AlexNovoFuturo veloz

El 16 de febrero de este año un jovencísimo corverano hizo una

prueba gratis para la Nascar en un circuito francés. Pusieron en sus manos un coche de 500 caballos. Dejó impresionados a los entendidos que siguieron sus evoluciones. Su nombre salió en las revistas especializadas del motor del mundo. Se llama Alex Novo. Nació hace 14 años en Las Vegas y hasta pasar con matrícula su bautismo internacional había pilotado un kart. Impresionante.

Este diamante en bruto, como en su día lo fue Fernando Alonso antes de llegara la Fórmula 1, empezó entrenar y conducir un kart a los 4 años, los fines de semana, en Noreña y Arriondas. Estaba acostumbrado a ver a su padre, José Miguel Rodríguez,

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En el año 2005 Alex comenzó a competir en la categoría alevín e inició una trayectoria deportiva plagada de éxitos

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conducir un kart y le gustó desde un principio. En su casa jugaba con un simulador de forma manual. Tanto su padre como Sonia Novo, su madre, comprobaron no sólo la afición del niño sino también la facilidad con que se desenvolvía. Es por ello que quisieron dar un salto cualitativo: que el crío se montase en un kart y entrenase. "Decidimos probar, a ver qué pasaba".

Lo que pasó es que en el año 2005 Alex comenzó a competir en la categoría alevín e inició una trayectoria deportiva plagada de éxitos. Ese mismo año se clasificó tercero en el campeonato social de Villablino; primero en el Campeonato de Cantabria, y sexto en el Campeonato de Asturias. Al año siguiente se proclamó Campeón de Asturias, Subcampeón de Castilla y León y fue quinto en el Campeonato de España.

Estos primeros y precoces éxitos supuso un "problema" para sus padres: "Empieza a ganar, a despuntar y tenemos un problema: decidir que seguíamos adelante", manifiesta el padre. "Ya no es suficiente competir en Asturias; hay que salir al resto de España y se multiplican los gastos y se complica un poco todo". El peso económico lo lleva el matrimonio, pero siguen: "Recompensa el

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esfuerzo que hacemos viendo que sigue ganando y que su forma de conducir y los éxitos que consigue captan la atención de los técnicos en la materia".

Alex sigue compitiendo en 2007 y aumentando su palmarés: Campeón de Asturias alevín; quinto en el Campeonato de España, y quinto en el Campeonato de Cataluña, el más duro y difícil de todos. "Los catalanes arrasan en las competiciones de kart; es dificilísimo estar en los primeros puestos". Al año siguiente consigue podium en Cataluña y es tercero en el Campeonato de Asturias.

En 2009 da el salto a la categoría cadete. Consigue el Subcampeonato de Asturias; es quinto en el de España y segundo en el de Sevilla. En 2010 consigue ser Campeón en Cataluña. Una cima casi inexpugnable para un no catalán.

"No me ha sorprendido mucho lo que conseguí hasta entonces; creo muchísimo en mis posibilidades y me encuentro muy cómodo cuando estoy ante un volante".

En 2011 conoció la cara amarga del deportista: las lesiones. Un problema de costillas le impide competir todo lo que quisiera. Aun así es octavo en el Campeonato de Europa en la categoría X30. En España corrió en dos carreras. "A medida que subes en el escalafón te das cuenta lo dificilísimo que es hacerse un hueco en el kart. De todas formas -manifiesta Alex- 2011 me enseñó que no todo son victorias y excelentes puestos; que es dificilísimo llegar a los puestos altos y luego mantenerse. Me sirvió de mucho la experiencia de 2011".

2012 está siendo un año de transición, al decidir la familia subir un escalón más: el de los 16-17 años, un nivel ya profesional que exige vehículos de 200.000 euros. Hay que buscar patrocinadores. "Hay que conseguir un inversor y conseguir competir en el extranjero", manifiesta el padre de Alex.

"Hay que ir poco a poco", manifiesta Alex. "El sponsor es fundamental -dice la madre- y hay que intentarlo sin desfallecer porque nunca sabes cuándo surge la oportunidad; él ya ha demostrado que es muy bueno conduciendo; lo que ha conseguido a los 14 años está al alcance de muy pocos y eso es lo que nos hace ilusión y el impulso que necesitamos para seguir luchando".

Pero todo tiene sus pros y sus contras. La transición todavía no intranquiliza porque Alex está intentando dar el salto definitivo, pero la situación de espera no puede mantenerse por mucho tiempo, hay que competir: "Estar mucho tiempo sin correr es peligroso", manifiesta.

"Hasta ahora -dice el padre- con poco dinero Alex ha hecho muchísimo; es el que menos desgaste hace de los coches y, por tanto, el que menos exige al coche para poder seguir adelante sin excesivos problemas mecánicos".

A la hora de hablar de subvenciones, la familia ha intentando, obtener alguna ayuda del Principado: "Pudimos competir en la Nascar europea por 50.000 euros. No han intentando pedir ayuda al Ayuntamiento: "Tal y como están las cosas es muy difícil pedir subvención para un deportista y lo entendemos", dice el padre, para apostillar que también hay otras ayudas que no significan aportar dinero: "A veces hablar de Alex ante la Administración regional o empresarios de la comarca puede ser más importante que dar una ayuda económica".

"No me ha sorprendido mucho lo que conseguí hasta entonces; creo muchísimo en mis posibilidades y me encuentro muy cómodo cuando estoy ante un volante"

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"Pero para llegar ahí, si es que tengo oportunidad, hay que correr en fórmulas y en turismo; hay que ir paso a paso. Sólo necesito que me den la oportunidad de pasar al profesionalismo y seguir conduciendo"

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Corvera EjemplarLa crisis económica también hace mella en el deporte. El dinero escasea, pero también hay oportunidades, como nos dice la madre de Alex: "Por culpa de la crisis hay una criba de deportistas y Alex puede destacar con más facilidad; hay que aprovechar esta realidad".

Hay optimismo de cara al futuro y parece que la lucha que la familia mantiene este año por conseguir dar el salto a profesionales puede dar sus frutos, como nos dice el padre: "A través de Fernando de la Oz, que es la persona que organiza la feria de vehículos clásicos en Oviedo y que cree en Alex, nos ha puesto en contacto con una empresa de representación de Australia, "Insithe Sport. Sus responsables ven a Alex como un diamante en bruto". Puede ser la llave del futuro que le dé la oportunidad que necesita este campeón en ciernes.

La aspiración de Alex Novo es llegar a ser Campeón del Mundo de Fórmula 1 y emular a Fernando Alonso. "Mi ídolo", dice el jovencísimo corverano, que sigue teniendo las ideas muy claras y los pies en el suelo: "Pero para llegar ahí, si es que tengo oportunidad, hay que correr en fórmulas y en turismo; hay que ir paso a paso. Sólo necesito que me den la oportunidad de pasar al profesionalismo y seguir conduciendo".

Es increíble encontrarte con un crío que habla con una gran seguridad cuando te cuenta sus logros deportivos y la creencia de que puede emular a sus ídolos del automovilismo. De momento le han sentado al volante de un coche con 500 caballos -¡qué bestialidad!- y la prueba ha resultado ser un éxito. Las revistas especializadas han empezado a hablar de un corverano de 14 años que tiene pinta de campeón, consiguiendo registros que sólo están al alcance de los elegidos. Ahora sólo hace falta que alguien crea lo suficiente en él para que fluya el dinero y dar el salto definitivo que le permita, con los años, ser otro Fernando Alonso.

Hay unos australianos que creen en él. Puede ser la llave del futuro. Hay que buscar relevo para Fernando Alonso para dentro de cinco o seis años.