Cuentos de Horacio Quiroga

Proyecto articulado con biblioteca e informática

Versión de alumnos de 5 A

Biografía de Horacio Quiroga

Horacio Quiroga (1878-1937), escritor uruguayo, nacido en Salto y muerto por suicidio en Buenos Aires.

Funda la tertulia de "Los tres mosqueteros "Viaja a París en 1900 y hace una breve experiencia de la bohemia pobre.

Ejerce empleos consulares y la crítica de cine, y pasa largas temporadas en el medio rural de Misiones, en la frontera argentino-paraguayo-brasileña, ambiente del que tomará temas para sus narraciones.

Su carrera se abre en la poesía, dentro del ámbito del modernismo, con Los arrecifes de coral (1901), obra sin mayor consecuencia.

Una vida dramática, siempre cercana a la estrechez económica, matrimonios conflictivos, experiencias con el hachís y el cloroformo y el constante cerco del suicidio, alimentan su tarea cuentista, una de las más importantes de América.

A veces se remonta a escenas conjeturales de la vida prehistórica o mezcla, con extraña astucia, personajes humanos y animales que hablan, como en las fábulas clásicas, pero estableciendo una sutil frontera entre la vida natural y la civilización.

Obras: El crimen de otro (1904), Historia de amor turbio (1908), Cuentos de amor, de locura y de muerte (1917), Cuentos de la selva (1918), El salvaje (1920), Las sacrificadas (1929), Anaconda (1921), El desierto (1924), Los desterrados (1926), Pasado amor (1929), Suelo natal (libro de lectura para niños, en colaboración con Leonard Glusberg) y Más allá (1935).

La tortuga gigante

Agus y Maguii 5ª A

Había una vez un hombre que vivía en la ciudad y un día se enfermo. El médico le aconsejó que tenía que irse a vivir al campo. Pero el hombre no le hizo caso, se fue a la selva y se encontró con un tigre que estaba maltratando a una tortuga y el hombre mató al tigre. El curó a la tortuga gigante

Un día el hombre se enfermó y la tortuga lo curo como él a ella. Pasaban los días y el hombre se estaba muriendo, perdió el conocimiento. La tortuga al escuchar sus palabras-¡ me voy a morir solo!. La tortuga se paró y le dio de comer y beber al hombre sucesivamente. Así hasta que un día mejoró pero después empeoro.

Tiempo después la tortuga gigante decidió ir a la gran ciudad de Buenos Aires para curar al hombre así lo cargo en su lomo y partió. Un día no pudo cargar al hombre y se rindió. Pero ese mismo día una rata entre la basura le dijo: - ¡Ya has llegado a Buenos Aires! Y era cierto al escuchar eso la tortuga y el hombre se pusieron muy contentos. Fueron al zoológico para que lo curen porque allí estaba un amigo del hombre y le dio los medicamentos para que se cure.

La tortuga se quedo a vivir en el Zoológico y siempre la iba a visitar y no dejaba que el hombre se vaya sin acariciar su lomo.

LALA TORTUGATORTUGA GIGANTEGIGANTE

Por Rocío Marine Por Rocío Marine zzelaelayya.a.

Una vez un hombre que vivía en la ciudad se enfermo, el medico le aconsejo que se fuera a vivir al campo, pero el hombre no hizo caso.

Un día su amigo, el encargado del zoológico lo vio tan mal que le dijo –porque no te vas a las montañas, yo ahí tengo una cabaña te puedes quedar ahí-el hombre le dijo que si y se fue. Cuando llego a las montañas enseguida mejoro y se puso a pescar y cazar.

Un día se encuentra a un feroz tigre que estaba maltratando una pobre tortuga.

El hombre fue en su salvación y mato al tigre luego trato de curarla y todos los días el estaba sin comer porque no cazaba pero tampoco pescaba y siguió así hasta que un día la

La tortuga se curo, el hombre se volvió a enfermar y la tortuga al escuchar lo que decía el hombre, (-me voy a morir y estoy solo-).Un día el hombre perdió el conocimiento y la tortuga se paro y le daba de comer y beber así hasta que un día mejoro pero luego empeoro. La tortuga decidió ir a la gran ciudad de Bs. as y cargo al hombre y su escopeta, en su lomo y partió.

Hasta que un día no pudo cargar ni a la escopeta y se rindió pero una rata de basural le dijo que ya había llegado. Que alegría al escuchar esto, luego partió al zoológico y lo vio el amigo y le dio los medicamentos necesarios y se curo.

Y así el hombre la va a visitar al zoológico todos los días pero la tortuga no deja que se vaya sin haberle acariciado su lomo.

La abeja haragana

Florencia

La abeja haragana

Había una vez una abeja que era muy

haragana y no trabajaba nunca, siempre se iba a trabajar y no hacia nada .Un día salio ,cuando volvió y no lo dejaron entrar a su casa , les suplico un rato y no lo dejaron pasar y se fue.

Luego vio un tronco y entro a un tronco que había visto y se encontró a una serpiente. Luego de asustarse con la serpiente aprendió la lección se fue la abeja pidió perdón y volvió a su casa tranquilo y fue a dormir sano y salvo .les dijo que aprendió la lección y que iba a trabajar como nunca y como los demás.

Grupo: Florencia Lucero