CONSTRUCCIONES DE ADOBE Y

CEMENTO J. Santos B.

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Construcciones de adobe y cemento

B) Y terminar acabando con el hilo fino de la adolescencia. Vasos corruptos de tuberías licuadas. Las migas se sustituyeron por vino para perder de nuevo el camino. Adyacente nos dejo de lado y se perdió en el infinito. En un escalar sin precipicio ni muralla alguien soltó las manos y no paso nada. De nuevo olas en mi Mente pausan el ritmo alérgico del etéreo ”De azúcar se compone la felicidad” es un dicho que aprendí de pequeño. Ahora no recuerdo su dicción; siquiera compuesto. ¿Cuándo pasa el arbusto a ser árbol? ¿Y cuándo se siente ramaje? Y volver al ritmo pausado de un pie y otro pie y tambaleando dar los primeros pasos ¡Quieto! ¡Cuidado!

¡Eso no se toca! Gracias, pero la música ha callado y ahora toca silencio. Escuchar los ruido juntarlos en sinfonía y de nuevo el silencio. Un niño saltando en un charco de color rojo. La sangre de La comisura de unos labios mordidos y una tempestad de amapolas forman un trío de pulcritud lesiva. ¿Qué pretende quién asesina al niño para después dispararse a uno mismo? Un, dos, tres, cuatro, cinco, seis… El orden ordenado que no sabe que ordena. Peripecias en el tiempo. Ahora nos toca el agua de resacas. ¡Tiempo al tiempo! y se pierde por el fondo de la escalera entre la dicotomía de seguir subiendo o bajando. ¿Cuál de las puertas es

la esperanza? ¿Cuánto cuesta despedirse de la imagen trasera del espejo? Citar de nuevo una frase interesante. Y no recordar el autor pero si el significado. Un piano increchiendo cómo banda sonora de la vida. Parar el reloj de cuerda y apostar por la melodía. ¿Quién corre libre en las llanuras del cemento? ¿Por qué seguir sonriendo mientras ahogamos el sentimiento? Hoy vi a un niño volar una cometa, reflotarla de su caída y perderla entre las nubes escapando de sus guías. Historias de un mundo soñado El juglar nos contó que aterrizó en manos de un anciano. Y mirar al viento hasta conseguir descubrirlo. Subir a un globo. Despegar y esperar buscar un soplo de aire nuevo Pintar figuras en las nubes entre miradas de niños y descender tranquilamente hacia el mar abierto

preguntando a las sirenas su sino y a los peces su recuerdo.

C) Nebulosa de un sueño yanqui mal complacido. ¿Cuánto cuentos cuentas? Aúlla el silencio encarando al destino. Un marcapasos abriendo camino. Chimenea, sillón, manta y un bebe dormido. De fuego recuerdo los cielos mimando a la luna en su ombligo. No hay metáfora tan intensa que la vida, un fotógrafo y el pergamino. Canción sin cuerda en DO Mayor. Un arpa rasgada y un tubérculo en flor. Un pasillo sonando a hueco y en el fondo el suspiro del viento. ¿Quién se atrevió a cruzar la puerta de la escalera? Alguien cerró la puerta y robo el pomo. Miró al norte y descendió de nuevo.

Paso tras paso desfilando un bordillo entre el fuego y la vida. Un guiño en blanco y negro Y un pañuelo de color volando al abstracto.

D) ¿Quién marca la línea entre la locura y el arte? Yo no soy un loco, siquiera artista y no más que un cuerdo que intenta escarbar su interior. Busco caminos. No sé si asfaltados o llenos de fango; donde poder resbalar y lleno de barro levantarme y chapotear sorbe los charcos. ¿Cómo superar el miedo a no sentirse querido? Para esto no hay metáforas útiles ni margaritas de destino marcado. El miedo del directo me lleva al diferido corregido prefiero navegar entre parábolas como director de timón. Reuniones de cafetería con taza solitaria, el mundo tras el cristal con acceso giratorio. El cenicero lleno y las manos en el bolsillo… La verdad sólo era una mentira en paracaídas.

F) 13-02-2005 De la noche más oscura, resplandeció el amanecer. Se me acaban las pilas ¿Por qué? ¿Por qué? ¿Abro los ojos, o los cierro? Adiós camino adiós lastre Adiós luz Hoy he decidido perderme; ¿sabes?, no me da miedo. Mañana, quizás pasado: me encuentre. No se sí lucho contra el tiempo o me rindo a él. No se sí uno de los dos gana. No se sí uno de los dos pierde. ¿Quién lleva de la mano a quién? Yo creo que le voy ganando, pero me quedo sin fuerzas y reparo: “no es más fuerte quién más puede, sino quién más aguanta” Ahora ya si estoy perdido. No se sí he entrado. No se sí he salido. Siquiera se porqué escribo. Cierro los ojos y sueño. Vuelo, vuelo… y me choco. ¿Cuáles son los muros a derrumbar?

G) ¿Cuánto tiempo sin hablar? ¿Cuánto tiempo sin saber decir las cosas? ¿Cuántas palabras faltan en una vida? ¿Cuántos ojos llenos, tapados con gafas de Sol? ¿Cuánto por compartir archivado de la “A” a la “Z”? ¿Cuanta servidumbre, en el silencio dictado, por el ”yo me lo quedo”? ¿Cuánto cuantas cuento? Podría decirse que hoy soy más que ayer pero menos que mañana. Podría decirse que no sé, qué es ser. Que viajo solo en el triciclo que nunca aprendí a conducir. Y que los amortiguadores me frenen los baches hasta la barrera del no pasar. Que sueño con volver a soñar Y que los sueños, sueños son pero esta vez: Quisiera compartirlos. ¿Cuánto, cuantas, cuento?

H) Nómada Si el viento es el suspiro del que quise renegar; que me acojan con cariño las nubes: No soy rayo que las quiera traspasar. Si las caretas de la pared no me acompañan en mis sueños, Haré de una maleta vacía, el saco de mis recuerdos. Dime, esfera pausada: ¿Quién preguntó sin pedir disculpas? Si la soledad, reveló su sinsentido, y dramatizó la vuelta en un solo cuarto. Si haces que una niña pequeña sea adulta, atrapada por un mago… Dime, esfera pausada, ¿Quién osó tan gran pecado? Si de la espada afilada, fabricas las tapas del calendario.

J) Somete al olvido a una mentira. Llénalo rocas Hormigónalo Y recúbrelo de acero. Después no intentes recordar de donde vienes; Cuales fueron tus pasos Ni si el pájaro voló o quedó atrofiado Lo peluches solo fueron muñecos Y los juegos, ya venían hechos El sol y la luna: hologramas puntuales a su cita… todo tan normal. Y ahora a escarbar el muro sin sabor ni lágrima. Súdalo y estrújalos juntos porque dentro encontrarás tu verdadero reflejo

K) De renglones torcidos y escaladores de palabras me contaron leyenda alguna de la cual no recuerdo siquiera metáfora. Durmiendo encontré palabras, colores, imágenes, pinceles y láminas. Mas el desvelo regaló a cada cual su jaula. Ahora pienso en el deberíaquepodríahaberpodido en quizases que fueron recitados en versos anteriores. Luego duermo y despierto descontando a la vigilia el tiempo para introducir en mi pequeño mundo nuevos destellos. ¡Silencio! El mundo calla. ¿Por qué no callas Mente? ¡Aquí nombro y abogo por el destierro de los pensamientos y el aprovechamiento de este tiempo para sueños febriles y encuentros!

L) Un neceser entreabierto regala a la vista los secretos que un día se escaparon por los pasillos para ser viento y letras en los cuadros Pájaros negros vuelan de nuevo por los ancestros de las ciudades: espacios de leyendas donde una vez habitaron para mutarse luego en ríos de despojos Aquello que una noche me contó un vagabundo a cambio de un cartón de vino ya no tiene explicación Las bicicletas en su camino fueron perdiendo ruedas hasta que un día prefirieron ir andando Saltar y convertirse en líquido Mariposas ahora reinan los cielos Y alguien las quiere quitar el color, pintarlas de gris y prohibirlas volar. Luces, coches, aviones y muros, grandes muros. Marionetas de sonrisa e hilos de colores. Música ambiental de construcción encadenada Y rumores de fondo. Hoy solo quería hablar, pero no se si alguien me entendió. ¡Yo no! Me vuelvo a mi burbuja A discutir con paredes de plástico

LL) Abdicamos al silencio para soñar. Los árboles, hoy, cambian las hojas secas por flores y en suelo un manto espeso nos marca el ritmo del caminar. Aguaceros de sonrisas el manantial nos abraza y un pájaro vuela a su grifo a beber.

M) No sé si tengo no sé si quiero no sé si debo expresar algo El silencio no me habla, y mi mirada se enfrenta con la pared. El silencio me susurra. Recubre aquel callejón de agitadas farolas y luces, en cuyo final, un involuntario apagón disuelve las formas, y anula la sensación de espacio. Donde los gestos son caricias y puñetazos, donde un beso turbador es un conato de incendio y los recuerdos desenvainan sus armas bajo la táctica de ataque-defensa. El silencio comienza a gritarme... y no lo puedo aguantar más. ¡POR FAVOR! ¡Que alguien me dé la luz!, que se me ofrezcan bellas melodías y cogiéndome la mano me abracen y me susurren al oído cuentos para niños mientras entorno los ojos y me acurruco abrazado a la almohada

N) No quiero el veneno inyectado en un colibrí. No expresa la belleza contaminada, belleza. No quiero decir palabras ni dibujar sentimientos. Acaso, Marcar tiempos muertos y explicar a los niños lo que les espera; Si decir, antes puedo aquello que quiero ¿Cómo hablar quién no llora? ¿Quién pide ser escuchado sin salir de su adentro? ¡Ruido! Mucho ruido hay en este mundo …que el colibrí vuelva a piar y los colores retomen sus tonos. Por soñar soñé… pero se quedaron en mis adentros. Soñar pude ser bonito, pero cumplirlos…

Ñ) Ciclones de ida y vuelta Arrojo constreñido incauto. Decires de antigua sapiencia. Aún un poder aún un quisiera aún una esperanza Aún un ahogo Aún todo queda sabido y en espera. Ayer me pintaron un camino que hoy decidir saltarme. Mañana…

P) Deviraciones I Tarifa plana en un descuido amado. Son culebrones de radio aquello que obsoleto nos recuerda donde vamos *********** No hay penumbra espesa sino habitación mal iluminada *********** ¿Qué pueden las planchas con las arrugas? Si no hay vapor ni quien el agua caliente

Q) De ritmos, sones y samplers. Son las notas ahogadas en mi mente las que buscan su lugar. Paracaídas de rejilla enhebrado por una señora en un puerto de mar. Andar, correr y caminar es la misma función con diferente vitalidad. El ahogado saltó a la orilla donde decidió descansar. Imágenes a un mismo tiempo, Diferentes espacios que no otro cantar. Son segundos necesarios para amarrar y volver a tirar. Y decir que está claro u oscuro y escuchar al viento pasar. Cerrar los ojos y encontrarte con un lienzo limpio a pintar.

R) Diáspora mental vacía de palabras sin gravitación. Una nuca enjaulada sin candado. Una estrella sin constelaciones en el cielo. De encuentros reencuentro y postencuentros. Duerme tranquila la niña sin miedo a pesadillas y el osito queda olvidado en el regazo. Anoche fueron hombres quienes despertaron. Lloraron. Se miraron. y siendo niños, durmieron de nuevo cogidos de la mano. ¿Quién palidece o sonroja? preguntó el abuelo al demonio. Se hizo el silencio y apartada entre los cierzos la luna brotó del suelo.

S) Deviraciones II Quien espera y desespera hizo de la triste noticia la verdad y de la verdad esfera. ************** …De una almohada que se parte y rompe hasta que la cabeza queda hundida en el colchón… ************** Quiero que no haya pájaros que se coman las migas que tras partir, en el camino se han ido dejando. ************** ¿Quien engaña a quién? Los pretendientes a los pretendidos. Los realistas a los soñadores Los aletargados a los alertagadores. De una nube nació una imagen y cada cual vio, Lo que quiso

T) ¿Cuáles son las palabras que se perdieron en el camino? Acaso son nubes haciendo dibujos a los ojos de un niño en el cielo. ¡Cuántas culturas difuminaron su arte sobre la arena! Pretensión de creación a ego cero. Son lo recuerdos de aquello creado la losa que nos anula el incierto.

V) Sonido de jazz al oído. Vibrador de móvil en la mano. ¡Esparcíos! – gritaban mi nombre. Estrellas redondas siguieron rodando. Manitú es un dios acabado y Dios renace para ser esclavo. Beligerancia de pensamiento ”Finito es quien nosotros creemos” Hay quien conquistó la cima para bajar escalando. Desperdicios juntados pueden hacer un todo del que poder comer. Lima de ojos, garraspera de voz, y el Adiós.

W) Hay luces que nos ahogan y secretos que nos inspiran. Esperanzas dibujadas en terciopelo azul. Columnas que siguen erguidas sin mausoleos que sostener y, a veces, una caricia que nos recupera hacia la vida. Somos sonámbulos de nosotros mismos. Ahogados entre liturgias de vetes y diretes. Una simple mosca con tres días de vida que quiere volar al Sol; también las sonrisas cómplices de un paritorio. Un pescador quiso hablar con un pez y la naturaleza quedó rota. Ahora en tiempos de penumbra brotan flores en las laderas y Yo, que quise encontrar un navío navegando entre senderos quedé relegado al letargo o quizás a un breve sueño.

X) Es una bala la que dispara el camino. Un silencio somnoliento al compás marcado de una ventana golpeándose. Una singladura ínfima, inerte, inconsistente, ineficaz. Al fin y al cabo morimos por nacer. Mientras tanto, hay quien se entretiene, se construye, o se detiene para andar su vida a pata coja. Los pájaros, hoy, le contaron a la luna recuerdos de antepasados, de pies y brazos y de cómo, desde la lejanía un día soñaban con tocarla. Ahora de nuevo, los pájaros, ocupan los cielos y en bandada, son de nuevo observados con los ojos de quién un día sueña con volar. El viento, hoy, cruza con fatiga el campanario. Se han callado las voces de la plaza y todo el pueblo espera el repique con tristeza. Y al fondo, en el parque de arriba, un niño se entretiene

con un coche de juguete.

Y) Escapamos de un delito sin careta, mientras perfilamos nuestros labios para emitir la mayor de nuestras sonrisas. Alguien nos guiña un ojo desde el lado contrario de la barra y la mirada se desliza de nuevo hacia el vaso con hielo. ¿Puedo jugar con vosotros? ¿Puedo ser vuestro amigo? ¡Que sinceras a veces pueden ser las respuestas de los niños! La niebla tapa la luna y las farolas se han fundido en la calle y en la esquina un abuelo observa un beso apasionado para dejar escapar una última lágrima. Todas las puertas con su alfombra “welcome” cerradas, y conversaciones de televisión. Una puerta perdida una cortina, ruido y algarabía. Alguien llora y grita mientras yo; sigo nadando por el aire entre despedidas y abrazos buscando una cuna donde recostarme.

Z) Hoy descarto hablar de lunas y estrellas Tampoco hablaré de mareas y leyendas. Siquiera de luces de farolas y encuentro prófugos. ¿Quizás de una flor? No, de eso tampoco. Ni de niños revoltoteando ni de mariposas volando ¿Y del amor? Muchos versos escritos aún más al desamor. Pues de sonrisas y ojos o de una caricia de unas manos del pelo de unos labios. Mmmmmm… tampoco me suena grato. De los vientos, la nieve, el verde, la montaña y los bosques. O mejor del cemento, los suburbios y los metros de mendigos y prostitutas y gitanos al son de flamenco. ¿Pues la verdad? Tampoco me convezco. ¿Y de un abrazo que busca consuelo? - No. ¿Ni del cielo, las nubes y el Sol? - NO Pues digo yo: Qué me cuento que sea escrito, hablado y entendido.

Quizás un Adiós. Quizás un Hasta Luego quizás espere para antes de hablar a escribir algo bueno. - ¿Escribir algo bueno? Bueno, escribir algo…