Transcript
Page 1: Fondazione Cariplo Annual Report

Para una fecha importante, un documento igualmente útil para profundizar en el papel

de la Hospitalité Notre Dame de Lourdes

En un DVD que podréis solicitar en la sede de la Hospitalité, se ha recogido una serie de datos y testimonios por parte de quienes viven desde dentro la Hospitalité

LA FINALIDAD DEL AMOR ES EL SERVICIOUn viaje a través de la historia de la Hospitalité Notre Dame de Lourdes de sus orígenes a nuestros días mirando hacia el futuro también

real

izad

o po

r MA

B.q

€ 10

Año 2010

Edición única

Page 2: Fondazione Cariplo Annual Report

LA FINALIDAD DEL AMOR ES

EL SERVICIOEdición única

Publicado porHospitalité Notre Dame de LourdesAccueil Jean-Paul II, B.P. 19765106 Lourdes Cedex

Responsable de la publicaciónAntoine Tierny

Realizado porHospitalité Notre Dame de Lourdes

Testos coordinados porPierre ChalvidanPierfrancesca GravianiDeborah Moleri

Proyecto GráficoMAB.q Roma-Milano-Parigi

CompaginaciónElena Colombi

RedacciónPierfrancesca GravianiDeborah MoleriTino Redaelli

AgradecimientosAl padre René Point por haber puesto a disposición su propio testimonio directo, sus escritos y gran parte de las imágenes utilizadas en esta monografía

FotografíasOsservatore Romano“Servir les malades à Lourdes, 1885-1985; 100 ans de Hospitalité”, de padre René Point, NDL ediciones

PrensaImprimerie Augé

s i t i o w e b

¡ La Hospitalité Notre Dame de Lourdes tiene un nuevo sitio web!

Concebido como un nuevo medio de comunicación, mediante el cual la asociación quiere acercarse a sus miembros y crear una mayor interacción,

el nuevo sitio tiene gráficos atractivos, es de simple consulta, disponible en seis idiomas (francés, italiano, español, inglés, alemán, neerlandés), para llegar

a los hospitaliers y simpatizantes en todo el mundo.

La Hospitalité Notre Dame de Lourdes tiene un nuevo sitio web. Conecta a la dirección www.hospitalite-lourdes.com para descubrir una gran cantitad de informaciónes útiles relativas a la asociación, a su historia, actividades, servicios, como participar en uno

“stage” y entrar en la gran familia de la Hospitalité Notre Dame de Lourdes.

Page 3: Fondazione Cariplo Annual Report

H o s p i t a l i t é 1

La publicación recorre los 125 años de la Hospitalité Notre Dame de Lourdes, fundada el 28 de enero de 1885 y permitirá a cada

uno de nosotros y a todos los que se interesan en nuestra hospitalité conocer su historia y la de los hombres y las mujeres que nos han precedido.

Rendimos homenaje a quienes, a través de sus escritos, nos han transmitido las informaciones necesarias para la redacción de esta obra, en concreto a monseñor Rebsomen, a los canónigos Courtin y Branthomme, a la señora Touvet, al padre Point y a los Santuarios de Lourdes y a sus numerosas publicaciones.

Gracias a todos los que han contribuído a la realización de la publicación, en concreto a Pierre Chalvidan, que ha tenido la ardua tarea de proyectarse en el futuro.Dos palabras destacan de esta obra: Acoger y Servir.

Con nuestro ejemplo, y como lo han hecho todos nuestros “Antepasados”, transmitimos estas palabras a nuestros sucesores para que la Hospitalité Notre Dame de Lourdes pueda seguir viviendo en el espíritu que desde siempre la caracteriza.

Antoine Tierny

INTRODUCCIÓN DEL PRESIDENTE DE LA HOSPITALITÉ

2 - Entrevista exclusivaUn testimonio de valor

6 - El nacimientoEl nacimiento de la asociaciónentre la buena voluntad y la perseverancia

12 - La Hospitalitése desarrolla – 1885 - 1914De las primeras presidencias a la Gran Guerra

18 - La asociación entre las dos guerras Un camino difícil

24 - La PosguerraHacia el centenario de las apariciones

32 - Peregrinación a Roma 2010

34 - La Hospitalité hace 100 años – 1960 - 1985Después del centenario de las apariciones la Hospitalitése prepara a vivir su siglo de vida 42 - Historia reciente - 1986-2008La Hospitalité en los últimos veinte años

48 - La Hospitalité hoyUna sólida realidad

56 - El futuro de la HospitalitéCiento veinticinco años y más...

60 - Lourdes y los PapasUna unión profunda

SUMARIO

Page 4: Fondazione Cariplo Annual Report

H o s p i t a l i t é2

El padre Point es el autor del libro “Servir los enfermos en Lourdes 1885-1985; 100 años de Hospitalité” editado por Ndl Editions y publicado en abril de

2009. Su obra ha sido definida por monseñor Jacques Perrier, obispo de Tarbes y Lourdes, “más que el simple estudio de un historiador, es la obra de un testigo” que ha sabido revivir un siglo de historia de una asociación fuera de lo común.

Efectivamente, el padre Point, nacido en Lourdes el 22 de abril de 1911, capellán de Notre Dame de Lourdes de 1947 a 1955 y responsable de la “Peregrinación de un día” de 1967 a 1984, ha vivido en primera persona gran parte de los hechos que han tenido como protagonista a la Hospitalité Notre Dame de Lourdes. Decididamente preciso y escrupuloso, no se ha limitado a contar su vivencia, sino que ha llevado a cabo numerosas investigaciones y estudios profundizando tanto sobre la asociación como sobre el santuario de Lourdes, hasta tocar el tema de las peregrinaciones en general. Su trabajo ha sido tan estimado que monseñor Jacques Perrier le ha pedido que trabaje en una continuación: la historia de la Hospitalité de 1985 a 2010, año que señalará un aniversario muy importante para la Hospitalité, sus 125 años. El padre Point ha aceptado de bueno grado este «trabajo bastante largo» aunque es consciente de que no podrá acabarlo para 2010 «esperando que el Señor le permita acabarlo».

Hemos preguntado a quien, sin la menor duda, podemos definir como el mayor experto de la Hospitalité Notre Dame de Lourdes, cuáles han sido las evoluciones más significativas dentro de la asociación y en sus voluntarios desde 1985 hasta hoy... «Me parece que la fecha más importante que hay que tener en cuenta en la historia moderna de la Hospitalité no es 1985, sino 1978, año de la firma del Acto constitucional (una especie de Estatuto de la asociación ndr) por parte del entonces obispo de Tarbes y Lourdes, monseñor Donze - sostiene el padre René Point. En aquel documento, concebido en el

Un testimonio de valorLa entrevista al padre René Point, el autor centenario de un volumen que recorre el primer siglo de vida de la asociación. El testimonio directo de quien ha vivido de cerca todas las transformaciones, los éxitos y las metas de la Hospitalité Notre Dame de Lourdes

Arriba, la cubierta del libro del padre René Point “Servir les malades à Lourdes, 1885 – 1985, 100 ans d’Hospitalité” (NDL ediciones), escrito para celebrar los primeros 100 años de la Hospitalité Notre Dame de Lourdes

en

tre

vis

ta e

xc

lus

iva

Page 5: Fondazione Cariplo Annual Report

H o s p i t a l i t é 3

“Servir a los enfermos en Lourdes 1885 - 1985, 100 años de la Hospitalité” es la obra que el padre Point ha publicado en el año dedicado a Bernadette

El presidente de la Hospitalité Notre Dame de Lourdes, Antoine Tierny, con el padre René Point, autor del libro que habla de los primeros 100 años de la Hospitalité, 1885 – 1985. Padre Point està recogiendo nuevos documentos sobre la Hospitalité, para escribir un segundo libro que habla de los últimos 25 años (hasta al 2010)

espíritu del Vaticano II, se introdujeron los límites de edad para los responsables de la asociación, también se sancionó la apertura del Consejo a miembros de nacionalidad no francesa y, sobre todo, la integración en la Hospitalité Notre Dame de Lourdes de todas las secciones de la parte femenina, como las enfermeras del hospital Saint-Frai y del Accueil Notre Dame».

«Desde ese momento en adelante, bajo el impulso fundamental del padre Joulia, la asociación ha realizado pasos de gigante, centrándose sobre todo en la acogida de los jóvenes y en su formación espiritual,

Padre René Point, misionero de la Inmaculada Concepción, sacerdote desde 1935, es el autor del libro que recorre los primeros cien años de la Hospitalité. Entre sus encargos recordamos también el servicio como capellán de Notre Dame de Lourdes de 1947 a 1955. Atendiendo la petición de un cofrade, el padre Henri Joulia, ex capellán general de la Hospitalité Notre Dame de Lourdes, el padre Point ha decidido emprender un trabajo laborioso para exponer la historia de la asociación a través de sus primeros cien años, sin esconder las dificultades que la Hospitalité ha encontrado durante este siglo. Entre las páginas del libro emerge una importante particularidad: el padre Point, a diferencia de un simple historiador, se revela, capítulo tras capítulo, la persona más indicada para presentarnos los diferentes hechos, gracias a su profundo vínculo con la Hospitalité y con la misma Lourdes, que es su ciudad nativa. Una vínculo intenso que dura desde hace casi un siglo, puesto que el autor se prepara a celebrar cien primaveras. Hecho que convierte este relato en un auténtico testimonio de una asociación

que no deja de «resplandecer y rejuvenecer en este principio del tercer milenio», como escribe François Vayne, director del “Pole Editions” de los Santuarios de Notre Dame de Lourdes, en su presentación.El libro se caracteriza por una narración de los hechos de tipo cronológico, en base a las diferentes presidencias que se han ido sucediendo en la historia de la asociación. Una excepción es el primer capítulo, que aporta preciosos elementos para contextualizar la historia de la Hospitalitè en sus primeros cien años de vida también desde un punto de vista político y social. Como conclusión del libro, una interesante sección dedicada a la “Hospitalité de las mujeres”, con preciosas informaciones sobre el nacimiento, organización y dirección del movimiento “hacia las mujeres”. El libro del padre Point se revela, pues, como una auténtica “biblia”, que se propone como útil referencia para todos aquellos que se interesan de cerca por la Hospitalité Notre Dame. Y, por qué no, también un medio para despertar y dar nueva savia vital a las vocaciones de los “pequeños obreros de María”.

en

tre

vis

ta e

xc

lus

iva

Page 6: Fondazione Cariplo Annual Report

H o s p i t a l i t é4

así como en la búsqueda de relaciones más cordiales entre la Hospitalité Notre Dame de Lourdes y las hospitalidades diocesanas”, precisa el padre Point.

Obviamente, la historia de la asociación y de los voluntarios ha evolucionado junto a un nuevo modo de organizar y de vivir las peregrinaciones... El padre René Point describe así este cambio de época: «Se ha pasado de peregrinaciones entendidas como grandes ceremonias, a peregrinaciones vistas como una comunión. Siempre hay un gran número de peregrinos aislados que vienen cotidianamente a Lourdes sin haberse organizado ni preparado espiritualmente.

De ello ha nacido la necesidad de la “peregrinación de un día”, que organicé personalmente en 1967 para facilitar el camino espiritual de estas personas».

Con el autor del libro sobre los cien años de la Hospitalité Notre Dame de Lourdes hemos hablado también de esa especie de “magia” ejercitada todavía hoy por la asociación, que no deja de reclutar a nuevos voluntarios, a pesar de la real crisis de valores que caracteriza a nuestra sociedad actual. ¿Cuál es el secreto de la Hospitalité? «Se trata de una atracción que notamos desde el nacimiento de la asociación. Servir a un enfermo, es servir a Cristo, de modo tal que

en

tre

vis

ta e

xc

lus

iva

Page 7: Fondazione Cariplo Annual Report

H o s p i t a l i t é 5

Padre Point, nacido el 22 Abril 1911 en la ciudad de Lourdes, fue capellán de Nuestra Señora de Lourdes (1947 – 1955) y responsable de la “Peregrinaciòn de un dìa” (1967 – 1984). Él ha vivido en primera persona una parte muy importante de la historia de la Hospitalité

El padre Point dice que la Hospitalité Notre Dame de Lourdes promueve el trabajo de los jovenes para las personas de edad avanzada y se interesa de las necesidades ajenas

pertenecer a la asociación se convierte en un honor, en un privilegio».

¿Qué se podría decir de la relación de la Hospitalité con los jóvenes? «Es una relación que ha cambiado mucho -explica el padre Point-. Efectivamente, desde la aplicación del Acto constitucional, los jóvenes, que hasta a entonces eran solamente camilleros, pueden ahora seguir una formación que les transmita las ganas de empeñarse mayormente en la asociación. Y las relaciones más estrechas entre las hospitalidades diocesanas y la Hospitalité Notre Dame de Lourdes dejan vislumbrar un futuro aún mejor desde este punto de vista».

Leyendo el libro sobre los cien años de la asociación se nota, desde la primera a la última página, una especie de fidelidad de todos los voluntarios a las intuiciones y a los objetivos originarios establecidos en 1885. Es muy raro ver una constancia tal, no sólo en una asociación sino en el mundo que nos rodea en general

«Para la Hospitalité Notre Dame de Lourdes, el padre Sempé habría podido pensar en una simple asociación, pero ha elegido hacer de ella una cofradía para darle la marca y la estabilidad de una obra de la Iglesia. Ha querido que los miembros de la asociación se empeñaran de manera más profunda en una vida cristiana más auténtica, teniendo como principal objetivo el servicio de los enfermos que van a la Gruta de Lourdes. Los hospitaliers no se conformarán nunca con hacer curas materiales, sino que se preocuparán, también y sobre todo, por el bien espiritual de las almas».

en

tre

vis

ta e

xc

lus

iva

Page 8: Fondazione Cariplo Annual Report

E L N A C I M I E N T O

H o s p i t a l i t é6

El nacimiento de la asociación entre buena voluntad y perseverancia

La HospitalitéNotre Dame de Lourdes

que conocemos hoy toma forma en enero

de 1885, pero la vocación y el empeño de los voluntarios que

la han fundado se remonta a las primeras

peregrinaciones de 1864

Se podría iniciar fácilmente esta revista, que rastrea y celebra la larga historia de la Hospitalité Notre Dame de Lourdes, con un clásico “érase una vez…”. Un poco

fabuloso como inicio, pero el recorrido de la asociación, que cumple 125 años en enero de 2010, se puede definir fácilmente como un recorrido extraordinario.

Pensemos brevemente en la situación política y social de los años 1850-1885, para entender bien las circunstancias en las que fue fundada la Hospitalité. Entre las fechas clave destaca indudablemente el 2 de diciembre de 1851, en que, gracias a un golpe de estado, Luis Napoleón Bonaparte pasará de “simple” Príncipe-Presidente a Emperador de los franceses. Un golpe de estado aplaudido por los católicos que sostenían a Napoleón III desde abril de 1850 cuando, derrotando a los republicanos de Garibaldi, logró llevar de nuevo a Roma al papa Pío IX.Un amor, entre Emperador e Iglesia, que duró una decena de años. Hasta que, en 1860, Napoleón III aleja a los católicos rechazando firmemente que los Estados Pontificios se unan al nuevo Reino de Italia.

Pasan otros diez años, es 1870, cuando el 4 de septiembre, con ocasión de la batalla de Sédan, los prusianos capturan a Napoleón y en París la muchedumbre invade el Palais-Bourbon, sede de la Legislatura, el año que declara el fin del imperio y proclama la Tercera República.

Mientras Francia está en pleno período napoleónico, el 8 de diciembre de 1854 en el Vaticano Pío IX proclama el dogma de la Inmaculada Concepción, como conclusión de una reflexión teológica que había durado algunos siglos. Algunos años más tarde, precisamente el 11 de febrero de 1858, en un pequeño pueblo en las laderas de los Pirineos, una joven niña, sencilla y pobre, asiste a la que será la primera aparición de la Virgen. «Porque soy la más pobre y la más ignorante es por lo que la Santa Virgen me ha elegido» dirá más tarde Bernadette. Se suceden después una serie de apariciones (18 en total) que finalizan el

Page 9: Fondazione Cariplo Annual Report

E L N A C I M I E N T O

7

La plaza con el nombre de monseñor Laurence y la “subida de los padres” hacia la basílica

Los hospitaliers y los sacerdotes ayudan a los peregrinos y a los enfermos a subir en el tren

Page 10: Fondazione Cariplo Annual Report

H o s p i t a l i t é8

E L N A C I M I E N T O

mes de julio. A lo largo de estas apariciones la Virgen le confía a Bernadette lo que se convertirá en el Mensaje de Lourdes. El 25 de marzo, en la decimosexta aparición, la Virgen se presenta a la niña diciendo: “Soy la Inmaculada Concepción”.Mientras tanto, monseñor Bertrand-Sévère Laurence, obispo de Tarbes había pronunciado algunas reservas acerca de estas apariciones de Lourdes, declarando que quería esperar las conclusiones de la comisión de investigación, que él mismo había formado, antes de confirmar estos acontecimientos. Será sólo el 18 de enero de 1862 cuando el obispo publicará una carta pastoral en la que confirma su apoyo a las conclusiones positivas de la comisión, declarando que la Inmaculada Madre de Dios se le ha aparecido realmente a Bernadette Soubirous en la Gruta de Massabielle. La historia de la Hospitalté comienza exactamente dos años después, el 4 de abril de 1864, con ocasión de la primera ceremonia oficial relacionada con las apariciones de Lourdes: la bendición de la imagen de la Gruta. Sólo tres meses después, en el mes de julio, fue organizada la primera peregrinación local hacia los lugares elegidos por la Virgen. A Lourdes se puede llegar en tren en 1866, haciendo así más fácil la llegada de los peregrinos de la región. Trenes especiales comienzan a viajar entre Bayonne y los lugares marianos, con no menos de 700 peregrinos a bordo. Ahora el movimiento está ya en marcha y empieza a extenderse.

En 1872 el abad Victor Chocarne comienza la organización de una «gran manifestación de fe y esperanza de Francia», todavía herida por la derrota de 1870. Con la ayuda de una ferviente católica como madame de Blic no es difícil alertar a todas las diócesis francesas, los santuarios de la Virgen y a la prensa. Entre el 5 y el 8 de octubre de 1872 son ya 25.000 los peregrinos que, procedentes de todos los rincones del país, acuden a Lourdes. Notre Dame de Lourdes se convierte así en el santuario mariano más grande de Francia. Precisamente por esto, 1872 es definido «el año del gran desarrollo» de la localidad mariana, que en doce meses registra la afluencia de 119.000 peregrinos llegados a Lourdes desde las riberas del Goronna, desde las cuencas del Loira y del Ródano, desde París y también desde las costas del Mediterráneo.

En julio de 1873 el padre Picard, director del Consejo General de las Peregrinaciones y uno de los fundadores de la Asociación Notre Dame de Salut, que el año de antes había organizado una peregrinación nacional a La Salette, repite la experiencia en Lourdes, con un total de 492 peregrinos. A finales de ese año, los registros de la compañía de los “Chemins de Fer du Midi”, certifican que Lourdes ha recibido 140.000 peregrinos durante el año y que, por primera vez,

En 1866, la línea Burdeos - Tarbes se prolonga hasta Lourdes, con numerosas ventajas para enfermos y peregrinos

Page 11: Fondazione Cariplo Annual Report

E L N A C I M I E N T O

también ha habido fieles procedentes del extranjero, en especial de España y de Bélgica.

Dos acontecimientos principales marcan 1874: por un lado, 14 personas enfermas y pobres participan a la peregrinación nacional y, por otro, las “Hijas de Notre Dame de los Dolores”, fundadas en Tarbes para acoger a los ancianos, ponen la primera piedra del hospital de Notre Dame de los Dolores y provisionalmente abren el chalet Saint-Joseph en la Villa Sainte-Marguerite en la avenue du Paradis que costea el Garonna en Lourdes. El hospital debía estar destinado a las personas ancianas y pobres de la región, pero también a los peregrinos que no tenían suficientes disponibilidades económicas para permitirse pagar un alojamiento. En este período los enfermos siempre estaban acompañados por sus familias, se alojaban en los hoteles y estaban a cargo de sus familiares. Ya entonces podían “lavarse en la fuente”, puesto que desde 1862 había sido construida una cabina junto a la Gruta para “el baño” de los enfermos.

En el período 1875-1879 el número de peregrinos aumenta cada vez más, al igual que aumenta el de enfermos y pobres, que desde 1879 son transportados gratuitamente gracias a la

Los peregrinos esperan la llegada de trenes blancos

Testimonio sacado de los Anales de Notre Dame de Lourdes

sobre las primeras peregrinaciones de 1879

«Por fin, después de dos días de pesado viaje, llegamos a Lourdes. Los vagones de los enfermos se visitan con temor. Primer y conmovedor prodigio: ¡no hay ningún muerto! Algunos han recibido la extrema unción durante el viaje, pero todavía están todos, llenos de confianza y de alegría.

Poco después los enfermos estaban ya delante de la Gruta o en las Piscinas, y habían iniciado la gran oración. Nunca el mundo podrá decir que ha asistido a un

espectáculo más conmovedor. Durante tres días y tres noches, centenares, miles de cristianos reunidos alrededor de la Gruta y de las Piscinas, de rodillas, con los brazos cruzados, besando la tierra al mismo tiempo, recitando los rosarios y las letanías, cantando los himnos, sin parar, perseverando en la oración y en las lágrimas mientras sus hermanos transportaban a los enfermos y los bañaban en las Piscinas.Multitudes venían de lejos para contemplar este extraordinario

espectáculo de la oración. Los indiferentes estaban conmovidos, se arrodillaban con las lágrimas en los ojos y empezaban ellos también a rezar.La imagen de la Virgen Inmaculada era acariciada numerosas veces y con amor. Los que han asistido a este espectáculo no lo olvidarán nunca. Ya a las 6 de la mañana la explanada delante de la Gruta empezaba a llenarse. En la Gruta, con la presencia de los enfermos, todos alababan solemnemente al Santísimo Sacramento».

Page 12: Fondazione Cariplo Annual Report

H o s p i t a l i t é10

E L N A C I M I E N T O

obra de Notre Dame de Salut. Todo ello no es, sin embargo, suficiente para acompañar y cuidar a los enfermos. Al principio todo se deja a la improvisación, a la buena voluntad y a la devoción de religiosos, estudiantes y también de monjas que cuidan, incluso desde el punto de vista sanitario, a estas personas no autosuficientes. Poco a poco a éstos se suman nuevos voluntarios y simples curiosos, aunque el “personal” y las estructuras dedicadas a la hospitalidad se demuestran a menudo insuficientes para satisfacer el cada vez mayor número de peregrinos. A menudo para el transporte de los enfermos se improvisan medios de emergencia. Frecuentemente las camillas las llevan “en brazos” los voluntarios, desde la estación hasta la Gruta y el alojamiento. Cuando es posible, los enfermos se acomodan sobre carritos empujados a mano o remolcados por caballos. Los imprevistos continúan también delante de la Gruta, donde se instalan camillas, sillas y colchones para los enfermos, pero todo de manera extremadamente provisional y nada funcional. Es precisamente en este contexto en el que, gracias a la buena voluntad de personajes como el conde Etienne de Beauchamp, monsieur l’Espinois, Combette du Luc y el padre Vincent de Paul Bailly, se trata de reclutar y organizar de la mejor manera posible el cada vez mayor número de voluntarios. Así toma forma el concepto de Hospitalité.

Un primer "Comité Hospitalier" se forma en Toulouse bajo la presidencia de Combette du Luc y, en agosto de 1881, la víspera de la Peregrinación Nacional, este Comité organiza su primera reunión. Sus miembros se comprometen a servir a los enfermos en Lourdes durante toda la duración de la Peregrinación Nacional. Cuando los enfermos empiezan a llegar, cada hospitalier ya está listo en su posición, el marqués Laurens Castelet ha organizado,

1848-1849 ITALIAPrimera guerra de independencia italiana

1851 FRANCIAEn Francia golpe de estado de Luis Bonaparte (Napoleón III)

1859-1860 ITALIASegunda guerra de independencia italiana contra Austria

1860 ITALIAGaribaldi y la expedición de los “Mil”

1861 ITALIAProclamación del Reino de Italia

1864 INGLATERRALondres, creación de la Primera Internacional de los Trabajadores fundada por iniciativa del filósofo Karl Marx

1866 ITALIAGuerra de Prusia e Italia contra Austria (tercera guerra de independencia italiana): anexión de Véneto a Italia

El patio del hospital Notre Dame des Douleurs (Saint-Frai).Los servicios de la Hospitalité Notre Dame de Lourdes son muy importantes para la asistencia material en Lourdes

la ayuda a los enfermos

CUáNDO Y QUé

Page 13: Fondazione Cariplo Annual Report

E L N A C I M I E N T O

en efecto, tres equipos de camilleros: el del hospital, el de la Gruta y el de las Piscinas. Los jefes de cada equipo han sido elegidos en el grupo del "Comité Hospitalier" y tienen la tarea de formar a los jóvenes voluntarios. Ya desde el primer año los servicios principales están organizados: el transporte desde la estación hasta los alojamientos de los enfermos, el transporte cotidiano de los enfermos hacia la Gruta y las Piscinas, una serie de enfermeros a su disposición, una especie de servicio de seguridad en la Gruta y en las Piscinas y, por último, los baños en las Piscinas asegurados (los hombres acompañados por los hospitaliers y las mujeres por las enfermeras).Bajo la presidencia del conde de Combette du Luc la organización de la Hospitalité de Lourdes se perfecciona. En 1882, los hospitaliers dispuestos para acoger a los peregrinos son 300. Los huéspedes empiezan a llegar en todas las épocas del año y los hospitaliers por tanto, tienen que reorganizarse para asegurar cierta calidad de servicios de manera continuada: entonces se forma el “Comité permanente de la Hospitalité Notre Dame de Lourdes.” Habrá que esperar, sin embargo, al año 1885 para ver el nacimiento de la auténtica Hospitalitè Notre Dame de Lourdes. Tras un período de unos dos años de organización, el 25 de enero de 1885 monseñor Billère erige canónicamente la cofradía de Notre Dame de Lourdes en la capilla de la Cripta y firma, el mismo día en Tarbes, su estatuto. La Hospitalité Notre Dame de Lourdes consigue así el reconocimiento oficial de la Iglesia.

Fundación de la Hospitalité

Notre Dame de Lourdes

«Bajo la dirección de los Padres de la Inmaculada Concepción, la Hospitalité de Notre Dame de Lourdes ofrece, durante todo el año, a los enfermos que afluyen a la Gruta y a las Piscinas, los mismos servicios, las mismas atenciones, que la Hospitalité de Notre Dame de Salut presta a los enfermos durante la Peregrinación Nacional. El obispo de Tarbes, más conmovido que cualquier otro por la amplitud y la belleza de esta obra, la ha elevado canónicamente al rango de cofradía».

Tomado del número de septiembre de 1885de los "Annales de Notre Dame de Lourdes"

1870 EUROPAGuerra franco-prusiana; anexión de Roma a Italia y su proclamación como capital

1871 FRANCIAMotín revolucionario de la “Comuna” de París; proclamación del imperio alemán

1873 EUROPALiga de los Tres Emperadores entre Austria-Hungría, Alemania, Rusia

1878 ALEMANIACongreso de Berlín, distribución de la península balcánica

1882 EUROPAEstipulación de la Triple Alianza entre Italia, Alemania y Austria en función antifrancesa

Page 14: Fondazione Cariplo Annual Report

L A H O S P I TA L I T é S E D E S A R R O L L A – 1 8 8 5 - 1 9 1 4

H o s p i t a l i t é12

Los años que preceden al estallido de la Primera Guerra Mundial constituyen para la Hospitalité Notre Dame de Lourdes un período bastante tormentoso, a causa de

múltiples razones históricas y políticas. Sin olvidar la no sencilla relación que se creará pronto con la Hospitalité Notre Dame de Salut, de la que la asociación se va distanciando gradualmente hasta conquistar una autonomía propia.

Estamos, por lo tanto, frente a una delicada fase de paso y transición que, en todo caso, no podrá sino confirmar la fe y la vocación de los miembros de la Hospitalité. El año 1885 señala el inicio de estos primeros contrastes. A diferencia del pasado, el Comité de Acogida, que se ocupa de asistir a los peregrinos y a los enfermos que llegan a la ciudad mariana, por primera vez lo organiza la Hospitalité Notre Dame de Lourdes. Los miembros y los responsables, y entre ellos el mismo presidente, pertenecen enteramente a la Hospitalité Notre Dame de Salut, pero las incomprensiones en el plano organizativo se superan gracias al extraordinario trabajo llevado a cabo por los hospitaliers, que demuestran una actitud irreprochable y muchas cualidades, alabadas en un informe del mismo año escrito por el vizconde de Pouy, secretario de la Hospitalité: abnegación, devoción, precisión y empeño en el servicio, pruebas de valor que disipan toda la desconfianza inicial. El vizconde añade que, gracias a su sabiduría, moderación y obediencia a las disposiciones, los hospitaliers han disipado completamente cualquier prejuicio. Sus servicios abarcan los diferentes ámbitos y lugares, desde la Gruta hasta las Piscinas, con especial referencia al área de las mujeres, cuidadosamente vigilada por una directora «precisa y severa, que sabe cómo mantener lejos a los profanos».

A pesar del óptimo trabajo realizado por los hospitaliers, no faltan problemas de naturaleza política. Por ejemplo, en un informe dirigido al padre Sempé el 12 de octubre de 1885, el padre Burosse critica a de Combettes de querer manipular la Hospitalité Notre Dame de Salut. En cambio, pide que se aplique perfectamente el ordenamiento de la asociación «sin compromisos, como se debe, a la comunidad, a los amigos, a los peregrinos, a Notre Dame». Estas palabras se revelan premonitorias de un momento fundamental de la historia de la Hospitalité, ahora más que nunca es necesaria una propia autonomía y libertad de acción. Es necesario escindir la unión con la Hospitalité Notre Dame de Salut, como enunció el

De las primeras presidenciasa la Gran Guerra

La Hospitalité Notre Dame de Lourdes

se convierte en un punto de referencia importante para miles de peregrinos.

Con el prestigioso reconocimiento

del Vaticano

Page 15: Fondazione Cariplo Annual Report

L A H O S P I TA L I T é S E D E S A R R O L L A – 1 8 8 5 - 1 9 1 4

H o s p i t a l i t é 13

El break con dos caballos pegados

delante de la oficina de la Hospitalité

La “Popote” de los hospitaliers fue creada en 1895 por la Hospitalité para los camilleros que, ocupados en ayudar a los enfermos y peregrinos, no tenían tiempo de ir a comer a la ciudad

Page 16: Fondazione Cariplo Annual Report

H o s p i t a l i t é14

L A H O S P I TA L I T é S E D E S A R R O L L A – 1 8 8 5 - 1 9 1 4

padre Burosse el 5 de octubre de 1885 en una reunión crucial: «A partir del 8 de octubre de 1885, nuestra organización se fundamentará solamente sobre sus propias fuerzas, y entrará en vigencia a partir de la Peregrinación Nacional, ejerciendo todas las anteriores funciones de la Hospitalité Notre Dame de Salut. Sin esconder todas las dificultades que me esperan... pero cuento con vuestra piedad, caridad y con la protección de Dios. A él le pido la luz, la fuerza, la sabiduría, la firmeza necesaria para llevar a cabo la obra de Notre Dame de Lourdes con éxito». Todo ello manifestando una especial gratitud por la realidad de la Hospitalité Notre Dame de Salut, a la que todos se sentirán siempre profundamente ligados.

Las dificultades anticipadas por el padre Burosse en su discurso no tardan en manifestarse, a causa de costumbres consolidadas y privilegios existentes, por lo que se habla también de una manifestación de protesta, sin facilitar sin embargo ulteriores aclaraciones. A pesar de todo, reina un clima de optimismo. A este propósito el vizconde de Pouy escribe: «El primer núcleo de la asociación ha terminado, pues, su servicio; pero los hombres que lo componen permanecen y mantienen su papel, se muestran siempre presentes a la llamada del Padre». Una situación, pues, complicada, en la que de Combettes se encuentra pronto desempeñando al mismo tiempo dos cargos ahora ya incompatibles. A pesar de sus iniciales dudas respecto a la creación de una realidad paralela a la Hospitalité Notre Dame de Salut, a cosa hecha acepta respetuosamente y sin problemas las disposiciones del padre Sempé y de los misioneros, y se dispone también a dirigir la Hospitalité Notre Dame de Lourdes. Su difícil tarea, sin embargo, está destinada a acabar prematuramente: de Combettes muere de repente el 8 de marzo de 1886 a la edad de 45 años.

La inesperada desaparición de de Combettes constituye una significativa pérdida para la asociación, que se ve privada de un presidente de incontestables calidades humanas. A de Combettes le sucede en 1886 el vizconde de Pouy, en el pasado a su lado en calidad de vicedirector. Sólo queda pensar en la Hospitalité Notre Dame de Salut: ¿hay que designar a un único presidente para ambas realidades, o por el contrario, favorecer una completa escisión nombrando a dos figuras diferentes? El marqués de Laurens Castelet se hace portavoz de la primera tendencia en una carta al padre Sempè. Un gesto inútil, puesto que en el mayo siguiente Fernand de Carriére es nombrado presidente de la Hospitalité Notre Dame de Salut.

1886 es un año difícil. La asociación se encuentra por primera vez volando con sus propias alas, gestionado la asistencia de los 700 enfermos que llegan a Lourdes con la Peregrinación Nacional. Una situación llevada de manera brillante por la

experiencia del nuevo presidente: a finales del año la asociación cuenta con 84 hospitaliers y 50 nuevas solicitudes de admisión. A esta meta se suman dos importantes acontecimientos, la constitución de la Hospitalité des Dames, la rama femenina de la asociación, y la primera procesión del Santísimo Sacramento, una manifestación destinada a convertirse en una cita irrenunciable para muchos peregrinos.

El año siguiente, 1887, la Hospitalité sigue incrementando su propio radio de acción con nuevos voluntarios (129 titulares, 38 asistentes en la rama masculina, 84 titulares y 52 asistentes en la rama femenina). Con ocasión del jubileo sacerdotal de aquel año, se realizan muchas peregrinaciones a Roma, y el presidente de Pouy, durante una en concreto, tiene la ocasión de encontrar al papa León XIII, quien alaba sus grandes calidades. Una alegría desafortunadamente de breve duración: el 25 de agosto de 1888, el día después de la Peregrinación Nacional, la muerte lo sorprende de repente a la edad de 54 años, mientras se encuentra a pocos pasos de la Gruta. El período incluido entre 1888 y 1891 ve la presidencia del barón Dunot de Saint Maclou, elegido el 28 de agosto para dirigir la Hospitalité. Médico y apasionado de filosofía, funda el “Bureau des Constatations médicales”, para examinar de modo escrupuloso los diferentes casos de curaciones aparentemente inexplicables que tienen lugar en la ciudad mariana.

El padre Burosse, director de la Hospitalité Notre Dame de Lourdes de 1885 a 1914

Page 17: Fondazione Cariplo Annual Report

H o s p i t a l i t é 15

L A H O S P I TA L I T é S E D E S A R R O L L A – 1 8 8 5 - 1 9 1 4

El 1889 es un año fundamental para la asociación y para la ciudad de Lourdes, con la inauguración de la Iglesia del Rosario en los días 6, 7 y 8 de agosto. Esta gran fiesta también se convierte en la ocasión para renovar las procesiones del Santísimo Sacramento y las bendiciones de los enfermos. Sin embargo, la alegría cede pronto el paso a un nuevo luto para la Hospitalité, con la desaparición del padre Rémi Sempé, superior general de los Misioneros. El barón Dunot de Saint Maclou muere en 1892, año en que se inaugura la larga presidencia del barón de Malet, miembro titular de la asociación y consejero durante muchos años. Un empeño de tan gran alcance que el cardenal Lécot, arzobispo de Burdeos, su ciudad natal, en su tiempo lo define “el guardián de la Gruta”. En los años de su presidencia tienen lugar muchos hechos importantes para la Hospitalité. En 1895 se instituye una nueva figura para los hospitaliers, llamada “popote”, con la tarea de alimentar a los voluntarios en servicio en la ciudad que no tienen a menudo tiempo de almorzar. Lourdes incrementa su vocación a la internacionalidad, con la llegada de los primeros peregrinos organizados por Bélgica el 27 abril de 1897.

1899 es un año crucial para el trabajo de la asociación, con la institución, del 17 al 21 de abril, de la primera Peregrinación Nacional, que ve confluir en Lourdes a 40.000 peregrinos. Un acontecimiento de extraordinaria importancia, que se hará cada vez más importante en el calendario de las citas de la localidad mariana, como testimonia en 1901 la afluencia de 60.000 fieles. Ante el sensible aumento de enfermos y peregrinos

(980 en la Peregrinación Nacional y 3.678 en las demás ocasiones), junto al crecimiento constante de los miembros de la Hospitalité, monseñor Schoepfer decide instituir el nuevo cargo de vicedirector, papel ejercido por Emile Christophe. Gran realce además se le da al trabajo de la rama femenina de la asociación, como se lee en los anales, en los que se expresa gratitud para las hospitaliers que «no contentas de ocuparse de los enfermos, quieren además entregar su tiempo y sus cuidados a nuestros santuarios».

Los días 5, 6 y 7 octubre de 1901 marcan un importante acontecimiento para la ciudad mariana, la consagración de la Iglesia del Rosario y de los 15 altares laterales por parte de monseñor Langénieux. En 1904 se celebra el cincuentenario de la institución del dogma de la Inmaculada Concepción. En el mes de octubre del mismo año los hospitaliers organizan una peregrinación propia. Mientras tanto, en el año 1903 muere el padre Picard, superior general de los Agustinos de la Asunción y promotor de las Peregrinaciones Nacionales de Lourdes y Jerusalén. Igualmente desagradable es, en el mismo año, la desmembración de los Misioneros de la Inmaculada Concepción, consecuencia de la ley contra las Congregaciones religiosas. Esta disposición afecta de modo particular al padre Burosse, director de la Hospitalité, nombrado canónigo en 1903 por el obispo y enviado como vicario a Auriébat, a 54 kilómetros de Lourdes, a los confines opuestos de la diócesis. Un nuevo cargo que, sin embargo, hace dificultoso su ministerio en la Hospitalité. Dos años después, sin embargo, vuelve a

1887 EUROPANobel inventa la dinamita

1888 FRANCIA Inauguración de la Torre Eiffel

1889 EUROPASe celebra la primera fiesta de los trabajadores

1892 ITALIA Inicia la época de Giolitti

1895 ITALIAGuillermo Marconi inventa y patenta la radio

1896 MUNDODe Coubertin repropone las Olimpiadas, que de ahora en adelante se celebrarán cada cuatro años

1896 ITALIAEn Etiopía tiene lugar la matanza de Adua, que marca la derrota de la campaña de África

1901 INGLATERRAMuere la reina Victoria

1904 FRANCIAAdhesión a la Triple Alianza con Inglaterra y Rusia

1909 ITALIANacimiento del Futurismo, con el cartel programático de Filippo Tommaso Marinetti

1912 MUNDOHundimiento del trasatlántico Titanic

CUáNDO Y QUé

Page 18: Fondazione Cariplo Annual Report

H o s p i t a l i t é16

L A H O S P I TA L I T é S E D E S A R R O L L A – 1 8 8 5 - 1 9 1 4

Lourdes como capellán del orfanato de las Monjas de Nevers, manteniendo su papel al servicio de la asociación hasta su muerte, que tuvo lugar en 1914. El barón de Malet en 1905, ante el agravamiento de sus condiciones de salud, presenta su dimisión, y es nombrado presidente honorario, cargo que ejerce hasta su muerte, que tiene lugar el año siguiente. Su presidencia, que ha durado 13 años, es una de las más significativas para la historia de la asociación. Para entender la importancia de este desarrollo exponencial basta mirar las cifras: el número de “trenes blancos” pasa de 179 a 318, y de 1554 a 5502 los peregrinos que llegan a lo largo del año. A estas cifras se suma el incremento de los hospitaliers, que pasan de 84 a 301, mientras que la asociación sigue haciendo frente a la organización de un número cada vez mayor de acontecimientos. En el lugar del dimisionario barón de Malet, se nombra presidente al vice Emile Christophe, que ejerce tal cargo desde 1905 hasta 1922, en uno de los períodos más atormentados y problemáticos de la historia, acompañando a la asociación durante la Primera Guerra Mundial y principios de la posguerra.

En 1906 la Hospitalité tiene la importante tarea de acoger 240 trenes de peregrinos y 6.000 enfermos. Un número en constante aumento también gracias al desarrollo de los transportes, en concreto de los trenes con vagón-cama, preparados con mayor consideración para el transporte y la asistencia de los enfermos, con la presencia de médicos y enfermeros que les pueden ofrecer los cuidados necesarios durante el largo viaje.

1906 ve surgir algunas importantes cuestiones de naturaleza política. En efecto, a causa de la aplicación de la ley sobre la separación entre Estado e Iglesia, el gobierno francés secuestra la Gruta de Lourdes. Por consejo de monseñor Schoepfer, Christophe y de Beauchamp actúan de modo que consiguen del Estado una cesión de los terrenos en concepto de arriendo, lo cual se lleva a cabo de acuerdo con Clemenceau, entonces presidente del Consejo. La situación sólo se soluciona de manera definitiva cuatro años más tarde, con un decreto oficial del 9 de abril, según el cual los bienes del Santuario de Notre Dame de Lourdes se atribuyen a las Villas y al Bureau de Bienfaisance. En 1908 Christophe puede contar con el apoyo del conde Etienne de Beauchamp, nombrado vicedirector para la preparación de los grandes acontecimientos que se prospectan para el año siguiente, con el cincuentenario de las apariciones en la Gruta.

Para tal ocasión, el papa Pío X anuncia la presencia a Lourdes del cardenal Lécot, arzobispo de Burdeos, en calidad de delegado suyo. Mientras tanto, el número de peregrinos que se dirigen a Lourdes sigue aumentando: los trenes pasan de 244 a 602 y los enfermos de 5.618 a 9.290. La Peregrinación Nacional se presenta como uno de los acontecimientos más destacados de

Vista de las Piscinas de 1891. Las Piscinas, situadas a la izquierda

de la Gruta, figuran entre los lugares más importantes de Lourdes

Page 19: Fondazione Cariplo Annual Report

H o s p i t a l i t é 17

L A H O S P I TA L I T é S E D E S A R R O L L A – 1 8 8 5 - 1 9 1 4

aquel año, con más de 70.000 presentes. En 1910 la Hospitalité alcanza una meta importante: los primeros veinticinco años de actividad. El 6 de abril, el papa Pío X recibe a la Hospitalité, conducida a Roma por monseñor Schoepfer. En su presentación el obispo explica que en 25 años de actividad, la asociación ha acogido en Lourdes a más de 80.000 enfermos, gracias al empeño de 631 voluntarios.

La gran fiesta jubilar de la Hospitalité, programada para el 8 de septiembre de 1910, con la bendición del Papa, para los voluntarios, los enfermos y sus familias es el acontecimiento culminante del año. Por tal ocasión, más de 420 hospitaliers se reúnen y salen en procesión hacia la Basílica llevando su bandera, acontecimiento que también se repite en la fiesta del Santísimo Sacramento. Las fiestas jubilares de ese año culminan con la constitución de la “Cofradía espiritual de los hospitaliers de Notre Dame de Lourdes”. A esto se añaden algunas obras de mejora, entre las que se encuentran la constitución de un Asilo de los Peregrinos nuevo y más grande en 1913 y el traslado de la sede de la asociación, al tercer pórtico de las escaleras del Rosario.

Enfermos y camilleros de la Hospitalité Notre Dame

de Lourdes en el patio del hospital Saint-Frai, a

finales del siglo XIX, bajo la presidencia del barón Dunot de Saint Maclou

Enfermeras de la Peregrinación Nacional delante del tren blanco

en la estación de Lourdes.La peregrinación nacional es un gran acontecimiento a la que participaron

más de 40.000 peregrinos en 1899

Page 20: Fondazione Cariplo Annual Report

L A A S O C I A C I ó N E N T R E L A S D O S G U E R R A S

H o s p i t a l i t é18

Las guerras mundiales, con su estela de muerte

y destrucción, no perdonan a la Hospitalité Notre Dame de Lourdes.

Pero entre dolorosas pérdidas y emergencias

siempre hay espacio para la esperanza

El final de la Belle Epoque abre nuevos e importantes escenarios políticos y sociales, mientras que el mundo se prepara para estar unido tras las atrocidades de dos

conflictos inéditos y sangrientos. Un clima de cambio en el que Lourdes se convierte en centro neurálgico, lugar de acogida para refugiados y heridos. Todo ello bajo una luz completamente nueva: el mensaje de la Virgen a Bernadette se transforma en una plegaria de paz y en un grito de esperanza que conmueve todas las partes del globo, a pesar de todo y más allá de cualquier estrategia geopolítica que la guerra conlleva.

El año1914 marca la repentina y dolorosa desaparición del padre Burosse, que muere el 25 de enero en Maubourguet, mientras se encuentra de visita a la cabecera de su gran amigo monseñor Gardey, cura de Santa Clotilde y vicario general de París. El padre Burosse a lo largo de su vida ha seguido con dedicación el recorrido de la Hospitalité desde su nacimiento y durante 29 años, a través de sus diferentes presidencias ha dado consejos y ha tomado decisiones para conservar el espíritu más auténtico de la asociación. Monseñor Schoepfer nombra inmediatamente su sucesor como guía espiritual de la Hospitalité Notre Dame de Lourdes: se trata del padre Balette, capellán del Santuario y redactor de los Anales de 1909. El 11 de febrero de 1914 el padre Balette pronuncia su acto de consagración en la Gruta de Massabielle y recibe de las manos de su obispo la medalla de la Hospitalité. Después, tras el canto del Magnificat, celebra el Santo Sacrificio de la Misa, rodeado de una quincena de hospitalarios y de un conspicuo número de voluntarias.

Del 22 al 26 julio del mismo año se programa, por segunda vez en quince años, el Congreso Eucarístico Internacional. Para entenderlo basta repasar la lista de los miembros “del comité local del Congreso Eucarístico”, entre los que destaca la presencia de Emile Christophe y del conde de Beauchamp. Además, figuran en la lista el padre Balette con su doble papel de redactor de los Anales y director de la Hospitalité, de Boysson, el presidente de la Hospitalité Notre Dame de Salut y otros cinco hospitalarios entre los que se encuentra el secretario general Emile Boulet. El Congreso Eucarístico está presidiado por el cardenal Granito

Un difícil camino

Page 21: Fondazione Cariplo Annual Report

H o s p i t a l i t é 19

Pignatelli di Belmonte, muy unido al Papa, y la procesión final se lleva a cabo por las calles de la ciudad mariana, acompañada por una multitud de 100.000 personas. La última bendición se imparte a los fieles desde un altar sobreelevado en el atrio de la Basílica del Rosario. El servicio de orden para este acto se encomienda a los voluntarios de la Hospitalité, bajo la dirección de Christophe, de Beauchamp y de Armand Mérillon. Para la Hospitalité, representa una ardua tarea, sobre todo a causa de la inmensa multitud de fieles, pero todo se desarrolla sin el más mínimo incidente. Como reconocimiento del gran trabajo realizado (empeño prodigado), el Papa Pío X decide otorgarle el prestigioso reconocimiento de comandante de la Orden de San Gregorio.

A esto se añaden importantes aprobaciones y elogios unánimes por la obra de los hospitalarios. Por ejemplo, el cardenal Andrieu, arzobispo de Burdeos, los compara con la orden de los hospitalarios militares, que asisten a los peregrinos en Tierra Santa. Entre sus palabras se recuerda un caluroso augurio: «Bajo la protección de la Virgen, aprenden a rezar, aprenden los principios de la devoción y la obediencia. ¡Que la Eucaristía se convierta en el alimento de su caridad!». El Congreso Eucarístico se lleva a cabo en un período crucial de la historia. Las hostilidades inician el 4 de agosto. La Primera Guerra mundial no perdona a Lourdes, que se encuentra sin embargo en una posición geográficamente crucial en los Pirineos y se presenta como posible objetivo. Se puede imaginar lo compleja que es la situación en la ciudad mariana. Los viajes de peregrinos y enfermos, como es obvio, se reducen drásticamente, pero el trabajo de hospitalarios y voluntarios no se detiene. Hay que gestionar un cuadro de emergencia, con pocos recursos a su disposición, ocuparse de los fieles aún presentes en Lourdes en concomitancia con el estallido del conflicto mundial, y sobre todo, preparar un servicio de asistencia para los heridos. En primer lugar, monseñor Schoepfer pone a disposición de las fuerzas de socorro algunas estructuras de sustentación, como el Asilo Notre Dame y el Asilo de los Peregrinos, que juntos constituyen el hospital temporal número 32, con una capacidad de quinientas cama. Otras miles de camas se ponen a disposición desde diferentes hospitales y centros de asistencia de la ciudad, en particular desde Saint Frai.

La administración financiera en el período de la guerra es confiada a Christophe, con la puntual asistencia de de Beauchamp y de Boulet. Los cuidados a los enfermos y a los heridos están asegurados por religiosos y enfermeros voluntarios. El hospital temporal 32 acaba su actividad el 12 de febrero de 1919, después de haber acogido y curado a más de 8.000 heridos. Durante la Primera Guerra mundial, Lourdes se convierte en una valiosa referencia para muchos refugiados del nordeste de Francia

El Asilo Notre Dame durante la guerra de 1914-1918(Hospital complementario 32)

El padre Balette, director de la Hospitalité Notre Dame de Lourdes de 1914 a 1943

Page 22: Fondazione Cariplo Annual Report

L A A S O C I A C I ó N E N T R E L A S D O S G U E R R A S

y Bélgica. A tal propósito se crea también una institución, el “Foyer du Soldat Belge”, con el objetivo de acoger, previa autorización, a los militares de esa región que, a causa de la guerra y de la invasión de su país, no tienen la posibilidad de volver a abrazar a sus familias.

El mes de septiembre de 1914 marca el principio de una fase muy dolorosa para la Hospitalité. Muchas personas cercanas a la asociación, hospitalarios, familiares y amigos pierden la vida a causa de las atrocidades de la guerra, muriendo con honor en el campo de batalla. La primera víctima es el capitán Jean de Montesquieu, cuñado del conde Beauchamp. En el mismo período las filas de hospitalarios, desde el comienzo, sufren una drástica reducción y la pérdida de valiosos elementos como madame Paule Goumy de Morvan, el vizconde de Roussy, Julien Davignon, madame Gamblon, el abad Espinos, el doctor Gustave Boissarie, Emmanuel Bailly, Emmanuel de Barbarin.

Durante los años de la Gran Guerra el flujo de las peregrinaciones a la ciudad mariana se detiene. Sólo algún reducido grupo de peregrinos de la región afronta el peligroso viaje hacia Lourdes. En todo caso, los Padres de la Asunción logran organizar la habitual Peregrinación Nacional, sin la participación de enfermos y sin con la contribución de la Hospitalité. Sólo en 1919 un significativo número de enfermos alcanza la localidad de culto, entre los cuales se hallan unos cincuenta soldados heridos y acogidos en el Asilo Notre Dame. A partir de este momento los hospitalarios gradualmente retoman su servicio,

bajo la dirección de Christophe y Beauchamp. El 20 de agosto de 1919 la Hospitalité se reúne y monseñor Schoepfer se preocupa en particular de recibir en persona a ocho nuevos titulares. El obispo aprovecha esta ocasión para dar las gracias a los hospitalarios y destacar ulteriormente su devoción y perseverancia, tanto respecto a los enfermos, como a los heridos propios y del enemigo, y los anima a seguir el camino con renovada confianza. A principios de octubre, la peregrinación del Rosario de Tolosa logra de todas formas reunir a un centenar de enfermos, mientras la Primera Guerra mundial se dispone a su conclusión. Una mejoría y una inyección de confianza que alcanza su cumbre en el mes de noviembre del mismo año. Los Padres Asuncionistas deciden organizar un nuevo momento de fe, una «peregrinación de Acción de gracias por todos los militares de Tierra y Mar», que llega a reunir en Lourdes a más de 20.000 peregrinos, del 11 al 13 de noviembre. La mayor parte de éstos está constituida por soldados que regresan de la guerra y que «llegan para agradecerle a la Virgo que los haya devuelto a sus familias y que haya dado la victoria a Francia». En tal ocasión se bendijo, además, la primera piedra del “Monumento de la Paz”. En el año 1920 y, sobre todo, 1921 se asiste a la progresiva e importante reanudación del flujo de las peregrinaciones. Muchos soldados antes de partir para el frente habían pedido la intercesión de la Virgen para volver sanos con sus familias. Por esto, muchos de los supervivientes del conflicto se preparan a la peregrinación a Lourdes, y la mayor parte de las diócesis organizan viajes desde toda Francia. Las considerables mejoras en los transportes permiten, además, a la Peregrinación Nacional

««La restauración de Francia necesita una toma de conciencia por parte del pueblo, una voluntad moral de sacrificio, el retorno a la cultura de la virtud y del trabajo, la vuelta del principio de autoridad no impuesto, sino aceptado confiadamente».

Lourdes, capital de la paz El 23 de agosto de 1942 el obispo

de Lourdes, monseñor Choquet,

lanza una llamada al mundo en guerra

1935, clausura del Jubileo de la Redención por del cardenal Pacelli, Secretario de Estado y Legado Pontificio. Llegada a Lourdes y saludo con el izado de la bandera

Page 23: Fondazione Cariplo Annual Report

L A A S O C I A C I ó N E N T R E L A S D O S G U E R R A S

reunir en Lourdes a más de 400 enfermos en 1920 y 600 al año siguiente, sobre todo gracias a la puntual asistencia facilitada por los hospitalarios, que retoman por fin el servicio a pleno rendimiento con alegría y renovado entusiasmo. Mientras tanto, también el Bureau Médical reabre sus puertas. En lugar del doctor Boissarie, el doctor Le Bec es nombrado presidente del Bureau des Constatations y el doctor Marchand vicepresidente. Ambos conocen a la perfección las problemáticas relacionadas con las curaciones inexplicables de Lourdes, por su larga colaboración con el doctor Boissarie. A partir de 1920 Christophe deja la ciudad de Lourdes para establecerse en París y seguir más de cerca la educación de sus cuatro hijos, reestableciendo el contacto con la Hospitalité sólo en la época de las grandes peregrinaciones. Sin embargo, muy pronto un mal que lo aflige desde hace tiempo mina definitivamente su salud llevándolo a la muerte el 9 febrero de 1922, después de una existencia vivida en su mayor parte al servicio de la Hospitalité y de sus enfermos. También la rama femenina de la asociación se ve puesta a dura prueba por la pérdida de dos miembros, una de las primeras colaboradoras de la cofradía desde 1886: la baronesa de Malet, vicepresidente de la Hospitalité Notre Dame de Lourdes desde 1903, muerta el 1 marzo de 1920 y la vizcondesa de Pouy, primera presidenta de la Hospitalité des Dames, desaparecida el 20 de enero de 1922. Mientras tanto, durante la presidencia de Christophe, las Dames de las Piscinas quedan bajo el control de madame de Werbier, con madame de Malet en calidad de vicedirectora. También esta rama de la asociación padeció en aquellos años una considerable reducción de sus propias actividades, como consecuencia de la gran Guerra.

A partir de 1922 inicia para la asociación una nueva etapa, bajo la presidencia del conde Etienne de Beauchamp. Un largo camino que

CUáNDO Y QUé

1915 MUNDO - Hundimiento del transatlántico Lusitania por obra de los submarinos alemanes

1917 RUSIA - Comienza la Revolución Bolchevique conducida por Lenin

1918 ESTADOS UNIDOS - Comienza la época del prohibicionismo, está prohibido fabricar o vender bebidas alcohólicas

1919 ITALIA - Después del final de la Gran Guerra, se habla de “victoria mutilada.” Gabriele D’Annunzio guía la empresa de Fiume

1921 ITALIA - Mussolini inaugura el ventennio fascista

1921 FRANCIA - En París sobre la Torre Eiffel se instala la primera emisora para las transmisiones regulares cotidianas radiofónicas. Es la primera en Europa

1925 FRANCIA - Trágica muerte en el Gran Premio de Francia del campeón automovilístico Ascari

1926 MUNDO - Fleming descubre la penicilina, el primer antibiótico

1927 FRANCIA - Los pilotos Costes y Le Brix realizan el primer vuelo transatlántico francés, París - Buenos Aires

1929 ESTADOS UNIDOS - Inicia la Gran Depresión

1930 MUNDO - El astrónomo Tornbaugh descubre el planeta Plutón

1933 ALEMANIA - Hitler conquista el poder absoluto de todo el país

1938 MUNDO - Estalla la Segunda Guerra Mundial

A bordo de la carroza, a la izquierda del cardenal,

el Prefecto Vié: cerca del coche monseñor Gerlier

Page 24: Fondazione Cariplo Annual Report

H o s p i t a l i t é22

L A A S O C I A C I ó N E N T R E L A S D O S G U E R R A S

continuará hasta 1957, marcando una de las gestiones más largas en la historia de la Hospitalité. El 13 febrero de 1922, solamente pocos días después de la muerte de Christophe, monseñor Schoepfer nombra al nuevo presidente de la Hospitalité Notre Dame de Lourdes, que será, como estaba ampliamente previsto, Etienne de Beauchamp. Presente en Lourdes y al servicio de la asociación desde el lejano 1881, se convierte en miembro titular el 24 septiembre de 1885, y es nombrado vicedirector en agosto de 1907, marcando un recorrido en continua ascensión. Después de la pérdida de gran parte de su familia, decide fijar su residencia en Lourdes y dedicar todas sus energías al servicio de la Hospitalité. A su lado como vicepresidente, Armand Mérillon, perteneciente a una respetable familia de Ossun y desde hace años entre las filas de la asociación después de su consagración en 1886. Una colaboración, sin embargo, muy breve, dada su prematura desaparición que tiene lugar el 5 de diciembre de 1923. En su puesto es nombrado Georges Boutry, hospitalario desde 1905 y miembro del Consejo.

En diciembre de 1926 tiene lugar un desagradable episodio dentro de la Iglesia, que implica a buena parte de los miembros de la Hospitalité Notre Dame de Lourdes: la condena de la Acción Francesa por parte del papa Pío XI, promulgada mediante una ordenanza de los cardenales y arzobispos transalpinos del 7 de marzo de 1928, que especifica que todos los que se nieguen a respetar esta observancia serán «excluidos de todas las asociaciones caritativas y de las obras católicas». Se trata de una decisión extremadamente difícil para muchas familias y también para la Hospitalité. Mostrando un espíritu de sumisión al Pontífice, el Consejo de la Hospitalité se dispone a divulgar valerosamente la siguiente nota, fechada el 4 de mayo de 1928 y firmada por el Presidente: «El Consejo de la Hospitalité de Notre Dame de Lourdes, totalmente obediente al Pontífice Soberano y a sus normas relativas a la acción francesa, pide a los hospitalarios, a los asistentes y a los voluntarios que no compartan tales sentimientos, que no presten servicio en la asociación.

El año siguiente tiene lugar la dolorosa desaparición de monseñor François Xavier Schoepfer, el 24 de agosto, después de haber dirigido durante 27 años la diócesis y contribuido de modo importante al incremento del culto mariano en Lourdes, junto al gran afecto que había manifestado hacia la Hospitalité y en especial hacia de Beauchamp, su gran amigo. En su lugar es llamado rápidamente un coadjutor suyo, monseñor Alexandre Poirier. Un camino, sin embargo, de breve duración, debido a su prematura desaparición en 1928, pero que no carente de gestos significativos. En concreto, monseñor Poirier realiza un acto fundamental para el crecimiento de la Hospitalité: gracias a una petición suya, el papa Pío XI, con un documento del 20 de marzo de 1928, eleva la Hospitalité Notre Dame de Lourdes al rango de

archicofradía. No se trata sencillamente de una condecoración, sino que tal acto marca el principio de una nueva fase para la asociación, con la posibilidad de tener sedes descentradas que compartan la espiritualidad y que estén intensamente ligadas a la obra de Lourdes y al servicio de los enfermos. Inicia, por lo tanto, a delinearse un nuevo cuadro, con la presencia de varias “filiales” de la Hospitalité esparcidas por Europa, en concreto en numerosas diócesis francesas, pero también en Bélgica, España, Italia, Inglaterra y Suiza. Otra ventaja relacionada con el nuevo orden de la asociación es la concerniente a la posibilidad de integrar en tal contexto también a las enfermeras del Hospital Saint-Frai y del Asilo Notre Dame, grupos capitaneados por los superiores que dirigen las dos estructuras sanitarias, pero hasta ahora siempre al margen de la Hospitalité. En realidad, el proceso de integración será mucho más largo y complejo de lo previsto y sólo se concluirá en 1978.

El 14 mayo de 1929 es nombrado el sucesor del llorado monseñor Poirier, monseñor Pierre Marie Gerlier. Durante los ocho años de su episcopado se empeña para organizar en el Santuario grandes ceremonias que puedan atraer grandes muchedumbres de fieles, con la implicación directa de la Hospitalité en muchas de estas ocasiones. El primer acontecimiento es el Congreso mariano, celebrado del 24 al 27 de julio de 1930, bajo la dirección del cardenal Verdier, arzobispo de París y legado del Papa, sobre el tema de la Inmaculada Concepción, con la participación de más de 40.000 personas. Beauchamp es nombrado vicepresidente del comité local, con la tarea de preparar la organización.

Mientras tanto, se acerca una importante solemnidad para la ciudad mariana, el 75° aniversario de las apariciones, en 1933. El 8 de diciembre tiene lugar el hecho más esperado de los fieles en estos años: la canonización de Bernadette durante la Fiesta de la Inmaculada Concepción, en la Basílica de San Pedro de Roma. Para la gran fiesta en Lourdes hay que esperar, sin

El Legado y Secretario de Estado durante su discurso

Page 25: Fondazione Cariplo Annual Report

L A A S O C I A C I ó N E N T R E L A S D O S G U E R R A S

H o s p i t a l i t é 23

El cardenal Pacelli sobre el trono del pontífice

embargo, al año siguiente. Tres son los días de fiesta, el 14, el 15 y el 16 de julio de 1934, coronados por la espléndida Misa dedicada a la nueva santa, y por una grandiosa procesión por las calles de la ciudad. También en ese mismo año, se concluyen las celebraciones para el Jubileo de la Redención, con un triduo de Misas en la Gruta, del 25 al 28 de abril. En esta ocasión, es designado legado pontificio el cardenal Pacelli y la presencia del Secretario de Estado del Papa concede un excepcional realce a estas ceremonias, junto a la presencia de 5 cardenales, 12 arzobispos, 50 obispos, 3.000 sacerdotes y religiosos y 250.000 peregrinos. El año siguiente se celebran los cincuenta años de la fundación de la Hospitalité Notre Dame de Lourdes. La gran fiesta se celebra el 25 de agosto, con la Santa Misa oficiada por monseñor Gerlier. En el almuerzo participan 250 hospitalarios. En su medio siglo de actividad la Hospitalité ha llegado a acoger a 835 titulares, 450 asistentes y 5.570 camilleros voluntarios. En 1937 monseñor Gerlier es trasladado a Lione, y madame de Werbier dimite de la presidencia de la rama femenina después de 50 años de servicio y 34 de presidenta. En su lugar, es nombrada la baronesa Jeanne Berthemy.

Pocos meses después, una inundación del río Gave provoca graves daños en la ciudad de Lourdes, en especial en la Gruta, en las oficinas de la Hospitalité, en el Asile y en las Piscinas, una parte de las cuales queda inutilizable. A estos problemas de gestión se suma en 1939 el estallido de la Segunda Guerra mundial. Para Lourdes se prepara otra fase de extrema dificultad, en la que las peregrinaciones dejan el puesto a una situación de emergencia, mientras, en tanto, el cardenal Pacelli es elegido Papa con el nombre de Pío XII. Como había ocurrido para la Primera Guerra mundial, las estructuras destinadas a la acogida

de los peregrinos son transformadas en hospitales de campaña para curar a los heridos, en particular a militares franceses, alemanes y marroquíes. Las peregrinaciones a Lourdes se paralizan de nuevo hasta el final de las hostilidades, en 1945. Sin embargo, la Hospitalité no permanece inactiva, sobre todo gracias a la obra de de Beauchamp. Su primera preocupación es mantener el espíritu de todos los miembros de la asociación, y cada mes manda a todos los que tienen la posibilidad de recibirlos mensajes de consuelo y ánimo. Además, organiza un comité de acogida para los refugiados procedentes de Bélgica y del Nordeste de Francia, ocupándose de la comida, de la ropa y de la distribución de dinero. Se dedica también a los jóvenes y a los niños, con la ayuda de la Cruz Roja.

En estos años difíciles, Lourdes se convierte en el centro mundial de la oración por la paz, donde el nuevo obispo, monseñor Choquet, se desvive para transformar la ciudad en la «montaña sagrada de nuestro país, donde Dios se revela y nos enseña su precioso mensaje». Nuestro viaje a través del período entre las dos guerras mundiales se encamina a su fin. Un recorrido difícil y atormentado, cuyas últimas fases ven también dolorosas pérdidas para la Hospitalité. En los años del segundo conflicto mundial, en efecto, desaparecen personalidades importantes como Emile Boulet, en 1939, monseñor Charles François de Costa, en 1941, madame de Werbier y el padre Balette, recordado con afecto por de Beauchamp: «Como un válido y seguro guía, ha contribuido al crecimiento de los hospitalarios diocesanos, a quienes había dado vida junto a él». En estos últimos años, la Hospitalité toma conciencia de ser una fuerza valiosa, capaz de atravesar siglo medio de historia sin perder unidad de intentos y un fuerte mensaje espiritual, el mismo desde su fundación.

Page 26: Fondazione Cariplo Annual Report

H o s p i t a l i t é24

L A P O S G U E R R A

La posguerra es parala Hospitalité un período

de fuerte recuperación. El número de enfermos

aumenta, se trabaja para mejorar las estructuras

de acogida y se preparaal Jubileo de las

apariciones.La asociación y sus

miembros recuperan un auténtico

“ritmo de crucero”

La primera mitad de 1900 fue especialmente dura para la asociación, a causa de los conflictos mundiales sobre todo. Hay que esperar hasta 1946 para ver a la Hospitalité

Notre Dame de Lourdes recuperar sus habituales tareas. Su presidente, el conde Etienne de Beauchamp, repara y pone en función todo el material necesario para el servicio a los enfermos y al final del año llama, mediante una carta, a todos los hosìtalarios subrayando que en 1946 han llegado a Lourdes un millón de peregrinos y que para 1947 se esperan aún más. Concluye su carta con estas palabras: «No debemos olvidar que somos sirvientes privilegiados de Notre Dame de Lourdes, y ello nos obliga a dar ejemplo tanto en nuestra vida privada como en nuestra vida pública».

En febrero de 1947 monseñor Pierre-Marie Théas se convierte en obispo de Tarbes y Lourdes y se hace recordar enseguida por la valerosa decisión tomada en el mes de noviembre del mismo año de mantener la responsabilidad del Santuario de Lourdes y seguir confiándoles a los padres de la diócesis la administración financiera y la organización de las peregrinaciones. Al mismo tiempo, monseñor Théas volverá a llamar a Lourdes a los Misioneros de la Inmaculada Concepción - que tuvieron que dejar el Santuario en 1903 - confiándoles la responsabilidad espiritual y pastoral de las peregrinaciones. El año 1947 también está marcado por dos jubileos que conciernen a la Hospitalité: el 27 de septiembre el conde de Beauchamp celebra sus 60 años de hospitalario de Notre Dame de Lourdes y sus 25 años como presidente. El 26 de diciembre la superiora de Saint-Frai, madre Saint Etienne, celebra sus 90 años y 40 años como superiora, es decir, toda una vida al servicio de los enfermos y de la Hospitalité.

El año 1948, no es muy relevante desde el punto de vista de las peregrinaciones, es sin embargo importante por las innovaciones

Hacia el centenario de las apariciones

Page 27: Fondazione Cariplo Annual Report

H o s p i t a l i t é 25

L A P O S G U E R R A

Procesión del Santísimo Sacramento con el celebrante bajo el palio

Page 28: Fondazione Cariplo Annual Report

H o s p i t a l i t é26

L A P O S G U E R R A

que se realizan en aquel año, empezando por la inauguración del aeropuerto de Ossun, que abre el camino a la llegada en avión de los peregrinos y los enfermos. Se crea entonces una línea regular entre Lourdes y Bruselas-Ámsterdam (sólo en este primer año los peregrinos y los enfermos que llegan a Lourdes por vía aérea son 1.442). Será a continuación la Cámara de Comercio de Tarbes, responsable del aeropuerto, la que hará grandes obras de mejora de las pistas, permitiendo así la llegada de aviones más grandes. La Hospitalité se encarga enseguida de este nuevo servicio. Un día importante es también el 8 de julio, cuando por primera vez una etapa del Tour de France sale de la Gruta de Massabielle. El 24 de agosto, en cambio, es el día de la llegada a Lourdes de la primera peregrinación americana organizada: 550 personas llegadas de Boston por vía marítima.

En la preparación del centenario de las Apariciones, monseñor Théas prevé desplazar las Piscinas y aumentar su número para facilitar el acceso a la Gruta. Hay que proveer, pues, para obras que no se han efectuado nunca. Así, efectuando excavaciones de dos metros bajo el nivel de la Gruta, aparece el manantial, el punto del que mana el agua que luego, a través de la roca, llega a las Piscinas. Se construye entonces una presa para recoger y canalizar esta auténtica “agua santa”. Gracias a una lámina de vidrio que protege el manantial, los peregrinos que pasan a la Gruta pueden ver correr el agua descubierta por Bernadette en 1858. Las obras de restauración de la Gruta y de las Piscinas acaban a finales del año, pero ( el área) se inauguran el 3 de febrero de 1949. Los años cincuenta se inician para la Hospitalité con la inauguración del Abri Saint Michel, un edificio con una capacidad de 100 camas y 140

cubiertos, destinada sobre todo a los jóvenes de la Hospitalité con pocas disponibilidades económicas. El 1 de noviembre de 1950 es, en cambio, un gran día de la gloria de la Virgen María: el papa Pío XII proclama el dogma de la Asunción en la plaza de San Pedro en Roma. El 21 de noviembre de 1951 el conde de Beauchamp es nombrado caballero de la Legión de honor con el título de “Presidente general de la Hospitalité de Lourdes”. La motivación que acompaña este nombramiento son los «66 años de servicios civiles y militares», dado que el empeño del conde como miembro de la cofradía se remonta a 1885, fecha de la fundación de la Hospitalité Notre Dame de Lourdes. Se trata, pues, al mismo tiempo de un homenaje a la asociación y del reconocimiento de los servicios realizados por su presidente durante las dos guerras, por los heridos cuidados en el Asile y por los militares licenciados acogidos en el Foyer de la rue du Bourg. La ceremonia se celebra el 6 de mayo de 1952: el general Lafon, con uniforme militar, pone la Cruz de la Legión de Honor en el pecho del presidente, que exhibe la medalla de plata de la Hospitalité y la Gran Cruz de San Gregorio el Grande.

En el año 1952 se toma una importante decisión: la construcción de dos puentes sobre el Gave. La pradera frente a la Gruta podrá ser utilizada así por los peregrinos y los enfermos para diferentes actividades y ceremonias. Algunos años después se construirán el Accueil Sainte Bernadette y la iglesia dedicada a la vidente de Massabielle y, en 1977, el nuevo Accueil Notre Dame. El 9 de septiembre el conde de Beauchamp consigna la cruz de la Legión de Honor a la madre Marie Antoinette Gueydier, superiora del Asile Notre Dame que servirá más de

1945 ALEMANIALiberación campo Auschwitz, suicidio de Hitler, capitulación de Alemania

1945 ITALIAEjecución de Mussolini

1945 FRANCIADe Gaulle jefe del gobierno

1945 ASIABombas atómicas sobre Hiroshima y Nagasaki

1946 FRANCIADebates y votos constitucionales que crean la IV República 1947 ESTADOS UNIDOSCreación del CIA

1953 URSSStalin muere, fin del terror staliniano

1957 EUROPATratado de Roma: los Seis organizan la CEE y la CEA o Euratom, organización aduanera para el Mercado Común

CUáNDO Y QUé

Page 29: Fondazione Cariplo Annual Report

H o s p i t a l i t é 27

L A P O S G U E R R A

40 años en el Asile. Tanto la madre Marie Antoinette, como el conde de Beauchamp gracias a su autoridad, ejercitada con tacto e inteligencia, han sabido mantener vivo el espíritu de los fundadores en todos los hosìtalarios, un espíritu de rigurosidad en el servicio, en la persistencia y en la caridad sonriente a los enfermos.

El año 1954 es considerado “Año Mariano” ya que se celebra el centenario de la definición dogmática de la Inmaculada Concepción. El papa Pío XII el 8 de septiembre de 1953 lo anuncia con una encíclica que subraya la unión privilegiada entre Roma, donde el dogma ha sido definido, y Lourdes, donde María, en sus apariciones, lo ha confirmado. A partir del 8 de diciembre de 1953, fiesta de la Inmaculada y apertura del año Mariano, los festejos a María se celebran en Lourdes con un espíritu muy especial. La fiesta del 11 de febrero de 1954 está presidida por el cardenal Saliège, arzobispo de Toulouse. Por la noche, en una procesión de antorchas desde la iglesia parroquial hasta el Santuario participa el alcalde, Antoine Béguère, y diferentes concejales. El 25 de marzo el cardenal Feltin, arzobispo de París, celebra una misa cantada por los monjes benedictinos de Tournay. La peregrinación de la Liga Femenina de la Acción Católica dona una campana que lleva la inscripción: «Por todas las mujeres de Francia». El año Mariano se concluye con la fiesta de la Inmaculada Concepción, celebrada bajo la presidencia del cardenal Léger, arzobispo de Montreal y legado pontificio.

1955 es, en cambio, el año de los 70 años de la Hospitalité, celebrados el 28 de enero, pero se celebra también la consagración de los primeros siete hosìtalarios, el 19 de agosto y la medalla de plata al conde de

1946 FRANCIADebates y votos constitucionales que crean la IV República 1947 ESTADOS UNIDOSCreación del CIA

1953 URSSStalin muere, fin del terror staliniano

1957 EUROPATratado de Roma: los Seis organizan la CEE y la CEA o Euratom, organización aduanera para el Mercado Común

Las nuevas Piscinas

Page 30: Fondazione Cariplo Annual Report

H o s p i t a l i t é28

L A P O S G U E R R A

Beauchamp el 24 de septiembre. El tiempo también vuela para el histórico presidente de la Hospitalité, que se acerca a su centenario... Todos los que le rodean esperan poderlo celebrar en 1958 junto a las apariciones pero, desdichadamente, tras una breve enfermedad, el conde Etienne de Beauchamp se apaga el 21 de agosto de 1957. Un momento difícil y particularmente doloroso para la gran familia de la Hospitalité y para todos sus amigos; de Beauchamp suscitó admiración, estima y cariño en todos los que habían ido a Lourdes a lo largo de los años. Los funerales se celebran en la basílica del Rosario. Monseñor Théas oficia la misa rodeado de cinco arzobispos, obispos y numerosos representantes de la diócesis, de los Santuarios de Lourdes y diferentes Hospitalités, del prefecto de los Altos Pirineos, del Alcalde de Lourdes y de una delegación del Consejo Municipal. Al final de la misa, monseñor Théas pronuncia el elogio del difunto: «El primer caballero de Notre Dame de Lourdes, el príncipe de los camilleros, la figura más representativa de nuestro Santuario y su benefactor, el testimonio privilegiado de un largo pasado en Lourdes, presidente de la Hospitalité Notre Dame de Lourdes, Gran Cruz de la Orden de San Gregorio, caballero de la Legión de Honor, caballero de la Orden de Leopoldo, oficial de la Corona belga».

Durante los 35 años de su presidencia, de Beauchamp ha sido el animador incansable de la asociación. Estaba tan ligado que se identificaba con ella. Testigo y garante de la tradición, hablaba a menudo de quien había fundado la Hospitalité, el padre Sempé. Prestigioso servidor de Notre Dame, ha defendido el dominio y ha llevado orgullosamente la bandera incluso durante los años difíciles de los conflictos. Durante la Segunda Guerra

mundial ha acogido a los refugiados y ha alojado a los militares licenciados. Una vida “sirviendo”, con inteligencia, devoción y convicciones cristianas. Al final de la homilía pronunciada durante los funerales del conde de Beauchamp, monseñor Théas anuncia el nombre de su sucesor: se trata de Goslen de la Poëze, del año 1892, superviviente de la guerra del 1914-1918 donde se ha distinguido por méritos y ha sido recompensado con la Cruz de Guerra y la Legión de Honor. Su primer compromiso con la Hospitalité se remonta a 1927, su consagración a 1929. El encargo que se le confía no es sencillo. Se trata de tomar las riendas de la asociación en plena época de las peregrinaciones y en vísperas del centenario de las Apariciones.

Pero de la Poëze conoce perfectamente el funcionamiento y el espíritu de la Hospitalité y está, pues, bien preparado para continuar la obra de Beauchamp.

Según monseñor Théas, el año 1958, centenario de las Apariciones, debería ser un «Pentecostés mariano y una superabundante efusión del Espíritu Santo», pero también, gracias al número de los peregrinos y a la viveza de las ceremonias, uno de los ápices de la historia del Santuario de Lourdes. El papa Pío XII concede mucha importancia a este jubileo, no sólo para los peregrinos que se dirigirán a Lourdes, sino en general para toda la Iglesia Católica. Aprovecha, pues, la ocasión para incitar a los fieles a la

Page 31: Fondazione Cariplo Annual Report

H o s p i t a l i t é 29

L A P O S G U E R R A

6 mayo de 1952 - Legión de Honor al conde de Beauchamp, con el general Lafon a su derecha

Legión de Honor del conde de Beauchamp.

Discurso de monseñor Théas: a su izquierda, el cardenal

Liénard y monseñor Méricq

Page 32: Fondazione Cariplo Annual Report

H o s p i t a l i t é30

L A P O S G U E R R A

conversión interior, gracia mayor de la peregrinación. Durante todo el año Pío XII mostrará su unión con los peregrinos de Lourdes mediante seis cartas y diferentes mensajes radiofónicos. Pero, como se puede imaginar, los preparativos para el centenario se empiezan mucho antes... Desde tres años antes Lourdes está trabajando para realizar cambios en la Gruta, la cual, una vez vuelta a su estado primitivo, se hace accesible a un número mayor de personas. Se empiezan también las obras para lo que será la basílica San Pío X, así como la creación del “Campo de Scouts” y de la “Cité Secours”. El cuartel general de los “Scouts” de Francia se interesa bastante por Lourdes y poco a poco, uno de los comisarios conduce la tropa de los pañuelos blancos hacia el grupo de los hosìtalarios de Notre Dame. Es así como estos jóvenes serán admitidos e integrados sucesivamente en todos los servicios de la asociación y ayudarán en el servicio a los enfermos que llegan a Lourdes.La cité Saint Pierre, ciudad de socorro, es en cambio un centro de acogida destinado a las personas que desean emprender una peregrinación a Lourdes, pero no tienen disponibilidad económica para alojarse en los hoteles de la ciudad. La Cité está abierto a todos, prescindiendo de la nacionalidad, de la edad, del origen, profesión y convicción religiosa. Hospeda cada año a unos 10.000 peregrinos procedentes de 20 Países.

El Jubileo se abre con un triduo de preparación. El 11 de febrero quedará grabado en la memoria gracias a la ceremonia presidida por el cardenal Gerlier, en la que Pío XII participará con un mensaje radiofónico. Siguen una serie de grandes celebraciones, como el 25 de marzo, fiesta de la Anunciación, o el 16 de julio, aniversario de la última aparición. Y, además, la fiesta de la Asunción, el Congreso mariológico del 10 al 13 de septiembre, seguido de un congreso mariano del 13 al 17 y, para acabar, la fiesta de la Inmaculada Concepción el 8 de diciembre. A finales de año se intenta hacer una evaluación sobre el número de personas que pueden haber llegado a Lourdes con ocasión del Jubileo y se llega a la conclusión de que los peregrinos han sido más de 5 millones.

Después del año del centenario, el Santuario retoma su ritmo de crucero. Es de la Poëze quien lo hace notar en una circular de enero de 1960. En esta misiva, además de expresar sus mejores deseos a los miembros de la Hospitalité, evidencia el hecho de que 1959 ha registrado un gran número de peregrinos que, si bien inferior al del año del Jubileo, es sin embargo más alto del total de los peregrinos llegados a Lourdes en 1957. Eso significa que la afluencia está en constante aumento y que hace falta desarrollar los medios de acogida de la Hospitalité, pero también de los hosìtalarios, y de los camilleros mismos, para reducir lo más posible sus gastos de alojamiento que siguen siendo, sobre todo para los más jóvenes, un problema serio.Entonces es cuando el presidente decide ampliar el Abri Saint Michel, que había sido dispuesto por su predecesor, para acoger a un centenar de personas más. Las nuevas obras facilitan así al Abri cuatro dormitorios con un total de 225 camas y un gran refectorio capaz de acoger hasta 300 personas.

Procesión del Santísimo Sacramento. El canto del “Parce Domine” con los brazos al cielo

Un grupo de hospitaliers alrededor de Beauchamp y de la Poëze. A su izquierda de Montecler. A la derecha de Beauchamp, Georges Boutry y Janson (Consejo del 1957)

Page 33: Fondazione Cariplo Annual Report

H o s p i t a l i t é 31

L A P O S G U E R R A

Page 34: Fondazione Cariplo Annual Report

pe

re

gr

ina

ció

n a

Ro

ma

2

01

0

Page 35: Fondazione Cariplo Annual Report

pe

re

gr

ina

ció

n a

Ro

ma

2

01

0

Page 36: Fondazione Cariplo Annual Report

H o s p i t a l i t é34

L A H O S P I TA L I T é H A C E 1 0 0 A ñ O S – 1 9 6 0 - 1 9 8 5

La asociación cambia. Son años

intensos, en los que se alternan presidentes

y se crean nuevos órdenes organizativos.

Dos palabras definen y encierran perfectamente estos

procesos: renovación y reconciliación

Después del centenario de las apariciones, también la Hospitalité

se prepara a vivir su siglo de vida

Los años Sesenta del siglo pasado, para la Hospitalité, se abren (el 12 de agosto de 1961) con la histórica inauguración y la bendición de los nuevos locales

del Abri Saint Michel. Es el primero de una larga serie de acontecimientos que, en una década, cambiarán intensamente y modernizarán los lugares, la organización y las funciones de la asociación. El año 1962, está marcado por el centenario de la carta pastoral de monseñor Laurence que en el lejano 1862 confirmó solemnemente la autenticidad de las apariciones de Lourdes. El 3 de junio de 1963 muere el papa Juan XXIII, al que sucede el cardenal Montini, arzobispo de Milán, gran devoto de la Virgen de Lourdes y varias veces peregrino a la ciudad mariana, que toma el nombre de Pablo VI. En Lourdes se recuerda también el 23 de agosto y la primera peregrinación Anglicana, guiada por monseñor Westall, que ha agrupado a unos sesenta fieles y a una decena de pastores. En estos años, con el aumento de las peregrinaciones, crece de manera exponencial también el tráfico en el aeropuerto y los pasajeros alcanzan la cifra de 98.111 en un solo año. Razón por la cual es alargada la pista 2.400 metros, en previsión de ulteriores trabajos de engrandecimiento y modernización de toda la sede aeroportuaria. La Cámara de Comercio de Tarbes, en efecto, anuncia la construcción, a finales de 1964, de una terminal para los enfermos, donde se instalarán 30 camas y donde estará presente un servicio especial de acogida y transporte con equipos especiales de camilleros y enfermeros.

También en 1964 el periódico de la Gruta publica el resultado de una encuesta realizada a un gran número de enfermos de las peregrinaciones que se titula: “Comprensión y respeto a los enfermos”. Emergen algunas reflexiones destinadas a los sacerdotes y a los hospitaliers: la indelicadeza de los predicadores que sacralizan el sufrimiento, las ceremonias y las oraciones demasiado largas, el tono árido como si fuera

Page 37: Fondazione Cariplo Annual Report

H o s p i t a l i t é 35

L A H O S P I TA L I T é H A C E 1 0 0 A ñ O S – 1 9 6 0 - 1 9 8 5

una orden por parte de algunos camilleros que no parecen darse cuenta que hablan a enfermos que sufren, el deseo de una vida más comunitaria entre los enfermos y los sanos que participan en la misma peregrinación, el comportamiento de los que rodean a los enfermos que a menudo causa, por culpa de la indelicadeza, aún más sufrimientos. Así pues, los trabajos de renovación

«Celebráis el centenario de vuestra Cofradía con vuestra venida a

Roma a la tumba de Pietro. Vuestro acercamiento es una señal de

comunión eclesial que subrayo con alegría acogiéndoos aquí hoy,

con vuestro presidente y monseñor Henri Donze, obispo de Tarbes

y Lourdes, a quien agradezco sus palabras. (…) La presencia de los

enfermos ha suscitado en torno a los Santuarios y en los peregrinos

un movimiento intenso de hermandad y ayuda para acompañarlos.

Muchos de aquéllos que los han servido se han encariñado con esta

tarea y la han llevado adelante de año en año. Se han encargado de

muchos aspectos de la animación de las peregrinaciones, tanto desde

un punto de vista espiritual como práctico. Así ha nacido vuestra

cofradía en Lourdes, pronto asociada a las innumerables cofradías

relacionadas regularmente con las peregrinaciones organizadas

por todos los países europeos y de otras partes del mundo. Cuando

pienso lo que representa la Hospitalité de Lourdes, me conmuevo

por el sentido evangélico de lo que ésta cumple. Parece que

descubre una larga continuación de respuestas a la palabra de la

Madre de Jesús: “Haced lo que os diga”. Servir a los enfermos, es

hacer lo que el Señor se espera de nosotros. Y cuando lo hemos

hecho, durante una peregrinación, la experiencia de la imitación

del Señor bajo los rasgos del Buen Samaritano, sentimos que no

puede tratarse de una experiencia aislada de un día. Los hospitaliers

vuelven cada año. Aún más, de año en año continúan su acción

en sus comunidades de origen. (...) En Lourdes como en cualquier

otro sitio, el hospitalier sabe bien que la ayuda fraterna a quienes

padecen tantos sufrimientos conlleva al mismo tiempo una ayuda de

tipo espiritual, una experiencia de comunidad eclesial. (...) Quiero

sencillamente subrayar la riqueza de vuestro empeño. Cuando los

miembros de la Hospitalité pronuncian su acto de consagración,

ruegan a la Virgen Inmaculada, en la docilidad al Espíritu Santo y

en el fervor de la fe, le piden la gracia de trabajar con Ella “en el

consuelo de los que sufren, en la reconciliación de los hombres,

en la unidad de la Iglesia y en la paz del mundo.” (...) Con vosotros

me gustaría dar gracias por todo lo que se ha realizado a lo largo

de un siglo de vida de vuestra cofradía, resplandeciente en tantos

lugares, me gustaría orar con vosotros a la Madre del Señor para que

os ayude a continuar cada vez más intensamente vuestra acción y,

en concreto, para que ayude a muchos jóvenes a sentir la llamada

evangélica de la caridad en todas sus dimensiones. (...) Que podáis

acoger y visitar a los más pobres, a los que sufren más que nosotros,

acompañarlos con discreción, ayudarlos así a recibir la gracia

salvadora del Redentor de modo que, confortados por la ayuda de

sus hermanos, se iluminen en la fe de la fuerza de la esperanza y

del amor. Esta intensa experiencia os lleva a participar cada vez

más en los múltiples esfuerzos pastorales de la Iglesia incluso en

otros sectores. (...) Desde lo más profundo del corazón ruego a Dios

para os bendiga, así como a todos los miembros de la Hospitalité

de Lourdes y a todos aquellos que servís en nombre del Señor».

La palabra de la acogida de Juan Pablo II para el centenario

de la Hospitalité – Audiencia del 18 de marzo de 1985

De derecha a izquierda, monseñor Henri Donze, Tronchet y el padre Joseph Bordes, rector de los Santuarios

Page 38: Fondazione Cariplo Annual Report

H o s p i t a l i t é36

L A H O S P I TA L I T é H A C E 1 0 0 A ñ O S – 1 9 6 0 - 1 9 8 5

de la Hospitalité ya no conciernen sólo a las estructuras y a la organización, sino también al modo de actuar. Y es así como en estos años la asociación continúa e implementa el trabajo en su interior. En 1965 se construyen 75 habitaciones para los hospitaliers en la Sala Bernadette, para reemplazar las que estaban en el Abri de los peregrinos donde, a partir de ahora, se predisponen salas de conferencias, cada vez más solicitadas por los directores de las peregrinaciones. Se construyen también dos puentes sobre el Gave para que la pradera frente a la Gruta pueda ser más funcional y utilizable. El 25 de marzo de 1966, día de la inauguración de los dos puentes, por fin los lugares de las peregrinaciones adquieren espacio y agilidad. Apenas a tiempo, se puede decir, para acoger la marea humana que llega a Lourdes del 10 al 12 de septiembre de 1966. La peregrinación de los ex deportados y prisioneros que reúne a unas 100.000 personas procedentes de todo el mundo. 1966 se concluye con una importante peregrinación a Roma, en la

cual el presidente, el vicepresidente, los miembros del Consejo y muchos hospitaliers del Abri Notre Dame son recibidos en audiencia por el papa Pablo VI, junto a algunos miembros de la Unitalsi, en la sala del “Pequeño Trono”. El Santo Padre les dedica un mensaje especial y, antes de bendecirlos, rinde homenaje a la Hospitalité con estas palabras: «Esta institución benefactora que ha prodigado, en el curso de los años, tesoros de fervor y generosidad ha ayudado intensamente a los millares de enfermos que la han encontrado».Ya desde 1965 los hospitaliers, y también los peregrinos que llegan a Lourdes, son cada vez más jóvenes. Basta pensar que en 1967 la peregrinación “Nacional francesa” aclama a los jóvenes hospitaliers de Notre Dame de Salut, un equipo de chicos que tienen entre 14 y 18 años. También en 1967, en el mes de julio, nace un nuevo servicio, “La peregrinación de un día”, destinada a agrupar a los turistas y a los peregrinos aislados y ayudarlos en su camino espiritual. En cambio, en el

Alrededor de monseñor Viscaro, rector de los Santuarios y director de la Hospitalité, a la derecha los señores de Valicourt, Janson, Imbert; a la izquierda los señores de la Poëze, Lanfry, de Bellisal

Page 39: Fondazione Cariplo Annual Report

H o s p i t a l i t é 37

L A H O S P I TA L I T é H A C E 1 0 0 A ñ O S – 1 9 6 0 - 1 9 8 5

mes de diciembre, se inaugura el nuevo hogar, “foyer”, de las “Bernadettes”, totalmente renovado después de un incendio que lo había destruido en parte. En 1969 la Hospitalité sufre un luto repentino: el de Georges Lanfry, miembro del Consejo y ex presidente de los Cadetes Normandos desde 1913 hasta 1935 (en el cuaderno cercano encontráis la acertada descripción hecha hospitalier). Después de los lutos del año, por fin el 13 de septiembre la Hospitalité puede celebrar un acontecimiento agradable: los 40 años de la medalla de plata y los 13 años de presidencia del conde de la Poëze. El año 1970 se inicia con un importante cambio para la Hospitalité y Lourdes: la dimisión de monseñor Théas del cargo de obispo de Tarbes y Lourdes. Lo sustituye el obispo de Tulle, monseñor Henri Donze. El nombre de Pierre-Marie Théas quedará en todo caso grabado y ligado al Santuario de Lourdes no sólo por su tenacidad y su fe que han hecho posible, a pesar de los numerosos obstáculos, la construcción de la basílica de

San Pío X, sino también por su papel de apóstol incansable de María. En el mes de mayo se inauguran en la estación de Lourdes, las instalaciones destinadas a facilitar el desembarque y el embarque de los enfermos: dos nuevas vías que pueden recibir diecinueve vagones y un hall de acogida renovado. También el Asile Notre Dame se reestructura en estos meses y se aprovechan estas modificaciones para cambiar su nombre por el de “Accueil Notre Dame”. Otra novedad, que volverá más fácil el transporte de los enfermos a la basílica San Pío X, es la creación de un paso directo entre el Accueil y la basílica, cortando así todo el trozo de la Explanada. Parte de los problemas indicados por el informe del periódico de la Gruta en 1964 se han arreglado, pero quedan todavía algunos otros por solucionar: como la relacionada con los horarios, no siempre respetada, con la participación activa de los enfermos en las peregrinaciones, con sus necesidades materiales y espirituales y su contacto con los hospitaliers.

1961 MUNDO - El 21 de abril se inicia una grave crisis internacional que implica a Cuba, URSS y Estados Unidos, y que amenaza con llevar al mundo al borde de un nuevo y espantoso conflicto global

1961 ALEMANIA - En Berlín se construye el Muro, que separa la zona Oeste de la ciudad, controlada por los Aliados, de la oriental, en manos de la Unión Soviética. Inicia la era de la Guerra Fría entre Estados Unidos y URSS

1963 MUNDO - El 3 de junio muere el Papa Juan XXIII, pocos meses después de haber publicado la encíclica “Pacem in terris”. El 21 de junio es elegido como su sucesor Giovanni Baptista Montini, el papa Pablo VI

1963 MUNDO - El 22 de noviembre en Dallas, Tejas,el presidente de los Estados Unidos,John Fitzgerald Kennedy, es asesinado

1969 MUNDO - Tres astronautas de la NASA, comandados por Neil Armstrong, a bordo de la nave Apolo 11, desembarca sobre la Luna, acontecimiento seguido por todo el mundo en directo por televisión

1978 ITALIA - El 16 de marzo las Brigadas Rojas secuestran a Aldo Moro, presidente de la Democracia Cristiana, que será asesinado el 9 de mayo

1979 MUNDO - El papa Pablo VI muere, en su lugar es elegido el papa Luciani con el nombre de Juan Pablo I, que morirá treinta y tres días después de su elección. Su sucesor es Karol Wojtyla, primer pontífice polaco en la historia de la Iglesia y primer extranjero después de 455 años

1981 MUNDO - El papa Juan Pablo II es gravemente herido en un atentado en la plaza San Pietro por del turco Alì Agca

CUáNDO Y QUé

Page 40: Fondazione Cariplo Annual Report

Extracto de la carta de monseñor Donze sobre la misión de

los hospitaliers. En estas palabras se encuentra el espíritu

de la Hospitalité

«... Tanto antes, como durante o después de la peregrinación

estáis, mediante el servicio a vuestros hermanos enfermos,

al servicio del mismo Cristo. El Evangelio es categórico

sobre este punto: “Señor... ¿Cuándo te vimos enfermo...

y fuimos a verte?... En verdad os digo que cuantas veces

hicisteis eso a uno de estos mis hermanos menores, a mí

me lo hicisteis” (cf. Mt 25 39-40). Este servicio supone

por vuestra parte discreción y olvido de sí mismo. Hoy

más que nunca, el enfermo quiere ser considerado como

una persona verdadera y no ser tratado como un asistido,

simple objeto de compasión. El que va hacia el otro siempre

corre el riesgo de ir con las manos llenas, con la ilusión

de superioridad, revestido de privilegios, con la cabeza

alta. Lo que los enfermos se esperan de vosotros es, en

cambio, una presencia cordial, gratuita, una amistad de

iguales que elimine todas las fronteras. Viendo a Cristo en

los enfermos, os preocupará más facilitar su participación

activa en la peregrinación. Vuestra misión es servirlos

para ayudarlos, no sólo a desplazarse, sino a encontrarse

bajo la mirada de la Virgen para escuchar su Mensaje e

iluminar su vida (...). Estamos trabajando en un proyecto

que facilite vuestra tarea de caridad en Lourdes. Que la

Virgen nos ayude a hacerlo bien, y que bendiga vuestra

próxima peregrinación».

Carta Sacada del

N°69 del Boletín

de la Hospitalité de Nancy

H o s p i t a l i t é38

L A H O S P I TA L I T é H A C E 1 0 0 A ñ O S – 1 9 6 0 - 1 9 8 5

Hay también que solucionar los problemas deontológicos relativos al agua de la Gruta y las Piscinas. Después del Consejo Pastoral, la Hospitalité Notre Dame de Lourdes invita a sus asociados a redescubrir el espíritu de los fundadores y a no cometer errores en el contacto con los enfermos. En concreto, se insiste en la dirección de mejorar la formación de los camilleros y de las enfermeras y en facilitar la participación de los enfermos en la peregrinación. Se decide entonces poner

a disposición de los animadores, sacerdotes o laicos, una guía de oraciones, y publicar una relación sobre la Unción común de los Enfermos. De ahora en adelante será posible también un acercamiento de fe personal y libre, aunque se dará gran espacio a la preparación de la peregrinación, tanto en las diócesis como en Lourdes. Precisamente para estos objetivos la Hospitalité y el Santuario crean nuevos instrumentos para favorecer un intercambio de información para todos los que van a Lourdes. Empezando por un gabinete de prensa en el Santuario, confiado al padre Ramond, ex director de la revista “Santuarios y Peregrinaciones”. Además, se edita, en febrero de 1973, un boletín bajo la forma de suplemento de la publicación “Investigaciones de Lourdes”, que en práctica hace de enlace con la Hospitalité Notre Dame de Lourdes. La redacción del boletín se le confía al padre Henri Joulia, capellán de la Hospitalité. En este primer número el presidente de la Poëze explica que el boletín es un modo para unir a todos los hospitaliers, pero también un apoyo y un consuelo espiritual. Esta publicación es muy bien acogida ya que muestra la voluntad de unificación de la Hospitalité, la apertura hacia los problemas de los jóvenes y el deseo de la asociación de renovarse. El 16 y el 17 de marzo de 1974 se reúne en Lourdes el Congreso de los Responsables de las Hospitalités diocesanas y nacionales francesas. El primer día está animado por el padre Turquet, delegado en la pastoral de la salud para la región parisiense sobre el tema: “¿Cómo ayudar al enfermo a crear un enlace entre su fe y su vida?”. El segundo día habla monseñor Fauchet, obispo de Troyes, sobre el tema: “¿De qué manera vivimos nosotros esta unión entre fe y vida?”. El Congreso reúne a 470 personas y, entre ellas, 410 son representantes de las diferentes Hospitalités. Estos dos días siempre serán recordados como el momento en que se perfila una nueva misión de los hospitaliers en la Iglesia: el descubrimiento de un auténtico carisma, gracias al cual se quiere hacer compartir al enfermo su propia vida.El 1974 es también una fecha importante para la Hospitalité, porque a finales de año su presidente de la Poëze dimite. El inesperado anuncio genera un sentimiento de malestar e inquietud en la Hospitalité. El conde de la Poëze, que ha sucedido al tan querido conde de Beauchamp, se ha distinguido por su gran conocimiento de todos los servicios de la Hospitalité, ha sabido conquistar a todos con su humildad, su disponibilidad, su espíritu de servicio, ha dado ejemplo del apego a la Iglesia y a la Santa Sede, de su devoción a la Santa Virgen. Bajo su presidencia, el número de hospitaliers ha crecido considerablemente, tanto que han tenido que preparar y crear nuevos locales para hospedar a todos los voluntarios. Monseñor Donze anuncia esta dimisión en enero de 1975 y, después de haber nombrado a de la Poëze presidente honorario, designa como sucesor a Edouard Imbert,

Page 41: Fondazione Cariplo Annual Report

H o s p i t a l i t é 39

L A H O S P I TA L I T é H A C E 1 0 0 A ñ O S – 1 9 6 0 - 1 9 8 5

presidente de la Hospitalité de Marsella y miembro del Consejo. En estos diez años inmediatamente precedentes al centenario de la Hospitalité se suceden cuatro presidentes: Edouard Imbert hasta 1978, que renueva la asociación “sirviendo en la humildad”; Jean-Marie Landouzy hasta 1982, que ofrece una colaboración eficaz entre el jurista y el canónigo; Jean Toso, en el cargo sólo un año y, para terminar, el que llevará a la Hospitalité al centenario y más allá, François Guilbaud.

El período de la presidencia de Edouard Imbert está marcado por renovaciones y reconciliaciones. Decide delinear de nuevo y desde el principio de su mandato seis puntos fundamentales: el hospitalier es, ante todo, un servidor; mandar significa, ante todo, servir; la humildad y la disponibilidadson dos cualidades esenciales para el hospitalier; la medalla no es una recompensa y el hospitalier debe ser reconocido, no por los tirantes, sino por su rosario. Para Imbert hay que identificarse en el espíritu del evangelio y de la conveniencia de encontrar una imagen de la caridad, más alegre y auténtica. En 1974 el padre Joulia, felicitando a los miembros de la Hospitalité, subraya en especial dos palabras que deben concernir a la asociación y a sus miembros: reconciliación y renovación. Habrá, sin embargo, que esperar cinco años para llegar a la redacción de una nueva carta de la Hospitalité (promulgada el 8 de septiembre de 1978) que establece nuevas reglas: los presidentes ya no serán vitalicios, el Consejo de la Hospitalité ya no estará compuesto sólo por franceses, sino que se abrirá a los voluntarios de otras naciones, habrá stages de formación para cada nuevo hospitalier, de forma que cada uno pueda conocer todos los servicios y pasar de uno a otro. En 1979 se convierte en presidente de la asociación Jean-Marie Landouzy,

Taller para la reparación de los coches de los enfermos

abogado en el Consejo de Estado y en el Tribunal de Casación, que al final de la segunda guerra mundial promete ponerse al servicio de Notre Dame de Lourdes. Landouzy ha sido elegido para llevar adelante el trabajo de los últimos años, sobre todo respecto al esfuerzo realizado para que cada hospitalier tenga una vida espiritual más intensa y más comunitaria y que participe aún más en la búsqueda de la actividad pastoral de la Iglesia. Se continúa con la presidencia de François Guilbaud (entre los dos presidentes que guían la asociación,

Page 42: Fondazione Cariplo Annual Report

H o s p i t a l i t é40

L A H O S P I TA L I T é H A C E 1 0 0 A ñ O S – 1 9 6 0 - 1 9 8 5

por un breve periodo de tiempo, está también Jean Toso) que llevará a la HNDL a su centenario. Además de la preparación de este importante acontecimiento, el nuevo presidente está encargado de mejorar la organización administrativa de la asociación y la formación de los jóvenes voluntarios. El período empieza con otro acontecimiento importante: una peregrinación del Papa a Lourdes el 15 de agosto de 1983. Juan Pablo II irá, en efecto, a Lourdes para celebrar el Jubileo de la Redención. Al llegar al aeropuerto de Ossun es acogido por el presidente de la República francesa, François Mitterand, (para

mayor información sobre las visitas de los papas a Lourdes remitimos a la ficha dedicada a ello). Se llega así al año del centenario, 1985. El momento que lo marca principalmente es sin duda la peregrinación a Roma y la exposición de las imágenes históricas dedicadas a la Hospitalité creada por el padre Joulia y Guilbaud e inaugurada el 24 de abril por monseñor Donze, fue visitada por 40.000 personas. Volviendo a la peregrinación a Roma, del 15 al 22 de marzo cerca de un millar de miembros de la Hospitalité viven uno de los momentos más importantes de la historia de la asociación. En Roma los

hospitaliers pueden, entre otras cosas, visitar las Catacumbas, participar en la misa de Santa Maria Maggiore, en San Pietro,

En el centro, Jeanine Da Badie; a su izquierda, la señorita de Radzisky, el doctor Da Badie y Gil; a su derecha, en segundo plano, el padre Joseph Bordes, rector, la señora Guilbaud y el padre Huchet

Alrededor del Canónigo Etienne Lalaque, a la izquierda, Gil, el doctor Da Badie, la señora Da Badie; a la derecha, la hermana Anne Marie y Lanfry

Page 43: Fondazione Cariplo Annual Report

H o s p i t a l i t é 41

L A H O S P I TA L I T é H A C E 1 0 0 A ñ O S – 1 9 6 0 - 1 9 8 5

en San Giovanni in Laterano, en San Pablo Extramuros y el privilegio mayor: la audiencia con el papa Juan Pablo II. Mientras tanto, en Lourdes se celebra el centenario con una misa internacional, con la participación de los cardenales Etchegaray y Willebrand. Obviamente, el año de festejos no interrumpe la “cotidianidad” de la asociación, es más, las peregrinaciones a Lourdes aumentan, así como la actividad de congresos, de convenios y los días de formación. 1985 es una fecha fundamental para todos los hospitaliers, también para los más jóvenes que han llegado recientemente a la asociación. La peregrinación a Roma está grabada en sus memorias, por eso, para los 125 años, el actual presidente, Antoine Tierny, ha decidido organizar un viaje a la ciudad símbolo del cristianismo.

HospitalierHospitalier, qué bonito nombre, que bien suena.¿Es éste viejo, es éste joven?Es de cualquier edad.Encierra todo el pasado caritativo yMora lleno de promesas.

Hospitalier, el que tiene sumorada como su corazón,Abierta a todas las miserias y a todas las penasPara socorrerlas y aliviarlas.

Hospitalier, el que se detiene, tanto Sobre los sufrimientos del almacomo sobre las heridas del cuerpo para medicarlas y curarlas.

Hospitalier, el que se hace buenSamaritano del viajero,Cirineo de los caminos decruz demasiado duros,El Cristoforo de los pequeños y de los pobres.

Hospitalier, el que lleva o guíahacia el manantial de vidaA los tristes y a los enfermos que se desmayany que gritan Ayuda.

Hospitalier, no sólo sobre el camino de Lourdes,en la acogida o en la Gruta, bajo la miradade la Virgen, ¡es demasiado fácil!

Hospitalier, ahora y siempre con nosotros.En nuestras obras, en la oficina, en el trabajo.Por todos nuestros hermanos y todos los díasDe nuestra vida.

Georges Lanfry

Descripción de el hospitalier

por Georges Lanfry

Un autobús para el transporte de los enfermos

Desembarque de los enfermos, aeropuerto de Ossun (hacia 1970)

Page 44: Fondazione Cariplo Annual Report

H o s p i t a l i t é42

H I S T O R I A R E C I E N T E – 1 9 8 6 - 2 0 0 8

Después del centenario la asociación

se reorganiza yalcanza los diez mil voluntarios

La Hospitalité en los últimos veinte años

También después del centenario, la Hospitalité continúa su misión y su empeño para renovarse, estar al paso con los tiempos y ser cada vez más eficiente, tanto respecto

a los voluntarios, como a los peregrinos que llegan a Lourdes. Desde las alboradas de la asociación, los responsables siempre se han preocupado por el desarrollo de la vida cristiana de sus miembros y de la devoción mariana. El Rosario sigue siendo para los hospitaliers la oración de todo el día, oración que recitan con los enfermos, oración a través de la cual dan ejemplo. La asociación con el tiempo, adquiriendo experiencia, ha sentido la necesidad de organizarse en servicios para acompañar a los enfermos en cada etapa de su peregrinación. La devoción y el empeño de la Hospitalité han atraído a un número cada vez mayor de voluntarios, algunos de los cuales deciden incluso establecerse en Lourdes.

Entre 1986 y 2008 esta conciencia se hace cada vez más fuerte y crece al igual que la necesidad de otras mejoras. Renovaciones y cambios queridos por sus presidentes y que han llevado a la Hospitalité a convertirse en la que conocemos hoy. Hasta 1994, la asociación queda bajo la dirección del mismo presidente, que la ha acompañado en el año del Jubileo, François Guilbaud. Desde 1994 a 2008, la Hospitalité Notre Dame de Lourdes ve la sucesión sólo de tres presidentes: Etienne de Roaldès, que sustituye a Guilbaud en 1994 y acompaña a la asociación hasta 1999; Gabriel Barbry, que conduce la cofradía al cambio de siglo, y, por último, Antoine Tierny, que desde 2004 mantiene la asociación al paso del tiempo y la acompaña a vivir otro momento muy importante: los 125 años.

Durante este período también se rinde homenaje a algunos grandes hospitaliers desaparecidos en estos años, que se han distinguido por su devoción, humildad, calma y por sus

Page 45: Fondazione Cariplo Annual Report

H o s p i t a l i t é 43

H I S T O R I A R E C I E N T E – 1 9 8 6 - 2 0 0 8

25 Marzo de 1988 - Monseñor Donze cede sus poderes a monseñor Sahuquet

La entrada de la Hospitalité Notre Dame de Lourdes

iniciativas. En 1972 desaparecieron Frotier de La Messeliere, titular desde 1949, jefe del servicio general, muy activo en el interior de la asociación, y Elie Longuet, jefe del servicio en las Piscinas que ha pasado treinta años en Lourdes sirviendo a los enfermos. Entre las mujeres, en cambio, emerge un nombre: Solar Eugénie de Borurbon, responsable de la ropa de baño de las Piscinas, un trabajo importante, desarrollado con gran eficacia y discreción, nombrada por monseñor Théas en 1958 presidente de la Hospitalité de las Piscinas. Un papel que desarrolla durante diecisiete años y coronado con la construcción de dos pabellones destinados a alojar a las hospitaliers de las Piscinas.

La Hospitalité femenina, en efecto, nacida también entorno a 1880 gracias a de Combettes, entonces presidente de la Hospitalité Notre Dame de Salut, y a los Padres de la Gruta, avanza en los años al mismo paso que la archicofradía de la que forma parte desde 1978. ésta también puede contar con

Page 46: Fondazione Cariplo Annual Report

H o s p i t a l i t é44

H I S T O R I A R E C I E N T E – 1 9 8 6 - 2 0 0 8

los mismos órganos decisorios (presidente, consejo, etc.) que la cofradía masculina. Existen presidentes de la sección de las Piscinas, de las madres superioras que administran el hospital Notre Dame de los Dolores, ahora Accueil Marie Saint-Frai, y otras madres superioras que dirigen el Asile Notre Dame, ahora Accueil Notre Dame.

Desde el año del centenario hasta 2008, la Hospitalité ha querido dar muchos pasos adelante. Por ello ha desempolvado los viejos archivos que contenían las cartas de quejas de los enfermos, que denunciaban la torpeza y, a menudo, la indelicadeza de algunos voluntarios, conflictos existentes entre los miembros de las hospitalités diocesanas y los hospitaliers de Notre Dame de Lourdes, las controversias entre las enfermeras de Saint-Frai, el Asile y los hospitaliers de las Piscinas. Teniendo en cuenta esta situación, los presidentes han ordenado los diferentes servicios.En el ámbito de acogida, por ejemplo, desde siempre los enfermos de las peregrinaciones habían sido alojados en tres Accueils diferentes: Saint-Frai, Notre Dame y Sainte Aeropuerto: embarque

de un enfermo

Los peregrinos se rocían con agua bendita antes de las Piscinas

Page 47: Fondazione Cariplo Annual Report

H o s p i t a l i t é 45

H I S T O R I A R E C I E N T E – 1 9 8 6 - 2 0 0 8

1986 MUNDOExplota un reactor en la central nuclear de Chernóbil, en la Unión Soviética. Una nube radiactiva se difunde por buena parte de Europa, generando una alarma ambiental en todo el continente

1986 MUNDOCambio histórico en las relaciones entre Iglesia católica y hebraísmo. El papa Juan Pablo II y el rabino jefe de la comunidad romana Toaff rezan juntos en la sinagoga de Roma. Es la primera vez que esto ocurre en la historia de los papas

1988 MUNDOPrimeros cambios en el orden global, aún marcado por la Guerra Fría, gracias a la era del presidente soviético Gorbachov. En Polonia se desarrolla el sindicado católico Solidaridad de Lech Walesa

1989 CHINAEl gobierno de Pekín reprime con sangre la revuelta estudiantil en el mes de junio con la matanza de la plaza Tien an Men

1989 MUNDOLa caída del Muro de Berlín marca el final de la Guerra Fría Estados Unidos - URSS, mientras que la era comunista se encamina a su conclusión

1990 MEDIO ORIENTEEstalla la Primera Guerra del Golfo tras la invasión de Kuwait por parte de las tropas iraquíes de Saddam Hussein

1995 ISRAELEl primero ministro israelí y Nobel de la Paz, Yithzak Rabin, es asesinado en un atentado en Tel Aviv, suponiendo el principio de una época difícil en las relaciones con el pueblo palestino

1997 MUNDOAcaba el dominio británico de Hong Kong, que vuelve a China después de 99 años

1997 MUNDOEl 5 de septiembre muere la Madre Teresa de Calcuta, que será proclamada Beata en 2003 por el papa Juan Pablo II

2001 MUNDOEl 11 de septiembre un grupo de terroristas islámicos, pertenecientes a la organización internacional Al Qaeda, desvían aviones civiles para chocar contra las Torres Gemelas del World Trade Center de Nueva York, provocando su derrumbamiento. Otro avión es dirigido contra el Pentágono, mientras que un cuarto, que tenía como objetivo la Casa Bianca, gracias a una revuelta de los pasajeros, no alcanza su objetivo y se precipita en un prado de Pensilvana. Se contarán 3.000 muertos. América y todo el occidente están bajo shock

2004 MUNDOLa sonda espacial Spirit envía a la Tierra las primeras imágenes en color del planeta Marte

2005 MUNDOEl 2 de abril muere el papa Juan Pablo II después de 27 años de pontificado. El 19 de abril es elegido como su sucesor el cardenal alemán Joseph Ratzinger, con el nombre de Benedicto XVI

2008 ESTADOS UNIDOSBarack Obama gana las elecciones americanas. Es el primer presidente de color en la historia de los Estados Unidos, premio Nobel de la Paz al año siguiente

CUáNDO Y QUé

Page 48: Fondazione Cariplo Annual Report

H o s p i t a l i t é46

H I S T O R I A R E C I E N T E – 1 9 8 6 - 2 0 0 8

Bernadette. En 1997 se decide que serán solamente el gran Accueil Notre Dame y, al año siguiente, en 1998, el Accueil Saint-Frai completamente renovado, los que alojarán a los enfermos. Se reordena también la organización: las hospitalités diocesanas se ocuparán de las habitaciones de los enfermos y de los refectorios, mientras que los hospitaliers de Notre Dame de Lourdes se encargarán de los servicios más generales. También los medios de transporte se renuevan. Los carritos y las camillas se hacen más cómodos y fáciles, en la estación se construyen vías suplementarias y se equipa la estación de puntos de descanso con lavabos y servicios. En 1999 habrá un cambio aún más significativo para la asociación: se modifica el Estatuto y se crea una única Hospitalité subdividida en cuatro servicios, el Servicio Saint Jean Baptiste, que se ocupa de las Piscinas,

Los peregrinos en procesión mariana

En la Esplanade, distribución de agua a los enfermos

Page 49: Fondazione Cariplo Annual Report

H o s p i t a l i t é 47

H I S T O R I A R E C I E N T E – 1 9 8 6 - 2 0 0 8

el Servicio Notre Dame, el nuevo Servicio Marie Saint-Frai y, por último, el Servicio Saint Joseph.

Esta nueva organización funciona bien, pero la asociación también necesita un servicio capaz de formar a los futuros hospitaliers y uno que se ocupe de la logística, de comprobar que todo el material funcione, que los edificios destinados al alojamiento estén en buen estado y que los servicios de descanso logren satisfacer las necesidades de los peregrinos. Así, en el año 2000, se crean dos nuevos servicios que se ocuparán de estos aspectos, el Servicio Sainte Bernadette y el Servicio Saint Michel. A partir de 2005 se decide renovar aún más los medios de transporte interno que deben asegurar la lanzadera con la estación, el aeropuerto y la Gruta. Se adquirirán, por lo tanto nuevos autobuses para los enfermos, camillas, sillas de ruedas más cómodas y seguras. Junto a los servicios y al material, también los edificios se renuevan. En 1993 se construye una casa-alojamiento que toma el nombre de “Benoît Labre”; en el año 2000, los despachos de la HNDL se desplazan al Accueil Jean Paul II; en 2007, se decide vender la Villa Marie Joseph y, en 2008, se construye la casa-alojamiento “Notre Dame du Oui.”

Las velas, símbolo de esperanza y plegaria

Page 50: Fondazione Cariplo Annual Report

H o s p i t a l i t é48

L A H O S P I TA L I T é H OY

Al umbral de susprimeros 125 años de vida,la Hospitalité

Notre Dame de Lourdes es hoy una de

las asociaciones más importantes a escala mundial. En la base

de su actividad,reglas precisas y un espíritu de acogida

inalterable en el tiempo

Una sólida realidad

«Para confortar a los que sufren, para la reconciliación de los hombres, para la unidad de la Iglesia y la paz en el mundo”. Ser hospitalier no significa

convertirse sencillamente en un voluntario, sino adoptar un auténtico proyecto de vida, un espíritu de servicio hacia el más débil, que se traduce en cada gesto de la propia existencia cotidiana, tanto en Lourdes como en cualquier otro lugar del planeta. Precisamente por esto, la Hospitalité Notre Dame de Lourdes no puede considerarse igual que otras asociaciones, por muy importantes y dignas de reconocimiento que sean, que obran dentro del mismo ámbito. Son muchas las razones que hacen realmente única la asociación nacida en el lejano 1885 en la pequeña localidad de los Pirineos, elegida sólo pocos años antes por la Virgen para manifestar al mundo su mensaje de fe. Ante todo, el peculiar contexto representado por Lourdes, que de una sencilla aldea de campesinos se ha transformado en el fulgor del culto mariano a nivel mundial: entre estas montañas se respira una atmósfera única, inalterada en el tiempo, una sensación que se vuelve aún más intensa durante la oración en la Gruta de Massabielle, donde la joven Bernadette recibió las visitas de la «Señora vestida de blanco». La sugestión de estos lugares, la profunda devoción de los peregrinos y los numerosos enfermos que afrontan viajes, a menudo largos y pesados, llevan a la creación de un ambiente único, donde la palabra “acogida” oculta detrás de sí un valor del todo especial. Un mensaje captado completamente por la Hospitalité y por todos los que, jóvenes o adultos, deciden emprender el camino que los llevará a ser miembros de la asociación.

A pesar de los años, a pesar de las épocas tan diferentes, a pesar de una pérdida general de valores y interés por parte de las nuevas generaciones. Desde 1885 hasta hoy, en los umbrales del 125° aniversario de vida, la Hospitalité Notre Dame de Lourdes ha sabido crecer, desarrollarse, acoger de día en día a

Page 51: Fondazione Cariplo Annual Report

H o s p i t a l i t é 49

L A H O S P I TA L I T é H OY

un número cada vez mayor de personas dispuestas a afrontar una nueva e importante experiencia de vida. A lo largo de su historia no han faltado problemas, dificultad, obstáculos, sin olvidar los dos conflictos mundiales que han puesto en serio peligro al mismo Lourdes. A ello se une el camino, nada fácil, de la asociación durante el último siglo, dispuesta a ir al paso con los tiempos, sin desnaturalizar su proyecto

original. Misión que, ahora ante esta celebración tan importante, podemos decir que está plenamente cumplida. La Hospitalité, fruto de esta historia tan rica y valiosa, ha sabido transformar los problemas en oportunidad de mejora y de crecimiento espiritual; con el tiempo se ha transformado y desarrollado en línea con las crecientes exigencias y con el número cada vez mayor de peregrinos y enfermos en viaje

La entrada de la Hospitalité Notre Dame de Lourdes

Page 52: Fondazione Cariplo Annual Report

H o s p i t a l i t é50

L A H O S P I TA L I T é H OY

hacia Lourdes; ha sabido organizar de la mejor manera sus propios recursos con el objetivo de ofrecer el mejor servicio y el más auténtico posible.

La Hospitalité Notre Dame de Lourdes es hoy una asociación de relevancia mundial, que cuenta de momento con más de 20.000 voluntarios. Un crecimiento exponencial, sobre todo si pensamos en el número de hospitaliers operantes en el lejano 1885, como se lee en las palabras del actual presidente, Antoine Tierny: «La Hospitalité es la única estructura en Lourdes que se ocupa de la acogida de los enfermos y de los minusválidos. Los recogemos en la estación, en el aeropuerto, los acompañamos a las celebraciones litúrgicas del Santuario y a las Piscinas, lugar devocional que ha conocido en los últimos años un incremento de visitas del 23% con respecto a los años anteriores. Las actividades de la Hospitalité se iniciaron en 1885 sólo con tres voluntarios, mientras que ahora hemos llegado a 20.000». Los hospitaliers actualmente esparcidos por el mundo, provienen de más de 70 países de los cinco continentes, y para realizar su servicio con los peregrinos enfermos, aceptan llegar a la localidad mariana corriendo ellos completamente con sus propios gastos. La tendencia positiva de los últimos años está testimoniada también por las palabras del presidente Tierny: «En 2008, año en que se ha celebrado el 150º aniversario de las apariciones marianas, hemos podido contar con 8.535 voluntarios (4.047 hospitaliers, 3.747 stagiaires y 741 asistentes), un millar más que en los años anteriores». Otro elemento que caracteriza a los miembros de la Hospitalité Notre Dame de Lourdes es su internacionalidad. Muchos son italianos (en total, 3.036, entre hospitaliers, stagiaires y asistentes), seguidos por franceses (2.739), americanos (471), ingleses (429), irlandeses (311), alemanes (252) y belgas (72). También crece de año en año el número de los voluntarios procedentes de los Países orientales, 221 entre hospitaliers, stagistas y asistentes.

Para administrar de la mejor manera posible las actividades cotidianas y el creciente número de peregrinos (hasta seis millones) que cada año afluyen a Lourdes, la Hospitalité se ha equipado con el tiempo de una compleja organización para no descuidar ningún aspecto del servicio y de la acogida, ofreciendo una obra lo más exhaustiva posible. Ya desde su fundación, certificada el 28 enero de 1885, la asociación se pone bajo la autoridad del Obispo de Tarbes y Lourdes, guía y pastor de las asociaciones de cristianos empeñados en el servicio de la Iglesia católica en su propia diócesis. Todo como confirmación de un proyecto acreditado que ha obtenido consideración, reconocimiento y respeto a lo largo del último siglo, como ha quedado manifestado ampliamente en el curso de las visitas papales que han tenido a Lourdes como protagonista. La Hospitalité Notre Dame de Lourdes está presidida actualmente

Page 53: Fondazione Cariplo Annual Report

H o s p i t a l i t é 51

L A H O S P I TA L I T é H OY

por Antoine Tierny, recientemente confirmado por segunda vez en el cargo de presidente, como colofón a más de treinta y siete años de empeño y servicio como hospitalier. En el papel de capellán general ha sido nombrado el padre Michel Riquet, sacerdote de Lourdes. El presidente, el secretario general y el tesorero de la Hospitalité no están relacionados directamente a un servicio particular. Su tarea es asegurar la buena marcha general, coordinando los diferentes repartos y favoreciendo su interacción recíproca. El presidente, además, tiene el encargo de mantener las relaciones con el Santuario Notre Dame de Lourdes y con las demás asociaciones presentes en el territorio. El capellán general lleva a cabo el encargo pastoral que le ha confiado el obispo de Tarbes y Lourdes celebrando los sacramentos y ocupándose de la asistencia espiritual de los numerosos hospitaliers que, en su camino de peregrinación y servicio, se ponen a disposición de sus hermanos más débiles.

Desde el 5 de diciembre de 1999, las actividades de la Hospitalité se han subdividido oficialmente en seis Servicios diferentes, cada uno de los cuales está presidido por un responsable, que también ostenta el cargo de vicepresidente junto al presidente Tierny:

El Servicio Sainte Bernadette: se ocupa de la acogida de los futuros miembros de la Hospitalité, asegurándoles una adecuada preparación para la tarea que les espera durante los cuatro años de stage necesarios para convertirse en

hospitaliers. Para ellos se ha preparado un programa específico de formación en seis idiomas (francés, italiano, español, inglés, alemán y neerlandés), en base a las diferentes nacionalidades de los stagiaires, gestionado por un Consejero y por los “Formadores” del Servicio. Generalmente, los trabajos se organizan semanalmente: los lunes están reservados a los stagiaires del primer año, los martes, miércoles y jueves a los del segundo, tercero y cuarto año, mientras que los viernes están dedicados a una especie de balance general de la semana, durante el cual los stagiaires analizan su vivencia. Tal programa es obligatorio para los primeros cuatro años de servicio, y está abierto a todo los hospitaliers que presenten la solicitud y deseen vivir un período de formación espiritual. El Servicio también es responsable de la Oficina de acogida en la entrada del Accueil Jean-Paul II, donde se encuentra la sede de la Hospitalité Notre Dame de Lourdes.

Dos voluntarios facilitan información a los peregrinos

en la Esplanade

Page 54: Fondazione Cariplo Annual Report

H o s p i t a l i t é52

L A H O S P I TA L I T é H OY

El Servicio Saint Jean Baptiste: tal servicio está dirigido al acompañamiento en las Piscinas de los peregrinos, en especial de enfermos y minusválidos. El recorrido del

Baño, en que se sumergen en una bañera llena de agua del Manantial, es un camino de fe en conmemoración del sacramento del Bautismo y de las palabras que la Virgen dirigió a Bernadette: «Id al manantial a beber y lavaros». Realizar este recorrido es una experiencia humana particularmente fuerte e importante, un mensaje de fe y humildad capaz de cambiar la vida de muchas personas. Por este motivo la obra de la Hospitalité asume aquí un papel muy especial: los hospitaliers deben acoger y ayudar a los peregrinos con dedicación y respeto, incluso frente a situaciones prácticas no fáciles. Desvestir y revestir a las personas enfermas, acompañándolas en un gesto, como el baño en las Piscinas, de tan fuerte impacto, requiere un auténtico espíritu de hermandad, generosidad y de amor hacia el prójimo. A diferencia de los demás Servicios, generalmente activos de marzo a octubre, en concomitancia con la estación de mayor afluencia de las peregrinaciones, el Servicio Piscinas, por su especial relevancia,dura todo el año, con variaciones de horario entre la estación veraniega y la invernal.

El Servicio Notre Dame: se ocupa de coordinar la actividad en el centro de acogida de los peregrinos enfermos que lleva el nombre de “Accueil Notre Dame”, con una capacidad

de más de 900 personas. Los hospitaliers, prácticamente todas mujeres, trabajan aquí en estrecho contacto con la congregación de las Hermanas de Nevers, responsables de la estructura, y con el personal del Santuario. Las tareas que hay que administrar son innumerables, y aunque no están directamente relacionadas con el acompañamiento de los enfermos, son igualmente importantes para garantizar la mejor acogida posible: el servicio en las mesas (ayuda en la cocina y en la distribución de las comidas), limpieza de los locales comunes, trabajo en las Sacristías,

costura y bordado, asistencia (para médicos y enfermeras) en los servicios de urgencias, recibimiento a la entrada de los locales de la Hospitalité Notre Dame de Lourdes, presencia en el servicio “objetos perdidos”, ayuda en la preparación de composiciones florales para los lugares de culto. En base a sus disponibilidades, los stagiaires pueden también unirse a los equipos de otros Servicios de la Hospitalité, en concreto en las Piscinas, en la estación, en la Gruta o, durante las grandes celebraciones, en la Esplanade, o bien en la basílica San Pío X. Del mismo modo, los hospitaliers a menudo son invitados a unirse a las monjas en los momentos de reflexión y oración.

El Servicio Marie Saint-Frai: el Servicio está relacionado con el “Accueil Marie Saint-Frai”, estructura situada cerca de los

Ayuda práctica y apoyo moral: la intención de los hospitaliers es también dar una sonrisa

Un grupo de enfermos en peregrinación a Lourdes

Page 55: Fondazione Cariplo Annual Report

H o s p i t a l i t é 53

L A H O S P I TA L I T é H OY

Santuarios, administrada por la congregación de las Monjas de Saint-Frai, capaz de acoger hasta a 400 peregrinos enfermos durante los viajes organizados. Los hospitaliers empeñados aquí trabajan en estrecho contacto con las monjas de Saint-Frai y, dependiendo de su disponibilidad, también prestan la misma colaboración en otros repartos.

El Servicio Saint Michel: administra y coordina todo lo relativo a la comida y al alojamiento de los miembros de la asociación presentes en Lourdes para acoger a los

enfermos. El Servicio se ocupa además del “Foyer de la Hospitalité” y del “Atelier”, que gestiona toda la parte logística del trabajo, en concreto de lo relativo al material necesario para la asistencia, desde los carros y las camillas, hasta llegar a las intervenciones para la manutención en los diferentes edificios de la asociación. Los hospitaliers de este Servicio se ocupan también de las instalaciones hidráulicas, de la carpintería, electricidad, etc. en todos los edificios de la HNDL

Para ser acogidos en el primer año de stage en la Hospitalité hay que ser mayores de edad y no haber superado los 70 años. Si se cumplen tales requisitos, es necesario presentar una solicitud a la asociación rellenando un módulo que se puede descargar en el sitio www.hospitalite-lourdes.com, enviando [email protected] o bien por correo a esta dirección: Hospitalité Notre Dame de Lourdes, BP 197, 65016 - Lourdes Cedex (Francia).

Al módulo de solicitud deberán agregarse una foto de carnet y una presentación por escrito del propio párroco o de un miembro de la Hospitalité. La duración de un stage está comprendida entre un mínimo de 6 días y un máximo de 15. La presencia en Lourdes es totalmente voluntaria y hay que hacerse cargo de los gastos de viaje, del alojamiento y de las comidas. Es preferible llegar un sábado o un domingo, ya que los cursos de formación se inician los lunes por la mañana. La cuota anual de adhesión a la Hospitalité o “cotisation” es de 8 euros para los stagiaires y de 15 euros para los hospitaliers.

Para convertirse en hospitalier es necesario asistir a los stages durante cuatro años y después de solicitarlo y ser admitido, tras la ceremonia del engagement, se entra a pertenecer a la Hospitalité Notre Dame de Lourdes como miembro efectivo.

Cómo convertirse

en hospitalier

Algunas informaciones

para hacer un stage

o entrar a formar

parte de la

Hospitalité Notre

Dame de Lourdes

La Hospitalité Notre Dame de Lourdes a la entrada de los Santuarios en la Puerta Saint Michel

Page 56: Fondazione Cariplo Annual Report

H o s p i t a l i t é54

L A H O S P I TA L I T é H OY

El Servicio Saint Joseph: este Servicio cumple una multitud de tareas: acogida de los peregrinos en la estación de Lourdes y en el aeropuerto de Tarbes-Lourdes, tanto a su llegada como a su salida. El transporte de estos peregrinos, en los autobuses de la Hospitalité, hacia los diferentes

acogidas. Acogida en la Gruta y en las Piscinas. Ayuda en la organización de todas las ceremonias cotidianas en estrecha colaboración con los Santuarios. Gestión de las llegadas y salidas de las peregrinaciones al Accueil Marie Saint-Frai y Notre Dame, etc.

La Hospitalité Notre Dame de Lourdes, fuerte por la notable consideración obtenida en el seno de la Iglesia, y por la experiencia acumulada en años de servicio, desde las primeras y pioneras actividades, se ha estructurado con una organización sólida y eficiente, llegando a convertirse en una de las más famosas y consolidadas realidades en el mundo del voluntariado católico. Todo ello sin perder de vista en ningún momento su original vocación, imprescindible fundamento de la elección de vida de

cada uno de sus miembros. Por esto, convertirse en hospitalier requiere un empeño muy especial y una preparación laboriosa, para mantener puro y intacto ese espíritu sobre el que la asociación, en todo momento, ha basado sus actividades y su propia existencia. Un empeño reconocido y estimado incluso por el papa Juan Pablo II, que escribió en una oración dirigida a una delegación de hospitaliers acogida en audiencia en el Vaticano: «Desde que, en la Gruta de Massabielle, se escuchó la llamada de la Virgen a la oración y a la penitencia, desde que se reconocieron las señales de la misericordia, los enfermos han venido a rogar, a ofrecer sus sufrimientos, a pedir alivio, a pedir la gracia de la esperanza y de la paz del corazón. Estos hombres y mujeres, jóvenes y maduros, han aparecido enseguida como los privilegiados del amor salvador de Cristo

y los predilectos de su Madre, infinitamente compasiva. La presencia de los enfermos ha suscitado en torno al santuario y en las peregrinaciones un intenso movimiento de hermandad y ayuda para acompañarlos. Muchos de los que los han cuidado se han ligado a esta tarea y la han realizado año tras año. Así ha nacido en Lourdes vuestra cofradía, enseguida asociada a innumerables cofradías y empeñada en las peregrinaciones, organizadas con regularidad en países de Europa y otras partes del mundo». El llorado pontífice continuó enunciando las características de cada hospitalier, una descripción que traza un retrato ejemplar: «Considerando lo que representa la Hospitalité de Lourdes, me conmueve el sentido evangélico de lo que ésta realiza. Se podría en ello descubrir una larga serie de respuestas a las palabras de la Madre de Jesús: “Haced lo que él os diga”. Servir a los enfermos es hacer lo que el

Señor se espera de vosotros. Y cuando se ha hecho durante de una peregrinación, la experiencia

de la imitación del Señor bajo los rasgos del Buen Samaritano, como

él se describe a sí mismo en el Evangelio, ciertamente no puede

ser una experiencia aislada, de un día. Los animadores de la Hospitalité vuelven año tras año. Además, durante el año, prolongan su acción en la comunidad de su vida cotidiana. Siguendo las huellas del Señor, tanto en Lourdes como en cualquier otro lugar, saben que el socorro

fraterno llevado a los que viven tantos y diferentes

sufrimientos implica, al mismo tiempo, una ayuda de

orden material, un testimonio de orden espiritual, una experiencia de

comunidad eclesial».

Las palabras del papa Juan Pablo II no podrían presentar de manera más exhaustiva la complejidad del

recorrido que lleva a convertirse en hospitaliers: no es una elección improvisada sino el cumplimiento de una misión, una “marca” impresa de modo indeleble por la oración: «Hoy querría sencillamente subrayar la riqueza de vuestro empeño. Cuando los miembros de la Hospitalité pronuncian su acto de consagración, ruegan a la Virgen Inmaculada, en comunión con el Espíritu Santo y en el fervor de la fe; piden la gracia de trabajar “para confortar a los que sufren, para la reconciliación

La medalla de la Hospitalité Notre Dame de Lourdes

Page 57: Fondazione Cariplo Annual Report

H o s p i t a l i t é 55

L A H O S P I TA L I T é H OY

participar cada vez más en los numerosos esfuerzos pastorales de la Iglesia, incluso en otros ámbitos». Una tarea, pues, nada fácil, que requiere empeño, determinación, una fe profunda, la capacidad de afrontar incluso situaciones problemáticas. «Nuestros números, en general crecen continuamente – ha dicho el presidente Tierny - Por ejemplo, en 2008, con respecto a los años anteriores, hemos registrado un crecimiento del 10% de hospitaliers, del 15% de stagiaires y del 31% de asistentes. Baste pensar que cada año formamos a unos 400 nuevos stagiaires». La única queja del presidente Tierny es la falta de un grupo numeroso de jóvenes, muchos de los cuales participan en los stages de preparación, pero no terminan el camino. Pero el creciente interés hacia la Hospitalité Notre Dame de Lourdes, en especial hoy que celebra sus 125 años de vida, junto al “despertar” de las nuevas generaciones respecto a la solidaridad y al empeño en el mundo del voluntariado, católico también, son las primeras señales de un cambio de rumbo que plantea las mejores bases para el futuro.

de los hombres, para la unidad de la Iglesia y la paz en el mundo”. Con esta oración, vosotros delineáis un admirable programa. Con vosotros, me gustaría dar gracias por todo lo que se ha realizado, y me gustaría con vosotros rogar a la Madre del Señor para que os ayude a realizar cada vez más intensamente vuestra acción, y, en concreto, para que ayude a muchos jóvenes a acoger la llamada evangélica de la caridad en todas sus dimensiones. Este testimonio debe contribuir a dar a la Iglesia un nuevo rostro y a abriros vosotros mismos a las diferentes solicitudes pastorales de la Iglesia». Y más aún: «Que podáis contribuir a este gran aspecto de la misión de la iglesia: acoger y visitar a los más pobres, a los que más sufren entre nosotros, acompañarlos con la discreción que requiere el sufrimiento del otro y el misterio de su camino interior; vosotros los ayudáis también a recibir la gracia salvadora del Redentor para que, reconfortados por la ayuda de sus hermanos, puedan ser iluminados en la fe, la fuerza de la esperanza y el amor. Esta intensa experiencia os conduce a

En 125 años de actividad basada en el servicio y la oración, la Hospitalité Notre Dame de Lourdes ha llegado a convertirse en una de las asociaciones más importantes del mundo católico

Page 58: Fondazione Cariplo Annual Report

H o s p i t a l i t é56

E L F U T U R O D E L A H O S P I TA L I T é

El futuro no nos pertenece…

Es la letra de unode los textos más bellos

que cantamos en Lourdes: «La primera en camino,

Maria, tú nos empujasa arriesgar nuestro

“sí” por losimprevistos de Dios»

Ciento veinticinco años y más

Por el contrario, lo que quizás nos pertenece y que representa la justificación misma de este folleto es - también a imagen de María - meditar bien todo esto

en nuestro corazón (Lc 2.19) para que todo lo pasado se vuelva presente y se transforme en memoria viva, portadora de futuro. Es normal decir que cuando no se sabe adónde se va, hay que mirar de dónde se viene… La Hospitalité dice “dónde” hay que ir: es un servicio cada vez más grande a nuestros hermanos peregrinos, enfermos y minusválidos, pero la relectura de su historia puede ayudar indudablemente a discernir “cómo” ir mejor.

Aquí, afloran al menos dos constataciones de estas páginas de recuerdos. La primera, positiva, es la de la sorprendente capacidad de esta institución que se llama Hospitalité de volver a ser protagonista y de adaptarse en función de los numerosos acontecimientos y de las diferentes épocas, sobre todo, gracias a responsables de gran entrega y calidad humana y a la movilización y a la disponibilidad de los voluntarios.

La segunda constatación, más negativa, es que, salvo graves catástrofes -las guerras, en concreto- el mundo exterior tiene poca penetración en Lourdes. Por otra parte, una experiencia que vivimos todos, individualmente, es la de la “burbuja de Lourdes”: cuando estamos en Lourdes, tendemos a olvidarnos de que el mundo existe…

Quizás podríamos partir de estas dos constataciones para preparar el futuro: consolidando la primera y corrigiendo la segunda. En términos prácticos, la capacidad de adaptación y movilización tendrá que conservarse y desarrollarse, sencillamente porque las circunstancias locales lo exigen. El entorno de la misión hospitalier evoluciona rápidamente en los términos que todos tenemos bien claros en el espíritu: hoy,

Page 59: Fondazione Cariplo Annual Report

H o s p i t a l i t é 57

E L F U T U R O D E L A H O S P I TA L I T é

Un joven enfermo africano de peregrinaciòn en Lourdes

A la izquierda una imagen de la Virgen de Lourdes, a la derecha Benedicto XVI firma su última encíclica

Caritas in Veritate

Page 60: Fondazione Cariplo Annual Report

H o s p i t a l i t é58

E L F U T U R O D E L A H O S P I TA L I T é

el peregrino y el enfermo ya no son los de ayer, su acercamiento ya no es necesariamente el mismo ni tampoco las condiciones de transporte y estancia, así como tampoco las esperanzas… La pastoral de los Santuarios debe, por tanto, adaptarse y la Hospitalité tiene la tarea de estar siempre a su servicio del mejor de los modos, aceptando ésta también los cambios necesarios. Empeño ampliamente ya asumido en estos últimos años, a partir de la modificación de las reglas hasta… el abandono de los tirantes, pasando por la reestructuración de los servicios, la adaptación de los procedimientos, la mezcla, la renovación de la gestión y de los alojamientos, la modernización de los medios de transporte, etc... Mañana habrá que continuar con la operación Siloë, la flexibilidad de los servicios, la formación continua y todas las reestructuraciones que resulten indispensables. En un contexto cada vez más marcado por el cambio, por la fluidez y por la individualización de los comportamientos, la preocupación por la institución, por su solidez y por su adaptabilidad se vuelve vital. En resumen, el germen del futuro ya está presente en nuestra vida en Lourdes. Y es un futuro exigente.

Indudablemente, lo es aún más desde el punto de vista de “el hospitalier en el mundo”, y en este segundo aspecto es donde nos empeñaremos verosímilmente, mañana, con los mayores esfuerzos. En efecto, entraremos cada vez más en la era de la globalización, de la comunicación, de los intercambios, de la internacionalización. La “burbuja” no resistirá y menos aún los aspectos todavía un poco “franco-franceses” de la Hospitalité. Será indudablemente necesario tener en cuenta que la palabra “hospitalité” deriva de dos palabras latinas, “hospes” y “hostis”, que significan ambas “el extraño” y que la hospitalidad bíblica basada en un ritual de acogida ligado al nomadismo se ponía a la prueba por la caridad y la recompensa divina, (cf. La Croix 19.10.2009). En otras palabras, la hospitalidad entendida como abertura al mundo y acogida de tal mundo se convertirá en una dimensión cada vez más esencial de la doctrina y de la práctica social de la Iglesia. Benedicto XVI lo recuerda a menudo.

Esta presencia del mundo y en el mundo reclamará nuestra atención sobre el hecho de que la actual evolución es portadora, además de numerosas riquezas, de riesgos e incluso de catástrofes virtuales que, aunque menos espectaculares que

Un grupo de jovenes franceses de peregrinación en Lourdes

Las adversas condiciones metereológicas no detienen a los numerosos peregrinos que piden ante la Gruta cada año

Page 61: Fondazione Cariplo Annual Report

H o s p i t a l i t é 59

E L F U T U R O D E L A H O S P I TA L I T é

las del pasado, llegan al corazón mismo de nuestro “oficio» de hospitaliers: la acogida de los más débiles, ya sean enfermos, minusválidos, niños o emigrantes. Ante las amenazas de un nuevo totalitarismo tecnoeconómico, no estará de más que pongamos toda nuestra inteligencia, nuestros brazos y nuestro corazón, para elaborar la nueva “síntesis humanista” que el Santo Padre nos indica en su última encíclica. Así pues, resulta evidente que en todos estos ámbitos, en Lourdes y fuera de Lourdes, nos corresponde a nosotros plasmar y construir en este mundo y en el otro de la mejor manera posible. Por esto es por lo que deberíamos más que nunca “empeñarnos” y a lo que deberíamos “consagrarnos.” En este sentido, es oportuno que la nueva página de la historia de la Hospitalité, que se abre con su 125° aniversario, se caracterice por la renovación de nuestros rituales de compromiso y consagración para diferenciar mejor y asumir lo que quiere decir: “trabajar” en Lourdes y de “ser o estar” en la Iglesia y en nuestro mundo actual.

Page 62: Fondazione Cariplo Annual Report

H o s p i t a l i t é60

Lo

urd

es

y l

os

pa

pa

s

El sugestivo entorno, entre montes y paisajes de roca. La sencilla humildad de una joven, elegida para ser protagonista y depositaria de un prodigio que marcará la historia de la cristiandad. La hermosa “Señora” vestida de blanco y envuelta por una luz misteriosa. Son muchas las razones que hacen única la atmósfera de Lourdes y que han transformado esta pequeña aldea incrustada en los Pirineos en el centro de la devoción mariana a nivel mundial. Pero lo que quizás afecta más, prescindiendo de las milagrosas curaciones que se han sucedido a lo largo de los años, es la sincera y profunda alianza que une a millones de peregrinos a estos lugares, quizás más que a cualquier otro lugar de culto en todo el mundo. Enfermos, personas de cualquier procedencia y cultura que se dirigen a la Virgen en busca de un consuelo físico o espiritual, de su intercesión en favor de una persona querida, simplemente para

orar. Todo esto con fe y una fuerza que se aprecian en las miradas, en los gestos, en el silencio de los grupos de personas reunidas en la Gruta o en la Explanada del Rosario. Basta ir una sola vez a Lourdes para captar esta atmósfera única y a menudo llevarse un recuerdo inolvidable. Muchos pontífices, desde los primeros años después de las apariciones, han comprendido su importancia, confirmando una unión ya indisoluble. Cada viaje papal marca una nueva y fundamental etapa en la historia de la Iglesia, se convierte en ocasión para proclamaciones importantes y deja conmovedores recuerdos Como el caso del Papa Juan Pablo II, que escogió Lourdes como etapa de su último viaje apostólico, los días 14 y 15 de Agosto del año 2004, antes de su muerte, que tuvo lugar en Abril de 2005. Ya postrado por la enfermedad, visiblemente abatido

por el dolor, rogó durante largos y silenciosos minutos en la gruta de Massabielle, confiando su discurso al cardenal Etchegaray. Palabras de afecto y comprensión, en concreto para los enfermos, con los que ha compartido el profundo sufrimiento físico de sus últimos años de vida: «Estoy con vosotros, queridos hermanos y hermanas, como peregrino ante la Virgen; hago míos vuestros ruegos y vuestras esperanzas; comparto con vosotros una parte de mi vida

marcada por el dolor del cuerpo, pero no por ello menos fecunda en el admirable designio de Dios. Junto a vosotros rezo por los que se han encomendado a nuestra oración». Y además: «Siempre he tenido gran confianza, por mi ministerio apostólico, en la entrega, en la oración y en el sacrificio de todos los que sufren. Os pido que os unáis a mí, durante esta peregrinación, para presentarle a Dios, por intercesión de la Virgen

15 agosto de 1983 -

Peregrinación de Juan Pablo

II a Lourdes: en el aeropuerto

de Ossun con Francois

Mitterrand

Una unión profundaMuchos pontífices, desde pocos años después de las apariciones, han llegado a Lourdes para conocer de cerca la realidad única de estos lugares. Desde Pío XII a Benedicto XVI, la historia de un encuentro especial

Page 63: Fondazione Cariplo Annual Report

H o s p i t a l i t é 61

Lo

urd

es

y l

os

pa

pa

s

María, todas las intenciones de la Iglesia y del mundo». Como conclusión de este conmovedor saludo, el papa Wojtyla se dirigió una vez más a los enfermos con palabras de profundo cariño: «Queridos hermanos y hermanas enfermos, me gustaría estrecharos entre mis brazos con cariño, uno a uno, y deciros lo cerca que estoy y lo solidario que soy con vosotros. Lo hago espiritualmente encomendándoos al amor materno de la Madre del Señor, y pidiéndole a Ella que consiga para vosotros las bendiciones y el consuelo de

su Hijo Jesús». El viaje de Juan Pablo II tuvo lugar con ocasión del 150° aniversario de la proclamación del dogma de la Inmaculada Concepción, subrayando la profunda unión con la Asunción de la Virgen: «Arrodillándome aquí, en la Gruta de Massabielle, siento con emoción que he alcanzado la meta de mi peregrinación. Esta cueva, donde apareció María, es el corazón de Lourdes. Hace pensar en la cueva del monte Oreb, donde Elías encontró al Señor, que le habló en el “murmullo de un viento ligero”. Queremos aprender de la humilde sierva del Señor la disponibilidad dócil a la escucha y el empeño generoso en acoger la enseñanza de Cristo en nuestra vida. “Yo soy la Inmaculada Concepción”. Las palabras que María dirigió a Bernadette el 25 de marzo de 1858 resuenan con especial intensidad durante este año, en el que la Iglesia celebra el 150° aniversario de la solemne definición del dogma, pronunciado por el Beato Pío IX con la Constitución apostólica Ineffabilis Deus. Hoy en particular la Iglesia celebra la gloriosa Asunción al Cielo

La llegada a Lourdes con el alcalde Francois Abadie

Juan Pablo II al llegar a los Santuarios en el papamóvil, cerca de la Virgen Coronada

Page 64: Fondazione Cariplo Annual Report

H o s p i t a l i t é62

Lo

urd

es

y l

os

pa

pa

s

El presidente Tierny empuja la silla de ruedas del papa Juan Pablo II

de María en cuerpo y alma. Los dos dogmas de la Inmaculada Concepción y la Asunción están íntimamente relacionados entre sí. Ambos proclaman la gloria de Cristo Redentor y la santidad de María, cuyo destino humano ya está desde ahora perfecta y definitivamente realizado en Dios». El discurso del papa Wojtyla no descuida una vez más una sincera consideración respecto a los enfermos y a los hospitaliers que los acompañan con empeño y devoción: «Saludo de modo especial a los jóvenes, asiduos de Lourdes, y que ponen generosamente sus fuerzas al servicio de los hermanos enfermos como hospitaliers. Recuerdo con emoción los encuentros tenidos en Francia con los jóvenes: el primero en París, luego en Lión, en Estrasburgo y por último de nuevo en París con motivo del Día Mundial de la Juventud. Estos encuentros me han dado una gran esperanza, que quiero hoy compartir con vosotros, queridos jóvenes amigos. ¡Entrad en la escuela de Maria y llevaréis por el mundo una ola de esperanza!» También sus predecesores no dejaron de celebrar Lourdes y su grandeza, a menudo con ocasión de importantes solemnidades como el papa Pío XII, que escribió una encíclica para el centenario de las Apariciones de la Virgen María: «La peregrinación a Lourdes, que hemos tenido la alegría de realizar presidiendo en nombre de nuestro predecesor Pío XI las solemnidades eucarísticas y marianas para la clausura del jubileo de la Redención, ha dejado en nuestra alma profundos y dulces recuerdos. Junto con vosotros, queridos hijos y venerables hermanos, queremos dar gracias a Dios por el insigne favor hecho a vuestra patria y por tantas gracias prodigadas a lo largo de un siglo sobre la multitud de peregrinos. Deseamos invitar a todos nuestros hijos a fortalecer, en este año jubilar, su devoción confiada y generosa hacia quien, según la palabra de San Pío X, se complació en establecer en Lourdes “la sede de su inmensa bondad”. Ella se aparece a Bernadette, la hace su confidente,

Oración a los enfermos

Puesto que tú eres la sonrisa de Dios, el reflejo de la luz de Cristo, la morada del Espíritu Santo,

Puesto que tú has elegido a Bernadette en su miseria, tú que eres la estrella de la mañana, la puerta del cielo y la primera criatura resucitada,

¡Nuestra Señora de Lourdes, con nuestros hermanos y nuestras hermanas cuyos corazones y cuyos cuerpos están doloridos, nosotros te rogamos!

Papa Benedicto XVI, Lourdes, 15 de septiembre 2008

La plegaria de Karol Wojtyla en la Gruta con monseñor Donze

H o s p i t a l i t è

Page 65: Fondazione Cariplo Annual Report

15 septiembre de 2008Peregrinación del papa Benedicto XVI. Misa de los enfermos

H o s p i t a l i t é 63

Lo

urd

es

y l

os

pa

pa

s

su colaboradora, el instrumento de su materna ternura y de la misericordiosa omnipotencia de su Hijo, para restaurar el mundo en Cristo a través de una nueva e incomparable difusión de la redención». Pío XII habló de la profunda unión que sus predecesores quisieron crear con Lourdes y sus múltiples sugestiones: «Estos cien años de culto mariano han entrelazado de algún modo entre la sede de Pedro y el santuario de los Pirineos firmes vínculos, que nos gusta recordar. ¿No ha sido quizás la misma Virgen quien ha deseado tales reacciones? Por lo tanto, no nos sorprende que nuestros predecesores se hayan complacido en multiplicar los privilegios al Santuario». Por ejemplo, ya en el lejano 1869, Pío IX manifestó su propia satisfacción «porque los obstáculos suscitados contra Lourdes por la iniquidad de los hombres habían permitido manifestar con más fuerza y evidencia la claridad del acontecimiento». En 1892 León XIII llegó a conceder un oficio especial y la misa de la fiesta “in apparitione beatae Mariae virginis Immaculatae”: «Que en su potencia la Virgen Madre, que otras veces cooperó con su amor al nacimiento de los fieles en la Iglesia, sea todavía hoy el instrumento y la guardia de nuestra salvación; que ella dé la tranquilidad de la paz a los espíritus angustiados, que acelere por último, tanto en la vida privada como en la pública, el retorno a Jesús Cristo». A su vez, Pío X se hizo promotor de otro gesto importante, creando el título episcopal de Lourdes junto al de Tarbes, elevando a Bernadette al honor de los altares con el inicio de la causa de beatificación. El papa Pacelli continuó citando otros dos importantes predecesores: Benedicto XV, que «quiso enriquecer el santuario, ya colmado de favores, con nuevas y preciosas indulgencias, y si las trágicas circunstancias

de su pontificado no le permitieron multiplicar los actos públicos de su obsequio, quiso sin embargo honrar a la ciudad mariana concediéndole a su obispo el privilegio del palio en la sede de las apariciones»; Pío XI, ya peregrino a Lourdes, que «continuó la obra y tuvo la alegría de elevar a los altares a la privilegiada de la Virgen, convertida en sor Maria Bernarda en la Congregación de la Caridad y de la instrucción cristiana», diciendo por último que «este santuario es ahora con toda justicia uno de los principales santuarios marianos del mundo». Lourdes ha visto la presencia de otro Papa muy querido, Juan XXIII, que pudo visitar varias veces la localidad mariana como joven sacerdote junto a su obispo Giacomo Maria Radini Tedeschi, y como legado pontificio, antes de su elección. El cardenal Roncalli había consagrado en marzo de 1858 el templo subterráneo de San Pío X, después de haber sido Representante Pontificio en tierra transalpina durante unos nueve años, de 1944 a 1953, y desde el 8 hasta el 15 de julio de 1954 presidió la peregrinación Triveneta a Lourdes como Patriarca de Venecia. Sin olvidar las obras de restauración del Santuario llevadas a cabo en 1962, con la demolición de los dos tramos de escaleras laterales que han llevado

a la actual disposición centrada en el altar y en la pequeña estatua de la Inmaculada. Después de los viajes allende los Alpes de Juan Pablo II, el último de los cuales estuvo marcado por el doloroso avance de la enfermedad, el papa Benedicto XVI ha querido rendir homenaje en los ciento cincuenta años de las apariciones de la Virgen a Bernadette con una solemne visita del 12 al 15 de septiembre de 2008. Una experiencia cargada de múltiples valores, espirituales y también políticos, como testimonia el encuentro en París con el presidente francés Nicolás Sarkozy que ha precedido las solemnes celebraciones en la localidad mariana. Una ocasión particularmente

H o s p i t a l i t è

Page 66: Fondazione Cariplo Annual Report

H o s p i t a l i t é64

Lo

urd

es

y l

os

pa

pa

s

El presidente Tierny empuja la silla de ruedas del papa Juan Pablo II en su último viaje apostólico a Lourdes

importante en un período de la historia marcado por conflictos, incomprensiones, pobreza y problemáticas sociales, en el que Benedicto XVI ha querido subrayar con vigor la unidad de la Iglesia y la necesidad de unir las fuerzas en una época tan atormentada. Delante de más de doscientas mil personas reunidas en la Explanada del Rosario para la Santa Misa, el Papa ha hablado de una fuerza nueva que desde este lugar es capaz de llevar nuevo impulso vital y renovación espiritual a toda la comunidad cristiana. Desde Lourdes la misión de la Iglesia «recibe un soplo nuevo», un nuevo «espíritu misionero» sobre la estela de los «grandes evangelizadores de Francia». El mensaje de la Virgen, según Joseph Ratzinger, reside en presentarse «en una dependencia total de Dios, que expresa en realidad una actitud de plena libertad, basada en el completo respeto de su dignidad. Habéis venido en gran número a realizar esta peregrinación jubilar conmigo y a encomendar vuestras familias, vuestros parientes y amigos, y todas vuestras intenciones a Nuestro Señora. Jesús ha tomado sobre sí el peso de todos los sufrimientos y las injusticias de nuestra humanidad, llevando las humillaciones y las discriminaciones, las torturas padecidas en tantas regiones del mundo por innumerables hermanos y hermanas nuestros por amor de Cristo». Todo ello sin olvidar palabras de afecto y solidaridad con los enfermos, durante la Santa Misa celebrada en el atrio de la Basílica de Nuestra Señora del Rosario el lunes 15 de septiembre: «Maria ama a cada uno de sus hijos, concentrando en especial su atención en los que, como su Hijo a la hora de la Pasión, son víctimas del sufrimiento; los ama sencillamente porque son sus hijos, según la voluntad de Cristo en la Cruz. En la sonrisa de la más eminente de todas las criaturas que se ha dirigido a nosotros, se refleja nuestra dignidad de hijos de Dios, una dignidad que no abandona nunca a quién está enfermo. Esa sonrisa, verdadero reflejo de la ternura de Dios, es el manantial de una esperanza invencible. El sufrimiento prolongado rompe los equilibrios mejor consolidados de una vida, sacude las más firmes certezas de la confianza y llega a veces hasta

a hacer desesperar del sentido y del valor de la vida. Quisiera decir humildemente, a los que sufren y a los que luchan y están tentados de volver la espalda a la vida: ¡dirigíos a María! En la sonrisa de la Virgen se encuentra misteriosamente la fuerza para continuar la lucha contra la enfermedad y a favor de la vida. Cerca de ella se encuentra igualmente la gracia de aceptar sin miedo ni amargura la despedida de este mundo, a la hora que Dios quiera».

Las palabras del papa Juan Pablo II a los jóvenes hospitaliers en su último viaje apostólico

«Saludo de modo especial a los jóvenes, asi-duos a Lourdes, que ponen generosamente sus fuerzas al servicio de los hermanos enfer-mos como hospitaliers.Recuerdo con emoción los encuentros tenidos en Francia con los jóvenes: el primero en París, luego en Lión, en Estrasburgo y por último de nuevo en París con motivo del Día Mundial de la Juventud. Estos encuentros me han dado una gran esperanza, que quiero hoy compartir con vosotros, queridos jóvenes amigos. ¡Entrad en la escuela de Maria y llevaréis por el mundo una ola de esperanza!»

UN RECUERDO ESPECIAL

Page 67: Fondazione Cariplo Annual Report

LA FINALIDAD DEL AMOR ES

EL SERVICIOEdición única

Publicado porHospitalité Notre Dame de LourdesAccueil Jean-Paul II, B.P. 19765106 Lourdes Cedex

Responsable de la publicaciónAntoine Tierny

Realizado porHospitalité Notre Dame de Lourdes

Testos coordinados porPierre ChalvidanPierfrancesca GravianiDeborah Moleri

Proyecto GráficoMAB.q Roma-Milano-Parigi

CompaginaciónElena Colombi

RedacciónPierfrancesca GravianiDeborah MoleriTino Redaelli

AgradecimientosAl padre René Point por haber puesto a disposición su propio testimonio directo, sus escritos y gran parte de las imágenes utilizadas en esta monografía

FotografíasOsservatore Romano“Servir les malades à Lourdes, 1885-1985; 100 ans de Hospitalité”, de padre René Point, NDL ediciones

PrensaImprimerie Augé

s i t i o w e b

¡ La Hospitalité Notre Dame de Lourdes tiene un nuevo sitio web!

Concebido como un nuevo medio de comunicación, mediante el cual la asociación quiere acercarse a sus miembros y crear una mayor interacción,

el nuevo sitio tiene gráficos atractivos, es de simple consulta, disponible en seis idiomas (francés, italiano, español, inglés, alemán, neerlandés), para llegar

a los hospitaliers y simpatizantes en todo el mundo.

La Hospitalité Notre Dame de Lourdes tiene un nuevo sitio web. Conecta a la dirección www.hospitalite-lourdes.com para descubrir una gran cantitad de informaciónes útiles relativas a la asociación, a su historia, actividades, servicios, como participar en uno

“stage” y entrar en la gran familia de la Hospitalité Notre Dame de Lourdes.

Page 68: Fondazione Cariplo Annual Report

Para una fecha importante, un documento igualmente útil para profundizar en el papel

de la Hospitalité Notre Dame de Lourdes

En un DVD que podréis solicitar en la sede de la Hospitalité, se ha recogido una serie de datos y testimonios por parte de quienes viven desde dentro la Hospitalité

LA FINALIDAD DEL AMOR ES EL SERVICIOUn viaje a través de la historia de la Hospitalité Notre Dame de Lourdes de sus orígenes a nuestros días mirando hacia el futuro también

real

izad

o po

r MA

B.q

€ 10

Año 2010

Edición única


Top Related