Download - INICIACIÓN Y ANIMACIÓN A LA LECTURA
Por: Rosa Orellana
Iniciación y animación a la Lectura• El Laboratorio iniciación a la
lectura tiene como propósito que los estudiantes puedan descubrir y disfrutar de las oportunidades que ofrecen diversos textos, promoviendo iniciativa y curiosidad por la lectura.
• El Laboratorio propone actividades que permitan desafiar y motivar a los estudiantes, mediante el trabajo colectivo, grupal e individual. Las unidades del laboratorio permiten que los estudiantes comiencen a reconocer algunas palabras y logos, asociando fonemas a sus respectivos grafemas. Además, promueven el interés por descubrir el propósito, reconocer su estructura y comprender la información de diferentes tipos de textos.
• Parece mentira que a un niño de 1, 2 o 3 años le guste la lectura. Pero es posible. Un bebé de estas edades puede disfrutar con la lectura y aficionarse a leer. Y hasta tomar un apego exagerado a un cuento concreto y pedirlo una y otra vez, para desesperación del adulto.• Para crear hábitos de lectura en niños de 0 a 3 años, hay
que repetir el acto de leer: sólo con la repetición se logra la costumbre. Lo mismo que, a fuerza de intentarlo un día tras otro, llegará el momento en que él o ella solitos sostengan la cuchara y se lleven el puré a la boca. ¡Qué logro!
Consejos para aficionar a los bebés a la lectura
• La presencia del adulto es imprescindible: él pone la voz y los matices a la historia que contiene el cuento o la revista.
• Además, es un estratega: para conseguir que la lectura sea una actividad atractiva para él, también hay que buscar las condiciones óptimas. A saber:
• 1. Buscar un buen momento en el día, en el que el niño esté tranquilo y no absorto en otras cosas y el adulto tenga un ratito para consagrarse a él en exclusiva sin, por ejemplo, tener que hacer algo en la cocina o atender el teléfono.
• 2. Crear un ambiente de distensión, pausado. Las actitudes físicas son importantes: sentarse a su lado o sentarlo sobre las rodillas, rodearlo con nuestros brazos sin agobiarlo y abrir pausadamente un libro, un cuento o una revista.
• 3. No vale cualquier libro por caro que sea o por prestigioso que sea su autor y su ilustrador. Desde muy pequeños, los niños pueden mostrar preferencias: los animales, los aviones, las casas, las imágenes de otros niños con los que se siente identificado o que le hacen gracia… Hay que atender sus gustos incipientes sin por ello limitar sus posibilidades de abrirse a otros asuntos.
• 4. Respetar su limitada capacidad de atención y su necesidad de movimiento: si se levanta y se aleja cuando estamos en lo mejor de la historia, no debemos desanimarnos. Sus razones tendrá. Habrá que intentarlo otro día, sin obsesionarse. Y también podemos hacer una prueba: seguir leyendo en voz alta y modulada, aunque él ya parezca entretenido en jugar con su muñeco preferido. Quién sabe, tal vez siga escuchándonos.
• 5. Mostrar interés por lo que le estamos leyendo o enseñando. El niño, incluso tan pequeño, es muy sensible a la atención de sus padres. Si ellos muestran interés por algo, él tenderá a mostrar interés también.
• 6. Sacar a escena el niño que llevamos dentro, el actor o la actriz capaz de cautivar a su público. El niño disfrutará y el adulto se sentirá enormemente recompensado.
Los beneficios de la lectura para los niños• Los beneficios del libro para los
niños son incalculables y para toda la vida. Lleva al niño a querer leer, a buscar saber, a adentrarse en el mundo del arte, del dibujo y de la imagen a través de las ilustraciones. Aumenta su habilidad de escuchar, desarrolla su sentido crítico, aumenta la variedad de experiencias, y crea alternativas de diversión y placer para él.
http://www.efectoeducativo.cl/web/productos/lenguaje/26-educacion-inicial-iniciacion-a-la-lectura
https://www.guiainfantil.com/articulos/educacion/lectura/habitos-de-lectura-en-ninos-de-0-a-3-anos/
https://www.guiainfantil.com/libros/Lectura/index.htm
http://www.zonatresite.com/elpoderyvalordelalecturaensudia-1024/
https://ticmatutinagrupo2psico.wordpress.com/2015/03/13/desarrollo-del-nino-desde-el-nacimiento-hasta-la-adolescencia/
BIBLIOGRAFÌA