de la mano de marÍa · 2018-12-28 · el señor está allí, sentado en aquella orilla, junto a la...

145
CAMINANDO CON JESÚS DE LA MANO DE MARÍA 1

Upload: others

Post on 20-Mar-2020

2 views

Category:

Documents


0 download

TRANSCRIPT

Page 1: DE LA MANO DE MARÍA · 2018-12-28 · El Señor está allí, sentado en aquella orilla, junto a la lumbre, esperando a sus hijos, para que se le acerquen y, movidos por el amor,

CAMINANDO CON JESÚS

DE LA MANO DE MARÍA

1

Page 2: DE LA MANO DE MARÍA · 2018-12-28 · El Señor está allí, sentado en aquella orilla, junto a la lumbre, esperando a sus hijos, para que se le acerquen y, movidos por el amor,

Editado por:Asociación Hijos de la Santa Cruz

Contacto y pedidos:[email protected]

Libros del mismo Editor:En la Escuela de María (2a Edición)Pequeñas Escenas de AmorVía Crucis con María

Número Depósito Legal: MU- 1268-2018

Copyright- 2018

Queda terminantemente prohibida la reproducción total o parcial de ésta obra.

Impreso en España por:Tipografía San Francisco - C/San Nicolás, 31- Murcia

2

Page 3: DE LA MANO DE MARÍA · 2018-12-28 · El Señor está allí, sentado en aquella orilla, junto a la lumbre, esperando a sus hijos, para que se le acerquen y, movidos por el amor,

INTRODUCCIÓN

Querido hijo, En esta ocasión te presento este nuevo libro: “Caminando con Jesús de la mano de

María”, que es el primero de una sucesión de libros, en los cuales explicaré el Evangeliodel día para guiaros al Señor. A través de todas estas escenas vas a ir caminandoconmigo tras los pasos del Señor.

Tu vida no puede ser una vida cualquiera, mundanizada y sin sentido, sino todo locontrario. Tu alma debe estar llena de Dios y vivir para Él. Puede que te encuentres alborde del camino y te sientas solo y sin ganas de luchar; pero, de repente, oyes unospasos que se acercan hacia ti y se paran…, miras hacia arriba, y ¿qué es lo que ves? ¡Esel Señor! que te estaba buscando; y entonces te mira con esa “mirada de Amor” quesolo puede salir de su Corazón, y te dice:

“Sígueme”. Y tú, hijo mío, te levantas y sin pensarlo vas tras Él. Pero.. ¡deja todo lo que te pesa

en el borde del camino! No lo necesitas, no te hace falta; porque todo eso es tu “yo”,que insiste en quedarse allí sentado, parado, y no continuar el camino. Es ese miedo ala exigencia, a cambiar de vida, a que desaparezcan todas esas cosas que te alejan deDios. Pero no temas, ¡cógete de mi mano! para que todo te resulte más fácil. No miresatrás, ¡deja tu vida pasada a un lado! que ha comenzado un nuevo día.

La luz brilla para ti, hijo mío; es la Luz del Señor, que te ha llamado y has respondidoque “sí” a su llamada, y deseas seguirle allá por donde quiera que vaya; pero a vecesno sabes cómo hacerlo.

Lee detenidamente cada página de este libro, ¡no tengas prisa! Están escritas para tiy para toda alma sencilla que desee cambiar de vida, y sustituir la que tenía por unavida entregada, sacrificada, un camino de verdadera conversión.

Oirás muchas voces que te dirán que lo dejes, que no sigas, que no merece lapena...; pero tú, alma mía, no las escuches, y aunque vayas despacio ¡sigue el camino!El Señor ha dejado allí sus huellas para que no te pierdas y sigas adelante.

Los apóstoles, a pesar de sus miserias le siguieron, y hoy son los pilares de la Iglesia,unos humildes pescadores.

Tú también estás llamado a ser algo muy grande; y es, demostrar con tu ejemploque eres hijo de Dios. Él es tu Padre y te ama de forma única e irrepetible. Por eso, hijomío, tras estas páginas te enseñaré la Ciencia del Amor, el Misterio de la Cruz, queformará parte de tu vida, y las virtudes que te ayudarán a seguir el camino de lasantidad.

Aquí te ofrezco este libro, amado hijo. Tómalo entre tus manos y comienza estaandadura. ¡No te sueltes de mi mano! porque Yo te iré enseñando en esta “Escuela deMaría”.

¡Adelante con Cristo por María!

Festividad de Nuestra Señora la Virgen del Rosario7 de Octubre de 2018

3

Page 4: DE LA MANO DE MARÍA · 2018-12-28 · El Señor está allí, sentado en aquella orilla, junto a la lumbre, esperando a sus hijos, para que se le acerquen y, movidos por el amor,

ABRIL

OCTAVA DE PASCUALunes, 17 de abril de 2017

La mañana de Pascua de Resurrección

Evangelio Mt 28,8-15. Queridos hijos, en el Evangelio del día siguiente a laResurrección de mi Hijo, se narran varios acontecimientos que ocurrieron en aquellosmomentos.

Aquí se ven dos actitudes contrarias: por un lado las santas mujeres, que, asustadas,fueron al sepulcro y no encontraron al Señor; pero Él les salió al encuentro, diciéndolesque no temieran y que comunicaran a los discípulos que fueran a Galilea, donde leverían.

Ellas sienten miedo ante lo desconocido, pero su amor es tan fuerte que van alsepulcro para estar con su Maestro.

Cuando vuestra alma va en busca del Señor, Él siempre aparece en el camino y comoa aquellas mujeres, también a vosotros os dice: “Alegraos”. Entonces, vuestra alma sellena de alegría, como María Magdalena, porque encontró al Señor; ella no lo perdió,vosotros tampoco. El Señor, como Buen Pastor que cuida de sus ovejas, las ama una auna, y se desvive por ellas para que no se pierdan y caminen por camino seguro, el dela santidad.

¡Qué alegría se produce en el corazón cuando se encuentra a Jesús! El alma se llenade dicha, se inunda de amor, no hay palabras humanas que puedan describir estasensación; es una felicidad que llena la vida y la convierte en una vida útil, que dejahuella allá por donde pasa, porque son las mismas huellas de Jesucristo actuando en elalma.

Por el contrario, está la actitud de los sumos sacerdotes, que intentaron comprar alos soldados y les obligaron a mentir. Ellos estaban cerrados a toda enseñanza, y teníanel corazón endurecido para poder conocer y amar a Dios. Su vida era estéril, sin fruto, yles envolvía la envidia y la mentira. Es una vida sin Dios, una vida que va cediendo a lasoberbia, a la vanidad, a la mentira, al desamor. El alma queda así cerrada e imbuida desí misma. ¡Qué vida tan desgraciada!

¡Hijos! por eso es tan importante la humildad, la humildad del alma sencilla, quesupone seguir obedeciendo a su Maestro y Señor; que confía y confía, y no sepreocupa de más. ¡Se ve tan poca cosa! que no se fía de sí misma y deja que el EspírituSanto actúe en ella.

¡Hijos! ¡corred al encuentro del Señor! Él os espera y está deseando abrazaros contodo su amor de Padre. Y vosotros, como hijos pequeños que sois, solo confiad y veréislos resultados.

4

Page 5: DE LA MANO DE MARÍA · 2018-12-28 · El Señor está allí, sentado en aquella orilla, junto a la lumbre, esperando a sus hijos, para que se le acerquen y, movidos por el amor,

OCTAVA DE PASCUAMiércoles, 19 de abril

En el camino de Emaús

Evangelio Lc 24,13-35. Queridos hijos, el Evangelio de hoy habla de los discípulos deEmaús. Estaban entristecidos por todo lo que había pasado, y hablaban de ello. ElSeñor se puso a su lado y no supieron reconocerle. Jesús les hablaba, pero su vista aúnestaba ciega, aun no le habían recibido.

Muchas veces, a lo largo del día, vais haciendo vuestras cosas, pero sin meter alSeñor en ellas; y estáis así, como ciegos, sin daros cuenta del alcance sobrenatural quetiene lo que lleváis entre manos. Qué distinto que todo vuestro día quede impregnadopor la Luz de Cristo, que, por el contrario, sea el resultado de todo un quehacerpresidido por motivos humanos.

Cada día de vuestra vida le pertenece a Dios y solo a Él. Desde el momento en que Élquede apartado de vuestro quehacer diario, éste deja de estar santificado; porque,aunque muchas veces los motivos humanos que os impulsan a hacer las cosas sonnobles y sinceros, sin embargo, no están perfumados por Cristo, no tienen ese toquesobrenatural que le da una nueva dimensión.

Los discípulos de Emaús, cuando hablaban con el Señor, notaban algo especial,porque el Señor nunca pasa desapercibido. Y llegaron a su casa y le invitaron a entrar.Esa es la misma invitación que hacéis vosotros al Señor cuando le dejáis entrar envuestra alma; entonces, Él se hace el dueño, es el invitado de honor y todo gira entorno a Él.

Después, se sentó a la mesa, partió el pan y se lo dio, y ellos quedarontransformados. Ese es el premio que recibe el alma cuando el Señor se hace dueño deella: os da “su Pan”, se da Él mismo, se sienta en vuestra mesa y se apodera de vuestraalma; entonces quedáis transformados por el Amor de Dios; vuestro corazón ya no estávacío, ya no está lleno de vosotros mismos, sino de Dios.

¡Hijos míos, dejaos transformar! Y en todos los malos momentos que habréis depasar en vuestra vida, es entonces cuando más especialmente tendréis que acudir a laoración a buscar la compañía del Señor, y dirigiros a Él. De esta forma, esos momentosdifíciles quedaran iluminados por la luz de Cristo.

OCTAVA DE PASCUAViernes, 21 de abril de 2017

Aparición junto al mar de Tiberíades

Evangelio Jn 21,1-14. Queridos hijos, después de la Resurrección, el Señor se aparecióa sus discípulos varias veces. Ellos, en esta aparición, iban en la barca por el lagoTiberíades; y hasta entonces, no habían pescado nada. Jesús andaba por la orilla; sesienta y hace un fuego. Entonces Juan lo ve, y Pedro, que era más impetuoso, se tira dela barca para estar con Él. Allí acaban todos, junto al Señor, después de haber pescadomilagrosamente multitud de peces.

¡Qué alegría produjo en esos corazones ver al Señor de nuevo! Quedaronreconfortados y animados para seguir adelante.

5

Page 6: DE LA MANO DE MARÍA · 2018-12-28 · El Señor está allí, sentado en aquella orilla, junto a la lumbre, esperando a sus hijos, para que se le acerquen y, movidos por el amor,

Esta escena del Evangelio os puede ayudar mucho. Aquellos hombres seencontraban desalentados, no habían pescado nada y en su corazón había tristeza; noveían al Señor, no lo sentían cerca de ellos, y todo era diferente. Pero el Señor lo sabe,sabe cómo se sienten. Como tantas veces os pasa a vosotros. ¡Cuántos días y encuántos momentos sentís esa tristeza y ese desaliento! Os encontráis solos…, aunqueno lo estáis; y el Señor parece que está lejos, como si ya no estuviera entre vosotros.No sentís esa presencia porque os falta fe.

El Señor sabía cómo se encontraban estos apóstoles - y lo mismo ocurre convosotros -. Él, entonces, aparece, se hace visible; y es Juan, el amor de Juan, el primeroque lo ve.

Para vosotros, hijos míos, también el Señor se hace visible - visible en vuestra almaen gracia - y solamente lo ve el amor. Si no fuera así, existirá esa presencia del Señor,pero de forma más lejana y débil. Si el corazón no está repleto del amor de Dios esporque hay algo que se lo impide, algo que nubla su presencia, y lleva a un estar con Éla medias, rodeados de factores humanos.

Debéis desechar todo aquello que notéis que os separa de Él, todo aquello quehace que estéis centrados en vosotros mismos, y no en Él, ni en los demás por amor aÉl.

El Señor está allí, sentado en aquella orilla, junto a la lumbre, esperando a sus hijos,para que se le acerquen y, movidos por el amor, se sienten a su lado y le digan conlágrimas en los ojos:

“¡Perdón! ¡Perdón, Padre mío! por tantas faltas de amor. Ten paciencia conmigo yno te alejes de mi lado, porque sin Ti nada puedo hacer. No soy nada, no valgo nada,pero junto a Ti lo puedo todo.

¡No te alejes Padre! ¡No me abandones! que yo no te abandonaré.”

SEGUNDA SEMANA DE PASCUAMiércoles, 26 de abril de 2017

Sal de la tierra y luz del mundo

Evangelio Mt 5,13-16. Queridos hijos, el Señor en el Evangelio os dice: “Vosotros soisla sal de la tierra. Pero si la sal se vuelve sosa, ¿con qué la salarán?” También os hablade la luz que hay que poner en el candelero, y no debajo del celemín, para quealumbre y brille.

Cuando el Señor habló a sus apóstoles, como en este momento, os está hablando avosotros. Os llama: “la sal de la tierra” y “la luz que brilla y alumbra”. “Sal” y “luz”: doselementos importantes para la vida. Sin la sal se pudrirían los alimentos y la comidaquedaría sosa; y sin la luz, el mundo viviría en tinieblas.

Esa “sal” y esa “luz” reflejan el amor que debéis de tener al Señor, y por Él, avuestros hermanos. Es la auténtica caridad, que es superior al amor, porque el amor esalgo natural, pero la caridad es sobrenatural. Es poseer en vosotros el Amor de Dios;es amar como Dios ama, con una intensidad semejante a la suya.

Por eso, os digo que la caridad conlleva tener paciencia con los demás. Para hacer elbien se deben disculpar los defectos del prójimo y evitar enfadarse con él; es necesariocomprenderle, tener serenidad y paciencia.

También la caridad ha de estar dispuesta a hacer el bien a todos los hombres;porque vuestro corazón debe de ser grande y generoso, universal, donde quepan todas

6

Page 7: DE LA MANO DE MARÍA · 2018-12-28 · El Señor está allí, sentado en aquella orilla, junto a la lumbre, esperando a sus hijos, para que se le acerquen y, movidos por el amor,

las personas. La caridad no tiene envidia de los demás y se alegra del bien; por ello noexiste crítica ni murmuración, ya que, solamente el Señor, y no vosotros, es el queconoce el corazón de todas los hombres. La caridad obra con humildad, porque sepreocupa únicamente de los demás; por lo tanto, en ella no cabe el egoísmo, no cabela soberbia. La caridad no es ambiciosa, porque el alma movida por la caridad no buscalo suyo, no se busca a sí misma; no es rencorosa, ya que todo lo olvida.

Por eso, hijos, ved el rostro de Cristo en los demás, no paséis de largo, preocupaosde sus problemas.

¡Hijos! ¡Paciencia con vuestros hermanos! No los enjuiciéis ni critiquéis; eso llevaríaa la destrucción de las relaciones entre hermanos; eso sería hacerle el juego alenemigo, que os quiere dividir.

¡Sed esa luz que el Señor espera! esa luz que ilumina la oscuridad de vuestroshermanos.

SEGUNDA SEMANA DE PASCUAViernes, 28 de abril de 2017

La multiplicación de los panes y de los peces

Evangelio Jn 6, 1-15. Queridos hijos, hoy el Evangelio os habla de la multiplicación delos panes y de los peces. Ese fue un gran milagro que hizo el Señor para aquellaspobres gentes que le seguían y que estaban cansadas y fatigadas.

Si reflexionáis sobre esta escena, hay algo en ella que conmueve: y es cómo el Señorestá pendiente del más pequeño detalle para que sus hijos estén a gusto. El Señorpudo tomar la decisión de irse de aquel lugar; sin embargo, permaneció allí con susdiscípulos para ocuparse de aquella multitud.

¡Siempre! ¡siempre es el amor y la misericordia lo que precede y acompaña elcomportamiento de mi Hijo! Se compadece y apena de todas aquellas personas, y haceel milagro. Lo mismo ocurre con vosotros: sois sus hijos, le seguís para escucharle, y¡cuantas veces os sentís cansados y fatigados! porque el mundo, que desprecia esafidelidad a Cristo, se os echa encima. Pero Él, como siempre, acude a vosotros, hace elmilagro y os da el alimento.

Para que tengáis y recibáis esa fuerza perdida, Él se presenta en la Eucaristía; osespera allí para que acudáis, no solamente a escucharle, sino, fundamentalmente, arecibirle. Llegáis muchas veces extenuados, pero Él entra en vosotros y renuevavuestras fuerzas, las ganas de trabajar por Él, y sobre todo, de cumplir su voluntad.

Por eso, vuestro interior debe estar muy bien preparado. Acaso, hijos míos ¿no osdais cuenta de a Quién recibís? En vuestra relación con Él ¿se ha metido la rutinadentro de vuestro corazón? Él realiza todos los días ese “milagro” para vosotros; osbusca, se os da por entero, y espera una respuesta. ¡Él quiere vuestro amor! Vuestroamor por entero, no las migajas.

Hijos míos ¡amad la Eucaristía! que es la fuente de todas las gracias. Allí es dondeencontraréis la paz perdida, las fuerzas que os faltan, el amor que necesitáis dar, laalegría que no existe en vuestro interior, la caridad que a todos llega, y la humildad y elabandono que todo lo pueden.

7

Page 8: DE LA MANO DE MARÍA · 2018-12-28 · El Señor está allí, sentado en aquella orilla, junto a la lumbre, esperando a sus hijos, para que se le acerquen y, movidos por el amor,

SEGUNDA SEMANA DE PASCUASábado, 29 de abril de 2017

Acción de gracias al Padre

Evangelio Mt 11,25-30. Queridos hijos, en el Evangelio de hoy el Señor os dice:“Aprended de Mí, que soy manso y humilde de corazón”. También dice en esta acciónde gracias al Padre: “porqué has escondido estas cosas a los sabios y entendidos y selas has revelado a los pequeños”. Así fue entonces y así continúa siendo hoy.

Los primeros en ir a adorarle eran unos humildes pastores, que nada tenían y nadasabían. Quienes le acompañaron en su caminar sobre la tierra fueron unos pescadores.Como veis… ¡siempre la humildad!

Un corazón humilde se ve tan pequeño y tan insignificante…; bien sabe que nadabueno va a poder salir de él, que necesita en todo momento la ayuda de su Maestro ySeñor; y que a Él, sola y únicamente a Él, le debe obediencia.

La humildad hace a las personas sencillas, exentas de complicación; ellas muestranlo que son y no desean aparentar nada.

La humildad está unida a la obediencia, pues un alma humilde siempre obedece,porque sabe que ése es el auténtico camino para no equivocarse; y se siente seguraobedeciendo.

El alma humilde se abandona totalmente en las manos de Dios y en Él confíaplenamente, porque, al sentirse tan pequeña, se deja hacer, se deja moldear por lasmanos de su Padre Dios. Y esa confianza, y ese abandono le producen felicidad yalegría. Sabe también que ella sola haría las cosas mal, pero con la ayuda de Dios todocambia, ya que es Él el que actúa. Y de esta manera cumple la voluntad de Dios.

El alma humilde es paciente con los defectos de sus hermanos, ya que se ve a símisma con grandes pecados.

Hijos míos, más cosas os podría decir de esta virtud de la humildad. Para podervivirla, tenéis grandes ejemplos que podéis imitar; pero lo que más os puede ayudar esla Pasión de Cristo. No dejéis de meditarla, y no solo eso, sino ¡vividla! para que así, deesta manera, podáis conocer lo que es el verdadero arrepentimiento.

8

Page 9: DE LA MANO DE MARÍA · 2018-12-28 · El Señor está allí, sentado en aquella orilla, junto a la lumbre, esperando a sus hijos, para que se le acerquen y, movidos por el amor,

MAYO

TERCERA SEMANA DE PASCUAMiércoles, 3 de mayo de 2017

“Yo soy el Camino, la Verdad y la Vida” Evangelio Jn 14,6-14. Queridos hijos, en el Evangelio de hoy el Señor os dice: “Yo soyel camino, la verdad y la vida”. Aunque son muchas más las cosas que el Señor ostransmite en este pasaje del Evangelio, hablando con Felipe, hoy quiero centrarme enestas tres importantes palabras: “Camino”, “Verdad” y “Vida”.

Con estas tres palabras, el Señor define claramente su identidad. Si reflexionáissobre ellas, veréis que, siguiéndolas, es el Cielo lo que al final os encontraréis.

Cristo es El Camino. Acompañadle, a través del Evangelio, por todos aquelloscaminos que Él recorrió. En su trato con cuantas personas se iba encontrando, todo enÉl era una enseñanza; practicó todas las virtudes y dio todo el amor que albergaba suCorazón. Siguiéndole a Él aprenderéis la “ciencia del amor”. A lo largo de aquelloscaminos polvorientos, llenos de gente necesitada, hijos míos, ¡a cuántos salvó! ¡acuántos les dio su amor y su misericordia!

Pues, hijos míos, lo mismo está haciendo con vosotros. Os muestra el camino, osmuestra su Voluntad Divina. Camináis junto a Él, como aquéllos apóstoles, y le decís enlo profundo de vuestra alma:

“Señor, enséñame a caminar a tu lado, y haciendo siempre lo que Tú deseas que yohaga, que se cumpla en mi tu Voluntad; que no quiera salirme con la mía, que sea tuVoluntad y no la mía”.

Cristo es la Verdad; no hay más verdad que la suya. Lo que rodea el mundo estáenvuelto en la mentira, es decir, en todo aquello que no hace verdaderamente feliz alhombre; porque todo está basado en lo material, en el egoísmo, en las ansias de poder,en el orgullo, en la soberbia. Por el contrario, la Verdad de Cristo hace a los hombresauténticamente felices, porque les ayuda a desprenderse de sí mismos y a dar gloria aDios, y por Él, a procurar la felicidad de los demás. Esa es la auténtica verdad, la del elAmor con mayúscula.

Cristo es la Vida, esa Vida que envuelve al hombre y le lleva a la santidad. De estaforma, la del hombre es una vida con sentido, llena de Dios; y con una meta: ir al Cielo.Es una vida que alberga a Dios como centro y motor de todo lo que el hombre hace.Todo así adquiere una razón sobrenatural; todo está impregnado por la Luz deJesucristo; y el hombre así se dignifica y se hace verdadero hijo de Dios.

Camino, Verdad y Vida es el Señor; y sus hijos, como buenos hijos que son, no seapartan de su Padre Dios, confiándole toda su vida.

9

Page 10: DE LA MANO DE MARÍA · 2018-12-28 · El Señor está allí, sentado en aquella orilla, junto a la lumbre, esperando a sus hijos, para que se le acerquen y, movidos por el amor,

TERCERA SEMANA DE PASCUAJueves, 4 de mayo de 2017

“El Pan de Vida”

Evangelio Jn 6,44-51. Queridos hijos, dice el Señor en el Evangelio: “Yo soy el pan vivoque ha bajado del cielo; el que coma de este pan vivirá para siempre. Y el pan que yodaré es mi carne para la vida del mundo”.

“Pan vivo que ha bajado del Cielo” ¿Os dais cuenta, hijos míos? Meditad sobre estarealidad: el Hijo de Dios se humilla ante el hombre y baja del Cielo; sufre y muere por élpara redimir sus pecados. Los dolores y sufrimientos que vivió durante su Pasión,ningún hombre de la tierra podría soportarlos; y Él, no solamente los sobrellevó sinqueja alguna, sino que perdonó.

Después, se quedó con vosotros hasta el fin de los días. Y allí se encuentra, en cadaIglesia. Y cada día, miles y miles de Eucaristías que se celebran por todo el mundo,renuevan el Sacrificio de mi Hijo en la Cruz.

Todos los días podéis recibirle en la Sagrada Comunión; podéis recibir al Señor, yesto ¡es una realidad y un milagro! Casi todos los días lo recibís en la Santa Eucaristíaacercándoos a comulgar para que Él entre dentro de vosotros y os transforme.

¿Cómo preparáis esa Sagrada Comunión? Es importantísimo que vuestra alma estépreparada para recibirle. Antes de ello, hay que hacer un verdadero acto dearrepentimiento: pidiendo perdón de corazón, y sintiendo de verdad ese dolor portodas las faltas de amor y pecados que cometéis a lo largo del día.

Cada comunión es algo único, hijos míos. ¿No os dais cuenta de a quién recibís?Tendríais que notar que vuestra vida va cambiando, que lucháis por desarraigarvuestros pecados y defectos, que os alejan de Dios. No podéis manteneros al margen,como si nada hubiera ocurrido; eso sería tibieza. En cada comunión es a Dios mismo aquien recibís, y eso tiene que dejaros una huella en el alma. Debe de notarse eseespíritu de querer renovaros, de querer cambiar; ese espíritu de lucha contra tantadeslealtad y tanto desamor.

¡Hijos míos! ¡Gran milagro es que Él se humille por vosotros! Y debéis valorarlo. Por eso, decidle al Señor: “que nunca más caiga en la frialdad de noponer todos los sentidos en la grandiosidad del “milagro” que Tú diariamente realizaspor mí”.

Y para entender mejor esto os pondré un ejemplo: pensad en una chimenea en lacual se quiere preparar un buen fuego. El tronco de un árbol se meterá dentro de esachimenea, y se irá quemando lentamente. Esto representa vuestra voluntad, es vuestro“yo”. La chimenea está preparada con las brasas y con el fuego - con el fuego del Amorde Dios - y vosotros metéis ese tronco, que es vuestro “yo”, para que se vayaquemando; para que se queme en esas “brasas del amor”, y ese “yo” llegue atransformarse conforme a la voluntad de Dios. Al quedar transformado por el fuego, seforman cenizas que, en apariencia, es algo pequeño e insignificante que no sirve paranada; es en eso en lo que habéis quedado transformados al haber sido consumidos porese amor. Pero no penséis que esas cenizas no valen para nada. ¡Si valen! Esas cenizasse recogen y se llevan a las plantas, donde se esparcen y se introducen dentro de latierra; y esa planta crece vigorosa, sin bichos, sin nada nocivo; crece sana, porque hasido transformada, a su vez, por ese “yo” que desapareció para que aparezca el Señor.

10

Page 11: DE LA MANO DE MARÍA · 2018-12-28 · El Señor está allí, sentado en aquella orilla, junto a la lumbre, esperando a sus hijos, para que se le acerquen y, movidos por el amor,

CUARTA SEMANA DE PASCUADomingo, 7 de mayo de 2017

El Buen Pastor y su rebaño Evangelio Jn 10, 1-10. Queridos hijos, en el Evangelio de hoy, el Señor os habla de unaprisco donde entran las ovejas. Allí se encuentra una puerta para poder entrar en él;esa puerta representa al Señor. Él va llamando a todas sus ovejas; os llama a todos, unoa uno, por vuestro nombre, de una forma particular y en cierto sentido exclusiva, paraque forméis parte de su rebaño, el rebaño de los hijos de Dios.

Pero muchas veces - también os puede pasar a vosotros - el hombre anhela sulibertad, lo que él entiende por libertad, ya que está supeditada a sus caprichos, a suvoluntad y a la búsqueda de su comodidad. Entonces, se niega a entrar por laverdadera puerta, se obstina en abrir la suya su propia, y entrar y salir del apriscocuando y como quiera. No quiere “barreras” a su libertad. Decide entonces romper lacerca del aprisco, y al hacerlo, no solo desobedece, sino que le añade el peligro de quealgunas ovejas de las que allí se encuentran, quieran también desobedecer y salir.

El hombre que quiere llevar la vida a su manera y prescinde de Dios, también, enocasiones, es instrumento para que otros le sigan en esa mala vida que ha decididollevar.

El Señor deja al hombre en libertad, para que elija la vida que quiere vivir; pero, si seinclina por apartarse de Él, entonces su vida será ya un infierno. El Señor mismo eneste Evangelio lo dice: “Yo soy la puerta: quien entra por Mí se salvará y podrá entrar ysalir, y encontrará pastos”.

Él deja a sus ovejas “entrar y salir”. El estar con Él, el entrar por su puerta no le robaal hombre su libertad, sino todo lo contrario. El Señor además, les da el alimento, lesda pastos, se da Él mismo, para que, dentro de su aprisco, encontréis la felicidad, laseguridad, el sentido de la vida; en definitiva, vuestra salvación.

Por lo tanto, hijos míos, ¡sed ovejas dóciles y obedientes!. Vuestro Pastor os cuida yos ama; ama a su rebaño y jamás lo deja abandonado, ocupándose siempre de él.

QUINTA SEMANA DE PASCUALunes, día 15 de mayo de 2017

Jesús revela al Padre

Evangelio Jn 14, 1-12. Queridos hijos, en el Evangelio de hoy dice el Señor: “No seturbe vuestro corazón, creed en Dios y creed también en Mí. En la casa de mi Padre haymuchas moradas; si no, os lo habría dicho, porque me voy a prepararos un lugar”. Hequerido explicaros este fragmento de suma importancia. Qué gran misericordia reflejael Señor con estas palabras del Evangelio.

Mirad hijos, primero os dice: “No se turbe vuestro corazón, creed en Dios y creedtambién en Mí”. Aquí el Señor os habla de que tengáis absoluta confianza en Él.Cuántas veces os pasa, hijos míos, que os turbáis, porque vuestro corazón se preocupaexcesivamente de los problemas que surgen día a día. Esa turbación hace que perdáisese recogimiento y esa paz interior que tanta falta os hace para saber en todomomento cuál es la Voluntad de Dios sobre vosotros. Entonces, el corazón se llena de

11

Page 12: DE LA MANO DE MARÍA · 2018-12-28 · El Señor está allí, sentado en aquella orilla, junto a la lumbre, esperando a sus hijos, para que se le acerquen y, movidos por el amor,

ese nerviosismo; es esa falta de serenidad que hace que afrontéis los problemas ydificultades con la perspectiva sólo humana y no con la divina.

Debéis cultivar la santa paciencia para saber esperar, para no querer resolver lascosas inmediatamente, sino en el tiempo de Dios. Confiad en Él, abandonaos en Él. Esmuchas veces falta de fe. Esa turbación solo provoca oscuridad en la mente y elresultado nunca es acorde con la voluntad de Dios.

Después, en el Evangelio, el Señor sigue hablándoos de que en la casa de su Padrehay muchas moradas. Y Él os está preparando un lugar; ese lugar es el Cielo, dondeexisten muchas moradas. Y vuestra meta es llegar a él. El deseo del Señor es que viváisallí; para esa “vida” habéis sido creados; ése es vuestro fin, vuestra última meta, y todaesta vida terrena es preparación para ello.

¡Merece la pena hijos míos! ¡merece la pena!. Luchad para conseguirlo, para llegar aesa morada a la que estáis destinados a pasar toda la eternidad. Por eso, ¡qué importael sufrimiento! ¡que importan todas las pruebas por las que debéis de pasar si, trasellas, hijos míos, es el Cielo! ¡El Cielo para siempre! ¡para siempre!

QUINTA SEMANA DE PASCUAMartes, 16 de Mayo de 2017

“La paz os dejo, mi paz os doy”

Evangelio Jn 14, 27-31. Queridos hijos, en el Evangelio el Señor os dice: “La Paz osdejo, mi Paz os doy; no os la doy Yo como la da el mundo. Que no se turbe vuestrocorazón ni se acobarde”.

Que importantes son estas palabras del Evangelio: “Mi Paz os dejo, mi Paz os doy”.Hijos míos, el Señor os ha dejado su Paz. Os la da, para que vuestra vida sea modelo deesa paz que jamás os dará el mundo.

Cuando sois portadores de esa paz y ella inunda vuestra alma y vuestro corazón, esapaz desprenderá alegría y serenidad; la bondad y el amor brotarán por sí solos devuestro corazón, y eso quedará reflejado en el exterior y se transmitirá a los demás sindaros cuenta.

Todos los santos han sabido transmitir esa paz; paz que nace de un corazónabandonado en la Voluntad de Dios. El hombre que tiene esa paz sobrenatural vivepara Dios; vive para darle gloria, para amar a sus hermanos. Y lucha; lucha con todassus fuerzas para salir de sí mismo, de su soberbia, de su egoísmo, de sus faltas decaridad, de su impaciencia, de su falta de amor a Dios.

El mundo, en cambio, lo único que os ofrece es esa actividad precipitada cuyo fin esbuscar una felicidad que está anclada en el propio egoísmo. Es esa carreradesenfrenada para ir alcanzando deseos, llenar el vacío del corazón, cubrirse degloria…; cosas todas ellas que, al final, dejan insatisfacción en el hombre, sin que éstepueda alcanzar esa paz duradera que llenaría su corazón.

La auténtica paz sólo la puede dar Dios a un alma enamorada de Él, y que aspira adarse completamente a Dios y a los demás. Debéis luchar por conseguirla, porque,muchas veces, el mundo y todo lo que os rodea atrae vuestro corazón y hace entoncesque perdáis esa paz.

“Mi paz os dejo, mi paz os doy”, os dice el Señor. En esa Cruz bendita es donde laencontraréis, siempre que améis lo que ella conlleva y lo hagáis vuestro, y todo esesacrificio servirá para la redención de otras almas.

12

Page 13: DE LA MANO DE MARÍA · 2018-12-28 · El Señor está allí, sentado en aquella orilla, junto a la lumbre, esperando a sus hijos, para que se le acerquen y, movidos por el amor,

¡La paz, hijos! La paz que Yo os transmito con mis propias manos para que, después,vosotros seáis capaces de transmitirla a todo aquel que lo necesite.

QUINTA SEMANA DE PASCUAJueves, 18 de Mayo de 2017

“Permaneced en mi Amor”

Evangelio Jn 15,9-11. Queridos hijos, el Señor en el Evangelio os dice: “Como el Padreme ha amado así os he amado Yo, permaneced en mi Amor”. Y más adelante, en estemismo Evangelio os dice: “Que mi alegría esté en vosotros y vuestra alegría llegue aplenitud”.

En este fragmento del Evangelio, el Señor os habla de la misma manera que hablabaa sus discípulos, y os transmite unas palabras que deberían llegar al fondo de vuestrocorazón. Él os enseña cómo es el Amor que os tiene; es el mismo que le ha dado suPadre.

Sois tan limitados que la grandeza de este misterio es, para vosotros, muy difícil decomprender. Os pasa lo mismo que les pasaba a sus apóstoles; que el Señor, mientrascaminaba y estaba con ellos, les hablaba. Pero ellos, aunque le escuchaban, muchasveces no le entendían.

Hijos míos, el Señor está comparando el Amor que recibe del Padre con el que os daa vosotros, que es el mismo: Amor puro, grandioso, generoso, destinado a cada uno devosotros en particular y con toda la fuerza que proviene de Dios.

Después, el Evangelio continua: “Permaneced en mi Amor”. Permanecer en su Amores darlo todo por Él; es estar inundados de todo lo que ese Amor encierra; es vivir enesa plenitud que hace que vuestro corazón, lleno de todo lo que Él os da, se derramecon generosidad; es ese permanecer en sus llagas, sufriendo y amando con Él.

Llenaos de su santo Amor; dejadle que actúe en vuestra alma; permaneced en suAmor. ¡Hijos! ¡Qué grandioso lo que todo esto significa! De aquí brotará esa alegríaprofunda y verdadera del alma que ha sabido desprenderse de todo lo que el mundoofrece y sólo vive para este Amor.

Que no os oprima todo lo que os rodea; no dejéis que se nuble vuestra mente yentre la oscuridad; no os dejéis envolver por esa oscuridad, que es la que ofrece elmundo. Abrid de par en par vuestro corazón; que entre en él a raudales ese Amorinmerecido y lo llene por entero, y de él brote toda esa capacidad de amar quealbergáis en vuestro interior, como hijos de Dios que sois.

QUINTA SEMANA DE PASCUAViernes, 19 de Mayo de 2017

“El Mandamiento Nuevo”

Evangelio Jn 15,12-17. Queridos hijos, el Señor os dice hoy en el Evangelio: “Este es mimandamiento: que os améis unos a otros como Yo os he amado”; “No sois vosotros losque me habéis elegido, soy Yo quien os he elegido y os he destinado para que vayáis ydeis fruto…”

13

Page 14: DE LA MANO DE MARÍA · 2018-12-28 · El Señor está allí, sentado en aquella orilla, junto a la lumbre, esperando a sus hijos, para que se le acerquen y, movidos por el amor,

Hijos míos, éste es el mandamiento más grande y perfecto que el Señor quiere queviváis: el mandamiento del amor; el amor a Dios y el amor incondicional que os debéislos unos a los otros. Todos sois hijos del mismo Dios, y estáis unidos por esa filiacióndivina. Estáis hechos a su imagen y semejanza; por eso, vuestro amor debe ir muchomás allá del amor natural, porque los lazos que os unen son lazos divinos.

Cuando estéis con algún hermano, debéis ver en él, reflejado, el Rostro de Cristo; deesta manera, con este vínculo tan fuerte, os daréis por entero a él, a vuestro hermano,ya que necesita de vosotros.

Cuántos hombres andan dispersos por el mundo en completa soledad,abandonados, con total falta de amor y de comprensión. Y a veces os pasa que estáistan metidos en vuestro propio mundo, que ni tan siquiera os dais cuenta de lasnecesidades del más cercano.

Es como en la parábola del buen samaritano: cerca de aquel hombre moribundopasaron varias personas, cada cual iba a lo suyo; y con excepción del buen samaritano,los demás pasaron de largo, tenían prisa y no quisieron detenerse. Cuantas personaspasan a vuestro lado o viven con vosotros, o son vuestros amigos…, y ¡también pasáisde largo!

La caridad implica ese amor que el Señor pone en cada oveja de su rebaño: todasson importantes, todas necesitan de esa atención, de ese amor incondicional, de esadelicadeza, de ese estar pendiente de todos los detalles, de ese darse hasta el final.

El Señor dio su vida por vosotros; ¿se puede esperar una muestra de amor másabsoluta? Él os ha dado ejemplo. En su caminar solo se ocupaba de ayudar a todo elque se cruzaba en su camino. Vosotros lleváis ese amor dentro de vuestro corazónporque sois hijos de Dios; ¡dadlo a los demás! Desprendeos de vosotros mismos, devuestros egoísmos, de vuestras preocupaciones, y ¡amad, amad como el Señor osama!. No hay nada, absolutamente nada en este mundo, que de mayor felicidad que elvivir la caridad.

QUINTA SEMANA DE PASCUASábado, 20 de Mayo de 2017

El odio del mundo contra Jesucristo y los suyos

Evangelio Jn 15,18-21. Queridos hijos, en el Evangelio el Señor os dice: “Si el mundo osodia, sabed que me ha odiado a Mí antes que a vosotros. Si fuerais del mundo, elmundo os amaría; pero no sois del mundo, sino que Yo os he escogido sacándoos delmundo”.

Hijos míos, bien demostrado quedó, a lo largo de toda la Pasión, el odio que elhombre descargó sobre mi Hijo. Ese odio surgió por no querer someterse a Dios,actitud expresada en esas palabras: “non serviam!” “¡no te serviré!” . Y todo ese odioacabó con la muerte de mi Hijo.

El que sigue al Señor, el que cumple su Voluntad, no habrá de tener una vida fácil. Elmundo, entonces, lo despreciará, se reirá de él. Quien permanezca fiel al Señor noconseguirá ni poder, ni fama, y además, lo tomarán por loco. Si experimentáis todasestas cosas, es porque vais por el buen camino.

No se puede servir, al mismo tiempo, a Dios y al mundo; hay que elegir. Por esodebéis estar muy atentos, porque, a veces, el mal se disfraza con apariencia de bien, ycaéis en sus redes sin daros cuenta.

14

Page 15: DE LA MANO DE MARÍA · 2018-12-28 · El Señor está allí, sentado en aquella orilla, junto a la lumbre, esperando a sus hijos, para que se le acerquen y, movidos por el amor,

Hay muchas faltas y pecados que no los veis como tales; os habéis acostumbrado aellos, e incluso, encontráis una justificación para poder seguir cometiéndolos; porque,en el fondo, es mucho más fácil y más cómodo no preguntar, no enterarse de queaquello está mal, y se van buscando excusas para seguir obrando así, dándole juego alenemigo. Muchas veces creéis que obráis bien, porque os habéis acostumbrado, en elambiente imperante, a ver cosas que aparentan ser buenas, pues todo el mundo lashace; pero eso no ha de ser así.

Tenéis la obligación de formaros, de ver en vuestra vida aquellas cosas que puedanofender al Señor. No podéis cerrar los ojos y seguir obrando conforme a vuestrocriterio, porque seguramente vuestro criterio estará equivocado. Por eso es tanimportante hacer todas las noches el examen de conciencia, pidiendo luz al Señor; luzpara poder ver todo aquello que mancha vuestra alma y os hace vivir a ras de tierra, sintener puesta la vista en el Cielo.

“No sois de este mundo”, os dice el Señor; por tanto, vuestra vida debe estarenfocada a dar gloria a Dios, a tener la mirada en el Cielo, a impregnaros del Amor deDios y a ser esas almas que viven para Él y para ayudar a los demás. ¿¡Qué os importalo que digan y piensen de vosotros!? ¡Meditad la Pasión! ¡meditadla! El Señor os dio ejemplo; dad vosotros ejemplo,amando con ese Amor que solo Dios os puede dar.

SEXTA SEMANA DE PASCUAMartes, 23 de Mayo de 2017

La acción del Espíritu Santo

Evangelio Jn 16, 5-11. Queridos hijos, dice Jesús en el Evangelio: “Ahora me voy al queme envió…”; “…por haberos dicho esto, la tristeza os ha llenado el corazón”; “…osconviene que Yo me vaya; porque si no me voy, no vendrá a vosotros el Paráclito”.

Después que el Señor murió en la Cruz, los discípulos quedaron desolados. Durantela Pasión habían huido, y en los momentos más duros le habían dejado solo. Teníanmiedo, no se atrevían ni a acercarse, estaban confundidos, y la cobardía les nublaba lamente.

Es muchas veces lo que os puede suceder a vosotros: tenéis la Cruz delante, elSeñor os pide que seáis sus cirineos, pero huís de ella; queréis las cosas a vuestro gustoy que la vida sea más fácil. Pensad que, detrás de esa negación al sacrificio, muchasveces se esconde el egoísmo, el placer, el querer disfrutar, la soberbia…

Pero Él os eligió; os eligió entre muchos, y desea que le acompañéis en su Pasión.Ofreced el dolor, ofreced el sacrificio, ofreceos a Él.

Después, el Señor resucitó y ascendió glorioso a los cielos. Los apóstoles quedarontristes y en soledad. Les faltaba la razón de su vida, les faltaba todo. Lo mismo que a unalma que se aparta de Dios; su corazón se llena de amargura y tristeza, porque el vivirsin Dios hace que la vida no tenga sentido.

Pero Él no les dejó solos - tampoco lo ha hecho con vosotros - porque envió alEspíritu Santo; ese Espíritu que envolvió a aquellos hombres, y desde aquel momentoya fueron otros.

Cuando recibisteis el sacramento de la confirmación, recibisteis al Espíritu Santo consus dones; con ese sacramento os convertís en soldados de Cristo, quedando selladospara trabajar por el Reino de Cristo.

15

Page 16: DE LA MANO DE MARÍA · 2018-12-28 · El Señor está allí, sentado en aquella orilla, junto a la lumbre, esperando a sus hijos, para que se le acerquen y, movidos por el amor,

El Espíritu Santo es el “Gran Desconocido”. Poco se acude a Él. Por eso, hijos míos, en los momentos difíciles que os toque vivir, invocadle muchasveces, acudid a Él para que os ayude. Él se encuentra dentro de vosotros, os ilumina yos fortalece. Siempre está con vosotros, y desea que acudáis a Él. Hacedle partícipe devuestra vida, y os daréis cuenta que las cosas cambiarán; porque Él guiará vuestrospasos, y sobre todo, os enseñará a amar.

SÉPTIMA SEMANA DE PASCUADomingo, 28 de Mayo de 2017

Solemnidad de la Ascensión del Señor

Evangelio Mt 28,16-20. Queridos hijos, día muy importante el de hoy. En este domingodel año se celebra la gran Solemnidad de la Ascensión del Señor.

Los discípulos se reunieron con el Señor en el monte que Él les había indicado, y enaquel lugar ascendió a los cielos. Ellos quedaron sobrecogidos y a la vez entristecidos,porque se quedaron solos. Él les habló y les dijo estas palabras: “Id, pues, y haceddiscípulos a todos los pueblos, bautizándolos…” “…y enseñándoles a guardar todo loque os he mandado. Y sabed que Yo estoy con vosotros todos los días…”.

Después de este grandioso acontecimiento nada ha cambiado; el deseo de mi Hijosigue siendo el mismo, y con vosotros utiliza las mismas palabras que entonces: “Id,pues, y haced discípulos a todos los pueblos, bautizándolos….” y “…enseñándoles aguardar todo lo que os he mandado. Y sabed que Yo estoy con vosotros todos losdías…”.

Con estas palabras, el Señor os dice dos cosas importantes: en primer lugar, osapremia para que salgáis al mundo, de manera que todo lo que se os está dando yenseñando - que es mucho - lo difundáis entre el resto de sus hijos, que tanto lonecesitan, para que se acerquen a Él y para que aprendan a amarlo.

El hombre está sediento de Dios, aunque no quiera aceptarlo y tenga oculta esased; pero en el fondo sabe, que de la forma en la que vive, no va a encontrar nunca lafelicidad tan anhelada. A vosotros, hijos míos, se os ha dado mucho. Por eso, no ospodéis guardar ese tesoro, ese maravilloso tesoro, dentro de vosotros mismos, sinllevarlo y darlo a quien lo está necesitando.

Tenéis que enseñar a las gentes que en su interior habita Dios, en ese “sagrariointerior”; y que para llegar a Él lo primero que tienen que hacer es estar en gracia, esdecir, tener limpia su alma mediante la confesión. A partir de ahí, el Espíritu de Diosentrará a raudales en su alma, y ya estará dispuesta a oír las enseñanzas del Señor. Deesta manera le será mucho más fácil orar, ir a encontrase con Él en la Santa Misa, ypoco a poco, el Amor de Dios le irá envolviendo y ya se convertirá en otra persona.

Y en sus últimas palabras, el Señor os dice: “Yo estoy con vosotros todos los días…” .Y así es. Por amor se ha quedado en el Sagrario, viene a vosotros en la Eucaristía y osfacilita continuamente el encontraros con Él.

¡Hijos míos, cuánto amor! ¡Cuánta misericordia! No me quedan ya palabras…; es elmomento de guardar silencio e interiorizar.

16

Page 17: DE LA MANO DE MARÍA · 2018-12-28 · El Señor está allí, sentado en aquella orilla, junto a la lumbre, esperando a sus hijos, para que se le acerquen y, movidos por el amor,

SÉPTIMA SEMANA DE PASCUALunes, 29 de Mayo de 2017

“Tened valor. Yo he vencido al mundo”

Evangelio Jn 16,29-33. Queridos hijos, en el Evangelio de hoy los discípulos, al ver laforma de hablar del Señor, ya creen que estas palabras han salido de Dios. El Señor lesresponde que ellos se dispersarán y le dejarán sólo; pero Él está con el Padre, y lesdice: “Os he hablado de esto para que encontréis la paz en Mí. En el mundo tendréisluchas; pero tened valor: Yo he vencido al mundo”.

El Señor no deja de instruir a sus apóstoles, de hablarles y de darles doctrina,aunque en muy pocas ocasiones le entienden. Pero esta vez les dice algo muyimportante, que también os lo dice a vosotros: “Os he hablado de esto para queencontréis la paz en Mí”. La paz solo se encuentra en el Señor. Él es el portador de paz yde alegría; porque si seguís sus palabras y enseñanzas, ellas mismas os llevan por loscaminos del amor; y es ¡siempre el amor! el que tiene verdaderamente la fuerza y lacapacidad de producir esa paz y esa alegría en todo.

A lo largo de la vida tendréis que luchar contra muchas cosas: con el ambiente queos rodea; con la soledad humana en la que muchas veces os encontráis, porque,realmente no sois entendidos; con vuestros propios defectos, pecados y deslealtades;con las enfermedades; con las dificultades familiares…; con un sinfín de cosas que, enmuchos momentos, os producen desesperanza y desaliento en el alma. Sí, realmente lalucha es difícil; pero lo que en verdad os pasa es que no confiáis suficientemente en elSeñor.

Él os dice: “Tened valor, Yo he vencido al mundo”. Estas son sus palabras; palabrasalentadoras, llenas de esperanza, y que deben generar en vosotros ese deseo de seguirluchando, a pesar de las dificultades, porque es el Señor el que os las comunica. Él osconoce bien a cada uno de vosotros, sabe por todo lo que tenéis que pasar; pero tenéisque tener valor, valor para continuar y ser fieles.

Este valor y esta fidelidad se alimentan en la oración y en la humildad de darle alSeñor todo aquello que os preocupe y os angustie. Él lo tomará en sus manos y se harácargo de ello, de manera que vosotros lo único que tenéis que hacer es confiar.¡Confiad y no perdáis la paz interior!

SÉPTIMA SEMANA DE PASCUAMartes, 30 de Mayo de 2017

Oración sacerdotal de Jesús

Evangelio Jn 17,1-11ª. Queridos hijos, en el Evangelio el Señor os dice: “Padre, hallegado la hora, glorifica a tu Hijo para que tu Hijo te glorifique, según el poder que Túle has dado sobre toda carne, para que dé la vida eterna a todos los que le has dado.Esta es la vida eterna: que te conozcan a Ti, único Dios verdadero, y a tu enviado,Jesucristo”.

El Señor comienza este Evangelio anunciando el comienzo de su Pasión: ”Padre, hallegado la hora”; y con esta Pasión será glorificado al dar su vida por cada uno devosotros. Él desea que vayáis al Padre a través de Él - al igual que a través de Mí llegáisa Jesús - . Desea que le conozcáis e intercede por cada uno de vosotros de forma

17

Page 18: DE LA MANO DE MARÍA · 2018-12-28 · El Señor está allí, sentado en aquella orilla, junto a la lumbre, esperando a sus hijos, para que se le acerquen y, movidos por el amor,

amorosa e individual. Está pendiente de todo lo que os pasa, y siempre está ahí paraayudaros. Lo único que tenéis que hacer es acudir a Él de la misma forma que un hijoacude a su padre siempre que lo necesita.

Pero sois muy débiles, y cuantas veces pasan las horas del día sin haberos acordadoni un solo momento de decirle, al menos: ¡Te quiero! ¡Perdóname! ¡Quiero serte fiel!Palabras de amor que Él tanto agradece, y que demuestran que el alma quiere amar asu Señor.

Todos vosotros habéis experimentado el amor humano, y si pensáis un poco en ello,os daréis cuenta que, muchísimas veces, a vuestro pensamiento acudía el recuerdo deaquella persona amada; contabais las horas para poder volverla a ver; y al estar conella, todo el tiempo os parecía poco. ¿Y Dios? ¿No se merece algo más? ¿Por qué le ignoráis tanto?. Porque en el fondoese amor es muy débil, muy egoísta. El alma tiende a mirarse a sí misma, a buscar encada minuto del día la forma de encontrarse mejor, a estar pendiente, únicamente, desus sentimientos y de que lo que le rodee sea placentero. De esta manera el Señorqueda relegado a un segundo plano, y así perdéis la oportunidad de hacerle presenteen cada momento de vuestra vida. Vuelvo a recordaros que meditéis la Pasión; peroparticipando en ella de una manera profunda, y dándoos cuenta que todo aquello porlo que Él tuvo que pasar, también lo sufrió por cada uno de vosotros.

Decidle en la intimidad de vuestro corazón: “¡Perdón, Señor! por todo lo que te hago sufrir; por todo lo que tenía que haber hecho y no hice; por querer llevar siempre, yo sólo, las riendas de mi vida. ¡Ayúdame a cambiar, porque ya sabes que yo sólo no puedo! ¡Te necesito, Padre! Y te pido nuevamente perdón por el daño que te hago. ¡Imploro tu Misericordia! ¡Dame tu Salvación!”.

SÉPTIMA SEMANA DE PASCUAMiércoles, 31 de Mayo de 2017

Festividad de la Visitación de nuestra Señora

Evangelio Lc 1,39-56. Queridos hijos, hoy se celebra en la Iglesia una gran festividad: LaVisitación a mi prima santa Isabel.

El Ángel me mandó a su casa y allí fui. En el momento mismo de saludarnos, el niñosaltó en su vientre, y ella se llenó del Espíritu Santo.

Supo entonces “quién” se encontraba dentro de Mí: su Señor.Y entonces, Yo le respondí con el Magníficat; grandiosa oración, hijos míos, en la que seproclama “la grandeza del Señor” y “la humildad de su Esclava”. Es una oración muyrepetida a lo largo de los siglos, y que, al rezarla con toda atención, hace mucho bien.

En esa visita se realizó el encuentro del “Precursor” con “El que había de venir”, ynuestros corazones se llenaron de gozo y de alegría.

Hijos de mi Corazón Inmaculado, ¡gran misterio la venida de Jesús al mundo! Comosu vida entera, que fue toda ella, igualmente, un gran misterio, y especialmente, suPasión, Muerte y Resurrección.

18

Page 19: DE LA MANO DE MARÍA · 2018-12-28 · El Señor está allí, sentado en aquella orilla, junto a la lumbre, esperando a sus hijos, para que se le acerquen y, movidos por el amor,

Él, todo un Dios, se encontraba indefenso en mis entrañas; hasta en eso se humilló.Pensad en ese Niño, en ese pequeño Niño que necesita de todo el amor y de todos loscuidados para salir adelante. Dios lo quiso así. Él podía haber venido a este mundocomo un hombre poderoso, lleno de gloria y de majestad; pero no lo hizo así. Aparecióen un establo humilde, como un niño indefenso. Con esto os enseña que sólo desde lahumildad se llega a Dios.

Hijos, cuántas veces lo habéis experimentado, que cuando estáis en esos ratos deoración tan cerca del Señor, y vuestra oración transcurre por caminos de humildad, dearrepentimiento y de perdón, el corazón y el alma se os llenan de una alegría y una pazindescriptibles; porque de esa manera, le dejáis la puerta abierta al Señor para queentre en vuestra alma y se haga dueño de ella.

Hijos míos, ¡la humildad todo lo alcanza, todo lo puede! Llega directa hasta el Corazón del Señor y lo derrite en Amor hacia su criatura. Hijos míos, sed muy humildes. Proclamad la grandeza del Señor, la Santidad de suNombre y su gran Misericordia. Tened muy presente su grandeza frente a vuestrapequeñez, y que sin Él nada podéis.

Humillaos de corazón y no dejéis ni un resquicio por donde pueda entrar lasoberbia.

¿Qué sois vosotros frente a todo un Dios? ¡Nada! ¡Menos que nada!

19

Page 20: DE LA MANO DE MARÍA · 2018-12-28 · El Señor está allí, sentado en aquella orilla, junto a la lumbre, esperando a sus hijos, para que se le acerquen y, movidos por el amor,

JUNIO

SÉPTIMA SEMANA DE PASCUAViernes, 2 de Junio de 2017

La triple negación de Pedro

Evangelio Jn 21, 15-19. Queridos hijos, en el Evangelio, el Señor pregunta por tresveces a Pedro si le ama, y Pedro le responde afirmativamente. En la última de estaspreguntas es cuando Pedro responde: “Señor, Tú lo sabes todo, Tú sabes que te amo”.

El Señor pregunta. Dirigiéndose a Pedro le pregunta, porque desea ese amorprofundo y sincero, para que, a través de ese amor, se santifique, se salve y sea feliz.

Pedro le siguió; dejó todo atrás porque vio en el Señor a alguien muy especial;alguien que le quería, le comprendía, le enseñaba. Pedro fue testigo de muchosmilagros; vio cómo predicaba, cómo oraba a su Padre Dios, cómo practicaba la caridad,cómo amaba a los hombres y cómo dio su vida por todos ellos. Sin embargo, a pesar deafirmar su amor hacia su Señor, en el momento más importante, cuando tenía que darla cara por Él, le negó tres veces; tres veces le negó y tres veces dijo que le amaba. Asíes la criatura humana manchada por el pecado y la deslealtad. Después se arrepintió ysalió transformado, renovado, con mucha más fuerza que antes.

Hijos míos, el Señor también a vosotros os pregunta: “¿Me quieres? ¿Me amas?¿Hasta dónde serías capaz de llegar por Mí?”.

Si hubierais estado en la misma situación que Pedro ¿qué hubierais hecho? Decir “tequiero” es muy fácil, lo difícil es demostrarlo.

El amor es darse, es olvidarse de uno mismo para pensar en el otro. El amor esgeneroso, es leal, es fiel hasta la muerte. Abarca a toda la persona, y se dona porcompleto. Sabiendo todo esto, si el Señor os hace esa pregunta ¿cuál sería vuestrarespuesta?

¡Cuántas cosas tenéis que cambiar, hijos míos!. Pero hoy vais a empezar con una:pensad qué detalle de cariño vais a tener hoy con el Señor - algo que os cueste - y se loofrecéis por el alma más necesitada.

Todos los días en vuestro examen de conciencia os podéis hacer esta pregunta: ¿quédetalle de cariño he tenido hoy con el Señor?

Unas veces será controlar el mal carácter; otras, hacer un poco más de oración;otras, practicar más la caridad; otras veces será prescindir de vuestro propio gustopara estar pendientes del gusto del hermano, buscando siempre su bien; otras vecesserá decirle que le queréis...; pero que sea un amor de verdad, ¡con el corazón!.

El Señor, como a Pedro, os hace esa misma pregunta: ¿Me queréis? En vosotros estála respuesta.

20

Page 21: DE LA MANO DE MARÍA · 2018-12-28 · El Señor está allí, sentado en aquella orilla, junto a la lumbre, esperando a sus hijos, para que se le acerquen y, movidos por el amor,

NOVENA SEMANA DEL TIEMPO ORDINARIOLunes, 5 de Junio de 2017

Parábola de los viñadores

Evangelio Mc 12,1-12. Queridos hijos, en el Evangelio el Señor habla a los fariseossobre el “hombre que plantó una viña”. Enviaba criados para recibir lo quecorrespondía de los frutos, y los labradores los asesinaron o los maltrataron. Mandó asu hijo y pasó lo mismo: lo mataron. Entonces, el Señor dice unas palabras: “La piedra que desecharon los arquitectos esahora la piedra angular”. Este pasaje representa a esos fariseos, que se apartaban delas enseñanzas de Jesús y que, incluso, llegaron a matarlo. Es lo mismo que ocurreahora: se aparta al Señor de la vida de los hombres; éstos no siguen sus enseñanzas, eincluso “lo matan”, haciendo que desaparezca de sus vidas.

Dios da muchas oportunidades al hombre a lo largo de su vida para que vuelva a Él.Pero los hombres, manchados por el pecado, están ciegos al amor que Cristo lesbrinda. El Señor sabe cómo son, cuál será su respuesta, lo que le van a hacer; pero…¡siente tanto amor hacia el hombre! ¡es tan grande su misericordia! que no deja dehacerse el encontradizo, de acudir en su busca, de cruzarse en su camino. Lo intentauna y otra vez, le da mil oportunidades, pero es el hombre el que libremente elige elcamino que desea tomar.

Él, con sus palabras, os dice como al resto de los hombres:“La piedra quedesecharon los arquitectos es ahora la piedra angular”. Él es esa “Piedra angular”donde debéis afianzar vuestra vida. Él se presentó ante vosotros, los hombres, ymuchos lo desecharon tomándole por loco. Pero a vosotros os mira con esa mirada demisericordia, y os pide que vayáis a Él, que aprendáis sus enseñanzas y su doctrina, quevuestra vida quede transformada por su Amor, pues Él es la Piedra angular quesostiene y levanta el edificio de vuestra vida. Es la piedra más importante porque, sinella, el edificio no se sujetaría y se vendría abajo. Esto es lo que les pasa a tantas ytantas personas que ponen la piedra angular de su vida en sí mismos; por eso desechanal Señor, porque no quieren reemplazar su egoísmo, su soberbia, su avaricia, susensualidad, su pereza.

Vosotros habéis recibido en vuestra vida esta Piedra angular y está colocada en elcentro de vuestro edificio. Pues que ella os guíe, os ayude y sintáis el Amor de Dioscomo hijos de Dios que sois.

NOVENA SEMANA DEL TIEMPO ORDINARIOMiércoles, 7 de Junio de 2017

La Resurrección de los muertos

Evangelio Mc 12,18-27. Queridos hijos, en el Evangelio de hoy el Señor os habla de lavida después de la muerte. Los saduceos tratan el caso de una mujer que se casó siete veces y preguntan alSeñor cuál de ellos será su marido en la vida eterna, tras la resurrección. Y el Señor lesresponde que no entienden la Escrituras, ni el poder de Dios; que cuando resuciten,ninguno de ellos vivirá casado. Y dice unas palabras importantes: Dios “no es Dios demuertos, sino de vivos. Estáis muy equivocados”.

21

Page 22: DE LA MANO DE MARÍA · 2018-12-28 · El Señor está allí, sentado en aquella orilla, junto a la lumbre, esperando a sus hijos, para que se le acerquen y, movidos por el amor,

Estos saduceos iban preguntando todas estas cosas al Señor. En realidad les faltabala fe. Para ellos la otra vida era algo que no entendían, ni tan siquiera creían en ella.Estaban “muy equivocados” porque lo importante para ellos era la vida terrenal, lo queveían, lo que conocían… Lo mismo está pasando en estos tiempos. A Dios no se le tieneen cuenta; es como si no existiera; sólo importa lo conocido en esta tierra y se vive deespaldas a Dios, porque la fe o ha quedado adormecida, o es inexistente.

Después, el Señor emplea unas palabras importantes: “No es Dios de muertos sinode vivos”. Esta muerte de la que el Señor os habla es la “carne”, es decir: “el espíritucarnal”, el del hombre que sólo vive a ras de tierra, que solamente le importa sucuerpo y la realidad material que conoce. Pero en esa realidad no se encuentra Él, nose encuentra Dios. Él es Dios de vivos, es el Dios del espíritu, el espíritu del hombre,que es el que realmente le da la vida, la vida auténtica.

El espíritu es imperecedero, se ocupa de las cosas de Dios, se eleva hacia el cielo yvive en Dios. Esa es, hijos míos, la verdadera vida: Vivir en Dios. El vivir en la tierra esun paso que dura cierto tiempo, a unos más, a otros menos; y ese paso es paraprepararse a vivir esa verdadera vida.

Hijos míos, os hago esta pregunta: ¿Hay algo más grande que dedicar la vida a Dios?.Y después…, ¡qué gran recompensa! ¡es para siempre! ¡Para siempre! ¡Toda laeternidad! ¿Qué os importan las purificaciones, los problemas y todas las cosas por lasque tendréis que pasar? Si después de todo eso ¡es el cielo para siempre!

La vida verdadera es la de ese espíritu que debe vivir en Dios; es una vida en la quesólo importa Él, por encima de todo lo demás.

Almas de Cristo, almas eucarísticas, almas de oración: que Él inunde todo vuestroser y se haga Dueño vuestro.

NOVENA SEMANA DEL TIEMPO ORDINARIOSábado, 10 de Junio de 2017

La ofrenda de la viuda pobre Evangelio Mc 12, 38-44. Queridos hijos de mi Corazón Inmaculado: el Evangelio dehoy es el de la “pobre viuda”, que allí, despreciada por todos, echó en el tesoro deltemplo todo lo que poseía y todo lo que tenía para vivir. Su actitud contrastaprofundamente con la de los escribas, que echaban de lo que les sobraba. Estas eranpersonas poderosas, que vivían del halago. Siempre buscaban estar en los primeroslugares, para así poder ser admirados por todo el mundo; y disfrazaban su generosidaddando siempre de lo que les sobraba, de lo que ya no necesitaban; e incluso ocultabancómo robaban a estas pobres viudas. Pero, sin embargo, ante el pueblo hacían largasoraciones, llevaban una vida hipócrita, egoísta, vacía, sin sentido. Aquí el Señor os quiere mostrar la vida que llevaban esos escribas y la de esta pobreviuda. Quiere enseñaros el valor de la confianza en Dios, de la humildad, del amor y delsacrificio hacia los demás.

El tiempo en esta vida es corto, aunque parece largo; y esta vida hay que consumirlaen dar gloria a Dios, no a vosotros mismos. La viuda del Evangelio representa ésevaciarse, ése no ser nadie ante los ojos de los hombres, pero ser mucho ante los ojosde Dios; representa también ése vivir únicamente confiando en Dios.

Tenéis que vivir desprendidos de todos los bienes materiales; estos bienes estánpara el servicio de los demás, para que su utilidad sea la de hacer el bien y no para

22

Page 23: DE LA MANO DE MARÍA · 2018-12-28 · El Señor está allí, sentado en aquella orilla, junto a la lumbre, esperando a sus hijos, para que se le acerquen y, movidos por el amor,

acapararlos donde “la polilla los corroe”. Esta pobre viuda en realidad no era pobre; eramuy rica porque poseía ese amor a Dios que a otros les faltaba. Ella sentía en sucorazón esa paz y esa alegría interior de no pensar en sí misma. Su persona leimportaba poco o nada y humildemente se acercó pasando totalmente desapercibida -aunque no para el Amor de Dios - y se quedó vacía del mundo. ¡Lo dio todo!¡absolutamente todo!. Y ese vacío quedó lleno del Amor de Dios.

Vivís en un mundo materialista en que se da culto al bienestar y al propio yo. Hijosmíos, no dejéis que todo eso llene vuestra alma, porque, poco a poco, esematerialismo se va haciendo dueño de ella sin daros cuenta, y acabáis como esosescribas.

En vuestra forma de actuar, pensad en esa viuda, porque eso os ayudará a quevuestra vida sólo esté encauzada a seguir y a cumplir la Voluntad de Dios.

DÉCIMA SEMANA DEL TIEMPO ORDINARIOLunes, 12 de Junio de 2017

Las Bienaventuranzas Evangelio Mt 5,1-12. Queridos hijos, gran enseñanza tiene el Evangelio de hoy: LasBienaventuranzas. Allí el Señor, ante el gentío, fue enumerándolas una a una, para que comprendieran; ycon ello, trazó el camino que un verdadero hijo de Dios debe de seguir. Son palabrasque un hombre que se encuentre imbuido por el mundo no puede entender ni vivir.

“Bienaventurados los pobres de espíritu”. Qué importante es la pobreza espiritual, esapobreza que tanto os acerca a la humildad. Con ella toda vuestra vida queda en manosde Dios, porque el alma sabe y comprende que nada tiene que no le venga de lo alto.Es una confianza ciega, es ese “ser un mendigo de Dios”, un “mendigo de su Amor”.

“Bienaventurados los mansos”, como son esas pequeñas ovejas del rebaño, mansas,que se dejan hacer. En esas almas brilla la paz interior, porque su mansedumbre leslleva a abandonarse únicamente en el Corazón de Cristo, que hace de guía a esa almaenamorada de Dios.

“Bienaventurados los que lloran”. Los que lloran esas lágrimas de arrepentimientosincero por haber hecho daño al Señor recibirán el consuelo; el consuelo de la otraVida. Porque el Señor, ante la humildad de un alma arrepentida, no se deja ganar engenerosidad.

“Bienaventurados los que tienen hambre y sed de la justicia”. Esa hambre y esa sed esla que tiene el alma por cumplir la Voluntad de Dios. Hambre y sed por ser perdonados,de ser otros Cristos, de ayudar a otras almas que lo necesitan.

“Bienaventurados los misericordiosos”. Esto es lo que debe de anidar en vuestrocorazón. La Misericordia que ha tenido el Señor con vosotros tenedla vosotros con losdemás. Dad amor, perdonad a los que os ofenden, rezad por ellos y abrazad al que máslo necesita.

23

Page 24: DE LA MANO DE MARÍA · 2018-12-28 · El Señor está allí, sentado en aquella orilla, junto a la lumbre, esperando a sus hijos, para que se le acerquen y, movidos por el amor,

“Bienaventurados los limpios de corazón”, esa limpieza que hace al alma pura. En ellano existe la mentira, la hipocresía; todo lo ve con los ojos de Dios.

“Bienaventurados los que trabajan por la paz”. Para que no haya odio en el mundo,tenéis que ser transmisores de esa paz que inunde las almas y las ayude a acercarse aDios.

“Bienaventurados los perseguidos por causa de la justicia”. ¡Qué alegría, hijos, que ospersigan por Cristo! Es el mayor honor que podéis recibir. Y vuestra vida serárecompensada grandemente; vuestro será el Reino de los Cielos. Por eso, que no osimporte que os persigan, que os calumnien por causa del Señor, porque éste es elcamino del cristiano si vive conforme a las enseñanzas de Cristo. Éste es el camino,hijos míos, que habéis de seguir; éste es el que os llevará a la santidad.

DÉCIMA SEMANA DEL TIEMPO ORDINARIOMartes, 13 de Junio de 2017

Sal de la tierra y luz del mundo Evangelio Mt 5,13-16. Queridos hijos, el Señor, al hablar a sus discípulos en elEvangelio, os está hablando también a vosotros; se dirige a vosotros de la mismaforma que si estuviera hablando con ellos. Primero os dice: “Vosotros sois la sal de latierra. Pero si la sal se vuelve sosa, ¿con qué la salará?”. “Sois la sal de la tierra”. La sal es un condimento esencial para dar sabor a lascomidas y para que el alimento no se estropee. Cuando se utiliza, se disuelve y ya no seve. “Ser sal” significa saber estar en el mundo, en el lugar donde el Señor os ha puestoa cada uno, siendo utilizados por Él como condimento, es decir, para que los otrossabores se noten y sean buenos al paladar. Ellos necesitan de esa ayuda de la sal, parasacar todo lo bueno que llevan en su interior. Sin la sal ya no resultaría la mismo; y estaayuda que da la sal hace que ella misma desaparezca, que no se vea; sólo se apreciaque los otros alimentos saben mejor. Esta es la ayuda que debéis dar a los demás para que ellos reluzcan, se llenen deDios. Pero esta ayuda se disuelve, pasa desapercibida, no se nota, porque su función esser ese condimento que hace que los demás brillen a los ojos de Dios. Esta sal, por lotanto, está unida a la humildad; a esa humildad que os hace desaparecer y que no seos note. Es a lo que tenéis que aspirar a la hora de ayudar a los demás.

También el Señor os dice: “Vosotros sois la luz del mundo”; “Brille así vuestra luzante los hombres, para que vean vuestras buenas obras y den gloria a vuestro Padreque está en los cielos”.

Hijos míos, “sois la luz del mundo” que brilla gracias a vuestras buenas obras. Tenéisque ser ese ejemplo para todos aquellos que viven en la oscuridad. Al ver vuestra luzpenetrante, luminosa, desearán acercarse para poder recibirla.

Esa Luz es Cristo, que penetra en las almas y corazones iluminando su vida yhaciendo que sea otra.

Sal y luz, eso es lo que sois para el mundo, eso es lo que se os pide y lo que quiere elSeñor: que paséis por la tierra dejando esa estela de luz y de salvación.

24

Page 25: DE LA MANO DE MARÍA · 2018-12-28 · El Señor está allí, sentado en aquella orilla, junto a la lumbre, esperando a sus hijos, para que se le acerquen y, movidos por el amor,

El Señor guiará vuestras vidas; trabajaréis para Él, para ser ese “faro en la noche”que alumbra a todo el que se acerca a él, y ese humilde condimento que ayuda a sushermanos a conocer a Cristo.

DÉCIMO PRIMERA SEMANA DEL TIEMPO ORDINARIOLunes. 19 de Junio de 2017

Mansedumbre y humildad de corazón

Evangelio Mt 5,38-42. Queridos hijos, en el Evangelio de hoy, Jesús os habla de lamisma manera que hizo con sus discípulos. Ahora, a través de este Evangelio, quierellegar a vosotros con estas palabras: “No hagáis frente al que os agravia. Al contrario, si uno te abofetea en la mejilladerecha, preséntale la otra”.

Con estas palabras el Señor os enseña a practicar la humildad, el amor al prójimo, lamansedumbre. En cuántas ocasiones a lo largo de vuestra vida os habéis sentidoofendidos, maltratados, despreciados, no entendidos… En tales situaciones, lo más fáciles ponerse en contra de esa persona y responderle de la misma manera que el tratorecibido por ella. No es esa la actitud que el Señor os pide.

Él a lo largo de su vida tampoco obró así. En el largo recorrido de su Pasión, cuandoaquellas gentes le maltrataban de tan cruel manera, Él ¿qué fue lo que hizo? Losmiraba con mirada de misericordia, de amor, de perdón; no se rebeló en ningúnmomento, y enseñó el gran valor que tiene el sufrimiento. Muchos de aquelloshombres ante aquella mirada cambiaron su corazón y quedaron convertidos. A partirde aquél momento su vida cambió tanto, que ya fue otra.

Vosotros le habéis dado al Señor toda vuestra vida; incluso en muchas ocasiones oshabéis ofrecido para ser esos pequeños cirineos que le ayuden a llevar su Cruz, a paliartanto sufrimiento. Por eso, hijos míos, esa cruz muchas veces viene dada por elsufrimiento que os causan los hombres, incluso vuestros hermanos, o los más queridosy allegados, como puede ser los de vuestra propia familia.

Poned amor donde no lo hay; sed como vuestro Maestro : manso y humilde decorazón. El amor todo lo alcanza, derrite los corazones más duros, derriba barreras.

Aprended del Señor a poner la otra mejilla si os abofetean; que no se llene vuestrocorazón de ira, lo que provocaría la pérdida de la paz interior que nunca os debe defaltar. No es tarea fácil; por eso, vivid ese recogimiento interior, para que el alma estémás preparada para cuando lleguen los momentos difíciles. Esto es otra forma de amarla Cruz. Uníos a los padecimientos de mi Hijo y aprended a ser mansos y humildes decorazón.

Pero también os digo que, cuando algo tengáis que decir por justicia, porque unapersona ha cometido un gran fallo y hay que ayudarla a que rectifique, en esosmomentos tampoco debéis callar; eso sí, la forma de decirlo es como lo haría el Señor:con todo el amor y la misericordia que sea capaz de dar vuestro corazón; sin ira, sinrencor, sin perder la paz, antes al contrario, llenos de paz.

De esta manera, y encomendándoos a su Ángel custodio, llegaréis a su corazón, si veen vosotros esa sinceridad, esas ganas de ayudar, pero a su vez, ese amor y esamisericordia.

25

Page 26: DE LA MANO DE MARÍA · 2018-12-28 · El Señor está allí, sentado en aquella orilla, junto a la lumbre, esperando a sus hijos, para que se le acerquen y, movidos por el amor,

DÉCIMO PRIMERA SEMANA DEL TIEMPO ORDINARIOJueves, 22 de Junio de 2017

Modo de hacer la oración

Evangelio Mt 6,7-15. Queridos hijos, el Señor os enseña en este pasaje del Evangeliode qué forma debéis orar. Él sabe muy bien lo que necesitáis, y esta oración, elPadrenuestro, es una oración dictada por Él; por lo tanto, no hay ninguna que la iguale.

Al empezarla os dirigís al Padre, al “Padre que habita en el Cielo” y también envuestro interior. Y “su Nombre es santo”, porque es Dios, y no hay nada que seasuperior a Él.

Después pedís que “venga su Reino” a vosotros. Si vuestra alma está en gracia, ya lotenéis en vuestro interior; ese “Reino” habita en vosotros. Sois sus hijos, y ese “Reino”debe empapar vuestra vida hasta que seáis un reflejo de Él.

Después, pedís que “se haga su Voluntad”. Para ello, el alma debe estar dispuesta asufrir, a llorar, a reír, a confiar, a abandonarse, a ser humilde ante lo que os pide elSeñor. El “hacer su Voluntad” os da esa alegría y esa paz interior. Los problemas, sinduda, seguirán existiendo; pero amáis la Cruz, y al amarla os fundís en ella, y a travésde ella ayudáis a la Redención.

Pedid todos los días que el Señor os de la gracia, no para “aceptar su Voluntad”,sino para “amar su Voluntad” sobre vosotros.

En la segunda parte de esta bellísima oración, quiero resaltar estas palabras delSeñor: “Perdona nuestras ofensas, así como nosotros perdonamos a los que nosofenden”. Primero pedidle perdón al Señor de todo corazón por todas las faltas deamor, pecados, infidelidades, deslealtades,… ¡tantas cosas que hieren el corazón delSeñor! Pero también os pide que perdonéis a todo aquel que os ofende.

En los días anteriores os he hablado ya de todo esto. Lo que os quiero decir, hijosmíos, es que necesito corazones enamorados de Cristo, que sepan ver reflejado en sushermanos ese Rostro; corazones cuyo interior esté tan lleno de ese “grandioso Amor”,que se desborde hacia fuera, hacia los hermanos, con la seguridad de que esa luz lesllegará y transformará sus corazones, dándoles la luz y el calor de Cristo.

DÉCIMO PRIMERA SEMANA DEL TIEMPO ORDINARIOViernes, 23 de Junio de 2017

Festividad Sagrado Corazón de Jesús

Evangelio Mt 11,25-30. Queridos hijos, dice el Señor en el Evangelio: “Venid a Mítodos los que estáis cansados y agobiados, y Yo os aliviaré. Tomad mi yugo sobrevosotros y aprended de Mí, que soy manso y humilde de corazón, y encontraréisdescanso para vuestras almas. Porque mi yugo es llevadero y mi carga ligera”. Alhablaros aquí el Señor en la fiesta de su Sagrado Corazón, se dirige a vosotros conpalabras llenas de profundidad. Cuando menciona el “yugo” y la “carga” se refiere a la“cruz”, a la “cruz de cada día”, y os dice que es “llevadera” y “ligera”.

Cuando pensáis en esa cruz, ¿qué os parece?: ¿es llevadera y ligera? o por elcontrario ¿es pesada? Si es pesada y se lleva arrastrando es porque en vuestro corazónno existe esa humildad y mansedumbre de la que os habla el Señor.

26

Page 27: DE LA MANO DE MARÍA · 2018-12-28 · El Señor está allí, sentado en aquella orilla, junto a la lumbre, esperando a sus hijos, para que se le acerquen y, movidos por el amor,

Para amar la cruz hay que tener un corazón humilde, que se da cuenta de sus fallosy errores, y se abandona y confía; y entonces se postra ante la Cruz, porque quierehacerse partícipe del sufrimiento que tuvo el Señor. Él alivia vuestro cansancio cuandoaprendéis de Él a llevar esa cruz, vuestra cruz.

Cuando no se acepta el sufrimiento, eso produce en el alma cansancio, agobio,tristeza y falta de paz; es ese rebelarse, ese querer con ansiedad que las cosas seandiferentes, esa pretensión de moldear la vida a vuestra manera; es el mirar esa cruzcomo un enorme y pesado madero que os hunde y agobia.

Muy al contrario, ese bendito madero de la Cruz es signo de la realeza del Señor; eslo más grande a lo que os debéis abrazar, hasta llegar a conocer y amar su ciencia: “laCiencia de la Cruz”.

Pocos en este mundo lo han entendido, pero quien lo ha hecho encontró “la perlapreciosa”, “el tesoro escondido” , el Paraíso.

Hoy, fiesta de su Sagrado Corazón, es un día importante para que reflexionéis cómoes vuestro amor por Él. Él os ofrece su Corazón lleno de Amor por vosotros, os loentrega; ¿y vosotros?¿le habéis entregado el vuestro?.

Consagraos hoy a Él, a ese Corazón que tanto os ama y vela por vosotros. ¿Hayalguien en la tierra que os quiera de esta manera? ¡Nadie, hijos míos!¡Nadie!

Ofrecedle vuestro corazón a través del Mío. Él lo cogerá en sus manos, lo besará y selo llevará, y ya será suyo.

DÉCIMO SEGUNDA SEMANA DEL TIEMPO ORDINARIOLunes, 26 de Junio de 2017

No juzgar al prójimo

Evangelio Mt 7,1-5. Queridos hijos, en el Evangelio el Señor vuelve a recordaros: “Nojuzguéis para que no seáis juzgados. Porque seréis juzgados como juzguéis vosotros; yla medida que uséis, la usarán con vosotros”.

Ya sabéis, hijos míos, que el juzgar a las personas sólo le pertenece a Dios. Pero elhombre tiende al pecado, su naturaleza está dañada y es muy fácil emitir esos juiciossobre los demás y no ver los defectos y pecados propios.

En el hermano debéis de ver a “otro Cristo”; y si obra mal, después de haberlollevado a la oración, y con mucha caridad y cariño, le hacéis ver que aquello que hizono está bien. Es muy fácil juzgar, criticar, pensar mal; mucho más fácil que ayudar a queel hermano rectifique. Esa forma de actuar, de eludir ese “deber de caridad”, sólo espropio de cobardes y de personas que se quieren más a sí mismas y que no lesimportan los demás.

Los primeros cristianos, en sus primeras comunidades, llamaban la atención por“cómo se querían”. Si se ama de verdad lo único que se desea es el bien de la otrapersona, deseo que lleva a ayudarle bajo la luz del Espíritu Santo.

¡Hijos!¡Ayudaos entre vosotros!¡Amaos de verdad! …imitando a aquellos primeroscristianos. El amor es lo que debe regir vuestra vida, ese amor que el Señor hadepositado en vuestro corazón para darlo a todo el que lo necesite.

27

Page 28: DE LA MANO DE MARÍA · 2018-12-28 · El Señor está allí, sentado en aquella orilla, junto a la lumbre, esperando a sus hijos, para que se le acerquen y, movidos por el amor,

DÉCIMO SEGUNDA SEMANA DEL TIEMPO ORDINARIOMartes, 27 de Junio de 2017

“Entrad por la puerta estrecha”

Evangelio Mt 7,6.12-14. Queridos hijos, hoy el Señor os dice en el Evangelio: “Entradpor la puerta estrecha. Porque ancha es la puerta y espacioso el camino que lleva a laperdición”; “¡Que estrecha es la puerta y que angosto el camino que lleva a la vida!”.

El Señor en este Evangelio os está hablando de dos clases de puerta: la ancha yespaciosa, y la estrecha, con un camino angosto y difícil.

Es fácil saber a que se refiere el Señor con este ejemplo. Cuando habla de la puertaancha y del camino espacioso, es el sendero que ofrece el mundo. En esta puerta sequiere la vida fácil, sin problemas, en que todo se resuelva rápidamente. Cada uno delos que han elegido ese camino espacioso llevan su vida a su antojo y manera,pensando únicamente en sí mismos y en su bienestar.

La puerta estrecha y el camino angosto es el “camino de la Cruz”. Es el camino difícilen el que está presente el dolor, pero en el que se encuentra Cristo; porque estesendero es de amor hacia Él, y por Él, a los demás. En ese camino se redime junto alSeñor.

Muy pocos eligen este camino, porque cuesta, y a través de él hay que darlo todo.Hijos míos, es el camino que vosotros debéis seguir.

Cuando los tres discípulos escogidos subieron con el Señor al monte Tabor, nodejaron de tener dificultades, porque no era fácil la subida. Al igual que cuandovosotros subís una montaña, la ascensión es costosa. Llega el cansancio, se pierden lasfuerzas…; pero en la cima se encuentra la recompensa. Lo mismo que les pasó a losapóstoles. Allí, en la cima, quedaron dormidos por el cansancio, pero después llegó loque no esperaban, ¡un gran premio!

Vuestro camino no es fácil - nunca dije que lo fuera - y requiere mucha fe, confianzay abandono en Dios.

Entrad por la puerta estrecha, seguid por el camino angosto, porque llegaréis a laVida, a la verdadera Vida en la que estáis llamados a entrar. ¡No miréis atrás! No hagáiscaso a las voces que os insinúan que cambiéis de camino. Id por la senda estrecha, ygrande será vuestra recompensa.

DÉCIMO SEGUNDA SEMANA DEL TIEMPO ORDINARIOJueves, 29 de Junio de 2017

Solemnidad de San Pedro y San Pablo

Evangelio Mt 16,13-19. Hijos míos, en el pasaje del Evangelio de hoy, el Señor hablócon Pedro y sus apóstoles, como tantas y tantas veces lo hace con vosotros. Os dice: “Yvosotros, ¿quien decís que soy Yo? Simón Pedro tomó la palabra y dijo: Tú eres elMesías, el Hijo de Dios vivo.”

A Pedro le resultaba humanamente imposible dar esta respuesta, porque le costabaentender y comprender quién era Jesús; pero le amaba mucho, y le fue fiel hasta lamuerte. Cuando él le respondió de esa manera, estaba iluminado por la luz del EspírituSanto, ya que para él hubiera sido imposible entender esto. Realmente para Pedro nofue nada fácil, pero confió y se dejó llevar, aunque a veces no hiciera las cosas bien.

28

Page 29: DE LA MANO DE MARÍA · 2018-12-28 · El Señor está allí, sentado en aquella orilla, junto a la lumbre, esperando a sus hijos, para que se le acerquen y, movidos por el amor,

Y ahora el Señor, en este ratito de oración y de reflexión os pregunta: “Vosotros,hijos míos, ¿quien decís que soy Yo?¿Quien es el Señor para vosotros?”. Pensadlodurante unos minutos.

No es fácil la respuesta. Porque os compromete y os hace daros cuenta quién es Él yquienes sois vosotros: simples criaturas. Esto os lleva por los caminos de la humildad.

Porque ¿qué es la criatura frente al Creador? ¿Qué es el pincel usado en una obramaestra de la pintura, frente al artista que lo utiliza? Es un instrumento pequeño quedebe de ser dócil para dejarse limpiar, para dejarse empapar del color que desea elartista, para dejarse mover al dar esas pinceladas maestras.

El Señor es el “Divino Artista” que desea utilizar el pincel para hacer la obra de arte.Esa obra de arte es vuestra vida, realizada por Él.

Si no os dejaseis utilizar, sería imposible hacer ese cuadro perfecto y grandioso;porque el pincel no puede moverse solo; necesita de la mano del artista para serutilizado.

Él es “El Mesías, El Hijo de Dios vivo”. ¡Todo un “Dios vivo”! que acude al hombrepara que, si se deja utilizar, salgan grandes obras maestras; obras maestras quesolamente las puede hacer todo un Dios.

Hijos míos ¡sed dóciles! No os resistáis a su ayuda. Dejaos llevar y veréis cómovuestra vida queda transformada en una gran “obra maestra” . Esa gran obra que, aladmirarla el resto de los hombres, les ayudará a acercarse a Dios.

DÉCIMO SEGUNDA SEMANA DEL TIEMPO ORDINARIOViernes, 30 de Junio de 2017

Curación de un leproso

Evangelio Mt 8,1-14. Queridos hijos, en el pasaje del Evangelio de hoy un leproso seacercó al Señor, y le dijo: “Si quieres, puedes limpiarme”, entonces el Señor “extendió lamano y le tocó diciendo: Quiero, queda limpio”.

La lepra era una enfermedad muy peligrosa, y hacía que las personas que lacontraían se las considerase proscritas. Tenían que vivir fuera de la ciudad y noacercarse a la gente por haber peligro de contagio.

Este pobre hombre, movido por la fe, se acercó al Señor para que le curase; y elSeñor, movido por su gran compasión y viendo la gran fe que tenía este hombre, locuró.

Pero, no solamente existe la lepra del cuerpo, también existe la lepra del alma: laque va pudriendo y consumiendo todo el amor que debe tener el corazón del hombrehacia su Padre Dios; es esa enfermedad tan peligrosa llamada “tibieza”. A los tibios los“vomitará” el Señor, dice la Santa Escritura.

Esta enfermedad comienza lentamente a apoderarse del alma con pequeñasinfidelidades, renunciando a darle al Señor lo que todos los días os va pidiendo.

Es muy sutil, y lentamente va calando en el alma hasta que, a base de deslealtades ydesobediencias, se va apoderando de ella y ganando terreno. Y llega un momento enque el alma se encuentra en ese estado de frialdad, de desgana, y sin fuerzas paraseguir al Señor.

Es ese aparentar ser bueno, pero en el fondo no serlo; es ese estado de letargo, deno querer avanzar, de quedarse cómodamente donde uno se encuentra, porque levence el amor a sí mismo y la comodidad; es ese no ser “ni frío, ni caliente”, y

29

Page 30: DE LA MANO DE MARÍA · 2018-12-28 · El Señor está allí, sentado en aquella orilla, junto a la lumbre, esperando a sus hijos, para que se le acerquen y, movidos por el amor,

mantenerse en esa actitud de rechazar la exigencia y no desear ir hacia adelante. Elalma entonces, poco a poco, se va oscureciendo hasta quedar al final en completaoscuridad.

Hijos míos, no permitáis que esta enfermedad se apodere de vuestra alma. Luchadpara que cuando percibáis el menor síntoma, desechéis esa predisposición a no quereresforzaros y avanzar; ese quedaros en un estado de comodidad donde nadie osmoleste, para así poder ir a vuestro aire y según vuestra conveniencia.

No os olvidéis cada noche de hacer el examen de conciencia. Ese examen que osayudará a descubrir cualquier cosa que os esté alejando de Dios. Cuando lo hagáis,pedid ayuda; pedid la luz del Espíritu Santo para ver esas pequeñas “raposas” que sevan metiendo dentro del alma y la van enfermando.

El examen es como la señal que detectará rápidamente qué cosas no han ido bien yasí poder, con dolor y arrepentimiento, todos los días, pedirle al Señor perdón. Y no osolvidéis de confesaros habitualmente, para que el enemigo no vaya ganando batallas.Él es astuto, y sabe que si un alma, por pereza o comodidad, va retrasando laconfesión, allí tiene mucho terreno ganado; porque, como os he dicho, esa alma se irádurmiendo, le irá faltando esa luz necesaria para descubrir cuándo una obra que hizo,la hizo mal, y se justificará a sí misma; así, las malas conductas irán dejando posos que,cada vez más, se irán acumulando en el alma, hasta hacerla enfermar.

¡Hijos! ¡Estad alerta! ¡No os dejéis llevar! Luchad para no caer en esta tremendaenfermedad.

30

Page 31: DE LA MANO DE MARÍA · 2018-12-28 · El Señor está allí, sentado en aquella orilla, junto a la lumbre, esperando a sus hijos, para que se le acerquen y, movidos por el amor,

JULIO

DÉCIMO SEGUNDA SEMANA DEL TIEMPO ORDINARIOSábado, 1 de Julio de 2017

La fe del centurión

Evangelio Mt 8,5-17. Queridos hijos de mi Corazón Inmaculado, el Señor en elEvangelio os habla de ese centurión que tenía un criado enfermo, y era tanta su fe enJesús que le pidió que le curara. Nunca el Señor había encontrado tanta fe y tantahumildad. Sus palabras quedaron grabadas en la santa Misa para siempre: “Señor, nosoy digno que entres bajo mi techo. Basta que lo digas de palabra, y mi criado quedarásano”. Él no le pidió al Señor que fuera a su casa, ni tan siquiera que viera al enfermo;únicamente le pidió que dijera una palabra y confió plenamente en que sanaría.

Y ahora os pregunto Yo, hijos míos: ¿Vuestra fe y vuestra confianza en el Señorllegan hasta este nivel? Daos cuenta que este centurión era romano, ni tan siquiera erajudío; tenía un alto puesto en su trabajo y estaba bien considerado. Pero era unhombre que se ocupaba de los que trabajaban con él con suma caridad. Estaba muypreocupado por el sufrimiento de su criado y fue en busca de Jesús. No le preocupabalo que los demás pensaran, porque él ya sabía que tanto los romanos como los judíosno le iban a entender. Éste hombre fue un gran ejemplo de fe y de humildad; en ningúnmomento dudó.

Tener esa fe, esa confianza en el Señor os ayudará mucho cuando os asalten lasdudas o vengan las dificultades. Siempre os digo que ésta virtud la tenéis que pedir,porque es muy importante para seguir el camino que Yo os he marcado.

¡Señor, que vea! ¡Señor, que vea! Esta es una buena jaculatoria que debéis repetirvarias veces al día; ese “ver” como vio el centurión; esa “fe” que traspasa fronteras,que ilumina toda la existencia y da ese vigor al alma para emprender grandesempresas.

El criado se curó y en aquella casa volvió la alegría. En vuestro caso puede llegar apasar lo mismo; todo lo que hoy veis imposible, con fe se hará posible.

¡Hijos míos, no debéis dudar! Esa fe debe de quedar bien arraigada dentro devuestro corazón, para que lo imposible se pueda hacer posible.

DÉCIMO TERCERA SEMANA DEL TIEMPO ORDINARIOMiércoles, 05 de Julio de 2017

Curación de dos endemoniados

Evangelio Mt 8,28-34. Queridos hijos, en el pasaje del Evangelio de hoy el Señor llega aun lugar donde se encontraban dos endemoniados. Y el Señor, con su autoridad divina, mandó a esos demonios que fueran a una piara decerdos; y todos aquellos cerdos cayeron por un acantilado, muriendo al hundirse en lasaguas. Pero a Jesús le “echaron” de la ciudad; los dueños de los puercos y la gente noquisieron admitirlo allí; le pidieron que se alejase de sus términos.

31

Page 32: DE LA MANO DE MARÍA · 2018-12-28 · El Señor está allí, sentado en aquella orilla, junto a la lumbre, esperando a sus hijos, para que se le acerquen y, movidos por el amor,

¿Por qué hicieron esto con Jesús la gente de aquella ciudad? Porque para ellos eramucho más importante el dinero que podían sacar por los cerdos, que la vida de esasdos personas. Tampoco supieron valorar el milagro que hizo el Señor. A ellos lo únicoque les importaba eran sus negocios temporales, la parte material, no lo que el Señorquiso mostrarles al realizar ese milagro.

Aquí Jesús, en este pasaje, muestra varias cosas: los endemoniados le llaman “Hijode Dios”, le temen y quieren que se vaya. Él tiene poder sobre ellos y es el Hijo de Dios;y ante ese poder no se pueden resistir, se tienen que ir.

La gente del pueblo no podía pasar por aquel sitio donde se encontraban esos doshombres. Sin embargo, ante tal prodigio hecho por Jesús, aun así, no quisieron creer;se molestaron y lo echaron.

El Señor muchas veces pasa por la vida del hombre, se acerca para ayudarle, parahacerle el bien; y muchos, como la gente de aquella ciudad, lo echan de su vida; lorechazan, aunque hayan visto prodigios y milagros, porque su corazón solo albergaegoísmo y carece de fe.

Pero el Señor es Padre y quiere a sus hijos con ese “Amor de Misericordia”. No secansa. Llama a la puerta una y otra vez: a la puerta de vuestra vida; y vosotros sois losque decidís si le abrís o no.

Hay un cuadro muy significativo que refleja todo esto: un hombre está detrás de lapuerta, dentro de su casa, y el Señor está fuera; y esa puerta solo tiene un picaporte enla parte de dentro; porque es el hombre el que decide, con su libertad, si abrirla o no.El Señor no fuerza la cerradura. Solo espera…; espera a que le abráis la puerta devuestro corazón.

Cada vez que decidís hacer las cosas “a vuestra manera”, esa puerta se cierra. Sólose abre cuando tomáis la decisión de cumplir la Voluntad de Dios en todo momento.

Hijos míos, también quiero deciros que no busquéis a Dios únicamente en “loextraordinario”. Él está presente en todo momento, en cada cosa que hacéis a lo largodel día. Y esos momentos son los que tenéis que santificar, lo que realmente ocurre enlas veinticuatro horas del día, que es lo ordinario. ( aunque Dios también está presente,y de una forma especial, en lo “extraordinario”)

El “Gran Milagro” lo tenéis en la Santa Eucaristía; pero os falta fe para valorarlo así.Si tuvierais un “granito de mostaza” de esa fe que se os pide allí, en cada Misa,¡saldríais transformados! Porque lo que realmente ocurre allí es un auténtico Milagro.

DÉCIMO TERCERA SEMANA DEL TIEMPO ORDINARIOJueves, 6 de Julio de 2017

Curación de un paralítico

Evangelio Mt 9,1-8. Queridos hijos, el pasaje del Evangelio de hoy tiene una granenseñanza. Le presentan al Señor un paralítico, y viendo su fe le perdona sus pecados.Fijaos en este detalle, cualquiera de vosotros podría llegar a preguntarse: ¿Qué es másimportante: que éste paralítico vuelva a andar, o que le sean perdonados sus pecados? Pero los escribas se escandalizan, y el Señor les dice: “¿Qué es más fácil, decir: “Tuspecados te son perdonados”, o decir: “Levántate y echa a andar?” Y ocurre el milagro.Porque el Señor nunca se deja ganar en generosidad, y le cura de su enfermedad.

Este hombre no estaba únicamente enfermo en su cuerpo, sino también, en sualma. Y mucho más importante es la curación del alma que la del cuerpo. Pero para los

32

Page 33: DE LA MANO DE MARÍA · 2018-12-28 · El Señor está allí, sentado en aquella orilla, junto a la lumbre, esperando a sus hijos, para que se le acerquen y, movidos por el amor,

hombres no es así, dan mucha más importancia a tener sano el cuerpo. Porque paraellos el alma es menos importante; es algo que “no se ve”, y que “depende de cadahombre”, de “sus creencias”.

El paralítico, después de este gran milagro que el Señor hizo con él, se convirtió yaen un hombre nuevo, ya podía andar. Pero, lo que realmente tuvo importancia, es quedejó de ser ciego “ante la realidad de Dios”. Su alma quedó preparada así para poderseguir a Cristo; y a Cristo se le puede seguir incluso sin poder andar. Aunque el Señorno le hubiera sanado de su enfermedad, con haberle perdonado sus pecados, ya eso lehubiera permitido seguir a Cristo.

Todavía hoy ¡cuántos hombres, como los escribas, se siguen escandalizando delSeñor! Y vosotros, hijos míos, si estáis enfermos y os dan a elegir entre la curación devuestro cuerpo o la de vuestra alma, pensadlo bien: ¿qué sería lo que elegiríais? ¿Aqué le dais más importancia?

¿Por qué os preocupáis tanto cuando tenéis ciertos dolores o enfermedades? Esverdad que tenéis la obligación de cuidaros, os lo digo siempre; pero no lo pongáis enel primer lugar entre vuestros pensamientos y preocupaciones. El cuerpo es materia yllegará un día en que desaparecerá ; sin embargo, el alma es espíritu, no desaparece,ya que es el hilo conductor que os une a Dios; es lo que os hace ser persona, y por elloes lo que más debéis de cuidar.

Esta alma debe de estar muy bien alimentada a través de la oración y de lossacramentos; y si os llega la enfermedad, ofrecedla con amor por tantos pecados quese cometen en el mundo.

Sois almas elegidas, y - no me canso de decirlo - tenéis mucha más responsabilidadque otros. Vuestra alma es lo más precioso que poseéis; frente a eso, lo demás ¿queimportancia tiene?.

¡Mantened vuestra alma limpia, pura, en total unión con Dios!Y abierta para dar amor a todos vuestros hermanos.

DÉCIMO QUINTA SEMANA DEL TIEMPO ORDINARIO Lunes, 17 de Julio de 2017

“El que pierda su vida por Mí la encontrará”

Evangelio Mt 10,34-11,1. Queridos hijos, os dice el Señor en el Evangelio: “El quequiera a su padre o a su madre más que a Mí, no es digno de Mí; el que quiere a su hijoo a su hija más que a Mí, no es digno de Mí; y el que no carga con su cruz y me sigue noes digno de Mí”; “El que encuentre su vida la perderá, y el que pierda su vida por Mí, laencontrará”. Palabras claras y difíciles de seguir os enseña el Señor en este Evangelio.

En primer lugar os está hablando de ese amor que sentís por las criaturas, amorgrande, digno y bueno; pero que nunca debe sobrepasar ni estar por encima del amorque le debéis a Él.

El hombre es un ser espiritual y ese espíritu es completamente de Dios, como todolo demás. Es la parte más importante que tiene el hombre. Ella os hace ser diferentesde las demás criaturas de la creación; y esa parte espiritual está ligada a Dios, formaparte de Él y en Él está su fin.

El Señor ha dispuesto que cada uno tenga una familia a la que ha de amar; pero eseamor nunca puede estar por encima del amor que debéis tenerle a Dios. Debéis amar a

33

Page 34: DE LA MANO DE MARÍA · 2018-12-28 · El Señor está allí, sentado en aquella orilla, junto a la lumbre, esperando a sus hijos, para que se le acerquen y, movidos por el amor,

esas personas queridas, pero a través de Él, y así ese amor será más puro y estaráencauzado hacia Él.

Después, en el Evangelio, os vuelve a hablar de nuevo de la Cruz: que quien no cargacon ella no es digno de Él. Él os enseña esta ciencia difícil de entender; porque esa Cruzno es una carga, es un auténtico “milagro” que obra vivamente en vuestra almapecadora. Cada vez que os acercáis más y amáis más esa Cruz, vais quedandotransformados. Lo que supone algo pesado, poco agradable, y de lo que muchas vecesse quiere huir, acaba convirtiéndose en esa “amada compañera de camino” que haceque vuestro “cambio interior” sea una “auténtica transformación”.

Y por ultimo: “El que pierda su vida por Mí la encontrará”. Así es, hijos míos, perder la vida por el Señor es ganarse el Cielo. ¡Qué gran felicidad yqué paz interior se experimenta cuando es el Señor quien preside vuestra vida! Por lo tanto, hijos míos, que no haya nada ni nadie que suponga un obstáculo parauniros totalmente al Señor.

Que vuestra vida sea ejemplar como lo fue la de los apóstoles, que dieron su vidapor su Maestro. Esto os tiene que llenar el alma y el corazón.

DÉCIMO QUINTA SEMANA DEL TIEMPO ORDINARIOViernes, 21 de Julio de 2017

“Quiero misericordia y no sacrificio”Evangelio Mt 12,1-8. Queridos hijos, en la escena del Evangelio de hoy, los discípulostenían hambre y comieron unas espigas que estuvieron arrancando en sábado. Losfariseos se quejaron por este hecho, porque por Ley no estaba permitido. Y el Señor lesrespondió: “Si comprendierais qué significa: quiero misericordia y no sacrificio.”

Aquí el Señor es muy claro, porque los fariseos eran duros de corazón, lo teníancomo de piedra, y solo se regían por la Ley, sin ver más allá, sin percibir las necesidadesdel corazón humano.

Puede que a vosotros os suceda un poco lo mismo en distintos aspectos. A veces ospuede pasar que vuestra relación con Dios, vuestros ratos de oración, los encuentroscon Él, los veáis como una norma que hay que cumplir diariamente; algo que os habéisimpuesto con toda libertad y que, incluso, no llegáis a cumplir con fidelidad. Y que si nolo cumplís estáis ofendiendo a Dios.

El Señor no quiere normas, quiere corazones. En vuestra relación con Él desea queen cada momento de oración, en cada encuentro, en cada sacramento, os deis a Él conamor; que pongáis todo el esfuerzo para que Él sienta cada latido de vuestro corazón;que no hagáis las cosas por cumplir sino porque deseáis amarle por encima de todo.

Y a la hora de relacionaros con los demás os pide que tengáis ese corazón lleno demisericordia que comprende, ayuda, está pendiente del otro, vive para los demás…; yno ese corazón duro que solo tiene tiempo para sí mismo, para quedar bien ante losdemás y que actúa con hipocresía para no perder la imagen que los demás tienen deél.

¡Hijos míos, misericordia! Es lo que os pide el Señor: misericordia. Tratad a losdemás como os gustaría que os trataran a vosotros. Muchas veces notaréis laincomprensión, el desprecio e incluso la maldad; pero no debéis juzgar los corazones,solamente el Señor sabe lo que hay dentro de ellos. Y también debéis de preguntaros sien algún momento, con aquella persona determinada que no os ha tratado bien, tal

34

Page 35: DE LA MANO DE MARÍA · 2018-12-28 · El Señor está allí, sentado en aquella orilla, junto a la lumbre, esperando a sus hijos, para que se le acerquen y, movidos por el amor,

vez vosotros no hayáis tenido el comportamiento deseable y ejemplar que pedía aquelmomento, y tal vez les hayáis hecho daño.

Tenéis que ser ejemplo de la verdadera caridad, la que funde hasta el corazón másduro. Derramad amor y misericordia allá por donde vayáis y sed ejemplo, a imitaciónde vuestro Maestro, de ese Amor que todo cristiano debe derramar.

Por lo tanto, hijos míos, a la luz de la oración, ved qué personas, con las que habéistratado, les habéis podido hacer daño; o tal vez se trate de que ellas os han hechodaño a vosotros, pero no habéis llegado a tener ese corazón lleno de misericordia parasaber perdonar; perdonar de verdad y con el corazón.

Pensadlo a la luz de la oración, para que el Señor os ponga las palabras que tenéisque decir a esas personas; y notareis y veréis cómo la felicidad entra dentro de vuestrocorazón y lo inunda, porque os estáis comportando como verdaderos hijos de Dios.

DECIMO SEXTO DOMINGODía 23 de Julio de 2017

Parábola de la cizaña

Evangelio Mt 13,24-43. Queridos hijos: hermoso es el pasaje del Evangelio de hoy enque el Señor habla mediante parábolas. Él es ese sembrador que sembró el trigo; ydespués, el maligno sembró también cizaña. Pero Yo hoy quiero explicaros la segunda parábola en la que el Señor os dice: “ElReino de los Cielos se parece a un grano de mostaza que uno toma y siembra en sucampo; aunque es la más pequeña de las semillas, cuando crece es más alta que lashortalizas; se hace un árbol hasta el punto de que vienen los pájaros del cielo a anidaren sus ramas”.

Hijos míos, el Señor, cuando habla del campo, se está refiriendo a vuestra alma, quees ese espacio de tierra que tenéis que cuidar: hay que abonarla, quitarle las malashierbas y las piedras, para que esté preparada para la siembra. Cuando el Señor ve esecampo preparado, pone la semilla, la más pequeña de todas. Ese “grano de mostaza”que es la llamada; la llamada a seguirle y a cumplir su Voluntad.

Pero el campo debe estar limpio y preparado para el sembrador, que es el Señor; sidejáis que permanezcan en él cosas que lo ensucien, el sembrador no podrá sembrar,porque se encontrará todos esos obstáculos que le dificultarán la siembra: son esasmalas disposiciones para obedecer, los pecados no confesados, la falta de lucha antelas malas tendencias, el dejarse llevar por la corriente del mundo…

Cuando Él se encuentra este campo bien preparado, siembra esa pequeña semilla,ese pequeño rayo de luz, que es su llamada a seguirle. Y ese “árbol” debe crecer y darfruto; y lo que era tan pequeño se convierte en ese “árbol”, “el más grande de todaslas hortalizas”. Y para que así sea, necesita de muchos cuidados, porque el enemigointentará que muera. Por eso, como os digo tantas veces, esa llamada debe seralimentada con la oración, con el sacrificio, con la confianza y abandono en el Señor,con los sacramentos.

Dentro de vuestra alma tenéis ese pequeño grano de mostaza que, al fructificar ydesarrollarse, ayudará a que otros aniden bajo su sombra; se parecerá al Reino de losCielos, donde todo está llamado a dar gloria a Dios.

35

Page 36: DE LA MANO DE MARÍA · 2018-12-28 · El Señor está allí, sentado en aquella orilla, junto a la lumbre, esperando a sus hijos, para que se le acerquen y, movidos por el amor,

DÉCIMO SEXTA SEMANA DEL TIEMPO ORDINARIOJueves, 27 de Julio de 2017

San Joaquín y Santa Ana

Evangelio Mt 13,10-17. Queridos hijos, ayer fue la festividad de San Joaquín y SantaAna, que fueron mis padres en la tierra y gran modelo de todas las virtudes. Tuvierongran confianza en el Señor y una fe recia y fuerte. No fue fácil para ellos ser los padres de la elegida para ser la futura Madre delSalvador. Eso les movió a llevar una vida de renuncia, de mucha oración y sacrificios; acreer en un misterio que no entendían, a pasar desapercibidos y a vivir una vidahumilde y amando la pobreza. Muchas veces fueron señalados y no eran entendidos nipor sus propios familiares y amigos. Pero ellos obedecieron y fueron dóciles hasta elfinal.

Hijos míos, qué importante es cuando el Señor se cruza en vuestro camino de unamanera o de otra, y renunciáis a todo lo que son vuestros gustos y formas de entenderlas cosas, para que sea el Señor el que se adueñe de vuestra vida, y sigáis sus mandatossin dar más cabida a esos gustos personales, ni al deseo de hacer las cosas a vuestramanera.

El Señor se hizo presente en la vida de este matrimonio, Joaquín y Ana; y lesencomendó la misión de cuidarme, respetarme y seguir los designios de Dios, tal cualestaban dispuestos. Eso suponía una renuncia total de sus personas ante lo que Diosles pedía.

Vosotros, hijos míos, también se os pide esa renuncia total a las cosas del mundo,que tanto daño os pueden hacer. Vivís en él pero no sois de él, porque vuestro dueñoya es otro: es el Señor; y Él os va conduciendo y enseñando como hizo con susdiscípulos, eligiéndome a Mí como vuestra “Maestra” en este “camino de santidad”.

Por lo tanto, la renuncia a vosotros mismos debe ser total, y vuestra alma debe estardispuesta, como la de San Joaquín y Santa Ana, a vivir conmigo en ese respeto,entendimiento, obediencia, docilidad y amor.

Todo lo llevará el Señor a través de Mí, ¡todo! Y todo pasará por Mi Corazón, que yaes vuestro, amados hijos de Mi Corazón Inmaculado.

DOMINGO DECIMO SÉPTIMO DEL TIEMPO ORDINARIODía 30 de Julio de 2017

Parábola del tesoro escondido y la perla preciosa

Evangelio Mt 13,44-52. Queridos hijos, el Evangelio de hoy os habla de la parábola del“tesoro escondido” y la “perla preciosa”. El Señor lo compara con el Reino de los Cielos,porque quien lo encuentra vende todo lo que tiene, para no perder lo mejor que podíaencontrar.

El hombre vive su vida aceptando y buscando otro tipo de tesoros que, en realidad,no lo son, porque se trata de cosas materiales que nunca le darán la felicidad que ansíasu alma. El hombre no es sólo materia, sino que es espíritu; y ésta es la parte másimportante que posee, ya que es la que prevalece; la que se une a su Creador, laesencia de cada persona humana. El cuerpo es materia y esta materia se descompone

36

Page 37: DE LA MANO DE MARÍA · 2018-12-28 · El Señor está allí, sentado en aquella orilla, junto a la lumbre, esperando a sus hijos, para que se le acerquen y, movidos por el amor,

y se convierte en polvo. Por eso, hijos míos, es tan importante alimentar el espíritu, elalma, para mantenerla unida al Señor formando parte de Él.

Todos buscáis ese “tesoro”, pero tenéis que saber que se encuentra dentro devosotros, en vuestro interior, y ya forma parte esencial de vuestra vida. Ese “tesoro”hay que cuidarlo, protegerlo, amarlo…; y para ello, hay que alimentarlo con la oración,porque la unión con el Señor solo se realiza a través de ese “diálogo”, de ese mirarle,de ese aprender a amarle, de ese estar pendientes de lo que os pide en cada momentoy cumplir su Voluntad.

Ese “Reino de los Cielos”, ese “tesoro escondido”, esa “perla preciosa”, está avuestro alcance, está esperando para ser recogido; y una vez encontrado, la felicidadinundará vuestro corazón, porque será al mismo Señor al que habréis introducido envuestra vida. Él se habrá hecho el dueño de ella; y esa vida ya no será la misma, porqueposeerá el tesoro más importante que el hombre puede encontrar: a Dios.

¡Cuidad ese Tesoro! Guardadlo en vuestro corazón con todo el amor y delicadeza deque seáis capaces; no existe algo en la tierra que contenga más valor. Una vez acogido,compartidlo con los demás, para que ellos encuentren el sentido de su vida y lo que elSeñor quiere realizar en ella.

37

Page 38: DE LA MANO DE MARÍA · 2018-12-28 · El Señor está allí, sentado en aquella orilla, junto a la lumbre, esperando a sus hijos, para que se le acerquen y, movidos por el amor,

AGOSTO

DÉCIMO SÉPTIMA SEMANA DEL TIEMPO ORDINARIOMartes, 1 de Agosto de 2017

Jesús ora al Padre

Evangelio Mt 13,36-43. Queridos hijos, en este Evangelio el Señor os dice: “Padre, hallegado la hora; glorifica a Tu Hijo”; “Esta es la vida eterna: que te conozcan a ti, únicoDios verdadero, y a tu enviado, Jesucristo”.

El Señor comienza este Evangelio anunciando la Pasión: “Padre ha llegado la hora”;y con la Pasión el Señor será glorificado al dar su vida por cada uno de los hombres, porcada uno de vosotros. Él desea que vayáis al Padre a través de Él.

El Señor desea que le conozcáis e intercede por cada uno de vosotros. Él estápendiente de todo lo que os pasa; aunque no os deis cuenta, aunque penséis que estálejos, no es así, lo tenéis cerca, a vuestro lado, para ayudaros, y lo único que tenéis quehacer es acudir a Él, igual que un hijo acude a su padre siempre que lo necesita. Perosois débiles y cuántas veces pasan las horas del día y no os habéis acordado en ningúnmomento o en muy pocos de Él. Por lo tanto es el momento de decirle: “¡PerdónameSeñor por lo que te hago sufrir! Quiero serte fiel, quiero aprender a amarte”. Sonpalabras de amor que el Señor agradece, y que demuestran que el alma está luchandopor contentar a su Señor.

Todos vosotros, en algún momento, habéis experimentado el amor humano, y loseguís experimentando; y a lo largo del día pensáis en esa persona, deseáis verla, ytodas las horas os parecen pocas para estar juntos. El Señor, ¿no se merece algo más?¿Por qué pasan las horas y no os acordáis de Él? Porque en el fondo, el amor que sentíses muy débil, es egoísta, el alma tiende a mirarse a sí misma, tiende a buscar cómoencontrarse mejor, a estar pendiente de sus sentimientos y de sus caprichos… Así, elSeñor pasa a estar en un segundo plano, a ser alguien que ya no merece tantaimportancia.

Ahora, que durante estos días os voy explicando la Pasión, vuelvo a recordaros quedebéis meditarla, pero de una manera profunda, y sabiendo que todo aquello por loque tuvo que pasar el Señor fue también por cada uno de vosotros.

En la intimidad de vuestro corazón decidle:

“Perdón Señor por todo lo que te estoy haciendo sufrir, por querer hacer siempre las cosas a mi manera, por no hacer lo que tú me mandas, lo que tenía que haber hecho, en el momento preciso, por pensar solamente en mí.Ayúdame Señor, porque yo quiero cambiar mi viday me doy cuenta yo solo que no puedo. Te pido perdón por el daño que te hago al no unirme a Tu Pasión. Apiádate de mí Señor porque soy un pecador”.

38

Page 39: DE LA MANO DE MARÍA · 2018-12-28 · El Señor está allí, sentado en aquella orilla, junto a la lumbre, esperando a sus hijos, para que se le acerquen y, movidos por el amor,

DÉCIMO SÉPTIMA SEMANA DEL TIEMPO ORDINARIOSábado, 5 de Agosto de 2017

Martirio de San Juan Bautista

Evangelio Mt 14,1-12. Queridos hijos, en el Evangelio, Herodes cree que Jesús es Juanel Bautista, que ha resucitado. Allí se cuenta la forma tan injusta y cruel con la que Juanfue decapitado. El Precursor fue muy valiente, hablando claramente a Herodes de sulujuria y adulterio; y Herodes, que vivía en pecado, aprobó la muerte de Juan cediendoal capricho de una mujer.

Herodes se rebeló ante la verdad que el Señor, a través de Juan, le quiso mostrar. Élpudo rectificar y cambiar de vida; pero el vicio y el pecado pudieron más, y a su pecadoañadió un asesinato.

¡Cuántas veces los hombres siguen decapitando a Juan, y llevan a la cruz a Jesús! Elhombre que está imbuido por el pecado, cuando Dios pone en su camino a otrapersona que intenta ayudarle, muchas veces su alma se rebela, y por darse gusto a símismo, quiere seguir con esa vida de comodidad, con esa vida de pecado, y se niega aprescindir de sus placeres y vicios, y a renunciar a lo que el mundo le ofrece.

Hijos míos, ya en algunas ocasiones os he llamado la atención y os he queridoaclarar actitudes que, pasado un tiempo, no tenían ya que formar parte de vuestravida. Me escucháis con atención, queréis rectificar, pero vuestro “yo” sigue tirando devosotros con fuerza; y acabáis cayendo una y otra vez. Esto es propio de la naturalezahumana, herida por el pecado. Por eso, vuestra vida, como la de todos los hombres,consiste en una continua lucha; la de comenzar de nuevo todos los días. Herodes noquiso luchar, y se dejó seducir; para él era más importante ese placer pasajero que lavida eterna.

¡Renunciad a los placeres que ofrece el mundo! Ninguno de ellos, hijos míos,merece la pena; porque solo producen en el alma tristeza y vacío, pues únicamente elSeñor es el que puede llenar el corazón del hombre. Muchas veces resulta difícil, pero,tenéis las armas para poder combatir esas tendencias y esas inclinaciones.

¡Sed valientes! ¡Decid siempre la verdad! . Y hablad claramente a las almas, sinmiedo a las consecuencias. Sed como Juan, que no le importó perder su vida y darlapor el Señor; para eso habéis sido llamados, a pesar de vuestras faltas, pecados yescasa virtud. Ninguno es mejor que otro, ninguno es superior. Ni tan siquiera debéisde compararos con otras personas que conocéis, y que veis que son más virtuosas. SiYo os he escogido a vosotros es para que se vea que la Obra es Mía. Lo único quetenéis que hacer, hijos míos, es obedecer.

DÉCIMO OCTAVO DOMINGO DEL TIEMPO ORDINARIODía 6 de Agosto de 2017

La Transfiguración del Señor

Evangelio Mt 17,1-9: Queridos hijos, el Evangelio de hoy habla sobre la Transfiguracióndel Señor en aquel monte, junto a tres discípulos suyos. “Su rostro resplandecía comoel sol, y sus vestidos se volvieron blancos como la luz”. Pedro entonces dijo: “Señor,¡qué bueno es que estemos aquí! Si quieres, haré tres tiendas: una para ti, otra paraMoisés y otra para Elías”.

39

Page 40: DE LA MANO DE MARÍA · 2018-12-28 · El Señor está allí, sentado en aquella orilla, junto a la lumbre, esperando a sus hijos, para que se le acerquen y, movidos por el amor,

Es el Tabor. Es allí donde el Señor resplandece como el sol, como una luz muyluminosa; allí se ve lo que es Él: el Hijo de Dios. Con toda su majestad, suomnipotencia… ése gran misterio difícil de entender que antecede a su resurrección yes anticipo de ella.

Los apóstoles no daban crédito a lo que veían. Pero se sentían tan sumamente agusto que no se querían ir de aquel lugar. Allí recibieron grandes luces y quedaronenvueltos en la Luz de Cristo. Vosotros, muchas veces, habéis sentido ese pequeñoTabor; lo habéis vivido al experimentar las gracias del Señor que van calando envuestro interior; y sentís esa gran paz, esa felicidad que nada del mundo os puedeproporcionar. Entonces, como los apóstoles, decís: “Qué bien se está aquí. Hagamostres tiendas”. Pero eso son pequeños momentos que os dan la fuerza para podercontinuar. En realidad vuestra vida es el Calvario; allí es donde verdaderamente ossantificáis y os unís a los padecimientos de Cristo.

El Señor quedó transfigurado, preparado para lo que iba a acontecer. Y conanterioridad, esa Transfiguración fue preparada mediante una “siembra de caridad”con todo aquel que se cruzaba en su camino; el Señor derrochó amor y misericordiacon todos aquellos pecadores, acercándose a los corazones más duros que noquisieron escucharle. Esto mismo os enseña a vosotros: lo que cambia, lo quetransforma el corazón es el ejercicio de la verdadera caridad; ese amor que todo loabarca, que por donde pasa deja huella, que cala hasta lo más hondo del corazón. Deesta manera vuestro corazón ya será otro. Y aunque “viváis la pasión”, sentiréis la paz yla alegría del Tabor.

Hijos míos, “el Calvario es el Tabor”.

DÉCIMO OCTAVA SEMANA DEL TIEMPO ORDINARIOLunes, 7 de Agosto de 2017

Multiplicación de los panes y de los peces

Evangelio Mt 14,13-21. Queridos hijos, el Evangelio de hoy es la multiplicación de lospanes y de los peces.

La gente seguía al Señor allá por donde iba; atraía con sus palabras, con su mirada ycon el amor que derrochaba. Él se compadeció de aquella multitud y les quiso dar decomer. Pero, ese alimento que tan sólo parecía ser algo material para saciar el hambre,tenía un significado mucho más profundo y superior: saciar el hambre espiritual.

Este milagro refleja la Eucaristía. El Señor multiplicó aquellos panes y peces para daralimento a “todos”, es decir, para significar que todos están llamados a recibir el santoalimento de la Eucaristía.

El alimento del cuerpo es necesario consumirlo todos los días, porque el día que nose toma notáis que os faltan las fuerzas, que no os encontráis bien. Ese alimentomaterial no necesita de una previa preparación, ni de unas disposiciones interiores. Esun alimento importante porque sin él no se podría vivir. Pero, más importante aun esel alimento del alma, sin el cual el hombre se deshumaniza, pierde ese hilo conductorque le une a Dios, y el alma va muriendo lentamente, hasta que se inunda de oscuridady pecado. Por eso, hijos míos, ¡es tan importante recibir al Señor! Para que entredentro de vosotros y se haga dueño vuestro.

40

Page 41: DE LA MANO DE MARÍA · 2018-12-28 · El Señor está allí, sentado en aquella orilla, junto a la lumbre, esperando a sus hijos, para que se le acerquen y, movidos por el amor,

¡Cuántas veces se le da más importancia al alimento del cuerpo que al del alma!¡Cuantas!. Es como si el Señor no viviera entre vosotros, estando, como en verdad está,presente en los miles de sagrarios que hay dispersos en todas las iglesias del mundo. Ypasáis por delante sin daros cuenta de “Quién” habita allí.

Hijos míos, vuestro corazón no tiene que ser como el de muchos hombres que nohan tenido la oportunidad de formarse, como la habéis tenido vosotros. El Señor osespera; ¡visitadle!. Y acordaos de Él cada vez que paséis por delante de la puerta deuna iglesia; entonces decidle: “Señor, yo te quiero, pero, por favor, ¡enséñame aquererte!” Y especialmente os espera en cada Eucaristía, para darse como alimento,alimento del alma, recibiendo esas Gracias que tanto necesitáis para uniros cada vezmás a Él.

DÉCIMO OCTAVA SEMANA DEL TIEMPO ORDINARIOJueves, 10 de Agosto de 2017

El grano de trigo. Morir a sí mismo

Evangelio Jn 12,24-26. Queridos hijos, dice el Señor en el Evangelio: “Si el grano detrigo no cae en tierra y muere, queda infecundo; pero si muere da mucho fruto. El quese ama a sí mismo, se pierde; y el que se aborrece a sí mismo en este mundo, seguardará para la vida eterna”.

Con estas palabras que el Señor dirige a sus discípulos, les está hablandoclaramente, lo mismo que hace con vosotros. El evangelio no está escrito para ungrupo de gente que vivió en la época en la que Jesús estaba en la tierra, sino paratodos los hombres de todas las épocas. Ahora, en estos momentos, se dirige a vosotrosque oís o leéis estas palabras. Pensadlas con detenimiento; son palabras importantesque tenéis que aplicar a vuestra vida.

Cuando el Señor os habla de ese “grano de trigo”, que cuando cae en la tierra nomuere, se está refiriendo a ese grano que no quiere morir a sí mismo, que quiere seresa planta que crece por sí sola y desea ser admirada por su valía. El grano de trigodebe morir a sí mismo; debe dejar que sean la tierra, el agua…, y su Creador los quehagan fecundar ese grano y se convierta en esa planta que da mucho fruto para el biende los demás. Para ello necesitará morir a sí mismo y dejarse ayudar por El que la creó.

Volviendo al Evangelio, el Señor explica todo esto muy claramente con estaspalabras: “El que se ama a sí mismo, se pierde”. Es la soberbia que está impresa en elhombre desde el pecado original; es el amor desordenado hacia vosotros mismos; espensar y llegar a la persuasión de que todo lo que hacéis está bien hecho; en definitiva,es llegar al convencimiento de que todo ha de girar en torno vuestro, en torno avuestro “yo”, deformando muchas veces la realidad, al querer ver en los demásactitudes que no son ciertas y defectos que no son suyos sino vuestros.

Por eso, el Señor os enseña y os dice: “El que se aborrece a sí mismo en este mundo,se guardará para la vida eterna”. Ése es “el grano de trigo que muere”; y muereporque es humilde y ve que no vale nada, que todo lo que tiene es porque el Señor selo ha dado y nada le pertenece.

Hijos míos, esta es la gran virtud que tenéis que adquirir: la Humildad. Pedidla coninsistencia y se os dará.

41

Page 42: DE LA MANO DE MARÍA · 2018-12-28 · El Señor está allí, sentado en aquella orilla, junto a la lumbre, esperando a sus hijos, para que se le acerquen y, movidos por el amor,

DÉCIMO NOVENA SEMANA DEL TIEMPO ORDINARIOJueves, 17 de Agosto de 2017

El perdón de las ofensas

Evangelio Mt 18,21-19,1. Queridos hijos, hoy el Evangelio os habla del perdón, y elSeñor con sus palabras os dice: “Señor, si mi hermano me ofende, ¿cuántas veces tengoque perdonarle? ¿Hasta siete veces? Jesús contesta: No te digo siete veces, sino hastasetenta veces siete”.

Este número indicado por el Señor es un número simbólico; con ello, lo que os estáqueriendo decir es que debéis perdonar siempre. Por mucho daño que os hagan,vuestra actitud siempre ha que ser la del perdón y la comprensión.

Yo sé que esto, a veces, ante personas que os hacen mucho daño, os resulta difícil;pero es el mejor ejemplo que les podéis dar, porque con ese perdón, vuestra actitud esde verdadera humildad, y mostráis la razón de vuestro obrar, ya que hacéis las cosaspor amor a Dios, que es el motor que mueve vuestra alma.

El Señor, en lo alto de la Cruz, perdonó a aquel ladrón arrepentido, porque vio uncorazón sincero, que se daba cuenta del mal que había hecho en su vida. Fijaos cómoJesús se compadecía de todos aquellos verdugos y fariseos que tanto daño le habíanhecho; a aquellos hombres también les perdonó. Y al ver aquél ejemplo, “el buenladrón” creyó en Jesús y se convirtió, y alcanzó la vida eterna, ya que a él se le perdonómucho.

Vosotros, como aquel ladrón, también tenéis cosas de las que debéis arrepentiros.El Señor, al igual que en la Cruz, os espera en el sacramento de la penitencia paradaros su perdón. Por eso, cada vez que acudís a Él en ese sacramento, abrid vuestraalma de par en par; no dejéis nada guardado, que - como las “raposas” que se comenla viña - os haría mucho daño. Todo tiene que salir a la luz con el debido dolor yarrepentimiento.

Cuidad muy bien este sacramento; ¡es tan importante para la limpieza de vuestrasalmas! Insisto: no dejéis nada en vuestro interior. Es la única forma de que avancéis yveáis, cada vez con mayor claridad, vuestras faltas y pecados. Allí el Señor, como elPadre del hijo pródigo, os espera con los brazos abiertos para daros su gracia.

Y si Él os perdona de esta manera ¿no sois vosotros capaces de perdonar a losdemás?.

DÉCIMO NOVENA SEMANA DEL TIEMPO ORDINARIOViernes, 18 de Agosto de 2017

El matrimonio

Evangelio Mt 19,3-12. Queridos hijos, en el Evangelio de hoy los fariseos, poniendo aprueba al Señor, preguntan si le es lícito al hombre repudiar a su mujer; y el Señor,aprovechando esta pregunta, les da una respuesta magistral sobre el significado delmatrimonio, y les dice: “Por eso dejará el hombre a su padre y a su madre, y se unirá asu mujer, y serán los dos una sola carne”. “Pues lo que Dios ha unido, que no lo separeel hombre”.

Qué difícil de entender es esto, viviendo en los tiempos en que vivís. El matrimonioes algo muy santo y querido por Dios, porque a través de él se realiza la donación

42

Page 43: DE LA MANO DE MARÍA · 2018-12-28 · El Señor está allí, sentado en aquella orilla, junto a la lumbre, esperando a sus hijos, para que se le acerquen y, movidos por el amor,

completa de una persona a otra; del hombre unido a su mujer. Y además, ésta uniónqueda bendecida por un sacramento santo: el del matrimonio.

Esta donación debe ser recíproca; y siempre, entre los dos esposos, debe existir eserespeto y ese deseo de que el otro se acerque a Dios. Solo a través del Señor seconsigue esta unión perfecta, que dará como fruto otros fieles hijos de Dios. Lamayoría de las veces esta misión no es fácil, porque hay mucha soberbia y egoísmo, yno se pone al Señor en el centro de la familia. Os sucede muchas veces que la otraparte no acompaña y os veis solos, ya no únicamente en la ardua tarea de sacar unafamilia adelante, sino en el hecho de no veros comprendidos por vuestro cónyuge. Peroesto, hijos míos, el educar a los hijos en la fe, es responsabilidad importantísima quedebéis llevar a cabo. ¡Gran recompensa tendréis en el Cielo! Porque es muy importanteque esos hijos aprendan a querer a Dios.

A vuestro cónyuge, a esa persona con la que os ha tocado vivir, tenéis que amarlacomo es. No impongáis vuestros criterios. Rezad y amad como santa Mónica, que consus lágrimas tocó el Corazón de mi Hijo, y llevó el corazón del suyo, Agustín, a laconversión.

Poned mucho amor allí donde no lo encontréis, y veréis cómo esto provocará latransformación de la otra persona. Dios os lo puso en vuestro camino y fundasteis unafamilia, y esa familia, ¡toda ella!, debe de ir al Cielo. Por eso os pido, hijos míos, quedeis amor aunque no lo recibáis. Meted al Señor en vuestra casa, en vuestro hogar,pero con todo el amor que alberga vuestro corazón; que el enemigo no se haga eldueño de vuestro hogar. Allí, en ese lugar, solo puede habitar el Señor.

Pero, también os quiero decir otra cosa: ¡nunca! ¡nunca dejéis que la otra parte oslleve a situaciones de pecado! Eso no lo podéis permitir. Debe existir un respeto, unrespeto hacia vuestra persona; por lo tanto, todo lo que os lleve a pecar en susdiferentes situaciones, eso ¡no lo permitáis!

Por otro lado ¡paciencia! Para el Señor su tiempo es su tiempo, y el vuestro es elvuestro. Llevad también una vida ejemplar, en cuanto a las virtudes, eso hará tambiénque se fijen y se den cuenta que vosotros vivís o intentáis vivir una vidaverdaderamente cristiana. Y luego, amor y cariño; y, cuando veáis situacionesinsostenibles… ¡iros! ¡No estéis allí! ¡No deis más pie a que eso se convierta en algopeor!

Cuando os encontréis con situaciones muy tensas y muy difíciles acudid a SanMiguel; acudid a Mí. Pero no echéis más leña al fuego; sencillamente os retiráis, y yaestá.

¡Hijos! Solo con amor se consiguen estas cosas, se consigue cambiar los corazones;pero, a la vez, exigiendo lo que haya que exigir, y de la manera más correcta en cuantoa cariño se refiere; y sobretodo, el buen ejemplo, que es tan importante para la vidafamiliar.

DÉCIMO NOVENA SEMANA DEL TIEMPO ORDINARIOSábado, 19 de Agosto de 2017

Jesús bendice a los niños

Evangelio Mt 19,13-15. Queridos hijos, el Evangelio de hoy os habla de cómoacercaron al Señor unos niños para que les impusiera las manos. Los discípulos no

43

Page 44: DE LA MANO DE MARÍA · 2018-12-28 · El Señor está allí, sentado en aquella orilla, junto a la lumbre, esperando a sus hijos, para que se le acerquen y, movidos por el amor,

querían, y Jesús les dijo: “Dejadlos, no impidáis a los niños acercarse a mí; de los queson como ellos es el Reino de los Cielos”.

¡Qué atracción tan grande tendría el Señor! para que unos niños, sin ningún tipo demiedo, se acercaran a Él. Les daba cariño, confianza, paz, y mostraba una preocupaciónabsoluta por ellos. Esos niños se sintieron queridos; estaban a gusto con Él porque losprotegía y sentían su Amor, cada uno de ellos de forma individual y única.

El Señor leía sus corazones y veía esa sencillez, ese abandono, esa despreocupaciónque sólo tienen los niños. Para ellos, el mundo se centra en sus padres y en todo lo quehaya a su alrededor que les enseñe algo.

Por eso, vuestros corazones tienen que ser como los de estos niños.En primer lugar, teniendo esa absoluta confianza para acercaros al Señor. Hacedlo sinmiedo, abriéndole el corazón de par en par, para que Él vea lo que anida en vuestrointerior. Vuestra actitud ha ser la de las almas sencillas, que se despreocupan de lasapariencias y se dejan guiar por su Padre del Cielo, que es el que sabe por dóndeencaminar sus vidas. Imaginaos cuando un niño se pierde en el bosque; si va sólo, leacecharán muchos peligros; pero si le acompaña y guía su padre todo cambia. Pues asíes el mundo, como un bosque lleno de peligros; por lo que no debéis caminar solos,sino acompañados del Señor para no perderos, para encontrar el camino y que sea Él elque os guíe.

Hay unas palabras de la escena del Evangelio muy importantes que no debéis deolvidar: “De los que son como ellos es el Reino de los Cielos”. Sí hijos míos, es la “infancia espiritual” en la que debéis vivir: el ser como niños en todas las ocasiones quese os presenten, viviendo esa sencillez de alma, esa humildad, ese abandono yconfianza que solo un hijo que ama a su Padre Dios puede tener.

DOMINGO VIGÉSIMO DEL TIEMPO ORDINARIODía 20 de Agosto de 2017

La mujer cananea

Evangelio Mt 15,21-28. Queridos hijos: en este Evangelio acude al Señor una mujerpidiéndole ayuda. En un principio el Señor nada le respondió, pero luego, para quetodos aprendierais le dijo: “Solo he sido enviado a las ovejas descarriadas de Israel”.Esta mujer no era judía, era cananea; al escuchar la respuesta del Señor pudo sentirsedesplazada y pensar que el Señor no la hacía caso. Pero, no le importó, ella insistió;insistió por la gran humildad que albergaba en su corazón. El Señor la puso a prueba para que todos aprendierais, y Él le dijo: “No está bientomar el pan de los hijos y echárselo a los perrillos”. Con estas palabras, la actitud delSeñor parecía de desprecio, pero no fue así; quiso que ella respondiera y demostrara sugran humildad. Y así lo hizo: “Tienes razón, Señor; pero también los perrillos se comenlas migajas que caen de la mesa de los amos”. ¡Qué gran acto de fe y de humildad es elque tuvo esta mujer! ¡Ella se consideró nada! Con solo esas migajas sería suficientepara la ayuda que ella necesitaba.

¡Cuántas veces, hijos míos, pedís tantas cosas! Sí, realmente todas ellas son muynecesarias, pero en vuestro corazón se esconde ese sentimiento que reclama del Señorque intervenga con celeridad y que os ayude siempre que se lo solicitéis; porque en elfondo de vuestro corazón anida aún la soberbia de creer que tenéis que ser

44

Page 45: DE LA MANO DE MARÍA · 2018-12-28 · El Señor está allí, sentado en aquella orilla, junto a la lumbre, esperando a sus hijos, para que se le acerquen y, movidos por el amor,

escuchados y atendidos, de querer las cosas resueltas en el momento, sin grandesesfuerzos…; y no os dais cuenta que todo ha ir precedido de esa “fe inquebrantable”;que todo sucederá a su debido tiempo; y que vosotros, ante Dios, sois como esos“perrillos” que, obedientes, están a los pies de su amo esperando a que él sea el queles de lo que necesitan.

La mujer cananea, por su gran fe y humildad, consiguió del Señor lo que pedía;estaba dispuesta a alimentarse de aquellas “migajas” porque ¡se sentía tan poca cosa!

¡Fe y humildad, hijos míos! Es lo que irá destruyendo vuestro “yo”.Dejad de buscaros a vosotros mismos, y buscadme a Mí; ni el Señor ni Yo jamás os

fallaremos. Pedid las migajas y conseguiréis el banquete: el sentaros a la mesa junto avuestro Señor.

VIGÉSIMA SEMANA DEL TIEMPO ORDINARIOLunes, 21 de Agosto de 2017

El joven rico

Evangelio Mt 19,16-22. Queridos hijos, la escena del Evangelio de hoy es la del “jovenrico”, que contiene una gran enseñanza.

Éste joven se encontró con el Señor. El Señor fue a buscarle porque era un hombrebueno. Cumplía los mandamientos; pero, en el fondo de su alma, sentía que le faltabaalgo, no era del todo feliz. Por eso, al encontrarse con el Señor, le pregunta: “Qué es loque me falta”; y el Señor, con ese Amor infinito, le responde: “Si quieres ser perfecto,anda, vende todos tus bienes, da el dinero a los pobres - así tendrás un tesoro en elCielo - y luego ven y sígueme”. Pero él se fue triste y renunció a seguirle. Su corazónestaba repleto del apego a esos bienes materiales que hacen que el alma quedecegada para los bienes espirituales.

Grandes valores y virtudes tenía este hombre; y se encontró con el Señor. Deseabacambiar, pero su ceguera se lo impidió. El Señor sale al encuentro de cada hombre y lellama, como a ese joven rico. Su llamada es para abandonar todo lo que estorba yseguirle sin dudarlo.

Hijos míos, ¡son tantas las cosas estorban en vuestra vida que os impiden caminar alritmo de Dios!

En cuanto a lo material no tenéis que preocuparos, porque nada os ha de faltar. Elcorazón debe estar desprendido de todo ello. Vivid con lo necesario y siemprepensando en compartir con quien más lo necesite.

El seguir al Señor, el decirle que sí, es estar dispuestos a no abandonar su llamada;todo eso implica una renuncia. Ya no os pertenecéis; le pertenecéis a Él. Y, poco a poco,os irá guiando por el camino que tiene trazado para vosotros; poco a poco os iráenseñando, como hizo con sus discípulos, y le iréis conociendo y amando cada vez más.

Ese renunciar a lo que os ofrece el mundo, pero viviendo en Él, os abre la puerta dela felicidad. Al estar libres, desasidos de las cosas de la tierra, ya vivís para Dios

¡Él está dentro de vosotros! Camina con vosotros. Está a vuestro lado. ¡Sois otrosCristos! Y eso es lo que ha de quedar reflejado en vuestra actitud y en vuestro rostro:La Vida de Cristo.

45

Page 46: DE LA MANO DE MARÍA · 2018-12-28 · El Señor está allí, sentado en aquella orilla, junto a la lumbre, esperando a sus hijos, para que se le acerquen y, movidos por el amor,

VIGÉSIMA SEMANA DEL TIEMPO ORDINARIOMartes, 22 de Agosto de 2017

Recompensa del seguimiento de Jesús

Evangelio Mt 19,23-30. Queridos hijos, el Señor en este pasaje del Evangelio vuelve arecordar lo difícil que es a un rico entrar en el Reino de los Cielos.

Hijos míos, la verdadera riqueza se encuentra en el alma; los bienes materiales sonperecederos, y muchas veces solo sirven para crearse más necesidades y vivir rodeadosde todas las comodidades. Pero todo eso produce un vacío en el alma que vainvadiéndola cada vez más, llenándose de cosas que le impiden ver con total claridad laluz de Dios.

¡El Señor lo pide todo! Desea hacerse el “dueño” de vuestra vida, y para eso, hayque dejar muchas cosas atrás.

Él os lo dice en el Evangelio: “Todo el que por Mí deje casa, hermanos o hermanas,padre o madre, hijos o tierras, recibirá cien veces más y heredará la vida eterna”. Loque el Señor os está queriendo decir con estas palabras, es que tenéis que vivir eldesapego de todo lo que os rodea. Eso no quiere decir que no estéis pendientes devuestras familias; les debéis cuidar y sobre todo amar, pero a través de Cristo.

No es lo mismo que una persona esté excesivamente unida y apegada a sus hijos,que el amarles a través de Dios. El primero es un afecto únicamente humano. Es elúnico factor que mueve este amor; por lo tanto, se trata de un amor incompleto y,muchas veces, egoísta, donde la persona, a menudo, tiende a buscarse a sí misma enesta relación.

Lo segundo es enteramente divino, por ser Dios el que está directamente en elcentro de ese amor.

Por eso, hijos míos, el significado de esas palabras del Señor es éste: vivid amando avuestra familia, a vuestros amigos y conocidos, pero a través de Dios. Así ese amorhumano se convertirá en “amor divino”.

También ese pasaje se refiere a todos aquellos que recibieron esa vocación alcelibato, y abandonaron sus casas para vivir consagrados a Dios. Éstos heredarán lavida eterna, porque abandonaron todo por Él. Pero los que estáis ya casados, eseabandonaros en Él, como os he explicado, habréis de vivirlo sin dejar vuestras casas, niabandonar a vuestras familias, pero sabiendo que solo pertenecéis a Dios, y Él será elque os guíe en esa tarea.

VIGÉSIMA SEMANA DEL TIEMPO ORDINARIOMiércoles, 23 de Agosto de 2017

Parábola de los obreros enviados a la viña

Evangelio Mt 20,1-16. Queridos hijos: en la parábola de hoy se habla de un“propietario” que va contratando jornaleros para su viña. A unos los contrata antes, y aotros después. Y aunque unos trabajan más, y otros trabajan menos, sin embargo, atodos les paga lo mismo. Los primeros protestan porque consideran que han trabajadomás horas, y por tanto, se les debe pagar más que los que llegaron más tarde.

El Señor, que es el “Amo”, llama a “su viña” a todos los hombres. Unos respondenantes que otros, porque se dejan guiar por la gracia de Dios. Pero Él dio su vida por

46

Page 47: DE LA MANO DE MARÍA · 2018-12-28 · El Señor está allí, sentado en aquella orilla, junto a la lumbre, esperando a sus hijos, para que se le acerquen y, movidos por el amor,

todos, y el Cielo se llena de una gran alegría cuando se convierte un pecador. Cadapersona tiene su tiempo, y cuando escucha la llamada del Señor, es entonces cuandotiene que responder y seguirle.

A veces podéis llegar a pensar de otras personas que están alejadas de Dios, queson felices; y vosotros, sin embargo, no disfrutáis de esa felicidad, porque estáis llenosde problemas que muchas veces os superan. Esa felicidad no es real, es ficticia. Y esaspersonas, igual que vosotros, están llamados a trabajar en la viña del Señor.

Después, en esta parábola, el Señor dice también unas palabras muy importantes:“Así los últimos serán los primeros y los primeros, últimos”.

Los primeros obreros en llegar a la viña albergaban, dentro de su corazón, algo desoberbia, al ver que siempre habían trabajado para su amo, que le habían obedecido yhabían cumplido con todo lo que se les mandó…

Así podéis llegar a sentiros vosotros: como ésos viñadores que acudieron a trabajarpara su amo, pero protestaron cuando su amo pagó de la misma manera a los últimosque llegaron. Éstos vivían en el pecado, pero se arrepintieron y se entregaron porentero al Señor. Su actitud fue más humilde. Ellos no pedían nada, porqueconsideraban que nada se merecían, pero, recibieron la misma recompensa.

Como veis, hijos míos, una vez más “la humildad”. Esta virtud hace que el Señor sevuelque en el alma que la posee, porque deja al Señor actuar totalmente sobre dichaalma. El alma humilde solo confía y se deja llevar, se deja hacer…; por eso, son losprimeros en el Reino de Dios.

VIGÉSIMA SEMANA DEL TIEMPO ORDINARIOJueves, 24 de Agosto de 2017

Encuentro de Jesús con Natanael

Evangelio Jn 1,45-51. Queridos hijos, en el pasaje del Evangelio de hoy se narra eseencuentro de Jesús con Natanael. Éste era un hombre muy sencillo, y a la vez frío, yesperaba la llegada del Mesías. Lo que más le sorprendió al Señor de este hombre fuesu total sinceridad, y por eso dijo de él: “Ahí tenéis a un israelita de verdad, en quien nohay engaño”. Este apóstol enseguida creyó en Jesús, se dio cuenta de que era el Hijo deDios, el Rey de Israel.

Esa sencillez, esa claridad producida por su sinceridad de vida, hizo que este hombretuviera esa mente clara y limpia; de esta forma es muy fácil ver al Señor.

Las almas sinceras, sencillas, sin ningún tipo de doblez, el Señor se complace enellas, porque en su alma no encuentra obstáculos para manifestarles su Amor.

La sinceridad, hijos míos, es otra gran virtud que no tenéis que dejar de vivir. Tenéisque ser como esa agua clara, limpia, que se presenta tal cual es. Así obró MaríaMagdalena; nunca negó que había sido una gran pecadora, ni escondió su vida pasada;eso la ayudó mucho a poder arrepentirse de corazón; y al hacerlo, como su dolor fuemuy profundo, llegó a tener ese amor por el Señor al que muy pocos han llegado. Ellasentía gran vergüenza de sí misma, por eso buscaba al Señor, para demostrarle sudolor, su amor, su arrepentimiento.

Hijos míos, jamás os guardéis nada. Presentaos al Señor tal como sois, tomandoconciencia de todo lo que pecáis y ofendéis a Dios. No os guardéis nada oculto, salvo loque no deba de saberse.

47

Page 48: DE LA MANO DE MARÍA · 2018-12-28 · El Señor está allí, sentado en aquella orilla, junto a la lumbre, esperando a sus hijos, para que se le acerquen y, movidos por el amor,

Vuestra vida debe estar regida por la total sinceridad de unos con otros. Es la únicaforma de poder ayudaros: si os dais a conocer. El ser sincero hace al alma sencilla,porque ésta no finge, no guarda, no aparenta algo que no es. El agua nunca debequedar estancada, debe correr clara y cristalina para poder llegar a su destino.

Por eso, hijos míos, ¡sed transparentes! para que todos vean vuestro corazón. Pero,fundamentalmente, practicad esta sinceridad con Dios, para que su ayuda seacompleta.

VIGÉSIMA SEMANA DEL TIEMPO ORDINARIOViernes, 25 de Agosto de 2017

El primer mandamiento

Evangelio Mt 22,34-40. Queridos hijos, en el pasaje del Evangelio de hoy, el Señorcontesta una pregunta de un doctor de la Ley que le dice: “Maestro, ¿cuál es elmandamiento principal de la Ley?” Y el Señor le responde: “Amarás al Señor tu Dios,con todo tu corazón, con toda tu alma, con toda tu mente.” Y “Amarás a tu prójimocomo a ti mismo”. Con estas palabras el Señor resume lo más importante que debe devivir un hijo de Dios.

¡Amar al Señor “con todo el corazón”! Todos los sentimientos y afectos del corazóndeben ir encauzados a Él, a su gloria; si no, serían simples sentimientos humanos cuyafinalidad estaría en el “yo” propio: en encontrar placer y felicidad donde no se puedeencontrar.

¡Amar “con toda el alma”! El alma, el espíritu es lo que os une con Dios; por eso,todas las prácticas de piedad, todos los encuentros que día a día tenéis con Él, en ellosdebe imperar el amor: en la forma como os dirigís a Él; si ponéis atención en lo quedecís; si le dais por entero vuestro ser para que en vosotros se cumpla únicamente laVoluntad de Dios.

¡Y, amarlo “con toda vuestra mente”! Aquí estarían todos los pensamientos,sentidos, razonamientos… Todo ello debe ir dirigido hacia Él, para que en vuestra formade actuar no seáis vosotros, únicamente, los que toméis las decisiones, sino que todasellas vayan precedidas por la Luz del Espíritu Santo.

En definitiva, amar a Dios “con todo vuestro ser”. ¡Dádselo todo!¡No os quedéis con nada! para que vuestra vida quede “divinizada” ypodáis decir: “Ya no soy yo quien vive, es Cristo quien vive en mí”.

Y, la última frase: “Amarás a tu prójimo como a ti mismo”. Esta es la consecuenciadel amor que le deis a Dios; cuando ese amor crece, también crece el amor haciavuestros hermanos, porque veis el reflejo de Cristo en ellos: en su sufrimiento, en susproblemas, en los buenos momentos…. Si estáis inundados del Amor a Dios solodeseáis que el hermano sienta ese mismo Amor, que se encuentre con paz, queexperimente el gozo espiritual, que su vida quede llena de ese amor a Cristo.

Este es el Mandamiento principal: Amar a Dios sobre todas las cosas y al prójimocomo a vosotros mismos. ¡Hijos míos! Esta es una gran lección.

48

Page 49: DE LA MANO DE MARÍA · 2018-12-28 · El Señor está allí, sentado en aquella orilla, junto a la lumbre, esperando a sus hijos, para que se le acerquen y, movidos por el amor,

DOMINGO VIGÉSIMO PRIMERO DEL TIEMPO ORDINARIODía 27 de Agosto de 2017

La confesión de Pedro

Evangelio Mt 16,13-20. Queridos hijos, en el Evangelio el Señor pregunta a susdiscípulos: “¿Quién dice la gente que es el Hijo del Hombre?” “Y vosotros, ¿quién decísque soy Yo?” Y Pedro le contestó: “Tú eres el Mesías, el Hijo de Dios vivo”. Y tras estarespuesta el Señor le dio las “llaves” de su Iglesia.Y ahora, hijos míos, el Señor también a vosotros os pregunta:

“¿Quién decís que soy Yo?”Para responder a esta pregunta dedicad unos momentos a reflexionar:

¿Es vuestro Padre, vuestro amigo, vuestro Dios, al que amáis?¿Qué representa para vosotros?¿Le habéis dado toda vuestra vida?

Preguntas profundas, que necesitan una respuesta. Con ellas he querido que lleguéishasta el fondo de vuestra alma, de vuestro corazón y ver qué es lo que anida allí. Quiero que, mediante estas preguntas, os respondáis a vosotros mismos: qué es loque os mueve a actuar; qué partes de vuestra vida aún no pertenecen al Señor; porqué hay tantas cosas del mundo que aún tiran de vosotros.

Éstos últimos días, mediante estas lecciones, quiero que, cuando hagáis oración,lleguéis hasta el fondo; debéis de llegar a la “raíz” de vuestros defectos y pecados: quées lo que los provocan y por qué; y si realmente vuestra actitud es de lucha para quetodo eso vaya desapareciendo.

Quiero que hagáis un profundo examen de conciencia para que podáis ver, con laclaridad que os dará el Espíritu Santo, cómo ir quitando de vuestra alma, poco a poco,las malas raíces, y ésta vaya despojándose del “hombre viejo” y modelándose según elEspíritu del Señor; para que “ese carbón se convierta en diamante”; y para que esecorazón le pertenezca por entero al Señor. “¿Quién decís que soy Yo?” Él os pregunta. Y ahora, vuestra respuesta tendría que ser:

“Padre, soy tu hijo, lleno de imperfecciones y pecados; pero que con tu ayuda y tu Gracia ya seré otro, el que Tú deseas que sea. Tú eres para mí el sentido de mi vida; el Amor que todo lo inunda. Eres mi Padre y me quieres más que todos los padres de la tierra juntos; por eso, te pido que me enseñes a quererte como te mereces. Aunque soy tan poca cosa que mi amor siempre será poco ante tanta grandeza”.Esta es la respuesta que debéis darle al Señor. Esta oración debéis conservarla para

leerla e interiorizarla muchas veces al día; para que no perdáis el norte y no osdescuidéis; para que os toméis en serio este Camino; y sobre todo, para que os deiscuenta de quién es Él: Todo, y quiénes sois vosotros: nada.

VIGÉSIMO PRIMERA SEMANA DEL TIEMPO ORDINARIOJueves, 31 de Agosto de 2017

Exhortación a la vigilancia

Evangelio Mt 24,42-51. Queridos hijos: en este Evangelio, el Señor os habla, igual quea sus discípulos, de la necesidad de estar en vela, de estar siempre con el alma

49

Page 50: DE LA MANO DE MARÍA · 2018-12-28 · El Señor está allí, sentado en aquella orilla, junto a la lumbre, esperando a sus hijos, para que se le acerquen y, movidos por el amor,

preparada; por eso, como a ellos, os dice: “Estad también vosotros preparados, porquea la hora que menos lo penséis, viene el Hijo del Hombre”.

Hijos míos, el alma siempre tiene que estar preparada para ese encuentro con elSeñor. Muchas veces contempláis ese acontecimiento como muy lejano, porque vivísmás para el mundo que para el Cielo. Para pensar en la otra vida se necesita mucha fe.¡Como éste mundo lo tenéis tan cerca! Lo veis, lo palpáis, lo vivís…, por eso loconsideráis más verdadero; entonces, os aferráis a él y no queréis sufrir. Muchas vecesintentáis huir del sufrimiento y del dolor, y por el contrario, ¡os agarráis tanto a lascosas del mundo pensando que allí vais a encontrar la felicidad! Y sabéis que eso no esasí.

Eso fue lo que hicieron las vírgenes necias de la parábola que ya conocéis. Sabíanque su Señor un día vendría a buscarlas, y ellas debían de estar preparadas, con laslámparas encendidas, esperando al Señor. Pero, fueron tan necias, que pensaron queaún les quedaba tiempo; y se quedaron dormidas.

Esto es lo que os puede llegar a pasar también a vosotros cuando pensáis: “Yacambiaré; aun me queda tiempo”; “ésta labor, esto que se me pide, me resulta muydifícil y costoso, y requiere un gran esfuerzo; me voy a tomar la vida con más calma;poco a poco, ya irán saliendo las cosas”; “me queda tiempo; ya tengo bastantesufrimiento, ya tengo bastantes cruces, ¿por qué no darme un respiro?”

¡No, hijos míos, no! El Señor desea y quiere que seáis como esas vírgenesprudentes. Ellas no esperaron. Fueron a preparar sus lámparas sabiendo que el Señorpodría tardar en venir, o quizás no; pero ellas no se arriesgaron. Ese era el momento deponerse en manos del Señor; de preparar su vida para ese encuentro.

¡Ese era el momento y no otro!Obedecieron; y así el Señor, cuando llegó las encontró completamente preparadas, lasabrió las puertas del Paraíso y el Esposo se las llevó.

Por eso, hijos míos: ¡es tan importante que cuidéis vuestra vida interior! La debéiscuidar con esmero, dándole cada día un poquito más. Debéis ver qué detalles persistenaún en vuestra vida que tenéis que mejorar. ¡Exigíos! ¡No os tengáis tanta pena! ¡No osconforméis con una vida espiritual mediocre! Tenéis que volar alto como las águilas,para ir cada vez creciendo más y más en santidad. No estáis llamados a llevar una vidaen la que van pasando los días, y poco a poco ese avance espiritual se va aletargadopor falta de lucha.

No, hijos míos, ¡cada día exigíos un poquito más! Un poquito más de lucha, deempeño en enterrar ese “yo” que tanto daño os hace, y así ir ganando terreno en elamor. Ganando en el amor todo lo tenéis ganado.

¡Adelante amados hijos míos! Que el camino es arduo y difícil; pero no olvidéisnunca que vais de mi Mano; y al final de ese camino, como bien sabéis, os espera esegran regalo que es mi Hijo, esperando que entréis con vuestras lámparas encendidas.

50

Page 51: DE LA MANO DE MARÍA · 2018-12-28 · El Señor está allí, sentado en aquella orilla, junto a la lumbre, esperando a sus hijos, para que se le acerquen y, movidos por el amor,

SEPTIEMBRE

VIGÉSIMO PRIMERA SEMANA DEL TIEMPO ORDINARIOViernes, 1 de Septiembre de 2017

Parábola de las diez vírgenes

Evangelio Mt 25,1-13: Queridos hijos, en el Evangelio de hoy, el Señor al hablar consus discípulos, igual que lo hace con vosotros, les explica la parábola de las “diezvírgenes”. Ya en la lección que os di ayer, os estuve explicando ese Evangelio. Vosotros sois personas de vida interior, que habéis introducido al Señor en vuestravida, y podéis hallaros en ese estado espiritual en que ya habéis dejado de ser como lasvírgenes necias, pero aún no habéis llegado a ser como las prudentes. Hacéis loposible por no quedaros dormidos, y queréis tener esa lámpara encendida, preparada;pero la Cruz a veces os pesa mucho, y huís de ella, queréis dejarla a un lado para asípoder distraeros un poco.

Es como si el alma quisiera salir de una prisión. Veis esa Cruz como una auténticacarga. En realidad es la soberbia la que hace que no tengáis esa claridad en la mente yen el alma, y busquéis las compensaciones y distracciones que os ofrece el mundo,pensando que así, de esa manera, podréis encontrar un poco de felicidad, un poco dedescanso.

“El amor a la Cruz” es lo que enciende la lámpara. Es esa “Luz” que arde en vuestrocorazón por amor a Dios. Yo sé que muchas veces os resulta difícil llevarla, y entonces,esa lámpara se va apagando lentamente, quedándose con una luz mortecina. Lo quetenéis que hacer en esos momentos es confiar plenamente en Dios, poneos en susmanos y comenzar de nuevo. Para ello, acercaos a Él mediante sus sacramentos, donderecibiréis la gracia. Así volverá ese Amor perdido, y la lámpara quedará nuevamenteiluminada, porque ya estará llena de ese aceite, de esa gracia recibida de Dios a travésde sus sacramentos.

Él os espera en el Banquete de Bodas, os espera como Esposo en la puerta delParaíso, donde desea abrazaros y llevaros donde se encuentra Él. ¡No os quedéis en lapuerta hijos míos! ¡No os quedéis dormidos! Subid donde se encuentra Él. ¿No os daiscuenta cómo está allí con esos brazos abiertos esperando vuestro amor? Él os haelegido, por lo tanto, no le defraudéis.

¡Es tan fácil que el mundo os envuelva! y queráis esperar y esperar para otromomento mejor… ¡No hijos! ¡Levantaos! ¡Id a Él! ¿No le veis que os espera? Decidleahora, en esta pequeña oración, con toda la humildad que sea capaz vuestro corazón,decidle:

“Señor, ya sé que aún no estoy preparado, mi lámpara la tengo casi vacía; es lo únicoque ahora mismo te puedo ofrecer, porque permanecí dormido. Pero, gracias a Ti yame he despertado. ¡Ayúdame con tu Gracia! Yo quiero y deseo darte todo mi amor,para que esa lámpara alumbre con luz cegadora; esa luz que disipe las tinieblas y melleve a Ti, al encuentro de mi Esposo”.

51

Page 52: DE LA MANO DE MARÍA · 2018-12-28 · El Señor está allí, sentado en aquella orilla, junto a la lumbre, esperando a sus hijos, para que se le acerquen y, movidos por el amor,

VIGÉSIMO PRIMERA SEMANA DEL TIEMPO ORDINARIOSábado, 2 de Septiembre de 2017

Parábola de los talentos

Evangelio Mt 25,14-30. Queridos hijos, el Señor en el Evangelio os habla de laparábola de los “talentos”. Aquél “Hombre”, al irse de viaje, dejó a cada uno de sus siervos una cantidaddiferente; el que menos recibió lo escondió bajo tierra y no dio ningún fruto. Entonces,una vez regresado el Amo, éste se lo quitó dándoselo al que más tenía; y lo echó.

El Señor quiere a todos sus hijos por igual. Aunque a cada uno le da unos talentos yuna vida diferente para que lo empleen en su servicio.

Da a cada uno según sus capacidades; y le da la parte del campo que le correspondepara que con ella dé gloria a Dios.

Él se muestra en el camino de cada persona para ayudarle a que su vida y esostalentos que le dio, fructifiquen y no queden baldíos, sepultados en la tierra y sin darfruto ninguno.

Cuantas personas son las que, como el siervo “perezoso e infiel”, reciben de Dios nosolo la vida, sino familia, trabajo, amigos, salud…, y todo ello lo utilizan para su propiobeneficio; para sacar provecho para sí mismos y vivir la vida de espaldas a Dios. Llega elmomento de la muerte y sus manos están vacías, porque su vida la enterraron bajotierra, y nada de lo que recibieron fructificó.

Por eso hijos míos, debéis ser como los otros siervos, los “fieles” ; cada uno recibióuna medida distinta, y según esa medida lo hicieron fructificar.

Cada uno tenéis una vida diferente, con distintas circunstancias. Pero, de esa parceladel campo que os ha regalado el Señor, de ella tenéis que sacar el correspondientebeneficio; es decir, que todos esos talentos sirvan para dar gloria a Dios.

¡No os resistáis hijos míos!. No enterréis nada de lo que ya se os haya dado, aunquepenséis que no podéis con la responsabilidad.

Uno de esos talentos, que es la familia, puede ser, en muchas ocasiones, una carga;porque sufrís a causa de todos los problemas que os puede ocasionar.

Pero el Señor os ha dado esa familia; es la que tenéis, y no tenéis otra. Y hay quesacarla adelante y descubrir la mano de Dios detrás de ella. Es ese talento tanimportante del que hay que sacar fruto; ese fruto es acercar esas almas a Dios a travésde vuestro ejemplo, de vuestras obras y palabras, de vuestra oración, y sobre todo, através del amor que pongáis en ello. Esa es la mejor forma de que ese talento no sepierda. ¡Amadlos como son y orad! ¡Orad!.

VIGÉSIMO SEGUNDA SEMANA DEL TIEMPO ORDINARIOMartes, 5 de Septiembre de 2017

En la sinagoga de Cafarnaúm

Evangelio Lc 4,31-37. Queridos hijos, en el pasaje del Evangelio de hoy, el Señordemuestra a todos los allí presentes su “fuerza” y su autoridad”. Dice el Evangelio quese quedaron asombrados de sus enseñanzas, porque su palabra estaba llena deautoridad.

52

Page 53: DE LA MANO DE MARÍA · 2018-12-28 · El Señor está allí, sentado en aquella orilla, junto a la lumbre, esperando a sus hijos, para que se le acerquen y, movidos por el amor,

El Señor, cuando pasaba por aquellas calles y la gente le miraba, nunca pasabadesapercibido. Él buscaba a las almas, llamaba a su interior, y muchas veces, con unasimple mirada, removía los corazones, los hacía suyos, porque ¡es tanto el Amor quederrama en cada alma…! que si esa alma no se resiste acaba por transformarse.

Hijos míos, escuchad la voz del Señor con toda su autoridad y enseñanza. No labusquéis fuera de vosotros, porque la tenéis en vuestro “sagrario interior”. Cuandohacéis oración y entráis dentro de ese “sagrario”, donde se encuentra la SantísimaTrinidad, allí quedáis inundados por su “Luz”: Luz sobrenatural, Luz cegadora, Luztransformante que os envuelve por completo; y vuestro corazón, si no se resiste y estácon el debido recogimiento, siente esa paz y esa alegría que solo Dios puede dar.

Allí, en ese lugar, dejaos hacer. Vuestra actitud solo puede ser de auténticaadoración y arrepentimiento; sin pedir nada a cambio, sin esperar nada, soloaprendiendo a amar.

“Señor, sólo Tú tienes palabras de vida eterna”. Sólo Él, a través de esa Luz que os da, sin ruido de palabras, os va enseñando la

ciencia del Amor. Notaréis a lo largo del día su presencia, su ayuda, su consejo, su paz. Pasáis por difíciles momentos muchas veces; pero tenéis que haceros varias

preguntas: Si estoy así… ¿qué es lo que lo ha provocado?¿Echo la culpa a los demás o el problema lo provoqué yo con mi actitud? ¿Me estoy buscando a mí mismo? ¿Se perdonar?Aquí os dejo estas preguntas para que podáis reflexionar sobre ellas. Muchas veces

sois vosotros los que buscáis los problemas, porque no metéis a Dios en vuestra vida; yDios acaba siendo para vosotros un desconocido.

Él siempre os ama y os enseña, porque sois sus hijos. Ahora, hijos: ¡correspondedle!

VIGÉSIMO SEGUNDA SEMANA DEL TIEMPO ORDINARIOMiércoles, 6 de Septiembre de 2017

La curación de la suegra de Pedro

Evangelio Lc 4,38-44. Queridos hijos, en la escena de Evangelio de hoy, se narra cómoJesús curó a la suegra de Pedro. Después, llegaron más enfermos para ser curadosigualmente. Y “De muchos salían demonios gritando: Tú eres el hijo de Dios”. Eran verdaderos milagros los que allí realizó el Señor. Pero Él se tuvo que ir a otrasciudades, para seguir practicando el bien.

Él, por donde pasaba, ayudaba a todo aquel que lo necesitaba. Su Amor por elhombre es tan grande, que en todos sus actos solo se ve la inmensa generosidad y elamor que inunda su Corazón.

Vuestra vida debe estar impregnada también por esa generosidad que debe demarcar vuestra vida. La mayoría de vosotros vivís en familia, os rodean muchaspersonas que necesitan de vuestra ayuda, de vuestro cariño, comprensión ygenerosidad; por lo que tenéis que estar atentos e ir por delante; no esperéis a que ospidan esa ayuda, sino anticipaos, dándoos cuenta de sus necesidades. Esto sólo sepodrá conseguir si vuestra alma está bien preparada para ello: si desde el primermomento del día hasta el último, tenéis ese “recogimiento interior”, esa “presenciadel Señor”, sabiendo que realmente Él vive dentro de vosotros. Ya no seréis vosotroslos que estéis con las personas, sino que será el mismo Cristo. Envuelta en esa

53

Page 54: DE LA MANO DE MARÍA · 2018-12-28 · El Señor está allí, sentado en aquella orilla, junto a la lumbre, esperando a sus hijos, para que se le acerquen y, movidos por el amor,

generosidad y ese olvido de sí, el amor emanará desde vuestro interior alcanzando atodo el que lo necesite.

Él se ocupaba de todos, sin excepción; está pendiente de cada detalle, de cadanecesidad. Por eso, hijos míos, ¡no os debéis de sentir nunca solos! Él se encuentra envuestro interior; sólo tenéis que recogeros y lo sentiréis cerca, ¡muy cerca!

Esa soledad solo viene provocada por la falta de Dios. “Quien a Dios tiene nada lefalta; sólo Dios basta”.

Por eso, hijos míos, es tan importante ese “recogimiento interior” para vivir conCristo y para Cristo, y así, servir con generosidad a todas las almas.

VIGÉSIMO TERCERA SEMANA DEL TIEMPO ORDINARIOMartes, 12 de Septiembre de 2017

Elección de los Doce Apóstoles

Evangelio Lc 6,12-19. Queridos hijos, en la escena del Evangelio de hoy el Señor osenseña una gran lección. Fue escogiendo, entre otros muchos, a los que iban a ser susapóstoles; por eso, antes, Él subió a un monte y se puso a orar. Después habló a unagran muchedumbre, y curó a los enfermos y endemoniados, “porque de Él salía unagran fuerza que sanaba a todos”. Y esa “fuerza divina” que distinguía las intervencionesy milagros del Señor, quiso Él que estuviera unida a la oración.

Con esto el Señor quiere enseñaros que sin la oración no podéis nada. A través deella es como recibís la fuerza y la luz para saber en cada momento lo que debéis hacer;y no solamente eso, también para uniros a la Voluntad de Dios, la que Él tiene sobrevosotros.

En esa oración de silencio es donde tenéis que depositar en vuestro Padre Dios todolo que os preocupa, todos vuestros proyectos, vuestra vida entera; es el momento dedárselo todo para que Él se ocupe. Vosotros dejadle actuar, y enseguida notaréis esaluz sobrenatural, que no solamente os dará paz y alegría, sino que iluminará vuestramente, para que en cada momento sepáis tomar las decisiones correctas.

Es cuestión de confianza en Él. Vosotros dejadlo todo en sus manos, que Él, poco apoco, os irá indicando el camino que tenéis que seguir para cumplir su Voluntad. Lafuerza, la decisión, la fortaleza para seguir adelante… todo eso es fruto de la oración.¡Perseverad en ella! Aunque en muchas ocasiones estéis distraídos, vosotros no tenéisque hacer nada, solo abandonaros y poneros en su presencia y Él actuará. Decidle:

“Señor, aquí me tienes, como todos los días. Tú bien sabes cómo me encuentro y lo poco o nada que hago por ti.Acudo en este momento para estar a solas contigo, y que seas Tú elque ilumine mi camino y me ayude a cumplir siempre tu DivinaVoluntad. Tú sabes que yo no puedo, soy inútil y me falta amor; pero sé quecon tu ayuda todo cambiará.Padre mío confío y me abandono; enséñame a quererte”.

Hijos míos, esta oración en concreto os ayudará para que, cada vez que tengáis quehacer oración la recéis, y así os será más fácil estar en presencia de vuestro Padre Dios.

54

Page 55: DE LA MANO DE MARÍA · 2018-12-28 · El Señor está allí, sentado en aquella orilla, junto a la lumbre, esperando a sus hijos, para que se le acerquen y, movidos por el amor,

VIGÉSIMO TERCERA SEMANA DEL TIEMPO ORDINARIOMiércoles, 13 de Septiembre de 2017

La Bienaventuranzas

Evangelio Lc 6,20-26. Queridos hijos, hermoso es el Evangelio de hoy, donde el Señoros enseña las Bienaventuranzas. En ellas se resume la vida de un cristiano, la vida quevosotros debéis llevar. El Señor os va diciendo en éste Evangelio:

“Bienaventurados los pobres, porque de ellos es el Reino de Dios”. Es la “pobreza deespíritu”, que hace que, ante vuestro Padre Dios, os sintáis necesitados de todo;porque ¡nada tenéis! ¡Nada! Es vivir en esa humildad, al veros tan poca cosa. Porque,en realidad, eso es lo que sois: muy poca cosa; pero sois “elegidos” desde toda laeternidad.

También se refiere a ese “desprendimiento” de los bienes materiales. Si estáisapegados a ellos el Señor no tiene cabida en vuestro corazón, no tiene sitio. Por eso,vivid con lo necesario, pero nada más; todo lo que sobre dejadlo atrás, ¡no lonecesitáis!

“Bienaventurados los que ahora tenéis hambre, porque quedaréis saciados”. “Hambre de Dios”, porque las cosas del mundo no llenan el vacío que el alma siente.Sólo el Señor puede saciar ese hambre, porque si en el alma habita Dios, ya no necesitade nada más ¡Él lo inunda todo! Por eso, el alma que está alejada de Dios busca..; busca sin descanso saciar esehambre; pero no lo conseguirá si sigue buscando en lo que le da el mundo. Solamentelo encontrará en Dios ¡Solamente en Él!

“Bienaventurados los que ahora lloráis, porque reiréis”. Son todas esas “purificaciones y sacrificios” por los que pasáis, para que vuestra almaquede mejor preparada para el encuentro con Dios. El pecado deja una huella y esodebe de quedar purificado. Además, toda alma que quiere darse por entero a Diosdebe vivir esa vida de sacrificio y purificación para unirse a la Cruz de Cristo; sin todoesto no es posible esa unión.

Necesitáis pasar por el crisol… porque Él os espera. Toda vuestra vida estará unida ala Cruz; la Cruz nunca ha de faltar ¡Amadla con todo vuestro corazón!

“Bienaventurados vosotros cuando os odien, os excluyan, os insulten por causa delHijo del Hombre. Alegraos ese día y saltad de gozo, porque vuestra recompensa serágrande en el Cielo”. Esta es la mayor alegría que debéis experimentar; que por causa de Mi Hijo sufráistodos esos padecimientos. Seguir a mi Hijo es dar la vida por Él, como Él hizo porvosotros. Es una vida de entrega y sacrificio. ¡Qué felicidad se siente cuando se da lavida por Dios! ¡No hay nada que lo iguale!

Hijos míos, con esta lección tenéis un proyecto de vida que seguir, un proyecto devida maravilloso: Pobreza espiritual y material; hambre de Dios; amar la Cruz y larecompensa de la persecución; y todo… todo esto resumido en “el amor”; porque elamor, hijos míos, es lo más importante de todo. Todo esto que os he dicho, si no estáhecho con amor, con verdadero amor, de nada sirve.

55

Page 56: DE LA MANO DE MARÍA · 2018-12-28 · El Señor está allí, sentado en aquella orilla, junto a la lumbre, esperando a sus hijos, para que se le acerquen y, movidos por el amor,

VIGÉSIMO TERCERA SEMANA DEL TIEMPO ORDINARIOSábado, 16 de Septiembre de 2017

Rectitud de corazón

Evangelio Lc 6,43-49. Queridos hijos, hoy el Señor en el Evangelio os dice estaspalabras: “¿Por qué me llamáis “Señor, Señor”, y no hacéis lo que os digo? Todo el queviene a mí, escucha mis palabras y las pone en práctica, os diré a quién es semejante”,y aquí os pone el ejemplo de una casa construida con sus cimientos sobre roca; y vinola crecida del río y no pudo derrumbarla. Ése cimiento firme del que os habla elEvangelio es esa vida coherente que sigue el camino de cumplir la voluntad de Dios,donde las palabras y las obras van unidas. Vuestro edificio espiritual debe ser edificadosobre el cimiento del “amor a la Cruz”; esa es la “Roca firme” que sujeta vuestra casa.

Cada uno de vosotros tiene que descubrir sus defecto dominante, y ver de quéforma, con la ayuda de Dios, habéis de luchar contra él; si no, el río de lascontrariedades y de los engaños del mundo llegará a esos cimientos, y si no estánconsolidados en esa lucha por amor a Dios, el río del mundo se llevará la casa y ladestruirá. Es el segundo ejemplo que pone el Evangelio: el que escucha y no pone enpráctica es el que edificó la casa sobre tierra, y llegó el río y la derrumbó; esto escuando queréis edificar vuestra vida interior amoldada a vuestros gustos o supuestasdificultades.

Cuando en el alma hay verdadero espíritu de lucha y, por encima de todo, deseacumplir la voluntad de Dios, ese alma pondrá los medios para poder superar las todaslas dificultades que le sobrevengan y los obstáculos que tenga que saltar. Porque deseacambiar su interior, desea dar gloria a Dios, y desea, con su ejemplo, ser luz y faro paratantas almas necesitadas.

Construid vuestra casa sobre roca firme, emprended una fuerte batalla contra todasesas cosas que os separan de Dios. Para esto, a la luz del Espíritu Santo, en vuestraoración personal, id viendo todo lo que ofende a Dios, todo lo que os separa de Él; ydespués, una vez conocido, ved el modo de afrontar la lucha contra ello para irganando en santidad. ¡Éste es el camino, hijos míos! No hay otro, queridos hijos de miCorazón Inmaculado.

SEMANA VIGÉSIMO CUARTA DEL TIEMPO ORDINARIOLunes, día 18 de Septiembre de 2017

La fe del Centurión

Evangelio Lc 7,1-10. Queridos hijos, hoy el Evangelio os transmite una hermosaescena: la de aquél centurión que amaba a su criado, el cual se encontraba enfermo y apunto de morir; y pidió al Señor su curación a través de otros, porque él no se atrevía,al verse tan poca cosa. Él, como soldado, tenía un alto cargo, y estaba acostumbrado a dar órdenes y serobedecido; además, no era creyente, era pagano. Pero, tanta confianza tenía en elSeñor, que no lo dudó ni un momento y le pidió ayuda. El criado quedó curado, y elSeñor alabó a ese centurión con estas palabras: “Os digo que ni en Israel he encontradotanta fe”.

56

Page 57: DE LA MANO DE MARÍA · 2018-12-28 · El Señor está allí, sentado en aquella orilla, junto a la lumbre, esperando a sus hijos, para que se le acerquen y, movidos por el amor,

Éste centurión os da un gran ejemplo con su forma de actuar. ¿Cómo un romanopagano acude a Cristo para pedirle que cure a su criado? Jesús no era médico nicurandero; ¿qué vería este hombre en Él? Seguramente ya habría oído hablar delSeñor. Y el Señor, como siempre, buscando las almas, buscando su confianza y amor, secruzó en su camino.

Hijos míos, fijaos en una cosa: ¿de dónde nació esa fe tan grande en alguien que noconocía bien la religión del pueblo judío, y que pertenecía a otra religión y a otracultura? Nació de un corazón humilde, que se sabe necesitado, que obedece a sussuperiores, y que ve al Señor como a “alguien superior”. Y Jesús se enternece ante elalma humilde.

Esa humildad tan grande le ha llevado a la fe, a esa fe que proporciona unaconfianza ciega, que el Señor tanto alaba. Esa fe nace de un corazón humilde; esa fe sealimenta de la humildad, porque sin ella sería imposible creer.

Un alma soberbia, que todo lo puede, no necesita creer, ya ella se basta a sí misma;su fe está puesta en su persona y todo lo que realiza. Por eso, hijos míos, esta virtud, la humildad, es la que irá acompañando siempre alresto de virtudes; ella y la caridad, el amor, son las que tenéis que pedir con insistenciapor su gran importancia. Hijos míos, siendo humildes ya tenéis mucho camino andado.

SEMANA VIGÉSIMO CUARTA DEL TIEMPO ORDINARIOSábado, día 23 de Septiembre de 2017

Parábola del sembrador

Evangelio Lc 8,4-15. Queridos hijos, hoy el Evangelio os presenta la parábola delsembrador, que al sembrar, su semilla cayó en diferentes terrenos, dando lugar a quese secara o fructificara. La semilla es la palabra de Dios, y el sembrador es Dios mismo.Él quiere sembrar en cada alma las enseñanzas que ayudarán a esa persona a cambiarde vida; no todas las almas están dispuestas a escuchar, por lo cual esa semilla se seca,o se la comen los pájaros o se pisa.

El Señor en la Santa Misa, a través de su Palabra, os habla y os da pautas para queluchéis y os abandonéis en sus manos; pero a veces ¡estáis tan imbuidos en vuestrosproblemas y preocupaciones…! ¿De qué os sirve darle vueltas a lo que os preocupa sieso os va a quitar la paz? ¿Acaso de esa manera se va a solucionar el problema? ¿No osdais cuenta que todo depende del grado de confianza que tengáis en vuestro PadreDios?

El Señor quiere sembrar en vosotros, y la tierra, es decir, vuestro interior, debe estarpreparado para recibir esa semilla.

La forma de prepararlo es con la oración: la oración bien hecha, con recogimientointerior y con esa actitud abierta y humilde para saber escuchar sus palabras. Sonpalabras sagradas, son “palabras de vida eterna”, que calan en lo profundo del alma yla transforman. De esta manera, esa tierra buena, humilde y generosa, dará frutoabundante, y lo dará con perseverancia.

Sois almas que tenéis que estar preparadas para dar a los demás la doctrina delSeñor. Él, a través de vosotros, iluminados por el Espíritu Santo, quiere hacer llegar su“enseñanza” a muchas personas; por eso, cada vez que acudís a la Santa Misa,escuchad con atención lo que allí el Señor os enseña. Llevad a la oración todas las

57

Page 58: DE LA MANO DE MARÍA · 2018-12-28 · El Señor está allí, sentado en aquella orilla, junto a la lumbre, esperando a sus hijos, para que se le acerquen y, movidos por el amor,

palabras que hayan calado dentro de vuestro interior, y haced propósitos de mejora,para ir avanzando y no retroceder.

¡Tenéis que ser esa buena semilla! Y el Señor, de esa siembra, recibirá de vosotrosfruto abundante para darle gloria.

SEMANA VIGÉSIMO QUINTA DEL TIEMPO ORDINARIOLunes, día 25 de Septiembre de 2017

Parábola de la lámpara encendida

Evangelio Lc 8,16-18. Queridos hijos, hoy en el Evangelio, el Señor os habla de esalámpara encendida que se pone en el candelero para que dé luz. Muchas veces elSeñor ha empleado este símbolo para hablar de vosotros y de Él: “Yo soy la luz delmundo”.

La luz es algo muy necesario en la vida; sin ella, se viviría en absoluta oscuridad. Laluz es necesaria para vivir, sin ella sería imposible la vida. Lo mismo pasa en la vidainterior; cuando una persona vive en la oscuridad no ve la grandiosidad que le ofrece lavida; solo está imbuida en sus problemas, preocupaciones, deseos personales… y cadavez su entorno se va limitando más, sin darse cuenta del horizonte tan maravilloso quele pone el Señor por delante. Es como cuando vais por el monte y tenéis muchosárboles delante; no veis lo que hay detrás.

El vivir en esa oscuridad, el permanecer en ella, es dejarle ganar la batalla alenemigo. Todos tenéis sufrimientos en la vida; tenéis los que podéis sobrellevar.Aunque algunos de ellos os los habéis buscado vosotros, no han venido de Dios: sonproblemas y preocupaciones que el ser humano va forjando debido a su malcomportamiento, a su forma de ser equivocada, a la búsqueda de su egoísmo…,llamándolos cruz; pero esa cruz no viene de Dios. Aún así, todo esto no os debe decegar; todo sirve para algo, sobre todo para poder así purificaros. Es difícil amar la purificación, porque eso requiere un total desapego de uno mismo,y son pocas las almas que están dispuestas a ello.

Estáis llamados a “ser luz”, a ser “faros luminosos” que guíen a otras almas. Esa luznacerá de un “amor incondicional a la Cruz”, a la Voluntad de Dios sobre vosotros, seala que sea. Así atraeréis a los demás como el sol atrae con sus rayos y da calor a toda lanaturaleza.

Las almas necesitan de vuestro cariño y comprensión, de vuestro tiempo y de todolo que hasta ahora habéis aprendido. ¡No podéis cerrar las puertas a la Luz que elSeñor os envía! para que penetre en vuestra alma y a su vez vaya a otros hermanos:“Yo soy la Luz del mundo”, dice el Señor.

Por eso hijos míos, no os encerréis en vuestro agujero y tapéis con “tablones” elorificio por donde podríais salir; así nunca entrará la luz de Cristo. Esos “tablones” sontodas esas cosas que no aceptáis en vuestra vida. Pues si vais tapando lentamente esehabitáculo donde os encontráis, un día un tablón, otro día otro, así hasta que se cierratodo el orificio, la luz nunca podrá penetrar, porque vosotros, al no querer aceptar laCruz, habéis ido cerrando su entrada.

¡Hijos míos, id a La Fuente! ¡Empapaos de su amor! ¡Desapegaos de todo lo que elmundo os ofrece! Sed esa luz clara, luminosa y transparente, donde los demás veránreflejado el rostro de Cristo.

58

Page 59: DE LA MANO DE MARÍA · 2018-12-28 · El Señor está allí, sentado en aquella orilla, junto a la lumbre, esperando a sus hijos, para que se le acerquen y, movidos por el amor,

Por lo tanto, hijos míos, os vuelvo a repetir: ¡no os inventéis cruces! La Cruz delSeñor es clara y es la que hay que amar para así poder purificaros.

SEMANA VIGÉSIMO QUINTA DEL TIEMPO ORDINARIOJueves, día 28 de Septiembre de 2017

El temor de Herodes

Evangelio Lc 9,7-9. Queridos hijos: Herodes, el que había mandado decapitar a Juan,estaba desconcertado al oír hablar de Jesús. No sabía quién era, pero escuchaba de Éltodo tipo de cosas y quería verle.

El Señor no se escondía. Él hablaba abiertamente a todas las gentes, en especial alos pecadores; porque busca a las almas, desea que le conozcan para darle su Amor. Él,muchas veces, permanece en silencio, parece que no está, que se encuentra muy lejos,pero no es así.

Vosotros habéis experimentado situaciones dolorosas, en que implorasteis la ayudadel Señor para que esa situación cambiara, y al no ver resultados inmediatos osrevelasteis, llegando a creer que Dios os había abandonado. Es esa una tentación delenemigo para que perdáis la esperanza, la fe y la confianza en Dios. Por mal que loestéis pasando, nunca jamás debéis de separaros de Él.

El Señor muchas veces os prueba; quiere que demostréis con hechos esa confianza yabandono que habéis que tener; en esos momentos es cuando tenéis que acudir conmás insistencia a la oración y a los sacramentos. Él nunca abandona a sus hijos; lesprueba y les da purificaciones para limpiar su alma de tanta impureza. Son los“silencios del Señor” que tanto bien hacen en vuestra alma si confiáis en Él. En esossilencios… ¿cómo un Padre, que ha dado su vida por sus hijos, irá después aabandonarlos? Como os he dicho, ese pensamiento es una tentación del enemigo, quenubla y oscurece la mente, haciéndoos perder la esperanza.

Herodes estaba sumergido en sus vicios y en su soberbia, y eso no le dejaba ver niescuchar al Señor. Por eso, hijos míos, ¡mantened vuestra alma limpia! Desechad todatentación de soberbia y reconoceros a vosotros mismos como almas que todo lonecesitáis de Dios.

Él siempre está a vuestro lado, en toda situación, sea la que sea. ¡Confiad yabandonaos en Él!

59

Page 60: DE LA MANO DE MARÍA · 2018-12-28 · El Señor está allí, sentado en aquella orilla, junto a la lumbre, esperando a sus hijos, para que se le acerquen y, movidos por el amor,

OCTUBRE

VIGÉSIMO SEXTA SEMANA DEL TIEMPO ORDINARIOLunes, día 2 de Octubre de 2017Santos Ángeles Custodios

Evangelio Mt 18,1-5.10. Queridos hijos, hoy es la fiesta de los santos ÁngelesCustodios. Es una gran fiesta que tenéis que celebrar. Por el Amor inmenso que ostiene el Señor, cada uno de vosotros tiene un Ángel que siempre le acompaña, que velapor él y que le encamina para que se acerque a Dios. Esa es su misión, y siempre semantiene a vuestro lado. Pedidle cosas, hablad con él, que note vuestro cariño, y no osolvidéis de él.

Es de grandísima ayuda que un “ser celestial” esté a cargo de cada uno de vosotros.Por eso, no lo olvidéis, tratadlo con toda confianza y os será de gran ayuda, sobre todoen las cosas espirituales.

Y hoy, en el Evangelio os dice el Señor: “En verdad os digo que, si no os convertís yos hacéis como niños, no entraréis en el Reino de los Cielos”. Con este Evangelio, elSeñor os vuelve a recordar la “infancia espiritual”. Id por un momento al pasado, muchos años atrás, e intentad recordar cuando eraisniños; niños que dependían para todo de sus padres, y que vivían felices,despreocupados, y con esa inocencia y sencillez propia de la infancia. Fuisteiscreciendo y todo cambió; se perdió esa sencillez, esa inocencia, esa sinceridad; y lavida se convirtió en preocupaciones, problemas, complicaciones, y muchas veces, entristezas. Cuando esto ocurre es porque no vivís esa infancia espiritual, ese “haceroscomo niños” ante las cosas de Dios.

Muchas veces os he hablado de esta virtud, tan sumamente ligada a la primerabienaventuranza, la de “los pobres de espíritu”. Aquí no existe la soberbia, impera lahumildad, porque el hombre se siente niño ante los ojos de Dios; sabe que es “tanpoca cosa”, que sin la ayuda de Él, nada puede hacer. Se abandona y se confía en lasmanos de su padre Dios, y deja que Él actúe en su vida, sabiendo que es lo mejor quele pueda ocurrir. No busca los “porqués”, ni cuándo ocurrirá; vive el presente, con esaalegría que le proporciona la seguridad de verse en las manos de un Padre que lequiere y se ocupa de él.

¡Infancia espiritual, hijos míos! ¡Qué importante es!

SEMANA VIGÉSIMO SEXTA DEL TIEMPO ORDINARIOMiércoles, día 4 de Octubre de 2017 San Francisco de Asís

Evangelio Lc 9,57-62. Queridos hijos, hoy se celebra una gran fiesta: San Francisco deAsís. Es uno de vuestros protectores, ya que su vida fue un gran ejemplo, y en muchosaspectos le tenéis que seguir. En aquellos tiempos todo estaba corrompido por lasriquezas, el ansia de poder, el ser alguien importante en la sociedad. Y él con susencillez, humildad y pobreza fue un ejemplo - y un reproche - para todos aquellos que

60

Page 61: DE LA MANO DE MARÍA · 2018-12-28 · El Señor está allí, sentado en aquella orilla, junto a la lumbre, esperando a sus hijos, para que se le acerquen y, movidos por el amor,

le conocían. Él nada poseía, solo una gran caridad y un amor a Cristo que le hacía nodesear nada de esta tierra, pero sí amar a través de la humildad y la pobreza.

En el Evangelio de hoy, Jesús seguía su camino, y se va encontrando con diversaspersonas, y Él los invita a que le sigan; todos tienen una excusa, algo que les ata,porque para ellos es más importante y prioritario resolver todos sus compromisos queseguir al Señor. Aquí se ve clara la diferencia con el santo que os mencioné antes. SanFrancisco se deshizo de todo lo que le ataba, porque su camino era seguir al Señor,desnudo de todo lo que el mundo le podía ofrecer. Aquellos judíos, sin embargo,ponían por delante lo que a ellos les parecía importante.

Ahora vosotros os habéis encontrado en el camino al Señor, y Él os dice:“Sígueme”¿Cuál es vuestra respuesta? ¿Lo dejáis todo y le seguís? O ¿miráis hacia atrás parasolucionar todo lo que os preocupa? El que sigue al Señor no tiene por quépreocuparse de nada, únicamente de obedecerle, confiar absolutamente en Él y darlegloria.

Eso fue lo que hizo san Francisco de Asís. Por eso le seguía tanta gente, porque en surostro se reflejaba el verdadero amor a Cristo, y por Él a todos los hombres. No queríanada para sí, y se deshizo de todo lo que pudiera apartarle de Dios.

¡No os apeguéis, hijos míos, a los bienes materiales! Llevad una vida sobria, sin caprichos ni vanidades; conformaos únicamente con lo

necesario, buscad el servir a los demás con todo el amor de vuestro corazón y así seréisese “reflejo de Cristo sobre la tierra”, y daréis un ejemplo de vida semejante al quetantos santos han dado.

SEMANA VIGÉSIMO SEXTA DEL TIEMPO ORDINARIOJueves, día 5 de Octubre de 2017

Eficacia de la oración

Evangelio Mt 7,7-11. Queridos hijos, el Señor os dice en el Evangelio: “Pedid y se osdará, buscad y encontraréis, llamad y se os abrirá; porque todo el que pide recibe,quien busca encuentra y al que llama se le abre”.

Son palabras muy profundas con las que hoy os habla el Señor en este Evangelio.Todas ellas os conducen a un mismo fin: llegar al Señor, encontrarle, estar con Él, queforme parte de vuestra vida, que esa vida se consuma en darle amor.

“Pedid y se os dará”: como aquel centurión que pedía la curación de su criado. ¡Eratanta su fe y su humildad! que recibió lo que pedía.

Para pedir, el alma debe de estar segura que el Señor le dará lo que le está pidiendo.Por lo tanto se necesita “fe”, creer profundamente que el Señor siempre escucha y queno se deja ganar en generosidad.

“Buscad y encontraréis”: eso fue lo que hizo María Magdalena. Después de llevaruna vida depravada y llena de pecados, buscó y encontró al Señor, que le estabaesperando. Después de un profundo arrepentimiento empezó a conocer el verdaderoamor, ese “amor a Jesucristo” que hizo que cambiara su vida profundamente, y fueraejemplo, especialmente en aquellos momentos difíciles de la Pasión.

“Llamad y se os abrirá”: el Señor siempre está dispuesto a escucharos y a abriros lapuerta de su Corazón, como hizo con aquellos discípulos de Emaús, que no lereconocieron, pero le invitaron a entrar en su casa, y allí el Señor abrió sus corazones ala Gracia.

61

Page 62: DE LA MANO DE MARÍA · 2018-12-28 · El Señor está allí, sentado en aquella orilla, junto a la lumbre, esperando a sus hijos, para que se le acerquen y, movidos por el amor,

Hijos míos: ¡pedid, buscad y amad! Ahí le tenéis, Él os espera; y espera esa fe yhumildad del centurión, ese amor y arrepentimiento de María Magdalena, y ese abrirlela puerta de vuestro corazón para que Él entre y pueda comunicaros su Gracia.

Con estos tres ejemplos el Señor os muestra el camino para encontrarledefinitivamente. No le busquéis por otros senderos, porque no os llevarán a Él. Sólo leencontraréis a través de la fe, la humildad, el verdadero arrepentimiento al veros tanmiserables, y la apertura de vuestro corazón.

Lo encontraréis porque habéis sabido pedir, le habéis sabido buscar y llamasteis a supuerta y os abrió.

DOMINGO VIGÉSIMO SÉPTIMO DEL TIEMPO ORDINARIODía 8 de Octubre de 2017

Parábola de los viñadores infieles

Evangelio Mt 21,33-43. Queridos hijos, en el Evangelio de hoy se narra la historia deJesús. Él se dirige a los sumos sacerdotes y ancianos, que poseían la sabiduría;sabiduría humana, no divina. Él les quiere enseñar; darles la oportunidad de queaprendan los verdaderos caminos del Señor.

Es la parábola del propietario de una viña. Dicho propietario, que representa a Dios,dejó su viña a unos labradores para que la trabajaran; pero no lo hicieron, sino queapalearon y mataron a los criados que venían de parte del amo. Todos éstosrepresentan a los profetas; a los profetas que anteriormente no habían sidoescuchados.

Después, este propietario decidió mandar a su hijo, pensando que así loescucharían. Pero los labradores lo sacaron fuera y lo mataron; como hicieron con miHijo, que lo sacaron fuera de Jerusalén y lo crucificaron en el Calvario.

Pero el Señor busca labradores que den fruto, que trabajen bien la viña; vabuscando hombres que se den por entero y obedezcan a su Señor. Esta viña es elmundo que tenéis delante, es la vida que os ha tocado vivir; y Él necesita de vuestrasmanos para trabajar esa tierra infértil y convertirla en tierra que de muchos frutos alSeñor.

En el Evangelio se dice que el propietario se fue y dejó allí solos a los labradores,porque confiaba plenamente en ellos. Él pensaba que irían a trabajar bien toda esatierra que les había sido encomendada, y por eso, después, mandó a sus criados paraque recogieran los frutos de la cosecha; pero se encontró sin nada, y que los criadoshabían sido asesinados.

Es la cerrazón del hombre que no confía en Dios y desea hacer las cosas a sumanera; no desea trabajar para Dios, desea trabajar para sí mismo, atendiendo suscaprichos, comodidades y egoísmos.

Sé que esto os pasa a veces, hijos míos; por lo cual, la lucha debe de ser constante,porque las tentaciones y formas de vida del mundo atraen más. Y yo os pregunto:¿Estáis dispuestos a trabajar para el Señor en su viña? ¿Le vais a obedecer en todo loque os vaya pidiendo? ¿Lucháis contra vosotros mismos?

La tarea no es fácil, los labradores son pocos y la viña es muy grande. ¡Almas deoración! Vuelvo a repetirlo: ¡tenéis que ser almas de oración! para que todo lo quehagáis a lo largo del día tenga luz; esa luz recibida a través del dialogo con vuestro

62

Page 63: DE LA MANO DE MARÍA · 2018-12-28 · El Señor está allí, sentado en aquella orilla, junto a la lumbre, esperando a sus hijos, para que se le acerquen y, movidos por el amor,

Padre Dios. Si no queréis hacerlo así, actuaréis a vuestro modo, negándoos a dar gloriaa Dios, ofendiéndole y cayendo muchas veces en pecado.

Soy vuestra Madre y deseo lo mejor para vosotros.Hijos míos, ¡obedeced y orad! para no caer en tentación.

SEMANA VIGÉSIMO SÉPTIMA DEL TIEMPO ORDINARIOLunes, día 9 de Octubre de 2017

El mayor precepto

Evangelio Lc 10,25-37. Queridos hijos, hoy el Señor os habla con mucha profundidad.Esta vez se dirige a un maestro de la ley, que previamente responde al Señor citando elmandamiento supremo: “Amarás al Señor, tu Dios, con todo tu corazón y con toda tualma, y con todas tus fuerzas y con toda tu mente. Y a tu prójimo como a ti mismo”.Tras lo cual el Señor le dice, dirigiéndose también a vosotros: “Haz esto y tendrás lavida”. Y para completar la enseñanza le explicó la parábola del Buen Samaritano, quefue el único que ayudó a aquél pobre moribundo tendido junto al camino. Los demástenían mucho que hacer, pero él practicó la verdadera caridad posponiéndolo todopara ocuparse del malherido.

Si os fijáis, el Señor se dirige a un maestro de la ley, cuya función era interpretarla yexplicarla, cosa que éste doctor hacía, pero sin darse cuenta que detrás de la ley haymucho más.

Ellos sólo entendían de leyes, era su vida, y en ella no existía esa capacidad de amar;ese corazón estaba frío…, frío para amar. Por eso el Señor le enseña con sus palabrasque el amor que el hombre debe tener hacia su Dios, debe cubrir todo su ser. Debe“amar con todo su corazón”; al Señor le pertenecen los sentimientos todos del alma; yéstos deben siempre ir dirigidos a ese amor puro y profundo que pide el Señor.

No se trata de sentimentalismos, ni de un sentimiento pasajero y fugaz, que al pocotiempo ya se ha olvidado. Habéis de poner estos sentimientos al servicio del Señorpara que Él se haga dueño de ellos.

Y cuando paséis por estados de aridez, tenéis que saber amarlo igual, desprendidosde gozos y emociones.

“Con toda tu alma”, es decir, con ese hilo conductor que os une directamente conDios; y vuestra alma se une a Dios a través de la oración, de los sacramentos y devuestra vida de piedad. Todo esto está encaminado al Amor; sin Él, toda esta vida depiedad… ¿de qué os sirve?

“Con todas tus fuerzas”, esa fuerza que sale del alma enamorada de Dios; esa fuerzaque todo lo abarca porque ha sido alimentada por la confianza y el abandono en Dios.

“Y con toda tu mente”, es decir, con todos vuestros pensamientos yrazonamientos, como hombres que sois, dotados de facultades racionales. Vuestramente siempre ha de estar al servicio de Dios.

Y por último: “A tu prójimo como a ti mismo”. Ésta es la caridad verdadera, la delbuen samaritano, que no conocía a ese hombre y dejándolo todo le socorrió. Ésta es lacaridad que debéis practicar: dejar todo por las almas necesitadas, por vuestroshermanos. ¡Hay tantos hombres que necesitan que les deis amor!

Hijos míos, no olvidéis la enseñanza que hoy os ha trasmitido el Señor. Amadle a Élcon todo vuestro ser y a través de Él a todos vuestros hermanos. Ésta es la doble

63

Page 64: DE LA MANO DE MARÍA · 2018-12-28 · El Señor está allí, sentado en aquella orilla, junto a la lumbre, esperando a sus hijos, para que se le acerquen y, movidos por el amor,

ciencia que debéis aprender, y que van completamente unidas: la Ciencia del Amor y laCiencia de la Cruz. Con esto se resume toda vuestra vida espiritual.

SEMANA VIGÉSIMO SÉPTIMA DEL TIEMPO ORDINARIOMartes, día 10 de Octubre de 2017

Marta y María

Evangelio Lc 10,38-43. Queridos hijos: Jesús, después de haber caminado llegó a lacasa de Marta y María. Estaba cansado, por eso paró en esa casa de sus amigos, paraasí poder descansar.

Marta trabajaba para que todo estuviera bien, pero María sólo escuchaba la palabradel Señor. Marta entonces se quejó porque su hermana no la ayudaba; y el Señor ledijo: “Marta, Marta, andas inquieta y preocupada con muchas cosas; solo una esnecesaria. María, pues, ha escogido la parte mejor, y no le será quitada”.

Marta servía, quería que el Señor se encontrara a gusto; pero su trabajo eramecánico, nervioso, queriendo abarcar todo, y en su corazón no había paz. En esetrabajo no estaba metida la oración, no lo hacía cara a Dios; quería que todo quedasebien hecho, por eso estaba inquieta y preocupada y le faltaba la paz. En realidad,trabajaba para ella misma y detrás de ese trabajo no estaba el Señor.

A lo largo del día es mucho el trabajo que debéis resolver, muchas las cosas que iránsurgiendo; pero siempre hay que tener una prioridad, y es no olvidaros de esosencuentros íntimos con el Señor a través de la oración. Era la actitud de María. Ellaestaba allí, sentada a los pies de Jesús, escuchándole; poco le importaba lo que habíaalrededor, para ella lo verdaderamente valioso era aprender a amar… amar a Jesús.

Hijos míos, debéis aprender el verdadero sentido del trabajo. Éste siempre debetener como finalidad dar gloria a Dios; de este modo, ese trabajo se convertirá enoración, porque ya no lo haréis para daros gusto a vosotros mismos, sino que, a travésde él, al hacerlo con la mayor perfección posible, daréis mucha gloria a Dios; ésetrabajo será algo ofrecido al Señor y Él será su Dueño.

Y todo ello sin olvidar nunca el tiempo que habréis de dedicar a esos ratossilenciosos de oración íntima con el Señor. Por eso, hijos míos, la oración será lo que, alfinal, envuelva todo vuestro día, porque estará integrada también en ese trabajo hechopara Dios y por Dios.

En realidad el Señor en este Evangelio os presenta dos personas muy distintas:Marta y María. Con ello quiero deciros también que en vuestro día ambas figurasdeben de estar unidas. Marta con su trabajo; trabajo ofrecido a Dios por la conversiónde las almas y por tantas cosas que tenéis que ofrecer.

El trabajo conlleva una serie de virtudes que deben ser vividas: Ha de estar bien terminado; ha de hacerse en el momento oportuno, cuando toque; hade brillar en él la paciencia para que todo él sea para Dios, y le complazca; en el trabajono debe existir la pereza, y ha de hacerse en cada momento lo que se debe hacer; ysiempre hay que ofrecerlo al Señor, para que Él lo lleve en sus manos. De esta maneratodas esas horas de trabajo se convertirán en oración, y se vivirá así la presencia deDios.

Después está la parte característica de María, que es la oración; esa oraciónsilenciosa que se unirá a ese trabajo también. Además están las horas de descanso que

64

Page 65: DE LA MANO DE MARÍA · 2018-12-28 · El Señor está allí, sentado en aquella orilla, junto a la lumbre, esperando a sus hijos, para que se le acerquen y, movidos por el amor,

también se deben de santificar ofreciéndoselas al Señor. De este modo todo el día, susveinticuatro horas quedarán depositadas en las manos del Señor.

Un buen ejemplo lo tenéis en San José; cómo realizaba él su trabajo, con quéperfección; con qué santa intención de ofrecerle a Dios algo perfectamente realizado,pero no para vanagloriarse él, sino porque estaba ofrecido a Dios.

Por eso, vosotros debéis ver en vuestra vida cómo unís a “Marta” y a “María”;cómo unís en vuestra vida sus respectivos carismas. La una ha de quedar integrada enla otra. Así es como debe de ser. Así será cómo cada día ordinario quede santificadopara la gloria de Dios.

SEMANA VIGÉSIMO SÉPTIMA DEL TIEMPO ORDINARIOMiércoles, día 11 de Octubre de 2017

El Padrenuestro

Evangelio Lc 11,1-4. Queridos hijos, los discípulos observaban cómo oraba Jesús, y sedaban cuenta que no sabían rezar; por eso, le dicen al Señor que les enseñe a orar, y Élles respondió dándoles ésta oración, que es una plegaria que abarca todas lasnecesidades espirituales y temporales del hombre: es el Padrenuestro. Oración queaún se repite en multitud de lugares y por personas de toda condición.

Consta de dos partes: En la primera de ellas os dirigís al Padre, y en ella reconocéis que es vuestro Padre yvosotros sois sus hijos; que habita en el Cielo y en cada uno de vosotros; que suNombre ha de ser santificado, y se santificará también con vuestra actitud, si a travésde vuestras obras le dais gloria.

Después pedís que su Reino venga a vosotros. Eso supone un cambio en vuestravida, porque vivir bajo el Reino de Dios supone cumplir en todo momento su Voluntady comportaros como verdaderos hijos suyos. ¡Es un canto a su grandeza, omnipotenciay soberanía! Es ensalzar algo que vuestra mente jamás llegará a comprender, porquesois humanos, seres pequeños, criaturas hechas por Él.

A continuación, la segunda parte es la dedicada a las necesidades temporales, comohombres que sois. Pedís el pan de cada día, el perdón de vuestros pecados,perdonando vosotros a quien os ofende; y la ayuda para no caer en pecado ni ententación. Sois débiles, y en medio de toda la creación sois insignificantes; pero paraDios sois sus hijos, sois únicos e irrepetibles, y por cada uno de vosotros Él ha dado suVida.

En esta oración queda reflejada esa diferencia entre la criatura y el Creador; pero noqueda dividida en dos oraciones separadas y distintas. Porque ambas partes se unen,se ensamblan formando un todo: el Creador que ama a su criatura, y le enseña cómodirigirse a Él para recibir las gracias que necesita. Y la criatura, que al ir reflexionandocon las palabras de esta oración, se da cuenta de su nada; que todo lo necesita de suPadre Dios para poder cumplir su Voluntad, y fundamentalmente el perdón de suspecados, que es el don que más le agrada al Señor otorgar, al ver a su criaturahumillarse ante Él.

¡Oración por excelencia hijos míos! Repetidla con mucha atención, porque es a Diosa quien os dirigís. Por eso, hijos míos, os pido insistentemente, que cuando os dirijáis aÉl o a Mí con el Padrenuestro, o con esa otra oración, también escrita en el Evangelio,

65

Page 66: DE LA MANO DE MARÍA · 2018-12-28 · El Señor está allí, sentado en aquella orilla, junto a la lumbre, esperando a sus hijos, para que se le acerquen y, movidos por el amor,

que es el Avemaría, hacedlo, no solo con la atención que yo os pido, sino con amor,con verdadero amor de un hijo que se dirige a sus padres.

Entonces, al hacer esto que os pido, notaréis en vuestro interior que os vaistransformando. Esa alma se transforma porque al dirigirse a su Padre Dios y a su MadreSantísima, está poniendo amor, está poniendo todo de su parte, ¡todo! Ya no rezáis,entonces, de esa manera mecánica e irreflexiva, sin daros cuenta a quien os dirigís ycómo os dirigís. Cuando habláis con otras personas pensáis muy bien lo que vais adecir; y cuidáis las palabras y las formas para que os entiendan y sepan de lo que estáishablando; ponéis la atención debida. ¡Cuánto más atención tenéis que poner cuandoos dirigís a vuestro Dios!

Sé que muchas veces no os dais cuenta, y por eso rezáis de esa manera atropellada,sin saber ni lo que decís. Por eso os pido este esfuerzo hijos míos, porque estáisllamados a algo grande. Por eso ¡tenéis que cambiar tantas cosas! Y esta es una de ellas.

¡Rezad hijos míos con amor! Y veréis… veréis la Paz y el gozo que sentiréis envuestro interior.

SEMANA VIGÉSIMO SÉPTIMA DEL TIEMPO ORDINARIOJueves, día 12 de Octubre de 2017 Festividad Nuestra Señora del Pilar

Evangelio Lc 11,27-28. Queridos hijos, hoy es la gran festividad de la Virgen del Pilar.Hoy quiero que viváis profundamente mi presencia, y que volváis a renovar laconsagración a mí. Yo soy la que os guía. “La Guía de vuestras vidas”, como lo fui de los apóstoles en elmomento en que mi Hijo subió a los cielos. Y ellos me tuvieron como Madre y Maestraigual que me tenéis vosotros.

En el Evangelio de hoy el Señor os transmite unas importantes palabras:“Bienaventurados los que escuchan la palabra de Dios y la cumplen”. El quererescuchar la “Palabra de Dios” ya es un gran paso que el alma da en su vida; porquenecesita de esa “Palabra” para ir aprendiendo, como les ocurría a los apóstoles, e irviendo -tras las enseñanzas del Señor- cómo debéis actuar para seguir sus pasos.

Son muchas las formas en que podéis escuchar esta “Palabra de Dios”: cuandoacudís a la Santa Misa y se leen las lecturas, sobre todo el Evangelio; a través de lalectura de libros de espiritualidad; o a través de otras personas; o en vuestra oraciónpersonal.

Él se manifiesta de diversas formas para que tengáis la oportunidad de poderescucharle. Pero Él llama “bienaventurados” no sólo a los que “escuchan” esta“Palabra”, sino a los que “la cumplen”.

Cumplir es obedecer, pero obedecer por amor, por cumplir su Voluntad y hacervuestros sus mandatos. Es posible que a la hora de escuchar se os haya metido larutina, que escuchéis sin oír, que estéis distraídos pensando sólo en vuestras cosas, queel Señor forme parte de vuestra vida, pero no de un modo profundo y coherente.

Más que el oír, escuchar la palabra de Dios implica esa disposición del corazón parahacer vida sus palabras. Por lo tanto se necesita fe, para estar completamenteconvencidos de que esas palabras vienen del Cielo. Humildad, para daros cuenta quesin ellas nada podéis. Obediencia, para cumplir ciegamente su Voluntad; y pacienciacon vosotros mismos al daros cuenta que, muchas veces, todo esto no se cumple.

Hijos: fe, humildad , obediencia y amor para oír sus Palabras.

66

Page 67: DE LA MANO DE MARÍA · 2018-12-28 · El Señor está allí, sentado en aquella orilla, junto a la lumbre, esperando a sus hijos, para que se le acerquen y, movidos por el amor,

SEMANA VIGÉSIMO SÉPTIMA DEL TIEMPO ORDINARIOSábado, día 14 de Octubre de 2017

Disposiciones para la escucha de la Palabra de Dios

Evangelio Lc 11,27-28. Queridos hijos, de nuevo se repite el Evangelio del otro día, enel cual el Señor os dice: “Bienaventurados los que escuchan la palabra de Dios y lacumplen”. Ya os hablé de la forma en que había que escucharla; y al final de la lecciónquise enseñaros que para que la Palabra de Dios entre de lleno en vuestro corazón,éste debe de estar bien dispuesto y abierto a esa Palabra.

Os recuerdo que para ello eran necesarias algunas virtudes: fe, humildad,obediencia y amor.

La Fe es totalmente necesaria para oír y escuchar la Palabra divina, para creerfirmemente que esas palabras vienen del Cielo. Muchas veces tendéis a racionalizarlotodo, a buscar siempre una explicación lógica para cada cosa. Pero, todo losobrenatural, lo que viene de Dios, o se cree en ello, o no se cree. No hay otraalternativa. Si se cree en Dios se cree en su Palabra y en todas la mociones que elEspíritu Santo comunica a vuestra alma. Y sólo se puede creer en la Palabra de Dios ycumplirla por medio de la fe.

La Humildad, otra virtud indispensable. El hombre soberbio no quiere escucharnada que no venga de él mismo. Solo cuenta su opinión y su modo de pensar; lo demásno sirve. Para oír esa “palabra sagrada” hay que ser muy humilde; el “yo” tiene quedesaparecer para escuchar a Dios. Él os inspirará hacer las cosas según sus planes, a lamanera de Dios, no a la vuestra, y por eso es tan necesaria la humildad.

La Obediencia, totalmente unida a la humildad. Sólo el que es humilde obedece,porque ya su opinión y su forma de pensar no cuentan; se somete a la Voluntad deDios y a lo que el Señor le manda.

El Amor para oír y escuchar sus Palabras también es indispensable. Sus Palabrasescuchadas con amor calan en el fondo del alma y la van transformando a medida queentran en ella. Es esa disposición de apertura hacia todo lo que viene de Dios.

Esta lección completa lo anterior, y quiero que reflexionéis sobre ella debido a suimportancia.

SEMANA VIGÉSIMO OCTAVA DEL TIEMPO ORDINARIOMiércoles, día 18 de Octubre de 2017

Misión de los setenta y dos

Evangelio Lc 10,1-9. Queridos hijos, en el Evangelio de hoy el Señor os da una nuevaenseñanza: a llevar el Reino de Dios allá donde os encontréis.

El Evangelio os explica cómo el Señor envió a setenta y dos discípulos a que leprepararan el camino. Había mucho trabajo que hacer con las almas y los obreros eranpocos. Les dijo una expresión muy significativa: “Mirad que os envío como corderos enmedio de lobos”. Habría mucha gente que les escucharía y otros que les echarían desus casas. No todos están capacitados para entender; pero cada alma le pertenece aDios y nunca hay que juzgarla por las apariencias.

Sois corderos en medio de lobos, y el Señor, como a aquellos setenta y dos, os envíapara que le preparéis el camino del encuentro con esas almas. Por eso hijos míos,

67

Page 68: DE LA MANO DE MARÍA · 2018-12-28 · El Señor está allí, sentado en aquella orilla, junto a la lumbre, esperando a sus hijos, para que se le acerquen y, movidos por el amor,

necesitáis hacer mucha oración, para que a través de ella penséis primero en todas laspersonas que os rodean, que viven con vosotros o se relacionan con vosotros másíntimamente. A ellos es a los primeros que debéis ayudar, con vuestro cariño,generosidad y paciencia; sabiéndoles escuchar, dedicándoles el tiempo que necesitan.Después, también a otras personas que el Señor os pondrá en el camino.

No todas las almas están en la misma disposición de escuchar al Señor; no todashan recibido las mismas enseñanzas, ni las mismas oportunidades. Por eso, hijos míos,vosotros tenéis la responsabilidad de prepararles el camino que conduce al Señor; paraque esa alma, al ver vuestro ejemplo, sienta verdadera necesidad de cambiar su vida. Ycuando el Señor se cruce en su camino se encuentre ya con un alma preparada, abiertaa sus enseñanzas y a su Misericordia. ¡No os olvidéis de vuestra familia! Esos son losprimeros y más importantes.

Hijos míos, gran labor tenéis por delante. Sois mis apóstoles y lleváis a Cristo envuestro interior. La mies es mucha y los obreros son pocos. ¡Poneos en camino! porquelas almas os esperan. Regadlas con esa oración, esa oración íntima y personal convuestro Padre Dios; allí, poned en sus manos esas almas, para que cada acción, cadapensamiento, cada palabra que salga de vuestra boca esté “regada por el amor deCristo”. Esa acción, ese pensamiento, esa palabra… como está ya en las manos delSeñor quedará completamente divinizada. Ya no serán vuestras manos, ni vuestras palabras, ni vuestros pensamientos los queayuden a esas personas, sino que será el mismo Cristo a través de vosotros. Por eso,hijos míos, ¡no olvidéis la oración! tan importante para llevar a cabo esto que ahora osmanda el Señor.

SEMANA VIGÉSIMO OCTAVA DEL TIEMPO ORDINARIOSábado, día 21 de Octubre de 2017

“El mundo necesita de vuestro testimonio”

Evangelio Lc 12,8-12. Queridos hijos, en el Evangelio de hoy el Señor les dice a susdiscípulos: ”Todo aquel que se declare por Mí ante los hombres, también el Hijo delHombre se declarará por él ante los ángeles de Dios; pero si uno me niega ante loshombres, será negado ante los ángeles de Dios”.

Palabras muy claras las que con este Evangelio os dice el Señor. El mundo que osrodea y los hombres que viven en él, incluso familiares muy allegados, viven como siDios no existiera. Con su forma de vivir niegan la existencia de Dios, porque quierenestar libres de toda atadura y de todo lo que pueda comprometerles. Todo gira entorno al confort, al dinero, al poder, al sexo, al egoísmo y a la soberbia.

El Señor emplea en este Evangelio palabras muy duras: “Si uno me niega ante loshombres, será negado ante los ángeles de Dios”.

La vida en este mundo dura un tiempo, que pasa muy rápido. Y después llega la otravida: la vida eterna, que ya es para siempre, para toda la eternidad. Vosotros no estáis,directamente, negando a Dios; pero en ocasiones, con algunas actitudes, dais malejemplo, y de alguna manera también negáis su existencia.

Cuando os dejáis llevar por infidelidades y pecados, que van en contra de Dios, esuna forma de negarle, de apartarle de vuestra vida, como si su existencia ya no osimportase; porque en esos momentos sólo os importa seguir vuestra propia voluntad.

68

Page 69: DE LA MANO DE MARÍA · 2018-12-28 · El Señor está allí, sentado en aquella orilla, junto a la lumbre, esperando a sus hijos, para que se le acerquen y, movidos por el amor,

Ahí tenéis el ejemplo de los dos ladrones que estuvieron crucificados al lado delSeñor: uno le negó y se desesperó, siendo ya su vida un infierno; el otro, en cambio,pidió perdón, y su corazón se llenó de esperanza, ya que alcanzó la vida eterna; salvósu alma estando en las mismas circunstancias que su compañero.

El mundo necesita de vuestro testimonio, de vuestro ejemplo. Tenéis que llevar aCristo allá donde vayáis; que sepan que forma parte de vuestra vida, que seguís sushuellas y su ejemplo, y que, aunque caigáis muchas veces, os volvéis a levantar.

Porque ¡lucháis por alcanzar la Vida Eterna!

SEMANA VIGÉSIMO NOVENA DEL TIEMPO ORDINARIOLunes, día 23 de Octubre de 2017

Parábola del rico insensato

Evangelio Lc 12,13-21. Queridos hijos: en el Evangelio de hoy el Señor habla a lasgentes, poniéndoles el ejemplo de aquel hombre que atesoró bienes en esta tierra parapoder vivir así tranquilo, comiendo, viviendo y sólo preocupándose de sí mismo. Y a lasalmas que imitan al rico de ésta parábola, el Señor las habla con estas palabras: “Necio,esta noche te van a reclamar el alma, y ¿de quién será lo que has preparado?. Así es elque atesora para sí y no es rico ante Dios”.

Hijos míos, de esta manera es como vive el mundo; y el Señor los llama necios, y loson, porque piensan que lo único valioso que existe en esta vida es el deseo dedisfrutarla hasta la saciedad.

Vosotros sabéis que esto no es así; pero vuestra alma debe estar siempre preparada,porque no sabéis ni el día ni la hora en que será reclamada.

Vuestras manos en estos momentos, ¿de qué están llenas? ¿cuál es el motor devuestra vida?

¡No atesoréis nada para vosotros mismos! Y no me estoy refiriendo a las riquezasmateriales, sino a algo mucho más costoso de dar, algo más difícil, y es vuestro “yo”. Esuna forma de atesorar algo que no os pertenece.

Habéis sido creados por Dios y sois suyos; por lo tanto, vuestro cuerpo, mente,dones, virtudes, defectos, carácter, actuaciones, todo, absolutamente todo es de Él. Éles vuestro Dueño absoluto, por lo que no tenéis que atesorar nada para vosotrosmismos, ya que todo le pertenece a Él. A veces podéis caer en la tentación de irosquedando con cosas que forman parte de vuestro interior, y las tenéis allí ocultas,porque no queréis que salgan a la luz, ni dárselas al Señor. ¡Tenéis que ser almas purasy cristalinas! Sin ningún tipo de doblez ni de mentira.

No atesoréis cosas que a la larga os hagan daño; y no me refiero a nada material,sino a cosas que preferís que queden allí guardadas, en vuestro interior, como en aquel“almacén lleno de grano” del rico de la parábola; eso no produce riqueza, sino todo locontrario, porque hace daño al alma.

¡Sinceridad, hijos míos, os pido sinceridad!

69

Page 70: DE LA MANO DE MARÍA · 2018-12-28 · El Señor está allí, sentado en aquella orilla, junto a la lumbre, esperando a sus hijos, para que se le acerquen y, movidos por el amor,

SEMANA VIGÉSIMO NOVENA DEL TIEMPO ORDINARIOMiércoles, día 25 de Octubre de 2017

Necesidad de la vigilancia

Evangelio Lc 12,39-48. Queridos hijos: el Señor os habla hoy en el Evangelio de unarealidad que habéis de tener muy presente, y os lo expresa con estas palabras:“Comprended que si supiera el dueño de casa a qué hora viene el ladrón, velaría y no ledejaría abrir un boquete en la casa. Lo mismo vosotros, estad preparados, porque a lahora que menos penséis viene el Hijo del Hombre”.

En primer lugar, cuando el Señor os habla del dueño que debe estar preparado parano dejar entrar al ladrón, ésa casa es “su alma” y el ladrón es “el enemigo”. Con esto, elSeñor os está queriendo decir que el enemigo siempre está al acecho para entrar envuestra alma; aprovecha cualquier cosa para desanimaros, quitaros la paz, confundiros,y sobre todo dividiros; él es más astuto que vosotros y os conoce muy bien. Por eso, elSeñor os dice que veléis, que estéis preparados, porque siempre intentará pillarosdesprevenidos. El alma entonces debe de estar limpia, cimentada en la oración yanclada en el abandono y en la confianza en Dios. No dejéis que en vuestra menteaniden los pensamientos negativos, que destruyen la alegría y confunden vuestrasmentes. ¡Luchad!¡Luchad contra ellos! ¡Invocad a san Miguel! Y poneos en mis manos.

En segundo lugar, cuando el señor os dice que estéis “preparados” para cuando Élvenga, os invita a seguir el ejemplo de las “vírgenes prudentes”, que con sus lámparasencendidas se prepararon para la venida del Esposo y así pudieron entrar en sumorada.

El mundo tira fuerte de vosotros. A veces no os deja ver y os adormece con susofrecimientos; y así os dejáis envolver por una felicidad ficticia que acaba por matar elalma.

Hijos míos, tenéis todo lo necesario para poder combatir y ganar la batalla. Cuandopeor os encontréis decidle al Señor:

“Padre, aquí me encuentro; solo deseo servirte y cumplir tu Voluntad.Pero, ¡valgo tan poco! Que la corriente del mundo me lleva, y entonces mi alma se llena de oscuridad. ¡Recógeme Padre! Me encuentro herido.Yo solo no puedo nada, porque no soy nada. Tú me amas y yo deseo amarte. Dame tu Fuerza para vencerme a mí mismo y tu Misericordia para poder verme perdonado”.

SEMANA VIGÉSIMO NOVENA DEL TIEMPO ORDINARIOJueves, día 26 de Octubre de 2017

Jesús como signo de contradicción

Evangelio Lc 12,49-53. Queridos hijos, palabras muy fuertes las que os dice el Señorhoy en el Evangelio: “He venido a prender fuego a la tierra, ¡y cuanto deseo que esté yaardiendo!” “¡Pensáis que he venido a traer paz a la tierra? No, sino división”. Es posible

70

Page 71: DE LA MANO DE MARÍA · 2018-12-28 · El Señor está allí, sentado en aquella orilla, junto a la lumbre, esperando a sus hijos, para que se le acerquen y, movidos por el amor,

que, a simple vista, éste Evangelio no se comprenda muy bien; pero si lo meditáis conprofundidad, encontraréis el verdadero sentido de sus palabras.

Ése “fuego” al que se refiere el Señor es el fuego del amor; el amor que Él deseaque arda en todos los corazones de los hombres. Ese amor hecho fuego, conlleva eldesapego de todo lo que el mundo ofrece, la exclusividad de darle vuestra vida entera,de no quedaros con “pequeñas parcelas” para vuestro propio provecho.

Todo esto requiere una profunda renuncia a todo lo placentero y a todo lo que ossepare de Dios. Eso puede provocar que las personas que os rodean no entiendanvuestra actitud de renuncia, lo vean como una cobardía y lleguen incluso a pensar quehabéis perdido la razón. Pero para la persona que tiene ese fuego del Amor dentro desu corazón, nada de lo demás le importa. ¡Nada! Nada que no sea Dios tieneimportancia; todo lo demás solo produce angustia, dolor, falta de paz y de alegría,vacío interior.

Por eso, la “Paz” que Él ha venido a traer a la tierra no es lo que el mundo entiendepor “paz”, es decir, una vida exenta de dificultades y problemas. Su Paz está en elinterior del alma; dentro de la persona que sólo vive para Él, y a través de Él para losdemás.

Esa paz es la auténtica Paz; es duradera, exige mucha renuncia de la persona y llegaa todos los corazones cuando se abren a ella dejando que entre, porque ya no quierenvivir para sí mismos sino para Dios. Por eso hijos míos, ¡vida coherente, ejemplar!Aceptando el Evangelio y haciéndolo vida en vosotros.

SEMANA VIGÉSIMO NOVENA DEL TIEMPO ORDINARIOViernes, día 27 de Octubre de 2017

Saber discernir los tiempos

Evangelio Lc 12,54-59. Queridos hijos, hoy el Señor en el Evangelio habla a aquellasgentes, explicándoles que si sabían interpretar los signos de la naturaleza, cómo, sinembargo, no sabían interpretar algo tan importante como el “tiempo presente” y “loque es justo” o no.

El tiempo presente que os ha tocado vivir, no os ofrece una sociedad en la queimpere el amor entre los hombres. Existe mucha injusticia, egoísmo, ansias de poder,hedonismo, materialismo…; porque el hombre vive de espaldas a Dios, solo estápendiente de sí mismo; por lo tanto, lo que le suceda al hermano nada le importa.

Es un tiempo de lucha, de ir contracorriente. Todos los días, al levantaros por lamañana, el primer pensamiento tiene que ser para Dios. Pedidle esa ayuda quenecesitáis para ir saltando todos aquellos obstáculos que os encontréis por el camino,todas aquellas cosas que os puedan ir entibiando y apartando de Dios.

No podéis vivir sin estar atentos a las necesidades de los demás. Cada día os tenéisque examinar del amor. Reflexionad durante unos momentos, antes de acostaros, yved, a la luz del Espíritu Santo, cómo transcurrió el día; si todo lo que hicisteis ypensasteis giró en torno a vosotros mismos y a vuestra comodidad, o si estuvocentrado en las necesidades de los demás. Estas necesidades se podrán fácilmenteresolver con una llamada de teléfono, con sencillas muestras de cariño, visitando a unenfermo, ofreciendo al Señor alguna mortificación por determinada persona, yprescindiendo de vuestros gustos y caprichos.

71

Page 72: DE LA MANO DE MARÍA · 2018-12-28 · El Señor está allí, sentado en aquella orilla, junto a la lumbre, esperando a sus hijos, para que se le acerquen y, movidos por el amor,

¡Almas recias, entregadas, generosas, con la mirada y el corazón puestos en el Cielo,y derrochando amor allá por donde vayáis!

SEMANA VIGÉSIMO NOVENA DEL TIEMPO ORDINARIOSábado, día 28 de Octubre de 2017

Elección de los Doce Apóstoles

Evangelio Lc 6,12-19. Queridos hijos, en el Evangelio de hoy el Señor os habla de laeficacia de la oración: “Subió a un monte a orar y pasó la noche orando a Dios”. Acontinuación nombró a los que serían sus “Apóstoles”. Después, la gente venía demuchos pueblos y ciudades para oír sus palabras y que les curara de sus enfermedades,“porque salía de Él una fuerza que los curaba a todos”. Cada acto, cada cosa que hacíaiba precedido de la oración al Padre; de esta manera os enseña cómo vosotros debéisde proceder.

La oración es un acto de humildad, de fe, de amor, porque el alma sabe que sin ellanada podrá conseguir; el alma, cuando se dirige al Señor, sabe y se siente poca cosa.

En esa oración pide, da gracias, habla y escucha al Señor, le muestra su amor y sedeja guiar. Todo lo pone en sus manos, como hizo el Señor a lo largo de su vida; poreso, la oración verdadera siempre es humilde, porque el alma siempre recurre a ellapara que todo pase por las manos del Señor. También se necesita fe, porque el alma sedirige a alguien que no ve y a veces tampoco siente. Es un acto de total confianza yabandono; al sentirse simple criatura que nada puede, tiene la total confianza de queserá escuchada por “alguien”; y sabe que ese “alguien” es su Padre Dios.

Y por último, al hacer oración, el alma tiene que poner una dosis más o menosgrande de amor, dependiendo de su capacidad de amar, del deseo que tenga de darsea ese Padre que lo ha dado todo por él. Por eso, la oración tiene tanta fuerza; derribamurallas, derrite corazones, llega a todos ellos, a todos los que desean abrirse a laGracia.

¡Hijos míos! que todos vuestros actos vayan precedidos de esta oración humilde,llena de fe, y desbordada de amor por quien sabéis que ¡tanto ha hecho por vosotros!

DOMINGO TRIGÉSIMO DEL TIEMPO ORDINARIODía 29 de Octubre de 2017

El primer mandamiento

Evangelio Mt 22,34-40. Queridos hijos, ya en otra ocasión os expliqué el Evangelio dehoy, pero es tan importante, que voy a volver a recordarlo una vez más. Ante lapregunta de un doctor de la Ley, cuál es el mandamiento principal, el Señor responde:“Amarás al Señor, tu Dios, con todo tu corazón, con toda tu alma, con toda tu mente”. Y“Amarás a tu prójimo como a ti mismo”. Enseñanza difícil de seguir, pero en ella quedaresumido lo más importante que debe de vivir un hijo de Dios. Amar al Señor con todo el corazón significa que todos los sentimientos deben irencauzados hacia Él; si no, serían sentimientos humanos, cuya finalidad sería la delpropio beneficio, placer y felicidad, buscando todo eso donde nunca lo podríais

72

Page 73: DE LA MANO DE MARÍA · 2018-12-28 · El Señor está allí, sentado en aquella orilla, junto a la lumbre, esperando a sus hijos, para que se le acerquen y, movidos por el amor,

encontrar. Al corazón hay que tenerlo cerrado con siete cerrojos, porque tiende aobsesionarse y a vivir para sí mismo.

Amar con toda el alma: el espíritu es lo que os une con Dios, y ese amor tiene quequedar demostrado en esas prácticas de piedad, que deben estar envueltas con elamor. ¡Cuidad muy bien todos los detalles, preparad esos encuentros, dadle la importanciaque merecen, poned atención sabiendo a quién os dirigís! Que no se conviertanúnicamente en un simple cumplimiento, sino en un deseo fervoroso de estar convuestro Padre Dios.

Amar con toda la mente, es decir, con todos los pensamientos razonamientos,sentidos…, para que vayan encauzados a cumplir la Voluntad de Dios; de esta manera,todas las decisiones estarán iluminadas bajo la Luz del Espíritu Santo. Se trata de amaral Señor con todo vuestro ser, que no os pertenece porque es suyo; de esta maneratodo quedará divinizado porque es el Señor el Dueño de todo, quedando todo regidopor su Voluntad.

Y amarás al prójimo como a ti mismo: caridad heroica, amor incondicional a loshermanos, manos repletas de amor que un día ofreceréis al Padre; y es de lo que se osjuzgará, del amor. Todo esto será la consecuencia del amor que le deis a Dios; de ahínace y desde ahí crece, porque veis a Cristo reflejado en cada uno de vuestrosprójimos. Gran lección la de hoy. Grabadla a fuego en vuestro corazón. Y ¡amad, hijosmíos, amad!

SEMANA TRIGÉSIMA DEL TIEMPO ORDINARIOMartes, día 31 de Octubre de 2017

Parábola del grano de mostaza

Evangelio Lc 13,18-21. Queridos hijos: en el Evangelio de hoy el Señor compara elReino de Dios a un pequeño “grano de mostaza”, que se siembra, crece, haciéndose unárbol donde después anidarán los pájaros.

El grano de mostaza es una de las semillas más pequeñas que existen. Cuando esasemilla se encuentra en buena tierra y se la cuida acaba creciendo, haciéndose un granárbol que cobijará a todo aquel que se acerque a ella.

Esa pequeña semilla la tenéis en vuestro interior; llegó a través del bautismo, de lossacramentos; es el Señor que habita en vosotros, dentro de vosotros. Pero esa semillapuede quedarse pequeña y no crecer, o incluso morir debido al pecado; ésas son lasmalas hierbas, la falta de alimento, las piedras que no la permiten crecer.

El Señor sembró en vuestra alma la “buena semilla” y el alma debe responder. A esa“semilla” hay que cuidarla con esmero; hay que alimentarla día a día con la gracia quese recibe en los sacramentos, con la oración personal, con los sacrificios ymortificaciones ofrecidos para el bien de tantas almas, con esa vida entregada a losdemás.

Por eso, hijos míos, pensando en esa semilla, en ese pequeño grano de mostaza,cuando arrancáis de ella las malas hierbas es cuando acudís al sacramento de laconfesión, para limpiar así el terreno y que quede preparado para recibir después esa“agua viva”. Esa agua que hará que la semilla crezca grande y vigorosa, a través delsacramento de la Eucaristía.

73

Page 74: DE LA MANO DE MARÍA · 2018-12-28 · El Señor está allí, sentado en aquella orilla, junto a la lumbre, esperando a sus hijos, para que se le acerquen y, movidos por el amor,

Después, el resto de cuidados que necesita: el quitar esas piedras, el que no seacerquen los animales a comérsela, el que la tierra quede bien abonada…, eso será através de la oración, a través de los sacrificios y mortificaciones, y del amor a losdemás. Pero lo más importante es hacer todo eso por amor. Así es comoverdaderamente esa semilla recibirá todo lo que necesita; porque si lo hacéis sin amor,sí lo recibirá, pero en mucha menor medida.

Vosotros tenéis que ser como ese jardinero, que va todas las mañanas a ver sucampo y observa cómo va creciendo su planta, y la va cuidando con esmero. Así escomo esa pequeña semilla, al estar tan bien cuidada, irá creciendo, día a día, hastahacerse un árbol frondoso que servirá para dar cobijo a todo el que lo necesite.

¿Veis, hijos míos, qué maravilloso es dejarse moldear? Dejarse hacer. Que sea elSeñor el que viva en vuestra alma, y así convertirá lo que fue una pequeña semilla enun gran árbol repleto de sombra y frutos. Esa sombra que necesitan todos aquellos quese acercan para cobijarse de ese calor, o de esa lluvia o de ese vendaval.

Hijos míos, verdaderamente, ¿os dais cuenta de lo que lleváis en vuestro interior?¿Podéis llegar a entenderlo? Es muy difícil que vuestra mente alcance esta “sabiduría”.Pedidle luz al Espíritu Santo para acercaros un poco a éste entendimiento, y así daroscuenta de que sois el reflejo de Cristo ante los demás hermanos. Sois ese árbolgrandioso, frondoso, que está alimentado por el amor a Cristo.

74

Page 75: DE LA MANO DE MARÍA · 2018-12-28 · El Señor está allí, sentado en aquella orilla, junto a la lumbre, esperando a sus hijos, para que se le acerquen y, movidos por el amor,

NOVIEMBRE

SEMANA TRIGÉSIMA DEL TIEMPO ORDINARIOMiércoles, día 1 de Noviembre de 2017 Festividad de todos los santos

Evangelio Mt 5,1-12ª. Queridos hijos, hoy es la fiesta de Todos los Santos, hombrescomo vosotros que se tomaron en serio su vida cristiana y supieron vivir el Evangelioen toda su plenitud.

El Evangelio de hoy os habla de las Bienaventuranzas . El Señor en lo alto de unmonte fue enumerándolas una a una, y todo el conjunto de ellas resume la vidaheroica que debéis vivir. Esa fue la vida de los santos: pobres de espíritu, mansos,sufridos, incomprendidos, misericordiosos con los demás, limpios de corazón, pacíficos,perseguidos por no ser entendidos, insultados, calumniados por seguir a Cristo. Todoesto es el resumen de la vida de un santo. Y el Señor, al final del Evangelio, les añadeestas palabras: “Alegraos y regocijaos porque vuestra recompensa será grande en elCielo”.

Este planteamiento de vida expresado en las Bienaventuranzas implica una vida muycostosa y llena de sacrificios. Es una vida centrada en la Cruz de Cristo; Cruz tomadacon amor, con esa donación que ha de hacer el alma para unirse a su Señor. Esa es laverdadera forma de expresar el amor a Cristo; ése es el camino que debéis seguir parallegar un día a la santidad.

Y el Señor anuncia su gran recompensa: “Alegraos y regocijaos porque vuestrarecompensa será grande en el Cielo”. Es lo que más desea el Señor, lo que más lealegra: la salvación de las almas. Para eso vino al mundo y para eso permanece en él.

¡Hijos míos! Id repasando cada una de las Bienaventuranzas, son un programa devida que os llevará a la verdadera Vida. Cada una de ellas supone una lucha, unnegarse, un vivir desasido de todas las cosas de la tierra; es ese darse incondicional,primero a Dios y después a las almas a través de Él.

Hoy, día de todos los santos, encomendaos a ellos, para que os ayuden en vuestrocaminar hacia Dios, de la misma forma que lo hicieron ellos.

SEMANA TRIGÉSIMA DEL TIEMPO ORDINARIOJueves, día 2 de Noviembre de 2017 Conmemoración de todos los Fieles Difuntos

Evangelio Jn 6,37-40. Queridos hijos, hoy es el día en el que se conmemora a Todoslos fieles difuntos, que son las almas de todos aquellos que dejaron ya esta tierra y sehan salvado, pero que necesitan la ayuda de vuestras oraciones para que les seaabreviado su tiempo de purificación y puedan entrar en el Cielo.

Y el Señor en el Evangelio os dice: “Esta es la voluntad de mi Padre: que todo el queve al hijo y cree en Él tenga vida eterna, y Yo lo resucitaré en el último día”. En esteEvangelio el Señor os da un mensaje de esperanza, sabiendo que la vida no acaba aquí

75

Page 76: DE LA MANO DE MARÍA · 2018-12-28 · El Señor está allí, sentado en aquella orilla, junto a la lumbre, esperando a sus hijos, para que se le acerquen y, movidos por el amor,

en la tierra. Esta vida es un paso, una preparación y una oportunidad para ganaros elCielo; por eso es tan importante aprender a amar a Dios. Solo se tiene una vida, yaunque parece larga, no lo es. Los años pasan rápidamente y de repente os encontráisque, con el paso de los años, se ido consumiendo el tiempo de vuestra vida; yentonces: ¿qué le habéis ofrecido al Señor? Pero nunca es tarde para darse al Señor;siempre hay tiempo, siempre es el momento de empezar. Y el Señor expresa muyclaramente cuál es el camino: “que todo el que ve al Hijo y cree en Él tenga vida eternay yo le resucitaré en el último día”.

Ver al Hijo y creer en Él se os ofrece de muchas maneras: a Él se le ve y se leencuentra en cada Eucaristía, escondido en los Sagrarios, en los momentos de oración,en la necesidad de un hermano, en la cruz de cada día. Allí es donde lo encontraréis ydonde habréis de tener fe para “verle y creer en Él”. De esta manera Él os promete elgozo de la vida eterna y de la resurrección el ultimo día. ¡Qué gran recompensa!

Vuestros fieles difuntos ya dieron el paso a la vida eterna. Es el momento de rezarmucho por ellos. Ofreced la Santa Misa por su almas, para que se encuentren con elSeñor en el Cielo. Necesitan de vuestras oraciones, sacrificios…; es una de las mayoresobras de caridad que podéis hacer, ya que ellos tuvieron ya su oportunidad en esta viday ahora ya no pueden hacer más por sí mismas. Son esas Almas benditas delPurgatorio, que esperan vuestras oraciones. Y cuando lleguen al Cielo serán grandesaliadas que os ayudarán en vuestro caminar. ¡Rezad por ellas, lo necesitan!

SEMANA TRIGÉSIMA DEL TIEMPO ORDINARIOSábado, día 4 de Noviembre de 2017

Lección sobre la humildad

Evangelio Lc 14,7-11. Queridos hijos, en la parábola del Evangelio de hoy, el Señor oshabla de la humildad. Para ello utiliza el ejemplo de una boda, en la que los convidadosbuscaban los primeros puestos, cuando no les correspondía. Les da el consejo de quebusquen siempre el “último puesto”, y así subirán más alto; y emplea unas palabrasque quiero que meditéis: “Porque todo el que se enaltece será humillado; y el que sehumilla será enaltecido”.

Hijos míos, éstas palabras del Señor son sumamente claras. Ya sabéis en quéconsisten la humildad y la soberbia; y Yo quiero profundizar un poco más.

Todos vosotros sois personas de oración, y estáis luchando por adquirir las virtudes,y con vuestra vida dar gloria a Dios; pero, para facilitar esta humildad que debéis vivir,quiero remitiros a la vida de infancia espiritual : “Si no os hacéis como los niños noentraréis en el Reino de los Cielos”.

La humildad quedó reflejada en toda la Vida de Cristo; en todos los momentos de suvida la practicó, y es el espejo donde os debéis mirar y aprender. Sois sus hijos, y loshijos aprenden de sus padres; porque nacen sin saber nada, y según van creciendo,todo se les va enseñando.

Esa vida de infancia espiritual os lleva directamente a vivir la humildad; porque,cuando el alma está desprendida de todo y dispuesta a dejarse hacer, la confianza ensu Padre Dios es absoluta; todo se lo da a Él. Como un niño pequeño, que vivedespreocupado porque su padre se ocupa de su vida, así él vive feliz, tranquilo y

76

Page 77: DE LA MANO DE MARÍA · 2018-12-28 · El Señor está allí, sentado en aquella orilla, junto a la lumbre, esperando a sus hijos, para que se le acerquen y, movidos por el amor,

obedeciendo a lo que le mandan. Sabe que nada le ha de pasar; se siente seguro en lasmanos de su padre.

He querido hablaros de esto para facilitaros el camino hacia la humildad, esa virtudque tanto atrae a los hombres cuando se encuentran con almas que la viven.

¡Confiad en Dios hijos míos! Abandonaos en Él y olvidaos de tantas cosas que ospuedan quitar la paz.

DOMINGO TRIGÉSIMO PRIMERODía 5 de Noviembre de 2017

Humildad y espíritu de servicio

Evangelio Mt 23,1-12. Queridos hijos, hoy el Señor en el Evangelio vuelve a hablar delos escribas y fariseos. Su falta de palabra, su doblez e hipocresía, el ocupar losprimeros puestos y el desear la adulación de la gente..., todo eso lo veis reflejado enmuchas personas que conocéis, y es la forma de vida que el mundo enseña. Pero elSeñor quiere de vosotros una actitud completamente distinta. Por lo tanto, no busquéis estar por encima de los demás. Ningún hombre es superiora otro. Sólo tenéis un Padre y es el del Cielo; en la tierra tenéis hermanos paraayudaros mutuamente. Y no busquéis ser alguien importante en la vida, aunqueenseñéis a los demás. ¡Es el Señor quien os enseña a vosotros! Y Él es el único Maestroal que hay que seguir.

Después, repite las palabras del Evangelio de ayer y os dice también: “El primeroentre vosotros será vuestro servidor”. Otra vez la virtud de la humildad. Ése servicio alos demás hace que os olvidéis de vosotros mismos y que practiquéis la virtud de lagenerosidad, abriéndose las puertas del alma para que los hermanos encuentren laayuda que necesitan. Cuando el alma está muy cerca de Dios e intenta amarloprofundamente, su vida gira en torno a Él, por lo que en esa alma no cabe el egoísmo.Es un alma abierta al amor, a dar todo lo que tiene por el bien de los hermanos; nopiensa en sí misma, y es mucho más feliz. Porque su vida la dedica a servir, a estarpendiente de los demás, a despreocuparse de su persona; porque sabe que toda suvida está en manos de Dios.

El abandono y la confianza, van unidas totalmente a esa humildad. Un buen ejemploes la madre Teresa de Calcuta; todo lo dio y nada se quedó para ella ante los másdesgraciados de los hombres; y ¡viviendo una noche oscura del alma!; pero ella, apesar de todo, se abandonó totalmente en el Señor.

¡Así debéis hacer vosotros! Pasadlo todo por la oración, para que el Señor guíevuestros pasos. ¡No os quedéis con nada!

77

Page 78: DE LA MANO DE MARÍA · 2018-12-28 · El Señor está allí, sentado en aquella orilla, junto a la lumbre, esperando a sus hijos, para que se le acerquen y, movidos por el amor,

SEMANA TRIGÉSIMO PRIMERA DEL TIEMPO ORDINARIOMartes, día 7 de Noviembre de 2017

Parábola de los invitados a bodas

Evangelio Lc 14,15-24. Queridos hijos, en el Evangelio de hoy el Señor expone laparábola de un “Hombre que daba un gran banquete e invitó a muchos”. Ese “Hombre”representa al Señor, y el “banquete” es su Reino. Y Él convida a los hombres a queparticipen de él - y os invita también a vosotros - pero cada uno de los convidadosrechaza esta invitación; para ello buscan diferentes excusas, que les parecen másimportantes que el banquete. Desean vivir su vida, y el Reino de Dios no forma partede ella.

Siguiendo el Evangelio, el Señor, al ver que ninguno de los invitados respondía,mandó a sus criados a buscar a los pobres, a los lisiados, a los ciegos y a los cojos.Todas estas personas son los humildes, todos aquellos que sufren, todos aquellos queprocuran vivir la Voluntad de Dios, y los que son capaces de entender el Amor de Dios;por eso van al banquete.

El Señor invita a todos los hombres sin excepción a su casa. Él desea celebrar ese“banquete” con todos ellos, ¡con todos vosotros!; ¡os ama tanto, hijos míos! Pero elhombre tiene el corazón muy duro, y la soberbia, que es el peor de los pecados, haceque se nuble su mente impidiendo que aprenda a querer a Dios.

Hijos míos, todos vosotros hace tiempo, unos antes y otros después, fuisteisllamados, uno a uno. El Señor se presentó muchas veces a lo largo de vuestra vida,ofreciéndoos su Reino; pero, en muchas ocasiones habéis rechazado esta invitacióndebido a vuestros caprichos personales y vuestra forma humana de vivir la vida, y lehabéis dicho al Señor que no. Pero el Señor, como os quiere tanto, nunca os abandona.Y ha seguido esperando una y otra vez.

En muchas ocasiones, a lo largo del camino, se ha hecho el encontradizo, esperandovuestra respuesta para llevaros a Él; en aquellos momentos, frente al Sagrario;esperando minuto tras minuto, hora tras hora, para que derramarais allí vuestraslágrimas y le pidierais la ayuda que necesitabais para seguir.

¡Hijos míos, no le rechacéis! Él os invita con todo su Amor, y dándose a vosotrostotalmente, os llama una y otra vez; espera… espera vuestra respuesta. Por eso, decidledesde lo más profundo de vuestro corazón:

“Señor, aquí me tienes; perdóname, porque te negué ¡tantas veces! al querer hacer las cosas a mi manera, despreciando tu invitación a seguirte; pero ahora, aquí me tienes; nada soy y nada valgo, pero soy hijo tuyo, y Tú me hasescogido para seguirte.Todo te lo doy, lo poco que soy, para que hagáis de mí un auténtico hijo de Dios.”

78

Page 79: DE LA MANO DE MARÍA · 2018-12-28 · El Señor está allí, sentado en aquella orilla, junto a la lumbre, esperando a sus hijos, para que se le acerquen y, movidos por el amor,

SEMANA TRIGÉSIMO PRIMERA DEL TIEMPO ORDINARIOJueves, día 9 de Noviembre de 2017

Expulsión de los vendedores del templo

Evangelio Jn 2,13-22. Queridos hijos, el Señor, en el Evangelio de hoy, os habla de esaescena en la que tiene que expulsar a los vendedores del templo, porque habíanconvertido su “casa de oración” en algo totalmente profano: en una “cueva deladrones”. Y dijo estas palabras: “Quitad esto de aquí, no convirtáis en un mercado lacasa de mi Padre”.

Esto es, ciertamente, lo que habían hecho los judíos: convertir el Templo, la casa deoración, el lugar donde acudían a estar con el Señor, en un “mercado” donde secompraban y vendían mercancías para así poder sacar un provecho económico.

En éste momento en el que os ha tocado vivir, la iglesia, el lugar donde se encuentrael Señor, aún no se ha convertido en ese lugar profano, donde se intercambian lasmercancías; pero, si observáis con detenimiento, preguntaos: ¿cómo se comportan laspersonas que acuden allí?; ¿se respeta el lugar donde habita el Señor? Y vosotros,¿cómo lleváis preparada vuestra alma para ese encuentro con Él?; ¿es un mercado demercancías?; ¿o estáis en esa disposición de recogimiento y de amor hacia el Señor?

No existe respeto, no existe amor, porque en lo profundo del corazón del hombrehay un amor desmesurado hacia sí mismo, amor al mundo, a lo que se ve y se siente.Con esas disposiciones entra en el templo, en la iglesia, y entonces su comportamientoes tan sólo una forma de cumplir, sin pensar en “Quién” habita allí. Sucede algoparecido a lo que se expone en el Evangelio.

El corazón del hombre sigue tan lejos del Señor como entonces; no permanece juntoal Señor porque solamente está preocupado por sus cosas.

Hijos míos, ¡cuidad mucho las muestras de cariño hacia vuestro Padre Dios! Él seencuentra allí, escondido en ese Sagrario, esperándoos horas y horas, días y días ¡Estodo un Dios! Es vuestro Padre, y si aún existís y vivís es por su Voluntad, porque Él loquiere así.

Cuando paséis por delante del Sagrario, cuidad vuestras genuflexiones, que no seansimples garabatos. Enseñad a los demás Quién habita allí. Y después, estad con eldebido respeto, cuidando con esmero el silencio, la forma de estar, también la formaen que vais vestidos, con el debido decoro, y vuestra actitud de total contemplaciónante la realidad que tenéis delante.

Es todo un Dios, ¡todo un Dios, no lo olvidéis! Por eso, poned todo el amor quealberga vuestro corazón; dad ejemplo, porque muchas almas no saben y nadie los haenseñado. El amor no se demuestra con las palabras, sino con el ejemplo; por lo tanto,ése ejemplo es el que tienen que ver en vosotros.

79

Page 80: DE LA MANO DE MARÍA · 2018-12-28 · El Señor está allí, sentado en aquella orilla, junto a la lumbre, esperando a sus hijos, para que se le acerquen y, movidos por el amor,

SEMANA TRIGÉSIMO PRIMERA DEL TIEMPO ORDINARIOSábado, día 11 de Noviembre de 2017

“Ningún siervo puede servir a dos señores” Evangelio Lc 16,9-15. Queridos hijos, el Señor hoy os habla con palabras muy claras,como lo hizo con sus discípulos, y os dice: “El que es fiel en lo poco, también en lomucho es fiel”; “Ningún siervo puede servir a dos señores”. Palabras que tenéis quemeditar y os tienen que llegar al corazón, hijos míos.

Si vais descuidando las pequeñas cosas, como terminar bien el trabajo, estarpendientes del hermano teniendo con él detalles de cariño, los ratos de oración con elSeñor, vencer la pereza en cada momento, sonreír cuando más cuesta…, y tantas ytantas cosas más que forman cada día, y que a simple vista carecen de importancia…; sitodo esto lo descuidáis, lo que al final ocurrirá es que las cosas más importantes lasiréis descuidando igualmente.

Vuestra vida y camino de santidad está formado por muchas cosas pequeñas,hechas a lo largo del día por amor al Señor. No suelen ser grandes cosas las que formanun día corriente; por regla general son pequeños detalles de amor los que llenan ysantifican la jornada; y esto es lo que hace que el alma esté siempre preparada, estévigilante, y con la lámpara encendida, como aquellas vírgenes que fueron con elEsposo.

Entonces, cuando llegue el momento - y llegará - en que tengáis que librar lasgrandes batallas del alma, ya habréis recibido la suficiente preparación, ¡y saldréisvictoriosos! Por eso, quien es fiel en lo poco, lo será también en lo mucho.

Todo esto tiene mucho que ver con la tibieza, que es ese vivir con Dios, pero adistancia, para no perder la libertad - una libertad mal entendida -; y de esa maneraseguir haciendo lo que el cuerpo y el mundo quieren. Y el Señor habló muy claramentede esta enfermedad del alma, y dijo que a los tibios los “vomitará de su boca”. Caer enla enfermedad de la tibieza es como estar a un paso del infierno, porque el alma seama tanto a sí misma que nunca se decide del todo a hacer el bien.

Hijos míos, ¡luchad para no caer en esta enfermedad del alma! No os dejéis envolverpor vuestra concupiscencia, por la soberbia, la vanidad, la sexualidad, la falta demortificación, el amor desmedido a vosotros mismos… ¡Empezad la lucha! ¡Levantaosde nuevo! Dad un paso hacia delante y desechad todo aquello que os separe de Dios. `

¡Pongo tanto amor en cada uno de vosotros! que quiero que os preguntéis, hijosmíos, cómo es vuestra respuesta. Reflexionad sobre esto.

DOMINGO TRIGÉSIMO SEGUNDODía 12 de Noviembre de 2017

Parábola de las diez vírgenes

Evangelio Mt 25,1-13. Queridos hijos, el Evangelio de hoy es el de las diez vírgenes,que tenían que preparar sus lámparas para cuando llegara el Esposo. Cinco se dejaronllevar por la desidia, por la pereza, por lo que el mundo ofrece, y fueron dejando pasar

80

Page 81: DE LA MANO DE MARÍA · 2018-12-28 · El Señor está allí, sentado en aquella orilla, junto a la lumbre, esperando a sus hijos, para que se le acerquen y, movidos por el amor,

el tiempo, pensando que en el último momento podrían encontrar el aceite que lesfaltaba. Muchas almas viven así; su vida está centrada en disfrutar en todo tipo de placeres ydistracciones; y el tiempo va pasando…, y llega el momento de la muerte, y entonces seencuentran con sus manos vacías; su vida no ha tenido sentido, y ya llegan tarde.

A vosotros, hijos míos, puede llegar a sucederos que queréis seguir al Señor, ypensáis que tenéis mucho tiempo; que las cosas pueden esperar. Y os encontráis que elaceite que se os dio se va acabando lentamente, y si no se repone con la gracia deDios, se acaba vaciando. No podéis nunca dejar en segundo lugar al Señor, y ponerotras cosas por delante, aunque sean y os parezcan importantes.

Él tiene que ocupar el primer lugar en vuestro día. La jornada hay que llenarla deesa presencia de Dios, de ese recogimiento, que ayudará a que todo se ordene según elplan previsto por Dios. ¡Cuántas veces no tendréis ganas!¡Cuantas veces estaréiscansados! Pero no importa, ¡hay que trabajar para el Señor! Y esas obras hechas poramor, que tanto y tanto os cuestan, son mucho más meritorias. Desde que os levantáis,hasta el final del día, éste ha de estar regado por esos actos de amor, por esossacrificios que irán llenando, poco a poco, la lámpara de ese aceite de la gracia, queiluminará toda la jornada. De esta manera, cuando el Señor venga a buscaros, siempreencontrará vuestra alma preparada, porque habréis luchado para que esa llama deamor nunca quedase apagada.

El tiempo no es vuestro, sino únicamente de Dios; no os pertenece, y se os pedirácuenta de lo que habéis hecho con él. ¡Hay mucho que hacer hijos míos! “La mies esmucha y los obreros son pocos”.

Mucho se os está dando, y tenéis que responder. La respuesta ha de ser generosa.Por lo tanto, ¡tened vuestra alma bien preparada! para que, cuando llegue el Esposo abuscarla, la encuentre bien preparada, y de esta manera podáis entrar en la Gloria delSeñor.

SEMANA TRIGÉSIMO SEGUNDA DEL TIEMPO ORDINARIOMiércoles, día 15 de Noviembre de 2017

Los diez leprosos

Evangelio Lc 17,11-19. Queridos hijos, en el Evangelio de hoy el Señor os habla de lacuración de diez leprosos; pero solo uno de ellos, que era samaritano, se volvió paradarle al Señor las gracias. Ninguno de los otros le dio gloria a Dios; y entonces el Señorle dijo: “Levántate, vete, tu fe te ha salvado”.

Fue un samaritano el que tuvo una fe agradecida en el Señor, los otros nueve, queeran judíos, no la tuvieron, y no le dieron gloria.

Muchas veces, hijos míos, los que parecen más alejados son los que más cerca estándel Señor; dentro de su corazón hay sencillez, como la de aquel centurión al que elSeñor le curó a su criado. ¡Tuvo tanta fe aquel centurión! No dudó en ningún solomomento; por eso su criado quedó inmediatamente curado. Esa fe que no quedaenturbiada por una mente complicada y llena de prejuicios.

Aquél samaritano volvió a dar gloria a Dios, alabándole y feliz por su curación.

81

Page 82: DE LA MANO DE MARÍA · 2018-12-28 · El Señor está allí, sentado en aquella orilla, junto a la lumbre, esperando a sus hijos, para que se le acerquen y, movidos por el amor,

¡Hijos míos! Cuantas veces el Señor, como a ese leproso, os ha curado de la lepra delalma, de todos aquellos pecados que la envuelven y ennegrecen. El Señor siemprepasó a vuestro lado, muy cerca, como hizo con aquellos leprosos, derrochando envuestra alma misericordia. Es ése perdón, ése amor que ofrece a sus hijos, porque losama.

Cada alma debe preguntarse si verdaderamente se da cuenta que el Señor lo amacon ese Amor único, que nada ni nadie le puede dar. Y, sobre todo, ha de preguntarsecuál es su respuesta ante tanto Amor. ¿Os dais cuenta hijos míos? ¿O estáis tanpendientes de vosotros mismos que no percibís este Amor?

Tenéis que aprender a dar gracias de corazón por todo lo que se os da, por todo loque recibís. ¡Cuántas personas hay en el mundo que no lo reciben! ¡Cuantas, hijosmíos! ¿Cómo entonces, ante tanto Amor, puede permanecer el corazón tan frío yalejado? ¡Reaccionad hijos míos! Al menos dadle gracias, pero con el corazón.

SEMANA TRIGÉSIMO SEGUNDA DEL TIEMPO ORDINARIOJueves, día 16 de Noviembre de 2017

La venida del Reino de Dios

Evangelio Lc 17,20-25. Queridos hijos, hoy el Señor, en el Evangelio, responde a losfariseos, que le preguntaban: “¿Dónde está el Reino de Dios?”, y Él respondió: “ElReino de Dios no viene aparatosamente, ni dirán: Está aquí o está allí; porque, mirad, elReino de Dios está en medio de vosotros”. Y así es, hijos míos. El Reino de Dios no lotenéis que buscar fuera, porque se encuentra dentro de vosotros.

Con todo esto, el Señor os ha demostrado cuánto os ama. Él se quedó entrevosotros, porque sabía que el hombre es muy débil, cae muchas veces, y el mundo ytoda su realidad lo zarandean, y lo llevan de un lugar a otro, haciendo ya de su vida unauténtico infierno.

Por eso, Él se quedó con vosotros; y el vivir en su Reino transforma al hombrehaciendo de él una persona completamente distinta, que vive en paz, con alegríainterior, dándose totalmente a los demás, con olvido de sí mismo.

Ese Reino de Dios lo podéis encontrar en muchos lugares, porque es allí donde seencuentra Él: cada vez que acudís a la Santa Misa y participáis del Santo Sacrificio, allílo recibís, en vuestro interior; quedándose con vosotros obra la transformación devuestra alma. Cada vez que hacéis un acto de caridad, porque ahí es como si el Señorpasara delante de esas personas necesitadas y les dijera: “Hijo, aquí estoy, ¿qué es loque necesitas?”

También en vuestra vida ordinaria de todos los días; esa vida que parece monótona,que siempre es igual, donde, en cada momento, lo que debéis hacer es cumplir laVoluntad de Dios, porque allí es donde encontraréis su Reino; y eso solamente podréissaberlo si vivís esa presencia de Dios, que os va avisando, bajo la luz del Espíritu Santo,qué toca hacer en cada momento del día, sin dar paso a vuestros caprichos, sólo a suDivina Voluntad. Así es como sale todo, no dando lugar a la pereza, no dando lugar a laespera, no dando lugar a vuestro egoísmo. Y esto sin olvidaros de vuestro “sagrariointerior”; allí Él se encuentra siempre esperándoos, en esos ratos íntimos de oraciónentre un Padre y un hijo que se quieren.

82

Page 83: DE LA MANO DE MARÍA · 2018-12-28 · El Señor está allí, sentado en aquella orilla, junto a la lumbre, esperando a sus hijos, para que se le acerquen y, movidos por el amor,

En el momento de comulgar alimentáis vuestra alma con el “divino alimento”,permaneciendo en ese “sagrario” todo el resto del día.

Por eso, el “Reino de Dios” permanece dentro de vosotros, siempre que vosotros lopermitáis. ¡Él se ha dado a vosotros!

DOMINGO TRIGÉSIMO TERCERODía 19 de Noviembre de 2017

Parábola de los talentos

Evangelio Mt 25,14-30. Queridos hijos, hoy el Señor en el Evangelio os habla de laparábola de los talentos: Un hombre dejó a cada uno de sus siervos varios talentos; dosde ellos los hicieron fructificar, pero el tercero no. Entonces empleó estas palabras elSeñor: ”Porque al que tiene se le dará y sobrará, pero al que no tiene, se le quitaráhasta lo que tiene”.

El Señor, con esta parábola, os enseña que Él, a cada hombre, le ofrece unostalentos, unas oportunidades para salvarse y ganar la Vida Eterna; y muchos rechazanesas llamadas que les hace el Señor, y se olvidan, escondiendo bajo tierra todo lo queel Señor les dio y ofreció. Otros sin embargo, siguen la llamada y aprenden a caminarjunto al Señor; su vida es fructífera, porque viven el Evangelio y lo enseñan a vivir aotros con su vida y con su ejemplo.

Hijos míos, el Señor os ha dado una vida, que puede ser corta o larga, para que laviváis de cara a Él. En ese camino, Él se hará el encontradizo, pasará a vuestro lado y osirá llamando valiéndose de diferentes circunstancias, para iros, poco a poco,enseñando a llevar una vida ejemplar en la que sólo se cumpla la Voluntad de Dios, seala que sea.

Los apóstoles humanamente no eran nada, incluso eran ignorantes; pero noenterraron sus talentos, siguieron al Señor allá por donde fue y aprendieron de susenseñanzas, haciendo de su vida la de unos “siervos buenos y fieles” que recibieron delSeñor esta recompensa: “Entrad en el gozo de vuestro Señor”. Vosotros estáis recibiendo mucho, y tenéis una gran responsabilidad, porque muchasalmas os esperan. ¡No enterréis lo que se os da! No os dejéis envolver por el mundo,que tirará de vosotros para que imitéis al “siervo negligente y holgazán” que despreciólo que le daba el Señor.

Almas de oración, almas que contemplan al Señor y que desean cumplir suVoluntad. Así fructificarán vuestros talentos y entraréis en el “gozo de vuestro Señor”.

SEMANA TRIGÉSIMO TERCERA DEL TIEMPO ORDINARIOLunes, día 20 de Noviembre de 2017

El ciego Bartimeo

Evangelio Lc 18,35-43. Queridos hijos, hoy el Evangelio os relata la historia del jovenciego Bartimeo. Él permanecía al borde del camino, y cuando supo que Jesús pasaba,

83

Page 84: DE LA MANO DE MARÍA · 2018-12-28 · El Señor está allí, sentado en aquella orilla, junto a la lumbre, esperando a sus hijos, para que se le acerquen y, movidos por el amor,

gritó para que el Señor le ayudase. El Señor se acercó y le preguntó: “¿Qué quieres quehaga por ti? Y Bartimeo respondió: Señor, que vea”. Entonces el Señor le curó, ya quesu fe le había salvado.

¡Cuántos ciegos habría por aquellos lugares! Pero no llamaron al Señor, porque nocreían en Él, y permanecieron con su ceguera toda la vida. Es la oscuridad de tantoshombres que permanecen en el pecado y en la indiferencia.

El no ver con los ojos del cuerpo no es deseable para nadie, pero aun peor es laceguera del alma, que es esa oscuridad permanente que no deja entrar la Luz de Dios.El alma, con esa ceguera, va viviendo la vida a su forma, buscando todo tipo decompensaciones que apaguen esa sed, ese vacío, esa oscuridad que hace al hombretotalmente infeliz.

El pecado produce esta ceguera, y el alma queda así como insensibilizada ante todolo que haya a su alrededor que no tenga como fin su propio provecho y capricho.Ocurre también muchas veces, cuando se sigue al Señor, que el alma queda atrapadaen faltas de amor hacia Él, en pequeños pecados, en faltas de omisión…, y todo estohace que el alma no tenga esa luz clara, diáfana y fuerte, y queda con esasemioscuridad, como si sólo la iluminara la débil luz de una vela.

Hijos míos, tenéis que luchar para no caer en esa falta de luz, que a la largaproduciría una auténtica ceguera.

¡Señor que vea! Le dijo Bartimeo al Señor. Y vosotros, con el corazón en la mano, levais a decir también:

“¡Señor, que vea! Que vea tu Rostro reflejado en mi vida, Y sea ese Rostro el que marque las pautas de mis obras. Ayúdame a no aferrarme a la ceguera del pecado, que tira de mí para hundirme en la oscuridad. ¡Señor, que vea tu Voluntad y la siga! Ten misericordia de mí”.

SEMANA TRIGÉSIMO TERCERA DEL TIEMPO ORDINARIOMiércoles, día 22 de Noviembre de 2017

Historia de Zaqueo

Evangelio Lc 19,1-10. Queridos hijos: hoy, por su gran enseñanza, voy a explicaros elEvangelio de ayer: la historia de Zaqueo.

Zaqueo era un hombre rico y publicano, y quería ver a Jesús. Como no podía, sesubió a un árbol, ya que la gente no le dejaba ver al Señor. Puede ser que, a través delos acontecimientos diarios, no “veáis” al Señor por falta de esfuerzo personal. Y esque, para ello, el alma debe de estar preparada con la oración y con el debidorecogimiento, que le ayudará a unirse con Él en cualquier circunstancia que tengáis quevivir. Si el alma no se prepara, frente a los acontecimientos y circunstancias que habréisde afrontar, buscaréis “soluciones humanas”, que serán muchas veces equivocadas,porque no habrán pasado por la luz de la oración.

Zaqueo “no lograba ver a Jesús a causa del gentío, porque era pequeño de estatura”,y se subió a un árbol. Vosotros, hijos míos, dejad que vuestra alma suba hacia Dios, sedeje envolver por Él y todo pase por sus manos.

84

Page 85: DE LA MANO DE MARÍA · 2018-12-28 · El Señor está allí, sentado en aquella orilla, junto a la lumbre, esperando a sus hijos, para que se le acerquen y, movidos por el amor,

El Señor vio a Zaqueo y se encaminó a su casa, porque éste le abrió sus puertas paraque Él entrara. Es lo mismo que el Señor quiere hacer con cada uno de vosotros. Élcamina en medio de la muchedumbre y va buscando almas; almas que deseenencontrarse con Él. Si la vuestra está preparada, si está recogida con verdaderorecogimiento interior, lo encontrará enseguida detrás de cualquier acontecimiento devuestro día; y entonces, es el momento también de decirle:

“Entra en mi casa; aunque soy un pecador ¡hospédate en ella! Sé que poco o nadapuedo ofrecerte; sólo hallarás, dentro de mí, falta de amor y miseria, pero es que notengo otra cosa que ofrecerte. ¡No te quedes en la puerta y entra! Entra dentro de mialma y límpiame con tu presencia; haz de mí lo que Tú quieras; no pases de largo; estoes lo que tengo y lo que te ofrezco, yo que soy un pecador miserable, pero que quierecambiar su vida y aprender a amarte”.

Y el Señor, como a Zaqueo, os responde: “Hoy ha sido la salvación de esta casa,pues también este es hijo de Abraham. Porque el Hijo del hombre ha venido a buscar ya salvar lo que estaba perdido”.

Por eso hijos míos, ¡abrid vuestro corazón, abrid vuestra alma a la misericordia deDios!.

SEMANA TRIGÉSIMO TERCERA DEL TIEMPO ORDINARIOJueves, día 23 de Noviembre de 2017

Llanto de Jesús sobre Jerusalén

Evangelio Lc 19,41-44. Queridos hijos, en el Evangelio de hoy el Señor habla deJerusalén: Él lloraba sobre ella, porque le cerró sus puertas; le echó de la ciudad y noreconoció sus enseñanzas. Pero, en su día, sufrirá las consecuencias de su pecado, al noreconocer al Señor y tratarle de esta manera.

Hoy viene a hablaros a vosotros, hijos míos, ya que vuestra alma está representadaen esa puerta, como os dije en la lección de ayer. El Señor, cuando entra en el alma loquiere todo. Él entra en ella, y allí se encuentra lo que el alma le puede ofrecer.

Para ir “colocando” las cosas en su sitio y “verlas con claridad”, será fundamental elexamen de conciencia diario; este ejercicio os facilitará después la preparación devuestras confesiones.

Primero debéis preparar el alma, con un profundo acto de contrición, y pedir ayudaal Espíritu Santo para ver con claridad todo el polvo, la suciedad y el desorden queexiste en ella.

Después, tenéis que acudir con asiduidad a la confesión, y es allí donde esa almaquedará completamente limpia y preparada, para que el Señor entre y se encuentre agusto en ella. Este sacramento debe de ir precedido también por un profundo y sinceroarrepentimiento, y un deseo de no volver a ofender a Dios.

Ante las puertas de Jerusalén el Señor lloró, por su cerrazón, por su egoísmo, por susoberbia, por su falta de comprensión. Él desea ser el Dueño de vuestra alma; no leapenéis más despreciando su ayuda.

Él llama incesantemente, día a día, y os llama por vuestro nombre, sabiendo todo loque sois y lo que le podéis ofrecer.

85

Page 86: DE LA MANO DE MARÍA · 2018-12-28 · El Señor está allí, sentado en aquella orilla, junto a la lumbre, esperando a sus hijos, para que se le acerquen y, movidos por el amor,

Su llamada es única e irrepetible. ¡No os dejéis confundir por otro tipo de llamadasque os quieren llevar a la perdición!

Hijos míos, ¡sed dóciles! Dejaos hacer, apartaos de vuestros razonamientoshumanos, y que entre la Luz de Cristo y llene por entero vuestra alma.

SEMANA TRIGÉSIMO CUARTA DEL TIEMPO ORDINARIOLunes, día 27 de Noviembre de 2017

La ofrenda de la viuda Evangelio Lc 21,1-4. Queridos hijos: hoy el Señor, en el Evangelio, os presenta a esapobre viuda, que echó en el templo todo lo que tenía para vivir. No dio de lo que lesobraba, como hacían los demás, sino de lo que le faltaba. El Señor, que lee loscorazones, quedó gratamente impresionado por la actitud de esta mujer. Para ella noquería nada, ni lo más necesario. Era tal su generosidad y su humildad, que todo se lodio a Dios, no se quedó con nada. Ella confió y se fue feliz de aquel lugar, porque coneste gesto demostró la gran confianza y el absoluto abandono que tenía en Dios.

Con este ejemplo, el Señor os quiere preguntar: ¿qué cosas aun os quedan por dar?.El hombre es un ser codicioso, le gusta tener su autonomía, rodeándose de muchascosas que considera necesarias para vivir. Y sobre todo, ese interior que todos tenéis yque tantas veces ocultáis ¿se lo dais a Dios para que Él lo transforme, abandonándoosen sus manos?

Aquella viuda fue un auténtico ejemplo de fe, ya que nada más le quedaba por dar,y se fue feliz porque todo lo dio. Fue generosa con Dios, le dio toda su vida, la dejó ensus manos; ella sólo se dejó hacer, sin preocuparse de nada más.

Tampoco le importó lo que los demás pensasen al ver aquellas pequeñas monedas.¡Era tan pobre, pero a la vez, tan rica en sabiduría y en amor a Dios! Os dio ese granejemplo para enseñaros a todos vosotros.

Hijos míos, el Señor sólo os dio una vida para ofrecer; en esa vida muchas cosas sonlas que habéis recibido; pero, todos esos talentos y dones, podéis ponerlos al serviciode Dios y de los demás hermanos, o por el contrario, podéis perder esa granoportunidad.

Imitad a esta gran mujer; dadle todo al Señor, no os reservéis nada; si no, vuestrodía no quedará divinizado, y no será Cristo quien gobierne vuestra vida.

SEMANA TRIGÉSIMO CUARTA DEL TIEMPO ORDINARIOMartes, día 28 de Noviembre de 2017

El fin de los tiempos Evangelio Lc 21,5-11. Queridos hijos, hoy el Señor en el Evangelio os habla del fin delos tiempos; pero, eso sólo el Padre lo sabe, y no debe ser causa de preocupación paravosotros. Sin embargo Él, como a los apóstoles, os da un consejo: “Mirad que nadie os

86

Page 87: DE LA MANO DE MARÍA · 2018-12-28 · El Señor está allí, sentado en aquella orilla, junto a la lumbre, esperando a sus hijos, para que se le acerquen y, movidos por el amor,

engañe. Porque muchos vendrán en mi nombre, diciendo: “Yo soy”, o bien “Estállegando el tiempo”. No vayáis tras ellos”.

A lo largo de la historia y más en estos últimos años, han aparecido corrientes,personas…, que se han dedicado a difundir todo tipo de señales, avisos, que eran elanticipo de estos últimos tiempos. De esta manera, el hombre fácilmente se distrae delo que es verdaderamente importante, y es el cuidado de su vida interior. Todo estosucederá cuando Dios lo tenga establecido, pero si os enredáis en todas estas cosas, loúnico que conseguiréis es que os quiten la paz y descuidéis aquello que debéisatender. Por lo tanto, no hagáis caso a todo aquél que venga con estas “teorías” y“predicciones”, intentando demostrar algo que no es cierto.

Vosotros tenéis que tener una cosa bien segura, y es que Cristo ya está con vosotros.Desde el momento de su Resurrección no ha dejado de acompañar al hombre en sucaminar. Es mucho más fácil y placentero creer en todas estas cosas que no implicanningún tipo de exigencia; por eso, no os dejéis engañar. Vuestra lucha está en cumpliren cada momento la Voluntad de Dios, y para ello hay que prepararse para poderescucharle.

El Señor sólo habla a aquellas almas que tienen esta disposición, porque le buscan através de la humildad, de la fe, del silencio, del abandono, del desprendimiento totalde sí mismos, de la caridad. Por todo esto es por lo que debéis luchar, y así estaréisperfectamente preparados para cuando llegue ese día, en el que el Señor se presentecon toda su Gloria.

87

Page 88: DE LA MANO DE MARÍA · 2018-12-28 · El Señor está allí, sentado en aquella orilla, junto a la lumbre, esperando a sus hijos, para que se le acerquen y, movidos por el amor,

DICIEMBRE

SEMANA TRIGÉSIMO CUARTA DEL TIEMPO ORDINARIOViernes, día 1 de diciembre de 2017

Parábola de la higuera.Vitalidad de la Palabra de Cristo y respuesta del hombre.

Evangelio Lc 21,29-33. Queridos hijos, en el Evangelio de hoy, vuelve otra vez el Señora hablar a sus discípulos con una parábola. Mediante el ejemplo de una higuera lesexplica cómo ellos conocen por medio de la naturaleza las estaciones del año; puesigualmente ocurre con la cercanía del Reino de Dios. Y les dice unas palabrasprofundas: “El cielo y la tierra pasarán, pero mis palabras no pasarán”. Esas “palabras”con las que el Señor os enseña, son “Palabras de Vida eterna”.

Ciertamente Él ha venido a enseñaros. Pero meditad en vuestra oración diaria estaspreguntas: ¿creéis realmente en esa Palabra de Dios, o sencillamente la escucháis enun momento determinado y luego se olvida? ¿Asumís esa Palabra para que cale dentrode vuestra alma y vaya transformando vuestro interior? ¿La tomáis realmente en serio?

Él, como bien sabéis, jamás se aparta de vuestro lado; allí permanece esperandocada día vuestra respuesta. Llama a vuestro corazón porque quiere habitar en vuestracasa. Sus palabras permanecen siempre vivas, buscando a cada hombre allá donde seencuentre y como se encuentre. Esas palabras no son humanas sino divinas; por lotanto, contienen esa grandeza que solo Dios puede transmitir. Y si el alma lo permite,penetran en el corazón y lo transforman. Pero esto sólo se conseguirá a través de lahumildad.

Cada vez que os encontréis delante del Señor en vuestros ratos de oración, decidlecon toda la fuerza de vuestra alma:

“Señor, aquí estoy delante de Ti, de rodillas ante todo un Dios.Tú me miras, yo te miro. Y… ¿qué contemplas? Una simple criatura que sólo desea aprender a amarte. ¡Ten misericordia de mí! No tengo derecho de estar contemplándote, pero, ¡es tanto lo que me quieres! Que permites que un ser como yo se atreva a mirarte. Cuando te miro, mi corazón se llena de alegría.Es la Luz que sale de Ti hacia mí, y llena mi alma de esa Paz y de ese inmenso gozo que solamente Tú puedes dar. ¡Perdóname, Padre mío! ¡Recoge mis lágrimas a través de mi Madre del Cielo! como signo de mi arrepentimiento. Nada soy, nada valgo, nada tengo, pero contigo todo lo puedo.Eres mi guía. Enséñame a caminar. Y dame la virtud de la humildad para aprender a seguir tus pasos”.

88

Page 89: DE LA MANO DE MARÍA · 2018-12-28 · El Señor está allí, sentado en aquella orilla, junto a la lumbre, esperando a sus hijos, para que se le acerquen y, movidos por el amor,

DOMINGO PRIMERO DE ADVIENTODía 3 de diciembre de 2017

Velad ante la Venida del Señor

Evangelio Mc 13,33-37. Queridos hijos, hoy el Señor, hablando con sus discípulos lesdice, igual que a vosotros: “Velad entonces, pues no sabéis cuando vendrá el Señor dela casa”; “...no sea que venga inesperadamente y os encuentre dormidos. Lo que osdigo a vosotros, lo digo a todos: ¡Velad!”.

Hijos míos, el Señor os anuncia su Venida, y os insta a que vuestra alma esté siemprepreparada para cuando Él venga a buscarla. Él habla a todos los hombres por igual,pero muchos viven en la indiferencia y no creen en sus palabras, pensando que conesta vida todo se acaba.

Vosotros no estáis indiferentes y fríos ante la voz del Señor, pero sí tenéis el peligrode caer en la rutina; de ir, poco a poco, abandonando o retrasando vuestrasobligaciones; de ir avanzando muy lentamente, porque no queréis exigiros más. Poreso es tan importante que permanezcáis vigilantes y examinéis cómo va vuestra vidainterior.

Cada día es un nuevo amanecer, es una nueva posibilidad que el Señor os brindapara que le demostréis vuestro amor fiel, ya que en este “camino de amor”, cada díahay que dar un pequeño paso más hacia delante. ¡Nunca hay que pararse! porque sino, se retrocede.

Cada día, en vuestra oración personal, pensad ante el Señor qué más le podéis dar.Un día será esa sonrisa que le cuesta aparecer en vuestra boca; otro día ese trabajobien terminado; o el orden en las cosas; o hacer algo por alguna persona que en esemomento os necesita; o dar cariño siempre que veáis que alguien os lo está pidiendo…Hay muchas cosas que cada día podéis hacer y que os ayudan a que salgáis de vosotrosmismos y estéis más pendientes de Dios y de los demás.

¡Velad, hijos míos! Que el Señor no os encuentre dormidos, sin haber trabajado parasu viña, ni haber preparado las lámparas con el aceite de la gracia. Éste es el sentido devuestra vida; todo lo demás carece de importancia.

¡Vigilad vuestra alma! para que el enemigo no se adueñe de ella ¡Trabajad paraCristo! Que muchas almas os esperan.

PRIMERA SEMANA DE ADVIENTOLunes, día 4 de diciembre de 2017

La fe del Centurión

Evangelio Mt 8,5-11. Queridos hijos, hermosa historia es la que hoy contemplaréis enel Evangelio. Es la de ese centurión que tenía a su criado enfermo, y confió plenamenteen el Señor para pedirle su curación.

El centurión se acercó a Él para pedirle, lo mismo que, muchas veces, hacéisvosotros: os acercáis al Señor para pedirle tantas y tantas cosas. El Señor ya sabe deantemano lo que le vais a pedir, lo que necesitáis; pero Él espera a que deis el primerpaso, y os aproximéis como hijos necesitados que acuden a su Padre. Porque esvuestro Padre y vosotros sois sus hijos; y Él siempre os escucha y os atiende, estápendiente de vosotros y os da lo que necesitáis.

89

Page 90: DE LA MANO DE MARÍA · 2018-12-28 · El Señor está allí, sentado en aquella orilla, junto a la lumbre, esperando a sus hijos, para que se le acerquen y, movidos por el amor,

Pero, en este episodio del Evangelio hay algo más profundo, que son estas palabrasdel centurión: “Señor, no soy digno de que entres bajo mi techo. Basta que lo digas depalabra, y mi criado quedará sano”. Estas palabras son la verdadera enseñanza quetenéis que aprender: “Señor, no soy digno”. El centurión veía su bajeza frente a lagrandeza de Jesús; su actitud fue, por tanto, de total humildad. Es la disposición con laque vosotros debéis acudir a la oración y a recibir los sacramentos; con esta actitud,bien conscientes de que no sois nada, ni merecéis nada. Sois simplemente hombrespecadores que necesitan de la Misericordia de Dios; la que encontró el hijo pródigo,que fue a buscar el perdón de su Padre después de tantas cosas que había hecho mal;él sabía que allí lo iba a encontrar, esperándole, con los brazos abiertos. Porque Dios esMisericordia, y si se encuentra a un corazón arrepentido le perdona; siempre leperdona.

Meditad esta frase muchas veces al día: “Señor, no soy digno”. Repetidla a lo largodel día y os hará mucho bien. Porque no sois dignos de que el Señor se haya fijado envosotros, de que os considere sus hijos. ¿Habéis pensado alguna vez en esta realidad?¡Sí, hijos de Dios! Pero no sois dignos.

“Basta que lo digas de palabra, y mi criado será sano”. No se puede pedir más fe,más confianza, más abandono. Impresiona la respuesta de este hombre.

Hijos, mucho es lo tenéis por delante. ¡Cuánto trabajo!¡Cuantas dificultades! Es elmomento de responder como ese centurión: “Basta que lo digas de palabra”. Esa es lafe que habéis de pedir para poderla obtener; esa fe pura, inquebrantable, fiel, que noda paso a la duda.

Y es de esta manera como el Señor obrará el milagro; cuando Él vea ese totalabandono en su criatura, ya que ésta sentirá en su corazón una seguridad absoluta alsaber que es Dios quien hace las cosas y no ella.

PRIMERA SEMANA DE ADVIENTOMartes, día 5 de diciembre de 2017

Acción de gracias de Jesús. La humildad de San José

Evangelio Lc 10,21-24. Queridos hijos, hoy el Señor se dirige a vosotros con unapalabras salidas de su interior: “Te doy gracias, Padre, porque has escondido estascosas a los sabios y entendidos, y las has revelado a los pequeños”. Otra vez el Señor osestá hablando de esta gran virtud: la humildad.

Quien fue maestro de esta virtud es San José. Él fue elegido para ser mi esposo en latierra. Dedicó todo su tiempo a servir al Señor. Era un hombre de la tierra igual quevosotros, como muchos otros; pero amaba al Señor sobre todas las cosas. Llevó unavida escondida, haciendo en cada momento lo que tenía que hacer; y aunque muchascosas no las entendía, él no se preguntaba nada; simplemente obedecía.

Él siempre se mantuvo en la sombra, pasando desapercibido; pero, era tal su fuerzay su amor, que sin él nada hubiera podido realizarse.

La humildad, junto con la caridad, son las virtudes más importantes que debéis vivir.Para poder ayudaros a que crezcáis en humildad os daré algunos consejos:

- Que vuestras opiniones y juicios no los consideréis como únicos y verdaderos;todos ellos hay que pasarlos por la oración.

- No queráis ser el centro de atención allá donde os encontréis; hablad sólo

90

Page 91: DE LA MANO DE MARÍA · 2018-12-28 · El Señor está allí, sentado en aquella orilla, junto a la lumbre, esperando a sus hijos, para que se le acerquen y, movidos por el amor,

cuando sea necesario. - Amad el silencio y la reflexión. Contemplad lo que os rodea y aprended de cada

persona, que mucho os puede aportar.- Todos los dones, carismas y regalos que habéis recibido del Cielo, empleadlos

para el bien de otras almas, y no para el propio beneficio.- Dejad todo en manos de Dios, confiad únicamente en Él y dejadle actuar para

que se cumpla en vosotros su Santísima Voluntad. - Amad la Cruz, esa será la “escuela” donde mejor aprenderéis esta virtud.

Hijos míos, id apuntando estos consejos en un cuaderno aparte; así los podréisrepasar cada noche en vuestro examen de conciencia.

Y sobre todo, en el momento en que acudáis a la confesión, haced examen conellos, pero examen en profundidad. De esta manera os será más fácil adquirir estavirtud, y os ayudará a avanzar.

PRIMERA SEMANA DE ADVIENTOMiércoles, día 6 de diciembre de 2017

Curación de muchos enfermos

Evangelio Mt 15,29-37. Queridos hijos, el Señor se compadecía tanto de los hombres,que aprovechaba todos los momentos para enseñar, para curar. Allí, en aquel montecuró a muchos, y sintió compasión de ellos; tal era el amor que sentía por cada uno. Ydespués realizó el milagro de la multiplicación de los panes y de los peces, para saciarel hambre que sentían, esa debilidad en su cuerpo; y de esta manera quedó saciada.

El hombre necesita de este alimento para poder vivir, pero mucho más importantees el alimento del alma. Si el alma se va adormeciendo, y se llena de oscuridad y devacío, producido por el pecado, este alma irá poco a poco enfermando; cada vez la vozdel Espíritu Santo se oirá más lejos y más débil, hasta que apenas se perciba. Y ya, lascosas que antes se veían mal, ahora se van aceptando como indiferentes o inclusobuenas. De esta manera, el alma se separa de Dios, se vacía de la vida de la gracia, y escuando el enemigo se aprovecha, y llena todos esos vacíos con su presencia.

Debéis siempre estar alerta, como los centinelas en la torre, y montar guardia. Esesa voz de la conciencia que os va indicando cuándo habéis hecho algo mal; ¡no laacalléis! Y todo lo que os indique, llevadlo a la oración para profundizar en las causasque motivan vuestros actos.

Buscad siempre “el porqué” de las cosas, no os quedéis en la superficie; así, cadavez os iréis conociendo mejor, y sabréis cuáles son vuestros puntos débiles para lucharen ellos con mayor eficacia . Fijaos en esta comparación: cuando miráis la superficie delmar ¿qué es lo que veis? Únicamente la superficie. Pero, si buceáis su interior hallaréisla riqueza y vida que alberga. De la misma manera, cuando os digo que no os quedéisen la superficie es que debéis interiorizar, y ver qué es lo que os mueve a hacer lascosas, el porqué de cada acto, para que así os conozcáis bien, sepáis la causa de cadaestado o situación negativos, lo qué os ha llevado allí, cuál ha sido su origen, y de estamanera poder combatirlo y que vaya desapareciendo. Y ya entonces, lo que se halle enese interior, debajo de esa superficie, sea esa riqueza grandiosa y esa vida queentonces contendrá el alma. Esta es una manera importante de alimentar el alma, sinolvidar ese otro alimento que recibís mediante la oración y la Sagrada Eucaristía. Que

91

Page 92: DE LA MANO DE MARÍA · 2018-12-28 · El Señor está allí, sentado en aquella orilla, junto a la lumbre, esperando a sus hijos, para que se le acerquen y, movidos por el amor,

estos momentos no se conviertan en algo rutinario, en un simple cumplir y nada más;que sea un verdadero encuentro, donde unís vuestra alma con la del Señor; es asícomo recibiréis el verdadero alimento de la gracia, que tanto bien os va a hacer.

PRIMERA SEMANA DE ADVIENTOJueves, día 7 de diciembre de 2017

Edificar sobre roca

Evangelio Mt 7,21.24-27. Queridos hijos, en el Evangelio de hoy el Señor os habla deese “hombre prudente”, que edificó su casa sobre roca y nada pudo derrumbarla.Mediante este ejemplo el Señor compara esa casa con el interior del hombre, y os diceestas palabras: “No todo el que dice Señor, Señor, entrará en el Reino de los Cielos, sinoel que hace la Voluntad de mi Padre que está en los cielos”.

Vuestra vida interior debe estar cimentada sobre algo sólido y fuerte como es laroca. Siendo así, todo lo que el mundo os vaya ofreciendo, como es la vida fácil, sincompromiso, esa vida mediocre en cuanto al trato con el Señor, ese estar siemprebuscando el gusto propio…, todas esas cosas, dejadlas a un lado. Porque lo único queharán, si se vive de esa manera, es edificar vuestra vida espiritual y de trato con Diossobre arenas movedizas, que provocarán que la casa acabe derrumbándose porcompleto, formando ya parte de los placeres que el mundo ofrece. Por eso es tanimportante, cada día, medir la temperatura de vuestra alma: cómo está de amor aDios. Cada cosa que hacéis, todos vuestros actos… ¿los mueve ese amor que debéistener a vuestro Padre Dios?¿o hacéis las cosas a medias, sin dar todo lo que debieraisdar, ya sea porque no queréis comprometeros, o ya porque os resulta muy costoso?

El Señor es un mendigo de amor, busca a su criatura, está pendiente de ella, se haceel encontradizo porque os ama y desea que os unáis con Él en el Cielo.

¡Hijos míos, cumplir la Voluntad de Dios! Dejad vuestra vida en sus manos para queÉl la gobierne y la dirija hacia el camino que tiene reservado para vosotros. Cada día,en vuestra oración personal, decídselo con toda la fuerza de vuestro corazón:

“Señor, solo deseo cumplir tu Santísima Voluntad, pero, ¡hacédmelo ver! para no apartarme de ella. Me pidas lo que me pidas, te serviré”.

PRIMERA SEMANA DE ADVIENTOViernes, día 8 de diciembre de 2017 Solemnidad de la Inmaculada Concepción de María

Evangelio Lc 1,26-38. Queridos hijos, ¡bellísimo es el Evangelio de hoy! donde elSeñor se hizo presente en mi vida, me invadió con todo su Amor e hizo de mí la Madredel Salvador.

El Ángel se presentó en mi casa, y sus palabras me produjeron turbación; no lascomprendía muy bien. Pero llegó el Espíritu de Dios, y ví claramente mi misión; qué eralo quería el Señor de mí, qué me pedía; y Yo, sin dudarlo, le contesté: “He aquí laEsclava del Señor, hágase en mí según tu palabra”.

92

Page 93: DE LA MANO DE MARÍA · 2018-12-28 · El Señor está allí, sentado en aquella orilla, junto a la lumbre, esperando a sus hijos, para que se le acerquen y, movidos por el amor,

Fue un “Fiat” incondicional, sin reserva alguna, preparada para todo lo que teníaque vivir y sufrir; esa era la Voluntad de Dios sobre mí y mi respuesta tenía que ser ese“SÍ” que haría cambiar la historia de la humanidad, ya que comenzaba a hacerserealidad la esperanza de que el Señor venía a salvaros a todos y a cada uno,personalmente.

Hijos míos, ¡qué difícil os resulta muchas veces cumplir la Voluntad de Dios! Loprimero que tenéis que saber es cuál es esa Voluntad; qué desea, qué quiere y esperade vosotros. Para ello, no solamente en vuestra oración personal, sino muchas veces aldía, decidle al Señor:

“Señor, ¡que vea! Como Bartimeo. Indícame el camino que Tú deseas que yo siga; muéstramelo, y yo te obedeceré, me cueste lo que me cueste. Deseo obedecerte y darme a Ti por completo, no reservándome nada, todo lo mío es tuyo;por tanto, haz de mi alma, de mi vida, lo que desees; es tuya por completo.Que vaya seguro por este Camino, sin dudas, porque sé que es lo que quieres para mí.Aparta de mí todos mis gustos, caprichos, anhelos,todo lo que implique egoísmo, soberbia, apegos.Yo te doy mi alma, te doy todo lo que poseo.¡Hazme ver el Camino, te lo suplico Señor! Te lo suplico Señor.Para nunca apartarme de él. Solo deseo cumplir tu Santísima Voluntad”.

DOMINGO SEGUNDO DE ADVIENTODía 10 de diciembre de 2017

La misión de San Juan Bautista

Evangelio Mc 1,1-8. Queridos hijos: el Evangelio de hoy os habla de cómo Juan ibaprecediendo al Señor y preparándole el camino, bautizando y predicando un bautismode conversión.

En el río Jordán bautizaba a los que a él acudían y allí confesaban sus pecados. Peroél pronunció unas palabras de suma importancia: “Yo os he bautizado con agua, peroÉl os bautizará con Espíritu Santo”.

Juan fue preparando la misión pública del Señor. Se fue al desierto, lugar dondeexiste el silencio, donde nada puede distraer la mente humana, para así poder haceroración. Profunda oración en la que nada le distraía, y podía sentir esa unión con suMaestro y Salvador. Nada material poseía, se alimentaba de lo que por allí encontraba,y se vestía pobremente. De esta manera, mortificaba su cuerpo de todo apego a latierra; su alma así, se encontraba preparada para anunciar al que tenía que venir,diciendo que él no era digno de desatar las correas de las sandalias del Señor; tal era suhumildad y el amor que sentía por Él.

93

Page 94: DE LA MANO DE MARÍA · 2018-12-28 · El Señor está allí, sentado en aquella orilla, junto a la lumbre, esperando a sus hijos, para que se le acerquen y, movidos por el amor,

Vosotros no iréis a vivir al desierto, como Juan; ni os alimentaréis de saltamontes ymiel silvestre; no se os pide eso. Pero sí tenéis que buscar la manera de vivir, durante eldía, ese recogimiento interior, para que vuestra jornada esté empapada del espíritu deoración. Tenéis que practicar de forma ejemplar la virtud de la modestia y la guarda delos sentidos, y ser muy mortificados en vuestros gustos y comodidades. Necesitáisalimentar vuestro cuerpo, pero apartando todo lo que sea superfluo; y siempre, encada comida, tener vuestras pequeñas mortificaciones.

Estáis en tiempo de Adviento, tiempo de preparación a la venida del Señor, y vuestraalma ha de estar preparada para ese encuentro con Él.

¡Oración, hijos, oración! Mortificación y sacrificio. Y vivid esa presencia de Dioscontinua, para que Él habite dentro de vuestro corazón y lo encuentre preparado.

SEGUNDA SEMANA DE ADVIENTOJueves, día 14 de diciembre de 2017

Elogio de San Juan Bautista

Evangelio Mt 11,11-15. Queridos hijos, el Evangelio de hoy os vuelve a hablar de Juanel Bautista. El Señor, al hablar de él os dice: “En verdad os digo que no ha nacido demujer uno más grande que Juan”; “Él es Elías, el que tenía que venir”.

Juan fue el Precursor, el que anunció la venida del Señor. Toda su vida la dedicó aDios. Él es consciente de quién es y de su misión; por eso, delante del Señor se sientetan poca cosa, y dice: “No soy digno ni de desatar la correa de sus sandalias”. Viviósantamente, centrado únicamente en el Señor.

Hoy se celebra la fiesta de San Juan de la Cruz, uno de los grandes santos de lahistoria. Su vida fue un auténtico reflejo de humildad y de unión profunda con el Señor,de ese amor encendido que sentía por Él.

Ahora estáis en Adviento, tiempo de preparación de la venida del Señor. Hoy estáiscontemplando el ejemplo de dos personas que amaron a Cristo, que se sometierontotalmente a Él, pero por amor; y que no se valoraron nada a sí mismos. Sabían que noeran nada, y que a través de esa nada, de esa humildad, se llegaba al “Todo”: a suMaestro y Salvador.

Buen ejemplo para que podáis preparar el nacimiento de vuestro Señor; Él es elmodelo supremo de esa humildad que hoy debéis llevar a la oración y debéis reflejaren vuestras vidas. Para ello desasíos de todo aquello que os aparte de Dios; vividcontinuamente en su presencia, sabiendo que nada os pertenece y que solos no podéisnada. Toda actividad, pensamiento o afecto siempre ha de ser a través de Él y con Él. Idpreparando vuestra alma para ese encuentro en Navidad, para ese día en quefestejaréis su llegada al mundo.

Llevad a la oración esta idea: “Todo un Dios” viene al mundo por mí; ¿acaso lomerezco? Preparad la venida del Señor con oración, sacrificio y caridad. ¡Dadle amor!Él lo espera.

94

Page 95: DE LA MANO DE MARÍA · 2018-12-28 · El Señor está allí, sentado en aquella orilla, junto a la lumbre, esperando a sus hijos, para que se le acerquen y, movidos por el amor,

SEGUNDA SEMANA DE ADVIENTOSábado, día 16 de diciembre de 2017

La “barca de vuestra vida”

Evangelio Mt 17,10-13. Queridos hijos, el Señor bajaba de la montaña; había estadoorando, como hacía siempre. Y encontró a los discípulos envueltos en una duda, y éstosle preguntaron “porqué dicen los escribas que Elías tiene que venir primero”. Y el Señorles contestó que Elías ya había venido: era Juan y no lo reconocieron; lo mismo que aÉl, “que tendrá que padecer de parte de ellos” todo lo que en verdad sufrió.

Es difícil reconocer al Señor cuando el alma solo vive para sí misma y para estemundo. Es un “barco a la deriva”, sin rumbo, expuesto a toda clase de tempestades ybonanzas. Las corrientes marinas lo llevan de un lado para otro. En esa situación seempieza a sentir la soledad, el miedo, la incertidumbre…, por no tener marcado elcamino.

Esta es el alma que decide llevar el “barco de su vida” ella sola. Las corrientesideológicas formarán su alma; sentirá la soledad, porque su vida está marcada por elegoísmo, el miedo por lo desconocido, la incertidumbre y la duda por verse tanzarandeada. ¡Cuántos hombres viven así, con esa vida vacía y sin sentido!

Por eso, hijos míos, en la barca de vuestra vida, ha de ser el Señor quien lleve eltimón, el que marque el rumbo, señalando día a día, momento a momento, haciadonde tenéis que dirigiros. De esta manera, aunque aparezcan tempestades, nosentiréis el miedo, porque la barca no será zarandeada, ya que es el Señor quien lalleva; tampoco la soledad, porque Él es vuestra compañía en todo momento. Lascorrientes no la moverán de su sitio, porque está anclada en el Amor de Dios.

Hijos míos, la vida aunque parece larga es corta. Los días pasan rápidamente, yvuestras manos deben estar repletas de buenas obras. No os dejéis envolver por elegoísmo, por la soberbia, por el pecado, por la impureza… No queráis ser capitanes devuestra barca, porque se hundirá. Sea el Señor vuestro Capitán y dejaos hacer.

DOMINGO TERCERO DE ADVIENTODía 17 de diciembre de 2017

Primer testimonio de Juan el Bautista

Evangelio Jn 1,6-8.19-28. Queridos hijos, hoy el Evangelio os habla nuevamente deJuan. Los sacerdotes y levitas le preguntaban quién era y él les contestó: “Yo soy la vozque grita en el desierto: Allanad el camino del Señor, como dijo el profeta Isaías”.Aquellos judíos no entendían estas palabras; aunque muchos de ellos le seguían y sedejaban bautizar por él, ya que creían su mensaje por su santidad de vida, quereflejaba un auténtico amor a Cristo. Él anunciaba su venida: la venida del Hijo de Diosal mundo; por eso él no se sentía digno ni de “desatar las correas de sus sandalias”.

Volviendo a las palabras de Juan, éstas tienen mucho significado: “Yo soy la voz quegrita en el desierto”. El desierto es un lugar donde impera el silencio. No hay nada queatraiga los sentidos; es un lugar donde el hombre vive la soledad; nada de lo que lerodea le distrae del contacto con Dios.

Vosotros podéis buscar esos lugares, vuestros desiertos, delante del Sagrario dondenada ni nadie os moleste; también introduciéndoos en vuestro sagrario interior, donde

95

Page 96: DE LA MANO DE MARÍA · 2018-12-28 · El Señor está allí, sentado en aquella orilla, junto a la lumbre, esperando a sus hijos, para que se le acerquen y, movidos por el amor,

sólo encontraréis silencio y el amor de Dios. El Señor sólo habla cuando el alma está endisposición de escucharle, y para eso debe vaciarse de todo lo que le rodea y distraiga.Allí, como Juan, “clamaréis” por las maravillas que el Señor obra en vosotros.

“Allanad el camino al Señor”. ¡Qué generosidad la de vuestra alma si esta misión osla tomarais en serio! Él caminó por caminos tortuosos, difíciles, en los que encontrabatanto odio y persecución. Pero vuestra alma puede apaciguar todo ese dolor que Élpasó.

Hijos, ¡allanadle el camino! ¡Que le resulte más fácil! Id apartándole las piedras devuestros pecados, la indiferencia ante su dolor, todas aquellas negligencias que vanmanchando vuestra alma, haciendo que cada vez se aleje más del Señor.

Seguid el ejemplo de Juan: nada ni nadie le importó, sólo el Señor. Su vida la dedicótotalmente a Él y se ganó un lugar en el Cielo.

Ofreced vuestra vida, ¡no tengáis miedo! Él os ama, demostradle vuestro amor.

TERCERA SEMANA DE ADVIENTOLunes, día 18 de diciembre de 2017

El misterio de la concepción virginal de Jesús revelado a José

Evangelio Mt 1,18-24. Queridos hijos, hoy se celebra la fiesta de Nuestra Señora de laEsperanza. En el Evangelio se narra mi desposorio con José, la concepción de mi Hijopor obra del Espíritu Santo, y cómo José no lo entendía y vino un Ángel a explicárselo. Ytodo esto sucedió según “lo que el Señor había anunciado por el profeta: Mirad, laVirgen concebirá y dará a luz un hijo y le pondrá por nombre Emmanuel, que significa“Dios-con-nosotros”.

Hoy, como os he dicho, se celebra esa gran fiesta de nuestra Señora de la Esperanza.Es la espera del más maravilloso acontecimiento que haya jamás ocurrido en la tierra:el nacimiento del Niño Dios. Ese “nacimiento” que cambió radicalmente toda la historiadel mundo, y que significó que ya siempre viviría entre vosotros: “Dios-con-nosotros”.Desde entonces podéis acudir a Él en cualquier situación, llegar a sentirlo en vuestrointerior, y en muchas circunstancias de vuestra vida, que hasta os puedan resultarinexplicables.

Este tiempo de espera es un tiempo de verdadera preparación para suAdvenimiento. Cada día le tenéis que ofrecer pequeños sacrificios, para que cuandonazca se encuentre su cuna preparada, llena de pequeños actos de amor que le habéisofrecido sus hijos.

Pedid al Espíritu Santo que os ayude a saber percibir qué cosas podéis aún mejorar:pequeños actos de caridad con quienes conviven con vosotros, muestras de cariño,trabajo bien terminado y hecho a su tiempo, perdonar a todo aquel que os hace daño,vivir esa presencia de Dios que tanto ayuda al alma, y tantas y tantas cosas que a lolargo del día podéis ofrecer.

¡Hijos, preparad vuestra alma! ¡Es lo más grande que podéis hacer! Jesús vuelve anacer; pero, tiene que nacer dentro de vuestra alma, cada día, en cada momento.

¡Él ha hecho tanto por vosotros! ¿cuál será vuestra respuesta? José en todo momento se sometió a los planes de Dios; fue modelo de identificacióncon lo que Dios le pedía. Escuchad al Señor, para que en todo momento sepáis cumplirsu Voluntad.

96

Page 97: DE LA MANO DE MARÍA · 2018-12-28 · El Señor está allí, sentado en aquella orilla, junto a la lumbre, esperando a sus hijos, para que se le acerquen y, movidos por el amor,

NATIVIDAD DEL SEÑORLunes, día 25 de diciembre de 2017

Evangelio Jn 1,1-18. Queridos hijos, hoy día de Navidad, por fin ha llegado el díaanhelado: día en que se celebra el Nacimiento del Niño Dios.

En el Evangelio, Juan expresa unas palabras que debéis de meditar: “Éste es dequien yo dije: El que viene detrás de mí se ha puesto delante de mí, porque existíaantes que yo. Pues de su plenitud todos hemos recibido, gracia tras gracia. Porque laley se dio por medio de Moisés; la gracia y la verdad nos han llegado por medio deJesucristo”.

Haced un momento de silencio para meditarlas.Él nació en un humilde pesebre, pasando frío y todo tipo de incomodidades, ¡y era

todo un Dios! Pero os ama tanto, que se hace visible en forma de hombre, y deja ypermite que el mundo le odie, le maltrate, se muestre indiferente… Porque Él os ama,os abre sus brazos con amor: brazos clavados en un madero, que derraman esa Sangreadorable. ¡Abrazaos a ella y dejad que empape todo vuestro ser! De esta manera os daréis cuenta de todo lo que le habéis ofendido, aunque jamásllegaréis a amarle con el Amor insondable y purísimo con que Él os ama.

Él os espera en todo momento para daros su gracia; para que sintáis en el interiorde vuestra alma esa poquedad ante su grandeza; la de mi Divino Hijo. Ahí lo tenéistambién, indefenso, en un pobre pesebre. Ante vuestros ojos aparece como un Niño. Pero su mirada profunda quiere taladrarvuestro corazón y llenarlo de su Amor y de su ternura.

¡Preparad vuestros brazos hijos! ¡Abridlos, tomadlo, cogedlo! Mirad sus ojos, ¿quéveis en ellos? Te están hablando a ti, hijo o a ti, hija. Mendigan tu amor. Se hacepequeñito para que puedas cogerlo y abrazarlo, y cubrirle de besos; ¡hazlo!¡Rompe contodo lo que pueda hacerle daño!

Hoy, día tan importante para Él, ¡acaba con el mundo que te esclaviza! ¡rompe esascadenas que no te dejan volar hacia Él! ¡Pídele perdón de corazón! Que broten esaslágrimas de tus ojos y que hoy le des el mejor regalo que te pide: y eres tú mismo, yesa lucha incesante por alcanzar la santidad.

Date por entero a Él ¡Eres su regalo! No dejes nada atrás, no te lleves nada para ti,dáselo todo. ¡Tómatelo en serio, querido hijo! Comienza de verdad, en serio, en estecaminar que os llevará directamente a Él.

TIEMPO DE NAVIDADMiércoles, día 27 de diciembre de 2017 San Juan Evangelista

Evangelio Jn 20,2-8. Queridos hijos de mi corazón Inmaculado, hoy el Evangelio ostraslada de nuevo al amanecer de la mañana de Pascua, tras la Resurrección del Señor,cuando María Magdalena fue donde le habían sepultado “y vio quitada la piedra delsepulcro” y al no verle “echó a correr en busca de Simón Pedro y del otro discípulo queJesús amaba y les dijo: Se han llevado del sepulcro a mi Señor y no sabemos dónde lohan puesto”. Ésta era su gran preocupación: no ver a su Señor al que tanto amaba. Ellaes la que va de un lugar a otro buscándole con angustia, porque no le encuentra.

Es lo que os pasa a vosotros, hijos míos, cuando ofendéis a Dios y cometéis pecado.Es una forma de perderlo, de no sentirlo en vuestro interior; y entonces todo resulta

97

Page 98: DE LA MANO DE MARÍA · 2018-12-28 · El Señor está allí, sentado en aquella orilla, junto a la lumbre, esperando a sus hijos, para que se le acerquen y, movidos por el amor,

mucho más difícil. Ya no sentís tampoco ese amor hacia los demás; el alma estáoscurecida y triste, buscándose a sí misma, envuelta en un gran vacío; porque su Señorya no se encuentra en ella. En estos momentos es cuando hay que volver a buscarlo,para así poder encontrarlo.

Después de su muerte, Él resucitó para estar con vosotros, y que no le perdieraismás. Únicamente es vuestra libertad la que decide qué camino tomar. MaríaMagdalena lo encontró trabajando la tierra, como si fuera un hortelano; peroenseguida lo reconoció, tan pronto como Él pronunció su nombre.

También a vosotros Él os espera; siempre que le habéis perdido. Y os llama a cada uno por vuestro nombre; os conoce, sabe todo lo que os pasa y osespera. Y vosotros, con el alma profundamente arrepentida le decís: “Rabboni”,“Maestro, perdóname porque no quiero perderte otra vez, y que te veas obligado asalir de mi vida”.

Si así sucediese ¿Qué os quedaría, hijos míos? Nada; el mundo, que cada vezintentará que os separéis más de Él.

Hoy, día de san Juan Evangelista, y meditando este Evangelio tan bello, haced unverdadero acto de contrición, para que el Señor habite en vuestra alma y nunca se vayade allí.

TIEMPO DE NAVIDADViernes, día 29 de diciembre de 2017

Presentación del Niño Jesús en el templo

Evangelio Lc 2,22-35. Queridos hijos, el Evangelio de hoy narra la presentación deJesús en el templo. Hasta en eso fue obediente cumpliendo la Ley.

Él no tenía ninguna necesidad de hacerlo, y sin embargo lo hizo para enseñaros quetambién en esto, como en todo, se hizo hombre, y no quiso destacar ni aparecer comoalguien diferente a los demás. Allí se encontró con Simeón, cuyo gran anhelo y deseoera vivir para ver al Salvador del mundo. Cuando lo tuvo en sus brazos se llenó dealegría, e inspirado por el Espíritu Santo dijo: “Porque mis ojos han visto tu Salvador, aquien has presentado ante todos los pueblos: luz para alumbrar a las naciones y gloriade tu pueblo Israel”.

Es así como lo presenta: como Luz y como Gloria, pero muy pocos lo entendieron. ElSeñor es la Luz, esa luz que ilumina el camino que cada uno de vosotros debe seguir. Escomo un faro encendido en la noche, cuando todo está en tinieblas, cuando sentís elzarpazo de la soledad, cuando os sentís abandonados.

Cada vez que estéis perdidos y con la angustia de no encontrar el camino, mirad laLuz, ¡acercaos a ella! Porque con vuestra mirada pequeña no podréis ver el horizonte.Vuestra vista es muy limitada, porque solo alcanza a ver vuestros deseos, caprichos,egoísmos y soberbia. Pero la Luz de Dios lo alcanza todo; alcanza a todos los hombres ysus circunstancias, y os hace ver hacia qué lugar tenéis que dirigiros para cumplir lamisión que os ha sido encomendada: dar gloria a Dios con vuestra vida.

Hijos míos, ¡Él es la Luz del mundo! Dejaos guiar por ella para no quedaros ciegos,en tinieblas. ¡Confiad en Él! Ya que siempre os guiará por el verdadero camino, el queun día os llevará al Cielo. Haced como Bartimeo y pedidle con insistencia: ¡Señor, quevea! Señor, que vea cuál es tu voluntad sobre mí, y ayúdame a cumplirla.

98

Page 99: DE LA MANO DE MARÍA · 2018-12-28 · El Señor está allí, sentado en aquella orilla, junto a la lumbre, esperando a sus hijos, para que se le acerquen y, movidos por el amor,

ENERO

TIEMPO DE NAVIDADLunes, día 1 enero de 2018 SANTA MARÍA, MADRE DE DIOS

Adoración de los pastores

Evangelio Lc 2,16-21. Queridos hijos hoy es una fiesta grande: Santa María Madre deDios, que aprovecharéis para renovar vuestra consagración a mí.

En el Evangelio se narra cómo unos humildes pastores vinieron a vernos por laindicación de un Ángel. Allí quedaron asombrados y dieron gloria a Dios por todo loque habían visto y oído. Yo estuve en silencio, guardando todas esas cosas en micorazón. Ellos obedecieron al Ángel y allí adoraron al Niño en silencio; no hacían faltalas palabras, era el momento de dejarse llenar el corazón por su presencia, por sumirada..., y eso, hijos míos, lo llena todo. Pero, para que el Señor entre en el corazóndel hombre, éste debe estar desasido de todos los bienes de la tierra.

Comienza un nuevo año, que ha de servir para alabar a Dios. El que ya pasó debeayudaros a reflexionar sobre todo aquello en que no habéis dado gloria a Dios. Peroeso no debe desalentaros, sino que ha de servir para conoceros mejor, y comenzar denuevo, con las fuerzas renovadas.

Os vuelvo a dictar una oración en forma de carta, que os ayudará en los malosmomentos que se presenten, y es cuando tenéis que recordarla:

“Padre mío, te quiero escribir esta carta recordando el año que ya pasó; y parareflejar aquí mis deseos de aprender a amarte en este nuevo año que comienza. Lo primero que debo hacer es pedirte perdón, por todo lo que tenía que haberhecho y no hice, por mis faltas de amor, por mis pecados y negligencias. Cada jornada me esperabas en la cruz de cada día, pero a mí solo me pesaba. Perdóname como a Dimas, como a María Magdalena y como a tantos que supieronacercarse a Ti. Sé que nada merezco, pero siento en lo profundo de mi corazón un deseo grande decambiar, de comenzar de nuevo. Es mi propósito de este año: que cada día sea un comienzo, un nuevo amanecer a tu gracia y un aprender a quererte, aunque mi amor nuncaserá bastante. ¡Ayúdame, Padre mío! Sabes que yo sólo no puedo, me fallan las fuerzas… Acudiré atu presencia para llenarme de tu Amor, tu fuerza y tu gracia. Cuenta con mi poca cosa; lo que tengo te lo doy a través de tu Madre, porque asíllegará segura esta ofrenda que de estas manos sale.¡Recíbela Padre mío! Deseo aprender a amarte”.

99

Page 100: DE LA MANO DE MARÍA · 2018-12-28 · El Señor está allí, sentado en aquella orilla, junto a la lumbre, esperando a sus hijos, para que se le acerquen y, movidos por el amor,

TIEMPO DE NAVIDADMartes, día 2 de enero de 2018

Testimonio de Juan el Bautista

Evangelio Jn 1, 19-28. Queridos hijos, en el Evangelio de hoy se vuelve a hablar deJuan el Bautista. Allí los sacerdotes y levitas le interrogaron para saber quién era. Y unade sus respuestas fue:

“Yo soy la voz del que proclama en el desierto: Allanad el camino del Señor”. Él era la voz de Dios: Esa voz que tantos hombres escuchaban, a los que fue

preparando para el momento en que se habrían de encontrar con el Señor. Juan sepreparó en la soledad y en el silencio.

Cuando el alma se aleja de los ruidos del mundo, de las voces que, lentamente, levan separando de Dios, se predispone en ese silencio a escuchar lo que Dios quiere deÉl.

Es esa oración en la soledad del Sagrario, donde el alma, sin ruido de palabras,expone su vida, lo que es, lo que siente… y lo pone al servicio de su Padre Dios. Es esaconfianza absoluta, dejándose penetrar por la mirada amorosa del Señor y dejándolehacer… Él entonces actúa en el alma sin obstáculos; el silencio hace que esa alma nobusque nada de sí misma, ya que sabe que todo eso nada vale. Todo eso es humano yallí no cabe Dios.

El silencio del alma enamorada, que solo necesita de esa mirada, de ese estar juntoa su Padre, adorándole y aprendiendo a amarle.

Después, el Evangelio continúa con estas palabras: “Allanad el camino del Señor”.¡Mucho tuvo que sufrir por vosotros! Todo lo dio, hasta su Vida. El camino que tuvoque seguir fue muy difícil, y hoy en día lo sigue siendo. Aún hay miles de almasalejadas, separadas de Dios, que no desean amarle. Vosotros tenéis que ayudar alSeñor, y atraer a esas almas descarriadas con vuestra oración, con vuestro ejemplo ycon vuestro sacrificio. Tenéis que allanarle el camino. Lo haréis cogiendo vuestra cruzpara aprender a amarla; a través de ella muchas almas se salvarán y se acercarán aDios.

¡Allanad el camino! Ofreceos a Él y dad vuestra vida por amor a Cristo.

TIEMPO DE NAVIDADMiércoles, día 3 de enero de 2018

Segundo testimonio de Juan

Evangelio Jn 1, 29-34. Queridos hijos, Jesús se acercaba a Juan, él lo vio y le dijo: “Ahítenéis al Cordero de Dios, que quita el pecado del mundo”. Al decir estas palabras, Juanestaba lleno del Espíritu Santo, que no se apartaba ni un instante de él. Cuandonombra a Jesús dice que es “El Cordero de Dios”. No hay en la tierra un animal másmanso noble y bueno que el cordero. Qué imagen tan apropiada para referirse alSeñor. “Como cordero llevado al matadero”, sin quejarse, obediente, cumpliendo sumisión. Él dejó que hicieran con Él cuanto quisieron; no se quejó ni una sola vez; todoen Él desprendía amor, mansedumbre, verdad, vida.

100

Page 101: DE LA MANO DE MARÍA · 2018-12-28 · El Señor está allí, sentado en aquella orilla, junto a la lumbre, esperando a sus hijos, para que se le acerquen y, movidos por el amor,

Con esta imagen del Cordero, Él se acerca más fácilmente a los hombres. Es unaimagen de entrega, de donación, de obediencia a su Padre. También, con ello os quiereenseñar cómo debéis ser vosotros ante Él: mansos corderillos que no tienen quepreocuparse por nada, porque su Pastor los cuida y se ocupa de ellos. Solo tienen queseguirle y obedecerle a lo largo de su vida, como hizo Juan; y de esta manera vuestravida será plena, sin preocupaciones que os quiten la paz; porque el Buen Pastor seocupa de sus ovejas y de todo lo que les acontece. Él quita el pecado del mundo. Élsiempre está dispuesto a perdonar al alma arrepentida.

Hijos míos, tenéis que llegar a la raíz de vuestras acciones; a su por qué, a la razónque os mueve a hacer las cosas. No os quedéis en la superficie. Profundizad paraconoceros bien y así poder combatir al enemigo. Él Señor sólo tiene Corazón deMisericordia y os espera cada día, para que, a través del examen de conciencia, leabráis vuestra alma y reconozcáis, arrepentidos, todo aquello que haya ofendido a suCorazón .

Así, el alma quedará liberada, porque le ha presentado a Dios su podredumbre, susmalos hábitos y sus faltas de amor. Al vaciarse de todo ello ante Dios gana enhumildad, porque ve la realidad de su alma, que ha quedado desnuda ante tanto Amor.¡Profundizad hijos en vuestros actos! Y presentadlos al Señor para que os perdone.

TIEMPO DE NAVIDADViernes, día 5 de enero de 2018

Natanael

Evangelio Jn 1, 43-51. Queridos hijos, siguiendo el Evangelio, se narra cómo el Señor,a lo largo del camino, va encontrando a esos hombres que, al verle y conocerle,decidieron seguirle. Su vida entonces cambió radicalmente desde el momento en quetomaron esa decisión. Allí se habla de un hombre, Natanael, que en él no cabíafalsedad alguna. Al principio no creía, pero después de conocer al Señor dijo:“Maestro, tu eres el Hijo de Dios, tú eres el Rey de Israel”. Es la luz del Espíritu Santo,que le hace ver con claridad quién es Jesús.

Vosotros habéis encontrado al Señor; Él se ha hecho presente en vuestra vida. Perosólo depende de vosotros, de cada uno de vosotros, el que continúe en ella. Podéistener muy buenas disposiciones, muy buenos deseos… pero eso no basta.

Cuando deseáis amar a una persona primero la conocéis, y poco a poco la vaistratando, para conocerla mejor. No se ama lo que no se conoce.

El Señor alabó a este hombre, a Natanael; no había encontrado en Israel un hombremás sincero, sin falsedad alguna. Para llegar a amar al Señor, es necesario tener uncorazón sincero, sin doblez, sin apariencias; es ese alma que toma la decisión de iracercándose cada vez más al Señor, y la toma con la seriedad que se requiere.

La hipocresía, la falsedad, corroen el alma; la incapacitan para amar porque estállena de sí misma, y vive del qué dirán y de las apariencias. Las almas así son “sepulcrosblanqueados”, como diría el Señor. Son almas que han puesto “una vela a Dios y otra aldiablo”.

101

Page 102: DE LA MANO DE MARÍA · 2018-12-28 · El Señor está allí, sentado en aquella orilla, junto a la lumbre, esperando a sus hijos, para que se le acerquen y, movidos por el amor,

Hijos míos, ¡sinceridad de vida! !Sed como esos libros abiertos que nada esconden,que nada ocultan! ¡Presentad vuestra alma al Señor, esté como esté! para que Él sea elque obre en ella.

BAUTISMO DEL SEÑORDomingo, día 7 de enero de 2018

Evangelio Mc 1,7-11. Queridos hijos, el Evangelio de hoy os presenta el Bautismo delSeñor en el Jordán: el cielo se abrió y el Espíritu Santo descendió sobre Él en forma depaloma, y se oyó una voz proveniente del cielo que decía: “Tú eres mi Hijo amado, en time complazco”.

Él era el Hijo de Dios, no necesitaba ser bautizado, pero sí lo hizo; hasta en eso osdio ejemplo. E introduciéndose en aquellas aguas, que habían preparado interiormentea tantos hombres, el Señor recogió todo aquello para limpiar esas almas, para quequedaran blancas y puras como la nieve. Él estaba demostrando su misión deRedentor; para eso vino a la tierra, para redimiros del pecado.

En un momento se juntaron las tres personas de la Santísima Trinidad: Padre, Hijo yEspíritu Santo. Hubo un resplandor potente en el cielo, y apareció la figura del EspírituSanto en forma de paloma, oyéndose, a su vez, las palabras del Padre: “Tu eres mi Hijoamado, en ti me complazco”.

Vosotros un día recibisteis el sacramento del Bautismo, y aunque erais muypequeños, desde ese momento habitó la Santísima Trinidad en vosotros. Así mismo, elPadre os llamó “hijos”, porque ya lo sois; “hijos amados”, porque ya formáis parte de Él;vuestra alma le pertenece y Él la hace suya, y en vosotros se complace. Él os mira conAmor y Misericordia, como todo buen padre hace con sus hijos, pero con un Amor¡infinitamente más grande!

Con este “gran sacramento” ya estáis preparados para amar y seguir al Señor. En élrecibisteis la semilla de la Fe, que irá creciendo como un don, el cual tenéis que pedir,ya que vuestras faltas de amor hace que esa llama se vaya apagando poco a poco.

¡Hijos míos, gran regalo recibisteis ese día! ¡El mayor que recibiréis en toda vuestravida! Dad gracias al Señor porque se fijó en vosotros, y os dio la oportunidad deamarle.

SEMANA PRIMERA DEL TIEMPO ORDINARIOLunes, día 8 de Enero de 2018

Vocación de los primeros discípulos

Evangelio Mc 1,14-20. Queridos hijos: hoy se vuelve a recordar la llamada a losprimeros discípulos, y cómo lo dejaron todo e inmediatamente le siguieron. Allí semenciona también a Juan el Bautista, que “fue entregado”. Después de suencarcelamiento sufriría el martirio por el Señor.

La vida de Juan fue una vida plena, llena del Señor, y al final dio su vida por Él. Lomismo le ocurrió a los apóstoles. El Señor se presentó en su camino, a su edad madura,

102

Page 103: DE LA MANO DE MARÍA · 2018-12-28 · El Señor está allí, sentado en aquella orilla, junto a la lumbre, esperando a sus hijos, para que se le acerquen y, movidos por el amor,

cuando ya tenían una vida resuelta y humanamente centrada; pero los planes delhombre no coinciden muchas veces con los planes de Dios. ¡Cuántas veces lo habéisexperimentado, a lo largo de vuestra vida!

Cuando el Señor llama a un alma y ese alma le sigue, su vida cambia radicalmente.No ha de faltarle el sufrimiento en ningún momento de su vida. Y muchas veces susdeseos personales quedarán anulados, porque ya su vida no le pertenece; no es suyasino de Dios.

El alma, así, va caminando tras los pasos del Señor, e irá aprendiendo las enseñanzasde su Maestro y Señor. A veces se os pedirá cosas pequeñas, pero en otras ocasionesserán grandes cosas, porque al abrazaros a esa Cruz bendita quedáis sometidos a laVoluntad de Dios. Él desea que os entreguéis por completo, sin dejar nada paravosotros. Así quedará todo divinizado, porque estará en sus manos benditas.

¡Hijos míos, aprended de los apóstoles! Nada sabían, poco tenían, pero… ¡muchoconfiaban! Todo lo dejaron atrás. Ese es el camino: dejar atrás al “hombre viejo”,porque con el nuevo año ha renacido uno nuevo, ese hombre que luchará con todassus fuerzas para que en su vida solo habite Dios.

SEMANA PRIMERA DEL TIEMPO ORDINARIOViernes, día 12 de Enero de 2018

Curación de un paralítico

Evangelio Mc 2,1-12. Queridos hijos, hoy el Evangelio os habla de un paralítico que fuellevado por sus amigos a los pies de Jesús, para que fuera curado. El Señor al ver tantafe dijo: “Hijo, tus pecados te son perdonados”.

Como veis, hijos míos, ante la enfermedad del cuerpo prevalece la enfermedad delalma; es más importante curar esa alma de los pecados e infidelidades, que el cuerpo.Pero, el Señor, que no se deja ganar en misericordia, también curó la enfermedad deaquél paralítico. Los maestros de la ley se escandalizaron; sin embargo, el resto dehombres, que allí se encontraban, alabaron a Dios y quedaron asombrados.

Ahora, hijos míos, pensad que también vosotros, de alguna manera, sufrís ciertaparálisis: la del pecado. Eso provoca en el alma inquietud, desanimo, tristeza,desilusión, apatía, falta de lucha y cierta oscuridad que no deja que penetre la fe. Es elmomento de elevar el alma hacia el Cielo, pidiendo perdón por todo lo que habéisofendido al Señor, y de levantarse de ese letargo, de esa falta de lucha, de nostalgias yrecuerdos pasados, que ya no sirven para nada.

¡Levantaos hijos! No os quedéis parados y encerrados en vuestro pequeño mundo,en el que sólo prevalecen vuestras preocupaciones. ¡Salid fuera! ¡Gritad al mundo elamor que invade vuestro corazón! Subiréis montañas muy altas que os costarán granesfuerzo; pero al llegar a la cima… ¡que cerca se está del Cielo! Esas montañas sonvuestros sacrificios, vuestras negaciones a vosotros mismos, vuestra confianza yabandono, vuestro amor a la Cruz de cada día… Pelead la batalla de cada día yofrecédselo todo a Dios. Todo esto es un tesoro que cambiará vuestras almas ycorazones.

¡Conquistad el mundo! Las almas os esperan.¡Adelante apóstoles de María!

103

Page 104: DE LA MANO DE MARÍA · 2018-12-28 · El Señor está allí, sentado en aquella orilla, junto a la lumbre, esperando a sus hijos, para que se le acerquen y, movidos por el amor,

SEMANA SEGUNDA DEL TIEMPO ORDINARIOLunes, día 15 de Enero de 2018

El ayuno

Evangelio Mc 2,18-22. Queridos hijos, en el Evangelio, los fariseos le preguntan alSeñor por qué sus discípulos no ayunaban. El ayuno es muy necesario para elevar elalma a Dios, sobre todo, guardando la mortificación en las comidas y en las bebidas. Unhijo de Dios nunca debe destacarse por no saber controlar su cuerpo, y dejar que lasapetencias tengan más fuerza que la Voluntad de Dios y se pongan por encima de loque el Señor quiere de vosotros. Al cuerpo hay que dominarlo y mantenerlo a raya; queno se haga dueño de las situaciones, ni mande sobre vosotros. Pero el Señor, en este Evangelio, va mucho más allá; el ayuno al que se refiere esotro. Él vino para cambiar las cosas, para predicar el Evangelio del Amor, y no lo quelos fariseos y judíos enseñaban. Ha venido a transformar lo viejo en nuevo; y para ellotuvo que morir, para luego resucitar. Pero, después de la Resurrección ya no seencontraría entre los hombres de la misma manera. Ése es el ayuno al que se refiere:ya no le verían en carne y hueso como a cualquier hombre; no se encontraríafísicamente visible, pero sí espiritualmente. Él se ha quedado en la Santa Misa, en los “sagrarios escondidos”, dentro de todobautizado. Él, de esta forma, ¡se encuentra Vivo! Se hace presente en todo momento ynunca se separa de vuestro lado. A veces os falta fe, mucha fe, y vivís como si Él noestuviera a vuestro lado, velando por vosotros y atrayéndoos hacia su Corazón.

“A vino nuevo, odres nuevos”. Él es el “vino nuevo” que necesita de nuevoscorazones, cuya manera de actuar y de vivir esté movida por el Amor. El Amor todo lovence, todo lo cura, todo lo transforma; llega a todos los corazones dejando huella enellos.

¡Aprended a amar hijos míos! Porque eso es lo que llenará vuestras manos para eldía en que se os llame a la verdadera Vida.

SEMANA SEGUNDA DEL TIEMPO ORDINARIOMiércoles, día 17 de Enero de 2018

Curación en sábado del hombre de la mano seca

Evangelio Mc 3,1-6. Queridos hijos, hoy en el Evangelio, el Señor vuelve a recordaros,igual que lo hizo ayer, la importancia que le da el hombre a esas leyes humanas, sinsentido, que están por encima del amor al prójimo. Él volvió a curar en sábado, porqueaquel hombre lo necesitaba.

Ayer os hablé ampliamente del amor; del amor que habéis de tener, primero a Dios,y por Él a los demás. Deseosos estáis todos de aprender y de cambiar, porque, en elfondo de vuestro corazón, os habéis dado cuenta que no sabéis amar. Pero no osdescorazonéis y desalentéis por esto. Poco a poco, si os dejáis hacer, podréis aprender.

Y aprender a amar es darse, día a día, en todas aquellas cosas que forman parte dela jornada; es “aprender a ver” en cada pequeño detalle que se os presente, poniendoallí el Amor de Dios. Para ello el alma debe estar vibrante, conservando a lo largo del

104

Page 105: DE LA MANO DE MARÍA · 2018-12-28 · El Señor está allí, sentado en aquella orilla, junto a la lumbre, esperando a sus hijos, para que se le acerquen y, movidos por el amor,

día ese recogimiento interior que le proporcionará la luz y la fuerza para estarpendiente de cada detalle, del amor que debe brotar de lo más profundo de vuestrocorazón para darlo a raudales.

Es ese amor que derrochaba María Magdalena. Ella fue una gran pecadora, perotuvo tal fuerza su arrepentimiento, que siguió al Señor con total fidelidad hasta el final.Es la humildad, unida con el amor, de aquella pobre viuda, que dio todo lo que tenía. Ylo dio por amor a Dios. Es esa fe y confianza, unido con el amor, del centurión que pidióla curación de su criado. En su corazón no había nada que le importase más que aquelhombre, ¡que era un criado! Pero, era tal la bondad del corazón de aquel centurión,que no le importaban los rangos. Si era un criado o no, nula importancia tenía para éleste hecho. Él sabía amar.

La Ciencia del Amor la encontraréis en la Cruz, en esa Cruz que os espera todos losdías, sin Crucificado; porque sois vosotros los que os pondréis en su lugar. Allí, desde loalto, se ve y se ama el mundo, con un corazón de misericordia y de perdón, como elque tenía el Señor.

¡Daos por entero! ¡No os quedéis con nada! Porque nada de lo que tenéis esvuestro; y así, llenaréis vuestras manos de ese amor que tanto agrada al Señor, y delcual un día seréis juzgados. No se os juzgará de otra cosa, sino del amor que hayáisderramado.

SEMANA SEGUNDA DEL TIEMPO ORDINARIOViernes, día 19 de Enero de 2018

Elección de los Apóstoles

Evangelio Mc 3,13-19. Queridos hijos, el Evangelio de hoy os relata la elección de losApóstoles. El Señor lo había preparado todo con mucha oración; y subió a un monte yallí los fue designando, uno a uno. Ellos vivirían después con Él, y luego predicarían susenseñanzas, todo lo que irían aprendiendo estando a su lado.

Eligió a los que quiso. Ninguno de ellos destacaba en nada, siendo tan pecadorescomo cualquier hombre de la tierra. Y fijaos, hijos míos, hasta donde llegaron.

También pasaron malos momentos: oscuridad, dudas, cobardías, impaciencias,soberbia, ira, recelos… Pero, a pesar de todo, luchaban. Aunque muchas veces noentendían ni lo que oían, ni lo que veían, y se consideraban, a veces, tan ignorantes,era tal la confianza que tenían en el Señor, que seguían adelante tras sus huellas.

Esto supone para vosotros una gran enseñanza: ¡cuántas veces os encontráis en sumisma situación! Sin embargo, el Señor, de lo que es poca cosa, de lo que no valenada, elige a las almas para que le sigan; a pesar de que muchas veces no entendáisesas situaciones y lo que el Señor os ha mostrado, para que le obedezcáis.

Todo se basa en la confianza y en el abandono. Todo requiere una gran dosis dehumildad, para dejarse hacer, para daros cuenta de lo que sois: pequeñas criaturashumanas, que, sin la ayuda y el amor de Dios, no seriáis nada. Vuestra vida sería unauténtico fracaso, movida únicamente por lo que ofrece el mundo, que es la idolatríadel hombre puesta por encima de la gloria y del amor a su Padre Dios.

Por eso, hijos míos, ¡confiad! Confiad en el Señor. Él es un Padre que os ama, y os haelegido entre muchos para darle gloria. ¡Salid de vuestro “yo”! ¡salid de vuestro

105

Page 106: DE LA MANO DE MARÍA · 2018-12-28 · El Señor está allí, sentado en aquella orilla, junto a la lumbre, esperando a sus hijos, para que se le acerquen y, movidos por el amor,

egoísmo y soberbia! Y daos por completo, con la total confianza de que, con esadonación, seréis felices ya aquí en la tierra y herederos del Cielo.

SEMANA SEGUNDA DEL TIEMPO ORDINARIOSábado, día 20 de Enero de 2018

Actitud de los parientes de Jesús

Evangelio Mc 3,20-21. Queridos hijos, hoy el Evangelio os habla de cómo vinieronvarios parientes de Jesús para llevárselo y sacarlo de allí, alegando que estaba loco. Noentendían su forma y manera de vivir, porque distaba mucho de la que llevaban ellos.

El Señor se arriesga; no le entienden ni comprenden. Él demuestra con obras para loque ha venido al mundo; y es para salvar al hombre.

El llevar una vida cristiana siguiendo el Evangelio es un “riesgo”. Muchas vecespuede crear inseguridad en el alma del que ha tomado esa decisión en su vida, porquetendrá que enfrentarse a muchas tentaciones que tirarán de él, y necesitará mucha fepara mantenerse firme y seguro.

Cuando se sigue al Señor, por encima de todas las modas y costumbres mundanas,que tanto dañan al alma, lo más fácil es que os encontréis con personas que no osentiendan, que os tomen por locos, que os critiquen y calumnien… Pero, quien ofrecesu vida al Señor, sin importarle lo que vaya a ocurrir o lo que se va a encontrar, su almaencontrará la salvación el día en que deje este mundo.

Se os ofrece un verdadero reto, una elección, una vida que nunca será fácil nicómoda, porque ¡tendréis que negaros a tantas cosas placenteras que antes formabanparte de vuestra vida!

¡Es el Señor el que os llama! El que ilumina vuestra mente, os abre su Corazón, ostiende su mano y os dice:

“Hijo mío, ven, ¡ven a Mí! Te estaba esperando desde toda la eternidad.Para Mí eres único e irrepetible,y te amo como Padre tuyo que soy.Aquí me tienes: con los brazos abiertos y derrochando sobre timi Misericordia.Ábreme tu corazón para que Yo entre en él.Dame tu sufrimiento, que Yo te ayudaré a llevarlo”.

106

Page 107: DE LA MANO DE MARÍA · 2018-12-28 · El Señor está allí, sentado en aquella orilla, junto a la lumbre, esperando a sus hijos, para que se le acerquen y, movidos por el amor,

DOMINGO TERCERO DEL TIEMPO ORDINARIODía 21 de Enero de 2018

“Convertíos y creed la Buena Noticia”

Evangelio Mc 1,14-20. Queridos hijos, el Evangelio de hoy vuelve a narrar cómo elSeñor escoge a algunos de sus apóstoles, y antes de ello dice unas palabras: “El tiempoya se ha cumplido y ya está cerca el Reino de Dios: Convertíos y creed en la BuenaNoticia”.

Jesús vino al mundo y pasó treinta años - su “vida oculta” - santificando cada día desu vida ordinaria. En ese tiempo se estuvo preparando para los tres años de vidapública, donde elegiría a los apóstoles y daría a conocer su doctrina a todos. El tiempoya se había cumplido, y desde aquel momento empezó su misión de predicar y llegar atodos los corazones. Pero el corazón del hombre puede estar abierto a Dios, o puedecerrarse a Él. Por eso, el Señor emplea estas importantes palabras : “Convertíos y creeden la Buena Noticia”.

Camino de conversión es cuando el hombre se da cuenta que no está contentoconsigo mismo, que nada le llena; y busca nuevas alternativas para ir llenando el vacíoque experimenta en su interior; pero todo eso le deja una tristeza en el alma quenecesita saciar.

Y entonces el Señor pasa a su lado; le habla, le mira, como hizo con tantos hombresa lo largo de la historia, y toca ese corazón, el cual se arrepiente de todo pecado ydesobediencia a Dios. Es como si el Amor de Dios entrara a raudales en esa alma y allíse quedara. Ya la vida no es igual; todo lo que antes era importante, deja de serlo;porque para un alma convertida, Dios pasa a ser lo primero y principal. Se hadesprendido de sus ataduras, de todo aquello que le mantenía a ras de tierra y leimpedía poner la mirada en el Cielo.

Hijos míos, ¡alzad la mirada! ¡contemplad la Faz de Cristo! Que viene en buscavuestra. Convertíos y creed en el Evangelio.

SEMANA TERCERA DEL TIEMPO ORDINARIOLunes, día 22 de Enero de 2018

El pecado contra el Espíritu Santo

Evangelio Mc 3,22-30. Queridos hijos, el Evangelio de hoy narra cómo los maestros dela ley afirmaban que Jesús estaba poseído por el jefe de los demonios y por eso losexpulsaba. No entendían ni comprendían cómo podía tener ese poder, y le teníanenvidia. Y esto le sirvió al Señor para explicarles que quien “blasfeme contra el EspírituSanto” jamás será perdonado. No sólo quien atribuye al maligno las obras realizadaspor el mismo Dios; también peca contra el Espíritu Santo quien niega el poder quetiene el Señor de perdonar los pecados. Es lo que le pasó a Judas. Él se dio cuenta de supecado, pero pensó que jamás el Señor le podría perdonar, que no tenía ese poder; yse adueño de él la desesperación, y al final se ahorcó. No acudió a la Misericordia deDios porque no creía en ella.

107

Page 108: DE LA MANO DE MARÍA · 2018-12-28 · El Señor está allí, sentado en aquella orilla, junto a la lumbre, esperando a sus hijos, para que se le acerquen y, movidos por el amor,

En el Señor no existía división. En Él todo era unidad, todo confluía a un mismo fin:la glorificación y el amor a su Padre, y a través de Él a las criaturas. Por eso, hijos míos,¡es tan importante la unidad! Un alma nunca puede servir a dos amos; tendrá queoptar por uno de ellos. No se puede servir a Dios y al mundo. El pecado, que está alservicio del enemigo, es lo que crea división en vuestra alma; os produce oscuridad,que os impide ver al Señor detrás de cada cosa o acontecimiento. Os va llevando porcaminos que os acaban destruyendo; y cada pecado os va abriendo la puerta para queentren en el alma más infidelidades a Dios.

¡Unidad de vida, hijos míos! Esa unidad no quiere decir que os veáisdefinitivamente libres de caer en pecado. No. Sino que sirváis sólo a un amo, a unSeñor; que vuestro corazón sólo quiera seguir y amar a Dios, despreciando al enemigoen todo lo que su astucia os presente.

Sólo tenéis un alma, creada por Dios, y que se encamina a un sólo fin: a Dios. Todolo demás os rompería y os confundiría. ¡Apartadlo de vuestra vida! Apóstoles de María.

SEMANA TERCERA DEL TIEMPO ORDINARIOMartes, día 23 de Enero de 2018

El verdadero parentesco de Jesús

Evangelio Mc 3,31-35. Queridos hijos, en el Evangelio de hoy el Señor os transmiteunas importantes palabras: “¿Quiénes son mi madre y mis hermanos?” Y, mirando a losque estaban sentados a su alrededor, añadió: “Estos son mi madre y mis hermanos.Porque todo el que hace la voluntad de Dios, ése es mi hermano, y mi hermana y mimadre”.

Mucho más fuerte que el vínculo de sangre es el vínculo espiritual. Este vínculo esla caridad sobrenatural que os une a Dios, y a través de Él, con muchos hermanos. ElSeñor no se deja ganar en generosidad; todos los bautizados son hijos de Dios. Pero¡qué gran diferencia entre el que cumple su Voluntad y el que se resiste a ello! Todobautizado puede vivir la vida de dos maneras: de espaldas a Dios, indiferente a susenseñanzas y olvidándose de sus promesas como hijo de Dios que es; o por elcontrario, viviendo una vida plena que tiene al Señor como centro y modelo, y quecarga con su Cruz y le sigue.

Cumplir la Voluntad de Dios es la decisión más maravillosa que podéis tomar. Alcumplir su Voluntad ¡es tanto lo que recibe vuestra alma! ¡son tantas las gracias!Porque ya os abandonáis completamente en sus manos; vuestro actuar estará dirigidopor Él; el amor será el que guíe vuestros pasos, porque es su Amor el que invadirávuestra alma. Tened vuestra alma bien dispuesta para recibir sus indicaciones. Envuestra oración personal abrid vuestro corazón, y con toda la fuerza que salga devuestro interior decidle:

“Señor, aquí me tienes para hacer tu Voluntad;házmela ver con claridad,y como Bartimeo te digo: ¡Señor que vea! ¡Señor que vea!Sólo deseo servirte, desaparecer, para que Tu prevalezcas,amar aunque sea despreciado,

108

Page 109: DE LA MANO DE MARÍA · 2018-12-28 · El Señor está allí, sentado en aquella orilla, junto a la lumbre, esperando a sus hijos, para que se le acerquen y, movidos por el amor,

y siempre hacer tu Voluntad, pase lo que pase.Aquí me tienes Señor, aquí me tienes.Haz de mí lo que Tu quieras”.

SEMANA TERCERA DEL TIEMPO ORDINARIOMiércoles, día 24 de Enero de 2018

Parábola del sembrador

Evangelio Mc 4,1.3-8.14-20. Queridos hijos: Jesús, allá por donde iba, enseñaba. En elEvangelio de hoy se sentó en una barca para enseñar, porque había gran multitud; y atodos los que escuchaban les contó la parábola del sembrador, que al esparcir susemilla, ésta cayó en diferentes partes, fructificando o quedando estéril.

Él os anuncia su mensaje, y lo anuncia a todos por igual; pero, la tierra, que esvuestra alma, podrá estar dispuesta de una manera o de otra para recibirle. El Señor oshabla; a través de diversos medios, Él os comunica su enseñanzas.

Con esta lección quiero que os paréis un momento, en silencio, para ver, a la luz delEspíritu Santo, cómo es vuestra tierra:

¿Escucháis al Señor, pero por cualquier circunstancia os olvidáis de lo que oís?¿Recibís con alegría las insinuaciones del Señor, pero cuando hay una prueba o

problemas de cualquier tipo, os olvidáis de lo que escuchasteis?¿Estáis tan apegados a las cosas que, aunque escuchéis al Señor, le oís, pero su

Palabra no se profundiza en vuestros corazones? O por el contrario, ¿recibís el mensaje y le hacéis vida en vosotros profundizando en

sus palabras a través de la oración?Hijos míos, este mensaje, estas palabras, ¡son el mismo Señor que se da a vosotros!

¡Es la Vida que viene a rescataros de las tinieblas y de la oscuridad, en la que muchasveces os encontráis! ¡Es la fuerza que entra en vuestra alma para renovaros y hacerosverdaderos apóstoles de Cristo! Ya no fijaréis la mirada en vuestro “yo”, ni en vuestrosproblemas, que habrán de quedar apartados, para que sea Él quien atraiga vuestrasmiradas y el que obre en vuestra vidas.

Todas esas cosas que antes os nombré: pruebas, problemas, enfermedades, apegos,persecuciones, soledades… todo eso, os lo vais a encontrar; pero si os habéisabandonado en las manos del Señor, nada de eso hará que vuestra alma se entibie,caiga en la negligencia, se apegue a las cosas del mundo y se vaya apartando de Dios.

¡Abonad vuestra tierra con la oración y los sacramentos! Y de esta manera daréis elciento por uno.

109

Page 110: DE LA MANO DE MARÍA · 2018-12-28 · El Señor está allí, sentado en aquella orilla, junto a la lumbre, esperando a sus hijos, para que se le acerquen y, movidos por el amor,

SEMANA TERCERA DEL TIEMPO ORDINARIOViernes, día 26 de Enero de 2018

Parábola del grano de mostaza

Evangelio Mc 4,26-34. Queridos hijos, hoy el Señor vuelve a hablaros del Reino de losCielos, comparándolo con el grano de mostaza, y con la semilla que crece y germina enla tierra dando fruto.

El Señor quiere plantar en cada corazón humano este Reino. Él va lanzando sumensaje poco a poco; se va introduciendo en el alma, si ésta se lo permite, parahacerse dueño de ella. Es como ese grano de mostaza, pequeño, insignificante, que casino se ve. Si la tierra donde se planta es fértil y está regada con la oración, el sacrificio,el amor a la Cruz, la confianza, el abandono, y todo lo que hace que esa alma viva enDios, la semilla irá creciendo cada vez más, haciéndose después una planta muy grandedonde se cobijarán los pájaros y anidarán en ella.

Hijos míos, si os dais cuenta, cada día de vuestra vida es un día ordinario, en el queno ocurren grandes cosas. En él se desarrollan un cúmulo de cosas pequeñas, que en sícarecen de importancia. Todas esas pequeñas cosas pueden estar regadas por la graciade Dios, porque han sido ofrecidas a Él y se han hecho por Él. De esta manera, ese díaha quedado divinizado, y esa pequeña planta ha sido abonada, regada, cuidada,creciendo fuerte y robusta, para mayor gloria de Dios. Cada día viviréis diferentesacontecimientos, grandes y pequeños, y el conjunto de todos ellos formará vuestravida: esa planta grande y fuerte, o por el contrario, muy pequeña por no haberladejado crecer.

Hijos míos, dejad que el Reino de Dios invada vuestra alma y germine. Que de frutoy pueda así albergar en él a otras almas, que necesiten ese cobijo y puedan anidar enél.

SEMANA TERCERA DEL TIEMPO ORDINARIOSábado, día 27 de Enero de 2018

La tempestad calmada

Evangelio Mc 4,35-41. Queridos hijos, hoy quiero que esta lección quede grabada afuego en vuestro corazón y en vuestra mente. Es una lección importante para vuestravida; por eso, no dejéis de leerla con mucha atención y llevarla a la oración. El Evangelio de hoy os sitúa en aquella escena en que el Señor, junto a susdiscípulos, se internó en el lago, y se despertó una gran tempestad. El Señor dormía, ylos discípulos, llenos de miedo y faltos de fe y confianza, despertaron al Señor. Y Élcalmó las aguas y les dijo: “¿A qué viene ese miedo? ¿Dónde está vuestra fe?”.

El Señor quería pasar “a la otra orilla”, y que los apóstoles también lo hicieran.Donde éstos se encontraban era un lugar seguro, conocido, con su vida resuelta, consus pecados y deslealtades… Y el Señor les pone a prueba, como lo hace muchas vecescon vosotros.

Os encontráis en “vuestra orilla”, viviendo la vida que vivís y con esa apariencia defelicidad, que no es cierta. ¡Es vuestra orilla! No la del Señor. Son vuestras seguridades,

110

Page 111: DE LA MANO DE MARÍA · 2018-12-28 · El Señor está allí, sentado en aquella orilla, junto a la lumbre, esperando a sus hijos, para que se le acerquen y, movidos por el amor,

vuestros apegos, vuestro “yo”, que está ahí anclado y no quiere salir de ahí porquetiene miedo de perder su propia libertad, su propia autonomía.

Pero el Señor desea que crucéis el lago, como los apóstoles, personas comovosotros, tan poca cosa, con tantos defectos. Ese lago son todas las tempestades,tormentas, purificaciones que necesitáis para ir puliendo el alma de tantasdeslealtades. Allí también se encuentra el Señor, en la barca donde estáis montadospara cruzar el lago. Aparentemente se encuentra dormido, pero no lo está. Él estávigilante; vela por vosotros y espera a que sea la fe, la confianza y el abandono los quelleven vuestra alma, para así poder llegar a la otra orilla, que es la del Señor, no lavuestra. Pero, ante tanta dificultad y al veros a vosotros mismos, al ver vuestro interior,os entra ése pánico, ése miedo… Es entonces cuando vuestra alma, que ama al Señor,le dice: “¡Ayúdame Señor, no puedo más! ¡Despiértate, escúchame, no puedo Señor,no puedo!” Y el Señor, que nunca os deja solos, que siempre ha estado allí, aunquepensaseis que no, acude en vuestra ayuda, y os pregunta: “Hijo, ¿a qué viene esemiedo? ¿Dónde está tu fe? ¿No te das cuenta que necesitas de estas purificacionespara llegar a la otra orilla?”

Este es el aprendizaje por el que el alma debe pasar: dejar su “yo”, dejar su orilla,entrar en el lago para ser purificado y llegar al otro lado, donde su alma ya seencontrará mucho más unida a Dios, porque se habrá purificado.

Allí, al pasar a la otra orilla, al llegar donde se encuentra el Señor, ¡conquistaréis elmundo! Ese mundo que os espera. Pero no solamente ahí, hijos míos. Recordad quecuando estéis en plena tempestad, cuando vuestro corazón, vuestra alma y todovuestro ser experimente la purificación y la prueba para uniros más a Dios, tambiénentonces conquistaréis el mundo, porque estáis obrando bajo la confianza y elabandono en Dios; y eso hace que seáis humildes y os deis cuenta de vuestra nada, deque nada valéis y nada tenéis; ¡solo a Él y a Mí!

¡Adelante hijos, adelante! El Señor os espera. ¡No tengáis miedo! Ya estáis en labarca. Remad mar adentro ¡Remad, apóstoles de María!

DOMINGO CUARTO DEL TIEMPO ORDINARIODía 28 de Enero de 2018

Jesús en la sinagoga de Cafarnaúm

Evangelio Mc 1,21-28. Queridos hijos: hoy el Señor, a través del Evangelio, osdemuestra cómo enseñaba a todas aquellas gentes. Les hablaba con una granautoridad. Pero sus palabras no quedaban en el aire; llegaban a los corazones yactuaban en ellos si encontraban buenas disposiciones. También los maestros de la leyenseñaban, pero sus palabras estaban vacías de contenido, y no penetraban en elcorazón humano.

El Señor hablaba con autoridad, pero no con esa autoridad que desea someter alque escucha, sino con la autoridad basada en el amor. Hablaba con tal fuerza, quecalaba en los corazones, porque esas palabras estaban llenas de la luz del EspírituSanto.

111

Page 112: DE LA MANO DE MARÍA · 2018-12-28 · El Señor está allí, sentado en aquella orilla, junto a la lumbre, esperando a sus hijos, para que se le acerquen y, movidos por el amor,

Después curó a un endemoniado, expulsando de él a un “espíritu inmundo”, porquesu poder era superior, y Él había venido a salvaros, a curaros de toda dolencia y mal. Éldesea liberaros de lo que os esclaviza.

Cada alma es libre, y ha sido creada con esa libertad para elegir el bien o el mal. Sipensáis en vosotros mismos, encontraréis muchas ataduras, que os paralizan, osmantienen pasivos, y muchas veces no os dejan avanzar en vuestra vida interior comoquisierais. Esas ataduras son los pecados, son las negaciones a vuestro Padre Dios. PeroÉl desea liberaros, como lo hizo con aquel hombre; sólo tenéis que pedírselo.Arrodillaos ante Él con verdadero arrepentimiento de todos vuestros pecados, yofrecedle vuestras miserias, para que Él, con su Amor, las cure y las sane, acudiendodespués a ese sacramento santo que es la Confesión.

Huid de la soberbia y humillaos ante Él. Él os conoce; sabe lo que pasa en vuestraalma; conoce cada lucha, cada batalla perdida o ganada; ve en cada momento cómo osencontráis.

Obedecedle, someteos a su autoridad, que está regida por el Amor, y así, hijos míos,la lucha será mucho más fácil.

SEMANA CUARTA DEL TIEMPO ORDINARIOLunes, día 29 de Enero de 2018

Curación del endemoniado de Gerasa

Evangelio Mc 5,1-2.9-13.17.20. Queridos hijos, el Evangelio de hoy os relata cómo elSeñor fue a la “región de los gerasenos”, en la que se encontraba un hombre poseídopor una “legión” de malos espíritus. El Señor obró el milagro y sanó a ese hombre, ytodos aquellos demonios entraron en una piara de cerdos, haciendo que seprecipitaran al mar por un acantilado. Los porquerizos quisieron que el Señor se fuerade la ciudad, y así lo hizo. Para ellos era más importante todo el dinero que habíanperdido al morir los cerdos, que la vida de un hombre. Así de cruel es el corazón humano; solo ve su egoísmo, lo que pierde, no ve más allá.No se da cuenta que el alma de un hombre tiene un valor infinito, porque está hecha aimagen y semejanza de Dios; y Él dio su vida por esa alma, igual que por la de todos loshombres.

Tras su liberación, este hombre quiso seguirle, pero el Señor le mandó a su casa,para que contara todo lo que le había sucedido; y así lo hizo, quedando asombradotodo aquel que le escuchaba.

Es otra vez el encuentro de un alma con el Señor, un alma atormentada, poseída.Pero gracias a la Misericordia del Señor tuvo la oportunidad de ser curado. A vosotrosno os atormentan esos espíritus, pero a veces vivís oprimidos por el amor desmedidoque os tenéis a vosotros mismos, que en cierta manera es como un tormento.

Necesitáis salir de esa especie de tumba que vosotros mismos habéis cavado. Id a laoración, y abriendo vuestro corazón al Espíritu Santo, entrad en vuestro interior y vedlo que allí se encuentra: habrá suciedad, muebles rotos, desorden… pero, no entréiscon una vela, porque no veréis casi nada. ¡Abrid de par en par las ventanas para queentre la Luz del Espíritu Santo! y así poder ver todo lo que allí desagrada a Dios; es la

112

Page 113: DE LA MANO DE MARÍA · 2018-12-28 · El Señor está allí, sentado en aquella orilla, junto a la lumbre, esperando a sus hijos, para que se le acerquen y, movidos por el amor,

forma de verlo todo. Y entonces, estando en oración, le pedís su ayuda para poderrecomponerlo todo.

Él vino a sanar lo que estaba enfermo, y llegó a vuestra vida como a la de aquelhombre. ¡Abrid vuestra alma! Porque Él viene a sanaros.

SEMANA CUARTA DEL TIEMPO ORDINARIOMartes, día 30 de Enero de 2018

Curación de la hemorroísa y de la hija de Jairo

Evangelio Mc 5,22-24.35-43. Queridos hijos, el Evangelio de hoy os narra dos historiasque ya os expliqué varias veces: la curación de la hemorroísa y la de la hija de Jairo, quevolvió a la vida. Dos hermosas historias llenas de contenido, en las el Señor os quiereenseñar la gran fe que tuvieron esas personas. Pero hay una frase que quiero que hoymeditéis, y es cuando el Señor se acerca al cadáver de aquella niña y le dice:“Muchacha, a ti me dirijo, ¡levántate!” Y volvió a la vida.

Esa niña había muerto, pero el Señor, al ver la fe de sus padres, obró el milagro; y laque estaba muerta, volvió a la vida. ¡Volver a la vida! ¡Sentir otra vez que Cristo habitaen vuestro corazón! Tener esa fe; esa certeza de que con Él lo podéis todo, y sin Él nadasois y nada podéis.

Cuantas veces os encontráis como esa “niña muerta”: es vuestra alma muerta, sinaliento de vida, cerrados los ojos, inmóvil, sin poder avanzar… Es el pecado, hijos míos,que nubla la mente, que os deja sin vida sobrenatural, que os hace hundiros cada vezmás en la oscuridad y en las tinieblas…

Pero llega el Señor, y como a aquella niña os dice: “A ti me dirijo: ¡Levántate!¡Levántate y no esperes más! Reconoce tus culpas y ven a Mí que te estoy esperando,no esperes más. Lo que estaba muerto debe de volver a la vida”.

Como Lázaro salió de su tumba cuando el Señor le dijo: “Lázaro, sal fuera”, así osdice a vosotros:

“¡Alma! ¡alma mía, sal fuera! Sal fuera, que aquí te espero con los brazos abiertos,como al hijo pródigo, que venía arrepentido de toda su mala vida. Lo que estabamuerto debe volver a la vida; a la vida de la Gracia, que recibirás en esa confesión conel dolor y el arrepentimiento sinceros”.

No te dejes seducir por las voces falsas que escuchas en tu interior. ¡Lucha, hijo mío,lucha! Aparta de ti todo lo que te aparte de Él.

Y ¡levántate! ¡anda! Sal de la tumba, como Lázaro. Sal de la tumba del pecado; sal ala luz y respira ese nuevo aire de la Gracia. Acude a Él, que te dará la fuerza quenecesitas; porque te ama como un padre, y el Amor del Señor es mil veces mayor quecualquier amor que tenga cualquier padre de este mundo,

¡Te ama, hijo, te ama! Vuelve a Él.

113

Page 114: DE LA MANO DE MARÍA · 2018-12-28 · El Señor está allí, sentado en aquella orilla, junto a la lumbre, esperando a sus hijos, para que se le acerquen y, movidos por el amor,

FEBRERO

SEMANA CUARTA DEL TIEMPO ORDINARIOViernes, día 2 de Febrero de 2018 Fiesta de la Presentación del Señor

Evangelio Lc 2,22-35.39-40. Queridos hijos, hoy es la fiesta de la Presentación deJesús en el templo. Cumplimos este precepto siguiendo la ley de Moisés. Allí nosencontramos al anciano Simeón y a la profetisa Ana que llevaban largo tiempoayunando, orando, esperando ese gran día. Todos esos sacrificios fueron muy gratos alSeñor, y les concedió la dicha de poder contemplarle. Allí oí palabras maravillosas, quedespués se cumplieron. Se me dijo que una espada traspasaría mi Corazón; todo estose cumplió, y aun perdura ese dolor en mi Corazón al contemplar cuántas almas sepierden por el pecado.

El Señor es presentado en el templo. Yo también os lo presento; lo llevo en misbrazos como a un niño indefenso, y os lo muestro: ahí lo tenéis. ¿Sois capaces deadorarlo? ¿Qué le podéis ofrecer para tener la dicha de poder verlo?

Él habita en vuestro interior; está allí presente; ¡vive dentro de vosotros! Vuestracasa… ¿está bien preparada para que Él se sienta a gusto? ¿Habéis preparado con amorcada detalle, cada acto de amor que debéis ofrecerle, cada renuncia?

Simeón y Ana pasaron largos años de su vida renunciando a una vida más cómoda,más fácil. Ayunaban, oraban, esperaban… y tenían fe; porque sabían que un díatendrían la dicha de encontrarse con su Maestro y Señor. ¡No les importó la espera!Mereció la pena el sacrificio de toda una vida para gozar de aquellos momentos.

Por eso os digo a vosotros, hijos míos: ¿cómo preparáis la venida del Señor cadadía? Él viene en cada Santa Misa para encontrarse con cada uno de vosotros, y debéistener bien preparada el alma para albergar a todo un Dios, que se hace pequeño parallegar al corazón de cada hombre.

Preparad cada encuentro, limpiad vuestra alma. Que llega el Señor a vosotros ¡todoslos días! No le defraudéis.

SEMANA CUARTA DEL TIEMPO ORDINARIOSábado, día 3 de Febrero de 2018

Regreso de los Apóstoles tras la misión. El descanso

Evangelio Mc 6,30-34. Queridos hijos, después de largas jornadas de trabajo yenseñanza, los discípulos se encontraban cansados. El Señor hizo que se subieran a unabarca y se dirigieron a un lugar solitario para descansar. Pero la multitud les seguía, y alverlos, Jesús bajó de la barca y se puso a enseñar a todas aquellas gentes.

Se encontraba muy cansado, pero no pensó en sí mismo, sino en las necesidades delos que le esperaban. Se bajó de la barca y comenzó a enseñar. Con este gesto mostró asus apóstoles que ante la necesidad del prójimo nunca hay que pensar en uno mismo;hay que estar pendientes de lo que necesitan los demás, y apartar a un lado lapreocupación por el propio cansancio y las necesidades propias.

114

Page 115: DE LA MANO DE MARÍA · 2018-12-28 · El Señor está allí, sentado en aquella orilla, junto a la lumbre, esperando a sus hijos, para que se le acerquen y, movidos por el amor,

Les enseñó la verdadera caridad, que es capaz de salir de sí misma, del “yo”, de supropio descanso, bien merecido, para darse a los demás.

Cuántas veces os pasa, hijos míos, que después de haber realizado un trabajo que oscostó mucho, sentís esa alegría de poder ya descansar, y dedicaros a cosas que os sonmás agradables. El descanso es necesario y bueno, pero también hay que santificarlo.Ese descanso debe de ser ofrecido a Dios, sabiendo que después hay que seguirtrabajando. Ese descanso tiene un peligro, y es el buscaros a vosotros mismos y alpropio capricho. Hay muchas formas de descansar, pero siempre hay que estar atentosa dar gloria a Dios con ese descanso.

El Señor se montó en aquella barca, y escuchaba a sus discípulos; allí, encima deaquellas aguas, se relajaron y reanudaron las fuerzas para seguir trabajando por lasalmas.

¡Mucho es lo que queda por hacer! Y los obreros son pocos… ¡Trabajad para lamayor gloria de Dios! Y no olvidéis que también en el descanso se encuentra el Señor.

DOMINGO QUINTO DEL TIEMPO ORDINARIODía 4 de Febrero de 2018

Curación de la suegra de Pedro

Evangelio Mc 1,29-39. Queridos hijos, el Señor, después de haber estado predicando,se dirigió a la casa de Pedro, donde se encontraba su suegra, enferma con fiebre. “Él seacercó, la tomó de la mano, hizo que se levantara y desapareció la fiebre”.

La gente no paraba de traerle enfermos y endemoniados, y Él curó a muchos. Demadrugada se fue a orar a un lugar apartado. Terminada su oración se fue a otroslugares para seguir predicando y curando.

Esta escena del Evangelio es toda una enseñanza. La gran preocupación del Señor esacercarse al hombre para enseñarle, curarle y liberarle. Él tomó la mano de la suegrade Pedro e inmediatamente quedó sanada.

Hay veces, hijos míos, en que no sabéis lo que os pasa; os encontráis sin fuerzaspara la lucha, os falta motivación. Es como si una fuerza tirara de vosotros e hiciera queos olvidéis de cumplir la Voluntad de Dios, y deseéis entonces hacer vuestra propiavoluntad. Esto se produce cuando el alma aún no está limpia o se deja tentar por elenemigo; es la huella que deja el pecado, que hace que el alma tienda a caer siempreen las mismas debilidades. Os encontráis entonces como la suegra de Pedro: postradosy sin fuerzas para la vida sobrenatural.

Pero Él se acerca donde os encontráis, os tiende la mano y os dice:

“Alma mía, te ofrezco mi Mano. Sé que te falta fe, y miras para otro lado. No te equivoques, porque por ese camino caerás. ¡Agárrate fuerte. No te sueltes! ¡Levántate! ¡Comienza un nuevo día!Tienes todo lo que necesitas; y sobre todo, me tienes a Mí. Mira hacia adelante y no mires atrás. ¡Comienza una nueva lucha! que con todo tu amor me ofrecerás. Intenta ver en cada rostro el Amor de Cristo, el amor que debes dar,porque tú, hijo mío, estás llamado a eso: a amar. Es lo único que merece la pena; por lo que debes llenar tus manos de ese amor por las almas; que un día de eso se te juzgará”.

115

Page 116: DE LA MANO DE MARÍA · 2018-12-28 · El Señor está allí, sentado en aquella orilla, junto a la lumbre, esperando a sus hijos, para que se le acerquen y, movidos por el amor,

SEMANA QUINTA DEL TIEMPO ORDINARIOJueves, día 8 de Febrero de 2018

La mujer cananea

Evangelio Mc 7,24-30. Queridos hijos, el Evangelio de hoy os habla de una madre quetenía una hija endemoniada, poseída. El Señor la probó y de esta manera “enseñó”, conla actitud ejemplar de esta mujer. Ella deseaba la curación de su hija, pero el Señor, alser ella extranjera, le dijo: “Deja primero que los hijos se sacien, pues no está bienquitarles el pan a los hijos para echárselos a los perros”. Y ella con gran humildad leresponde: “Es cierto, Señor, pero también es verdad que los cachorrillos que estándebajo de la mesa comen las migajas que se les caen a los hijos”. Y la hija quedócurada.

¡Qué gran humildad la de esta pobre mujer! Ella se tiene por tan poca cosa que nopide nada, ni se considera merecedora de nada. Se compara con ese pequeñocachorrillo que se alimenta de las migajas que caen debajo de la mesa. Eso es lo quesois vosotros delante de Dios, como esos pequeños cachorrillos; nada tenéis ni poseéis,que no se os haya dado. ¿Por qué, a veces, os vanagloriáis? ¿Por qué pensáis que valéisalgo por vosotros mismos? ¿No os dais cuenta que si algo tenéis, eso podríadesaparecer en cualquier momento?

Hijos míos, humildad. La humildad que todo lo alcanza. Un corazón humilde esatractivo incluso para los ojos de los hombres. Presentad vuestro corazón al Señor; sivierais lo que de verdad contiene en su interior, no os atreveríais a vanagloriaros denada. Y entonces, brotando del corazón con toda su fuerza, le diríais al Señor:

“Padre mío, esto es lo que te presento: este pobre corazón de piedra que poco o nadate puede ofrecer, solo contiene telarañas. Te pido que lo conviertas en un corazón de carne, que sepa y aprenda a amar como Túdeseas. Nada puedes esperar de mí, pero con tu ayuda todo será distinto, porque serás Tú elque actúe a través de mi persona.Nada quiero, nada valgo, solo deseo aprender a amarte.”

SEMANA QUINTA DEL TIEMPO ORDINARIOMartes, día 13 de Febrero de 2018

La levadura de los fariseos

Evangelio Mc 8,14-21. Queridos hijos, en esta escena de hoy se ve a los apóstolescómo seguían sin entender lo que el Señor les estaba enseñando. Ellos estabanpreocupados por si tenían o no pan para comer, y el Señor les dice que se guarden dela levadura de los fariseos y de Herodes, diciéndoles también: “¿Tenéis ojos pero noveis, tenéis oídos pero no oís?”.

Los apóstoles se van quedando siempre con la superficie del mensaje. Noprofundizan, no piensan, no comprenden… sus ojos y oídos están embotados ante lasenseñanzas del Señor, que les está queriendo decir que no sigan los mismos pasos queHerodes y los fariseos, ese camino de mentira y de hipocresía.

116

Page 117: DE LA MANO DE MARÍA · 2018-12-28 · El Señor está allí, sentado en aquella orilla, junto a la lumbre, esperando a sus hijos, para que se le acerquen y, movidos por el amor,

El no ver, el no oír, es propio del ser humano, porque difícilmente entra encomunicación con las cosas de Dios, con su Voluntad, con lo que le está queriendodecir en cada momento, a través de personas, de acontecimientos, de situaciones.

Hijos míos: ver al Señor, oír al Señor… ¡Cuántas veces se encuentra muy cerca devosotros y no sabéis verlo! Cuando pasan por vuestra vida el sufrimiento, las pruebas,cualquier tipo de padecimiento… pensáis que el Señor se ha ido de vuestro lado; y esaprueba se convierte en una carga, en una grande o pequeña desesperación, en unafalta de esperanza. Eso pasa porque no sois capaces de amar el dolor; no el dolorbuscado por vosotros, sino las pruebas que os da el Señor para que quedéis máspurificados. Entonces es cuando debéis daros cuenta que es el Señor el que seencuentra a vuestro lado. Es el momento de ver y oír la enseñanza que se os da através de esa prueba. ¡Es el amor a la Cruz!

Hijos míos, nunca me canso de repetirlo: ¡No busquéis cruces falsas! Esas queprovocáis con vuestras malas actitudes; esas que el Señor no quiere para vosotros,porque no purifican, no enseñan, ya que nacen del pecado del hombre. ¡Escuchad alSeñor! ¡Oídlo a través de la oración! Él os habla. Escuchadle, para saber en cadamomento qué desea de vosotros.

TIEMPO DE CUARESMA - MIERCOLES DE CENIZADía 14 de Febrero de 2018

Evangelio Mt 6,1-6.16-18. Queridos hijos, en el Evangelio de hoy, el Señor os trasmiteuna gran enseñanza, y es, que todo el bien que hagáis, siempre tiene que estarcustodiado en la intimidad con Dios.

En este Evangelio, el Señor se refiere, en primer lugar, a la caridad; después a laoración, y por último al ayuno. Para los tres utiliza las mismas palabras: “Tu Padre, queve en lo escondido, te recompensará”.

La caridad, la oración y el ayuno: tres pilares fundamentales para crecer en vidainterior. Pero el Señor quiere ir más allá y daros una gran enseñanza; porque la prácticade cualquiera de estos fundamentos de la vida espiritual, Él quiere que sea “en loescondido”, en lo secreto, porque se corre el peligro de que desaparezca la humildad yen su lugar aparezca la soberbia.

Puede suceder que al practicar estos actos de piedad, penitencia y caridad, surja envosotros el deseo de que vuestros hermanos lleguen a saberlo de algún modo, y de servalorados por vuestras buenas acciones; o incluso, que vosotros mismos tengáisinteriormente pensamientos de autocomplacencia. Es una fácil manera de tentaros elenemigo, que saca mucho aprovecho de esos pensamientos, que pasandesapercibidos, como el veros a vosotros mismos como esas personas distintas,mejores, mucho más cerca de Dios que los demás, porque practicáis pequeños actosde caridad, porque hacéis oración, porque ayunáis. Esos actos de virtud son meritoriosy agradan a Dios; pero, tenéis que estar pendientes de vuestro corazón, de la intencióncon la que hacéis las cosas. Tenéis que examinar si os preocupa lo que piensan losdemás, si en realidad buscáis la vanagloria, los elogios, el que os tengan en buenaconsideración.

Hijos míos, que vuestra intención sea siempre alabar y amar al Señor. Que Él sea elmotor de vuestros actos e intenciones; así tendrán su verdadero sentido y suverdadero valor.

117

Page 118: DE LA MANO DE MARÍA · 2018-12-28 · El Señor está allí, sentado en aquella orilla, junto a la lumbre, esperando a sus hijos, para que se le acerquen y, movidos por el amor,

VIERNES DESPUÉS DE CENIZADía 16 de Febrero de 2018

La cuestión del ayuno y la Ley Nueva Evangelio Mt 9,14-15. Queridos hijos, el Señor en este Evangelio habla del ayuno. Losdiscípulos de Juan no comprenden por qué los apóstoles no ayunan tantas veces comoprescribe la Ley. Y el Señor va más allá de la ley y les habla de otra clase de ayuno:“¿Pueden acaso estar tristes los invitados a una boda mientras el novio está con ellos?Ya llegará el momento en que les faltará el novio, entonces ayunarán”.

El ayuno del que les habla el Señor es el que los suyos tendrán que sufrir cuando Élya no se encuentre entre ellos en forma visible. Tendrán entonces que acostumbrarsevivir su presencia de otra forma; ya no lo verán con los ojos del cuerpo sino con los delalma. Los apóstoles pasaron varios años con Él, día a día, momento a momento.Durante ese tiempo Él les enseñaba y les daba su cariño, y ellos se sentían seguros porsu presencia. Pero el Señor debía cumplir la misión a la que había sido llamado.

Cuando físicamente dejó este mundo, los apóstoles sintieron esa soledad; pero,después aprendieron que no se había ido, sino que se encontraba entre ellos, entretodos los hombres, de una forma misteriosa, pero real: con su Cuerpo, Alma, Sangre yDivinidad.

Así es como está con vosotros; y si le permitís que actúe, Él se hace “dueño” devuestras almas y corazones y habita en vosotros. Podéis llegar a pensar que para losapóstoles era más fácil, ya que gozaron de su presencia visible; sin embargo, nohabitaba dentro de sus ser, como lo hace ahora, pues hasta la Institución de laEucaristía no pudieron recibirle en la Comunión. Y después de la Institución, lo recibíany gozaban de su presencia sacramental; pero -al igual que en vosotros- tenía queintervenir la “fe” para creer en su presencia.

Ahora forma parte de vosotros, de una forma más íntima, personal y profunda. Seune a vuestra alma formando un todo. Es esa unión de espíritus que es mucho másfuerte que la de los cuerpos. El cuerpo es materia que perece, pero no así el espíritu.

¡Hijos, pedid esa fe! Y sentid en cada Eucaristía cómo el Señor viene a habitar envosotros. Grandioso misterio. Y lo hizo por Amor.

DOMINGO PRIMERO DE CUARESMADía 18 de febrero de 2018

Como Cristo en el desierto: preparados para la tentación

Evangelio Mc 1,12-15. Queridos hijos, el Señor recibió el Bautismo, aunque Él no lonecesitaba; y el Espíritu Santo quiso que os diera ejemplo de cómo ha de ser vuestravida. Os hacéis hijos de Dios por medio del sacramento del Bautismo, y empiezavuestra andadura como cristianos. El mundo aparece entonces como un lugar quedebéis aprovechar para hacer el bien, siendo testigos del Señor. Es donde tenéis quehacer méritos para ganaros el Cielo.

Y el Señor os manda pruebas, como Él tuvo que pasarlas durante los cuarenta díasen que se retiró al desierto a orar, para después superar la tentación. Eso os enseña laimportancia de tener esa preparación, sin la cual es muy difícil, cuando os tienta y osataca el maligno, superar las tentaciones.

118

Page 119: DE LA MANO DE MARÍA · 2018-12-28 · El Señor está allí, sentado en aquella orilla, junto a la lumbre, esperando a sus hijos, para que se le acerquen y, movidos por el amor,

Él era atendido por los Ángeles. Cada uno de vosotros tenéis vuestro Ángel de laGuarda que os cuida y vela por vosotros. ¡Cuántas veces os insinúa que vayáis por elcamino correcto! Él os conoce; sabe y ve cuando caéis; por eso, el Señor os lo puso avuestro lado. Ese gran compañero, al que tenéis que acudir mucho, es de gran ayuda.Dadle las gracias; pedidle cosas. Pedidle que os ayude a acercaros cada día más alSeñor, y que sea vuestro amigo fiel, ¡amigo que nunca, nunca falla! Porque es elcompañero que el Señor os puso en esta andadura terrena.

El Señor, tras haber estado en el desierto orando y ayunando, ya estaba preparado.Y se dirigió a Galilea a predicar a todas las gentes, y a atraerlas hacia Él. “Ya estabapreparado”: éste es el camino que vosotros tenéis que seguir.

Ahora os encontráis en ese momento de preparación, aprendiendo cómo imitar alSeñor. No podéis dar nada que no poseáis. Si vuestra alma está vacía y no está llena deDios ¿cómo vais a poder ayudar a los demás?

¡Nunca dejéis la oración, hijos míos! Es la vía de unión y comunicación con vuestroPadre Dios. Es donde el entendimiento recibe luz para conoceros, para daros cuenta devuestros fallos, errores y faltas de amor. Es donde encontráis el arrepentimiento parallorar con verdadero dolor; el que ha de salir de un corazón arrepentido.

Es vuestro alimento; ese alimento espiritual donde encontráis la paz, la fortaleza, yesa la alegría gozosa del alma que presiente la cercanía de su Padre Dios y que, al estarjunto a Él, se llena de dicha. ¡Nada hay en la tierra que pueda igualarlo! Esa paz, eseamor que todo lo inunda, que todo lo transforma.

Por eso, hijos míos, es tan importante que nunca… ¡nunca dejéis la oración!

SEMANA PRIMERA DEL TIEMPO DE CUARESMAMiércoles, día 21 de Febrero de 2018

“Esta generación pide una señal”

Evangelio Lc 11,29-32. Queridos hijos, el Señor se encontraba rodeado de muchagente que pedía señales, milagros para creer. Y el Señor les dice: “Así también el Hijodel Hombre será una señal para esta generación”. La señal que les da el Señor es sumensaje, su ejemplo de vida, sus enseñanzas, su donación. Pero los hombres pidenotra cosa; desean ver milagros, grandes manifestaciones sobrenaturales, “fuegosartificiales” para creer en Él… Todo esto no les lleva a la conversión, ni a cambiar devida; porque con ello no se profundiza, no cala en el interior del hombre para que seexamine y busque las causas que le separan de Dios. La verdadera conversión nace de dentro. Es cuando el alma, por la gracia de Dios ypor su infinita misericordia, se da cuenta del vacío que existe en su interior, yexperimenta un deseo de conocer verdaderamente al Señor. Es muy fácil apegarse a losmilagros, a los carismas sobrenaturales que algunas personas tienen, a ver cosasextraordinarias; pero todo eso pasa. En ese momento hace reaccionar a muchoscorazones, pero muchas veces no deja ni poso, ni huella. El verdadero cambio de unalma se realiza día a día, con ese esfuerzo, esa lucha, ese comenzar desde cero tantasveces. El seguir al Señor es sacrificado y cuesta, no es fácil, y requiere mucho olvido desí.

Hijos míos, trabajad vuestro interior; id cambiando esas malas tendencias que osseparan de Él. ¡No busquéis en lo extraordinario el milagro de vuestro cambio interior!

119

Page 120: DE LA MANO DE MARÍA · 2018-12-28 · El Señor está allí, sentado en aquella orilla, junto a la lumbre, esperando a sus hijos, para que se le acerquen y, movidos por el amor,

Eso solo se realizará a través de la lucha diaria, constante, fiel; día a día. Este es elcamino de vuestra santificación.

SEMANA PRIMERA DEL TIEMPO DE CUARESMASábado, día 24 de Febrero de 2018

“Amad a vuestros enemigos y orad por los que os persiguen”

Evangelio Mt 5,43-48. Queridos hijos, en el Evangelio de hoy el Señor os dice: “Amada vuestros enemigos, y orad por los que os persiguen…” “Porque, si solamente amáis alos que os aman, ¿qué recompensa podéis esperar?” “Vosotros sed perfectos, como esperfecto vuestro Padre Celestial”.

Palabras difíciles de cumplir, porque amar a quien os ama, a quien es vuestro amigo,¡es muy fácil! Incluso con ellos, en ocasiones, tenéis roces y malos entendidos. Pero elSeñor os pide más, ese “algo más” que a vuestra humanidad le resulta imposible, y esamar al que os hace daño, al que no os comprende, al que os critica e injuria, al que ospersigue. Amar es poner la otra mejilla; es rezar y mortificarse por esas almas, para queel Señor las haga ver; es no guardar ningún tipo de rencor, y perdonar de corazón.

Ahora que, dentro de pocos días, vais a vivir la Pasión del Señor, es buen momentopara meditar en todo esto. Él recibió toda clase de vejaciones; no hubo nada que elodio de aquellos hombres dejara sin hacer. Sin embargo, Él lo único que hizo fueperdonarles: “Padre, perdónalos porque no saben lo que hacen”. Esta fue una de lassiete palabras que pronunció en la Cruz.

¡El amor todo lo puede! Hasta lo que se puede considerar imposible. Vosotros, envuestros ratos de oración, pensad en todas aquellas personas a quienes aún guardáisalgún rencor y os cuesta olvidar lo que os han hecho. Es muy difícil para una personahumana llegar a perdonar de corazón. Por eso, Yo os enseño con esta lección para que,de alguna manera, podáis llegar a tener ese corazón capaz de perdonar.

Cuando penséis en esas personas, lo primero, considerad que son hijos de Dios;hijos cuya alma está hecha a imagen y semejanza de Dios, igual que vosotros. Después,al considerar las ofensas que de ellas habéis recibido, poned más atención en ver susvirtudes, olvidando sus defectos; porque si consideráis sus defectos, seguramenteveréis que los vuestros son mayores; solamente quedaos con lo bueno que tienen. Yuna vez que hayáis dado estos pasos, entonces, rezad por ellas, ofreced algún sacrificioy perdonadlas de corazón.

¡Cuánto os ha tenido que perdonar a vosotros el Señor! ¿Acaso lo habéis olvidado?Seguid su ejemplo; ¡aprended a amar! que eso llenará vuestro corazón de gozo yalegría, porque es lo más grande que podéis aprender en esta vida: Amar.

DOMINGO SEGUNDO DE CUARESMADía 25 de febrero de 2018

La Transfiguración del Señor

Evangelio Mc 9,2-10. Queridos hijos, el Evangelio de hoy narra la Transfiguración delSeñor en el monte Tabor. Allí, todo Él se convirtió en Luz; y sus discípulos y Él quedaron

120

Page 121: DE LA MANO DE MARÍA · 2018-12-28 · El Señor está allí, sentado en aquella orilla, junto a la lumbre, esperando a sus hijos, para que se le acerquen y, movidos por el amor,

envueltos en una nube, de la que salía la voz del Padre, que dijo: “Este es mi Hijoamado, escuchadle”.

Los apóstoles se sentían a gusto allí, aunque estaban asustados. Allí también quedó reflejada la Divinidad de Cristo, al haber sido reconocido como el

Hijo de Dios. También vosotros, hijos míos, al recibir el Bautismo y haceros hijos deDios, recibisteis esa participación en la Vida Divina, ese Espíritu de Dios que habita envuestro interior.

Aquellos momentos maravillosos vividos por los tres apóstoles fueron un anticipode la Resurrección. Muchas veces también los vivís vosotros, cuando experimentáisfuertemente el Amor de Dios; al sentirlo con esa fuerza… ¡todo a vuestro alrededorcambia! Las cosas ya las veis de otra manera, siendo los mismos. Vuestro corazón sesiente con más capacidad de amar y tenéis más facilidad para ver al Señor detrás decada acontecimiento, de cada momento del día. Os encontráis entonces tan cerca deesa Luz que transforma, que vuestro corazón se inunda de amor y felicidad. Esosiempre ocurre cuando, estando en su presencia, os sometéis totalmente a suVoluntad; cuando le dais toda vuestra vida y os despreocupáis, ya que es Él quien lalleva.

Pero del Tabor hay que bajar y seguir tras los pasos del Señor. Eso fue como unapreparación para lo que vendría después: el sufrimiento de la Pasión: dolor que no esmenos gozoso, y que es ¡tan meritorio! Es donde ya os abandonáis en sus manos y osabrazáis a la Cruz; pero cada cruz contiene la Sangre y el Agua purificadoras del Señor;esa cruz os lleva a la gloria del Cielo; esa cruz transforma los corazones y las almas; esacruz es la que, hijos míos, os llevará al Cielo

SEMANA SEGUNDA DEL TIEMPO DE CUARESMALunes, día 26 de Febrero de 2018

“Sed compasivos, no juzguéis, no condenéis, perdonad, dad”

Evangelio Lc 6,36-38. Queridos hijos, hermoso es el Evangelio de hoy. Las palabras queutiliza el Señor las tenéis que grabar a fuego en vuestro corazón, porque mucho bien osharán: “sed misericordiosos”; “no juzguéis” a nadie; “no condenéis” a nadie;“perdonad”; “dad” y Dios os dará; os medirá “con la misma medida con que vosotrosmidáis” a los demás.

Todas estas actitudes son completamente indispensables para deshaceros de lasbarreras que oprimen vuestro corazón. ¡Cuántas veces exigís a vuestros hermanosactitudes generalmente muy buenas, pero desconociendo las circunstancias que enesos momentos les rodean!. Pretendéis que hagan lo que consideráis correcto, pero enel fondo os estáis buscando a vosotros mismos.

En todo esto entra la falta de comprensión, de paciencia, de información; influye lacrítica y el juzgar sus actuaciones según vuestra forma de vivir y de ver las cosas. ¡A lasalmas solamente las juzga Dios! Y es a Él a quien tienen que rendir cuentas. Por eso, seos pide que afinéis cada vez más en la “caridad”.

Es muy fácil ver los defectos de los hermanos, criticarlos y juzgarlos; pero ¿quién devosotros puede tirar la primera piedra? Nadie pudo condenar a la “mujer adúltera” delEvangelio ¡y tenía muchos pecados! Pues vosotros, hijos míos, no condenéis tampoco.Todo eso nace de la soberbia. Al contrario, debéis fomentar en vuestra vida lahumildad, aunque notéis el aguijón del desprecio, la soledad y la falta de cariño.

121

Page 122: DE LA MANO DE MARÍA · 2018-12-28 · El Señor está allí, sentado en aquella orilla, junto a la lumbre, esperando a sus hijos, para que se le acerquen y, movidos por el amor,

Tenéis que ayudaros unos a otros, pero siempre comprendiendo, perdonando,dándoos, ¡amando!. No se trata de hacer grandes cosas; se trata de estar pendientesde las mociones que Espíritu Santo os comunique, y tener pequeños detalles de cariñocon quienes están más cercanos, y a veces con los lejanos; mediante una sencillallamada de teléfono o un mensaje, un servicio que prestáis.… cualquier cosa.

No os debéis acostar cada noche sin, al menos, haber hecho esos pequeños actos decaridad, que forman la vida ordinaria. Incluidlo en vuestro examen de conciencia de lanoche, y preguntaos en ese día qué hicisteis por alguno de vuestros hermanos. Vuestraalma quedará muy recompensada, y notaréis el gozo de haber “salido” de vosotrosmismos, de haberos dado a los demás.

SEMANA SEGUNDA DEL TIEMPO DE CUARESMAMartes, día 27 de Febrero de 2018

Humildad, Caridad y Servicialidad

Evangelio Mt 23,1-12. Queridos hijos, en este Evangelio, el Señor habla de nuevo delos fariseos, para enseñar a sus apóstoles que no tienen que imitar su conductahipócrita, y les dice: “No os dejéis llamar maestros, porque uno sólo es vuestromaestro, Cristo”. “Y no llaméis a nadie padre vuestro, porque uno sólo es vuestroPadre, el del Cielo”. “El primero entre vosotros será vuestro servidor. Al que se ensalza así mismo, Dios lo humillará, pero, al que se humilla a sí mismo, Dios lo ensalzará”.

De nuevo el Señor os habla de humildad, de la caridad, del servicio. Humildad: para no consideraros superiores a los demás; para ver en vosotros vuestrospropios defectos; para someteros por amor a la Voluntad de Dios; para no criticar alhermano; para ver en vosotros defectos y faltas superiores a los que tienen ellos; parano caer en la tentación de consideraros maestros de nadie, porque el único Maestro esel Señor, y es de Él de quien aprendéis.

Caridad: de ella os he hablado ya, ampliamente, en otras lecciones. Ésta ha de ser la“virtud guía” de vuestra vida: con una entrega total, sintiendo verdadero amor hacia elhermano, con el mismo amor de Cristo.

Servicio: que significa estar pendiente de las necesidades de los que os rodean, yadelantaros antes de que os lo pidan. Es ese mirar con la “mirada del Señor”, quecalaba hasta lo más profundo del corazón humano, para transmitirle ese Amor quesiente por él. Ese servicio es como un centinela, que se da cuenta del más levemovimiento. Servir es vivir para los demás, sin preocuparos de vosotros y de vuestrasnecesidades.

En resumen, “servir” es salir de vosotros mismos, aunque, a veces, ¡tanto y tanto oscuesta! En el fondo, lo que os ocurre es que tenéis miedo al sacrificio, no queréis sufrir,porque cada entrega al otro conlleva ese pequeño darse, ese tener que sufrir. Y muchasveces huís del sufrimiento porque aun no habéis aprendido a amar la Cruz como lohacían los santos, que buscaban y anhelaban tener ese sufrimiento; ¡lo amaban! Ycuando no lo tenían se preocupaban, porque pensaban que el Señor se había olvidadode ellos. ¡Ellos amaban! Amaban a los demás por el Señor. Y todo el aprendizaje queestáis llevando durante este tiempo es precisamente para que sepáis amar la Cruz.

Por lo tanto, hijos míos, tomaos en serio la lección de hoy: Humildad, Caridad,Servicio. Tres pilares fundamentales donde se apoyará vuestra vida espiritual.

122

Page 123: DE LA MANO DE MARÍA · 2018-12-28 · El Señor está allí, sentado en aquella orilla, junto a la lumbre, esperando a sus hijos, para que se le acerquen y, movidos por el amor,

SEMANA SEGUNDA DEL TIEMPO DE CUARESMAMiércoles, día 28 de Febrero de 2018

La madre de los Zebedeos

Evangelio Mt 20,17-28. Queridos hijos, en el Evangelio de hoy aparece la madre deSantiago y de Juan pidiéndole a Jesús que sus hijos se sentaran en su Reino, y el Señorle respondió: “¿Podéis vosotros beber el mismo cáliz de amargura que Yo estoy a puntode beber?”; “Mi cáliz lo beberéis; pero el puesto a mi derecha o a mi izquierda no metoca a Mi concederlo, es para aquellos para quienes lo tiene reservado mi Padre”.

La madre de los Zebedeo quería ese puesto de honor para sus hijos; quería quedestacaran sobre los demás, un puesto importante, honor, soberbia, poder…; actitudque llevó a una situación tirante entre los discípulos. Pero eso no es lo que el Señorquiso para ellos, y tampoco quiere para vosotros.

El que desee ser grande, ser alguien especial frente a los demás, destacar por suvalía… ése tiene que hacerse pequeño, tiene que ponerse al servicio de los demás,pasar desapercibido por la vida observando lo que necesitan los demás para servirles,estar atento a sus necesidades. El querer destacar, el querer ser importante, porencima de los demás…, eso no acerca a Cristo que es todo humildad. Para ser sudiscípulo, para poder seguirle, hay que estar desprendidos de ese afán de ser alguienimportante en la vida, en la que todo es adulación y vanidad.

El Señor, en su paso por la tierra, llevó treinta años de vida oculta, y los otros tresrestantes de servicio, sacrificio y dolor. ¡Cuántas veces huís del sufrimiento, del dolor, yentonces dejáis abandonado al Señor!

Allí, en la “soledad de la Cruz”, allí os espera el Señor. Sólo un alma que estédispuesta a aprender a amar el sufrimiento llegará un día, por gracia de Dios, acomprenderlo y a desearlo; a unirse con Él en su Pasión; a ayudar a la corredención delas almas; y a dar ese ejemplo de vida que se espera de un verdadero hijo de Dios.

123

Page 124: DE LA MANO DE MARÍA · 2018-12-28 · El Señor está allí, sentado en aquella orilla, junto a la lumbre, esperando a sus hijos, para que se le acerquen y, movidos por el amor,

MARZO

SEMANA SEGUNDA DEL TIEMPO DE CUARESMAViernes, día 2 de marzo de 2018

Sembrar y cultivar con Jesús

Evangelio Mt 21,33-43.45-46. Queridos hijos, en el Evangelio de hoy, el Señor oshabla, mediante una parábola, del Reino de los cielos, y os hace responsables de eseReino: cultivándolo, cuidándolo, sembrando su palabra y su mensaje, dando ejemplocon vuestra vida; de esa manera, cada planta pequeña que nazca de nuevo, recibirátodo lo que necesita para crecer fuerte y vigorosa.

Vuestra misión es uniros al Señor en esta tarea de siembra, cosecha y recogida. Élcuenta con vuestro esfuerzo, porque hay muchas almas sedientas de Dios. Son esaspequeñas plantas que han sido sembradas en ese Reino por el Bautismo, pero lastempestades, el mundo, el pecado, los fuertes vientos y grandes inundaciones lasahogan y acaban pereciendo.

Esa planta, que es el alma, se va apagando poco a poco, se marchita y muere. Poreso necesitan de vuestra ayuda. Tenéis que fortalecerlas y cuidarlas para que lasinclemencias del mundo no acaben ahogándolas. Y la forma de ayudarlas debe ser pormedio de la oración, por el sacrificio ofrecido por sus almas, por el cariño que lespodáis dar. Tenéis esa responsabilidad, porque mucho estáis recibiendo y es precisodar gratis lo que gratuitamente se ha recibido.

Él os dice estas palabras: “Por eso os digo que el Reino de Dios se os quitará avosotros, y será entregado a un pueblo que produzca los frutos que corresponden alReino”.

Este Reino está dentro de vosotros y hay que hacerlo fructificar; no como losfariseos, que se apartaban de Él y su semilla moría, quedaba anegada en la soberbia

¡Que este Reino brille en vosotros! que germine y abone todo lo que se encuentre asu alrededor, con esa paz, esa alegría, ese abandono en Dios, con esa humildad y amora la Cruz.

DOMINGO TERCERO DE CUARESMADía 4 de marzo de 2018

Expulsión de los vendedores del templo

Evangelio Jn 2,13-25. Queridos hijos, el Evangelio de hoy relata la expulsión de losvendedores del Templo. Lugar de oración, casa de Dios, que quedó convertida, por elegoísmo humano, en “cueva de ladrones”.

El Señor habita en vuestro interior; es también su morada, su templo. Él, después dehaber “llorado sobre Jerusalén” al contemplarla desde un monte cercano, bajó a laciudad, y entró en el templo, encontrando allí todo alborotado, y viendo convertida en“un mercado” la casa de su Padre. “Un mercado”; esto es lo que habita, muchas veces,en el corazón humano: ruido, voces, egoísmo, afán de riquezas, desorden, suciedad,

124

Page 125: DE LA MANO DE MARÍA · 2018-12-28 · El Señor está allí, sentado en aquella orilla, junto a la lumbre, esperando a sus hijos, para que se le acerquen y, movidos por el amor,

alboroto… El Señor, cuando vio todo aquello, lleno de “celo santo” lo derribó todo, yarrojó a todos del Templo. ¡Era la Casa de Dios! ¡Era su Morada!

Ahora quiero que os preguntéis: ¿Qué habita dentro de vuestro interior? ¿Es unacasa preparada para la oración? Mirad en el fondo de vuestra alma: ¿hay desorden,suciedad, ruido, afán de placer, alboroto? En vuestra morada, realmente, ¿habita elSeñor o habitáis vosotros mismos?

Vuelvo otra vez a insistiros en cual debe de ser el principio que ha de regir vuestrodía: vivir el recogimiento interior. Debéis ir a la oración y ver de qué está llena vuestraalma. ¡Es tan importante el silencio! Esa apertura hacia Dios, ese saber sobrenaturalizartodos los acontecimientos del día, ese saber mirar al otro y lo que en esos momentosnecesita, ese saber prescindir de tantos gustos y caprichos, ese alcanzar la pazinterior… Todo esto sólo se consigue mediante la oración profunda y sincera, y elrecogimiento que durante todo el día debéis vivir.

Es ese sentir que el Señor está dentro de vosotros, que guía cada uno de vuestrospasos, que todo lo hacéis a través de sus manos, y que en todo os sometéis a suSantísima Voluntad.

Este es el “camino” que debéis de seguir; camino difícil, viviendo en el mundo queos rodea, en el cual se idolatra al hombre. Difícil, pero no imposible. Tenéis antes quepreparar vuestra alma para que esté limpia y pueda allí habitar Dios. Si está llena depecados y de miserias no le dejáis sitio. Así, con el alma limpia, es mucho más fácil vivireste recogimiento.

Esos son los pasos que debéis seguir. ¡He ahí el camino! ¡Adelante, apóstoles deMaría!

SEMANA TERCERA DEL TIEMPO DE CUARESMALunes, día 5 de marzo de 2018

“Ningún profeta es bien recibido en su tierra”

Evangelio Lc 4,24-30. Queridos hijos, en el Evangelio de hoy, el Señor comienza conestas palabras: “Os aseguro que ningún profeta es bien recibido en su propia tierra”. Ylos que le escuchaban “se pusieron furiosos” y lo llevaron fuera del pueblo para tirarlopor un barranco. Pero Él, que infundía autoridad, “se abrió paso entre ellos, y se fue”.

El Señor no fue bien recibido en Nazaret. Sus palabras y su ejemplo hacía quequienes le escuchaban, se diesen cuenta del tipo de vida que llevaban, la cual noquerían cambiar. Por eso le rechazaban y querían matarlo, para no escucharle más. ElSeñor denuncia y condena su actitud, les dice la verdad para remover sus almas; perosus corazones, más duros que la piedra, deciden aniquilarlo.

Esto mismo, muchas veces, os puede pasar a vosotros: sentís la fuerza de Dios quehabita en vuestro corazón, y deseáis que quienes os rodean, quien os conoce, participede todo lo que vais recibiendo; de esa “luz” que está haciendo cambiar vuestra vida yque dejen ya de importaros las pompas del mundo, porque queréis llenaros de Dios.

Este tipo de vida provoca rechazo en muchas personas, que se apartan de vosotros,os critican, os juzgan y desean que no les habléis, que os alejéis… Por eso os dice elSeñor: “Ningún profeta es bien recibido en su tierra”. Es una purificación más, es algoque cuesta vivir y asimilar; pero, es algo que podéis ofrecer por sus almas, ydemostrarles con el ejemplo, que al formar el Señor parte de vuestra vida, os ocupáis

125

Page 126: DE LA MANO DE MARÍA · 2018-12-28 · El Señor está allí, sentado en aquella orilla, junto a la lumbre, esperando a sus hijos, para que se le acerquen y, movidos por el amor,

de ellos, les dais cariño, os interesáis por sus cosas, vivís con esa paz y ese recogimientoque sólo pueden brotar cuando se está muy cerca del Señor; e irradiáis luz y felicidad.

Seguís teniendo problemas y preocupaciones, pero los lleváis con el Señor. Éste es elejemplo que debéis dar. Y que os vean seguros en éste camino, sin preocuparos del quédirán o pensarán.

“Quien a Dios tiene nada le falta, solo Dios basta”.

SEMANA TERCERA DEL TIEMPO DE CUARESMAMartes, día 6 de marzo de 2018

El perdón de las ofensas

Evangelio Mt 18,21-35. Queridos hijos, hoy el Señor, en este Evangelio, os habla delperdón: “Señor, ¿cuántas veces he de perdonar a mi hermano si me ofende? ¿Hastasiete veces? Jesús le contestó: No te digo siete veces, sino setenta veces siete”.

Esta es una cifra simbólica. Con ella, el Señor os quiere decir que el perdón ha depracticarse siempre. Una persona que no es capaz de perdonar a su hermano,encontrará en su propia soberbia la raíz de la omisión del perdón; estará en creer quesiempre tiene razón al pensar mal del hermano, en juzgar sus actitudes falsamente.

Detrás de todo esto hay mucho orgullo y egoísmo. El vivir sin perdonar, sin olvidarlas ofensas recibidas; el llevar esa losa en el corazón, produce barreras que hacen queesa persona, mientras mantenga el rencor dentro de sí, no pueda practicar la caridad,ni pueda sentir ese amor profundo por cualquier hermano, ya que ha cerrado laspuertas de su corazón al auténtico amor.

Esa persona intentará y querrá amar a otros, pero no sabrá, ni podrá; porque en elfondo, alberga una gran dosis de soberbia, que le impide querer perdonar y aprender aello.

El perdón requiere el absoluto olvido de la ofensa recibida; requiere muchas vecesdel acercamiento hacia esa persona, para demostrarle que, a pesar de todo, se laquiere. Si la otra persona ya no acepta nada y se retira, lo único que queda por hacer,es rezar por ella, para que en su corazón no habite el rencor.

Pensad: ¡cuántas veces el Señor os ha perdonado a vosotros tantas ofensas! Ymuchas de ellas graves. Por lo tanto, no tenéis derecho a negar el perdón, como hizo elsiervo de la parábola que fue perdonado, pero él fue incapaz de perdonar.

Hijos, ¡abrid vuestro corazón y arrancad las ataduras del rencor y la falta de perdón!“Perdonad y seréis perdonados”.

SEMANA TERCERA DEL TIEMPO DE CUARESMAViernes, día 9 de marzo de 2018

El primer mandamiento

Evangelio Mc 12,28b-34: Queridos hijos, palabras profundas y autenticas son las quehoy os transmite el Señor en el Evangelio: “El Señor, nuestro Dios, es el único Señor:amarás al Señor, tu Dios, con todo tu corazón, con toda tu alma, con toda tu mente ycon todas tus fuerzas”. Y “Amarás a tu prójimo como a ti mismo”.

126

Page 127: DE LA MANO DE MARÍA · 2018-12-28 · El Señor está allí, sentado en aquella orilla, junto a la lumbre, esperando a sus hijos, para que se le acerquen y, movidos por el amor,

Aquí queda resumida toda vuestra vida espiritual, todo lo que el Señor quiere devosotros, toda su Voluntad Divina.

El amor que el Señor espera de vosotros no son pequeñas parcelas de vuestra vida;¡lo quiere todo! No pueden existir en vuestra vida áreas reservadas exclusivamentepara vosotros, donde el Señor no tenga entrada. Él espera de vosotros que le améis“con todo el corazón”, es decir, todos vuestros sentimientos y afectos, con el cariñoque tenéis a otras personas, todo encaminado hacia el Señor, y todo a través de Él.Cuando penséis en vosotros mismos, meted al Señor ahí, para que ese pensamientoquede transformado en un olvido de sí y una apertura hacia Él.

“Con toda tu alma”: ese hilo conductor por el que os unís a Dios. Son todos esosmomentos en que estáis con Él, que le recibís, que le notáis tan cerca. Allí se debemanifestar ese amor que le profesáis; cada oración bien pensada, sin prisas; cada Misabien preparada, con absoluto respeto y recogimiento, sabiendo a “Quien” recibís.

“Con toda tu mente y con todas tus fuerzas”: vuestra mente, vuestrospensamientos y razonamientos, sea el Señor dueño de ellos.

Y después “La Caridad”: amor a los hermanos, por encima de todas vuestraspreocupaciones y de vosotros mismos.

El amor, hijos míos, el amor que le debéis; ese que tanto os cuesta dar, porquemuchas veces lo fundáis en palabras pero no en obras. El amor de María Magdalena,del apóstol Juan; ese amor callado, fiel, perseverante, sin condiciones, profundo, leal,noble, delicado, buscando cada detalle… Amad para aprender a amar.

SEMANA TERCERA DEL TIEMPO DE CUARESMASábado, día 10 de marzo de 2018

Parábola del fariseo y el publicano

Evangelio Lc 18,9-14. Queridos hijos, hoy el Evangelio os habla de un fariseo y unrecaudador de impuestos, que se acercaron al templo a orar; uno se ensalzaba, el otrose humillaba. Por eso, a uno, al recaudador de impuestos, sus pecados le fueronperdonados; al otro no. Porque Dios humillará al que se ensalce a sí mismo, peroensalzará al que se humille a sí mismo. Esto es lo más importante para preparar unaauténtica confesión: la humildad.

Todos cometéis muchos pecados, que traen, para vosotros y para otros, susconsecuencias. Pero el alma debe verse tal cual es, sin miedo, con la valentía dereconocer lo que hizo o dejó de hacer. De esta manera, se dará cuenta del barro delque está hecha; reconocerá que nada vale, que nada tiene que no le haya sido dado,que si es algo en la vida no es mérito suyo.

Hijos míos, ¡humildad!. Cuántas veces os hablo de esta gran virtud. Porque,solamente a través de ella el alma purifica la intención, abre sus puertas al Amor queDios quiere introducir en su alma, se fortalece su voluntad, se abre a las demásvirtudes y es llevado a un auténtico arrepentimiento.

Cada vez que acudáis al sacramento de la Confesión, decidlo todo, no os guardéisnada en vuestro interior. Negarse a pasar un rato de vergüenza ya es falta de humildad,porque, en el fondo, no os gusta quedar mal. Pero ¿no os dais cuenta que es el mismoCristo quien está escuchándoos? ¡Es Él, representado en cada sacerdote! Es Él mismoquien os escucha, os comprende y os perdona. ¡No os dejéis llevar por el enemigo!Que lo único que desea es vuestra perdición.

127

Page 128: DE LA MANO DE MARÍA · 2018-12-28 · El Señor está allí, sentado en aquella orilla, junto a la lumbre, esperando a sus hijos, para que se le acerquen y, movidos por el amor,

Humildad, hijos míos, en todos vuestros actos. Pedid esta virtud para seguiravanzando en vuestra vida interior.

DOMINGO CUARTO DE CUARESMADía 11 de marzo de 2018

Cristo: Luz del mundo

Evangelio Jn 3,14-21. Queridos hijos, el Evangelio de hoy os dice cómo Dios entregó asu Hijo para salvaros, “para que todo el que crea en Él tenga la vida eterna”.

Él vino como Luz del mundo, pero muchos hombres tapan sus ojos a esa Luz, loscierran, se apartan… Él desea que desaparezca esa oscuridad en la que viven inmersosy que provoca ese vacío, esa infelicidad, ese buscar todo tipo de compensaciones enlas cosas que ofrece el mundo. Vivir en esas tinieblas ya es un infierno. El hombre sesiente así insatisfecho, desorientado, vacío, intolerante. Busca y busca ese “algo” quesacie su sed de felicidad y de paz; pero no lo encuentra, porque sigue buscando lasolución en sí mismo, y ahí lo único que va a encontrar es soberbia, egoísmo, falta deamor.. falta de tantas virtudes.

Cada uno de vosotros ya sabe cuál es el camino que debe seguir; ¿por qué a vecesos resistís tanto? Esa luz se presenta todos los días para alumbrar cada momento deldía; esa luz quiere iluminar vuestro entendimiento, todas vuestras acciones, vuestravoluntad, cada paso que deis. ¿Cuántas veces os encontráis como perdidos en unbosque oscuro, sin tan siquiera ver lo que os rodea? Porque al no hacer un examen deconciencia profundo, no conseguís ver el “por qué” de vuestra conducta. A veces se osencienden pequeñas lucecitas, con una luz tenue, que son esos pequeños propósitosde mejora, pero que no alumbran lo suficiente para ver el camino.

Para tener esa luz hay que pararse al final del día, para ver qué cosas se hicieronbien, las que aún faltan por hacer, y las que se hicieron mal y por qué. Esa es la luzpotente que iluminará vuestro interior como si de un faro se tratara y os ayudará aencontrar el camino perdido.

¡Buscad la luz! Esa Luz que es Dios, y que será el que inspire vuestras acciones y osindique el camino.

SEMANA CUARTA DEL TIEMPO DE CUARESMAMartes, día 13 de marzo de 2018

Curación de un paralítico en sábado

Evangelio Jn 5, 1-3.5-16. Queridos hijos: el Evangelio de hoy os relata la curación de unhombre, que llevaba muchos años enfermo y no había conseguido sanar. El Señor ledijo que se levantara, le curó, y después le dijo que se fuera; también le instó a que nopecase más.

El Señor llegó a aquella piscina llena de enfermos. Va buscando al pecador, alenfermo de cuerpo y de alma. Y ¿por qué se acerca a este hombre y no a otro? Porquetiene misericordia de él; llevaba muchos años esperando curarse, y perseveraba en elintento.

128

Page 129: DE LA MANO DE MARÍA · 2018-12-28 · El Señor está allí, sentado en aquella orilla, junto a la lumbre, esperando a sus hijos, para que se le acerquen y, movidos por el amor,

Esa fe en su curación, esa perseverancia, esa paciencia… hizo que el Señor seacercara a él y lo curase. Pero el Señor no levantó al enfermo, sino que le dijo que selevantara, que lo hiciera él solo. Así el enfermo sabrá valorar lo que después ocurrió. Setuvo que esforzar y tener fe en las palabras de Señor: confió plenamente, y se levantó ycomenzó a andar.

Hijos, muchas veces vuestros pecados hacen que os encontréis paralizados y sinpoder andar. El alma está como aletargada, dormida, y desea salir de esa situación;pero no puede, porque quiere hacerlo sola, y no tiene ni las fuerzas ni la gracia parapoder hacerlo. Por eso, hay que acudir al Señor, a la “Fuente de la Gracia” parasumergiros en esa “Fuente de Agua Viva”, en esa piscina sanadora, donde el Señor, consu misericordia y mediante vuestro arrepentimiento, os da la posibilidad de sanar, dequedar limpios, de poder andar para darle gloria a Él.

SEMANA CUARTA DEL TIEMPO DE CUARESMAViernes, día 16 de marzo de 2018

Jesús en Jerusalén durante la fiesta de los Tabernáculos

Evangelio Jn 7,1-2.10.25-30. Queridos hijos: nos dice el Evangelio de hoy que “Jesúsrecorría Galilea, pues no quería andar por Judea porque los judíos trataban dematarlo”. Pero subió a Jerusalén de incógnito y siguió enseñando abiertamente; nodesaprovechaba la ocasión de hacerlo. Y decía:“Yo no he venido por mi propia cuenta,sino que he sido enviado por Aquél que es veraz y a quien vosotros no conocéis; Yo sí loconozco porque de Él vengo y es Él quien me ha enviado”. El Señor no tenía miedo, daba la cara; había sido enviado para una misión: salvar alhombre, redimirlo. No teme por su vida, sabe que aún no ha llegado su hora y prosigueadoctrinando. Aquellos que le escuchaban estaban nerviosos, y se hacían preguntas. Sucorazón debía estar preparado para que esas enseñanzas calaran en su interior; pero,en esas almas había tantas barreras, que en Jesús veían un simple hombre al quemuchos deseaban matar.

Lo mismo pasa en los momentos que estáis viviendo actualmente. Él se encuentrapresente en cada uno de vosotros de una manera real y única. Él ha cumplido sumisión, pero no abandona jamás al hombre, dándole la oportunidad de encontrarsecon Él e ir cambiando su vida. Todas estas cosas, hijos míos, os las he dicho muchasveces, pero el corazón humano es olvidadizo, y hay que repetirlas una y otra vez.

Toda alma tiene la oportunidad, a lo largo de su vida, de buscar, encontrar yaprender a amar a Dios; forma parte de su libertad el hacerlo o no. Él siempre vahaciéndose el encontradizo. No deja pasar un día sin que, de alguna manera, sepresente ante el hombre, le llame, le de oportunidades para cambiar. Pero, a veces¡estáis tan ciegos! que no le reconocéis cuando Él se presenta.

Él fue enviado a vosotros y se encuentra entre vosotros, ¿vais a seguir ignorándole?¿Todavía quedan cosas que queréis vivir a vuestra manera? No hijos míos, ¡dádselotodo! Obedeced y no os quedéis con nada. De no ser así, nunca desaparecerá esabarrera que existe entre el alma y Dios.

129

Page 130: DE LA MANO DE MARÍA · 2018-12-28 · El Señor está allí, sentado en aquella orilla, junto a la lumbre, esperando a sus hijos, para que se le acerquen y, movidos por el amor,

SEMANA CUARTA DEL TIEMPO DE CUARESMASábado, día 17 de marzo de 2018

División a causa de Jesús

Evangelio Jn 7,40-53. Queridos hijos, el Señor, en este Evangelio, muestra cómo suspalabras fueron motivo de discordia; unos estaban a favor, otros en contra, y otros semostraban indiferentes. Ésa es la reacción humana ante las palabras del Señor: cadauno, cada alma, reacciona de diferente manera; y esta diferencia se debe al grado deamor que siente el alma hacia su Señor. Lo mismo sucedió al pie de la Cruz, cuando le crucificaron en el monte Calvario. Élpermanecía allí, en lo alto del madero, con sus brazos abiertos, acogiendo a todos loshombres. Todo su Cuerpo era una llaga, cubierto de sangre y en total soledad. Miraba acada uno de los que se acercaban allí, uno por uno; como os mira a cada uno devosotros, de forma única, para introducirse en cada alma. Llega entonces el momento en que os pregunta:

“¿Y tú, hijo mío, quien soy Yo para ti? ¿Quieres que forme parte de tu vida?” Podéis ser como los soldados, ajenos a todo sufrimiento, que sólo cumplían

órdenes, pero que se ensañaron con Él por el odio que albergaba en su corazón. Podéisser como los fariseos y los judíos, que pidieron su condena; hipócritas, sepulcrosblanqueados, que sólo seguían la ley humana y se olvidaban de lo más importante:amar. Podéis ser como sus discípulos, que huyeron por miedo y cobardía, y en suinterior albergaban dudas. O como todos aquellos indiferentes que se acercaban a laCruz, pero, ignoraban lo que contenía, porque estaban cómodos con la vida mundanaque llevaban.

Por el contrario, podéis ser como Juan, su discípulo amado, o como MaríaMagdalena, o como las santas mujeres, que le acompañaron en todo momento por elamor que sentían en su corazón

El Señor se presenta al hombre, y el hombre elige: toma un camino con o sin elSeñor. Él os llama desde el madero. ¡Uníos al Amor, refugiaos en su Santísima Sangre,acompañadle en su soledad, en su dolor!

Y entonces, desde aquel lugar, debajo de esa Cruz bendita, Yo vuelvo a preguntar avuestro corazón: “Hijo mío, ¿quién es Jesús para ti?”

Piénsalo. Lleva esta pregunta a cada momento de tu día, en las diferentescircunstancias que has de vivir; en ese momento, en esa circunstancia: ¿Quien es elSeñor para ti?

DOMINGO QUINTO DE CUARESMADía 18 de marzo de 2018

“Si el grano de trigo no muere queda infecundo”

Evangelio Jn 12,20-33. Queridos hijos, maravillosas palabras las que os transmite elSeñor en este Evangelio: “En verdad, en verdad os digo, que si el grano en trigo no caeen tierra y muere, queda infecundo; pero si muere, producirá fruto abundante. Él queama su vida la perderá, y el que aborrece su vida en este mundo, la guardará para lavida eterna”.

130

Page 131: DE LA MANO DE MARÍA · 2018-12-28 · El Señor está allí, sentado en aquella orilla, junto a la lumbre, esperando a sus hijos, para que se le acerquen y, movidos por el amor,

Un grano de trigo bien poca cosa es; tan sólo un grano pequeño, igual a muchosotros; y si al esparcir la semilla el sembrador, cae ese grano en tierra infértil, con eltiempo se acaba secando y ya no sirve para nada. Él fue, también, producto de otrograno que dio fruto, desarrollándose la espiga, que a su vez contenía varios granos.

Este grano es vuestra alma; debéis prepararla para que, cuando el Señor la depositeen la tierra, que es el mundo, ese grano busque el alimento para no secarse y morir;ese alimento viene a través de la oración, de los sacramentos, del amor que ponéis encada cosa, de la caridad practicada con vuestros hermanos. Ese grano entonces, poco apoco, va desprendiéndose de lo que le recubría, lo que es suyo, y va saliendo todo loque contiene en su interior, para que al unirse con la tierra, que ya ha sido fertilizadacon todo ese amor a Dios, dicho grano vaya poco a poco germinando, uniéndose a esatierra fértil, formando un todo y haciendo que de esa semilla vaya brotando unapequeña planta, producto de esa unión con Dios.

Esa planta seguirá creciendo vigorosa, hasta convertirse en espiga fuerte, que a suvez contiene más semillas. Son los frutos, ¡son el resultado del amor! que no vive parasí mismo, para ser semilla única, sino para que a través de él y con el amor de Diosnazcan nuevas semillas, cuya función será dar gloria a Dios.

¡Dejaos hacer!¡Morid a vuestro “yo”! para así germinar y cumplir la misión que Diosos encomendó, como hijos suyos que sois.

SEMANA QUINTA DEL TIEMPO DE CUARESMAMartes, día 20 de marzo de 2018

Jesús, el Enviado del Padre

Evangelio Jn 8,21.23b-30. Queridos hijos, hoy el Señor, en el Evangelio, os transmiteestas palabras: “Vosotros pertenecéis a este mundo, Yo no. Por eso os he dicho quemoriréis en vuestro pecado: porque, si no creéis que Yo soy, moriréis en vuestrospecados”.

Con estas palabras el Señor os habla muy claramente. Nacisteis en este mundo, queel Señor hizo para vosotros; recibisteis el Bautismo y ya nacisteis para el espíritu;recibisteis la condición de hijos de Dios. El mundo al que pertenecéis, es unaoportunidad que Dios os da para darle gloria. En él vivís durante unos años, los queDios quiere; y esos años podéis perderlos o no, sólo depende de vosotros, de ladecisión que queráis tomar.

Él no es de este mundo; vivió en él por vosotros; padeció y dio su vida para salvaros.Todo aquel que no cree en el Señor, que su vida no la dedica a Él, muere en el pecado;pierde aquella vida para la que ha sido creado, y se deja envolver por lo que el mundole ofrece, viviendo para sí mismo, sin ofrecer nada más.

¿Qué vale una vida si en ella no cabe Dios? ¡Cuántas oportunidades se os presentana lo largo del día, para que todo quede iluminado bajo la Luz del Señor! Cuándo seréiscapaces de dejar tanta comodidad, caprichos, tanto estar pendientes de vuestrossentimientos y de cómo os encontráis…

El Señor os dice: “Hijo mío, soy Yo, ¿no me reconoces? ¿Qué es lo que ocupa tucorazón para no darte cuenta que estoy a tu lado? ¿Cuántas cosas te quedan aún pordarme? ¿Por qué te apegas a ellas tanto? Soy Yo, que he venido a buscarte, que teencontré por el camino y te invito a que me sigas. Deja todo obstáculo que no te

131

Page 132: DE LA MANO DE MARÍA · 2018-12-28 · El Señor está allí, sentado en aquella orilla, junto a la lumbre, esperando a sus hijos, para que se le acerquen y, movidos por el amor,

permita andar, o hace que tu paso sea lento y dudoso. ¡Lánzate y confía, no miresatrás! Y con la seguridad de un hijo de Dios, acompáñame en el camino”.

SEMANA QUINTA DEL TIEMPO DE CUARESMAMiércoles, día 21 de marzo de 2018

“La Verdad os hará libres”

Evangelio Jn 8,31-42. Queridos hijos, con estas palabras del Evangelio de hoy, el Señoros transmite una gran enseñanza: “Si permanecéis en mi palabra, seréis en verdaddiscípulos míos; conoceréis la verdad, y la verdad os hará libres”. Palabras profundas que deben calar en vuestro interior. Pero no sólo son palabras.Es una conducta, un camino: el camino de perfección en el que el alma va dándosecuenta de todas las “raposas” que anidan en su corazón, y hacen que se aleje de Dios.

Es el camino de la fidelidad, que mantiene el alma despierta, alerta… para nodejarse llevar por las insinuaciones del enemigo. Fieles a su mensaje, a sus enseñanzas,a su ejemplo de vida, que marca la vuestra.

Todas sus enseñanzas os encaminan y os llevan a un mismo fin, a una misma meta:al Amor. De esta manera, siguiendo cada palabra, cada mensaje, y haciéndolo vida envosotros, seréis sus discípulos. Esto no lo enseñó sólo para unos pocos, para un grupode personas que vivió en una determinada época, no. En estos momentos os lo dice avosotros y al resto de la humanidad. No son palabras caducas, son actuales, son¡palabras vivas! Con ellas conocéis la verdad, ya que la verdad solo es una: SU VERDAD,con mayúscula; no existen más verdades. Cada hombre se fabrica la suya propia, a sumedida, según su capricho; y la defiende por encima de cualquier cosa. Pero como es“su verdad” y no la Verdad, esa verdad oprime, no le deja volar y elevarse; crea suspropias situaciones angustiosas, llenas de problemas y que muchas veces no tienensalida. La Verdad que el Señor enseña es la única que hace al hombre libre, libre de lasataduras del pecado, libre para amar y ser amado.

Cuando se ama, el corazón se ensancha, respira oxigeno puro, abre sus brazos paraconsolar al hermano y tiene alas para volar muy alto… ¡se goza en el amor!

Hijos, ¡fidelidad al Señor! Así conoceréis la auténtica verdad: La Verdad que os hará libres.

SEMANA QUINTA DEL TIEMPO DE CUARESMAViernes, día 23 de marzo de 2018

Cristo, signo de contradicción

Evangelio Jn 10,31-42. Queridos hijos, en el Evangelio de hoy, al Señor le acusan dehaber blasfemado, y le querían apedrear, ya que Él dijo: “Muchas obras buenas hehecho ante vosotros en virtud del poder de mi Padre: ¿por cuál de ellas queréisapedrearme?” Aquellos hombres no aceptaban oír sus palabras ni sus hechos,corazones cerrados ante la gracia.

Él, por donde iba y pasaba, sólo hacía el bien. Se cruzaban ante Él multitud depersonas, entre ellas: María Magdalena, Zaqueo, Bartimeo, Casio Longinos, Herodes,

132

Page 133: DE LA MANO DE MARÍA · 2018-12-28 · El Señor está allí, sentado en aquella orilla, junto a la lumbre, esperando a sus hijos, para que se le acerquen y, movidos por el amor,

Caifás, José de Arimatea, la Verónica, el Cirineo, y muchos más. Todos ellos vieron susmilagros, o supieron de la existencia de ellos. Y se encontraron con la “mirada profundadel Señor” que quería llegar hasta el fondo de su corazón. ¡Qué distintas lasrespuestas de estos hombres! Varios se convirtieron; otros le rechazaron. Es el corazónhumano, que en unos casos se llena de soberbia, vive en el pecado, pero se arrepientede él, y en otros no. ¡Que diferente final tuvieron todos ellos! A unos les esperaba elCielo; a otros una vida sin sentido, llena de tristeza y sin horizonte.

Todos estos hombres tuvieron un encuentro con el Señor. Él se presentó en su vida,igual que lo hace con cada uno de vosotros. Y como aquellas almas fieles que lesiguieron, vuestra vida puede estar repleta y llena de aquél mismo amor que inundabael corazón de María Magdalena; podéis acompañarle y ayudarle a llevar la Cruz, comoel Cirineo; pedirle que veáis como Bartimeo; aprovechar la oportunidad de poder verlecomo Zaqueo; limpiar su Rostro, sin respetos humanos, como la Verónica; y dejarseempapar por su Gracia, como Longinos. Para algunos fue un verdadero escándalo lavida y enseñanzas del Señor; para otros, empezar de cero, acogiendo todo lo que elSeñor les daba.

¡Hijos míos! Que vuestra vida sea un ejemplo, que con vuestra actitud llevéis lasalmas a Cristo. ¡Dejaos hacer! ¡No opongáis resistencia, almas de Cristo, Apóstoles deMaría!

SEMANA QUINTA DEL TIEMPO DE CUARESMASábado, día 24 de marzo de 2018

El Sanedrín decreta la muerte de Jesús

Evangelio Jn 11,45-54. Queridos hijos, en este Evangelio se explica la verdadera causade la condena de Jesús. Los fariseos, los jefes de los sacerdotes, pensaron que debíamorir el Señor, antes que los romanos destruyeran el templo y la nación entera; yaentonces, su única meta era conseguir matarlo y utilizan todos los medios.

Durante aquellos días, el Señor se fue a otra región, cerca del desierto, porque aúnno era su hora y debía seguir enseñando. El Señor eligió el pueblo judío para nacer,vivir, amar y morir. Y aunque encontró almas que le apoyaban, también encontrómucho odio e indiferencia. Ellos no le aceptaban como el Mesías, porque querían unohecho a su medida, a su gusto, a su manera de entender las cosas…

Cuando vosotros oís el Evangelio, la Palabra de Dios, éstas palabras pueden serrecibidas con indiferencia; pueden interpretarse a vuestro modo y manera; pueden,incluso, ser escuchadas, y no llegar a entenderse o no ser interiorizadas; o no seraplicadas a vuestra vida. Entonces, como aquellos judíos, estáis fabricando un Mesíassegún vuestro gusto. De esta manera, en vuestra vida no entrará el sacrificio, laentrega; os quedaréis en lo más superficial, sin ahondar en el por qué de los actos querealizáis a lo largo del día; buscaréis la comodidad, el quedar bien, que nadie molestevuestras costumbres; el buscar el sacrificio, pero solamente en cosas muy pequeñas ysin poner allí el corazón; el darse, pero sin comprometerse; el poner más esfuerzo entodo lo que os cause gusto y placer. Así la Cruz queda prácticamente olvidada; ycuando de verdad llega esa Cruz, entonces el alma se desespera y no la acepta. Allí noexiste el Crucificado, porque el alma no quiere mirarlo, no quiere acercarse a Él paraque le redima, y entonces se retrae y huye. El Señor incomodaba a aquellos hombres,porque hablaba a sus conciencias, como lo hace a las vuestras:

133

Page 134: DE LA MANO DE MARÍA · 2018-12-28 · El Señor está allí, sentado en aquella orilla, junto a la lumbre, esperando a sus hijos, para que se le acerquen y, movidos por el amor,

Hijos míos, ¿deseáis realmente amar la Cruz? ¿Deseáis acompañarme en mi dolor? ¡Acercaos, abrazadla, pedid perdón, arrepentíos de corazón! Y comenzad de nuevo.

DOMINGO DE RAMOS EN LA PASIÓN DEL SEÑORDía 25 de marzo de 2018

Evangelio Mc 14,1-15,47. Queridos hijos, hoy en la Santa Misa del Domingo de Ramos,escucháis el relato de la Pasión del Señor; dentro de ella se van viendo escenas muyimportantes: En primer lugar, cómo María Magdalena, con ese frasco de perfume quederramó sobre Él, le preparó “para la sepultura”, con ese amor que ella ponía en todolo referido al Señor. Luego, la institución de la Eucaristía y del Sacerdocio; Getsemaní; elprendimiento; las negaciones de Pedro; Pilatos; la crucifixión y muerte del Señor; traslo cual fue sepultado para resucitar al tercer día. Cada parte tiene una gran importanciay enseñanza.

El Señor se prepara con esa oración intensa y llena de amor por los hombres.¡Acudid a la oración! Es donde encontrará paz vuestra alma, y recibiréis la fuerza y laluz para continuar el camino.

Al Señor le esperaban grandes padecimientos, y su alma se debía preparar. Allí, enGetsemaní, contempló todos los pecados, pero a su vez lo asumió todo con Amor. SuCuerpo bendito no era ya capaz de soportarlo, pero recibió la ayuda necesaria paravencer la tentación.

¡Cuántas veces os pasa también a vosotros, que todo os desborda! Y parece que elmundo se os viene encima; como siempre os digo, es el momento de dárselo a Él. Éltiene esa fuerza; Él recoge vuestras plegarias, las hace suyas y se las lleva a la Cruz, ¡labendita Cruz, que todo lo purifica y lo limpia! Cuando veáis esa Cruz, tenéis que ver elAmor que se ha derramado a través de ella. Ése es el “misterio” que muchas veces elhombre no comprende, porque le invade el egoísmo y le ceguera.

Toda la Pasión es un cúmulo de gracias, para cualquier alma que se acerque a ellacon el corazón desasido del propio “yo”. Es la cátedra de la enseñanza sobre el Amor.Es el dolor, la angustia, el llanto, la soledad, el abandono, hecho AMOR. Y ese Amorlleva a la fidelidad, a la esperanza, a la caridad, a la humildad, y a todas las demásvirtudes.

¡Preparad vuestra alma para recibirle, amados hijos de la Santísima Cruz de santoToribio de Liébana! Levantaos, id a Él, abandonaos en su Corazón. Y ¡adelante porCristo con María!

LUNES SANTODía 26 de marzo de 2018

Evangelio Jn 12,1-11. Queridos hijos, en esta escena, el Señor va a casa de Lázaro. Allídescansa con sus amigos. Allí es donde María Magdalena le unge con su perfume, muycaro. Él deja que lo haga, a pesar de las protestas de Judas y de las miradas de susdiscípulos. Ella no tiene respetos humanos, y es el amor lo que la mueve a realizar estaacción.

134

Page 135: DE LA MANO DE MARÍA · 2018-12-28 · El Señor está allí, sentado en aquella orilla, junto a la lumbre, esperando a sus hijos, para que se le acerquen y, movidos por el amor,

Ella gasta mucho dinero en ese perfume. Pero no lo malgasta; se lo derrama porentero al Señor; le da lo mejor que tiene: ese perfume acompañado de su amor.

Al Señor no se le puede tratar de cualquier manera. ¡Hay que darle lo mejor quetenéis! Si hacéis oración, no busquéis los momentos que os sobran, que estáis máscansados, sino cuando os cueste sacrificio. Al empezar la mañana es uno de losmejores momentos. Eso requiere el sacrificio de levantarse temprano, muchas vecesdespués de haber pasado una mala noche. Pero si ya el día se comienza con eseencuentro con el Señor, será más fácil que sintáis su presencia, que trabajéisofreciéndoselo todo a Él, que el trato con vuestros hermanos vaya acompañado decariño y caridad.

Es ese caro perfume de gran valor, que aromatiza todo el día con la presencia deDios, y que por donde quiera que se derrame, todo queda impregnado de su aroma.

A Él le preparó “para el día de su sepultura” y para después resucitar. A vosotros osprepara para amar la Cruz, y transformaros a través de ella.

¡El perfume del amor que todo lo impregna! que llega a todos los corazones, quehace agradable todo lo que toca y que siempre queda, aún con el paso del tiempo.Fragancia pura, limpia, envolvente, que atrae a todo el que se acerca: es el amor quetodo lo puede, que llega a todos los corazones, que taladra hasta las almas maspetrificadas por el odio.

Hijos míos, ¡amad! ¡amad con todo el amor que sepa dar vuestro corazón!

MARTES SANTODía 27 de marzo de 2018

Evangelio Jn 13,21-31ª.36-38. Queridos hijos: en este Evangelio se narra cómo, ante losdiscípulos, el Señor, que ya conocía el corazón de Judas, quiso aún darle la oportunidadde enmendar su mal. Pero su corazón permanecía duro, la soberbia lo embargaba; yaunque recibió el Santo Alimento, que con su arrepentimiento le habría transformado,no ocurrió así; él quiso permanecer en el estado en que se encontraba, queríaproseguir el mal que había empezado. Y al tomar el Cuerpo y la Sangre del Señor, alrecibir la Santa Comunión, el maligno entró dentro de él, porque él no quiso salir deesa situación.

Era un alma compleja. El Señor le atraía, y él le seguía; pero deseaba hacer las cosasa su modo. En el fondo no llegaba a entenderle, ni deseaba aprender de Él; se dejaballevar por sus propios juicios y pensamientos. Llevaba una doble vida. Estaba junto alSeñor, pero le engañaba, le robaba, era un hipócrita. Todo esto, día a día, fueendureciendo su corazón; y ya le resultaba imposible “ver” al Señor y aprender de Él.

Por otro lado se encontraba Pedro: hombre fogoso, de genio vivo, espontáneo, quetodo lo decía, pero que se quedaba en la superficie de las cosas. Él quería ir con elSeñor, pero no interiorizaba lo que el Señor quería transmitirles, y por eso le dice:“Señor, ¿por qué no puedo acompañarte ahora? Estoy dispuesto a dar mi vida por ti”. YJesús le responde: “¿De modo que estas dispuesto a dar tu vida por Mí? Te aseguro queantes que el gallo cante me habrás negado tres veces”. Y así fue. Pedro no se conocíabien; no había profundizado en el conocimiento de sí mismo: de sus miedos ycobardías, de su falta de fortaleza, y en el fondo, de su egoísmo.

Aquí os encontráis dos ejemplos de los que brota una enseñanza que podéis aplicaren vuestra vida. Para seguir al Señor ¡nunca os dejéis llevar por la hipocresía y la doble

135

Page 136: DE LA MANO DE MARÍA · 2018-12-28 · El Señor está allí, sentado en aquella orilla, junto a la lumbre, esperando a sus hijos, para que se le acerquen y, movidos por el amor,

vida! O se le sigue o se huye de Él. ¡Sed sinceros! Ved la realidad de lo que hay envuestro interior y luchad para desarraigar todo lo que os separe de Él.

Y Pedro terminó bien, por su gran arrepentimiento y porque se dejó hacer.¡Aprended hijos! El Señor siempre espera vuestra respuesta, que ha de ser sincera yllena de humildad.

MIERCOLES SANTODía 28 de marzo de 2018

Evangelio Mt 26,14-25. Queridos hijos, en este Evangelio se narra la traición de Judas;treinta monedas de plata fue lo que se pagó por el Señor. Él lo sabía, por eso dice: “Mihora está cerca”. Llegó el momento de la Santísima Cena, y Jesús anunció que uno delos Doce le iba a traicionar. Todos ellos se iban preguntando: “¿Seré yo?”. Porquecuando el hombre mira en su interior, dentro de su alma, y se encuentra con la miradadel Señor, experimenta inseguridad al descubrir que por sí solo puede llegar a ser untraidor.

Sin la Gracia de Dios todos podríais haber sido Judas, por muy seguros que estéis devuestra voluntad de amar a Dios. Sois humanos, la carne es frágil y débil, y muchasveces se deja tentar, y entonces caéis en la tentación, en el pecado; y para salir de esasituación se requiere una gran dosis de humildad, para poder pedir perdón y reconocerlas faltas cometidas.

Por eso, nadie debe de estar seguro de sí mismo. ¡Debéis estar siempre alerta! Y vertodo aquello que puede llegar a ofender al Señor, y así poder arrepentiros y ponerremedio con la lucha incesante de cada día. Si no, os puede pasar como a Judas, quevendió al Señor por treinta monedas de plata. Vosotros le podéis vender por unosinstantes de placer, por no obedecer a sus mandatos, por tener la confianza puestasólo en vosotros mismos, por no querer cumplir su Voluntad, sino sólo la vuestra...

Buscad dentro de vuestro corazón si aún quedan pequeñas monedas, que son elprecio de una traición; seguramente sólo serán pequeños céntimos. Pero todo esto hayque verlo a la luz de la oración y haciendo un profundo examen de conciencia.

¡Preparaos para estos días que vais a vivir junto al Señor! Os iré llevando por lasescenas que marcan su Pasión, y así os ayudará a vivirlas con más recogimiento ydevoción.

JUEVES SANTO DE LA CENA DEL SEÑORDía 29 de marzo de 2018

Evangelio Jn 13,1-15. Queridos hijos, hoy es un día muy importante dentro de laIglesia: la institución del Sacramento de la Eucaristía y del Sacerdocio. Dos importantessacramentos; sin ellos, al hombre le sería casi imposible llegar a Dios.

En el Evangelio, el Señor lava los pies a los apóstoles, aunque en su alma estabanlimpios. Pero los pies tocan la tierra y se ensucian con ella, y para recibir al Señor elalma debe estar limpia, purificada, blanca. Por eso, antes de comulgar es tanimportante repetir esas palabras del centurión: “Señor, yo no soy digno de que entresen mi casa, pero una palabra tuya bastará para sanarme”. De esta manera, si queda

136

Page 137: DE LA MANO DE MARÍA · 2018-12-28 · El Señor está allí, sentado en aquella orilla, junto a la lumbre, esperando a sus hijos, para que se le acerquen y, movidos por el amor,

alguna pequeña falta que ensucie su alma, con este acto de humildad se prepara pararecibir al Señor.

Aquélla noche el Señor se encontraba rodeado de sus discípulos, incluso del que leiba a traicionar. Y ellos, en aquella Eucaristía, fueron consagrados como los primerossacerdotes, que ayudarían después a muchas almas a llegar a Dios. Fue un momentograndioso, en el que el Cielo y la tierra se juntaron por mediación de Jesucristo, Sumo yEterno Sacerdote, que se dio como Víctima ofreciendo su Cuerpo y su Sangre: elAlimento Santo que transforma a las almas y las llena de Dios.

Todos sabéis lo que ocurre en cada Eucaristía: el Señor vuelve a ser crucificado, vapasando toda la Pasión, se ofrece como Víctima ante tantos hombres que allí seencuentran.

¡Hijos, poned toda la atención en cada parte del Santo Sacrificio! Todas ellas tienenun significado y una enseñanza. ¡Estáis al pie de la Cruz! Él se os está dando, y anteesta realidad… ¿os quedáis indiferentes? ¿Son tantas las distracciones, que no soiscapaces de adorar a Dios?

El Cielo se abre para vosotros. Allí se encuentran los Ángeles, los santos, los seresqueridos que se salvaron; está presente el clamor de almas del purgatorio quenecesitan de vuestras oraciones…

¡Y allí también me encuentro Yo, sufriendo con mi Hijo! ¡Poned todos los sentidos! Haced un esfuerzo, ofreceos a Dios para que en vosotros

se cumpla su Voluntad. Es el momento de abrazaros a la Cruz y decirle:

“No soy digno. ¡Perdóname! Haz de mi un verdadero discípulo que con mis obras te ame.¡Imprégname con tu Sangre y purifica mi alma!Aquí estoy Señor para hacer Tu Voluntad”.

VIERNES SANTO DE LA PASIÓN DEL SEÑORDía 30 de marzo de 2018

Evangelio Jn 18,1-19,42. Queridos hijos, hoy el Evangelio os vuelve a narrar la Pasióndel Señor, llegando al momento central donde muere Jesús. En lo alto de la Cruz seencuentra desfallecido, no queda en Él carne sana, abofeteado, escupido, despreciado,en total soledad y abandono.

Ese leño de madera con Jesús crucificado es para muchos burla, odio, indiferencia oamor. Cuando expiró miró al cielo, y después “inclinó la cabeza”. En aquel momentopidió misericordia para los hombres; en toda su Pasión lo estuvo haciendo, incluso enlos últimos momentos: con el ladrón arrepentido, Casio Longinos, y tantos...

Pero, mirad hijos: esta escena, sobrecogedora en sí y de una profunda tristeza,tenéis que interiorizarla con el verdadero sentido que tiene: el del Amor. Por eso, antela Cruz, con Cristo muerto, el Cielo se abre y ¡aparece una luz que lo envuelve todo! Esuna luz brillante, clara, potente, que atrae a las almas: ¡Es la luz de Cristo Resucitado! Es la victoria del bien sobre el mal. Es ese halo de esperanza, ya que después delpecado, ante el perdón y el arrepentimiento, llega la luz del Amor. Es el misteriosublime de la Cruz, que solo las almas que la buscan llegan a entenderla.

La Cruz ilumina las almas, abre el entendimiento, fortalece la voluntad, encaminahacia la santidad, y sobre todo, ¡enseña a amar!

137

Page 138: DE LA MANO DE MARÍA · 2018-12-28 · El Señor está allí, sentado en aquella orilla, junto a la lumbre, esperando a sus hijos, para que se le acerquen y, movidos por el amor,

Por eso, hijos míos, pedid esa gracia: AMAR LA CRUZ. ¡Besad los pies del Crucificado, empapaos con su Sangre purificadora, introducíos ensus Llagas gloriosas, bebed de su costado! Y permaneced allí, junto a Mí, acompañándome en su agonía; pero que os lleve alamor. Por eso, ¡no hay tristeza, todo es dicha! Solo llorad por vuestros pecados y por elresto de los hombres, y todo esto os llevará a un propósito sincero: el de uniros alSeñor, para así poder hacer siempre su Divina Voluntad.

SÁBADO SANTO DE LA SEPULTURA DE SEÑORDía 31 de marzo de 2018

Queridos hijos: hoy es un día de espera, en que, tras la muerte del Señor en la Cruz,aguardáis el acontecimiento de la Resurrección.

Muerto el Señor, lo bajaron de la Cruz, y lo colocaron en mis brazos. Con ellos loabracé, besé sus heridas, no dejaba de mirarlo… Su Cuerpo estaba frío, inerte; pero¡desprendía tal paz, serenidad y amor! que mi alma se sintió unidísima a la suya.

Y al tenerlo allí, en mis brazos, ahora os lo muestro, os lo doy, para que vosotrostambién os acerquéis a este lugar, y desasidos de todo, le abracéis, dándole todo elamor que le podáis dar.

¡Hijos míos! desprendeos de vuestro “yo”, y de todas las ataduras de la tierra. Y deesta manera estaréis libres; ya no os pesará todo eso que lleváis encima, y así podréisacercaros a Él, abrazándole y dándole, en ese abrazo, toda vuestra vida.

Después, fue embalsamado y preparado para la sepultura. Allí, en aquel Sepulcro,fue colocado. Y unos Ángeles presidían aquel Santo Sepulcro. Esa tumba albergó elCuerpo del Señor durante unas horas, porque después resucitó. Resucitó para estarpresente en el corazón de todos los hombres.

Hijos míos, su Sepulcro fue la antesala de su Resurrección, porque ese Sepulcrocontenía todo el sacrificio de su Pasión para salvar vuestras almas. Vosotros, encambio, a veces quedáis sepultados por vuestras miserias y pecados, y en ocasiones,no sabéis salir de esa situación, quedando enterrados. Pero Él siempre viene abuscaros, llega al lugar donde os encontráis y remueve la piedra. Y entonces, en esemomento os dice: “Hijos míos, aquí tenéis mi Mano”.

Y como a la hija de Jairo, os dice: “Levántate, hijo mío, levántate, cógete mi Mano; y ahora ¡anda! Ven a Mí, te

ayudaré a desprenderte de todo aquello que te hace separarte de Mí. ¡Sal de tutumba! ¡Ven a la Luz! ¡La Vida te espera! Esa vida que se encuentra en tu interior, y queYo formo parte de ella. ¡Vuelve a la vida, que Yo he resucitado!”.

138

Page 139: DE LA MANO DE MARÍA · 2018-12-28 · El Señor está allí, sentado en aquella orilla, junto a la lumbre, esperando a sus hijos, para que se le acerquen y, movidos por el amor,

ABRIL

DOMINGO DE PASCUA DE LA RESURRECIÓN DEL SEÑORDía 1 de abril de 2018

Evangelio Jn 20,1-9. Queridos hijos: ¡El Señor ha Resucitado, está Vivo! Pasó de lamuerte a la Vida. ¡Es la Luz que se os abre en el horizonte! Esa luz que os atrae hacia Él,que os indica el camino que habéis de recorrer, que os hace ya felices aquí en la tierra.Porque el alma… el alma se llena de esa Luz que todo lo ilumina con su presencia. Esotra dimensión, es otro sentido, es la fuerza del Amor.

A aquel Sepulcro, bien de mañana, acudieron María Magdalena, Juan y Pedro; y seencontraron la tumba vacía, sus paños en el suelo.

Pero el lienzo que cubría su Santa Faz y su Sagrada Cabeza, se encontraba biendoblado, colocado en un lugar apartado. Este paño contenía unas señales muyimportantes: señales de las heridas de su Santísimo Rostro y Cabeza. El Señor queríaque fuera bien conservado, y así es como ocurrió.

Esa tumba, aparentemente vacía, contenía la Fuerza y el Amor que el Señordesprende tras su Muerte y Resurrección. Allí se respira luz, serenidad, abandono,deseos de santidad, amor incondicional por todo ser humano… ¡Dejaos envolver! ¿Veislas marcas de los paños? Contienen todo su sufrimiento, pero han sido transformadospor los rayos del Amor.

Contemplad la escena: ¡es un trocito del Cielo en la tierra! ¡Abrid vuestras almas,hijos míos! Y dejaos inundar por tanto Amor ¡Postraos ante tanta majestad, antesemejante grandeza! ¡Dejaos envolver por su grandiosa Luz! Como si del Tabor setratase.

¡Porque estáis ante Dios, hijos míos! Él os creó, os dio la vida para que toda ellasiguiera un fin: ¡darle gloria!

Que su Santa Faz ilumine vuestra mente; que invada vuestro corazón de amor porÉl; que fortalezca vuestra voluntad para seguir la suya. Cuando el mundo tire devosotros y penséis que ya no podéis seguir, que todo se convierte en tinieblas… ¡acudida este Santo Sepulcro! En donde el Cielo y la tierra se unen para que todo un Dioshabite en vuestra alma. ¡Aprended a amarle, hijos míos! ¡Él os ama!

139

Page 140: DE LA MANO DE MARÍA · 2018-12-28 · El Señor está allí, sentado en aquella orilla, junto a la lumbre, esperando a sus hijos, para que se le acerquen y, movidos por el amor,

INDICE

Págs.

INTRODUCCIÓN …………………………………….…………………........................... 3

ABRIL 2017 ….....………………………………………………………....................... 4

-OCTAVA DE PASCUA-Lunes- La mañana de Pascua de Resurrección (Mt 28,8-15) Miércoles- En el camino de Emaús (Lc 24,13-35) Viernes- Aparición junto al mar de Tiberíades (Jn 21,1-14)

Segunda semana de PascuaMiércoles- Sal de la tierra y luz del mundo (Mt 5,13-16)Viernes- Multiplicación de los panes y de los peces (Jn 6,1-15) Sábado- Acción de Gracias al Padre ( Mt 11,25-30)

MAYO 2017 …............................................................................................... 8

Tercera semana de Pascua Miércoles-“Yo soy el Camino, la Verdad y la Vida” (Jn 14,6-14) Jueves- El Pan de Vida (Jn 6,44-51)

Domingo Cuarto de Pascua- El Buen Pastor y su rebaño (Jn 10,1-10) Quinta semana de Pascua Lunes- Jesús revela al Padre (Jn 14,1-12) Martes- “La paz os dejo, mi paz os doy” (Jn 14,27-31ª) Jueves-“Permaneced en mi amor” (Jn 15,9-11) Viernes- El Mandamiento nuevo (Jn 15,18-21) Sábado- El odio del mundo contra Jesucristo y los suyos (Jn 15,18-21)

Sexta semana de PascuaMartes- La acción del Espíritu Santo (Jn 16,5-11) Solemnidad de la Ascensión del Señor (Mt 28,16-20) Lunes- “Tened valor. Yo he vencido al mundo”(Jn 16,29-33). Martes- Oración sacerdotal de Jesús (Jn 17,1-11ª) Miércoles- Festividad de la Visitación de Nuestra Señora (Lc 1,39-56)

JUNIO 2017 ….............................................................................................. 20

Viernes- La triple negación de Pedro (Jn 21,15-19)

-TIEMPO ORDINARIO-Novena Semana Lunes- Parábola de los viñadores (Mc 12,1-12) Miércoles- La resurrección de los muertos (Mc 12,18-27) Sábado- La ofrenda de la viuda pobre (Mc 12,38-44)

140

Page 141: DE LA MANO DE MARÍA · 2018-12-28 · El Señor está allí, sentado en aquella orilla, junto a la lumbre, esperando a sus hijos, para que se le acerquen y, movidos por el amor,

Décima SemanaLunes- Las Bienaventuranzas (Mt 5,1-12) Martes- Sal de la tierra y luz del mundo (Mt 5,13-16)

Décimo Primera SemanaLunes- Mansedumbre y humildad de corazón (Mt 5,38-42)..Jueves- Modo de hacer la oración (Mt 6,7-15) Viernes- Festividad del Sagrado Corazón de Jesús (Mt 11,25-30)

Décimo Segunda Semana Lunes- No juzgar al prójimo (Mt 7,1-5) Martes- “Entrad por la puerta estrecha” (Mt 7,6.12-14) Jueves- Solemnidad de San Pedro y San Pablo (Mt 16,13-19) Viernes- Curación de un leproso (Mt 8,1-4)

JULIO 2017 …................................................................................................ 31

Sábado- La fe del centurión (Mt 8,5-10)

Décimo Tercera Semana Miércoles- Curación de dos endemoniados (Mt 8,28-34) Jueves- Curación de un paralítico (Mt 9,1-8) Décimo Quinta SemanaLunes- “El que pierda su vida por Mí la encontrará” (Mt 10,34-11,1) Viernes- “Quiero misericordia y no sacrificio” (Mt 12,1-8) .

Domingo Décimo Sexto-Parábola de la cizaña (Mt 13,24-43) . Jueves- San Joaquín y Santa Ana (Mt 13,10-17)

Domingo Décimo Séptimo- Parábola del tesoro escondido y la perla preciosa (Mt 13,44-52)

AGOSTO 2017…............................................................................................ 38

Martes- Jesús ora al Padre (Mt 13,44-46) Sábado- Martirio de San Juan Bautista (Mt 14,1-12)

Domingo Décimo Octavo- La transfiguración del Señor (Mt 17,1-9) Lunes- Multiplicación de los panes y de los peces (Mt 14,13-21) Jueves- El grano de trigo- Morir a sí mismo (Jn 12,24-26) ..

Décimo Novena SemanaJueves- El perdón de las ofensas (Mt 18,21-19.1) Viernes- Matrimonio (Mt 19,3-12) Sábado- Jesús bendice a los niños (Mt 19,13-15)

Domingo Vigésimo- La mujer cananea (Mt 15,21-28) Lunes- El joven rico (Mt 19,16-22) Martes- Recompensa del seguimiento a Jesús (Mt 19,23-30) Miércoles- Parábola de los obreros enviados a la viña (Mt 20,1-16)

141

Page 142: DE LA MANO DE MARÍA · 2018-12-28 · El Señor está allí, sentado en aquella orilla, junto a la lumbre, esperando a sus hijos, para que se le acerquen y, movidos por el amor,

Jueves- Encuentro de Jesús con Natanael (Jn 1,45-51) Viernes- El primer Mandamiento (Mt 22,34-40)

Domingo Vigésimo Primero- La confesión de Pedro (Mt 6,13-20) Jueves- Exhortación a la vigilancia (Mt 24,42-51)

SEPTIEMBRE 2017 ….................................................................................. 51

Viernes- Parábola de las diez vírgenes (Mt 25,1-13)Sábado- Parábola de los talentos (Mt 25,14-30)

Vigésimo Segunda SemanaMartes- En la sinagoga de Cafarnaúm (Lc 4,31-37) Miércoles- La curación de la suegra de Pedro (Lc 4,38-44)

Vigésimo Tercera SemanaMartes- Elección de los doce apóstoles (Lc 6,12-19) Miércoles- Las Bienaventuranzas (Lc 6,20-26) Sábado- Rectitud de corazón (Lc 6,43-49)

Vigésimo Cuarta SemanaLunes- La fe del centurión (Lc 7,1-13) Sábado- Parábola del sembrador (Lc 8,4-15)

Vigésimo Quinta SemanaLunes- Parábola de la lámpara encendida (Lc 8,16-18) Jueves- El temor de Herodes (Lc 9,7-9)

OCTUBRE 2017 …..................................................................................... 60

Vigésimo Sexta SemanaLunes- Santos Ángeles Custodios (Mt 18,1-5.10) Miércoles- San Francisco de Asís (Lc 9,57-62) Jueves- Eficacia de la oración (Mt 7,7-14)

Domingo Vigésimo Séptimo- Parábola de los viñadores infieles (Mt 21,33-43) Lunes- El mayor precepto (Lc 10,25-37) Martes- Marta y María (Lc 10,38-42) Miércoles- El Padrenuestro (Lc 11,1-4)Jueves- Nuestra Señora del Pilar (Lc 11,27-28)

Sábado- Disposiciones para la escucha de la Palabra de Dios (Lc 11,27-28)

Vigésimo Octava SemanaMiércoles- Misión de los setenta y dos (Lc 10, 1-9)Sábado- “El mundo necesita de vuestro testimonio” (Lc 12,8-12)

Décimo Novena SemanaLunes- Parábola del rico insensato (Lc 12,13-21) Miércoles- Necesidad de la vigilancia (Lc 12,39-48)

142

Page 143: DE LA MANO DE MARÍA · 2018-12-28 · El Señor está allí, sentado en aquella orilla, junto a la lumbre, esperando a sus hijos, para que se le acerquen y, movidos por el amor,

Jueves- Jesús como signo de contradicción (Lc 12,49-53)Viernes- Saber discernir los tiempos (Lc 12,54-59) Sábado- Elección de los Doce Apóstoles (Lc 6,12-19)

Domingo Trigésimo- El primer Mandamiento (Mt 22,34-40)Martes- Parábola del grano de mostaza (Lc 13,18-21)

NOVIEMBRE 2017 …...................................................................................... 75

Miércoles- Festividad de todos los santos (Mt 5,1-12ª) Jueves- Conmemoración de todos los fieles difuntos (Jn 6,37-40) Sábado- Lección sobre la humildad (Lc 14,1.7-11)

Domingo Trigésimo Primero- Humildad y espíritu de servicio (Mt 23,1-12) Martes- Parábola de los invitados a las bodas (Lc 14,15-24)Jueves- Expulsión de los vendedores del templo (Jn 2,13-22) Sábado- “Ningún siervo puede servir a dos señores” (Lc 16,9-15)

Domingo Trigésimo Segundo- Parábola de las diez vírgenes (Mt 25,1-13) Miércoles- Los diez leprosos (Lc 17,11-19) Jueves- La venida del Reino de Dios (Lc 17,20-25)Domingo Trigésimo Tercero- Parábola de los talentos (Mt 25,14-30) Lunes- El ciego Bartimeo (Lc 18,35-43) Miércoles- Historia de Zaqueo (Lc 19,11-28) Jueves- Llanto de Jesús sobre Jerusalén (Lc 19,41-44)

Trigésimo Cuarta SemanaLunes- La ofrenda de la viuda (Lc 21,1-4) Martes- El fin de los tiempos (Lc 21,5-11)

DICIEMBRE 2017 …................................................................................. 88

Viernes- Parábola de la higuera. Vitalidad de la Palabra de Cristo y respuesta del hombre (Lc 21,29-33)

-TIEMPO DE ADVIENTO-Domingo Primero de Adviento- Velad ante la venida del Señor (Mc 13,33-37) Lunes- La fe del centurión (Mt 8,5-11) Martes- Acción de Gracias de Jesús y la humildad de San José (Lc 10,21-24) Miércoles- Curación de muchos enfermos (Mt 15,29-37) Jueves- Edificar sobre roca (Mt 7,21.24-27) Viernes- Solemnidad de la Inmaculada Concepción de María (Lc 1,26-38) Domingo Segundo de Adviento- La misión de San Juan el Bautista (Mc 1,1-8) Jueves- Elogio de San Juan Bautista (Mt 11,11-15)Sábado- La “barca de nuestra vida” (Mt 17,10-13)

Domingo Tercero de Adviento- Primer testimonio de Juan el Bautista (Jn 1,6-8.19-28) Lunes- El misterio de la concepción virginal de Jesús revelado a José (Mt 1,18-24)

-TIEMPO DE NAVIDAD-

143

Page 144: DE LA MANO DE MARÍA · 2018-12-28 · El Señor está allí, sentado en aquella orilla, junto a la lumbre, esperando a sus hijos, para que se le acerquen y, movidos por el amor,

Lunes- Natividad del Señor, s. (Jn 1,1-18) Miércoles- San Juan Evangelista (Jn 20,2-8)Viernes- Presentación del Niño Jesús en el templo (Lc 2,22-35) .

ENERO 2018 …................................................................................. 99

Lunes- Santa María, Madre de Dios, f.- Adoración de los pastores (Lc 2,16-21) Martes- Testimonio de Juan el Bautista (Jn 1,19-28)Miércoles- Segundo testimonio de Juan (Jn 1,29-34)Viernes- Natanael (Jn 1,43-51)

Bautismo del Señor (Mc 1,7-11)

-TIEMPO ORDINARIO-Lunes- Llamada de los primeros apóstoles (Mc 1,14-20)Viernes- Curación de un paralítico (Mc 2,1-12)

Segunda Semana Tiempo OrdinarioLunes- El ayuno (Mc 2,18-22) Miércoles- Curación en sábado del hombre de la mano seca (Mc 3,1-6) Viernes- Elección de los apóstoles (Mc 3,13-19) Sábado- Actitud de los parientes de Jesús (Mc 3,20-21) Domingo Tercero- “Convertíos y creed en la Buena Noticia” (Mc 1,14-20) Lunes- El pecado contra el Espíritu Santo (Mc 3,22-30) Martes- El verdadero parentesco de Jesús (Mc 3,31-35) Miércoles- Parábola del Sembrador (Mc 4,1.3-8.14-20) Viernes- Parábola del grano de mostaza (Mc 4,26-34)Sábado- La tempestad calmada (Mc 4,35-41)

Domingo Cuarto- Jesús en la sinagoga de Cafarnaúm (Mc 1,21-28) Lunes- Curación del endemoniado de Gerasa (Mc 5,1-2.9-13.17.20) Martes- Curación de la hemorroísa y de la hija de Jairo (Mc 5,22-24.35-43)

FEBRERO 2018 …................................................................................... 114

Viernes-Fiesta de la Presentación del Señor (Lc 2,22-35.39-40). Sábado- Regreso de los apóstoles tras la misión. El descanso (Mc 6,30-34)

Domingo Quinto- Curación de la suegra de Pedro (Mc 1,29-39) Jueves- La mujer cananea (Mc 7,24-30)

Sexta SemanaMartes- La levadura de los fariseos (Mc 8,14-21)

-TIEMPO DE CUARESMA-Miércoles de Ceniza- (Mt 6,1-6.16-18) Viernes- La cuestión del ayuno y la Ley Nueva (Mt 9,14-15).

Domingo Primero de Cuaresma- Como Cristo en el desierto: preparados para la tentación (Mc 1,12-15)

144

Page 145: DE LA MANO DE MARÍA · 2018-12-28 · El Señor está allí, sentado en aquella orilla, junto a la lumbre, esperando a sus hijos, para que se le acerquen y, movidos por el amor,

Miércoles- “Esta generación pide una señal” (Lc 11,29-32).Sábado- “Amad a vuestros enemigos y orad por los que os persiguen” (Mt 5,43-48)

Domingo Segundo Cuaresma- La Transfiguración del Señor (Mc 9,2-10) Lunes- “Sed compasivos, no juzguéis, perdonad, dad” (Lc 6,36-38) Martes- Humildad, Caridad y Servicialidad (Mt 23,1-12) Miércoles- La madre de los Zebedeos (Mt 20,17-28)

MARZO 2018 ….............................................................................................. 124

Viernes- Sembrar y cultivar con Jesús (Mt 21,33-43.45-46) .Domingo Tercero Cuaresma- Expulsión de los vendedores del templo (Jn 2,13-25) Lunes- “Ningún profeta es bien recibido en su tierra” (Lc 4, 24-30) Martes- El perdón de las ofensas (Mt 18,21-35)Viernes- El primer Mandamiento (Mc 12,28b-34)Sábado- Parábola del fariseo y el publicano (Lc 18,9-14)

Domingo Cuarto Cuaresma- Cristo: Luz del mundo (Jn 3,14-21) Martes- Curación de un paralítico en sábado (Jn 5,1-3.5-16).Viernes-Jesús en Jerusalén durante la fiesta de los Tabernáculos (Jn 7,1-2.10.25-30) Sábado- División a causa de Jesús (Jn 7,40-53)

Domingo Quinto Cuaresma- “Si el grano de trigo no muere queda infecundo” (Jn 12,20-33)

Martes- Jesús, el Enviado del Padre (Jn 8,21.23b-30) Miércoles- “La Verdad os hará libres” (Jn 8,31-42) Viernes- Cristo, signo de contradicción (Jn 10,31-42) Sábado- El Sanedrín decreta la muerte de Jesús (Jn 11,45-54)

-SEMANA SANTA-Domingo de Ramos en la Pasión del Señor (Mc 15,1-39) Lunes Santo (Jn12,1-11) Martes Santo (Jn 13,21-31ª.36-38) Miércoles Santo (Mt 26,14-25) Jueves Santo de la Cena del Señor (Jn 13,1-15) Viernes Santo de la Pasión del Señor (Jn 18,1-19,42) Sábado Santo de la Sepultura del Señor

ABRIL 2018 ….......................................................................................... 139

TIEMPO DE PASCUADomingo de Pascua de la Resurrección del Señor (Jn 20,1-9).

145