La interpretación en la Técnica Psicoanalítica
Rafael Pedroza
Resumen
Hay que volver, siempre a los textos de Freud. Retomar el sentido de la letra freudiana, es
la propuesta de Jacques Lacan frente al estudio del psicoanálisis y sus rigores. En el presente,
la interpretación en la técnica psicoanalítica, es el concepto de estudio. Se buscará compilar
los textos de la obra de Sigmund Freud, en su fecha de publicación para darles un orden de
acuerdo al tiempo, para así articular lo planteado por el autor de acuerdo a los cambios
conceptuales, y de la técnica interpretativa en el análisis. Al final, se presentará los momentos
por los que este concepto pasó en la obra, exponiendo divergencias y convergencias en el
desarrollo analítico de este concepto.
Palabras Claves: Freud, Concepto, Interpretación, Técnica.
Abstract
There’s always the need to come back to Freud’s books. To come back and hold the sense
in Freud’s words. This is the proposal that Jacques Lacan, made in front of the psychoanalysis
studies and its rigors. The interpretation in the technique is the concept so study at. It will try
to compile Freud’s texts from his work, due their publication date trying to give them an order
accord the conceptual changes and the interpretative technique inside the analysis. By the end,
it’s going to try to be shown the different moments which this concept had in Freud’s work,
exposing divergences and convergences in the analytic development of this concept.
Keywords: Freud, Concept, Interpretation, Technique.
El presente artículo, además de ser una demanda académica, tiene por objetivo presentar el
contenido del trabajo de grado “Revisión Bibliográfica Analítica Del Concepto De
Interpretación En La Técnica Psicoanalítica En La Obra De Sigmund Freud” tratando de
resaltar los aspectos más importantes de este tema, que convoca a la reflexión.
La interpretación indiscutiblemente tiene un lugar preponderante en el psicoanálisis.
Toma su lugar precisamente por su función en el dispositivo analítico. Develar en el espacio
de análisis contenidos inconscientes a la consciencia del sujeto. Siempre que se habla del
psicoanálisis, se convoca paralelamente a reflexionar en torno al sujeto y el inconsciente, o al
sujeto, sujeto a su inconsciencia. El sujeto del inconsciente. Un sujeto dividido entre lo que
dice, y lo que sabe, siendo este no saber, el saber oscuro que será clarificado en el análisis, por
la vía del insight, construcciones e interpretaciones.
La justificación del trabajo de grado antes mencionado son varias. La primera es el
deseo que moviliza a la elaboración del mismo. El rastreo, la selección y el conocimiento que
brindan estos textos en cuanto a la técnica analítica son fundamentales para su estudio,
teniendo en cuenta lo cambiante de la teoría psicoanalítica. Y la primacía del discurso
analítico está reflejada en la conceptualización del inconsciente y el psicoanálisis como
método de acceso a este. El descubrimiento freudiano. Por otra parte, Colette Soler en su
seminario de 1989 sobre la transferencia y la interpretación, da un lugar preponderante a la
interpretación haciendo énfasis en el papel desarrollado en la invención del psicoanálisis
como método para acceder y comprender el inconsciente; “al comienzo había la transferencia
y, añade, gracias al analizante. Pero hay analizante gracias a Freud y a su interpretación” (Pág,
1). Por otra parte, este trabajo tiene como justificación también ampliar el material de estudio
en cuanto a este tema, el cual es uno de los pilares del análisis. Y por último, este trabajo es
material conceptual en el grupo de investigación A.R.I.A.D.G.E, teniendo en cuenta que se
utiliza la interpretación del inconsciente en las intervenciones e investigaciones realizadas por
este grupo.
La hipnosis y sus recursos, no fueron suficiente para los intereses del psicoanálisis. El
recuerdo del trauma, no es lo fundamental para la cura. Existen otros elementos de los
mecanismos psíquicos que no eran posibles de dilucidar con la hipnosis. Se debe buscar otra
forma de acceder al inconsciente. La interpretación será la alternativa analítica de acceder al
inconsciente. Empezando con los textos, las primeras referencias donde se deja ver el uso de
la interpretación, en su forma inicial, son Estudios Sobre La Histeria De 1895, La Sexualidad
En La Etiología De La Neurosis De 1898, en los cuales se les da lugar a la abreacción y el
recuerdo. Al descubrirse que los síntomas histéricos no tenían su asidero etiológico en lo
orgánico, y que tampoco eran una simulación de las pacientes, se concluye la etiología
psíquica de los síntomas neuróticos. La interpretación en estos textos, se orienta a la búsqueda
del recuerdo traumático para descargarlo afectivamente, en lo que se le da cabida a la
abreacción. En estos textos, se denota el objetivo de la hipnosis, donde se argumenta que al
tener el recuerdo reprimido, los síntomas desaparecen.
El Método Psicoanalítico De Freud De 1904 Y Sobre Psicoterapia De 1905, se presentan
otros elementos del cambio de la técnica analítica, en cuanto a la interpretación. La asociación
libre es propuesta como la regla fundamental del análisis. Esta consiste, en el dejar fluir lo que
al sujeto se le ocurra. Se le pide al paciente, que comunique todo lo que se le ocurra,
librándose de toda posibilidad de autocrítica o censura moral, social, etc, para poder contar
con un contenido decantado de cualquier forma de juzgamiento personal o social. De esta, el
analista descifra los contenidos inconscientes, a manera de lapsus, chistes, sueños o síntomas.
Los sueños, al igual que los síntomas están estructurados de la misma forma, y su
interpretación es fragmentada. Se interpretan los elementos que el sujeto decida ocuparse en
la reflexión del análisis. De esta forma, los simbolismos tendrán un lugar preponderante en la
consulta, por ser estos, los que traslucen los significados de los mismos.
La resistencia como obstáculo de la cura, tienen lugar en estos textos. Las resistencias son
las dificultades que el sujeto neurótico opone a la cura, porque el sujeto, quiere, a pesar de los
padecimientos, mantener la seguridad que le impone la enfermedad. La forma fundamental de
evidenciar la resistencia, está presente en los olvidos repentinos que tiene el paciente en sus
relatos, al momento de acercarse a un contenido reprimido de mucho valor para la estructura
neurótica. Es una posibilidad de negación de la cura, teniendo en cuenta, que el sujeto que
recurre al análisis no ha encontrado solución o respuesta a su padecimiento, y al acercarse se
resiste, por lo que esto implica afectivamente. La interpretación toma gran valor frente a las
resistencias porque es a través de ella en la que se puede dilucidar la resistencia, darle salida a
la misma, y poder continuar con el análisis. El analista, siguiendo con lo anterior, está en la
obligación de hacer saber al sujeto que se encuentra frente a una resistencia; que esta también
posee contenidos inconscientes y que es preciso darle cabida en la consciencia del sujeto. De
esta forma se puede pensar, que el desarrollo del psicoanálisis tiene que ver con la relación
entre el relato del sujeto y lo dilucidado del contenido inconsciente.
Es a través de la interpretación donde se puede dilucidar lo que se dijo sin expresarse,
rompiendo la dicotomía existente entre lo que se dice y lo que se sabe, dicotomía
constitucional del sujeto.
En estos textos, encontramos el objetivo fundamental del análisis. Hacer consciente lo
inconsciente. Hay un sujeto, que al no conocer las razones y el sentido de su padecimiento,
llega a la consulta; se le hace saber que se deje llevar por la asociación libre, y prestando
escucha atenta, el analista se dispone a comunicar lo inconsciente presente en las
articulaciones significantes del sujeto a manera de interpretación. Este análisis se hará siempre
eliminando las resistencias que se presenten en la marcha.
Freud, luego de los anteriores artículos presentados, dedica parte del trabajo de desarrollo
del psicoanálisis, a exponer los puntos fundamentales en cuanto a la técnica analítica,
haciéndolos públicos, para personas interesadas o no en el psicoanálisis. En este periodo
Fredu escribe: Las Perspectivas Futuras De La Terapia Psicoanalítica De 1910, Sobre
Psicoanálisis Silvestre Del Mismo Año, El Uso De La Interpretación De Los Sueños En
Psicoanálisis De 1911; Luego a manera de recomendaciones, escribe los consejos, y estos
son: Consejos Al Médico Sobre El Tratamiento Analítico De 1912, Sobre La Iniciación Del
Tratamiento (Nuevos Consejos Sobre La Técnica Del Psicoanálisis, I) De 1913, Acerca Del
Fausse Reconnaissance De 1914, Recordar, Repetir Y Reelaborar (Nuevos Consejos Sobre
La Técnica Del Psicoanálisis, II) También De 1914, Puntualizaciones Sobre El Amor De
Transferencia (Nuevos Consejos Sobre La Técnica Del Psicoanálisis, III De 1915). Siguiendo
con su cometido de hacer conocer el psicoanálisis como saber, presenta las Conferencias De
Introducción Al Psicoanálisis De 1916 Y 1917, y por último, expone, también en forma de
conferencia los Nuevos Caminos De La Terapia Psicoanalítica De 1918. Un punto
fundamental a tener en cuenta de estos textos, es la forma como se expone el quehacer
analítico, la forma como llevar el análisis y la función de la interpretación en la consulta.
Anterior a estos textos, Freud proponía la agotadora tarea que era para el analizante, el
análisis. El paciente hablaba, y el analista escuchaba y pocas veces intervenía. Para estos
momentos de la teoría y la técnica, se trata de la asociación libre del paciente, y las
comunicaciones del analista vía interpretación.
La transferencia aparece en estos textos como condición fundamental del tratamiento. Al
igual que la asociación libre para conocer los relatos del sujeto, la transferencia es el espacio
donde el análisis se desarrolla. Las interpretaciones, se realizarán en el espacio transferencial
del análisis, dado que de las disposiciones que el sujeto tenga frente al analista, las
comunicaciones realizadas por este, podrán ser tomadas como correctas o no. De la misma
forma como se habla de transferencia, desde al analizante al analista, la contratransferencia, lo
generado por el analizante en el analista, ha de tenerse en cuenta como condición
fundamental, también, para el proceso de análisis, tal como se presenta en el texto
Puntualizaciones Sobre El Amor De Transferencia (Nuevos Consejos Sobre La Técnica Del
Psicoanálisis, III De 1915).
La transferencia se vuelve condición para el análisis, por los efectos que pueden tener las
interpretaciones en el sujeto. Si se realizan bajo esta, las interpretaciones podrán ser recibidas
por el analizante de la mejor manera en pro del análisis. De manera contraria, cuando el
analista emite sus comunicaciones sin la transferencia, se puede esperar la renuncia del
análisis por parte del sujeto, una retaliación en las disposiciones del sujeto en la consulta,
como señala Freud en el caso Dora; a pesar de lo acertada que puede ser una interpretación
puede tomarse como algo carente de significado. O pueden ser tomadas las interlocuciones
del analista como una agresión hacia la persona del paciente. Se debe ser muy cuidadoso con
esto, pues esta situación puede truncar el progreso de un análisis que pudo haber sido
provechoso en algún momento.
Continuando con la transferencia para el análisis, en estos textos se expone otro aspecto de
importancia. La transferencia puede ser el mejor motor de desarrollo del análisis, así como
puede ser el mejor obstáculo. En el análisis, las manifestaciones hacia el analista, pueden ser
de dos formas. Tiernas y amorosas, teñidas de disposición hacia la cura, las cuales son
llamadas, transferencia positiva. Por otro lado, están las manifestaciones hostiles por parte del
paciente para el analista. A este tipo de manifestaciones están dentro de lo que es expuesto
como la transferencia negativa. En este sentido, el analista debe ser capaz de soportar las
manifestaciones del amor de transferencia, sean en el polo positivo o negativo de dichas
manifestaciones. La transferencia, de acuerdo a sus manifestaciones, podrá instalar
resistencias al proceso. La figura idealizada del analista, puede ser un elemento que resiste al
sujeto de relatar algunos aspectos que pueden ser útiles para el análisis. El analista tiene el
deber de mostrar al sujeto la situación de transferencia y librarlo sujeto de las resistencias que
esta pueda imponer al desarrollo del análisis.
Continuando con lo expuesto con estos textos, se abre la pregunta: ¿Cuándo se debe
realizar la interpretación? Cuando se tenga la certeza que al analizante poco le falta para llegar
al contenido inconsciente de ese momento del trabajo analítico. La interpretación, es un
elemento introducido por el analista para que el sujeto logre anudar otros significantes
referidos a dar significado a ese contenido previamente oscuro, antes de su interpretación.
La interpretación de un elemento de las formaciones del inconsciente, siempre dependerá
de las asociaciones del sujeto y de la transferencia, es decir que por sí solo no es suficiente
sino en su conexión con otros contenidos.
Otro de los aspectos en cuanto a la interpretación, presentado como cambio en esta fase del
discurso, tiene que ver con la solución del síntoma. En los primeros momentos del
psicoanálisis, llevar el sujeto a recordar los contenidos reprimidos era la meta para la
disolución del síntoma. La técnica varía con las posibilidades de recordar, repetir o reelaborar,
presentada en el texto que lleva ese nombre. Con respecto a esto, el recordar, mantiene el
sentido de los primeros trabajos de Freud. La repetición, tiene que ver con la transferencia. El
sujeto en la transferencia repite patrones vinculares anteriores. Al igual que en la
transferencia, vista como una reedición de los vínculos afectivos del pasado traídos a la
situación analítica, esta repetición recae en el espacio analítico. Lo que vuelve en la
transferencia no son solamente los afectos y su entramado, también vuelven posiciones
asumidas por el sujeto que se manifiestan como actos frente al analista. El analista debe, de la
misma forma como con otro contenido inconsciente, interpretar estas actuaciones para que el
sujeto pueda elaborarlas. La elaboración consta en la resignificación y entrada a la
consciencia de los contenidos reprimidos del sujeto. La elaboración tiene que ver también con
la posibilidad que tiene el sujeto de hacer propios estos elementos e integrarlos a su estructura
de personalidad. En la elaboración, el sujeto ya posee la fuerza para poder llevar el peso un
pasado que inconscientemente lo ha torturado.
El trabajo analítico busca construir con el sujeto elementos de los cuales este puede asirse
para llevar la vida y las situaciones que esta presentará. Se esperaría que un sujeto con
conocimiento de sí mismo y de sus dinámicas inconscientes, pueda de algún modo gobernar
sobre ellos. Se quiere pensar un sujeto con capacidad de producir y gozar, de los objetos y
formas de goce escogidas conscientemente, disminuyendo en cuanto sea posible, la ganancia
de la enfermedad.
Otros aspectos que ocupan el pensamiento freudiano, en el desarrollo del psicoanálisis,
presentan otro viraje en la teoría. Se introduce un concepto que estará presente en el
desarrollo del discurso analítico, hasta el final. La pulsión de muerte. Este concepto, influirá
en los modos de llevar el análisis.
Los textos referenciados en este momento del desarrollo psicoanalítico son: Más allá del
Principio del Placer de 1920, Observaciones sobre la Teoría y Práctica de la Interpretación
de los Sueños de 1923, Pueden los legos ejercer el análisis. Diálogos con un juez imparcial
de 1926, Nuevas Conferencias de Introducción al Psicoanálisis, realizadas entre 1932 y
1934.
En cuanto a la repetición, descrita como un aspecto de la transferencia, esta toma otra
forma. El origen de esta repetición es pulsional. Existe un empuje a la satisfacción de formas
relacionales infantiles. No solamente en la transferencia se repite ese vínculo. Es repetido
compulsivamente, siendo estos contenidos reprimidos del sujeto los que vienen a actualizarse
en acciones en el marco de la cura. A razón de esto, se expone que la resistencia no tiene su
asidero en la represión. La resistencia es una parte del yo, al servicio del principio del placer,
que evita sufrir los dolores del enfrentamiento del sujeto con lo que lo aqueja. Es la búsqueda
de la comodidad al servicio del placer.
El sujeto es muy ágil para usar estas compulsiones y detener o truncar el trunco del
análisis. Como ya se ha mencionado, las resistencias han de ser interpretadas para lograr el
desarrollo del análisis.
La transferencia es inevitable, y de su establecimiento el proceso analítico podrá operar
con el objetivo de la cura. La contratransferencia es un elemento que el analista no dejará de
tener en cuenta. Tal como se mencionó en los textos entre 1914 y 1918.
Para la comunicación de las interpretaciones se mantienen dos aspectos ya trabajados en
los escritos técnicos.
Primero: El pase del sujeto al dispositivo debe estar mediado por la respuesta del pedido de
la asociación libre. Segundo: la transferencia, dado que las comunicaciones no pueden ser
realizada fuera del dispositivo. De igual forma, se mantiene, lo planteado en cuanto al
momento de la emisión de la interpretación. Se realiza la interpretación cuando el sujeto esté a
poco pasos de conquistar esa parte de sus contenidos reprimidos.
En Construcciones en el Análisis de 1937, Análisis Terminable e Interminable también de
1937 y Esquema del psicoanálisis de 1940, se presentan otros aspectos de acuerdo a la técnica
y por ende a la interpretación. El objetivo del análisis es descrito también, desde un punto de
vista tópico y económico, manteniéndose lo fundamental: hacer consciente lo inconsciente.
Para este momento se presenta la discusión con las construcciones y las interpretaciones.
Estas dos vienen a ser las formas fundamentales de comunicaciones realizadas por el analista
al analizante. Freud, comenta el lugar de las partes del análisis en las realizaciones de estas.
La construcción es la traducción de un trozo olvidado de la historia del sujeto. Con esto se
abarcan diferentes elementos que pueden estar presentes. Por otro lado la interpretación sería
la traducción de un solo elemento que hace parte del relato del sujeto. Lo que se interpreta son
las formaciones del inconsciente; a saber, lapsus, chistes, sueños y síntomas. Una podría
desencadenar la otra, pero la diferencia está fundamentalmente en lo que cada una se ocupa.
En el último texto, Esquema del Psicoanálisis, no hay una clarificación de este modelo para
las construcciones, pues el cambio realizado en la teoría aparentemente Freud, lo deja en el
texto del Esquema.
La repetición se concibe en este momento, a manera de mecanismo de defensa, por ende
también de la resistencia dado que se compone de los aspectos inconscientes del yo, pero no
de la represión. Los mecanismos de defensa al igual que los síntomas son formas de evitar el
displacer, pero siempre tienen incidencias como solución fallida. Al igual que el síntoma, el
mecanismo de defensa desemboca en los padecimientos propios de la neurosis. La labor
analítica, consta en darle aparición en la consciencia a elementos reprimidos, ya sea por la vía
de la construcción o de la interpretación.
Para este momento se colige cuando es aceptado o no una comunicación por parte del
paciente. Cuando un sí o un no de parte del analizante significa eso como tal y no son
productos, por decir algo de la resistencia. En lo fundamental, si la construcción o la
interpretación no modifican algo sobre el paciente, entonces se considera que fue errada y
habrá que sortear los efectos de esta equivocación.
El fin del análisis queda establecido bajo dos parámetros. La ausencia de síntomas y
dominación de lo reprimido por el sujeto, ahora consciente de esto. En este final también tiene
función la opinión del analista, que podrá establecer hasta donde se trabajo y si este sujeto
está apto, para llevar las situaciones internas y externas que se le presenten, porque se espera
al final de la cura una modificación yoica significativa en el sujeto.
La neurosis se articula por causas externas e internas. Internas por la imposibilidad del yo
de tramitar las demandas hiperintensas pulsionales. Externas porque hay situaciones de la
vida, que un yo en formación no puede tramitar. Esta situación de imposibilidad de
afrontamiento o elaboración se puede definir como trauma.
De acuerdo a lo anterior, en vida el yo debe tramitar las demandas internas del ello y del
superyó, como de la misma forma debe tramitar las demandas de la realidad objetiva, sin
perder su autonomía. En el análisis de los neuróticos se encuentra un yo, imposibilitado a dar
un trámite (armónico o equilibrado) las demandas de las diferentes instancias.
En cuanto a la técnica, se mantiene el pedido de cumplimiento de la regla fundamental por
parte del paciente. El influjo del analista en la transferencia que motiva al sujeto a la
continuación del análisis cuando las resistencias aparecen por efecto de la transferencia
como trunco de la cura. La interpretación tanto de los elementos trasferenciales como de las
resistencias se concibe como estrategia en el vencimiento de lo que se opone a la continuidad
del tratamiento. El material del análisis se obtiene a partir de la asociación libre respecto a
las formaciones de lo inconsciente: sueños, equivocaciones del lenguaje, chistes, síntomas.
De la misma forma, las comunicaciones se realizan cuando el sujeto esté muy cerca del
contenido reprimido, para solamente tener que asirse de este.
Para finalizar, “la experiencia nos ha enseñado que la terapia psicoanalítica, o sea, el librar
a un ser humano de sus síntomas neuróticos, de sus inhibiciones y anormalidades de carácter,
es un trabajo largo.” (Freud, 1937, Pág, 219. a) “la tarea terapéutica consiste, entonces, en
desasir la libido de sus provisionales ligaduras sustraídas al yo, para ponerla de nuevo al
servicio de este.” (Freud, 1937, Pág, 413. B).
El psicoanálisis, ha demostrado que el dolor humano, va más allá de lo orgánico, que las
pasiones del alma también se ven afectadas por la forma en que el sujeto cede frente a otro
deseo y no al deseo que lo habita. Un evento, o hasta una fantasía tiene un valor diferente para
cada sujeto, en los que para algunos se instala el trauma y para otros no. Un sujeto sometido
por su propia voluntad inconsciente es posible de fortalecer para que afronte la vida, las
situaciones que esta trae, para que este pueda gozar, y saber que goza y de qué goza. La
interpretación vendrá a jugar un papel fundamental en el proceso analítico que busca acudir al
llamado del padecimiento sintomático del sujeto.
Para terminar vamos a decir que la interpretación es la intervención o comunicación hecha
por parte del analista, la cual busca hacer consciente lo inconsciente, respondiendo a uno de
los objetivos fundamentales del psicoanálisis. Cuando se habla de lo inconsciente, en el caso
específico de la interpretación, se habla de lo que el sujeto no puede traer a la consciencia, ya
sea una defensa, una resistencia, o un elemento reprimido. Estos elementos son traídos por el
sujeto a manera de síntoma, un lapsus, en un chiste o un sueño. Se llegan a estos elementos
gracias a la, no tan libre, asociación libre.
El momento de la interpretación es cuestión de timing. El analista, siempre paciente, y
dispuesto a la escucha lleva al sujeto, estando bajo el manto de la transferencia, y
respondiendo al pedido de la asociación libre, al límite de sus relatos, buscando la mayor
cercanía a los contenidos inconscientes, para luego emitir la comunicación, que hará las veces
de nuevos significados en el sujeto, y de los que se apropiará para poder integrarlos al yo.
Con respecto a los efectos de la interpretación en el análisis, se puede decir que el
fundamental, es el fortalecimiento del yo debilitado. Esto responde otro de los objetivos del
análisis. El sujeto posee mayores posibilidades de gozar y de producir, ubicando las
demandas del ello, las pulsionales, las de la realidad objetiva y al yo, en paralelo para la vida
del sujeto. La angustia, irá disminuyendo, será conocida por el sujeto, como señal de alarma.
La represión disminuye, pues la angustia en el último modelo de Freud, la angustia genera la
represión. En el primer modelo, era lo contrario. (Soler, 2000). Por último, otro de los efectos
esenciales (fundamentales) del análisis es brindarle al sujeto la posibilidad de movilizar
investiduras libidinales resignificadas para recuperar porciones de libido que puedan ahora ser
empleadas de otro modo. (Freud, 1937).
“Tenemos que ponernos como meta lograr que el menor número posible de individuos se
vea obligado a enfrentar la vida cultural con un armamento anímico tan deficiente, y para ello
debemos reunir muchas experiencias, aprender mucho. Cada análisis puede ser instructivo,
aportarnos la ganancia de nuevos esclarecimientos, prescindiendo por entero del valor
personal de los enfermos individuales.” (Freud. 1926, Pág, 208).
Referencias Bibliográficas
Freud, S. (2001a). Estudios sobre la histeria. En J. Etcheverry (Trad.), Sigmund Freud: Obras
completas (Vol. 2). Buenos Aires: Amorrortu. (Trabajo original publicado en 1893- 95).
Freud, S. (2001b). La sexualidad en la etiología de la neurosis. En J. Etcheverry (Trad.),
Sigmund Freud: Obras completas (Vol. 2). Buenos Aires: Amorrortu. (Trabajo original
publicado en 1898).
Freud, S. (2001c). La interpretación de los sueños. En J. Etcheverry (Trad.) Sigmund Freud:
Obras completas (Vol. 4). Buenos Aires. (Trabajo original publicado en 1900).
Freud, S. (2001d). Fragmento de análisis de un caso de histeria. En J. Etcheverry (Trad.),
Sigmund Freud: Obras completas (Vol.). Buenos Aires: Amorrortu. (Trabajo original
publicado en 1905).
Freud, S. (2001e). El método psicoanalítico de Freud. En J. Etcheverry (Trad.), Sigmund
Freud: Obras completas (Vol. 7). Buenos Aires: Amorrortu. (Trabajo original publicado
en 1904).
Freud, S. (2001f). Sobre Psicoterapia. En J. Etcheverry (Trad.), Sigmund Freud: Obras
completas (Vol. 7). Buenos Aires: Amorrortu. (Trabajo original publicado en 1905).
Freud, S. (2001g). Las perspectivas futuras de la terapia psicoanalítica. En J. Etcheverry
(Trad.), Sigmund Freud: Obras completas (Vol. 11). Buenos Aires: Amorrortu. (Trabajo
original publicado en 1910).
Freud, S. (2001h). Sobre el Psicoanálisis silvestre. En J. Etcheverry (Trad.), Sigmund Freud:
Obras completas (Vol. 11). Buenos Aires: Amorrortu. (Trabajo original publicado en
1910).
Freud, S. (2001i). El uso de la interpretación de los sueños en psicoanálisis. En J. Etcheverry
(Trad.), Sigmund Freud: Obras completas (Vol. 11). Buenos Aires: Amorrortu. (Trabajo
original publicado en 1910).
Freud, S. (2001j). Sobre la dinámica de la transferencia. En J. Etcheverry (Trad.), Sigmund
Freud: Obras completas (Vol. 12). Buenos Aires: Amorrortu. (Trabajo original publicado
en 1912).
Freud, S. (2001k). Consejos al médico sobre el tratamiento psicoanalítico. En J. Etcheverry
(Trad.), Sigmund Freud: Obras completas (Vol. 12). Buenos Aires: Amorrortu. (Trabajo
original publicado en 1912)
Freud, S. (2001l). Sobre la iniciación del tratamiento. En J. Etcheverry (Trad.), Sigmund
Freud: Obras completas (Vol. 12). Buenos Aires: Amorrortu. (Trabajo original publicado
en 1913).
Freud, S. (2001m). Acerca del fausse reconnaissance <<deja raconté>>. En J. Etcheverry
(Trad.), Sigmund Freud: Obras completas (Vol. 10). Buenos Aires: Amorrortu. (Trabajo
original publicado en 1914).
Freud, S. (2001n). Recordar, repetir y reelaborar. En J. Etcheverry (Trad.), Sigmund Freud:
Obras completas (Vol. 12). Buenos Aires: Amorrortu. (Trabajo original publicado en
1914).
Freud, S. (2001o). Puntualizaciones sobre el amor de transferencia. En J. Etcheverry (Trad.),
Sigmund Freud: Obras completas (Vol. 12, pp. 159-174). Buenos Aires: Amorrortu. (Trabajo
original publicado en 1915).
Freud, S. (2001p). Conferencias de introducción al psicoanálisis. En J. Etcheverry (Trad.),
Sigmund Freud: Obras completas (Vol. 16). Buenos Aires: Amorrortu. (Trabajo original
publicado en 1917)
Freud, S. (2001q). Nuevos caminos de la terapia psicoanalítica. En J. Etcheverry (Trad.),
Sigmund Freud: Obras completas (Vol. 17). Buenos Aires: Amorrortu. (Trabajo original
publicado en 1919).
Freud, S. (2001r). Más allá del principio del placer. En J. Etcheverry (Trad.), Sigmund Freud:
Obras completas (Vol. 18). Buenos Aires: Amorrortu. (Trabajo original publicado en
1920).
Freud, S. (2001s). Observaciones sobre la teoría y práctica de la interpretación de los sueños.
En J. Etcheverry (Trad.), Sigmund Freud: Obras completas (Vol. 19). Buenos Aires:
Amorrortu. (Trabajo original publicado en 1923).
Freud, S. (2001t). ¿Pueden los legos ejercer el análisis?. En J. Etcheverry (Trad.), Sigmund
Freud: Obras completas (Vol. 20). Buenos Aires: Amorrortu. (Trabajo original publicado
en 1925).
Freud, S. (2001u). Nuevas conferencias de introducción al psicoanálisis. En J. Etcheverry
(Trad.), Sigmund Freud: Obras completas (Vol. 22). Buenos Aires: Amorrortu. (Trabajo
original publicado en 1932 – 36).
Freud, S. (2001v). Análisis terminable e interminable. En J. Etcheverry (Trad.) Sigmund
Freud: Obras completas (Vol. 23). Buenos Aires: Amorrortu. (Trabajo original publicado
en 1937).
Freud, S. (2001w). Construcciones en el análisis. En J. Etcheverry (Trad.) Sigmund Freud:
Obras completas (Vol. 23). Buenos Aires: Amorrortu. (Trabajo original publicado en
1937)
Freud, S. (2001x). Esquema del psicoanálisis. En J. Etcheverry (Trad.) Sigmund Freud: Obras
completas (Vol. 23). Buenos Aires: Amorrortu. (Trabajo original publicado en 1940).
Soler, C. (1989). Seminario. La Interpretación y la Transferencia.