E XEQ U IA SCON QUE L A M. N. M. L . Y M. H. CIUDAD
D E S E E—'E L L A
HONRÓL A MEMORIA DE SU AMADA REYNA Y SEñORA
DONA MARIA ISABEL DE BRAGANZAa
L OS DIAS 1 6 Y 1 7 DE FEBRERO DE ESTE Año DE'
1 8 1 9 :
D E SCR IP C I ON
DEL SUNTUO SO MAUSOL EO
EN QUE MANIFESTÓ SU DOLOR'
Y L A ORACION F!NEBRE
QUE SE DUO EN ELLAS .
Y SE PUBL ICAN POR ACUERDO
DE SU EXCMO. AYUNTAMIENTO .
Z/m¡owenm £ea /y <7Í/Lay0z .
[ III ]
¡Que fa l ibles son los juicios de los hombres !Cuando Sevi l lae speraba que el Cielo correspondiera á sus con tinua s ple
ga ria s , da ndo a su am ada Reyna un parto feliz, que se con si. deraba próxim o : cuando cada uno p repa raba en su án im o la sdemostra cion es de su júbi lo, a l ver perpetuada una dina st íapor la que tan ta sangre derramara , oyó una voz de trueno quedecía : la Reyn a ha m uer to. Al pun to se repitió con silenciosodolor por toda la Ciudad; m as cada cua l buscaba motivos pa rano Creerla . Era un pesar y esto ba stó pa ra que se verifi ca ra .
Al fi n , el sábado 2 de enero recibieron los dos Cabi ldosC a rta—órden de S . M . not iciandoles tan infausto a caecim ien
to , y el eclesiást ico despues de Víspera s m andó romper el doble con cincuen ta campanada s, que con tinuó por veinte y cua
t ro hora s, a l que a compaña ron toda s la s campa n a s de la Ciudad .
Luego se puso el apa ra to de prime ra cla se , con cera am a
ril la en el a lta r m ayo r, y con cera bla n ca en la a lca tifada cru
gia , en que sobre rico te rliz blan co y a lmohadon es del m ismocolor se colocó la corona y el cetro rea l . L a tierra osten tó poresta vez qUe á ella pertenecían los despojos de la muerte . El
Dom ingo en la ta rde despues de Completa s, el mism o Ca bildo can tó con la m úsica el respon so solemne, que ofi ció su Ar
cedia no titula r y ca nón igo D . Ju a n Perez Tafa lla , caba lleroprofeso del órden de Ca la tra va y m in is tro honora rio de l Consejo rea l .
En . la m i sma m añana de l Dom ingo e l Excmo a Ayun tam ien
to en su cabildo extra ordin a rio, d espues de obedecer la referida rea l Ca r ta a órden , dic tó va ria s providencia s pa ra su exa ctocumplim ien to , en t re otra s, que por la Ciudad se escribiesen a l
Rey y dem a s Persona s rea les á qu ien es correspondiera sen tidí
sim a s ca rta s, que m an ifesta sen su dolor, la s que se dirigíeran
por m ano de su capitula r el Excm o . Señor Conde de Mi randa , de qu ien esperaba el m a s seguro desempeño .
Una d iputacion cºmpuesta de D. Ma rtín de Ha lcon y Cala , m a rques de S . Gil y ten ien te de Alguaci l m ayor, de D.
Jua n Ma ría de Va rga s, vein ticua tro, y del jurado D. Francisco Ladron , pa só luego á da r el pésam e a l I lm o . Cabildoeclesiástico
,qu ien en segu ida correspondió con otra , en que D.
Fra ncisco de Arjona , m in i stro honora rio de l Consejo rea l , dign idad de Maestrcscue la
,a compañado del canón igo D . Francis
[ IVco Chacon, Sum il ler d e Cortina
]de S . MP, y del Racioncro D.
Nicola s Leso, m an ifestó a l Excm o . Ayun tam ien to la con sta n ted isposicion de su Gab ildo
*
e n con t ribui r a cuan toS evi lla dispusiera pa ra hon ra r l a m em oria de su Reyn a y Señora, á qu iene n d ia s m a s felices logró la fo rtun a de servi r en esta ciudad.
L os m i sm os Diputados del Ayun tam ien to eva cuaron igualaten cion con el tribuna l de la Fe , que respondió agra dee ido —
p or su s indiv iduos D .
'
José Ma ría Va len zuela , canón igod e la San ta Iglesia de Badajoz é Inqui sidor m oderno y el Dr.D . San tiago ! ey , ca nón igo de la Ca tedra l de Cana ria s é l nq uisidor fisca l . Los achaques del M . R; Arzobispo priv
'
a ronSevi lla de la sa tisfa ccion de besa rle la m a no por m edio de susenv iados, segun ten ia a corda do; m a s el Excm o . Prelado pusoá disposicion de la Ciu da d el púlpi to en la form a que lo hab ia n egecutado sus
, dig11ísimo s a n tecesores, con ha rto sen t im iento de n o poderlo ocupa r por sí m i sm o, com o la Ciudad de aseaba .
Otros oficios de esti lo acordó igua lm ente e l Ayuntam ien to ,cuyos Alca ld es m a yores , A lgua cil m a yor , el As is ten te, y los
Vein ticua tr os circu la ro n Ca rta—órden …á los veinte y ocho pueb los de su ju risdiccion ,
-
que . llama n de la Tierr a , m a ndando h ace r hon ra s y vestir lu tos a Sus vecin os con la s dem a s prevencion es que juzga ron oportuna s. L os m ism os l u tos se pregon ar on en la ciudad con fún ebre apa ra to : se impu sieron pena sá los q ue encareciera n los géne ros
'
que sirven pa ra el los : se
prohibieron po r el t iem po de la ley toda s la s divers ion es púb lica s , y se cerra ron po r n ueve día s la s Ca sa s Capitu lares
por cin co se suspe n die ron los t ribun a les, y todos los cuerposen sus prontos sufragios m an ifesta ron su a rdien te deseo por “ eld esca nso eterno de su am ada Reyn a . Su juven tud , sus gra cia s,su herm osura y sus v irtudes eran otros tan tos m otivos que lesempeñaba n en su dolor.
No por esto se perdió de — vista e l punto prin cipa l de la sexequia s, que Sev i lla debia celebra r con la m agn ificen cia queacostum bra , y aun si fuera posible que exced ieran á cua li
t as conoció la edad pa sada . Pa ra todo dió com ision y fa cu lta—3des ámpl ia s e l Excm o . Ayu ntam ien to á su Procura dor m a
yor y veinticua tro propieta rio D. Igna cio de Medin a , ten ie n -a
te coronel de infan tería agregado a l regim ien to provincia l deesta C iudad , quien no perdonó fa t iga pa ra que el Cat afa lco
que se habia de con st ru i r correspondiera a l rea l objeto que
se ded icaba y a l decoro de la Ciudad qu e le ofrecia . Por otrapa rte , la hon rada em ulacion de los a rt ista s y el deseo de contribuir a l obsequ io de la am ada Reyna e3t imulahan su apli
VT
cacion pa ra presenta r algunos[dibujos rela tivos a l in ten to; m a s
esta m i sm a Copia con tribu ia para hacer m a s difici l l a eleccion . El
”
ingen io , el buen gusto en la s a rtes, los conocim ien tosl i tera rios y la gra ndeza de las idea s no son p renda s que se h aIlan s iempre herm anada s, y toda s era n n ecesa ria s pa ra juz
g a r rectam en te del m érito de los diseños presen tados ; m a s e l
Procu ra dor m ayor ha lló el m edio de con cilia r esta s a ten cion es, y bien persu a dido d el concepto q ue se h a a dqu irido la rea lSociedad pa triótica , en la que se ha lla n a listados los prin cipa lesl i tera tos de esta capita l, conv idó si a lgunos de sus in dividuos,pa ra que exam inados los dibujos, eligiesen jun tos el m a s no
b le y m agn ífico y lo a n im a ran de los pen sam ien tos é in scr ipc iones corre5pondien tes su destin o .
Se el igió en efecto e l que h abía form ado D . Anton io Cabra ] Beja rano, discípu lo de la rea l Escuela de las tres n oblesArtes , en que in cluyó a lgun a pa rte del que habia prese n tadoe l a rqu itecto m ayor de la Ciudad D. Cayetan o Velez y otros ;
pensam ien tos del a dorn ista D. Ma nuel Ga rcía , y en su con
s ecuencia se fl ó a'
… estc . la direccion de los tra bajos, qu edandoá ca rgo del prim ero la egecucion de la pintura , que desem
peñó á sa t isfaccion de la Jun ta . CZCa t”
a l eó [oEsta , correspondiendo á la confi anza que de sus
b ía h€Ch0 el Procu rador mayor, no se l imitó si sola la e ieccio n
de l m ejor d iseño : qu iso adem a s en m an ifesta cion de su ze loh a cer a lgun a s m od ifica ciones; m a s la prem u ra d e l tiempo yescasez de a rtista s im p idie ron que toda s se ve r ifm a r a n . L a adjunta lám ina m an ifiesta el tota l d e l p e n s a m ie n to ; a u nque n o esb a sta n te pa ra expresa r el grandioso efecto que "ca u saba su m ole .
Esta se a lzaba sobre el pa v im en to ciento t re s pies y m e
d io ca stellanos, apoyada en un robu sto bas am en to de . plan tacuadrada , á la a ltura de trein ta y seis p ies y m edio, cuyosángu los sobresa lía n pa ra da r m a s gra cia ¿ su form a . Tod a lam áqu ina se figu ró de piedra m a rtelilla de X erez pa ra un ifor
m arla con el templo, bien q ue se im ita ron otra s en los Ingares conven ientes, tan to pa ra ha cer resa lta r la que rein aba en
t oda ella , cuanto pa ra distingui r a lguna s de sus pa rtes : en treo tra s el zóca lo que la rodeaba se figuró de m ármol n egro fbeteado, que l lam a n de S . Pablo .
Dos M plia s esca linata s ocupaban sus cos tados, cuyos pasamanos en escocía s rem a taban en pedesta les sobre los cua lesse coloca ron _ gra ndes bola s b roncead a s : a quel la s d irigía n á unp la no de diez pies de fondo, y en sus ángulos se s itua ron ochograciosos trípodes p ebetero_
s , q ue im itaban e l oro y exa laban a pausas los. pcxfumes funera les .
z
VI ]En los m uros, que ha cian frente a l coro y capilla m a
yor, se p in ta ron en a lto rel ieve a l cla ro oscuro a lgunos Geañ os , qu e lam en taban la m a lograda jóven , ora vertiendo su
d olor en la u rn a de la s lagrim a s, o ra ofreciendo a n te su tum
ba el hum o de sus sacrificios , ora fin a lm en te adm i rando la ca
d ucidad de las soberb ia s fábrica s . En tre ellos la robusta en
e ina y palm a t ronchada s, la s ergu ida s column a s y pirám idesrota s , los bus tos y los pin celes , a cuya s a rtes la difun ta Reyn a p rotegía , ca idos por el suelo, todos símbolos de la m or
t a lidad . Solo la gua da ña desoladora se via en tera y apa rejadaa n uevos t1 iunfos, triste p ron óstico de nuevos pesa res .
E n los cla ros que ofre cían los ángu los sa l ien tes, se figuraron a s im ism o tea s, cuya luz se sofoca ba con tra la t ierra . Así
e l aura v ita l es confundida con el elem en to de que fué for
De este “
m agn ífico ba sam en to a rran caba el prim er cuerpos obre un sotabanco de pla n ta igua lm en te cuadrada de cincop ies y m edio de a lto, cuya s fa cha da s ocupa ron grandes ta rgeton es con lau rea s y colga n tes dorados, en que se vian la s a r
m a s de la Iglesia , de España _y
'
de Portuga l , y la em presa deSev i lla . Estos escudos ha cia n rela cion a los dedican tes , quein dicaba n la s In scripcion es que despues di rem os, y sus s ituaciones segu ian el m ismo órden en que esta s esta ban co
lo cada s .Figuraba el prim er cuerpo un oscu ro pa n teon de vein
te y cua tro pies de a ltura , a l cua l s o lº a lum braba una tristelam pa ra sepu lcra l, pe n d ien te d e l cen tro de su bób eda rebajad a . L a bri llan tez de la s luces a leja ría de aquella lúgubre m an
sion las idea s m “elancó l i ca s, que se pretendían exci ta r. Por la
pa rte de a fue1 a , en las enju ta s de sus cuat ro a rcos se d istri
h uyeron a lgun os pen sam ien tos, que determ inaban su objetoe n m eda l lon es a l cla ro oscuro por este órden .
M i rando a la capil la m ayor la Vi lla d e Ma d r zd , figura— da en un a m atrona coron ada , que a rrodillada pedia a l Cielo
por la v ida de la Reyna , y un Angel que le seña laba e l li
b ro del inm u table Decreto . L a Rel igion con solando a España'
y a Portuga l , ca racterizada aquella por la Cruz, y esta s porlos escudos de su s a rm a s .
A l lado del Eva ngelio . Am or Him eneo represen tados enun gracioso n iño y ga lla rdo m a ncebo, que apagaba n sus tea s viav ifi cadora s en un sepulcro coronado . L a L ea lta d esp a ñola en
figura de una m a trona sen tada , en tregaba a la voladora Fam ael retra to de la Reyn a pa ra que publicara sus v irtudes.
Por el fren te del coro . L a s tres nobles Ar tes en lazada s por
[ VII
la s m anos, l loran la m uerte de su
]p rotectora . E l a lm a d e la
Reyn a coronada de a zucen a s es conducida a l Cielo por un An
gel, que le seña la su etern a m an sion .
Y a l lado de la Epístola el r ío Ma nza na res l lorando sobree l sepu lcro de la Reyn a , y el Ja neyr o coronado de plátano,que en lejan o térm ino le a com paña en su dolor. L a B en ej icencia desm aya da sobre un a régia tum ba se via rodeada de a l
gunos Gén ios que la com p adecian .
En la s cla ves de los a rcos se pin ta ron un a s culebra s euroscada s con m a riposa s den tro de la s el ipsis que form aban , an un
cia ndo la brevedad de la presen te v ida y etern idad de lafu tura .
El centro del pa n teon lo ocupaba e l sepulcro, donde lam uerte pone el últim o sel lo á la m em oria de los hombres . Elde la Reyn a figu ra ba u na m agn ífica u rn a de m árm ol bla n co,cuya s faja s, en riquecida s con estría s de oro, y su ta lon im itab an a l pórf1do : sus a sa s pa recía n ba cia da s del m i sm o m eta l .Sobre ella de'sca n saba un Gen io, que m an i festaba a l Pueblo e l
r etra to de la Ma lograda : y á la s cua tro fren tes del zóca lo en
que desca n saba la urna se un ieron otra s ta n ta s ba sa s cúbica s,dos de l a s cua les sosten ía n , la que m i raba a l coro u n a ga lla r
º
d a m a tron a de esta tura colosa l coronada de oliva , que figurab a ser de m ármol y represen taba a SEV ILLA l lorosa en aptitudde esta r recosta da sobre la cabecera del sepu lcro de su am a
d a Reyn a . En su ba sa con cara cteres de oro se leían una s palabra s de Job .
PRAESTOL ABAR L UCEM.
E sp era ba l a luz .
En la de los pies, que hacía fren te á la capilla m ayor,se
colocó á Him eneo en im ágen de un n iño l leno de afl iccion ,
que apagaba con tra la t ierra su tea nupcia l , y en su ba sa con t inuando aquel pen sam ien to, se escribió con letra s igua lmen tede oro
ET ECCE TENEBRAE ¿
Y se convir tió en tin iebla s,Figura s de excelen te expresió n , que egecutó el a credita—B
do a rtista D. Jua n de'
Astorga , ten ien te director de la escuela de escu ltura en la de la s tres n ob les Artes .
Un sencil lo corn isam en to gua rn ecía este cuerpo, y sobre“
los m aci zos de sus ángulos en pedesta les de tres pies se elevahan la s cua tro Vir tudes Ca rd in a les represen tada s en otra st an ta s estatua s agigan tada s, que egecutó el escu ltor D. Ce=h
sa rio Ramos iSobre los macizos de los muros se le vantó un bancal á.
VIH
la a ltu ra de once pies, e n[cuyiis cua tro fren tes se p in tó a l
cla ro'oscu r o en abu ltado rel ieve una pom pa fun era l tomada
el a n tiguo, en que la augu sta Jóven e ra conducida al tem
plo de :la inm orta lidad por la E sp a ña , distingu ida por losca sti llos y leon es d e su m an to, á qu i en segu ia n sus prin cipa les prov in cia s . L a Rel igion que espiritua liza por su s
.m is
t erios estos a ctos de la s gloria s m und ana s, la r ecibe en e lá trio del templo, de donde el últim o dia sa ldrá acompaña dad e la s Pu lcheria s, de la s Indegunda s y de las Isab eles . L osa n ci a nos y la s m a trona s, los jóven es y las v írgenes velados,los n iños l lorosos, toda s las clases, todos los estados iban en
pos del cadáver, y cerraban la procesion la s Ciencia s y las nob les Artes . Pens am ien to muy tierno y a
' propósito pa ra disperta r la s en sibil idad de los padres, d e los esposos, de losh erm anos, á qu ien es la m uerte a rreba tó las querida s prend a s de su am or.
En este banca l se apoyaba el Segundo cuerpo de la máq u ina , que se com pon ía de un sól ido cuadrilátero de diez ymueve pies de a l tura , cuyo en tab lam en to e ra sosten ido en sus
á ngulos por e stípites , que figu raban cua tro plañidera s, quecubi erta s de pies á cabeza , recibía n e n amplios va sos la s l ágrima s de su dolo r : bu l tos m uy bien “
e n tendid ºs, que record aban nuestra s pa sada s costum bres h eredada s de la m a s re
m ota a nt iguedad . En los cua tro fren tes se im ita ron'
gran de9
p izar ra s con gota s y cla vos rom anos dados de o ro , y con e l
m ism o m eta l se escribieron la s sigu ien tes in scripcion es, quedictó el Doctor y Maestro D M anuel Ma ría del Márm ol ,capella n de S . M . en la rea l capil la de S . Ferna ndo, é ind iv iduo de la rea l Socieda d Pa triótica .
Fren te de la capilla m ayor, donde se había colocado e l
e scudo de la Iglesia con la tiara y cla ve s.
MARIAM EL ISABETHAM
HISPANIARVM REC INAM
FERDINANDI vtr FIDEL EM CONÍVGEM
REL IGIONE SEDVL AM
DEVOTAM MISERIS
ANN JVVENEM ADVL TAM VIRTVT
E VITA ECRESSAM
CRISTIANA ECCL ESIA L VGET
[ IX ]Que puede rom ancearse a si .
A Ma r ía I s a bel , Reyn a“
d e E sp a ña y fiel esposa de Fer .
n a ndo VII , j óven en los a ños , p er o a dul ta en sus vir tud es,
l a Igles ia cr is tia n a la l lor a m uer ta , con ociendo la purezad e su rel ig ion y su la rgueza p a ra con los p obres .
Al la do del Evangel io, en que estaba situado e l escudo conlas arm a s de España .
MARIAº ELISABETHA
FERDINANDL VII' CONIVX' DILECTA
PIA' HlSPANORVM' MATER
IACET' TV1V€V£OIACEN
“
T
CONIVGIS' AC ' C L IENTVM
SPES ETº DELICIAE
Que en castel laíno,dice .
Ma r ía I sa bel , p ia d osa m a dre d e los E spa ñoles y a m a d a
e sp os a d e Fern a ndo VI ] , s e represen ta yer ta en el sepulcro.
Con ella se s epulta ron la s d elicia s d el esp oso y la espera nza
d e sus va sa l los .
M i ra ndo a l coro, en que estaban la s a rm a s de Portuga l .
MARIAM º E L ISABETHAM
L VSITANIAE ' B EGIBVS EDITAM
IMMÁTVRA PRAEREPTAM MORTE
L VSITANI º PL ORANT
HISPANIº PLANGVNT
ORBIS DESIDERAT
Que puede in terpreta rse a sí.L os L us ita nos l lora n ,
los E sp a ñoles la m en ta n , y el orbe
echa m énos á Ma r ía I sa bel, h ij a d e los Reyes d e P or tuga l ,á qu ien la m uer te a rr eba tó en sus flor idos a ños .
Y —fina lm en te á la “ banda de la Epístola , a donde m ira ba laempresa de Sevi lla en su
'
m adeja y NODO con que la condecoró el Rey D . Alonso el Sábio, en prem io de su fi delidad .
[ X ]
J
MARIA EL ISABETH
VIGESIM PRIM A NATAL ITIIS ANNO
TERT A THRONI HISPAN OGCVPAT
TERT ITIDEM AB INCRESV HISPAL
MORTEM EXTEMPORAL EM SVBIIT
ORDO HISPAL ENSIS
REC IBVS SEMPER FIDE L IS
OPTIMAE INTER REGIN MEMO!
P .
ue en ca stel lan o diria a sí.
]lÍ a r ía I s a bel, d e ed a d de ve in te ,y un a ño s , a l tercero _ d e
ocup a r el tr on o esp a ñol , y a l tercer o a s im ismo d e su en tr a d a
e n es ta Ciud a d , fa lleci ó d e m uer te r ep en tin a . Sevi lla s iemp r e
j iel sus [ leyes con s agró es ta m em or ia á la m ej or d e la sReyn a s .
Na die a l … leerla s juzga ría que el tem plo, donde r eyn an la
hum i lda d y la verdad, habia sido esta vez profanado por lavan ida d y m en ti ra de los epitafi os .
Todo el edificio rem a taba en una colum n a tron ca da , e nm an ifestac
'
ion'
de la desgra cia que a cababa de pa decer la … quee ra el apoyo de la coron a . En su pa rte in ferior se pin ta ronen una s ca rtela s g ua
'
rn ecida s d e ci-pres la s cu a tro pa rtes delm undo rep resen tada s , el Am ér ica en un o de sus a n tiguosguerre ros desnudo, con
'
penacho de"
plum a s, ca rcax y flecha s .El Á s ia en una m a t rona a cuyos lados se v ia n un came lloechado y un perfum ador
, que i ndicaba los a rom a s q ue p roduce su suelo . El Áfr ica en una n egra que con u n pa ra so lse d efend ía de los rayos
¡
abra sadores del clim a , y la E urop a
por otra m a trona á cuya espa lda se descubría un brioso cabal lo
,y en su m ano la cornucopia volcada . Cada una de el las
se quejaba de que En un solo golp e d el li a do ha bian s ido
m uer ta s la m a dr e, la b ija'
. y'
a un“
el la s m ism a s .¡El mote con
letra s de oro decia .
VNO PATO ET MATER, ET
INFANS,'
ET NOS IPSI OCCIDIMVS
Coroñ aban esta column a un grupo con'
dos'
mundos , so
bre que . desca n saban r icos a lm ohadon es , y en el los el ram o
de lau rel, e l m a n to rea l descogido, y las ins ígh ia s d e la Ma
gestad .
Concluida que fué esta m áqu ina - los dos Ca bildos a cordaron los dia s de su solem ne dedicacio n , que el Excm o . Ayuntam ien to comun icó a l M . R. Arzobispo y a l Tribun a l de laFe por una d ípu tacíon , compuesta de los ve in ticua tros D . Jua nNl a ría de Va rga s y el m a rques de To rrebla nca , y de l ju radoD . Fra n cisco de Pa u la Ladron . El Asisten te lo hizo igua lmen
te por m edio de oficio a l Rea l Acuerdo, y el Procu ra dor m ayorv is itó a l Gobern ador m i l ita r D… Luis A n ton io de Flores, b r i
gadier de la rea l Arm ada , pa ra que se si rviese da r la s órdenescon ven ien tes a fi n de que el ba ta l lon de a r ti lle ría y tropade la gua rn icion con curriesen con los honores fun era les de o rfden anza . El Prov isor m a ndó cita r a l elero , y a lgunos ve int i
cua tros se enca rga ron de conv ida r á la s com un ida des religios a s . O tra s prov iden cia s se toma ron a l efecto, en tre ella s e l señ a la r la s puerta s de sa lida y en trada a l templo para m an ten er e l órden .
A los costados del túmu lo se d ispus ieron h onoríficos teat ros cerrados con b e rja s , q ue había n de ocupa r los Excm os .
í
Ayun tam ien to y Acuerdo, cuya s diputaciones los v i sita ron
p reviam en te pa ra a segura r el decoro de tan respetables autor idade s .
A las doce de la m añan a del m artes 1 6 de febrero toda sla s iglesia s rom pieron el dob le , _ y á la s tres de la ta rde con
cur rieron á la Ca tedra l el Clero y Com un idada s rel igiosa s , á
qu ienes el Ayun tam ien to habia repa rtido cera , y ca n ta ron e n
la s capil la s que les esta ba n seña lada s la vigil ia de difun tos ,que con cluyeron con el respon so a v i sta del ca tafa lco .
El Excm o . Ayun tam ien to en rueda genera l y en cochesde ga la, precedido de" sus m ú sicos y cua tro a lguaciles de losVein te a caba l lo, y sus m a ceros tam bien en coche, ves tidosde ropou n egro, y baja s la s m a za s, se di rigió por ca l le d eGén ova á la Ca tedra l, donde en tró por la puerta de 8 . M i
guel , … presidido de su Asis ten te D . Fran cisco de Laborda yPleyler . Al lí le espera ba el núm ero de Escribanos públicos yl a Un iversidad de Corredores de Lonja , los Escriban os de losJuzgados C ivi l , Crim in a l y de Caba lleros fieles .egeC I itore s , qu ien es .Con los diez y seis Algu aci les res ta ntes le a com paña ronha sta el pa lenque
, que se situó a l lado de la Epístola , d ondeestaban prepa rados b ancos, sin ot ra distin cion honorífica , quela de ten er respa ldos, los que ocupó e l Ayun tam ien to .
XII IEn otros igua les a l lado del Evangelio se acom odó e l rea l
Acuerdo , que en tró a la propia hora por la puerta, que lla
m aban Colora d a , con sa lida a l pa tio de n a ra njos . Le presidías u Regen te D . Torcua to An tonio Collado, del Con sejo de S .
M.,y luego que sus m in is tros deja ron los coches
,se le incor
pora ron sus suba lternos, el colegio de Abogados y los Con tadores d e núm ero .
El tribuna l de la Inquisicíon , presidido de su segun doj uez D . Juaqu in de Murua y Eula te, caba llero del órden deCarlos III y canón igo de la Sa nta Iglesia de San t iago
,y a com
pañado de sus secreta rios , m in is tros y fam i liares, en tró ahorapor la puerta inm edia ta a la torre, y se colocó en la capi llam ayor .
Acom odados que fueron estos cuerpos y sus respectivosa compañam ien tos en los luga res seña lados por rea les órden es ,empezó el coro la v igil ia , q ue can tó la m úsica , y con clu i dacon el respon so fina l, se ret ira ron por el m ism o órden que
h abia n en trado .
El m iércole s 1 7 repitieron su a sisten cia a la Ca tedra l e lC lero y Com un idades regula re s , a qu ien es se volvió á repa r
t ir cera , y habiendo ca ntado cada una la m isa de Requiem en
l a s propia s capil la s en que se si tuaron la ta rde an terior, conc luyeron con el respon so a v is ta del túm ulo .
A la hora proporcionada l os Excm o s. Ayun tam ien to yAcuerdo y el t ribun a l de la Inqu ísícíon ocupa ro n s u s lu gar es, y concluida la solem n ís im a m isa , q ue d ijo el Dean D. Fa
b ian de M iranda , … p ronun ció la o ra cion fún ebre el ca n ón igol ectora ] de esta Sta . Iglesia D . Nicola s Ma estre, á qu ien laCiudad la h ab ia '
encom endado , da n do fi n con los cu a t ro res
pousos á ca n to l la no en los ángu los del túm u lo, q ue oficia rono tros ta n tos canón igos, y el últim o que can tó la m úsica y ofi…
ció el celebran te .
No por eso el inm en so con curso desampa ró el templo , adm ira ndo la m agestad del Mau soleo, cuyos colores sombríosa nun ciaba n su destino, ayudando a la i lu sion el no ten er m a s
luces que la lámpa ra sepu lcra l y cua tro gra ndes h a cha s decera blanca en el pa vim en to de la crugia . Ba ste decir en su
e logio, que m ereció el apla uso de los impa
'
rcia les, y puso sileucio á los ém u los de la s gloria s de Sev i l la .
L a tropa estuvo form ada en rededor de la ' Igles ia , s i tuada .
l a rea l briga da de Ca ra bin eros a espa lda s de la capilla de S .
Fernando y en la Lonja , y la infan tería á la ba nda occiden ta ldela n te de Grada s , habiendo esta y la Artillería en su pa rqu ede la Resolana hecho a sus tiempos las descargas funera les .
[ XIII ]Grande, m agnífica fué esta funcion; pero no tan to com o
deseaba Sevi l la , que n o conoce l ím ites cuando se tra ta de a cred ita r su f i delidad . Ya sus t iempos felices hab ía n pa sado sus
Propios agotados y dism inu idos sus Arbitrios, no con taba con
otros fondos que los de su lea ltad . Pero la Metrópol i de sus
cua tro Reinos debía da r el egemp l0 , y en a lgun a m anera m a
n ifesta r que su s án imos generosos, la cultura de sus habitantes
,y como decia Pl in io su r ico a dorno y su a seo y p r im ar
m a s esp ecia l, en que se a ven tajaba la an tigua Bética a toda sla s prov in cia s, no se habian eclipsado con sus desgracia s . Noe ra pequeña l a que a cabab a de sufrir en la pérdida de su
am ada Reyna , la herm osa , la v irtuosa Ma ría Isabel de Braganza , a sique pretendió perpetua r su m emoria un ida a
'
su
dolor en estos religiosos cu ltos, que con sagró a l pie de losa ltares, rogando por su eterno descanso .
l º lsos
,y á su despecho enm udec
j
iera de respeto y de pavor.Igua l s iempre a t í m ism a en la a ltura del trono y en e lá ngu lo m a s ret irado de tu c z
i
ma ra , donde eras un m odel o de v i rtudes ; adm i rab le
"
por tu seren idad nunca pert u rbada , tu a m abilidad sin desabr imien to a un m om en tan eo , td m odestia d eco'rosa , tu a specto grave sin a ltiv
'ez n i
d esvió , afable s in a l lan am iento, a ccesible s in d e”
grada r te , en
e l tra to fam il i a r e n tendida y am ena , donosa con*
_
díscrecio íi;e ras devota sin …ha zañería , fervorosa en la piedad ,
'
zelosa en
la religion, a n imosa e n la c reen cia , solicita en e l cu lto, oficiosa con e l m enesteroso , p rotectora d e l desva l ido , l ibera lcon el pobre, m adre de tus pueblos
,e sposa t iern a , Reyn a be e
néfi ca . Nad ie te m i ró s in am a rte,'
a n adie hon ra ste Con tu'
pa labra q ue no le prenda ra tu bondad . Tus dom ésticos precon ízaba n la s virtudes que escondía tu hum ildad, la
'
Cortes e edificaba con tas egemp los, tus a laba nza s cun dían a
'pa rde tu s gra cia s , t u fama
'
s e h a p ropagado ha sta las extrem i
d ades del Reyno, y tu n ombre se pronuncia con e n tusia s
m o . Semejan te á Judith, te ga na ste con preven cion los cora zon e s , no tu
'
vi ste “
e n v ida que desa rmar"
a lgun a m a lq'
ueren 'cia,y en
tu.
m uerte no ha ha bido qu ien no m ezcle con sus lam entost us loores . te hem os '
¡Aciaga noche la de l 26de
'
. Diciem del que som bra s tan fa ta les tev in i ste ¿sobre ¡En tu Oscuridad dejó de a lumbra rn ue st ra luz, se apagó nuest ra a legría ,
'se desconcerta ron “
n uest ra s espera nza s, tus
.
t in iebla s En lutaron nuestros
¡Y en que c ircun sta n c1a s , y en'
que ocas ion , yen que
¡Cua ndo el Reyn o todo se exa laba en oraC1ones_
a l Altísimo
pa ra im petra r á su Reyna un feliz a lum bram ien to l. . ¡Cuand o todo” s a n e labamos por un Príncipe á quien se t ra sm i tiesela corona, que l a — lea l tad española esm a ltó con su s a n g re p a
'
ra la posteridad de su ¡C uando todos suspi rámes
'
con impaciencia un fel iz a nun cio pa ra romper en e l
m om en to el clam or de n uestro ¡Se m a r
ch itó en todo su verdor y loza nía la flor en que se rec'rea-a
ba la ¡Murió la Reyna en que todos'
nos m ira
¡Se t ra sformó súbitam en te la fa z del Reyno , losfestines se ttºoca ron en duelos , los júbilos en l loros, la s prevenciones de regocno s en apa ra tos de luto, la n a cion quedócon stern ada y su am ado Mona rca anegado en am a rgura , he¡ ido su corazon y pa rtido en su
Llora enhorabuen a , España , tu horfandad. L lora tú, fi
de lísim a
"
Sev i lla , aman tísima de tus Soberanos, riega de dolorosa s lágrim a s esa u rna sun tuosa en que yace clado cadáver
[ 3]a quel la Reyna, que un d ia en este m i sm o luga r resolv ió tu
cora zon en lágrima s de t iern o am or. ¡Día s 1 y 1 5 de Set iembre de ¡Qué recuerdos tan Otro sol
d e luz m as cla ra y apacible os ¡El gozo den uestros cora zones rebosaba por n uestros ¡Con
que pla cer discurríamos de una á otra pa rte, fel ici tándonoscon m útuos plácem es por ve r den tro de esta in signe Ba sílica án uestra Reyna re ligiosísim a , que ven ia á rend ir su coron a álos pies del Rey de los Reyes, am pa rándose de su augu stoabuelo Fern ando III e l Sa n to, cuyo sagrado cuerpo íncorr upto Un gentío innum erable con cu rría hácía donde quiera que iba su Soberan a , insa ciable en gozarse con su
presen cia Por esa s elevada s bóveda s resonaban los ecos a r
m on iosos de los in strum en tos y cán ticos festivos de a ccionesde gracia s ¡Com o n os deleitábam os e n aquella devocion afcctuosísima , aquella m odesta com postura , aquella compuncíon
h um i lde, aquel la ven era cion profunda con que a si stió a l div in o sacrificio ! Nos a rreba taba la a ten cion ,
y ahin cados en
el la los ojos del clero y del pueb lo, un iendo n uest ros votos
p rorump iamos e n dep reca cion e s a l Cielo pa ra que derram a seSobre el la sus ben diciones ¡Cam bio funesto ! Se h a n sucedído estos him nos y can ta res dol ien tes , esta m úsica m elancólica ,q ue con la suav idad de su m elodía nos hiere y da m a s agudeza á nuestro sen tim ien to . A la s ga la s del san tua rio se ha sub
rogado esta pom pa , tan to m a s luctuosa , cuanto m a s m agnífi
cai El Cordero inm a cu la do,del icia s del Etern o Pa dre, gozo
d e los Angeles , gloria y a legría del Cielo, se inm o la hoy so
b re n u a ra en lutada en tre m úst ia s a n torcha s , y los m in istrºs
que s irven a l sacrificio, m an ifestando su pena en este a cto e l
m as sagrado y solem n e con pa ram en tos lúgubres . Hácia cua l
q uiera la do que se conv ierte nuest ra v i sta nos rodean expec
t áculos de afl iccion , y por todo se n os m uestra la Iglesia l a st im ada y pesa rosa .
Llora pues, Sevi lla : impera este desahogo la natura leza , ylo d irige la Religion . Da á tu l lan to todo el apa ra to m as sol em ne sobre los m odelos que te deja ron tus padres, y te haconservado la Iglesia . Solem n ísím a s fueron la s exéqu ia s de .l acob , cuantiosa s las sum a s expendida s en bálsam os, m agn ífica'
_
Ia ceremon ia de la uncíon reiterada por cua ren ta día s , y tod os luctuosos, costosísim a la tra slacion del cadáver a l sepul
cro de sus padres en Can aam el a compañam ien to de la princ ipa l n obleza de Egipto fué el m a s num eroso , el m as i lust re
y e l m as lucido que jam a s se v ió , los honores fúnebres, ques e repitieron en el t ránsito, pus ieron a dm iracion si toda la
5
t ierra , ¿ é hicieron m emo rable a Del Con,
la nombrºadíade l l la nto dél Eg ip tº, que duró por sigl os . Ni m enos d ispendi
'
osos fue ron los funera le s d e Moises y de Aaron . Pa ra el déIosia s in spiró Dios m i smo á un P rofeta las endecha s . L a Opul encia y el gen io se ga sta ron en los sepu lcros de David
, de:Sa lom on y de Dan iel . L o s m etales prec iosos del prim ero so
b ra ro n á con ten ta r la codicia de An tíoco , y redim ir a Je ru sa'
l en de los desa stres de 1 1n'
saqueo .
'
El de D an iel pareció biená los r eyes Persas , Medos
*
y Pa rtos,“
Con ser t an
pa ra pa n teon de sa s fami lias. El t riunfo dedicádo '
á la m e
m oria inm orta l de Jon a ta s sobre :
e l en terram ien to de sus pa
CII CS, la s siete in signes pi rám ides, l a s p reci0 sa s colum n a s eri
gidas en torno, la s porten tosa s naves'de escultura , tani añas que
se descubrían por los m a rea n tes a la a ltu ra m a s remota , losa dornos cincelados de escudos gen t il icios, geroglíficos y trofeos m i li ta res fueron fábrica s en qu e la s a r t e s a
'
got a ro"
n lá"
cu
n osidad, la del icadeza y la inven cion .
¡Mundo hipócrita , respeta los umbra les de este sagrado , yno en tre s á profa na r la san tidad de n uestra pompa funera l
, n i
d isí :tiu les tu fa usto en tre n uestra osten ta cion ve rdaderam en ter el igiosa! Levan ta , si quieres , tu s soberbios y
"
desm esuradosm a usoleos pa ra con serva r cOn supersticion el va so pequeño decen iza s, 1restos ún icos de esos colosos a rrogan te s qu ien es e lUn ivm so ven ia estrecho . Hón rá los á tu u sanza . Sostituye Ge
n i os que suplan tu dolor. En via plañ idera s que pa r del sepulcro de r ram en lágr im a s a rtificiosa s; Disipa con el in ciensod e tus (l eclam a cione s l isonge ra s el fet ido olor que deja ron en
l a t icu a las proeza s con que la infe sta ron , y'colora con tin
t a s de v irtud sus deformida des . Así engaña 1ºás á t us secta rios
i n sen sa tos y desva necidos con el hum o de Una vana inmo rta
l idad , los conduci rás á la muerte con semblan te pla cen tero .
Pero nosotros lOs hijos de la Iglesia de Jesucristo som os reg1dos de l espíritu de verdad y detestam os esa s fa lsía s yd es pagana s . Vi rtudes ca st iza s , m éri to só lido , gloria verdader a , la ureles que no se ajan , fama qUe no se borra , nom bre
que el t iempo n o a caba , v ida Si n fe 1i ecim ien to , inm ortalidadfeliz, b iena ven tm anza etern a , placeres inefableS; estos randesObgetos n os ocupa n , es tos Son e l al m a de n uestra s cerem on ia slos que av iva n la l lam a de n ues t1a fe , y dan esfuerzo '
a nuest i a espe ra n za . Esta s m i1'a s sublim es nos reun en hoy
_
á_ paga r con
l a s dem ostra cion es cordia les y sin cera s de esta so lemtn ida d fúne
b re el hom enagé que la rel igion y la polít ica de conciertor eclaman pa ra la vir ,tud e l tributo de respeto y de honor
q ue la lea l tad a deuda Ạl'a soberan ía , y el Obsequio de mil es
tra p iedad fil ia l á nu*estra cºm un m adre . E l i seña dos por la
Iglesia l lºram ºs sin la desm esura de los ritos gen'
t ilicos'
yt emp lam ºs n uestra pen a cºn los con sue los de la esperan zacristia na r
. L a m em oria de la s vi rtudes de un a Reyna , que nºse1 a ta n ca ra es lº que ún icam en te n os recrea en el sen tim ien to de su pérdida : Segu i rem os esta bri llan te estrel la desde su or ien te a su oca sº pºr el ra strº de luz qu e desci il
i
ib
en la breve órbita de su vida . L a obserVa rém os e n tºda s susfa ces, y la veremos siempre crecer en luz y cla r i dad . V irtudes en Su n iñez , v irtudes en su juven tud
, Vi rtu de s de h i
j a , v irtudes de esposa y de m adre, v irtudes secr eta s y v ir
t udes públ ica s, v irtudes com un es a l sexo , v irtude s pecu l iare s á su a lta gerarquía , v i rtudes de infa n ta . y v i rtudesde reyna en tºdos sus a spectos la descubrirem os virtuosa , y haciendº verdadera su fam a . Tres son lo s pun tos
p rin cipa les d e vnsta e n que se n os m uestra .
º
. CO IHO m uge rvirtuºsa . 2 .
º
Com º espºsa perfecta . 3.
0
Cºm º
I
reyn a d ign a .
¿Pº r qué, Señores , habeis querido con fi a rm e tam aña em
presa con fuerza s ta n desigua les! Asístam e Diºs con su gracia : ayudadm e á imp lora rla : AVE MARI
'A.
El m a s sábio de lºs hºmbres,y que mas vi ctºri osamenteh a cºm ba t ido sus preºcupa ciones
y
y errºre s,_
n os h a esc la re
c ido sºbre las prenda s de la muger ben eméri ta de la a la banza. Nº sºn la s gra cia s n a tura les , las do tes del espíritu, lasperfecciones de la beldad , n i lºs bien es que són rea lmen tede providencia y llam an de fortun a , opu len cia , n ºble es
tofa , au toridad y poder los que m erecen n uestra estim a
Tºdº est o es vacíe '
dad. El temor san tº de Diºs es lº queh n iCam enie da rea l idad, va lº r y qu i la tes á aquellas prendas,y sin él la m uge r m a s aven taja da en dones de na tura leza ,y mas rica y a ba stada en fortun a s n º es acreedora á n uestra loa. Si n uestra d ifun ta Reyna“ solo se hubiese recome n
dado por esta s gra cia s, que fel izm en te le ala rgó la P1ºviden cia cºn l ibera l idad , Su n om bre no se proh u néia—r ia hoy en
en este lugar, cºn sagradº ún icam en te a l elºgió de las v i rtudes cri stiana s .
ES verdad que estos dºnes són corrientes de la fuen te d ív ina l de tºdº don perfectº . L a cla ridad
_ y despejo de su ia
geni o, su justo y exacto discern imien tº, la bºnda d de su In n !
de le, su apacible n a tura l, que relucía bien e tt la dulzura de
[ 6su a spectº , fuerºn prendas de la predileccion de Diºs, esmalat es cºn que hermosea aquella s ºbra s que qu iere da r esmerad a s, y seña les con que suele m a rca r la s persona s sºbre quet ien e gra ndes design ios . Ma s esta s prenda s ta n sºbresa lien tes
,
s in el tem ºr s a nto de Diºs , _ serian sºm bra s que ecl ipsará n lag loria , que con ellas supo gan a rse para el m undo y pa ra Dios.Estºs son lºs ta len tºs dadºs pa ra grangea r por el Padre de fam i lia s, que sºn á dañº d e l que lºs recibe , s i por negligencian º se emplean , s i por m a l icia se disipan , ó por m enos iná ustria no se a crecien tan . El desempeño fiel y caba l de lºsde stinºs de la Providenc ia es el frutº de esta n egºcia ciºn , ylºs l ucros y rendim ien tos q ue ha de exigir el Padre de fam i lias sºbre el capita l que n os ha cºnfiado . El próvidº a u
tºr de la sºciedad huma na derram ando á lºs hom bres pºrla s gerarquía s, grados y ºficiºs que le ha p lacidº, lºs prev ien e de la s ha bilidades cºnven ien tes, y cºn ta l ecºnom ía lesr epa rte sus gracia s , que no hay una s in cºn sejo n i p rºpó
s ito, ó que nº esté regla da en órden á los design iºs que ca
d a unº ha d e cumplir. No se sujetaba a l a lcance de la razºnh um a na , cºm o la esta tura cºlºsa l de Saul esta ba cºmb in adaen lºs a rcanºs de Diºs en tre la s cua l idades que le prepa rab an a l trºnº de Israel . Ni pudº en tenderse, ha sta despues dels uceso, que Judith fué embellecida tan a drede pa ra que sirv iese á la gloria de Diºs en ºbra que tan to en sa lzó a l b ra
z o de la Om n ipoten cia . Estos secretºs ínapeable s deben ten ern ºs en contín uo a viso pa ra n º desaprovecha r la s gracia s n i
va ldiam en te , n i pºr abu so . L a d ifun ta Reyna fué destinada
pa 1a sen ta i se en el t rºn o de la s España s a l ladº del Monarca m a s deseadº : á este fi n el Cielº derivó en ella todo e l
ca uda l de dºnes que la pa ra sen digna de tan ta eleva ciºn .
Dios se los concedió sin prévio m éritº : una educa ciºn dil i
gen te se lºs cu lt ivó : la gra cia a sió de e lla con p resteza ya cabó su ºbra .
Nada le escaseó la Prºv idencia de aquella s dºtes que adorn a n un a lm a rea l, y cuan tº se desplegab
'
a su razºn se m os
t raba la im ágen de una reyna . Un a lm a dóci l y capaz detºdº lo bueno, una ingenu idad, indiciº de un cºra zºn verdaderº y si n dºblez, un en tendim ien to sólido que se tra slucíab ien pºr e l d isgustº de todº en treten im ien tº frívºlº, y pºre l pla cer y cºnten tam ien tº que tom aba ún icam en te en ocu
pacion es séría s y útiles, gen io blando y cºm pa sivº, propens iºn á la beneficencia , igua ldad de afectos nunca a lterada ,gra vedad am able, cºmpºstura m esurada : pºr tºdº su exter iºriba en señándose aquella a lma buena que Salomºn agradecia
[ 7 ]a l C ielo por la dádiva mas preciada cºn que le rega la ra a l
env ia rle el cetrº de Judá . Pºr las inclina cion es y tenden cia sde la n iñez puede
_
a ugurarse la v i rtud de la edad provecta .
L a s inceridad de Jºsé n iñº, su severidad cºn tra lºs cr ím e
nes de su s herma n os descubría n y a la en tereza y ca rácterjusticiero del prim er m agistra dº del Egip tº . L a s m uestra s quedaba en su infa n cia n uestra Reyn a , hacian ya presen t i r cua
l idades extra ordin a ria s .Perº un na tura l con dispºsiciºn es m uy fel ices es cºm o la
t ierra feraz, perº s in labºr, que sºlo l leva fru tos espºntán eos ,… que á poca s rep roducciºn es se hacen s ilvestres . Es n ecesa riº
q ue la m anº indust riosa del labradºr requiera y sºlicite su
fecun didad , que la rºm pa , de svue lva y d eshe rbe pa ra quesea m a s l ibera l y n o cºn sum a e n v iciºs sus jugos . L a s fácultades del a lm a n ecesi tan ser ayudada s pa ra que tºm en su
en sa n che y expliquen tºda su energ ía . Si el en tendim ien tº nº
se cºrrige y guia desva ra en extravagan cia s, ó se pierde en
sus vuelºs. L a s pa sion es desorden ada s del hombre sofocan la ssem i lla s de v i rtud en s u c r e c im ien to y si nº se a cude p rºn
.tam en te á pºda r los sin iestrºs que brºtan de l a r a íz qu e in
fi ciºnó el pecadº, la plan ta n a cien te y t iern a se tuerce y adultera , y lo que em pezó vír tud d egenera en v iciº . L a educaciºn es la cultu ra del a lm a : a rregla la razºn , enfrena la s pas ion es , ºrdena y m odera — a l hom bre, y lo rest ituye á sí m ism o : fºrm a r e l en tendim ien tº y el cºrazºn es toda su obra .
Maestros expertºs , m étodºs ºrdenadºs é industriosos, precanciºnes y m ed ida s discreta s pa ra e l lºgrº del frutº y su
con serva cion es el apa ra tº de una educa ciºn sábia y cum
plida .
Seña les nada equivºcas dió e l C ielo de que estaba m uya lerta á n uestra Reyna en haberla prºveído de tºdºs estºsa uxi lios , que nº siem pre se “
a cierta n á reun i r . Form a do estaba Moyses á m anºs del C ielo pa ra ca beza
__ y gefe de la n a
cion predi lecta , y en tre lºs prim erºs test im ºn iºs q ue dió laPrºvidencia de haberlo tom adº á su sºm bra , fué d ispºne r poruna ra ra com bin acion de sucesºs , que recibiese la educa ciºnde príncipe bajo los auspicios de la h ija de un sºberano . L a
edu cacion mºra l y pºlítica de nuestra Reyn a fué en ca rgadaá m a estrºs dignºs de confi a nza tan del icada : fué desem peñad a sºbre plan es bien concertadºs : y pºr dicha la sºl ici tud dela i lustrada Prin cesa del Bra si l , que ya reyna pºr ven turade su s pueb los, y los egem p los vi rtuºsºs
'
de que siempre rº
deó á sus augustas hija s, a segura rºn el sucesº de la educa*
ciºn .
8
E l aciertº en la e l eccion ddl os m aestros de l os princi-kpes puede va ler ta n tº com º la fel icidad de un E st ado , Ga á
n ándºse la doci l idad del discípu lº , pueden ha cerse dueñºs desu cora zon , m an eja r á discreciºn sus p a s iºn es, y a cºnd icion a r lo á su m a nera . E l m a estro e s el m odelº que e l ”
discípulo tra sla da e n su ¿persºn a y las imperfecciones d e l
“ orig ina l habrán de repetirse en la cºpia . , ,NO S.
.
Gerón im o en el plan de educaciºn crist ia na , digno de lai ntegridad y m adurez de su juicio, qu e dió á L eta m a tronade
¡
la nºbíeza ma s esclarecida d e Rºma para la crianza de “
:su h ija Pa ul a, ,,nº h abrá n ingunº que- *
nº b uelgú e en seña runa virgen noble y tan principa l, a sí comºAris tóteles h ol;gó de en señar á A leja ndrº hijo del Rey Fi lipº, m ostrándoe desde lºs prim eros p rin cipios de las let ra s; m a s tú bú sc a lo de sa n ta v ida , ºbuena dºctrin a y egem p lo .
”
Un s ab ersóhdº y sanº es n ecesar iº ; p erº n o b a sta : m ºrahdade s ir rep reens ib les n o pueden dispensa rse; perº no es tºdo : aun deb e esta r adorn ado de cu l tura , civ i lidad , decºrº y su av idaden su s m ºda les , s in ,
v u l—g a r íd a d , n i vi ciº en su lenguage, en“
s u prºn u n cia 0 íºn , n i en su gesto, que“ºfen da en la socie
d a d , porque estas gra01a s y perfeccion es sºn el ba rn iz y el
b r i llº que dan resa lte á la s vi rtudes , hacen am able el tra
tº , cºm un ican una fuerza m a s V iva “
e ín sinua n te á la s pa lab ra s, y presen ta n a l m a estro pºr u n decha do s in im prºp ie
d ades que aficiona de si m ismº , y a lien ta á la im i ta ciºn . S .
Gerón im º tam bien ºbservaba sºbre lo que habia leidº en
l a historia de lºs Griegºs , que el grande Alejan drº jamasperdió cie rtºs defectºs incivi les tºmadºs en su n iñez de sup edagogo León ida s .
Ta les fuerºn lºs Cºn tinuºs en la crianza de nuestra Reyh a , de quienes no pasó si e lla defecto que tuviera en ade
- la n te que desaprerlde r. Uñ a Señºra, tan i lu stre por Sus v ir
tudes com º por su cuna , en qu ien se h erm an aban la discrecíºn y la pieda d , l e fué dada por Aya , y se desempeñó de tan hon roso y elevadº ca rgº con ta l sºl ici tud, que se
recuerda n lºs desvelºs de Iºsaba en la custºdia y cria nzadel Rey Joram . Un sacerd ote, que hon raba a l cláustrº con
SUS ta len tºs y Virtudes, recibió en si el árduo empleo de láe n señan za l itera ria . Su experien cia con Su pen etracion l e hábia n adqui rido un conocim ien to perspica z de la óptica decada ingen io para presen ta rle la verdad en un gradº de luz,que la v iese siem pre agradable . L a docil idad de nuestraReyna , la deferenc ia y con side ra cion respetuºsa á s us m aest ros n º des em
”
eja b ari de la s" seña les de veneraciºn
“ ym odes
[ l º ]'
c esitál
ser encam inada pºr sende rºs d erechos,y que Se te
a v isen los t rºpiezºs y rodeos que la pueden desv ia r : que se ledescubra n la s fuen tes de sus errores , que se le desengañe de :
la s i lusiºn es que h acen fa lsa s sus idea s y sin ie strºs su s juicios : ser in troducida en fm
“
en s i m i sm a , d a rle á conºcer su s
a t r ibutºs s ublim es y ens aya rla en el buen u so de sus facul
tades . Una lógica sencilla y una m etafísica ju iciosa sºn dºsa pºyºs sobre que se sºstien e la débil ra zon , y esta s fuerºnlas pr im era s in sti tucion es que recibió la Reyn a , pa ra hacers e capaz de lºs va riºs saberes cºn que prºgresivam en te fuéi lust rada . Su fácil cºmpreen sion nº n ecesitaba de tan ta in a
dustr ia pa ra acerca r le los ºbgetos y ha cérselºs a ccesibles, cºem o pa ra con tenerla e n los l ím i tes de la sºbriedad . L a dest reza de sus m a estrºs se a creditó en haber m an ejadº la …eu
seña n za de a rte, que l leván dola divertida po r la am en idad ,
n i la dej arºn holga r en investigaciºn es curiºsa s y s in pro ..
vecho qu e la hiciesen un a l etra da resabida , n egl igen te de sus
prim eros deberes, n i po r peligrº de ta l engreim ien to en la sletra s que la em b a rga r a e n e l ºciº , la defrauda ron de aquellai lu straciºn q ue exige todo en tendim ien to pºr un cona tº n aé
tura l á restablecerse en su perfecciºn, n i de lºs conocim i en
tos q ue correspºndían á la sublim ida d de su cla se.El saber tien e en su exten sion y sus gradºs un a ta sa re
glada por la templan za , en razºn de la capa cida d de lasºna , de su cºndicion y ºtra s circun stancia s cºn que se h ad e ten er cuen ta .
Cºn esta di screta ecºnºm ia y pa rsim on ia se fué m idiendºla in struccion de la Reyn a , puesta s iempre la m i ra en lo quele impºrtaba pa ra cum plir sus obligaciones á Dios, á s i m is
m a,y á la sociedad . El conocim ien tº de lºs deberes prºpiºs ,
e l servi ciº de Diºs y el ben eficiº públ ico fuerºn el bla ncoel que se en derezó la educa cion . Cºpia de letra s s in reforma
del cora zºn es un saber vanº que cría e l orgul lo, a rru in a a l
a l ina'
y la despeña en su infel icidad eterna . ¡Ay de aquel lºssábios destituidºs de la cien cia de Diºs ! Sus luces serán sus
t in iebla s, y pºr la celebridad de su nom bre los cubri rá ígn om in ia perdurable . L a cien cia verdadera es luz que a lumb ra y a ca lora , es m anja r en que el en ten dim ien to n o se sa
b orea cºn provechº sinº lº repa rte con la volun tad, í e 5 el
a l im en tº de la virtud, es la fuerza que lan za en Diºs a l
cºra zon humanº . L a Religiºn fué el a lm a d e tºda s la s l etra s que se d ierºn á la Reyn a , y el n ºrte que jam a s ¡ “
per
dieron de v ista sus a tin ados m aestrºs en toda la erudiciónsagrada y prºfan a , que recºrrierºn en su cºmpañ ía . Estudia
1 1'
l
la Rel igion en su sistem a , sigu iendo el encadenam ien to yk
en
la ce de sus verdades . Es luego tra sladada á la h istoxia de laa n tigua y nueva Igle sia , y se le ha ce observa r su m a rcha m a
gestuo sa y serena , por en tre el torbell ino de los sig los, sosten ida de una m a no por la Sabiduría Etern a y de la otra po rla Om n ipoten cia . Peregrin a despues por el campo de la historia profan a , se le va de ten iendo sobre el m apa de cadac lim a , pa ra ha cerle su descripcion geográfica , n otando la s revolucion e s q ue en el orbe físico y m ora l h a n cau sado la n a
tura leza y la s pa siones, la s diferen cia s del a n tiguo y n uevom undo, el flujo y refl ujo de la s n a cion es, q ue cayendo y leva n tándose
“
un a s sobre Otra s h an habitado cada pa ís, la s m u
danza s de costum bres , leyes y gobiern os, y s in deja rla repos a r m ucho tiem po , es rest itu ida a l sola r de la re ligion ya llí, con cil ian do t iem pos, época s , sucesos y person a s, r econo
ce los b a ib en es y e st rem eci'
m ien to s qu e ha cia el trono de lRein o de Dios a l en cuen tro con los dem a s im perios, y el impu lso secreto de un a m a n o om n ipoten te, que leva n ta ba loshom b1es en m a sa s en orm e s y l a s d e sp e d ía desde zon a s m uyr em ota s sobre los poderíos m a s form idables en la t ie r r a ha star e su r tir en el reyn o de los escogidos , para que si rv iesen á su
h um illacion ó en
'
gra ndeci'
m ien to , segun la a l terna tiva '
en que
l a s costu'
mb 1es públ ica s se m ov ían'
por la rectitud ó imp rov ida d de su s gob e i n a n te s . Este espíritu de religion , qu e se lein spiraba e n todos sus estudios
, e ra el nu trim en to de su a lm a ,
con el que du lzora ba sus ta rea s a m ane1 a de la in dustriosaabeja , que m uda “
en propia substa ncia , y destila en li cor sa
broso la s esencia s vegeta le s,y con el m ism o de spertaba sus
a nhelos de nuevos conocim ien tos que la eleva sen a Dios . An te sde vaguea r por la s cria tu ra s, dem a ndándo lcs com o Job la m o
r ada de la sabiduría , por toda s pa rtes se la ha01a n sus m a estros encon tradiza , y ha sta de los m ism os absu rdos de la m i
to logía , y de la s deform aciones de la na tura leza ra cion a l porl a m ora l gen tílica le ha cía n esca la pa ra a llega rla a la sum a
v erda d , y funda rla m a s en la fe sobre el ca rácter verdaderoy san to de los orácu los divm os . Si se le descorre por a lgunl ado el velo de la s hum a n idades, y en trevee la s ga la n ía s dela e
'
locuen 0 1a y la s gra cia s de la poesía , es pa ra que suba su
a lm a a l suprem o origin a l de lo bello ; pero precav iéndo la del a dema sía qu e puede haber e n el refina r del sent im ien to,porque la experien cia del placer n o re laja se su cora zon en
m uelle y voluptuoso . Con esta m ism a m ode1acion se la l a s
t ruye e n la m ú sica ha sta el pun to de conocer su fi losofia , ysaber el uso m ora l a que se ordena e ste honesto recreo . Ador
[ 12 1n ada de los conocim ien tos cien t ífi cos, se le entrega con
'
la l en
gua la t ina la lla ve de oro de l tesoro m a s rico de la sab idu
r ía , y segu idam en te se le e n seña n los idiom a s v ivos de la sn a ciones cu lta s española , fra nce sa é inglesa , con quienes ha ;b ía de esta r en com ercio , y en sus cortos años corrió con a ce
l era do adelan tam ien to la filo sofia , hi storia sagra da , y profan a , con la m itología , esfera , cómputo , geografia , e lem entos de huma n idades, m úsica , idiom as , y con prefere n cia lac ien cia de la religion , que poseyó , no con una in struccionv ulga r, sino profunda y_
sólida que la in cita ba á la v i rtud .
E s ta fué el cen tro donde se recogieron tod a s las l ín ea s de lae ducacion , in clinada s d ie stram en te por sus m a estros hácia losm odelos de m uge res v i rtuosa s , que le prese n taban en la E se ritura y la his toria pa ra conform a rla con ella s .
El Sábio, que hizo una m em oria prolija de la s prendasen que ha de resplandecer la muger fuerte, 6 sea perfecta , n od a la preem in encia á la sabidu ría , sino si la prov idencia domestica , á la econom ía y laboriosidad. Ta mbien se a sen tó es :
t a idea en la ra zon , que n i la fa n ta s ía creadora de los poet as supo fi n g ir otra gloria fem en i l pa ra sus de idades
_y prin a
cesa s, que pin ta rla s en tre copos de lana , husos, rueca s y telare s . L a s n acion es m a s reputada s en letra s no a certa ron con
a dorno m a s hon roso pa ra las h ija s de los prín cipes , que lah abi l idad y delica deza en el h i lado y el tegido . Alejandro en señ aba á la s princes as de Persia su s vestidos ricos y curioso st rabajados por m a nos de su m adre y herm an a s , conform e a le stilo de los Ma cedon ios de n o vest i r los soberanos otra s ro
pas que no fuesen la brada s por la s mugeres de su fam i l ia .
L os Rom anos con serva ron po r m uchos años las hila za s y laste la s, con la rueca y el huso de la reyna Ta n aqui la , m ugerde Ta rquino , quizá con m a s aprecio que la s
'
a rm a s de Róm u lo . Ni Augusto, n i Ca rlo Magn o perm itieron que la s señora s de su esti rpe hiciesen estado de la ociosidad, n i que
“
e l
r espla ndor de sus corona s las i lu stra se, sin o pa ra ennoblecerlos instrum en tos y u ten si l ios de su s labores. ¿Qué m en digam os egemplos extraños, ten iéndolos dom ésti cos en ta n ta co a
p ia ! No sufre el t iempo recor rer la serie de nuestra s Reyn a s; pe ro va le por toda s la Ca tólica Doña Isabel, tan a certar—3
d a en el gobierno complicado de esta va sta m ona rq'
uía , no
b ien con sol idada en tón ees, como en el a rte de form a r rey!n as laborera s en los ta lleres de industria pa ra los prim erost ronos de Europa . Estos fueron los dechados que se pr0pusieron si nuestra Reyna pa ra que se estudi a se e n el los, y sa l ió
por cierto m uy aprovechada . Todos los oficios y labores aco
!31m oda dos a l sexo le fuerºn en señados , y los egecutó con maest ría . Ha cendosa por gen io, por agilidad, por refl exion y por
v irtud n unca fué est im u lada su aplica cion. Su teson y con sta n cia en el t rabajo e ra como de la que v iviera expen sa s de lpropio sudor. No se perm itía a sí m ism a ocia r po r un b re
ve espa cio . Se va riaban la s l abores, se i nterca laba n la lecturay ege rc1c¡os de piedad pa ra d ivertir la a tencion ,
y sostenerlas in can sa ncw . No sazonaba la m olestia con pa sa tiempos; lasb ellezas de la s a rtes y los enca ntos del dibujo eran su espaciam iento, y el púb l ico a dm iró sus progresos en la s obra s quegozaron sus OJOS_
.
Pero n o se lisongeaban su s m aestros de haber l legado porso la su habilidad ,
_
n i el con cierto de sus m étodos, á ta n buentérmino con la s disposicion es dóciles de la Reyn a , porque s i
n o les m in tió el suceso de sus afanes, m erced a los desvelos dél a Princesa del Bra si l, que sólidam en te in struida , nun ca s e:
tuvo por desobligada de los ofi cios de m adre si fuero de su
excelsa dign ida d . Mi raba en sus hija s un depós ito precioso de lCielo , y empleó el celo m a s vigi lan te pa ra con serva rlo sin
m enoscabo , y volverlo con creces . Extendia su v ist a a lo la r=go de la historia , y por la s ven tajas que observaba haber r e
crecido a la religion y á la república de la s v i rtudes y ln
ces de las princesa s piadosa s y discreta s , v a luaba e l preciod e l tesoro que gu a rdaba por en ca rgo del C ielo . No se pueded efrauda r á Elen a , Teo l in da , Cloti lde é Ingunde la gloria del a s grandes adq
'
u i51cion es que debe a l a rdor y saga cidad desu celo por la fe el rein o de Jesucristo . En los a na les de la sn acion es se h a con serva do pa ra el reconocim ien to de la post eridad la m em ó ria de coron a s afi anzada s, gobiernos puestose n a sientos, riva les am istados , pa rcia l idades aven ida s , guerra sa paciaguada s , let ra s protegida s , estados florecien tes por los m a
_
n ejos polít icos de- la s reyn a s . ¡Qué felizm ente libró n uestr a…
E spaña , cuando comprom et1a en m anos de sus Sobera nas lacrisis de su suerte ! El m em orable tra tado de Va len cia de D..
Juan ,segun unos, ó de Tuy , segun otros, en que se aju stó la
r eun ion de la s corona s de Ca stil la y de Leon en Fe rn andoIII e l Santo, pa ra nunca m as sepa ra rse, fué la prim era piedradel engrandecim iento y con so lidacion de la mona rquía Española , y esta capitulacion se con certó entre dos Reyn a s DoñaBerenguela y Doña Teresa . L a Europa en tera 'se abra sa ba en
l as l lam a s de la guerra , que a l im en taba la emu la cion d e Cárlos V y Fran cisco I, y otra s dos prin cesa s Ma rga ri ta de Austr1a y L uisa de Saboya , por sí solas a comodaron la s diferen
cia s de los dos competidores i rreconci liables en la célebre pa _
z
14 ]d e Camb r .ay Repa saba la z
ingusta m adr e de nuestra Reyna
es ta s y otra s m em ori a s, y so lta ndo la s vela s á la im agin ac ion ,
se engolfa ba en e l occéano de la Pro vidr n cia se b re
los destin os de la s cria tura s pa ra con clu ir lu ego en la su
m a de bien es ó m ales que podian a ven tura rse “
en la cr ian
z a de sus hija s . Aun s in ser en cum bra da s sobre s u a l ta cla
se de l nfa n ta s, en a quel m ism o estado a ca so la s re serva ra la
Providencia po r a lgunos de sus giros m iste r iosos pa ra ser arb it ra s de la fo1 tun a de uno ó de m ucho s reinos . Pu lcheriae ra un a prin cesa del Imperio y no m a s ; pe ro con su juicio,su con sejo y su s ra ra s v irtudes se ganó la superioridad sobree l cora zon de Teodosio su herm a n o, y m ien tra s estuvo som et ido a su s d ictam en es florecieron e n el imperio la religion , lajusticia y la pa z . Infan ta era de España , y n o m a s, U1 ra ca ,he rm a n a de A lfon so VI,
'
y á su ext ra o rdin a r ia pruden cia d eb ió este la v ida y la prosperidad d e su rein ado . Infan ta era
tam bien Sa n cha , herm a n a de Alfonso VII el Empera dor, ysu con sum ada pruden cia , su mad l i re z y
“
d iscrec10 n la ele '
va
r on ha sta ce t ca del t ro n o c o n e l t í tu lo hon ora rio de Reynaen justo recon ocim ien to de la s gloria s con seguida s por el
a cie rto de sus con sejos . L a va sta y pe 15p 1ca z pen et ra cion del a Prin cesa del Bra si l n o de scubría y a térm ino a la t ra scen
den cia de lo s ca rgos de que debia re sponder po r la educa ciond e sus hija s , y se con sagró en tera m en te a l len a r la s ob l iga cio
n es de m adre en toda su exten sion . Son los pa dres lus mm aest ros que ha dado a los h ijos la n a tura leza , y de ella m i sm a es
l a en e rgía que an im a ta n to la voz de aquellos , que jam a s de
ja de ¡ eson a r en el secreto del cora zon de los hijos, a un en la
v ida m a s rem ota y e s tragacla Ta n v i va y profunda fué la impresion q ue hizo esta voz en Sa lom on , que vert iendo la sub li
m e y di vin a m ora l d e sus Proverbios, se rega la con el recuerdo de que esa m i sm a era en la q ue su m adre le habia doct rinado, y recom ienda frecuen tem en te la doci lidad y deferencia á la en seña nza m a tern a . L a a ugu sta m adre de n uesta Reyn a no n ecesitaba auxilia rse de m a estros pa ra la e rud icion de
de sus h ija s , n i da ndose los se exon e ró de su ens eñanza , porque la direccion fué toda suya . Dura a un la m emoria de losad elan tam ien tos pre coces de la Infan ta Doña Ma ría Ca rlota ,que fué en su n iñez la s delicia s de n uest ros sabios , oyen tes yadm i radores de sus prim eros ensayos l i te ra rio s . En la educacion m ora l se reservó toda la gloria sin pa rti rla con a lgu ien .
Siempre a lertada con tra la s sorp resa s á“ que esta expuesta la
i nocen cia inexperta , se constituyó ella m ism a la sa lvagua 1d ia
d e su s h ija s, para que n ada se les ace1ca se que empeciera su
[ 15 ]candor . Jam a s la s separa de su presencia , n i deja por un so
lo m om en to de esta r en a ta laya de sus acciones . Se a com
pañaba de ella s pa ra industr iarla s con su egemp lo e n las
obra s de beneficen cia y e n los ac tos de re l igion . Sus la
b ios e ran un ma nantia l de sabiduría que se desl i za ba sua vem ente en toda s sus conversaciones . Aten ta siem pre a que e l
cora zon de sus hija s no se levan ta se con el apa ra to q ue ro
dea á la s"person a s rea les, n i con los a ca tam ientos de una
servidum bre de la n obleza m a s ca lificada q ue se compite l a sp rim era s hum i llacion es, n i con los homenage s y obsequ ios quer eciben de toda s la s gen tes , desde el m a s a l to ha sta e l m a s
l la no, dispensaba en el pa lacio el rigor de la etiqueta , m o
deraba el fa usto de su tren en el público, la s a costum brah a a el t rato popu la r les in cu lcaba con frecuencia la duracion _
efim era de la s gera rqu ías de l m undo, que a llana en un
m om en to l a m uerte, y la igualdad en el n a cer y el morir .
de l príncipe co n e l va sa llo . Quien en tra ra en el pa la cio de lBra si l y llega se ii la esta ncia de la Prin ce sa , a l observa rlacercada de sus hija s a toda s hora s, ya rep a rt iendo les la s ta rea s,y a tom ándole s residencia de
”
su apl icacion , ó b ien enmen
dando sus trabajos, ó… dándoles docum en tos para regla r su
porte, no podria menos que exclam a r : n o es“ este el laga rde la vi da rega lada y delei tosa , esta es m orada de virtude s ,sem in ario de prin cesa s . ¡Virtuosa Ca rlota , n ada n os deja s env id iar de la s eda des pa sada s ! Tú h a s renova do aquella regu lar idad y aquel órden q ue se adm ira ba e n e l pa la cio de l jóven Teodosio, y la v ida metódica y siempre a ctiva , no diferente de la disciplina m on ástica , que s egu ian e n comun
la empera triz Eudoxia y la princesa Pulcli eria con sus h e r
m ana s . Tú eres el Vástago en qu ien han reflo re0 id0 la s vi r
tudes dom ést ica s de la s soberan a s , de cuya rea l sang re v ie
n es .—Tu nombre se escribirá en el ca tálogo. en que está po r
Cabeza el n ombre de Isabel la Ca tól ica y pa sa rá a la m e
moria de los ven ideros m as recom endado por tus“ oficios de
m adre de fam i l ia que el de Cristina en Suecia d iscurriendo con aplauso e n a ca demia s de erudi tos ; Grande fué la
m isericordia de l Cielo en la confianza que te hizo de una hijaCom o María Isabel con a lm a dotada ta n ricam ente ; pe rol a fide l idad con que ha s respondido a Dios le h an empeñado en nueva s bendiciones . L a verás m edra r e n vi rtudes,y esta dulce sa tisfaccion será la recompen sa de tus trabajos .
¡Que obed ien cia la de de n uestra Reyna !No se desqu i-acia de la volun tad de su m adre, ni t iene un querer pro
pio , n i se a treve a descu bri r jamas su gusto, mi Usar de Su
l_ 15“
e lecci ó n para la ca sa de ménos3a lia por un miram ientpe tuoso . ¡Que piedad ! Su v ida e ra una serie con tinuada deobra s religiosa s en que estaba cen te lleando la d evocion . Ciu
dad de 8 . Seb a stian , s i podra s ol vida r jam a s aquello s fervor es de tu Infa n ta , qu e te en tern eci a n s i n a rbitrio para re
p rim ir tus lagrimas , cuando en l os dia s con sagrados a l Na
cim ien to y Resurreccion del Sa lvador te con vid aba á la ve
n eracion de estos m iste rios, represen tán dolos en sim u la cro ssobre a lta res , c os tosa y prim orosam en te adornados dentro desu cama ra , que franqueaba a la vi sta del público. ¡Que m i
se ricordia l ¡Que clem en cia ! ¡Que ofi ciosidad l Su co razon se
conm ovía a l i mplor a r su proteccion a lgun afl igido : sin otrarecom enda c10 n q ue la s lágrim a s del m i sera ble y el sem b la n
-te angustiado del desva lido , h ac-ia propia la causa agena , se
const ituía rogado ra con su augusto Padre y no des istia d esu dem anda ha sta reca bar el con suelo de su c lien te .
.
En su c orta edad ya se a nun ciaba n uestra Reyna con e la pa ra to de v irtu des de la
“
mnger fuerte . Su a lm a poseída del a sabiduría , la clem en ci a en sus labios, la s m anos 6 a biertasp a ra el pobre , ¡1 ocupad a s en e l trabajo pa ra m erecer el pan .
Llegó en fi n un dia en que la providen cia descorrió su
velo y descubrió l lanam en te que preparaba esta Infan ta p ara que e n tra ra en el plan de sus m i seri cordia s sobre la España .
Suelta s ya la s caden a s de nuestro cau t iverio, r estitu ido nuest ro Rey a l trono, resanados los v ín cu l os cas i deshechos de latnon a rquía , y repa rada s las brecha s de la religion y del e sta do, queda ba para sel la r esta r ean im acion prodigiosa de laEspa na , da rle un a Reyn a que afi anzase el imperio de la V i r
tud con su egemplo , y se hiciese va le r en el corazon de su
esposo pa ra da r im pu lso a n uest ra prosperidad .
L os destel los qu e enviaban ha sta Europa la s v i rtudes deMa ría Isabel dieron a conocer que el la sola era digna de un
Rey de España , y que solo este podia m erecerla . Una Infan tal len a de prenda s y tan tem erosa de Dios se debia en m a trim on io á un príncipe dist ingu ido por su rel igion , y en la ce detan difici l igua ldad e ra ob ra pa ra a credita r el seso y co rdurade sus padres conform e a la sen ten cia del Eclesiástico . Tr a d e fíl i a m et gr a n de op usfecer is et Ízom in i sen sa to d a illam . (a) Tuhija
,dijo á Raquel e l _
Para n info d e l Cielo, ,ha de darse por m u
ger a este jóven que tem e a'Dios
,y este decreto divino le deci a
dió para con cederla á Tobia s_ y sin m a s dem ora celebra r los
Concie rtos del matrim on io . E t a ccep ta'
ca r td fecerun t con scr ip
18
Decid de buena fe , verdad que desde el aviso de apresta rse la Reyn a pa ra su Venida : á España cam in ah a el so l con len ti tud pa ra vu estra im pac iencia! ¿No os pareció a l a v i starse … la n ave que la conducía , q ue despuntaba laa lborada de vuestra dicha! ¿No se ferm en tó la lea lta d en todos los cora zones españoles no hervía ' el amor en todos lospechos, no corrí an en uno de toda s pa rtes los pueblos pa rasa luda r y aplaudir á su recien l lega da Soberana con la s dem ostraciones m a s afectuosa s! ¿Hubo ciudad
, n i a ldea quen o pretendiese con em peño y con importun idad tenerla en
“
su recin to, siqu1era por a lgun a s horas! Tú, Sev i l la fuiste priv ilegiada . Logra ste que se digna ra acceder á tus . ruegos re
veren tes , y que superior a“
si m ism a_
re“
tarda se , por no n ega r—ste e l honor de su presen cia ,
“
la un ion á su esposopor quetan to a nhelaba . Muy pocos fueron los !dia s que . te
_
'
concediópa ra con ten ta r un amor t an eXa ltado _ como e l … tuyo. En _
… todos el los tus m oradores estuv ieron agrupados sobre
“
la s v i sta sdel pa lacio por no m a logra r una oca sion ” de divisa r ¡i su Reyn a . L a segu ia n por esa s Ca lles
_
e l p a so …cor 'rido, e l_
huelgo apre-esurado ,
y se restitu ian a sus ca sas muy sa tisfechos, con tandolo s sa ludos y v iva s que le . h abían dado '
en algunas travesía s,y en careciendo el aga sajo y las gra cia s con que les habiacorrespondido . No quiero… a to rmen taros m a s con - m em oria st an crueles, porque se m e tra sluce por . la tu rb aciori de vues—at ros semblan te3, qate me est a i s a cusa ndo de la in sensibilidadcon que t ra to vuestra herida .
Segu id á la Reyn a en su Ca rrera fy ved la in augurada So-ñbera na de inm en sos d om in ios , ceñida con la cor0n a de dos
m undos, recibiendo la s congra tu lació ne s de las cortes extran a
gera s, y el va sa llage de todos sus estados por fidelidad y pora m or. ¿Te in e is a ca so por su v irtud! ¿Si la de slumbra i
º
á el res
p landor de'
tan ta m agestad! ¿Si la fa scin ará esa pom pa Sed a etora ! Jóven eres é incau ta , vas a en t ra r
“
en l id con un m un
do veterano y m uy certero la s pasiones juven iles para derriva r la v irtud . Redob la tu vigi la n cia , Ma ría Isa bel, qu e no
sobran la s defen sa s . Repa ra en los bu stos que decoran el t rono si que ha s subido : s on de la s Ingundes, San cha s, Elvita s,Teresas, Berengue la s , Ma ría s , Con stanzas, L eoriores, I
"
sabeles,
Ma rga rita s, Bárba ra s y Arrialia s f a tiende a la s empresa s quedistinguen el de Cada un a y verás la d ivi sa de la pa cificadcion ,
de la m ah sedum bre , _ de_
la pa ciencia , de la m isericor
d ia , de la piedad , de la magn ificencia de la s Virtudes
'
conyuga les,y cobra
_
a lien to para no desconve'nir de reyn a s tan ' di
'
gna'
sf No'
desfa llezéa s , pide á Dios la animos idad y
D e!con stancia que J_
ud1t, para senorea rte de ese m undo en e
m igo que se vence con el desprecio . (a)Ven turosa Espan a , eleva tus ojos y m ira en la persona
“
d e tu Reyn a la v irtud sen tada en e l trono . Aquella es lasobera n a que te ha da do el Cielo, la que no se a tavía ta n
to de'
tela s m atizada s con v a rio gusto , n i s e enjoya m a s depiedra s preciosas que de v i rtudes : esta s son la s pres
'
ea s m a s
r ica s de su a dorno y de su apreciam iento. En nada Se h a'
desm en tido de lo que era e n el Bra sil . A im i ta cion de Ester , que ,
tan obediente estaba a la voz de Ma rdoque0'
en su exa ltacion, cºm o cuando se cria ba n iña en su ca sa ,con la mism a docilida d cumple n uest ra Ma ría Isabel ya reyna , los docum en tos de su m adre , que Siendo hija de fam il ia . (b) Ta n enga stada s h a tra ido en su a lm a la s leccion esd e la educa cion , q ue lo que era de infa n ta eso m ism o esde reyna . L a m i sm a desn udez de cora zo n ,
el mi sm o desasim ie n to , el m i sm o m enosprecio de la va n ida d , e l m is
tenor de vida cristia na : ta n com edida , tan có mp 11e s ta , tan
h um i lde , ta n Com pa siva , t a n d e v o ta y t a n labra nde ra ,'
s in
a dvertirse otra diferencia que la del n uevo esplend or qu e tomaron sus vi rtudes con el rea lce de la m agesta d. Fie l siem
pre zi
la s renun cia s qu e hizo a l in corpora rse por el b au tism o en la iglesia , guardó su cora zon de que
'se le “ en laza 'ráa l m undo con aficion es —d em a siadas . No elogio ba stan te la h o!n est idad
_
de la Reyn a"
con“
d ecir solamen te que detestó losafei tes l ivianos de Jezabel puso
¡
a dem a s un estudio Serio e n
concerta r Su ga la n'
ura, y tuvo'
siem p'
re en la m a no la no'
r
m a de la m odestia Cristiana pa ra q ue—a la preciosidad de su s
trages y a l iños convm i era co n el resplandor de la magesta d,s in desn ivela r _
se de la decencia y de l'
áf
sobriedad . Era“seme
jan te á Judit, elogiada por sa l i r del retiro en la s gra ndes" so
lem n ida des pa ra d eja rse ve r en públ ico con osten tacion y fansto , no por la van idad de luci rse, sino por un espíri tu de rel igion , Ester se hermoseaba cnn ga la s v i stosa s cuando pa recia en presencia de Asuero ; pero el historiador sagrado prev iene que no pa ra ba m ien tes en su adorn o, y Vestia á
”elecCion de l Cam a rero. (c) Esté de sapego celebrado por
'
prueba de
V l l't l] d m arca tan a l
'
v ivo el de nuestra Reyn a , que aún en
ojos m uy vulga res no d eberá pa sar por una indiferencia tne
(a) Da m iln animo meo constantiam a t conterimari1 il lum.
(b) Quidquid ¡lle praecipiebat observabat E sther; et ita cuneta faciebat ut eo tempore so
lita erat quo earn pa rvulata nutriebat.
(c) Non quaesivit muliebrem cul tum, sed quaecumque Vo lai t Egeus E unuchus custos virginum, h aec. e i ad ornatum ded it. E sth. II.
ºº
rameute gen ia l . No se l lega si esta desa ii cion sin mucho posce rse
,n i a tan ta posesion sin el vencim ien to de la pa sion m a s
t i ran a de la m uger. El engreim ien to de sí m ism a , la presun-f»
cion orgul losa del propio mérito, la in tolera ncia del agen o,
e l apeti to de vanagloria y de aplausos in sensa tos la lleva con
desapoderado ah ínco á recue sta r del m undo todos los a rt ifi
cios, ó sea n bur lería s, que aborta el capri cho pa ra sorpreen
der con la e xtrañeza de la in ven cion y la novedad del aderezo, y sobresa l ir
'
por una l inde '
za de i lusion . Pero m uger quen o adolece de este gusto por la singula ridad y la ex travagan
cia ,'
es superior a su condicion , y la excepcion de su sexo.
Ta l fué n uest ra Reyn a . Con su buen ta len to ayudado de lagra cia en tendió b ien la nobleza y excelen cia de su a lm apa ra sob reponerse a esa s n adería s que degra d an e l ca ráctersublim e del ser ra ciona l . Bien es con apa riencia s m en os fút iles , a unque va cíos de verdad , no prendieron sus a fecto s . Noam ó la Va n idad , y una s “
veces en el ret iro, otra s a la faz detodo el pueblo hum i l laba su corona a l Señor de los sobera
n os , y le d e r r am a b a su corazon"
en tiernos y am orosos coloqu ios . vvTú , Señor, decia á egemplo de Ester, sabes qUe e ri
sv toda verdad abom ino esta coron a de que m e h a s he cho merced, y con cuan ta violen cia la l levo sob re m i ca beza en los
93dia s de osten tar la m agestad. Tú sabes q ue en el tiemposuque m e queda de silencio y de 'sosiego excuso todo el "
apa
5 9 ra to bri lla n te de m i gra ndeza . Yo m e confieso por tu escla
95 va , y tú , Señor, m e e res testigo que desde e l d ia en que
sv fuí tra sla dada de la ca sa de m is padres ha sta el presen te , e n
as ti solo he h a l lado pla cer que m e dé ha rtu ra . (a ) Si de la sora cion e s que env iaba a l Altísim o en la soleda d de su espiritu,
n o hubo otros testigos que los Angeles, m ed ia n eros porqu ienes la s presen taba , m e a trevo sin emba rgo si a segura r,po r l a conform idad de sus obras, que esta s m isma s serian la serupcion es de sus a fectos en cen didos. Todo Madrid fué test igo de sus egem p los v i si ta ndo los santua rios, y de cuan toed ificó en el de la Soledad , compa reciendo sin osten tacion n i
m a s com i tiva que su cam a rera , por Un cierto núm ero de dia s
que se prescr ibió su devocion , com u lgando repetida s veces p ar a obten er la proteccion de Ma ría San t ísim a cuando dió á luzla prim e ra Infan ta , y despues pa ra agra decer el benefi cio . Suescla recida servidumbre puede depon er tam bien de la s v i rtudes m a s recóndita s que n o podia en cubrirle el velo de la m o
destia . Decid , pues, cuan ta e ra su vigilan cia por con serva r el
(a) E sth. XIV.
2 1 ]corazon en pureza , cuanto su temºr de desgraciar Dios
,,
cu an to el m iedo de perder su am ista d, con cuan tos sol lozos ygem idos se le via pedir el perdon de sus fragi lidades, y con
cuan ta a nx iedad pretendia la reconciliacion en el tribuna l dela pen itencia . ¿ No eran sus confesion es ca si d ia ria s, y sus co
m un iones tan frecuen tes com o fervorosa s ! ¿ Qué se observabaen la Reyn a cua ndo se a cercaba á la m esa de la Euca ristía !E sa jóven a ngel ica l, que e n el juicio hum a no h a s ido adm it ida á la s boda s del Cordero, s in haber am ancil lado el vestido cándido de su inocencia , ¿no se sobrecogía de un sa nto yr espetuoso pavo r, y se a bism a ba en el conocim iento de su b a
geza y de la d ignacion de Dios ! ¿ No se anonadaba en su d iv in o a ca tam ien to, é imploraba por la rgo tiempo su m i sericordia y el favor de los cortesanos del Cielo, pa ra l lega rset rému la á un i rse con Jesucristo ! ¿ No se hacian sen sibles lo sefectos de aquella celestia l vianda en el gozo que se vertia porsu ro stro, y con dem ostracion es devota s de a ccion de gracia sen que duraba por largo ra to, queda ndo ta n tom ada del am o r,que ni aun se curaba de s í m ism a m ientra s estaba a los piesd el Sa lvador ! Bien impreso h a quedado en n uest r a m em oriaaquel fervor extraordin a rio con que seña ló los úl tim os pe ríodos de su
“
v ida a sistiendo en la noche de Nav idad , que an tecedió a la de su m uerte, si los oficios eclesiást icos ha sta la st res de la m a druga da , s in que fuesen parte si retira rla sino despues de oir tres m isa s y recibir la sagrada com un ion , n i las
m olestia s que le _
aquejaban en su del icada y penosa si tuacion , n i la s oficiosa s persua sion es de su com i tiva porque e vi
ta ra el peligro de la dem a siada fa t iga , á que respondió con
una sen ten cia digna de un espíritu en a rdecido en el serviciod e D ios n o h ay tr a baj º.
En estos ab ra sam ien tos de amor quedaba su a lm a sed ie n
ta de Dios, y a n siosa de in tim a rse m a s en su com un icacion .
Su comercio con el Cielo pa recía no in terrumpido por el trato con la s cria turas. Da ba la rgo tiempo si la oracion , y deconversa r con Dios pa saba á postra rse an te el trono de . la grac ia la San tísim a V irgen Ma ría , implora ndo dia riam en te su
c lem encia pa ra con sigo y su a ugusto esposo con la s a laba nzas y preces que le dedica la Iglesia en su oficio . He aqu ídonde aprendió la cien cia que form a san tos, donde adqu irióla s v i rtudes que tan to recom endó con sus docum en tos y egemplos nuestro Div ino Ma estro Jesucristo, la m a n sedumbre yhum i ldad de cora zon ,
de que e ra v iva eXpresion la suav ida dy du lzu ra de la s pa labra s de la Reyn a , aquella desestim a q ue
h acia de sí m ism a e ra tan verdadera , que nunca estaba m a s
[ 22 1een
'
ténta que cuando podia cercena iº a la magestad el bri lloque no es ta bien m engua r a
'
los ojos del publico, n i nunca
m as compla cida que cua ndo men os figura ba'de reyna . Se ,
dila taba su cora zon cuando e n su cám a ra se a liv iaba de lasin sign ia s de l a m agestad Hon ra ba á sus c riados, sen tia l a sm olestias q ue no podia excusa rles, reusaba de e llos todo servicio que pudiera hacerse por sí m isma , y los tr a taba sin e l '
cerem on ia l de et iqueta t an fam il ia r y am igab lem ent e, que s ila m age stad no estuviera pin tada en su sem blan te, ó la gran a .
deza n o in sp i ra ra m ayor respeto cuan do m as se a lla na, no
pud iera distingu irse la Reyna confundida en tre su servidum
b re , y laboreando com o en tre am iga s y compañera s. El espiritu de hum i ldad de que estaba poseída la ha cia ingen io sa
"
e n busca r a rtes y m an era s disim u ladas de acercarse m a s con laim ita cion a l div ino egemp la r . Indu stria fué d e su hum i ldad .
la que se h a divu lgado de ha ber dado de com er á doce pobresm ugeres , y servído les a la m esa po r s í m ism a con aga sajo
, tan
si n afectacion n i a rtificio, que se m an ifestaba bien e l e spír itttde que se ha l laba a n im a d a E s to e r a cumplir á la letra aquell a m áxim a que n os dejó nuestro Sa lva dor com o un a de la sfundam en ta les de nuestra re l igion el m ayor h ága se m enor,
y el que m a nd a tom e el luga r del que s ir ve .
España , vuelvo a exortar te á que ven eres la vi rtud ensa l
zada en e l tron o a que ha sido leva n tada M a ría Isabel por lama no de Dios , pa ra ofrecer en el la un espectácu lo de la perfeccion m a s cumplida, que la n a tura leza , la rel igion y lal ítica exigen de su sexo . Educa cion i lustrada y rel igiosa
, n i
ñez inocen te, juven tud irrep reen sib le , la a lteza decorada con
l a s v i rtudes cristia na s, l a pompa de la m agesta d templada con
l a hum i ldad , la pobreza de espíritu, la hon estidad y la m e .
de stia l ibera l idad y m agn ifi cencia s in profusion , sin super—sflu idad y em lujo, sociabilidad —
sin disipacion , ben eficen ciapúbl ica , la boriosida d dom éstica , v ida siempre útil , s in obrav a ldía , n i tiempo perdido. ¡Muger incompa rable, España fel iz, Rey dichoso !
Pa ra tí, amado Fernando, reservaba el Cielo esta esposapor con suelo de tus trabajos pa sado s, y colm o de la s m ercedescon que despues te ha fav0 1ecid0 . He aqu í la m uger san ta ypudorosa , que es sola el la el conjun to de toda s la s gracia s yben eficios . Esta es la m uger buen a y sen sa ta , delicia s de s u
m arido, que a la rga sus d ía s en tra nqu i l idad y r eposo, donsingu la r con que Dios ga la rdon—
a la s buen a s obra s de l quele tem e . En Ma ría Isabel
.b ri l lan tam bien la s —v i rtudes comynga les en el m i sm o grado que la s comunes y gen era les de
“
to
[ 23]dó el
“
sexo, _
es una esposa perfecta , es l'
egemp la r de casada s,II.
“ El espíritu de Dios se derram ó s in oposicion en el
a lm a de la Reyn a con todo el llen o de la gra cia con nubia l , para cumplir el grande y sublim e obgeto de la sociedad m a rid able . No se le aven tajó esposa a lguna en el hon ra r y am a rsi su c onsor te . Se en agenó de su volun tad sin reserva , n o qui
so s'
er m a s dueña de sí m ism a , n i ten er una a ccion l ibre, ya nudó tan apretadam en te el v ín cu lo conyuga l, que no fueron
ya dos'
en un a ca rne, sino se refundieron los cora zon es y q uereres de amb os en un cora zon y un querer solo, y ese fué e l
de * su esposo . .Estudia r la volun tad del Rey , …preven irla án tesde m an ifestárse la , egecuta r la a la m a s leve in s inuacion , cum
p lirla con pla cer, eso era la Reyn a . No dió a l Rey el m enord isgusto su deseo de no descon ten ta r le tocaba en el últim oápice de del icadeza : bastaba n ota r le el semblan te menos festivo p a ra con turba rse, se a congojaba ha sta sab er la pe sada mb re.
'
que le robaba la tranqu i l idad, y m ien tra s no se la ve ia º
r esti t'
uida no ca lm aba su inqu ietud. Habia sabido com bin a rt an to su volun tad con la d el Rey , que comun ica ba n en sus
sati sfacciones y pen a s, y , se afectaban de la s m ism a s i m p re sm
n es . Esta a rm on ía de vo lun tades sin disonancia n i desconcie r
to es bien desusada , n i es ra ro que a lguna desconfo rm idaddesacuerde ta l vez en tre sí a
__
los ca sados m a s san tos sin . desun ir
sus co razones . Abraham y Sa ra se am a ron siempre con el am ormas ún ico y en tero; m a s a que l Pa tria rca , m olestado de disturbios dom ésticos recibió duram en te el empeño que tom ó !
su esposa e n que extraña ra de ca sa a l hijo de su ém ula , n i
a caba ra con él que adopta ra providen cia ta n Violen ta pa ra un
padre , com o la de ha cer abandono de un hijo en la edad tiern a á la in clem en cia , s i no le — con sta ra n luego por revela cionl a s disposiciones divin as, que e nderezan a l cumplim ien to desu s a ltos fi nés la s pa sion es descam inada s de la s cria tura s.
(a ) No hubo am ores m a s con stan tes y probados que los de .l a
cob a Raquel , m as n o dejó esta esposa tan querida de da rlee nojo a lgun a vez con sus qu erella s impertinen tes por la fecund idad que solo estaba en m a nos de Dios con cederle . (b) L at risteza incon solable de An a . por su esteri lidad , y su sem bla n
t e siempre penado no dejaban gusto cum plido á su m a rido Rlcana que la am aba con extrem o. (c) Afortun adame n te la vo
(a) Ejice ancilla'
m haric et li l ium ejus Da ré accepít hoc Abraham pro fi l io suo . Gen . XXI.
(b ) Cera s us autem Rache l quod infecunda esset, invidit soror i snae , et art ma rito suo, da m i
-h i l iberos, a lioquin moriar .
Cui ira :us respond i t Jacob num pro Deo ego sum qui privavit te fructu ventris m i !Gen. XXX.
(c) 1. Reg.
24"
]untad de Ma ria Isabel n un
[ca ¿stuvo encontrada con la de
'
!
Fern ando, y esta conform idad ¡
era tan a gradable a Dios, com o
pa recia b ien a los hombres, segun a qu ella sen tencia del Ecles iástico tres cosa s apla cen á m i esp ír i tu, que son d e la ap ro
ba cion d e Dios y de los hom bres : la concord ia en tr e los her
m a n os ,-el a m or d e l os pa r ien tes , y e l m a r ido y la m uger
n un ca des a ven idos . (a )¡O esposa perfecta , dign a e res de que el Cielo bendiga e l
tálam o q ue adorn a s con flores de tan ta s v irtudes ! S e te con
=cederá la fecundidad , n o pa ra nuestro con suelo, s ino para ilus
t ra rte con n uevas v i rtudes y cre'
cer te en m éritos . Se m a lograré la Infan ta prim ogén ita ; pero v iv i rá a lgun t iempo pa ra quecria
'
ndo la a tu s pechos renueves en n uestros d ias las Vi rtudesm a terna les de las Berengue las .
…En su m uerte in tempestiva recib irá tu e sposo nueva s m uestra s de tu am or con la s e xpresion es m a s ingenu a s y cordia les de tu pena , por no a segu ra 'rleen la sucesion de su posterida d l a coron a d e e sta m on a rqu ía yla gloria de su fam i lia .
Cóm o podría n no 1n teresar p ren da s tan'
aprecia bles y'e
'
x=t ra ordi na r i a s , n i dej a r de ser am ada esposa ta n '
am a ble ! E l
prem io de la ca sada perfecta es el corazon de su m a rido : con
j íd it ea cor vir i sui . Ma ría Isabel a spi 'ró con todos sus con a tos á mere cer e l de Ferna ndo, y fué d ign a de poseerlo . Su
am or n o era d olo so com o el de la infiden te Dá li la , n i habiar ecela r de ella com o de la m uger de Putifa r, que en con a racon tra la inocen cia el corazon de q ue s e la hiciese deposi ta ria .
Sus ca ricia s no era n saga ces n i in teresada s como los a lhagos de
Jezabel, ha rto fata les á su m a rido Acab . Ma ría Isabel am aba áFerna ndo en verda d
,lo ven erab a s in l isonja , n i simu la cion,
pretendia su corazon con d es in teres y desprendim iento : la so
b era n ía no tuvo pa ra ella otro in cen tivo a lhagii eño que la fa
cu ltad de ha cer bien no la dom inó ot ra am bicion que la dedispen sa r gracia s,
'
esta fué su propen sion n a tu ra l, que habiaido en incremen to con su edad , con el egemplo y con la prác
=
t ica con stan te, lo que habia visto desde que abrió los ojos “á laluz
, en lo que habia sido criada , lo m ism o en que la am acst ra ron , y por el lo mereció una coron a , y fué dign a Reyna deEspaña .
III. Desde que Sube a l trono Se con sidera con stitu ida por laProv idencia para ser a l lado del Mona rca el sosten de la ju sticia , el escudo de la inocen cia , el ampa ro del desva lido , el a silo del m isera ble
,prom otora de la felicidad, rem ed iadora de
(a) E cel i . XXV.
26
dam ente, los fajaba con cu ririsida d , lo s estrechaba contra su
propio rostro,im prim ia en el de el los am orosam en te sus la
b ios, a rra sándose le los ojos de lágrim a s
,los a ca l laba en el llan
to con ca ricia s , y em ulaba toda la ternu ra de una m adre verdadera . ¡Qué herm osa a lm a ! 0 san ta v i rtud, con qué injust icia pre tenden des te rra r te de os pa la cios á los rú sticos a l
v e rgue s l Tú te defien de s gua recida del corazon de Ma ría Isab el . Allí h as ten ido an churosa m orada , que en san chó la ca
r idad a un a exten sion s in l ím i tes de luga res,de pe rson a s, m
d e objetos . En toda s partes se ha cía sen t i r su ca lor, sin que lad ista ncia debilita se la energía y eficacia de sus influjos. Declar ada protectora de l as herm ana s de la Ca ridad de la ca sa deExpósitos , envia . de en tre el la s qu ien es pa sen a Va lencia pa ra.e n ca rga rse de aquel la hospita l idad
,s in deja r por eso la obe
_
d iencia sus prelados, impetrando de la Si lla Rom an a la bula n ecesa ria pa ra a l lan a r todo obstáculo .
No llen aba la capa cidad de su corazon la infan cia abandon ada ten ia tam bien —
cabida m uy espaciosa*
toda … cla se'
indigen te . Se consideraba , y era verdaderam en te una m adre '
v de“
todos sus va sa llo s , y lo s mi raba como otros tan tos hijos el quie-4n es e ra d eudora de sus cu idados y de sus ben eficios . L a s renta s de su con signa cion eran un ca uda l com un con los pobresen que todos ten ía n su propiedad . L a l im osn a e ra una porcion de la legítim a m a tern a , que cada uno con de recho le reclam aba pa ra susten ta rse . Se imputa ria a si m ism a la disipac10 n del haber de sus h ijos en cua lqu i er ga sto perdido quehubiese hecho . Aprovechada y econ óm i ca -com o la m uger !
fue rte , e ra ta n a certada en dispen sa r la s ren ta s de su seña lam ien to, q ue reservándose lo ba stan te pa ra su decencia
'
e scaa'
s am en te m edida , no e ra costosa a l era rio , y le sobraba n grues a s sum a s que repartir en pen sion es y l im osna s . Tan l ibera le n da r , com o discreta en la distribucion , era n su s socorrosm a nera del rocío que va rem edian do la s tierra s Con solo el
r efrigerio conven ien te y Oportuno . No esperaba el ruego de ln ecesitado, n i con sen t ia que el pobre conocido arreba ta se lapa rte del que se obscu rece. Den tro del som brío y m ezquinodom ici lio donde el pobre hon rado y vergonzan te fa l lece en trel a ceria á fi los de su propio rubor
, a ll í m ism o le busca y l eha l la la ca ridad de esta m adre oficiosa y solicita . ¡0 m ano genéros a , de qué lágrim a s ta n agradecida s era s bañada cuandote besaba el pobre q ue redim ia s de la m uerte, 6 resca taba s dela deshon ra ! Era s bend i ta por los tesoros que derram aba s : en
público y en secreto, e n la s pla za s, en la s ca ll es y e n la s es
tancia s m a s apartadas de las ca sa s se recon taban tus l ibera li
[ 27 ]dades, y en donde qu iera , y por toda s person a s se
_
o ian tus
a labanza s . ¡O Reyna , verda deram en te digna de serlo ! En tu
pecho ha lla ron a cogida ben ign a el expósito y el huérfano y eldesampa rado y el m endigo y el ve rgonza n te y el anciano
y la viuda , todo pobre y todo m isera ble . Aclam e '
n ellos e n
horabuen a tu ben eficen cia ; m a s n o sea n solos su s labios losórga nos de tus elogios; acuerden su v oz con la s de todos losagra ciado
's por tus mercedes, y“
Confedérese el reyno en teropa ra con sag ra rte en tre el coro de la s reyna s que han e scla re
cido el trono de la s España s la m emoria debida a tus v irtud es singula res. Concurra n la s letra s y la s a rte s orla r con
sus ingen ios e l nom bre de su tute la r, tributen la s ciencia s e ljusto reconocim iento a los a u spicios que les con cediste desde
que v is ita ste la rea l Imprenta , la Bib lioteca y lo s e stablecím ien tos l itera rios, y la s a rtes rindan este hom enage su p ro
l ectora in sign e y decidida que la s an im aba despertando el gen io , propagando el gusto , fa cil ita ndo la en seña nza , fom enta ndo la s escuela s . Se a el lem a exp resivo d e tu ca rácter el m isino que descifró l a gloria pecu lia r de Débora entre los gobernadore s y jueces del pu eblo de D ios . Á gue l l a fuép a r a I sr a elun a m a dre: escríba se en el busto de Ma ría Isabel : e s ta fué lam a dre d e los E sp a ñoles . (a)
Oh plegue a l Cielo prolongar tu v ida “pa ra que se fige enella la épo t:a de nu est ra ven tu ra . No fa l ten de en tre nosotrosen la rgos dia s tus cla ros egemplos , pa ra que sea s el decha dode tu sexo, afren te s con tu porte la d iso lucion ,
se a ve rguence
la inm odestia , se confunda la va n idad , ahuyen tes el ocio, restaures la piedad , a vives la rel igion , en señes la honestidad
,el
reca to y la decencia , in spi re s la hum ildad y el desprecio de lm undo, a l ien tes a l am or sin cero y efectivo del prógim o , fer
m entes la aplicacion y laboriosidad , extirpes los v icios y plantes la s v i rtudes . V iva s en un ion de tu esposo cua l fiel y am a
b le compañera con quien repa rta su cora zon y á quien re
ga les con tu am or, esfuerces con tus con suelos, a l ivies con tu
prudencia el peso de la coron a tus ora cion es y tus v irtudesa tra igan sobre su person a , sobre tu tálam o , sobre el gob ierno y sobre tus estados la s b endiciones del Cielo y de lati erra . Estés siempre a l lado del Mona rca como pa cífica m e
dianera , componedora oficiosa , reyna ben éfica , m adre tiern ay am an te , pa ra que siempre tercies en gracia de tu s va sa llos.Sea s en el trono com o aquella lum bre ra que tem pla en el Cielola luz a rdien te del prim er a stro . Que posea s la s gra cia s de
(a) Donec surgeret Debbora , surgere t mater in Isra e l . Judi e . V.
28
Est er, la destreza de Abiga i l , la jbersua sw a dela de Th ecua , yafiance Dios el la zo que abra za en agrada ble concordia tu vo
lun tad con la de tu esposo . Que in clin es b landam en te hácian osotros el cet ro que rigen en la zada s vuestra s m anos sober an a s , y hag a s que reyn e la clem en cia bajo el sol io de la justicia . Dígnese Dios recibir nuestros votos, y reun ida la Españae n u na sola fam i l ia bajo la tutela m a tern a l de esta Reyn a concil iadora , provida y generosa prospere sosegada y tra nqu i lah a sta cobra rse de su langu idez
,pa ra env idia y terror de la s
n acion es que la ins ulta ron .
¡Dios San to ! otra e ra la suerte qu e n os ten i a s decretada .
No m erecia Espa n a ta l Reyn a . ¡ In sen sa to de m i l por quéhe deja do a la im agina cion fan ta sea r l ibrem en te u n a fel icid adq ue apen a s v imo s en perspecti va ! ¡Ah ! ¡e sa Reyn a de b end icion ya n o v iv e l. . ¡Mu erte in exora ble , ¡qu e n o hayan deba sta r v íctim a s a tu voracida d l… que siem pre baya s de cc
b a rte en lo m a s No bla son es de tu v ictor ia n i delos estrago s de tu gu adañ a , porque de un corte deshiciera s eln udo de dos cora zon es q ue o tra fuerza n o solta ra
,y derriba
se s de un golpe la s esperan za s de esta n a cion . Tú n o ha s ven
cido a la Reyn a . Se embo ta ron tus arm a s en ese cuerpo, ún ico despojo de tu t riunfo, y no a lcan za r 'on a ofender a l a lm a;
v iva e stá en el seno de Dio s : desde a ll í la env ia rá, l legado quesea un dia , a recobra r m ejorada s esa s cen iza s qu e u la n a cu stodia s en el sepulcro , pa ra res tituírse la s ti tu pesa r a l t iem poapla zado . ¡0 Rel igion , con soladora ún i ca del cristia no afl i
g ido l L a Reyn aÓ
v i ve l… y_
goza … . y en u n pa i s de delicia s'y p la ce1e s qu e son in e lables l… y n o h a perdido de corona
, n i
d e reyno , ha ga n ado sí con ven taja s Esposo a ugusto de Ma ría i sabel , cesa ya en tu l la n to . Llore Pl1a ltie l lasepa racion de su am ada Michol ; a l fm a unque Rey , es otrohom bre qu ien se la a rranca de los brazos; pero e s Dios e l
que te quita pa ra sí a Ma ría Isabel . No te deja ella po r desam or ha sta en los desm ayos de la m u erte, escurecidos ya sus
ojos, te m i raba y tendía hacia t i su s bra zos débiles y trému
lo s , y te estrechaba consigo , y dejó sobre tu pecho el postrera lien to esa que no quiso un a respira cion sin o pa ra t i . Con
suéla te , que si la m uerte pudo desa ta r '
e l v íncu lo conyuga l,n o el de la ca r idad con que te con serva uni do in sepa rablem en te con sigo .
Pobres desolados por la fa l ta de bienhechora tan compasiva y libera l , n o os lam en te i s de que sea s in rem ed io vue s
t ro de sva lim íen to . De sde esa region a donde . . se h a tra spue s=
to oye vuestros clam ores . y los a t iende . Osten tad vosotros
a
agradecidos en derredor del cadáver de esa Tabitha de nuestros dia s la s obra s de su ben efi cencia , y la hon ra re
'i s con pom
pa cristia n a n o a dul terada .
España dolorida , no te llam es tan m a lhadada , respira en
la pe na de tu s pérd ida s . Ahora va le m a s t u Reyn a pa ra cum
p lir te de bienes .
Dios fie l y veraz , con esta confia n za habla tu m in ist ro por el de sem peño de tu pa labra . Ha s prom etido se r la r
go en perdo nes y prem ios con el h om bre d e m iserico rdi a ,v irtud que am a s sobre el sacrificio . Y esto dice bien con tus
en traña s ¿ por qué, pues , esta jóven que en pocos an os v ivióm uchos de
¿vi rtudes con sagrados con prefe ren cia a la m i se r i
cordia, que era su pred ilecta , no te ob liga ra por la q ue ofre
ciste a los m i sericordiosos ! ¿ Por qué no h a s de prem ia rla conheredam ien to igua lm en te rico en tu reyno . Pad re de la s m ise rico rdia s, y Dios de todo n uestro con su elo , yo tengo pa ram í q ue la ha s perdon a do; pero eres la sa n t idad m i sm a
, y n o
sufres cerca de tí la m enor im pur idad . Tú exam in a s la s v ir
t udes, y no ha lla s u n a s in a lgu n á tom o qu e ofusque su l im
pi eza . Aca so n uestra v irtuosa Reyn a a un n o puede pa receren tre los e spíritus gloriosos de tu corte, pero la sangre preciosís im a de tu Hijo, q ue a caba de derram a rse sobre ese a 1a , t iene sobrada efica cia pa ra la va rla de m a n cha s . He rm osea la
,Se
ñor , con este baño, y apaga ya la s l lam a s qu e pur ifiquen e sa
a lm a bendita , que a rde en deseos de go za rte . No le reta rde sm a s su biena ven tura nza . Descan se en paz.