Índice
Resumen Ejecutivo
Introducción
CAPITULO 1: Aspectos Metodológicos
CAPITULO 2: Panorama General
del Uso de Drogas en El Perú
CAPITULO 3: Alcohol
CAPITULO 4: Tabaco
CAPITULO 5: Marihuana
CAPITULO 6: Drogas Cocaínicas
CAPITULO 7: Éxtasis, Opio Y Heroína
Bibliografía
17
23
39
47
55
63
77
87
Autores:
13
09
Presentación
El año 1987 el Centro de Información y Educación para la Prevención del
Abuso de Drogas (CEDRO) asumió la responsabilidad de realizar la
primera investigación con cobertura nacional acerca de la magnitud del
consumo de drogas en población general. Fue un trabajo pionero que
permitió conocer la medida en que los peruanos estábamos
involucrándonos en el uso de drogas en un contexto donde el boom del
cultivo de coca y el narcotráfico estaban entrando en una etapa de
apogeo.
Nuestra institución ha continuado produciendo este tipo de estudios
con el fin de establecer tendencias en el consumo y caracterizar a los
peruanos que lamentablemente siguen insertándose en él, permitiendo
contar con información que facilite el desarrollo de políticas sociales y
educativas en el ámbito preventivo, de tratamiento y reinserción social.
En esta ocasión presentamos los resultados obtenidos en el estudio
“Epidemiología de Drogas en la Población Urbana Peruana 2013:
Encuesta de Hogares”, donde se entrevistó a hombres y mujeres entre los
12 y 64 años en Lima Metropolitana y 12 ciudades (Piura, Trujillo, Ica y
Tacna en la costa; Huancayo, Arequipa, Ayacucho y Cusco en la sierra; y
Pucallpa, Iquitos, Tarapoto y Tingo María en la selva).
El documento presenta los resultados en forma de tablas y gráficos que
establecen diferencias según variables tales como sexo, edad, nivel de
instrucción y lugar de residencia; recogiéndose información sobre
variables epidemiológicas del consumo (prevalencia e incidencia por
ejemplo) pero también edades de inicio, oportunidades de consumo y
otras variables que aluden a factores de riesgo y protección.
Esperamos que la información aquí presentada sea útil para los ámbitos
educativos, sociales, políticos y científicos; que logren establecer
estrategias que impidan que las drogas continúen adentrándose en
nuestra sociedad dañando a nuestros jóvenes y afectando sus
posibilidades de futuro mejor.
El compromiso de CEDRO es continuar sensibilizando a la población
peruana, alentando el reconocimiento de sus valores personales,
familiares y comunales para potenciarlos y así generar salud y desarrollo.
Contamos con el apoyo de todos para esta tarea.
Alejandro Vassilaqui
Director Ejecutivo
CEDRO
Resumen Ejecutivo
A nivel mundial, las evaluaciones respecto al consumo de drogas en la
población general se hacen evaluando indicadores epidemiológicos
selectos, incluyendo los de prevalencia (de vida, último año, último mes),
incidencia, edad de inicio y otros. El presente estudio, denominado
«Epidemiología de Drogas en Población Urbana Peruana 2013» realizado
por CEDRO, se ha ceñido a los estándares internacionales sobre la
materia y busca ser comparable con los estudios realizados en años
previos.
El trabajo de campo supuso la aplicación de encuestas en hogares de
Lima Metropolitana, Callao y otras 12 ciudades del resto de costa, sierra y
selva del país. En cada vivienda seleccionada se entrevistó a una persona
«residente habitual» entre los 12 y 65 años de edad, escogida mediante
procedimientos aleatorios. La aplicación de encuestas estuvo a cargo de
personal profesional especialmente capacitado.
La prevalencia de vida (uso alguna vez en la vida) de drogas legales fue
82.1% en el caso de bebidas alcohólicas y 54.8% en el caso del tabaco. En
lo relativo a las drogas ilegales, la sustancia con mayor prevalencia de
vida fue la marihuana (7.5%), seguida por la pasta básica de cocaína
(2.9%) y el clorhidrato de cocaína (2.4%) en tercer lugar. El 4.1% de
encuestados informó haber recibido al menos un ofrecimiento para
consumir éxtasis; 1.0% recibió ofrecimiento para usar heroína y 0.3% para
consumir opio.
09
Se evidenció diferencias según sexo en cuanto al haber probado
psicoactivos. En general, la prevalencia de vida de drogas legales e
ilegales fue mayor en hombres que en mujeres, aunque con mayores
diferencias en el caso del alcohol que en el caso del tabaco. La
prevalencia de vida de drogas ilegales fue también mayor en los varones,
pero en este caso, los porcentajes fueron cuatro y hasta cinco veces más
altos en hombres que en mujeres.
Respecto a la región de residencia, para el caso de todas las drogas, el
estudio mostró una mayor prevalencia de vida en Lima Metropolitana en
comparación con provincias. En todas las regiones la droga ilegal con
mayor prevalencia de vida fue la marihuana, seguido por la pasta básica y
el clorhidrato de cocaína; indicando una tendencia de nivel nacional.
Se observó que las edades promedio de primer empleo de drogas
legales fueron menores que las reportadas para las drogas ilegales. El
inicio en el empleo del tabaco y alcohol estuvo alrededor de los 18 años
mientras que en el caso de la marihuana se identificó en los 18.8 años;
20.1 años para la pasta básica y 21.9 años para el clorhidrato de cocaína.
Las edades de primer consumo fueron mayores en las mujeres que en los
hombres para el caso de las drogas legales y la marihuana; mientras en el
caso de las drogas cocaínicas, las edades promedio de primer consumo
fueron mayores en los varones.
Los resultados muestran que más de 10 millones de peruanos en los
rangos de edad y regiones donde se desarrolló la encuesta han probado
bebidas alcohólicas al menos una vez en la vida y que son casi 7 millones
los que han utilizado cigarrillos de tabaco. Estas cifras no pueden ser
sumadas entre sí pues el empleo de cada sustancia se ha evaluado de
manera independiente y que existen personas que consumen más de
una droga al mismo tiempo, ingresando en la categoría de
«policonsumidores».
En cuanto a las drogas ilegales, las estimaciones poblacionales han
mostrado que cerca de 1 millón de peruanos ha empleado marihuana
por lo menos una vez en la vida; poco más de 350 mil han probado pasta
básica y poco menos de 300 mil han utilizado clorhidrato de cocaína.
Nuevamente debe informarse que tales cifras no pueden sumarse pues
existen casos de consumo simultáneo. En realidad, se ha encontrado que
poco más de 510 mil personas han utilizado drogas cocaínicas por lo
menos una vez en la vida.
Cabe recordar que en muchos casos podría tratarse de un único uso
experimental de drogas ilegales, que no necesariamente se convirtió en
adicción. No todas las personas que han probado drogas alguna vez en la
vida han entrado en patrones de consumo abusivo o han desarrollado
dependencia. Muchos de ellos -la mayoría tal vez- no pasan del consumo
experimental o situacional y son menos quienes ingresan en la adicción.
Entre el estudio del año 2010 y el actual, la prevalencia de vida de drogas
legales ha presentado ligeras reducciones: a) de 87.8% en el 2010 hasta
82.1% en el 2013 en el caso del alcohol; y b) de 56.7% en el 2010 hasta
54.8% en el 2013 para los cigarrillos de tabaco. Se aprecia el fenómeno
inverso en el caso de las drogas ilegales, con ligeros aumentos en los tres
casos: a) de 5.6% en el 2010 a 7.5% en el 2013 en el caso de la marihuana;
b) de 2.1% en el 2010 hasta 2.9% en el 2013 para la pasta básica; y c) de
1.5% en el 2010 hasta 2.4% en el 2013 para la cocaína.
Investigaciones como la desarrollada consiguen brindar aproximaciones
a la cantidad de personas que han usado drogas en el país pero no
pueden informar sobre el número de adictos. Para considerar a una
persona como farmacodependiente, es necesario realizar una evaluación
en la cual el profesional de la salud verifique que la persona cumple una
serie de criterios científicamente establecidos. Esto no es posible realizar
en los estudios epidemiológicos de cobertura nacional.
Finalmente, debe señalarse que los estudios epidemiológicos como el
aquí presentado muestran resultados que pueden ser distintos según el
momento en que se recogió la información, las variaciones naturales en
los indicadores demográficos, las coberturas muestrales y las
metodologías empleadas. Se espera que la información aquí presentada
sea útil para todas las personas interesadas y contribuya a orientar las
acciones de prevención y remediación en todo el país.
10 11
Introducción
De acuerdo a los resultados del más reciente estudio de opinión sobre
drogas realizado por CEDRO el año 2013; el 42.0% de la población
urbana peruana considera que el problema de las drogas es el tercero en
importancia para el país, apareciendo solo después de los aspectos
referidos a seguridad ciudadana (73.7%) y solamente un punto
porcentual por debajo de la pobreza (43.0%).
Esto indica que la población nacional identifica las graves consecuencias
asociadas a la cadena de las drogas; que como es sabido, se inserta de
manera compleja en los procesos económicos, sociales y políticos del
país; con impactos significativos a nivel de seguridad ciudadana,
pobreza, ecología y otros problemas también mencionados por los
encuestados.
Al ser consultados, el 92.5% de peruanos indicó su rechazo a la
legalización de las drogas y un cercano 91.6% señaló que el narcotráfico
es un problema grave para el país, mostrando una posición clara de
rechazo respecto a las drogas, enfrentándose a personas que promueven
el libre consumo y quienes se benefician económicamente a través de las
perversas acciones del narcotráfico.
13
El presente estudio epidemiológico sobre el consumo de drogas en
población urbana peruana busca mostrar el contexto en el que se apoyan
las percepciones poblacionales, evidenciando la magnitud del empleo
de drogas a nivel nacional y estableciendo patrones de consumo según
variables sociodemográficas; de tal manera que sea posible caracterizar a
los grupos en riesgo a ser enfocados en las acciones de prevención,
tratamiento y reincorporación al medio social.
A nivel metodológico el estudio cumple con estándares
internacionalmente aceptados, con un tamaño muestral adecuado a las
necesidades presentes, un instrumento validado en estudios previos y un
diseño de recolección de información que asegura la validez y
confiabilidad de los hallazgos.
Es importante señalar que a nivel metodológico el presente estudio es
comparable con las 10 investigaciones epidemiológicas previas,
realizadas por CEDRO desde el año 1986; aportando a la identificación de
los patrones nacionales de consumo, que como es sabido, cambian en
función de las coyunturas sociales, económicas y políticas.
La información aquí incluida busca ser útil para todos los interesados;
incluyendo hacedores de políticas, líderes de opinión o profesionales de
las ciencias humanas y sociales; para los educadores y alumnos, padres
de familia y en general para cualquier persona que tenga un interés en
alguno de los eslabones de la cadena de las drogas en el Perú.
Muchas personas han brindado su mejor esfuerzo para que este estudio
se haga realidad. A los supervisores y encuestadores el mayor de los
agradecimientos, igual que a las personas que amablemente abrieron
sus puertas y brindaron información; que ha sido tratada con el mayor
respeto y la confidencialidad necesarias.
Finalmente, CEDRO reitera su compromiso por continuar sensibilizando
a la población peruana, generando conciencia respecto al problema de
las drogas, alentando la salud física y mental así como el desarrollo
comunitario, esperando el compromiso de todos los involucrados en
esta tarea de aportar para el progreso del país. Todo momento es el
mejor momento.
14
Aspectos
metodológicos
Población y ciudades investigadas
La población bajo estudio corresponde a residentes habituales entre 12 y 65 años
de edad, ubicadas en zonas urbanas de 13 ciudades del Perú: Lima capital; Piura,
Trujillo, Ica y Tacna en la costa; Arequipa, Huancayo, Ayacucho y Cusco en la sierra;
y Tarapoto, Tingo María, Iquitos y Pucallpa en la selva. Se seleccionó y visitó 9,452
viviendas a nivel nacional.
De manera más específica, Lima Metropolitana está definida por los distritos que
conforman la Provincia de Lima y la Provincia Constitucional del Callao,
excluyéndose los balnearios y zonas periféricas, que constituyen alrededor del
5% del total de la población de estas regiones.
El marco muestral empleado fue elaborado en base a información proporcionada
por el Instituto Nacional de Estadística e Informática (INEI), referida al último
censo nacional de población y vivienda realizado el 2007. La información
empleada permite hacer inferencias únicamente a nivel del área metropolitana
de cada una de las ciudades participantes en el estudio.
1
17
Diseño de la muestra
.La muestra fue probabilística, trietápica y de
estratificación implícita previa. Cada ciudad
considerada en el estudio conforma un marco
muestral aislado, por tanto las selecciones son
independientes en cada ciudad, según se describe
a continuación:
Probabilística
La muestra es probabilística, pues las unidades de
selección dentro del marco muestral se
seleccionaron empleando procedimientos
aleatorios. Por tanto, cada unidad del marco
muestral tuvo una probabilidad de selección
conocida y diferente de cero.
Trietápica
La selección de la muestra se realizó en tres etapas:
1. Se seleccionó Unidades Primarias de
Muestreo (UPM), que son conglomerados
formados por una, o la unión de dos o más
manzanas, o partición de manzanas de gran
magnitud de viviendas. En promedio, cada
UPM incluyó alrededor de 120 viviendas
particulares.
población nacional. En las ciudades del interior del
países seleccionó entre 40 y 60 UPM. En la tabla 1.1
se muestra la distribución de las unidades
seleccionadas.
Rendimiento muestral
El tamaño de muestra establecida en el diseño
generalmente está sujeto a variaciones al realizarse
el trabajo de campo; principalmente en lo referido al
número de personas encuestadas, que a su vez está
determinado por el procedimiento aleatorio de
selección empleado en el estudio.
Por ejemplo, existen hogares y viviendas
suplementarias, no discriminadas al momento de
asignar la muestra de viviendas a visitar. Al ser
identificadas, el número de tales viviendas se suma
a la muestra estudiada. De igual manera, algunas
v iv iendas no son encuestadas debido a
inconsistencias en los listados y referencias,
pasando a ser consideradas pérdidas muestrales.
LIMA
RESTO COSTA
TRUJILLO
ICA
TACNA
PIURA
SIERRA
AREQUIPA
AYACUCHO
CUSCO
HUANCAYO
SELVA
PUCALLPA
TARAPOTO
TINGO MARÍA
IQUITOS
TOTAL
150
50
60
50
50
50
60
50
50
746
46
50
40
40
210
210
176
1,667
432
897
433
400
428
589
998
401
9,452
434
902
955
916
2,162
2,416
3,207
2. Se seleccionó Unidades Secundarias de
Muestreo (USM), conformadas por
viviendas contiguas dentro de las UPM
seleccionadas. En cada USM se seleccionó
una vivienda y las viviendas contiguas a
esta, obteniéndose el listado de viviendas
que constituyó la muestra del estudio.
3. Se seleccionó Unidades Terciarias de
Muestreo (UTM), conformadas por los
habitantes de las viviendas dentro de las
viviendas dentro de las USM seleccionadas.
En cada UTM se seleccionó a una persona
entre 12 y 65 años de edad, bajo la
condición de ser residentes habituales en el
hogar.
Estratificada
Se utilizó la técnica de estratificación implícita
previa, lo significa que antes de iniciar el proceso
de selección, las UPM fueron agrupadas con un
orden preestablecido, comenzando con los
distritos de mayor población hasta los menos
poblados, desde las áreas céntricas hacia las más
alejadas. A través de dicho procedimiento se
optimizó la eficiencia de la selección.
Tamaño de la muestra
Se seleccionó 150 UPM en Lima Metropolitana
debido a la variabilidad de las características de su
población por ser la capital de la república, así
como por albergar a la tercera parte de la
Cada ciudad considerada en el estudio conforma
un marco muestral aislado, por tanto las
selecciones son independientes en cada ciudad,
según se describe a continuación:
En cada una de las viviendas seleccionadas se
efectuó el registro de todos los residentes
Selección de las personas a entrevistar
habituales (que habitaron en la vivienda por lo
menos 15 días previos a la visita del encuestador).
Inmediatamente se identificó a los elegibles,
definidos como aquellas personas entre 12 y 65
años de edad, entrevistándose a la última persona
que había cumplido años.
El rendimiento muestral permite evaluar el
comportamiento de la muestra de viviendas
(ocupadas y desocupadas ) , as í como e l
comportamiento de las personas que las ocupan
(rechazos, ausencias, etc.) La tabla 1.2 presenta el
rendimiento muestral del estudio, donde se
observa que los resultados estuvieron dentro del
margen de lo esperado, con una tasa de respuesta
de vivienda superior al 90% y una tasa de no
respuesta de personas de 7.9%; siendo la tasa de
respuesta total, incluyendo las viviendas y personas
del 89.3%.
Tabla 1.1: Distribución de unidades primarias de muestreo (UPM)
CONGLOMERADOS N° VIVIENDASN° CONGLOMERADOS
18 19
Instrumento
Se empleó un formulario específicamente
desarrollado, el cual consta de una hoja muestral
que contiene información de identificación de la
vivienda, un registro de miembros del hogar que
incluye datos sobre los residentes habituales de la
vivienda y el cuestionario individual que contiene
tres secciones.Las preguntas fueron elaboradas
sobre la base estudios previos, los cuales
requirieren de un seguimiento con miras a evaluar
cambios en las tendencias del uso de drogas. La
estructura de la encuesta se describe a
continuación:
Hoja muestral
Incluye información para identificar la vivienda
donde se aplicó la encuesta. Es un registro que
permite llevar un control exhaustivo de la
ubicación de la vivienda, número de visitas
realizadas por el encuestador, identidad del
personal involucrado en las distintas fases del
proceso y comentarios del encuestador y el
supervisor de campo.
Registro de miembros del hogar
El registro de los miembros del hogar permite
recabar información demográfica relevante con el
fin de caracterizar la población de la que ha sido
extraída la muestra; de esta manera se cumple el
objet ivo de ver i f icar la adecuación del
procedimiento de muestreo y se obtiene una
descripción detallada de las familias participantes
en el estudio.
Encuesta Individual
Incorpora preguntas sobre aspectos generales de
la población y el problema de las drogas, con
énfasis en su consumo.
Lim
a
Res
to C
osta
Truj
illo
Ica
Tacn
a
Piu
ra
Sie
rra
Are
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a
Aya
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1,66
7
432
897
433
400
428
589
998
401
9,45
2
434
902
955
916
0200 00 00 00 04 00 55 121
13 01 01 00 00 0002 00 00 00 00 13 06 36
1,73
3
435
903
433
400
403
430
589
998
434
906
968
977
9,60
9
1,48
2
398
880
372
383
381
390
304
998
398
862
913
906
8,66
7
15 01 13 19 14 1117 15 00 20 40 11 18 194
119
22 08 15 00 0805 168
00 06 04 20 11 386
10 01 00 04 00 0103 38 00 03 00 03 12 75
08 08 02 07 00 0001 29 00 01 00 21 22 99
22 00 00 05 00 0104 17 00 04 00 00 08 61
59 05 00 09 00 0007 17 00 01 00 00 00 98
18 00 00 02 03 0103 01 00 01 00 00 00 29
5,12
0
1,51
5
2,83
5
1,10
1
1,19
3
27,6
77
1,19
1
1,03
1
3,06
6
1,21
9
1,38
3
2,87
0
2,56
6
2,58
7
1,48
2
398
880
372
383
381
390
304
998
398
862
913
906
8,66
7
1,47
8
391
772
351
380
360
389
227
998
380
838
879
883
8,32
6
04 00 82 11 00 0601 26 00 08 10 09 13 170
00 00 03 00 00 0000 19 00 02 02 02 04 32
00 03 15 08 00 0400 28 00 06 05 17 06 92
00 04 08 02 03 1100 04 00 02 07 06 00 47
Tab
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dim
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20 21
Panorama generaldel uso de drogasen el Perú
Indicadores generales
El estudio epidemiológico realizado por CEDRO recogió información sobre
diversos indicadores que reflejan la magnitud del consumo de drogas legales e
ilegales a nivel nacional en población urbana entre los 12 y los 65 años. Cabe
indicar que los estudios de esta naturaleza incorporan a población general; esto
es, personas identificadas en sus hogares, seleccionadas a través de
procedimientos aleatorios; sin incluir a grupos cautivos en hospitales, prisiones,
cuarteles u hoteles.
Cabe señalar que las personas encuestadas no han sido seleccionadas bajo la
presunción de que están involucradas con el consumo de drogas, por lo que se
asume que los resultados reflejan las tasas de empleo de sustancias en la
población común. Debe considerarse que las personas insertas ya en el consumo
de drogas, en muchos casos ya no están en sus hogares; por lo que pueden no
haber formado parte del marco muestral del presente estudio.
2
23
Los indicadores de prevalencia de vida reflejan el
nivel de cercanía temporal con cada sustancia,
distinguiendo entre quienes han tenido alguna
experiencia de consumo de aquellos que se han
mantenido lejos de éste. La prevalencia de vida es
tal vez el indicador más general y muestra la tasa de
personas que han usado una droga al menos una
vez en la vida.
Es necesario señalar, sin embargo, que una persona
que ha consumido una sustancia y forma parte del
grupo con prevalencia de vida no necesariamente
ingresará en niveles de adicción. En realidad, son
muchos los factores que además de una primera
experiencia de consumo pueden llevar a alguien a
desarrollar una drogodependencia.
Por otro lado, debe considerarse que, el
instrumento empleado en este estudio no tiene la
sensibilidad suficiente para identificar casos de
adicción. En realidad el diagnóstico de adicción
debe ser hecho por un profesional calificado,
trabajando en un ambiente clínico apropiado,
empleando pruebas y métodos sofisticados que
establezcan con claridad la condición de cada
paciente.
El estudio mostró que las drogas más consumidas
en el Perú son las legales. En efecto, la prevalencia
de vida (uso alguna vez en la vida) de alcohol fue de
82.1%, quedando en segundo lugar el tabaco con
54.8%; siendo en ambos casos la prevalencia de
vida mayor en hombres que en mujeres,
observándose además que el grupo entre 30 y 39
años es el grupo con mayores valores en este
indicador.
Según nivel educativo, la prevalencia de vida de
drogas sociales es mayor en los encuestados con
instrucción superior; quedando en segundo lugar
los que cuentan con educación inicial/primaria y en
tercer lugar los que tienen estudios secundarios. En
función a la región de residencia, en ambos casos,
la prevalencia de vida es mayor en Lima
M e t ro p o l i t a n a q u e e n o t r a s c i u d a d e s ,
especialmente en la sierra; y es muy similar en los
niveles socioeconómicos medio y alto, mayores
que en nivel bajo.
En lo relativo a las drogas ilegales, la sustancia con
mayor prevalencia de vida es la marihuana (7.5%),
seguida por la pasta básica de cocaína (2.9%) y el
clorhidrato de cocaína (2.4%) en tercer lugar. Igual
que en el caso de las drogas legales, la prevalencia
de vida de drogas ilegales es mucho mayor en los
varones en comparación con las mujeres; pero sin
un patrón claramente definido en el caso de la
variable edad.
En el caso de la marihuana y el clorhidrato de
cocaína la prevalencia de vida es mayor en el grupo
con mayor nivel educativo, mientras que en el caso
de la pasta básica de cocaína la prevalencia de vida
es mayor en los encuestados con instrucción
secundaria. Según región, la prevalencia de vida de
las 3 sustancias fue mayor en Lima Metropolitana
que en otras ciudades. La mayor prevalencia de
vida de marihuana se observó en la sierra (5.4%),
mientras que la de pasta básica de cocaína y
clorhidrato de cocaína fue mayor en la selva (2.5% y
1.5% respectivamente).
CARACTERÍSTICAS
Sexo
Mujer
Edad
12 a 18 años
Hombre
19 a 24 años
30 a 39 años
40 a 49 años
50 a más
25 a 29 años
Nivel Educativo
Secundaria
Superior
Región
Inicial, primaria
ALCOHOL[ % ]
85.4
79.2
56.0
86.2
86.6
90.3
83.5
77.7
75.7
87.9
67.1
44.3
32.8
61.5
57.5
61.9
57.4
51.0
46.6
61.0
13.8
2.2
4.0
7.3
9.4
8.2
5.9
2.7
6.5
9.1
Provincias
Resto costa
Lima Metropolitana 8.984.5
76.8
70.2
58.4
47.0
37.5
4.7
4.0
Selva
Estrato socioeconómico
Sierra 5.481.7
79.2
57.1
44.8 4.4
Bajo
Medio
78.7
83.0
51.3
56.1
5.1
8.6
Total
Alto 7.983.7
82.1
55.6
54.8 7.5
85.5 53.5 10.5
TABACO[ % ]
MARIHUANA[ % ]
5.3
0.8
1.8
3.5
3.1
3.3
3.4
2.4
3.6
2.5
3.5
1.6
1.2
1.6
2.5
2.3
2.9
3.4
2.9
1.9
PASTA BÁSICADE COCAÍNA
[ % ]
CLORHIDRATODE COCAÍNA
[ % ]
4.1
0.9
0.6
2.3
2.0
3.6
2.4
2.2
2.0
2.8
3.1
0.8
0.6
0.7
1.5
1.6
2.7
2.6
2.4
2.8
Tabla 2.1: Prevalencia de vida de drogas legales e ilegales
24 25
Gráfico 2.3: Perú 2013: Prevalencia de vida de drogas legales según región
Gráfico 2.2: Prevalencia de vida de drogas ilegales según edad
SUSTANCIA
Marihuana
PBC
Éxtasis
Heroína
Opio
Cocaína
LIMAMETROPOLITANA
31.5
0.4
11.4
5.3
1.3
14.9
0.3
3.8
2.1
0.5
25.6
0.3
8.7
4.1
1.0
19.9 7.2 15.3
PROVINCIAS TOTAL RELACIÓN LIMA/PROVINCIAS
2.1
0.3
3.0
2.6
1.0
2.8
El estudio también valoró la oportunidad de
ofrecimiento de drogas i legales, que es
considerado un importante factor de riesgo para el
inicio en el consumo, y eventualmente, para la
adicción. Se apreció que el 25.6% de encuestados
reportó haber recibido al menos un ofrecimiento
para consumir marihuana; seguidos por el 15.3% a
los que se les ofreció pasta básica y el 8.7% a
quienes se les ofreció clorhidrato de cocaína. En
todos los casos, los reportes de ofrecimiento
fueron mayores en Lima Metropolitana que en
otras ciudades, siendo el doble en el caso de la
marihuana y el triple en el caso de la pasta básica y
el clorhidrato de cocaína.
Se valoró también drogas ilegales de menor
presencia en el contexto peruano; observándose
que el 4.1% de encuestados informó haber
recibido al menos un ofrecimiento para consumir
éxtasis; 1.0% recibió un ofrecimiento para usar
heroína y un más reducido 0.3% tuvo ocasión para
decidir si usar opio.
Como se señaló previamente, la prevalencia de vida de drogas legales e ilegales es mayor en hombres que en
mujeres, aunque con diferencias de cerca de 13 puntos porcentuales en el caso del alcohol pero solo de seis
puntos en el caso del tabaco; indicando que ambos sexos en realidad no difieren mucho en cuanto a la
exposición a los cigarrillos. La prevalencia de vida de drogas ilegales es también mayor en los varones, pero en
este caso, los porcentajes son cuatro y hasta cinco veces más altos en hombres que en mujeres, evidenciando aún
importantes diferencias entre ambos sexos en cuanto a haber al menos probado tales sustancias.
Se aprecia que en todos los grupos de edad la marihuana es la sustancia con mayor prevalencia de vida.El grupo
de 12 a 18 años, el de menor edad en el presente estudio, presentó prevalencias de vida que van desde 0.4% para
el caso del éxtasis hasta 4.0% para la marihuana. En el extremo opuesto, en el grupo de 40 a 49 años se observó
prevalencias de vida en el orden del 0.05% para el éxtasis y 5.9% para la marihuana.
100.0
80.0
60.0
40.0
20.0
0.0
PO
RC
EN
TAJE
LimaMetropolitana
Provincias RestoCosta
Sierra Selva Total
58.4
84.5
47.0
76.8
37.5
70.257.1
81.7
44.8
79.2
54.8
82.1
Tabaco Alcohol
0.00
2.00
4.00
6.00
8.00
10.00
12.00
PO
RC
EN
TA
JE
0.560.40
1.751.80
3.98
1.41
1.91
2.83
4.19
10.50
0.34
2.03
3.12
4.81
9.358.22
4.50
3.58
3.29
0.23
5.92
4.38
3.43
2.36
0.05
GRUPOS DE EDAD40 a 4930 a 3925 a 2919 a 2412 a 18
Marihuana PBC Cocaína Éxtasis Cocaínicas
Tabla 2.2: Perú 2013: Oportunidad de ofrecimiento de drogas ilegales
MarihuanaAlcoholTabaco PBC Cocaína
67.1
44
54.8
82.1
79.2
13.8
2.27.5
0.82.9
Hombre Mujer Total
90.0
80.0
70.0
60.0
50.0
40.0
30.0
20.0
10.0
0.04.1
0.92.4
PO
RC
EN
TAJE
85.4
5.3
Gráfico 2.1: Perú 2013: Prevalencia de vida de drogas legales e ilegales según sexo
26 27
Gráfico 2.4: Perú 2013: Prevalencia de vida de drogas ilegales según región
En función a la región de residencia, para el caso de todas las drogas (legales e ilegales), el estudio mostró una
mayor prevalencia de vida en Lima Metropolitana en comparación con provincias; evidenciando una mayor
cercanía con todas las sustancias en los residentes en la capital. En todas las regiones la droga ilegal con mayor
prevalencia de vida fue la marihuana, seguido por la pasta básica y el clorhidrato de cocaína; reflejo de la
tendencia observada a nivel nacional.
Una variable importante evaluada en el estudio es la referida a la edad promedio de inicio en el uso de drogas;
esto es, la edad típica de consumo inicial reportada por quienes consumieron cada sustancia al menos una vez en
la vida. Se observó que las edades promedio de primer empleo de drogas legales el menor que las reportadas
para las drogas ilegales.
SEXO
Hombre
Mujer
Cocaína
TABACO
17.5
18.0
17.3
17.9
18.7
18.8
18.7 18.5 19.4
ALCOHOL MARIHUANA PBC
20.2
20.1
19.5
COCAÍNA
22.0
21.9
21.5
debido a que en los grupos mixtos que ingresan en
el consumo las mujeres suelen ser de menor edad
que los varones. En contraste, en el caso de las
drogas cocaínicas, las edades promedio de primer
consumo son mayores en los varones, lo que
posiblemente se relacione con que estas sustancias
son menos consumidas en grupos mixtos y sí más
bien en grupos solo de varones o solo de mujeres.
El inicio en el empleo del tabaco y alcohol está
alrededor de los 18 años de edad mientras que en
el caso de la marihuana está en los 18.8 años; 20.1
años para la pasta básica y 21.9 años para el
clorhidrato de cocaína.
Se apreció que las edades de primer consumo son
mayores en las mujeres que en los hombres para el
caso de las drogas legales y la marihuana, tal vez
Estimaciones poblacionales
Los valores de indicadores epidemiológicos valorados a través del estudio han sido empleados para realizar
estimaciones poblacionales, permitiendo tener una idea más clara sobre la cantidad de peruanos entre 12 y 65
años que viven en zonas urbanas y han empleado drogas legales e ilegales. La población de referencia, calculada en
base a información proporcionada por el INEI, fue 12'464,747 personas.
Los resultados mostraron que más de 10 millones de peruanos en los rangos de edad y regiones donde se
desarrolló la encuesta han probado bebidas alcohólicas al menos una vez en la vida y que son casi 7 millones los
que han utilizado cigarrillos de tabaco. Debe tomarse en cuenta que estas cifras no pueden ser sumadas entre sí
pues el empleo de cada sustancia ha sido evaluado de manera independiente.
CARACTERÍSTICAS
Sexo
Mujer
Edad
12 a 18 años
Hombre
19 a 24 años
30 a 39 años
40 a 49 años
50 a más
25 a 29 años
Nivel Educativo
Secundaria
Superior
Región
Inicial, primaria
PREVALENCIADE VIDA
[ % ]
85.4
79.2
56.0
86.2
86.6
90.3
83.5
77.7
75.7
87.9
4,900,713
5,326,936
1,037,603
1,892,701
1,409,333
2,372,910
1,797,571
704,763
3,943,669
4,980,587
Provincias
Resto costa
Lima Metropolitana 7,163,69584.5
76.8
70.2
3,063,954
1,093,268
Selva
Estrato socioeconómico
Sierra 1,340,99181.7
79.2 629,695
Bajo
Medio
78.7
83.0
2,532,921
5,390,346
Alto 2,304,38283.7
85.5 1,717,530
67.1
44.3
32.8
61.5
57.5
61.9
57.4
51.0
46.6
61.0
58.4
47.0
37.5
57.1
44.8
51.3
56.1
55.6
53.5
Total 82.1 10,227,648 54.8
ESTIMACIÓNPOBLACIONAL
[ % ]
PREVALENCIADE VIDA
[ % ]
ESTIMACIÓNPOBLACIONAL
[ % ]
3,849,139
2,978,493
607,377
1,350,064
935,153
1,625,843
1,234,845
462,698
2,425,980
3,454,463
4,951,352
1,876,280
583,135
937,205
355,940
1,653,019
3,644,314
1,530,300
1,074,351
6,827,632
ALCOHOL TABACO
1.0
0.0
PO
RC
EN
TAJE
LimaMetropolitana
Provincias RestoCosta
Sierra Selva Total
Marihuana PBC
2.0
3.0
4.0
5.0
6.0
7.0
8.0
9.0
Cocaína
8.9
3.5
3.1
1.21.6
0.7
5.4
4.4
2.5
1.5
7.5
2.92.4
4.7
1.6
0.8
4.0
0.6
Tabla 2.3 Edad promedio de inicio en el consumo de drogas
Tabla 2.4 Estimaciones poblacionales de prevalencia de vida de drogas legales
28 29
CARACTERÍSTICAS
Sexo
Mujer
Edad
12 a 18 años
Hombre
19 a 24 años
30 a 39 años
40 a 49 años
50 a más
25 a 29 años
Nivel Educativo
Secundaria
Superior
Región
Inicial, primaria
PREVALENCIADE VIDA
[ % ]
13.8
2.2
4.0
7.3
9.4
8.2
5.9
2.7
6.5
9.1
789,367
151,236
73,823
160,161
152,173
216,022
127,383
24,059
338,538
514,117
Provincias
Resto costa
Lima Metropolitana 754,3318.9
4.7
4.0
186,271
61,748
Selva
Estratosocioeconómico
Sierra 89,4055.4
4.4 35,117
Bajo
Medio
5.1
8.6
164,555
559,280
Alto 216,7677.9
10.5 211,040
5.3
0.8
1.8
3.5
3.1
3.3
3.4
2.4
3.6
2.5
3.5
1.6
1.2
1.6
2.5
2.3
2.9
3.4
1.9
Total 7.5 940,602 2.9
ESTIMACIÓNPOBLACIONAL
[ % ]
PREVALENCIADE VIDA
[ % ]
ESTIMACIÓNPOBLACIONAL
[ % ]
304,020
53,785
32,497
76,000
50,763
86,466
73,775
21,927
185,059
140,117
293,869
63,936
18,021
25,680
20,236
73,097
189,854
94,855
38,304
357,805
MARIHUANA PASTA BÁSICA DE COCAÍNA
4.1
0.9
0.6
2.3
2.0
3.6
2.4
2.2
2.0
2.8
3.1
0.8
0.6
0.7
1.5
1.6
2.7
2.6
2.8
2.4
PREVALENCIADE VIDA
[ % ]
ESTIMACIÓNPOBLACIONAL
[ % ]
236,586
59,841
10,453
51,403
33,002
93,923
50,864
20,008
102,878
159,510
263,357
33,069
8,925
12,050
12,094
51,655
173,279
71,491
56,781
296,426
CLORHIDRATO DE COCAÍNA
Cabe recordar que en muchos casos podría tratarse
de un único uso experimental de drogas ilegales,
que no necesariamente se convirtió en adicción;
además debe considerarse que estas cifras no
pueden sumarse entre sí debido al fenómeno del
“policonsumo” (empleo simultáneo de más de una
sustancia), que hace que una misma persona pueda
aparecer en las estimaciones de dos o más drogas.
En el caso de las drogas ilegales, las estimaciones
poblacionales permiten verificar que cerca de 1
millón de peruanos ha empleado marihuana por lo
menos una vez en la vida; poco más de 350 mil han
probado pasta básica y poco menos de 300 mil han
utilizado clorhidrato de cocaína.
Lima
Resto Costa
Trujillo
Ica
Tacna
Piura
SIERRA
Arequipa
Ayacucho
Cusco
Huancayo
Selva
Pucallpa
Tarapoto
Tingo María
Iquitos
TOTAL
8.9
5.1
2.2
5.4
1.3
5.8
3.2
9.7
7.5
4.9
3.0
5.1
7.2
754,331
35,931
5,024
13,035
4,398
46,516
4,738
33,753
17,502
940,602
2.1 7,759
8,230
5,926
3,459
5.1
1.5
1.2
2.6
0.4
3.0
0.2
1.9
3.5
4.1
0.6
2.2
2.6
3.2
434,645
10,652
2,729
6,393
1,410
24,126
297
6,664
12,582
512,290
2,249
6,002
3,007
1,534
En lo referido a las drogas cocaínicas, se aprecia una
mayor prevalencia de vida en Arequipa (3.0%:
24,126 casos), seguida por Iquitos (3.5%: 12,582
casos) y Trujillo (1.5%: 10,652 casos).
Debe entenderse que estas c i f ras están
determinadas tanto por el nivel que ha alcanzado el
indicador como por el tamaño de las poblaciones
de referencia en cada ciudad. Esto explica que
existan ciudades donde se aprecia mayor cantidad
de personas que reportan consumo alguna vez en
la vida a pesar que el indicador porcentual de
prevalencia de vida es menor.
Adicionalmente, de modo informativo, se realizó
estimaciones poblacionales del empleo de drogas
ilegales a nivel de las ciudades involucradas. Este
procedimiento permitió observar que el número
de peruanos entre 12 y 65 años que han empleado
marihuana al menos una vez en la vida supera a los
750 mil y los que han utilizado drogas cocaínicas
está alrededor de los 434 mil casos.
En el interior del país, el mayor número de
personas que ha consumido marihuana al menos
una vez se observa en la ciudad de Arequipa (5.8%:
46,516 casos), seguido por Trujillo (5.1%: 35,931
casos) y Cusco (9.7%: 33,753 casos).
Tabla 2.5: Estimaciones poblacionales de prevalencia de vida de drogas ilegales
CIUDAD
PREVALENCIA DE VIDADE MARIHUANA
% EXPANDIDO
PREVALENCIA DE VIDADE DROGAS COCAÍNICAS
% EXPANDIDO
Tabla 2.6: Prevalencia de vida de drogas ilegales según ciudad [n expandido: 12´464,747]
30 31
Tabla 2.8: Perú 2010 y 2013: Prevalencia de vida de drogas legales e ilegales
Policonsumo
El estudio también tomó en cuenta el hecho de que una misma persona puede haber empleado más de una droga,
tanto de manera experimental como permanente, incluso hasta el desarrollo del fenómeno adictivo. En realidad los
caminos que pueden conducir a un individuo hacia la drogodependencia son muy variados.
Muchas personas ingresan en el mundo de las drogas ilegales a partir del empleo de drogas legales, especialmente
desde las bebidas alcohólicas; sin embargo, existen reportes actuales que indican que existen personas,
especialmente las más jóvenes, que están ingresando directamente al empleo de drogas ilegales, sea desde la
marihuana o incluso desde las drogas cocaínicas.
El estudio evidenció que el 5.4% de encuestados, cerca de 680 mil personas, entre 12 y 65 años, residentes en zonas
urbanas peruanas reportó haber empleado al menos una vez alguna droga ilegal. El 2.4% (poco más de 300 mil
personas) informó haber probado dos drogas ilegales y el 1.1% señaló haber probado incluso tres drogas ilegales a
lo largo de la vida, representando a más de 130 mil personas. En general se apreció que el 9.0% de peruanos habría
probado al menos una vez alguna droga ilegal, representando más de 1 millón 120 mil casos.
5.4%
2.4%
1.1%
9.0%
han consumido UNA sola droga
han usado DOS drogas
han usado TRES drogas
han probado al menos UNA DROGA ILEGAL
[ 676,815 personas ]
[ 303,850 personas]
[ 137,612 personas]
[ 1´121,258 personas]
4.3%
0.3%
1.5%
0.6%
0.9%
han usado solo MARIHUANA
[ 532,726 personas ]
han usado solo PBC
[ 34,279 personas ]
han usado MARIHUANA+PBC
[ 180,975 personas ]
han usado MARIHUANA+COCAÍNA
[ 77,208 personas ]
han usado MARIHUANA+PBC+COCAÍNA
[ 113,364 personas ]
Tasa de enganche
La tasa de enganche es un indicador que informa sobre el porcentaje de personas que recibieron algún
ofrecimiento de drogas ilegales y llegaron a consumirlas al menos una vez en la vida; entrando algunos de ellos en
la posibilidad de desarrollar procesos adictivos más severos. Este indicador refleja la medida en que las personas
logran mantenerse distantes del consumo a pesar de las presiones del medio para comenzar en este.
SUSTANCIA
Marihuana
PBC
Éxtasis
Cocaína
OPORTUNIDADDE OFRECIMIENTO
26.4
9.3
4.5
7.5
2.4
0.4
0.3 [3 de 10]
0.3 [3 de 10]
0.1 [1 de 10]
16.3 2.9 0.2 [2 de 10]
PREVALENCIADE VIDA
TASA DE ENGANCHE(PV/O)
La marihuana y el clorhidrato de cocaína presentaron las tasas de enganche más elevadas pues llegaron a ser
consumidas por tres de cada 10 encuestados a quienes se las ofrecieron. Por su parte, la pasta básica de cocaína fue
consumida por dos de cada 10 encuestados que reportó algún ofrecimiento. El caso del éxtasis es distinto pues la
tasa de enganche fue 0.1, indicando que fue consumido solo por una de cada 10 personas que tuvieron al menos
un ofrecimiento para probarlo.
Comparación 2010-2013
Resulta interesante establecer cómo han variado los indicadores de consumo de sustancias desde los estudios
realizados en años anteriores; cambios que en su mayor parte están relacionados con las coyunturas nacionales
relacionadas con la disponibilidad de drogas en el mercado peruano, las políticas educativas y preventivas en
marcha y el influjo de la problemática social, entre otros factores.
SUSTANCIA
Alcohol
Tabaco
PBC
Marihuana
%
87.8
5.6
2.1
82.1
7.5
2.9
10,227,648
940,602
357,805
56.7 54.8 6,827,632
PBC 1.5 2.4 296,426
POBLACIÓN
11'584,775
738,892
277,085
7'481,284
197,918
% POBLACIÓN
Gráfico 2.5: Perú 2013: Indicadores de policonsumo
Tabla 2.7: Perú 2013: Tasa de enganche de drogas ilegales
32 33
La prevalencia de vida de alcohol pasó de 87.9% el
2003 a 87.6% el 2005 y 85.0% el 2007; se elevó
ligeramente a 87.8% el 2010 y aparece con 82.1% el
año 2013. Algo similar se aprecia en el caso del
tabaco, cuya prevalencia de vida fue de 63.4% el
2003, 67.4% el 2005, 63.4% el 2007 y bajó hasta
56.7% el 2010 y mucho más, hasta 54.8% el 2013.
Al revisar la evolución de la prevalencia de vida de
drogas ilegales se aprecian parones distintos según
sustancia. La prevalencia de vida de marihuana el
2003 fue de 10.3%; subió a 11.9% el 2005; bajó a
8.1% el 2007 y a 5.6% el 2010; pero para el año 2013
subió a 7.5%.
Entre el estudio del año 2010 y el actual, la
prevalencia de vida de drogas legales ha presentado
ligeras reducciones: a) de 87.8% en el 2010 hasta
82.1% en el 2013 en el caso del alcohol; y b) de
56.7% en el 2010 hasta 54.8% en el 2013 para los
cigarrillos de tabaco.Se aprecia el fenómeno inverso
en el caso de las drogas ilegales, con ligeros
aumentos en los tres casos: a) de 5.6% en el 2010 a
7.5% en el 2013 en el caso dela marihuana; b) de
2.1% en el 2010 hasta 2.9% en el 2013 para la pasta
básica; y c) de 1.5% en el 2010 hasta 2.4% en el 2013
para la cocaína.
Se estableció comparaciones adicionales en los
restantes indicadores de prevalencia de drogas
ilegales; los cuales, son aún menos sensibles a
variaciones en cortos períodos de tiempo y
únicamente son detectables a través del empleo de
muestras suficientemente grandes como la
utilizada en el presente estudio.
De esta manera, el uso reciente (uso alguna vez en
los últimos 12 meses) de drogas ilegales entre el
2010 y el 2013 se incrementó de 1.2% a 1.7% para la
marihuana; de 0.2% a 0.5% para la pasta básica; y se
mantuvo en 0.2% en el caso del clorhidrato de
cocaína.
El uso en los últimos 30 días o uso actual de drogas
ilegales entre en 2010 y el 2013 se redujo
ligeramente en el caso de la marihuana, pasando
de 0.8% a 0.7%; aumentó de ser no detectable a
0.1% en la pasta básica y disminuyó de 0.1% a ser
no detectable en el caso del clorhidrato de cocaína.
Adicionalmente, al observar la evolución temporal
del empleo de sustancias desde el primer estudio
epidemiológico realizado por CEDRO en 1986, se
verifica la existencia de un patrón con ligera
tendencia a la disminución en la prevalencia de
vida de drogas legales.
Usó alguna vez en la vida:Prevalencia de vida
Marihuana PBC Cocaína
7.5
5.6
2.12.9
1.52.4
Marihuana
PBC
Cocaína
2010 2013
5.6 7.5
2.1 2.9
1.5 2.4
738,892
277,085
197,918
361,478
934,856
299,154
% Personas % Personas
Usó alguna vez en los últimos 12 meses:Uso reciente
Marihuana
PBC
Cocaína
1.2 1.7
0.2 0.5
0.2 0.2
158,334
26,389
26,389
63,324
211,901
24,929
2010 2013% Personas % Personas
Marihuana PBC Cocaína
1.21.7
0.2 0.5 0.2 0.2
Usó alguna vez en los últimos 30 días:Uso actual
Marihuana PBC Cocaína
0.8 0.70.0 0.1 0.1 0.0
Marihuana
PBC
Cocaína
0.8 0.7
0.0 0.1
0.1 0.0
105,556
0
13,194
12,664
87,253
0
2010 2013% Personas % Personas
2010 2013
1986 1988 1992 1995 1997 2001 2003 2007 2010 2013
0
5
10
15
20
25
2.61.3 2.0 1.9
3.2
2.03.9
1.7 1.5 2.4
2.84.0
5.6 3.14.7
2.44.1
2.2 2.1 2.9
8.3
5.3 7.8 6.48.0
6.1
10.3
8.1
5.67.5
AÑOS
PR
EV
ALE
NC
IA D
E V
IDA
(P
OR
CE
NTA
JE)
0
10
20
30
40
50
60
70
80
90
100
1986 1988 1992 1995 1997 2001 2003 2007 2010 2013
PR
EVA
LEN
CIA
DE
VID
A (
PO
RC
EN
TAJE
)
87.283.5
92.0
84.687.2 86.0 87.9 85.0 87.8
82.1
67.4
57.2
66.062.1 60.5 63.4 63.4 63.4
56.754.8
Alcohol
Tabaco
Drogas legales
Marihuana
PBC
Drogas ilegales
Cocaína
AÑOS
Gráfico 2.7: Perú: Prevalencia de drogas legales 2010-2013
Gráfico 2.8: Perú: Prevalencia de drogas ilegales 1986-2013
Perú: Prevalencia de drogas ilegales 201-2013
Gráfico 2.6
34 35
complejas coyunturas sociales, económicas y
políticas de las poblaciones involucradas. Esto
también ocurre en el caso peruano, siendo
necesario estar atentos a los cambios que puedan
darse en este aspecto.
Finalmente, se estableció comparaciones en la
prevalencia de vida según ciudades, tomando en
cuenta que el marco muestral de ciudades
empleado el año 2013 fue el mismo que el
empleado en el estudio del 2010. Los resultados
mostraron variaciones según droga y ciudad
evaluada, sin que sea posible establecer un patrón
específico.
Adicionalmente, desde el 2003 se apreció
reducciones en la prevalencia de vida de drogas
cocaínicas, llegando el 2010 a ser de 2.1% para la
pasta básica y 1.5% para el clorhidrato; sin
embargo, para el 2013 estos valores se han
incrementado hasta llegar a 2.9% para la pasta
básica y 2.4% para el clorhidrato de cocaína;
aunque en realidad aún no es posible aseverar que
existe una tendencia al alza.
Respecto a lo anterior, es necesario señalar que en
general los patrones de prevalencia de drogas
tienen un proceso evolutivo lento; con variaciones
muy ligeras a lo largo de los años en función a las
Lima 8.95.1
10.5
Piura 2.10.62.4
Trujillo 5.11.56.3
Ica 2.21.22.8
Huancayo1.30.42.0
Iquitos4.93.55.6
Pucallpa3.02.24.7
Cusco9.71.9
11.8
Tacna5.42.66.1
Tarapoto5.12.66.6
Tingo María 7.23.28.7
2010-2013Marihuana
8.9
6.0
6.1
2.6
5.8
4.3
4.6
8.3
7.4
5.3
2.8
3.1
4.9
9.7
8.9
7.2
5.8
5.1
5.1
5.4
4.9
3.0
3.2
2.2
2.1
1.3
2010-2013
10.0
7.9
8.0
4.2
8.8
5.2
5.3
11.3
8.4
6.8
4.3
4.1
5.7
11.8
10.5
8.7
6.8
6.6
6.3
6.1
5.6
4.7
4.4
2.8
2.4
2.0
2010-2013
2.5
2.8
2.6
1.0
2.9
1.8
1.6
5.4
2.2
1.9
2.0
3.1
1.9
1.9
5.1
3.2
3.0
2.6
1.5
2.6
3.5
2.2
0.2
1.2
0.6
0.4
Drogas Cocaínicas Una droga legalCiudad
Cusco
Lima Metropolitana
Tingo María
Arequipa
Tarapoto
Trujillo
Tacna
Iquitos
Pucallpa
Ayacucho
Ica
Piura
Huancayo
Marihuana Drogas Cocaínicas Una Droga Legal
Gráfico 2.9: Perú: Prevalencia de drogas ilegales según ciudades 2010-2013
36 37
Alcohol
En el Perú el abuso y la dependencia de alcohol es el principal problema de salud
pública en cuanto a drogas se refiere. Si bien no se dispone de información
confiable en cuanto al número de individuos alcohólicos, las proyecciones de los
estudios de CEDRO, y reportes de monitoreo de la atención en establecimientos
de salud mental y urgencias psiquiátricas, permiten estimar conservadoramente
que pueden existir más de medio millón de personas afectadas por la
enfermedad del alcoholismo.
De acuerdo a la Organización Mundial de la Salud (OMS) cada año fallecen más
de 2.5 millones de personas por causas relacionadas con el empleo de alcohol,
evidenciando que se trata de un problema serio a nivel mundial, más aún cuando
el fenómeno adictivo está fuertemente asociado con diversas problemáticas en
el ámbito de la salud pública, con consecuencias tales como accidentalidad en
transporte público, baja productividad laboral, afectación de las relaciones
familiares, trastornos en diversos órganos y aún muerte.
Las bebidas alcohólicas tienen diversas formas de presentación, que han ido
aumentando a lo largo de la historia. El pisco, considerada bebida nacional
peruana, tiene un elevado contenido alcohólico; como lo tienen también diversas
“chichas”, “aguardientes” y “macerados” que se consumen ampliamente en todas
las regiones del país. La cerveza y el vino son bebidas que acompañan cualquier
evento, privado o público y su consumo es promovido ampliamente en los
medios de comunicación.
3
39
El alcohol tiene la capacidad de generar dependencia, esto es, adicción alcohólica, caracterizada por una
necesidad creciente de mantener el consumo y síntomas fisiológicos severos cuando se trata de abandonar el
empleo; insertando al individuo en un estado de desequilibrio y afectación de su vida social, familiar o laboral;
con estragos en la salud física que los ponen en riesgo a sí mismos y a su entorno.
Los efectos del alcohol sobre la conducta están en directa relación con su concentración en sangre. El inicio del
consumo puede generar una sensación de bienestar y relajación que rápidamente se convierte en una reducción
de las inhibiciones y sentido de seguridad. Con mayor cantidad comienzan las dificultades para hablar,
problemas de coordinación y reducción de los reflejos. Más allá, se pasa a dificultades para caminar y pérdida de
conciencia y del control del propio cuerpo. El coma y la muerte pueden ser las consecuencias de la intoxicación
alcohólica.
últimos 12 meses, siendo a veces también
denominado como “uso reciente”.
El 61.7% de encuestados informó haber empleado
alcohol durante el último año (7'691,070 personas),
siendo, igual que en el caso de la prevalencia de
vida, más hombres (67.4%) que mujeres (56.9%). El
42.3% de jóvenes entre 12 a 18 años usó bebidas
alcohólicas al menos una vez en los últimos 12
meses frente al 71.1% reportado por el grupo entre
30 y 39 años. Se apreció también un incremento
con la edad en la prevalencia de último año, desde
51.5% en el grupo con menor nivel educativo hasta
alcanzar el 67.0% en el grupo con educación
superior.
Según región de residencia, se verificó una
prevalencia de último año ligeramente mayor en
Lima Metropolitana (62.2%) que en otras ciudades
(60.6%) y entre éstas últimas, es mayor en la sierra
(64.9%) y en la selva (63.0%) que en el resto de costa
(54.9%). Finalmente, este indicador ofreció valores
cercanos en los tres estratos socioeconómicos: bajo
(61.6%); medio (62.6%) y alto (59.8%).
El último consumo de quienes emplearon bebidas
alcohólicas al menos una vez en la vida fue hace
menos de 30 días (38.0%); hace más de un mes pero
menos de un año (37.2%) y 7.2% hace más de un
año pero menos de 3 años. Finalmente, el 17.6%
informó haber usado alcohol por última vez hace
más de 3 años, ingresando al grupo de
“ex˗consumo”.
La prevalencia de mes, identifica al porcentaje de
encuestados que reporta haber usado bebidas
alcohólicas de cualquier tipo al menos una vez
durante los 30 días previos a la fecha de entrevista,
por lo que también se denomina “uso actual”.
En el grupo total entrevistado, la prevalencia de
mes fue de 31.2%; indicando que tres de cada diez
Pero estos efectos están influenciados por factores
tales como la forma de beber o aspectos
fisiológicos característicos de cada persona. El uso
de bebidas alcohólicas puede ir desde un consumo
moderado ocasional, pasando por episodios
severos espaciados en el tiempo hasta consumo
inmoderado permanente, donde todas las esferas
de vida del individuo se ven afectadas.
Los resultados del estudio actual evidencian que el
consumo de alcohol es un fenómeno grave, siendo
la droga de mayor consumo a nivel nacional. La
tabla 3.1 evidencia que la prevalencia de vida de
bebidas alcohólicas alcanzó al 82.1% de la
población, lo que significa que ocho de cada diez
peruanos entre los 12 y 65 años consumió alcohol
al menos una vez en la vida (10'227,648 personas);
siendo mayor el porcentaje de hombres (85.4%)
que de mujeres (79.2%) en esta condición.
La mayor prevalencia de vida de alcohol se
observó en el grupo de 30 a 39 años (90.3%) y la
menor en el grupo de 12 a 18 años (56.0%), lo que
sin embargo es grave puesto que indica que seis
de cada diez personas menores de 18 años ya han
probado bebidas alcohólicas. Se observa también
mayor prevalencia de vida en las personas con
mayor nivel educativo (87.9%).
Según región de residencia se observa mayor
prevalencia de vida en Lima Metropolitana (84.5%)
que en otras ciudades(76.8%). En cuanto a otras
ciudades, se aprecia menor prevalencia de vida en
resto de costa (70.2%) en comparación con la selva
(79.2%) y la sierra (81.7%). Además, se apreció
mayor prevalencia de vida en los estratos
socioeconómicos medio (83.0%) y alto (83.7%) que
en el bajo (78.7%).
El indicador prevalencia de año informa acerca del
porcentaje de entrevistados que han consumido
bebidas alcohólicas al menos una vez durante los
Euforia.
Desinhibición.
Aumento de la sociabilidad.
Pérdida del control de las facultades superiores: dificultad para asociar ideas.
Estado de apatía, relajación y somnolencia
EFECTOS DE LA INTOXICACIÓN
Principio activo: Alcohol etílico.
Características: Bebida presentada de diversos colores, graduaciones y procedencia.
Producción: Se produce a part i r de la cata l ización de azúcares naturales presentes en los productos de los que se deriva, obtenidos por destilación y/o fermentación.
Presentación: Dependiendo del tipo puede llevar sobrenombres que se identifican con su procedencia y formas de preparación: 'chela', 'wiscacho', 'wiskola', etc. Generalmente se comercializa en botellas y latas en forma pura o combinada, con diferentes grados de pureza.
EFECTOS NO DESEADOS
Órganos más afectados: hígado (destrucción celular) y sistema digestivo (gastritis).
Disminución del ritmo cardiorespiratorio.
Pérdida de masa neuronal.
Dependiendo de la dosis se pueden afectar otros sistemas: habla, equilibrio, visión y oído.
Disminución de reflejos y pérdida de la coordinación motora fina.
CONSECUENCIAS
Pérdida de responsabilidad social.
Desestructuración familiar.
Malos tratos.
Ausentismo laboral.
Baja productividad.
Exposición a accidentes fatales.Conductas delictivas.
Suicidios.
Accidentes de tráfico.
Conductas temerarias.
Información sobre alcohol
40 41
encuestados entre 12 y 65 años en zonas urbanas peruanas consumieron alcohol al menos una vez durante los
últimos 30 días (3'886,386 personas); siendo estos muchos más hombres (40.6%) que mujeres (23.1%). El 19.8%
del grupo de menor edad (12 a 18 años) empleó alcohol durante el período indicado frente a porcentajes que
superan el 35% en los grupos desde 19 hasta 49 años.
La prevalencia de mes se incrementó en paralelo con el nivel educativo: inicial/primaria (23.7%); secundaria
(27.2%) y superior (35.6%) y, a diferencia de los indicadores anteriores, apareció ligeramente mayor en provincias
(32.1%) que en Lima Metropolitana (30.7%). Los encuestados del estrato socioeconómico bajo presentaron
mayor prevalencia de mes en el consumo de alcohol (33.2%) frente a los del nivel medio y alto (30.3% y 30.8%
respectivamente).
CARACTERÍSTICAS
Sexo
Mujer
Edad
12 a 18 años
Hombre
19 a 24 años
30 a 39 años
40 a 49 años
50 a más
25 a 29 años
Nivel Educativo
Secundaria
Superior
Región
Inicial, primaria
PREVALENCIADE VIDA
[ % ]
85.4
79.2
56.0
86.2
86.6
90.3
83.5
77.7
75.7
87.9
67.4
56.9
42.3
52.7
65.1
71.1
66.1
51.5
57.1
67.0
Provincias
Resto costa
Lima Metropolitana 62.284.5
76.8
70.2
60.6
54.9
Selva
Estratosocioeconómico
Sierra 64.981.7
79.2 63.0
Bajo
Medio
78.7
83.0
61.6
62.6
Alto 59.883.7
85.5 69.7
40.6
23.1
19.8
19.5
35.7
38.4
35.1
23.7
27.2
35.6
30.7
32.1
31.5
31.5
34.7
33.2
30.3
30.8
37.1
Total 82.1 61.7 31.2
PREVALENCIADE AÑO
[ % ]
PREVALENCIADE MES
[ % ]
INCIDENCIAANUAL
[ % ]
50.3
33.7
35.5
29.0
47.8
56.3
37.0
32.0
36.8
50.4
47.3
29.1
15.6
44.2
25.9
36.4
40.8
47.5
46.2
41.0
17.3
18.7
15.0
20.1
17.2
18.3
19.0
19.9
18.0
17.7
18.0
18.0
17.7
18.1
18.4
18.3
17.9
17.8
16.6
18.0
EDAD PROMEDIO DEPRIMER CONSUMO
[ AÑOS ]
Adicionalmente se valoró el indicador de incidencia anual, que informa acerca del porcentaje de encuestados
que reportaron haber tenido el primer consumo de alcohol en algún momento dentro del período de 12 meses
previos a la fecha de entrevista; siendo considerados como “casos nuevos” que ingresan al consumo.
Se encontró que la incidencia anual de alcohol fue del 41.0%, mucho mayor en hombres (50.3%) que en mujeres
(33.7%). Fue de 35.5% para el grupo de 12 a 18 años y de 29.0% para los mayores de 50 años Este indicador se
incrementa según el nivel educativo desde 32.0% para el nivel primario hasta 50.4% en el nivel superior, que
presentó mayor porcentaje de casos nuevos de empleo de alcohol.
Según región de residencia se reportó más casos nuevos en Lima Metropolitana (47.3%) que en otras ciudades
(29.1%), donde el mayor porcentaje apareció en la sierra (44.2%) y el menor en el resto de costa (15.6%). Los
casos nuevos también se incrementaron en paralelo con el estrato socioeconómico: bajo (36.4%), medio (40.8%)
y alto (47.5%).
En lo referido a la frecuencia de empleo de bebidas alcohólicas, se apreció que entre quienes las usaron al menos
una vez durante los últimos 12 meses, el 31.2% reporto haberlo hecho solo una o dos veces, el 19.3% entre 3 a 6
veces y el 15.5% consumió alcohol al menos una vez por mes.
3.9%de personas que han usado alcohol han tenido deseos algunas veces de
usarlo al despertar por la mañana
pero hay un
0.5%de personas han tenido estos deseos siempre.
[señal de posible problema de alcoholismo]
Los que han usado alcohol al menos 1 vez en la vida en los últimos 12 meses
31.2%
19.3%
7.4%
15.5%
6.3%
0.2%
20.1%
1 ó 2 veces
3 a 6 veces
7 a 11 veces
Al menos 1 vez al mes
Al menos 1 vez por semana
DiariamenteNo lo hicieron hace 12 meses
El último consumo de quienes usaronalcohol al menos 1 vez en la vida
38.0%
37.2%
7.2%
17.6%
Hace menos de 30 días
Hace más de 1 mes pero menos de 1 año
Hace más de 1 año pero menos de 3 años
Al menos 1 vez al mes
Tabla 3.1: Perú 2013: Indicadores epidemiológicos sobre alcohol
Gráfico3.1: Perú 2013: Información epidemiológica sobre alcohol
42 43
Es también notable que la edad promedio de primer consumo de bebidas alcohólicas fue 18 años, con
diferencias entre hombres (17.3 años) y mujeres (18.7 años). En los más jóvenes (12 a 18 años) la edad promedio
fue los 15 años aunque el grupo de mayor edad (50 a más años) informó que consumió por primera vez a los 20.1
años, evidenciando el conocido fenómeno de la reducción en el inicio del uso de sustancias.
Se observó que las personas con menor nivel educativo presentaron una edad promedio de primer consumo
(19.9 años) ligeramente mayor que los demás: secundaria (18.0 años) y superior (17.7 años). No se apreció
diferencias según región de residencia (18.0 años en Lima y lo mismo en provincias) y estas fueron ligeras en
función al estrato socioeconómico: bajo (18.3%), medio (17.9%) y alto (17.8%).
Finalmente, el 3.9% de personas que han usado alcohol han presentado deseos de consumirlo al despertar por
las mañanas al menos algunas veces pero el 0.5% presentan estos deseos siempre; elementos que son posibles
señales de un problema de adicción alcohólica, denominada corrientemente como “alcoholismo”.
82.1%de peruanos lo han usado al menos una vez en la vida
67.4%de peruanos lo han usado al menos una vez en losúltimos 12 meses
40.6%de peruanos lo han usadoal menos una vez en losúltimos 30 días
10´227,648 personas
7´691,070 personas
3´886,386 personas
8.9%de encuestados usaron alcohol por primera vez30 días antes de la encuesta
El uso alguna vez en la vida es mayor en
Lima
84.5%
76.8%
que en
Provincias
18 años es la edad promedio del primer consumo
17.3 en hombres
18.7 en mujeres
6.3% lo hicieron hace más deun mes pero menos de 1 año
84.8% lo hicieron hace más de 1 año
Gráfico 3.2: Perú 2013: Información epidemiológica sobre alcohol
44 45
Tabaco
Los productos del tabaco son la causa principal evitable de enfermedad, invalidez
y muerte prematura en el mundo y se constituye en uno de los más importantes
problemas de salud pública mundial. El consumo de tabaco y la exposición al
humo de tabaco ajeno continúan siendo las principales causas individuales de
mortalidad, morbilidad y discapacidad prevenibles en todo el mundo y son
responsables del 12% de todas las muertes de los adultos mayores de 30 años.
El tabaquismo mata entre un tercio y la mitad de todas las personas que han
fumado a lo largo de todas sus vidas. La OMS estima que en el siglo pasado han
muerto casi 100 millones de personas por casusa relacionadas con el tabaco.
Para el año 2010, el tabaco causó la muerte de cerca de 6 millones de personas,
72% de las cuales residían en países de ingresos medios y bajos.
Si las tendencias actuales continúan, el tabaco habrá matado anualmente 7
millones de personas para el año 2020 y más de 8 millones de personas para
2030. Varias de esas muertes ocurrirán en los países de ingresos bajos y medianos
y a la vez, en los grupos poblacionales con menos recursos económicos y menor
educación. La OMS advierte que de no tomarse medidas urgentes, a finales del
presente siglo, el tabaco puede matar a mil millones de personas.
4
47
Refuerzo positivo: estimula la capacidad de concentración, hace que mejore el sentido del humor, y disminuya el peso.
Relajación.
Sedación.
EFECTOS DE LA INTOXICACIÓN
Principio activo: Nicotina, alquitranes y otras 4,000 sustancias incluyendo el monóxido de carbono.
Características: Sustancia que se fuma (vía oral) y en algunos casos puede masticarse.
Producción: Se produce a partir de la planta solanácea conocida como nicotiana tabacum, que es secada y procesada de manera artesanal o industrial.
Presentación: Tiene 3 presentaciones: cigarrillos, puros y tabaco para mascar. Los cigarrillos suelen venir en presentaciones de 10 ó 20 unidades en envolturas de cajetilla. Los puros son envueltos de hojas secas de tabaco de aproximadamente 20 centímetros de tamaño, con mayor pureza.
EFECTOS NO DESEADOS
Incremento de la frecuencia cardiaca, presión arterial y ritmo respiratorio.
Disminución de capacidad pulmonar.
Fatiga frecuente.
Enfisema pulmonar.
Deterioro del gusto y olfato.
Tos persistente.
De te r io ro de l os d ien tes vinculado a cáncer de las vías respiratorias y de la boca.
CONSECUENCIAS
Costos sociales y de salud pública incalculables.
La exposición al humo causa graves daños a la salud de fumadores y no fumadores.
Los hijos de madres fumadoras pueden presentar bajo peso al nacer, con aumento de complicaciones perinatales.
Mayor incidencia de bronquitis, neumonía, infecciones respiratorias, asma y otitis en fumadores y en expuestos a humo de tabaco ambiental. Fumadores involuntarios tienen mayor riesgo de enfermedades cardiovasculares y cáncer.
Empeoramiento de las consecuencias de problemas coronarios, asma y enfermedad pulmonar obstructiva crónica en fumadores y por exposición a humo de tabaco ambiental.
El consumo de tabaco está vinculado a unas 56 enfermedades, entre ellas diversos tipos de cáncer, y es la
principal causa de más de la mitad de las enfermedades cardiovasculares. Se sabe que el tabaco es el único factor
de riesgo compartido por cuatro de las principales categorías de enfermedades crónicas no transmisibles,
originando 1 de cada 6 muertes. Se sabe que hasta 1 de cada 5 muertes por tuberculosis podría haberse evitado
si los pacientes no hubiesen fumado. Según el Banco Mundial, los costos de atención médica por el consumo de
tabaco constituyen por lo general, entre el 1 y el 1.5% del producto bruto interno de un país.
Una situación alarmante a nivel mundial, es el consumo de tabaco en los jóvenes. Las cifras señalan que cada día,
entre 80,000 y 100,000 jóvenes en todo el mundo desarrollan adicción al tabaco. Si las tendencias actuales
continúan, 250 millones de los niños de la actualidad, morirán a causa de enfermedades relacionadas con el
tabaco en el mediano y largo plazo.
El consumo de tabaco, no sólo afecta la salud, sino
también otros aspectos que contribuyen al
bienestar y desarrollo de las personas. El
tabaquismo tiene un impacto negativo sobre la
nutrición, la educación, el empleo y la igualdad de
género de las personas de bajos ingresos,
ensanchando aún más la distancia que separa a
pobres de los no pobres. El tabaco genera costos a
la economía mundial por hasta 500 billones de
dólares al año.
En el Perú y pese a los importantes avances
alcanzados en control de tabaco, sigue siendo la
segunda droga más consumida entre la población,
según lo evidencian los últimos estudios
epidemiológicos realizados; donde se aprecia que
su consumo se inicia cada vez a menor edad y con
mayor gravedad entre los adolescentes, jóvenes y
mujeres.
La nicotina, alcaloide natural que está presente en
las hojas de tabaco, es el principal responsable del
uso continuado de cigarrillos y otras formas de
empleo, pese a sus efectos nocivos. Es una
sustancia sumamente adictiva. Fumar cigarrillos es
la forma más prevalente de adicción a la nicotina
en el mundo.
Los cigarrillos son sumamente eficientes para
suministrar nicotina. Cada vez que inhala, el
fumador promedio consume entre 1 y 2 mg de
nicotina por cigarrillo. La nicotina llega al cerebro
en unos 10 segundos lo que contribuye a su gran
poder de adicción. El cigarrillo y otros derivados
del tabaco, generan dependencia por un
mecanismo similar al de la adicción a otras drogas
como la cocaína y la heroína.
La definición de adicción implica la presencia de: a)
tolerancia, que es la necesidad de ir aumentando la
dosis para tener el mismo efecto; b) síndrome de
abstinencia ante su ausencia; y c) el consumo
compulsivo a pesar de conocer las consecuencias
negativas sobre la salud.
En el caso de la nicotina, el síndrome de
abstinencia alcanza su máxima intensidad entre 24
a 48 horas luego del último cigarrillo y se
caracteriza por irritabilidad, somnolencia, fatiga,
dificultades de concentración, trastornos de
sueño, urgencia de fumar, entre otros signos y
síntomas. Luego de entre 2 y 4 semanas de
abstinencia, estos síntomas van disminuyendo
lentamente.
E l consumo de tabaco genera además
dependencia de dos tipos: a) física, provocada
directamente por la nicotina, responsable del
síndrome de abstinencia; y b) psicológica que
surge desde el establecimiento de una relación
condicionada entre fumar y la realización de
ciertas actividades o la presencia en determinados
escenarios, con los que se establece un vínculo
difícil de vencer.
En la actualidad se sabe que la mitad de los niños
que prueban un cigarrillo, se convertirán en
adictos a la nicotina. De allí la importancia de
implementar medidas orientadas a evitar el inicio
de tabaco entre los menores.
Los resultados del estudio actual evidencian que el
consumo de tabaco sigue ocupando el segundo
lugar de consumo a nivel nacional. La tabla 4.1
evidencia que la prevalencia de vida de tabaco
alcanzó el 54.8% de la población, lo que significa
que 6 de cada diez peruanos entre los 12 y 65 años
fumó al menos una vez en la vida (6'827,632
personas); siendo mayor el porcentaje de consumo
alguna vez en la vida de hombres (67.1%) que de
mujeres (44.3%).
Mayor prevalencia de vida de tabaco se evidencia
en el grupo de 30 a 39 años (61.9%) y menor en el
Información sobre tabaco
48 49
CARACTERÍSTICAS
Sexo
Mujer
Edad
12 a 18 años
Hombre
19 a 24 años
30 a 39 años
40 a 49 años
50 a más
25 a 29 años
Nivel Educativo
Secundaria
Superior
Región
Inicial, primaria
PREVALENCIADE VIDA
[ % ]
67.1
44.3
32.8
61.5
57.5
61.9
57.4
51.0
46.6
61.0
35.8
17.7
19.4
18.6
30.8
31.8
23.0
13.9
21.2
31.5
Provincias
Resto costa
Lima Metropolitana 26.458.4
47.0
37.5
25.1
21.1
Selva
Estratosocioeconómico
Sierra 31.057.1
44.8 20.7
Bajo
Medio
51.3
56.1
22.9
26.7
Alto 28.155.6
53.5 32.0
24.7
10.0
11.5
11.0
19.2
19.5
16.6
7.8
13.1
21.3
17.0
16.3
14.8
18.7
14.2
15.0
15.9
20.9
22.5
Total 54.8 26.0 16.8
PREVALENCIADE AÑO
[ % ]
PREVALENCIADE MES
[ % ]
INCIDENCIAANUAL
[ % ]
19.8
7.1
15.5
5.7
12.0
10.6
10.0
8.6
11.3
13.0
14.1
7.6
3.8
13.8
5.1
9.2
12.4
13.5
14.5
11.8
17.5
18.8
15.1
19.9
17.3
18.4
18.6
20.9
17.9
17.6
18.1
18.0
17.8
17.7
18.9
18.5
18.1
17.5
16.8
18.0
EDAD PROMEDIO DEPRIMER CONSUMO
[ AÑOS ]
grupo de más de 50 años de edad (18.6%). Una situación preocupante es que 6 de cada 10 adolescentes
menores de 18 años han consumido tabaco alguna vez en la vida. Es importante señalar, que la edad de inicio
promedio de primer consumo en el Perú se ubica en los 18 años, siendo un poco menor en los hombres (17.7
años) que en las mujeres (18.8 años).
Lima Metropolitana obtiene los mayores niveles de prevalencia (58.4%) que en el resto de provincias (47%).
Menores prevalencias se observan en las ciudades del resto de la costa (37.5%), en comparación con la sierra
(57.1%) y la selva (44.8%). Cuando se revisan las prevalencias de vida según estrato socioeconómico, se aprecia
mayor prevalencia en los estratos medio (56.1%) y alto (55.6%).
Uso reciente de tabaco, es decir, consumo de tabaco (al menos una vez) en los últimos 12 meses es reportado por
el 26.0% de la población entrevistada, aproximadamente 3'241,581 personas, siendo estos más hombres (35.8%)
que mujeres (17.7%). Las mayores prevalencias de año se concentran en los grupos de entre 19 y 39 años. El 32%
de los jóvenes de 19 y 24 años reporta consumo de tabaco en el último año, seguidos por el grupo entre los 30 y
39 años (31.8%) y los de 25 a 29 años (30.8%). Es importante el 19.4%; es decir, uno de cada cinco adolescentes
entre los 12 y 18 años, señala haber fumado en el último año.
Según grado de instrucción, se observa una prevalencia de año mayor entre quienes cuentan con mayor nivel
educativo: nivel educativo superior (31.5%) y secundaria (21.2%). Se verificó según región de residencia, al igual
que en el caso de prevalencia de vida, una mayor prevalencia de año en Lima Metropolitana que en otras
ciudades. Cuando se revisan las prevalencias de otras ciudades, las más altas se ubican en sierra (31%), seguida
por el resto de ciudades de la costa (21.1%).
Respecto al consumo según estrato socioeconómico, se encuentra que los mayores consumos en el último año
se presentan en el estrato socioeconómico alto (28.1%), seguido del medio (26.7%). Menores prevalencias de
año, se observan en el grupo socioeconómico bajo (22.9%).
sienten siempre este deseo[indicando una posible adicción]
54.8%de peruanos lo han usado al menos una vez en la vida
26.0%de peruanos lo han usado al menos una vez en losúltimos 12 meses
16.8%de peruanos lo han usadoal menos una vez en losúltimos 30 días
6´827,632 personas
3´241,581 personas
2´088,232 personas
6.2%
18 años es la edad promedio del primer consumo
17.5 en hombres
18.8 en mujeres
0.9%
de quienes han usado tabacoalgunas veces han sentidoel deseo de hacerlo al despertar por las mañanas.
44.3%54.8%
Prevalencia de vida (usó por lo menos alguna vez en la vida)
Tabla 4.1: Perú 2013: Indicadores epidemiológicos sobre tabaco
Gráfico 4.1: Información epidemiológica sobre tabaco
50 51
Un dato importante encontrado en la encuesta es que el 43.1% de quienes usaron tabaco al menos una vez en la
vida lo consumieron hace más de 3 años, 9.4% hace más de un año pero menos de 3 años, 16.9% hace más de 1
mes pero menos de 1 año y 30.6% lo ha consumido hace menos de 30 días. Por otro lado, las cifras señalan
también, que no han usado tabaco durante los últimos 12 meses, el 48.4% de los encuestados.
La prevalencia de mes identifica al porcentaje de encuestados que reporta haber fumado al menos una vez
durante los 30 días previos a la fecha de entrevista, siendo también denominada “uso actual”. El 16.8% de
peruanos residentes en zonas urbanas (aproximadamente 2'088,232 personas) reportan uso actual de tabaco. El
porcentaje de uso actual en los hombres (24.7%) es mayor que en las mujeres (10.0%).
Las mayores prevalencias de uso actual se presentan en los grupos de mayor edad. Los mayores de 50 años
alcanzan una prevalencia de 18.6%, seguidos por el grupo de 40 a 49 años (18.6%) y los de 30 a 39 años (18.4%).
Sin embargo, nuevamente es importante resaltar un importante 15.1% de peruanos de menos de 18 años que
reportan consumo en el último mes y un grupo de jóvenes comprendidos entre los 19 y 24 años donde se
verifica una prevalencia de mes de 16.8%. Estos datos parecieran sugerir que el consumo de tabaco aumenta en
correspondencia con la edad.
89% lo hicieron hace más de 1 año
Finalmente respecto a incidencia, las cifras
evidencian que los nuevos casos de consumo de
incrementan en correspondencia con un estrato
socioeconómico mayor: nivel socioeconómico bajo
(9.2%), medio (12.4%) y alto (13.5%).
Es importante prestar atención a los datos
relacionados con la frecuencia de consumo de
tabaco, así como a los deseos de fumar al despertar
por la mañana, que pudieran estar evidenciando
niveles de dependencia al tabaco entre quienes lo
señalan. Al respecto, el 3.4% de personas que han
fumado tabaco en los últimos 12 meses reportó un
empleo diario; el 7.4% señaló fumar una vez a la
semana y el 8.2% una vez por mes. Además, el
20.6% indicó haber fumado solo 1 o 2 veces en ese
lapso; 8.6% dijo haberlo hecho de 3 a 6 veces y el
3.5% entre 7 y 11 veces.
Finalmente, el 6.2% de la población entrevistada
que ha usado tabaco señaló haber sentido alguna
vez la necesidad de fumar al despertar por las
mañana y 0.9% sienten siempre este deseo, siendo
este uno de los indicadores usados para evaluar los
niveles de dependencia a nicotina. Indicando que
un importante número de personas requieren
evaluaciones clínicas que establezcan la existencia
d e l f e n ó m e n o a d i c t i v o y s u s p o s i b l e s
consecuencias.
La prevalencia de mes se incrementó también en
paralelo con el nivel educativo: inicial/primaria
(7.8%); secundaria (13.1%) y superior (21.3%) y al
igual que en los indicadores anteriores, Lima
Metropolitana presenta mayor nivel de prevalencia
(17.0%), aunque el resto de ciudades presenta una
prevalencia bastante cercana (16.3%). La sierra
presenta comparativamente mayores niveles de
prevalencia (18.7%) que el resto de provincias
seguido por otras ciudades de la costa (14.8) y la
selva (14.2%).
Los encuestados del estrato socioeconómico alto
presentaron mayor prevalencia de mes en el
consumo de tabaco (20.9%) frente a los del nivel
medio y alto (15.9% y 15% respectivamente).
Cuando se revisan los porcentajes de nuevos casos
(reporte de primer consumo de tabaco en los 12
meses previos a la realización de la encuesta), se
encuentra que la incidencia anual fue de 11.8%,
considerablemente mayor entre los hombres
(19.8%) que entre las mujeres (71%).
Por otro lado, los grupos que presentaron los
mayores niveles de incidencia fueron los de menor
edad: El grupo de 12 a 18 años presentó una
incidencia anual de 15.5% seguido del grupo
comprendido entre los 19 y 24 años (14.5%),
disminuyendo conforme las edades avanzan: 25 a
29 años (12%), 30 a 39 años (10.6%), 40 a 49 años
(10%) y mayores de 50 años (5.7%).
Este indicador se incrementa también según el
nivel educativo, desde 8.6% % para el nivel
primario hasta 13% en el nivel superior. Por otro
lado, revisándose la incidencia según región de
residencia, Lima Metropolitana es la ciudad que
reporta la mayor cantidad de nuevos casos de
consumo (14.1%) en comparación con las otras
ciudades (7.6%). Asimismo, la sierra es la que
presenta en provincias los mayores niveles de
incidencia de tabaco (13.5%).
6.5%de encuestados usaron tabacopor primera vez 30 días antesde la encuesta.
4.6% lo hicieron hace más de un mes pero menos de un año.
El último uso de quiénes usaron tabacoal menos una vez en la vida fue:
[43.1%] hace más de 3 años
[ 9.4% ] hace más de 1 año pero menos de 3 años
[16.9%] hace más de 1 mes pero menos de 1 año
[30.6%] hace menos de 30 días
Consumo en el último año:
[3.4%] Diariamente
[7.4%] Una vez por semana
[8.2%] Una vez por mes
[3.5%] 7 - 11 veces
[8.6%] 3 - 6 veces
[20.6%] 1 - 2 veces
[48.4%] No han usado durante los últimos 12 meses
Gráfico 4.2: Perú 20113: Información epidemiológica sobre tabaco
52 53
Marihuana
La marihuana es una planta de origen asiático, de textura fibrosa y aromática. Su
existencia supera los 5,000 años. Históricamente sus fibras fueron utilizadas en la
fabricación de cuerdas y ropa, y con sus semillas se elaboraba aceite y resina. Sus
efectos psicoactivos modifican el estado de ánimo, la percepción, los procesos
cognitivos y el estado de conciencia, generando un efecto sedante-alucinógeno.
Se reconocen tres especies: cannabis índica, cannabis ruderalis y cannabis sativa.
La marihuana contiene más de 400 ingredientes químicos activos, de los cuales
casi 70 son cannabinoides responsables de los efectos psicotrópicos. De estos, el
más importante es el Do-9-tetrahidrocannabinol (THC), que fue identificado en
1940 y sintetizado en el laboratorio en 1967.Según el último informe de la
UNODC (2012), la marihuana es la droga ilícita más consumida mundialmente,
existiendo entre 119 y 224 millones de consumidores, manteniéndose estable su
consumo.
Existe evidencia para sostener que la mayor parte de la marihuana actual ha
sufrido cambios en cuanto a sus propiedades, logrando variedades con efectos
hasta 20 veces más elevados que las empleadas en el pasado.
Uno de los aspectos más preocupantes sobre el consumo de la marihuana en el
mundo, del cual el Perú no está exento, es la disminución de la edad de inicio. Hoy
está suficientemente documentado que un inicio antes de los 16 años
incrementa considerablemente el riesgo de consecuencias adversas en el orden
de la salud mental del adolescente. Del mismo modo, preocupa la posible
asociación con déficits neurológicos que en los adolescentes pueden
manifestarse como bajo rendimiento y la deserción escolar temprana.
5
55
Relajación.
Desinhibición.
Enlentecimiento.
Sequedad de la boca.
Ojos brillantes y enrojecidos.
Alteraciones sensoriales.
Dificultad en expresión oral, memoria inmediata y concentración.
Ansiedad, paranoia o pánico.
A dosis altas puede producir ilusiones visuales y somnolencia.
EFECTOS DE LA INTOXICACIÓN
Principio activo: Tetra-hidro-cannabinol delta -9 [THC].
Características: Sustancia que generalmente es fumada pero también puede ser ingerida (pasteles, galletas o infusiones).
Producción: Se produce a partir de la planta conocida como cannabis sativa, indica y rudelaris. Es conocida como 'pito', 'hierba', 'tola' y 'grass' entre otros nombres.
Presentación: Hojas secas, flores y pequeños tallos de mata que son empleados de la misma forma que el tabaco.
EFECTOS NO DESEADOS
Aumento del apetito.
Taquicardia.
Sudoración.
Insomnio.
Descoordinación en movimientos.
Apetito voraz.
Déficit en funciones cognitivas (atención, concentración y memoria).
Déficit motivacional.
Actitud pro-consumo.
Problemas de rendimiento académico y/o laboral.
Riesgo de psicosis/esquizofrenia en consumidores con patologías de salud mental, como condición previa a la iniciación del consumo.
CONSECUENCIAS
La alta tasa de consumo ha favorecido la baja percepción del riesgo.
A dosis altas puede generar accidentes de tránsito y de índole laboral.
Alteraciones en el sistema familiar.
En el caso particular de los efectos del abuso de la marihuana en adolescentes, existe evidencia científica sobre
los efectos negativos de corto y mediano plazo sobre los procesos cognitivos en el desempeño escolar y social:
disminución en el rendimiento (Ramström, 2004, Puighermanal et al., 2009,Swedish National Institute of Public
Health, 2008, NIDA, 2007), mayores índices de conflictividad (Copeland et al., 2009), ausentismo y deserción
(Copeland et al., 2004).
En el primer caso se señala deficiencias en la
memoria, atención y concentración, organización
de l a in fo rmac ión y en es t ra teg ias de
p r o c e s a m i e n t o . E s t a s a l t e r a c i o n e s
neuropsicológicas pueden relacionarse con
cambios funcionales del flujo sanguíneo y
metabólico en regiones pre frontales y cerebelares,
observados en neuroimágenes de usuarios
jóvenes con consumo intenso y prolongado.
En cuanto a los efectos de la marihuana en la
corteza prefrontal, al parecer el impacto de la
toxicidad de la marihuana en púberes y
adolescentes está dirigido al daño de las
principales funciones de esta región del cerebro,
como la capacidad de planificación, de trabajo con
propósito y control e inhibición de respuestas. Hay
que precisar que en la corteza frontal se ubica la
gama de conductas humanas relacionadas con la
dimensión ética del individuo.
Al revisar los indicadores epidemiológicos del
presente estudio sobre el consumo de marihuana
en el ámbito nacional se destacan varios aspectos.
Un primer elemento es que se confirma una vez
más que la cannabis sigue siendo la sustancia ilícita
más consumida en el país con una prevalencia de
vida de 7.5%, indicando que 940,602 peruanos
admitieron haber consumido marihuana al menos
una vez en la vida). Además, se apreció que las
tasas más altas de prevalencia de vida, prevalencia
anual y uso actual se encuentran en personas con
edades entre los 19 y 24 años; siendo estos
indicadores menores en los demás grupos etáreos.
El grado o intensidad de ofrecimiento es una de las
principales aristas de la disponibilidad de las
drogas, habiéndose constituido en uno de los
factores de riesgo más fuertes en el Perú. Así, el
ofrecimiento de marihuana alcanza el 26.4%,
siendo mayor en los varones (38.1%) que en las
mujeres (16.5%), con un incremento según nivel de
instrucción y mayor en Lima Metropolitana (31.5%)
que en el resto de regiones.
Considerando que los rangos de edades de la
muestra encuestada fue de 12 a 65 años, se aprecia
que la edad media de inicio del consumo de
marihuana fue de 18.7 años, siendo menor la edad
en los varones (18.6 años) que en las mujeres (19.2
años). Se observó además que la edad de inicio es
ligeramente mayor en el grupo con instrucción
superior (18.8 años); sin diferencias importantes
según región.
Respecto al sexo de los encuestados, si bien los
varones son los que obtienen las tasas más altas de
ofrecimiento (38.1%) y prevalencia de vida (13.8%),
los mismos indicadores en las mujeres encuestadas
son más bajos aunque no marginales dado que se
determinó que la prevalencia de vida de marihuana
en la población femenina fue de (2.2%) con una
tasa de ofrecimiento del 16.5%. Estos datos
sugieren que el grado de involucramiento de las
mujeres en el consumo de cannabis y la intensidad
del ofrecimiento hacia este sector confirma un
lento proceso de feminización en el consumo de
drogas ilícitas.
En lo que se refiere a los grupos de edades de los
encuestados se aprecia que son los adolescentes
(19–24 años) y jóvenes (25–29 años) quienes han
recibido mayor cantidad de ofrecimientos para el
consumo de mar ihuana (32 .6% y 34 .3%
respectivamente), y son también los grupos donde
se encuentra las tasas de prevalencia de vida más
altas (10.5% y 9.4% respectivamente). No deja de
ser importante que el 21.4% del grupo conformado
por púberes y adolescentes de 12 a 18 años hayan
recibido ofrecimiento de consumo y presenten una
prevalencia de vida del 4.0%.
Otro indicador a comentar es el referido a la tasa de
incidencia, es decir los casos de nuevos
Información sobre marihuana
56 57
CARACTERÍSTICAS
Sexo
Mujer
Edad
12 a 18 años
Hombre
19 a 24 años
30 a 39 años
40 a 49 años
50 a más
25 a 29 años
Nivel Educativo
Secundaria
Superior
Región
Inicial, primaria
OPORTUNIDAD DEOFRECIMIENTO
[ % ]
38.1
16.5
21.4
20.6
34.3
28.3
22.6
15.4
23.1
30.8
13.8
2.2
4.0
7.3
9.4
8.2
5.9
2.7
6.5
9.1
Provincias
Resto costa
Lima Metropolitana 8.931.5
15.7
12.6
4.7
4.0
Selva
Estratosocioeconómico
Sierra 5.417.5
17.8 4.4
Bajo
Medio
20.7
27.2
5.1
8.6
Alto 7.931.3
32.6 10.5
2.4
0.4
1.4
0.1
1.4
1.0
0.1
0.1
0.7
2.3
1.4
1.3
1.0
1.8
0.8
1.3
1.3
1.5
4.6
Total 26.4 7.5 1.4
PREVALENCIADE VIDA
[ % ]
PREVALENCIADE AÑO
[ % ]
1.2
0.3
0.2
0.0
1.1
0.7
0.1
0.0
0.5
1.1
0.8
0.6
0.5
0.7
0.3
0.8
0.8
0.6
2.4
0.7
18.6
19.2
15.5
19.4
18.7
19.5
19.7
16.9
18.5
18.8
18.8
18.6
18.9
18.2
18.8
18.1
19.1
18.2
18.0
18.7
EDAD PROMEDIO DEPRIMER CONSUMO
[ AÑOS ]
consumidores durante los 12 meses previos a la fecha de entrevista. Para el caso de la marihuana la tasa de
incidencia anual fue 0.8%, siendo mayor en los varones (1.4%) que en la mujeres (0.3%); registrándose las tasas
más altas en los grupos etáreos de 19 a 24 años (2.7%) y de 12 a 18 años (1.3%). Por otro lado, se observó que la
tasa de incidencia de la marihuana se incrementa según el nivel de instrucción, llegando a un valor de 1.1% en
aquellos con educación superior. También se observa que este indicador alcanza el 1.0% en Lima Metropolitana.
Estos resultados guardan relación con el indicador nivel educativo de la muestra estudiada; así, el 30.8% de los
que tienen nivel de instrucción superior recibieron ofrecimiento de consumo y obtienen una prevalencia de vida
de 9.1%, mientras que el 23.1% de los que tienen nivel de instrucción secundaria, han recibido ofrecimiento y
obtienen una prevalencia de vida de 6.5%. En cuanto a quienes tienen grado de instrucción de inicial o primaria,
el 15.4% han recibido ofrecimiento y obtienen una
prevalencia de vida de 2.7%. Estos últimos
resultados si bien están por debajo de los dos
primeros grupos preocupan por tratarse de una
población especial; más aun sabiendo el grave
impacto del consumo de marihuana cuando la
iniciación es precoz.
Ahora bien, se observa también que es en Lima
Metropolitana donde se presenta la tasa de
prevalencia de vida más alta de consumo de
marihuana (8.9%), con un ofrecimiento del orden
de 31.5%, mientras que las otras regiones obtienen
una prevalencia de vida de 4.7% y una tasa de
ofrecimiento del 15.7%. Llama la atención que la
tasa de ofrecimiento tanto en la sierra como en la
s e l v a s e a n s i m i l a r e s , 1 7 . 5 % y 1 7 . 8 % ,
respectivamente, confirmándose de esta manera
la amplia disponibilidad de la marihuana en estas
zonas aunque las prevalencias de vida aparecen
distantes (5.4% y 4.4% respectivamente).
En cuanto al ofrecimiento y la prevalencia de vida
del consumo de marihuana considerando los
estratos sociales se encuentra que el 31.3% de los
encuestados de estrato social alto han recibido
ofrecimiento, determinándose que el 7.9% de ellos
consumió por lo menos una vez en la vida;
mientras que al 27.2% de los que pertenecen al
estrato medio recibieron ofrecimiento y el 8.6% de
ellos la consumieron. No deja de ser importante
que de la muestra de estrato bajo, el 20.7% recibió
ofrecimiento y el 5.1% de ellos reconoció que
consumió marihuana al menos una vez en la vida.
INCIDENCIAANUAL
[ % ]
PREVALENCIADE MES
[ % ]
1.4
0.3
1.3
0.0
1.2
0.0
0.0
0.0
0.4
1.3
1.0
0.4
0.2
0.8
0.2
0.4
0.8
1.3
2.7
0.8
Cusco
Lima Metropolitana
Tingo María
Arequipa
Tacna
Trujillo
Tarapoto
Iquitos
Ayacucho
Pucallpa
Ica
Piura
Huancayo
9.7
8.9
7.2
5.8
5.4
5.1
5.1
4.9
3.2
3.0
2.2
2.1
1.3
Ciudad 2013
9 - 9.9
8 - 8.9
7 - 7.9
5 - 5.9
4 - 4.9
3 - 3.9
2 - 2.9
1 - 1.9
Rango
Tabla 5.1: Perú 2013: Indicadores epidemiológicos sobre marihuana
Perú 2013: Prevalencia de vida de marihuana según ciudad
Gráfico 5.1
58 59
Como se indicó, el 26.4% de los encuestados recibieron ofrecimientos de consumo pero solo 3 de cada 10,
aceptaron y consumieron la droga. También se observa que en los últimos 30 días 89,836 personas reconocieron
haber consumido marihuana. De los que informaron haber consumido alguna vez en su vida, el 9.6% lo hizo por
última vez hace menos de 30 días, 8.6% hace más de 1 mes pero menos de 1 año, 13.0% hace más de 1 año pero
menos de 3 años y, finalmente, 68.9% hace más de 3 años.
Respecto a la edad de inicio del consumo de la marihuana, tal como ya se mencionó, este se ubica en el orden de
los 18 años, dato que guarda semejanza con los obtenidos por DEVIDA (2010) en población general donde se
determinó que la edad promedio se ubicaba entre los 12 y 23 años, encontrándose que el 50% de los que la
consumen se iniciaron en su uso entre los 16 y 19 años, mientras que el 25% la consumió por primera vez antes
de los 16 años.
7.5%
1.4%
0.7%lo han usado al menos 1 vez en los últimos 30 días
940,602 personas
170,443 personas
89,836 personas
18.7 años es la edad promedio del primer consumo
18.6 en hombres 19.2 en mujeres
lo han usado al menos1 vez en los últimos 12 meses
lo han usado al menos una vez en la vida
26.4%de peruanos recibieron al menos un ofrecimientopara consumirla
3 10de cada ACEPTARON
Consumo en el último año
De los que han usado al menosuna vez en la vida:
lo hizo por última vezhace menos de 30 días 9.6%
8.6%
13.0%
68.9%
hace más de 1 mespero menos de 1 año
hace más de 1 añopero menos de 3 años
hace más 3 años
El uso de alguna vez en la vida:
Es mayor en los hombresque en las mujeres
Es mayor en el grupo de 19 a 24 años
Se incrementa con el nivel educativoinicial / primaria
secundariay superior
Es mayor en Limaque en provincias
Es mayor en el estratosocioeconómico medio
[13.8%][2.2%]
[10.5%]
[2.7%][6.5%][9.1%]
[8.9%][4.7%]
[8.6%]
Gráfico 5.2: Perú 2013: Información epidemiológica sobre marihuana
60 61
Drogas CocaínicasPasta Básica y Clorhidrato de Cocaína6
La Cocaína
La cocaína es un alcaloide, presente en las hojas de la planta de la coca
(Erytroxilum coca coca, Erytroxilum coca var Truxillensis y Erytroxilum coca var
Ipadú) que crecen en la región andina y selvática de Peru, Bolivia y Colombia
principalmente. Crece en los valles en los valles templados a partir de los 1,500 m.
sobre el nivel del mar. La variante Ipadú se ha extendido en su cultivo a la zona de
selva alta y recientemente al llano amazónico.
La cocaína es un poderoso estimulante del sistema nervioso central, de gran
poder adictivo. Existen diferentes formas de abuso de la cocaína: hojas de coca,
sulfato de cocaína (PBC), clorhidrato de cocaína y cocaína base o crack, que
condicionan la farmacocinética, la actividad farmacológica, la toxicidad y el
grado de adicción de la droga. En el Perú la cocaína se fuma (PBC) o se esnifa o
aspira por la nariz fundamentalmente (clorhidrato de cocaína).
La cocaína es un potente inhibidor de la recaptación tipo I de noradrenalina,
dopamina y serotonina, en neuronas cerebrales, lo que facilita la acumulación de
esos neurotransmisores en la hendidura sináptica. Las acciones farmacológicas
se caracterizan por manifestaciones de actividad noradrenérgica y
dopaminérgica fundamentalmente, que afecta a los distintos aparatos; la
intoxicación aguda se manifiesta por una hiperactividad de estos sistemas.
63
La cocaína es una de las drogas conocidas más
antiguas. El uso ritual de la hoja de coca y su
empleo en las comunidades andinas se ha
reconocido en las culturas precolombinas
peruanas desde 500 años antes de cristo. En un
principio, la coca se empleaba en ceremonias
religiosas para introducir el trance de meditación y
como ayuda para comunicarse con la naturaleza.
Los incas reservaban el consumo de la coca para
los nobles y sacerdotes y aquellos que gozaban de
un extremo favor imperial les permitía consumirla.
El cultivo de la planta de coca en el incanato se
efectuaba para tributo al inca y la nobleza.
Después de la "conquista" del Perú por los
españoles, el uso de la coca estuvo prohibido,
hasta que estos últimos descubrieron que la
población originaria podía trabajar más con
menos alimento y resistir mejor los esfuerzos
físicos cuando usaban la droga. Dicha práctica
llegó a convertirse en un hábito que aún persiste
en la actualidad (coqueo, chacchado o acullico).
La cocaína posee un intenso efecto anestésico
local, descubierto en París por el médico peruano
Tomás de Moreno y Maíz a mediados del siglo 19.
Veinte años después, Carl Koller comenzó a usar la
cocaína como anestésico local en oftalmología y
poco después su uso se extendió a todas las
especialidades quirúrgicas. Debido a su toxicidad y
la capacidad de producir adicción, la cocaína fue
reemplazada a comienzos del siglo 20 por otras
sustancias anestésicas locales no adictivas, y en la
actualidad su uso como anestésico local ha
quedado muy restringido.
En 1884, Sigmund Freud inició una serie de
experimentos clínicos y publicó numerosos
artículos sobre los supuestos "efectos benéficos"
del consumo del alcaloide cocaína en humanos,
hasta sufrir el mismo el proceso adictivo,
retractándose finalmente por completo de sus
anteriores observaciones y afirmaciones.
Hay dos formas químicas de la cocaína que suelen
consumirse: la sal (clorhidrato, que es soluble en
agua) y los cristales de cocaína o base, conocida en
inglés como “freebase” (que no son solubles en
agua). El clorhidrato, o la forma en polvo de la
cocaína, se consume de forma inyectada o
aspirada (esnifada) por la nariz (“snorting”).
Los cristales de cocaína o freebase han sido
procesados con amoniaco o bicarbonato sódico y
agua y luego calentados para eliminar el
clorhidrato y producir una sustancia que se puede
fumar. El término “crack”, dado a la cocaína
altamente purificada de cocaína, luego de la
combinación con solventes orgánicos y
evaporación al calor, contiene más del 98% de
cocaína pura, y forma una capa blanca sobre la
superficie caliente empleada para la evaporación.
Al enfriarse la capa blanca se cuartea y se
denomina crack. Esta forma altamente purificada
es administrada mediante el fumado del crack en
pipas especiales de vidrio. En el Perú el uso de
crack es marginal e infrecuente. En países del
hemisferio norte existe un mayor consumo de
crack que en los países del hemisferio sur.
El clorhidrato de cocaína (¨coca¨) fue en la primera
mitad del s iglo 20, una droga uti l izada
principalmente por la elite económica pudiente de
las grandes ciudades peruanas, utilizándose
principalmente la vía inhalatoria (polvo aspirado).
Era una droga relativamente cara.
En los años 70 aparece en el mercado peruano un
producto intermedio extraído de la hoja de coca: la
Pasta básica (PBC, pasta), un producto sólido
pastoso, que contiene contaminantes propios de
proceso productivo, y al cual después del paso por
la cadena de distribución y comercialización, del
traficante mayorista al microcomercializador se le
van incorporando diferentes adulterantes.
Así cualquier polvo blanco, polvo de hornear, talco
o hasta incluso cemento, es adicionado a la PBC
con la finalidad de aumentar peso y obtener mayor
ganancia. La PBC que se vende en las calles de las
ciudades peruanas contiene por lo general la
tercera parte del peso de PBC, y dos terceras parte
de adulterantes. La pasta Básica de cocaína es
insoluble en agua y soluble en grasas. Por ello su
consumo es por la vía inhalatoria (fumado con
cigarrillos de tabaco).
En la actualidad la PBC es un producto de muy bajo
costo en las ciudades peruanas. Los investigadores
de mercado reportan que se puede obtener hasta 5
ketes de PBC (unidad de aproximadamente 300mg
de PBC) por un sol. Su consumo desencadenó una
epidemia de grandes proporciones entre los
jóvenes peruanos en las décadas de los 70,80 y 90
del siglo pasado. Las acciones de interdicción, el
intenso trabajo preventivo desarrollado en el Perú
en la década del 90 y la primera década de este
siglo han traído consigo la atenuación de la
epidemia de consumo de PBC en los jóvenes en la
última década.
El clorhidrato de cocaína (denominado ¨cocaína¨,
polvo, nieve) Ha ido disminuyendo de precio
progresivamente en los últimos años de 20 soles
por gramo hasta 5 soles que es el precio promedio
actual en Lima Metropolitana. El factor precio y la
mayor demanda de producción para exportación
del clorhidrato, han traído consigo una tendencia
al crecimiento del consumo del clorhidrato entre
los jóvenes peruanos.
Las principales vías de administración de la cocaína
son oral (coqueo), nasal (esnifado, aspirado nasal, e
inhalatoria (pulmonar, fumado PBC y crack). La
forma de administración nasal, conocida como
“e s n i f a r ” o “ s n o r t i n g ” , e s e l p r o c e s o
> 5
3 - 3.9
2 - 2.9
1 - 1.9
< 1
Rango
Ciudad 2013
5.1
3.5
3.2
3.0
2.6
2.6
2.2
1.9
1.5
1.2
0.6
0.4
0.2
Lima Metropolitana
Iquitos
Tingo María
Arequipa
Tacna
Tarapoto
Pucallpa
Cusco
Trujillo
Ica
Piura
Huancayo
Ayacucho
Perú 2013: Prevalencia de vida de drogas cocaínicas
según ciudad
Gráfico 6.1
64 65
cantidades tóxicas de la droga, con la posibilidad
de que ocurra una emergencia aguda de tipo
cardiovascular o cerebrovascular y convulsiones,
cualquiera de las cuales puede ocasionar la muerte
súbita. El uso continuado de estas formas de la
droga se asocia a severa adicción.
Los efectos de la cocaína se presentan casi
inmediatamente después de una sola dosis y
desaparecen en cuestión de minutos o dentro de
una hora. Los que consumen cocaína en
cantidades pequeñas generalmente se sienten
eufór icos , energét icos , conversadores y
mentalmente alertas, particularmente con relación
a las sensaciones visuales, auditivas y del tacto. La
cocaína también puede disminuir temporalmente
el apetito y la necesidad de dormir. Algunos
consumidores sienten que la droga les ayuda a
realizar más rápido algunas tareas simples, tanto
físicas como intelectuales, mientras que a otros les
produce el efecto contrario.
Los efectos fisiológicos a corto plazo que resultan
del consumo de cocaína incluyen contracción de
los vasos sanguíneos, dilatación de las pupilas y
aumento en la temperatura corporal, la frecuencia
cardiaca y la presión arterial. Si se usan cantidades
mayores se puede intensificar el “high” del usuario,
pero también puede llevar a un comportamiento
más extravagante, errático y violento. Se puede
observar también desasosiego, irritabilidad y
ansiedad, temblores, vér tigos, espasmos
musculares o paranoia. Además, puede haber
graves complicaciones médicas asociadas con el
abuso de la cocaína. Entre las complicaciones más
frecuentes se encuentran algunos efectos
cardiovasculares como alteraciones en el ritmo
cardiaco y ataques al corazón (arritmias, crisis
hipertensiva, infarto de miocardio agudo); algunos
efectos neurológicos incluyendo accidentes
cerebrovasculares, convulsiones, dolores de
cabeza y hasta coma; y complicaciones
gastrointestinales, como dolor abdominal y
náusea. En raras ocasiones, puede ocurrir la
muerte súbita la primera vez que se prueba la
cocaína o de forma inesperada al consumirla
subsiguientemente. Las muertes ocasionadas por
la cocaína suelen ser el resultado de un paro
cardiaco o de convulsiones seguidas por un paro
respiratorio.
de inhalar la cocaína en polvo (clorhidrato) por la
nariz, de donde pasa directamente a la sangre a
través de las membranas nasales. También se
puede aplicar el clorhidrato directamente sobre las
mucosas (oral, encías, nasal, vaginal o rectal). La
inyección o la administración intravenosa del
clorhidrato de cocaína transporta la droga
directamente a la sangre aumentando así la
intensidad de su efecto.
Al fumar la PBC o el crack, se inhala el vapor o el
humo que contiene la cocaína vaporizada
(sublimada por el calor), que llega a los pulmones,
donde es absorbido a través de los bronquiolos
pulmonares hacia la sangre a la misma velocidad
que cuando se inyecta por vía endovenosa. El
efecto euforizante resultante es casi inmediato, y
es la razón por la cual la popularidad del crack
aumentó enormemente a mediados de los años
ochenta.
La forma en que se administra la cocaína
determina el tiempo que dura el efecto inmediato
de euforia. Mientras más rápida es la absorción,
más intenso es el “high” o euforia resultante; pero
al mismo tiempo, cuanto más rápida es la
absorción, menor es la duración del efecto de la
droga. El “high” que se produce al esnifar la droga
se demora en llegar pero puede durar de 15 a 30
minutos. En contraste, los efectos que se obtienen
fumando la cocaína pueden durar de 5 a 10
minutos, esto lleva al pastómano a fumar
numerosas dosis repetidas de PBC dentro de una
misma sesión.
El consumo de cocaína (pasta, clorhidrato o crack)
puede ir desde su uso ocasional a un consumo
repetido o compulsivo, con una variedad de
patrones entre estos dos extremos. Fuera de su
uso para fines médicos, no existe una manera
segura de consumir cocaína. . Cualquier método
de consumo puede causar la absorción de
66 67
Pasta Básica de Cocaína (PBC)
Al revisar los principales indicadores epidemiológicos del consumo de PBC en el Perú se destaca que el 2.9% de
la población peruana residente en las grandes ciudades del país (357,805 personas) admitieron haber
consumido PBC alguna vez en su vida. La prevalencia de vida, se incrementa en relación directa con la edad, y es
mayor en varones (5.3%) que en mujeres (0.8%).
La prevalencia de último año y el uso actual son mayores en el grupo de 25 a 29 años (2.3%).
La tasa de incidencia anual es mayor en los varones (0.2), que en las mujeres (0.01). La incidencia es mayor en el
grupo de 19 a 29 años, y en las ciudades de la selva.
A dosis moderadas:
Dilatación pupilarDesinhibiciónEuforiaSudoración InfatigabilidadMayor energíaExcitación
A dosis altas:
Seguridad Ansiedad intensa. Ilusiones y alucinaciones. Ausencia de sueño, hambre y fatiga. Gran euforia. Excitación. Incremento de la temperatura.Aceleración del ritmo cardiaco y presión arterial.
EFECTOS DE LA INTOXICACIÓN
Principio activo: Cocaína.
Características: Su consumo es fumado.
Producción: Se produce a partir de las hojas de la coca (erythroxylum coca) y sustancias químicas empleadas en la extracción de los alcaloides. Es conocida como 'pasta' o 'PBC' en el Perú, 'Bazuco' en Colombia.
Presentación: Sustancia pastosa de color blanquecino a marron oscuro. Se suele vender en pequeñas unidades de aproximadamente 300 gramos denominada 'Kete' envueltas en papel.
EFECTOS NO DESEADOS
Pérdida de la capacidad de autocontrol frente a la droga.
Paranoia.
Insomnio, falta de apetito.
Problemas en la alimentación y pérdida de peso.
Disfunción cardiovascular.
Temblores y movimientos involuntarios.
Infecciones.
CONSECUENCIAS
Ausentismo o bajo rendimiento académico o laboral.
Internalización de conductas anti sociales o psicopáticas.
Problemas con la familia, con la sociedad, con la policía y la justicia.
La edad media del primer consumo de PBC (20.1
años) fue mayor que el registrado con marihuana
(18.7 años). La edad promedio de inicio del
consumo de PBC es mayor en los hombres (20.2
años) que en las mujeres (19.5 años). La edad
media del primer consumo se incrementa con el
nivel educativo, y es similar (alrededor de 20 años)
en todas las regiones del país, a excepción de la
sierra donde la edad promedio del primer
CARACTERÍSTICAS
Sexo
Mujer
Edad
12 a 18 años
Hombre
19 a 24 años
30 a 39 años
40 a 49 años
50 a más
25 a 29 años
Nivel Educativo
Secundaria
Superior
Región
Inicial, primaria
OPORTUNIDAD DEOFRECIMIENTO
[ % ]
26.4
7.8
10.2
12.7
20.4
19.8
15.1
8.4
15.4
18.7
5.3
0.8
1.8
3.5
3.1
3.3
3.4
2.4
3.6
2.5
Provincias
Resto costa
Lima Metropolitana 3.519.9
8.9
8.3
1.6
1.2
Selva
Estratosocioeconómico
Sierra 1.68.1
11.5 2.5
Bajo
Medio
12.7
17.7
2.3
2.9
Alto 3.417.3
19.7 1.9
0.9
0.1
0.0
0.0
0.3
1.5
0.2
0.3
0.3
0.7
0.5
0.3
0.3
0.1
0.7
0.5
0.6
0.1
0.4
Total 16.3 2.9 0.5
PREVALENCIADE VIDA
[ % ]
PREVALENCIADE AÑO
[ % ]
0.2
0.0
0.0
0.0
0.0
0.2
0.0
0.0
0.1
0.1
0.1
0.1
0.1
0.0
0.2
0.2
0.1
0.0
0.3
0.1
20.2
19.5
17.5
23.6
17.5
20.4
20.4
18.8
20.0
20.5
20.0
20.4
20.3
20.8
20.0
19.5
20.7
19.3
17.2
20.1
EDAD PROMEDIO DEPRIMER CONSUMO
[ AÑOS ]
INCIDENCIAANUAL
[ % ]
PREVALENCIADE MES
[ % ]
0.2
0.0
0.0
0.0
0.3
0.1
0.0
0.0
0.0
0.2
0.1
0.1
0.0
0.0
0.3
0.1
0.1
0.0
0.3
0.1
consumo es más tardía (20.8 años). La edad
promedio de inicio de consumo de PBC es mayor
cuanto mayor es el nivel educativo.
La prevalencia de vida no guarda relación directa
con el nivel de estudios, siendo mayor en aquellos
que tienen estudios secundarios con respecto a los
que tienen estudios primarios o universitarios.
Información sobre pasta básica de cocaína Tabla 6.1: Perú 2013: Indicadores epidemiológicos sobre pasta básica de cocaína
68 69
años seguido de la región selva, donde el
ofrecimiento alcanza al 11.5% de la población.
En relación al consumo en el último año el 3.5% ha
consumido hace más de 30 días y 12.4% hace más
de un mes pero menos de un antes de un año.
La prevalencia de vida de la PBC es mayor en Lima
(3.5%), donde 293,869 habrían consumido esta
droga alguna vez en su vida. Le siguen las ciudades
de la selva y Arequipa: Iquitos (3.3%, 11,974
consumidores ) , A requ ipa (2 .5%, 20463
consumidores), Tingo María (2.5%), Pucallpa
(1.8%) y Tarapoto (2%). Las ciudades de la selva
registran un incremento progresivo de la
prevalencia de vida en los últimos años . En la
ciudad del Cusco, la prevalencia de vida de la PBC
alcanzó 1.1% y en Huancayo 0.4%
2.9%
0.5%
0.1%Prevalencia de consumoúltimo mes [uso actual]
357,805 personas
56,749 personas
12,422 personas
20.1 años es la edad promedio del primer consumo
20.2 en hombres 19.5 en mujeres
Prevalencia de año [usó alguna vez en los últimos 12 meses]
16.3%de peruanos recibieron al menos un ofrecimientopara consumirla
2 10de cada ACEPTARON
Consumo en el último año
De los que han usado al menos una vez en la vidael último consumo fue:
hace más de 3 años 74.9%
12.4%
9.2%
3.5%
hace más de 1 mespero menos de 1 año
hace más de 1 añopero menos de 3 años
hace más 30 días
El uso de alguna vez en la vida:
Es mayor en los hombresque en las mujeres
Es ligeramente mayor cuanto mayor edad; desde
hasta
Es mayor en personas con secundariaque en aquellas con primaria
y superior
Es mayor en Limaque en provincias
En provincias, es mayor en la selvaque en la sierra
y en el resto de costa
Se incrementa a la par que el nivelsocioeconómico bajo
medioy alto
[5.3%][0.8%]
[1.8%]
[3.6%][2.4%][2.5%]
[3.5%][1.6%]
[2.5%]
Prevalencia de vida[usó alguna vez en la vida]
[3.5%]
[1.6%][1.2%]
[2.3%][2.9%][3.4%]
En estudios previos se reportó que la elevada
disponibilidad de la PBC en las ciudades peruanas
es graficada por la oportunidad de ofrecimiento, y
constituye el principal factor de riesgo para la
i n i c i a c ión en e l consumo de PBC . E s
particularmente importante que de cada 10
personas a las que les ofertaron PBC, 2 aceptaron
consumirla. En este estudio se registra que el
ofrecimiento de PBC es mayor (4 a 1) en hombres
que en mujeres. El 10.2% de los jóvenes de 12 a 18
años recibieron un ofrecimiento de PBC alguna vez
en su vida.
El ofrecimiento de PBC es mayor en los grupos de
edades entre 25 a 29 años (20.4%), seguido de los
de 30 a 39 años (19.8%) y de 19 a 24 años (19.7%).
El ofrecimiento es mayor en las ciudades de la
región sierra (20.8%) con respecto a las demás
regiones y a Lima metropolitana (rango: 20% a
20.4%).
El ofrecimiento de PBC es mayor en el estrato
medio y en el alto (17.3% a 17.7%), que en el estrato
bajo (12.7%), y alcanza al 19.9% de la población de
Lima Metropolitana en el rango de edad de 12 a 65
Ciudad 2013
3 - 3.9
2 - 2.9
1 - 1.9
< 1
Rango
Lima Metropolitana
Iquitos
Arequipa
Tingo María
Tarapoto
Tacna
Pucallpa
Trujillo
Cusco
Ica
Huancayo
Piura
Ayacucho
3.5
3.3
2.5
2.5
2.0
1.9
1.8
1.5
1.1
0.6
0.4
0.3
0.1
Gráfico 6.2: Perú 2013: Información epidemiológica sobre pasta básica de cocaína
Prevalencia de vida de pasta básica de cocaína según ciudad
Gráfico 6.3
70 71
Clorhidrato de Cocaína (“Cocaína”)
Sexo
Mujer
Edad
12 a 18 años
Hombre
19 a 24 años
30 a 39 años
40 a 49 años
50 a más
25 a 29 años
Nivel Educativo
Secundaria
Superior
Región
Inicial, primaria
15.1
4.3
2.5
8.4
13.6
12.4
8.0
3.5
8.1
11.5
4.1
0.9
0.6
2.3
2.0
3.6
2.4
2.2
2.0
2.8
Provincias
Resto costa
Lima Metropolitana 3.111.4
4.8
5.5
0.8
0.6
Selva
Estratosocioeconómico
Sierra 0.74.0
5.2 1.5
Bajo
Medio
5.8
11.1
1.6
2.7
Alto 2.69.1
10.3 2.8
0.3
0.0
0.0
0.0
0.4
0.0
0.1
0.3
0.0
0.3
0.2
0.2
0.1
0.1
0.4
0.1
0.2
0.0
0.5
Total 9.3 2.4 0.2
0.1
0.0
0.0
0.0
0.2
0.0
0.0
0.0
0.0
0.1
0.0
0.0
0.0
0.0
0.0
0.0
0.1
0.0
0.0
0.0
22.3
21.3
17.6
27.4
20.3
22.6
21.4
20.0
24.4
21.0
21.9
23.2
20.6
24.8
23.6
19.3
23.7
20.1
18.8
22.1
0.3
0.1
0.0
0.0
0.2
0.0
0.1
0.3
0.0
0.4
0.3
0.1
0.0
0.0
0.4
0.1
0.4
0.0
1.0
0.2
Dentro de los indicadores epidemiológicos del consumo de clorhidrato de cocaína obtenidos en el presente
estudio, se destaca que el 2.4% de la población peruana residente en las grandes ciudades del país (296,426
personas) admitieron haber consumido clorhidrato de cocaína alguna vez en su vida. La prevalencia de vida, no
guarda relación directa con el incremento de la edad hecho que si ocurre con la PBC. Por otro lado, al igual como
se observa en otras drogas ilegales, la prevalencia de vida es mayor en varones (4.1%) que en mujeres (0.9%).
registradas en las diferentes ciudades estudiadas en el presente estudio.
En relación a la edad, La prevalencia de último año fue mayor en el grupo de 19 a 24 años (0.5%) y el uso actual
son mayores en el grupo de 25 a 29 años (0.2%).
A dosis moderadas:
Dilatación pupilarDesinhibiciónEuforiaSudoración InfatigabilidadMayor energíaExcitación
A dosis altas:
Seguridad Ansiedad intensa. Ilusiones y alucinaciones. Ausencia de sueño, hambre y fatiga. Gran euforia. Excitación. Incremento de la temperatura.Aceleración del ritmo cardiaco y presión arterial.
EFECTOS DE LA INTOXICACIÓN
Principio activo: Cocaína.
Características: Su consumo puede ser aspirado por la naríz (esnifado), aplicado sobre las mucosas (encías, vaginal, rectal) o inyectado o ingerido.
Producción: Se produce a partir de las hojas de la coca (erythroxylum coca) y sustancias químicas empleadas en la extracción de los alcaloides. Es conocida como 'coca', 'blanca', etc.
Presentación: Polvo blanco, cristalino e inodoro, con un sabor amargo, se suele presentar en bolsas o envolturas de papel.
EFECTOS NO DESEADOS
Pérdida de la capacidad de autocontrol frente a la droga.
Pérdida del olfato.
Daño y perforación del tabique nasal.
Paranoia.
Insomnio, falta de apetito.
Problemas en la alimentación y pérdida de peso.
Disfunción cardiovascular.
Temblores y movimientos involuntarios.
Infecciones.
CONSECUENCIAS
Ausentismo o bajo rendimiento académico o laboral.
Internalización de conductas anti sociales o psicopáticas.
Problemas con la familia, con la sociedad, con la policía y la justicia.
Lima metropolitana es la ciudad capital del Perú, donde viven alrededor de 8 millones de habitantes, y constituye
el mayor mercado en el país. Ello se asocia a una mayor prevalencia del consumo de drogas, y entre ellas el
clorhidrato de cocaína siendo mayor la prevalencia de vida del clorhidrato de cocaína en Lima Metropolitana
(3.1%) que en las otras ciudades (0.8%). Si consideramos las regiones, la prevalencia de vida es 2.1 veces mayor
en la región de la selva con respecto a las regiones resto costa o sierra. En el mapa se muestran las prevalencias
de vida registradas en las diferentes ciudades estudiadas en el presente estudio.
La tasa de incidencia anual es mayor en los varones (0.2), que en las mujeres (0.01). La incidencia es mayor en el
grupo de 19 a 29 años, y en las ciudades de la selva.
Información sobre clorhidrato de cocaína Tabla 6.2: Perú 2013: Indicadores epidemiológicos sobre clorhidrato de cocaína
CARACTERÍSTICASOPORTUNIDAD DE
OFRECIMIENTO[ % ]
PREVALENCIADE VIDA
[ % ]
PREVALENCIADE AÑO
[ % ]
EDAD PROMEDIO DEPRIMER CONSUMO
[ AÑOS ]
INCIDENCIAANUAL
[ % ]
PREVALENCIADE MES
[ % ]
72 73
22.1 años es la edad promedio del primer consumo
22.3 en hombres 21.3 en mujeres
9.3% de peruanos recibieron al menosun ofrecimiento para consumirla
3 10de cada ACEPTARON
0
0.5
1
1.5
2
2.5
3
Lo usaron al menos una vez en la vida
PR
EVA
LEN
CIA
DE
VID
A (
PO
RC
EN
TAJE
)
2.4 % [296,426 personas]
Lo han usado al menos1 vez en los últimos 12 meses
0.2 % [19,465 personas]
Los que usaron cocaína al menos una vezen la vida, lo hicieron por última vez::
hace más de 3 años86.9%
6.5%
5.1%
1.5%
hace más de 1 añopero menos de 3 años
hace más de 1 mespero menos de 1 año
hace menos de 30 días
El uso alguna vez en la vida:
Es mayor en los hombresque en las mujeres
Es mayor en el grupo de 30 a 39 años
Es mayor en el nivel educativo superior
Es mayor en Limaque en provincias
Es muy similar en los estratos medioy alto
[4.1%][0.9%]
[3.6%]
[2.8%]
[3.1%][0.8%]
[2.7%][2.6%]
[0.2%] Una vez por semana
[0.4%] 7 - 11 veces
[0.5%] Una vez por semana
[2.3%] Al menos una vez por semana
[10.2%] 1 - 2 veces
[86.4%] No han usado durante
los últimos 12 meses
Consumo en el último año
La edad promedio del primer consumo de clorhidrato de cocaína (22.1 años) fue mayor que el registrado para la
marihuana (18.7 años) o la PBC (20.1 años). La edad promedio de inicio del consumo de clorhidrato es mayor en
los hombres (22.3 años) que en las mujeres (21.3 años), y es mayor entre aquellos que tienen estudios
secundarios (24.4 años) y menor en el grupo de inicial o primaria (20 años). La edad promedio del primer
consumo es también más temprana en la costa (20.6 a 21.9 años) que en la selva y la sierra (23.6 a 24.8 años)
La prevalencia de vida no guarda relación directa con el nivel de estudios, siendo mayor en aquellos que tienen
estudios superiores (2.8%) con respecto a los otros grupos (rango 2 a 2.2%).
En estudios previos se reportó que la elevada
accesibilidad del clorhidrato de cocaína en las
ciudades peruanas es graficada por la oportunidad
de ofrecimiento y la disminución del costo
constituyen factores principales de riesgo para la
iniciación en el consumo de PBC. En este estudio
se registra que el ofrecimiento de PBC es mayor (4
a 1) en hombres que en mujeres. El 10.2% de los
jóvenes de 12 a 18 años recibieron un ofrecimiento
de PBC alguna vez en su vida.
El ofrecimiento de clorhidrato de cocaína es mayor
en el grupo etáreo de 25 a 29 años (20.4%),
seguido de los grupos de 30 a 39 años (19.8%) y de
19 a 24 años (19.7%). El ofrecimiento es mayor en
las ciudades de la región sierra (20.8%) con
respecto a las demás regiones y a Lima
metropolitana (rango: 20% a 20.4%).
El ofrecimiento de la cocaína es mayor en el estrato
medio y en el alto (17.3% a 17.7%), que en el estrato
bajo (12.7%), y alcanza al 19.9% de la población de
En relación a que tan frecuentemente han
consumido clorhidrato en el último año entre los
consumidores, el 10.2% refieren haber consumido
1 o 2 veces en este periodo de tiempo. Es
importante notar que el 2.3% consume al menos
una vez por semana y 0.5% consume regularmente
cada semana. 1.5% de las personas tuvieron su
ultimo consumo en el último mes, y 5.1% en el
último año.
En forma similar a lo observado para la PBC, la
prevalencia de vida de la Cocaína clorhidrato es
mayor en Lima Metropolitana (3.1%), donde
263,357 habitantes habrían consumido esta droga
alguna vez en su vida. Le siguen las ciudades de la
selva: Iquitos (2.4%), Tingo María (1.7%), Pucallpa
(1.8%) y Tarapoto (1%). En la ciudad del Cusco, la
prevalencia de vida alcanzó 1.1%. Llama la atención
el escaso consumo en la ciudad de Huancayo.
Ciudad 2013
3 - 3.9
2 - 2.9
1 - 1.9
< 1
Rango
Lima Metropolitana
Iquitos
Tingo María
Tacna
Cusco
Arequipa
Tarapoto
Ica
Pucallpa
Trujillo
Piura
Ayacucho
Huancayo
3.1
2.4
1.7
1.4
1.1
1.0
1.0
0.9
0.6
0.4
0.3
0.2
0.0
Gráfico 6.4: Perú 2013: Información epidemiológica sobre clorhidrato de cocaína
Perú 2013:Prevalencia de vida de clorhidrato de cocaína
según ciudad
Gráfico 6.5
74 75
Éxtasis, Opio
y Heroína
Éxtasis
De acuerdo al último informe de la Oficina de las Naciones Unidas contra la
Droga y el Delito (UNODC, 2012), a nivel mundial, el consumo de la MDMA
(metilendioximetanfetamina), comúnmente conocido como éxtasis, en el año
2010 habría alcanzado cifras comparables con la cocaína.
La prevalencia anual del consumo de éxtasis a escala mundial podría oscilar entre
0.2% y el 0.6% en población de 15 a 64 años; lo que permite inferir la existencia de
entre 10.5 millones a 28 millones de consumidores. Sin embargo, se han
informado tasas más elevadas de hasta el 2.9% en Oceanía, 0.9% en América del
Norte y 0.8% en Europa Occidental (UNODC, 2012).
Diversos estudios epidemiológicos y reportes de establecimientos de atención,
tales como los de urgencias psiquiátricas, coinciden en informar que el consumo
de éxtasis a nivel del Perú se sitúa especialmente en población de adolescentes y
jóvenes.
El éxtasis es una sustancia sintética elaborada en establecimientos clandestinos.
Se trata de una droga que actúa en el sistema nervioso central como estimulante,
generando efectos psicodélicos o alucinatorios; produce un efecto vigorizante,
locuacidad, euforia, desinhibición, incremento de la temperatura corporal,
deshidratación, además de distorsiones en el tiempo y la percepción así como el
incremento de la sensibilidad al placer y la afectividad. También se presentan
efectos tales como ansiedad, pánico, taquicardia, sequedad de boca, temblores y
contracción mandibular.
7
77
Euforia.
Bienestar.
Desinhibición.
Empatía.
Sensación de placer.
Aceleración del pensamiento.
Incremento del ritmo cardiaco y de la temperatura corporal.
Dilatación pupilar.
Contracción mandibular.
Sequedad de boca.
Visión borrosa.
Movimientos involuntarios de la lengua.
Disminución de las habilidades mentales.
Sed.
EFECTOS DE LA INTOXICACIÓN
Principio activo: Metilenedioximetanfetamina.
Característicasy presentación :
Se presenta en forma de comprimidos (pastillas o cápsulas), de diferentes colores con logos llamativos impresos en la cara de la pieza.En los escenarios de consumo se le conocen como: “pepas”, “tachas”, etc.
Producción: La MDMA o éxtasis es una base sintética derivada de la feniletilamina y relacionada estructuralmente con la anfetamina y el alucinógeno mezcalina.
EFECTOS NO DESEADOS
Sudoración anormal.
Irritabilidad.
Ansiedad generalizada.
Insomnio.
Taquicardia.
Pérdida de la capacidad de autocontrol frente a la droga.
Confusión mental.
Temblores y movimientos involuntarios.
Fallo renal.
Riesgo de fallo cardiaco.
Riesgo de accidente cerebro vascular.
Riesgo de daño en la función motora.
Deshidratación.
Calambres musculares.
CONSECUENCIAS
Daño en los procesos cognitivos: memoria y atención.
Psicosis paranoide aguda.
Psicosis tóxica.
Flash back.
Puede producirse muerte por hemorragia cerebral, hipertermia, rabdomiólisis (destrucción de las fibras musculares estriadas).
Insuficiencia renal y hepática agudas y edema pulmonar.
Dependencia.
La administración de la droga por lo general es por vía oral en forma de pastillas o tabletas. Sus efectos duran
generalmente entre 3 y 6 horas, aunque ello depende de algunos factores tales como la dosis (usualmente entre
60 y 120 miligramos), el grado de adulteración, la salud mental del consumidor, las expectativas del usuario, etc.
No es excepcional que el consumidor pueda tomar una segunda dosis aunque esta conducta en el medio
peruano al parecer es poco común. Debe indicarse que el consumo simultáneo de éxtasis y bebidas alcohólicas
bajo ciertas circunstancias puede ocasionar la muerte, debido a accidentes cerebro vasculares y paros
respiratorios.
Esta suficientemente documentado que el éxtasis altera la actividad de los neurotransmisores, en especial el
sistema serotoninérgico. Investigaciones en animales, han demostrado que las dosis de moderadas a altas de
éxtasis son tóxicas para las células nerviosas que contienen serotonina, incrementando el riesgo de daños de
larga duración. También hay evidencia de que la droga sobreestimula la producción de otro neurotransmisor
llamado norepinefrina, que genera el incremento del ritmo cardiaco y la presión arterial que acompaña el uso de
la droga (Ricaurte et al., 2000, McCann et al., 2000, Lyles y Cadet, 2003).
CARACTERÍSTICAS
Sexo
Mujer
Edad
12 a 18 años
Hombre
19 a 24 años
30 a 39 años
25 a 29 años
OPORTUNIDAD DE OFRECIMIENTO[ % ]
5.8
3.4
7.1
7.3
3.5
0.5
0.3
0.4
0.3
0.2
7.6 1.4
PREVALENCIA DE VIDA[ % ]
EXPERIMENTACIÓN DE EFECTOS[ % ] / a
89.1
29.8
20.2
76.1
72.3
75.2
40 a 49 años
50 a más
Nivel Educativo
Secundaria
Superior
Región
Inicial, primaria
1.6
1.4
1.4
3.5
6.3
Provincias
Resto costa
Lima Metropolitana 5.3
2.8
1.2
Selva
Estratosocioeconómico
Sierra 4.6
2.1
Bajo
Medio
3.5
4.8Alto 5.0
0.0
0.0
0.2
0.2
0.6
0.30.5
0.2
0.80.3
0.2
0.4
0.4Total 4.5 0.4
9.6
0.0
20.3
43.4
72.1
59.971.6
67.0
71.180.2
78.2
52.9
84.364.5
/a Calculado en base al número de personas que indicaron haber consumido éxtasis al menos una vez en la vida.
La tabla 7.1 presenta los principales indicadores de consumo de la MDMA o éxtasis en al ámbito nacional. En él se
observa que el ofrecimiento de la droga obtiene una tasa de 4.5%, porcentaje ligeramente superior al obtenido
en el estudio anterior, 4.0% (CEDRO, 2010).
Aún siendo menor el indicador de ofrecimiento de esta sustancia en relación con la marihuana y las drogas
cocaínicas, no deja de ser preocupante el grado de disponibilidad y acceso que tienen los jóvenes peruanos a
esta droga. Los datos muestran que los varones han recibido más ofrecimientos (5.8%) que las mujeres, (3.4%);
siendo los grupos de adolescentes (7.1%), jóvenes de 19 a 24 años (7.6%), y de 25 a 29 años (7.3%) quienes tienen
más reportes de ofrecimiento.
Se apreció mayores reportes de ofrecimiento de éxtasis en las personas con instrucción superior (6.3%), de Lima
Metropolitana (5.3%) y de la región de la sierra (4.6%). En cuanto al estrato socioeconómico, se apreció que los
estratos medio (4.8%) y alto (5.0%) son los que más indican haber recibido propuestas de consumo de éxtasis.
Información sobre MDMA (”extasis”)
Tabla 7.1: Perú 2013: Indicadores epidemiológicos de éxtasis
78 79
0.4% lo han usado al menosuna vez en la vida4.5% de personas ha recibido
un ofrecimiento
1 10de cada
ACEPTARON
La prevalencia de vida:
Es mayor en los hombresque en las mujeres
Es mayor en el grupo de 19 a 24 años
Es mayor en el nivel educativo superior
Es mayor en provinciasque en Lima
Es mayor en los estratos medio y alto
[0.5%][0.3%]
[1.4%]
[0.6%]
[0.5%][0.3%]
[0.4%]
64.5%De los que afirman haber consumido éxtasis:
Un tercioindicaron haber tenido sensaciones
compatiblescon el uso real de la sustancia
89.1% de los hombres y 29.8% de mujeres
Esto solo fue reportado por el 3.5% de los
encuestados del estrato bajo; confirmando que existe
un grado importante de ofrecimiento de la droga no
solo en Lima, sino en las tres regiones del Perú.
Por otro lado, la prevalencia de vida del consumo de
éxtasis en la población encuestada obtuvo una tasa
del orden del 0.4%, siendo ligeramente superior la
prevalencia en varones (0.5%) que en mujeres (0.3%);
observándose del mismo modo, que el consumo se
circunscribe mayoritariamente en los adolescentes de
12 a 18 años (0.4%) y jóvenes (1.4%), así como en
personas con instrucción superior (0.6%); más en los
que radican en provincias (0.5%) que en Lima
Metropol i tana (0 .3%) . Tanto en el estrato
socioeconómico medio como alto se identificó una
prevalencia de vida de 0.4%, mayor a la del segmento
bajo (0.2%).
En cuanto a la experimentación de los efectos de la
droga, un tercio de la población, 64.5%, describió
correctamente la sintomatología esperada cuando
es tá invo luc rado e l consumo de éx tas i s ,
encontrándose un porcentaje minoritario aunque no
marginal de encuestados que describieron una
sintomatología incompatible con los efectos de esta
droga sintética.
Al respecto, Rojas (2010) advierte que en la
evaluación de los efectos del consumo de éxtasis, hay
que contemplar que la sintomatología y las
características de la intoxicación tienen un grado
razonable de subjetivad en razón de varios factores
como el desconocimiento de la composición exacta
de la MDMA, así como el grado de adulteración de la
misma, dado que existen indicios razonables para
sostener que la droga que se comercializa en Lima
Metropolitana y otras ciudades urbanas, contienen
otras sustancias como efedrina, cafeína, ketamina,
anfetamina, cocaína, fluoxetina, alprazolam, benadril,
ibuprofeno, loratadina, carbamazepina, etc. Como se
indicó, el 4.5% de encuestados reportó haber
recibido al menos un ofrecimiento para consumir
éxtasis. El estudio determinó que 1 de cada 10
personas terminaron aceptando la propuesta de
consumo. De la población que informo haber
experimentado con la droga, dos tercios (64.5%)
describió una sintomatología congruente con el
perfil de la intoxicación inducida por el éxtasis,
indicando que es posible hayan empleado
realmente la droga y no formas adulteradas o
falsificaciones.
Opio
El opio procede del látex seco que se extrae por corte de las paredes de la cápsula de la adormidera. Las principales
formas de consumo son: fumada, ingerida y comida directamente de la planta. Los derivados opiáceos más usados son
la heroína, la morfina, la codeína entre otros.
Estos derivados se caracterizan por tener un efecto antitusígeno y antidiarreico dado que generan un estado de euforia
y de aislamiento respecto al mundo exterior. Estas sustancias tienen una gran capacidad de generar dependencia con
poco tiempo de exposición al consumo, cuyo perfil clínico esta dado por la compulsión del consumo continuado, el
incremento de la dosis y la imposibilidad de prescindir de ella.
Es importante anotar que en la parte norte del país la Policía Nacional del Perú ha incautado plantaciones de amapola y
litros de látex. Si bien no hay importantes extensiones de esta planta, preocupa estos allanamientos y el riesgo de
diseminación.
Gráfico 7.1: Perú 2013: Información epidemiológica sobre éxtasis
Información sobre opio
Estimulación.
Locuacidad.
Cansancio.
Somnolencia.
Hormigueo.
Insensibilidad al dolor.
Incremento de la sensibilidad táctil .
Sudoración.
Depresión respiratoria.
Disminución del ritmo cardiaco y presión arterial.
Contracción pupilar.
EFECTOS DE LA INTOXICACIÓN
Principio activo: Morfina, codeína y tebaina.
Características: Es una droga analgésica narcótica que contiene hasta 24 alcaloides. El principal es la Morfina..El opio se extrae haciendo incisiones superficiales en los frutos (cabezas) de la “adormidera”. Los cortes exudan un líquido (latex) blanco, lechoso, al secarse deriva en una resina pegajosa de color marrón. Al raspar esta resina se obtiene el opio en bruto. Al dejar secar por más tiempo da como resultado un sólido duro pétreo más oscuro a la vez que pierde agua y se concentran los alcaloides La vía de administración es oral y fumada.
Producción: El opio es un producto natural que se obtiene de un tipo de amapola (Papaver Somniferum) que crece en muchos países, planta que puede alcanzar de 1 a 1.5 metros de altura. En el Perú la amapola crece en todas las regiones, excepto en la puna. Se han detectado plantaciones de amapola en la selva alta y baja amazónica en los Departamentos de Cajamarca, Amazonas y San Martín.
EFECTOS NO DESEADOS
Pérdida de la capacidad de autocontrol frente a la droga.
Alucinaciones.
Náuseas.
Confusión mental.
Picazón.
Vómito.
Habla farfullante.
CONSECUENCIAS
Dependencia severa.
Complicaciones pulmonares (neumonía, tuberculosis).
Pérdida de peso.
Trastorno de sueño.
Infección del endocardio y válvulas del corazón.
Artritis.
Abandono prematuro de las principales obligaciones.
Internalización y desarrollo de conductas anti sociales o psicopáticas.
Problemas con la familia, con la sociedad, con la policía y la justicia.
Presentación: En forma sólida como polvo blanco o marrón.
80 81
Heroína
Se trata de una sustancia con un extraordinario potencial adictivo, estado que se instala prematuramente. En el rubro
de los opiáceos es la droga de más abuso. La heroína se procesa de la morfina, la misma que es extraída de la bellota de
algunas variedades de amapola o adormidera.
En el caso de la administración intravenosa, la droga presenta otros problemas particulares, especialmente el riesgo de
trasmisión del VIH y otras enfermedades tales como la hepatitis, como resultado del uso compartido de agujas u otros
equipos de inyección.
En lo que se refiere a los efectos inmediatos de la intoxicación, la heroína en cualquiera de sus formas de
administración, cruza con mucha facilidad y velocidad la barrera hematoencefálica del cerebro. En el cerebro la droga
se convierte en morfina adhiriéndose a los receptores opiodes (Volkow y Fowler, 2000). En ese contexto los efectos se
caracterizan por un pico de placer y de sensaciones agradables (los adictos se refieren a ello como el “rush”). La
capacidad de generar adicción inmediata, severa y crónica, parece que tiene que ver con la velocidad de llegada de la
droga al cerebro (Valverde y Maldonado, 2005, Moya et al., 2009).
Euforia.
Sedación.
Insensibilidad al dolor.
Sensación de pesadez.
Sequedad de boca.
Bostezo.
Sudoración.
Lagrimeo.
Depresión respiratoria .
Disminución del ritmo cardiaco y presión arterial.
Enlentecimiento psicomotor.
Insomnio.
Orgasmo espontaneo.
Piloerección.
Contracción pupilar.
EFECTOS DE LA INTOXICACIÓN
Principio activo: Diacetilmorfina (3,6 - diacetil).
Características: Su administración puede ser inyectada, aspirado, fumado o ingerido.Altera el sistema límbico (aumenta la sensación de placer), bloquea los mensajes de dolor desde la médula espinal, altera la actividad neuroquímica en el tronco encefálico que controla las funciones autónomas del cuerpo.
Producción: Es un derivado de la morfina, sustancia semisintética, originada de la adormidera, de la que se extrae el opio.
EFECTOS NO DESEADOS
Pérdida de la capacidad de autocontrol frente a la droga.
Pérdida del olfato.
Insomnio, falta de apetito.
Problemas en la alimentación y pérdida de peso.
Confusión mental.
Picazón.
Vómito.
Diarrea.
Habla farfullante.
Fiebre.
Dolores musculares.
Presentación: Polvo blanco o marrón. Muchas veces su presentación puede ser negro pegajoso.
Información sobre heroína
CONSECUENCIAS
Dependencia severa y crónica.
Complicaciones pulmonares (neumonía, tuberculosis).
Pérdida de peso.
Trastorno psicótico: con ideas delirantes; con alucinaciones.
Trastorno de sueño.
Enfermedades infecciosas: VIH, hepatitis B y C, etc.
Venas colapsadas.
Meningitis.
Aneurisma micótico.
Infecciones bacterianas
Infección del endocardio y válvulas del corazón.
Artritis.
Abandono prematuro de las principales obligaciones.
Internalización y desarrollo de conductas anti sociales o psicopáticas.
Problemas con la familia, con la sociedad, con la policía y la justicia.
La muestra que el ofrecimiento de opio fue del orden del 0.3%, con más reportes por parte de los tabla 7.2
varones (0.5%) que por mujeres (0.2%) y por personas con más de 50 años (0.7%), y los del grupo entre 12 y 18
años (0.5%). También se observó que los reportes de propuestas de consumo fueron los mismos en aquellos con
instrucción secundaria y superior (0.4% en ambos casos), sin reportes en las personas con educación inicial o
primaria.
La oportunidad de ofrecimiento en Lima Metropolitana fue de 0.4%; ligeramente mayor al observado en otras
ciudades (0.3%), destacando la sierra con el 0.4%. Al examinar las propuestas de consumo en función al estrato
se apreció el mismo resultado en los segmentos bajo y medio (0.3%), mientras que en los entrevistados de nivel
socioeconómico alto fue 0.4%.
La prevalencia de vida de opio fue 0.2% en la población general; siendo 0.1% en los varones y 0.2% en las mujeres.
Fue mayor en los grupos de 12 a 18 años (0.5%) y de 30 a 39 años (0.4%) y en aquellos que cursan las secundaria
(0.3%) pero sin diferencias entre Lima Metropolitana y otras ciudades (0.2% en ambos casos). Más bien, sí se
apreció un incremento en función al estrato socioeconómico: bajo (0.1%), medio (0.2%) y alto (0.3%).
CARACTERÍSTICAS
Sexo
Mujer
Edad
12 a 18 años
Hombre
19 a 24 años
30 a 39 años
25 a 29 años
OPORTUNIDADDE OFRECIMIENTO
[ % ]
0.5
0.2
0.5
0.3
0.0
0.1
0.2
0.5
0.0
0.4
0.3 0.0
PREVALENCIA DE VIDA
[ % ]
0.4
0.3
0.5
0.6
0.4
0.0
40 a 49 años
50 a más
Nivel Educativo
SecundariaSuperior
Región
Inicial, primaria
0.7
0.3
0.0
0.4
0.4
Provincias
Resto costa
Lima Metropolitana 0.4
0.3
0.2
Selva
Estrato socioeconómico
Sierra 0.4
0.2
Bajo
Medio
0.3
0.3
Alto 0.4
0.1
0.0
0.0
0.3
0.1
0.2
0.2
0.0
0.4
0.1
0.1
0.2
0.3
0.0
0.5
0.0
0.2
0.6
0.5
0.1
0.0
0.1
0.2
0.1
0.3
0.7
OPIO HEROÍNA
OPORTUNIDADDE OFRECIMIENTO
[ % ]
PREVALENCIA DE VIDA
[ % ]
1.4
0.7
0.7
3.2
0.6
0.6
0.7
1.0
0.0
0.9
1.5
1.3
0.5
0.3
0.7
0.6
0.5
1.2
1.4
Total 0.3 0.2 0.41.0
Tabla 7.2: Perú 2013: Indicadores epidemiológicos de opio y heroína
82 83
Por otro lado, el ofrecimiento de heroína en la
población general fue del orden del 1.0%, 1.4% en
varones y 0.7% en mujeres. Estos datos permiten
proyectar que 3 cada 10 personas que recibieron la
propuesta, llegaron a consumir heroína. El grupo
de entre 25 y 29 años de edad reportó mayor
oportunidad de ofrecimiento (3.2%), seguido por
el grupo de 40 a 49 años de edad (1.0%) y aquellos
con instrucción superior (1.5%) y con estudios
secundarios (0.9%).
Además se aprecia que la oportunidad de
ofrecimiento en Lima Metropolitana fue 1.3%
frente a 0.5% en otras ciudades, donde destacan
las regiones de la sierra (0.7%) y la selva (0.6%).
También se apreció mayores oportunidades de
consumo en función del estrato social: bajo (0.5%),
medio (1.2%) y alto (1.4%).
En cuanto a la prevalencia de vida del consumo de
heroína, el indicador fue de 0.4% en la población
g e n e r a l , d e s t a c a n d o l i g e r a m e n t e e l
reconocimiento de consumo en los varones (0.4%)
sobre las mujeres (0.3%). Por los datos presentados,
el grupo que reporta mayor consumo de heroína es
el de 25 a 29 años (0.6%), seguido por los grupos de
adolescentes de 12 a 18 años de edad y de adultos
de 40 a 49 años de edad, ambos con 0.5%
respectivamente.
También se aprecia que el grado de reconocimiento
de consumo se incrementa en función del nivel
educativo; así, no existen reportes en encuestados
con nivel primario, pasando a 0.2%, en secundaria y
0.6% en los que tienen instrucción superior,
habiéndose determinado que el 0.5% de los
informantes consumidores radican en Lima
Metropolitana y el 0.1% en provincias.
Finalmente se encontró que a mayor estrato social,
existe mayor reconocimiento de consumo; en
efecto, el 0.1% de personas que reportaron al
menos un consumo de heroína son del estrato
socioeconómico bajo; 0.3% del medio y 0.7% del
alto.
0.2% han consumido al menosuna vez en la vida
0.3%de personas ha recibido
un ofrecimiento
5 10de cada
ACEPTARON
La prevalencia de vida:
Es mayor en mujeresque en hombre
Es mayor en el grupo de 12 - 18 añosy de 30 a 39 años
Es mayor en el nivel secundario
Se observa por igual en Limaque en provincias
pero es mayor en la sierra
Se incrementa según el nivel socioeconómico:bajo
medioy alto
[0.2%][0.1%]
[0.5%][0.4%]
[0.3%]
[0.2%][0.2%][0.4%]
[0.1%][0.2%][0.3%]
Gráfico 7.2: Perú 2013: Información epidemiológica sobre opio
0.4% han consumido al menosuna vez en la vida
1.0%de personas ha recibido
un ofrecimiento
3 10de cada
ACEPTARON
La prevalencia de vida:
Es mayor en hombresque en las mujeres
Es mayor en los grupos de 12 - 18 años25 - 39 años
y 40 - 49 años
Es mayor en el nivel educativo superiorEs mayor en Limaque en provincias
Se incrementó según el nivel socioeconómico:bajo
medioy alto
[0.4%][0.3%]
[0.5%][0.6%]
[0.6%][0.5%][0.1%]
[0.3%][0.7%]
[0.5%]
[0.1%]
Gráfico 7.3: Perú 2013: Información epidemiológica sobre heoína
84 85
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FE DE ERRATAS
PAGINA 35
o Dice Gráfico 2.7: Perú: Prevalencia de drogas legales 2010-2013
Debe decir Gráfico 2.7: Perú: Prevalencia de drogas ilegales 2010-2013
o Dice Gráfico 2.8: Perú: Prevalencia de drogas ilegales 1986-2013
Debe decir Gráfico 2.8: Perú: Prevalencia de drogas legales 1986-2013