Llegó la primavera, y en la Capital no iba a ser menos.
Y es que no hay nada como disfrutar de un paseo
agradable, con una temperatura suave por cualquiera
de los rincones que ofrece la ciudad. Además de que el
hecho de estar en contacto con la naturaleza en un
lugar claramente urbanita es un punto más que
favorable para nuestra salud.
Es por ello que esta ciudad cuenta con lugares
indispensables si es que queremos disfrutar de la
misma en una estación como la primavera. Tanto en el
centro de la misma como en zonas un poco más
apartadas del mismo encontramos diversidad de
parques y espacios naturales a los que acceder con la
familia o amigos será un plan perfecto.
Sin duda alguna, unos de los rincones imprescindibles
para disfrutar de esta estación e Madrid es el Parque
del Retiro, en pleno corazón de la ciudad, este cuenta
con 118 hectáreas entre las que podemos encontrar
además de zonas verdes en las que sentarnos a
merendar, múltiples esculturas y fuentes.
Sin alejarnos mucho del centro, encontramos el que es
reconocido como uno de los lugares más bellos de la
capital, El Templo de Debod, que cuenta con más de
2000 años de antigüedad y fue un regalo realizado de
Egipto a España, una zona tranquila en la que estar
tanto por el día como por la noche.
Un poco más en la periferia, pero aún sin salir de los
límites de la ciudad encontramos la conocida Casa de
Campo madrileña, el mayor parque de la ciudad
público, en su interior cuenta con el zoo, el parque de
atracciones y múltiples instalaciones públicas. En sus
1722 hectáreas se puede disfrutar de un maravillosos
atardecer en compañía.
Y de una punta del cerco madrileño al otro, en este
encontramos el Cerro del Tío Pío, situado en el distrito
del Puente de Vallecas, es una zona verde en forma de
colinas en las cuales encontramos tanto zonas
infantiles como adultas, un lugar desde el que se
puede observar una perfecta panorámica de la ciudad.
Una de las zonas periféricas al sur de lo que es
considerado el centro neurálgico de la ciudad,
encontramos el Parque Madrid Rio, junto al
Manzanares, es uno de los lugares de referencia
cultural de la ciudad, ya que en él suceden muchos de
los eventos culturales que se llevan a cabo en la
ciudad.
Para finalizas con las amplias zonas verdes de la
ciudad, encontramos el Parque Quinta de los Molinos,
ubicado en el distrito San Blas-Canillejas, con una
extensión de 25 hectáreas en las que se pueden
disfrutar de los que es el emblema del mismo, una
sucesión de almendros, que en su época de floración
inundan de belleza el mismo.
Y es que la capital española cuenta con innumerables
lugares en los que pasar un rato agradable, parques
de menor tamaño ubicados en distritos conocidos
como lo son Conde Orgaz o Arturo Soria, un lugar en el
que vivir cerca de una zona verde no sonará a utopía y
poder disfrutar en familia o con amigos de las mismas
en un privilegiado lugar cercano al centro.