construcción de conocimiento y creencias epistemológicas sobre

25
Erick Cajigal Molina * , Ana Lucía Maldonado González ** y Edgar González Gaudiano *** Recepción: 22 de agosto de 2015 | Aprobación: 15 de enero de 2016 Construcción de conocimiento y creencias epistemológicas sobre cambio climático en docentes de nivel primaria. De la vulnerabilidad a la resiliencia La construcción del conocimiento está basada en las creencias epistemológicas de cada individuo. La identi- ficación de éstas y de cómo se construye el conocimien- to, proporciona elementos para diseñar y fundamentar estrategias de formación en educación ambiental y en temas complejos como el cambio climático y sus efec- tos. En este texto se presentan resultados de una inves- tigación realizada con una muestra representativa de docentes de educación primaria del municipio de Ju- chique de Ferrer, Veracruz. Uno de los aspectos sobre los que se indagó es el tipo de creencias epistemológicas que los docentes tienen acerca del cambio climático, así como su percepción de los desastres. Mediante una serie de instrumentos se encontró qué es lo que saben y cómo han llegado al conocimiento del tema. El análisis de los resultados brinda una aproximación a la realidad que guarda la educación ambiental en los espacios escolares, además de la concepción que tienen los docentes de este municipio sobre los desastres en zonas frecuentemente impactadas por ciclones tropicales. Palabras clave: creencias epistemológicas, construcción del conocimiento, educación ambiental, cambio climático, vulnerabilidad y resiliencia. Construction of knowledge and epistemological beliefs about climate change in primary level teachers . Vulnerability to resilience e construction of knowledge is based on epistemo- logical beliefs of each individual. e identification of these and of how knowledge is constructed, providing elements for designing and documenting strategies in environmental education and training in complex is- sues such as climate change and its effects. In this pa- per results of a survey conducted with a representative sample of primary school teachers in the municipality of Juchique de Ferrer, Veracruz is presented. One of the aspects that will be investigated in this text is the kind of epistemological beliefs teachers have on climate change, as well as their perception of disasters. rough a series of instruments we found what they know and how they have known about that topic. e analysis of the results provides an approximation of reality that keeps environmental education in school spaces, in addition to the conception of teachers of this town, on disasters in areas frequently hit by tropical cyclone. Keywords: epistemological beliefs, construction of knowledge, environmental education, disaster, vulnerability and resiliency. * Doctorante en Investigación Educativa por la Universidad Veracruzana, Maestro en Investigación Educativa. México. CE: [email protected] ** Investigadora de tiempo completo en el Instituto de Investigaciones en Educación de la Universidad Veracruzana. México. CE: [email protected] *** Investigador de tiempo completo en el Instituto de Investigaciones en Educación de la Universidad Veracruzana. México. CE: [email protected]

Upload: letuyen

Post on 11-Feb-2017

233 views

Category:

Documents


3 download

TRANSCRIPT

Page 1: Construcción de conocimiento y creencias epistemológicas sobre

� Erick Cajigal Molina*, Ana Lucía Maldonado González** y Edgar González Gaudiano***Recepción: 22 de agosto de 2015 | Aprobación: 15 de enero de 2016

Construcción de conocimiento y creencias epistemológicas sobre cambio climático en docentes de nivel primaria. De la vulnerabilidad a la resiliencia

La construcción del conocimiento está basada en las creencias epistemológicas de cada individuo. La identi-ficación de éstas y de cómo se construye el conocimien-to, proporciona elementos para diseñar y fundamentar estrategias de formación en educación ambiental y en temas complejos como el cambio climático y sus efec-tos. En este texto se presentan resultados de una inves-tigación realizada con una muestra representativa de docentes de educación primaria del municipio de Ju-chique de Ferrer, Veracruz. Uno de los aspectos sobre los que se indagó es el tipo de creencias epistemológicas que los docentes tienen acerca del cambio climático, así como su percepción de los desastres. Mediante una serie de instrumentos se encontró qué es lo que saben y cómo han llegado al conocimiento del tema. El análisis de los resultados brinda una aproximación a la realidad que guarda la educación ambiental en los espacios escolares, además de la concepción que tienen los docentes de este municipio sobre los desastres en zonas frecuentemente impactadas por ciclones tropicales.

Palabras clave: creencias epistemológicas, construcción del conocimiento, educación ambiental, cambio climático, vulnerabilidad y resiliencia.

Construction of knowledge and epistemological beliefs about climate change in primary level teachers . Vulnerability to resilience

The construction of knowledge is based on epistemo-logical beliefs of each individual. The identification of these and of how knowledge is constructed, providing elements for designing and documenting strategies in environmental education and training in complex is-sues such as climate change and its effects. In this pa-per results of a survey conducted with a representative sample of primary school teachers in the municipality of Juchique de Ferrer, Veracruz is presented. One of the aspects that will be investigated in this text is the kind of epistemological beliefs teachers have on climate change, as well as their perception of disasters. Through a series of instruments we found what they know and how they have known about that topic. The analysis of the results provides an approximation of reality that keeps environmental education in school spaces, in addition to the conception of teachers of this town, on disasters in areas frequently hit by tropical cyclone.

Keywords: epistemological beliefs, construction of knowledge, environmental education, disaster, vulnerability and resiliency.

* Doctorante en Investigación Educativa por la Universidad Veracruzana, Maestro en Investigación Educativa. México. CE: [email protected]

** Investigadora de tiempo completo en el Instituto de Investigaciones en Educación de la Universidad Veracruzana. México. CE: [email protected]

*** Investigador de tiempo completo en el Instituto de Investigaciones en Educación de la Universidad Veracruzana. México. CE: [email protected]

Page 2: Construcción de conocimiento y creencias epistemológicas sobre

53Revista Interamericana de Educación de Adultos Año 38 • número 2 • julio - diciembre de 2016

Construcción de conocimiento y creencias epistemológicas sobre cambio climático

� Erick Cajigal Molina, Ana Lucía Maldonado González y Edgar González Gaudiano

Introducción

El incremento en la intensidad y frecuencia de los fenómenos hidrometereológicos, como los ciclones tropicales, se relacionan con el aumento de temperatura promedio global. Los huracanes se forman en los mares tropicales cuando las aguas superficiales se calientan (igual o mayor a 27°C). Entonces las masas de agua y aire que se mueven a diferentes velocidades pueden causar un torbellino. En los últi-mos 30 años las temperaturas del agua en la superficie de los océanos tropicales han aumentado a más de 0.5°C; aguas más calientes significan más ciclones tropicales (Riechmann, 2005).

En Veracruz, desde 1851 y hasta años recientes, se han registrado desastres (Luna y Rivera, 2012) derivados, entre otras cosas, de la combinación de los ciclones tropicales (CT) con procesos sociales y económicos de las mismas poblaciones. Recientemente, en 2013, las tormentas Barry, Fernando e Ingrid, afectaron diversas poblaciones del Estado (16 municipios), causando inundaciones y desli-zamientos de tierra que resultaron en pérdidas humanas y económicas. Los desastres revelaron el nivel de vulnerabilidad que guardan las comunidades ante los CT (Acosta y Romero, 2011).

Nos referimos a vulnerabilidad como “La predisposición o susceptibilidad física, económica, política o social que tiene una comunidad de ser afectada o de sufrir daños en caso de que un fe-nómeno desestabilizador de origen natural o antrópico se manifieste” (Cardona, 2001: 2), dicho im-pacto puede conllevar consecuencias extremas, es decir, puede resultar en un desastre (Chardon y González, 2002).

Los desastres se derivan de procesos que se van gestando socialmente y se manifiestan por los efectos de los CT. Es decir que, un desastre se va construyendo en y por la sociedad y sólo está a la espera de una amenaza para revelarse (Ruíz, 2005). El modelo de desarrollo y los estilos de vida que imperan en nuestros días son generadores de desastres y, al mismo tiempo, contribuyen a proble-

en docentes de nivel primaria.De la vulnerabilidad a la resiliencia

Page 3: Construcción de conocimiento y creencias epistemológicas sobre

Erick Cajigal Molina, Ana Lucía Maldonado González y Edgar González Gaudiano

54 Revista Interamericana de Educación de Adultos Año 38 • número 2 • julio - diciembre de 2016

máticas ambientales como el cambio climático (CC), del cual se puede decir con certeza que incre-menta la frecuencia e intensidad de este tipo de fenómenos naturales.

Las problemáticas ambientales y sociales como el CC, sus causas y consecuencias, necesitan de un pensamiento complejo, crítico, capaz de relacionar problemas de diferentes órdenes para enten-derlas. También para atenderlas de manera eficaz es necesaria la articulación de diversas discipli-nas, sin embargo, los docentes de educación primaria y gran parte de la población no lo conciben así, por lo que se sigue gestando social, cotidiana e inconscientemente tal fenómeno, incrementan-do la vulnerabilidad de la población ante sus efectos. Por ejemplo, como efecto del CC (entre otros más), los CT han aumentado su frecuencia e intensidad en las comunidades causado afectaciones como: decesos humanos, lesiones en la población, pérdida de bienes, daño e interrupción de los servicios básicos e infraestructura, desorganización social y alteraciones conductuales de los pobla-dores (Bermúdez, 1993). Aunado a esto, la rapidez y capacidad de recuperación ante las adversidades varía entre las comunidades. A esta capacidad de enfrentar las presiones y dificultades, así como la manera de recuperarse e incluso aprender de las situaciones de riesgo, se denomina resiliencia (García, 2012).

En cuanto al término de resiliencia, si bien ha sido referido en la biología y alude a la persisten-cia y habilidad de los sistemas vulnerables para absorber el cambio y la alteración manteniendo las mismas relaciones entre poblaciones (Holling, 1973), hoy el concepto ha sido trasladado a las ciencias sociales y permite explicar, identificar, evaluar y reforzar las capacidades de las personas, instituciones y sistemas ante una adversidad (Maldonado y González, 2013). La resiliencia no es una situación extraordinaria, se presenta con frecuencia en individuos que experimentan situaciones de exclusión, riesgo o adversidad y que les permite normalizar sus situaciones (Carreto, 2010).

En este sentido, encontramos un espacio pertinente para la educación ambiental (EA), la cual pretende propiciar un cambio en el pensamiento y las conductas de las personas (Vázquez, 2012), así como un pensamiento crítico y complejo que promueva una visión más comprensiva de las proble-máticas ambientales y sociales (Meira, 2002), como el CC y sus efectos. La EA en la educación formal promueve conocimientos y habilidades para incidir en comportamientos amigables hacia el medio ambiente que, al mismo tiempo, reduzcan la vulnerabilidad y el incremento de la resiliencia, pues, como ya mencionamos, los desastres se van gestando por acciones de la sociedad. En muchos estu-dios, la EA tiene especial atención en estas acciones.1

El cambio ambiental y social impulsado por la EA desde las escuelas podrá contribuir a crear en los estudiantes, familias y comunidades un pensamiento crítico e independiente, cuando haya más docentes que asuman el reto de desarrollar la capacidad de comprender con mayor coherencia el significado del mundo y de la realidad (González, 2007). Para lograr esto, es necesario que los docen-tes se involucren en áreas que no siempre han sido parte de su formación, que ayudarían a entender el entramado de acciones que convergen en los problemas ambientales y su relación con otro tipo de problemas sociales de carácter complejo. Así los maestros podrán participar, de mejor manera, con la difusión de la EA desde las escuelas, contribuyendo a la solución de problemas como el CC y a la reducción de la vulnerabilidad que presenta el municipio de Juchique de Ferrer.

1. Más adelante, en el punto: Ubicación geográfica y situación sociodemográfica de Juchique de Ferrer, un municipio vulnerable, se hablará de ello.

Page 4: Construcción de conocimiento y creencias epistemológicas sobre

Construcción de conocimiento y creencias epistemológicas sobre cambio climático

55Revista Interamericana de Educación de Adultos Año 38 • número 2 • julio - diciembre de 2016

Durante la investigación que dio origen a este artículo, para involucrar a los docentes en otras áreas de formación se realizó un estudio empírico para descubrir el impacto de las creencias epis-temológicas en sus procesos de construcción del conocimiento sobre el CC. A través de este estudio se identificaron las ideas que los maestros sostienen acerca de lo que es el CC, su interés y cómo han conocido lo referente al tema, así como su perspectiva sobre los desastres vividos en 2013 en la zona de estudio. Esto brindó elementos para fundamentar estrategias de adscripción de los docentes a otras disciplinas.

Por lo anterior, en este artículo se presenta a la EA y a los docentes como posibles actores clave en la promoción de resiliencia comunitaria frente a problemáticas ambientales y sociales que se derivan del CC y que han resultado en desastres, sobre todo en comunidades vulnerables. También se plantea la construcción del conocimiento desde un enfoque teórico constructivista y sociohis-tórico, además de los conceptos teóricos referentes a las creencias epistemológicas. Se incluye un apartado en el que se detalla el contexto del municipio de Juchique de Ferrer, Veracruz, en donde se realizó la investigación y finalmente se describe el camino metodológico, así como los hallazgos obtenidos por esta investigación.

Educación ambiental frente al desarrollo

La idea contemporánea de desarrollo tiene una relación estrecha con el crecimiento económico y conlleva consecuencias sociales y ambientales (Gudynas, 2011), tales como el CC, pérdida de biodi-versidad, pobreza, consumismo y discriminación, por mencionar algunas. En efecto, el crecimiento económico actual de los países se encuentra en función del uso intensivo de recursos naturales y particularmente de combustibles fósiles, los cuales generan gases de efecto invernadero (GEI). Esta dinámica se intensificó a partir del siglo XIX con la Revolución Industrial (Meira, 2002) y la imposi-ción de un modelo de producción y consumo en el mundo.

En el marco de dicho modelo, la educación y otras políticas sociales como la salud, la seguridad y la vivienda, son consideradas como áreas que deben contribuir al desarrollo de la población. Es-pecíficamente en el caso de la educación, diferentes sectores de la sociedad enfatizan la importancia que ésta reviste en los procesos de desarrollo.

Lo anterior se refrenda en conferencias y declaraciones internacionales, como por ejemplo la “Declaración de Bonn” en la “Conferencia Mundial sobre la Educación para el Desarrollo Sustenta-ble” de la UNESCO (2009). Sin embargo, es preciso cuestionar el tipo de educación para el desarrollo que se está promoviendo, cuya finalidad pareciera ser construir seres humanos semejantes a piezas de un mecanismo de producción, resultado de una inversión monetaria con un valor meramente instrumental, cuyas consecuencias aún no han sido suficientemente valoradas en cuanto a justicia social y ambiental (Sen, 2000; Cedujo, 2006).

Por otro lado, existe la educación que se involucra en buscar soluciones a las problemáticas am-bientales y sociales, mismas que son consecuencia de tal modelo de desarrollo, específicamente la EA da cuenta de tales problemas y colabora en su solución. La EA se ha venido abriendo paso para atender las problemáticas ambientales y sociales resultantes del modelo de desarrollo vigente, “apa-

Page 5: Construcción de conocimiento y creencias epistemológicas sobre

Erick Cajigal Molina, Ana Lucía Maldonado González y Edgar González Gaudiano

56 Revista Interamericana de Educación de Adultos Año 38 • número 2 • julio - diciembre de 2016

rece como una propuesta viable para contribuir a enfrentar los problemas ambientales y sus conse-cuencias” (González y Arias, 2009: 59).

En México, la EA se encuentra integrada en todos los niveles de educación básica; después de va-rias décadas se ha logrado posicionar en la agenda educativa nacional de mejor manera (González, 2000). Sin embargo, se encuentran diversos sesgos y deficiencias que no han permitido que muestre eficacia en la solución de las problemáticas ambientales.

Al respecto, Terrón (2000) señala la necesidad de mejorar la estructura del contenido de los pla-nes y programas educativos formales en los que se incluya a la EA. Además, incluirla en actividades educativas y en la organización de los métodos de aprendizaje, todo esto considerando los propios desafíos del siglo XXI. En este mismo sentido, González (1994) señala la necesidad de desarrollar nuevas y más profundas estrategias de educación ambiental dirigidas a sectores y grupos clave.

El rol que los docentes juegan en el contexto social y educativo, podría permitirles posicionarse como grupos clave para el éxito de las acciones a favor de la EA impulsadas desde las escuelas. Sin embargo, como la problemática ambiental es determinada por diversos factores, entre ellos los pro-venientes de los procesos económicos y del estilo de desarrollo, para hacer aportes más consistentes es necesario que los docentes se involucren también en otros campos (Arias, 2001).

Adentrándonos en lo que ha sido y es la formación de los docentes de educación básica en México, encontramos que está involucrada en procesos de reformas educativas auspiciadas por organismos internacionales (i.e. Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos, OCDE, Fondo Monetario Internacional, FMI, Banco Mundial, BM y la Organización Mundial del Comercio, OMC), que no han permitido que se integren en su currículum disciplinas que pueden mejorar la resolución de las problemáticas ambientales; esto se debe a que dichos organismos res-ponden a los funcionamientos que favorecen los modelos capitalista y consumista (Chacón, 2005) que acarrean consecuencias sociales y ambientales; por tanto surgen acciones para introducir a los docentes en campos que no han sido parte de su quehacer.

Con base en afirmaciones de González (2004), identificamos esfuerzos por introducir a los do-centes en diferentes áreas que favorecen a la EA. Hoy en día, es claro que los docentes están incur-sionando en otros campos, que tienen contacto con información diferente a la que comúnmente manejaban, que se notan avances en el tratamiento pedagógico de las problemáticas ambientales; pero todavía tenemos asuntos que vislumbran la necesidad de enriquecer y mejorar las estrategias relacionadas con la EA, mismas que bien podrían fundamentarse mediante el estudio de las Creen-cias Epistemológicas (CE) en docentes y su impacto en la construcción del conocimiento sobre pro-blemáticas como el CC, sus causas y efectos.

La construcción del conocimiento y las creencias epistemológicas

El conocimiento es resultado de la interacción de los individuos con la sociedad mediante sus pro-cesos cognitivos, por lo que existen diferencias en los procesos de construcción del conocimiento en las personas debido a su edad, su cultura, su personalidad, el significado que dan a las situaciones u objetos y por sus habilidades intelectuales e interacción social. A lo largo de este apartado, trata-remos de dar cuenta de estos procesos cognitivos, apoyados en un enfoque teórico que integra una

Page 6: Construcción de conocimiento y creencias epistemológicas sobre

Construcción de conocimiento y creencias epistemológicas sobre cambio climático

57Revista Interamericana de Educación de Adultos Año 38 • número 2 • julio - diciembre de 2016

perspectiva constructivista y sociohistórica, además de dejar evidencia de cómo las CE impactan en la construcción del conocimiento y cómo se estudian.

En principio, el conocimiento es un término que puede ser entendido como “una contempla-ción porque conocer es ver; como una asimilación porque es nutrirse y como una creación porque conocer es engendrar” (Martínez y Ríos, 2006:112). Las formas de vivir en sociedad permiten que la mayoría de los conocimientos puedan ser compartidos y construidos entre los individuos por sus intercambios sociales; a través del conocimiento identificamos lo que pasa en el mundo y se puede modificar (Luque, 1993). El término en cuestión hace referencia a:

Los conocimientos comunes que las personas tenemos sobre el mundo y que utilizamos en nues-tra vida cotidiana; los conocimientos disciplinares sobre distintos ámbitos de la realidad natural y sociocultural, que conforman las distintas ciencias y saberes; los conocimientos sobre la propia identidad personal; los conocimientos sobre el conocimiento mismo (García, 2009: 2).

Para esta investigación, la epistemología del conocimiento se aborda desde un enfoque constructi-vista y sociohistórico porque ambos se consideran complementarios en el proceso de construcción del conocimiento en los sujetos; apoyando esta idea Delval (1991: 4) comenta:

Lo que parece claro es que si queremos explicar cómo se forman los conocimientos tenemos que examinar las transformaciones que tienen lugar en el interior del sujeto cuando éste forma un conocimiento nuevo y también la interacción entre la realidad con la que se enfrenta el sujeto y cómo éste la concibe.

Antes de abordar dichas perspectivas, es fundamental anticipar que ambas coinciden en la premisa de que para que el conocimiento exista es necesaria la relación de dos elementos: el sujeto y el objeto, es decir que es necesaria “la relación de un sujeto que aprende las propiedades de un objeto” (Maya-goitia, Ruíz y Villa, 1999: 17); “el sujeto no es otro que el ente particular que conoce su exterior, que recibe información de su circunstancia. Por el contrario, el objeto […] es en primera aproximación el mundo exterior, los entes circundantes, las cosas” (Luque, 1993: 4).

Ahora bien, la perspectiva sociohistórica plantea que los conocimientos son productos de la actividad social de los humanos. Los individuos construimos conocimientos mediante un proceso permanente en condiciones sociales específicas (Campos y Gaspar, 1999). “Todo nuestro conoci-miento sería el resultado del contacto con la realidad […] y es exterior a nosotros. El conocimiento sería una copia de la realidad y sería mejor en cuanto más fiel resulte la copia” (Delval, 1991: 2). Estas afirmaciones se mantienen en lo que llamaremos la primera etapa del proceso de construcción del conocimiento. Apoyados en Vygotsky (1995) se consideran dos funciones o etapas que se desarro-llan en los individuos, la primera aparece a nivel social y más tarde aparece a nivel individual “Son partes de un proceso único, el de la evolución de la formación de un concepto, que se encuentra afectado por las variaciones externas y las condiciones internas” (Vygotsky, 1995: 67), de esta última se enunciará en la perspectiva constructivista.

A nivel social, cuando se habla de función se hace referencia a lo que Vygotsky (1995) denominó procesos mentales superiores, los cuales se remiten a la comprensión, la adquisición de conceptos y

Page 7: Construcción de conocimiento y creencias epistemológicas sobre

Erick Cajigal Molina, Ana Lucía Maldonado González y Edgar González Gaudiano

58 Revista Interamericana de Educación de Adultos Año 38 • número 2 • julio - diciembre de 2016

lenguaje (Mendoza, 2010: 159). Dichos procesos mentales superiores son mediados por “herramien-tas, instrumentos, que son de creación social y como productos de la actividad humana a lo largo de su historia” (Mendoza, 2010: 160); en otras palabras, esta mediación se desarrolla en sociedades, entre la gente, en comunidades, grupos o díadas (Wertsch, 1985).

El acercamiento y captación de la realidad para la construcción de conocimientos dependerá de las herramientas o instrumentos con los que cada individuo cuenta, por lo que desde esta perspec-tiva consideramos que el conocimiento es acumulable, intercambiable y evolutivo, esto es, a través de la propia actividad y de la interacción social (Delval, 1991).

La concepción de la realidad es diferente de un grupo a otro, aun cuando se observe el mismo objeto. Berger y Luckmann (1968: 15) ejemplifican “Lo que es real para un monje del Tíbet puede no ser real para un hombre de negocios […] Se sigue de esto que las acumulaciones específicas de la rea-lidad y el conocimiento pertenecen a contextos sociales específicos”. Es así que los contextos sociales influyen en la construcción del conocimiento.

En lo que respecta a la perspectiva constructivista, ésta explica cómo se forman los conocimien-tos desde una posición psicológica que “establece que no podemos conocer la realidad tal y como es sino que construimos modelos de ella” (Delval, 2007: 2). A partir de esta posición, el individuo realiza su propia construcción de los conocimientos con ayuda de los instrumentos intelectuales de que dispone (Delval, 2007).

En ese sentido, “El constructivismo nos ayuda a entender qué es lo que sucede en el interior del sujeto cuando trata de formar nuevos conocimientos” (Delval, 1997: 53). El conocimiento es posible mediante la integración de la razón, implica la acción cognoscente del sujeto sobre el objeto, aquí lo importante no es el sujeto o el objeto, sino la relación entre éstos (Campos y Gaspar, 1999), ya que el sujeto no conoce directamente de las cosas, sino más bien de la información que recibe de ellas; por tanto, el conocimiento depende de la capacidad del sujeto de procesar la información que extrae del objeto, de ahí que “Todo conocimiento es información interpretada” (Sampieri y Ponce, 2011: 21).

Desde estas dos perspectivas, el conocimiento es un proceso que se considera dividido en dos momentos; el primero tiene que ver con la forma en que los individuos se acercan a la realidad para producir conocimiento (sociohistórico) y el segundo, el de cómo lo incorporan a su estructura cognitiva (constructivista). En otras palabras, el proceso va de lo social a lo psicológico. Por tanto, el conocimiento resulta de la actividad social y racional de los individuos.

En este proceso de construcción de conocimiento las CE tienen efecto. Éstas son construcciones sociales que los individuos adquieren a lo largo de su desarrollo (Hofer y Pintrich, 2002; Malbrán, 2009). Las CE están influidas por aspectos culturales y sociales de los individuos (Phan, 2008). Las CE también son conocidas como epistemología personal (Leal, Espinoza, Iraola y Miranda, 2009; Ponce y Carrasco, 2010;), supuestos epistémicos (Hofer y Pintrich, 2002) y concepciones implícitas (Malbrán, 2009).

Martínez, Montero y Pedrosa (2010: 4) señalan que las creencias son “productos de la mente cuya validación y justificación puede estar asentada en observaciones personales, en la autoridad de fuentes confiables, en inferencias lógicas, o en consensos culturalmente aceptados”, de ahí que las creencias epistemológicas hacen referencia a las concepciones o pensamientos que las personas sostienen acerca de la naturaleza del conocimiento y el proceso de conocer (Hofer y Pintrich, 2002).

Page 8: Construcción de conocimiento y creencias epistemológicas sobre

Construcción de conocimiento y creencias epistemológicas sobre cambio climático

59Revista Interamericana de Educación de Adultos Año 38 • número 2 • julio - diciembre de 2016

Las CE son una condicionante para el proceso de confiar, interpretar y procesar la información presentada en cualquier forma (oral, escrita y visual). Esta condicionante varía entre los individuos debido a que se desarrollan por su interacción con el mundo social y como resultado de las inter-venciones individuales y tienen efecto en la construcción del conocimiento (Ferguson et al., 2011).

Ahora bien, en el caso de los docentes, tal como lo señala Sarmiento (2011), el tipo de CE reper-cute en sus prácticas educativas ya que éstas ejercen efecto sobre sus decisiones dentro del aula y en la manera de instruir a sus alumnos.

Existen metodologías acerca de las CE (Sarmiento, 2009; Ponce, 2010; Ferguson et al., 2011; Sar-miento, 2011; Bråten et al., 2013) que nos permiten identificar las diferentes formas en que los indi-viduos construyen su conocimiento en determinados temas, además de evidenciar las condicio-nantes para el tránsito de la información de lo sociohistórico a la de internalización en los sujetos.

El estudio de las CE data de hace más de 30 años. Al respecto Perry (1968, en Malbrán, 2009) iden-tificó que un grupo de estudiantes universitarios sostenía que el conocimiento era simple, certero y que provenía de una figura de autoridad. Desde su inicio, este tipo de investigaciones han servido para interpretar las estrategias personales y la persistencia para construir conocimientos (Sarmien-to, 2011). Dicho de otra manera, al identificar las CE se pueden diseñar proyectos y estrategias de enseñanza (Malbrán, 2009).

De ahí que, con los elementos resultantes de este estudio, se pueden producir cambios en las estrategias de EA para los docentes. Esto mediante la construcción de conocimientos pertinentes de EA que permeen sus prácticas educativas, y que éstas trasciendan de los salones de clase. Asimismo, que contribuyan a buscar solución a problemáticas como el CC y sus efectos, que han resultado en desastres en poblaciones, sobre todo las que tienen un alto índice de marginación, por ejemplo, el municipio de Juchique de Ferrer, en Veracruz, México, al cual nos referimos en este estudio (Méxi-co, Consejo Nacional de Población, 2010).

Se dice que la identificación de las CE contribuye a la comprensión del conocimiento humano en temas específicos (Malbrán, 2009), pero ¿cómo se logran identificar las CE? Expertos en el área como Hofer y Pintrich (2002) encontraron que las CE se constituyen por cuatro dimensiones. Las primeras dos sobre la naturaleza del conocimiento, es decir, lo que se cree que es el conocimiento: certeza y simplicidad; y las otras dos sobre cómo se llega a conocer: fuente y justificación.

Dimensiones Pasivo Complejo

Certeza (el conocimiento es…). Absoluto y no cambiante. Tentativo y en evolución.

Simplicidad (el conocimiento es…)Acumulación de datos sin conexión.

Reconocer conceptos alta-mente relacionados.

Fuente (cómo se llega a conocer).Se origina fuera de uno mis-mo; reside en una externa y es transmitido por expertos.

Es construido activamente por la persona en interac-ción con otras.

Justificación (cómo se llega a conocer).

Se observa y se experimenta.Emplea normas de investi-gación, evaluación e integra-ción de diversas fuentes.

Tabla 1. Dimensiones epistemológicas y escala de valor

Fuente: Adaptado de Carrasco et al., 2008 en Ponce y Carrasco (2010).

Page 9: Construcción de conocimiento y creencias epistemológicas sobre

Erick Cajigal Molina, Ana Lucía Maldonado González y Edgar González Gaudiano

60 Revista Interamericana de Educación de Adultos Año 38 • número 2 • julio - diciembre de 2016

Cada dimensión en la Tabla 1 evidentemente contempla dos posibilidades de valoración que refieren a la complejidad de la naturaleza del conocimiento y su proceso, en esta investigación lo referiremos como pasivo o complejo.

Con base en lo anterior, los noruegos Strømsø, Bråten y Samuelstuen (2008) utilizaron un ins-trumento llamado Topic Specific Epistemological Beliefs Questionnaire (TSEBQ) que evalúa estas cuatro dimensiones. Este instrumento (entre otros) se utilizó en esta investigación sobre la cons-trucción de conocimiento de los docentes de educación primaria del municipio de Juchique de Fe-rrer (Veracruz, México), a partir de sus CE en temas de EA, en específico del CC. A continuación se describe el contexto y la metodología empleada.

La educación ambiental en zonas de vulnerabilidad ante CT

Los desastres, para que sucedan, evidentemente necesitan de un evento físico como una tormenta (ame-naza), aunque no es suficiente para que se materialicen. Debe existir una sociedad o subconjunto de ésta, vulnerable, para que se produzca una situación de desastre (Lavell, 2000). La vulnerabilidad hace referen-cia a “la predisposición, susceptibilidad o factibilidad física, económica, política o social que tiene una comunidad de ser afectada o de sufrir daños en caso de que un fenómeno desestabilizador de origen natural o antrópico se manifieste” (Cardona, 2001: 2). Las comunidades en condiciones de pobreza son las más vulnerables por amenazas climáticas debido a la fragilidad de sus elementos (Chardón y González, 2002; Ávalos y Thomas, 2007; Salamanca, 2009; Solbackk, 2011), como sus hogares y su organización social.

La educación en general, y en particular la EA, tienen una importante labor en zonas donde se re-gistran altas tasas de pobreza y de concentración y/o deterioro de recursos naturales. La educación es el factor más importante en la reducción de la pobreza, cuando los niveles educativos aumentan, se re-ducen las posibilidades de estar por debajo de la línea de la pobreza (Ordaz, 2009). En las zonas rurales donde se concentran los niveles más altos de pobreza existen las mayores desigualdades educativas en México (Ordaz, 2009); es el caso de las 32 localidades del municipio de Juchique de Ferrer, en Veracruz.

Cuando se habla de pobreza no sólo se hace referencia al aspecto económico, sino también a la falta de servicios sociales, tales como salud y educación. Es bien conocido que las poblaciones rurales carecen de servicios médicos y educativos de calidad. En esta zona de estudio, la educación tiene los mismos problemas que se presentan a nivel nacional, como el sindicalismo, los enfoques partidistas en los contenidos educativos y la mala capacitación de los docentes, por mencionar algu-nos ejemplos. Pero además de estos problemas se suman los que ocasiona la pobreza: desnutrición, explotación infantil, enfermedades, deserción escolar, etcétera.

La EA juega un papel muy importante en el municipio de Juchique de Ferrer, donde la pobreza y la desigualdad están presentes. Es necesario, en primer lugar, inducir un cambio en el concepto de desarrollo desde estos lugares donde la población es víctima inconsciente de sus efectos, pues cada vez es mayor la distancia entre pobres y ricos, además de perpetuarlos en esas condiciones. En segundo lu-gar, contribuir a dar solución a las problemáticas ambientales tales como: la contaminación de los ríos por la pulpa del café y las aguas negras, la pérdida de los manantiales y la tala forestal inmoderada, ya que la mayoría de sus localidades cuentan con diversos recursos naturales (bosques de tipo mediano, nacimientos de agua y ríos) y su explotación tiene consecuencias ambientales sociales y económicas.

Page 10: Construcción de conocimiento y creencias epistemológicas sobre

Construcción de conocimiento y creencias epistemológicas sobre cambio climático

61Revista Interamericana de Educación de Adultos Año 38 • número 2 • julio - diciembre de 2016

Juchique es un municipio vulnerable ante los CT. Un ejemplo es lo acontecido en el año 2013, con los CT Barry, Fernando e Ingrid, las cuales pueden estar relacionadas con el CC por la intensidad y frecuencia en la que se presentaron y que, combinadas con algunas actividades sociales y económicas de los po-bladores, resultaron en desastres en este municipio y en otros más del estado de Veracruz.

De ahí la importancia de identificar la construcción del conocimiento a partir de las CE en el tema del CC, en los docentes del municipio de Juchique de Ferrer, brindando elementos puntuales que pueden contribuir a fortalecer las estrategias educativas en este grupo, considerado clave en la resolución de los problemas ambientales y sociales, mediante la EA que difunden en el aula.

Ubicación geográfica y situación sociodemográfica de Juchique de Ferrer, un municipio vulnerable

Juchique de Ferrer se localiza en la región centro-norte del estado de Veracruz; colinda con los mu-nicipios de Colipa, Yecuatla, Alto Lucero, Vega de la Torre y Chiconquiaco. Tiene una población de 16,387 habitantes, concentrada en 32 localidades, de las cuales 30 no rebasan los dos mil habitantes (México, Instituto Nacional de Estadística y Geografía, 2010).

El municipio cuenta con 146 escuelas de educación básica y media superior, de las cuales 46 son de educación primaria, donde los cursos son impartidos por un total de 136 docentes. En 2010 egre-saron 249 alumnos de preescolar, 390 de primaria y 156 de bachillerato. El grado promedio de estu-dios en el municipio era de 5.6 en 2010 (México, Instituto Nacional de Estadística y Geografía, 2010).

Las principales actividades económicas son la agricultura (café, maíz, frijol y chile) y la ganade-ría (leche bovino y carne de bovino y porcino). Tiene actividades secundarias como la producción de miel, la producción de huevo y la crianza de gallinas para alimentación (México, Instituto Na-cional de Estadística y Geografía, 2010).

El sector salud del municipio cuenta con siete clínicas distribuidas en diferentes localidades con un total de 13 médicos, que atienden a 9,012 pobladores con derecho a Seguro Popular, Seguro Social a través del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) o del Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (ISSSTE). El resto de la población (7,375) no cuenta con algún tipo de servicio de salud pública (México, Instituto Nacional de Estadística y Geografía, 2010).

En el sector de comunicación y transporte, se cuenta con carreteras de terracería y con un servi-cio de 116 taxis locales que ofrecen servicios colectivos; cuentan con cobertura telefónica en todas las localidades, pero no existe cobertura de telefonía celular, excepto en la cabecera municipal y en la co-munidad Plan de las Hayas (las únicas comunidades que rebasan los dos mil habitantes). Hay servicio doméstico de electricidad en todas las localidades y de drenaje en la mayoría de ellas (no está disponi-ble el dato exacto); la provisión de agua potable es gracias a los nacimientos de agua y a la organización de los habitantes de cada comunidad. Existe a partir de marzo de 2014 el servicio de recolección de basura para todas las comunidades, antes de esa fecha sólo existía para la cabecera municipal y para la comunidad Plan de las Hayas, el resto de las comunidades quemaba sus desechos.2

2. Información obtenida por Cajigal, quien ha vivido en este municipio durante los fines de semana desde agosto del 2012.

Page 11: Construcción de conocimiento y creencias epistemológicas sobre

Erick Cajigal Molina, Ana Lucía Maldonado González y Edgar González Gaudiano

62 Revista Interamericana de Educación de Adultos Año 38 • número 2 • julio - diciembre de 2016

Este municipio fue afectado en el año 2013 por fenómenos naturales, las tormentas Barry (junio), Fernando (agosto) e Ingrid (septiembre), las cuales resultaron en desastres que perjudicaron a la mayoría de la comunidad. Dichos eventos ocasionaron múltiples derrumbes sobre las carreteras, así como crecidas de los ríos que arrastraron puentes que conectaban a comunidades dentro del municipio y con otras ciudades como: Xalapa, Misantla y Palma Sola. Tales ciudades han servido como opción para encontrar mejores servicios de salud, de educación y de adquisición de diversos productos que en Juchique de Ferrer no se encuentran. Además, en casos particulares, las crecidas de los ríos La Esperanza y Plan de la Flor, ubicados en las comunidades con el mismo nombre, arras-traron casas y vehículos, resultando en pérdidas económicas severas para una zona considerada con nivel alto de marginación (México, Consejo Nacional de Población, 2010).

Por sus condiciones sociales, económicas y demográficas, así como por la frecuencia e intensi-dad de los fenómenos naturales que se presentan, se establece que Juchique de Ferrer se encuentra en situación de vulnerabilidad ante este tipo de eventos, por la prolongación de los mismos y por la magnitud de sus efectos.

Los desastres vividos después de las tormentas de 2013 en la zona referida, no son sólo causa de estas últimas; los desastres se derivan de procesos que se van gestando socialmente y que se mani-fiestan por los efectos de los CT. Los estilos de vida y el modelo de desarrollo que impera en nuestros días son generadores de desastres y al mismo tiempo contribuyen a las problemáticas ambientales como el CC.

Para el caso del municipio de Juchique de Ferrer la gestación de los desastres se puede enten-der, por ejemplo, cuando se piensa en la deforestación. Las razones por las cuales los pobladores talan son principalmente de corte económico: fabricación de muebles, construcción de inmuebles, cambio de finca de café a potreros para el pastoreo, principalmente.3 Ahora bien, “los bosques jue-gan un papel determinante en la captación del agua de lluvia, y la presencia de éstos da una mayor oportunidad para que el agua pueda infiltrarse al subsuelo” (Basáñez, 2007: 6), por lo que al tener menor presencia de bosques, se reduce la captación de lluvia creando corrientes de agua en lugares donde no existían y/o se intensifica la afluencia de los ya existentes, incrementando el riesgo de los pobladores de la zona y, en consecuencia, su vulnerabilidad ya existente.

Debido a la magnitud de los desastres, después de los CT en el 2013 y agravado esto por las accio-nes de la población, es urgente reducir el nivel de vulnerabilidad y desarrollar resiliencia.

Metodología

El estudio que origina la presente publicación, se realizó a partir de la metodología utilizada en una serie de investigaciones de la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla (BUAP) (Sarmiento, 2009; Ponce, 2010; Ponce y Carrasco, 2010) sobre las habilidades lectoras de estudiantes de licencia-tura y/o bachillerato con la lectura de textos múltiples sobre el tema CC, teniendo como objetivo

3. Por la experiencia vivida de Cajigal en la zona, desde 2012 a la fecha.

Page 12: Construcción de conocimiento y creencias epistemológicas sobre

Construcción de conocimiento y creencias epistemológicas sobre cambio climático

63Revista Interamericana de Educación de Adultos Año 38 • número 2 • julio - diciembre de 2016

común el entendimiento, diagnóstico y estudio de las CE en dichos estudiantes. Los trabajos de la BUAP a su vez replicaron un estudio noruego (Strømsø et al., 2008).

Se realizó un estudio mixto mediante la aplicación de un conjunto de siete instrumentos y cinco textos adaptados (insumo) de los estudios realizados en la BUAP, más el instrumento adicionado. La metodología mixta se consideró por efectos de complementariedad entre los métodos cuantitativos y cualitativos, ya que se “[…]trata de buscar y también reconocer otras formas válidas y aceptables de hacer ciencia que no sigan los cánones prefijados por uno de los enfoques” (Álvarez, 1982: 10).

En la investigación se decidió utilizar la misma selección de instrumentos de Sarmiento et al. (2009) por su similitud con la investigación pionera de Noruega, adicionando un instrumento y realizando adaptaciones al resto de los instrumentos. Con tal selección pretendemos dar respuesta a la pregunta

Aspectos explorados Tipo de instrumento y descripción

Datos

Encuesta que refiere a la información que los docentes reportan desde su auto-valoración sobre su situación sociodemográfica, además de un acercamiento a tres áreas: prácticas tecnológicas, percepción de los desastres y el acceso a la información de su interés. Contiene 27 ítems, de los cuales siete refieren a su situación demográfica en pregunta abierta, seis al acercamiento a sus prácticas tecnológicas que son valoradas, las primeras tres con dos posibilidades (sí y no) y las restantes se valoran en escala Likert de 10 puntos; además de nueve ítems sobre su percepción de los desastres y cinco sobre acceso a la información de su interés; estos últimos también son valorados en escala Likert de 10 puntos.

Conocimiento previoEncuesta que evalúa el conocimiento que los docentes tienen acerca del cam-bio climático.

Interés en el temaEncuesta que mide el interés personal de los docentes y su compromiso con temas y actividades relacionadas con el tema del cambio climático. Consta de 12 ítems evaluados con escala Likert de 10 puntos.

Creencias epistemológicasEncuesta que evalúa las cuatro dimensiones de las creencias epistemológicas: certeza, simplicidad, fuente y justificación. Consta de 49 ítems evaluados en escala Likert de 10 puntos.

InsumoSe presenta un conjunto de cinco textos que contienen información acerca del cambio climático con ideas que difieren entre sí.

Inferencia IntratextualEncuesta. A partir de la lectura de los múltiples textos se mide el grado en que juzgan y relacionan la información de un texto con la fuente del mismo. Cons-ta de 15 afirmaciones en formato de respuesta correcta e incorrecta.

Inferencia IntertextualEncuesta. A partir de la lectura se mide el grado en que relacionan los textos leídos acerca del cambio climático. Consta de 15 afirmaciones en formato de respuesta correcta e incorrecta

Resumen/Reporte

Ejercicio que confirma la inferencia intratextual e intertextual de los docentes y aporta información sobre qué tanto de los contenidos leídos anteriormente se retiene. Permite realizar cruces con las dimensiones de las creencias episte-mológicas de los docentes.

Fuente: Adaptado de Sarmiento, Carrasco y Tello (2009); Sarmiento (2009); Ponce (2010).

Tabla 2. Instrumentos

Page 13: Construcción de conocimiento y creencias epistemológicas sobre

Erick Cajigal Molina, Ana Lucía Maldonado González y Edgar González Gaudiano

64 Revista Interamericana de Educación de Adultos Año 38 • número 2 • julio - diciembre de 2016

de ¿cómo se construye el conocimiento sobre el cambio climático en docentes de educación primaria, a partir de sus creencias epistemológicas? El objetivo de esta investigación, por ende, fue identificar las creencias epistemológicas en docentes de educación primaria del municipio de Juchique de Ferrer, y va-lorar su impacto en la construcción de conocimiento sobre el cambio climático, a fin de contribuir a la solución de tal problemática, así como a la reducción de la vulnerabilidad de esta zona.

Por la complejidad de comprender y atender problemas como el CC y sus efectos, la batería de instrumentos abarca la construcción del conocimiento en el tema CC, así como la valoración de conocimientos previos en el tema y el grado de validez, confiabilidad e interpretación que los do-centes dan a diferentes textos que se presentaron con ideas opuestas sobre el CC y la relación que guardan las CE con su percepción sobre los CT que han detonado desastres en el municipio, con su percepción lectora, con el acceso a las tecnologías de la información y con el acceso a la información de su interés. Todo ello en función de brindar elementos que pudieran ser utilizados más adelante en el diseño de mejores estrategias de EA para este grupo clave.

Los instrumentos incluidos en la Tabla 2 se aplicaron en el orden presentado a docentes de edu-cación primaria del municipio de Juchique de Ferrer en Veracruz; los sujetos participantes resulta-ron de un muestreo por cuotas, es decir, se segmentó a la población de acuerdo con su distribución geográfica para tratar de cubrir la mayor extensión posible.4

Por cuestiones de espacio, nos limitamos a presentar en esta publicación los hallazgos relaciona-dos con las CE, conocimiento e interés sobre el CC y el acercamiento a la percepción de los desastres. Los resultados del resto de los instrumentos se pueden consultar en Cajigal (2014).

Las creencias epistemológicas en los docentes de Juchique de Ferrer y la aproximación sobre su percepción de los desastres

Los resultados del instrumento TSEBQ (Topic Specific Epistemological Beliefs Questionnaire) o Creencias Epistemológicas (Cajigal, 2014) (Anexo) permiten identificar que, de las cuatro dimensio-nes para determinar las CE, en esta investigación resultaron dos dimensiones (certeza y justificación) con un posicionamiento cargado hacia alguno de los extremos (bajo y alto) y en las dimensiones restantes existió una distribución equitativa.5

La dimensión Certeza se refiere a la forma en que la persona percibe al conocimiento: absoluto y no cambiante (pasiva) o bien tentativo y en constante desarrollo (compleja). En esta dimensión una

4. Se aplicó al 22% de la población total de docentes de primaria del municipio. También hicimos una segmentación con porcio-nes similares de los participantes, para enriquecer el análisis: el primer grupo se abocó a los docentes de 27 a 34 años (menor edad), el segundo grupo a los de 35 a 46 años (mediana edad) y el tercero a los de 46 a 56 años (mayor edad).

5. El grado bajo refiere a la valoración Pasiva y el grado alto a la valoración Compleja; existe el grado medio que da cuenta de docentes sin un posicionamiento determinante en alguno de los valores.Las dimensiones restantes son Simplicidad, refiere si el conocimiento es la acumulación de datos sin conexión (pasivo) o si reco-noce conceptos altamente relacionados (complejo); Fuente refiere si el conocimiento se origina fuera de uno mismo, si reside en una autoridad externa y es transmitido por expertos (pasivo) o si es construido activamente por la persona en interacción con otras (complejo) (Ponce y Carrasco, 2010). Por otro lado, sólo se anexa el cuestionario Creencias Epistemológicas por cuestiones de espacio. Este instrumento tiene relación con los objetivos trabajados y evidenciados en este artículo.

Page 14: Construcción de conocimiento y creencias epistemológicas sobre

Construcción de conocimiento y creencias epistemológicas sobre cambio climático

65Revista Interamericana de Educación de Adultos Año 38 • número 2 • julio - diciembre de 2016

considerable parte de los maestros participantes (43%) tienen una dimensión Certeza Compleja, esto es, que creen que el conocimiento es provisional y puede cambiar.

En otras investigaciones similares, realizadas con estudiantes universitarios, los resultados en cuanto a esta dimensión difieren. En Ponce (2010) se reporta ausencia de la dimensión certeza, es decir, que hubo una distribución equitativa de los participantes, lo cual no permitió evidenciar un posicionamiento como grupo.

Sin embargo, para esta investigación, una concepción de este tipo es conveniente, debido a la complejidad de los problemas ambientales y sociales. Es necesario introducir a los docentes a disci-plinas que no han sido parte de su formación tradicional; se ha detectado que pueden tener apertura y estar receptivos a temas adicionales a su formación, como los relacionados con la educación am-biental, ya que su conocimiento es tentativo y en constante desarrollo.

Al profundizar en el estudio, encontramos que los docentes (como grupo) tienen una dimen-sión de certeza compleja, pero cuando hacemos un análisis por subgrupos de edad es evidente que la certeza compleja se concentra en los docentes de menor edad (56%) y mediana edad (46%), contra-riamente a los de mayor edad, quienes con más de la mitad (60%) se ubican en la dimensión de certe-za pasiva (perciben al conocimiento como absoluto y no cambiante), haciendo claras las diferencias en las características de las CE por la edad que se tiene.

En cuanto a la dimensión Justificación de la presente investigación, la cual refiere si el conoci-miento se justifica a través de lo que se percibe como correcto (pasivo) o sobre si se llega a conocer mediante el uso de normas de investigación, evaluación e integración de diferentes fuentes (com-plejo), el instrumento evidenció que más de la mitad (53%) de los participantes, se posicionan en una dimensión de Justificación Pasiva. Es decir, los docentes creen que llegan a conocer observando y experimentando, se posicionan ajenos a las metodologías de investigación necesarias para explorar y articular diversas fuentes que podrían enriquecer sus conocimientos.

Este resultado es diferente al identificado en jóvenes de bachillerato que participaron en la in-vestigación de Sarmiento (2009), los cuales resultaron con una justificación compleja, es decir, que emplean normas de investigación, evaluación e integran diversas fuentes; contrariamente, los do-centes creen que llegan a conocer observando y experimentando.

De esto último, la concepción de la naturaleza del conocimiento y el proceso de conocer que dan cuenta las dimensiones certeza y justificación, respectivamente, son diferentes entre los grupos de investigación (el presente estudio, Sarmiento (2009) y Ponce (2010), e incluso en un mismo grupo de estudio cuando se segmenta por edad; esto se puede entender mejor a través de la perspectiva socio-histórica, en la cual, entre otras cosas, plantea que la construcción del conocimiento es un proceso per-manente que sucede en condiciones sociales específicas (Campos y Gaspar, 1999), además de que las CE son construcciones sociales que los individuos adquieren a lo largo de su desarrollo (Hofer y Pintrich, 2002; Malbrán, 2009), y están influidas por aspectos culturales y sociales de los individuos (Phan, 2008).

En el análisis de la dimensión justificación, en el grupo de docentes, señalamos que tiene dimen-sión justificación pasiva, pero al incluir la variable edad (subgrupos) nos da cuenta que los de menor edad no se posicionan y se distribuyen sin diferencias determinantes (bajo 33%, medio 44% y alto 22%), sin embargo, los de mediana y mayor edad se cargan hacia el grado bajo (55% y 70%, respecti-vamente), por tanto, éstos dos últimos son lo que más aportan para que la dimensión justificación sea pasiva como grupo, confirmando una relación entre la edad y el tipo de CE.

Page 15: Construcción de conocimiento y creencias epistemológicas sobre

Erick Cajigal Molina, Ana Lucía Maldonado González y Edgar González Gaudiano

66 Revista Interamericana de Educación de Adultos Año 38 • número 2 • julio - diciembre de 2016

Con respecto a las dimensiones Fuente y Simplicidad, en este grupo de docentes no encontra-mos variaciones significativas; lo que significa que cantidades similares de docentes se ubican en las tres graduaciones (alto, medio y bajo) de dichas dimensiones. Por tanto, para dar cuenta de lo que este grupo cree que es el conocimiento y cómo llegan a conocer, se consideran aquí los resultados de las dimensiones Certeza y Justificación. Es decir, las dimensiones de las CE y sus características en los participantes docentes de educación primaria de Juchique de Ferrer son las siguientes:

•Certeza compleja: conciben el conocimiento como tentativo y en evolución.•Justificación pasiva: creen que se llega a conocer mediante observaciones y experiencias.

La identificación de las CE y sus características tienen impacto en la construcción del conocimiento sobre el CC en los docentes, han condicionado los procesos de confiar, validar, interpretar y proce-sar la información que se les ha presentado del tema, aunque se tiene presente que esta condición varía entre los individuos por sus interacciones con el mundo social y por sus intervenciones indi-viduales (Ferguson et al., 2011).

El resultado anterior hace que se considere a los docentes como sujetos que llegan a conocer por medio de la observación y la experimentación, encontrándolos ajenos a las metodologías de investigación necesarias para explorar y articular diversas fuentes que podrían enriquecer sus co-nocimientos; visto de otra forma, su proceso de conocer es pertinente para los formatos tradiciona-les de enseñanza. Por lo que, si se piensa en introducir a los docentes en otras disciplinas, este dato debe ser considerado para establecer las estrategias que puedan permitir atender otros problemas ambientales.

En cuanto al acercamiento a su percepción de desastres de los docentes, los resultados estuvie-ron concentrados en extremos contrarios. La idea del origen de los desastres, así como el grado de afectación por CT del 2013 en la zona de Juchique de Ferrer, es opuesta (40% en grado alto, y 47% en grado bajo).

El resultado anterior es preocupante ya que, como hemos dicho, los desastres son procesos que se van gestando socialmente y sólo están a la espera de un CT para manifestarse (Ruíz, 2005); en este caso, por ejemplo, la deforestación y las actividades productivas junto con su situación socioeconó-mica y las tormentas del año 2013 (Barry, Fernando e Ingrid) resultaron en desastres que afectaron a la mayoría de la comunidad; sin embargo, cerca de la mitad de los docentes (47%), considera que no existe incremento en la magnitud de los desastres, que las acciones del hombre no contribuyeron a generar los desastres en la zona, aunque al preguntarles si los desastres tienen que ver con el CC la mayoría (97%) estuvo de acuerdo. Ello significa que para el caso particular de los desastres en el mu-nicipio, no existe contribución del hombre, pero para el CC sí; dando cuenta del desconocimiento en el tema y de su responsabilidad en los desastres.

Además, identificamos que los docentes tienen un alto interés (50%) sobre el tema del CC. Este re-sultado coincide con los hallazgos en investigaciones sobre la percepción pública del CC en los últimos años que reportan Oltra, et al. (2009), en donde se enfatiza que existe una alta preocupación entre los ciudadanos por los problemas medioambientales (la contaminación, la destrucción de la capa de ozo-no y el CC), aunque esta preocupación o interés siempre es menor a la existente con otros problemas, como por ejemplo el tema de la seguridad que se señala en González y Maldonado (2013).

Page 16: Construcción de conocimiento y creencias epistemológicas sobre

Construcción de conocimiento y creencias epistemológicas sobre cambio climático

67Revista Interamericana de Educación de Adultos Año 38 • número 2 • julio - diciembre de 2016

En cuanto al conocimiento del CC, resultó que 43% conocen muy poco sobre el cambio climático. Es claro que el conocimiento del tema por parte de los docentes no es por sí sola la solución a los complejos desafíos de la EA que se han mencionado a lo largo de esta investigación; sin embargo, se considera que podría ofrecer mejores posibilidades a su solución si se divulgara entre los estudiantes.

En este sentido, interesó identificar la vía por la cual ellos se informan acerca del CC. La mayoría de los docentes (93%) manifestaron en el instrumento Datos (Tabla 1) que a través de los medios de comunicación aprenden acerca del CC. Esto es congruente con la manera en que ellos creen que se llega a conocer, que es a través de la observación y la experimentación dejando de lado el uso de métodos de investigación, evaluación e integración de diversas fuentes; sin embargo, consideran provisional la información recibida por estos medios, por lo que puede cambiar; en otras palabras, el conocimiento que tienen acerca del CC es resultado del contacto con la realidad, en donde en-contramos que los medios de comunicación son su fuente principal de información, es decir, que social y culturalmente validan y justifican la información que de tales medios proviene, aunque consideran que más adelante la información puede ser diferente.

Si bien la información proveniente de los medios se considera temporal (dimensión certeza com-pleja: conciben al conocimiento como tentativo y en evolución), lo preocupante es que para los do-centes de educación primaria de Juchique de Ferrer sean los medios de comunicación su fuente de información sobre el CC, porque tal información carece de rigor; los medios intentan explicar en tér-minos sencillos y fáciles la naturaleza y la magnitud del CC, destacan los daños que ocasionan los fenómenos, sus costos económicos, pero al mismo tiempo ocultan las responsabilidades del gobierno y del sector privado; al hacerlo, la información se vuelve confusa, impropia y distorsionada (González y Maldonado, 2013). Lo anterior se confirma por el sentido de responsabilidad contradictorio y el bajo conocimiento del tema; se puede decir que tal información carece de un carácter complejo, lo que impide construir conocimientos sobre el CC sin una posición crítica, restando relevancia al problema y por ende, obstaculizando la formación de compromisos individuales en los docentes y alumnos.6

Conclusiones

Esos resultados en su conjunto ofrecen una aproximación a la realidad que guarda la EA en los espa-cios escolares, donde temas como el CC se conciben por la mayoría de los docentes como problemas aislados, ajenos a sus comunidades y por tanto creen que sus actividades cotidianas no repercuten en el incremento de la magnitud de los desastres, aunque sí con el CC (sentimiento de responsabili-dad contradictorio); desconocen la complejidad que este tipo de problemáticas tiene y, por tanto, su difusión que en esencia debería de contribuir a su solución, no logra ser pertinente y más bien llega a ser más parte del problema que de la solución.7

6. El sentido de responsabilidad contradictorio tiene que ver con la percepción sobre la influencia de las actividades de las perso-nas como generadoras del CC, pero que dichas actividades no tienen relación con los desastres después de las tormentas del 2013 en la zona.

7. Un ejemplo sería la separación de basura y reciclaje que se impulsan frecuentemente en las escuelas. En tales actividades se convoca a los estudiantes a recolectar la mayor cantidad de objetos reciclables, compitiendo entre ellos; como resultado, los estudiantes hacen compras innecesarias para obtener los materiales reciclables. Otro ejemplo es la creación de huertos esco-lares en donde se utilizan semillas transgénicas.

Page 17: Construcción de conocimiento y creencias epistemológicas sobre

Erick Cajigal Molina, Ana Lucía Maldonado González y Edgar González Gaudiano

68 Revista Interamericana de Educación de Adultos Año 38 • número 2 • julio - diciembre de 2016

Con lo anterior, no se pretende hacer ver a los docentes como responsables de la falta de eficacia de las acciones de la EA desde las instituciones educativas, ya que entre otras cosas se encuentra al sistema educativo en gran medida como responsable, al privilegiar contenidos que desarrollan ha-bilidades en los individuos para contribuir al crecimiento económico sobre los contenidos referen-tes a la EA. Ello se evidencia en el Plan de Estudios 2011 de Educación Básica, en donde se encuentra una marcada tendencia a educar para apoyar al desarrollo económico del país y una discreta men-ción sobre el cuidado del medio ambiente. Lo anterior también se refleja en el bajo conocimiento sobre el CC; los resultados evidenciaron que los maestros han aprendido del tema fuera de las insti-tuciones escolares como en los medios de comunicación y no en las capacitaciones oficiales, ni por el contenido de los libros de texto.8

En la presente investigación, las dimensiones Simplicidad y Fuente no brindaron datos determi-nantes para ser consideradas en el análisis; sin embargo, la dimensión Certeza que hace referencia a las ideas que los docentes tienen acerca de lo que es el conocimiento y la dimensión Justificación de los pensamientos, acerca de cómo se llega a conocer, sí ofrecieron datos para establecer que los docentes participantes conciben al conocimiento como tentativo y en evolución (certeza compleja) y que se llega a conocer mediante observaciones y experiencias (justificación pasiva).

Por tanto, se puede decir que este tipo de CE y sus características identificadas en los docentes, han tenido impacto en la construcción del conocimiento sobre el CC y han condicionado los pro-cesos de confiar, validar, interpretar y procesar la información referente al tema, situándolos como agentes receptivos de información; esto es, que validan y a su vez incorporan la información que ofrecen los medios de comunicación, por lo que creen que es cierto y correcto, aunque tal informa-ción la ven como tentativa y en desarrollo.

Referencias bibliográficas

Acosta, R. y K. Romero (2011), “Cotaxtla: un municipio que se levanta del desastre. Estrategias sustentables ante la presencia del cambio climático”, en A. Tejeda (ed.), Inundaciones 2010 en el estado de Veracruz, México, Consejo Veracruzano de Investigación Científica y Desarrollo Tecnológico, pp. 414-431.

Álvarez, J. M. (1982), “Investigación cuantitativa/Investigación cualitativa: ¿una falsa disyuntiva?”, en T. Cook y C. Reichardt (eds.), Métodos cuantitativos y cualitativos en investigación evaluativa, Madrid, Morata, pp. 9-23.

Arias, M. A. (2001), La formación profesional de los educadores ambientales en México. Algunos puntos de partida para su discusión. Carpeta informativa del Centro Nacional de Educación

8. Cabe decir que para este grupo, los hombres saben un poco más sobre este tema, que las mujeres. En documentos de or-ganizaciones internacionales (Grupo Interagencial de Género, s/f), se señala que el hecho de que los hombres posean más información que la mujeres sobre este tipo de temas se debe a razones culturales, debido a que las mujeres se encuentran fuera de los ámbitos donde se distribuye la información.

Page 18: Construcción de conocimiento y creencias epistemológicas sobre

Construcción de conocimiento y creencias epistemológicas sobre cambio climático

69Revista Interamericana de Educación de Adultos Año 38 • número 2 • julio - diciembre de 2016

Ambiental de España, 326-337, en http://anea.org.mx/docs/Arias-Profesionalizacion.pdf (consultado el 13 de septiembre de 2014).

Ávalos, D y E. Thomas (2007), Medición de la vulnerabilidad social. Un análisis de los alumnos de Infocap. Chile: Universidad Católica de Chile y Centro de Estudios Infocap, en www.infocap.cl/web/pdf/Informe_Final_Medicion_Vulnerabilidad_Social.pdf (consultado el 13 de septiembre de 2014).

Basáñez, M. A. (2007), Aporte de agua pluvial al acuífero de la zona metropolitana del valle de México captada en azoteas y edificios. Tesis de Maestría. Centro Interdisciplinario de Investigaciones y Estudios sobre Medio Ambiente y Desarrollo. Instituto Politécnico Nacional. Ciudad de México, en http://itzamna.bnct.ipn.mx/dspace/bitstream/123456789/3197/1/APORTEAGUA.pdf (consultado el 20 de septiembre de 2014).

Berger, P. y T. Luckmann (1968), La construcción social de la realidad, Argentina, Amorrortu.

Bermúdez, M. (1993), “Vulnerabilidad social y organización ante los desastres naturales”, en Revista de Ciencias Sociales, núm. 62, pp. 131-141, en http://revistacienciassociales.ucr.ac.cr/wp-content/revistas/62/bermudez.pdf (consultado el 3 de diciembre de 2014).

Bråten, I. et al. (2013), “Prediction of learning and comprehension when adolescents read multiple texts: the roles of word-level processing, strategic approach, and reading motivation”, en Revista Reading and Writing, núm. 3, vol. 26, pp. 321-348, en http://link.springer.com/article/10.1007%2Fs11145-012-9371-x (consultado el 3 de marzo de 2014).

Cajigal, E. (2014), Las creencias epistemológicas en docentes de educación primaria y su impacto en la construcción de conocimiento sobre el cambio climático. Tesis de maestría. Instituto de Investigaciones en Educación. Universidad Veracruzana. Veracruz, México, en www.uv.mx/mie/files/2012/10/Tesis_Erick-Cajigal-Molina.pdf (consultado el 3 de marzo de 2015).

Campos, M. A. y S. Gaspar (1999), “Representación y construcción del conocimiento”, en Revista Perfiles Educativos, núm. 83,84, vol. 21, pp, 27-49, en http://132.248.192.201/seccion/perfiles/1999/n83-84a1999/mx.peredu.1999.n83-84.p27-49.pdf(consultado el 3 de junio de 2014).

Cardona, O. D. (2001), La necesidad de repensar de manera holística los conceptos de vulnerabilidad y riesgo. Una Crítica y una Revisión Necesaria para la Gestión. Trabajo presentado en la Work Conference on Vulnerability in Disaster Theory and Practice, Wageningen, Holanda. Resumen, en http://www.desenredando.org/public/articulos/2003/rmhcvr/rmhcvr_may-08-2003.pdf (consultado el 3 de junio de 2014).

Carreto, R. (2010), “Resiliencia. Una visión positiva para la prevención e intervención desde los servicios escolares”, en Nómadas. Revista Crítica de Ciencias Sociales y Jurídicas, núm. 3, vol. 27, en http://pendientedemigracion.ucm.es/info/nomadas/27/raulcarretero.pdf (consultado el 3 de diciembre de 2014).

Cedujo, R. (2006), “Desarrollo humano y capacidades. Aplicación de la teoría de las capacidades de Amartya Sen a la educación”, en Revista Española de Pedagogía, núm. 234, pp. 365-380, en http://revistadepedagogia.org/2007060249/vol.-lxiv-2006/nº-234-mayo-agosto-2006/desa-rrollo-humano-y-capacidades.-aplicaciones-de-la-teoria-de-las-capacidades-de-amartya -sen-a-la-educacion.html (consultado el 3 de agosto de 2014).

Chacón, P. (2005), “La formación pedagógica de los profesores de educación básica en México” en Revista Observatorio Ciudadano de la Educación, núm. 190, vol. 5, pp. 1-9, en http://www.observatorio.org/colaboraciones/chacon2.html (consultado el 5 de septiembre de 2014).

Chardon, A. C. y J. L. González (2002), Amenaza, Vulnerabilidad, Riesgo, Desastre, Mitigación, Prevención. Primer acercamiento a conceptos, características y metodologías de análisis y

Page 19: Construcción de conocimiento y creencias epistemológicas sobre

Erick Cajigal Molina, Ana Lucía Maldonado González y Edgar González Gaudiano

70 Revista Interamericana de Educación de Adultos Año 38 • número 2 • julio - diciembre de 2016

evaluación, en http://idea.unalmzl.edu.co/documentos/Anne-Catherine%20fase%20I.pdf (consultado el 3 de diciembre de 2014).

CNN México (2013), “Las cifras del desastre por Manuel e Ingrid”, en www.mexico.cnn.com/nacional/2013/09/24/las-cifras-del-desastre-por-manuel-e-ingrid (consultado el 13 de febrero de 2014).

Delval, J. (1991), “Notas sobre la construcción del conocimiento social”, en I. Alonso (ed.), Sociedad, Cultura y Educación, España, Centro de Investigación y Documentación Educativa, Universidad Complutense de Madrid.

Delval, J. (1997), “¿Cómo se construye el conocimiento?”, en Revista Kikiriki Cooperación Educativa, núms. 42,43, pp. 44-54. en http://antoniopantoja.wanadooadsl.net/recursos/varios/cons_cono.pdf (consultado el 3 de diciembre de 2014).

Delval, J. (2007), “Aspectos de la construcción del conocimiento sobre la sociedad”, en Revista Educar, Curitiba, núm. 30, pp. 45,64, en http://www.scielo.br/pdf/er/n30/a04n30 (con-sultado el 3 de abril de 2014).

Ferguson, L. E., I. Bråten y H.I. Strømsø (2011), “Epistemic Cognition When Students Read Multiple Documents Containing Conflicting Scientific Evidence: A think-aloud study”, en Revista Elsevier, núm. 22, pp. 103-120, en http://www.journals.elsevier.com/learning-and-instruction/ (consultado el 3 de agosto de 2014).

García, E. (2009), “Aprendizaje y construcción del conocimiento”, en A. López y M. Matesanz (eds.), Las plataformas de aprendizaje. Del mito a la realidad, España, Biblioteca Nueva, pp. 22-44.

García, J. I. (2012), “La Resiliencia social”, en Blog Jorge Ismael García Corleto y su Obra, en http://jorgeismaelgarciacorleto.blogspot.es/1331640760/la-resiliencia-social/ (consultado el 3 de marzo de 2014).

González G., E. (1994), Elementos estratégicos para el desarrollo de la educación ambiental en México, México, Instituto Nacional de Ecología.

González G., E. (2000) (coord.), III Congreso Iberoamericano de Educación Ambiental. La Educación Ambiental en México: logros, perspectivas, y retos de cara al nuevo milenio. Resumen en http://anea.org.mx/docs/Gonzalez-Informedepais.pdf (consultado el 3 de marzo de 2014).

González G., E. (2004), “La actualización docente en educación ambiental: Educación básica”, en Revista Agua y Desarrollo Sustentable, núm. 15, vol. 2, pp. 27-29, en http://anea.org.mx/docs/Gonzalez-La-actualiza-docente-EA.pdf (consultado el 3 de mayo de 2014).

González G., E. (2007), Educación ambiental: trayectorias, rasgos y escenarios, México, Universidad Autónoma de Nuevo León.

González G., E. y M. A. Arias (2009), “La educación ambiental institucionalizada: actos fallidos y horizontes de posibilidad”, en Revista Perfiles Educativos, núm. 124, vol. 31, pp. 58-68, en http://www.iisue.unam .mx/perfiles/perfiles_articulo.php?clave=2009-124-58-68 (consultado el 8 de noviembre de 2014).

González G., E. y A. L. Maldonado (2013), Los jóvenes universitarios y el cambio climático. Un estudio de representaciones sociales, México, Universidad Veracruzana.

Grupo Interagencial de Género (s/f), Género y Cambio climático. Ficha informativa sobre género y desarrollo (7), en http://www.cinu.org.mx/gig/Documentos/ambiente.pdf (consultado el 3 de marzo de 2014).

Gudynas, E. (2011), “Buen Vivir: Germinando alternativas al desarrollo”, en Revista América Latina en movimiento, núm. 462, pp. 1-18, en http://www.uv.mx/personal/jmercon/files/2011/08/alai462-Buen-vivir-y-Gudynas.pdf (consultado el 3 de febrero de 2014).

Page 20: Construcción de conocimiento y creencias epistemológicas sobre

Construcción de conocimiento y creencias epistemológicas sobre cambio climático

71Revista Interamericana de Educación de Adultos Año 38 • número 2 • julio - diciembre de 2016

Hofer, B. K. y P. R. Pintrich (eds.) (2002), Personal Epistemology. The Psychology of Beliefs About Knowldege and Knowing, Estados Unidos, Lawrence Erlbaum Associates Publishers.

Holling, C. (1973), “Resilience and Stability of Ecological Sistems”, en Annual Review of Ecology and Systematics, núm. 4, pp. 1-23, en http://biolambiental.posgrado.unam.mx/pdf/Holling1973.pdf (consultado el 13 de mayo de 2014).

Lavell, A. (2000), “Desastres y desarrollo: hacia un entendimiento de las formas de construcción social de un desastre: el caso del huracán Mitch en Centroamérica”, en N. Garita y J. Nowalski (comps.), Del desastre al desarrollo sostenible: el caso del Mitch en Centroamérica, BID y CIDHS, en http://www.desenredando.org/public/articulos/2000/dyd/DyD2000_mar-1-2002.pdf (consultado el 3 de marzo de 2014).

Leal, F. A., C. Espinoza, M. Iraola y M. Miranda (2009), “El contexto en la epistemología personal: consideraciones teóricas y exploraciones empíricas”, Revista Interamericana de Psicología, núm. 1, vol. 43, pp. 170-180, en http://www.redalyc.org/articulo.oa?id=28411918019 (consultado el 3 de marzo de 2014).

Luna, A. y D. Rivera (2012), “Los ciclones tropicales en Veracruz y sinopsis del huracán Karl”, en A. Tejeda y L. Betancourt (coords.), Las inundaciones de 2010 en Veracruz. Memoria social y medio físico, México, Consejo Veracruzano de Investigación Científica y Desarrollo Tecnológico.

Luque, J. (1993), El conocimiento, España, Departamento de Tecnología Electrónica. Servicio de Publicaciones, Universidad de Sevilla, en http://personal.us.es/jluque/Libros%20y%20apuntes/1994%20Conocimiento.pdf (consultado el 3 de marzo de 2014).

Malbrán, M. C. (2009), “Indagaciones sobre las creencias epistemológicas en estudiantes universitarios”, en Blog María Malbrán- Argentina, en http://mariamalbran.blogspot.mx/2009/10/articulo-indagaciones-sobre-las.html(consultado el 3 de octubre de 2014).

Maldonado, A. L. y E. González G. (2013), “De la resiliencia comunitaria a la ciudadanía ambiental. El caso de tres localidades en Veracruz, México, en Revista Íntegra Educativa, núm 3, vol. 6, en http://www.scielo.org.bo/scielo.php?pid=S1997-40432013000300002&script=sci_arttext (consultado el 3 de diciembre de 2014).

Martínez, A. y N. Ríos (2006), “Los conceptos del conocimiento, epistemología y paradigma, como base diferencial en orientación metodológica del trabajo de grado”, en Revista Cinta de Moebio, núm. 25, pp. 111-121, en http://www.revistas.uchile.cl/index.php/CDM/article/viewFile/25960/27273 (consultado el 3 de marzo de 2014).

Martínez, R. D., Y. H. Montero y M. E. Pedrosa (2010), “Creencias epistemológicas, estrategias de búsqueda de información, y criterios para validar la información de la Web”, en Revista Electrónica de Investigación, Educativa, núm. 1, vol. 12, pp. 1-27. Recuperado de http://www.scielo.org.mx/pdf/redie/v12n1/v12n1a8.pdf (consultado el 30 de marzo de 2014).

Mayagoitia, S., J. Ruíz y E. Villa (1999), “La sociología como ciencia”, en Sociología dinámica para bachillerato, Zapopan, México, Amate Editorial, pp 13-21.

Meira, P. (2002), El cambio climático y la educación ambiental neoliberal (que también existe), Centro Nacional de Educación Ambiental. España, Gobierno de España. Ministerio de Agricultura Alimentación y Medio Ambiente, en http://www.magrama.gob.es/es/ceneam/articulos-de-opinion/2002_06meira_tcm7-53009.pdf (consultado el 30 de marzo de 2014).

Mendoza, J. (2010), “Vygotsky y la construcción del conocimiento”, en Notas: Boletín Electrónico de Investigación de la Asociación Oaxaqueña de Psicología, núm 1, vol. 6, pp. 159-164, en http://www.conductitlan.net/notas_boletin_investigacion/81_vygotsky_construccion_conocimiento.pdf (consultado el 20 de febrero de 2014).

Page 21: Construcción de conocimiento y creencias epistemológicas sobre

Erick Cajigal Molina, Ana Lucía Maldonado González y Edgar González Gaudiano

72 Revista Interamericana de Educación de Adultos Año 38 • número 2 • julio - diciembre de 2016

México, Consejo Nacional de Población (CONAPO) (2010), Índice de marginación por entidad federativa y municipio 2010, en http://www.conapo.gob.mx/es/CONAPO/Indices_de_Marginacion_2010_por_entidad_federativa_y_municipio (consultado el 3 de marzo de 2014).

México, Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), (2010), Información Nacional, por Entidad Federativa, en http://www3.inegi.org.mx/sistemas/mexicocifras/default.aspx?e=30 (consultado el 3 de marzo de 2014).

Oltra, C. et al. (2009), “Cambio climático: percepciones y discursos públicos”, en Revista Prisma Social núm. 2, pp. 1-23, en www.isdfundacion.org/publicaciones/revista/pdf/n2_9.pdf (consultado el 3 de junio de 2014).

Ordaz, J. (2009), “México: impacto de la educación en la pobreza rural”, en Serie, estudios y perspectivas, núm. 105, México, Sede subregional de La Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL), en http://archivo.cepal.org/pdfs/2009/S2009326.pdf (consultado el 3 de enero de 2014).

Phan, H. P. (2008), “Exploración de las creencias epistemológicas y los enfoques de aprendizaje en su contexto: una perspectiva sociocultural”, en Electronic Journal of Research in Educational Psychology, núm. 16, vol. 6, pp. 793-822, en http://www.redalyc.org/articulo.oa?id=293121916012 (consultado el 3 de diciembre de 2014).

Ponce, R. (2010), Creencias epistemológicas como recurso de comprensión entre estudiantes universitarios. Enseñar a leer múltiples textos en la universidad: un eje de ref lexión necesario del administrador educativo. Tesis de maestría. Benemérita Universidad Autónoma de Puebla. Puebla, México, en http://www.remeri.org.mx/english/REMERI.jsp?id=oai:tesis.bibliotecas.buap.mx:BAFA20114614 (consultado el 3 de marzo de 2014).

Ponce, R. y A. C. Carrasco (2010), “Prácticas de lectura en educación media superior: la epistemología personal como recurso de la lectura”, en G. Ruiz., G. López. y A. C. Carrasco (coords.), Memoria de las Ponencias del II Seminario Internacional de la Lectura en la Universidad y I Congreso Nacional de Expresiones de Cultura Escrita en Instituciones de Educación Media Superior y Superior, México, Consejo Puebla de Lectura y Universidad Autónoma de Aguascalientes, pp. 87-101, en http://www.inaoep.mx/~cplorg/pdfs/memoria2010.pdf (consultado el 3 de marzo de 2014).

Riechmann, J. (2005), Un mundo vulnerable, Ensayos sobre ecología, ética y tecnociencia, España, Catarata.

Ruíz, J. C. (2005), “De la construcción social del riesgo a la manifestación del desastre. Reflexiones en torno al imperio de la vulnerabilidad”, en Revista Desacatos, núm. 19, pp. 99-110, en http://www.redalyc.org/articulo.oa?id=13901907 (consultado el 3 de diciembre de 2014).

Salamanca, L. A. (2009), “Estudio de resiliencia en desastres naturales en seis barrios de la ciudad de La Paz, Bolivia”, en La gestión del riesgo urbano en América Latina: recopilación de artículos (pp. 205-222), en http://www.preventionweb.net/files/11118_eird.pdf (consultado el 3 de diciembre de 2014).

Sampieri, R. y A. Ponce (2011), “Reconceptualización del sujeto epistémico en la sociedad del conocimiento”, en J. A. Hernanz (ed.), Innovación y dinámicas sociales en la era del conocimiento, México, Plaza y Valdés.

Sarmiento, A. (2009), Diagnóstico de la lectura como recurso cognitivo en un grupo de estudiantes de bachillerato. Tesis de maestría, inédita, México, Benemérita Universidad Autónoma de Puebla.

Sarmiento, A., A. C. Carrasco y P. Tello (2009), Lectura de múltiples textos. Explicar la comprensión integrada de textos desde la epistemología personal, en http://www.comie.org.mx/congreso/memoriaelectronica/v10/pdf/area_tematica_01/ponencias/0885-F.pdf (consultado el 3 de diciembre de 2014).

Page 22: Construcción de conocimiento y creencias epistemológicas sobre

Construcción de conocimiento y creencias epistemológicas sobre cambio climático

73Revista Interamericana de Educación de Adultos Año 38 • número 2 • julio - diciembre de 2016

Sarmiento, P. (2011), Creencias epistemológicas de profesores universitarios, Tesis licenciatura, Lima, Pontificia Universidad Católica del Perú, en http://tesis.pucp.edu.pe/repositorio/handle/123456789/800?show=full (consultado el 3 de diciembre de 2014).

Sen, A. (2000), “El desarrollo como libertad”, en Revista Gaceta Ecológica, núm. 55, pp. 14-20, en http://www2.inecc.gob.mx/publicaciones/consultaPublicacion.html?id_pub=245 (consultado el 3 de abril de 2014).

Solbakk, J. (2011), “Vulnerabilidad: ¿un principio fútil o útil en la ética de la asistencia sanitaria?”, en Revista Red bioética/Unesco, núm 3, vol 1, pp. 89-101, en www.unesco.org.uy/ci/fileadmin/shs/redbioetica/revista_3/Solbakk.pdf (consultado el 3 de junio de 2014).

Strømsø, H. I., I. Bråten y M. S. Samuelstuen (2008), “Dimensions of topic-specific epistemological beliefs as predictors of multiple text understanding”, en Revista Learning and Instruction, núm. 6, vol. 18, pp. 513-527, en http://www.sciencedirect.com/science/article/pii/S0959475207001247 (consultado el 3 de diciembre de 2014).

Terrón, E. (2000), “La Educación Ambiental ante los desafíos del Siglo XXI”, en Revista de la Academia Mexicana de Profesores de Ciencias Naturales, núm. 3, pp. 5-13, en http://anea.org.mx/docs/Terron-EducAmbSigloXXI.pdf (consultado el 3 de marzo de 2014).

UNESCO (Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura) (2009), Declaración de Bonn, en http://unesdoc.unesco.org/images/0018/001887/188799s.pdf (consultado el 3 de abril de 2014).

Vázquez C., E. (2012), “El tratamiento interdisciplinar de lo eco-sostenible en la enseñanza secundaria: un estudio de casos”, en Revista de Currículum y Formación de Profesorado, núm. 16, vol., pp. 165-192, en www.redalyc.org/articulo.oa?id=56724395010 (consultado el 3 de agosto, de 2014).

Vygotsky. L. S. (1995), Pensamiento y Lenguaje en http://www.aacounselors.org.ar/adjuntos/Biblioteca%20AAC/Lev%20S%20Vygotsky%20%20Pensamiento%20y%20Lenguaje.pdf (consultado el 3 de marzo de 2014).

Wertsch, J. (1985), Vygotsky y la formación social de la mente, España, Paidós Ibérica.

Anexo Creencias epistemológicas

Los temas relacionados con el clima son de gran actualidad y continuamente se habla de ellos en los medios de comunicación. Con frecuencia, podemos leer informaciones sobre el cambio climático, la contaminación atmosférica, el calentamiento de la Tierra, temperaturas extremas, el aumento del nivel de agua en los océanos, y el derretimiento del hielo en las regiones polares. Noticias sobre estos temas salen a menudo en periódicos y revistas, así como en la televisión o en la radio. La mayoría de científicos que estudian el clima tienen formación en ciencias tales como química, biología o meteorología. Las siguientes afirmaciones hacen referencia a conocimientos sobre el clima y a cómo uno llega a adquirir conocimientos acerca del mismo. No hay elecciones correctas ni incorrectas en estas afirmaciones; son sus creencias personales lo que nos interesa conocer. Utilice la escala que verá abajo para marcar su elección. Si está completamente de acuerdo con una afirmación, marque el 10; si está totalmente en desacuerdo marque el 1. Si está más o menos de acuerdo con una afirma-ción, marque el número entre 1 y 10 que mejor exprese su creencia.

Page 23: Construcción de conocimiento y creencias epistemológicas sobre

Erick Cajigal Molina, Ana Lucía Maldonado González y Edgar González Gaudiano

74 Revista Interamericana de Educación de Adultos Año 38 • número 2 • julio - diciembre de 2016

Afirmaciones Totalmente en desacuerdo Totalmente de acuerdo

1 Los investigadores del clima pueden descubrir la verdad sobre casi todo lo referente al clima.

1 2 3 4 5 6 7 8 9 10

2 Cuando leo sobre temas relacionados con el clima, la opinión del autor es más importante que la mía.

1 2 3 4 5 6 7 8 9 10

3 Con respecto a los problemas sobre el clima, siento que me muevo en terreno seguro únicamente si encuentro una afirmación de un experto.

1 2 3 4 5 6 7 8 9 10

4 En la investigación sobre el clima, los hechos son más importantes que las teorías.

1 2 3 4 5 6 7 8 9 10

5 El conocimiento sobre temas relacionados con el clima cambia constantemente.

1 2 3 4 5 6 7 8 9 10

6 Cuando leo acerca de temas relacionados con el clima, confío sobre todo en mi propia percepción de lo que es correcto.

1 2 3 4 5 6 7 8 9 10

7 En la investigación sobre el clima , existe acuerdo sobre lo que es cierto.

1 2 3 4 5 6 7 8 9 10

8 Sólo creo lo que leo sobre temas relacionados con el clima si está de acuerdo con mis propias observaciones.

1 2 3 4 5 6 7 8 9 10

9 Con respecto a los temas relacionados con el clima, para mí es más importante que el punto de vista sea bueno que la forma en que he llegado al mismo.

1 2 3 4 5 6 7 8 9 10

10 Con respecto al conocimiento sobre el clima, rara-mente existen conexiones entre temas diferentes.

1 2 3 4 5 6 7 8 9 10

11 En la investigación sobre el clima, el conocimiento preciso de los detalles es lo más importante.

1 2 3 4 5 6 7 8 9 10

12 Cuando leo sobre los problemas del clima, confío en los resultados de las investigaciones científicas más que en el punto de vista de la gente común y corriente.

1 2 3 4 5 6 7 8 9 10

13 El conocimiento sobre el clima consiste en ideas esenciales más que en detalles.

1 2 3 4 5 6 7 8 9 10

14 No existe un método que yo pueda emplear para decidir si afirmaciones de textos sobre temas relacionados con el clima son fiables.

1 2 3 4 5 6 7 8 9 10

15 La gente común y corriente no tiene ninguna base para hablar sobre temas relacionados con el clima.

1 2 3 4 5 6 7 8 9 10

16 En la investigación sobre el clima, la verdad no cambia.

1 2 3 4 5 6 7 8 9 10

17 Comprendo mejor los temas relacionados con el cli-ma cuando pienso sobre ellos por mí mismo, y no me limito a leer sobre ellos. 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10

18 Para comprender los problemas del clima no es sufi-ciente con leer lo que los expertos han escrito sobre esos problemas. 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10

19 Cuando leo sobre temas relacionados con el clima, lo que me inspira más confianza son las afirmacio-nes basadas en investigaciones científicas. 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10

Page 24: Construcción de conocimiento y creencias epistemológicas sobre

Construcción de conocimiento y creencias epistemológicas sobre cambio climático

75Revista Interamericana de Educación de Adultos Año 38 • número 2 • julio - diciembre de 2016

Afirmaciones Totalmente en desacuerdo Totalmente de acuerdo

20 En la investigación sobre el clima, tener varias teo-rías sobre el mismo asunto hará las cosas innecesa-riamente complicadas. 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10

21 El conocimiento sobre temas relacionados con el clima está reservado a los expertos. 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10

22 El conocimiento sobre el clima consiste en con-ceptos bien relacionados entre sí más que en una acumulación de hechos aislados. 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10

23 Para averiguar si lo que leo sobre los problemas del clima es digno de confianza, intento comparar conocimientos de fuentes diferentes. 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10

24 En la investigación sobre el clima, muchas cosas están relacionadas. 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10

25 Cuando leo sobre problemas del clima, tengo la máxima confianza en las ideas que confirman lo que he visto con mis propios ojos. 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10

26 Mis ideas personales sobre los problemas del cli-ma, tienen poco valor en comparación con lo que puedo aprender sobre ellos en libros y artículos. 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10

27 A menudo me da la impresión de que debo limi-tarme a confiar en lo que leo sobre los problemas del clima.

1 2 3 4 5 6 7 8 9 10

28 Las teorías sobre el clima pueden ser refutadas en cualquier momento. 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10

29 Cuando leo sobre los problemas del clima, confío en lo que el texto dice expresamente. 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10

30 Para poder confiar en afirmaciones de textos sobre temas relacionados con el clima, uno tiene que comprobar varias fuentes de conocimiento. 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10

31 El conocimiento sobre los problemas del clima es incuestionable. 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10

32 La finalidad principal cuando se lee sobre los pro-blemas del clima es formarse una opinión personal sobre ellos. 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10

33 El conocimiento sobre el clima se caracteriza, sobre todo, por una gran cantidad de información de detalle. 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10

34 El conocimiento cierto y seguro sobre el clima es algo poco común. 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10

35 En la investigación sobre el clima, el conocimiento consiste principalmente en una acumulación de hechos. 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10

36 En la investigación sobre el clima, hay conexiones entre muchos temas 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10

37 En la investigación sobre el clima, el conocimiento es complejo. 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10

38 Los resultados de la investigación sobre el clima son provisionales. 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10

39 En los temas relacionados con el clima, las actitudes son más importantes que los métodos científicos. 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10

Page 25: Construcción de conocimiento y creencias epistemológicas sobre

Erick Cajigal Molina, Ana Lucía Maldonado González y Edgar González Gaudiano

76 Revista Interamericana de Educación de Adultos Año 38 • número 2 • julio - diciembre de 2016

Afirmaciones Totalmente en desacuerdo Totalmente de acuerdo

40 Para lograr verdadera comprensión sobre los temas relacionados con el clima, uno ha de formarse su propia opinión personal de lo que lee. 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10

41 Los problemas en la investigación sobre el clima ca-recen de una solución clara e inequívoca. 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10

42 Mi propia comprensión de temas relativos al clima es por lo menos tan importante como el conoci-miento que hay sobre ellos en los textos. 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10

43 Lo único que sabemos con seguridad sobre los pro-blemas del clima, es que nada es seguro. 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10

44 Cuando leo sobre temas relacionado con el clima, evalúo si el contenido tiene lógica. 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10

45 Lo que hoy se considera conocimiento cierto acerca del clima, mañana puede ser considerado falso. 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10

46 Los conocimientos sobre el clima hacen referencia a principios y conceptos más que a hechos. 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10

47 La investigación sobre el clima demuestra que la mayoría de los problemas en esa área tienen una solución correcta. 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10

48 Para comprobar si lo que leo acerca de los problemas del clima es fiable, intento evaluarlo comparándolo con otras cosas que he aprendido sobre el tema. 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10

49 Cuando leo sobre temas relacionados con el clima, intento llegar a una comprensión personal del con-tenido. 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10