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HELICONIAS
Karen Turriago* y Víctor J. Flórez R.**
* Ingeniero Agronómo, Especialista en Horticultura, Universidad Nacional de Colombia sede Bogota** Profesor asociado. PhD. Facultad de Agronomía, Universidad Nacional de Colombia, sede Bogotá.
http://www.encolombia.com/economia/floriculturandina_heliconias.htm
RESUMEN
Las heliconias son plantas herbáceas perennes cuya altura varía desde 70 cm hasta 10 m. Las brácteas son los órganos más vistosos de una heliconia, generalmente son de colores primarios o mezclados. Están agrupadas en el orden Zingiberales, y son conocidas en el exterior como exóticas tropicales, por su variedad de colores, formas, tamaños y larga durabilidad. Se encuentran distribuidas desde el Trópico de Cáncer hasta el Trópico de Capricornio, son propias en su mayoría de regiones tropicales y subtropicales de centro y sudamérica. El cultivo exitoso de las heliconias depende de un adecuado método de propagación y de la realización de labores culturales a tiempo, con el fi n de obtener plantas sanas y de buena calidad. La primera cosecha se obtiene entre los siete y los diez primeros meses después de la siembra, pero la fl or con mejor calidad se obtiene después de los 12 meses. Actualmente las exportaciones de flores exóticas, en particular de heliconias, son de alrededor de 24.000 a 30.000 tallos al año, dependiendo de las variedades. A pesar de su belleza, las heliconias colombianas tienen varios limitantes de distribución como el peso, el tamaño, el costo de los fl etes y el transporte inadecuado, por lo cual se deben generar acciones a corto y a largo plazo para ser competitivos en el mercado externo.
Palabras Claves: Heliconias, propagación, cultivo, cosecha, exportaciones.
Summary
his work intends the compilation of bibliographical information on heliconias. Heliconias are perennial herbaceous plants, its height varies from 70 cm to 10 m. The bracts are the showest organs of one heliconia, are generally of primary or mixed colors. They are grouped in the Zingiberales order, and are known in the outside like exotic tropical, by its variety of colors, forms, sizes and releases durability. They are distributed from the Cancer Tropic to the Tropic of Capricorn, are own in its majority of tropical and subtropical regions of Center and South America. The successful culture of heliconias depends on time on a suitable method of propagation and the accomplishment of cultural workings, with the purpose of obtaining healthy plants and of good quality. The fi rst harvest is obtained between the 7 and 10 months after planting, but the fl ower with better quality is obtained after the 12 months.
At the moment the exports of exotic flowers, in individual of heliconias, are of around 24,000 to 30,000 stems to the year, depending on the varieties. In spite of their beauty the heliconias of Colombian has several limits of distribution as the weight, the size, the cost of the loads and the inadequate transport, thus are due to generate short and long term actions to being competitive in the external market.
Key words: Heliconias, propagation, culture, harvest, exports.
Introducción
Actualmente las exportaciones de flores exóticas, en particular de heliconias, son de alrededor de 24.000 a 30.000 tallos al año, dependiendo de las variedades. El destino de estas exportaciones son Estados Unidos, Canadá, Holanda y Alemania (PROEXPORT, 2004).
Las heliconias están agrupadas en el orden Zingiberales, y son conocidas en el exterior como exóticas tropicales, por su variedad de colores, formas, tamaños y larga durabilidad.
Entre otras, las más conocidas son las gingers y las aves del paraíso (Betancur y Crees, 1993). Del género Heliconia se han descrito más de 250 especies, de las cuales 97 se encuentran distribuidas en Colombia y 48 de éstas han sido descritas como endémicas, ubicando a nuestro país como el centro de diversidad más grande de este género en el mundo (Abalo y Morales, 1982).
En razón a la importancia de las flores tropicales en nuestro país, la ingeniera agrónoma Karen Turriago, con la orientación del profesor Víctor Flórez, se propuso hacer la presente revisión bibliográfi ca, cuyo texto por extenso, reposa en la biblioteca de la facultad de Agronomía.
Este fue uno de los requisitos para que la ingeniera Karen obtuviera título de especialista en Horticultura, en la especialización ofrecida por la Facultad de Agronomía, Universidad Nacional de Colombia, sede Bogotá.
Taxonomía
as heliconias, las aves del paraíso, las achiras, las gingers, los bilbos y otras plantas conocidas como platanillos están agrupadas botánicamente en el orden Zingiberales. Este orden se compone de ocho familias: Heliconeaceae, Strelitziaceae, Musaceae, Costaceae, Lowiaceae, Marantaceae, Zingiberaceae y Cannaceae. Anteriormente, el grupo de plantas pertenecientes a la familia Heliconiaceae se ubicaban en la familia Musaceae; sin embargo, Nakai en 1941 las separó como Heliconiaceae. Posteriormente, Kress en 1994 propuso un nuevo sistema de clasifi cación en subgéneros y secciones, basado en características morfológicas, ecológicas y genéticas.
La familia Heliconiaceae sólo está representada por el género Heliconia, cuenta con 200 a 400 especies y el 98% de éstas se encuentran distribuidas en el centro y sur de América y en el Caribe (Kress, 1994, citado por Maza y Builes, 2000).
Morfología
Las heliconias son plantas herbáceas perennes cuya altura varía desde 70 cm, como en H. brachyantha, hasta 10 m, como en H. rígida o en H.
mariae. Presenta raíces adventicias y fasciculadas. El pseudotallo está formado por la superposición de las vainas de las hojas y se origina desde el sitio de crecimiento del rizoma hasta donde brotan los peciolos de las hojas, dándole sostén a las mismas, el cual asciende por su interior en épocas reproductivas.
El peciolo puede tener colores diferentes al verde como en H. platystachis que tiene el peciolo blanco y en H. mutisiana, en la cual el peciolo tiene cobertura pubescente.
Teniendo en cuenta la distribución de las hojas en el pseudotallo y la longitud del peciolo, según Maza y Builes (2000) se diferencian tres hábitos de crecimiento (Figura 1): Musoide, con peciolos largos y hojas en posición vertical u oblicuas similar a Musaceae; Canoide, con peciolos cortos y hojas en posición oblicua similar a Cannaceae; y Zingiberoide, con hojas sin peciolos o con peciolos cortos en posición horizontal, similares a las ginger.
La infl orescencia puede ser erecta, con brácteas dispuestas hacia arriba (Figura 2) o péndula, con brácteas dispuestas hacia abajo (Figura 3). La infl orescencia generalmente brota en forma terminal, al fi nal del pseudotallo, como en H. reptans; en algunas especies ocasionalmente brota del rizoma en un tallo sin hojas, como en H. metallica y en H. hirsuta.
Las brácteas son los órganos más vistosos de una heliconia, generalmente son de colores primarios o mezclados ( H. fernandezii y H. spathocircinata); éstas se conectan con el raquis que continua del pedúnculo de la infl orescencia, el cual puede ser rígido como en H. rígida o fl exible, como en H. laxa y en H. fragilis.
Las heliconias no toleran suelos básicos, ni mal drenados.
En Colombia, las regiones con mayor número de especies son la vertiente occidental andina, con el 35%; el valle del río Atrato con el 25%; las vertientes del río Magdalena con el 25% y la región Oriental Andina con el 25%.
Aproximadamente la mitad de las especies que crecen en Colombia son endémicas. Las regiones con mayor proporción de endemismo son a Andina con el 75% y la Pacífica con el 20% (Betancur y Kress, 1993).
Cada flor está rodeada y protegida por una bráctea floral individual que protege al ovario, estas brácteas son opacas y coriáceas como en H. combinata, H. fernandezii y H. giggsiana. Otras especies presentan brácteas transparentes que se descomponen después de la apertura de la flor, como en H. hirsuta, y en H. burleana. La flor posee seis estambres: cinco fértiles y un estaminodio. El ovario es amarillo, verde o blanco, generalmente liso o pubescente en algunas especies (H. mutisiana); al ser fecundado aumenta de volumen, iniciándose la formación del fruto (drupa), que contiene entre una y tres semillas. Cuando el fruto madura generalmente se torna azul oscuro como en H. plathystachys, en otras especies, es de color violeta como en H. sanctae-theresae. La semilla es pequeña (6 a 10 mm) y de testa dura y rugosa. Luego de la fecundación, el pedicelo se elonga exponiendo el fruto maduro a disposición de los dispersores de semilla, como en H. plathystachys y en H. laxa (Daniels y Stiles, 1978, citado por Kress et al, 1999).
AGROECOLOGÍA Y DISTRIBUCION GEOGRAFICA
Las heliconias se encuentran distribuidas desde el Tropico de Cáncer hasta el Trópico de Capricornio, son propias en su mayoría de regiones tropicales y subtropicales de centro y Sudamérica, varias especies están distribuidas desde Indonesia hasta Nueva Guinea. Su hábitat es variado pueden crecer en regiones húmedas y secas. La mayoría de las heliconias se desarrollan en climas húmedos y cálidos, entro 200 y 2000 msnm, sin embargo, la altitud ideal es de 1500
msnm, con temperatura de 23 a 30°C. Toleran una precipitación entre 1500 y 2000 mm, distribuidos de 120 a 200 mm al mes. En cuanto a la luminosidad necesitan entre 30 y 40% de sombrío y humedad relativa de 60 a 80% (Atehortúa, 1998; Maza y Builes, 2000)
Con respecto a la luminosidad, Betancur y Kress (1993) reportan que cuando H. psittacorum se cultiva a plena exposición solar y con buena fertilización produce 130 inflorescencias por año, pero si la iluminación se reduce en un 37% el promedio de producción es de 35 inflorescencias por año.
Los suelos aptos para su cultivo deben ser profundos, húmedos, ricos en materia orgánica, protegidos de radiaciones solares fuertes Hoyos (1999), con temperaturas de 18 a 23°C, ubicados en zonas planas y con texturas francas; el pH ideal es de 4.5 a 6.5 Atehortúa (1998) Aimone (1986) Betancur y Kress (1993) reportan que las heliconias no toleran suelos básicos, ni mal drenados.
En Colombia, las regiones con mayor número de especies son la vertiente occidental andina, con el 35%; el valle del río Atrato con el 25%; las vertientes del río Magdalena con el 25% y la región Oriental Andina con el 25%.
Aproximadamente la mitad de las especies que crecen en Colombia son endémicas. Las regiones con mayor proporción de endemismo son la Andina con el 75% y la Pacífi ca con el 20% (Betancur y Kress, 1993).
En Colombia, las regiones con mayor número de especies son la vertiente occidental andina, con el 35%; el valle del río Atrato con el 25%; las vertientes del río Magdalena con el 25% y la región Oriental Andina con el 25%.
Aproximadamente la mitad de las especies que crecen en Colombia son endémicas. Las regiones con mayor proporción de endemismo son la Andina con el 75% y la Pacífi ca con el 20% (Betancur y Kress, 1993).
PROPAGACION
Las heliconias se pueden propagar por rizomas (Figura 4), por cultivo de tejidos y por semillas. Mediante los dos primeros métodos se obtienen plantas iguales a las que les sirvieron como parentales, lo que no sucede a través de semillas.
El sistema de propagación por rizomas es extremadamente lento y requiere deshijar las plantas madres para poder establecer un nuevo clon de plantas; por otro lado, las semillas tardan de tres meses a tres años en germinar Montgomery (1986). Estos sistemas de propagación no son los más apropiados y efi cientes para establecer un cultivo con fines comerciales, sin embargo, en la actualidad, el método más utilizado en Colombia es la propagación por rizomas.
Para la propagación por rizomas es necesario tener una infraestructura con polisombra para lograr una
Figura 4. Rizomas de heliconias listos para tratamiento con fungicida antes de la siembra. 1. Planta escogida para propagar; 2. Deshije; 3, 4 y 5. Lavado de raíces; 6. Retiro de raíces de los rizomas; 7. Selección de rizomas. Fuente: Zoneten (2004)
luminosidad adecuada (Figura 5). Para sembrar los rizomas se utilizan bolsas o materas de 20x15 cm y de 23x17 cm, dependiendo de la variedad a sembrar. El suelo a utilizar debe ser rico en materia orgánica, bien cernida, libre de piedras y terrones para facilitar un buen desarrollo radical (Figura 6). La proporción de tierra y materia orgánica descompuesta es de tres a uno (Maza y Builes, 2000).
La propagación por semillas presenta dificultades ya que las semillas poseen un bajo porcentaje de germinación y larga latencia; además las plántulas resultantes son de lento crecimiento y presentan gran variabilidad en las características obtenidas de un mismo lote (Montgomery, 1986).
Otro método de propagación es a través de micropropagación, proceso que permite la propagación masiva de plántulas in vitro, mediante varios sistemas de regeneración del material vegetativo y reproductivo (Hurtado y Merino, 1987; Perik, 1990; CIAT, 1991).
Aunque el cultivo de tejidos es una técnica ampliamente utilizada para la propagación de especies ornamentales, este no ha sido el caso para especies de este género a juzgar por los reportes
científi cos disponibles (Natnan et al., 1992; Osorio, 1993).
A pesar del éxito de la técnica utilizada vía organogénesis directa, los costos todavía son muy altos, debido al largo tiempo de reproducción requerida, insumos y mano de obra, lo cual restringe la producción comercial.
Por otro lado, dentro de las técnicas de micropropagación, la embriogénesis somática ofrece una alternativa interesante ya que el proceso permite lograr una producción masiva, rápida, efi ciente y de bajo costo, además de su potencial para desarrollar procesos de transformación genética y de fitomejoramiento
(Ammirato, 1983; Gray y Purohit, 1991; Vasil, 1994.
ESTABLECIMIENTO DE LA PLANTACIÓN
Cuando no se cuenta con un sistema de riego se deben esperar épocas de lluvia para realizar la siembra. La densidad de siembra se decide de acuerdo a la altura de la planta. Betancur y Kress (1993) recomiendan que miniheliconias (tipo H. psittacorum) se siembren con distancias de 1 m entre plantas y 1,5 m entre surcos; Heliconias de tamaño mediano (tipo H. wagneriana) se siembren a 2 m entre plantas y 3 a 4 m entre surcos; heliconias grandes (tipo H. platystachys) se siembren de 2 a 3 m entre plantas y de 3,5 a 4,5 m entre surcos.
La literatura reporta que la densidad puede afectar la productividad de las heliconias como se muestra en la Tabla 1.
LABORES CULTURALES
Tabla 1. Productividad y distribución de siembra de diferentes tipos de heliconias.
HeliconiaPromedio del número de flores de planta/año
Distancia de siembra (m)
PurpurataWagnerianaGrandeMedianaPequeñaColgante
905025407545
3,5 x 3,54X44x43x32x23,5x3,5
Fuente: Anónimo. Flores y follajes tropicales (2000).
FERTILIZACIÓN
Una semana después de la siembra se debe aplicar una enmienda rica en fósforo para estimular el desarrollo radical; a los tres meses, un refuerzo sólido de elementos mayores y menores; a los seis meses hacer una enmienda rica en potasio, para preparar la planta para la floración. Para el segundo año se deben hacer refuerzos cada tres meses. La fertilización edáfica se hace de acuerdo con análisis de suelos, teniendo en cuenta los requerimientos de elementos según la variedad. También, es recomendable aplicar materia orgánica en el momento de la siembra y cada que sea posible durante el ciclo del cultivo. Las heliconias requieren alto contenido de nitrógeno, potasio, magnesio y elementos menores, como azufre, molibdeno, boro, y zinc. La proporción recomendada para épocas de fl oración es de 3:0,5:2 de nitrógeno, fósforo y potasio (Broschat, 1992; Maza y Builes, 2000).
Atehortúa (1998) reporta los niveles foliares óptimos para Heliconia sp., como se muestra en la Tabla 2. Bittencourt y Oliveira (1995) reportan que diferentes dosis de macronutrientes infl uencian notablemente algunas variables en la planta.
Tabla 2. Niveles nutricionales a nivel foliar de Heliconia sp.
Elemento Rango Rango superior
Nitrógeno (%)Fósforo (%)Potasio (%)Calcio (%)Magnesio (%)Azufre (%)Boro (ppm)Cobre (ppm)Hierro (ppm)Manganeso (ppm)Zinc (ppm)
3,1-3,80,2-0,43,5-4,51,26-1,750,26-0,80,2-0,810-756-2576-300100-100025-250
>3,8>0,4>4,5>1,75>0,8>0,8>75>25>300>1000>250
RIEGO
Debido a que las heliconias tienen hojas grandes y se deshidratan fácilmente por la radiación directa, es necesario usar riego por aspersión foliar. La cantidad de agua depende de la incidencia lumínica, de los requerimientos del cultivar y de la época del año. Maza y Builes (2000) citan que H. psittacorum requiere un centímetro de agua diario cuando está sembrada en camas de suelo
bien drenado, 2,5 cm para especies creciendo en suelos más compactos y hasta 7 litros por planta en producción, en épocas de verano (Maza et al., 2000).
DESHIJE
Consiste en cortar los brotes débiles conocidos como “hijos de agua” y los vástagos adultos, cuya infl orescencia pasó del estado óptimo de corte. Esto permite que la planta tenga mayor aireación, el brote de vástagos más vigorosos y previene enfermedades (Maza y Builes, 2000).
CONTROL DE MALEZAS
Esta labor es muy importante en los primeros meses de la siembra ya que las malezas pueden atraer plagas y ser competencia de plantas recién sembradas, se puede hacer de forma manual o química.
DESHOJE Y ELIMINACIÓN DE VÁSTAGOS NO APROVECHADOS
Esta labor debe realizarse semanalmente puesto que las hojas y los vástagos viejos son focos de infecciones y competencia por nutrientes y luz para los nuevos brotes que normalmente crecen en la base de las plantas (Maza y Builes, 2000).
RESIEMBRAS
Cuando las plantas adquieran un círculo despejado en su interior debido a la floración y muerte de sus primeros vástagos, se deben sembrar rizomas para aprovechar este espacio y conservar por más tiempo la distribución original del cultivo. Esto se hace dos a tres años después de establecida al plantación (Maza y Builes. 2000)
TUTORADO
El sistema de tutorado permite evitar pérdidas por flor torcida, para esto se usa fibra de polipropileno (fibra bananera), colocándola en forma de cinturón que abarque la mayoría de los ejes productivos. Sin embargo, no todas las heliconias requieren de tutorado (Atehortúa, 1998; Ball, 1986)
PLAGAS Y ENFERMEDADES
Entre las principales enfermedades Maza y Builes (2000) reportan el moko, cuyo agente causal es Pseudomonas solanacearum. Afecta la parte interna del pseudotallo y el peciolo, causando la muerte de cilindro central; esta bacteria se transmite a los hijos por los haces vasculares. La forma adecuada para su control es por erradicación y posterior entierro de la planta afectada.
Existen otros patógenos que inciden sobre el follaje, como por ejemplo Colletotrichum que afecta las brácteas, principalmente en wagneriana amarilla y en fucsias, sobre todo cuando las plantas se encuentran mal nutridas. Además, se han encontrado patógenos en suelo como Phytium, Phythopthora y Rhizoctonia, que afectan raíces y tallos. Entre otras enfermedades reportadas pero poco mencionadas esta la causada por Myrothecium sp., este hongo produce manchas marrón, necróticas y de diferentes tamaños en inflorescencias (Figura 7). Esta enfermedad se desarrolla en épocas de alta humedad relativa y temperatura. Para prevenirla es aconsejable regular el sombrío, drenar el suelo y no exceder aplicaciones nitrogenadas (Escalona et al, 1992).
Entre las enfermedades vasculares que causan perjuicio económico está la fusariosis (Fusarium oxysporum) enfermedad que afecta principalmente al gingers y bastones. El control debe ser preventivo, sembrando materiales sanos y en zonas libres del patógeno Murillo (1997).
A las heliconias también las afectan los virus, como el del mosaico del pepino (CMV) que causa decaimiento de la planta y un moteado claro. Este virus puede ser transmitido por afidos (Aphis maydis y A. gossypii).
Figura 7. Síntomas de la enfermedad causada por Myrothecium sp. A a C: Síntomas inducidos por el hongo en el pedúnculo y espata de inflorescencia de heliconia; A y C, en el cv. “Golden Torch”; B, en el cv. “Tropic”; D a F, síntomas con masas de conidios en el ápice de las brácteas; D y E, in situ; F, mostrando crecimiento indeterminado.
Fuente: Escalona et al (1992)
Entre las principales plagas se encuentran los nemátodos que afectan el sistema radical, formando nódulos y necrosamientos que obstruyen el transporte de agua y de compuestos orgánicos e inorgánicos, causando debilidad general, amarillamiento y flor pequeña. Su control es a base de nematicidas; se debe tener el cuidado de no realizar desyerbas ni plateos con azadón, lo que ocasionaría rupturas en las raíces, permitiendo la entrada del patógeno.
Los thrips son otra plaga limitante, inciden sobre los brotes tiernos (cogollos) y chupan la savia floemática, haciendo que la planta detenga su crecimiento. En heliconias del tipo maraca pueden causar la muerte.
El gusano tornillo ( Castniomera humbrolti) también es una plaga limitante, pues hace perforaciones en el tallo causando la muerte del eje de la planta. La larva penetra por heridas causadas en las labores culturales y el adulto, que es un lepidóptero, oviposita en materiales en descomposición. El control consiste en retirar y compostar el material vegetal afectado.
El picudo ( Cholus sicaudata) normalmente afecta inflorescencias rojas, causando perforaciones en las brácteas y el consecuente deterioro de la flor; vive en lugares frescos y oscuros. Para controlarlo es necesario tener buena luminosidad en el cultivo; adicionalmente, está reportado el uso de Beauveria bassiana para controlar esta plaga (Ramírez , 1993).
COSECHA
Epoca de cosecha
La primera cosecha es durante los 7 y los 10 primeros meses después de la siembra, pero la flor con mejor calidad se obtiene después de los 12 meses (Maza y Builes, 2000).
Requerimientos de corte: el tipo de corte depende de la especie y del destino de las fl ores. Las miniheliconias como H. psittacorum se cortan con una bráctea abierta o totalmente cerrada y a 80 ó 90 cm de longitud. Los cultivos de tamaño medio para fl orero como H. wagneriana se cortan con
dos a tres brácteas abiertas, de 120 a 130 cm de longitud y se empacan en cajas con 15 ó 20 unidades (Betancur y Crees, 1993).
Los cultivares de tamaño medio para bouquete se cortan con sólo una bráctea abierta y con 60 a 80 cm de longitud total, éstos se empacan de 35 a 40 unidades por caja. En especies péndulas, el corte es con tres a cinco brácteas abiertas, la longitud de corte varía con el tamaño de la infl orescencia de 130 a 140 cm y se empacan en cajas con 15 ó 20 unidades (Betancur y Crees, 1993).
Siempre que una flor sea cortada se debe manipular lo menos posible, colocándola bajo sombra, preferiblemente sobre una almohadilla de espuma o un colchón de las mismas hojas de heliconias (Echeverri, 1990).
POSCOSECHA
Transporte
El transporte debe hacerse en almohadillas de 30 x 60 cm, en grupos de máximo seis flores para evitar su maltrato. Cuando la flor llegue a la poscosecha se debe hidratar colocándola enrecipientes con agua limpia y algún desinfectante (Maza y Builes, 2000).
Selección de la inflorescencia
Se eliminan las flores que no cumplan con los requerimientos de tamaño, que tengan algún daño mecánico o causado por patógenos. La longitud de la infl orescencia con pedúnculo debe ser inferior a 80 cm y el pseudotallo debe tener un diámetro máximo de cinco centímetros (Maza y Builes, 2000).
Las heliconias para exportación deben estar sanas, sin síntomas de deshidratación o deflexión y con una coloración intensa, permaneciendo así por un tiempo no inferior a 12 días (Betancur y Crees, 1993).
Lavado y curado de la inflorescencia
La flor se debe lavar usando agua jabonosa y luego se sumerge en una solución bactericida y funguicida. La desinfección también se puede hacer sometiendo la flor a un ambiente saturado de vapor de agua a 46°C por un tiempo de 10 a 60 minutos de acuerdo al tamaño de la especie (Maza y Builes, 2000).
Almacenamiento
Si la flor se va a almacenar, se debe utilizar una habitación ventilada que esté a una temperatura de 14 a 16°C, con un 90% de humedad relativa; la mayoría de heliconias no se deben almacenar por más de cinco días. Los recipientes de almacenamiento deber ser adecuados para colocar la flor en una solución de agua con cloro al 0,02%. El uso de preservativos no afecta la durabilidad de la flor, pero ayudan a evitar el crecimiento de microorganismos en el agua (Maza y Builes, 2000).
Durabilidad de la inflorescencia
Varía entre las especies y cultivares, pero, en promedio, alcanza 14 días; sin embargo, se ha reportado un máximo de 28 días para H. bihai cv (Echeverri et al., 1990). La fl or en la planta puede tener una vida de 1 a 10 meses dependiendo de la especie, su tamaño y el número de brácteas (Maza y Builes, 2000).
Empaque
El 60% de las flores tropicales son exportadas en empaques corrugados con dimensiones de 41x10x5 pulgadas, el 30% de los consumidores importan las heliconias en cajas de 41x20x5 y el
10% restante lo hacen en cajas corrugadas de 41x40x5, siendo esto un gran tamaño. El importador prefiere el empaque de 41x10x5 pulgadas por ser el característico para la venta (PROEXPORT, 2002).
La flor tropical colombiana se exporta en cajas de 20 heliconias, con dimensiones de 44x20x5 pulgadas. Estas cajas, en la parte superior presentan: foto de una heliconia, el nombre del productor y el lugar de procedencia. En el lateral izquierdo tienen la indicación de la fecha para posicionar las cajas y un aviso de no refrigerar y, en la parte interior, la caja lleva un plástico forrando las fl ores y papel periódico picado humedecido. Las fl ores no se empacan amarradas, la fl or va protegida en el papel, pero no totalmente envuelta. En la parte posterior, se encuentran anuncios como por ejemplo: caja N° 21, variedad heliconia mixta, cantidad 20 y un aviso que dice FRÁGIL (PROEXPORT, 2002).
ESTUDIO DEL MERCADO DE HELICONIAS
Entorno mundial
El cultivo de flores cortadas y bulbos de flores se da en 145 países, ocupando un área de 190.000 hectáreas aproximadamente. Los principales productores de fl ores son Holanda, con una producción de US$ 4 billones de fl ores por año, seguido por Alemania, Francia, España, Japón, Colombia, Ecuador y Estados Unidos, donde la producción fue de aproximadamente US$ 20 mil millones para el año 2002 (Centre for the promotion of developing countries, 2002).
Colombia ocupa el segundo lugar como exportador mundial por la calidad de sus fl ores, sus exportaciones son del 14% después de Holanda, país que exporta el 50%. Colombia y Ecuador son los principales países suramericanos exportadores de flores.
Dentro de las flores de bulbos Holanda ocupa un lugar importante (84%) seguido por Chile. Dentro de los follajes el principal exportador es Estados Unidos seguido por Costa Rica, Italia, Holanda, Alemania, Chile, Kenya, Israel y Japón (Florvertical, 2004).
Las exportaciones de fl ores colombianas se iniciaron en 1965 con un valor de US$ 20.000 y en el año 2002 alcanzaron un valor de US$ 665 millones de dólares, presentando un crecimiento promedio anual de 6,9% durante el período comprendido entre 2000 y 2002. Las exportaciones de flores a Estados Unidos fueron de 82% en el 2000 y de 89,1% en el 2002, presentando un incremento del 7% con respecto al año 2000. El segundo destino de exportaciones colombianas es la Unión Europea con 9,8% de participación en sus ventas. En 1987 los exportadores de flores Colombianas, establecieron en Miami el COLOMBIA FLOWER COUNCIL (CFC) cuyo objetivo es promover el consumo de flores colombianas, sin embargo, otros organismos que han incidido en la promoción son PROEXPORT y BANCOLDEX (Datafl owers, 2004). El principal producto de
Heliconia mariae
Heliconia musoide
exportación de Colombia es la rosa con un 29% seguida por el clavel con el 28,5%, el miniclavel con el 9%, y los crisantemos con 1,8%. Las heliconias y otras fl ores tropicales se encuentran agrupadas dentro de la clasifi cación de otras fl ores, las cuales representan el 31,7% del total de exportaciones de fl ores (PROEXPORT, 2002).
Mercado de Heliconias en Estados Unidos
Las flores tropicales y específicamente las heliconias y follajes han venido ocupando en los últimos tres años un renglón importante dentro del total de las importaciones de flores cortadas a Estados Unidos, con un 3,2% de participación de acuerdo con la información proporcionada por USDA Path Publishing, Prochile y Data flowers, entre otros. Muchas variedades tropicales han sido comercializadas como fl or de corte durante los últimos 20 años, entre ellas se encuentran H. wagneriana; H. bihai; H. stricta; H. orthotricha; H. caribbea; H. psittacorum; H. rostrata; H. chartacea; y H. platystachys. Otras especies comercializadas son platanillos de otras familias tales como: Musa coccinia, Alpinia purpurata, Zingiber spectabilis, Etlingera elatior, Tapeinochilos ananassae, Calathea crotalifera, Calathea lutea, pero las que se encontraron más familiarizadas con la mente de los actores de la cadena fueron: H. Psittacorum y H. Caribbea (PROEXPORT, 2002).
A pesar de la crisis en la economía mundial después del 11 de septiembre de 2001 y después de la guerra de Irak, las fl ores mantuvieron un nivel de ventas con crecimiento. Sin embargo, en el año 2003 las empresas importadoras en Miami experimentaron un descenso en las ventas del 8% durante el primer trimestre (PROEXPORT, 2002). Estados Unidos tiene un consumo pe cápita de US$ 30 por año en flores. A nivel de consumo en Estados Unidos, las flores tienen unas características específi cas, pues son un bien imprescindible, con una demanda elástica, y con una alta estacionalidad según las principales fiestas: San Valentín, madres y navidad. Sin embargo, hay algunos floristas que afirman que las flores tropicales se venden mejor en primavera y verano mientras otros afirman que se venden mejor en invierno (Florvertical, 2004).
Los principales consumidores de las especies tropicales en Estados Unidos forman parte de los sectores hoteleros, quienes compran semanalmente arreglos de flores tropicales que oscilan entre los US $150 y los US $ 1000, dependiendo del tamaño y la sencillez.
Las heliconias tienen alto costo por lo que son menos apetecidas, puesto que una flor equivale a comprar media docena de rosas o un ramillete de claveles (Florvertical, 2004).
Más del 80% de floristerías estadounidenses no compran flores tropicales colombianas por sus altos costos en fl etes y por esta razón compran productos costarricenses. Las características del empaque y las variedades son muy similares entre ambos países, pero el precio varía por los costos de transporte (PROEXPORT, 2002).
El mercado de heliconias es sumamente competitivo y está relacionado con la calidad del producto, disponibilidad y precio del mismo, los precios de los productos importados por Estados Unidos, de Costa
Rica, son al menos un 25 a 50% más económicos que los productos de Colombia y entre un 40-60% inferior a los de Ecuador (PROEXPORT, 2002).
Es importante invertir en publicidad para dar a conocer las diferentes variedades de heliconias y su uso. Costa Rica tiene algún tipo de publicidad ya que ha podido entrar a comercializar en la cadena de supermercados Publix (PROEXPORT, 2002).
Dentro de los principales limitantes de distribución de flor colombiana se encuentran el peso de la fl or, el tamaño, el costo de los fletes y el transporte inadecuado (PROEXPORT, 2002).
Las diferencias en los fl etes difi cultan la comercialización para países como Colombia ya que el costo desde Colombia es de US$ 1,1 y US$ 0,9 desde Costa Rica (PROEXPORT, 2002).
La cadena de frío para el transporte no es la adecuada para el manejo de flores tropicales por lo que la comercialización es difícil y el costo se incrementa por los procesos que se deben hacer a la fl or, como insolación para que esta no se dañe (PROEXPORT, 2002).
Para que las heliconias tengan oportunidad en el mercado externo se deben hacer proyectos de difusión de las heliconias para que sean reconocidas en el mercado objetivo. Adicionalmente, se deben buscar subsidios para el desplazamiento de la flor desde Colombia hacia el país de destino con el fi n de disminuir los costos de fletes. Internamente hay que fomentar el cultivo de ciertas variedades de heliconias dependiendo del nicho o mercado a donde se quiera llegar.
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