Por nosotros se hizo pobre.

Autor: Arturo Giraldo

♪♪Entre los cuerpos celestes que titilan en la noche del majestuoso

universo tiene que estar la metrópoli, una población que excede a

las imaginaciones con jardines florecidos rodeados de resplandores,

donde jamás hubo lágrimas, donde no hubieron dolores, nunca

hubo funerales y a pesar de los millones de los años transcurridos

no hay vejez, no hay ojo miope.

En esos jardines nunca se han marchitado las flores y hay eterna

juventud por todos sus horizontes, ese lugar tan hermoso cinco

letras lo componen, cielo lo llama la biblia título que corresponde a

la patria de Jesús el salvador de los hombres, Hogar por la

eternidad del Rey Señor de señores.

Gloria infinita le cantan las campanas en sus torres, adorado como

rey de la Ciudad hasta el monte, nuestro príncipe celeste coronado

de favores, entronizado en el padre sin límites de valores, rico en

poder y en amor, nadad en adoradores, rico en gloria y santidad en

todas las dimensiones, los seres más distinguidos le dan todos sus

honores danzas y doxologías le dan en adoraciones, que grandeza

de dominio, que huestes de admiradores

Un día surgió un gran desastre, en uno de los millones de los

mundos que el creo en la inmensidad enorme, la tierra fue el

escenario del lamentable desorden, ese fue el mundo caído que se

alejó de su molde, una fuerza indescriptible lo arrastra hacia las

feroces añagazas del pecado, en las tinieblas de la noche,

ocasionando gemidos que allá en el cielo se oyen un arranque de

dolor producido por mil voces, ecos muy agonizantes ignorados

hasta entonces.

Dejando su recio solio el príncipe cuando oye detiene el centro del

circulo que hacían sus adoradores, se apresuró atravesar los

portales exteriores para hundirse en las tinieblas de este mundo en

convulsiones

Los ángeles le gritaron Señor no nos abandones; es preciso que

descenda el príncipe le responde, quiero entregarme a mí mismo

redimiendo las naciones adiós tronos, querubines, arcángeles y

legiones, renuncio al cetro de gloria por el amor a los hombres, por

el rechazo palacios celestes, aclamaciones, prefiero el planeta tierra

con sus inmundas regiones, prefiero burla terrestre, prefiero

criticadores. Es por eso que en Belén Cristo nació aquella noche.

Ángeles le hacen escolta en todas las direcciones, meteoros

especiales todo el espacio recorren, las estrellas una a una

enciende su luz de bronce toda aquella bienvenida es de otro

mundo señores.

Porque este globo terráqueo no le ofreció recepciones,

ninguno izo la bandera, no hay música de tambores, solo le dan un

pesebre lleno de malos olores, para saber su pobreza dicen

investigadores que reclinar su cabeza el Señor no tenía donde,

preguntémosle a María, a los magos, a los pastores, busquemos en

los archivos del país de los Herodes, veamos que finca era de él,

cual eran sus posesiones, allá en una iglesia ajena discutía con los

doctores, navegaba con frecuencia, mas no era suyo ese bote, la

bestia en que cabalgaba tampoco le corresponde, sentado junto al

jaguey verlo pidiendo favores, mendigando por un a sorbo de agua,

no son suyos esos posones.

Comiendo en la mesa de otros se ve en muchas ocasiones,

un pez le da una moneda para las contribuciones y una cruz hecha

para otro de patíbulo le escogen, aun ni el sepulcro era de él lo

afirman los escritores aserto Pablo en decir: por vosotros se hizo

pobre.

Lo llamaron transgresor, traidor, blasfemo, sin dotes, cuantas

palabras obscenas del bajo fondo recogen para injuriarlo y golpearlo

con bofetadas y coses.

En mayoría sus amigos eran ciegos y deformes, gente enferma y

angustiada cargada de depresiones con solo tocar su manto les

impartía bendiciones. Alguien podrá comparar ese precio tan

enorme? Jesús derramo su sangre por el amor a los hombres, solo

por gracia soy salvo lo testifican millones, gracia que salva al

borracho, que salva a los malhechores, que resucita a los muertos,

gracia que dio a los apóstoles, Cristo regreso a los cielos llevando

ese triunfo enorme proclamado en cielo y tierra, el salvador de los

hombres, su amor es inmensurable alabado sea su nombre y para

que fuéramos ricos POR NOSOTROS SE HIZO POBRE ♪♪