . t _ 0 que se trata >. normallvos, rar senales de 1 en este caso es d '" ~
dad ' 0 que se contie' e eneon-en una s1tuaci6n da i' ,n,c como potenciaIi
metros de tiempo yd' (a, segun diferentes P' -
Pro e espaci ' ,I[a-
yecciones I '1 ,0, en vez de et de d l' ' " ., potencialidad eetuar a e Inlltar, entre todas las' cumple la funcion quella que resulte viabl . a1ternatlvas posib1es
Los' d e, ., 10 icadores no .
por las a 1 '. ~ nnatJvos son su . genClas publicas d d penmpuestos e esarroll . . 0, representan
~f~~------~==~------------~·
76 . S DFL CO~OCIj\llr:\TO PROBLEi\L"., .
7 d~ to de conceptos \ la operaClonahdad de l~e~\~:~~~s de "lguna teo~a d~~
[0 OSlClones teoncas , e roceso, en cam 10" P P 11 J os mdl("dores d p d 1a capaCldad desarro 0 J i desenvoh Iffilento e 11 con-relaClonan con e L or 10 IDlsmo, con ~
~ de 10 real, y, P 1 pues conducen de Vlsion, d los sUJetOS SOCla es, '16n de 1.1 Clenoa cnuel e / concretJ en tunc
, de una SltUJClOn ) a1 anahS1S l't 'as altern,ltlvaS --., de pOlK . ~ definiClon
, I plano de los \ x resado en t' , ."
lorad6n de 0 c" p . d 'cadores, \-leXiCO, n par~ l~~a ;~~ca episfemul6gi~a de tr;s 1~9~9.
indicadoreCi, ct. . (1 nadas. num. 11 t), . MexlCO. or < El coleglo de
EL PROCESO DE CAMBIO Y LAS DIMENSIONES MICRO
Y MACROSOCIALES
Nos proponemos mostrar los peligros que se enfn:ntan cuando se recurre a enfoques fragmentarios y simplemente estructurales de los procesos sociales. Si incorporamos eI presupucsto del sujeto social (0
cotnunitario), sera necesario revisar la informaci6n mediante la eual se organiza fa accion que relaeiona al hombre con su realidacl. Para ello consideramos necesario distinguir entre 1a realiJad empirica, como 10 exterior, sin que medie la presencia de ningun sujeto, y la realidad empirica mediada por la presencia de un sujcto que articula la realidad en terminos de su practica social.
La idea central que pretl'nclemos dl'sarrollar es que la visiclO integracJa (no simplemente agregath'a) descansa en las necesidaclcs que plantea 1a praxis del slljeto, en \'ez de limitarse a una combinacicm entre factores propios de clistintas jreas de la realidad para que, de ese moclo, se puedan determinar las posibilidacles de desarrollo. Se haee neeesario fonnular algunas aciveItencias para una mejor caracterizaci6n del planteamiento.
77
IDEAS METODOLOGICAS PARA EL ESTUDIO DE SUJETOS SOCIALES *
DESAFIOS DE CO.\!OCIMIE:\,TO
La importancia del tema de los sujetos sociales estriba en que constituye un esfuerzo significativo para aIcanzar una rnejor captaci6n de 1a realidad hist()rica, en tanto conforma un hori2onte que articula dife-rentes pIanos de la reaUdad social. EI punto de partida de cualquier reflexi6n metodoi6gica sobre los sujetos sadales tiene que ser el reconocimiemo de 1a complejidad que reviste .'iU consideraci6n como simple producto historica, en raz6n de su naturaleza dinarnica, 1a cual se manifiesta en Sll constantc despliegue en el tiempo. Ello plantea que tengamos que conceptualizar a cualquier sujeto como producente de nuevas reaIidades, a La vez que exige la inclusion de distintos ritmos temporales y de escalas de espacios asociados con esta condici6n de producente. De este modo, nos colocamos cn la necesidad
.. E.stc trabajo fue clahorado a solicilud del Progmma de Maestria en Sociologia del Trabajo, LO\M~I7.tapalapa. que coordin:l el doctor EnriquE' de la Garz;1.
97
I 98 PROBLEMAS DEL COt\OCL\lIE".JTO
de organizar un recorte de observacicJn que permita Gtptar la realidad como articulaci6n de niveles heterogeneos, circunstancia que configura la situacion de objetivaci6n del sujeto; esto es, la situaci6n que garantice e\"itar las distorsiones propias de los para metros cuando se manejan implicitamente. Es necesario partir de esta situacion para evitar que nos alejemos de las complejidades del sujeto que sc pretende analizar.
La realidad, cuando es concebida como una articulacion entre producto y producente, constituye una relacion de conocimiento que sirve para ubicar el problema del sujeto. Se parte de que hay sujetos que, como tales, son capaces de constnIir realidades, sin restringirse a la condicion de producto historico, ya que constituyen una expresion particular de la subjetividad SOCial; de 3hi que permanezca, como trdsfondo del desafio cognitiv(), la dialectica entre detcrminismo y voluntad humana, creadora 0 rutinaria, transformadora 0 reproJuctora. de un orden socioecon6mico y cultural estahlecido. Entendemos que el concerto de dinamica reproductora es propio de los orgdnismos vivos. l En oposici6n a estos, tenemos los dinamismos que no s610 pueden dar lugar a reproducciones y crecimientos, sino que, ademas, definen su particulariclad por quedar sometidos a la voluntad de direcci6n de los homhres, en terminus de opciones que se puedan reconocer y clegir.
cf. I().~ planteamientos sllrgidos desde Ia fi~iol()gla can Humbcrto Maturana V su traslaci6n al plano del analisis social pm Niklas Luhmann. 10 ~Iue pernllte acbrar la funci6n epistemol6gi
ca que puede cllmplir Ia distincion que hacemos
IDEAS .',1ETODOLOGICAS 99
Dcsde csta perspectiva, la subjetividacI. siempre que no se aborde can criterios reduccionistas. representa una situaci6n de confluencia de pianos de realidad en la qut' se puede rastrear c6mo d~sembocan los microprocl'Sos (por ejempio, los de indole psi cologica), asi como 1a apeltura hacia ambitos sociohistoricos que se caracterizan por ser indusivos cIe otros pIanos que puedcn constituir el contexto particular del sujeto concreto que interese estudiar. Estos ultimos phnos de la realidad pueden estar asociacios con otras ritmos temporales y otrdS escalas espaciales. p~)f clIo, la subjetividacI articula diferentes niveles de concred6n de la realiclaJ, 10 que nos obliga a analizar el recorte de observacion del fen6meno para poder dar cuenta de su condici6n de producente, esto es, de sus exigencias de despliegue temporal.
En decm, el recorte es parte de una secuencia que caracteriza a la situad6n de objetividad de la que hemos hahlado. En consecucncia, tenemos que partir de 1a premisa de que la complejidad de los procesos sociohist6ricos en general, y de los sujetos en particular, no se puede resolver recurriendo a procC"dimientos de simplificaci6n arbitrdrios. Una de las pocas afirmaciones que companimos (on Luhmann es h de 1a necesidacl de renovar constantemente cl presupuesto de la compkjidad en el esfuerzo por construir el conocimiento, en la medicIa en que 10 que se persigue es abrir 13 capacidad de pensar a los desafios incditos de la realidad social, en vez de encontrar la paz conformista de los constructos tc6-ricos, los cuales no sabemos cuancio se transforman en verdaderos "documentos muertos"
100 PROnLEl>1AS DEL COKOCIMIFNTQ
Al\\ECEDENTES CO]\;CEPTUALES
La reflexi6n es parte del esfuerzo para encontrar una forma de razonamiento adecuada a 1a naturaleza particular de 1a realidad sociohist6rica. Sin pretender recuperar en detalle estos desarrollos, cabe por 10 menos mencionar algunas formulaciones de car:kter epistemo16gico.2
Una caracterizaci6n de 1a propuesta puede ser definida a partir de los siguientes aspectos: ~
i) La realidad sociohist6rica constituye una articulaci6n en movimiento que ohliga, en cualquier recorte de observaci6n, a distinguir entre 10 dado y 10 que esta dandose.
ii) Esta exigencia, en cuanto se refiere a 1a construcci6n del conocimiento, implica distinguir entre las referencias empiricas (como 10 dado) y los requerimientos de la potencialidad (como 10 que esta dandose), que cumplen en conjunto la funcion de requisito de objetividad.
2 LI Hnea de reflexi6n ha reconocido di.<;tintas etaras, como las siguientes: Conocimiento y sUjetos sociales. El Colcgio de Mexico, Jomadat., 111, 1987; Uso crifico de la (eOlia ... , EI Colegio de '\lexico/Universidad de las ,,\'aciones lJnidas, 1987; De fa bis
foria a fa politica, Siglo XXI/L'niversidad de bs Naciones Unidas, 1989; Los horizontes de fa razon ... , Barcelona, Anthropos-El Colegio de Mexico, 1992.
l Cf. IIugo Zeme1man, "Razones para un debate epistemo-16gico", en Revisfa Mexicana de Sociofogia. ano XLIX, vol. XLIX, nllm. 1, enero-marzo de 1987.
IDEAS METODOLOGICAS 101
iii) De 10 que se deriva que el concepto de realidad como movimiento cumple una funci6n epistemologica, y no la de ser su concepci6n onto16gica.
h0 La funci{m epistemo16gica se desdobla y a) constituye la hase para recuperar la historicidad de 1a raz6n cognoscente, con base en la critica de 10 dado; h) impulsa la apertura de la raz6n mediante el esfuerzo consciente de objetivarse para po-der asimilar 10 no dado de la realidad, que es su movimiento.
v) Lo anterior significa que la fonnulacion de 1a teoria se subordina al esfuerzo de reconstruccion del problema que ha servido como punto de partida para aproximarse a su especificidad hist6rica.
vi) La reconstrucci6n mencionada permite delimitar la base real desde la cual se pueden definir opciones de teorizaci6n mediante las cuales transformar el problema inicial en objeto tearico de estudio.
vii) Par eso el razonamiento sobre la realidad hist6-rica tiene que ubicarse en un campo de la realidad mas vasto que el de la teoria; esto es, en un horizonte histarico que abra paso a la delimitacion de un campo de objetos, antes que restringirse a un objeto particular que, par 10 general, queda circunscrito a una estructura te6rica.
viit) La recuperaci6n de la historicidad del problema se acompana de un necesario control de los sesgos teoricos ideol6gicos, para evitar la reduccian del problema a un esquema predeterminado.
102 PI{Of3LE\\,\S DE! CO:--lOCIMIE'-:"\'O
Es un esfuerzo para resolver la adecuaci6n hist6rica de una teoria, ya que no se resuelve satisfactoriamentc mediante las distintas modalida
des de la prueba. POf adecuaci6n hist6rica de una teoria enteD
demos su capacidad para dar cuenta del modo en que se articula concretamente una rcalida? particular, en un tiempo y un espacio determlnados, asi como de sus potenciaiidades de
transf()flnacion. ix) Para un usa de la tcoria que sea hist6ricamente
adecuado, debemos distinguir entre el pensar te6rico y e1 pensar constitutivo del razon~~iento tc6rico. Este (lltimo alude a la formaCion de las categorias de anilisis, mas que a la formuL~ci6n de enunciados Lie contenido sabre la real1-dad. La constituci6n de la~ categorias se refiere al problema de la pertinencia de la teoria, e~to es, que sea adecuada a la historicidad del problema. De ahi que el pensar constitutivo del razonamicnto tc6rico exprese el esfuerzo para aprehender el cambio de la reaUdad en todas sus formas V en todas sus escalas de temporahdad y de espacio, antes que encuadrarlo en una estnlCtura de explicaci6n te6rica que tiene lugar en un marco de condiciones prestablecidas.
x) En la historia de las ciencias sociales es necesario separar dos tipos de procesos acum~lativoS: por una parte, la acumulaci6n sustantlV3: esto es, de conocimiento teo rica mente constnllc\o; Y por la otra, las formas de organizaci6n del razonamiento y de sus recursos anaHticos.
IDEAS \1ETODOlbGiCA;" 103
ESPECIFlCIDAD DE LA PROHLF\1ATICA
Las exigencias cognitivas que plantea el sujeto cuando se Ie concibe como producente ohligan a articular dimensiones en la perspectiva temporal del momento (en tanto producto de un proceso hist6rico-genetico) y de la secuencia (en tanto el momento es parte de una secuencia temporal), de manera tal que se incorporen los distintos dinamismos que constituyen al sujeto. Ella se traduce en tener que destacar la dimension del movimiento interno por encima de las condiciones externas, aunque ambas dimensiones esten articuladas. En este marco se tiene que distinguir entre la necesidad del sujeto y sus posibilidades de viabilidad. El sujeto queda enmarcado en una re1aci6n de conocimiento que aharca diferentes modalidades de concreci6n, de tal manera que se pueda recuperar al sujeto en tanto producto y producente. Pero. al consistir en esta relaci6n, 1a consideraci6n del sujeto supone tener que comprenderlo desde sus mismas dinamicas constitutivas, segun sean los modos de concreci6n de 1a
subjetividad sociaL Como manifestaci6n de la relaci6n entre pro
ducto y producente, no parece posible reducir a1 sujeto a la condici6n de un objeto completo y claramente delimitado. Esto significa entender a la subjetividad no como un campo definido en tenninos de sus manifestaciones, ya sean conductuales, de expectativas 0 perceptivas. sino, de manera mas profunda. desde su misma dinamica constitutiva; ello remite a un ambito de realidad muy amplio que no
104 PROBLE:>tAS DEL COt'OC1!1-UENTO
es fidl reducir a un campo te6ricamente consistente, pues, de hacerse, puede correrse el riesgo de permanecer en los pIanos mas superficiales del fe-
n()meno. En verdad, al expresar el proceso de la subjeti-
vidad constituyente, el sujeto es siempre un ca~p~ problematico antes que un objeto clara~ente deflnldo en la medida en que hay que estudtarlo en funci(;n de las potencialidades Y modalidades de su desenvolvimiento temporal. De ahi que su abordaJe conceptual tenga que consistir en desentranar los mecanismos de esta subjetividad constituyente, tanto como aclarar los a1cances que tiene el mismo concerto de subjetividad constituyente. Dire~os por el momento que dicha concepto nos perrnlte recuperar la distinci6n entre producto hist6rico Y p~oducente de nuevas realidades, aplicado al estudlO de
los sujetos sociales. por consiguiente, en cuanto exprcsi6n de 1a sub-
jetividad social constituyente, el sujeto se ti~~e que observar como proceso que se puede espeClflcar, en 10 que respecta a sus contenidos, en distinto~s rec.ortes de observaci6n. En otras palabras, segun dtferentes parametros, par 10 que la observaci6n no .se puede agotar en un solo momento, ya que su "obJetividad" consiste en una diversidad de modos de concreci6n de la subjetividad; esto nos obliga a considerar la relaci6n entre momenta y secuencia, de ahi el ri~sgo de manejar un concepto a priori de la subjetividad. Mis bien se tiene que considerar que la subjetividad puede reconocer distintos pIanos ~ara manifestarse, tal como pueden serlo los proplOS
IDEAS METODOLOCICAS lOS
d~ la cotidianidad que se muestra en la situaci6n de VIda y de trabajo; 0 bien, los pIanos tempo-espaciaies, en los ~ue .se manifiesta la relaci6n memoria-utopia y ~l proplO SIstema de necesidades. Por eso nos parece Importante recuperar el concepto de ritmo de constitu~i6n de la subjetividad social, pues seran esas diferencias las que marquen la distinci6n entre el micro V
el macroproceso social. En esta direcci6n, parec~ sugerente trabajar metodol6gicamente las distinciones temporales hechas por Braude! y establecer un vinculo con la idea grdmsciana de movimiento molecular.
La principal dificultad de 10 expresado consiste en saber resolver acerca de las dinamicas constitutivas, en raz6n de la tendenda que se observa en ~uchos analis~as.) ~e redudrlas a mecanismos ~roplOS de la subJettvldad individual; 0, en su defecto a una reconstrucci6n de las condiciones "externas'; que, ~~entualmente, 10 determinan. La cuesti6n problematlca central se encuentra en no manejar un concepto de determinaci6n que no considere las media~io~~s entre estas condiciones y la emergencia de subJetlvldad, que no necesariamente se somete a u.na evoluci6n progresiva. Por eso, el desafio cons.Iste en encontrar un concepto de subjetividad constttuyente que no sea operativo por reducciones al plano de las variables psicol6gicas, como tampon) que se resuelva como simple expresi6n de procesos macrohist6ricos.
.Si la subjetividad es un campo problematico que conJuga las dimensiones micro y macrosociales, supone que se tenga que entender en una dialectica que incluya estas dimensiones. Ella exige reconocer
.-~
106 PROBLE'vLA..S DEL COKOClMJE:->!TO
mecanismos que, pudiendo darse en un plano de la rcalidad, sean productores de realidades inclusivas. La necesidad y la experiencia articulan 10 micro con 10 macrosociaL pero en su reproducci6n se proyecta en microplanos, aSl como es posihle que en su concreci6n reflejen dinamicas macrosociales.
En esta direcci6n, se haee necesario profundizar en los mecanismos constitutivos de la subjetividad, para no -congelar la prohlematica en una tipologia de las conductas. En esta perspectiva se pueden destacar algunos momentos de este proceso de la suhjetividad social. Debemos comenzar par aque-110 que puede ser basico de 1a subjetividad, siguiendo un enfoque no psicologista, a saher: el mundo conj(Jrrnado de las necesidades, en un sentido generico y sin caer en el particularismo de ninguna demanda concreta. Este mundo esta constituido por dos sectores hasicos de fa genesis de necesidades: fa memoria (tradici6n, inercia), J' .. de otra parte, por las visiones de futuro, fa utopia de algo. El punto de tensi6n entre estas dos grandes polaridades delimita el primer ambito de las posihle~ necesidades.
Este momento es el propio de la diahktica memo-ria-utopia al que Ie sigue otro en el que esta cHaleLtica pasa a vincularse con el reconocimiento de las opciones, con base en el desarrollo de la capacidad para construir proyectos. En este caso, el sujeto representa una potencialidad realizada en terminos de determinadas alternativas de senti do: esto es, pasa de la pura potencialidad, propia del primer momento que contiene multiples posibilidades de
IDEA" ;\-'iETODOLOCICAS 107
senti do, a la concreci6n de . . de senti do. una .1iternatlva particular
Pem este momento pued ' , deado par racto
vo' t e e::,tarfuertemente mo/-
.I' ,,,--,\ ex erno"i (est( . 1 gencias politicas concreta~ d' .. ) es: IC eologias, exi-vas, etcetera) que altere11' ~u 17.or~Io~es .organizatijJosihle que se im
ho11 t (~namlCa Inlerna. E~'
1:-' gan c etermtnada . nes de la realidad t ' s Interpretacio-
, a,1 que pueden td de ji-ituro sohre 10 qu h d mo ear lIJl deseo La utoph se c . _ e ay e potencial en el sujeto
, onvlerte entonce' ~ . -. na al movimiento c ,.. s en una meta exter-pondiendo a una is;~1tJtll~,lVO de la subjetividad, res,. Ogl<l acerca de 1 .. , Gl trascender h re l' I' I d 0 que signtfl-, a IC <l( ada . d mecanismo de recono" ' en \ ez e ser un Ctnllento de la . . que se contiene en I' 'h' . ~ ~ potenctahdad
C lC a Situ acton dad- V tramos en lin mC)Jne t d' a, , os encon-n 0 Iteren!e en I! constituci6n de la "lib'" :d e Jroceso de , . ' '!jeWl ad- elt]u' ' "uleto movilizad .' e e,\ proplo del
0, que puede estar . sus potencialidad . romptendo con . es Interna5 efectiua' tlf!o de desenlloluimiento de fa "iU . ~ . ;'i: ya que este ra de to que pretend' h ,b)( Iludad de pen de-
a . acer con el' . c:;:terno, Su transformacl'o' f' ,'ilU
eto UJl agente
h, n en uerza ' h" <lse en 13 constnlc ," d se ace con , Cion e un pr .
puesto, sin que medie e ' ~)ye~to. que es imc;'}pacidad p' --" 1 desenvolVimiento de su
ara reconocer opcio 1 su viabiliclad, nes y e e establecer
. Cuando nos enfrentamos ala' .' . ~ subjetivid'lCj c constrtucron de la
< ,conlorme se vincul- I" memoria-utopia que' t 1 a con a dialectica , se rae uce en det . d tema de necesiclades '. 1. . ermma 0 sis-d " se re Jcrona c 1 .
e proyectos de resoluci6n 1 : on a eXlgencia incorpora la id d' d' ,: e estas. Con ella se
_ ea e lreCClon en e1 movimiento
108
constitutivO de 1a subjetividad. De esta manera se pasa del marco interpretativo de la intersubjetividad . a1 plano de 10 politicO, en tanto este involucra 1a necesidad de direccion del proceso constitutivo. E1 planteamiento de 1a direcci6n se expresa en que 1a constitucion de 1a subjetividad como simple movimiento entre memoria y utopia, y entre estas dimensiones Y las necesidades, se plantea como caracteristica del sujeto, en 10 que concierne a Sll capacidad para reconocer opciones que sean viables, Y esto, a su vez, representa una transformaci6n cualitativa del sujeto. En este marco, 1a subjetividad es apropiaci6n en fund6n de un sentido; pera, en tanto no se haya traducido en practicas, es todavia una direccionalidad potencial, ya que puede variar su sentido. 1:a _practica, en cambio, es una direcci6n realizada, por 10 tanto una particular resoluci6n de tiempo Y espacio segun detenninadas opciones reconocidas Y elegidas.
Cuando nos enfrentamos a la constituci6n de la subjetividad (con base en la dialectica necesidadesexperiencia-utopia: NEU), pero sin estar vinculada al reconocimiento de opciones viables, esto es, en el puro momento de la dialectica memoria-utopia, estamos en presencia de un nivel de desarrollo de la subjetividad que denominaremos el momenta del sujeto potE!.ncial. Este, cuando madura hasta alcanzar 1a capacidad de reconocer opciones Y construir proyectos, se transforma en el sujeto actuante, que tambkn podemos denominar como el sujeto como poder.
En esta perspectiva, planteamos algunos problemas conceptuales particulares. Entre estos, el mas importante es cuidarse de imponer los parametros
IDEAS METODOI.OGTCAS 109
de despliegue de un su'eto . " . las potencialidade d 1 par:Ku1ar para analizar
s e otro sUJeto E f sujeto se puede realizar t 'f .~ n e ecto, ~un (
. rans ormandos por eJernplo lIn rna' . ,e en otro? , Vlmlento s . 1 '
tico; 0 bien un actor P' ['to ~OCta VIa un acto poli-, Jl ICOVla un act . comunicaci6n co d or sOClal 0 de , mo pue e ser u '~d' cadena televisiva) Tin peno ICO 0 una , a pregunta nos bl' el significado mis ~ ~. olga a aclarar
. mo que t1ene e1 c to actuante Si 10 co f oncepto de suje-jeto que es 't~davia pn rontamos con 1a idea del su
ura potencialidad nos encontramos co . ' en este caso dad realizach e~ f n .~uedel sUJeto es la potenciali-
, unclon e dete . d vas de senti do. El se t'd . rmma as alternati-
~ n 1 0 equlva1e ala' . ~ construcci6n de II I' concreClon 0 na a ternatlva p It' 1 do, 10 eual implica U 1" a lCU ar de senti-que, desde luego n ~a se ~cClon de sentidos aun-
, 0 sometlda a un 1 d ta racionalidad. p ano e estric-
Sin embargo, ocurre que e t ' . puede ver fuertement 'fl' s e .~u..Jeto actuante se
e 10 uldo por f . nos (esto es ideol ~ . aetores exter-
, OglCOS politicos . que alteren su dl'na~" c, organtzativos) , mica co t" . confunde con frecuencia 1 ns It~lt~va. Ocurre que se en terminos ideo16gicos) ~o~e~eable (po: ejemplo, ocasiona que se impon an 0 n~cesano, 10 que de la realidad h g determmadas versiones
1 con ase en op " a este deseo ue se . .. Clones que responden tenida' dicha; op . ldenttftca con potencialidad con-
, . Clones reemp1' . como 10 que es posible de s azan a e~ta necesidad situaci6n la utop~ .' er potenClado. En esta
, 1a constttuye L1na movimiento constitutivo de la . ~~ta externa al diendo mas b' . subJettvldad, respon-. ' len. a una tdeolo '
slgnifica trascender la realid d gdladacerca de 10 que a a a. en vez de ser
110 PROBLElvlAS DEL CO:--JOCIMIFSTO
un mecanismo de reconocimiento de 10 potencial que se contiene en la situaci6n dada. Estamos en presencia de una tercera modalidad de sujeto: 1a del sujeto movilizado, que tambien podemos denominar
sujeto como pro.Vecto. La consideracion del sujeto como proyecto pue-
de impliear una ruptura con las potencialidades anteriormente senaladas, por cuanto la "potencialiclad" de este tipo de sujcto depended de 10 que pretendan de el agentes externos: su transformaci6n en fuerza sin atender a la efectiva capacidad para recO
nacer opciones Y de establecer su viabilizaci6n, sino, mas bien, la que sea funcional para una determinada construcci6n social que es impuesta. La ideo16gicamente deseado se impone como sentido de la propia subjetividad constituyente, quedando esta podada de sus mismas posibilidades de sentidos alternativos.
Todo 10 anteriormente expuesto se puede resumir en el planteamiento de que, en el trasfondo de las diferentes modalidades que puede asumir el proceso de constituci6n de la subjetividad (sujeto potencial, sujeto actuante Y sujeto movilizado) , la construcci6n de 1a realidad se encuentra como categoria central del analisis, 10 que significa asumir la utopia como desafto para el conocimiento de la historia.
La necesidad representa un modo de concreci6n de 1a relaci6n entre 10 microcotidiano-individual con el contorno que Ie sirve no 5610 de contexto sino de espado y que, en tanto le es ajeno, constituye parte de sus desaftos, En cambio, la experienda es la decantaci6n, como vivencia, de un derrotero conformado entre determinados parametros de tiempo
IDEAS METODOLOGICAS 111
y espacio que, desde 1a reaUdad de abrirse hacia otr ' d del presente, pue-
05 erroteros' ~ d parametros' 0 bien . ' segun iferentes una idea d~ prese~treePtetlr los mismos cn funci6n de
a rapada en I ' , part~, la visi6n de f e pasado. Por su > b' uturo es una r·f - ' am Ito de realidad d 'd. ' ~ ef(~ncta a un discontinuidad res e vd
l a poslble que tiene una
peeto c la real' I' I ' Dc este d 1 1( ae cotldiana .. , mo 0, a necesidad I' . .
nSlon de futuro ~ , a expenencia v 1a , 0 utopIa co ~ .
de articulaci6n entre 1 '1' norman mecanismos
1 os panos m'
es, en tanto represent' d'f ICro y macrosociatura de la situa .', ar:. 1 ercntes modos de aper
CIOn mas pa t"' 1 necesidad 10 es d ".' .r~ leu ar del sUjeto: la
e una 51tuauon d 1 ' La presencia 0 ausen ,', d e 0 cotldiano. CIa e 1a m .
nos coloea ante 1 ' ., emona-utopia ~ a euestton de l' h" ' , -
utopia, Cabe forln 1 I' . a Istonzauon de la uar e SlgUi t . rno se siente la "utC) ~," en e mterrogante: ;c6-
pIa por el ",' ";1
que, en este niver de 1, d'" . ~ sUJcto. Esta claro " d a ISCUSlon ap 1 SIan e dimension " ," areee a inclu-
, es PSlCosoClaies i ~ . a establecer un vincul ' 0 que nos obhga o entre esta c . ~ teamiento aeerea de I' b" ~ uestlon y un plan-a su JetIvld,td' ' garantice articular dl'st' . 1 L constItuyentc que
d mtos panos d ~,
as: el individual v el .1 . ' e esta, a 10 menos J cu ectlvo -t En
parece que la idea d ,. ' este marco, nos ~ . e mOVlmrento m 1" 1
ser utl1 en la medida en 0 e(u ar puedc cuesti6n de 1a med', " ~ que pretcndc abordar la
lauon entre estos dos extremos,
.. Distinci6n esqLlcm:"iticl ' I . compleja, pero que indiclmo.' pues a reahdad e.~." mucha mas pro ',' ' sa mancra d· VISional. La construcci6n d l~ _ (C una eJemplificaci6n tra que es mLly comple" , e d. prapuest;J metodol6gica mues-
pal dil' Ja ) que, de hccho es lCultadet> par'l su I. I ., ' es una de las prinei-
,. e.1 10ra0011
112 PROBLEMAS DEL CONOCIMIEl'.'TO
sin buscar precipitadamente, por comodidad te6rica y meto16gica, una reducci6n a 10 psicol6gico 0 a 10 social.s Lo anterior) debido a que nO basta con "describir el sentimiento" que se tenga de 1a utopia, ya que el problema reviste su verdadera significacion cuando se examina si ese "sentimiento" se transform
a
en terminos politicos; esto es, en proyectos de construed6n a partir de 1a conversi6n de 1a utopia en necesidad de practicas que, por definici6n, son siem-
pre de presente. Desde 1a perspectiva en que nos colocamas, el
movimiento molecular representa 1a construccion misrna de 1a historia. Consiste en una articulaci6n conerela de necesidades, experiencias Y utopia en determinados recortes tempo-espaciales. En este sentido, esta articulacion es tal que conforma la especificidad que reviste la subjetividad en un momento de observacion, pero sin perder la dimensi6n de su secuencia temporal. Es necesario aclarar el significado heuristico de cada uno de estos elementos conceptuales que constituyen esta articulacion. Es as! como resulta que: i) la necesidad es una exigencia del dandose, pues se abre a vados pIanos de la reaUdad (micro 0 macro como expresiones del desenvolvimiento temporal); it) la experiencia es una exigencia de 10 dado, y iiI)
'; Entre los c\asicos noS parecen !TIUY sugerentc~ los planteamientoS de Simmel en cuanto a la relacion entre individuo Y cultura, as! como las ideas que se contienen, pero que habria que desarroll
ar, en las Tesis sobre Fauerbach; mas recientemcnte, las
aportaciones
de Thompson en sus estudios ~obrc la clase obrera
inglesa
I I I I
11)EAS All:TODOLOG1CAS 115
la lltOp' Ia es llna . Pero' eXlgencia de 1 vearnos con mas I '. 0 posible de c} . rompimiento d 1 . (etenlIllICnto a1 J;" J <lrse.
EI d' e presente, <tne ose como . andose pllede se' ,
un futuro 0 . I un dan dose" f ncntes d I. no serlo, sCgllIl el pe" len unci6n de
e J. rehc'~ so ce los' presente pued ' Ion presente-futuro E ,[compoo bien e Contener su flltu ~ . n e ecto, el b como un posibl . ro lomo deseahl '
Ie determina relacio ~ 0 un lmposible. 1.0 d ~, ,<.:, el pasado nes del present ~ esea-
puede con" . e lon cl pa " d tacion d I stlturr una' . ~ sa 0; , e 0 dad verSIOn . dad 0 como defi ,. ' 0 Interpre-
. 0 pueue asumir un _ Dltlvo; 0 bien, donde sImple repetieion del ,car1acter de d:indose c 10
Por p,lsac 0 omo su parte 10 ' '
present. ,poslble deter . . no de meacon e1 pasado como SiIl1
mplma relaciones del
nera est~ . . e mem . canismo de fll .' atlca 0 inhibitoria, sine ~fla, pero caso el J;" I elZa que potencie al ,) como mecom:) 'i ane ose se cIa en el de .presente. En este
< pertura hacia 1 spllegUl' de 10 d~ I ner, ya sea c . . 0 nuevo, 10 c U <i( 0 di '. ontmUidades 0 1 I e puede supo-
ir:;~~~7eUlddade.s respecto delop~~~des nf,liS probable. etermi' I < O. ,n camb'
versi6 . na re aciones 10, 10 do < n, a mterpretaci6n co I Con eI pasado como
como posible de dar~" mp eta y unica de 10 d'l-Todo I ,e, '
d 0 anterior se . e 1a historizaci6n d~ 1 relaCl(~na con el prohle .
como deseable . . a WOPtJ, ya que "m.i canforma d' . ' 0 bIen como posihl . el futuro
lstmtas ill d I' . e 0 Imp '11 lecular p 0 a ldades d 1 . OSI ) e, puede~ ues las dinamicas COnstr~, ,movlmiento mo(en 1a a que.~arse reducidas a 1I "ct~rds de historia te cepelon de Alberoni) n es~ado funciante"
Y cOyuntural (en l' ,0 puramente eme a acepci6n de R L rgen-. llxem burg), 0
114 pH.OBLE\lA~ DEL CO)!OCIJ\UE,\T(J
, . de h concepci6n de a traducClon , bien reconoeer un ~. , ., de proyectos (en f '1 terminos poittlCOS, () sea, -uturo , ., . ~., 'cD . ,
la acepClon de (JIams . 10 de concrenon ' 1 d ~ cscnta un mOL
La neceslC a f(~pr L • \" a-individual con . ~ e 10 mierocotl( Ian . d .
de la reiaClon eotf '1 de contexto smo e Ie sirve no so 0
el contorno que, -. _ ) constituve parte . -" t'lnto Ie es aJcn< , ' , d
espaClo y que. en, \. 1'1 experiencia cs 1a -e-I "f~ s Fn cam )}O, '- f' _ de sus c esa 10L" .!. n derrotero con 01-
'iVeOClJ (e U cantacion, como v. \_.' "ametros de tiempo y
determmac os pal d malio entre . I'd' d del ])resente, pue e desde la rea I a . espacia, que,. . segun difereotes para-
I " otros derroreros "d d' abrirse laCla '. f 'I'()n de una 1 ea l' ' , - petlrlOS en unc l' metros; 0 blcn, Ie , "' d POI' su parte, a
'da en el pasa D. . d Presente atrapa f ncia 'l un ambIto e f 'unareere ~ .
visi6n de uturo es . . ne una discontimu->, 1" dad de vida poslble que t1~ , f";
re,11 I l' reaUdad coudlana. . _,' dad respecto e e a " l' d la experiennJ. ~ 'Ht lola neccsiC a, ~
De este moe, ~', f )rm'm mecanismos lOI'1a, con ( , ,
visi6n de futuro. 0 u 1 'nl'cro \/ macroSOCla-' 1 'p anos t J
de articulaci6n entre os I'f' ~ tes modos de ar"~'-sentan e 1 eren
Ies, en tanto repr~~ .'. particular del sujetL tura de la situacl0n ma~ - ," dada de preseme;
I 1 de una SltuaUOn necesidac o. es "csde el recuerdo de un pasa-la experienCla 10 es d , , t'culaci6n presente
" desde una ,If 1 do, y una utopIa, _', .'6n de producto, una
, -. de una Sltuao '~ futuro. 1'.sto es, ,', I'd' d respectlVamenlL.-,
'1 de potenCla 1 a , f de causa y un. " \' \ 'onJ'uga pasado y utu-. d la nccesiC <Ie c 1 En este sentI 0, hacia el pasado y e
\ . de la 'lpertura ro es la )lsagra " ~1 asado v el futuro
' d d de como c P , , futuro que epen e ", de la experiencia de pre-"1 presente: 0 sea, f
c:stan en c: '., l' + "6n pasado- utum. sente que es funClon de a rc au
IDEAS METODOI/}(;lCAS 115
De ahi que a 10 micro tengamos que concl'bir-10 como ci presente vivido y a 10 macro como la linea de pasado-futuro que se percibe como un contorno de posibilidac1es. Esta es la dinamica de la subjetividad como campo problematico, conformada a la vez par ]a concreci6n y eI desplieguc del pre, sente en tanto es una apropiaci6n de 1a situaci6n de vida (que emendemos constituida por e1 trabajo, la cotidianidad, ]a familia, los cuales apuntan a distintas bases dl'sde las que tiene lugar la apropiaci6n),
Si entendemos la constituci6n de Ia subjetividad a partir de mecanismos como los anteriores (que podemos sintetizar en la dialectica memoria-utopia), se plantean diversos problemas que dcben ser elevelados para su comprensi6n. Concebimos 1a suhjetividad como una capacidad dl' apropiaci6n centrada
1.1 constnlccion de realiciades, 10 que supone una LLlerminada articubci6n de tiempos y espacios, En esa medida se puedl' expresar en distintos recortes, esto es, en diversos contextos, La apropiaci6n-cons_ ~",j:wci6n .'Ie objetiviza en su misma espacia1izaci6n. ~;,,j\' embargo, en la medida en que ella puede tener Jugar en diversos recortes, da lugar a diferentes modos de concreci6n de La objetividad del sujeto,
El modo de apropiaci6n de 10 real ensena acerca de 1a conformaci6n ele sentic10s en el sujeto, en la medida en que ]a apropiackm se haga en funci6n de una determinacia artic~liaci6n entre el pasado (memoria) y un futuro deseable (utopia). En todo colectivo se pueden observar ciertos "anudamientos" que vinculan a estas dimensiones. La ponderaci6n que tengan en las practicas del sujeto determinaran las
116 PROHT.E!l.V5 DEI CO:'-iOC[vITEI'TO
potencialidades de este. En deetn, toda practka coneeta pasaclo y futuro en su conerecion presente, ya que siempre se mostrara una doble subjetividad: como rcconstrucci6n del pasado (memoria) y como apropiaci6n del futuro, dependieodo la constituci6n del sujeto de las articuiaciones de ambas. Por elln, la subjetividad contiene una direccionaliciad potencial seg(m la apropiaci6n de 1a rcalidad descanse en una U otra dimension.
En el estudio de las dimimicas constitutivdS, tenemos que considerar que los individuos que se pueden rcconocer al interior de una identidad mayor participan de una complejidad de relaciones c interacciones (familia, vecinciario, comunidad, etcetera), que no son ajenas a la constituci6n de una subjetividad compartida. No se trata de que la relaci6n se vaya negando para superarse en una identiclad mayor; mas bien las relaciones se moldean, se reformulan e induso se orientan, pero permanecen como parte de esas microdinamicas que constituyen la subjetividad social. Se debe respetar la especificidad de los comportamientos individuales y colectivos, sin incurrir en reduccionismos con pretensiones explicativas. Pues, antes que nada. estamos enfrentados al clasico problema de tener que entender el plano de \a subjetividad social como una articulaci6n de 10 individual y 10
colectivo. En decto, 10 que se puede dennir como Ia
dimensi6n colectiva de los individuos no es una realidad dada en terminos de una estructura social y/o valorativa, sino m{ls bien una reaUdad que reconoce
IDEAS .\lETODOU)GICAS 117
S~L: propias posibilidades de realidad objetiva~ posibll!dades que dependeran de la naturalcza del nucl~~lmiento de 10 colectivo (como plIede serlo 1a fam11IJ, l~ comunidad, la regi6n, el tipo de unidad produ("tl~'a. estructura de clases). De all1 qUt: definir 10 colectlvo como exclusi\'o de lin plano de la realidad represente lin corte arbitrario que elimina las otras I1lodalidades en que se puede lllanifestar 10 col~ctivo. Pero, tambien, rorque esa fijaci(m de su real~d~? en un plano particular significari<1 perder la poslbIi~dad de enteneler 1a complejidael que se ocu1-t~ detras de los distintos nucleJ.llliemos de 10 colectlVO~ redu~icndo10 a un producto predetf:flllinado segun pre1erencias teork-as 0 ideol6gicas (es decir, clases, regiones, etcetera), pero sin llcgar a ("om~r~~derlo como un proceso que transforma la subJetlvldad del individuo segCm sea la naturaleza del nudeamiento que silYe de apoyo a la constitllci6n de la subjetividad social.
ClJESTJO:\ES \1t::l"UI)OL6(;ICAS
La. di~il'ultad de teorizar a los sujetos sociales resicie, pnn~'lpalmente. en poder resolver b posihilidad de retlepr adecuadamente su naturalcza ell' proccso, pu~s'. como hemos observado, la tendencia es a defI~lrlo~ (~~mo pf(~duct~s hist6ricos y no como pro~ucentes. Sm 1a eXlgcncta del movimiento, el an:iliSIS de la subjetividad termina por reducirst: al ambito de ~entido que impone el dis('urso cuya visi6n de la reahdad actual y de su devenir se ha convCitido
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118 PROI3LD-IAS DEL C:O]\"OCl!;1IE~TO
en el marco de referencia 60ico y, en consecllencia,
obligado. En tanto producentcs, los sujetos revisten la di
mensi6n de Sll potencialidad, que ohliga a amplilkar el concepto mismo de 10 qu~ enlenocmos por objetividad. En esta linea, se plantea 1a necesiuad de rdacionar el concerto de realidad, en cuanto objctivaci6n que resulta de las practicas sociales, con la capaciclad de los sHjetos para nxonocer opciones de viabilidad (de 10 que no son ajcnas sus representJciones simh6licas).
Ahora bien, 1a conceptualizacion del sujeto como una relaci6n entre producto y producente impliea entender que la concrecion de 13 subjetividad social, en distintos paraIDctros de tiempo y de espacio, .'lupone una particular relaci6n de 10 dado con sus posibilidades de devenir. Lo anterior significa que tengamos que rescatar la influencia que tienen las concepciones de futuro del suieto sobre la dinamica constitutiva; pero tamhien de como la situaci6n de presente, 0 dada, del sujeto pueue ser bloqueada, 0 hien potenciada, segun sea el papd que cumpla la memoria hist6rica del sujcto. Esto es, como la utopia y la memoria se transforman en necesidades del suieto, y como a Sll vez estas se tradu
cen en practicas. 1.0 que decimos plantea dos cuestiones: una
tcorica y otra metodol6gica. Te6ricamente se enfrenta la tarea de c6mo est~l. presente \a necesidad de futuro en la relaci6n entre presente y futuro, que, a su vez, nos remire a la cuesti6n de c6mo la memoria y/o la utopia sirven de base a la constitucion de las pr,l.cticas. Par Sll parte, metodol6gica-
]])EAS .r..IFTODOU)G1CAS 119
mente obliga a volver mas compIcjas las coordenaclas de ohseITaci6n, pues cstas no se pueden reducir al plano de las manifestaciones empiricas del prohlema, ya que debemos ubicar al sujeto en su momento historico que incorpora toda la riqueza de otras m(iltiples coorJenadas de observaci6n. Complejidad del momento que se expresa en la simultaneidad de distintos ticmpos y espacios. los que no se pueden dejar de lado en tanto cl m0111ento hist6rieo ubica aI problema en su contexto de articuladonl's.
En efecto, la concepcion del suieto como proceso obJiga a considerar su despJiegue en cl ticmpo, 10 que, a dif'crencia de las eclosiones que un C011-
glomerado social puede experimentar en un momento dado, obUga a incorporar los contextos en que el sujeto se especifka, tanto en sus dinamicas como en sus demandas. Par eso nos parece valido recuperar la nod6n de "coyuntura'", en cuanto establece una dif'erenda entre un simple hecho cmpirico y un acontl'cimiento. EI primero no traspasa los limitcs temporales del evento, mientras que el segundo se caracteriza porque se transforma cn una tendencia historica. De ahi que el despliegue temporal no estc mcdiado solamente por momentos, en cuanto son recortes de observaci6n, sino que los momentos son rambien expresiones de la propia dina mica constitutiva del fenomeno; por cllo 10 que subyace en el despliegue es la dialectica productoproducentc del mismo sujeto social.
Por consiguiente, es neccsario distinguir varios pIanos en d recorte de observackm; a saber, algu-
r 120 I'ROBLE\lAS DEL CO--';OCIM[ET\lTO
nos como los siguientes: a) cl nivel morfol6gico, que se corresponde con 10 que propiamente es el nivel de enunciaci6n de un lema can sus limites conceptuales, ya que este. por definicion, es difuso; b) el nive1 problematico, que sc corresponde con la transformaci6n del terna del sujeto en un campo problematico; en consecuencia, en tanto campo prohlemitico puede contencr diferentes modalidades de concreci6n del sujeto Y pOf 10 mismo es mas dinamico que el primer nivel de observJcion, y c) el nivel de cierres conceptll~t1es posihles clel propin campo problem{ltico, que se corresponde con la transformaci6n del problemasujeto en un objeto que retleje, 10 mas articuladamente posible, .'iU naturaleza dinamica.
De todo 10 anterior se dcsprende que sea nece~ sado revisal' el manejo de los padmetros de tiempo y de espacio, ya que 10 que importa es el despliegue del fen6meno. En cada uno de los niveles de obseryaci6n anteriol'cs se l't"fkjan distintas moda1idades de concreci6n, planteando diferentes posibilidades de contenidos. En este sentido, debemos te~ ner claro que de la manera en que se construya el sujeto, en tanto objeto de estlldio, depended. eI senticin que se espera que cumpla el cnnocimicnto; esto es, de la opci6n de futuro que uetermina al in\'esti~ gad or: ya que el ohjeto SL[Ci funciCm del ciinamismo, o bien de su ausencia, propios del recorte de obscrvaci6n que el investigaclor clelimite.
Si 10 que importa es el despliegue del fen6meno, en H .. 'Z de limitarse a un estado particular en que asume 1a condici6n de producto hist6ricu, la conceptualizacion de 1a subjetividad es parte del
lDEAS METO])OLCJCICAS 121
esfuerzo de aprnpiacion del tiempo y del espacio: es la historizJ.cion como mecanismo que actua snbre 10 potencial. EI tiempo deviene en 1a constituckm de sentido de construcci6n social, pOI' 10 que creemos mejor hablar de ritmo que de temporalidad ahstracta y extcrna al sujeto. Sin embargo, en ]a
medida en que el tiempn es constituci6n de sentido de construcci6n, l.'i espacio es la materializacion del tiempo en terminos de distintos tipos de pdcticas nrientadas a construir e1 presente por parte del sujeto.
Algunas implicaciones particulares que se presentan en el intento de captar los procesos constitutivos de los sujl'tos se asocian, por un laclo, con la necesidad de dar cuenta de la relaci6n entre 10 dado y 10 que esta dan dose, entre 10 determinado y 10 indeterminado en ]a reconstrllcci6n de las pr::icticas y discursos de los colectivos; por el otro, con el reconacimiento del tipo de relaci6n que estos cstableccn can la realidad.
Creemos que para avanzar en esta direcci6n es imprescindihle estahlecer una primera diferenciacion entre los tipos de contenidos que se pueden reconocer en las manifestaciones colectivas. Distinguimos fundamentalmeme dos clases: los contenidos de detenninaci6n y los de posihilidad. Dado que estos contenidos pertenecen tambien a estructuras te6ricas preyiamente establecidas, nos parece necesario discutir acerca de la relacion entre ellos,
Los contenidos de deterrninaci6n se refieren a situaciones estructurales, mienlras que los contenidos de posihilidad aluden a 5 ituaciones de potencia~
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122 PROBLEMAS DEL CONOCTMIE?\TO
lidad susceptihles de estnlcturarse si sc atiende a la perspectiva de su desp/iegue temporal.
Los contenidos de posibilidad son los que inCOf
poran 10 real, no como objeto denotado sino como cxperiencia-concicncia connotada en las rcpresentadones simh6licas. La conjugaci6n de ambos tipos de contenidos permite cuestionar las situaciones estructuradas, es decir, analizar 10 dado en tanto conformado POf la expericncia-conciencia de construcci(m de realidadcs. La incorporaci6n de los contcnidos de posibilidad se puede lograr por medio de las rcpresentacioncs simh6licas, las cllales permiten. adem:ls, cnriquecer el contcnido de las teorias. En decto, su contribuci6n consiste en incorporar mas realidad, una realidad que se plantea como necesaria de apropiarscla pero no en el sentido limitado de un objeto de explicaci6n, sino como 10 posible de ser imaginado como nueva historicidad.
Como una anticipaci6n que sirva de umbral para inicial' un giro en 1a reflexi6n epistemieo-metodologica, se puede sostener que el estudio de los sujetos sociales supone cuestionar el paradigma fundado en las relaciones de determinacion, en la medida en que el eoncepto de suhjetividad constituyente no se puede resolver excIusivamente como un producto de procesos anteriores, sino que requiere sea considerada su dimensi6n de produeente. Por eso, cl problema de la "objetividad" asume un car{leter mas complejo que si s610 10 circunscribieramos a la relaci6n de causa-cfecto, 0 bien de determinaci6n. No se puede negar que esta dimensi6n est;, presente -pero es s610 una dimensi6n entre otras-, de manera que
IDEAS .\1ETonou .. 1CICAS 123
si es aislada de las otras exigencias cognitivas, se incurriria en un an{ilisis reduccionista 0 de naturaleza unilateral.
Si por suhjetiviclad social constituyente entendemos la eapaciclad para construir sentidos. ella supone una eonstruccion de realidades en diferentes tiempos y espacios. Pero, conforme la construeci6n de l'ealidades pueda asumir estas caracteristicas, signifiea que la subjetividad social puede concretarse en distintas modalidades de sujeLOs socialcs. Desde esta perspectiva, la constituci6n de sujetos representa modos de apropiaci6n de la realidad a partir de la constnlcci6n de senti dos, 10 que nos remite al problema del reconocimieno de opeiones.
En este marco se plantea que uno de los desaflos en la construcci6n de conocimiento reside en reconoeer opciones potenciales, pues la realidad se tiene que concebir como conjunto de posibilidades objetivas susceptibles de potenciarse por medio de proyectos. Esto obliga a un modo de razonamicnto que consiste en abrirse a la realiclad, como aquello indeterminado, de modo que puedan reconocerse estas opciones objetivizables.
El sujeto social sera realmente activo si es eapaz de distinguir entre 10 que es viable y 10 que es puramente descahle; Junque dotu de sentido a las practicas sociales no significa asegurar que eHo Jes ("onflera capacidad para construir opciones y. de este
124 PROBLE\1AS DEL CO~Oc\MJEl\TO
modo, viabilizarlas. Es sola mente en cl plano de 1a experiencia donde se puede reconocer 1a posibili~:d de transformaci6n de la realidad, porque la nOClon
de expericncia da cuenta de 1a objetivaci6n de 10 potencial; es decir, de 1£1 transmutaci6n de~lo deseable en posible, dando lugar a que la utopta Sl' COI1-
vierta en un proyecto mediante e1 (lui sc pretende impancl' una direcci6n al presente 0 a una situaci6n
dada. ~o obstante, para resolver aeered de 10 viable
resulta imprescindible determinar el contexto en cl que se ubican los sujetos sociales, mediante la reconstrucci6n de la trama de rclaciones que conforman la realidad concreta Jel sujeto. Este conjunto articulado de rdacioncs se corresponde con proce-50S de diversa indole, cuyas manifeslaciones trans~ curren en distintos tiempos y espados. Tal grado de complejidad hace indispensable un estricto control de los condicionantes tec)ricos, ideol6gicos y experiendales durante eJ proceso de an{tlisis, pues es posible que inspiren sesgos en el momenta de la
conceptualizaci6n. _ . Se trata de impuisar una discusi6n metodologt
ca centrada en la idea de conjugar objetividad con sentido de realidad, en tanto el analisis siempre r~sponde a aogulos de lLctura que reprcsentan. diterentes ··para que" del conocimit.::nto de los sUJetos. Es 10 que consideramos constituye la pertinencia del conocimiento, en cuanto la capacidad de reconocer opciones nos enfrenta con la responsahilidad de proporcionar a los movimientos sodales ~nstr·.~menlOS de diagn6stico que cumplan can la tunClon de
lDL\S .\1ETODO[/)GTCAS 125
estillllllar su 311tocrecimiento; de ahi que el coocximiento de los movimientos sociales tenga que ser pcrtinente para In que se busque impulsar con dichos movimientos.
COKOCH\"llE0JTO y PRAXI~
La incorporaci6n del sentido obliga a considerar la relaci6n del conocimiento con la praxis como dimensi6n del propio conocimicnto. Nos colnca ante la tarea de tener que resolver cuestiones metodol6gicas propias de la praxis como dimension del conocimiento. La idea de praxis trasciende la experiencia puramente cognitiva, ya que refiere las neccsidades del hombre. 5i ha de darse una relaci6n entre el conocimientn y la praxis, sera esta (Iltima la que de~ fina la pertinencia de aqueI, de manera que la pro~ fundizaci6n del conocimiento sea concomitante can la de Ia praxis, en la medida en que determina la necesidad de su propio conocimiento.
POI' otra parte, si el conocimiento se circunscri~ biera a los limites de la praxis que 10 dctennina, se expondria a una peligrosa deformaci6n conforme sea tributario de los problemas mas inmeciiatos, pero que pueden no ser los mas signitlcatiYos para alcanzar un mayor desarrollo del conocimiento. Es el caso del pragmatismo que, en oposieion al "praxismo", vinculado a una exigeneia de totalidad 00 que no signifiea una interpretaci6n total definitiva y autorreferida de Ia realidad), mas bien, a una necesicbd de inclusiones necl'sarias, disuelve e1 conocimiento en
126 PROHLF.\lAS Oft CONOCli\IIEl\iO
]a voragine de la inmediatez de los problemas que se van sLlceclienclo. En cambio, la praxis nunca csta restringida a un objeto particular dado, sino que alude de manera directa 0 medi~lta a un contexto articulado de relaciones.
La idea de praxis, al vincularsc con b de constfLlcci6n, se corresponde con la exigencia de proyccto; l'S por eso que el anjJisis tiene que colocarsc en la perspectiva de superdf el plano de 10 puramcl1tc intersubjetivo para reemplazarlo por el propio de la dimension polItica, que, a diferencia del anterior, sc acompana siempre de la exigencia de constnIcci6n de orciooes viables. E5tO es, de 13 necesidacl ell' imprimir una direcci6n a los procesos.
La exigencia de proyccto interesa en tanto define las rdaciones .'loci ales en el marco de sus posibilidades de transforrnaci6n. El proyecto es la conciencia de construcci6n de futuro y la determinaci6n de las practicas requcridas para su logro. La realidad asi concebida deja de ser ese pasado cargada de inercia para desplegarse con tocb Ia fuerza de su virtualidad. En este marco un conglomerado social se constituye en sujeto en 1a medida en que pueda general' una voluntad colectiva (seglm los diferentes nucleamientos) de manera tal que pueda desarrollar la capacidad que Ie: permita construir realidades con una direcci6n conscientemente definida.
IDEAS MEl (mOU)GICAS 127
ESQL.DfA'I'IZAClC):--; METODOLOGICA
Una sintesis de las consideraciones metodo16gkas que hemos esbozado (que apuntan mas a sugerir la posibilidad de un disefio que a definirlo) exige destacar 10 siguiente como base de estas reilexiones:
a) La organizaci6n del anMisis, a partir del supuesto del movimiento, plantea rescalar de 1a reaUdad (aquello indeterminado que nos rodea) temas sustantivos que permitan dar cuenta del movimiento constitutivo de los fen6menos particulares que interesa conocer; de ahi que se privilegie la subjetividad constituyente.
b) La subjetividad constituyente, cuanclo se reseata en cl ambito particular de los sujetos sOciales, plantea concebir a estos con base en la relaci6n producto-producente que, desde el angulo de la observaci6n, se traduce en tener que subordinar el recorte al desplieguc del fen6meno en distintos tiempo-espacios.
c) De esta manera, la soluci6n del recorte de observaci6n se tiene que resolver a partir de una detenninada relaci(m entre momento y sccueneia; es decir, seglm los modos de concreci6n de la subjetividad en una detenninada secuencia tempo-espacial: i) sujcto potencia; ii) sujeto actuante; y iii) sujeto movilizado.
d) Las delimitaciones anteriormente fijadas no pueden ocultar el movimiento interno del recorte movimiento que expresa los modos de concreci6~ de la subjetividad constituyente y que trasciende el recorte. En esta linea de argumentaci6n, el tiempo
128 PROBLE,\1AS DEL COl'<OCL'vllE'lTO
se transforma de parametro en fitma, y el espacia, de territorio en 1a materializaci6n del fitma temporal del clespliegue scg(m determinados tipos de practicas sociales. De este modo tiene lugar la transfonnaci6n de los parametros en propicdades del fen6mcno para captar su despliegue. Tanto el tiempo como el espacio permiten comprender 1a articulaci6n del fen6meno con distintos pIanos de la rcalidad.
e) EI modo de concreci6n de la subjetividad constituye una inclusi6n de pIanos de la rcaUdad, con base en la clialectica fundante memoria-utopia, que encarna una particular necesidad de realidad como necesidad de sentido de construcciones posibles. De ahi que la inclusion no se puecla reclucir al marco de una 16gica de determinaciones, por cuanto haec parte de la construcci6n de una relacion de conocimiento que incluye otras modalidades de apropiaci6n de la realidad diferentes a las propias dc 1a explicaci6n te6rica; por eso la importancia de conjugar los materiales analitieo-cognitivos con otros de naturaleza simb6lico-gnoseoI6gica.
fJ En este sentido, el predominio de una exigencia de sentido sobre la logica de determinaciones plantea el surgimiento de practieas que, a partir de expresar al mundo conformado por la relaci6n memoria-utopia, fundante del analisis, expresa una subjetividad que trasciende los Hmites de 10 estrictamente intersubjetivo. En verdad, cuando las practicas traducen un sentido desde e1 eual se resuelve la inserci6n en las condiciones externas a1 sujeto, quiere decir que la subjetividad del trasfondo pasa del plano puramente intersubjetivo (0 interactivo) a otro
IDF..-\S ,\lETOI)OLOC;ICAS 129
cualitati:amente diferente qLle llamamos ~ . , porque Implica L1na opci6n en term" 'd dPOlitK~, nado sentido de const ," . mos e etenl11-
, , rucuon socIal. . g) Este momento puede cor[(~s d'. ~
slIJeto "actln t" _, . _ -pon erse L on un " 1 < n e 0 con el SLlJetO "moviliz'lcio", -
Sl a orientaci6n del senticlo d' ' . ~ ,segun seota . " e construcClOO repre
.una potenClaiIdad de sf mismo esto capaud' d d ~ , '. ,es, una
"~a e r( conoumlemo y tamhien I ' trucC'lon de " . c e coosta a' sus proploS objelivos; 0 bien, si se limi-do s~e.~~onder a L1na meta impuesta al conglomera-
CIa por un agente externo. El gran des'lfl'() '" , < epIstemlCo-metod I' "
subyac d I ° OgKO Clue e a to 0 0 anteriormente ' en pacier sui d' 1 ' expuesto, consiste '_ ~ Jor Inar as CiIS(,llsiones co .' "f'
Clones cerradas (. ,n slgOl lGlincluso 1 t ," for eJe~plo, el discurso ideo16gico
se orien~e ~~~~~ar al~I~~I:;~~~~~;dL:~ s~gn:nc3nt~S" qu.e vo pan recupe ' f e a constrtutl-
< - rar, rente a cualq , LI particular Oa I, 1 . . . uler prOLJ l'matica ~ c C os sUJetos es L1na entre otras), el angul0 de lectura del
I d movimiento constitutivo (Ie
rea i ades concretas.
Por todo 10 anterior es que decimos C ue ,.' , este esfuerzo metodo! ~ J' , I dl'tr<ls de significac' - .OgKO .'Ie pretende, mediante 1a
Ion que rensten 10' . ' . nueleo teo" _I I"" . S sUJetos, Ublclr como
nco <- e .IS CiL'ncl'lS' "I' sub' t' 'd I'" < ~ SOCIa L'S el tema de la Je IVI ae sOCIal Fllo
dad de la . r i. f ' ,porque expresa la historici-I' _ rea K Je en lanto mavimiento Clue lOnna y se t f trans-
, rans orma; pl'ro que, simultaneamentl',
-----------=;;;;~""~. ---• 130 PHOBLJ::MAS DEL CO,\OCl.vlll::r\TO
reviste sentido como problema siempre que se 350-
cie a los esfuerzos de construir la realidad soeL:! desde opciones que traduzcan preferencias axio1 gicas derivadas de visiones ut6picas, aunque con t; sella de que sean objetivamente posibles (en acepci6n de Bloch). Es a este respecto que asume biJ
funcion una construcci6n de conocimiento que ~ pertinente para las opciones elegidas; de 10 contrario, bastaria con las formulaciones icleo16gicas.
Si estamos de acuerdo en que hoy dla es una obligaci6n etica buscar nuevos horizontes de viela, ello es posible sola mente a partir de desentraiiar las fuerzas intemas que poncn en movimiento a las estmcturas saciales. Es la significaci6n que atribuimos a los esfllerzos que se hacen para conocer en pre fllndidad la problematica de la subjctividad social constitllyente y sus manifestaciones en 1a variedad de slljetos socia1es que se pueden reconocer en 10, diferentes contextos sociohist6ricos.
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EN TORNO DEL PROBLEMA METODOLOGICO DE LAS MEDIACIONES (ACERCA DE WVA RFCONCEPTUAIJZACION DISC1PLINARIA NECES'ARIA lii CASO DE
LA DbMOGRAFiA)*
E1 presente trabajo pretende ser una reflexi6n sobre las mediaciones que tiencn lugar entre fen6menos;
? es este lin problema muy signifkativo para dar cllenta del proceso de constituci6n de las relaciones de determinaci6n, asi como de Ins fen6menos 0 proee-50S invo1ucrados en esas re1aciones, con el fin de pocier aprender Sll movimiento mas alIa del propio reeorte temporal de su observaei6n.
El origen de 1a rcflexi6n se pucde encontrar en la preoeupaci6n por avanzar en 13 constrllcci6n de propuestas te6rico-metodol6gicas que contribuyan a enriqllecer el analisis de los procesos
• Trabajo presentado en el .:.emi03rio Investigaci6n Mullidiscipliilaria sobre Mortalidad y ~al\Jd, organizado por el Centro Re!,,,mal de Invesrig;1Ciones Multidisciplinaria.:. (CRB1-L\A)"J). Carlo.:. Garcia y Hector Hemandez (words.), 23-27 de agosto de 199'1
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