Download - Lo que Dios hizo por nosotros
7 COSAS QUE DIOS HIZO POR NOSOTROS
Efesios 2:1‐22
Introducción: La obra de Dios en Cristo Jesús para el beneficio de los creyentes es uno de los temas más
sobresalientes en la carta a los efesios. En el capitulo dos no solamente el apóstol Pablo habla de estas
obras divinas sino que las enfatiza contrastándolas con la condición en que nos encontrábamos antes de
que el Señor nos rescatara.
Desarrollo
I. Nos dio vida. Esta vida el apóstol la define de tres formas o facetas distintas: como un
impartimiento de vida, como una resurrección y como una creación:
1. “Y El os dio vida a vosotros, cuando estabais muertos en vuestros delitos y pecados” (v.
1).
2. “Y juntamente con él nos resucitó” (v. 6).
3. “Porque somos hechura suya, creados en Cristo Jesús…” (v. 10). Esta obra no es lo que
el hombre logra hacer consigo mismo, sino lo que Dios hace con él, de ahí las palabras
“hechura suya”.
II. Nos sentó en lugares celestiales: “…y asimismo nos hizo sentar en los lugares celestiales con
Cristo Jesús” (v. 6).
1. Nos hizo sentar denota una posición de privilegio, igual a la de Cristo quien también se
sentó a la diestra del Padre en los lugares celestiales (Efesios 1:20).
III. Nos acercó a Él: “Pero ahora en Cristo Jesús, vosotros que en otro tiempo estabais lejos, habéis
sido hechos cercanos por la sangre de Cristo” (v. 13).
1. En el verso 12 Pablo describe la condición de los que no han recibido la vida de Dios
como una gran tragedia con cinco características:
i. Sin Cristo,
ii. Alejados de la ciudadanía de Israel,
iii. Ajenos a los pactos de la promesa,
iv. Sin esperanza y
v. Sin Dios en el mundo.
2. El hijo pródigo (alguien que dilapida o desperdicia) demostró su rebelión contra su
padre yéndose de su casa a una provincia apartada; su arrepentimiento (cambio de
mente) lo demostró regresando a su padre (Lucas 15:15‐20).
IV. Nos hizo uno: “Porque él es nuestra paz, que de ambos pueblos hizo uno…” (v.14). Antes del
sacrificio de Cristo la relación entre judíos y gentiles (las otras naciones o pueblos) era de
contienda. A la acción de convertir dos pueblos enemigos en uno Pablo la describe como:
1. Un acto de paz (v. 14).
2. Derrumbar una pared (v. 14).
3. Abolición (cancelación) de enemistades (v. 15).
4. Muerte de las enemistades (v. 16).
5. Una buena noticia (v. 17).
V. Nos dio entrada a su presencia: “Porque por medio de él los unos y los otros tenemos entrada
por un mismo Espíritu al Padre” (v. 18). Esta entrada es para recibir de su gracia (favor).
1. Cristo dijo: “Yo soy el camino, y la verdad, y la vida; nadie viene al Padre, sino por mi”
(Juan 14:6).
2. También dijo: “Yo soy la puerta; el que por mi entrare, será salvo; y entrará, y saldrá, y
hallará pastos” (Juan 10:9).
3. Al morir Cristo “el velo del templo se rasgó en dos, de arriba abajo” (Mateo 27:51), lo
que impedía el acceso para todos a la presencia del Señor había sido quitado (Hebreos
10:19‐22).
VI. Nos dio una nueva ciudadanía y nos hizo parte de su familia: “Así que ya no sois extranjeros ni
advenedizos (una persona sin condiciones para pertenecer a algo), sino conciudadanos de los
santos, y miembros de la familia de Dios” (v. 19). Los contrastes entre el antes y después son
muy marcados:
1. Estando muertos, recibimos vida.
2. Seguíamos al mundo, nos sentaron en lugares celestiales.
3. Practicábamos delitos y pecados, fuimos creados para buenas obras.
4. Estábamos lejos, fuimos hechos cercanos.
5. Éramos diferentes pueblos, Dios hizo uno solo.
6. Éramos extranjeros y advenedizos, ahora somos ciudadanos y miembros de la familia de
Dios.
VII. Nos convirtió en templo del Señor: “En quien vosotros también sois juntamente edificados para
morada de Dios en el Espíritu” (v. 22). En los versos del 20 al 22 Pablo se refiere a la iglesia de
tres maneras:
1. Como un edificio bien coordinado (v. 21).
2. Como un templo santo (v.21).
3. Como morada de Dios (v. 22).
Conclusión: Un verdadero creyente no puede decir que Dios no ha hecho nada por él o ella, por medio
de Jesucristo y En El hemos sido colmados de muchos bienes.