JOSEP FONTANA. “HISTORIA: ANALISIS DEL PASADO Y PROYECTO SOCIAL”
La descripción del presente, producto obligado de la evolución histórica, se completa con lo que
llamo, genéricamente, una economía política, esto es: una explicación del sistema de relaciones
que existen entre los hombres que sirva para justificarla y racionalizarlas, y con ellas, los
elementos de desigualdad y explotación que incluyen, presentándolas como una forma de división
social de trabajos y funciones, que no solo aparece como resultado del progreso histórico, sino
como la forma de organización que maximiza el bien común. Cada etapa de la evolución social,
cada sistematización de la desigualdad y la explotación, ha tenido su propia economía política y
su racionalización del orden establecido. De esa evolución del pasado, mediatizada por el tamiz
de la economía política, ser obtiene una proyección hacia el futuro: un proyecto social que se
expresa en una propuesta política.
Fontana sostiene que las tres partes de este conglomerado, es decir, historia, economía política
y proyecto social se encuentran indisolublemente unidas: que ninguna es comprensible
desgajada de la otras.
Hay que comenzar a construir, a un tiempo, la nueva historia y el nuevo proyecto social, asentados
en una comprensión crítica de la realidad presente. Deberemos tomar en cuenta, sobre todo que
la línea del pasado que proyectamos hacia el futuro ha de apuntar a una sociedad cuyo elemento
definidor fundamental no ha de ser el de construir una fase más avanzada del desarrollo industrial,
sino la de aproximarnos al ideal de la supresión de todas las formas de explotación del hombre: de
una sociedad igualitaria en la que se haya eliminado toda coerción. Una sociedad en que no siga
siendo preciso racionalizar la desigualdad como una condición necesaria para el progreso
colectivo, ni construir toda una visión de la historia para legitimar este argumento.