Download - Fotografo de guerra
Fotógrafo de guerra
Daniel Jiménez T.
Jim Nachtwey, es un reportero gráfico que en los años 80’s decide ir a New York a
dedicarse definitivamente a la fotografía, en especial a la fotografía de guerra.
Nactwey queda impactado por las fotos que llegaron desde Vietnam en la década
de 1970. Ese impacto que causaron esas imágenes en Jim, no sólo tocaron
profundamente al que posteriormente llegaría a ser uno de los mejores reporteros
gráficos de guerra, también hirió la conciencia de miles de norteamericanos que
protestaron frente a los organismos de poder para que detuvieran la absurda
guerra de Vietnam. Como plantea Sontang (2005) las imágenes fotográficas
aunque contribuyen a despertar una conciencia social éstas “no pueden crear una
posición moral, pero sí consolidarla; y también contribuir a la construcción de una
en cierne” (Sontang, 2005: 35). En otros términos para que una fotografía tenga
una repercusión sobre los individuos sobre una situación ignominiosa es necesario
contar con un “contexto apropiado de disposición y actitud”. La decisión a partir de
la indignación por medio de la fotografía, invita al sujeto a que, por medio de ese
instrumento por el cual se captó dicha realidad, este dese seguir conociéndola a
fondo.
La profundidad de la imagen fotográfica remplaza la profundidad de la realidad
social. Para averiguar las verdaderas motivaciones de Nachtwey para adentrarse
a través de su cámara en el mundo de la guerra, habría que realizarle un profundo
psicoanálisis al hombre y al fotógrafo. No obstante el documental War
Photographer, nos revela algunos aspectos de este opaco personaje. Dentro de
sus características de personalidad más destacadas por las personas más
cercanas a él, el silencio es una constante en la reiteración de las experiencias
fotografiadas por Nachtwey, y casi nunca, verbalizadas por él. Christiane
Breustedt, su compañera sentimental se pregunta si Jim no necesita canalizar
esas experiencias, sino necesita contarlas a alguien. Y desde la relación fetichista
y vouyeur que permite el acto fotográfico, el fotográfico se ha complacido y ha
canalizado sus experiencias en el mundo por medio de las imágenes que produce;
estás imágenes son un grito en el silencio del lenguaje emotivo del gesto corporal.
Contar la vida y la experiencia de un fotógrafo de guerra no podría hacerse de otra
manera que no fuese a través de imágenes (en movimiento, pero también fijas) y
de intentar objetivar lo mayor posible una experiencia tan subjetiva como la
experiencia fotográfica. La utilización de una micro-cámara ubicada cerca del visor
pretende hacer las veces de una cámara subjetiva, desde el plano técnico, pero
desde la producción de un mensaje su pretensión va más allá: quiere connotar la
experiencia del fotógrafo en el campo de batalla por medio de una simulación que
ubica al espectador en el lugar de “el fotógrafo en acción”.
Una de las primeras hipótesis de Barthes, es que a pesar que el sentido común
dictamina la objetividad de la fotografía de prensa, esta tiene altas dosis de
connotación que “es posible inferirla a partir de ciertos fenómenos que tienen
lugar en el nivel de la producción y recepción del mensaje” (Barthes, 1986: 15)
dichas “dosis de connotación” como afirma Barthes se producen tanto en la
producción como en la recepción de las imágenes fotográficas. Los encuadres o la
pose, el trucaje y la fotogenia son elementos que este autor plantea como una
visión de mundo que el fotógrafo quiere dar a conocer, es decir, a connotar y ya
que este comparte los códigos y simbolismos culturales de la sociedad receptora
de sus imágenes, dicha connotación tiende a naturalizarse haciendo pasar esta
visión de mundo como algo real denotado por un testigo oculto tras el aparato
fotográfico.
Las diferentes imágenes con las que ilustran los recorridos de Nachtwey por
lugares del África e Indonesia plantean un dialogo que reafirma la ilusión de la
producción objetivas de imágenes. El reportaje gráfico es un recorrido
documentado en imágenes, una doble experiencia vivida a partir de luces y
sombras, de un collage de situaciones que emulan una cotidianidad propia y
ajena. Los dramas humanos y el respeto, con el que Nachtwey dice acercarse y
fotografiar, parece victimizar aún más a quien vive tal drama que se magnifica en
la imaginación que exacerba la llegada de esas imágenes de lugares
insospechados y sólo aprehendidos por la fotografía de prensa.
La presencia-ausencia que invocan las imágenes fotográficas están presenten en
los usos rituales que se hacen de éstas. En el álbum familiar, en los pequeños
altares personales del ser amado, el objeto del deseo se revela en estos espacios
privados. Sin embargo, como lo afirma Nachtwey, fotografiar a una persona que
ha acabo de sufrir una pérdida familiar en un contexto privado es impensable
éticamente, pero sí es posible esto en una situación de guerra y en países donde
la miseria y los dramas humanos, al parecer, ya son públicos antes de volverse
más en la documentación que llevan a cabo estos reporteros. Esto se da, en parte,
porque estos dramas transcienden a un interés político, es decir, se politizan los
dramas humanos. En este sentido cabría preguntarse si las imágenes que los
documentos también se politizan o viven un proceso de politización en la
producción y la recepción de sus mensajes, tal como se construye el código
connotativo según Barthes?
Finalmente, es necesario recordar que quién realiza este documental, Christian
Frei, está estrechamente vinculado al mundo del reportaje de guerra y a la
producción editorial que trabaja este tipo de imágenes. Esto último para recalcar
que este documental, también, nos muestra una visión del mundo, llena de poses,
fotogenia y objetos que constituyen los primeros elementos naturalizados para los
espectadores que viven junto a los dramas y miseria que documenta el fotógrafo
de guerra, el propio drama y miseria de quien lo ha sacrificado todo para producir
estas imágenes con las que pretende cambiar el mundo, por lo menos el suyo
propio.
Referencias Bibliográficas.
Barthes, 1986. Lo obvio y lo obtuso. Paidós, Barcelona.
Sontang, 2005. Sobre la fotografía. Alfaguara, Bogotá.
Sobre James Nachtwey (blog) disponible en http://numerof.com/blog/?p=694
Sobre la ficha técnica de War photographer disponible en: http://www.filmaffinity.com/es/film368249.html