MADURARSIN ABUSO
A MODO DE INTRODUCCION
Relación entre el reconocimiento de un ser humano como persona y el reconocimiento de sus derechos.Las paradojas de esta extraña imagen y sus enseñanzas.
La representación de la realidad como construcción y ocultamiento.
El género como perspectiva y el sexo como variable de análisis
PRIMERA PARTE
El por qué de un método y la necesidad de investigar
Incorporar las variables género y sexo en la descripción de la realidad de las personas es una condición sine qua non para cambiarla
La investigación más reciente ha demostrado que las variables de sexo y género no son todavía suficientemente consideradas. Perviven estereotipos y sesgos en la investigación que construyen como norma universal lo que son
las realidades, experiencias y expectativas de los varones, invisibilizando las realidades de otras personas, especialmente las de las mujeres.
Comisión Europea para la Investigación y el Desarrollo - 2012
Gender-based Analysis Plus (GBA+) is an analytical tool the federal government uses to advance gender equality in Canada. The "plus" in the name highlights that Gender-based Analysis goes beyond gender, and includes the examination of a range of other intersecting identity factors (such as age, education,
language, geography, culture and income).
Status of Women Canada - Government of Canada
EL POR QUE DE LA PERSPECTIVA DE GÉNERO EN LOS ANALISIS DE LA REALIDAD
La situación al día de hoy tal como se describe en el informe Elder Abuse in Canada: a gender-based analysis es el siguiente:
“…[we do not] have access to data from population surveys, which would provide
more detailed information related to gender, age and diversity. Unfortunately, published reports on these surveys contain little analysis that takes into account both gender and age, let alone analysis on diversity related to socio-economic,
ability or race and gender and age”.
Elder abuse in Canada: a gender-based analysisPublic Health Agency of Canada - 2010
LA PERSPECTIVA DE GÉNERO APLICADA AL TEMA DEL ABUSO Y LOS MALOS TRATOS [DIFICULTADES Y CARENCIAS]
¿QUÉ SABEMOS? ¿QUÉ NO CONOCEMOS? ¿QUÉ NECESITAMOS?
Sabemos que existe un problema, sabemos que las cifras de las que disponemos seguramente están subestimadas y sabemos que las herramientas para la solución del problema deberían tomar en consideración algunos elementos del problema que no
conocemos.
No conocemos -entre muchas otras cosas- la situación de nuestra comunidad en particular en temas como el de la relación entre género y malos tratos a las personas de edad.
Necesitamos no solamente más servicios y mayor acceso a los mismos, sino más investigación y en especial investigación que nos permita una mayor cuantificación y
cualificación del problema.
A eso nos referiremos en la quinta parte de esta presentación
Vejez y envejecimiento
SEGUNDA PARTE
Construcción de la realidad, Estereotipos, Discriminación y Malos Tratos
Todo proceso de maduración supone un incremento de la complejidad y ese incremento se traduce en enriquecimiento, en plenitud, en nuevas
posibilidades… y también en pérdidas tanto inevitables como necesarias.
El énfasis en las pérdidas y la concepción estereotipada de la vejez como etapa de carencias, de ausencia de roles a desempeñar y de
improductividad o inutilidad, conduce al desconocimiento de derechos, la discriminación, el abuso y el maltrato.
PERDIDAS NECESARIAS, ESTEREOTIPOS, Y PERDIDAS INADMISIBLES
“De acuerdo a cómo se construye socialmente la vejez, los adultos mayores pueden enfrentarse al riesgo de no ser considerados como ciudadanos plenos.
El principal problema de las personas mayores es la discriminación en razón de la edad, que obstaculiza el reconocimiento, goce o ejercicio, en igualdad de condiciones, de todos
los derechos humanos y libertades fundamentales.
Actitudes discriminatorias como la infantilización, la invisibilización o la estigmatización de la vejez contribuyen a naturalizar el abuso y el maltrato, una naturalización que
entraña, para las mujeres en particular, un riesgo sensiblemente mayor.”
CEPAL - Comisión Económica de Naciones Unidas para América Latina
DISCRIMINACION Y PERDIDA DE CIUDADANIA PLENA
RECONOCIMIENTO DE DERECHOS Y EMPODERAMIENTO
Como veíamos al inicio, las construcciones de la realidad a partir de estereotipos y prejucios, conforman un medioambiente no saludable, que a su vez conduce al reforzamiento de las inequidades, al desconocimiento de derechos, el abuso de
poder y la despersonalización.
Esa es la razón por la cual en la base de la acción contra las diferentes formas de violencia intrafamilar, debe estar:
-el reconocimiento de que no se trata de problemas privados sino de problemas de interés público,
-el empoderamiento de quienes son más vulnerables.
Definiciones, Contexto y Estadísticas
TERCERA PARTE
“El abuso de las personas de la tercera edad se define como un acto aislado o repetido, o la falta de una respuesta apropiada, que surge en el seno de
una relación en la que hay una expectativa de confianza, y que causa daño, angustia o sufrimiento a una persona mayor. Puede ser de varios tipos: físico, emocional, sexual, financiero, o simplemente reflejar un acto de
negligencia intencional o por omisión."
Esta primera definición de la Organización Mundial de la Salud, de 2002, subraya un hecho característico que diferencia el abuso a las personas de edad de otros tipos de abusos o violencia: quien lo perpetra
ocupa una posición de confianza respecto a la víctima.Esto complejiza el fenómeno de muy variadas formas, que veremos más adelante.
DECLARACION DE TORONTO (OMS – 2002)
ACLARACIONES PERTINENTES
El uso de los términos abuso y maltrato en español
En algunos países de habla española se ha optado por el no usode la palabra abuso ya que en nuestro idioma ese término implica intencionalidad. Del mismo modo, usualmente se habla demalos tratos y no de maltrato, ya que maltrato implica una continuidad que no está contemplada en la definición.Dada nuestra situación particular de hispanohablantes inmersos en una sociedad de habla inglesa en nuestro programa hemos optado por el uso de ambos términos o de uno solo de ellos cuando corresponda.
¿Responsables de malos tratos o maltratadores?
Es recomendable el uso de la expresión “responsable de losmalos tratos” ya que en el caso del abuso y el maltrato a las personas de edad no siempre se ocasiona el daño de modo voluntario o conciente.
Malos tratos institucionales
En la primera definición de la Organización Mundial de la Salud noestaba contemplada la posibilidad de que quien sea responsable de los malos tratos sea no una persona sino una institución o la sociedad en su conjunto. Por esa razón, a los diferentes tipos de maltrato se le han sumado tipologías como el abuso institucional o el desconocimiento de derechos.
El 64% de los casos de abuso y maltrato ocurre en el ámbito familiar, el 23% en residencias de largo plazo, el 5% en hospitales, mientras que el 78% de los casos de abuso y maltrato se dan en adultos mayores de 70 años,es decir en aquellos más vulnerables.
Estudios llevados a cabo en Ontario y en otras provincias de Canadá ubican el maltrato y el abuso a los adultos mayores en cifras que van entre el 6% y al 10%, aunque quienes trabajan en el tema tienden a creer que 10% es un cifra más cercana a la realidad.
CONTEXTO Y ESTADISTICAS (1)
CONTEXTO Y ESTADISTICAS (2)
Entre los casos reportados de abuso y maltrato al menos las 2/3 partes corresponden a mujeres.
Esto se debe, en algunos casos, a que se continúa una historia de abuso y maltrato anterior. A eso se suma la feminización del envejecimiento y la mayor estigmatización de la que son objeto las mujeres cuando ya no pueden cumplir sus roles preestablecidos.
CONTEXTO Y ESTADISTICAS (3)
De acuerdo a la evolución de la población delos países desarrollados y de algunos de nuestros países, el porcentaje de adultos mayores tiende a crecer y de hecho es el único sector que crece.
Eso determinará que de no haber cambios importantes en nuestras pautas culturales, el número de personas (en especial de mujeres) en situación de vulnerabilidad y con el riesgo de sufrir malos tratos, irá en aumento.
FEMINIZACION DE LA VEJEZ Y DE LOS CUIDADOS
In 2005, women accounted for 52% of Canadians aged 65 to 69, and 75% of all persons aged 90 and over were women. More women than men are caregivers. Daughters are three more times more likely to help older parents with personal care than sons.
Back in 1960, among Canadian women over 50, 16% had a surviving parent. This number is expected to grow to 60% in 2010. As a result, family caregivers are getting older as their parents live longer. In 2007, most eldercare in the community (75%) was provided
by those between 45 and 64 years of age. Nearly 6 in 10 caregivers were women.
It is important to note that caring for senior men may be under-reported since many are cared for by their wives, often without the wife reporting it as caregiving. According to the Canadian Caregiver Coalition, three out of four home caregivers are women
between the ages of 50-65 years, 10% are over 75.Two thirds of unpaid Canadian caregivers work outside the home. Twenty percent of these caregivers report health impacts, and
40% incur personal expenses.Caregivers can be found across all income strata, however, it has been reported that families who provide care have household
incomes below the national average.
Elder abuse in Canada: a gender-based analysis - Public Health Agency of Canada - 2010
Los por qué de la subvaloracióndel problema
CUARTA PARTE
OBSTACULOS PARA LA DETECCION Y EL DIAGNOSITICO (1)
El abuso y los malos tratos hacia las personas de la tercera edad tienen una característica distintiva y perversa: en muchos casos quien es responsable de ellos es
quien está a cargo de las tareas de cuidados. Esas situaciones están originadas en desiguales relaciones de poder y/o cuando quien cuida ve sobrepasada su capacidad de
sobrellevar lo que ha asumido como deber.
Cuando es esto último lo que sucede, el o la cuidadora abusa o maltrata a causa de un fenómeno conocido como “estrés del cuidador”.
En esa situación suelen estar mujeres cabeza de hogar que quedan a cargo primero de sus hijos y luego también de uno y hasta dos adultos mayores. Siendo las mujeres
quienes más asumen las tareas de cuidados, son quienes mayores posibilidades tienen de sufrir sobre sí mismas sus consecuencias.
OBSTACULOS PARA LA DETECCION Y EL DIAGNOSITICO (2)
Cuando la persona responsable de los malos tratos es un ser querido, el adulto mayor puede tener vergüenza de dar a conocer su situación o no querer hacerlo por cariño.
Con mucha frecuencia la persona responsable de los malos tratos tiene respecto de la persona que los sufre una relación de poder, por lo que debe considerarse también el factor miedo.
Es frecuente también la situación en la que la persona mayor es conciente de que la persona responsable de los malos tratos vive una situación de stress y se niega a informar por solidaridad y comprensión.
OBSTACULOS PARA LA DETECCION Y EL DIAGNOSITICO (3)
Hay casos en los que lo que sucede se naturaliza como una simple prolongación de lo que se sufrió siempre y debido a que la víctima no conoce sus derechos.
Por último, tenemos los casos en los que la persona mayor tiene algún tipo de demencia o deterioro cognitivo que la hace no tener plena conciencia de lo que le
sucede o no poder recordarlo poco después.
Todos estos factores que dificultan el reconocimiento del abuso o los malos tratos, determinan además situaciones familiares que tienden a reproducir las pautas de
convivencia basadas en la violencia y el uso abusivo del poder.
EL ABORDAJE Y EL EMPODERAMIENTO (1)
Las situaciones que dificultan el reconocimiento del abuso y los malos tratos pueden coexistir en una misma persona, determinando entramados de emociones y sentimientos
que son difíciles de desentrañar y que requieren abordajes muy afinados y cuidadosos.
Son esenciales a estos efectos el entrenamiento adecuado, el respeto a la víctima y la comprensión de sus resistencias, el respeto a la confidencialidad, el respeto a sus
decisiones, el promover la expresión de sentimientos, romper el aislamiento, evitar los juicios y alentar la participación de la familia y/o de quien está a cargo de los cuidados en
el proceso de solución de la situación.
EL ABORDAJE Y EL EMPODERAMIENTO (2)
En el abordaje de las situaciones de abusos y malos tratos a los adultos mayores es necesario buscar el empoderamiento de las personas haciéndoles conocer sus derechos, promoviendo estilos de vida diferentes y socialmente saludables, y creando condiciones
para que les sea posible manejar todos los aspectos de su vida con el mayor grado de autonomía que sea compatible con su seguridad en cada circunstancia.
Y para ello, las herramientas metodológicas que el movimiento de mujeres fue creando y aportando a las ciencias sociales y al trabajo social, han sido y seguirán siendo
imprescindibles.
A continuación veremos los datos que podrían indicar que los niveles de abuso y malos tratos a las personas de edad en nuestra comunidad podrían ser mayores a los del
promedio de la sociedad canadiense.
Invisibilidad y Visibilización
Nuestra necesidad de conocer más
QUINTA PARTE
LO QUE NO PODEMOS VER PERO PODEMOS INTUIR
No podemos “ver” las cifras del abuso, la negligencia, o los malos tratos a las personas de edad en el interior de nuestra comunidad.
Tampoco existen investigaciones cuantitativas que nos indiquen si las
mujeres hispanohablantes sufren el desconocimiento de sus derechos en menor, mayor o igual medida que el resto de las mujeres de Canadá.
Pero podemos ver otras cifras y tratar de, en base a ellas, deducir cuál podría ser la situación real.
INCIDENCIA DE LAS VIOLENCIAS DOMESTICA Y DE GENERO
Sabemos que las cifras de violencia intrafamiliar y de violencia de género son, en nuestros países de origen, superiores a la media mundial y en muchos casos
más de 10 veces superiores a las correspondientes a Canadá.
Y sabemos que de acuerdo a estudios de CEPAL y del Fondo de Población de Naciones Unidas, ese fenómeno tiene raíces culturales, es decir que no sería razonable pensar que el problema no tenga una incidencia importante entre
nosotros.
INCIDENCIA DE LA FEMINIZACION DE LA POBREZA
Sabemos también que en la comunidad latina de Toronto la pobreza como fenómeno y el empobrecimiento como proceso se concentran en aquellos hogares monoparentales con
una mujer como cabeza de familia, que al tener que encargarse sólas de las tareas de cuidados no pueden acceder a trabajos de tiempo completo.
De acuerdo a datos publicados en 2000 y 2006 casi el 20% de los hogares con hijos menores de 19 años tenía a una mujer sóla como cabeza de familia y de ese porcentaje, el
75% se encontraba por debajo de la línea de pobreza.
Fuente:ORNSTEIN, Michael. (2000) Ethno-Racial Inequality in Toronto: Analysis of the 1996 Census. Institute for Social Research - York University. ORNSTEIN, Michael. (2006) Ethno-Racial Groups in Toronto, 1971-2001: A Demographic and Socio-Economic Profil. Institute for Social Research York University.
INCIDENCIA DE LA POBREZA POR FAMILIAS Y POR GRUPO ETNO-RACIAL
INCIDENCIA DE LA FEMINIZACION DE LA POBREZA
Cabe preguntarse entonces, en base a los datos anteriores, qué tipo de problemas económicos y de salud están enfrentando las mujeres que además de tener hijos a cargo,
tienen que cuidar de adultos mayores que comienzan a tener problemas para bastarse a sí mismos.
Y qué tipo de problemas han de enfrentar a medida que su propia vida transcurra ysean ellas mismas quienes estén en situación de recibir cuidados.
No tenemos cifras que nos indiquen cuál es la situación de nuestra comunidad en particular, pero sí tenemos un panorama de lo que sucede entre las mujeres inmigrantes
de todos los grupos.
UNA DESCRIPCION DESOLADORAAccording to the 2001 Census, among female immigrants aged 65 and over who lived alone and who landed in
Canada after 1990, 71% were in a low-income situation (compared to 42% of Canadian-born senior women living alone and 58% of male immigrant seniors).
Some studies have named the emotional isolation experienced by immigrant and refugee women as an important factor in being abused. Isolation may be increased for older women who may not have Canadian
citizenship and may be very dependent on their husband and children. Focus groups with abused women who do not speak English or French show that women in their 50s and 60s felt the most despair. Many of these
women also have health problems because of years of abuse. As a result, daily life is difficult for them and the limitations imposed by their health problems compound their isolation and painful lives. Even for those
women who are living essentially separate lives from their husbands, they are still living in the same house because they cannot afford to move, they do not want to leave the house they worked so hard to buy and
because they would feel even more isolated outside their language community.
Elder abuse in Canada: a gender-based analysis Public Health Agency of Canada - 2011
UNA ACLARACION NECESARIA
En el tratamiento de estos temas es necesario evitar posibles estigmatizaciones.
La relación existente entre género, naturalización de relaciones signadas por la inequidad, bajos ingresos, etc. y diferentes formas de abusos o malos tratos tiene que ver con la
vulnerabilidad que dichas situaciones generan.
Y esa vulnerabilidad es mayor cuando dos o mas factores potencian el efecto que cada uno de ellos tiene sobre las personas involucradas.
CRUCE DE VULNERABILIDADES
Como veíamos al inicio, la generación de acciones inclusivas y de protección de los derechos de las personas y sectores vulnerables requiere
de perspectivas en las que se tengan en cuenta la edad, el género, las características etno-culturales, la identidad sexual y el ingreso.
Dentro de nuestra comunidad, entonces, el cruce de vulnerabilidades es particularmente complejo y podría haber más personas (y en particular
más mujeres y personas de edad) sufriendo situaciones de abuso o malos tratos de las que podemos, queremos, o nos atrevemos a imaginar.
Por eso es tan importante que podamos investigar y saber más.