¡¡¡ AVISOS, COMUNICACIONES,…!!!
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Hoy domingo día 24 a las 13:30 h van a recibir el sacra-
mento del Bautismo: SOFÍA GONZÁLEZ ADAN y
CLARA LEÓN ROMANOS, nuestra mas sincera felici-
tación a sus familias.
Los días 25, 26 y 27, en las Eucaristías de las 19:30 h. ce-
lebraremos junto a la Asociación de la Medalla Milagro-
sa de Alfaro, el Triduo a esta advocación. Os animamos a
participar.
Miércoles 27, ultimo de mes; el grupo de Adoración Noc-
turna de nuestra Parroquia nos invita a participar en el rato
de oración que realizaremos ante el Santísimo a partir
de las 20:00 h. En la capilla de la Virgen del Burgo. Esta-
mos todos invitados.
El Viernes día 29, en la Capilla de Ntra. Sra. Del Burgo
tendremos expuesto el Santísimo de 10:30 h hasta el inicio
de la Misa de la tarde a las 19:20 h. que se hará la reserva.
El sábado día 30 comenzaremos en las Misas de las 10
de la mañana la Novena en Honor a la Inmaculada
Concepción, donde tendremos un recuerdo muy especial a
la congregación de las Concepcionistas Franciscanas que
estuvieron en nuestro pueblo más de 400 años.
Anuncio para los Jóvenes de Alfaro: los días del 20 al 23
de diciembre se va a realizar un Voluntariado social en
Valencia con entidades de la Ciudad. Los interesados de
entre 17 y 25 años deben apuntarse cuanto antes en la pa-
rroquia. O en el 646 24 56 93 (Móvil de Alejandro)
Horarios de Acompañamiento y Confesión en la sala habilitado para ello en la
Iglesia de Santa María del Burgo. Los horarios serán:
Martes de 11:00 a 12:20
Viernes de 11:00 a 13:30
Sábados de 18:00 a 19:30
Oración a Cristo Rey.
¡Oh Cristo Jesús! Os reconozco
por Rey universal. Todo lo que
ha sido hecho, ha sido creado
para Vos. Ejerced sobre mí to-
dos vuestros derechos.
Renuevo mis promesas del Bau-
tismo. Y muy en particular me
comprometo a hacer triunfar,
según mis medios, los derechos
de Dios y de vuestra Iglesia.
¡Divino Corazón de Jesús! Os
ofrezco mis pobres acciones pa-
ra que todos los corazones reco-
nozcan vuestra Sagrada Reale-
za, y que así el reinado de vues-
tra paz se establezca en el Uni-
verso entero. Amén.
Fiesta de Cristo Rey.
24 de Noviembre de 2019
Nº 723
La celebración de Nuestro
Señor Jesucristo, Rey del Univer-
so, cierra el Año Litúrgico en el
que se ha meditado sobre todo el
misterio de su vida, su predica-
ción y el anuncio del Reino de
Dios.
El Papa Pio XI, el 11 de
diciembre de 1925, instituyó esta
solemnidad que cierra el tiempo
ordinario. Su objetivo es recordar
la soberanía universal de Jesucris-
to. Lo confesamos supremo Señor
del cielo y de la tierra, de la Igle-
sia y de nuestras almas.
Jesús no es el Rey de un
mundo de miedo, mentira y peca-
do, Él es el Rey del Reino de
Dios, al que nos conduce, y nos
invita a construir cada día con
nuestra vida.
CONCIERTO-VERMUT SOLIDARIO A FAVOR DE MANOS UNIDAS.
Después de misa de 12:30 h. (Sobre las 13:15) en el
Patio del Colegio Amor Misericordioso podremos partici-
par de un concierto del Cantautor Cristiano Gabi Soñer. Y
colaborar tomando un pincho con su bebida con el que
colaboraremos con la ONG Manos Unidas.
HOJA PARROQUIAL
DE ALFARO
A LA ESCUCHA DE LA PALABRA….
Lectura del Segundo libro de los SAMUEL 5, 1-3
Lectura de la carta del apóstol San Pablo a los COLOSENSES 1,
12-20 Hermanos: Damos gracias a Dios Padre, que nos ha hecho capaces de compar-
tir la herencia del pueblo santo en la luz. Él nos ha sacado del dominio de las
tinieblas, y nos ha trasladado al reino de su Hijo querido, por cuya sangre
hemos recibido la redención, el perdón de los pecados. Él es imagen de Dios
invisible, primogénito de toda criatura; porque por medio de él fueron creadas
todas las cosas: celestes y terrestres, visibles e invisibles, Tronos, Dominacio-
nes, Principados, Potestades; todo fue creado por él y para él. Él es anterior a
todo, y todo se mantiene en él. Él es también la cabeza del cuerpo: de la Iglesia.
Él es el principio, el primogénito de entre los muertos, y así es el primero en
todo. Porque en él quiso Dios que residiera toda la plenitud. Y por él quiso re-
conciliar consigo todos los seres: los del cielo y los de la tierra, haciendo la paz
por la sangre de su cruz.
LECTURA DEL SANTO EVANGELIO LUCAS 23, 35-43 En aquel tiempo, las autoridades hacían muecas a Jesús, diciendo: «A
otros ha salvado; que se salve a si mismo, si él es el Mesías de Dios, el
Elegido». Se burlaban de él también los soldados, ofreciéndole vinagre
y diciendo: «Si eres tú el rey de los judíos, sálvate a ti mismo». Había
encima un letrero en escritura griega, latina y hebrea: «Éste es el rey de
los judíos». Uno de los malhechores crucificados lo insultaba, diciendo:
«¿No eres tú el Mesías? Sálvate a ti mismo y a nosotros». Pero el otro lo
increpaba: «¿Ni siquiera temes tú a Dios, estando en el mismo suplicio?
Y lo nuestro es justo, porque recibimos el pago de lo que hicimos; en
cambio, éste no ha faltado en nada». Y decía: «Jesús, acuérdate de mí
cuando llegues a tu reino». Jesús le respondió: «Te lo aseguro: hoy es-
tarás conmigo en el paraíso».
SALMO 121: Vamos alegres a la
casa del Señor.
A lo largo de nuestra vida hemos podido contemplar infinidad de cru-
cifijos. Algunos nos han conmovido más que otros. El comentario a esta lec-
tura nos recuerda que, cuando nos acercamos a un crucifijo debemos evocar
a tantos crucificados, conocidos o no, que sufren humillación e injusticias. Si
nos acercamos a Jesús Crucificado ignorando el sufrimiento colectivo, esta-
mos también haciendo burla. Confieso que nunca lo había mirado así. El su-
frimiento asociado a la crucifixión ha sido siempre el que había de salvarnos
a todos. Murió por todos y cada uno de nosotros. Eso hace que presentarnos
ante la cruz, únicamente con nuestro sufrimiento individual en nuestra plega-
ria, desvirtúe todo el significado. Ante la cruz no podemos arrodillarnos so-
los, con nuestras penas personales por delante. Debemos llevar todo el pesar
que conocemos, y ser voz de aquellos cuyo lamento no es oído por nadie, ni
tenido en cuenta por el conjunto de la sociedad. Llevamos al cuello esa cruz,
como símbolo, para besarla y recordar el amor de nuestro Padre. También
hay que cargar con ella, y comprometernos con el servicio a los crucificados
de este mundo.
La fiesta de Jesucristo, Rey del Universo, que cierra (y resume) el año
litúrgico, no presenta lecturas triunfales. Quizá porque quiere recordarnos la
verdadera esencia del Reino de Dios: la justicia divina. Aquella que se mide
en dar el ciento por uno de lo recibido, en caminar dos millas en vez de una,
en dar el manto y la túnica, en poner la otra mejilla y en perfumarse la cabe-
za cuando mayor es la pena del alma. Viviendo en esa intención y asumien-
do todas las veces que tropezaremos, podremos decir con humildad
“acuérdate de mí”. No quedaremos sin respuesta.