FORO DE CONSULTA CIUDADANA PARA LA ELABORACIÓN DEL
PLAN VERACRUZNO DE DESARROLLO 2011 -2016
Propuesta: Lic. Victoria Navarro Morales.
Contraloría General.
Tema: La cultura de la legalidad.
Con el proceso de globalización han surgido situaciones que han provocado cambios
significativos, no sólo en el orden económico, político y social, sino también cultural, pues la
misma inercia de ese movimiento ha provocado cambios en los valores que rigen las conductas
y comportamientos de la sociedad.
Estos cambios, también han tenido efectos dañinos que se pueden percibir en distintas
magnitudes, los cuales se han extendido por todo el mundo, como es la corrupción.
A principios de los años 90 sucedieron en el mundo, acontecimientos, escándalos o actos
políticos de corrupción en Japón, Reino Unido, Estados Unidos, España, Francia e Italia, asi
como en algunos países latinoamericanos; muchos consideraron que esto se debía a la alta
injerencia del estado, partidos políticos y la burocracia en áreas estratégicas de economía y
política.
Un proceso universal de privatización en numerosos países europeos, estimulado por el retorno
de la economía de mercado, la presión ejercida por las instituciones financieras internacionales
sobre sus deudores para disimular el papel del estado en la administración de los servicios
públicos, provoca un incremento en la atención puesta en los países donantes como Japón,
Canadá y Estados Unidos por el problema de la ayuda internacional otorgada por los gobiernos,
ya fuera directamente o a través de organismos internacionales como el Fondo Monetario
Internacional, el Banco Mundial y la Organización de la Naciones Unidas, no solo en especie,
sino también financiera, para ayudar a equilibrar las cuentas públicas y reducir la deuda pública,
provocan el descubrimiento de graves problemas de corrupción; con un uso excesivo e
indiscriminado de recursos, asi como la falta de responsabilidades claramente definidas para
los funcionarios públicos de los países y organismos donantes; lo que ocasionaba opacidad en
la toma de decisiones; además la emergencia de los problemas ambientales destapa los
problemas de corrupción relacionados con el otorgamiento de concesiones y franquicias para
explotar la posesión ambiental.
Todo lo anterior genera una conciencia sobre los problemas que genera la corrupción, no sólo
políticos sino también económicos, con repercusiones negativas en el desarrollo de los países,
que afectan directamente a la población más pobre.
PROBLEMA:
Los efectos de la corrupción los percibe la sociedad en la deficiencia de los servicios públicos,
aumentando los obstáculos para acceder a ellos a la población con menos recursos
económicos; en los caminos, puentes, edificios mal construidos, en la ineficiente seguridad
pública, asic omo en la deficiente e injusta distribución del ingreso y en el deterioro del medio
ambiente.
La corrupción le cuesta a la sociedad en recursos económicos, en bienestar social, en
seguridad y en calidad de vida.
La corrupción debilita los mecanismos de rendición de cuentas, distorsiona los incentivos de los
actores económicos, debilita la eficacia y eficiencia de las políticas y los programas públicos,
genera la desconfianza de los ciudadanos hacia el gobierno y los extranjeros se forman una
mala imagen del país y de su población.
De acuerdo a las más recientes cifras presentadas por TI, en el 2010, en lo que se refiere al
índice de percepción de la corrupción; nuestro país tiene una calificación baja de 3.1; en donde
la mejor calificación es de 10 y la peor es de 1, nuestro país ocupa el lugar no. 98 de 178
países calificados.
Lo preocupante de esta información es que, según sta organización, la puntuación del Índice de
Percepción de Corrupción ha esta descendiendo, de 3.6 en 2004 a 3.1 en 2010.
De igual forma, tampoco hemos salido bien librados de la evaluación que hacen a los
estudiantes mexicanos en la reconocida prueba PISA, (Programa Internacional de Evaluación
de los Alumnos) que realiza la OCDE, organismo del cual, formamos parte, en donde se obtuvo
el puntaje más bajo de dicho organismo.
Al mismo tiempo las recomendaciones a nuestro país sobre el tema de educación, se refieren al
cuidado inmediato que se debe tener en la calidad de la educación.
De alguna manera estos son dos indicadores de cómo la corrupción está minando nuestras
instituciones.
PROPUESTA
Ante este panorama sombrío, proponemos cambiar la cultura de la corrupción, por la cultura de
la legalidad, como un objetivo para poder transformar la sociedad en que vivimos, en donde no
sólo se ejerza el Estado de Derecho, en donde las leyes se aplican por igual a todos y se
protegen los derechos de los individuos y de la sociedad; sino que la mayoría de la sociedad
este convencida de que este Estado de Derecho ofrece la mejor forma de lograr la justicia y se
comporten de acuerdo a este convencimiento.
Construir una cultura de la legalidad implica transformar conductas en todos los ciudadanos,
romper con costumbres arraigadas, desde el ciudadano común que intenta evitar la sanción por
la violación de una norma de tránsito, hasta el funcionario que interpreta la normatividad en
beneficio particular o de grupo por encima del bien común.
La adopción de la cultura de la legalidad no sólo tiene que ver con el conocimiento de las leyes
ysu cumplimiento, también requiere mejorar la educación cívica y política buscando rescatar los
valores de la honestidad, el respeto, la equidad, el mérito y la justicia, así como asumir
compromisos firmes para erradicar prácticas nocivas de corrupción como el clientelismo, los
liderazgos caciquiles, el “charrismo” sindical y el nepotismo, que tanto daña el desempeño de
las instituciones.
En este sentido, el papel de las instituciones en esta tarea es fundamental. Por ello es
indispensable su fortalecimiento para garantizar el Estado de derecho, lo que traerá como
consecuencia una mejora en la percepción del ciudadano respecto de sus Instituciones.
Es importante comprender la diferencia entre estado de Derecho y Cultura de la Legalidad:
Por Estado de Derecho se debe entender como el principio en el cual todos los miembros de la
sociedad están gobernados por leyes establecidas en forma democrática, que protegen los
derechos individuales y se aplican uniformemente.
Sus cuatro componentes principales son:
1. Leyes establecidas en forma democrática, es decir, bajo la ley, todos tienen la
oportunidad de participar en la elaboración y modificación de las leyes.
2. Las leyes se aplican a todos por igual.
3. Las leyes protegen tanto al individuo como a la sociedad.
4. Las violaciones a la ley son sancionadas a través de los procedimientos y castigos
establecidos.
Por lo que se refiere a la Cultura de la Legalidad esta existe cuando la mayoría de los
ciudadanos comparten la creencia de que cada persona tiene la responsabilidad de ayudar a
construir y mantener una sociedad en un Estado de Derecho.
Definición:
“Cumplimiento espontáneo y estricto por gobernantes y gobernados de las obligaciones que la
ley (el orden jurídico) impone para garantizar la convivencia social, a partir de su publicación,
difusión, comprensión y adopción personal; acatamiento sustentado en la conciencia y
convicción, individual y colectiva, de respeto a la ley, como práctica cotidiana de valores éticos,
universales, y forma de vida”1.
La cultura de la legalidad rquiere del mejoramiento de cada uno de lospoderes; el ejecutivo, a
través del fortalecimiento de cada una de las dependencias y entidades de la administración
pública; el legislativo, a través del fortalecimiento de cada una de las fracciones parlamentarias
de los partidos políticos representados y el judicial mediante la independencia y autonomía de
sus miembros.
Características de la Cultura de la Legalidad:
1. La mayoría de las personas conocen las leyes y sus derechos individuales.
2. La mayoría de las personas aceptan la ley y están dispuesta a acatarla.
3. Prevalece una actitud en contra de la corrupción y la delincuencia.
En este sentido, cuando los ciudadanos o el gobierno actúan con impunidad, contribuyen a una
cultura de la ilegalidad, esto es, la corrupción viola los principios fundamentales del Estado de
Derecho.
Pero, para poder generar un cambio, también implica que nosotros como individuos que vivimos
en sociedad, nos comprometamos a construir una Cultura de la Legalidad, como una estrategia
necesaria en contra de los fenómenos de delincuencia y de corrupción.
Creemos que, para refundar la cultura de la legalidad, es necesario abordar la situación actual
de nuestro país, en lo que se refiere a la corrupción, desde el aspecto de los principios
humanos y sobre los preceptos de los valores éticos.
1 Castellano Hernández, Eduardo de Jesús.- LA CULTURA DE LA LEGALIDAD COMO POLÍTICA PÚBLICA. HACIA UNA TEORÍA DEMOCRÁTICA DEL DERECHO POSITIVO MEXICANO. http://www.ordenjuridico.gob.mx/Noticias/NoticiasOJN/CulturaLegalidad/LA%20CULTURA%20DE%20LA%LEGALIDAD.pdf
Lo anterior implica una responsabilidad individual; tomar la decisión de no participar en la
cadena de corrupción, así como extender hacia los familiares, amigos, compañeros de trabajo,
vecinos y otros, el conocimiento de los daños que ocasiona la corrupción y de la importancia de
adoptar una cultura de la legalidad para generar un cambio positivo en nuestra comunidad.
El reto es un cambio en nuestro sistema de valores, tener conciencia de lo que es la corrupción,
de cómo nos afecta en nuestra vida cotidiana, y reconoce que en cada uno de nosotros esta la
posibilidad del cambo.